bienestar psicolÓgico en vÍctimas del conflicto …
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BIENESTAR PSICOLÓGICO EN VÍCTIMAS DEL CONFLICTO ARMADO EN
COLOMBIA: UNA REVISIÓN DE LA LITERATURA.
Autora:
Mayra Alejandra Arias
Código: 360358
ASESOR DE INVESTIGACIÓN:
María Catalina Echeverri Londoño
UNIVERSIDAD COOPERATIVA DE COLOMBIA
SEDE CALI
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
2017
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CONTENIDO
1. Planteamiento del Problema………………………………………………….
2. Marco Teórico………………………………………………………………..
3. Justificación…………………………………………………………………..
4. Objetivos……………………………………………………………………..
4.1. Objetivo General…………………………………………………………
4.2. Objetivo Especifico………………………………………………………
5. Diseño metodológico…………………………………………………………
6. Hipótesis………………………………………………………………………
7. Resultados…………………………………………………………………….
8. Conclusiones y Recomendaciones……………………………………………
9. Referencias……………………………………………………………………
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1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
La violencia en Colombia ha dado como por resultado consecuencias devastadoras
en la salud pública, especialmente en la salud mental de los ciudadanos que viven en la
zona urbana y sobre todo en la zona rural, por ello se considera necesario elaborar una
revisión sistemática, que permita evidenciar las diferentes concepciones que se tienen
acerca de la salud mental de las víctimas del conflicto armado en Colombia,
relacionándolos con los conceptos de bienestar psicológico, calidad de vida y apoyo social
percibido.
Para abordar el tema se han desarrollado acciones desde el estado como el programa
de atención psicosocial y salud integral de victimas (Decreto 4800 de 2011) que efectúan
una serie de actividades que tienen como objetivo la promoción e intervención tanto a nivel
individual como colectivo, desde una mirada interdisciplinar; acción dirigida por el
ministerio de protección social de Colombia el cual busca restablecer los derechos como el
bienestar psicológico y calidad de vida, todo ello con el fin de dar a conocer el esfuerzo
institucional para atender a la población que ha sido víctima de la violencia socio política.
Al ser reconocidas las víctimas del conflicto armado en Colombia desde la corte
constitucional se promueve una acción legislativa orientada al abordaje e intervención con
el surgimiento de la ley 1448 de 2011 (ley de víctimas y restitución de tierras), apoyada en
la sentencia T-760 de 2008, la cual reconoce el valor de la vida digna como parte
fundamental de la salud mental desde la percepción del campo psicosomático y
psicológico, tema que se ratifica con la ley 1616 de 2013 desde el principio de
interdisciplinariedad y la universalidad.
Generándose una serie de acciones orientadas desde el Ministerio de Protección
social de Colombia las cuales buscan realizar intervenciones a nivel individual y colectivo
como el programa de atención psicosocial y salud integral a víctimas (PAPSIVI), (Decreto
4800 de 2011) que pretende ejecutar un conjunto de actividades desde una perspectiva
interdisciplinaria, mediante el cual se pretende que haya un restablecimiento de derechos,
tales como: bienestar psicológico y calidad de vida. Lo que permite reconocer que hay un
esfuerzo institucional por atender a la población víctima de la violencia socio política.
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Actualmente se adelanta un proceso de paz que pretende poner fin a la violencia
generada por el conflicto armado con la guerrilla de las FARC-EP. El alcance de dicho
objetivo amerita la construcción de un escenario donde el bienestar psicológico, la calidad
de vida y el apoyo social percibido por parte de las víctimas del conflicto armado del país
es fundamental dado que son variables relevantes que cimentan las bases para los procesos
de perdón.
De acuerdo con algunas investigaciones como la de Campo-Arias, Oviedo y Herazo
(2014) se puede observar la necesidad de profundizar más en el tema del conflicto armado
y sus consecuencias, debido a que son muy pocas las investigaciones realizadas sobre la
salud mental, el bienestar psicológico, calidad de vida y apoyo social de la población
víctima del conflicto armado, temas de suma importancia para entender a fondo toda las
implicaciones que acarrea este fenómeno que no solo afecta de manera individual si no
también colectiva.
Este proyecto surge de la necesidad de realizar una revisión sistemática y conceptual
con bases conceptuales referentes al bienestar psicológico, calidad de vida y apoyo social
percibido, y contextos de investigaciones sobre estudios realizados con víctimas del
conflicto armado en Colombia. Con el fin de aportar al proyecto planteado por la UCC
sobre la relación entre el bienestar psicológico, calidad de vida y apoyo social percibido por
la población víctima del conflicto armado de Colombia, beneficiada por alguna medida de
atención, asistencia y reparación de la ley 1448 de 2011.
Expuesto lo anterior y teniendo en cuenta la situación actual que vive el país frente a
los acuerdos obtenidos, en los diálogos de paz se propone la siguiente pregunta de guía de
investigación. ¿Cómo se ha entendido el bienestar psicológico en aquellas investigaciones
que han enfatizado en las víctimas del conflicto armado, violencia o guerra?
Los resultados que se obtengan al respecto, enriquecerán el marco teórico y
conceptual de los principales temas que se relacionan con la salud mental en las víctimas
del conflicto armado en Colombia. Además de aportar significativamente al panorama en el
que se encuentra nuestro país en aras del fin del conflicto armado con las FARC-EP, con
criterios que esclarezcan el estado actual de las víctimas.
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2. MARCO REFERENCIAL
El presente trabajo, se realizará bajo un enfoque psicosocial, haciendo una revisión
sistemática de la literatura sobre los aspectos de la salud mental en víctimas del conflicto
armado, violencia o guerra; según lo planteado por Garzón, J., Parra, A., Pineda, A. y San
Pedro, J. (2003), los cuatro conceptos cruciales para entender las características del
posconflicto son: construcción, rehabilitación, asistencia humanitaria y construcción de paz,
características que permitirá indagar y conocer más de la parte del bienestar psicológico en
víctimas, violencia y guerra.
De esta manera de se hace una exploración teórica de diferentes redes de
investigación para conocer como se ha formulado y se ha trabajado las diversas formas de
trabajar desde el bienestar psicológico y así verificar desde las diferentes investigaciones
los planteamientos que se han abordado.
Como preámbulo según Ryff (1989), se entiende por bienestar psicológico, que es
un concepto amplio que incluye dimensiones sociales, subjetivas y psicológicas, así como
comportamientos relacionados con la salud en general que llevan a las personas a funcionar
de un modo positivo; según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud mental es
un estado de bienestar en el que se es consciente de las propias capacidades, en relación con
ello, la psicología positiva tiene como objetivo, el estudio de la satisfacción vital, el
bienestar psicológico, el bienestar subjetivo y otras variables psicológicas positivas, así
como el desarrollo de recursos para su cotidianidad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la psicología positiva supone un
modelo orientado a la promoción y el desarrollo personal, complementario del tradicional
modelo patogénico, con base a lo anterior se tiene en cuenta una perspectiva en la que se ha
depositado muchas esperanzas desde el campo de la psicología clínica y la de la salud; su
objetivo se encuentra especialmente en fortalecer lo que para el ser humano es saludable, es
decir, lo positivo, lo adaptativo, lo cognitivo y comportamental, en cuanto a los procesos y
tratamientos que puedan ser llevados a cabo desde el bienestar de cada individuo.
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Se puede entender que el bienestar psicológico está relacionado con la experiencia
personal de cada sujeto, cómo la gente lucha en su día a día afrontando los retos que se van
encontrando en sus vidas y así proyectando modos de manejarlos, aprendiendo de ellos y
profundizando su sensación de sentido de la vida, desde lo individual y social donde
intervienen factores objetivos y subjetivos del sujeto. Por lo tanto Ryff (1939) el modelo de
bienestar psicológico parte desde unos puntos clave para comprender las determinadas
conductas o modelos de personalidad como: ‘‘la autoaceptación, relaciones positivas,
propósito de vida, crecimiento personal, autonomía y dominio del entorno’’. De este modo
el bienestar positivo según Ryff (1939) es un componente clave para construir acciones
funcionales del saber ser, saber hacer de cada sujeto, comprendiendo que es un concepto
amplio que incluye dimensiones sociales, subjetivas y psicológicas, así como
comportamientos relacionados con la salud en general que llevan a las personas a funcionar
de un modo positivo ante cada compromiso y dominio del entorno.
De esta manera se hace referencia o todo tipo de investigación sobre bienestar
subjetivo o bienestar social, se dice que las perspectivas psicológica y subjetiva del
bienestar estudian el mismo proceso psicológico buscando suministrar los diferentes
indicadores. Según Zubieta, E. Muratori, M. Fernández, O. (2011), el bienestar subjetivo
tiene bases más emocionales y se ha abordado a través de temas como la felicidad, la
afectividad o la satisfacción vital, mostrándose en relación de causa y efecto de la
experiencia que la víctima tubo y que impacto dejo desde ese momento, se puede decir que
componente afectivo y cognitivo ha influido y ha generado consecuencias o nuevas formas
de los estados de ánimo, entorno a la calidad de vida de la persona.
El bienestar psicosocial se ha desarrollado a través de las investigaciones de Ryff
(1989) sobre el bienestar psicológico y de Keyes (1998) sobre el bienestar social. ‘‘El
enfoque se ha centrado en el desarrollo personal, en las formas de las personas de afrontar
los retos vitales y sus esfuerzos por conseguir sus metas, así como también en las
valoraciones que hacen de las circunstancias y de su funcionamiento dentro de la
sociedad’’. Son las conceptualizaciones sobre bienestar y calidad de vida, analizando las
condiciones sociales y psicológicas que lo promueven o dificultan, se abordan y analizan
diferentes variables desde el bienestar subjetivo y la política, así mismo enfatizando la
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relación entre las potencialidades del desarrollo y los contextos que promueven una mejor
calidad de vida y un progresos desde el estado de ánimo. Teniendo en cuenta los seis
indicadores que plantea Ryff ‘‘1. La autoaceptación, 2. Relaciones positivas, 3. Propósito
de vida, 4. Crecimiento personal, 5. Autonomía y 6. Dominio del entorno’’.
Por consiguiente en la actualidad se presenta la participación interdisciplinar de los
profesionales que aportan en la mejora de las dimensiones socioeconómicas, sociopolíticas,
socioculturales, con énfasis específico en la contribución de la psicología (social-
comunitaria y clínica), los beneficios que son brindados a las personas pertenecientes e
involucradas en este conflicto, teniendo en cuenta que proceso ha sido dado desde el adulto
mayor, adultos, jóvenes y niños, por tanto, se logra identificar que existen falencias
directamente conocidas por las exigencias del estado y la comunidad, convirtiendo esto es
un factor de foco inmediato, por lo tanto, es necesario conocer dicho objetivo que amerita
investigar y conocer el concepto y la construcción de un escenario del bienestar psicológico
en víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
De acuerdo a lo anterior se debe de tener en cuenta variables relevantes que revelen
las bases para los procesos de perdón, procesos que permiten darle un nuevo horizonte al
ser sujeto y parte de la sociedad, donde permite a la víctima ser capaz de obtener nuevas
decisiones y planes para afrontar con valentía los capítulos dados en un pasado; así mismo
saber cuál es la intervención propuesta por los psicólogos es de desafíos y metas, con el
propósito analizar los resultados de aquellos indicadores concretados por dichos autores y
variables que permitan ejemplificar y dar respuesta a dicha investigación.
Se identifica que la psicología es un mediador relevante dentro del trabajo de
victimas debido que se requiere de una disciplina que logre sumergir las necesidades
identificadas en la comunidad, siendo así se propone que esta sea el facilitador inmediato
de las propuestas alternativas que surgen en los cambios ambivalentes en la planeación y
desarrollo en torno a las necesidades propuestas por cada uno.
Por lo cual es importante conocer que la construcción que se ha ido elaborando y
que está marcado por el componente de bienestar psicológico de la mayor parte de las
situaciones evidenciadas en los recorridos demográficos del país, si bien conocemos que la
sociedad implicada no solo son las víctimas, victimarios, estado, etc.
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De acuerdo con Bravo de Rueda (2006), el estudio de la salud mental estuvo muy
ligado desde sus inicios al concepto de ausencia de enfermedad mental, aspecto que se ha
ido transformando a través del tiempo, dando como resultado la incursión de un modelo
más integral de análisis (a nivel biológico, psicológico y social).
Con base en este planteamiento, la salud mental, según lo planteado por la
Organización Mundial de la Salud (OMS), es el estado de bienestar que permite a cada
individuo realizar su potencial, enfrentarse a las dificultades usuales de la vida, trabajar
productiva y fructíferamente y contribuir con su comunidad (Rondón, 2006). De acuerdo a
lo anterior, la salud mental se crea a partir de los lineamientos de calidad de vida en las
personas víctimas; la salud mental en cada individuo, establece un campo de gran interés
desde sus necesidades de integridad, de equilibrio y de capacidad de ser una persona
productiva a corto, mediano y largo plazo.
Según toda la información plasmada se mostró de forma clara el trabajar con las
personas temas relacionados con el perdón, la reconciliación, los acuerdos como tal y todos
los ejes como acciones que resuelven los actuales conflictos que han sido ejes
fundamentales desde el interés y la necesidad de cada persona.
De acuerdo con datos de la OMS (2003, 2005; citada en Valencia, 2007), ‘‘se
calcula que 450 millones de personas a nivel mundial padecen alguna forma de trastorno
mental, lo cual genera algún tipo de sufrimiento e incapacidad. Alrededor de 121 a 150
millones de ellas sufren depresión, entre 70 y 90 millones padecen trastornos por el abuso
del alcohol o diversas drogas; de 24 a 25 millones sufren esquizofrenia, 37 millones tienen
demencia, un millón de personas se suicidan cada año y entre 10 y 20 millones intentan
suicidarse’’
De acuerdo a los principios de la bioética y preparar el campo propicio para
producir salud mental, se sugiere trabajar según Bravo (2006) los siguientes principios:
Respeto a la persona
✓ Respeto a la vida de la mujer.
✓ Defender su dignidad y su valor como persona.
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✓ Adoptar medidas legislativas que prohíban toda discriminación contra ella.
✓ Eliminar prejuicios sobre su inferioridad.
✓ Suprimir la trata de mujeres y la explotación de la prostitución.
✓ Elección del cónyuge por libre albedrío y matrimonio con pleno consentimiento.
✓ Defender los derechos de la mujer y facilitar su acceso a todos los niveles e instancias
de toma de decisiones.
✓ Defender su derecho a no ser sometida a tratos crueles o degradantes.
Beneficencia
✓ Acceso a alimentación adecuada de acuerdo con los ciclos de vida y condiciones
especiales como el embarazo.
✓ Promover la prevención y un sistema oportuno y de calidad para el cuidado de la salud
de la mujer.
✓ Protegerla durante el embarazo, con atención médica e información sobre planificación
familiar.
✓ Prevenir y erradicar la violencia física, sexual y psicológica contra las mujeres.
Justicia
✓ Igualdad de derechos, oportunidades y responsabilidades, fomentando la redistribución
de roles, en los cuales las mujeres no sólo estén relegadas a lo privado mientras los
hombres dominen en lo público.
✓ Erradicar el analfabetismo y lograr el acceso equitativo y no discriminatorio a la
educación.
✓ Facilitar su acceso a puestos de responsabilidad que ofrezcan la posibilidad de inspirar
las políticas de las naciones y promover soluciones innovadoras para los problemas
económicos y sociales.
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Teniendo en cuenta los principios anunciados por Bravo (2006) y la bioética, el cual
se ha trabajado desde el área de la salud mental de los victimarios, el apoyo de bienestar
psicológico, desde una intervención social, clínica, como transformar y construir nuevos
horizontes desde una mejor calidad de vida en un proceso de identidad, para lograr
desenvolverse en un contexto social, individualista y poder afrontar ciertos conflicto
ciudadanos, permitiendo dejar a un lado la experiencia y cumplir con el deber ciudadano.
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3. JUSTIFICACIÓN
El presente trabajo, tiene como finalidad hacer una revisión sistemática de la
literatura con base al bienestar psicológico en víctimas del conflicto armado, violencia o
guerra. Tiene como objetivo relevante investigar toda información científica que se haya
llevado a cabo con víctimas y entender cueles son las relevancias que contribuyen en las
diferentes serie de datos y así verificar y analizar todo un procedimientos que se ha hecho
desde diferentes autores.
El bienestar ha sido tema de interés de diversas disciplinas y campos de la
psicología y se ha relacionado con la felicidad, calidad de vida y salud mental; de esta
manera se busca saber cómo se ha entendido, conceptualizado el bienestar psicológico
como concepto y que se ha encontrado sobre víctimas del conflicto armado, violencia o
guerra en diferentes lugares de Colombia o del mundo.
Como se ha dicho, se permite contextualizar las diferentes formas de transcender en
manera positiva o negativa frente a la situación del impacto en la vida de las personas,
niños, jóvenes, adultos, ancianos, familias, que luchan por el bienestar y cumplimiento de
sus derechos humanos. No obstante, se investigara bajo un enfoque psicosocial y aspectos
de la salud mental.
Según Sánchez (2008) el conflicto armado viene afectando por más de 50 años la
salud mental y calidad de vida de comunidades e individuos de diversos municipios,
asimismo las investigaciones permitirán ser un soporte conceptual para conocer la unidad
de análisis en las búsquedas de los estudios originales primarios, a partir de los cuales se
pretende contestar a una pregunta de investigación claramente formulada mediante un
proceso sistemático y explícito.
Dado que lo que se pretende es una revisión de la literatura, para saber cómo se ha
entendido este concepto y que se ha estudiado en este, en relación a las víctimas de
violencia, guerra o conflicto armado. Es importante hacer referencia, porque para el
proyecto de investigación grande, es importante el esbozar acerca del bienestar psicológico;
el cual permite tener una literatura actualizada que admita analizar los datos que se
obtengan, ya que para la psicología este proyecto es importante, porque es un concepto que
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ha sido poco estudiado y más aún en victimas de guerra o conflicto, lo que permite
sistematizar lo que se ha propuesto para este concepto en el ámbito de las ciencias sociales
y de la psicología.
De acuerdo con la Fundación Ideas para la Paz y la Universidad de los Andes (2002,
citadas en Gómez Restrepo, 2003), ‘‘estas son algunas consideraciones que se deben tener
en cuenta para la realización del análisis sistemático en la literatura, como:
➢ Cuál ha sido el apoyo a la recuperación del posconflicto, en temas relacionados
con atención humanitaria a las víctimas del conflicto, violencia o guerra, así
conocer por diferentes datos el apoyo a poblaciones desplazadas y de
desmovilización y como se ha explorado desde el bienestar psicológico.
➢ Conocer con base a las diferentes investigaciones los procesos sociales de
perdón y de reconciliación, y fomento del resurgimiento y consolidación de la
sociedad.
De acuerdo en los siguientes puntos mencionados anteriormente, se muestra la
importancia de conocer los diferentes procedimientos y aspectos frente a la reconstrucción
en víctimas, considerando los avances en materia militar y de recuperación del Estado, y las
aproximaciones a acuerdos bilaterales entre el Gobierno colombiano y los grupos armados
al margen de la ley.
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4. OBJETIVOS
4.1.OBEJTIVO GENERAL
Identificar las diferentes perspectivas que se han abordado para comprender el
bienestar psicológico en víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
4.2. OBJETIVOS ESPECIFICOS
▪ Identificar las diferentes investigaciones realizadas sobre víctimas del conflicto
armado, violencia o guerra.
▪ Conocer como se ha entendido las variables correspondientes en las
investigaciones que se han llevado a cabo con víctimas del conflicto armado,
violencia o guerra.
▪ Conocer las diferencias en torno al bienestar psicológico según, genero, etnia,
tipo de afectación de las víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
▪ Averiguar quiénes más han abordado el tema de víctimas del conflicto armado,
violencia o guerra en relación al bienestar psicológico.
▪ Conocer que enfoques teóricos sobre bienestar psicológico han sido trabajados
en la problemática de víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
▪ Enterarse de las diferentes profesiones que han trabajado en el campo en
relación a víctimas del conflicto armado, violencia o guerra y bienestar
psicológico.
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5. DISEÑO METODOLÓGICO
A manera de resumen, podemos afirmar que la investigación científica es la
actividad intelectual dirigida a lograr una respuesta a una pregunta que representa un
problema de investigación. En este caso, interesa dar cuenta de lo dicho e investigado sobre
un tema en particular: el Bienestar psicológico en victimas de conflicto armado, guerra o
violencia sociopolítica, por lo tanto, se revisaran una serie de textos con el ánimo de
recoger de manera pormenorizada y organizada aquellas investigaciones cuyos resultados
den cuenta del tema; de esta manera permitirá plasmar toda la recolección de cada
investigación y artículo en un diseño estructurado donde se ubicara la importancia del
bienestar psicológico en víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
El presente trabajo se desarrolla a partir de metodologías documentales y
experimentadas, a través de la revisión sistemática de la literatura, es decir se hará una
recolección exhaustiva de texto que aborde la temática a trabajar. La revisión tendrá un
paso a paso el cual consiste en la consulta de texto de revistas virtuales, libros, artículos o
trabajos de grado.
Se trabajara buscando los textos en las diferentes bases de datos de diversos países
los cuales cuenten con el objetivo desarrollar el concepto de bienestar psicológico como eje
central el cual mostrara el verdadero sentido de la documentación, siguiendo se tomara el
bienestar psicológico enfocado en víctimas del conflicto armado, violencia y guerra, para
lograr revisar como el bienestar psicológico está presente en la situación de victima por la
violencia y por ultimo encontrar lo elementos principales que podrán dar luz a la actualidad
del bienestar psicológico en victimas basándose en el recorrido histórico del mismo.
Con relación a lo anterior se toma como base el trabajo de Chacón, Herrera,
Villalona (2013) en el evidencian el protocolo para la búsqueda de la información en el
cuadro #3 Fase heurística basado en Kitchenharm (2004), Budgen y Brereton (2006) y Caro
Gutiérrez (2005) divido en tres partes A. Protocolo de búsqueda de fuentes de información,
B. Protocolo de revisión de fuentes de información y C. Valoración de la fase heurística.
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Para organizar la revisión se tomara un cuadro con los tópicos más importantes de
cada uno de los textos, resaltando los autores de primera mano, resumen, objetivos y
contribución retomando algunas ideas del formato de revisión documental cuadro #4.
Cuadro # 3
PRIMERA FASE – BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN
Tema
(Términos)
Bienestar psicológico en víctimas del conflicto armado, violencia y
guerra.
• Bienestar psicológico, victimas, conflicto armado, condiciones de
vida, satisfacción, satisfacción de vida, Colombia, violencia,
guerra, enfoques. Investigación, sistematización, profesiones,
campos de estudio.
Recursos • Bases de datos (Redalyc, Scielo, Proquest)
• Revistas científicas
• Google Académico
• Trabajos de investigación postgrado
• Trabajos de investigación pregrado
• Tesis
• Investigaciones académicas
Estrategia Elegir textos, trabajos, revistas que trabajen sobre los siguientes
apartados:
• Indagación en medio investigativos seguros en los que se logre
abordar el tema con elementos básicos de desarrollo como su
conceptualización.
• Evidenciar enlace con la problemática en la cual se va sumergir y
se va enfocar la investigación, es decir como es el bienestar
psicológico en víctimas del conflicto armado.
• Mostrar la actualidad del concepto, por medio de textos que hayan
trabajado el tema y trasforme los elementos que lo conforman.
• Revisión de autores, campos y profesionales.
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Validación Verificar por medio de la revisión exhaustiva de los textos sobre la
información, incluye planificación y medio usados para la indagación
sobre el tema.
Cuadro #4
REVISIÓN DOCUMENTAL
Datos de revisión
Numero de revisión
Fecha de
diligenciamiento
Elaborado por
Datos de publicación (texto)
Título de la publicación
Fechas de publicación
Autor/es
Palabras claves
Enfoque
Elementos relevantes de la publicación
Resumen
Conceptos
Metodología
Discusiones
Conclusiones
Observaciones
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6. HIPÓTESIS
▪ Se puede encontrar poca información de las diferencias en torno al bienestar
psicológico según género, etnia, tipo de afectación de las víctimas.
▪ Se encontrara suficientes investigaciones alrededor del tema de víctimas.
▪ A partir de las diferentes investigaciones, se lograra encontrar las variables
correspondientes en torno al bienestar psicológico según género, etnia, tipo de
afectación de las víctimas.
7. RESULTADOS
BIENESTAR PSICOLÓGICO
Como preámbulo se brindará una descripción general de la revisión sistemática de
la literatura que se realizó frente a las investigaciones de bienestar psicológico en víctimas
del conflicto armado, violencia y guerra. Partiendo así, permitirá al lector conocer la labor
de los trabajadores de las ciencias sociales y de las ciencias de la salud en pro de la solución
y la reparación de la salud mental en víctimas.
Por lo tanto, durante la exploración investigativa, se abordaron treinta y cinco
artículos que hablaron sobre los procesos de reparación en la salud mental en víctimas, de
acuerdo con las investigaciones se seleccionaron trece que referían las tareas elaboradas
sobre procesos de reparación específicamente en lo concerniente al bienestar psicológico,
así mismo permitiendo conocer las dificultades que se han desarrollado o abordado en pro
de la reconstrucción del tejido social, reconciliación, la garantía de sus derechos y deberes.
Se ha registrado en las investigaciones seleccionadas, que los procesos de
reparación, acciones en pro de la verdad y la justicia, han sido ignoradas por parte del
gobierno, lo que conlleva a la inhibición o retroceso del bienestar psicológico y de otra
índole de las víctimas.
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Disciplinas que han abordado el tema del Bienestar psicológico en victimas
Dentro de las disciplinas que han abordado el tema del bienestar psicológico en
víctimas, se encontraron las siguientes:
Teniendo en cuenta la gráfica se puede evidenciar que la mayoría de los trabajos
han sido realizados por psicólogos, eso apunta a que el tema del bienestar psicológico sigue
siendo asunto de los psicólogos, al igual que el tema de la salud mental. Circunscribiendo a
esta a un tema individual y no tanto social; sin embargo, el tema del bienestar psicológico,
también ha empezado a ser reportado en los últimos años como un tema en el que los
psicólogos se involucran en un trabajo interdisciplinar con otros profesionales como
abogados, educadores, médicos, entre otros. Lo que empieza a mostrar que estos temas
relativos a la salud mental se empiezan a complejizar y a considerar desde esquemas más
biopsicosociales.
Fuente: Propia.
Conceptos y teorías con las que se ha abordado el bienestar psicológico en relación con
las víctimas del conflicto armado, guerra o violencia.
La búsqueda de mejores niveles de bienestar y significación es una aspiración
fundamental de la humanidad y obviamente del propio trabajo de las ciencias sociales.
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Nuestra profesión ha procurado siempre contribuir a la mejora de las condiciones de la
población. Sin embargo, el énfasis se ha puesto en combatir el malestar de las víctimas, de
modo que el foco de interés ha estado centrado en la detección y tratamiento de los
problemas, déficits, disfunciones y enfermedades de los individuos y del tejido social.
Desde hace unos años, no obstante, comienza a tomar cada vez más importancia un
planteamiento más relacionado con las fortalezas, las capacidades, las potencialidades y los
recursos que se pueden adquirir por el esfuerzo y la autoayuda de las víctimas y
victimarios. Así mismo se logra conocer algunos conceptos que durante las investigaciones
en las ciencias sociales y de la salud, se han tenido presentes para el abordaje de ciertos
fenómenos que afectan la calidad de vida de las personas, como lo es el concepto del
bienestar psicológico. Este ha sido abordado desde dos tradiciones que impactan en las
diferentes exploraciones sobre el bienestar en víctimas, una sobre tradición hedónica y
tradición eudaimonica.
Como se ha dicho, muchos de los autores de los artículos investigados retoman esta
definición e intentan incorporarla para entender bien lo que sucede con la víctima, ya que
ellos consideran que al trabajar con víctimas, parafraseando a Ryan y Deci (2001) & Ryff
(1989), se debería retomar la definición de bienestar entendido ‘‘como el esfuerzo por
perfeccionarse y la realización del propio potencial’’. Se han dado, a lo largo de los años de
la tradición sobre el bienestar, dos grandes visiones o tradiciones:
➢ Tradición eudamonica: abordar el bienestar desde el potencial humano.
➢ Tradición hedónica: abordar el bienestar desde el concepto de felicidad.
Es decir, desde el concepto de felicidad-bienestar hedónico, y el bienestar como el
desarrollo del potencial humano-bienestar eudamónica, intentan establecer límites que
permitan contribuir a una mejor calidad de vida y nuevos recursos que les permitan obtener
una estabilidad emocional dentro del proceder como persona.
Por lo tanto, en la tradición sobre el estudio del bienestar, se han tenido dos visiones
y al parecer en los trabajos analizados se retoma más la visión eudaimonica, siempre
abordando el bienestar desde el potencial humano. Sin embargo, se evidencia que en la
mayor parte de los artículos investigados más recientes, los autores que hablan del
bienestar, a pesar que resaltan la importancia de la tradición eudaimonica, se centran en
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resaltar ambas convicciones desde las diferentes posturas, ya que ambas resultan
importantes para que el individuo afronte las circunstancias vividas, así mismo, se vincula
dicha tradición para establecer una definición de las proyecciones que se han ido
incorporando en el sujeto.
Así mismo, Diener (2000) ve el bienestar como, bienestar subjetivo – tradición
hedónica, lo cual busca incorporar categorías que permitan seleccionar potenciales que sean
útiles para su bienestar o conocer dificultades internas que le permitan juzgar hechos
ocasionados por si mismos o de los demás, terminando en la medida de aceptarse como
persona o desertar a la vida que lleva y a los nuevos proyectos que se pueden construir
como evaluaciones cognitivas y afectivas que hace una persona entorno a su vida.
Podemos decir que Diener (1994), resalta tres elementos característicos como: el
carácter subjetivo, el cual siempre está ligado a apoyar las experiencias de las personas, su
contexto social, cultural, económico, familiar, emocional, etc. Así mismo realizando
opiniones o evaluaciones sobre su calidad de vida, con el fin de incrementar medidas
positivas sobre los factores negativos.
Las categorías según Diener (1995) se pueden agrupar en torno a tres grandes
bloques:
1. ‘‘La primera describe el bienestar como la valoración del individuo de su propia
vida en términos positivos. Esta agrupación es la relativa a la “satisfacción con
la vida”.
2. ‘‘Una segunda categoría incide en la preponderancia de los sentimientos o
afectos positivos sobre los negativos. En este sentido, se entiende que una
persona es más feliz cuando en su vida predomina la experiencia afectiva
positiva sobre la negativa’’.
3. La tercera concibe la felicidad como una virtud o gracia. Las definiciones bajo
esta última perspectiva se pueden considerar normativas, ya que no se
contempla como un bienestar subjetivo sino más bien como la posesión de una
cualidad deseable (Coan, 1977).
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AFECTO
POSITIVO
AFECTO
NEGATIVO
SACTISFACCIÓN
CON LA VIDA
DOMINIOS DE
SACTISFACCIÓN
➢ Alegría
➢ Euforia
➢ Satisfacción
➢ Orgullo
➢ Cariño
➢ Amor
➢ Felicidad
➢
➢ Culpa y
vergüenza
➢ Tristeza
➢ Ansiedad y
preocupación
➢ Enfado
➢ Estrés
➢ Depresión
➢ Envidia
➢ Deseo de
cambiar su
estilo de
vida
➢ Satisfacción
con la vida
actual
➢ Satisfacción
con el
pasado
➢ Satisfacción
con el futuro
➢ Satisfacción
de como
otros ven
nuestra vida
➢ Trabajo
➢ Familia
➢ Ocio
➢ Salud
➢ Ingresos
Fuente: Diener, Lucas y Smith (1999)
Por otro lado, desde la tradición eudaimonica se ha hablado del bienestar psicológico;
este es un concepto amplio que incluye dimensiones sociales, subjetivas y psicológicas, así
como comportamientos relacionados con la salud que en general llevan a las personas a
funcionar de un modo positivo.
Aristóteles define la felicidad (del griego eudaemonia) en su obra “Ética a
Nicómaco”, como los sentimientos que acompañan a un comportamiento en una dirección
consistente con el desarrollo del verdadero potencial. Según Aristóteles la verdadera
felicidad se encuentra en la expresión de la virtud. Este término no designa, por tanto, un
estado de satisfacción pasajera, sino el conjunto de una vida lograda.
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En algunas investigaciones el bienestar psicológico es entendido desde la postura de
Carol Ryff (1989) como el esfuerzo por perfeccionarse y la realización del propio potencial,
en el cual se conceptualiza como el énfasis de poder lograr expresar sus emociones y
proceder a nuevas experiencias y nuevos proyectos de vida, también considerando las
emociones negativas como algo de lo que hay que librarse. Esta definición viene
acompañada de 6 componentes que son:
1. Auto aceptación: Cuando las personas intentan sentirse bien consigo mismas.
2. Establecer relaciones positivas: Basadas en confianza mutua y empatía.
3. Autonomía: Cuando pueden regular su conducta frente a las circunstancias y
poder tomas conciencia y ante las situaciones de toma de decisiones.
4. Poseer un propósito de vida: Plantearse metas y proyectos, sea a corto a
mediano y largo plazo, para la planificación y estructuración de nuevos
objetivos de vida.
5. Poseen crecimiento personal: Empeño por desarrollar sus potencialidades.
6. Dominio del entorno: Hacer referencia de las exigencias y oportunidades del
ambiente para satisfacer sus necesidades y capacidades.
Algunos otros toman el bienestar psicológico desde la postura de (García, V. &
Gonzáles, B. 2000, p. 217) ‘‘el sentir positivo y el pensar constructivo del ser humano
acerca de si mismo’’ se relaciona estrechamente con aspectos particulares del
funcionamiento físico, psíquico y social. Así mismo el bienestar psicológico se enfoca en el
desarrollo de las capacidades y el potencial humano como elementos característicos de un
funcionamiento positivo.
Para González – Méndez (2005) ven el bienestar psicológico como la postura que
adquiere el ser humano para crear y organizar criterios desde su propia postura, donde le
permita autorregularse y tomar sus propias decisiones ya que en sus contextos sociales,
familiares y laborales puede emprender nuevos retos con una condición diferente, teniendo
en cuenta, el constructo del mejoramiento que se ha alcanzado en su situación emocional,
físico y social.
23
De esta manera el bienestar ha sido concebido por componentes que integran las
tradiciones, según Díaz (2006) eudamonica como: ‘‘Bienestar psicológico’’ y hedónica
como: ‘‘Bienestar subjetivo’'; con esto se interpreta que el bienestar psicológico está
asociado al funcionamiento positivo y al disfrute de la salud integral, buscando alternativas
de autoayuda, autorregulación y una continua prevalencia por el bienestar de las emociones
y el crecimiento emocional de las personas víctimas del conflicto armado, quienes en su
momento decaen desde su autoestima y no buscan fijarse en el desarrollo de la superación,
por lo tanto la tradición eudamonica lo que explora en cada individuo es abordar el
bienestar desde el potencial humano, y la tradición hedónica indaga sobre el bienestar desde
el concepto de prosperidad, alegría y satisfacción.
Cabe decir que en los estudios del bienestar psicológico subjetivo en la formación
científica del bienestar surge a finales del siglo XX, a partir de entonces aparece unos
legados de Plantón, Aristóteles, Confucio, Seneca, entre otros; el cual definen el concepto
desde la antigüedad de bienestar como: “vida buena”, la “vida virtuosa” y el “cuidado del
alma”.
Durante el siglo XX se ha venido discutiendo el tema de bienestar psicológico y
bienestar subjetivo ya que se han encontrado con controversias para la estructuración de las
diferentes posturas y temáticas que nos permiten unificar y complementar las necesidades
de los distintos contextos de aprendizaje y desarrollo psicológico; según Salotti, Díaz,
Cuadra y Florenzano, (2006) estas controversias han girado históricamente en torno a los
siguientes aspectos:
1. Realizan una discusión ya que descubren en las investigaciones psicológicas que
abordan el bienestar como sinónimo de ‘‘calidad de vida”, “felicidad”,
“funcionamiento positivo” “auto-concepto”, “locus de control interno”, “salud
mental”, “resiliencia” y “motivación”, cuando separan de tener el mismo significado
y la misma función para cada individuo Ballesteros (2006).
2. García, Viniegras y López, (2000) cuestionan la especificación de las definiciones
que hacen frente al tema y la comparación del “bienestar subjetivo” y “bienestar
psicológico” lo cual, separan los significados y las funciones una de la otra, cuando
24
las dos se relacionan en ‘‘bienestar’’ y su función hace parte del orden en cómo se
prioriza y se construye la aptitud en pro de un continuo proceso de cambio.
3. Diener, Cuadra y Florenzano (2003) están en desacuerdo con la existencia de las
tradiciones de Ryan y Deci (2001) que permiten definir el bienestar como una
tendencia hedónica – conocido como bienestar subjetivo y una tendencia
eudamonica – como el bienestar psicológico.
4. Para algunos autores como García, Viniegras y López (2000) ven el bienestar
psicológico como la estructura que permite al ser humano obtener una condición de
superarse así mismo, teniendo en cuenta la experiencia obtenida y a partir de eso
como planifica desde su interior y sus potenciales a destacar nuevos proyectos para
desenvolverse ante la sociedad con unas conductas pertinentes y que le generen así
mismo una estabilidad emocional. De esta manera, González, Montoya y Bernabéu
(2003) ven el bienestar como ‘‘bienestar subjetivo’’ como sinónimo de ‘‘sentirse a
gusto consigo mismo’’ lo que permiten elaborar una conclusión de que el sujeto está
en condiciones de actuar y planificar nuevos proyectos a corto, mediano y largo
plazo, ya que desde su nivel cognoscitivo, afectivo y emocional están preparados
para enfrentarse nuevamente a las diferentes áreas contextuales de vida.
5. Otra cuestión es el interés por diagnosticar o encontrar algún tipo de trastorno que
se logre evidenciar en la victima y dejar de un lado algunos elementos de la salud
psíquica de la persona, que en el momento pueden ser de mayor importancia.
De esta manera, se puede decir que el Bienestar psicológico es el ''sentirse positivo
y el pensar constructivo del ser humano acerca de si mismo''(p.217) se define por su
naturaleza subjetiva vivencial y que se relaciona estrechamente con aspectos particulares
del funcionamiento físico, psíquico y social; así mismo el Bienestar subjetivo es aquella
categoría que utiliza una persona para juzgar de un modo general o global su vida, es decir,
en qué medida la persona está a gusto con la vida que lleva y busca estar bien consigo
mismo, para obtener un movimiento correlativo de las actividades que desea emplear.
25
Principales hallazgos en relación al Bienestar psicológico y/o Bienestar Subjetivo en
personas que han sido víctimas de conflicto armado y/o situaciones de violencia.
En las investigaciones revisadas, se encuentra que en general las personas que han
atravesado algunas situaciones límite como lo son el conflicto armado y/o situaciones de
violencia política o guerra, al ser evaluadas en su Bienestar psicológico y/o Bienestar
subjetivo se encuentran en niveles medios y altos. Esto contrasta, dadas las situaciones que
han atravesado.
En relación al Bienestar psicológico, se ha encontrado que algunas de las
dimensiones evaluadas que puntúan en niveles altos son las relativas a auto-aceptación,
dominio del entorno y propósito de vida. Esto demuestra que las personas que han sido
víctimas tienen actitudes hacia ellas mismas y se sienten bien con su pasado y con las
consecuencias que les trajo a su presente según (Keyes, 2002. Citados por Díaz, Rodríguez,
Blanco, et al., 2006). Esto quiere decir que las personas a pesar de las circunstancias
vividas anteriormente, logran ver el pasado como un efecto positivo, el cual les permite
reintegrarse y traer consigo mismo nuevos potenciales de lucha, esfuerzo y progreso por el
BIENESTAR SUBJETIVO PSICÓLOGICO
Para Csikszentmihalyi (2005) ‘‘estar y
sentirse bien con la vida es un estado
psíquico y por lo tanto subjetivo relacionado
con la felicidad, la cual se define de dos
maneras distintas según sea la dimensión
temporal en que tiende a contextualizarse’’.
Fierro (2000) ‘‘asocia el bienestar psicológico
con el potencial o la posibilidad activa de “bien-
estar” y “bien -ser” entendida como una
disposición a cuidar la propia salud mental de
modo que la persona responsablemente puede
crear vivencias positivas o experiencias de vida
feliz estando consciente de ello’’.
Un potencial
innato
Un potencial
adquirido
Un potencial
modificable
Es concebido a partir de:
Fuente: Propia. Para el BPS es considerado desde la obtención de información y aprendizaje durante los procesos de
experiencia y así mismo tener autocontrol y auto-cuidarse en los trascursos de modificación de su vida.
26
crecimiento personal de cada uno de ellos, siempre enfocada hacia las nuevas experiencias
y oportunidades que la vida puede presentarles.
Lo anterior, permite a las personas generar un interés por cumplir metas y tener
sueños; quizá esperando que el futuro sea algo mejor, por lo cual giran en torno al logro de
sus objetivos sin dejar de lado sus valores’’. (Casullo, 2002, p.46). Es prudente resaltar que
en la mayoría de las investigaciones este ítem fue alto casi en todos, permitiendo reconocer
que las personas encuentran motivos para el crecimiento personal, a través de buscar y
hallar el propósito de vida, de desarrollar habilidades internas.
Este hecho de sentir la posibilidad de soñar y proyectarse incide fuertemente
también en que las personas víctimas sienten que pueden Dominar el entorno, es decir;
pueden hacer un uso efectivo de las oportunidades que les ofrece su entorno y son capaces
de crear o escoger entornos que encajen con sus necesidades personales y valores.
De igual manera, en la mayor parte de las investigaciones revisadas algunas
dimensiones del Bienestar Psicológico resultan en niveles medios e incluso bajos. En
común acuerdo, se tiende a reconocer que a las personas víctimas de situaciones de
conflicto y/o violencia política, tienen una capacidad moderada para mantener relaciones
estrechas con otras personas, basadas en la confianza mutua y la empatía. Castro (2000).
Este resultado indico que las personas tienen consecuencias para relacionarse asertivamente
con los otros y poder formar redes acuerdos e ideas con el fin de restaurar soluciones por
medio de la comunicación. Lo que resulta congruente con los mecanismos de quiebre de la
confianza y del lazo social comunitario, que son usados por los grupos armados.
En relación con lo anterior, la dimensión sobre autonomía se encontró como poco
desarrollada en la mayoría de las investigaciones, lo cual está refiriendo que las personas
no se sienten completamente capaces de influir en el mundo y desarrollarse como personas,
autorregularse y mantener su posición ante la presión social. (Ryff & Keyes, 1995. Citados
por Díaz, Rodríguez, Blanco, 2006). Lo cual muestra las profundas heridas que sobre la
capacidad para hacer elecciones, tomar decisiones y asumir las consecuencias de las
mismas, ha dejado el conflicto armado y/o la violencia política; la cual parece anclarse
sobre la polarización y el comando de la vida cotidiana en algunos territorios
27
De igual manera, y asociado a la dificultad para sentir autonomía el crecimiento
personal también se encontró en niveles medios, por lo cual se puede decir que si bien las
personas buscan activar su potencial interno para que les permita crecer y sentirse bien en
el momento en el que están viviendo, puede que exista cierto temor por el futuro y por las
circunstancias postconflicto, que altera el estado de ánimo y los hace recaer o tener
sentimientos negativos.
Frente a aquellas investigaciones que evaluaron o abordaron el bienestar subjetivo,
también se encontraron algunos resultados comunes. Entre estos se rescata que en relación
con indicadores relativos a la “satisfacción con la vida” en las investigaciones se muestra
que la mayoría de las personas refieren estar satisfechos con la vida, lo que se evidencia en
la capacidad de tener metas, por la posibilidad de vivir nuevas experiencias y
oportunidades, por la oportunidad de un nuevo inicio.
De igual manera, ante el afecto positivo que experimentan las personas este es el
que se va más afectado en las personas que han atravesado alguna situación de conflicto
armado y/o violencia. Ya que las personas pueden de manera baja reconocer en sí mismas
emociones y sentimientos como: la alegría, el buen humor, el optimismo, el entusiasmo y el
amor, entre otras.
Y frente al Afecto negativo, categoría que casi siempre está ligada a la duda, el
miedo, los temores, la ansiedad, con el que tiende a sentirse la persona a la resolución de
ciertos conflictos internos y sociales. En este sentido, está por lo general resalta en la
mayoría de las personas, evidenciando así un malestar emocional. Sin embargo, es
importante referir que esta puede verse neutralizada por las capacidades que tienen las
personas, como la satisfacción, el propósito de vida, la sensación de ser capaz de seguir las
oportunidades que el medio brinda.
Algunas de las investigaciones encontradas, que se permiten medir o tener en cuenta
tanto el Bienestar psicológico, como el Bienestar subjetivo en víctimas, han encontrado que
variables como la autoestima, anomia, fatalismo entre otros, se relacionan ampliamente con
estos dos conceptos BP y BPS.
28
Se puede decir que la autoestima es de mayor importancia en la superación de la
persona, ya que permite conocer como las víctimas han podido incorporar las adversidades
que se han presentado en el trascurso del tiempo y a raíz de la eventualidad, lograr tener
solidez y estabilidad emocional para conseguir nuevos recursos y plantearse nuevos
proyectos de vida. Los resultados según Abello, Amaris, Blanco, et al (2009) ‘‘la
autoestima va ligada a la satisfacción que las personas tienen por la vida, el auto concepto y
el afecto positivo con el que ven la vida’’.
Otros conceptos y teorías relacionadas con el Bienestar psicológico en víctimas del
conflicto armado, violencia o guerra.
En varios de los estudios encontrados que miden bienestar psicológico y/o
subjetivo, se logra apreciar que para los autores fue importante medir también el bienestar
social. Dado que, algunos de ellos hacen uso de los planteamientos de Keyes (1998) y
Blanco y Díaz (2005), cuando refieren que el bienestar subjetivo-psicológico; o esas
posibilidades que tienen las personas de ser felices, planear su vida y hacer frente a las
circunstancias adversas no se hacen en el vacío, “sin un tejido en el cual pueda
referenciarse, debido a que éste no puede abstraerse de la realidad y mucho menos
olvidar el contexto social en el que se encuentra inmerso” (Keyes 1998, p. 122). Para
ampliar un poco más la idea, vale proponer lo expuesto por Keyes (1998) quien menciona
que las dimensiones de los tres tipos de bienestar: Bienestar psicológico, bienestar
psicológico subjetivo y bienestar social, son los criterios que componen un nuevo modelo
de salud mental.
Para definir bienestar social, es importante remitirse a quien ve el bienestar como
social y lo define como “la valoración que hacemos de las circunstancias y el
funcionamiento dentro de la sociedad” (Keyes 1998, p. 122), de esta manera adquiere unas
dimensiones como:
1. Integración social: es la evaluación de la calidad de las relaciones que
mantenemos con la sociedad y la comunidad.
29
2. Aceptación social: implica el disfrute por pertenecer a la sociedad en cuanto a la
aceptación y confianza de otros.
3. Contribución social: como creencia de que se tiene algo útil que ofrecer al
mundo.
4. Actualización social: se centra en la concepción de la sociedad y las
instituciones que hacen parte de esta, se conduce en la dirección a lograr metas y
objetivos.
5. Coherencia social: consiste en la concepción de la cualidad, organización y
funcionamiento del mundo social e incluye la preocupación por enterarse de los
que pasa en el mundo.
Lo referido anteriormente, permite adentrarse a los resultados obtenidos en las
investigaciones que realizaron en Barranquilla, Colombia por Abello, Amaris, Blanco, et al
(2009) la cual buscaba conocer como estaba el bienestar en relación con la depresión,
autoestima y anomia, y así analizar en qué medidas estas variables afectan o no al bienestar
y sus dimensiones: Bienestar psicológico (BP), Bienestar psicológico subjetivo (BPS) y
Bienestar Social (BS).
Para adentrarse al tema, basta referir que la anomia se manifiesta a través del estado
de desorganización que presentan los individuos frente a su entorno social o el aislamiento
que se muestra como consecuencia de la falta o la incongruencia de las normas sociales.
Según Abello, Amaris, Blanco, et al (2009) las personas “se mantienen distantes ante los
demás, conservando sus esperanzas en ellos mismos y en el mundo que les ha tocado vivir,
pero sin dejar de lado sus individualidades” (p. 459). Así mismo resaltan a partir de lo
explorado que estas condiciones dependen de tanto procesos sociológicos como
psicológicos.
Con base a los resultados, se identifica los resultados que se obtuvieron frente a las
categorías del bienestar social las personas víctimas del conflicto. Dentro de las
dimensiones de la categoría, las personas víctimas refieren buenos niveles de Integración
social, lo cual se puede interpretar como una forma de mantener una posición neutra en
30
referencia a calidad de las relaciones que mantienen con la sociedad y con la comunidad, lo
que refleja un nivel de asertividad en las relaciones sociales.
En relación a lo anterior, las personas víctimas parecen tener una actitud importante
y positiva frente a la resolución de problemas, entienden que para ellos poder continuar con
un proceso asertivo en sus vidas debe empezar con las relaciones que se tejen con los otros,
aceptarse a sí mismos y a adaptarse a los otros, por lo cual se considera que hay una buena
Aceptación social.
Frente a este buen panorama, hay otras dimensiones del bienestar social que no
parecen estar en tan buena condición. En este sentido, frente a la contribución social parece
que las víctimas aclaman por la resolución de sus necesidades básicas y en búsqueda de un
saber especializado que les permita cambiar o mejorar la situación que predomina en su
cotidianidad, con el objetivo de lograr una intervención clara y eficaz para mejorar las
condiciones de vida.
En relación al anterior, las victimas frente a la actualización social, se ven en
condiciones de adquirir nuevas posibilidades de crecimiento y desarrollo en los contextos,
en las que puedan buscar formas para sentirse contribuidos por la justicia, prevención,
atención y reparación integral, dado que parecen no sentirse plenos con ello en sus
condiciones actuales – justo después de que los grupos salieran del territorio-.
En este sentido, un clamor constate de las personas víctimas que surgieron en las
investigaciones que midieron y evaluaron bienestar social, es que estas esperan soluciones
de reparación integral y acciones de responsabilidad por parte del gobierno y la justicia, con
el fin de que sean escuchadas sus necesidades y peticiones, se puedan ver como sujetos
activos de derechos por ese otro que los ha invisibilizado, en este sentido es un sentir
constante la baja coherencia social por parte de las personas víctimas, justo después de que
los grupos se han retirado de sus territorios.
Alteraciones que ocurren en la salud mental y que no permiten un bienestar psicológico
en las víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
31
Para poder observar o analizar el bienestar psicológico, fueron usados otros
conceptos y herramientas metodológicas que permitieran conocer elementos actitudinales,
por lo tanto se establece que el bienestar psicológico puede ser analizado o visto en las
creencias, las actitudes, el lenguaje, el contexto sociocultural y los rasgos de personalidad;
así mismo los procesos de adaptación y superación han sido observados desde las acciones
de resistencia, las nuevas formas de vivir. Lo anterior, para poder tener en cuenta los
factores socioculturales y de creencias.
Según Triandis (1994) todo factor social o de creencias esta combinado con las
tendencias del individualismo y colectivismo. La tendencia del colectivismo se ve reflejada
en el cumplimiento de las normas y el desempeño que se obtiene de cada contexto social,
familiar, educativo o laboral. Y, en la tendencia del individualismo busca dar prioridad a
las propias necesidades y planes. En este transcurrir, ambas tendencias impregnan el
bienestar psicológico, subjetivo y social, en últimas la salud mental, así como sus
alteraciones.
Por lo tanto, se ve necesario hablar de las alteraciones ya que se conoce las
diferentes posturas que son expuestas del BPS o el BP, así mismo en las investigaciones se
halló, que los adolescentes expuestos a vivenciar toda la esfera de la problemáticas del
conflicto armado, violencia y guerra, inician el consumo de SPA y el consumo del alcohol.
Según Juárez, Baños, Guerrero, et al (2016) de acuerdo a las investigaciones se dice que
hay más probabilidad de que las alteraciones o traumas se vean reflejados en las victimas
de una edad temprana, como la niñez, así mismo acarrean con secuelas que los impulsa a
tomas decisiones inadecuadas entre esas, el consumo de sustancias psicoactivas.
Según los resultados presentados por Juárez, Baños, Guerrero, et al (2016), se
expone que en ‘‘el cuestionario de síntomas SRQ (cuestionario de síntomas para niños) se
observa que el 84.6% de la población presenta síntomas de psicoticismo, específicamente el
sentimiento de que alguien trata de herirlo o hacerle daño de alguna manera, lo que está
relacionado con la vivencia real de las situaciones violentas a causa del conflicto armado, y
el 34% presenta el comportamiento de consumo de alcohol, así mismo el mayor porcentaje
de la población en la categoría de síntoma se ubica en el factor de estado disociativo, con
un 22.5%, lo que se relaciona con alteraciones en la atención y en la memoria.
32
Adicionalmente, se observa que un 18.5% de la población se ubica en la categoría de
síntoma en el factor de estado anímico, lo que indica que hay desesperanza y falta de
motivación’’. (p.204)
De esta manera, lo que dejan ver los resultados presentados en las investigaciones
que han explorado las consecuencias que puede dejar el conflicto armado en la niñez y
juventud, es que en ellos se pueden presentar problemas de aprendizaje, trastornos
cognitivos, y de conducta, además de una pérdida de identidad y estado de la realidad. En
este sentido, dichas alteraciones no sólo afectan a los niños y jóvenes, sino que esta afecta
también a las familias, siendo las problemáticas más constantes los conflictos internos, los
procesos de duelo, la carente autoestima, el estrés postraumático, las emociones negativas y
la resolución de problemas de formas no pacíficas.
Dentro de otras investigaciones consultadas, La Organización Mundial de la Salud (OMS,
2002), se evidenciaron algunas alteraciones como la ansiedad y la depresión como aquellas
primeras causas de morbilidad en Salud Mental; siendo así clara la relación entre como la
violencia marca la salud mental en varias esferas como: individual, familiar, grupal o
comunitaria.
Lo anterior, resuena con los hallazgos que hace Martin-Baró (1983), en relación a
algunas cuestiones generales como la salud mental
Cooper (1972) Si la especificidad de los seres humanos reside menos en su dotación para la vida (es
decir, en su organismo) y más en el carácter de la vida que se construye históricamente, la salud mental
deja de ser un problema terminal para convertirse en un problema fundante. No se trata de un
funcionamiento satisfactorio del individuo; se trata de un carácter básico de las relaciones humanas
que define las posibilidades de humanización que se abren para los miembros de cada sociedad y grupo.
En términos más directos, la salud mental constituye una dimensión de las relaciones entre las personas
y grupos más que un estado individual, aunque esa dimensión se enraíce de manera diferente en el
organismo de cada uno de los individuos involucrados en esas relaciones, produciendo diversas
manifestaciones («síntomas») y estados («síndromes»). (p. 1)
Los resultados presentados en relación, tanto al bienestar psicológico, bienestar
subjetivo y bienestar social como a las alteraciones en la salud mental que dejan como
consecuencia el conflicto armado y/o la violencia, que se lograron evidenciar en las
33
investigaciones dan pie para percibir en las victimas, aquel síndrome denominado como “el
del refugiado'' dado que, muchos de los síntomas aparecen tiempo después de la migración
o evento traumático, y en este se encuentran reacciones de estrés agudo, ansiedad,
depresión, trastorno de estrés postraumático, consumo de SPA y alcoholismo.
En relación al “síndrome del refugiado” Martin-Baró (1983), al observar las
manifestaciones en las personas que habían padecido la guerra, empezó a notar una serie de
síntomas psicosomáticos como: temblor generalizado, flojera muscular, diarrea, entre otros.
Reacciones que eran producidos por el cuerpo que no se explicaban el porqué; ya que hacia
parte del temor, miedo a la violencia que estaban padeciendo en esos momentos, cuando la
Fuerzas Armadas lanzaban operativos militares, realizaban bombardeos, mortereos,
minados de campos, rastreos y destrucción de viviendas y cultivos.
Así mismo se tuvieron en cuenta dentro de las investigaciones tres conceptos que
oprimían el bienestar de las víctimas como:
▪ Fatalismo: dentro de este concepto del bienestar se demuestra como una actitud
pasiva caracterizada por sentimientos de resignación frente al propio destino,
indefensión y aceptación pasiva de la realidad y el sufrimiento causando. Según
Abello, Amaris, Blanco, et al (2009) podría decirse que el fatalismo opera en con-
textos violentos donde existe un predominio de la inseguridad y condiciones
adversas, que ponen en riesgo la vida del sujeto. “Ya no se trata de un derrotismo
catastrofista o de una resignación paralizante incapaz de hacer frente al destino, sino
de un estado de inseguridad y agobio solitario que invade a los sujetos enfrentados a
la fuerza incontenible de una naturaleza caprichosa que convierte nuestra vida en
una lotería frente a la que sólo cabe la resignación y la reclusión sobre sí mismo”
(Blanco & Díaz, 2007, pp. 14-15).
▪ Trauma: aquí se observa que se considera como un problema psíquico originado por
el impacto de una determinada experiencia. En la tabla de resultados se halló
gravedad de los síntomas, creencias negativas hacia el Yo.
▪ Cogniciones irracionales traumáticas: por lo tanto, se genera una estabilidad de
nuestro sistema cognitivo para funcionar adaptativamente en el mundo. Se encontró
creencias negativas hacia el mundo, auto culpa.
34
➢ Fatalismo y bienestar psicológico:
Según Abello, Amaris, Blanco, et al (2009) ‘‘La aceptación pasiva de la realidad y
del sufrimiento es una de las características del fatalismo’’. Esto permite que el individuo
no actué de manera autónoma e independiente ante las situaciones que sean programadas
para alternativas que le permitan progresar y tener dominio y control de sus propias
emociones y de las decisiones que se necesitan tomar en el momento oportuno.
“Si los principales aspectos de la vida de una persona están definidos en su destino
desde el momento mismo de nacer; la existencia individual no es más que el despliegue de
ese proyecto de vida predeterminado en el hado de cada cual. Las personas no pueden hacer
nada por evadir o por cambiar su destino fatal” (Martín-Baró, 1998, p. 79).
Por otra parte, en la búsqueda se encontró que no hay correlación entre el fatalismo
y la dimensión de auto aceptación, crecimiento personal, dominio del entorno y propósito
en la vida. Cabe decir, que le fatalismo está ligado a que las personas permanezcan en una
zona de conformismo donde persista en continuar con una vida sin proyectos, sin visiones o
sin arriesgarse a tener nuevas elecciones u opciones de vida; así mismo unido a una
dimensión negativa con todo lo que tenga que ver con relaciones positivas.
➢ Trauma y Bienestar Psicológico:
En cuanto a esta dimensión existe una correlación negativa entre el trauma y las
dimensiones auto aceptación, relacione positivas y crecimiento personal, según García
(1999), ‘‘este deterioro produce una desorganización como individuo y como parte
reconstituyente de una red social particular’’. Según Abello, Amaris, Blanco, et al (2009)
menciona que al desanimarse el individuo deja de un lado elementos que permiten dar ‘ ‘ ‘ ‘
‘‘coherencia, orden y estabilidad al mundo, se crea un contexto amenazador y traumatizante
con gran potencial destructivo’’, dejando huella de temor, desconfianza y dificultades
para enfrentar nuevos obstáculos que se puedan cruzar en el camino o nuevas
oportunidades que durante un proceso de transición pueden estar presentes y dejar de un
35
lado capacidades y habilidades que poseen por prestar atención a un pasado que no les deja
mirar hacia delante de una manera positiva y asertivamente.
Según Ryff (1989) “tienen sensación de estancamiento a nivel personal; han perdido
la sensación de desarrollarse a lo largo del tiempo; se sienten aburridos y desinteresados
con la vida; se sienten incapaces de desarrollar nuevas actitudes y comportamientos”. (Ryff,
1989, p. 1072).
➢ Cogniciones Irracionales Postraumáticas y Bienestar Psicológico:
Teniendo en cuenta las cogniciones irracionales postraumáticas y el bienestar
psicológico en las victimas, según Abello, Amaris, Blanco, et al (2009) se presentó una
correlación negativa entre las creencias negativas hacia el yo y las dimensiones de auto
aceptación, relaciones positivas, autonomía, dominio del entorno y crecimiento personal.
Según Foa & Cahill (2001), ‘‘afirman que las víctimas o sobrevivientes de los eventos
traumáticos se ven a sí mismos como personas débiles e incapaces de controlar las
situaciones cotidianas del entorno, viendo el mundo tan extremadamente peligroso que
los deja imposibilitados para ejercer cualquier acción frente a la tensión que
experimentan’’.
De esta manera las personas que han estado presentes en los acontecimientos
traumáticos o de impacto para sus vidas, suelen presentar cambios entorno a su proceso de
aprendizaje y creencias en sus contextos; para Blanco & Díaz, (2004) ‘‘el mundo en el que
viven las víctimas no es un lugar justo, y no se puede confiar en las buenas intenciones de
otras personas. Los traumas destrozan las creencias, sólidamente compartidas, respecto a
que las personas son buenas, amables y honestas dificultando de esta manera el
establecimiento de las relaciones de confianza y empatía con los otros’’.
De acuerdo a los hallazgos o resultados de las investigaciones seleccionadas se
puede decir que, el bienestar psicológico, subjetivo y social en victimas es bajo y las
explicaciones que se dan sobre sus dimensiones siempre está ligado al crecimiento de su
potencial y relaciones positivas; de acuerdo con los resultados, se logra evidenciar
36
diferencias de pensamientos y actitudes para lograr posicionarse o enfrentar las secuelas
que se produjeron a partir de las consecuencias vividas; dado que se debe ascender y
rehacerse a partir de las nuevas oportunidades que son expuestas para tomarlas y
afrontarlas. De esta manera el bienestar en víctimas debe llevarse a cabo por diseños que les
permitan fabricar nuevas aspiraciones, planes, así mismo generando nuevos pensamientos
positivos que les autorice involucrarse en los planos que son ejecutados por la reparación en
víctimas y justicia.
Formas en las que se ha medido la presencia o ausencia del bienestar psicológico en
víctimas del conflicto armado, violencia o guerra.
En la literatura revisada, se encontraron diversas formas para medir o valorar el
bienestar psicológico, el bienestar subjetivo y el bienestar social. Encontrando
investigaciones de tipo cualitativo y cuantitativo en las cuales se aplicaron instrumentos
como pruebas previamente diseñadas y valoradas. E investigaciones de tipo IAP, donde se
usaron talleres que buscaron a su vez mitigar los impactos dejados por las situaciones de
conflicto.
Un rasgo característico de las diferentes investigaciones y pruebas, es que buscaban
descubrir cuáles son las diferentes causas del bienestar, su relación con las alteraciones en
la salud mental, esto con el fin de generar estrategias de intervención. El interés por
observar la existencia de una relación entre los trastornos y el bienestar, entre las
capacidades individuales y el bienestar, y entre las situaciones externas y el bienestar, se da
dado que en todas ellas se sobreentiende que el Bienestar en un concepto cada vez más
complejo que no depende únicamente de una sola variable. Otro hecho que llama la
atención es que en la mayoría de investigaciones se usaron varias pruebas al mismo tiempo.
➢ Cuestionarios que miden o buscan la presencia de algún tipo de trastorno:
▪ Cuestionario de síntomas (SRQ; World Health Organization [WHO], (1994) evalúa los
síntomas psiquiátricos más frecuentes.
37
▪ Prueba de (Depresión y Ansiedad) las primeras 20 preguntas evalúan los síntomas
psiquiátricos más frecuentes. Las cuatro preguntas siguientes están relacionadas con
trastornos psicóticos. (21 al 24) La pregunta 25 con las crisis convulsivas y las cinco
adicionales con el consumo de alcohol.
▪ Se realizó una prueba de estrés postraumático. Escala tipo Likert. Con 24 preguntas
correspondientes.
▪ las escalas de Depresión de Zung,
▪ Anomia de Srole
▪ el Inventario de Cogniciones Postraumáticas, éste instrumento cuenta con una excelente
fiabilidad, con valores α = 0,97 para la escala CNY y α = 0,88 para la escala CNM;
▪ la Escala de Síntomas de Davidson (Trauma), (α = 0,92)
▪ la Escala Global de Fatalismo (GAF: Global Scales of Fatalism) desarrollada por Díaz,
Blanco et al.
➢ Pruebas que miden las capacidades o habilidades que hay en los sujetos:
▪ Prueba de escala de estrategias de afrontamiento. Compuesta por 69 ítems con opciones
de respuesta tipo Likert.
▪ Prueba de escala de resiliencia en adultos. Abarca 17 ítems
▪ Autoestima de Rosenberg
➢ Escalas que miden el Bienestar en cualquiera de sus manifestaciones:
▪ Bienestar Social de Keyes, (α= 0,70);
▪ la escala de Bienestar Subjetivo de Diener, Entre esas la adaptación al español
(Blanco & Díaz, 2005) de las escalas de: Bienestar Subjetivo de Diener (α= 0,68).
▪ la escala de Bienestar Psicológico de Ryff. (α=0,73)
▪ la Escala de Ítem Único de Satisfacción con la Vida de Cantril (α= 0,68),
▪ la adaptación al español de Robles y Páez (2003) del Inventario de Afecto Positivo y
Negativo (PANAS), (α= 0,38).
Se abordaron cuestionarios o entrevistas sobre situaciones o elementos de la
experiencia sobre los hechos victimizaste y la vivencia en relación a los actores armados y
38
personal estatal. En las encuestas revisados, es frecuente encontrar preguntas que se
enfocaron en recoger datos sobre cómo ha sido la intervención desde la Salud Mental.
Hay pruebas y hay procesos de intervención para promover el bienestar psicológico,
entre esas están: procesos de integración en la formación de grupos, como objetivo de ser
influencia para la incorporación de ayudas grupales, estructurando así, competencias de
liderazgo, generando nuevas esperanzas, nuevas posibilidades de ayudas, ideas, creatividad,
optimismo de parte de ellos, donde participen varias masas, en integridad de sinergia a un
mismo fin y propósito.
8. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
A partir de lo formulado y explorado en las distintas investigaciones sobre el
bienestar en víctimas se puede decir que hay pocas investigaciones que aborden el tema de
víctimas y su bienestar en Colombia. Se encontraron 35 que cumplían con los primeros
criterios, pero al ser revisadas de nuevo solo sirvieron 13 pues cumplían con todos los ítems
para poder hacer la revisión.
Por lo tanto, los estudios indican que el bienestar psicológico es un ítem cada vez
más complejo y los diferentes autores tienden a amalgamar el concepto de bienestar
psicológico con el de bienestar subjetivo. Pero además, los diferentes autores cada vez más,
prefieren conectar este constructo con el bienestar social, en tanto uno no puede ser
entendido sin el otro, por lo que se encontraron muchas investigaciones en las que se
abordan ambos. Otro hallazgo importante es el relativo a que al hablar de BPS,
inmediatamente se hace referencia al concepto de Salud mental y sus alteraciones, por lo
que en la mayoría de las investigaciones se explora también otros conceptos relativos a
patologías y a habilidades y capacidades internas y subjetivas de las personas.
En cuanto a las diferencias en torno al bienestar psicológico, según género, etnia,
tipo de afectación de las víctimas del conflicto armado, violencia o guerra; se registró pocas
investigaciones que evidencien que tanto influye, este tema parece que dentro de la revisión
39
que se hizo, no se ha abordado lo suficiente. Se encontró diferencias entre edades, lo que
permitió un resultado oportuno.
Así mismo, los que más han abordado el tema del bienestar en victimas han sido
psicólogos, hay que mencionar además que durante los últimos años, y últimas
investigaciones que se han realizado sobre el tema se han involucrado en un trabajo otros
profesionales como abogados, educadores, médicos, entre otros. Generando así una
estrecha relación entre el Bienestar y la salud; lo que llama la atención pues se deja de lado
una perspectiva que una el bienestar a condiciones sociales y políticas.
Por otra parte, una de las visiones más usadas para entender el bienestar es la
referida a la eudaimonica, sin embargo esta retoma de manera integral la visión hedónica.
Siendo la postura de Ryff y Diener las más sobresalientes en las investigaciones. En
relación al Bienestar social, la postura de Keyes y Blanco son las más usadas para
relacionar y darle respuesta a todo lo que es el bienestar en víctimas.
Frente a lo encontrado en victimas sobre bienestar psicológico, es que estas tienden
a tener unos niveles adecuados del constructo, especialmente en lo relativo a la capacidad
para proyectarse a futuro y para el crecimiento personal. Sin embargo, algunas de las
dimensiones ubicadas por Ryff, tienden a estar en niveles medios y bajos como el de auto
aceptación, autonomía y relaciones positivas. Lo que deja entrever que las víctimas del
conflicto no pierden la esperanza de un futuro mejor, sin embargo cuentan con escasas
habilidades internas para hacerle frente a las realidades actuales.
Como recomendaciones, se propone ampliar la búsqueda a otras bases de datos y
países, buscando específicamente diferenciaciones étnicas y culturales, que nos permitan
obtener más incrementos o respuestas a lo que ocurre desde el bienestar en víctimas.
40
9. REFERENCIAS
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