Texto: Miguel Ángel Mesa Texto: Miguel Ángel Mesa Presentación: M. Asun Gutiérrez.Presentación: M. Asun Gutiérrez.Música: Bach. Concierto para oboe. Adagio.Música: Bach. Concierto para oboe. Adagio.

Felices quienes no aspiran a ver, ni a creer, Felices quienes no aspiran a ver, ni a creer, sino que acompañan, humildemente, con mucho amor.sino que acompañan, humildemente, con mucho amor.

Felices quienes llevan ungüentos, Felices quienes llevan ungüentos,

aromas, vendas y esperanzas aromas, vendas y esperanzas

a quienes esperan en sus tumbas a quienes esperan en sus tumbas

diarias una nueva vida.diarias una nueva vida.

Felices quienes se asombran ante la luz, Felices quienes se asombran ante la luz, de un momento feliz, de un momento feliz, frente a un cielo azul.frente a un cielo azul.

Felices quienes no reconocen al Crucificado, Felices quienes no reconocen al Crucificado, pues se les mostrará diferente, alegre y Resucitado.pues se les mostrará diferente, alegre y Resucitado.

Felices quienes se sienten llamados a subir a Galilea, Felices quienes se sienten llamados a subir a Galilea, al mundo de los que son silenciados en vida.al mundo de los que son silenciados en vida.

Felices quienes avivan Felices quienes avivan su esperanza tocando las su esperanza tocando las

llagas del Resucitado, llagas del Resucitado, aunque antes hayan aunque antes hayan

experimentado el silencio, experimentado el silencio, la incredulidad, la incredulidad, la noche oscura la noche oscura

de la confianza y la fe. de la confianza y la fe. 

Felices quienes ahuyentan las tinieblas, quienes se apresuran para que surja la

aurora, quienes salen de noche y llegan a la madurez del día.

 

Felices quienes contemplan el mar, las montañas, el cielo y se encaminan, a la vez, a la construcción feliz,

humilde, gozosa del Reino.

Bienaventuranzas del Sábado Santo Bienaventuranzas del Sábado Santo Felices quienes no aspiran a ver, ni a creer, sino que acompañan, Felices quienes no aspiran a ver, ni a creer, sino que acompañan, humildemente, con mucho amor.humildemente, con mucho amor.  Felices quienes llevan ungüentos, aromas, vendas y esperanzas a quienes Felices quienes llevan ungüentos, aromas, vendas y esperanzas a quienes esperan en sus tumbas diarias una nueva vida. esperan en sus tumbas diarias una nueva vida.   Felices quienes se asombran ante la luz, de un momento feliz, frente a un Felices quienes se asombran ante la luz, de un momento feliz, frente a un cielo azul.cielo azul.  Felices quienes no reconocen al Crucificado, pues se les mostrará diferente, Felices quienes no reconocen al Crucificado, pues se les mostrará diferente, alegre y Resucitado.alegre y Resucitado.  Felices quienes se sienten llamados a subir a Galilea, al mundo de los que Felices quienes se sienten llamados a subir a Galilea, al mundo de los que son silenciados en vida.son silenciados en vida.  Felices quienes avivan su esperanza tocando las llagas del Resucitado, Felices quienes avivan su esperanza tocando las llagas del Resucitado, aunque antes hayan experimentado el silencio, la incredulidad, la noche aunque antes hayan experimentado el silencio, la incredulidad, la noche oscura de la confianza y la fe.oscura de la confianza y la fe.  Felices quienes ahuyentan las tinieblas, quienes se apresuran para que surja Felices quienes ahuyentan las tinieblas, quienes se apresuran para que surja la aurora, quienes salen de noche y llegan a la madurez del día.la aurora, quienes salen de noche y llegan a la madurez del día.  Felices quienes contemplan el mar, las montañas, el cielo y se encaminan, a Felices quienes contemplan el mar, las montañas, el cielo y se encaminan, a la vez, a la construcción feliz, humilde, gozosa del Reino. la vez, a la construcción feliz, humilde, gozosa del Reino. (Miguel Ángel Mesa)(Miguel Ángel Mesa)