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APORTES DEL CONDUCTISMO CONTEXTUALISTA A LA PSICOLOGÍA CLÍNICA COMPORTAMENTAL. Ponencia presentada en el Tercer Congreso Iberoamericano de Psicología Bogotá D. C., Julio 21 a 27 de 2002 Prof. César Rey. Tipos de conductismo. Metodológico: Surge con las posiciones neoconductistas. - PowerPoint PPT PresentationTRANSCRIPT
APORTES DEL CONDUCTISMO CONTEXTUALISTA A LA PSICOLOGÍA
CLÍNICA COMPORTAMENTAL
Ponencia presentada en el Tercer Congreso Iberoamericano de Psicología
Bogotá D. C., Julio 21 a 27 de 2002
Prof. César Rey
Tipos de conductismo
Metodológico: Surge con las posiciones neoconductistas. Contempla el papel de variables intervinientes para la explicación de la
conducta siempre y cuando se manifiestan conductualmente y estas manifestaciones puedan definirse operacionalmente.
Énfasis en la posibilidad de replicación experimental definiendo operacionalmente los procedimientos dirigidos al cambio comportamental.
Radical: Preferencia por la interpretación del comportamiento haciendo énfasis en el
ambiente. Se supera la dicotomía observable (públicamente)-no observable, a través
de la distinción manifiesto-encubierto. Por lo menos hay un observador de lo no observable públicamente.
LO NO OBSERVABLE PÚBLICAMENTE PUEDE TAMBIÉN SER ANALIZADO FUNCIONALMENTE Radical: raíz, razón de ser de la conducta, manifiesta o encubierta.
Insumos teóricos del enfoque contextualista
1. Planteamientos de B. F. Skinner sobre la conducta verbal (Verbal Behavior, 1957) y sobre la conducta gobernada por reglas (Contingencies of Reinforcement, 1969).
2. Investigaciones sobre la equivalencia de estímulos de Murray Sidman y el control contextual.
3. Planteamientos del grupo de la Universidad de Nevada (Steven Hayes, Linda Hayes, K. Wilson) en lo referente a la aplicación de la equivalencia de estímulos para el análisis de la conducta verbal y la teoría de los marcos relacionales.
Principios del conductismo contextualista (Hayes & Hayes, 1992)
1. Definición de comportamiento: acto en contexto
No es mecanicista (no es el accionar de un organismo ante un estímulo), sino la INTERACCIÓN de un organismo entero en y con un contexto. Dicha interacción es continúa y situada en ese contexto determinado. Por ejemplo: “Caminado a la escuela”: Esta acción no implica solamente los movimientos de músculos de las piernas.
LA CONDUCTA SE ANALIZA A LA LUZ DE CONTEXTO NO TANTO DE SUS PARTES CONSTITUTIVAS.
Implica la funcionalidad propósito del comportamiento, por lo que su análisis se dirige a ello
CONDUCTISMO RADICAL
Principios del conductismo contextualista
2. Nivel de análisis psicológico.
No es posible separar la conducta del contexto en el que ocurre, ni el organismo que emite esa conducta puede ser dividido en partes (no a posición mecanicista)
Ciencias biológicas y sociales pueden proveer un contexto para el análisis psicológico y constituyen otros niveles de análisis.
Principios del conductismo contextualista
3. Criterio de análisis pragmático.
El analista del comportamiento no “descubre” la verdad, pues debe interesarle descubrir la funcionalidad o meta de la conducta.
Esto implica analizar los propósitos detrás de los actos a la luz del contexto en el que ocurren (tradición descriptiva y funcional).
La cognición a la luz del conductismo contextualista
Es parte de las actividades del organismo entero interactuando en y con un contexto. Es una acción situada: tiene una FUNCIONALIDAD.
Se puede analizar de la misma forma que los fenómenos manifiestos, a la luz del contexto en el que ocurre.
Fenómenos estudiados experimentalmente a través de los cuales se ha abordado la
cognición:
1. Control contextual
Una R tiene una mayor probabilidad de ocurrencia ante determinadas claves contextuales y menor en presencia de otras claves.
Lo que se piensa o recuerda en un momento dado depende del contexto: claves contextuales pueden desencadenar determinados pensamientos o memorias.
Fenómenos estudiados experimentalmente a través de los cuales se ha abordado la
cognición:
2. Relaciones condicionales
Ocurre cuando la relación entre dos sucesos (R y Eref o EC y EI) está determinada por la presencia de otro suceso (en el caso del control contextual, de una o más claves contextuales).
Fenómenos estudiados experimentalmente a través de los cuales se ha abordado la
cognición:
3. Equivalencia de estímulos Consiste fundamentalmente en que un individuo,
tras haber aprendido a responder ante un E determinado por reforzamiento, da la misma R a otro estímulo de manera arbitraria, sin que se le haya reforzado previamente por ello. Así, este último estímulo se vuelve equivalente al inicial.
La función del primer E para provocar la R se ha transferido a este nuevo estímulo.
Permite un mejor entendimiento de fenómenos tales como el lenguaje (especialmente el nombrar objetos) y la formación de conceptos.
Formación de conceptos: se ofrece la misma respuesta a objetos o situaciones que muestran uno o más atributos en común.
La equivalencia de estímulos en los humanos Procedimientos de igualación a la muestra en
humanos (Sidman) LenguajeOcurre equivalencia si se demuestran cuatro
fenómenos (Sidman & Tailby, 1982): 1. Reflexividad: Elección de un objeto que
forma parte de un conjunto de objetos, con base en su igualación con un objeto muestra.
2. Simetría: Entrenada la función “Si aparece A escoja B”, sin entrenamiento el individuo escoge A si se le muestra B.
A B
3. Transitividad: Una vez se ha aprendido que ante A hay que elegir o responder a B, y que ante B se debe elegir o responder a C, sin entrenamiento adicional ocurre que el individuo ante A puede elegir o responder a C.
A B C
4. Relación derivada de estímulos o relación de equivalencia:
A B C
La equivalencia de estímulos no solo ocurre en relación con conductas verbales y otras conductas manifiestas sino con fenómenos encubiertos (pensamientos, imágenes, emociones).
Se analiza teniendo en cuenta las potenciales claves contextuales y las relaciones derivadas entre estímulos entre respuestas manifiestas y encubiertas.
Por ejemplo, con las claves contextuales adecuadas, un nombre puede provocar respuestas emocionales e imágenes.
La equivalencia de estímulos a la luz del grupo de la Universidad de Nevada
Gracias a la equivalencia de estímulos, no se requiere tener un contacto con los estímulos del ambiente para aprender, ya que “indirectamente” se podrían aprender muchas cosas.
Aplicación a la cognición
Conducta gobernada por reglas y relaciones derivadas de estímulos
Regla: enunciado verbal que especifica las condiciones en que debe ejecutarse una conducta y las consecuencias que resultarán de la misma.
También se define como un estímulo discriminativo verbal que enuncia una contingencia.
Los enunciados verbales en una regla ofrecen el contexto (relaciones derivadas de estímulos a través de equivalencia de estímulos) que facilitan la comprensión de las condiciones y las consecuencias de determinada conducta.
Reglas y vida cotidiana
El entorno sociocultural ofrece gran cantidad de reglas, que pueden incluso hacer insensible a las consecuencias al individuo que las maneje.
Por ejemplo: las “reglas” del machismo: “El hombre no debe llorar porque eso es signo de feminidad”, “La fuerza física es una señal de masculinidad”, etc. Estas reglas ponen en riesgo de comprometerse en peleas a muchos hombres que las siguen.
Las reglas pueden salir de:- Proverbios y máximas.- Códigos éticos y legales.- Prácticas culturales.
La psicoterapia como un contexto
A diferencia del enfoque de modificación del comportamiento, en el contextualismo se realza la importancia del contexto del consultorio y su riqueza para el entendimiento de la conducta del individuo y su tratamiento.
La psicoterapia como un contexto
La psicoterapia constituye un contexto social-verbal en el que muchas conductas manifiestas y encubiertas pueden darse y analizarse a la luz de la equivalencia de estímulos.
Ofrece la oportunidad de analizar las contingencias y las reglas que gobiernan la conducta del consultante en su entorno natural y que podrían estar jugando un papel importante en su problemática.
La psicoterapia como un contexto
Dado que los enunciados verbales y otras conductas pueden relacionarse por equivalencia de estímulos con otras conductas en otros contextos, la psicoterapia ofrece la posibilidad de modificar la conducta “indirectamente” en el consultorio, tratando de modificar las conductas clnícamente significativas, a través de reglas que permitan modificar la conducta cuyas consecuencias no son momentaneas.
La psicoterapia como un contexto
Al hablar con el consultante, el psicoterapeuta está brindando reglas (contextos conformados por relaciones entre imágenes, pensamientos, sensaciones, etc.) que le permiten comprender su conducta y actuar de forma efectiva en un momento dado.
Por la transferencia de funciones propia de las relaciones derivadas arbitrarias de estímulos, lo que el individuo llega a pensar, imaginar o recordar por influencia de los enunciados verbales y otras conductas del psicoterapeuta, se constituye en un estímulo para que muestre una R más deseable en su entorno natural.
Diferencias terapia basada en principios contextualistas y la modificación del
comportamiento
Terapia contextualista Modificación del comportamiento
Objetivo: Modificar el CONTEXTO en el que ocurre la conducta, para lograr un cambio en ella.
Objetivo: Modificar directamente la conducta.
Medio: Conducta gobernada por reglas y relaciones derivadas de estímulos fruto del intercambio social-verbal.
Medio: Manejo de contingencias: se modifican las condiciones antecedentes y consecuentes de la conducta (conducta gobernada por contingencias).
Lugar: consultorio. Lugar: ambientes naturales.
La terapia de Aceptación y Compromiso (ACT)
Se centra en el contexto social-verbal constituido por el consultante y el psicoterapeuta, por lo que se basa en la teoría de los marcos relacionales.
Lo que dice o hace el consultante es analizado funcionalmente ya que el contexto social-verbal natural del consultante sería el responsable de gran parte de sus dificultades (contexto de la explicación, del control, de la literalidad y de la evaluación).
La terapia de Aceptación y Compromiso (ACT)
Busca el desmantelamiento de tales contextos viéndolos desde afuera (“distanciamiento comprensivo”): uso de metáforas.
Se busca que el consultante identifique las reglas que sigue maladaptativamente su conducta para que establezca nuevas reglas.
Se le hace ver que es capaz de responsabilizarse de su conducta (no la controlan emociones o pensamientos de manera automática y sin control sobre ello).
Psicoterapia Analítico-Funcional (PAF) Robert J. Kohlenberg y Mavis Tsai (1991)
Hace énfasis en las reacciones a las conductas del psicoterapeuta, de cara a la determinación de las conductas clínicamente relevantes:
Las conductas clínicamente relevantes tipo 1 (CCR1) son aquellas conductas relacionadas con su problema que el cliente presenta en la sesión y cuya frecuencia debe ser reducida a lo largo de la terapia.
Las conductas clínicamente relevantes tipo 2 (CCR2) son las conductas que ocurren en la sesión y que suponen una mejoría en relación al problema por el que acude a consulta.
Las conductas clínicamente relevantes tipo 3 (CCR3) son las interpretaciones del cliente sobre su propio comportamiento. Junto a estas también se incluyen descripciones de la equivalencia funcional que indican semejanzas entre lo que ocurre en la sesión y en su vida diaria.
Psicoterapia Analítico-Funcional
Regla 1: Buscar las Conductas Clínicamente Relevantes. Esta regla tiene un papel clave en la terapia. Tanto es así que le dedica un capitulo completo a ayudar al terapeuta en su labor de búsqueda de las CCR.
Regla 2: Evocar las CCR. Se trata de establecer durante la terapia condiciones que originen algún aspecto del problema que presenta el cliente.
Regla 3: Reforzar las CCR2. Para implementar esta regla se ofrecen dos planteamientos, uno directo y otro indirecto (reforzamiento natural).
Regla 4: Observar los efectos potencialmente reforzantes de la conducta del terapeuta (implica auto observación).
Regla 5: Ofrecer interpretaciones al cliente sobre las variables que afectan su comportamiento y que tengan equivalencia en la vida práctica.
Bibliografía Hayes, S., Gifford, E., y Hayes, S. (1998). Una aproximación
relacional a los eventos verbales. En R. Ardila, W. López, A. Pérez-Acosta, R. Quiñones, y F. Reyes (Comp.), Manual de análisis experimental del comportamiento (pp. 499-517). Madrid: Biblioteca Nueva.
Hayes, S. C. y Hayes, L. J. (1992). Some clinical implications of contextualistic behaviorism: the example of cognition. Behavior Therapy, 23, 225-249.
Pérez, M. (1996). La psicoterapia desde el punto de vista conductista. Madrid: Biblioteca Nueva.
PAF Y ACT:Las nuevas aportaciones del Análisis de Conducta al tratamiento de los trastornos del comportamiento. Disponible en: http://www.recol.es/Contenidos/Articulos/articulos2.asp?idCmdad=13&nombCmdad=Psicologà a&idContenido=1084.
Sidman, M. (1997). Equivelence relations. Journal of Experimental Analysis of Behavior, 68 (2), 258-266.
Sidman, M. (2000). Equivalence relations and the reinforcement contingency. Journal of Experimental Analysis of Behavior, 74 (1), 127-146.