¿Casarme otra vez?... ¡Sí, quiero!

(Publicado en "Voz Al Mundo.com" en 2006 y en el periodico "el Vocero de Puerto Rico" en el 2005)

Por: Wilfredo G. Santa, M.D.

¿Por qué las personas se casan dos, tres o cuatro veces? Talvez porque les gusta que les cuiden, no desean estar solos y es más saludable amar y ser amado, que lo contrario, por eso se atreven a dar el sí frente al altar, cuantas veces sientan el llamado del amor.

No recuerdo quien fue, pero alguien famoso dijo que "El segundo matrimonio es el fruto de la esperanza sobre la experiencia". El contenido de esta frase no es del todo cierto. Lo más frecuente es que la persona que se vuelve a casar lo hace

porque a pesar de sus experiencias anteriores en el matrimonio, mantiene la ilusión de poder volver a tener un hogar y sentirse querido(a). Vivir en pareja o en familia es y ha sido la respuesta universal mas adecuada a las crisis universales de soledad y supervivencia, que nos han dado todas las culturas a través de la historia de la humanidad. Los humanos que viven en pareja siempre han estado más sanos en todos los sentidos.

En el ser humano hay una necesidad muy fuerte de formar un hogar con alguien, es algo que esta atado a la biología de nuestra especie. Por eso las personas no solo se vuelven a casar, sino que no se dan por vencidas, es su manera de mostrar el grado de compromiso que tienen con la humanidad.

El problema de elegir pareja se ha vuelto casi epidérmico, razón por la cual, decidí darles algunos ideas, para evitar entusiasmos inútiles y dolores en el alma que después tardan años y a veces toda una vida en sanar. Existirá ese buen partido, de un hombre o una mujer que reúna características como comprensión, honestidad, inteligencia, belleza y que aparte te apoye y permanezca a tu lado en la buenas y en las malas.

Consideraciones generales de las personas al tomar esta iniciativa

A parte de que su nivel de expectativa es muy alto, lo que también se observa por lo general en los divorciados o separados, quienes suelen casarse al poco tiempo es lo siguiente:

Si tuvieron una buena experiencia, quieren repetirla lo antes posible. No conciben una vida solitaria.

Al revés, cuando no tuvieron una buena historia de pareja no quieren repetirla, se enfrentan a la idea de andar solteros para siempre.

Para el hombre resulta una necesidad plantear un territorio.

En cambio, en la mujer las expectativas después de una separación quedan más deterioradas debido a su alta sensibilidad.

A su vez, la mujer contemporánea tiene menor presión de buscar un techo ya que cuentan con su propio dinero y trabajo.

Otro factor que influye para volver a casarse es el de la edad. Parecer ser que al hombre que se casa después de tres o cuatro décadas la sociedad le otorga el derecho tácito a mirar mujeres más jóvenes. Sin embargo la mujer se siente más

cohibida, aunque he visto que esta tendencia ha cambiado en los últimos 7 años.

Existe la creencia de que en el hombre habita la necesidad de una segunda oportunidad. Pero el sentimiento de ternura por tener los niños que el sistema judicial les otorga por lo general a las mujeres, deja a los hombres encariñados con la experiencia de volver a tener la familia que ya no tienen y por lo general quieren repetirla. La diferencia con la mujer es que si ya tuvo hijos, en su nueva relación lo único que quiere es una pareja.

¿Realmente crees que las personas aprenden de los errores que cometieron en su primer matrimonio? ¿Piensas que el amor se da mejor en un segundo matrimonio? Las estadísticas muestran que a diferencia de lo que muchos de nosotros creemos, los índices de divorcio en la segunda vuelta son más altos que en la primera. Y ante esto, te has de preguntar ¿por qué?.

No se supone que aprendemos de nuestros errores, pues sí, pero algunas de las más obvias razones de un segundo fracaso suelen ser:

· Los hijos e hijastros.

· La dificultad para soltar a todos los ex, a la ex, los ex esposos(as), los ex suegros, ex cuñados, etc. que te hicieron la vida imposible o feliz.

· Repetir lo que hicimos mal en el primer matrimonio.

. Y mudarse a la casa de la nueva pareja.

A quienes debes evitar al elegir una nueva pareja

· Los Dependientes : andan buscando que los cuiden. Aunque no lo aceptemos, por lo general, los hombres no sabemos cuidarnos. La casa no es nuestro territorio.

· Los solitarios: , una de mis pacientes separadas y vuelta a casar me decía: "Lo más triste de ser separada es volver a la casa y ver la toalla en el mismo lugar que la dejaste. Mi única tarea era revisar los mensajes del contestador, no tenía con quien salir". Naturalmente volvió a fracasar.

· El aventurero (a) sexual. Lo sexual puede llevar a las personas a vivir aventuras, pero no a formar una pareja. El sexo es importante, pero no definidor.

· Los indecisos. Para el hombre el matrimonio es algo muy serio, tanto que puede

tender a rehuirlo. Para el hombre implica toda una decisión económica, en términos de montar un proyecto, una empresa. La diferencia es que a la mujer le complica dejar entrar un hombre después que hubo otro antes.

· Los desubicados. Estos son los que quedan en el mundo del trabajo y no tiene adónde llegar, usualmente siempre han sido así.

· Los que aun están en crisis. Me decía otra persona “Después de quedar en un estado de desequilibrio emocional, me mude a un estudio donde viví solo por mucho tiempo. Las únicas excepciones las hacía a la hora de almuerzo, en la que iba a visitar a mi madre. Diez años no se borran con una goma y menos los afectos, pero el dolor más grande era no poder ver a mis hijos”.

Es importante buscar ayuda profesional y debes inquirirlo.

· Los comprometidos. Usualmente separados o separadas, buscan pareja con francas promesas de que pronto llegará el divorcio, el que nunca llega.

· Los super-optimistas. De pronto te vez teniendo un sueño de persona, el ideal, lo que andabas buscando toda la vida, el encanto que solo se ve en un sueño de hadas. Investiga porque fracasó ya dos veces.El factor sexo. Todo dependerá de la edad. El interés sexual de un hombre y una mujer entre los 30 y 40 va a ser mucho más fuerte que el de 50, que por lo general busca una relación de pareja mucho más plena. Esta persona madura puede enganchar muy bien con otra que ya salió del aspecto juvenil pero que aún es joven. El hombre a esa edad está más ablandado, no tiene tantas urgencias, es menos buscador de aventuras. Sabe lo que es el mundo... quiere quedarse tranquilo.

Algunos consejos prácticos para tus segundas nupcias.

· Disminuyan un poco sus expectativas – no tiene que ser la familia de un cuento de hadas. Aprendan a ser más flexibles. No obstaculices los sentimientos y piensa que todo conlleva tiempo, es un proceso que se va a dar poco a poco. No idealices ni compares, ya que una familia reconstruida nunca será igual a la original.

· No es saludable establecer una relación con alguien que te inspira lástima o pena. La lástima no es un sentimiento sano en el cual se pueda basar una relación.

· Aléjate de alguien que depende emocionalmente de ti. Aunque a todos nos gusta sentirnos necesitados, tratar de resolverle la vida a alguien que depende de ti,

puede volverte loco y convertirse en una tarea sin fin.

· Cuidado si se la pasa citando frase religiosas o bíblicas para manipularte o controlarte.

· Si observas que la persona carece de amigos o amigas, excepto tú y se le imposibilita crear nuevas amistades, entonces, hay un problema y más vale que lo reconozcas lo antes posible.

· Alerta si no logra reconocer sus errores y se la pasa echándole la culpa a otros por lo que no le sale bien o por sus problemas.

· Alerta si menosprecia tus sueños o aspiraciones. Alguien que realmente te ama, te motiva a superarte, a ser lo mejor que puedes llegar a ser.

· Sube la guardia si trata de comprar tu afecto. Por más dinero que un hombre o una mujer se gasten en ti – no le estás en deuda, si te trata de manipular a través del dinero, libérate y busca tu independencia económica y, por supuesto emocional.

A propósito te voy a repetir que te alejes de inmediato de alguien que te desacredita, amenaza, humilla, rebaja o descalifica y, después en un círculo vicioso se arrepiente y te promete que va a cambiar. Y, por último, cuidado con alguien que no te da tu lugar y que el lugar que te corresponde a ti, se lo da a un familiar o amigo.