año 10 no.1 abril de 2015

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Revista 1 del 2015. Tema principal el 120 aniversario de la llegada de José marti y Máximo Gómez por Playita de Caojobabo.

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  • Ahora ms que nunca hace falta la unidad de la nacin, ahora ms que nunca la prenda ms preciosa debe ser conservada. La fortaleza que nos ha permitido llegar hasta aqu fue aquella que vi esa otra noche de abril en Playita de Cajobabo cuando, convocados por el lder de la Revolucin, llegamos a aquella hora oscura de la noche a la orilla de la playa.l llevaba la bandera cubana en el asta que le trajo uno de sus ayudantes, y entonces, entrando en el agua a la altura prcticamente del tobillo, se abri de pronto en el cielo la luna blanca y movi la bandera de Cuba hacia el Sur, hacia el Norte, hacia el Este y hacia el Oeste, diciendo: Aqu estamos!Intervencin de Eusebio Leal Spengler, Historiador de La Habana, en el acto por el aniversario IZ O del reinicio de la Guerra de Independencia, 2 4 de febrero del 201-5.

  • BLASONES Guantnamo

    Ao 10, No. 1, abril de 2015 Revista econmica, social y cultural

    Publicacin de la Asamblea Provincial del Poder Popular de Guantnamo

    Coordinadora generalDrC. Nancy Acosta Hernndez

    Consejo editorialLic. Emilio Matos Mosqueda Lic. Alejandro Louit Correa Lic. Rodny Alcolea Olivares Lic. Pablo Soroa Fernndez

    FotosAsamblea Provincial del Poder Popular de Guantnamo Lorenzo Crespo Silveira Leonel Escalona Furones Vicente Gonzlez Daz

    CubiertaDesembarco por Playita de Cajobabo. Boceto al leo de Juan Emilio Hernndez Giro, 1901

    DiseoLuis Daniel Garca Morn (Anonimocorpus)

    CorrespondenciaCalle Ahogados el 10 y 11 Norte, Guantnamo, Cuba. CP: 95100http://www.scribd .com/blasonesg http://www.facebook.com/blasonesgt twitter: @blasonesgtmoe-mail: [email protected]

    [email protected]

    A modo de presentacin 12

    Guantnamo: 24 de febrero de 1895 /3

    Primero de abril de 1895. En una cscara o en un Leviatn 18

    Playita, lugar sagrado de la Patria /11

    Isabel: una espa en la retaguardia enemiga /1 2

    Arroyo Hondo: donde se salv la Patria /1 5

    Edad de Oro, una empresa del corazn /1 6

    Razones para una fecha histrica /1 9

    Pedro y sus dos encuentros con Fidel / 2 0

    MOMENTOS 122

    Ms transformaciones, espiritualidad y rescate de lo nuestro /2 4

    GALERA. PROGRAMA DE DESARROLLO LOCAL 125

    Dos emotivas visitas / 2 9

    El Cern de Gran Tierra de Mais IZO

    Fidel en Guantnamo /31

    SUMARIO

    1

  • A modo de presentacin

    Este ao dos mil quince posee una marcada significacin para Guantnamo y sus habitantes en tanto resulta fecha cerrada para la conmemoracin de importantes hechos culturales, artsticos, sociales e histricos; razn ms que suficiente para quela presente entrega de Blasones ofrezca una particular mirada a la celebracin de los ciento veinte aos de un grupo de fechas determinantes en la historia de nuestro pas.

    Entre estos relevantes hechos estn el alzamiento de La Confianza, el desembarco de Maceo y Flor Crombet por Duaba y sobre todo la llegada a La Playita cercana a Cajobabo, de Mart, Gmez y Marcos del Rosario, junto a otros expedicionarios, acontecimiento que centra de muchas maneras no solo la Historia, sino el acercamiento que realiza este nmero de la revista.

    As desde la gnesis del alzamiento del 24 de febrero, su concepcin y materializacin en el documentado trabajo de W ilfredo Campos; la importancia estratgica del combate de Arroyo Hondo, en palabras del Apstol : A las 12 de la noche haban salido, por ros y caaverales y espinares, en el pequeo pero intenso acercamiento que realiza Noralis Palomo; nuevamente Jos Mart en su determinacin de que se trasladaran de Costa Rica a Cuba Antonio Maceo y Flor Crombet, en una cscara o en Leviatn, frase con la que Rodny Alcolea titula su trabajo acerca del desembarco por Duaba de estos dos determinantes hroes de la guerra del '95; hasta Playita un lugar sagrado de la Patria, del periodista Pablo Soroa, quien valindose de las palabras del Apstol ofrece una semblanza del desembarco y su significacin.

    La entrega se completa con otros trabajos que reflejan tambin otras aristas de estos momentos histricos como la presencia de Fidel en Playita e Imas, los vnculos de otros patriotas como Inocencia Araujo y Nicols Jan con estos hechos, la relacin

    del poeta Regino Boti con Mart, la revista la Edad de Oro y su participacin en el grupo de cubanos que seal la ruta de los expedicionarios hasta Dos Ros.

    No poda faltar una actualizacin del Programa de Desarrollo Local que tanto beneficio ofrece a los habitantes de la provincia en la certeza de que la cualificacin de los ambientes en que nos desenvolvemos contribuyen decisivamente no solo a la elevacin del nivel de vida ciudadano, sino a enraizar los sentimientos de pertenencia y compromiso con lo que hacemos.

    Por ltimo, quisiera sealar un aspecto que el contenido de este nmero de Blasones no aborda directamente pero que resulta de referencia obligada como es el reflejo de estos hechos en la produccin simblica, y no solamente la actual. Es Mart el primero, una vez ms, desde el impresionante e imprescindible -literariamente hablando- Diario de campaa, poseedor de innumerables valores estticos imposibles de abordar en esta breve presentacin; cuando no de un documental como Mi hermano Fidel, de Santiago lvarez, un clsico del gnero a todas luces; o el libro de Hugo Crombet y su versin audiovisual, Duaba, correlato muy pocas veces logrado entre literatura y cine, o televisin.

    Este nmero se honra al acercarse a tan im portantes celebraciones en la certeza de que los smbolos, la historia, sus protagonistas nos acompaan indefectiblemente en un presente no exento de contradicciones y, al mismo tiempo, de retos como los que esos hombres y mujeres que hoy son historia, enfrentaron en su tiempo. Tambin es el nuestro.

    Jorge Nez Motes

  • Guantnamo: 24 de lebrero de 1895Lic. Wilfredo de Jess Campos

    124 de Febrero de 1895 es para los cubanos una fecha de profunda significacin histrica, que marca el reinicio de las luchas por la independencia nacional, bajo la gida del ms ilustre de los cubanos, Jos Mart.

    La capacidad de resistencia de los cubanos, afianzada en valores internos, reforzaba su autoctona al emprender una nueva etapa de la insurreccin que aspiraba a convertirse en una verdadera revolucin social. La regin de Guantnamo fue escenario principal de esos acontecimientos.

    El 25 de junio de 1894 el patriota Emilio Gir Odio, procedente de Costa Rica, arriba a Santiago de Cuba. Investido con la autoridad que emanaba de su condicin de Comisionado Especial de Antonio Maceo, deba cumplir una compleja y delicada misin conspirativa que requera de una lealtad sin lmites y una discrecin total para asegurar que no fuera conocida ni por sus ms cercanos colaboradores, incluyendo a los propios jefes militares orientales.

    En fecha no precisada Gir se traslada a Guantnamo y comienza a poner en prctica las indicaciones de Maceo: agrupar a los revolucionarios dispersos, coordinar las tareas con las fuerzas comprometidas, convencer a los indecisos, infundir confianza en los desalentados, fortalecer los clubes del Partido Revolucionario Cubano, combatir la propaganda autonomista, levantar los nimos con la certeza del prximo desembarco de expediciones libertadoras. Para ello cuenta con una formidable estructura conspirativa de muchos aos de experiencia, encabezada por revolucionarios probados en la lucha contra el colonialismo. Gir tiene a su favor el conocimiento de la regin donde actuaba, escenario de sus actividades clandestinas anteriores y a travs de Caridad Jaca mantiene estrechos vnculos con Luciano Peguero y Pedro Agustn Prez.

    Alberto Plochet, emigrado junto a l en Costa Rica, y su amigo personal, leg una descripcin que nos acerca al momento en que Gir ejerce su labor proselitista en Guantnamo.

    [...] trabaj como simple pen en los ingenios, y en el batey, a la hora del descanso, y junto a los bueyes, jesuseaba en los odos de los carreteros la buena nueva. Los das de pago aprovechaba la inconsciencia que proporcionaba el alcohol anestesiador, para revivir los corazones falto

    Mausoleo al mambisado Guantanamero, en La Confianza.

    de palpitaciones patriticas; y as peregrin de valle en valle, de colina en colina y del boho al palacio de suntuosidad colonial.1

    La labor de Gir comienza a dar sus frutos y la impaciencia renace entre los patriotas. Mientras tanto, en la emigracin se aceleran los preparativos para el movimiento insurreccional. Con fecha 22 de septiembre de 1894, Mart le escribe a Antonio Maceo:

    La comisin de Oriente pidiendo orden inmediata [.. .] le ruego que para mediados de octubre est absolutamente listo, porque parece imposible que deje de ser para entonces, ni que haya que demorarlo ms [...]Lo de Oriente es el resultado de la comisin de Ud. y de dos que fueron de Santo Domingo y de la impaciencia general, y temor justo de persecucin.2

    3

  • Coincidentemente con la activacin de la lucha clandestina, las autoridades locales incrementaron las presiones sobre los principales lderes revolucionarios.

    En esos instantes era preciso la mayor prudencia para evitar que el gobierno espaol anulara el ncleo del movimiento revolucionario. Para Mart resulta vital el papel de Emilio Gir y as lo comunica a Maceo: En Cuba se impide por su Oriente de Ud., con excelente enviado, el desbande o desconfianza, mientras ac se precisa y determina.3

    Eran momentos decisivos en que se jugaba, quizs, la sobrevivencia de la revolucin. No faltaron las dudas y vacilaciones en algunos. En otros predominaba la prudencia. La mayor parte se mantena firme. Sin embargo, no debe pasar inadvertido el hecho de que las condiciones para llevar a vas de hecho y vertebrar el movimiento eran entonces sumamente complejas.

    Mientras tanto Maceo reciba noticias halageas de Gir, su enviado especial, quien:

    Haba cumplido cabalmente las instrucciones que le dieron en Costa Rica con singular sagacidad y destreza suma. Sorteando innumerables peligros, estableci contacto con todos los jefes orientales indicados por Maceo, y, finalmente, en vista de que ya se aproximaba el da de la sublevacin y la llegada de los expediciones en los vapores contratados por Mart [...] de acuerdo con el teniente coronel Pedro Agustn Prez [...] comenz a poner en ejecucin la primera parte del plan militar del general Maceo en la zona de Guantnamo, en cuyas playas inmediatas desembarcara con su Estado Mayor y un fuerte contingente armado [,..].4

    Orden de alzamientoEl fracaso del Plan de Fernandina,5 la impaciencia de los comprometidos ante

    las constantes presiones de las autoridades espaolas, condicionaron a Mart para autorizar el alzamiento independentista en Cuba. Reunidos en Nueva York el 29 de enero de 1895, Jos Mara Rodrguez, jefe del Estado Mayordel General en Jefe Mximo Gmez; el Delegado del Partido Revolucionario Cubano, Jos Mart y Enrique Collazo, elaboraron la Orden de Alzamiento que fue remitida por mediacin de Miguel ngel Duque de Estrada a Guillermn Moneada, Bartolom Mas y a Pedro Agustn Prez en Oriente y a Juan Gualberto Gmez en La Habana.

    En ella se [...] autoriza el alzamiento simultneo [...] de las regiones comprometidas [...] durante la segunda quincena y no antes del mes de febrero. Se insista en que se [...] considera peligroso y de ningn modo recomendable todo alzamiento en Occidente, que no lo efecten a la vez que los de Oriente [...] , teniendo en cuenta las caractersticas del movimiento revolucionario en esas zonas, y se reafirma la voluntad de la emigracin de aportar [...] los valiosos recursos ya adquiridos y la ayuda continua, incansable del exterior [...] en la certidumbre de que la emigracin entusiasta y compacta tiene hoy la voluntad y capacidad de contribuir que la guerra sea activa y breve.6

    BLASONES Guantnamo

    Recibida en La Habana esta Orden, Juan Gualberto envi emisarios a Oriente y a Las Villas, con el propsito de obtener de los principales jefes el compromiso de levantarse en armas en el perodo indicado y opta por no definir la fecha precisa del alzamiento hasta tanto no hubieran regresado los comisionados.

    Juan Tranquilino Letapierfue comisionado para entrevistarse en Oriente con Guillermn Moneada, Bartolom Mas, Celedonio Rodrguez y Jos Mir. En Santiago de Cuba obtuvo la ratificacin de Guillermn, quien solicita a Pedro Agustn Prez un encuentro para imponerlo de la decisin tomada. La reunin se desarrolla en la propia ciudad de Santiago y asiste, adems, Emilio Gir Odio en calidad de Comisionado Especial de Antonio Maceo.7 Periquito expuso el estado en que se encontraba el movimiento Revolucionario en Guantnamo. Teniendo en cuenta la adhesin de otras regiones de Cuba, la Junta de La Habana fij como fecha definitiva para el alzamiento el 24 de Febrero. La decisin fue comunicada a los comprometidos en la isla, y por cable y clave a la Delegacin de Nueva York se envi el mensaje Giros Aceptados.

    El 15 de enero de 1895, tres das despus del fracaso del Plan de La Fernandina, el Gobernador Regional, general Enrique Carriles, informa al alcalde de Guantnamo Jos Grave de Peralta que: Se trata de introducir cajas conteniendo materias explosivas. Recomiendo a V.S. minuciosa vigilancia recibimiento buques.8 En telegrama cifrado del Gobernador al Alcalde se seala:

    Gobernador General en telegrama hoy me dice: Tengo noticias para considerar cierto yates Lagonda y Amadis y vapor Baracoa estaban fletados para traer a Cuba 3 expediciones completamente dispuestas en relacin con Mximo Gmez y no desisten proyecto. Lo traslado a V.S. para que ejerza la ms exquisita vigilancia, dando cuenta cualquier novedad ocurra.9

    En respuesta, indica el Alcalde:Que dentro del puerto no haba novedad; que se ejerca estrecha vigilancia; pero que convendra que en estos das el crucero Snchez Barcztegui se situara en la Playa del Este cerca de la Boca y que por la noche vigilara a ms la entrada del puerto la Ensenada de Cochinos y los dems desembarcaderos que existen fuera.10

    Puede apreciarse que el permetro costero constitua para las autoridades una preocupacin permanente, previendo que por estas costas se produjera un desembarco revolucionario. A tales efectos la vigilancia en los fortines ubicados en la costa fue activada, especialmente el de Cayo Toro.

    El 8 de febrero Grave de Peralta comunica a Capriles:A su tiempo tuve el gusto de recibir su apreciable de 31 del pasado relativa a la agitacin de los separatistas.Hace algunos das que con la discrecin necesaria vengo portados los medios vigilando con sigilo y constancia a los sospechosos y los movimientos de los mismos teniendo que hacer incursiones al campo.

  • [...] tendr el gusto de rem itirle la relacin que en aquella me indica y que he querido form ar con la mayor conciencia para evitar vacilaciones en caso necesario.11

    Grave de Peralta reitera el 12 de febrero:A conciencia he formado la relacin que adjunto, cumpliendo sus superiores rdenes de las personas que han hecho y hacen poltica separatista, los mismos que vigilo con cautela constantemente.Los ms han trabajado en reuniones con Periquito Prez y le han acom paado en la ltim a intentona. Los otros han secundado los planes de esos revo lucionarios en el pueblo y algunos que pblicamente se jactan de ser enemigos del Gobierno y separatistas.12

    En cada uno de los puntos comprometidos la actividad era intensa y los m ovim ientos y reuniones de los patriotas provocan alarma en las autoridades coloniales. El 19 de febrero Grave de Peralta le informa a C apriles que en Guantnam o haba re lativa tranqu ilidad, pero que en el cam po se observaban m ovim ientos que ind icaban ser de los revolucionarios, y aade:

    Tengo noticias de que Songo y San Luis de ese Trm ino estn en movimiento y segn se me ha hecho entender hoy preprase un movimiento para el 24 del actual y precisamente vigilo muy de cerca a un emisario que ha enviado el referido Songo, nombrado Toms [...] El A lcalde de Barrio Macurijes me participa que en la noche del jueves ltimo se sintieron por varios vecinos algunas voces en lo alto de la Sierra que all existe a las que contestaron otros con toques de corneta internndose en el monte [...]. Aunque entiendo que estos han podido ser cazadores descarriados he mandado confidentes para asegurarme de la verdad [...].El movimiento indicado para el 24 actual dcese que tendr lugar en combinacin los de esa jurisdiccin con los de esta, habiendo sabido que Periquito ha pasado a esa en estos d as.1

    Como puede apreciarse, el planeado alzam iento del da 24 era conocido por las autoridades espaolas.14 Lo confirma tambin el telegrama del Comandante General de Cuba, general Lachambre al Capitn General de la Isla Emilio Callejas, de 21 de febrero: Separatistas muvense en toda la provincia y es seguro alzamiento [...] Estamos preparados, pero im posib ilitados obrar, por garantas vigentes .15 Ese mismo da por la noche los gobernadores de las seis provincias avisan a Emilio Callejas que el alzam iento se efectuara el da 24 y que en Guantnamo estaban reconcentrados Periquito Prez y Enrique Brooks.16

    En la regin de Guantnamo se concentraban patriotas procedentes de Songo, San Luis, Loma del Gato, Ti Arriba, Ramn de las Yaguas y otras localidades santiagueras vinculadas histricam ente a las luchas

    Plumilla de la firma del Acta de La Confianza

    revolucionarias locales. El m ovim iento de estas fuerzas constitua un suceso visible que no pasaba inadvertido para el mando espaol.

    5

  • El levantamiento de La ConfianzaA partir del momento en que se recibe en Guantnamo la orden de

    alzamiento, Periquito comenz a dar los toque finales para la organizacin de la guerra que haba preparado meticulosamente. Entre los das 17 y 23 de febrero imparte instrucciones a los comprometidos mediante el eficaz sistema de comunicacin y enlace que tena en la patriota Inocencia Araujo a su ms relevante exponente.

    El movimiento insurreccional se haba diseado en Guantnamo para dar respuesta a las instrucciones de facilitar los desembarcos de expedicionarios por la costa sur y favorecer la dispersin de las fuerzas colonialistas mediante alzamientos en varios puntos de la localidad, con la presencia de reconocidos lderes: Yateras: Jos Mejas, Cartagena; Santa Cecilia: Pedro Ramos y Enrique Brooks; El Yarey: Agustn Araujo; Ro Seco: Pedro Mestre y Bartolom Cuza; Baitiquir: Lus Gonzlez Pineda; Los Caos: Jos Francisco Prez; San Miguel: Enrique Thomas Thomas; Tiguabos: Pablo Salomn; San Andrs del Vnculo: Prudencio Martnez Echevarra y Evaristo Lugo y en la costa sur oriental Enrique Tudela Garca.

    El 22 de febrero arriba Emilio Gir a la finca La Confianza, convertida por esos das en un verdadero campamento mamb y en el centro de operaciones principales del levantamiento armado previsto. Junto a Luciano Peguero y Caridad Jaca, imparta instrucciones y ultimaba los detalles organizativos.

    El 23 se ajust el plan insurreccional que contemplaba el alzamiento sim ultneo de varias regiones de Guantnam o. Para la ocupacin y destruccin de los fortines costeros se design a Enrique Tudela al frente de un reducido nmero de combatientes, quien deba partir ese mismo da. El resto de las fuerzas esperara en La Confianza para, al siguiente da, materializar el compromiso de alzamiento. Durante la noche y madrugada los patrio tas conjurados perm anecieron en constante v ig ilia . En los alrededores del campamento y en puntos avanzados en direccin a la villa de Guantnamo fueron situadas defensas para evitar ser sorprendidos.

    El da 24, fecha de inicio de las tradicionales celebraciones carnavalescas, la villa de Guantnamo luca diferente a otros aos, cuando desde horas tempranas era notable el bullicio de los vecinos. Se notaba la ausencia de muchos hombres, algunos de ellos figuras prominentes dentro de la ciudad. Mientras tanto, en La Confianza comenz desde horas tempranas a organizarse militarmente a las fuerzas del Ejrcito Libertador.

    A las nueve de la maana de ese da, Periquito, junto a su numerosa familia en la casa de Matabajo, jur luchar por la independencia de Cuba. A su lado se encontraban su esposa Juana Francisca Prez Gutirrez, su hija Ruperta Prez Prez, su yerno Jos Francisco Prez Prez, su cuado Francisco Castillo, su nieto de 12 aos Jess Prez Prez y otros, hasta la cifra de 15 hombres, 2 mujeres y un nio. A ll enarbolada la bandera cubana, bordada por las manos de Mara Olalla Prez, viuda de Federico

    BLASONES Guantnamo

    Prez Prez, hermano de Periquito, asesinado por las fuerzas espaolas en 1880 cuando los acontecim ientos de la Guerra Chiquita.

    De un escondite dentro de la casa fueron extradas 14 armas de fuego, 200 cartuchos de municiones y 2000.00 pesos, el primer aporte que reciba la revolucin en Guantnamo de manos de su lder histrico.17 Inmediatamente se dirige a La Confianza, donde era esperado desde horas tempranas.

    Reunido el Estado Mayor, se ratifican los compromisos y los planes de las operaciones militares. Como constancia histrica de aquellos momentos se consider oportuno redactar un Acta que contuviera en sntesis los principios y razones que movan a los cubanos a empuar nuevamente las armas contra el colonialismo espaol. Para esta misin de tan altos fines patriticos fue escogido Emilio Gir ese da haba sido ascendido al grado militar de teniente en reconocimiento indiscutible a sus mritos en la labor de organizacin del movimiento revolucionario que entonces cobraba cuerpo y se materializaba. Fue Guantnamo la nica regin alzada de Cuba que dej constancia documental de este acontecimiento poltico. En horas de la tarde procedieron a firmar el Acta y a las seis en punto se materializ de manera oficial el alzamiento.

    La primera accin militar victoriosa de la Guerra NecesariaUna de las instrucciones ms importantes encomendadas a Gir en Costa

    Rica estaba relacionada con el ataque y destruccin de los fuertes costeros que haba establecido Espaa en el sureste oriental de Cuba, en la zona comprendida entre los ros Baconao y Sabanalamar, con el fin de garantizar el desembarco y apoyo de las expediciones proyectadas.

    Desde finales de ao 1894 Enrique Tudela Garca haba recibido instrucciones de explorar y estudiar en sus ms mnimos detalles el permetro costero que abarcaba desde la desembocadura del ro Baconao hasta las cercanas de la orilla occidental de la baha de Guantnamo. Especial atencin deba prestar a las guarniciones espaolas ubicadas en los fortines situados en pequeas elevaciones desde donde se dominaba el mar. Precisamente en este detalle radicaba la importancia de estas instalaciones militares, que tenan la misin de establecer vigilancia permanente sobre los movimientos de embarcaciones y personas en la zona.

    Estos puntos de observacin establecan comunicaciones de manera rutinaria dos veces por semana con sus superiores y, de manera ocasional, con partidas de cazadores que frecuentaban sus predios. El estudio de Tudela lo convence de que esta circunstancia poda ser utilizada a su favor. Por tanto, desde los primeros das de enero de 1895 no resultaba extrao para los peninsulares que un pequeo grupo de cazadores, acompaados de perros, se acercara al permetro de los fortines y mantuvieran algn tipo de relacin.

    Despus de reunir las informaciones que aseguraran el xito, la direccin revolucionaria de Guantnamo acord el ataque de los fortines de San Nicols o Morrillo Chico, El Toro y El Cuero de Mara del Pilar. En horas de la madrugada

  • del 24 Tudela al frente de 12 hombres, armados de escopetas de caza y algunos machetes, parti rumbo a los objetivos colonialistas en la costa.

    A las dos de la tarde llegan al fortn San Nicols, custodiado por un cabo y cinco soldados de la guerrilla montada del segundo batalln del Regimiento Simancas No. 64. Una parte de los hombres avanz por el trillo que conduca a la fortificacin, mientras que el resto, portando las escopetas, se posesionaba en sus inmediaciones sin ser vistos. La avanzada mambisa, bajo el disfraz de cazadores, no levant sospechas en los peninsulares, quienes lo recibieron con el acostumbrado trato que dispensaban a esas partidas que en ocasiones les suministraban alimentos, agua y alguna bebida. Para su sorpresa, los cubanos se abalanzaron sobre ellos y logran neutralizarlos. Tres soldaos espaoles que se encontraban en las inmediaciones logran reaccionar y realizan disparos contra los asaltantes, aunque sin efecto alguno, para luego caer abatidos por el fuego certero de los escopeteros parapetados entre la maleza. Uno de ellos logra escapar y se interna en la tupida vegetacin circundante.

    La accin fue un xito completo. Resultaron muertos el cabo Benigno Daz Giros y el soldado Vicente Salas Martn. Fueron prisioneros tres soldados, uno de ellos herido. Los cubanos ocuparon un valioso botn de guerra, no tanto por su envergadura, sino por constituir las primeras armas arrebatadas al enemigo, consistentes en 6 fusiles muser, un revolver, abundante parque, un caballo y sus arreos y el botiqun. La instalacin fue destruida por el fuego inmediatamente despus.18

    Despus de atender al herido peninsular, las fuerzas cubanas se retiran en direccin al fortn El Toro, ubicado en la costa, en las inmediaciones de la regin conocida como El Mangle, al cual arribaron sobre las cinco de la tarde. Esta guarnicin se hallaba apercibida por haber escuchado los disparos de la accin de San Nicols y por recibir un informe detallado por parte del soldado que logr escapar.

    A las cinco de la tarde se present Tudela en este ltimo fuerte. Sobre aviso la guarnicin, se defendi bizarramente. Los seis muser de caballera y los cien tiros de cada uno, tomados en Hatibonico, sirvieron a la causa cubana en este asalto. No la pareci sensato a Tudela gastaren aquella nica operacin el parque, y tras haber hecho algunos heridos, se retir.19

    Despus de estas acciones, Tudela se incorpora a las fuerzas de Periquito en la finca La Pulsiana.

    El 24 de Febrero de 1895 adems de los pronunciamientos referidos de Boca de Jaibo y La Confianza, as como los ataques a los fortines de Hatibonico y El Toro tuvieron lugar levantamientos armados en el Ingenio Santa Cecilia, encabezado por Pedro Ramos y Pedro Brooks; en Baitiquir dirigido por Luis Gonzlez Pineda, Luis Chiquito; en El Yarey por los hermanos Araujo junto a los seguidores de los ingenios San Antonio Red y Romeli; en Tiguabos mandados por Pablo Salomn y en San Andrs del Vnculo por los veteranos

    Evaristo Lugo y Prudencio Martnez. Otras regiones de la isla respondieron tambin al llamado de Mart. Una nueva etapa se abra paso.

    La obra de Regino E. Boti: El 24 de Febrero de 1895. Exposicin crtica de los ms importantes estudios publicados hasta hoy sobre la fijacin histrica del Grito de Independencia, ensayo histrico de obligada consulta para conocer la verdad de los hechos, representa la confirmacin de justicia a Guantnamo, cuyo protagonismo en estos acontecimientos ha sido ignorado o menguado con reiteracin. El levantamiento simultneo de la Guerra Necesaria el 24 de Febrero represent el grito de la Independencia de Cuba, pica jornada que reabri las puertas de la Revolucin y ratific la unidad patrocinada por Mart.

    Notas1 Alberto Plochet:EI Coronel Emilio Gir Odio. La odisea de un hroe olvidado , en Diario de Cuba,

    Santiago de Cuba, 17 de mayo de 1930.2 Jos Mart: Carta al General Antonio Maceo, de 22 de septiembre de 1894 , en Jos Mart: Obras

    Completas, Ed. Ed. Ciencias Sociales, La Habana, 1975, t. 3, pp. 269-270.3 Jos Mart: Carta a Antonio Maceo, de 23 de noviembre de 1894 , en Jos Mart: Ob. c it., t. 3,

    p. 295.4 Jos Luciano Franco: Antonio Maceo. Apuntes para una historia de su vida, Ed. Ciencias Sociales,

    La Habana, 1975, t. 2, p. 72.5 Durante 1893 y 1894 Jos Mart recorri varios pases de Amrica y Estados Unidos para

    convocar y unir a los principales jefes de la Guerra del 68 y acopiar recursos para la nueva contienda. Desde mediados de 1894 aceler los preparativos del Plan de Fernandina, con el cual pretenda promover una guerra corta, sin grandes desgastes para los cubanos. El 8 de diciembre de 1894 redact y firm el plan de alzamiento en Cuba. El Plan fue descubierto e incautadas las naves con las cuales se iba a ejecutar. A pesar del revs, Mart mantuvo firme el plan general de desarrollar los pronunciamientos armados en la Isla.

    6 Jos Mart: Ob. cit., t. 4, pp. 41 -42.7 Jos Grave de Peralta: Comunicacin al Gobernador Provincial Enrique Capriles, febrero de

    1895 , en Archivo Nacional de Cuba (ANC), Fondo: Donativos y Remisiones, leg. 418, exp. 59.8 Luis de Jess Morlote Ruiz: Telegramas , 15 de enero al 26 de febrero de 1895, p. 1. (indito).9 Regino E. Boti: El 24 de febrero de 1895, Ed. El Mar y la Montaa, Guantnamo, 2008, p. 77.10 Idem.11 Jos Grave de Peralta: Comunicacin al Gobernador Provincial Enrique Carriles Osuna, 8 de

    febrero de 1895 , en ANC, Fondo: Donativos y Remisiones, leg. 418, exp. 59.12 Jos Grave de Peralta: Comunicacin al Gobernador Provincial Enrique Capriles, 12 de febrero

    de 1895 , en ANC, Fondo: Donativos y Remisiones, leg. 418, exp. 59.13 Jos Grave de Peralta: Comunicacin al Gobernador Provincial Enrique Capriles, 19 de febrero

    de 1895 , en ANC, Fondo: Donativos y Remisiones, leg. 418, exp. 59.14 Emilio Bacard Moreau: Crnicas de Santiago de Cuba, Tipografa Arroyo Hermanos, Santiago

    de Cuba, 1955, t. 8, p. 55.15 Enrique Ubieta: Efemrides de la Revolucin Cubana, t. 1, p. 335.16 Emilio Barcard Moreaux: Op. cit., t. 8, p. 72.17 Hoja de servicios del General Pedro Agustn Prez Prez , en ANC. Fondo: Gobierno de la

    Revolucin de 1895, Leg. 30, Exp. 4211.18 Jos Lachambre Domnguez: Cablegrama al Capitn General, de 26 de febrero de 1895 , en

    ANC. Fondo: Donativos y Remisiones, caja 418, exp. 52.19 Regino E. Boti: Ob. cit. p. 48.

    7

  • Primero de abril de 1895. En una cscara o en un LeviatnLic. Rodny Alcolea Olivares

    Hace 120 aos del arribo por playa Duaba en Baracoa de los herm anos Antonio y Jos Maceo, Flor C rom bet y otros patriotas, expedicionarios de la goleta Honor.

    BLASONES Guantnamo

    I territorio que en la actualidad comprende la provincia de Guantnamo fue testigo protagnico de la entrega e incondicionalidad de sus hombres y mujeres a las causas libertarias, en el 68, el 95 y durante la seudorepblica, hasta el logro definitivo de nuestra verdadera independencia, el luminoso Primero de Enero de 1959.

    No fue fruto de la casualidad histrica, y s de la sumatoria de condiciones creadas, que durante la Guerra Necesaria, concebida y organizada por Jos Mart, se produjeran por la regin guantanamera la llegada de sus principales jefes: El Titn de Bronce, Maceo; el veterano, Generalsimo Gmez, y aquel Delegado brillante del Partido Revolucionario Cubano.

    El da uno del abril de 1895, pisan tierra cubana, por Duaba en Baracoa, los hermanos Antonio y Jos Maceo, Flor Crombet, Agustn Cebreco y un selecto grupo de jefes. Diez das despus llegaban, por La Playita en Cajobabo, y daban aquel Salto de Dicha Grande, Mart, Gmez y un puado de patriotas. Meses despus tambin desembarcara el holguinero General Calixto Garca, el 24 de marzo de 1896, por Marav tambin en Baracoa.

    El investigador cubano y nieto del General Mamb Flort Crombet, Coronel (r) Hugo Crom bet Bravo, ha dedicado parte de su vida a reve lar los acontecimientos en torno a los sucesos que propulsaron la empresa que, por rdenes de Mart dirigiera su abuelo El Gallardo Flor , al dirigir la expedicin que, condujo a Maceo a la Patria. Investigaciones que acertadamente se recogen en el libro titulado La Expedicin del Honor .

    El general Antonio Maceo, - narra Hugo Crombet Bravo - despus de su expulsin de Cuba junto con Flor, por el entonces Capitn General espaol, Camilo Polavieja Garca en 1890, se radica en tierras costarricenses a principios de 1891, y funda una colonia agrcola, en convenio con el gobierno de ese pas centroamericano, en la regin de Nicoya, provincia de Guanacaste.

    Tal como era la idea del Titn, hasta all comienzan a acudir numerosos

    Monumento PLaya Duaba

    veteranos de las Guerras Grande y Chiquita, para lanzarse sobre Cuba, cuando se rompieran de nuevo las hostilidades. Entre ellos Flor Crombet, los hermanos Jos y Toms Maceo, Agustn Cebreco, Arcid Duverger y varios ms, los que conjuntamente con las labores agrcolas, se preparan para el gran salto hacia la patria irredenta.

    Jos Mart, el Delegado, visit a Maceo en 1893 y 1894, coordinando y puntualizando las bases, de lo que se conociera como el Plan de Fernandina, desde donde uno de los tres vapores contratados, el Lagonda, deba recoger al contingente dirigido por Maceo, en un lugar de la costa atlntica de Costa Rica.

    Pero como es conocido, por fatal delacin el plan de La Fernandina fracas, y ya para la segunda quincena de enero de 1895 la situacin en la Isla era insostenible y se haca definitivamente necesario tomar la decisin de ordenar el alzamiento, el que deba ser simultneo en todo el territorio nacional; sin esperar los poderosos tres desembarcos que se previstos en Oriente, Camagey y las Villas.

    Al producirse el alzamiento del 24 de febrero los principales jefes se encontraban en el exilio, situacin a la que se sumaban las irregularidades organizativas, dudas, descontentos e incertidumbre. Fue momento entonces de que brillara ms que nunca el genio de Mart para aunar voluntades.

  • Mayor General Flor Crombet Mayor General Antonio Maceo Grajales

    Como se recoge en el texto citado, con fecha 19 de enero, a slo una semana del fracaso de Fernandina, el Delegado enva una carta al general Antonio, explicndole la magnitud de la catstrofe y plantendole la necesidad imperiosa de moverse a Cuba, con un grupo de 25 a 30 jefes, contando slo con lo disponible en esos momentos, que eran 2 mil pesos .

    Se realiza entonces a la sazn un intercambio de correspondencia, tanto escrita como cablegrfica entre el Delegado y el general Antonio, quien considera insuficiente el dinero disponible para organizar una expedicin, quizs en grande, como inicialmente se pens con el Lagonda, solicitndole a Mart, 6 mil pesos y despus 5 mil para realizarla.

    El general Crombet, conociendo la situacin, escribe a Mart, plantendole que envindole las armas y menos de la suma disponible, era factible la entrada a Cuba, acompaado con un reducido grupo de veteranos, por lo que en consulta con el general Mximo Gmez comunica a Gonzalo de Quesada y Benjamn Guerra en New York el 26 de febrero que, ...pudiendo hacer Flor lo que Maceo no puede hacer, lo entrego a Flor a que lo haga, y lo de hecho a M aceo...

    Junto a estas instrucciones a la Delegacin, escribe al general Maceo una hermosa, difcil y patritica misiva, pidindole se subordine a la empresa puesta en manos de Flor.

    Reedicin del desembarco por Duaba

    Al General escribo hoy, an ms que al amigo, la guerra a la que estamos obligados, ha estallado en Cuba...Y como la ida de usted y de sus compaeros es indispensable, en una cscara o en un Leviatn, y usted ya est embarcando, en cuanto le den la cscara [...] decido que usted y yo dejemos a Flor Crombet la responsabilidad de atender ah a la expedicin, dentro de los recursos posibles, porque si l tiene modo de que ustedes puedan arrancar de ah con la suma que hay, ni usted ni yo podemos privar a Cuba del servicio que l pueda prestar

    Consciente del trascendental momento el Generalsimo Mximo Gmez, la figura de ms alto rango militar en el Ejrcito Libertador tambin le escribe al general Maceo, con fecha 27 de febrero:

    ...G enera l: Como muy bien com prender Ud., todo lo que ha ordenado y dirigido el Delegado del Partido, ha estado en lo racional, justo y perentorio. Pero lo que avisa y comunica en estos momentos, verdaderamente supremos, reviste carcter de preciso y urgente...

    Dando muestra una vez ms de su grandeza, y de que lo primero era la Patria, Maceo acepta con disciplina la decisin y se subordina a Flor, quien inmediatamente tras el desembarco le entrega el mando.

    9

  • BLASONES Guantnamo

    Monumento en Alto del Pino

    Lleno de enormes e incalculables dificultades y peligros de la Expedicin del Honor -narra Hugo Crombet- pues en definitiva, las prometidas armas no pudieron ser enviadas y slo se lograron adquirir 11 fusiles, despus de mltiples gestiones, movindose perseguidos y espiados por incontables agentes espaoles, que da a da, rendan un parte a las autoridades en Espaa y Cuba del ms mnimo movimiento de los generales Maceo y Crombet.

    Por fin, engaando magistralmente al propio cnsul espaol y a sus agentes, lograron embarcar y partir de Puerto Limn el 25 de marzo, en un vapor de lnea inglesa Atlas, el Adirondack, en viaje regular desde ese puerto, con escala a Jamaica e Isla Fortuna en Bahamas, con destino final en New York.

    Fueron 23 los hroes epnimos, que integraron el grupo de expedicionarios, que despus de breve escala en Kingston el 28 de marzo, ser perseguidos por cruceros espaoles al pasar a la vista de la costa sur oriental, despus de doblar la punta de Mais, arriban a la Isla Fortuna el viernes 29 de marzo, donde desembarcan mientras el vapor contina su viaje hacia Estados Unidos. En esta isla consiguen dos fusiles ms, completando los 13, con que contaban al momento de su desembarco.

    Es aqu donde contratan una goleta de 18 toneladas, con el sugestivo nombre de Honor, que despus de tormentosa travesa, comenzada el da

    Monumento al Coronel Flix Ruenes

    30 al atardecer, con serios riesgos de naufragar en varias ocasiones arriban a las arenas del tibaracn del ro Duaba, a una legua de Baracoa, sobre las 5:00 de la maana del 1 de abril.

    Haba arribado a Cuba Insurrecta, en plena regin del Alto Oriente, la expedicin del Honor, trayendo al Hroe de Baragu, el que dara en pocos das un vuelco a favor de las armas cubanas !Ha llegado el general Antonio!

    Ya en tierra Maceo, jefe natural en Oriente, ordena en las primeras horas de la maana, al comandante Flix Ruenes, levantarse en armas en el poblado de Baracoa, lo que se realiza y a slo unas pocas horas del desembarco, ya combate en Cuba y vence en Alto del Pino a una fuerza espaola superior en nmero, a la que derrota y obliga a regresar a la Villa.

    Luego vendran das verdaderamente difciles para los expedicionarios, con la irreparable prdida de grandes patriotas, entre ellos el propio Flor; pero con la presencia de Maceo, Guantnamo y toda Cuba estaban en pie de guerra.

  • Playita, lugar sagrado de la PatriaPablo Soroa Fernndez

    I General de Ejrcito Ral Castro ha expresado: (...) seguamos las huellas de Antonio Maceo, Flor, Jos y otros veinte combatientes que embistieron con la proa de la goleta Honor la playa de Duaba, con solo once fusiles, el primer da de abril de 1895. De Mart, Gmez y una mano de valientes que desembarcaron en Playita, once das despus, en un pequeo bote sin nombre, que muy bien podra llamarse tambin Honor.

    Noche de mar encrespada y chubascos la del 11 de abril de 1895, en Playita de Cajobabo, lugar sagrado de la Patria, como lo denomin el Comandante de la Revolucin Juan Almeida Bosque.

    En ardua jornada desembarcaron juntos por esa punta saliente de mar, perdida en la costa suroriental de la Isla, para incorporarse a la Guerra Necesaria que ya arda en varios puntos de la Isla, el hombre que la promovi: Jos Mart, Delegado del Partido Revolucionario Cubano (PRC) y el General en Jefe, Mximo Gmez, el dominicano que acept venir nuevamente a luchar por la independencia de Cuba sin otra remuneracin que el placer del sacrificio o la ingratitud probable de los hombres.

    Arribaron tambin los brigadieres Paquito Borrero y ngel Guerra, el coronel Marcos del Rosario -compatriota del Generalsimo- y el capitn Csar Salas.

    Verdadero Va Crucis debieron sortear los expedicionarios para llegar desde la vecina isla inglesa de Inagua hasta las costas de Cuba, en noche donde se perdi el timn del pequeo bote en el que descendieron del buque alemn Nordstrand, cuyo capitn Henrich J.T. Lowe, se comport de manera gallarda y desvi el rumbo, para protagonizar un gesto que deba incluirse en la historia de la solidaridad. Gmez y l se reencontraran aos despus en La Habana, y el primero reiterara a Lowe: Usted nos dej donde nosotros queramos estar

    Aquel hombre fue el encargado de comprar el pequeo bote en la cual 10 das antes del aquel acontecimiento histrico ponan pie en Duaba, Baracoa, Antonio Maceo, Flor Crombet y otra veintena de patriotas.

    Poco despus del arribo a Playita, en su Diario de Campaa Mart dej constancia de aquel episodio: (.. .) y el 11, a las 8 de la noche, negro el cielo del chubasco, vira el vapor, echan la escala, bajamos con gran carga de parque, y un saco con queso y galletas; y a las dos horas de remar, saltbamos en Cuba.

    Prosigue el Apstol: Se perdi el timn y en la costa haba luces. Llev el remo de proa. La dicha era el nico sentimiento que nos posea y embargaba. Nos

    Playita de Cajobabo

    echamos la carga arriba y cubiertos de ella, empapados, en sigilo, subimos los espinares y pasamos las cinagas. Camos entre amigos o entre enemigos? Tendidos por tierra esperamos a que la madrugada entrase ms, y llamamos a un boho: decir ahora ms fuera imprudencia...

    Ya estn en Cuba. Lo imposible es posible y los locos estamos cuerdos. Ha demostrado la veracidad de esas palabras suyas. En sus bolsillos el Manifiesto de Montecristi, plasmacin programtica de la voluntad revolucionaria. Invoc la guerra, y participa en ella. Ya est en el combate.

    Me quedo en el bote el ltimo vacindolo. Salto. Dicha grande, apunta el Apstol. Y el historiador Lus Toledo Sande ha subrayado que la referencia del ms universal de los cubanos refleja su optimismo inquebrantable y su personal contribucin guiadora a la hazaa.

    Despus del desembarco, los combatientes instalaron campamentos en Cajobabo, la cueva de Juan Ramrez, Vega Batea, Palmarito, Palenque y otros sitios de la provincia.

    Luego de detenerse en distintos puntos correspondientes a los hoy municipios de San Antonio del Sur, Manuel Tames y Niceto Prez, se produjo poco despus la entrevista de Mart, Gmez y Maceo en La Mejorana, y ms tarde, la cada del primero en Dos Ros.

    Solo este fatd ico suceso -ocurrido en la confluencia del Cauto y el Contramaestre- pudo truncar la felicidad del gua de la guerra, y dilatar hasta la alborada definitiva del primero de enero de 1959 su propsito de ver la Patria Libre para siempre.

  • Isabel: una espa en la retaguardia enemigaMSc. Jos Snchez Guerra, Historiador de Guantnamo

    La audacia y el ju ic io de Isabe l , agente de la in te ligenc ia m am bisa contribuy de m anera destacada a sa lvar a Mart y Gmez del operativo que el ejrcito espaol planific para m atar o cap turar a los dos lderes de la Revolucin de 1895.

    BLASONES Guantnamo

    a yaterana Inocencia Araujo Caldern, fue pionera en las actividades clandestinas en la villa de Guantnamo y en Oriente. Su formacin ideolgica se produjo en un hogar de viejos luchadores independentistas de la Guerra Grande.

    Hija del tabaquero mayarisience Manuel Lorenzo Araujo y de la yaterana Juana Caldern, hermana de Juan, Trino y Jos Agustn Araujo, responsables del levantamiento armado de El Yarey, el 24 de febrero de 1895, cumpli mltiples tareas patriticas junto al ingeniero Jos Nicols Jan, Pnfilo Mesa, Luciano Peguero, Caridad Jaca e Higinio Medrano. Al abortar la intentona separatista en octubre de 1893 -elaborado por Pedro Agustn Prez (Periquito) y Guillermn Moneada- el primero se vio obligado a refugiarse en los campos, para desde all dirigir la trama conspirativa, debido a la accin del agente enemigo Manuel Cardet, infiltrado en un eslabn de las filas clandestinas, Periquito se vio obligado a refugiarse en los campos, para desde all dirigir la trama conspirativa.

    Qued Jan al frente de los comprometidos de la poblacin, contando con Inocencia, la agente Isabel como una de sus principales colaboradoras.

    En mayo de 1894, el joven Emilio Gir y Odio arriba a Guantnamo procedente de Costa Rica; lo enva el ge^neral Antonio Maceo. Gir contacta con Pnfilo Mesa en la dulcera La Dominica.

    Se entrevista con Isabel quien lo conduce a la finca La Confianza, cuartel general de la conspiracin. Jos Prez Aroche leg lo siguiente de este primer encuentro del agente secreto de Maceo con Periquito:

    El General Prez deseoso de conocer el asunto de que se trataba, aunque infiri sera conveniente a la revolucin, lleg vido de noticias a casa de Peguero encontrndose con los patriotas Inocencia Araujo y Emilio Gir Odio, que traa una elevada misin del extranjero del General Antonio Maceo, y que al llenar su cometido dio una alta nota de patriotismo e imperecedera recordacin en los anales de la Historia Patria.

    En el boho de la pequea propiedad de Peguero, donde fueron atendidos con preferencias por Caridad Jaca, en presencia de Isabel, fue informado Periquito por Gir de las indicaciones de Maceo, que aconsejaba incrementar los preparativos blicos para el inicio de la guerra y valorar la situacin de las posiciones militares del en el permetro costero comprendido desde la desembocadura del ro Sabanalamar en San Antonio del Sur hasta la boca del ro Baconao, al oeste de la baha de Guantnamo; ordenando el Titn de Bronce de manera particular, que cuando se iniciara el conflicto una de las primeras acciones que deba acometer Prez era tomar los fuertes costeros situados en esta zona. El propsito de Maceo era desembarcar en el sur del territorio.

    Com o parte de la es truc tu ra conspirativa, en el mes de julio del propio ao, Pedro A. Pre, orden crear e!Comit Revolucionario de Guantnamo, uno de los centros conspirativos msfuertes de la isla, integrado por 27 destacadas figuras del separatismo del Alto Oriente, entre ellas Nicols Jan e Inocencia, nica mujer, a quin Periquito le asign la misin de crear una red clandestina de agentes, para recoger informaciones de inteligencia militar, localizar recursos blicos y garantizar los contactos con los responsables de los grupos subord inados en Yateras. Considerada una de las costureras ms destacada del municipio, alternaba su trabajo con la peligrosa misin de espa en la retaguardia espaola. Realiz contactos frecuentes con sus hermanos en Jamaica, con Jos Mejas, en Yateras, con Pedro Ramos en Santa Cecilia, y con Silverio Guerra y Pedro Mestre, en Ro Seco.

    Constituido el Comit Revolucionario de Guantnamo, Periquito separ la labor de la red de inteligencia del trabajo conspirativo, ya que este tipo de trabajo tiene la tendencia de realizarse con el propsito de hacerse pblico para poder alcanzar el respaldo de parte del pueblo. Los jefes, en momentos determinados, llegan a conocerse. En la inteligencia, sus agentes siempre deben permanecer en la oscuridad, incluso despus que triunfe o no exista la causa por la que lucharon. Probablemente, la razn principal de los golpes

    Jos Nicols Jan, jefe directo de la espa Isabel .

  • que sufri la inteligencia mambisa en Santiago de Cuba y Guantnamo, en el otoo de 1895, se debi a la violacin de estos principios.

    La agente Isabel tuvo cuidado en la seleccin del personal que trabajara en la labor secreta de la villa y en los poblados del valle. Junto a Nicols Jane, Lucas, escogi entre el numeroso grupo de comprometidos veteranos de las campaas pasadas y jvenes bisoos los hombres y mujeres ms preparados para acometer las complejas misiones de agentes secretos. Demostr poseer proyeccin para elegir los establecimientos comerciales y centros sociales que por su ubicacin en la cabecera del municipio resultaban sitios claves para la recogida de informacin confidencial del ejrcito y de las autoridades civiles, as como tambin para los contactos entre los comprometidos.

    Fueron centros de la inteligencia revolucionaria la ya mencionada cafetera y dulcera La Dominica, de Pnfilo Mesa y su esposa Caridad Romero, situada frente al Casino Espaol, en la cntrica calle general Valds entre Gobierno y Campana. A un lado se localizaba la relojera de Antonio Surez Richard, uno de los principales colaboradores de Periquito, quien mantena correspondencia con Jos Mart desde 1890.

    El centro La Luz, primera sociedad cultural esencialmente cubana en Guantnamo, fue escenario de las acciones clandestinas de Pedro Ramos y Enrique Brooks. En las veladas y bailes all celebradas aprovechaban a favor de la causa independentista las indiscreciones de funcionarios y oficiales espaoles. A pocos metros de La Luz radicaba la imprenta de Patricio Corona, donde se reunan los agentes y se publicaron pasquines subversivos.

    Completaba el sistema de inteligencia mamb la farmacia Santa Catalina, frente a la Plaza del Prncipe, uno de los sitios ms frecuentados por los uniformados, donde el sagaz farmacutico Higinio Medrano, Pupulo, mediante la utilizacin del vapor de agua, lograba abrir las cartas que escriban los funcionarios del gobierno y otras autoridades espaolas. En este lugar radicaba un buzn oficial de la oficina de correo de entonces. En 1893 haba obtenido la prueba documental que confirmaba la presencia en la conspiracin del espa enemigo Manuel Cardet.

    En esta etapa, antes del estallido del conflicto, Inocencia y Jan organizaron y capacitaron a una de las redes ms fuertes del oriente cubano. Jane, uno de los jefes clandestinos mejor preparados, instruye a la luchadora en el empleo de la tinta invisible, novedoso sistema introducido desde Estados Unidos, que posibilitaba ocultar las informaciones confidenciales sin ser detectadas por el enemigo.

    Al recibirse en Guantnamo la orden de Guillermn Moneada que indicaba realizar el levantamiento armado el 24 de Febrero de 1895, Jan orienta a Inocencia permanecer en las labores de inteligencia en la poblacin, y le corresponde trasladarse a Yateras y trasmitir a Jos Mejas, la decisin del mando revolucionario. La yaterana, mujer extraordinaria, forjada por la revolucin,

    posea atrayente personalidad y sangre fra.

    El 24 de abril, al encontrarse en la casa de unos familiares en San Justo, en lugar prximo al puente Santa Isabel, se gan la confianza de un teniente del ejrcito espaol enamorado de una de sus primas. En la maana de ese da Jan e Inocencia se percatan de un inusual movimiento entre los oficiales peninsulares y las unidades que defendan la villa.Horas despus, un sargento espaol que cooperaba con los insurrectos, confirm la sospecha al informar a Jan que el regimiento Simancas realizaba preparativos que indicaban una prxima operacin. El golpe que haba recibido la revolucin en la primera quincena de abril, en la serrana yaterana donde murieron el general Flor Crombet y otros expedicionarios de la goleta Honor, constitua una leccin.

    Los miembros de la red deban redoblar las actividades de recogida de informacin en las filas del ejrcito colonialista, en particular las relacionadas con los planes de operaciones, el nmero de fuerzas e itinerario que trazaran sus jefes. Jan indic a Inocencia fortalecer la labor, tratando de no llamar la atencin de oficiales del Simancas.

    No poda sospechar Inocencia, que aquel encuentro casual en San Justo con el oficial del Regimiento iba a proporcionar una de las informaciones ms valiosas que obtuvo la inteligencia mambisa en la guerra de 1895. Se trataba de los planes operativos del coronel Juan Copello y de su Estado Mayor para acorralar a Mart y Gmez en la zona de Arroyo Hondo. Su objetivo consista en capturar o eliminar a las ms grandes figuras de la revolucin.

    Inocencia inform a Jan y luego sali en direccin al campamento de Periquito Prez en Vuelta Corta de Filiphnas. En la media noche del da 24 de abril pudo informar personalmente al general Jos Maceo y a Pedro A. Prez de los propsitos del enemigo, lo que posibilit que el Len de Baconao adoptara las medidas necesarias para evitarlo.

    Jos, al frente de las fuerzas de Periquito y Garzn, parti hacia Arroyo Hondo, donde derrot en horas del medio da del 25 a un batalln del Simancas al cual obliga a retirarse y con ello salva de una probable muerte a Jos Mart y a Mximo Gmez.

    Caridad Jaca

    13

  • Luego de este xito, Inocencia continu bajo la direccin de Jane. Jos Maceo sostuvo encuentros con Inocencia en Vuelta Corta y Sierra de Canasta, y la nombr su agente personal, reconocimiento que fortaleca su misin. En uno de los escritos que enva Inocencia a Maceo, le informa el cumplimiento de algunas de las misiones asignadas:

    Pas a consulta con el General Prez en Canasta, all aprob en todos mis puntos el propsito y convenimos la siguiente entrevista, dndome instrucciones sobre el trabajo en Guantnamo. Mucho estimar la tinta especial que me remiti y la instruccin que le escribiera todo lo que debe permanecer en secreto, lo que me permitir hablar con toda libertad y sin temor a que si es capturado el portador perjudique nuestros planes. Los espaoles situaron artillera en el fuerte del Prncipe y construyen un cuartel de caballera en el alto de San Justo, preparo plano de la defensa enemiga de la poblacin que enviar al General Prez. Isabel.

    En el verano de 1895 result decisiva su participacin en el descubrimiento de la espa de Beln Botijuela, negra exesclava, vendida al oro espaol. Beln prest servicios en los campamentos insurrectos en la Guerra Grande y en 1895. La traidora entraba libremente a la villa guantanamera e informaba la situacin de los campamentos insurrectos. Estas frecuentes entradas y salidas llamaron la atencin de Inocencia, quien lo informa a Periquito, el cual ordena su captura. Detenida en la zona de Tiguabos, fue maniatada y remitida por el alto oficial del Ejrcito Libertador al campamento de Jos Maceo, en La Pimienta.

    Un consejo de guerra, ordenado por Antonio Maceo, condenaba das despus a la pena de muerte a la ms connotada espa capturada en las lneas del Ejrcito Libertador, nica mujer sentenciada a muerte y ejecutada que registran los anales de la historia de Cuba.

    A partir de mayo de 1895, Isabel, por orden de Pedro A. Prez, sostuvo conversaciones con el administrador del ferrocarril de Guantnamo, Mr. William Goire, en las cuales lleg a amenazar al conspicuo funcionario de la sociedad comercial Brooks y Compaa con la destruccin de las propiedades de la empresa si su directiva no cooperaba con recursos monetarios y materiales para la Revolucin. Como resultado de estas conversaciones y de la situacin de guerra existente en el valle de Guantnamo, se enviaron importantes remesas de dinero a Nueva York a nombre de los representantes del Partido Revolucionario Cubano.

    Los constantes golpes que propinaba la red clandestina de Jan e Isabel, provocaron que el mando espaol adoptara severas medidas de control sobre los sospechosos y redoblara la vigilancia en los objetivos militares y econmicos. En septiembre de 1895 la polica de la Metrpoli descubri a los principales lderes del Comit Secreto Revolucionario de Santiago de Cuba y detuvo a Emilio Bacard Moreaux, y otros comprometidos. Con las informaciones obtenidas el cuerpo represivo colonial se situ en la pista que finalmente lo

    l B L A S O N E S Guantnamo

    condujo al centro conspirador de Guantnamo.

    En octubre de 1895 una unidad pen insu la r efectu reg istros en la Empresa del Ferrocarril y en el tren de Caimanera y descubre un cargamento de municiones y dinam ita, materiales que deban entregarse en un punto acordado con los mambises en la finca Matabajo.

    El p roceso de in ve s tig a c i n condujo a la detencin de un grupo de conspiradores, entre ellos el Dr.Joaqun Ross e Inocencia Araujo.Jan escap hacia Estados Unidos y all se puso bajo las rdenes del general Calixto Garca.

    Inocencia sufri prisin por breve tiempo en la crcel de Guantnamo.Luego fue conducida al Morro en Santiago de Cuba, all la vio llegar el expedicionario de la goleta Honor Manuel Granda, quien escrib i:A l ve r m bar a la p res tig iosa mambisa Inocencia Araujo, aquella tarde, maniatada por las ataduras y conducida por un grosero sargento, comprend que la Revolucin haba sufrido un fuerte golpe.

    La agente Isabel se mantuvo encarcelada hasta el final de la guerra en 1898. De sus labios el colonialismo no pudo arrancar ninguna confesin.

    Fuentes._ Documentos de la Guerra de 1895: Archivo del Museo Emilio Bacard de Santiago de Cuba._ Coleccin Emilio Gir: Archivo Histrico Provincial, Guantnamo._ Jos Snchez Guerra: Mambisas guantanameras, Editorial El Mar y la Montaa, 2002.

    Mayor General Pedro A. Prez

  • Arroyo Hondo: donde sesalv la PatriaDrC. Noralis Palomo Daz Presidenta de la Filial Provincial de la Sociedad Cultural Jos Mart

    os Mart, el hombre que organiz la Guerra Necesaria, est convencido de que su responsabilidad comienza con ella, en vez de acabar, y por eso est dispuesto al sacrificio que eso implica, decide regresar a su patria amada para cumplir con su ms anhelado deseo: luchar por su independencia, como soldado de primera fila.

    Tras afrontar el peligro propio de la empresa, en la noche del 11 de abril el delegado del Partido Revolucionario Cubano, junto a Gmez y otros patriotas desembarcaron por Playita de Cajobabo. Comienza as un camino plagado de obstculos, pero tambin de glorias y satisfacciones para quien predic con el ejemplo y empez por poner en riesgo su propia vida.

    Durante la marcha del grupo por tierras guantanameras sucedi un hecho de guerra de singular importancia, que hubiera podido cambiar los acontecimientos: el combate de Arroyo Hondo, el da 25 de abril de 1895.

    Investigaciones realizadas por el historiador Jos Snchez Guerra revelan que ms de 600 soldados espaoles del Batalln de Simancas, al mando del teniente Coronel Joaqun Bosch, acompaado de un grupo de voluntarios, guerrilleros y de las tropas de la guarnicin del territorio, se emboscaron en ese lugar para aniquilar a la direccin de la contienda cubana, que avanzaba en su difcil travesa por este territorio oriental.

    Enterados Jos Maceo y Pedro Agustn Prez, de lo que se preparaba, gracias a la oportuna informacin de la patriota guantanamera Inocencia Arajo, parten las tropas designadas por Periquito, a las que se une Victoriano Grazn, al frente del regimiento Limones e inician su desplazamiento hacia la zona probable del encuentro.

    Durante todo el trayecto Jos Maceo, quien impaciente recorra la columna en marcha, arengaba a los soldados con esta histrica frase: Arriba muchachos, que perdemos la Patria, si no llegamos a tiempo.

    Casi al medio da del 25 de abril se producen los primeros disparos de un encarnizado combate, en el que con coraje sin par se enfrentaron al enemigo los valientes mambises, en posicin desventajosa desde el punto de vista numrico y de armas.

    En esta accin decisiva se destac el Coronel Arcid Duverger Lafargue, quien

    en medio del tiroteo cae muerto de un balazo en la frente, y como al percatarse los espaoles del hecho piensan que es Jos Maceo, se recrudece la violencia de su ataque para exterminar a sus contrarios.

    En los momentos ms tensos de aquel enfrentamiento Jos, el bravo Len de Oriente, espolea su caballo y, machete en mano, grita: Arriba muchachos, a vengar la muerte de Arcid, arenga que le imprimi nuevos bros a las fuerzas y cambi por completo la suerte de las armas, que impuls tambin la valerosa carga dirigida por Victoriano Garzn, hasta culm inar en una rotunda victoria frente a un enemigo superior.

    El jefe espaol, quien cuatro horas antes soaba saborear el triunfo glorioso y los honores que recibira por la captura o muerte de Mart y Gmez, se retira hacia Guantnamo con carretillas repletas de heridos, despus de enterrar cerca del lugar a varios soldados espaoles.

    Las fuerzas cubanas tuvieron pocas, pero sensibles bajas. Ese fue el precio pagado para salvar las vidas de Mart y Gmez, quienes una hora ms tarde, todava vivo el eco de los disparos, llegan al lugar guiados por el mamb guantanamera Modesto Prez. Despus de los sucesos Jos Maceo quien haba venido en busca del Delegado, le obsequia a este un caballo bayo que le posibilit, al hombre ms buscado de Cuba, atenuar los estragos de sus das recios.

    Sobre ese pasaje de guerra escriba Mart en su Diario: A las 12 de la noche haban salido, por ros y caaverales y espinares, a salvarnos; ...A partir de aqu vendran jornadas de insomnios, de recuento de los sucesos, de cura a los heridos...

    Que mayor prueba para Mart de que los cubanos de ac estaban dispuestos a dar su vida por salvar la de l, en gratitud al que entreg sus mejores aos a preparar una guerra generosa y breve, que se desenvuelve ya y augura la victoria.

    Muchos combates victoriosos fueron desarrollados por el Ejrcito Libertador en desiguales condiciones frente al poderoso Ejrcito Espaol de Operaciones en Cuba, pero el de Arroyo Hondo tuvo una connotacin especial, pues en l se salv al Apstol de la independencia cubana, que fue igual a salvar la Patria.

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  • Guantnamo, Boti y La Edad de Oro, una empresa del coraznLic. Martha Reyes Noa

    BLASONES Guantnamo

    i primer contacto de Jos Mart con la regin de Guantnamo acontece en 1889 cuando remite desde los Estados Unidos ejemplares de La Edad de Oro, pertenecientes al primer nmero de las cuatro revistas redactadas por l para los nios de Amrica y que seran distribuidas en la Isla, expres en exclusiva a Blasones el Msteren Ciencias Regino Boti Rodrguez.

    No fue remiso en brindar la mayor cantidad de datos a la reportera, en relacin con ese acontecimiento, el tambin albacea literario de su abuelo, el poeta historiador y jurisconsulto Regino E. Boti Barreiro, quien precisa que el envo fructifica a raz de una convocatoria del autor de Versos Sencillos, al compatriota Amador Esteva Mestre, radicado en esta villa del Guaso y miembro de la Sociedad Cultural La Luz.

    El propsito, precisa el entrevistado, consista en contribuir la bsqueda de un agente para la circulacin de los textos portodo el oriente cubano, tarea que el propio Esteva asume junto a su hijo Jaime. La gestin inicia precisamente en ese ateneo donde solan reunirse personalidades de sentim ientos independentistas.

    La edificacin, en la actual interseccin calle Calixto Garca y Emilio Gir, es hasta ahora la nica todava en pie entre los inmuebles relacionados con la Edad de Oro, asegur, hace algn tiempo, durante una entrevista en la emisora CMKS de Guantnamo, el Dr. Jorge Lozano, Asesor de la Oficina del Programa Martiano. El local est sealizado con una tarja colocada por los martianos del territorio en el 2003, mientras importantes pruebas documentales permanecen en el voluminoso archivo del Poeta Mayor del Alto Oriente cubano.

    Retomando el dilogo con Rodrguez Boti, y a la pregunta de cmo obtuvo su abuelo la misiva original probatoria de ese encargo de Mart y de la entrada de La edad de Oro a Cuba, por Guantnamo, responde: el aun joven escritor, a quien se debe La sexualidad en el atardecer de la (Editorial Oriente, 2003), ensayo con que obtuvo ese ao el Premio Nacional de Salud de la Repblica de Cuba Mi abuelo adquiere el valioso documento con la familia de Esteva, patriota santiaguero que conoci al Maestro en nueva York, al frecuentar la casa de Manuel Mantilla y Carmen Miyares, entre 1878 y 1888. El activista, inmediatamente despus de su regreso a la patria cumple lo indicado por

    el autor y Boti tiempo despus guard esa carta durante veinte aos en su papelera personal. Parece que cuando los proveedores supuestamente vuelven por el escrito para entregarlo quizs a los archivos nacionales, l opta por reproducirlo.

    Mi interlocutor muestra la fotocopia del documento, a la cual el lector podr asomarse en el recuadro que acompaa este trabajo.

    Nueva York, 27 de ju lio de 1889 Seor Amador Esteva Guantnamo Mi muy querido Amador:Me va a decir egosta y hombre despreciable, que slo se ocupa de sus amigos cuando los puede necesitar

  • Edificacin actual donde radic la Sociedad Cultural La Luz

    se avergenza al ignorar quin es el hombre muerto en combate en Dos Ros el 19 de mayo y del que hablan tanto en Santiago de Cuba al momento de su partida hacia Espaa -

    As lo refleja -d ice- en un trabajo titulado In Memorian, tras concluir sus estudios en esa nacin ibrica.

    Cita a su abuelo cuando por esa poca asegura en un artculo que Solamente las generaciones futuras le rendirn el justo reconocimiento que Mart merece y luego redacta otro verdaderamente enciclopdico que titula Gentica Martiana.

    Evoca que, el que luego devendra el ms grande intelectual guantanamero de todas las pocas, que nunca ms pudo desprenderse del Maestro, haba recibido clases de fotografa y grabado con Luis Lamarque y esa habilidad le permiti fotocopiar la carta original.

    Y precisa: La Dra. Florentina Boti Len (mi madre), subrayaba que las naciones se sustentan sobre la base de su memoria y que un pueblo sin ese patrimonio, es desgraciado... por eso la epstola de Mart para Esteva sobre La Edad de Oro posea un extraordinario valor sentimental, patrimonial y cultural para su padre y eso lo ha defendido toda la familia.

    En el Archivo Boti se conservan otros pergaminos sobre Jos Mart, producto de lo que sobre este Boti Barreiro escribi durante ms de 50 aos, como demostr la autora de los das de mi interlocutor, al rescatar 104 trabajos alusivos al Apstol, la mayora de ellos correspondientes a personalidades de

    - - * -

    y*

    Fragmento de carta escrita por Jos Mart

    las letras cubanas y extranjeras.En la conversacin, trasluce que faltan por estudiar cientos de cuartillas de

    la Gentica Martiana, que el archivo protege ejemplares de la primera reedicin de la Edad de Oro y la carta de (escrita por) Boti Barreiro el 2 de junio de 1921 al seor Armando Leyva en Santiago de Cuba, donde le comenta que por gestiones mas el Dr. Gonzalo de Quesada y Arstegui le ha prestado al intelectual costarricense Garca Monje un ejemplar sobre la Edad de Oro que ser reproducido en El Convivio de los Nios. Por ahora esa ser la nica oportunidad de conseguir La Edad de Oro. Agotada ya la primera edicin.

    Llama la atencin el hermoso y desinteresado gesto de amistad de Gonzalo de Quesada, al desprenderse de ese tesoro para prestarlo por mediacin de Boti al narrador, crtico y animador cultural de la nacin centroamericana.

    Aflora durante el intercambio una carta indita escrita por el entonces capitn del Ejrcito Libertador y luego Coronel Emilio Gir y Odio, ayudante del Mayor General Jos Maceo, desde el campamento de Vuelta Corta el 30 de abril de 1895, un da antes de Mart dejar los lmites de Guantnamo dirigida al seor Laureano Ruiz, pseudnimo de guerra de Luis Rivera, quien termin la contienda con los grados de Comandante

    Se precisa que en la misiva Emilio Gir expone: acabo de hablar con el amigo Mart y l lo quiere saludar y es cuando el Maestro de puo y letra escribe un prrafo y lo firma.

    17

  • Es una carta indita que vaga por esa rica papelera...con la firma del fundador del Partido Revolucionario Cubano y que invita a profundizar en el espritu martiano del guantanamera que adems de renovar la lrica hispanoamericana de principios de la pasada centuria, incursion en las artes plsticas y otras disciplinas

    En palabras del entrevistado: La compenetracin de Boti con la obra de Mart era ya conocida en el archipilago cuando an no haba pasado la segunda mitad del siglo X X . Una nota de Nemesio Lavi, de la Revista Orto fechada el 6 de enero de 1925, le avisaba a Boti de que se organizaba algo digno del natalicio del Apstol y era necesario que enviara cuatro cuartillas sobre el Maestro para una edicin especial .

    En junio de ese mismo ao -subraya el nieto del bardo- la imprenta Siglo X X de La Habana da a la luz su ensayo Mart en Daro, texto que caus admiracin y respeto en personalidades como el ensayista Juan Marinello.

    Indagado en torno al papel de su abuelo como historiador con el desembarco de Jos Mart y Mximo Gmez 11 de abril de 1895 por Playita de Cajobabo, contesta que en 1922 Boti integr la Comisin Histrica creada con el apoyo del gobierno y el ejrcito para fijar por primera vez el lugar del arribo de Mart, el Generalsimo y sus compaeros.

    Agrega que durante el periplo se reconstruy igualmente la Ruta hasta Dos Ros, y cita la relacin de los integrantes del grupo, encabezado por Arturo R. de Carnearte, periodista, escritor y estudioso de la vida de Jos Mart: Marcos del Rosario (nico superviviente entonces de aquella gesta) y su hijo, el General Loynaz del Castillo, Regino E. Boti, Gustavo E. Rubio, Urbano Gmez Toro (hijo del generalsimo Mximo Gmez), Carlos E. Botta (fotgrafo) y Rafael Lubin y Arias, teniente y topgrafo del Ejrcito.

    Indica que aquel trabajo comenz el 21 de abril al llegar a Playita de Cajobabo a las 5 de la tarde despus de 11 horas de navegacin desde Santiago de Cuba en el vapor Patria e inmediatamente despus de recibir a Marcos del Rosario procedente de Santo Domingo en el vapor Guantnamo.

    En 1930 Boti -declara su descendiente- escribe el artculo La Obra potica de Mart. Cronologa y Antologa, publicado en la Revista Oriente, donde afirma

    i B L A S O N E S Guantnamo

    LA

    EDAD DE ORO

    Ejemplar de la primera edicin de la Edad de Oro

    que la edad mental del Hroe Nacional de Cuba, corri pareja con la edad fsica en un hombre casi perfecto.

    Narra que entre 1947 y 1948 su abuelo viaja a los Estados Unidos con sus dos hijas, visita la Biblioteca del Congreso en Washington en busca de datos y libros sobre el tema martiano, y que por si fuera poco, su ltima publicacin en vida, como hombre cvico y patriota aparece en 1953 en la Revista Accin Ciudadana de Santiago de Cuba donde realiza una Valoracin del Diario de Campaa. De ah surge mi idea de escribir sobre Mart en Boti.

    En Guantnamo el Apstol permanece 20 das de los 38 de su Ruta de Gloria, desde el once de abril hasta el primero de mayo. Aqu recibe de Jos Maceo Grajales su caballo Baconao el 25 de abril despus del combate de Arroyo Hondo y expresa dicha grande al poner pie en tierra para emancipar a Cuba en palabra y accin de la metrpoli espaola.

    Perseguido de muerte y sin quejarse jams de fatiga alguna en Sao del Najesial (Imas) anota en su Diario de Campaa que subir lomas hermana hombres. En esa zona, en el Rancho de Tavera, Mximo Gmez le confiere los grados de Mayor General del Ejrcito Libertador, el 15 de abril.

    Anduvo por maniguas, ros y montes pertenecientes a cinco de los actuales diez municipios guantanameros: Imas, San Antonio del Sur, Manuel Tames, Guantnamo y Niceto Prez y su presencia ilumina todava los 13 campamentos del recorrido. Apenas tuvo tiempo para conocer los campos de la amada Patria (de sus 42 aos slo vivi 19 en Cuba), mas percibi en campaa los sonidos de la naturaleza, el color y textura de las flores y el poder curativo de las plantas.

    Al respecto, y como colofn de sus declaraciones, el entrevistado confiesa que esa extraordinaria sensibilidad del Hroe Nacional de Cuba, Boti la resume con esa frase suya, inscrita en su In Memorian Mart parece ser el revolucionario que menos estuvo con su pueblo y sin embargo nadie quiso como l al pueblo.

    Tarja conmemorativa

  • Razones para una fecha histricaMsC Arturo Valds Curbeira

    P Intervencin en Asam blea Provincial del Poder Popular,en la que se aprob como fecha histrica ms significativa de la provincia el 11 de abril de 1895. ra ta definicin de fecha histrica ms significativa de una provincia debe cumplirse como principio bsico ser original, nica y distintiva.

    El 11 de abril de 1895 rene esas caractersticas. Ese da llegan a Guantnamo las figuras de ms rango de la nueva gesta: Mximo Gmez, el supremo jefe militar, smbolo histrico de internacionalismo y modestia, el revolucionario sagaz e inclaudicable, y Jos Mart, el Delegado del Partido Revolucionario Cubano, el inspiradorde la nueva clarinada, quien 16 aos antes que V .I. Lenin crea un solo Partido para dirigir la guerra necesaria, y el pionero en caracterizar las entraas podridas del naciente Imperio del Norte, revuelto y brutal.

    Mart, el ms universal de los cubanos, quien al arribar a la mambisa costa cubana de Playitas de Cajobabo, pasa a formar parte de la historia guantanamera.

    Das despus, todava en tierra imiense, es ascendido a Mayor General del Ejercito Libertador, aquel patriota cuyo tobillo haba sido marcado para siempre por los grilletes, durante el presidio a que fue sometido por la metrpoli espaola. El que en esas condiciones fsicas recorre como un soldado ms nuestras escabrosas montaas, cuyas bellezas describe en su Diario de Campaa, con palabras salidas desde lo ms hondo de su corazn patriota.

    En Arroyo Hondo, donde cae el valiente Arcid Duverger, a quien la muerte le entr por la frente, tal como escribi en su Diario, recibe de regalo, salido de las cuadras del ingenio Los Caos (hoy Paraguay), el caballo con que cayera combatiendo de cara al Sol en Dos Ros.

    En Filipinas, tierra guantanamera, escribe la Circular a los Jefes, en la que con su visin estratgica y de futuro, dice: Quien respete a la Revolucin ser respetado por ella. Cunta vigencia la de esa frase!

    El desembarco de Mart y Gmez, el 11 de abril de 1895 y su paso por nuestra provincia, los situ para siempre en el corazn de la historia de los actuales diez municipios. De Imas, San Antonio del Sur, Manuel Tmes, Guantnamo, Niceto Prez, Baracoa, cuyos jefes militares y patriotas aseguraron el apoyo y proteccin de Gmez y Mart, y tambin la del Titn de Bronce Antonio Maceo.

    De Mais, zona que Fermn Valds Domnguez, durante su exilio en Baracoa,

    Fidel en Playita de Cajobabo, 11 de abril de 1995

    ya haba explorado por rdenes directas del Apstol.Los revolucionarios de Caimanera, El Salvador y Yateras tambin pusieron

    todo el dispositivo patritico en funcin de garantizar el cumplimiento de las rdenes combativas de Mart y Gmez.

    El 11 de abril se celebr siempre por historiadores, artistas y pueblo. Fecha de arraigo y tradicin.

    A esta efemride del 11 de abril est vinculada la presencia del Comandante en Jefe quien en tres ocasiones estuvo en Playitas de Cajobabo.

    Recuerdo aquel 11 de abril de 1995, a las 10:20 pm, cuando la naturaleza quiso, 100 aos despus, por pura coincidencia, comportarse igual que en 1895: noche oscura, en la que la figura gigantesca de Fidel se perfilaba a la luz de lejanos relmpagos cuando se acerc al mar, hasta que las olas mojaron sus botas guerrilleras, y parado, firme, con la bandera de la estrella solitaria en alto y de frente al mar, estuvo varios minutos, para despus dirigirse hacia el monumento, en que la coloc y nos dijo: he venido a recibir en el ao del Centenario, de manos de Mart, la Bandera de la estrella solitaria, y solo pido que las futuras generaciones la mantengan ondeando para siempre en una patria Libre.

    Desde ese instante y para la eternidad, en renuevo continuo e inmortal, como en pocos lugares de Cuba y en ningn otro de Guantnamo, pude sentir el simbolismo histrico de la fusin de Mart en Fidel, y de Mart y Fidel en la historia de Guantnamo y el Mundo.

  • BLASONES Guantnamo

    Pedro y sus dos encuentros con FidelLic. Pablo Soroa Fernndez

    ara r l hoy profesor Pedro Rodrguez, su primer encuentro con el Comandante en Jefe Fidel Castro, est envuelto en las neblinas del recuerdo, all en la escuela Oscar Lucero, de Cajobabo, muy cerca del sitio donde desembarcaron el 11 de abril de 1895 Jos Mart, delegado del Partido Revolucionario Cubano; Mximo Gmez, General en Jefe de todos los cubanos y del Ejercito Libertador y cuatro compatriotas ms.

    Para l, designado historiador de Imas y muy vinculado al trabajo del Partido en ese territorio dominado (como en el poemario de Boti) por el Mar y la Montaa, fue aquella la primera visita del Mximo Lder de la Revolucin al municipio, donde el Apstol fue ascendido a Mayor General, en Consejo de Jefes.

    El hecho ocurri a mediados de la dcada del 60, yo soy hijo de campesinos pobres y cursaba el cuarto grado a una edad en que normalmente hoy se ha concluido hace rato la primaria, explic al reportero.

    La subescolarizacin fue un producto de la etapa anterior a la Revolucin, y gracias a esta pude graduarme de maestro, opin el imiense.

    Narra que Fidel se present all, vena de Imas, y dialog con maestros y alumnos. Estuvo en mi aula y aquello produjo un impacto muy grande en la muchachada. Luego recorri las dems aula. Los nios queran conversar con l y los ms audaces que l jugara con ellos.

    Alguien le paso una pelota de voleibol y lo invit al patio a jugar. El nos tir la bola varias veces, durante poco menos de un minuto, porque enseguida lleg el transporte de relevo, el de viajar por las montaas, ya que l, la escolta y otros dirigentes haban arribado en unas mquinas muy grandes.

    Esos carros continuaron hacia Baracoa, y Fidel, en jeep, sigui por la costa sur hacia Mais. Creo, si mal no recuerdo, iba al entierro de los Mrtires de Punta de Silencio. Aunque esa reflexin la hice mucho ms tarde.

    Recuerda Rodrguez que antes de partir, pregunt si se le haban quedado los tabacos en los otros vehculos, un escolta le ofreci uno. Lo encendi y se fue. Esa fue la nica vez que lo he visto fumar. Nunca ms lo vi, ni por televisin ni en la otra ocasin en que me encontr con l.

    Pedro agachado, el segundo de izquierda a derecha, junto a Fidel y otros compaeros

    Vino en helicpteroPero antes de que Pedro refiera su reencuentro con Fidel (ocurrido durante

    la tercera visita del entonces Primer Secretario del Comit Central del Partido a la localidad), describamos la segunda (1976).

    El ya desaparecido Flix Garmenda Lupern, entonces primer secretario del Partido en Imas, narr a este periodista, que en esa ocasin el Presidente cubano vino en helicptero hasta Cajobabo, donde el Bur Municipal del Partido y dirigentes de la provincia lo esperaban.

    Tambin refiri la siguiente ancdota, reflejativa de la modestia y el sentido del humor del Lder Histrico de la Revolucin: Fidel haba sobrevolado las montaas de Imas y a la franja costera en una poca de intensa sequa, donde no se vean ni los pastizales. Todos sabemos que nuestro territorio es uno de los que menor rea cultivable tiene en la provincia, y l se percat de esa circunstancia desde las alturas.

    En un instante del recorrido efectuado a raz del aterrizaje, pasa el brazo por mis hombros y me pregunta por qu haba sido sancionado. Le respondo que no tena en mi expediente partidista ni siquiera un sealamiento crtico, y que haba sido promovido de funcionario del Partido en Baracoa, a primer secretario de Imas. Entonces me dice: No te lo habrn querido decir, pero eso no fue una promocin, sino una sancin.

  • Garmenda narr que Fidel, siempre sin quitarle el brazo de encima, le explic que era una broma de l, porque dirigir un territorio rido, sin recursos naturales y de otro tipo, nunca podra interpretarse como un castigo, sino como un ejemplo de confianza en la persona en que se depositaba tamaa tarea.

    Fue en aquella visita que el Lder Histrico de la Revolucin convers con Salustiano Leyva Leyva, ltimo testigo del Desembarco de Mart, en compaa del cineasta Santiago lvarez, quien film el documental Mi hermano Fidel.

    Quienes hayan visto esa joya del cine cubano, recordarn el dilogo con el nonagenario, cuya lucidez haba mermado debido a la edad, y a quien Fidel le espeta cariosamente en un punto de la conversacin: Salustiano, caramba, as que dices que eres mi hermano y no me conoces

    Despus de ese intercambio con quien era un nio cuando el desembarco de Mart y Gmez, Fidel fue hasta Playita.

    En las imgenes del filme de Santiago lvarez, se ve avanzando por la arena, admirado de las angustias y sobresaltos que debieron acompaar a los expedicionarios, en el arribo a esa punta saliente de mar, rodeada de arrecifes.

    Cantidad grande de MdicosA mediados de octubre de 1986, Fidel clausura en Imas el acto nacional de

    inicio de la aplicacin masiva del Plan del Mdico de la Familia y la Residencia en Medicina General Integral. Nuevamente fue Cajobabo, el escenario de una actividad de marcado relieve. Se escoge para celebrarlo un sitio al que Rodrguez califica como un ncleo de historia.

    Relata el entrevistado que donde se levant la tribuna y se instalaron las sillas para el pblico y los recin graduados, exista en 1878 un fuerte espaol considerado estratgico para la metrpoli y en el cual tuvo lugar la penltima accin blica de la Guerra Grande.

    El enclave militar se llamaba La Tintorera, y se encontraba en el delta del ro Joj. Su ubicacin es prxima a la Ruta Martiana, y limita al norte con el primer campamento de los revolucionarios: la casa de Adela, la Nia, madre de Salustiano.

    All se construye luego el museo municipal, por orientacin de Fidel.En aquel sitio el lder cubano asegur que nunca en la historia, una nacin,

    provincia o regin haba recibido de una sola vez una cantidad tan grande mdicos, como la asignada entonces a Guantnamo para contribuir al desarrollo de la salud en sus zonas montaosas.

    Durante su discurso sentenci que aquellos 147 jvenes (136 recin graduados de Ciudad de la Habana, siete que lo fueron en esta provincia, y cuatro ya incorporados a esa experiencia), abriran un nuevo captulo en sus vidas, rodeados de la gratitud, el aprecio y la admiracin de los campesinos.

    Transcurren despus casi nueve aos para su retorno a la zona, y este se produce en ocasin del centenario del desembarco, es algo que vino a coronar

    con la mxima expresin el sentido de patriotismo, de respeto y de homenaje que merece aquella pica hazaa.

    Algo indescriptibleLo que siguen son las impresiones vividas -plasmadas en un artculo indito-

    del Historiador de Imas, sobre la tercera visita de Fidel al municipio:Algo indescriptible. Nueve y 20 de la noche del 11 de abril de 1995. Una voz

    interrumpe el murmullo continuado de las olas caribeas sobre las viejas rocas y las arenas de playita.

    All conversa, con voces casi imperceptibles, un grupo de compaeros que esperan con singular reposo no se sabe a quin o a quines en la oscuridad, frente a un gran monumento.

    Junto a la voz se hace la luz y viene por el angosto trillo entre piedras arriba, tras las huellas de Mart, su mejor discpulo, el Comandante en Jefe Fidel Castro.

    Amaury Terrero, entonces miembro del Bur Provincial del Partido, al ver que Fidel avanza por la arena, exhorta: Compaeros, vamos a tener el privilegio de recibir al Jefe. Son necesarios varios instantes para reponernos de la sorpresa y la emocin. Nos detenemos. Pienso que soy el ltimo.

    El grupo que viene en posicin opuesta nos envuelve, ya estamos saludando y me toman por el brazo derecho. Hay presentaciones, y una de ellas me concierne: Comandante es el historiador de Imas. Fidel me tiende la mano y expresa solamente: Ah. Me atrae y me abraza, en tanto formula la primera pregunta, la otra, varias, que acierto a contestar de casualidad, debido a la emocin.

    Me toma del brazo y lleva hasta cerca del monumento, acompaado de Pedro lvarez Tabo, Ricardo Alarcn, Eusebio Leal y otros.

    El Comandante ordena apagar las luces para imaginar la intensidad de la oscuridad que pudo ser en la noche del desembarco, un siglo atrs.

    Extraordinario simbolismo patritico cuando Fidel avanza sobre la misma orilla del mar, a recibir la bandera de la Estrella Solitaria de Mart, da un giro y la coloca en un pedestal de madera.

    Luego, con solemnidad, evoca el da del desembarco, que era martes y lloviznaba, como ahora, cien aos despus.

    21

  • H | BLASONES Guantnamo

    M OM ENTOS

    Constitucin de la Comisin Electoral provincialEn ceremonia que tuvo lugar en la plaza de la Revolucin Mariana Grajales Coello, se constituy en Guantnamo la Comisin Electoral provincial, segn lo establecido en la Ley 72 de la Constitucin de la Repblica de Cuba, Ley Electoral, integrada por 15 compaeros en representacin de toda la sociedad, quienes tienen la responsabilidad de garantizar el desempeo de un transparente y democrtico proceso eleccionario.Los miembros de la Comisin Electoral firmaron su toma de posesin ante Nancy Acosta Hernndez, Presidenta del mximo rgano de Gobierno en Guantnamo. En la siguiente jornada quedaron constituidas las Comisiones Electorales municipales

    Nominacin de candidatos a DelegadosDe los 10 primeros candidatos a delegados a igual nmero de las Asambleas municipales del Poder Popular, electos por el pueblo en asambleas piloto de sus respectivas reas de nominacin, realizadas en Guantnamo, seis fueron mujeres.El acto cvico se realiz el 24 de febrero de 2015, coincidiendo con el aniversario 120 del reinicio de la guerra por la independencia cubana. La nominacin de candidatos es el primer paso para las elecciones parciales en el pas.En Guantnamo se realizaron dos mil 201 asambleas de nominacin, proceso que concluy el 25 de marzo. Luego de esta etapa se exponen las biografas y fotos de los candidatos nominados, en sitios concurridos de las respectivas circunscripciones, con vista a las votaciones el 19 de abril, con segunda vuelta el 26 del mismo mes en las demarcaciones donde alguno de ellos no obtenga los votos vlidos para ser electos.

    Tributo al alzamiento del 24 de febrero en GuantnamoAnte decenas de estudiantes, trabajadores, combatientes de las FARy el Minint y miembros de la Asociacin de Combatientes concentrados en el Mausoleo de La Confianza, Jos Snchez Guerra, Historiador de Guantnamo, signific la

    trascendencia del alzamiento insurreccional en esta localidad el 24 de Febrero de 1895, al mando de Pedro Agustn Prez, en el acto por el Aniversario 120 del inicio de la Guerra Necesaria organizada por Jos MartSnchez Guerra remarc la organizacin de la conspiracin aqu gracias a la pericia de Periquito Prez, el patriota ms grande de esta tierra.Adems del levantamiento en La Confianza, Guantnamo tuvo acciones en Matahabajo, adonde fueron los hombres que partieron desde la primera, Baitiquir, Santa Cecilia, El Yarey, Tiguabos, San Andrs del Vnculo y Hatibonico, donde tomaron el fortn de Morrillo Chico, la primera accin victoriosa de la Guerra.

    La tierra no espera para producirLa tierra no espera por los recursos necesarios para producir alimentos, ya sean fertilizantes o combustible para el transporte, subray en Mais y Baracoa, Jos Ramn Machado, segundo secretario del Comit Central del Partido Comunista de Cuba.Al intervenir en la Asambleas municipal de balance de la ANAP, el tambin Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, aclar que el axioma es aplicable a los insumos que se encuentran en el pas, en la provincia o en el municipio, y llegan a destiempo a los productores.Machado fue enftico al sealar que si se le pide a los campesinos dar ms, hay que garantizarle sin dilacin lo que necesitan.Al terciar sobre el tema, el miembro del Bur Poltico, Marino Murillo Jorge, coincidi que en ocasiones la materia prima y las piezas permanecen en los almacenes, cuando deban estar a pie de surco, en funcin de las tareas agrcolas. La asamblea estuvo presidida adems porDenny Legr Azahares, primer secretario del Partido en la provincia; Rafael Santiesteban Pozo, presidente nacional de la ANAP, Julio Andrs Garca Prez, viceministro primero de la Agricultura y Nancy Acosta Hernndez, Presidenta de la Asamblea provincial del Poder Popular.

    Acto nacional de la FMC en el Alto Oriente cubanoLa Plaza 28 de septiembre, en la barriada sur de la ciudad del Guaso, fue escenario del acto central por el aniversario 54 de la Federacin de Mujeres Cubanas (FMC), otorgado a la provincia por el Secretariado Nacional de la organizacin.

  • A Guantnamo se le otorg el galardn de provincia Vanguardia en la emulacin nacional. La decisin del Secretariado Nacional de la FMC de otorgarle al territorio ms oriental cubano la sede del acto por el 23 de agosto se debi a la influencia de varias de sus estructuras en las comunidades, el trabajo social, preventivo y educativo, la batalla contra las indisciplinas sociales y las ilegalidades, la atencin a la formacin de valores, a los nios con problemas de conducta, y por los indicadores de funcionamiento, entre otros resultados.Con la presencia de Olga Lidia Tapia Iglesias, miembro del Secretariado del Comit Central, ms de 3 mil guantanameros en representacin de las 191 mil federadas de la provincia protagonizaron el acto que tuvo como consigna central: Sigue Vilma viva en el corazn del pueblo.

    Conmemorado en Guantnamo el Da del Campesino cubanoUn respaldo popular a la Revolucin cubana expres nuevamente el pueblo de Guantnamo, el 17 de mayo, durante la realizacin del Acto Nacional por el Da del Campesino, y en el aniversario 55 de la firma de la primera Ley de Reforma Agraria.Miles de guantanameros y guantaname- ras se dieron cita en la plaza polifuncional Pedro Agustn Prez, para conmemorar la histrica fecha del 17 de mayo, que tanta relacin guarda con este territorio, pues en igual da pero del ao 1946 fue asesinado, en la zona de El Vnculo, el lder campesino Niceto Prez Garca, por rdenes del terrateniente Lino Mance