ALIENACIÓN PARENTAL - LA JUSTICIA TARDÍA ES UNA FORMA DE INJUSTICIA

La resolución judicial de los casos NO debiera demorarse atendiendo al sufrimiento de los menores involucrados en una situación de ruptura conflictiva entre sus progenitores.

A lo largo del proceso judicial, ellos sufren permanente stress y un temor intenso teñido por un sentimiento de profunda confusión con consecuencias negativas a nivel psicoemocional y conductual.

Al demorarse la decisión judicial, todo el tiempo que transcurre sin que un padre pueda ver a su hijo, facilita y consolida las nocivas manipulaciones alienadoras de quien tiene al menor bajo ‘secuestro emocional’ y a su exclusiva disposición para continuar la inculcación maliciosa.

Las maniobras (‘chicanas’) ante los órganos judiciales, la lentitud de la justicia y la torpeza de sus funcionarios, posibilita que se deteriore o destruya la comunicación paterno-filial. .

ES NECESARIO, ADEMÁS DE JUSTO, QUE LAS FALSAS DENUNCIAS SEAN CASTIGADAS SEVERAMENTE

Creo que se debe penalizar severa y específicamente la falsa denuncia fabricada para alejar a un progenitor de su hijo.

La pésima y nociva conducta, por ejemplo de la madre que, por si y a través de un hijo construye una acusación falsa e induce al hijo a recitarla como si fuese veraz, debe ser castigada con la máxima severidad.

Otro tanto para el profesional que se preste a la formalización de tal denuncia a sabiendas de su falsedad o sea quien diseña la estrategia de la presentación de la falsa denuncia...

Hay ejemplos útiles de esta penalización: Brasil fue uno de los países que logró frenar las denuncias falsas con el solo anuncio de castigar con cárcel a las mujeres que inventaban acusaciones utilizando a sus propios hijos para que repitieran lo que ellas les instalaban

mediante sugestiones, presiones o amenazas....

> SEPAMOS AGRADECER y LUCHEMOS TAMBIÉN POR ELLOS

– Respondo con toda franqueza a los amigos DBR, PGT, OVB y a quienes puedan encontrarse en similar situación.

Comprendo fácilmente cada una de vuestras objeciones porque mi situación NO es muy diferente a la de ustedes. Puedo decirles que, a pesar de tales objeciones, vale la pena continuar luchando; así lo pienso y así lo siento. Se trata también de un deber de conciencia. Esta lucha debe librarse por cada hijo, también por quienes cada uno de ustedes tiene a su lado y por ustedes mismos, por vuestra honra y dignidad.

El daño principal lo sufre cada hijo, pero también los miembros de cada familia paterna alienada. Y, ni que hablar, cada uno de ustedes.

Entonces: por nuestros hijos y por nuestros familiares más próximos que son terriblemente lastimados por esta situación, NO podemos ni debemos abandonar la lucha.

Pensemos en las mujeres que cada uno eligió para la vida y que están incondicionalmente a nuestro lado en esta batalla contra aquellas otras mujeres con las que nunca debimos habernos vinculado.

Pensemos en padres (muy especialmente PGT), abuelos, hermanos, tíos, primos.Entiendo muy bien a OVB por su actitud para con sus hermanos.A mí me sucede otro tanto por contar con hermanas que han sido pilares muy firmes en todo esto y que luchan a brazo partido junto conmigo para tratar de rescatar a mi hijo. Si no fuera también por ellas, hoy podría estar en la peor ruina moral y material, además de sentirme derrotado si hubiese perdido la voluntad de luchar.

Pensemos, además, que a medida que se alarga el tortuoso proceso, aumenta el ya inmenso valor del apoyo recibido porque puede resultar fácil respaldar unos meses, pero nada fácil es apoyar por años en forma invariable.

Tengamos presente a cada una de esas personas que afortunadamente tenemos cerca, sepamos agradecer a Dios por ellas y redoblemos fuerzas en este combate.

Hay todavía instancias judiciales para transitar por lo cual sugiero que aparten, al menos por ahora, toda idea o tentación imprudente como las que van apareciendo en medio del dolor y de la indignación.

FUERZA, CONFIANZA y CORAJE.