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Artículos año 2009 (Revista Maestra Jardinera)

Neurociencias y Educación Marzo 2009

Dr. Victor Fernández Hidalgo

Educadora Claudia Donoso Rioseco

Es para nosotros un placer poder compartir un espacio dedicado al diálogo entre dos ciencias fundamentales: “Las neurociencias y la Educación”.

Como médico abordaré en este segmento temas de interés para que los educadores realicen estimulación de calidad con fundamentos dados por la neurobiología, y como educadora de párvulos orientaré la implementación de las neurociencias con los niños y las niñas en el aula.

Espacio Dr. Victor Fernández

La característica más notable del cerebro en desarrollo, es su extraordinaria capacidad de adaptarse a las demandas de la estimulación sensorial (neuroplasticidad).

Los efectos benéficos del medio ambiente enriquecido sobre las neuronas corticales alcanzan su punto máximo (peak), durante los primeros años post-natales (ventanas de máxima sensibilidad a los REQUERIMIENTOS DEL ENTORNO).

La evolución ANATÓMICA, NEUROQUÍMICA, FUNCIONAL Y CONDUCTUAL se genera a partir de la interacción entre numerosos factores EPIGENÉTICOS y el ÁRBOL DENDRÍTICO DE NEURONAS AMBIENTE DEPENDIENTES. Dicha correlación genera los cimientos de los procesos mentales superiores, que rigen nuestras decisiones y determinan nuestras acciones “PERCIBIR, APRENDER, RECORDAR Y CREAR”.

Surgen entonces las interrogantes. ¿A través de qué mecanismos el ambiente enriquecido ejerce su acción sobre nuestras neuronas? ¿Cómo logra representarse en nuestra corteza cerebral?

Petr Anokhin, en su trabajo “Brain and Environment”, señala que el ambiente que rodea a los seres vivientes es TRANSDUCIDO mediante eventos químicos con capacidad NEUROTRÓFICA, que forman puentes de enlace entre el AMBIENTE ENRIQUECIDO que rodea al sujeto y sus propias neuronas cerebrales (activación de factores químicos difusibles transportados por fibras nerviosas [axones] desde los receptores que miran al entorno, y a continuación envían sus señales eléctricas hacia los CENTROS SUPERIORES).

Resulta entonces evidente que la ACTIVIDAD NEURONAL está marcada

por el JUEGO DE INTERACCIONES con el mundo exterior. Se establece así una relación DINÁMICA Y FLUCTUANTE entre el entorno, las neuronas y el aprendizaje, dirigida a concretar la formación de sinopsis corticales

(sinaptogénesis reactiva al medio ambiente enriquecido). [V. Fernández: Estimulación temprana. Los primeros tres años. Primer Simposio Mundial de Educación Parvularia. Revista JUNJI 27:16-18 (2000)].

Existen HOY numerosas evidencias respecto a que la evolución cerebral es generada mediante respuestas adaptativas de la materia viva, frente al ambiente enriquecido. La estimulación que proviene del entorno, resulta así determinante para la formación adecuada del ENCÉFALO HUMANO y finalmente de la capacidad afectiva y cognitiva del sujeto, situación que persiste durante el resto de su ciclo vital.

Espacio Claudia Donoso

Lo planteado por el Dr, Fernández nos reafirma que el ambiente es determinante para las neuronas, por lo que debemos preocuparnos de la estimulación que le brindamos a nuestros alumnos/as, la que debe ser de calidad, entendiendo por ello que debe ser sistemática, activa, mediada, oportuna, variada, afectiva, versátil, efectiva y seductora.

Te invito a reflexionar analizando cada una de éstas características en tu didáctica:

Sistemática: ¿favoreces en tu práctica la adquisición de hábitos? ¿Tienes organizado el tiempo explicitado en un horario donde se equilibren el tipo de experiencias de aprendizaje?

Activa: ¿generas experiencias de movimiento o pasas la mayor parte del tiempo con los niños y niñas sentados?

Mediada: ¿Dejas pensar a tus alumnos o sólo los haces obedecer lo que tú pensaste? ¿Intervienes sólo cuando es necesario o les resuelves todo?

Oportuna: ¿Estás despierta y atenta para observar lo que necesita cada uno, logrando flexibilizar lo planificado?

Variada: ¿Realizas experiencias de aprendizaje de diferente tipo (plástica, música, literatura, corporal, teatro, ciencias, matemáticas, lenguaje etc) o simplemente te inclinas por lo que a ti más te gusta?.

Afectiva: ¿te vinculas con el alma de tus alumnos o sólo con su cerebro?,¿les explicitas con gestos como abrazos, besos y caricias tu afecto?, ¿Eres amable, cariñosa y dulce con ellos al hablarles?.

Versátil. Dentro de la plástica, música etc. ¿presentas opciones y técnicas diversas o siempre utilizas la misma estrategia para que aprendan?

Efectiva. ¿Logras que tus alumnos/as aprendan realmente para la vida o los llenas de conocimientos sin sentido, pertinencia y trascendencia pensando que el cerebro es un saco por llenar?

Seductora: ¿Eres capaz de conquistar a tus niños y niñas y lograr que disfruten aprendiendo?

Como ves, es de una responsabilidad enorme ser docente en educación inicial, nos confían seres humanos que tenemos el deber de educar para la vida, por lo que debemos cuidar la calidad de los estímulos que reciban del medio ambiente el que tiene que ser enriquecido.

Neurociencias y Educación Abril 2009



NEUROCIENCIAS Y APRENDIZAJE EN LIBERTAD (Dr. Victor Fernández H.)

Nosotros los Homo Sapiens-Sapiens constituimos una especie que se desarrolló y evolucionó en los bosques primitivos ( PRIMATES ) de cara al universo, contemplando el devenir de los cielos, percibiendo el movimiento rítmico de la creación ( the starry heavens de Giovanni de Dondi ).

Allí en ese paraíso perdido surgieron por vez primera los colores, la música y el libre albedrío. Hoy, por fin, estamos re-incorporando ese medio-enriquecido en el proceso educativo, estamos dejando atrás un sistema “PIRAMIDAL” basado en rigidez y reiteración, en sedentarismo y carencia de movimientos exploratorios. Nosotros los humanos amamos la libertad y la equidad, nos negamos a ser robots o simples clones, rechazamos las imposiciones y restricciones. Como educadores no queremos generar un mundo de NIÑOS-OBJETO, estáticos en nuestras aulas, reproduciendo mecánicamente contenidos impuestos por un proceso repetitivo.

Hasta hace relativamente poco tiempo prevalecía el “MITO” que el cerebro era un saco vacío por llenar “UNA TÁBULA RASA-UNA HOJA EN BLANCO” que el profesor se encargaba por repletar con información (MUCHA INFORMACIÓN Y POCA FORMACIÓN).

Los nuevos avances nos han permitido superar tiempos remotos en que la educación estuvo basada en el cumplimiento de tareas siempre impuestas que no respetaban las habilidades específicas de los alumnos, ni sus valores, ni sus decisiones personales, ni sus motivaciones, ni la existencia de períodos críticos del desarrollo cerebral, ni menos aún la existencia de inteligencias múltiples, aprendizajes basados en capacidades auditivas, visuales o somestésicas y memorias de características espaciales, motoras o asociativas, etc.

Las Neurociencias Cognitivas nos señalan un nuevo camino “compartir formación intelectual, social y afectiva en libertad”.

APLICACIÓN EN EL AULA (Ed. Claudia Donoso R.)

El texto del artículo del profesor Fernández, sin duda nos hace repensar sobre nuestra didáctica, en especial sobre el tipo de experiencias de aprendizajes que les brindamos a los pequeños, ¿cuántas de ellas realmente les permiten aprender en libertad, a través del juego, la música y los colores?

¿No será que los tenemos encadenados a los contenidos de un programa o a un horario inflexible donde se organiza el tiempo en función al cumplimiento de los mismos?.

A continuación se propone un horario diferente, que permita aprender en libertad. Para ello partiremos cambiando el nombre “ HORARIO ” por :”MOMENTOS DEL DÍA”, enfatizando en las vivencias de los niños y niñas en el jardín o colegio por sobre los contenidos, priorizando así en la formación de su “ser”.

Se menciona cada momento con un nombre sugerente, el que se explicará brevemente en su esencia:

1. Bienvenida cariñosa: se busca generar vínculo afectivo. Un abrazo y un beso sincero junto a un alegre “Buenos días” se constituyen en los alimentos perfectos para el alma de todo niño y niña, generando así la llegada a un ambiente cálido y acogedor.

2. Despertando las neuronas: la idea es antes de comenzar con el saludo, invitar a los niños y niñas a “moverse”, utilizando para ello entretenidos juegos, canciones y bailes que les permitirán disponer mejor su cerebro para el aprendizaje, conectando así un mayor número de neuronas. De esta forma se evita desde el inicio de la jornada el clásico sedentarismo al que sometemos a los alumnos al estar tanto tiempo sentados en una silla.

3. Brindis saludable: El agua es un elemento vital para el cerebro y qué mejor que acompañarlo de un brindis que le permitirá a los peques aprender a “agradecer”. Resulta muy bien el llenar diariamente una botella, de las que se usan para deporte, y usarla para brindar, quedando además a la mano para que sigan durante la jornada tomando más agua. Los estudios han demostrado que nuestros niños y niñas consumen muy poca cantidad de agua al día.

4. Rito del saludo “círculo de las emociones”: aquí se utilizan diferentes tipos de saludos, no la misma canción todo el año, enfatizando realmente en la expresión de las emociones más allá de contestar al compás de una canción ¡muy bien!.

5. Experiencias de Aprendizaje significativa: las llamadas actividades las cambiamos por el concepto de experiencias donde realmente se piensa en lo que los niños y niñas tienen que aprender y no en lo que tienen que hacer.

6. Juego socializador: es fundamental el rescate de los juegos grupales tradicionales en la hora de patio: aprender a jugar a la ronda, al pillarse, al alto y tantos más, favorecerán una sana y espontánea socialización.

7. Rito de despedida: no podemos terminar el día aceleradamente, una grata conversación de cierre comentando lo que aprendieron hoy es un rito muy significativo para la vida.

Neurociencias y Educación Mayo 2009



“El ser humano es el producto de una evolución cognitiva y afectiva; por dicha razón ama los espacios abiertos,

los colores y el movimiento.”

(Por el Dr. Víctor Fernández H.)

Hasta hace algunas décadas, la programación de actividades docentes se basaba en un molde cerebral rígido —hoy superado—, de neuronas y localizaciones cerebrales inmutables frente a las influencias del entorno. Se señalaba, entonces, que la capacidad de aprendizaje estaba predeterminada y dependía exclusivamente de factores genéticos y raciales absolutamente invariables.

Esta visión del encéfalo humano sirvió de marco a un tipo de enseñanza rígida basada en imposición, reiteración Y memorización. Investigaciones recientes han generado una visión absolutamente opuesta, demostrando que el cerebro humano, “esa joya impresionante de la evolución”, se caracteriza por su adaptación dinámica frente a las contingencias del entorno, gracias a su flexibilidad, plasticidad y apertura, frente a las influencias sensoriales. Esto se debe a la existencia tanto de neuronas como de localizaciones corticales ambiente dependientes, cuyo desarrollo es el producto de la interacción entre la carga genética de nuestros niños y el nivel de enriquecimiento del hábitat que los rodea. La relación dinámica entre dichas neuronas y localizaciones corticales (sensoriales, cognitivas y motoras) es responsable de la existencia de inteligencias, aprendizajes y habilidades múltiples: espaciales, sociales, motrices, emocionales, etc., que constituyen el sello de nuestra especie (homo sapiens sapiens), caracterizada por una capacidad infinita de adaptación al medio ambiente (homo cuyo cerebro le permite explorar, evolucionar y crear). De aquí la propuesta de un modelo educativo sobre la base de resolución de problemas, libertad, plasticidad y vuelo intelectual.

A todas las evidencias experimentales se agrega información emergente respecto a que los circuitos sensoriales, el lenguaje y el resto de las funciones cerebrales superiores forman parte de un evento progresivo basado en experiencias previas, como se puede ver en Nelson (2000), McEwen (2002), Greenspan and Shanker (2004), Polk (2008). De este modo, los circuitos que se desarrollan tempranamente determinan el curso y la evolución de los eventos posteriores: sensibilización, lenguaje, exploración, autocontrol y predicción.

Aplicación en el aula

(Por la Educadora Claudia Donoso R.)

Nuevamente el Dr. Fernández nos invita a reflexionar, con sólidos fundamentos brindados por las neurociencias, sobre la importancia de cambiar radicalmente las prácticas pedagógicas de los docentes, en especial del Nivel Inicial, basadas en la ”imposición, reiteración y memorización”, habilidades muy básicas y rígidas de poca potenciación cognitiva.

La educación parvularia, creyendo actuar correctamente, no ha estado ajena a lo anterior. Las educadoras copiaban patrones de enseñanza y aprendizaje de la Educación General Básica, a base de, fundamentalmente, contenidos, sometiendo casi exclusivamente a los niños y niñas del nivel de transición a los llamados “aprestos” sedentarios de grafomotricidad, ejercicios matemáticos poco concretos y dibujos estereotipados con el fin de preparar a los peques para el primero básico, lo que daba lugar a una gran cantidad de cuadernos y carpetas, incluso de Educación Física.

Hoy la mirada ha cambiado. Se conoce la importancia de aprender para la vida; es por ello que los docentes de Educación Inicial necesitamos pensar, al trabajar con un niño o una niña, en generar y potenciar sus habilidades en su proyección a la vida adulta, en lo que necesitará para cumplir sus diferentes roles como futuro padre o madre, esposo o esposa, profesional, y por qué no decirlo, como abuelo o abuela, muy alejado del prisma actual de la Educación Parvularia, “cuya pobre y errada preocupación es prepararlo para el colegio”, sometiéndolo a un estrés innecesario y una muy mala calidad de estimulación sobre la base del sedentarismo corporal y neuronal sin bases sólidas afectivas y con poco desarrollo cognitivo en los niveles superiores: comprensión, resolución de problemas, autonomía, análisis y aplicación.

Necesitamos de niños y niñas que sepan “pensar” y no sólo “obedecer” sin cuestionar lo que la tía muy amablemente ha pensado y les dice.

Sólo les dejamos dos preguntas cruciales para ejercitar durante este mes con sus niños y niñas en el aula durante la realización de las experiencias de aprendizaje, de modo de generar ciertos hábitos de pensamiento en libertad.

¿Qué aprendiste hoy?

¿Quién quiere hacer una buena pregunta hoy?

Finalmente, aprovechen los espacios físicos exteriores para realizar ejercicio y disfrutar de los colores y olores de la naturaleza. No pasen tantas horas encerrados y sentados entre cuatro paredes: el cerebro es movimiento y emoción.

Tenemos la responsabilidad de formar a nuestros niños y niñas como homo sapiens sapiens “amorosos”, término acuñado por el biólogo Humberto Maturana.

Neurociencias y Educación Junio 2009



Existen, hoy, evidencias experimentales que demuestran que los métodos de educación modernos que ofrecen dinámicas abiertas e implican plasticidad neuronal, diálogo socrático, libertad de expresión y movimiento, contribuyen a disminuir considerablemente los efectos del estrés traumático, dado que activan y movilizan cantidades importantes del factor neurotrófico derivado del cerebro BDNF y de las beta endorfinas.

El BDNF, una proteína extraída del cerebro, tiene importantes efectos sobre la sobrevida neuronal e implica, además, aumento de las ramificaciones dendríticas y sinapsis, en tanto que las beta endorfinas están asociadas a conductas de liberación y bienestar psíquico-cognitivo.

Al respecto, Alfred Snider, director del Instituto Mundial del Debate, ha señalado recientemente (2008) que discutir durante las clases genera estudiantes de alto rendimiento académico (de la discusión sale la luz). En contraste con esto, los métodos tradicionales rígidos e impositivos liberan cortisol, una hormona altamente dañina que produce disminución del árbol dendrítico, situación asociada a una significativa limitación cognitiva y afectiva.

Dr. Víctor Fernández H.

Aplicación en el aula

El estrés infantil es un tema que se comienza a percibir fuertemente en las últimas dos décadas del siglo XX. La acelerada vida que se lleva en las sociedades modernas, donde el padre y la madre trabajan para satisfacer las necesidades familiares, sin duda ha hecho que los niños y las niñas carezcan, en su hogar, de suficiente tiempo afectivo vincular compartido y que estén sometidos al sistema de vida laboral de sus padres. Si a esto se le suma la tecnodiversión violenta, sedentaria y solitaria, es muy poco probable que se dé, en los cerebros de los niños y de las niñas, un desarrollo óptimo del árbol dendrítico.

Si monitoreamos lo que vive la mayoría de los pequeños en su día, nos daremos cuenta de que muchas de sus actividades están favoreciendo este estrés:

- Se duermen tarde porque sus padres los quieren ver y jugar con ellos después del trabajo.

- Se despiertan con sueño.

- Se visten apurados porque hay que llegar a la hora al colegio.

- Ven correr desde tempranito a mamá y a papá, ajetreados con las labores domésticas para ir a trabajar, con muy poco diálogo real.

- Toman muy rápido el desayuno que es, además, poco nutritivo.

- Al llegar al Jardín o al colegio, pasan largas horas sin movimiento, sentados, sometidos a prácticas tradicionales exigentes basadas en el cumplimiento de contenidos.

- Realizan muchas actividades rígidas con lápiz y papel y con poca libertad de expresión.

- No realizan ejercicio físico sistemático.

- Se llevan, desde muy pequeños, áridas tareas para la casa, las que realizan muy tarde en compañía de sus padres.

- No dialogan mucho con los docentes, más bien escuchan y obedecen lo que éstos han planificado.

Revisemos, entonces, nuestras prácticas pedagógicas, “modifiquemos lo que podamos cambiar” y eduquemos a los padres (en encuentros, entrevistas y talleres) en la importancia de brindarle a su hijo o hija movimiento, diálogo, calma y libertad de expresión.

Educadora Claudia Donoso R.

Neurociencias y Educación Julio 2009



(Por el Dr. Víctor Fernández H.)

Trabajos experimentales recientes entregan evidencias abrumadoras respecto de la necesidad de incorporar los conocimientos generados por la neurobiología y las ciencias de la conducta a los programas de Educación Parvularia. El período prenatal avanzado y los tres primeros años de vida son cruciales para el desarrollo cognitivo, dado que las células cerebrales –neuronas– sufren un enorme aumento de sus conexiones sinápticas.

El niño es “hoy”

Con sólo cuatro palabras Gabriela Mistral nos envía un mensaje clave para las futuras generaciones: “El niño no puede esperar” dado que existe un período critico del desarrollo entre 0 y 4 años, en que se genera la actividad cerebral superior del ser humano, la que nos ubica en la cúspide de la pirámide cognitiva: el lenguaje; una actividad que nos diferencia de los seres irracionales y que nos permite comunicar valores, arte, ideas, tecnologías, conocimientos, deseos, emociones, etc.

Durante este período inicial de la evolución posnatal, maduran las redes neuronales encargadas de las funciones cerebrales superiores: aprendizaje, memoria y lenguaje. Se establecen, así, los sistemas de relación entre el individuo y el medio ambiente. Un individuo sometido a un ambiente enriquecido, novedoso y fluctuante desarrollará capacidades adaptativas neuroplásticas frente a un enriquecimiento del entorno sensorial, afectivo y cognitivo del hábitat que nos rodea; neuronas ambiente-dependientes de nuestra corteza cerebral emitirán un creciente árbol dendrítico con miles de opciones sinápticas que reaccionan frente al enriquecimiento mediante la construcción de un sistema con enorme capacidad funcional (sinaptogénesis adaptativa).

Es evidente que durante este período crítico del desarrollo no sólo se están “jugando” las capacidades cognitivas del sujeto, sino, además, las habilidades de adaptación del individuo a la sociedad, sus efectos socioculturales y sus capacidades de tolerancia-equidad y altruismo. Ellos constituyen la base de la conducta humana.

APLICACIÓN EN EL AULA (por la Ed. Claudia Donoso R.)

Tal como se señala en este artículo, el desarrollo del lenguaje es uno de los aspectos que resulta determinante trabajar en la primera infancia para el aumento de conexiones sinápticas.

Es sabido que entre los seis meses y los cinco años aparece y se consolida el lenguaje verbal, tanto a niveles fonológico, semántico y sintáctico, como también en la pragmática. Para que ello ocurra debemos hablarle a los niños y a las niñas desde la cuna, donde primero serán cautivados por la prosodia de las palabras (melodía), para luego ir comprendiendo significados.

Se sugiere manejar un gran repertorio de cuentos, rimas, trabalenguas, poemas, adivinanzas, juegos de pega, matutines y canciones, entre otros, que le permitan a cada pequeño o pequeña ir ampliando su bagaje lingüístico de forma amena, entretenida, rítmica y, por sobre todo, afectiva.

Qué mejor que un mágico “había una vez” o un lindo poema a mamá o a papá para ampliar el vocabulario y la comprensión oral, o un entretenido trabalenguas para la adquisición de fonemas más complejos, como también una adivinanza para el desarrollo del pensamiento.

A continuación compartimos con ustedes algunos recursos literarios para que los puedan utilizar con los niños y las niñas. Las invitamos a recopilar muchos más, de modo que cuenten con un amplio y variado repertorio que potencie el desarrollo del lenguaje.

Matutín

Esteras y esteritas

para contar peritas,

esteras y esterones

Para contar perones;

y ahora, con el viento,...

…¡se acerca un nuevo cuento!

Adivinanza

Vuelo de noche,

duermo de día

y nunca verás

plumas en el ala mía.

(El murciélago.)

Trabalenguas

Juan compró pocas copas.

Como pocas copas compró,

pocas copas pagó.

Poema

Del cielo cayó una rosa,

el viento la deshojó,

y en cada pétalo decía:

“¡Mamita, te quiero yo!”

Juego de pega

Zapatito cochinito

cambia de piecito.

Por favorcito.

Rima

A mi papi regalón

yo lo quiero un montón.

Neurociencias y Educación Agosto 2009



(Dr. Víctor Fernández H.)

El componente emocional

La estimulación “afectiva temprana” es de importancia crucial para que nuestros niños crezcan de manera armoniosa y así puedan desarrollar el máximo de sus potencialidades genéticas. Los rasgos de personalidad, afectividad y socialización parecen elaborarse tempranamente durante los primeros años de vida. Resulta entonces de la mayor importancia que los progenitores y educadores consideren el componente emocional en sus relaciones con los niños.

Desde hace mucho tiempo se sabe que los niños no desarrollan sus potencialidades si sus padres y maestros son hostiles o simplemente indiferentes hacia ellos.

De acuerdo con investigaciones recientes, el rechazo hacia los niños es una forma de abuso infantil, dado que, para su formación integral, ellos necesitan ser abrazados, estimulados a través del tacto y recibir todo el afecto posible, fundamentalmente de su madre (apego-attachment) y también estimulación afectiva de quienes comparten sus experiencias en los primeros años de vida, sus profesores.

Lytt Gardner, en 1972, en su trabajo “Enanismo por deprivación” señalaba que los niños criados en “ambientes emocionalmente deprivados” alcanzan un menor desarrollo corporal por inhibición de la secreción de hormonas pituitarias, entre ellas la hormona del crecimiento. Día a día se acumulan más evidencias que señalan que el contacto afectivo entre madre e hijo (attachment) influye positivamente sobre la tasa de crecimiento corporal, la eficiencia del sistema inmune y la organización de las redes neuronales.

Los estudios de prevalencia de efectos de deprivación afectiva entre los sujetos desfavorecidos de nuestra sociedad deben hacernos meditar, ya que señalan una realidad desgarradora: “los efectos negativos persisten por el resto de la vida del sujeto”. Ésta es una gran tarea que no debemos demorar, una tarea país. Hoy no tenemos excusas; las evidencias experimentales sobre desarrollo cerebral son aplicables al desarrollo infantil de nuestros niños, a sus lazos afectivos, a su percepción del mundo, a la formación de sus valores y funciones cerebrales superiores: aprendizaje, memoria y lenguaje.

Aplicación en el aula (Ed. Claudia Donoso R.)

Los niños y las niñas que recibimos en las Salas Cuna y Jardines Infantiles vienen ya con algo maravilloso: han aprendido a sonreír frente a personas que responden amable, dulce y cariñosamente a su mirada, confiando plenamente en un “otro” que le brindará amor. De esta forma van creciendo seguros y sanos

Como educadores, a medida que se desarrolla cada pequeño, debemos educarlo en las emociones desde un trabajo de vínculo permanente, lo que le permitirá conocerse y alcanzar espiritualmente plenitud y felicidad en la vida.

Los invitamos a revisar nuestra actitud como docentes en el plano de las emociones:

¿Brindamos ambientes emocionales cálidos a nuestros alumnos y alumnas?

¿Nos contactamos con las emociones de nuestros pequeños escuchándolos y mirándolos a los ojos?

¿Conversamos con cada niño o niña preocupándonos por entender con empatía sus sentimientos?

¿Nos ocupamos de atenderlos cuando manifiestan rabia, miedo o dolor? ¿Compartimos con alegría sus logros? ¿Somos positivos en el día a día? ¿Les demostramos motivación como seres humanos? ¿Mantenemos la calma y la quietud ante situaciones extremas?

Éstas son algunas interrogantes que quisiéramos invitarlos a responder en la

intimidad del ser y a reflexionar sobre la importancia que le asignamos, en nuestra práctica pedagógica, a este tema.

A continuación compartimos con ustedes acciones explícitas que favorecen la construcción de las emociones en los niños y las niñas en el Jardín o en la Sala Cuna.

Para Sala Cuna:

Acunar al bebé hacia el lado izquierdo, de modo que escuche el corazón.

Acariciarlo mientras toma su mamadera y hablarle con dulzura.

Sonreírle mirándolo a los ojos.

Tararear una canción mientras se lo acuna.

Abrazarlo y bailar con él en brazos.

Al mudarlo, hablarle cariñosamente.

Acompañarlo con palabras delicadas, amables y positivas en sus descubrimientos.

Para segundo ciclo:

Verbalizar los sentimientos a través de un tablero de las emociones.

Explicitar con gestos el afecto: una abrazo de oso, un beso, un cariñito en la mejilla.

Pedirle por favor y darle las gracias cuando se requiera.

Felicitarlo por sus logros con palabras positivas.

Comprenderlo y acompañarlo en sus errores.

Conversar sobre sus sentimientos.

Neurociencias y Educación Septiembre 2009




La memoria en el aspecto musical

El niño graba en su memoria todo tipo de experiencia, desde el período de gestación. Para Edelman (1997), la memoria es dinámica, y actúa o se organiza mediante categorizaciones. Esto implica el desarrollo de mapeos neuronales a nivel cerebral, los cuales se interrelacionan, y son personales e irreversibles. Allí se acumula la experiencia, la cual hace funcionar la memoria; por lo tanto, las bases de la construcción de cada personalidad permanecen grabadas y desde la memoria se interpreta, actúa y piensa.

Existen algunos estudios, como los de Hykin, J. y Gowland, P., de la Universidad de Nottingham, que dan cuenta del mismo tema de la memoria pero en lo relacionado con el aspecto musical. Según algunos teóricos, luego de 20 semanas de gestación, el feto ya ha desarrollado la audición. Se han hecho experimentos en los que la propia madre graba o canta canciones de cuna, que el bebé escucha mediante un tubo de 10 centímetros conectado a un parlante que se pone en el abdomen de la futura madre. Posteriormente, se comprobó que esos niños de edad preescolar que fueron expuestos a ese tipo de experiencia, o a escuchar prolongados momentos de música clásica, desarrollan importantes aspectos en las funciones espacio-temporales de la inteligencia, lo que se aplica después en mejores habilidades matemáticas, científicas, lectoras y en el ajedrez.

Exponer a los niños, desde edades tempranas, a buenos repertorios musicales ayudará a la formación de un gusto estético, educará la selección de buenas melodías. Trabajar acompañados por diferentes estilos musicales, relajándose o divirtiéndose en representaciones que los acompañarán el resto de sus vidas, genera un estilo placentero frente al arte musical.

Estos estudios, aún considerando que algunos investigadores dudan de ellos, deberían ser acogidos por los educadores de párvulos como un indicador que forma parte del ambiente donde se trabaja con el niño, y para que no sólo se escuchen en algunas aulas infantiles músicas inapropiadas a fuerte volumen, por satisfacer un gusto del adulto, que quizás tampoco contó con formación.

Cabe señalar lo importante de poder realizar un trabajo educativo con la familia. Tanto la madre como el padre deben conocer, aprender y dotar a sus hijos de experiencias musicales favorables a su desarrollo, que amplíen su universo a través de contactos con diferentes estilos de música.


Hablar de estimulación musical en esta edad no es más que hablar de la importancia de la música para un ser humano en su proyección a la vida adulta. Soy testigo privilegiado de cómo la música ha sido parte inherente y natural en mi vida, desde los recuerdos en los brazos de mamá y papá, que con arrullo y calor me regalaron dulces canciones de cuna, hasta hoy, en los diferentes roles que me toca desempeñar en la vida.

Como toda persona es musical, entendiendo que la palabra “persona” proviene de las raíces latinas PER y SON, que quiere decir: “el sonido pasa a través de”, un ser humano no puede no vincularse a la música. Se ha comprobado que cuando un hombre o una mujer se enferma, puede existir decaimiento en todas sus funciones cognitivas, emocionales, sociales, motoras y biológicas, pero no así en su “yo musical”. ¿Qué es este “yo musical”? Es el “ritmo vital”, lo que permite existir, el movimiento del aliento y el palpitar del corazón.

El ser humano, desde su gestación, es “movimiento”. Su primer latido cardíaco, su frecuencia respiratoria y las pataditas en el vientre materno demuestran que el ritmo es parte de la vida. La naturaleza realiza el primer trabajo de estimulación musical dentro del vientre materno, que luego será complementado por el “mediador humano”, a través de su voz que llega al feto y, posteriormente, en la cuna, con sus caricias y palmaditas cariñosas al hacerlo dormir. Esto logra generar un vínculo primordial con la música en una dupla maravillosa de ritmo y afecto que nunca se olvida, e idealmente debiera continuar en la Sala Cuna y en el Jardín Infantil, siendo la responsable de confluir con este torrente la educadora de párvulos.

Por ello, cantar, decir rimas, bailar al ritmo de distintas músicas, escuchar músicas de diferentes estilos, jugar a descubrir las cualidades del sonido, como timbre, intensidad, altura, duración, silencio y procedencia, potenciarán las funciones cognitivas de los niños y de las niñas, favoreciendo la atención, la concentración y la percepción sensorial integrada, entre otros beneficios asociados al proceso de lectura, escritura y de las matemáticas.

Para trabajar en educación musical, no necesitamos ser grandes músicos o cantantes, sólo basta nuestra voz, nuestra espontaneidad y mucho afecto, que es lo que finalmente se recuerda.

Consideraciones importantes para la Sala Cuna y el Jardín

Cuidar la contaminación acústica y, por ende, los oídos. No poner la radio a un volumen fuerte y, menos aún, usarla de música de fondo.

Diferenciar las orejas de los oídos. Los oídos son los que escuchan. Cultivar el silencio musical. Trabajar siempre el ritmo a nivel corporal: palmear, percutir en

diferentes partes del cuerpo y del entorno (pared, suelo, sillas), caminar, zapatear, saltar, etcétera.

Respetar el registro en que cantan los pequeños y las pequeñas, no hacerlos cantar en el registro de la tía, es ella quien se debe acomodar al de los niños y niñas.

Si no se es afinada, se puede usar de apoyo auditivo una grabación en CD, o apoyarse en una compañera.

Utilizar, sin temor, terminología musical. Trabajar siempre con elementos auditivos contrastantes (agudo – grave;

rápido – lento; suave – fuerte; etc.). Trabajar repertorio variado y de diferentes estratos: popular, folclórico,

infantil, aborigen y de los grandes compositores.

Neurociencias y Educación Octubre 2009




Evolución de las curvas de desarrollo cognitivo y períodos críticos

Investigaciones recientes han señalado que los avances cognitivos se realizan de acuerdo con las curvas de desarrollo “consecutivas” progresivamente más complejas y relacionadas, a partir de la formación de sinapsis: percepciones desde el hábitat, respuestas motrices adaptativas y, finalmente, funciones cerebrales superiores (Nelson, 2000; Mc Ewen, 2002; Greenspan and Shanker, 2004).

Aun cuando los efectos del medio ambiente sobre las redes neuronales se inician durante el período prenatal (intrauterino), con la percepción del líquido amniótico y la detección de la vibración de la arteria aorta abdominal de la madre, las experiencias ambientales alcanzan sus efectos más eficaces durante los períodos posnatales tempranos. Durante el período crítico de máxima sensibilidad cerebral (entre 0 y 6 años y particularmente durante su fase más sensible, entre 0 y 3 años) se generan efectos considerables sobre el volumen encefálico, la utilización de glucosa y oxígeno, la motricidad, el lenguaje y la afectividad. Así, por ejemplo, las dos primeras horas posnatales son fundamentales para el desarrollo del apego temprano, el establecimiento del vínculo y el inicio de la lactancia.

Entre el nacimiento y los seis o siete meses, el bebé experimenta un enorme incremento en su capacidad de captación de fonemas, situación que incluso ofrece una “ventana de oportunidades” para que desarrolle una comunicación bilingüe, si es que los padres o los educadores le otorgan la posibilidad de recibir fonemas de un par de idiomas. Dentro de este mismo período (específicamente entre 0 y 3 meses), Silvana Quattrochi Montanaro, en su texto Un Ser Humano. La importancia de los primeros tres años de vida (1999), registró un avance importantísimo en la expansión de las dendritas neuronales en la corteza cerebral desde el momento de nacer y sólo tres meses después (ver capítulo 7; figura 15).

A los seis meses, como consecuencia de los avances señalados, el niño comienza a emitir sonidos simples que repite reiteradamente una y otra vez (balbuceo) en un esfuerzo inicial para ejercitar su lenguaje básico. Esto permitirá que a los doce meses emita sus primeras palabras simples pero significativas (lenguaje single de entre una y tres palabras). Al avanzar hacia los dos años, se produce una “explosión del lenguaje” que alcanza unas 300 palabras y que, además, son asociadas en frases muy cortas de un par de palabras (lenguaje asociativo telegráfico: “mamá papa”; “papá papü”). A los tres años el lenguaje sigue creciendo en número de palabras (900) y en asociaciones entre ellas.

Dos hitos importantes de destacar se logran al avanzar de 0 a 3 años: el consumo de glucosa alcanza su máxima expresión en el cerebro, coincidiendo con un aumento notable del volumen, de 500 cc a 1500 cc. Este incremento ontogenético del encéfalo en sólo tres años es semejante al crecimiento conseguido por la especie humana en seis millones de años desde el Australopithecus afarensis hasta el actual Homo sapiens-sapiens. Este veloz y asombroso ritmo de avance permite que, a los cuatro años, se pueda iniciar la lectura con un lenguaje incorporado de 1600 palabras (consolidación del lenguaje). Entre los cinco y los seis años el niño sigue avanzando en el conocimiento, la comprensión y el uso de 2100 y 2600 palabras, respectivamente.

La relación entre la percepción, el medio ambiente que nos rodea y los componentes afectivos queda claramente enunciada al recordar a nuestra querida Violeta Parra:

Gracias a la vida que me ha dado tanto,

me dio dos luceros que, cuando los abro,

perfecto distingo lo negro del blanco

y en el alto cielo, su fondo estrellado,

en las multitudes, al hombre que yo amo.


Por la gran cantidad de horas que pasan los niños y las niñas en los colegios, Jardines y Salas Cuna, resulta importante darse cuenta de la gran responsabilidad que tenemos los docentes de Educación Inicial en la formación de un ser humano en sus primeros años de vida, tal como lo explicita el Dr. Fernández, y de cómo sus vivencias en esta etapa son determinantes para su neurodesarrollo, entendiendo que un medio ambiente enriquecido con educación de calidad y humanizada favorecerá más conexiones sinápticas en su cerebro, considerando que deben generarse desde los afectos hacia las cogniciones.

Por otro lado, las madres y los padres nos confían su más preciado tesoro, su hijo o su hija; creen en nosotros como profesionales, por lo que resulta fundamental capacitarse en neurociencias, conocer sus aportes al campo educativo y entregarlos a la familia, ya que la educación se realiza en común unión entre el centro educativo y la familia.

Pero ¿cómo trabajar con la familia?

Aprovechar cada reunión de apoderados para tratar un tema de interés vinculado a las neurociencias y orientado a la vida práctica, como, por ejemplo: la “higiene del sueño”; la “nutrición saludable”; o, como lo plantea este artículo, las “curvas de desarrollo cognitivo y los períodos críticos” y no concentrar la reunión en calendarizaciones, cuotas de

cursos, organización de convivencias, que hoy en día se pueden tratar hasta por Internet.

Realizar entrevistas personales, al menos dos veces al año, en las que se pueda guiar a los padres en la educación de su hijo o hija, entregándoles estrategias concretas de aprendizaje considerando las características individuales de su pequeño y no comparándolo con la norma.

Compartir, vía libreta de comunicaciones o por Internet, artículos educativos que les ayuden a comprender mejor cómo aprenden los niños y las niñas.

Invitar a las madres y a los padres a la sala a compartir en un espacio de la jornada y observar cómo se comporta y desenvuelve su hijo o su hija con sus amigos.

Entregar “informes al hogar” con sugerencias concretas, descriptivos y no distantes y técnicos en su lenguaje. Deben ser comunicables y útiles.

Finalmente, ocupar hasta las entrevistas de pasillo, cuando van a dejar o a buscar a su hijo o hija, para socializar lo que ha ido aprendiendo y en qué hay que reforzarlo.

Podemos concluir que, si queremos potenciar afectiva y cognitivamente a nuestros niños y niñas, es determinante, especialmente en el nivel de Educación Parvularia, generar una relación vincular, cercana y sincera con los padres y las madres de cada uno de nuestros pequeños.

Neurociencias y Educación Noviembre 2009




ALIMENTACIÓN SALUDABLE Y AMBIENTE ENRIQUECIDO PARA NUESTROS BEBÉS

El juego de “relaciones beneficiosas” entre nuestros bebés, su desarrollo mental y corporal (mente sana en cuerpo sano) y el medio ambiente enriquecido es determinante para alcanzar capacidades físicas, cognitivas y afectivas en el adolescente y en el adulto. Esto le permitirá cumplir su rol en la sociedad y guiar su capacidad de resolución de problemas.

De acuerdo con Peter Morgane (1992), los desarrollos físico, químico y fisiológico del sujeto y su comportamiento consecutivo se generan a partir de una interacción permanente entre los genes con los que nace y numerosos factores ambientales que incluyen “la dieta e influencias del entorno”. La nutrición adecuada no sólo aporta constituyentes anatómicos sino, además, la energía suficiente que les permite al niño y a la niña activar sus sentidos mediante el movimiento y la exploración. El niño que no explora debido a carencias nutricionales sufre notables pérdidas cognitivas (ver “Malnutrition, Poverty and Intellectual development”, Scientific American 26-31; 1996).

Estos resultados nos señalan un nuevo camino que consiste en reemplazar la obsoleta propuesta de GUARDERÍAS (los niños no se guardan sino que se educan). Es decir, tenemos que desterrar un método destinado a brindar exclusivamente servicios básicos de alimentación y protección física, para fundar una educación inicial basada en vivencias intelectuales, creatividad, afectividad e imaginación.

Las dietas modernas se preocupan no sólo por ofrecer un listado de nutrientes balanceados (proteínas, hidratos de carbono y lípidos) sino que consideran, además, los efectos de un entorno de buena calidad que induce al movimiento, a la exploración y a la recreación de nuestros niños y niñas (ver dieta mediterránea en Chile). Hoy día conocemos la importancia de incorporar simultáneamente proteínas y estimulación sensorial con el objetivo de construir sistemas neurales enriquecidos (proteína MAP-2).

Mamá, papá y maestra:

Las proteínas construyen mis músculos, los hidratos de carbono me entregan energía para explorar mi entorno y los fosfolípidos están implicados en mis pensamientos.

APLICACIÓN EN EL AULA (Ed. Claudia Donoso R.)

Resulta muy interesante para una vida saludable la asociación que ha hecho el doctor Fernández en relación con la dupla nutrición y entorno enriquecido.

Como docentes, debemos educar a nuestras niñas y a nuestros niños en la importancia de comer con inteligencia, de modo de ingerir alimentos saludables que, a su vez, reporten beneficios tanto para el cuerpo como para el cerebro, mejorando su capacidad de retención, atención y concentración, además de prevenir enfermedades futuras.

Pero, ¿cómo hacerlo?

Preocupándonos por que las colaciones sean sanas, sobre la base de frutas o verduras, preferentemente.

Preparando jugos de fruta naturales en la sala. Disfrutando de piñatas con mandarinas. Organizando, al menos una vez a la semana, el día de las verduras,

armando un mesón atractivo y colorido de ensaladas para degustar. Pidiéndoles a los kioscos de los colegios que brinden opciones de

alimentos sanos. Trabajando en reuniones de apoderados el tema, educándolos en la

importancia de una alimentación equilibrada, inocua, suficiente y variada unida a la actividad física y a la ingesta de agua de modo de mejorar los aprendizajes de sus hijos e hijas.

Teniendo a la vista en la sala la pirámide mediterránea de Chile para conversar con los niños y las niñas sobre lo que se debe comer.

Elaborando cartillas informativas de alimentación saludable y adjuntando recetas.

¿Sabías qué?

Debes comer 3 porciones de frutas y 2 de verduras al día, de diferentes colores (ver programa 5 al día).

Consumir 3 veces al día lácteos, de preferencia descremados o semidescremados.

Comer legumbres al menos 2 veces por semana, en reemplazo de la carne.

Comer pescado 2 veces por semana, al horno, a la parrilla, cocido o al vapor.

Preferir alimentos de bajo contenido graso y colesterol. Reducir el consumo de azúcar y de sal. Tomar entre 6 y 8 vasos de agua al día. Comer más de 4 veces al día.

Cuando se habla de porción, hay que contemplar que para un adulto es diferente que para los niños y las niñas. La forma más práctica de saber cuál es la porción adecuada es fijarse en la cantidad que cabe en la mano de cada uno.

Artículos año 2010 (Revista Maestra Jardinera)

“NEUROPEDAGOGÍA” Febrero 2010

Dr. Víctor Fernández Hidalgo


Introducción (por la educadora Claudia Donoso R.)

Queridas lectoras y queridos lectores: ha sido un gusto recibir tan buenos comentarios sobre el espacio desarrollado el año pasado, en el que ocurría un amistoso y práctico diálogo entre neurociencias y educación.

Agradecemos la posibilidad de seguir comunicándonos nuevamente a través de esta sección, que llamaremos “Neuropedagogía”, donde seguiremos relacionando algunos contenidos del conocimiento del desarrollo del cerebro, abordados por el doctor Víctor Fernández, y la pedagogía, entendiendo que esta última palabra proviene del griego antiguo “paidagogós”, de las raíces “paidos” que es niño y “ago”, que es llevar o conducir. Por tal razón queremos invitarlos a conducir la educación de sus alumnos y alumnas con fundamentos neurobiológicos, de modo de mejorar las prácticas pedagógicas y la didáctica en pos de la formación de un ser humano “bio-psico-socio-cultural”.

En esta oportunidad los invito a leer, a modo de comenzar a sintonizarnos y, además, de repensar nuestra didáctica, el primer artículo de esta serie desarrollado por el Dr. Fernández, quien alude a la importancia de la memoria y sus componentes emocionales. Nada perdura más en el tiempo que aquellos recuerdos que dejan huella emocional, ya sea para bien o para mal, por eso es fundamental entender que nuestras interacciones emocionales con cada una de nuestras pequeñas alumnas y cada uno de nuestros pequeños alumnos pueden ser parte de los “hitos afectivos imborrables de su historia personal”, por lo que debemos considerarlas en nuestra implementación curricular, estando muy despiertos frente a las sensaciones y emociones que generamos con nuestras palabras, gestos y miradas en los niños y en las niñas en toda experiencia de aprendizaje.

“Y voy a hablar de la más grande y más importante de todas las cosas dichas hasta ahora. Se debe buscar, para los hijos, unos maestros que sean irreprochables por su género de vida, irreprensibles en sus costumbres y los mejores por su experiencia, pues la fuente y la raíz de una conducta intachable es, casualmente, una buena educación.” (Plutarco, Sobre la educación de los hijos).

Red de memoria y sus componentes emocionales (por el Dr. Víctor Fernández H.)

El proceso de memoria incluye un complejo conjunto de receptores, áreas corticales, núcleos, centros nerviosos y tractos profusamente interconectados entre sí. El evento memoria se inicia en los receptores que reciben directamente la información proveniente del medio ambiente en forma de claves visuales auditivas, táctiles o propioceptivas. Esta información constituye la “memoria

sensorial” y debe ser velozmente transferida (en menos de un segundo) a la “memoria de corto plazo”, localizada en la corteza prefrontal; en caso contrario, se pierde. La “memoria de corto plazo o memoria de trabajo” sólo permite mantener la información mientras completa la tarea. Esta memoria es frágil y decae rápidamente si no se repasa (20 segundos). Por lo tanto, debe ser reenviada a la “memoria de largo plazo” para mantener la vigencia de la información. Esta última acción requiere la participación de dos componentes del sistema límbico: “la amígdala cerebral”, involucrada en la respuesta y en la memoria emocional, y el “hipocampo”, a cargo de la memoria declarativa de largo plazo, encargada de retener conocimientos que en el hombre pueden expresarse verbalmente. Esta dualidad afectiva-cognitiva nos señala la importancia de asociar nuestras acciones de aprendizaje y de memoria con componentes lúdicos. Nuestro cerebro retiene con gran precisión aquella información ligada al afecto (el día del matrimonio, el nacimiento de un hijo, etc.). La memoria a largo plazo permite, así, mantener los hitos afectivos de la historia personal tomando localización en la amígdala cerebral, en el hipocampo y en extensas áreas de la neocorteza cerebral. Tal cual se ha señalado, la memoria constituye “un proceso HOLÍSTICO que involucra numerosos componentes cerebrales”. Dicha organización nos permite interactuar adecuadamente con el entorno y, finalmente, adquirir (aprendizaje) y almacenar (memoria) información significativa para el sujeto ligada a componentes emocionales, motivación y alerta cortical.

“NEUROPEDAGOGÍA” Marzo 2010




Funciones holísticas del cerebro humano: vigilancia (sobrevida), percepción y acción motora

El cerebro constituye la herencia más importante de la evolución, el más preciado instrumento del ser humano y la máquina de aprendizaje más eficiente del universo. Alexander Romanovich Luria (1902 -1977) logró esquematizar sus tres componentes fisiológicos, que se caracterizan por actuar sucesivamente y en forma coordinada a través de extensas conexiones sinápticas.

1. Cerebro vigilante ⁄ expectante

2. Gran cerebro sensorial

3. Cerebro ejecutivo

Posee dos componentes: uno de respuesta extraordinariamente rápida, casi instantánea, constituido por la formación reticular del tallo cerebral que sintoniza con señales de riesgo vital. Está encargado de la alerta cortical que ocurre, por ejemplo, cuando un automovilista

que se estaba quedando dormido al volante despierta de inmediato y reacciona a un movimiento repentino del auto. Así salva su vida y la de sus pasajeros.

El segundo sistema relacionado con la sobrevida está constituido por el circuito límbico-hipotalámico, encargado de

mantener el equilibrio homeostático, el comportamiento emocional y la memoria de largo plazo. La relación entre estas dos últimas funciones expresa la

importancia de los componentes afectivos en los mecanismos de

Formado por la corteza pario-temporo-occipital, situada en los hemisferios cerebrales por detrás de la cisura de Rolando. Esta área está directamente conectada con el entorno a través de los receptores: fotorreceptores visuales de la retina que nos informan colores, contrastes, sensaciones de profundidad y de movimiento y formas de los objetos; auditivos, que detectan el tono, la frecuencia y la posición de los sonidos en el espacio; receptores somestésicos de tacto, presión, dolor y propiocepción muscular y auricular.

Estas áreas corticales visuales, auditivas y somestésicas descargan, finalmente, sobre áreas de asociación dándole significado gnóstico, por ejemplo, a un objeto que se ve, que se escucha y que se percibe por el tacto al mismo tiempo. Es el caso del área de Wernicke, localizada en el hemisferio cerebral izquierdo y encargada de detectar el

Incluye la corteza motora

voluntaria, el área de Broca, responsable de la emisión del lenguaje, y la corteza prefrontal predictiva, que orienta las actividades dirigidas hacia el entorno sin cometer errores.

La corteza prefrontal predictiva alcanza altísimo desarrollo en el hombre. En ella residen importantes funciones cerebrales superiores, como son la elaboración del pensamiento; la regulación de las conductas sociales con el altruismo y la empatía; el control de los actos motores voluntarios, seleccionando la respuesta más adecuada en cada caso; la planificación de las acciones a futuro, considerando sus consecuencias positivas o negativas; la capacidad de elegir la mejor respuesta posible frente a una situación compleja; resolver problemas que requieren capacidad intelectual; seleccionar las metas significativas evitando

consolidación de la memoria.

significado de una palabra escrita o escuchada (comprensión del lenguaje).

distracciones. Además, la corteza prefrontal predictiva es el asiento de la memoria a corto plazo (memoria de trabajo).

Homo sapiens-sapiens, especie con enorme capacidad holística

Reflexiones docentes (Educadora Claudia Donoso R.)

Conocer cómo funciona nuestro cerebro nos permite maravillarnos reconociendo la extraordinaria capacidad que tenemos para aprender; estamos diseñados como especie para ello. El aprendizaje es una función cognitiva superior, y los docentes debemos favorecer aprendizajes que sean significativos, de modo que trasciendan y perduren en el tiempo.

La mirada de un cerebro holístico, que funciona secuenciadamente en una unidad indivisible, nos llama a repensar nuestra didáctica: ¿cuántas prácticas segmentadas, parceladas y distantes muchas veces realizamos en favor de la metodología y del currículo, sin pensar que ese homo sapiens sapiens no sólo es cerebro cognitivo, sino también emociones, sensaciones, movimiento y percepciones? Es nuestro deber contribuir a su formación como homo sapiens sapiens “amoroso”.

Al referirnos al cerebro sensorial es inevitable pensar en la importancia de seleccionar estímulos visuales auditivos y somestésicos para el aprendizaje, que permitan la apropiación del entorno sin sobreestimulación. En este aspecto, resulta interesante cuestionarse, por ejemplo, acerca de la decoración y de la ambientación excesivas y recargadas de las salas de educación inicial, lo que se convierte en interferencia para la apropiación del lenguaje comprensivo por parte de los niños y de las niñas.

Finalmente, para favorecer el dinamismo del cerebro ejecutivo necesitamos realizar prácticas docentes que permitan el desarrollo del pensamiento de nuestros alumnos y de nuestras alumnas, y no sólo buscar que se centren en obedecer lo que dice el profesor, de modo que sean capaces de ejercitarse en la resolución de problemas, la empatía y la regulación de la conducta social buscando la mejor respuesta.

Nuestro cerebro es tan espectacular que nos permite, en ocasiones, salvar nuestra vida, en otras, disfrutar conociendo y, lo más increíble, nos hace libres con el desarrollo del PENSAMIENTO.

“NEUROPEDAGOGÍA” Abril 2010




Arte y ciencias: actividades exclusivamente humanas

Linneo (Carolus Linnarus), quien ordenó las plantas y los animales según géneros y especies, clasificó a los seres humanos como “Homo sapiens”.

Desde tiempos muy remotos, el arte y la ciencia son el producto de la exploración del hábitat y apuntan hacia la educación y la cultura.

Podemos señalar, sin dudas, que en conjunto ellas constituyen las bases del desarrollo humano.

Un cerebro altamente evolucionado, con redes neuronales que comandan holísticamente percepciones, aprendizajes, emociones, sentimientos y capacidades psicomotoras nos ubica en la cúspide de la creación.

De acuerdo con Jacob Bronowki en su libro The aseent of man (1973), el ser humano constituye una especie singular capaz de desarrollar arte y ciencia debido a la maravillosa capacidad plástica de su mente.

Las pinturas encontradas en el interior de cavernas como Altamira, Candamo y Lescaux, de bóvidos, bisontes, ciervos, caballos y jabalíes, realizadas con restos orgánicos y extractos de plantas, tierra de colores y otros materiales disponibles, son arte ligado a la observación del medio ambiente.

Además, el hombre primitivo incorporó el arte a su propio cuerpo, a través de tatuajes y pinturas sobre su piel, utilizando collares, plumas, etc.

Un avance significativo fueron los rudimentos de astronomía a partir de la contemplación del Universo, que se observan invariablemente en todas las culturas (Babilonia, Egipto; pueblos mayas). El conocimiento de la astronomía impulsó necesariamente el desarrollo de la matemática y, así, se generaron, como consecuencia, los calendarios.

Ese hecho fue clave para la sobrevida en esos tiempos. El uso del calendario entrega información básica para elegir el momento adecuado para plantar las semillas y más tarde cosechar los frutos de la tierra.

Más aún, la contemplación de los cielos resultó esencial para guiar la navegación y las migraciones a través del planeta. Para esos exploradores primitivos, la posición y el movimiento de las estrellas y de los planetas fue esencial para lograr sus propósitos.

La pintura, la arquitectura, la música (arte) y la curiosidad insaciable de conocimientos (ciencia) se encarnan en el genio universal de Leonardo da Vinci (1452 – 1519). Él señalaba que el artista debía, ante todo, ser explorador del mundo que lo rodea.

Homo sapiens sapiens, especie con enorme capacidad holística: arte, investigación, ciencia, aprendizaje, memoria, predicción y programación neurolingüística


“Arte y ciencia dos manifestaciones de la naturaleza humana que deben estar presentes en toda didáctica”.

Si analizamos las prácticas pedagógicas de la infancia, observamos que éstas carecen de la expresión y de la apreciación artística integradas, como también de la potenciación de la curiosidad e indagación científica.

Se ocupan muchas horas de la organización del tiempo en la iniciación al lenguaje y a la matemática, en el trabajo de la motricidad fina y en seguir indicaciones dadas. La plástica, por ejemplo, una de las ramas del arte que más presencia tiene, se utiliza como un recurso más para desarrollar la motricidad y no con un fin en sí misma.

El ser humano necesita de la expresión para comunicarse y de la observación del entorno para conocer y relacionarse con su medio ambiente.

Revisemos, entonces, nuestra propuesta educativa de manera concreta:

Expresión plástica

Expresión literaria:

Expresión corporal

Expresión musical

Ciencia

-Realizas experiencias plásticas permitiendo que el niño o la niña elija formatos y colores.

-Les muestras diferentes técnicas plásticas: modelado, pintura, estampado, etc.

-Trabajas la tridimensionalidad o sólo en papel.

-Les permites imaginar al narrar cuentos sin la utilización de imágenes.

-Manejas un amplio repertorio de narración oral.

-Les brindas la posibilidad de teatralizar.

-Usas diferentes ritmos para bailar libremente sin coreografías predeterminadas.

-Utilizas una variedad de implementos para la danza: pañuelos, cintas, diarios, etc.

-Trabajas en los diferentes niveles del espacio (alto, medio y bajo).

-Trabajas las cualidades del sonido: timbre, altura, intensidad, procedencia, duración.

-Al cantar, renuevas tu repertorio.

-Les permites tocar instrumentos.

-Los invitas a observar diariamente la naturaleza, sus manifestaciones y cambios.

-Realizas preguntas de indagación.

-Les brindas la posibilidad de explorar el medio natural.

-Ejecutas experiencias de observación de cambios en la materia “experimentos”.

Los niños y las niñas se entregan por completo a la risa, al baile y a la danza, a la música, al canto, a la pintura, a las manifestaciones de la naturaleza, buscando simplemente el gozo de existir, el gozo de crear descubriendo, el gozo de expresarse.

“NEUROPEDAGOGÍA” Mayo 2010



Percepción visual: luces, colores, emociones, creatividad y lectura comprensiva

por el Dr. Víctor Fernández H.

La visión constituye el sistema receptivo más sofisticado y complejo de nuestra especie, manteniéndonos informados permanentemente sobre los colores, la presencia de la luz-oscuridad, el contraste, la forma, la posición y el movimiento de los objetos en el espacio.

Durante su evolución, el hombre primitivo sobrevivió en el entorno tridimensional de la vida arborícola para protegerse del asedio de los carnívoros. En los bosques primitivos desarrolló la capacidad de distinguir a la distancia frutos rojos (maduros) de frutos verdes (inmaduros). Esto último asociado a la visión binocular (que le permitió comparar la imagen del ojo derecho con la imagen del ojo izquierdo) para determinar con exactitud la distancia que media entre el sujeto y el punto que desea alcanzar tras el salto y, así, calcular exactamente la magnitud de impulso adecuada en cada caso para no caer al vacío (aquí no se admiten errores). Esto es lo que se conoce como estereognosis o visión de profundidad. Éste fue un tremendo desafío. Recordemos que los avances evolutivos se generan justamente frente a las presiones del entorno (si no hay desafíos no se generan avances). En ese mismo contexto se desarrolló la relación ojo-mano-cerebro de modo que, en cada salto, además de calcular la distancia, logró asirse de las ramas con manos prensibles y oposición del pulgar (grasping) que hoy nos permite manipular objetos para escribir, pintar, interpretar instrumentos musicales, guiar automóviles, etc.

Los receptores visuales (fotorreceptores) transforman estímulos luminosos en actividad neural eléctrica que luego se traslada a distintos centros nerviosos (corteza visual, colículo superior, tálamo, hipotálamo, etc.). En esta última estructura se encuentra un reloj biológico, el núcleo supraquiasmático que regula nuestras actividades diarias mediante el ciclo luz-oscuridad (sueño- vigilia). La visión de colores posee un notable efecto sobre los componentes emocionales. Los sujetos que pierden accidentalmente la visión del color “acromatopsia” caen en una profunda desmotivación, en tanto, mediante el empleo de fototerapia cromática es posible recuperar la motivación en sujetos que han caído en estados depresivos.

Es importante señalar que el sistema visual cumple un rol importante en el desarrollo intelectual, dado que la corteza visual está conectada con las áreas involucradas en la lectura comprensiva a través de su proyección hacia el girus angularis y el área de wernicke (estructuras encargadas de decodificar el

significado del mensaje escrito) y a través de esta última con el área de broca encargada de la vocalización de los mensajes.

Reflexiones docentes por la educadora Claudia Donoso R.

Sin duda este artículo nos permite valorar la importancia de la percepción visual y lo fundamental que ha sido para la sobrevivencia de la especie a lo largo del tiempo.

Desde la Sala Cuna, todo docente debe trabajar con los colores y las luces. Su variedad y contraste permitirán a cada pequeño apropiarse y conocer mejor el medio que lo rodea.

A continuación, compartimos algunos comentarios, reflexiones o experiencias que podemos realizar con los niños y las niñas en el Jardín infantil, para cada una de las siguientes ideas planteadas:

Presencia de luces y colores

En el aula debemos cuidar una adecuada iluminación y uso del color. No cabe duda de que las salas de la primera infancia son muy coloridas; sin embargo, muchas veces se cae en una sobredosis de colores y de formas que no permiten una adecuada selección de estímulos por parte del niño o la niña, generando una sobrecarga de actividad neural eléctrica.

Visión binocular

Resulta muy interesante descubrir, con los pequeños, que cada ojo tiene una visión diferente.

Para ello es muy entretenido jugar a taparse un ojo como los piratas y dibujar lo que se ve. Luego realizar la misma experiencia con el ojo contrario y comparar.

Relación

ojo–mano-cerebro

Todas aquellas experiencias de motricidad fina que realizamos fortalecen la relación ojo-mano- cerebro.

Seamos creativos aprovechando los elementos y objetos que nos rodean, como atornillar envases con tapa rosca, confeccionar collares con fideos pequeños, usar la pinza de ceja para tomar lentejas de una en una y colocarlas en un frasco de orificio pequeño.

Ciclo sueño-vigilia

Necesitamos de la luz y de la oscuridad para vivir en plenitud y armonía.

Es fundamental educar a la familia sobre la importancia de respetar el ciclo de sueño-vigilia de su hijo o hija.

Además de explicitar que sólo al dormir en la oscuridad de la noche se genera la hormona llamada melatonina, tan indispensable para la atención y la concentración.

“NEUROPEDAGOGÍA” Junio 2010




Nuestros bebés y el sistema visual: la relación entre la madre y el hijo, la motivación, las luces y los colores

La enorme importancia del sistema visual en la evolución de los primates y del hombre queda en evidencia al observar los efectos motivadores generados en el bebé como consecuencia de la contemplación de la región facial, particularmente la de su madre (reconocimiento facial). Dicha imagen despierta un notable interés en el cerebro del recién nacido humano, tal como ha sido demostrado experimentalmente mediante el método de seguimiento visual (Visual Tracking Procedure), en los trabajos de Johnson y Morton de 1991. Otro tipo de evidencia ha permitido detectar notables efectos en el diámetro pupilar. En este caso el aumento del diámetro pupilar de la madre es respondido mediante el aumento del diámetro pupilar del bebé. Este efecto, conocido como “midriasis”, es el resultado de la acción del neurotransmisor adrenalina sobre las fibras radiales del iris bajo situaciones de alta motivación emocional dentro de la relación madre–hijo. Esto enfatiza la importancia trascendente de los impulsos visuales en el proceso de estimulación cognitivo–afectiva. De acuerdo con trabajos de Heinz Kohut (1971), las relaciones entre madre e hijo más significativas son justamente mediadas por el sistema visual. Por otra parte, he tenido la experiencia personal de percibir cómo bebés de sólo dos meses de edad observan detenidamente los movimientos de la boca de un adulto y enseguida tienden a imitar la gesticulación de los labios de quienes le han hablado. En consecuencia, es importante considerar y aplicar el rol motivador de las luces, los colores, la libertad del movimiento y las conductas lúdicas en la sala de clases, dado que todos ellos son parte del entorno enriquecido y, por lo tanto, incrementan notablemente las capacidades cognitivas y afectivas de nuestros niños y de nuestras niñas.

Un científico, un poeta y un evangelista…

“La luz es la sombra de Dios”. (Albert Einstein)

“La luz es Dios que desciende y el sol brecha por donde se filtra.” (Federico García Lorca)

“No se pondrá más tu sol, ni faltará tu luna; porque tu luz eterna será Yahvé y los días de tu llanto se habrán acabado.” (Isaías, 60)


Tal como lo plantea el artículo, son múltiples los efectos motivadores generados en el bebé como consecuencia de la contemplación de la región facial, en especial la de su madre. Por tal razón, una docente debe, como hábito, y más aún en la sala cuna, hablarles a los bebés mirándolos a los ojos, gesticulando de modo de lograr sacar el máximo de expresión facial para generar comunicación entre ambos; de ese modo, por imitación, el pequeño podrá responder con sus gestos, gorjeos, balbuceos y movimientos.

Si es la hora de que una mamá amamante a su bebé en el Jardín infantil, procurar que sea un momento de intimidad y de tranquilidad, ya que es en ese momento cuando más contacto visual hay entre madre e hijo.

También resulta importante aconsejar a las madres aprovechar la situación de muda para generar ese contacto visual entre ambos, utilizando el lenguaje gestual, hablado y cantado. Lo mismo pueden hacer la educadora y la asistente de párvulos.

Ya ha quedado de manifiesto que el sistema visual es determinante para el desarrollo de las capacidades cognitiva y afectiva del ser humano, y es a través de las luces, los colores, las formas y el movimiento que construye su percepción del mundo y se motiva por aprender.

“NEUROPEDAGOGÍA” Julio 2010




Siete estrategias básicas de protección y potenciación para nuestros niños y nuestras niñas

1.- Apego temprano madre-hijo dentro de las dos primeras horas posparto. Período de extrema sensibilidad (Marshall Klaus, 2000).

2.- Lactancia natural (seis primeros meses), dentro de lo posible, con el objeto de intensificar el apego madre-hijo y sostener el flujo de anticuerpos hacia el bebé (en caso contrario, utilizar fórmulas lácteas maternizadas).

3.- Estimulación temprana y afectiva de los sentidos y de la psicomotricidad, muy especialmente la audición (precursora del lenguaje) y la visión (involucrada en la coordinación ojo-mano-cerebro).

4.- Impulsar y supervisar paso a paso el desarrollo del lenguaje (función cerebral superior exclusiva de los seres humanos). La estimulación del lenguaje debe iniciarse precozmente a partir de las primeras interacciones madre-hijo-familia (al acariciar, al bañar, al mudar, etc.). El lenguaje le permite al niño o a la niña relacionar los objetos y sujetos del medio ambiente con sus identidades (palabras, nombres, apellidos, etc.). Más aún con propósitos o anhelos.

5.- Evitar el stress; los circuitos neuronales de las emociones se desarrollan muy tempranamente (dentro de los primeros 60 días posnatales). Es importante generar relaciones interpersonales positivas y no impositivas en el grupo familiar, en la sala cuna y, luego, en el Jardín.

6.- Incentivar conductas de juego y de exploración para incrementar su creatividad. Además, inducir capacidades reminiscentes relacionadas con relatos que estimulan su imaginación. Se puede ejemplificar con las experiencias vitales tempranas de Nelson Mandela y José Saramago, ambos premio Nobel.

7.- Establecer relaciones enriquecidas con su mediador, el cual debe ser talentoso, creativo, motivador y poseer liderazgo. Esta relación afectivo-cognitiva facilitará las capacidades de iniciativa del niño o la niña, reforzará su autoimagen y activará sus conductas de exploración.

Reflexiones docentes (Educadora Claudia Donoso R.)Si leemos atentamente estas estrategias, podemos encontrar dos factores comunes a todas: “el afecto y las emociones”. Una vez más nos damos cuenta de que nuestra biología se centra en las emociones y, por qué no decirlo, en “el amor”. En la medida en que éste sea explícito, con caricias, abrazos, palabras y,

por supuesto, una mirada dulce y cariñosa, todo es posible de conseguir y de superar.

Desde esta perspectiva, es muy importante revisar nuestra actitud en las prácticas docentes. Para ello, vincularemos algunas de las estrategias abordadas por el Dr. Fernández con la didáctica, planteándonos interrogantes que nos inviten a la reflexión:

En relación con el apego temprano y llevándolo a la docencia, ¿logras generar vínculo real con cada uno de tus alumnos y alumnas?

¿Brindas instancias de aprendizaje que involucren la integración sensorial, ocupando la tridimensionalidad y el afecto?

¿Planificas experiencias de aprendizaje que contemplen la música y el movimiento?

¿Te preocupas de potenciar el lenguaje en todas sus dimensiones: expresión oral, comprensión oral, ampliación de vocabulario, conciencia fonológica, producción oral y pragmática?

En relación con el clima de aprendizaje que brindas en el aula, ¿permites que los niños y las niñas no se estresen con clases impositivas, exigentes y distantes?

¿Mantienes tu armonía emocional en situaciones que se te escapan de las manos?

¿Brindas la posibilidad de explorar el entorno libremente? ¿Utilizas el juego socializador como herramienta de aprendizaje? ¿Propicias el desarrollo de la imaginación contando historias, cuentos o

relatos? Como mediadora, ¿consideras que eres creativa, entusiasta, con claro

liderazgo pedagógico y, por sobre todo, que generas motivación en tus alumnos y alumnas?

Finalmente, quisiera agregar que es fundamental para lograr buenos aprendizajes en nuestros niños y en nuestras niñas, desde la mirada de las neurociencias:

1.- Conocer sobre la “higiene del sueño” de cada uno. El niño o la niña necesita dormir la cantidad de horas adecuadas y en la oscuridad de la noche, para que la glándula pineal segregue “melatonina” suficiente. Así, mejor será su capacidad de atención y de concentración.

2.- Revisar sus hábitos alimentarios, guiando a la familia hacia una sana alimentación que favorezca la nutrición cerebral y corporal, en especial la calidad del “desayuno”.

3.- Favorecer el consumo de agua en el Jardín o en el colegio.

4.- Realizar diariamente actividad física al inicio de la jornada, moverse.

5.- Encantar a tus alumnos y alumnas generando motivación por aprender.

¡Hasta la próxima!

“NEUROPEDAGOGÍA” Agosto 2010




El niño, un explorador activo del medio ambiente

Los seres humanos y el resto de las especies están siendo permanentemente bombardeados por una diversidad de “energías” provenientes de eventos que ocurren en su entorno y que deben seleccionar y decodificar para que lleguen nítidamente a su conocimiento: ondas de comprensión y descomprensión del aire que detectan sonidos trascendentales para el desarrollo del lenguaje y del pensamiento abstracto del bebé, ondas electromagnéticas que despiertan la exploración visual del óvalo facial de su madre, la expresión de sus ojos y el movimiento de sus labios cuando ella le dirige sus primeras palabras, etc. Dichas activaciones sensoriales son importantísimas cuando el bebé las recibe acompañadas de estímulos táctiles y afectividad durante el período mas crítico del desarrollo cerebral (desde el nacimiento hasta los 3 años), en que las neuronas cerebrales ambiente-dependientes exploran el entorno que las rodea. William James en 1890, en su obra Principios de la psicología, realizó el siguiente planteamiento: “Millones de detalles se presentan a mis sentidos; ellos nunca penetran propiamente en mi experiencia. ¿Por qué? Porque no tienen interés para mí.”

Es evidente que el interés conduce a la exploración y ésta a la cognición. La conducta exploratoria de nuestros niños y de nuestras niñas es impulsada por nuestra capacidad de involucrarnos en sus intereses (yo como mediador me involucro primero), en sus juegos y en sus anhelos. Resulta de la mayor importancia proporcionarles entornos enriquecidos (environmental enrichments. Víctor Fernández, 2001 y 2003). Además, impulsar sus contactos sociales (Desmond Morris, 1967) y sus relaciones con los “caregivers” que se preocupan no sólo de sus cuidados básicos, sino también de su proceso cognitivo consiguiendo impulsar asociaciones interpersonales que amplían sus

conductas exploratorias (Ains Worth, 1967). La validez de los argumentos precedentes queda en evidencia al observar que la conducta exploratoria es dramáticamente inhibida en niños desnutridos por la necesidad imperiosa de ahorrar energía (Brown y Pollit, 1996).

Dime y lo olvido.

Enséñame y lo recuerdo.

Involúcrame y lo aprendo.

Benjamin Franklin


Resulta maravilloso darnos cuenta de que somos energía y, como tal, captamos todas las energías del medio ambiente y de los seres humanos que nos rodean. Es indudable el papel que jugamos los docentes en este tema. Debemos vincularnos por el “afecto explícito” (gestos, abrazos, caricias, tomadas de mano, palabras, miradas) con cada uno de nuestros alumnos, de modo que les permita decodificar el mensaje amoroso que, como especie, necesitamos sentir para el aprendizaje y la cognición, en especial en los primeros años de la vida.

Por otro lado, es sabido que debemos permitir que nuestros niños y nuestras niñas exploren el medio ambiente según su interés. Ha quedado de manifiesto que esto los inducirá a la exploración y potenciará su cognición, de modo que lograrán, así, aprendizajes realmente significativos que implican trascendencia. Sin embargo, en nuestras planificaciones, ¿consideramos los reales intereses de nuestros niños y de nuestras niñas o los subordinamos a los nuestros y a los contenidos de los programas?

Este artículo nos pone en alerta. No podemos seguir abordando la didáctica sin priorizar la consideración de los intereses de nuestros alumnos y de nuestras alumnas, debemos involucrarnos con ellos, en sus juegos y fantasías; sólo así impulsaremos la conducta exploratoria fundamental para el aprendizaje. Debemos estar despiertos observando lo que los motiva, sólo así nos sintonizaremos con la triada:

MOTIVACIÓN, INTERES, CONCENTRACIÓN

“Siempre me concentro en lo que me interesa”

“NEUROPEDAGOGÍA” Septiembre 2010




La corteza prefrontal predictiva: Considera el pasado. Controla el presente. Predice el futuro

La corteza prefrontal predictiva (CPP) cumple la importante función de adaptarnos a las condiciones “permanentemente fluctuantes” del medio físico, social e intelectual que nos rodea. Esta estructura cerebral nos permite responder en forma apropiada, armónica, objetiva, racional y oportuna frente a los diversos tipos de señales sensoriales. Esto implica controlar la impulsividad y, además, planificar las conductas de acuerdo con las circunstancias. Esta área desempeña un papel importantísimo en las actividades asociativas, que involucran varios sistemas en forma consecutiva y secuencial, por ejemplo, elegir el bus de la locomoción colectiva que nos trasladará a un determinado lugar. Esto implica una secuencia ordenada de eventos neurales: (1) ver el bus (estimulación de la retina, del tálamo y de la corteza visual); (2) leer el número del recorrido y decidir que es el adecuado para el viaje que deseamos realizar (girus angular, área de Wernicke y corteza prefrontal predictiva) y (3) finalmente, subir al bus cuando éste se detenga (corteza motora, médula espinal, motoneuronas alfa, músculos de las piernas y de los brazos). En el caso descrito, se configuró y se disparó una sucesión ordenada de eventos neuronales cascada) dirigida al cumplimiento de metas predeterminadas por la corteza prefrontal predictiva.

Frente a situaciones especialmente difíciles y conflictivas, existen dos tipos de respuestas posibles: una reactiva, emocional, irreflexiva y precipitada, frecuentemente violenta, mediada a través de la amígdala cerebral, y otra racional y reflexiva a cargo de la corteza prefrontal predictiva que señala su enorme importancia evolutiva y permite lo siguiente:

(1) Concentrar la atención en temas relevantes.

(2) Respetar las ideas, las opciones y los derechos de los demás componentes del grupo social, aun cuando no concuerden con los propios puntos de vista (tolerancia).

(3) Planificar acciones a futuro en términos razonables.

(4) Elegir la opción más adecuada en cada caso.

(5) Anticiparse y descartar acciones a futuro que pudieran generar efectos negativos (predicción).

(6) Concentrarse en tareas que exigen esfuerzo mantenido de largo plazo.


Es interesante conocer lo determinante que resulta ser la corteza prefrontal predictiva en los seres humanos en lo referente a su adaptación armónica al medio.

Por tal razón debemos poner en práctica estrategias didácticas que permitan que se desarrolle, se utilice y se ejercite en plenitud en cada uno de nuestros alumnos y de nuestras alumnas, de modo que favorezca respuestas reflexivas y racionales por parte de ellos, en especial a la hora de vivir situaciones difíciles.

Con los niños y las niñas

¿Trabajamos la tolerancia generando experiencias que les permitan respetar puntos de vista diferentes a los suyos?

¿Les pedimos que elaboren pequeños proyectos viables de ejecutarse y los monitoreamos para que los realicen?

¿Realizamos preguntas abiertas y divergentes que les permitan dar más de una respuesta y pensar racionalmente sobre lo que resulta ser lo más adecuado?

¿Seleccionamos para trabajar temas potenciadores y desafiantes para los niños y las niñas, considerando sus experiencias previas?

¿Generamos la reflexión sobre las consecuencias negativas que pueden tener nuestros actos instando a anticiparse a ello para evitarlas?

Sin duda, se requiere para todo lo anterior de docentes atentos, vivos, observadores, empáticos y, por sobre todo, cariñosos, que sean capaces de mediar en la secuencia:

“percepciones, emociones y comportamientos”.

“NEUROPEDAGOGÍA” Octubre 2010




Nuestra corteza parieto-temporo-occipital (Lenguaje y asociación. Comprensión del entorno, lateralización y lecto-escritura)

La corteza parieto-temporo-occipital ocupa una enorme superficie del encéfalo humano delimitada por las cisuras de Rolando y de Sylvio. Está conectada, mediante receptores visuales, auditivos y somestésicos, con el medio ambiente circundante: luces, colores, música, lenguaje, etc. Más aún, tiene la facultad de asociar las diferentes modalidades sensoriales y darles significados cuando dicha información impacta el área de Wernicke. Un componente significativo asociado a esta última área es el Girus angular que nos permite generar lectura comprensiva que, en caso contrario, resulta ser sólo lectura mecánica que no nos entrega ninguna información significativa (en este caso, la atención al texto es un factor relevante).

Veamos un ejemplo de la importante asociación que es capaz de realizar el área de Wernicke.

Si en cierta circunstancia escuchamos un ruido en el techo de nuestra casa y desconocemos su significado, éste puede ser aclarado si, algo más tarde, escuchamos un maullido; llegamos entonces a la siguiente ecuación: ruido en el techo + maullido = gato.

Es importante señalar que el área de Wernicke se encuentra en la mayor parte de los pacientes en el hemisferio cerebral izquierdo, desde el cual se implementa el circuito Wernicke-Broca-corteza motora izquierda, que nos permite exteriorizar nuestros pensamientos y anhelos en forma oral y también en forma escrita. Esto último es evidente al observar que un altísimo número de sujetos escribe con la mano derecha debido a que las áreas motoras descargan en forma cruzada contralateral: corteza motora izquierda sobre mano derecha (diestra).

La corteza parieto-temporo-occipital y la corteza prefrontal predictiva constituyen la base de nuestras funciones cerebrales superiores, entre ellas la comprensión de los eventos que ocurren en el medio ambiente, el lenguaje, la memoria de corto plazo y la manipulación de actividades motoras finas: interpretación de instrumentos musicales, dibujos, pintura, escritura, etcétera.

Es importante considerar que el hemisferio cerebral derecho contribuye con ciertos componentes afectivos conocidos como “prosodia”: énfasis, tono y ritmo del lenguaje.


En este artículo podemos percibir las múltiples funciones que permite desarrollar la corteza parieto-témporo-occipital en el ser humano, siempre y cuando ésta se desarrolle en plenitud en gran parte, producto de la conexión con el medio ambiente. Entre las funciones que permite desarrollar, a continuación se plantean las siguientes, visualizando la práctica pedagógica:

Lenguaje: es determinante abordarlo desde la expresión y, por sobre todo, desde la comprensión. No basta que el niño o la niña se exprese en forma oral y escrita por medio del lenguaje, sino que lo comprenda, por lo que nuestras prácticas deben estar muy orientadas al entendimiento y no centradas en la información, en el traspaso de contenidos y en la repetición mecánica de palabras.

Asociación: no podemos dejar de trabajar este aspecto de forma explícita. Resulta interesante para ello el uso de preguntas divergentes y gatilladoras, las que pueden planificarse para cada experiencia de aprendizaje, además de una actitud activa modificante por parte del docente.

Comprensión del entorno: los dos conceptos anteriores están estrechamente vinculados a este tópico. Es a través del lenguaje y de las asociaciones que realizan los niños y las niñas que nos damos cuenta de cómo perciben y comprenden el entorno y de cómo lo van valorando. El uso del dibujo resulta también una estrategia maravillosa para ello, pues nos permite visualizar, en forma concreta, la percepción y la comprensión que van teniendo del medio ambiente.

Lateralización: realizar diariamente ejercicios prácticos de movimiento con el cuerpo en su totalidad utilizando juegos didácticos musicales permite, de forma atractiva y potenciadora, coordinar, controlar y diferenciar movimientos, favoreciendo la definición de la lateralidad, tan importante para la vida diaria.

Lectura y escritura: la iniciación natural a estos dos maravillosos procesos se puede realizar rescatando los recursos literarios como cuentos, poemas, canciones, rimas, adivinanzas y chistes, entre otros, por lo que es vital que los docentes manejen un amplio repertorio.

En general, como educadores y educadoras, tenemos el deber de encontrar estrategias didácticas que permitan el desarrollo de las funciones señaladas en todos los alumnos y las alumnas, generadas por la corteza-parieto-témporo-occipital, para ello es determinante brindar los tiempos adecuados a cada uno de los niños y de las niñas, buscando diferentes estilos de aprendizaje y respetando sus ritmos e intereses.

“NEUROPEDAGOGÍA” Noviembre 2010




Caminando y evolucionando hacia una educación “creativa, afectiva y resolutiva”

Quisiera hoy plantear una propuesta educativa ligada a las ideas señaladas por Harold I. Modell y Joel A. Michael en su artículo “Promoting active learning in the life science classroom” que señala: “Todas las críticas de la escena educacional americana, desde el kindergarten hasta las escuelas profesionales, indican que nuestros estudiantes memorizan muchas materias pero son incapaces de utilizar dicha información para resolver problemas.” (“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo”. Benjamín Franklin).

En efecto, la simple memorización de textos tiende a que éstos se olviden, y sólo constituye un elemento primario del aprendizaje, frente al cual es fundamental consolidar dichos conocimientos mediante la comprensión del contenido y su aplicación en tareas resolutivas. Un ejercicio valioso es la introducción temprana de cuentos e historietas relatados a nuestros niños y niñas y que incrementan notablemente su interés y creatividad, situación valorada por tres premios Nobel:

- “De mi madre escuché los relatos que alimentaron mi imaginación.” Nelsón Mandela.

- “Mientras el sueño llegaba, la noche se poblaba con las historias y los sucesos que mi abuelo iba contando.” José Saramago.

- “Tuve la suerte de que en la escuela Montessoriana las maestras estimulaban los cinco sentidos.” Gabriel García Marquez.

- Durante estas primeras etapas, cada sujeto construye su propia

individualidad de acuerdo con sus experiencias personales: emociones, sentimientos e imaginación. Así se despiertan los cinco sentidos, la exploración del entorno y la reflexión, y se mezclan luces, colores, música y afectos, el ingenio, el talento y la creatividad en esa maravillosa máquina de aprendizaje que es el cerebro de nuestros niños y niñas (período crítico del desarrollo).

“El puente de enlace entre el medio ambiente externo que rodea a nuestros niños y sus neuronas está dado por moléculas tróficas que activan su estructura en forma adaptativa”.


Es fundamental desarrollar la memoria, como función cognitiva superior, en nuestros niños y niñas desde temprana edad, en especial en relación con la “comprensión del medio que los rodea”.

Los invito a reflexionar sobre ello, analizando nuestras prácticas docentes y parcelando la célebre frase de Benjamín Franklin planteada en este artículo:

Dime y lo olvido:

¿Cuántos contenidos trabajamos que se olvidan al día siguiente?

¿Cuántas indicaciones damos que no son comprendidas por nuestros alumnos y alumnas?

¿Cuántas palabras decimos que se las lleva el viento?

Enséñame y lo recuerdo:

¿Nos preocupamos por que los niños y las niñas comprendan lo que les entregamos?

¿Les brindamos diferentes estrategias de aprendizaje de modo que puedan, por uno u otro medio, entender lo que se les dice o pide?

¿Trabajamos temas, ideas o conceptos con prácticas pedagógicas innovadoras y atractivas que permitan la potenciación de la imaginación y la fantasía como parte de la creatividad?

Involúcrame y lo aprendo:

¿Nuestra didáctica permite que nuestros alumnos y alumnas apliquen lo que les pedimos o entregamos?

¿Nos preocupamos de generar un vínculo afectivo con cada uno de ellos emocionándolos en el aprendizaje?

¿Les brindamos la posibilidad de recrear constantemente situaciones o hechos que demuestran la comprensión de un tema o idea?

¿Favorecemos en las niñas y en los niños la resolución de problemas prácticos y cotidianos o lo hacemos nosotros por ellas y ellos?

Te invito a trabajar estas preguntas en reuniones de equipo docente de modo de generar reflexión en función de la mejora.

“NEUROPEDAGOGÍA” Diciembre 2010




El inicio del camino

Esta es nuestra propia historia, la maravilla que nos permite participar y compartir el mundo biológico y físico que nos rodea:

1.- Todo se inicia en el ovario cuando en forma cíclica se libera un óvulo maduro (generalmente cada cuatro semanas), y viaja hacia las “trompas de Falopio” enfrentando la aventura de ser o no ser fecundado (to be or not to be).

2.- Allí en la trompa de Falopio el espermatozoide más potente, de los millones que se depositan en la vagina en cada relación sexual, alcanzará el óvulo maduro produciéndose así la fertilización, que dará como resultado la formación de un nuevo individuo.

3.- Dos hormonas femeninas regulan las etapas vitales: a) el estrógeno, que reconstruye la capa interna del útero (endometrio) después de la menstruación y b) la progesterona, que prepara el endometrio para anidar el óvulo fecundado.

4.- El huevo fecundado pasará por una serie de transformaciones hasta llegar a la etapa de embrión (el período embrionario es la etapa de mayor vulnerabilidad durante el embarazo, por la acción de agentes teratogénicos como alcohol, drogas, enfermedades virales (rubéola), etc.) y se ubicará en la capa interna del útero, donde iniciará su desarrollo hasta lograr su maduración transformándose en feto, el que logrará su término al cabo de 38 ó 40 semanas. Posteriormente se iniciará el proceso del parto.

5.- Recién nacido. Tras el parto, el equipo médico realizará una serie de evaluaciones que permitirán medir las condiciones del recién nacido. Por ejemplo, el test de APGAR: siglas que involucran lo siguiente:

A = apariencia del color de la piel (normal, rosado, azul, etc.)

P = pulso, frecuencia cardíaca

G = grimacé (gesto, mueca), respuestas reflejas

A = actividad muscular; ono muscular

R = respiración, esfuerzo respiratorio

Además, se mide la presencia de reflejos innatos (presión palmar, succión, moro, etc.). Durante las dos primeras horas posparto el recién nacido se coloca en contacto piel con piel con su madre (apego temprano – attachment. Marshall Klaus, 2000).

Ser padres

Cada vez que nace un niño, trae consigo la esperanza de que Dios aún no está desilusionado con el hombre.

R. Tagore. poeta laureado montessoriano


Con este artículo queremos despedir un espacio en el que hemos podido compartir mes a mes algunos tópicos que nos brindan las neurociencias y su relación con la pedagogía. Ya estamos en diciembre, y todo el ambiente comienza a llenarse de luces de colores, arbolitos de Pascua y guirnaldas intermitentes, que nos recuerdan que ya se acerca la Navidad; es decir, el nacimiento de un Niño llamado Jesús en Belén. ¿Qué mejor, entonces, que relacionar biológica y espiritualmente este gran acontecimiento?

La vida es un regalo maravilloso en la que un ser humano empieza su camino anidándose en el útero de su madre que lo contiene y acuna 9 meses, para luego nacer y adaptarse a su medio. Es aquí que el apego y el vínculo son determinantes. A poco andar y apenas a los 84 días, ya podemos recibir a ese bebé en la Sala Cuna, pero… ¿hemos pensado que seremos el útero externo que lo debe seguir conteniendo y acunando ahora en vez de su madre, y más aún, educarlo para la vida? Gran responsabilidad es, entonces, la de los docentes de estos niveles, pues nos confían la existencia de un ser humano y su formación como persona. No olvidemos que lo más importante es que cada uno de nuestros niños y niñas sienta el cariño de sus docentes explícitamente y que, además, debemos brindarle un ambiente enriquecido de aprendizajes para la vida, donde desarrolle habilidades que le permitan su autonomía, confianza básica, autoestima, autoconcepto y, por sobre todo, plenitud. También es determinante que nuestra actitud sea la de un mediador eficiente, que logre paulatinamente la automediación de sus alumnos y alumnas. Por otro lado, debemos cuidar lo que hacemos y decimos, pues somos modelos en sus aprendizajes y, finalmente, entender que, además, debemos ser moduladores sensibles y empáticos, a fin de modular las emociones de cada uno de nuestros niños y niñas, lo que no es fácil, pues requiere de una gran armonía emocional.

Teniendo esto en cuenta, además de la inspiración divina, no cabe la menor duda de que dejaremos huellas positivas en cada uno de nuestros niños y niñas. ¡Feliz Navidad!

Artículos año 2011 (Revista Maestra de Párvulos, ex Maestra Jardinera)

Neurociencias, arte y cultura – Febrero 2011



Espacio de Claudia Donoso

Estamos felices de compartir con ustedes un año más. Es para nosotros una gran responsabilidad escribir estos artículos mes a mes y pensar en un tema que les sirva y les genere interés por acercarse a este maravilloso mundo de las neurociencias, las que este año irán tomadas de la mano del arte y de la cultura.

Desde la molécula hasta el amor, abordaremos tópicos que les permitan entendernos como individuos, insertos en un medio ambiente rodeado de arte y de cultura y que, dependiendo de las intervenciones pedagógicas que realicemos y de la calidad de estas, permitirán el aprendizaje trascendente y significativo por parte de los niños y de las niñas que nos confían en este hermoso desafío de “EDUCAR”. Por lo tanto, caminar de la mano, amablemente y con cariño cada día, es determinante para lograr que nuestros alumnos y alumnas aprendan. No basta la transmisión de contenidos, sino que es necesario emocionarse en el aprendizaje, lo que está determinado por el mediador humano que lo genera; es decir: “TÚ COMO MAESTRO”.

El cerebro no es un vaso por llenar, sino una lámpara por encender.

Plutarco, escritor griego, siglo IV a.C.

En esta oportunidad, el doctor Fernández aborda la importancia del factor humano en la mediación para el aprendizaje, además de la humanización y potenciación de las prácticas pedagógicas por medio de la reflexión.

Espacio del Dr. Fernández:

Presencia humana: motivación y reflexión

Hace unos quince años, Patricia Kuhl, profesora de Lenguaje de la Universidad de Washington, pudo comprobar que niños tan pequeños como de nueve meses aprendían a detectar los sonidos fonéticos del mandarín tras sólo doce sesiones, comunicándose con sujetos adultos que al mismo tiempo les mostraban juguetes. Un experimento similar, realizado en otro grupo de bebés en idénticas condiciones pero reemplazando al adulto por un sistema de reproducción mecánica (cinta de video o de audio) no indujo aprendizaje alguno del mandarín. Esto revela el importante rol del mediador humano desde el inicio del proceso educativo. En un experimento muy antiguo, Michel Gaetano Malacarne (1780) observó que, al trasladar a convivir a su domicilio a una pareja

de mirlos, ellos desarrollaron un incremento notable del número de fisuras corticales, hallazgo que señala un importante hito de evolución cerebral.

Otro ejemplo notable respecto de la presencia humana se puede observar al analizar el caso de Lev Semionovitch Vygotsky (Ramona Bolívar. Maracay. Venezuela, 2006). La formación de Vygotsky fue confiada al profesor Salomón Ashpiz, quien practicaba un método semejante al diálogo socrático, que propiciaba la interacción entre profesor y alumno, caracterizada por actividades motivadoras, libertad de opinión y sentido crítico. Mediante dicho procedimiento, el educador abre caminos de comprensión y de reflexión, constituyéndose en el componente más trascendente del aprendizaje. No sólo debe entregar conocimientos, sino que debe invertir esfuerzos en cómo despertar el interés de nuestros niños y niñas, incorporándolos como investigadores activos del conocimiento. Al respecto, Michael Strong, autor de El hábito de pensar: debate socrático en la sala de clases, señala que la educación tradicional no considera el derecho de los alumnos a razonar por sí mismos, más bien los estimula a convertirse en una especie de grabadora de video rígidamente restringida por los puntos de vista de la educación tradicional.

Entonces predisponemos con el ejemplo: “Nosotros debemos ser el cambio que queremos ver en el mundo” (Mohandas Gandhi).

Finalmente recordemos lo siguiente:

Nuestros alumnos y alumnas no son simples clones, sino individuos en búsqueda de una verdad libre de errores y de imposiciones. Es importante crear espacios interactivos orientados en círculos que incrementen las posibilidades de discutir y pensar ideas para resolver problemas y avanzar.

Neurociencias, arte y cultura – Marzo 2011




Las manos y la región facial de mi bebé

Estas estructuras están involucradas, desde el comienzo de la existencia, en funciones importantísimas:

El reflejo innato vital de succión de leche. El apego temprano entre madre e hijo, etcétera.

A través de la cavidad bucal, el recién nacido comienza a explorar y a reconocer su entorno, a relacionarse con su madre y con los sujetos y cosas que le rodean. En estas áreas faciales se detectan los colores, el movimiento de los objetos, la música, los olores y los sabores de los nutrientes. Además, allí se ejercitarán los primeros indicios de la comunicación: los músculos de la mímica facial le permitirán expresar sus estados de ánimo: el llanto, las sonrisas, el balbuceo y, finalmente, las primeras palabras. Las manos complementarán tanto la información recibida como la ejecución de las respuestas aportando la textura y la temperatura de los objetos, la motricidad fina de los dígitos y la asociación clave MANO – OJO – CEREBRO, característica de los primates.

Para concretar dichas importantes funciones evolutivas, estas áreas están dotadas de una enorme agudeza perceptiva. La punta de la lengua y los labios, por ejemplo, son capaces de detectar partículas pequeñísimas de 2 a 2,5 g/mm, en tanto que el pulpejo de los dedos es capaz de distinguir, como separados, dos estímulos situados a una distancia de solo 2,3 mm (discriminación a 2 puntos). Los códigos obtenidos mediante el pulpejo de los dedos le permitieron a Hellen Keller (ciega y sorda) romper con su incomunicación al emplear un sistema de escritura y lectura diseñado para leer mediante el tacto (BRAILLE).

Además, es necesario señalar las importantes y complejas acciones motoras de la lengua en el proceso de vocalización y de los dígitos en eventos altamente evolutivos como la utilización de instrumentos musicales. En la escritura, la pintura y la cirugía, la mano y la boca suelen actuar en forma asociativa, armónica, secuencial y sinérgica. Así, los niños y las niñas que están aprendiendo a escribir suelen retorcer la lengua mientras mueven los dedos (tal como William H. Calvin señaló en “Como piensan los cerebros”, Ed. Debate, 2001).

Aproximadamente entre 75 y el 80% de la corteza motora está destinada al manejo de la región facial y los dígitos, lo que demuestra la importancia del lenguaje oral y escrito en el hombre.


Resulta muy interesante abordar y hasta modificar la didáctica considerando los conocimientos que nos entrega el Dr. Fernández. No podemos dejar de atender al hecho de que casi el 80% de la corteza motora está destinada a la región facial y a las manos, específicamente los dedos, lo que conlleva, sin duda, al lenguaje oral y escrito, cuya principal función es la comunicación.

¡Manos a la obra!

Te invitamos a incorporar sistemáticamente en tu quehacer pedagógico algunos recursos didácticos que contemplan la ejercitación de las zonas faciales y los dedos, comprendiendo ahora que esto favorece el desarrollo de la corteza motora:

Cantar canciones que permitan la expresión facial, asociada a la mímica.

Muy triste, pensando, no sabe, qué asco.

Gruñona, durmiendo, sonriendo al final.

Realizar juegos rítmicos verbales que favorezcan el lenguajear.

Neuronas, neuronitas,

neuronas con axón;

soma con dendritas,

sinapsis por montón.

Jugar con los dedos a través de la independencia de cada uno de ellos asignándoles su nombre.

Mis deditos vienen caminando por aquí.

Mis deditos vienen caminando por allá.

Pulgar, pulgar se llama el dedo más gordito;

se dan un fuerte abrazo y se quedan dormiditos.

Índice es el nombre del dedo que indica;

se dan un fuerte abrazo y se van a la camita.

Medio es el más alto de todos los deditos;

se dan un fuerte abrazo como buenos hermanitos.

Se viene a presentar el dedo anular;

se dan un fuerte abrazo y dejan de jugar.

Meñique es el que queda, el dedo pequeñito;

se dan un fuerte abrazo también un gran besito.

Realizar experiencias de manipulación usando la pinza (dedos índice, medio y pulgar).

A las yemas de los dedos

se les llama pulpejos;

si juntas el pulgar, el índice y el medio,

puedes imitar tenazas de cangrejo.

Neurociencias, arte y cultura – Abril 2011




Jugar es educar ( l )

(magia, ilusión y fantasía)

“Piensa como un sabio. Actúa como un loco. Juega como un niño”.

El hombre de la mancha

El juego constituye una herramienta emocional cognitiva que nos

permite alcanzar, paso a paso y sin estrés, las fronteras del conocimiento. Es un devenir en búsqueda de soluciones creativas y flexibles; no es un simple proceso de memorización y reiteración. Es un aprendizaje en libertad; es activar nuestros sentidos con colores, movimiento y recreación potenciando nuestro cuerpo y nuestra mente.

El juego:

1.- Desarrolla una actitud positiva hacia los aprendizajes (perseverancia). 2.- Involucra la puesta en acción conjunta de redes neuronales visuales, auditivas y motoras. 3.- Activa capacidades de razonamiento relacionadas con desafíos que el niño o la niña deberá enfrentar y resolver a futuro (artes, ciencias, deportes). 4.- Estimula la imaginación permitiendo resolver problemas en forma creativa y adaptativa. 5.- Equilibra la razón (corteza prefrontal predictiva) con la emoción (amígdala cerebral); la humildad en el triunfo con la aceptación y la tolerancia frente a la derrota (autocontrol). 6.- Expande los aprendizajes y la memoria de largo plazo por sus efectos emocionales (retención a largo plazo de los eventos significativos). 7.- Permite encauzar la vida hacia objetivos positivos en términos de salud física y emocional. Permite el desarrollo cerebral y muscular (mens sana in corpore sano). 8.- Dado que las estrategias de juego competitivo dependen no solo de las habilidades y destrezas personales sino, además, de las capacidades del adversario, nos obligan a considerar nuestras opciones frente a aquellas del otro

participante, lo cual nos permite medir nuestras capacidades y debilidades personales. Fragmento:

“Todas íbamos a ser reinas”

Todas íbamos a ser reinas de cuatro reinos sobre el mar:

Rosalía con Efigenia y Lucila con Soledad.

Lo decíamos embriagadas, y lo tuvimos por verdad,

que seríamos todas reinas y llegaríamos al mar.

Gabriela Mistral (1889-1957).

Espacio de la educadora Claudia Donoso

Sin duda, todo educador o educadora, en su formación de pregrado, ha conocido la importancia del juego para el aprendizaje. Sin embargo, su abandono en el aula infantil demuestra su escasa valoración, lo que se revierte inmediatamente al leer tan sólidos fundamentos de su relevancia en la educación planteados por el Dr. Fernández desde la mirada de las neurociencias.

Surge, entonces, la necesidad imperiosa de replantear la didáctica actual y de revisar la práctica pedagógica en función de los espacios y del tiempo que se le asigna al juego en el aula.

“Tugar tugar, juegos entretenidos hay que encontrar”

Recordemos Juegos de Palmas

Rescatemos los juegos tradicionales a la hora del patio: rondas, pillarse, escondidas, alto y tombo, entre otros.

Realicemos juegos de imaginería: mimos, teatralizaciones y bailes.

Baile

Organicemos una ludoteca en el aula: dominó, lotería, bingo, ludo y tablero de carreras.

Juguemos juegos folclóricos: tirar la cuerda, carrera de ensacado, botar los tarros y rayuela.

Generemos ambientes para juegos de roles: el doctor y la familia, entre otros.

Juega con tus niños y niñas, no solo los mires jugar, y disfruta con ellos. Si te lo propones, ¡se puede!

Neurociencias, arte y cultura – Mayo 2011




Jugar es educar (segunda parte) Acción, pasión y aprendizaje

Juego: actividad creativa sin límites, ni fronteras, ni exclusiones. Jugar a contar, jugar a leer, jugar a compartir.

La motivación por el juego se manifiesta en la mayoría de los mamíferos (gatitos, perritos, ositos y primates) y forma parte del desarrollo emocional de los niños y de las niñas; por lo tanto, debe ser considerado por los educadores como parte irrenunciable del aprendizaje temprano. El juego potencia el interés de los niños y de las niñas por su entorno, incluso activa los objetos inanimados que los rodean, puesto que los niños y las niñas les dan vida mediante su imaginación y los convierten en compañeros de aventuras, de bailes y de conversaciones. Más aún, el juego es el camino hacia un aprendizaje entretenido a través del cual interactúan la magia, la ensoñación, el placer y la libertad. Al impulsar las emociones positivas activa, además, el hipocampo y la memoria de largo plazo.

El juego:

1.-Induce al PROTAGONISMO, puesto que transforma a los niños y a las niñas de OBJETOS EN SUJETOS de su propio aprendizaje.

2.-Despierta en los niños y en las niñas el INTERÉS por los elementos del entorno fortaleciendo sus relaciones con el medio ambiente.

3.-Ayuda a desarrollar la AUTOESTIMA.

4.-Mejora la sensación de bienestar (MOOD), mediante la liberación de beta-endorfinas.

5.-Constituye un factor significativo de promoción social muy importante de considerar en los grupos marginados.

6.-Desde el punto de vista médico, la combinación de juego y movimiento ayuda a combatir la obesidad y la diabetes. Además, su práctica y uso adecuados protegen el sistema CARDIOVASCULAR.

7.-En el JUEGO COMPETITIVO las posibilidades de triunfar o de perder siempre están presentes. Esto ayuda a enfrentar y a resolver problemas rápida y eficientemente de acuerdo con las circunstancias, y a tomar la opción más adecuada; es decir, desarrolla la capacidad de resolución de problemas.

“Deja que la educación temprana sea como un JUEGO; podrás conocer mejor las naturales inclinaciones.” PLATÓN


Si unimos lo abordado en esta segunda parte dedicada al juego a lo abordado en la revista de abril, podemos fundamentar la importancia del juego ante la comunidad educativa (docentes, directivos y padres), de modo de generar un cambio de mirada y una revaloración de él en la didáctica.

¿Qué tal si organizamos una reunión de padres en la que el tema de reflexión sea la importancia del juego en el aprendizaje y se les invite a “jugar”, de modo que experimenten lo que sus hijos e hijas viven a diario en el Jardín?

Para cada juego realizado, hay que explicar las habilidades que se desarrollan, por ejemplo:

Coordinación fina. Disociación de movimientos. Memoria. Secuencia de patrones. Resolución de problemas. Atención y concentración. Control de las emociones. Imaginación. Otras.

La idea es, entonces, incorporarlo al desarrollo curricular: planificación, implementación y evaluación, de modo que te permita conocer más a tus niños y niñas en todos los ámbitos de experiencias para el aprendizaje. Te invitamos a pensar en diferentes juegos para cada uno de ellos, por ejemplo:

Formación personal y social: juegos deportivos, juegos colaborativos y grupales.

Comunicación: juegos rítmicos verbales, juegos de imaginación.

Relación con el medio: juegos en la naturaleza, juegos lógico-matemáticos.

Neurociencias, arte y cultura – Junio 2011



Espacio del Dr. Fernández: Genes y medio ambiente – Primera parte

(Lo innato y lo adquirido)

Aquí exploramos el camino de “cómo llegar a ser lo que somos” (Preface: the developing mind. Daniel Siegel, 1999.)

Aquellas semillas (genes) que cayeron en tierra fértil (medio ambiente enriquecido) brotaron, crecieron y se multiplicaron. Aquellas semillas que

cayeron en tierra estéril ni brotaron, ni crecieron, ni se multiplicaron.

“(…) En la danza de la vida, los genes y el medio ambiente son socios inseparables. Por un lado los genes esbozan un esquema básico del cerebro. Luego, la estimulación del medio ambiente, ya sea la luz que llega a la retina o la voz de la madre en el nervio auditivo, enciende y apaga los genes, afinando estructuras cerebrales tanto antes como después del nacimiento”. (Hyman, S., States of mind. New york. John Wiley,1999)

La codificación genética prenatal y las percepciones adquiridas del entorno (sonidos, luces, colores, emociones, interacciones sociales, etc.), activan nuestras redes neuronales, nuestros aprendizajes y nuestras memorias (experiencias recogidas). Así logramos personalizar, orientar y gobernar nuestras conductas (procesos mentales).

Determinantes genéticos Efectos epigenéticos ambientales

Prenatales Posnatales

No modificables Modificables (flexibles, plásticas)

Deterministas Relativistas

Recombinación genética jugada al azar. Proceso paso a paso por el cual el niño puede avanzar cognitivamente.

Responsable de características físicas: color de ojos, pelo, piel, altura, etcétera.

Dependiente del entorno y del esfuerzo individual.

Puede generar efectos positivos o negativos (enfermedades hereditarias).

Involucra el proceso educativo: padres profesores y entorno sociocultural.

Es evidente que existen dos períodos vitales, uno antes y otro después del nacimiento. La vida se inicia en un hábitat rodeado de líquido amniótico desde el cual el feto recoge parte del “mundo sensorial”. A los dos días después del nacimiento, el bebé es capaz de reconocer, mediante movimientos orofaciales, las características del lìquido amniótico de su madre -memoria transparto mediada por apego temprano-.

Durante el período prenatal, la vibración de la aorta abdominal de la madre le comunica al feto seguridad de sobrevida. En ambas etapas se observan períodos críticos. En la fase prenatal, un período de altísima vulnerabilidad frente a la ingesta de alcohol por parte de la madre (tercera u octava semana, síndrome alcohólico fetal). Durante la etapa posnatal, ventanas de oportunidad para el desarrollo de las actividades del lenguaje (lectura, escritura etc.), que deben ser consideradas para elegir las condiciones más adecuadas para activar las “funciones cerebrales superiores”.


Nos queda claro que un medio ambiente enriquecido es determinante en la arquitectura cerebral, en especial en los primeros años de vida, por lo que es indispensable, para potenciar al máximo las funciones cerebrales superiores (memoria, lenguaje, creatividad, aprendizaje y predicción), planificar, implementar y evaluar acciones educativas desafiantes, que permitan desarrollar en nuestros niños y niñas el descubrimiento, la curiosidad, la indagación y, por sobre todo, el pensamiento.

Los invitamos a trabajar las funciones cerebrales superiores con estrategias creativas en los diferentes momentos del día.

¡Manos a la obra!

Funciones cerebrales superiores Estrategias didácticas

Memoria Recordando canciones, poemas, cuentos y chistes, entre otros.

Lenguaje Expresándose en forma oral, en conversaciones y gráficamente, a través del dibujo, así como también usando la expresión corporal y la música para comunicarse.

Aprendizaje Escuchando, mirando y moviéndose en su entorno.

Predicción Con adivinanzas, planteamientos de ideas, formulación de hipótesis y juegos de percepción.

Creatividad A través de la integración de las artes (plástica, música, literatura y expresión corporal), o bien en el montaje de pequeñas obras de teatro, donde los niños y las niñas puedan recrear.

Neurociencias, Arte y Cultura – Julio 2011 Dr. Victor Fernández Hidalgo

Educadora Claudia Donoso Rioseco Espacio Dr. Fernández:

Genes y medio ambiente – Segunda Parte (Lo innato y lo adquirido)

En el proceso de desarrollo cerebral Genes y Medio Ambiente interactúan permanentemente. Los estímulos del Entorno activan o apagan genes (on-off) consolidando nuestro destino.

Inmediatamente después del Parto el recién nacido se enfrentará a la necesidad de adaptarse a un mundo complejo, cambiante y fluctuante.Nuestro bebé venía de un comportamiento Nido (caverna útero de María Montessori) que lo mantenía protegido de las inclemencias de los cambios físicos y fisiológicos. Allí en ese hábitat materno todo estaba perfectamente controlado y regulado.

Mas tarde en el nuevo hábitat externo deberá adaptarse a cambios dramáticos de la temperatura y la glicemia (glucosa en sangre). Mediante el ion fierro contenido en la hemoglobina de los glóbulos rojos deberá establecer un puente de enlace (aire-pulmones-sangre y cerebro) para transportar constantemente oxígeno a sus neuronas que en caso contrario no sobrevivirán. Además para no cortar el laso afectivo con su madre deberá ser puesto en contacto “piel a piel” con su progenitora durante las dos primeras horas post-natales (apego temprano-attchment-imprinting) Así, nuestros alumnos enfrentarán un proceso donde no sólo se amalgaman la simiente genética con el entorno epigenético sino además la cognición con los componentes lúdicos, la razón con la pasión y el aprendizaje con las luces, los colores y la música.

Características:

Determinantes Genéticos Determinantes Epigenéticos Ambientales

Por mucho tiempo se pensó que el desarrollo cerebral dependía exclusivamente de los genes.

Hoy sabemos que el desarrollo cerebral es el producto de complejas interacciones entre los genes y las experiencias recogidas del entorno.

Las experiencias tempranas modifican el “potencial genético” actuando como reguladoras de la transcripción genética.

La carencia de experiencias tempranas provoca pérdidas sinápticas significativas. De aquí la expresión use-it-or lose it ”úsalo o lo perderás”.

El determinismo exclusivamente genético de las capacidades cognitivas ha generado graves errores. Entre ellos señalar la existencia de razas superiores (racismo) hoy universalmente descartado.

Las experiencias tempranas son cruciales para pavimentar el camino hacia un cerebro sustentable ya que ellas afectan las redes neuronales.

Índice de variabilidad:

- 23 pares de cromosomas (total 46).

-100.000 genes según Proyecto Genoma Humano (Craig Venter y Francis Collins).

- 3.120 millones de pares de bases.

- 100.000 millones de neuronas.

Índice de variabilidad:

- ILIMITADO


Una vez más comprobamos que el ambiente es determinante para generar redes neuronales, por lo que debemos preocuparnos de la educación que le brindamos a nuestros alumnos/as, la que debe ser de calidad. Como ves, es de una responsabilidad enorme ser docente en educación inicial, nos confían seres humanos que tenemos el deber de educar para la vida, por lo que debemos cuidar la calidad de los estímulos y la educación que reciban del entorno el que tiene que ser enriquecido.

Entre Juglares y Trovadores… Con juegos, cantos, poesías, cuentos, bailes y colores debemos ir cada día en nuestras prácticas pedagógicas. Los maestros de educación inicial deben educar con el sonido, el movimiento, la palabra y el color, los que podemos considerar unidades o elementos básicos de las artes, por lo que es muy importante contar con recursos pedagógicos variados, atractivos y potenciadores, respetando si, la diversidad de estilos y ritmos de aprendizaje de lo niños y las niñas y considerando además sus experiencias previas.

Gracias a la vida… Finalmente no quiero terminar estas palabras sin invitarte a la metacognición de “Tú bienestar”, no olvides que para que puedas ser un docente iluminado y encantes y entusiasmes a tus niños y niñas al aprender debes:

Permitir que tu Pasión e Inspiración sean tu brújula Permanecer abierto y flexible para recibir las soluciones ideales a través

de la inspiración divina Deshacerte de las creencias que bloquean tu felicidad. Ser uno con el Universo y la bondad del Universo. Estar más consciente y despierto, con lo que podrás formular las

preguntas correctas y obtener las respuestas correctas. Borrar aquellos programas negativos que afectan tus planes, objetivos,

decisiones y resultados. Saber escuchar y mirar a tus alumnos/as mientras aprenden, sólo así

podrás conducir la ruta pedagógica con sabiduría, donde el saber no sólo se asocia a conocimientos si no a encontrarle “sabor al aprendizaje”.

No olvides que somos la suma total de todos los pensamientos pasados, emociones, palabras, hechos y acciones y que nuestras vidas presentes y elecciones están marcadas por este banco de memoria del pasado. Vive con gratitud el “hoy” y comprende que sólo pendes en esta existencia de un milagro divino que llamamos ¡suspiro! y que tienes además un gran regalo llamado: “vocación de educar”.

“En las manos de los docentes está la proyección de la humanidad”. ( Claudia Donoso)

Neurociencias, Arte y Cultura – Agosto 2011 Dr. Victor Fernández Hidalgo


NEUROCIENCIAS COGNITIVAS. LA RAZÓN DE SU EXISTIR ¿Por qué Neurociencias hoy?

“De acuerdo con K’ung Fu-tzu (Confucio) estudiar sin pensar es tan inútil como pensar sin estudiar” (551 - 479 a.de C.)

En los últimos años se ha ido construyendo ”paso a paso” una disciplina que integra los conocimientos obtenidos (memorias) con su utilización reflexiva y acertada (homo sapiens sapiens). La razón fundamental de las Neurociencias Cognitivas reside en CREAR estrategias para la RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS utilizando conocimientos pre-existentes.

Investigaciones en nuestro KINDERGARTEN EXPERIMENTAL (Developmental Brain Research, Biol.neonate, Brain Behav.Evolution, Growth, Development and Aging etc…etc) señalan que la estimulación sensorial temprana activa la EXPRESIÓN DE GENES ESPECÍFICOS que tienen efectos a largo plazo desde el JARDÍN hasta la UNIVERSIDAD. La educación tradicional entrega mucha información a memorizar y pocas oportunidades de aprendizaje ACTIVO dirigido a resolver problemas. “Un poco de conocimiento que ACTUA” es más valioso “QUE MUCHO” conocimiento ocioso. Khalil Gibran.

La razón de retener información en memoria de largo plazo tiene por objeto tomar decisiones inteligentes, creativas y racionales, más que acciones repetitivas, rígidas y restrictivas que no consideran la necesidad de evolucionar de acuerdo con los tiempos. En un mundo en que se agotan los recursos naturales “necesitamos ciencia, mas ciencia y mejor, no por su tecnología, no por placer, ni siquiera por la salud y la longevidad, sino por la esperanza de sabiduría que nuestro tipo de cultura debe adquirir para sobrevivir. Lewis Thomas , 1979”. No podemos quedarnos donde estamos, en el nivel actual de conocimientos. Veamos lo que señala la Reina Roja: ”Si quieres llegar a alguna parte, tienes que correr por lo menos el doble de rápido. Lewis Carrol, Alicia a través del espejo, 1871”

El siglo XX se inició con la Revolución Industrial, el siglo XXI se enmarca en la Sociedad del conocimiento. La valoración del conocimiento crece hoy a ritmo acelerado en las sociedades avanzadas conscientes de la importancia de la formación de líderes creativos.

Los progresos de nuestra civilización, se apoyan sobre bases científicas. Por lo tanto también la educación debe afianzarse sobre bases científicas. (María Montessori – Formación del Hombre)

Adquirimos virtudes sólo al practicarlas; uno se hace arquitecto construyendo, se hace músico tocando la cítara… y sabio, cultivando la sabiduría. (Aristóteles 384 – 322 a.de C)


Queda de manifiesto que las neurociencias nos han permitido paso a paso, en especial esta última década, apoyarnos en educación sobre bases científicas de cómo aprende mejor nuestro cerebro.

Ha resultado una maravilla comprobar que el encéfalo humano tiene una gran capacidad de aprendizaje, y que su potenciación depende del tipo de ambiente en que un individuo se desarrolle. Por tal razón los docentes debemos preocuparnos de enriquecer los ambientes de aprendizaje, de modo que generen en los niños y las niñas interés y motivación por aprender, donde el contenido como traspaso de información no tiene relevancia, si no el actuar y el pensar por parte del aprendiz.

Me parece relevante además señalar la gran capacidad del cerebro de modificarse y adaptarse a las diferentes situaciones que se presentan en la vida, como también el que aprendemos gracias a un grupo de neuronas llamadas neuronas espejo (Giacomo Rizzolatti -1996), las que desempeñarían un importante rol en las capacidades cognitivas ligadas al aprendizaje social, tales como la empatía y la imitación.

Yo he aprendido mucho de mis investigaciones, De mis profesores, De mis alumnos, Pero mucho, mucho más al compartir el crecer de mi nieta Julieta hoy 4 1/2 años. Compartir es crecer

Victor Fernández H.

A continuación se señalan 10 principios que a mi juicio deben considerarse en el aula

DECÁLOGO NEUROPEDAGÓGICO

1.- Abordar didácticas que permitan la resolución de problemas y no la memorización sin sentido. 2.- Los alumnos y alumnas necesitan emocionarse aprendiendo, encantándose con lo que el o la docente les entrega como desafío. 3.- Repetir tantas veces como cada niño o niña lo necesite. Por ejemplo no se puede aprender a tocar el violín si no se repite y repite. 4.- Realizar diariamente ejercicio físico placentero. 5.- Ingerir agua para oxigenar el cerebro. 6.- Comer frutas en la colación. 7.- Cantar, bailar y jugar con alegría y entusiasmo. 8.- Respetar los ritmos y estilos de aprendizaje de los niños y las niñas. 9.- Incorporar las artes en la didáctica de forma integrada: sonido, color, movimiento y palabra. 10.- Escuchar y estar “CON” los niños y las niñas.

Si ponemos en práctica estos aspectos, estaremos trabajando con fundamentos entregados por las neurociencias.

Neurociencias, Arte y Cultura – Septiembre 2011 Dr. Victor Fernández Hidalgo


NUESTROS BEBÉS ENFRENTANDO LOS DESAFÍOS DEL ENTORNO. I. OXITOCINA V/S CORTISOL.

Heráclito de Efeso (540 – 480 a. de C. según Enciclopedia Británica) señalaba que los eventos del entorno se encuentran en un cambio permanente, en un constante devenir (FLUIR DE LA REALIDAD). Dichas experiencias, potencialmente amenazantes, propias del medio ambiente impactan significativamente el desarrollo cognitivo y afectivo. Así, dichos cambios “PREDICEN” la evolución emocional, el bienestar y las capacidades de aprendizaje de nuestros bebés (ver: Evolución de las emociones, sentimientos y afectos. V. Fernández. Mundo Montessori. Nº7. 2011). En períodos avanzados del desarrollo (adultos) no hay problemas, los centros cerebrales superiores nos permiten tomar decisiones acertadas respecto a las CONTINGENCIAS del mundo en que vivimos, dada en dicha etapa avanzada la capacidad de equilibrar “LA RAZÓN, EL DERECHO Y LA PASIÓN”. Los problemas surgen cuando la carga emocional se ejerce sobre nuestros bebés, generando “EL QUIEBRE DEL EQUILIBRIO ALOSTÁTICO”. Así aparecen situaciones límites potencialmente muy peligrosas debido a la liberación de cantidades crecientes del glucocorticoide CORTISOL. Cuando la liberación de cortisol temprana es excesiva y prolongada sus efectos deletéreos (negativos) son gravísimos dado que “NUESTROS BEBÉS SE ENCUENTRAN EN DESVENTAJA PARA MANEJAR LA RELACIÓN RAZÓN-EMOCIÓN” entre otras causas por inmadurez de su “CORTEZA PREFRONTAL PREDICTIVA”. En el momento del nacimiento se ponen en acción dos hormonas: OXITOCINA Y CORTISOL.

OXITOCINA CORTISOL (corticoides)

(Del griego: nacimiento rápido)

Encargada de la INICIACIÓN Y TRABAJO DE PARTO mediante el control de la contracción uterina.

Genera apego temprano MADRE – HIJO.

Activa los Galactoforos colaborando así con la prolactina y eyectando leche.

(Liberado por la corteza suprarenal)

Secretado como consecuencia de los altos niveles de ESTRÉS generados por el binomio madre – hijo durante el parto.

Induce ESTRÉS temprano que puede ser muy disruptivo por la inmadurez del Sistema RAZÓN – EMOCIÓN (sus efectos negativos pueden ser antagonizados por la Oxitocina).

EXPERIMENTO: Ratitas sometidas a ESTRÉS compulsivo durante sus períodos críticos del desarrollo se transforman en ratas adultas muy agresivas. ENSEÑANZA: las niñas y los niños maltratados, abusados, golpeados o abandonados se transforman en adultos abusadores y castigadores.

Los niveles de CORTISOL durante los períodos tempranos pueden ACTIVAR (ON) O DESACTIVAR (OFF) expresiones genéticas. Los niveles de la hormona esteroidal cortisol pueden ser medidos en la saliva. Megan R. Gunnar. Universidad de Minnesota.


¿Te habías preguntado alguna vez cuánto cortisol generarás en tus alumnos/as con tus prácticas pedagógicas? y, ¿Qué resultados tendrías en tu sala si midieran en la saliva de tus alumnos/as el cortisol? Interesante resultaría considerar el nivel de cortisol de los estudiantes para evaluar el desempeño del docente, mientras mas cortisol genera un educador más alejado de la pedagogía de la ternura estará. En cuántas ocasiones los profesores generamos estrés en nuestros estudiantes con exigencias desmedidas, apresurados por cumplir un programa o simplemente con el buen fin, pero equívoco de prepararlos para…

Es muy importante revisar una vez más, los tipos de ambientes de aprendizaje que creamos, los que deben ser amables, acogedores, potenciadores pero por sobre todo afectivos, solo así combatiremos como la oxitocina al momento del parto, el estrés temprano.

Algunas ideas anticortisol - antiestrés:

Resulta interesante jugar al “amigo/a crítico/a” entre educadores,

observándose unos a otros sobre la forma de relacionarse con los niños y

las niñas, la didáctica utilizada, el tipo de clima de aula que genera, el

manejo del tono de voz, los gestos que usa, las palabras que dice, la

mirada que utiliza entre otros, de modo luego de compartir lo observado

en el contexto de una evaluación de pares.

Grabarse durante la jornada y ver críticamente el video observando el

desempeño y el tipo de ambiente que genera.

Incorporar ritos de aprendizajes como la hora del chiste y el minuto del

abrazo, que de seguro generarán ambientes distendidos y sin estrés.

Seleccionar educadoras/es para el trabajo en aula, con gran sentido del

humor, explícitamente afectivos, comunicativos y vinculares.

Organizar el horario sin prisa, sacando aquello que ya perdió el interés de

los niños y las niñas.

Ahora te invito a pensar junto a tu equipo de trabajo, en otras ideas concretas anticortisol - antiestrés envíándolas a nuestra editorial para que las publiquemos el mes que sigue.

¡hasta pronto!

Neurociencias, Arte y Cultura – Octubre 2011 Dr. Victor Fernández Hidalgo


NUESTROS NIÑOS Y NIÑAS ENFRENTANDO LOS DESAFÍOS DEL ENTORNO. II. HOMEOSTÁSIS.

HOMEOSTÁSIS: Capacidad de responder en forma eficiente a los cambios presentes en el medio ambiente. En otras palabras la Homeostásis ”Regula, Ajusta y Coordina las actividades viscerales”.

ESTRÉS: Condición que tiende a alterar la HOMESTÁSIS. Debemos evitar que ocurra estrés en el proceso educativo.

Principio físico de ACCIÓN Y REACCIÓN: Cada vez que se ejerce una fuerza llamada ACCIÓN se genera otra igual y contraria llamada REACCIÓN.

AMÍGDALA CEREBRAL: Estructura activada por los eventos ESTRESANTES del entorno. Uno de sus roles es responder frente a estímulos extremos “ situaciones de riesgo, ansiedad y terror”, por ejemplo visión de una serpiente (Le Doux 2002).

Los estímulos que se originan en la Amígdala desencadenan respuestas que preparan al organismo para el ataque o la huída (liberación de cortisol, noradrenalina, dopamina, etc.)

Tenemos dos Sistemas Reguladores: El Sistema Simpático utiliza el neurotransmisor Adrenalina que se expresa en forma muy activa en los ESTADOS DE EMERGENCIA. En contraste el Sistema Parasimpático utiliza el neurotransmisor Acetil-colina que permite recuperar las ENERGÍAS gastadas, durante el ESTRÉS.

OXITOCINA Y APEGO CORTISOL Y ESTRÉS

Reduce los estados de ansiedad y estrés.

Inhibe al Sistema Inmune dejando al individuo desprotegido frente a Hongos, Virus y Bacterias.

Hormona de la calma, el amor y la sanación. (Kerstin Uvnas Moberg).

Las conductas de Juego disminuyen el ESTRÉS facilitando el incremento de Betaendorfinas. Jugar es Educar. (Victor Fernández

H.2011)

Propicia la formación de parejas estables “MONOGAMIA” observada en el ratón de las praderas. (Thomas Insel 1992).

El ESTRÉS excesivo activa el flujo de ión calcio (Ca++) hacia el interior de las neuronas provocando atrofia y muerte neuronal.

Es inducida por estímulos táctiles. Ver: El amor en la primera infancia de los monos Harry F.Harlow Sci.Am.1959.

En cantidades adecuadas permite responder en forma eficiente a las contingencias ambientales.

Activa el apego temprano. Los corticoides son anti-inflamatorios activan cytokinas anti-inflamatorias (uso clínico).

Los bebes que reciben cuidados cálidos y adecuados PROSPERAN y muestran más RESILIENCIA. (Rima Shore Rethinking the Brain New Insights into early development.

Crema anti-inflamatoria HIDROCORTISONA recomendada para usar en períodos breves para no inhibir el sistema inmune.

En su ópera Tristan e Isolda, Richard Wagner da a conocer los efectos de una substancia que impulsa la Pasión sobre la Razón, retratando su propia historia personal cuando él y Matilde Wesendonk la esposa de su mecenas, caen seducidos apasionadamente tras beber un EXILIR DE AMOR preparado por la doncella Brangane ¿Probablemente la Hormona OXITOCINA? Antonio Damasio. El error de Descartes. La razón de las emociones.

Espacio Claudia Donoso R.

Si analizamos y relacionamos desde la mirada de la pedagogía, algunos de los conceptos presentados en este artículo, podríamos darnos cuenta por ejemplo, en relación al principio físico ACCIÓN-REACCIÓN, la influencia que tienen en las conductas de nuestros educandos los gestos, acciones y palabras que utilizamos como docentes. Por tal razón debemos considerarlo en nuestro desempeño, un gesto o palabra amorosa, de aliento o de esperanza, siempre generará reacciones positivas por parte de nuestros niños y niñas y muy por el contrario, una palabra o acción brusca, solo gatillará inhibición, temor, inseguridad y conductas desadaptativas.

Por otro lado, es importante también, darnos cuenta que debemos cuidar el nivel de estrés en el proceso educativo, pues altera la “homeostásis” tan necesaria para desarrollarse y aprender. No se trata de pensar que tenemos que educarlos en “una burbuja”, si no de creer que según el tipo de ambiente que propiciamos, es como se determina la calidad del aprendizaje, el que debe ser en libertad, en plenitud, con confianza y seguridad.

Para ello, al planificar en nuestras prácticas pedagógicas, debemos considerar los diferentes estilos cognitivos, ritmos de aprendizaje e intereses de las niñas y los niños, sólo así estaremos en sintonía con su biología. Si somos capaces de ofrecer experiencias de aprendizajes diversificadas y no únicamente uniformes y colectivas, seguro se logra.

Finalmente y como última reflexión, deberíamos actuar siempre como lo hace el neurotransmisor Acetil-colina del sistema parasimpático, permitiendo con cariño explícito recuperar en nuestros aprendices, las energías gastadas por situaciones de estrés, lo que es vital para el ser humano, en especial para aquellas niñas y niños que en sus hogares lo viven constantemente.

“Donde no hay amor, pon amor y sacarás amor”.

“Donde hay cortisol, pon oxitocina y generarás oxitocina”

¿OXITOCINA O CORTISOL ES LO QUE SE PERCIBE EN TU PRÁCTICA DOCENTE?

Neurociencias, Arte y Cultura – Noviembre 2011 Dr. Victor Fernández Hidalgo


NUESTROS NIÑOS Y NIÑAS ENFRENTANDO LOS DESAFÍOS DEL ENTORNO. III. EMOCIONES Y SENTIMIENTOS AL AMANECER.

Los circuitos relacionados con las emociones se desarrollan tempranamente “alrededor de los 2 meses de edad, las sensaciones experimentadas por los recién nacidos evolucionan hacia alegría, tristeza, empatía, orgullo, vergüenza etc.,” Madeleine Nash 1997.

Para ayudarlos la estrategia mas adecuada es “entregarles cuidados CÁLIDOS Y CONSISTENTES de modo que desarrollen APEGO SEGURO” Rima Shore. Rethinking the Brain. Es así, como los niños y niñas que tienen la suerte de establecer RELACIONES ENRIQUECEDORAS ADECUADAS CON SUS CAREGIVERS (personas encargadas del cuidado y estimulación cognitiva de nuestros niños y niñas) utilizan dichas asociaciones interpersonales como punto de partida desde el cual se aventuran hacia círculos sociales más amplios mediante CONDUCTAS EXPLORATORIAS. Mary Ainsworth. Infant care and growth of attachment 1967.

Existe hoy consenso en que las experiencias tempranas modelan el potencial genético Kendler and Eaves 1986 (genotype and environment)

El comportamiento PARENTERAL es considerado hoy como el más importante aporte para el desarrollo ontogenético del niño. West and King. Developmental Psychobiology 1987. Dado que, una gran parte de la estimulación temprana es de naturaleza social: La madre constituye el estímulo más frecuente que el niño enfrenta, más aún cuando sus relaciones con el resto del medio ambiente son mediadas fundamentalmente por su madre. Allan N.Schore. Affect regulation and the origin of the self. En consecuencia el apego temprano madre-hijo induce:

I.- Interacciones emocionales face to face y eye to eye con aumento del diámetro pupilar (MIDRIASIS) por acción del neurotransmisor ADRENALINA.

II.- Conductas afectivas mediadas por la OXITOCINA, hormona altamente beneficiosa en términos de salud mental y equilibrio psíquico.

lll.- Activación de conductas LÚDICAS llenas de magia, ilusiones, colores, afectos y ensueños.

IV.- Puesta en acción del Hemisferio Cerebral Derecho (con su sello emocional) que es dominante durante los primeros tres años (Daniel J. Siegel 1999).

V.- Activación de la AMÍGDALA CEREBRAL grupo neuronal que recibe y envía impulsos emocionales junto con las cortezas orbito-frontal y cingular anterior.

ENSEÑANZA: los niños que sufren un apego DESORIENTADO Y DESORGANIZADO presentan más tarde dificultades frente a impedimentos

sociales y cognitivos. Daniel Siegel.1999.


Los docentes de educación inicial debemos conocer y tomar conciencia como nuestra acción pedagógica y las experiencias de aprendizaje que generamos en nuestros niños y niñas son determinantes para el desarrollo cerebral, modelando incluso el potencial genético, mientras más a temprana edad se trabaje.

Por lo mismo tenemos el deber de brindarle a nuestros discentes cuidados cálidos, amables y consistentes, generando ambientes emocionales seguros y enriquecidos, favoreciendo así el APEGO SEGURO tan fundamental para la socialización, a lo que se refiere el Dr. Fernández en este artículo.

Así como la madre genera tempranamente este vínculo, es deber de todo docente de educación infantil también lograrlo, sólo así trascienden los aprendizajes. Debemos siempre ir “desde el afecto a la cognición”.

Algunas estrategias en aula para lograr un apego seguro.

- Poner al niño o niña a la altura de tus ojos para hablarle, generando conexión visual.

- Utilizar un tono de voz cálido.

- Usar un lenguaje afectivo, cercano y empático para comunicarse.

- Generar acciones cariñosas como el “Rito de los abrazos de oso”

- Jugar y reir con tus alumnos/as y disfrutar de ello.

- Cantar, bailar y narrar cuentos incorporando elementos expresivos.

Estas son algunas de tantas ideas que con cariño, sensibilidad y creatividad podemos implementar en nuestro día a día como docente.

Neurociencias, Arte y Cultura – Diciembre 2011 Dr. Victor Fernández Hidalgo


NUESTROS NIÑOS Y NIÑAS ENFRENTANDO LOS DESAFÍOS DEL ENTORNO. IV (DIADA MADRE - BEBÉ).

Existe hoy consenso entre los médicos, neurobiólogos y educadores respecto de la necesidad de proteger el desarrollo afectivo de nuestros niños y niñas. “ Los pediatras están comenzando a cambiar la forma de evaluar a sus pacientes más jóvenes. Además de chequear su desarrollo físico, están ahora involucrándose profundamente en su desarrollo emocional ”(Reading your baby s mind. Pat Wingert and Martha Brant. Newsweek August 2005). Por otra parte se ha observado que durante el período sensible del post-parto (2 primeras horas de vida) es fundamental establecer la relación de apego madre – hijo, el establecimiento del vínculo y el inicio de la lactancia (Marshall Klaus 2000- En:Humanización del Proceso Reproductivo Mujer- Niño-Familia). Ambas publicaciones resultan ser muy relevantes dado que las relaciones entre el individuo y su entorno surgen muy tempranamente, incluso durante la vida intra-uterina. Desmond Morris en su publicación The Naked Ape (1968) señala la posibilidad que el embrión en desarrollo sea marcado por el imprinting del latido cardíaco materno, talvez yo pienso mediado por la vibración de las grandes arterias entre ellas la aorta abdominal. Este imprinting cardíaco pre-natal parece condicionar la tendencia de las madres (ya sean diestras o zurdas) a amamantar a su bebé hacia su lado izquierdo, condición en que en el 80% de los casos el bebé se tranquiliza y concilia rápidamente el sueño debido a la percepción cercana del ritmo cardíaco materno. Un análisis de 466 cuadros de la Virgen y El Niño confirman dicha tendencia al constatar que en el 80% se observa al Niño Dios acogido sobre el costado izquierdo de La Virgen. Desmond Morris.The Naked Ape (1968). Además ver la Virgen y el Cristo Niño en una rosaleda de Stefan Lochner La Historia el Arte. E.H.Gombrich pág. 272.

Entre los aspectos más relevantes en generar afecto por nuestros bebés están sus características físicas juveniles. De acuerdo con Konrad Lorenz las características juveniles descargan “MECANISMOS DE LIBERACIÓN INNATOS” de afecto y protección. Esto fue visualizado y aplicado por “WALT DISNEY PRODUCTIONS” en el rejuvenecimiento del ratón Mickey. En este caso se aplicó un EFECTO NEOTÉNICO que tiene el objetivo de hacerlo cada vez más atractivo a su público. Estos efectos de las formas juveniles pueden ser observados además en obras artísticas como LA VIRGEN DEL PRADO de Rafael Sanzio y por otra parte en el EFECTO DE ATRACCIÓN que ejercen las formas juveniles de gatitos, pollitos, perritos etc., que resultan ser notablemente más atractivos y motivadores que sus formas adultas.

La OXITOCINA hormona del nacimiento, del amor, de los afectos y el apego MADRE – HIJO se administra HOY en forma de SPRAY NASAL en niños y niñas AUTISTAS para mejorar su comunicación y socialización.

Durante el período de máxima sensibilidad se desarrolla un apego progresivo… que se va incrementando día a día... Esta maravilla de la creación explica la sobrevivencia del hombre a lo largo de la historia de la Humanidad, pese a los períodos glaciales, guerras y desastres de la naturaleza… (Dr. Fernando Pinto Laso, Neuropsiquiatría Infantil – Hospital Clínico San Borja Arriarán - Chile)


Con este artículo terminamos la serie 2011 “Neurociencias, Arte y Cultura”. Esperamos haber contribuido con fundamentos desde la mirada de las neurociencias para mejorar tus prácticas pedagógicas, comprendiendo que un docente de Educación Infantil debe conocer cómo funciona el cerebro para adaptar el currículo a cada uno de sus alumnos/as, y no al revés, que sean los alumnos/as quienes se adapten al currículo. De esta forma estaremos hablando de un “Currículum Cerebro Compatible”, respetando ritmos y estilos de aprendizaje, intereses y diversidades de talentos.

No olvides que…

Es fundamental educar de forma congruente entre el gesto, la palabra y la mirada.

Todo aprendizaje va desde los afectos hacia la cognición.

Los ambientes educativos deben ser potenciadores pero amables, cálidos y sin estrés.

El aprendizaje se debe generar en la tridimensionalidad, descubriendo, explorando y observando el entorno y la naturaleza.

El juego, las artes, la música y el humor deben ser parte de la didáctica diaria.

Y por último no olvides…

“Cultivar la Belleza del Arte de educar como Pedagogas de la Ternura”.

Artículos año 2012 (Revista Maestra de Párvulos)

Neurociencias, Emociones y Aprendizaje – Marzo 2012 Dr. Victor Fernández Hidalgo

Educadora Claudia Donoso Rioseco Espacio Dr. Fernández: AFECTIVIDAD Y DESARROLLO TEMPRANO: I.- Los primeros pasos

Aquí pretendo responder la interrogante: ¿Por qué asociar el desarrollo temprano con la emocionalidad y la motivación?

Las relaciones dentro de la DIADA MADRE-BEBÉ son construidas por : 1) Percepciones químicas (quimioreceptores de gusto y olfato, incluso activos durante las fases pre-natales) 2) Estimulación TACTIL AFECTIVA post-natal temprana. Ambas en conjunto están presentes en el desarrollo del APEGO TEMPRANO. Más tarde, en la medida que avanza su desarrollo nuestros bebés comienzan a ser bombardeados por colores, voces, melodías, canciones, luces y arrumacos (demostraciones de cariño hechas con gestos y ademanes) - Diccionario de La Real Academia de La Lengua Española – Como consecuencia de lo anterior se induce un aumento generalizado del tamaño y complejidad de los árboles dendríticos neuronales en la corteza cerebral (Victor Fernández y colbs. Developmental Brain Research 107: 209 - 307 (1998)).

Hoy sabemos que las influencias AFECTIVAS son mediadas por la activación temprana del Hemisferio Cerebral Derecho. Dichas influencias afectivas pueden observarse cuando nuestros niños y niñas inician sus primeros ensayos de comunicación con expresiones llenas de emocionalidad, relacionadas con sus necesidades de sobrevivencia sentimental y bienestar físico. Así, ellos llaman la atención de su madre con sonrisas, arrullos, expresiones faciales o llanto frente a molestias intestinales, hambre, calor, dolor etc. Estos intentos de comunicación siempre se relacionan con objetos, necesidades apremiantes o personas que le inducen MOTIVACIÓN. Así nace primero el BALBUCEO (6 meses) y las primeras palabras al año “MAMÁ, PAPÁ, PAPA”.

A lo largo de su primer año (etapa pre-lingüística totipotencial) nuestro bebé es FONETISTA UNIVERSAL. Posee capacidad de interiorizar e integrar los fundamentos básicos presentes en los diferentes idiomas. Más tarde se transforma en FONETISTA EXCLUYENTE que IMITA las características presentes en su entorno inmediato (especialmente el modelo presente en el lenguaje materno). ¿Por qué con el Lenguaje materno? Por los componentes afectivos que dicha comunicación involucra.

Es con el corazón como vemos correctamente; lo esencial es invisible a los ojos.

Antoine de Saint – Exupéry. El Principito

Espacio Educadora Claudia Donoso R. Definitivamente, la interconexión que se genera entre la estimulación

tactil del bebé con su madre y luego con la educadora que lo acoge en la Sala

Cuna, es clave para el desarrollo de la afectividad y la comunicación. Una docente de este nivel, debe comprender que el trabajo pedagógico se debe basar en ciertas acciones que son determinantes para ello, como: acurrucarlo, acariciarlo, mirarlo a los ojos, hablarle amablemente y con dulzura, cantarle, mecerlo, entre otras, convirtiéndose en percepciones que generan apego y vínculo, lo que el bebé registrará en su cerebro favoreciendo su armonía emocional, seguridad y bienestar, además de iniciarlo en la comunicación. Resulta importante entonces que se incorporen en la jornada de trabajo diario, en especial, en aquellos momentos que permiten la acción conjunta entre “bebé y docente”, como a la hora de llegada y despedida, muda, alimentación y siesta.

¿Habías pensado alguna vez que la calidad de tus intervenciones pedagógicas son determinantes para generar un aumento en el árbol dendrítico de tus niños y niñas? por lo anterior ¿Dimensionas la relevancia que tiene el trabajo pedagógico en estas edades?

Si lo llevamos al desarrollo curricular, no podemos dejar de pensar en cómo generar planificaciones de calidad, que despierten y potencien las facultades latentes de cada uno de los niños y las niñas, y que contemplen la integración de los sentidos, de modo que con colores, sonidos, gestos, palabras. y movimientos, sean capaces de aprender a comunicarse y desarrollarse en plenitud, evolucionando de “Fonetista universal” a “Fonetista excluyente” en sólo unos pocos meses de vida. ¡Qué maravilla!

Te invito a reflexionar con tu equipo docente al respecto, y diseñar una propuesta pedagógica desafiante pero respetuosa de cada uno de los pequeños/as que te confían para su formación como ser humano y para su educación.

A continuación comparto una serie de características que debiera poseer una docente de Sala Cuna, extraídas de un taller realizado con Directoras de Jardines Infantiles de la zona Oriente de Santiago de Chile. ¿Con cuántas te identificas? Amable, dulce y cariñosa Alegre y entusiasta Que sepa cantar y jugar Contenedora Paciente Con armonía emocional Culta Inteligente Con sólidos fundamentos para educar Precavida y cautelosa Intuitiva Con sentido común Criteriosa Experta en primeros auxilios Que sepa observar y escuchar

¡Toda una Profesional!

Neurociencias, Emociones y Aprendizaje – Abril 2012

Dr. Victor Fernández Hidalgo Educadora Claudia Donoso Rioseco

Espacio Dr. Fernández: AFECTIVIDAD Y DESARROLLO TEMPRANO: Il – Período crítico del desarrollo cerebral

Aquí pretendo responder la siguiente interrogante: ¿Por qué es tan importante el período 0 - 3 años?

Uno de los eventos más transcendentes del desarrollo postnatal es la activación temprana del Hemisferio Cerebral Derecho ( Daniel J. Siegel, MD. The developing mind 1999) Sólo después de los 3 años el cuerpo calloso permite transferir información entre los dos hemisferios, tras lo cual el Hemisferio Cerebral Izquierdo comienza a ejercer su predominio Racional y Cognitivo. Dicho Hemisferio CEREBRAL DERECHO requiere la estimulación emocional proveniente del medio ambiente para desarrollarse adecuadamente ( D.J.Siegel 1999). Todo esto es muy importante dado que la EDUCACIÓN INICIAL ES LIDERADA por el mundo de las EMOCIONES. Así, nos vemos obligados a considerar la inplementación de estrategias EDUCACIONALES TEMPRANAS con alto contenido lúdico. Tal cual lo señala el LOGO de la organización “ ZERO to THREE”: para hacer crecer la mente de nuestros niños tenemos que enriquecer su Corazón ( o sea su afectividad).

No olvidemos que en las fases tempranas del LENGUAJE es posible observar el alto contenido emocional del PARENTESE que ofrece sonidos breves y melodiosos. Al respecto Anne Fernald de la Universidad de Stanford afirma que “ el PARENTESE” acelera el proceso de asociar las palabras con los objetos que ellas representan”. A través de dicha estrategia AFECTIVA, este tipo de LENGUAJE SIMPLE Y LLENO DE TERNURA es crucial para que nuestros bebés reconozcan e incorporen los mensajes del entorno.

No olvidemos: Periodo Crítico del desarrollo cerebral 0 - 6 años con su peak a los 3 años. Ventana abierta a las oportunidades a través del despertar de las emociones pero, al mismo tiempo permeable al riesgo y por lo mismo vulnerable.

Analicemos algunos hallazgos de las Neurociencias: A los 8 meses la corteza visual del niño logra el peak de la formación de sinápsis (Huttenlocher 1990), en tanto entre los 3 y 8 años se alcanza el peak del metabolismo de la Glucosa (Chugani y colbs 1987). Estos datos señalan además que el metabolismo cerebral durante el periodo crítico dobla los valores observados en el adulto.

MÁQUINA DE APRENDIZAJE: La más importante máquina de aprendizaje del UNIVERSO es el bebé que está en la Cuna. The Scientist in the crib Gopnik, Meltzoff y Kuhl 1999.

Espacio Educadora Claudia Donoso R.

Como docentes de Educación Inicial, es fundamental saber que los 3 primeros años de vida de un ser humano son determinantes para su desarrollo cerebral, por lo que la formación de educadores de párvulos debiera contemplar un ramo de neurociencias aplicadas a la educación en su malla curricular que forme en este paradigma, sólo así, podríamos lentamente cambiar la mirada que tienen hoy la mayoría de las Salas Cunas, donde el quehacer se centra en actividades de crianza con un afán más asistencial que educativo.

Si se sabe que en los tres primeros años de vida el niño y la niña triplica su capacidad cerebral según la calidad de los estímulos que generan un medio ambiente enriquecido, seguro que la didáctica pedagógica se abordaría con una mirada más potenciadora.

Tal como lo indica el Dr. Fernández, durante este período etáreo el protagonismo para el aprendizaje lo tiene el hemisferio derecho, lo que implica revisar nuestras prácticas pedagógicas al respecto, las que deben estar orientadas a su potenciación. Recordemos para ello parte de la Teoría de Los Hemisferios cerebrales desarrollada por Sperry y colaboradores en 1970, donde señala que el Hemisferio cerebral derecho es memorístico, espacial, sensorial, intuitivo, holístico, sintético, subjetivo y detalla el todo; por lo tanto, potencia la estética, los sentimientos, y es fuente primaria de la percepción creativa.

Lo anterior nos invita a reflexionar sobre el tipo de experiencias de aprendizaje que se debieran planificar en los primeros años en las aulas de educación inicial, las que debieran basarse en el trabajo con la percepción tridimensional y no bidimensional, en contacto con la naturaleza, en el desarrollo de la imaginación y la perspicacia, en la potenciación a través de la integración de las artes donde el color, el sonido, el movimiento y la palabra son sustanciales para el procesamiento sensorial y el desarrollo de la creatividad. A todo ello debe sumarse la contención afectiva, seguridad emocional y amabilidad de los espacios educativos que genere el o la docente, utilizando el juego como estrategia básica.

A lo largo de los periodos “de extrema sensibilidad” (prime times) las influencias ambientales MODELAN LA ARQUITECTURA CEREBRAL que sustentan las FUNCIONES CEREBRALES SUPERIORES:

Predicción Creatividad Aprendizaje

Memoria Lenguaje

Neurociencias, Emociones y Aprendizaje – Mayo 2012

Dr. Victor Fernández Hidalgo Educadora Claudia Donoso Rioseco

Espacio Dr. Fernández: AFECTIVIDAD Y DESARROLLO TEMPRANO: IlI– Lenguaje, creatividad y emociones.

Aquí pretendo responder la siguiente interrogante: ¿Por qué invertir nuestras mejores capacidades, esfuerzos y anhelos en la educación pre-escolar 4 -5 años?

El gran escritor ruso León Tolstoi (1828 -1910) señaló “del niño recién nacido al de 5 años un ABISMO, del de 5 años hasta mi SÓLO UN PASO. Señalando así la enorme capacidad cognitiva del cerebro infantil.

Un estudio retrospectivo de nuestra propia existencia nos recuerda que las primeras vivencias son infinitamente más impactantes y creativas que las más avanzadas. Tal cual lo hemos discutido en los ESPACIOS de Marzo y Abril 2012, Maestra de Párvulos 176 y 177 existe inicialmente un predominio del Hemisferio Cerebral Derecho con intenso componente emocional y creativo ¿Quién de nosotros no se creyó hombre araña, Superman, bombero o piloto de avión? y ¿Quién de ellas no se creyó reina de uno de cuatro reinos sobre el mar? Gabriela Mistral. Todo esto en una etapa en que la cifra de sujetos creativos alcanza su máxima expresión (+ - 90º/º). Esto es evidente en el trabajo autobiográfico de Mark Twain que señala como nuestros niños y niñas expresan tempranamente sus sueños a futuro.

Recordemos que el Hemisferio Cerebral Derecho controla el mundo de la imaginación y de las emociones (frecuentemente empujándonos más allá de la realidad) situación que se expresa sin límites ni restricciones hasta que posteriormente el Hemisferio Cerebral Izquierdo asume el control del razonamiento analítico e intelectual. Es cierto además que el hemisferio izquierdo es el encargado del lenguaje ORAL, ESCRITO Y EXPRESIVO (Wernicke, Broca y CORTEZA MOTORA) pero también es cierto que el hemisferio derecho es el asiento de los componentes emocionales del lenguaje, prosodia, (ritmo y frecuencia).

Resulta importante señalar que el LENGUAJE a pesar de su enorme LATERALIZACIÓN IZQUIERDA incluye numerosos componentes emocionales dependientes del hemisferio derecho, representados a través de expresiones faciales de enojo, odio, amor, sorpresa, satisfacción, felicidad etc…

Nuestros hallazgos científicos confirman las ventajas de la ESTIMULACIÓN – AFECTIVA - COGNITIVA Y CREATIVA al demostrar que los aprendizajes MOTIVADORES (no impositivos, no compulsivos) generan un aumento de la irrigación sanguínea en el cerebro (Victor Fernández y colbs. Developmental Brain Research 1998), además de provocar incremento de las

redes neuronales y sinaptogénesis reactiva, específicamente en las areas de impacto del ambiente enriquecido sobre la corteza cerebral (Victor Fernández y colbs. Growth, Development and Aging 2003).


Este artículo definitivamente nos demuestra que la estimulación de los niños y las niñas en especial en educación inicial, debe ocurrir “DESDE EL AFECTO A LA COGNICIÓN”, es decir desde el “HEMISFERIO DERECHO HACIA EL HEMISFERIO IZQUIERDO”. No hay aprendizaje significativo, entendiendo que este concepto apunta a la trascendencia del mismo, si no aprendemos desde el afecto y la emoción.

Se dice que si logro activar de forma eficiente el hemisferio derecho por medio de un aprendizaje cariñoso, amable, gozoso, lúdico y tridimensional, favoreciendo la imaginación, la curiosidad y la creatividad, se augura por consecuencia también, un exitoso desarrollo del hemisferio izquierdo. En cambio, si en los primeros años enfatizamos en la “INTELECTUALIZACIÓN PRECOZ” fría, distante, abstracta, bidimensional y basada en la transmisión de contenidos, la potenciación del hemisferio izquierdo no será la misma, deprimiéndose además el desarrollo del hemisferio derecho, lo que no tiene reversa y afecta al bienestar, el desarrollo pleno y la felicidad del ser humano.

Lo anterior es vital de considerar por los docentes en sus planificaciones educativas. Es así como en la ruta pedagógica.no se debe centrar el aprendizaje del niño y la niña en experiencias orientadas casi exclusivamente a lenguaje, matemáticas y en menor escala a ciencias. Deben planificarse también experiencias de aprendizajes de música, artes visuales, expresión corporal, deporte, teatro entre otras.

Para resguardar el equilibrio curricular dentro de esta mirada potenciadora de “Currículo Cerebro Compatible”, uniendo además otros aspectos ya abordados en artículos anteriores, se sugiere elaborar un cronograma de experiencias de aprendizaje semanal que esté en sintonía con la planificación y evaluación educativa elaborada por el equipo de docentes. A modo de ejemplo se comparte el siguiente:

Cronograma Experiencias de Aprendizajes

Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes

Yo elijo mi rincón

Yo elijo mi rincón

Yo elijo mi rincón

Yo elijo mi rincón

Yo elijo mi rincón

Despertando Neuronas y

Brindis Saludable con









agua agua agua agua agua

Lenguaje Matemáticas Ciencia Lenguaje Matemáticas

Deporte Artes visuales Música Cuenta cuentos Folclore

Protagonista de la semana

Teatro Biblioteca de aula

Juego Socializador

Cierre Protagonista

Neurociencias, Emociones y Aprendizaje – Junio 2012 Dr. Victor Fernández Hidalgo

Educadora Claudia Donoso Rioseco Espacio Dr. Fernández: AFECTIVIDAD Y DESARROLLO TEMPRANO: IV.- Genes, medio ambiente y emociones.

Es cierto que los genes juegan un rol muy importante dotando a cada individuo de un arsenal particular de predicciones (Rima Shore. Rethinking the Brain) es decir de inclinaciones básicas naturales. Si a la enorme variabilidad de predisposiciones genéticas le agregamos la diversidad de las condiciones ambientales (impacto emocional, factores físicos, sociales y culturales) se alcanza así una singularidad de tal magnitud que cada individuo llega a ser irrepetible (individuo = unidad irrepetible). Diccionario de la Real Academia de Lengua Española.

Hoy día los neurólogos están muy preocupados de las etapas afectivas tempranas por su proyección a futuro. Tan importante es esto que Stanley Greenspan de la George Washington University ha sugerido que las relaciones emocionales tempranas son fundamentales para el desarrollo de los restantes procesos representacionales ( “La creación mental de REPRESENTACIONES nos entrega una visión respecto de cómo la realidad es estructurada por procesos emocionales e interpersonales”. Daniel J. Siegel. The developing mind 1999).

Hoy gracias al impulso de las NEUROCIENCIAS, estamos descubriendo que los efectos de las emociones, sentimientos y afectos tempranos permiten evitar desórdenes psicológicos, depresiones, ansiedades, alteraciones del aprendizaje y autismo (Victor Fernández H. Mundo Montessori Nº7 otoño 2011). Un efecto importante de considerar al respecto fue detectado cuando investigando el problema del DÉFICIT ATENCIONAL se descubrió que los hijos de madres depresivas desarrollaban más tarde DÉFICIT ATENCIONAL

No olvidemos que las FUNCIONES CEREBRALES SUPERIORES (Lenguaje, Aprendizaje y Memoria de largo plazo) encierran importantes componentes AFECTIVOS. El lenguaje que expresa el despliegue del pensamiento incluye emociones, comunicación y cognición. Los contenidos afectivos refuerzan los Aprendizajes, al mismo tiempo que “MARCAN A FUEGO” (imprinting) la Corteza Límbica, el Hipocampo y la Neocorteza cerebral, areas responsables de la RETENCIÓN de la Memoria de largo plazo. Cuando los EFECTOS EMOCIONALES superan ciertos límites la MARCA (IMPRONTA) permanece indeleble por el resto de la vida del sujeto.

“ La niñez es la etapa de la vida donde todos los hombres son creadores” Juana de Ibarbourou.

“ La enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón” Howard G.Hendricks.


Muy buenos días Cristina, ¿cómo amaneciste hoy?, que bueno que viniste, ayer te extrañé… dame un abrazo grande y apretado.

En definitiva comenzar la jornada con palabras, gestos y miradas amables, cálidas y afectuosas referidas a la individualización de cada uno de nuestros niños y niñas, generará emociones positivas en ellos/as, sustrato básico para su cognición.

La prosodia (melodía) de la voz de los docentes debe ser dulce y amorosa, que genere contención, calma y seguridad, encantando a cada uno de sus alumnos/as para el aprendizaje. La motivación afectiva es también clave en ello, sólo así se desarrolla la VOLUNTAD DE QUERER APRENDER. Si un niño o niña no está motivado, será muy difícil que aprenda.

Muchas veces como educadores, nos hemos visto enfrentadas a algún pequeño/a que no quiere hacer nada porque está enojado, triste o con rabia, y si nosotros no nos encargamos de “modular” esa emoción desde el afecto explícito, no se logrará un buen aprendizaje. El rol del y la docente está determinado por su “mediación afectiva” en el aula con cada uno de sus niños y niñas.

Además tenemos que darnos cuenta que estamos dotados biológicamente de la maravillosa capacidad de “Amar”. El ser humano cuenta cerebralmente con el sistema límbico que lo posibilita para emocionarse y sentir, crear vínculos y apego. Es en este punto donde me parece fundamental diferenciar el apego (vínculo) con la conducta de apego. El apego se refiere a la proximidad que se quiere lograr. La conducta de apego en cambio es el comportamiento que desarrolla la persona para lograr el apego. Bolwby (2009), define como conducta de apego “cualquier forma de comportamiento que tiene como resultado el logro o la conservación de la proximidad de otro individuo, claramente identificado, al que se considera mejor capacitado para enfrentarse con el mundo”. Es aquí pues donde los docentes de educación inicial debemos poner el énfasis, pues tal como lo señalan las evidencias derivadas de los estudios iniciales de Bolwby (década del 60) y las más recientes sobre la neurobiología del apego, el “cerebro social” o los experimentos sobre la interacción genético-ambiental, sugieren fuertemente “que el vinculo afectivo que se establece con el principal cuidador en los primeros dos años de vida representa el sustrato para otras tres capacidades que son críticas para las interacciones humanas: confianza, empatía y desarrollo moral”. Todo ello va a repercutir en la calidad de las relaciones interpersonales, en este caso entre tu y tus alumnos y alumnas.

Necesitamos de verdaderas Pedagogas de La Ternura que caminen de la mano, amablemente y con cariño cada día con sus alumnos y alumnas. No basta la transmisión de contenidos si no emocionarse en el aprendizaje, lo que está determinado por el mediador humano que lo genera es decir “TÚ COMO MAESTRO”.

Cualidades de una buena cuidadora que predicen apego seguro (M.Ainsworth 1978)

Atención

Sensibilidad y ternura Responsividad

Regulación afectiva

archivos dr fernandez claudia donoso

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