bendice tu mesa esta navidad
DESCRIPTION
ÂTRANSCRIPT
Bendice tu mesa
¿Cómo utilizar esta guía?
1. Recuerda cuatro fechas importantes: Nochebuena, Día
de Navidad, Día de Año Nuevo y Día de Reyes.
2. Recorta por la línea de puntos la tarjeta
correspondiente a cada día.
3. Imprime tantas tarjetas como comensales tenga tu mesa
y coloca junto al cubierto de cada invitado.
4. Procura que de forma individual todos lean su contenido
y de manera conjunta leáis la oración oportuna antes de
comenzar a degustar los platos.
Advertencia: Puede que esto genere risas y opiniones varias. No pasa nada. La
navidad es alegría y celebración.
CENA DE NOCHEBUENA
¿Sabes por qué esta noche es tan especial para nosotros los cristianos?
Pudiera ser porque gran parte de la gente que quieres se reúne después de largo
tiempo, o bien, porque vas a disfrutar de una deliciosa cena preparada con mucho
cariño, pero sobre todo el verdadero significado de esta noche está en el nacimiento de
Jesús. Su llegada no fue ruidosa y sin embargo llenó de esperanza al mundo entero.
Decide también tú, nacer cada día y renovar tu alma en este tiempo de gracia.
Oración: (TODOS)
Jesús, hoy en el día de tu cumpleaños, te bendecimos y te damos gracias por poder
disfrutar de una cena como la de esta noche. Da pan a los que tienen hambre y
hambre de ti a los que tenemos pan. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Compromiso:
Nosotros que somos unos privilegiados por tener pan, seguro que conocemos a alguien
que no lo tiene, alguien más próximo de lo que imaginamos. No hace falta irse muy
lejos para hacer el bien. Podrías, por ejemplo, compartir algo de tu cena con esos
abuelos que viven solos en tu mismo edificio o llevar un juguete a esa familia numerosa
que tiene tantos hijos. ¡¡Ánimo!!
COMIDA DÍA DE NAVIDAD
Jesús nació una vez hace mucho tiempo y vivió entre nosotros los hombres para
enseñarnos muchas cosas. Hoy sigue vivo en nuestros corazones y por eso lo
festejamos por todo lo alto. Huele a turrón, suena a villancico... Se respira paz y
amor. Y si no es así, ¿por qué no pones tu granito de arena para que tu entorno se
llene de alegría? No importa cuáles sean tus circunstancias. Siempre puedes dibujar
una sonrisa en tu cara y mirar al futuro con ilusión. Recuerda que no estás solo. ¡¡Dios
vive en ti!!
Oración: (TODOS)
Te damos gracias, Padre de bondad, por el alimento que nos regalas y por todos sus
beneficios: a ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Compromiso:
Propón a los tuyos ir a la casa del Señor estos días y vivir una Eucaristía. Llénate de
la alegría de saberse amado y transmítela a todos los que sienten vacío en sus
corazones.
COMIDA DÍA DE AÑO NUEVO
Acabamos de despedir un año para dar bienvenida a otro nuevo. 2015 nos brinda
365 oportunidades para ser aquello que queramos ser. Tener proyectos y objetivos
es necesario para seguir adelante y si además contamos con la voluntad de Dios,
todo resultará más sencillo. ¿Quién mejor para saber qué pasos son los acertados?
Cuenta con Él.
Oración: (TODOS)
Bendice, Señor, los alimentos que vamos a tomar: que nos den fuerzas para hacer el
bien a los demás. Amén.
Compromiso:
Este nuevo año comprométete con la oración personal. Necesitarás de humildad, la
misma que mostraron José y María para recibir a Jesús. Ellos son el mejor ejemplo
de unidad y obediencia para seguir la voluntad de Dios.
ROSCÓN DE REYES
¡Qué curioso! A nuestro niño Jesús fueron a visitarle personas muy singulares:
Pastorcillos y Reyes Magos de Oriente. Desde la sencillez más absoluta hasta la
diversidad más extraordinaria. ¿Qué puede significar?
Oración: (TODOS)
Dios, que nos ha dado para hoy, nos dé para mañana: su gracia y su bendición, salud
para el cuerpo y salvación para el alma. Amén.
Compromiso:
En este tiempo de navidad, seguro que ya has recibido un montón de regalos y
buenos momentos. No te olvides del espíritu navideño para el resto del año.
Cualquier gesto de amor puede servirte. Visita a niños huérfanos, sácale una sonrisa
al más necesitado... Hay miles de gestos, ¿te atreves?
“…No podemos asegurar mejor nuestra felicidad
que viviendo y muriendo en el servicio de los
pobres…”
(San Vicente de Paul)