22. el que se humilla sera ensalzado.pps

8/6/2019 22. El que se humilla sera ensalzado.pps

1/9

Los comensales criticados por Jess

Un sbado, Jess entr a comer en casa de uno de losprincipales fariseos. Ellos lo observaban atentamente. Y al notarcmo los invitados buscaban los primeros puestos, les dijo estaparbola:Si te invitan a un banquete de bodas, no te coloques en elprimer lugar, porque puede suceder que haya sido invitada otrapersona ms importante que t, y cuando llegue el que los invit

a los dos, tenga que decirte: "Djale el sitio", y as, lleno devergenza, tengas que ponerte en el ltimo lugar.Al contrario, cuando te inviten, ve a colocarte en el ltimo sitio, demanera que cuando llegue el que te invit, te diga: "Amigo,acrcate ms", y as quedars bien delante de todos losinvitados. Porque todo el que ensalza ser humillado, y el que sehumilla ser ensalzado.Despus dijo al que lo haba invitado: Cuando des un almuerzoo una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tusparientes, ni a los vecinos ricos, no sea que ellos te inviten a suvez, y as tengas tu recompensa. Al contrario, cuando des unbanquete, invita a los pobres, a los lisiados, a los paralticos, a losciegos. Feliz de ti, porque ellos no tienen cmo retribuirte, y astendrs tu recompensa en la resurreccin de los justos!.

Evangelio de Lucas 14,1.7-14

DOMINGO XXII Tiempo ordinario El que se humilla ser ensalzado.


2/9

En todas las culturas existen REGLAS muy precisas departicipacin en la mesa. stas normalmente reflejan ysostienen el orden, los valores y las jerarquas existentes enun grupo social.

Siempre hay un PROTOCOLO sobre cmo sentarse paracomer, sobre la distribucin de los puestos y las preferencias:

Los labios bendicen al que sirve bien de comer y eltestimonio de su generosidad es digno de fe. La ciudadmurmura del que mezquina el pan y el testimonio de sumezquindad es exacto (Eclesistico 31,23-24).

No hagas entrar a cualquiera en tu casa, porque el falso

tiende muchas emboscadas. Alberga a un extrao, y tetraer complicaciones, y har de ti un extrao para tuspropios parientes (Eclesistico 11,29.34).

Cuando te invite un poderoso, qudate a distancia, y teinvitar con ms insistencia. No te precipites, para no serrechazado, ni te quedes muy lejos, para no ser olvidado. Nopretendas hablarle de igual a igual ni te fes si conversademasiado: l te pone a prueba con su locuacidad y te

examina entre risa y risa (Eclesistico 13,9-11).


Un sbado, Jess entr a comer en casa de uno de losprincipales fariseos. Ellos lo observaban atentamente (Lc 14,1).

La mesa y el orden social


3/9

El ceremonial de la mesa es un pequeo mundo paralelo alamplio mundo de relaciones dentro de la sociedad. La

jerarqua queda reflejada en la ubicacin de los comensales:


Y al notar cmo los invitados buscaban los primeros puestos,les dijo esta parbola:Si te invitan a un banquete de bodas, no te coloques en elprimer lugar, porque puede suceder que haya sido invitada otrapersona ms importante que t, y cuando llegue el que los invita los dos, tenga que decirte: "Djale el sitio", y as, lleno devergenza, tengas que ponerte en el ltimo lugar (Lc 14,7-9).

Los lugares de la mesa

La disposicin habitual en unTriclinium (comedor de tres

divanes) era la siguiente

FITRI , presidente de la mesa: Locus summus in imo

PERSO

DE CO FI

Z

del

nfitrin: Locus medio in imo I VIT

DO MS DISTI GUIDO: Locus imus in medio


4/9

Dime qu te sirven y te dir quin eres


La jerarqua social se reflejaba tambin en la diferencia de loservido a cada uno de los comensales. El descaro al momentode hacer tales diferencias se puede apreciar en la queja delescritor Marcial a su patrn-anfitrin:

Puesto que tu a comer me invitas desde que no recibo dineroalguno, por qu no se me presentan los mismos platos que a ti?

T te inflas de ostras, criadas en el lago Lucrino, yo chupo slouna almeja, y me rompo la boca al hacerlo.

T te sirves championes: para m slo hay hongos de los cerdos.

T te encargas de un lenguado: yo tengo que contentarme conuna brema.

Una dorada paloma con enormes muslos hay ante ti: a m se me

sirve slo una cotorra que muri en su jaula.Pntico, si estoy comiendo contigo, por qu tengo que comer sinti? Que me aproveche el que no haya ningn deber de dinero!Comamos lo mismo! (Marcial, Epigramas 1,60).


5/9

Al rico y a otros pocos se les sirvieron algunos platosmagnficos; a los dems, pocos y malos.

Tambin proporcion en pequeos recipientes tres clasesdiferentes de vino; pero no se piense que cada invitadopoda elegir el que quisiese; en absoluto poda elegir.

na clase era para l y para m;

otra clase, para sus amigos de un orden ms bajo(porque coloca a sus amigos segn categoras),

y la tercera clase para sus libertos y los mos.

Yo pongo a todos lo mismo, porque, cuando invito, lo hagopara cenar, no para establecer diferencias. A quien hecolocado en igualdad conmigo, admitindole a mi mesa, lotrato como un igual en todos los aspectos.

A los libertos tambin, porque en tal ocasin no les veocomo libertos, sino como compaeros.

[Y no me sale muy caro] Porque mis libertos no beben el

mismo vino que yo, sino que yo bebo el suyo (Plinio,Epistolario II,6)

Comer con humildad


En cambio, un romano virtuoso y rico como Plinio noaprobaba tales costumbres. En la conversacin durante unacomida a la que fue invitado explica el trato igualitario que daa todos:


6/9

La transgresin del ritual


Delante de l haba un hombre enfermo de hidropesa. Jesspregunt a los doctores de la Ley y a los fariseos: Estpermitido curar en sbado o no?.

Pero ellos guardaron silencio. Entonces Jess tom de la manoal enfermo, lo cur y lo despidi. Y volvindose hacia ellos, lesdijo: Si a alguno de ustedes se le cae en un pozo su hijo o subuey, acaso no lo saca en seguida, aunque sea sbado?.A esto no pudieron responder nada (14,2-6).

En el banquete (sabtico) al que ha sido invitado, Jess comienzacon una transgresin de las normas de pureza sobre los tiempossagrados:

En el banquete que comparte en el captulo siguiente, Jess se

pone a la defensiva y justifica por qu recibe a los pecadores ycome con ellos (Lc 15,2).

Para eso recurrir a las tres parbolas de la misericordia.

Aqu ha tomado una actitud ofensiva, cuestionando los valores desu anfitrin y dems comensales.

Lo hace recordndoles un principio que ellos mismos practicaban:

todo peligro de vida desplaza el sbado (Mishn Yom VIII,6).


7/9

Las parbolas sobre los invitados


Tambin cuestiona los valores de los comensales por medio dedos parbolas.

La primera dirigida a los invitados (14,7-11).

La segunda dirigida a su propio anfitrin (14,12-14).

Ambas estn relacionadas y tienen una estructura paralela:

Cuando te inviten a un banquete de bodas Cuando des un almuerzo o una cena

no te coloques en el primer lugar no invites a tus amigos, ni a tus hermanos,ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos

no sea que haya sido invitada otra persona msimportante que t y, lleno de vergenza,tengas que ponerte en el ltimo lugar

no sea que ellos te inviten a su vez, y astengas tu recompensa

Al CONT A IO, cuando te inviten, ve a colocarteen el ltimo sitio

Al CONT A IO, cuando des un banquete,invita a los pobres, a los lisiados, a losparalticos, a los ciegos

el que se humilla ser ensalzado ellos no tienen cmo retribuirte, y as tendrs tu recompensa en la resurreccin

de los justos!


8/9

La mirada de los hombres y la deDios


La observacin de Jess parte de la experiencia habitual, dondecon frecuencia se desaloja a quien ocup un lugar reservado.

Tambin es habitual que la distribucin de lugares termine en unconflicto entre aquellos que deban compartir un buen momento consu anfitrin. As lo sealaba Tales de Mileto:

Un hombre que se disgusta por el lugar que ocupa en la mesase queja ms del compaero que del anfitrin y se enemista conambos (El Banquete de los siete sabios 148 F.149 F).

Pero despus da un paso ms adelante, mostrando que Diosvalora la realidad de un modo diferente.

Usa en la conclusin de la primera enseanza el pasivo divino,

que es un recurso para no mencionar el nombre del sujeto (Dios)que, por respeto, es impronunciable:

Todo el que se ensalza [a s mismo] ser humillado [porotros], y el que se humilla [se hace humilde] ser ensalzado[por Dios] (Lc 14,11).


9/9

Animarse a la gratuidad


El la segunda enseanza, dirigida al anfitrin, Jess es muchoms radical en la alternativa que propone.

Lo habitual es ser muy selectivo en las invitaciones. Se busca a

los que pueden devolver la invitacin

aquellos que se transformarn en clientes que alabarn yaumentarn el prestigio del anfitrin.

Se trata de un sistema llamado tcnicamente reciprocidadequilibrada (ms sencillamente: quedar a mano).

Busca RECIBIR gratitud.

No le interesa DAR gratis.

Hagan el bien y presten sin esperar nada en cambio. Entonces la recompensa de ustedes sergrande y sern hijos del Altsimo (Lc 6,35).

La aceptacin del Dios predicado por Jess motiva una nueva forma de obrar, inversa a los

criterios establecidos por la cultura.Dios es el verdadero BENEFACTOR (el que hace bien), porque ofrece sus dones de modo

gratuito, porque l es bueno con los desagradecidos y los malos (Lc 6,35).

Jess propone no anhelar ser como los ganadores, sino imitar el ejemplo de Dios:

22. el que se humilla sera ensalzado.pps

Documents