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Insuficiencia RenalInsuficiencia Renal CrónicaCrónica
Cocine sin sal.Si tiene indicada una medida, agréguela en el plato ya servido.
Recomendaciones para pacientes conInsuficiencia Renal Crónica
Procurar tener una alimentación saludable para mantener la función renal, un buen estado nutricional y un peso cercano al normal.
Realice al menos cuatro comidas diarias: desayuno, almuerzo, merienda y cena.
Agregue el aceite crudo cuando finalizó la cocción así mantendrá las propiedades de los aceites.
Recomendaciones para pacientes conInsuficiencia Renal Crónica
Utilice formas de cocción sin aceites ni grasas: hervido, horno, parrilla, vapor, microondas, plancha o sartén antiadherentes.
Controlar las proteínas de la dieta, debido a que en la Insuficiencia Renal Crónica el desecho de las proteínas no se elimina correctamente y se acumula en la sangre. Por lo que hay que evitar esta acumulación incorporándolas sólo en cantidad suficiente, sin suprimirlas, pues sus funciones son irreemplazables.
Recomendaciones para pacientes conInsuficiencia Renal Crónica
¿Qué alimentos contienen proteínas?
Carne de vaca, cerdo, pollo, pescado. Huevos. Lácteos: leche, yogurt, quesos. Legumbres. Agua mineral de bajo sodio
¿Cómo distribuyo las proteínas en el día?
Consuma diariamente la cantidad que le indique su médico o nutricionista.
Distribúyalas en las diferentes comidas del día. No las acumule en una sola comida. Por ejemplo: la leche en el desayuno, el yogur en la merienda, la carne en el almuerzo y el queso en la cena.
¿Cómo realizar una dieta con poca sal (hiposódica)?
Para realizar una dieta baja en sodio es necesario dejar de agregar sal a su comida y familiarizarse con los alimentos que contienen sodio agregado aprendiendo a leer las etiquetas.
¿Qué alimentos tienen alto contenido de sodio?
Sal marina o saborizadas (de ajo, de apio, etc)
Aderezos envasados: mayonesa, mostaza, salsa de tomate, salsa de soja…
Quesos y fiambres
Caldos y sopas concentradas
Manteca y margarina
Embutidos (salchichas, chorizo, morcilla, entre otros)
Alimentos envasados: paté, sardinas, atún, carnes ahumadas, etc.
Carnes elaboradas industrialmente: hamburguesas, empanizados…
Comidas rápidas (pizza, hamburguesas, perros calientes…
Pan, galletas saladas o dulces
Enlatados dulces y salados
Refrescos (gaseosas)
Agua mineral: salvo las de bajo sodio
Jugos artificiales, envasados, enlatados
Algunos medicamentos como las sales digestivas
Algunos edulcorantes: sacarina sódica, ciclamato sódico
¿Es posible comer rico sin agregar sal?
Sí, utilizando hierbas aromáticas, especias, aceite de oliva o aceites con agregado de hierbas, o salsa de soja sin sal.
Se recomienda inventar aderezos y saborizar con: Ají dulce, ajo fresco o en polvo, albahaca, curry, laurel, menta,
mostaza en polvo o en semillas, nuez moscada, orégano, perejil, pimienta, pimentón, salvia, tomillo, limón, vinagre…
¿Y los líquidos?
Es importante consumir la cantidad de líquidos aconsejada por su médico.
Tenga en cuenta el sodio que aportan, la patología del paciente y el funcionamiento de los riñones.
Fuentes Consultadas
Lic. Rocío Lozada, Nutricionista de Corpoelec del Marqués (antigua CADAFE)
Lic. Juan del Pineda del Servicio Médico del Consejo Nacional de la Magistratura
http://kidney.niddk.nih.gov/Spanish/indexsp.aspx
http://www.aniorte-nic.net/index.html
Lic. Greisy Moreno del Servicio de Nutrición del Hospital J.M. de los Ríos.