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Cirilo Alameda y Brea

Firma de 1830 En la Iglesia de Ajalvir existe un retrato al óleo de Fray Cirilo Alameda, realizado en 1849 por Javier Bueno, según firma y fecha en el ángulo inferior derecho, de unas dimensiones de 127 x 99 cm. Acababa en aquellas fechas de ser nombrado Obispo de Burgos. ¿ Pero por qué este cuadro de Cirilo de Alameda y Brea en la Iglesia de Ajalvir ?

“…consejero de Estado de don Carlos en la primera guerra civil, implicado en la transación de Vergara, exiliado hasta 1848 y presentada al año siguiente por el Gobierno de Isabel II para la archidiócesis burgalesa, primado desde el 57 y cardenal en el 58, pero aparentemente marginado luego por la Santa Sede y acusado de afiliación a la masonería.” Boletín de la Real Academia de la Historia – Las juntas revolucionarioas de 1868. Fray de Cirilo Alameda y Brea nació en Torrejón de Velasco el 9 de julio de 1781, hijo de unos honrados labradores hacendados de dicho pueblo. Estudió, con el mayor aprovechamiento, en el colegio imperial de San Isidro, y a los quince años le entró la vocación de hacerse religioso en una Orden tan austera como la de San Francisco, cumpliendo su noviciado en el convento de San Francisco el Grande, donde vistió el sayal en 1796. “..hijo de Pedro Alameda, natural de Humanes de Madrid, y María Brea, natural de esta de Torrejón,…” Murió en Madrid, el 30 de junio de 1872. Su gran influencia en la Orden Religiosa a la que pertenecía le permitió acercarse a la Corte de Fernando VII donde ejerció una notable influencia. La revolución de 1808 provocó que las ordenes religiosas tuvieran que abandonar sus conventos, convertidos en cuadras y cuarteles. El Padre Cirilo y sus compañeros abandonaron el de Pinto, donde residia como catedrático de humanidades, y huyendo de las tropas francesas se refugio en Cádiz, donde lo hicieron poco después el gobierno y las Cortes.

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Grabado según aparece en el libro: Los quadros de la penitencia – Antoine Godeau – 1819. Dibujado por Meneses y grabado por Francsico Suría Lozano.

Dedicatoria del libro a Fr. Cirilo Alameda el 13 de noviembre de 1819.

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Al prepararse en Cádiz una misión que debía salir para la Morquegua, se alistó, siendo nombrado su presidente, y arribando a Montevideo. Vuelve a España en junio de 1814, justo al comienzo de la etapa absolutista. En 1816 se había concertado el segundo matrimonio de Fernando con la princesa doña María Francisca, concierto en el que tomó parte activa Fr. Cirilo Alameda. Con motivo de las reales nupcias se prodigaron las mercerdes y gracias a todo tipo de personas. A Cirilo Alameda se le dieron los honores del tribunal de la suprema Inquisición, y una pensión eclesiástica de 15.000 reales. En la regencia fue un hombre de influencia que gozó de mucho favor en la corte de Fernando VII.

Fue nombrado Ministro General de la Orden de San Francisco por un breve del Papa Pio VII el 28 de Noviembre de 1817, por seis años, con la intervención de Fernando VII. El 19 de junio de 1818 por real despacho se le conceden los honores de Grande de España. En 1817 se le cita en el Kalendario manual y guia de forasteros en Madrid: Consejo de la Suprema y general Inquisición.… Ministros honorarios del mismo Consejo.… Rmo. P. M. Fr. Cirilo Alameda, del Orden de S. Francisco, en su Convento de San Francisco el Grande. y en 1818 se añade el cargo: Real Junta incorporada con la Orden de Carlos III para tratar de los

asuntos relativos al misterio de su Patrona. Teologos consultores. R. P. Fr. Cirilo Alameda, Ministro general de la Orden de S. Francisco, en su Convento, nato.

En los años 1819 y 20 mantiene los dos cargos. En 1821 solo como teólogo consultor, y en 1822 y 23 aparece como ausente en lugar de nato.

Dibujo de Juan Guillermo Santiago Bauzil y grabado por Vicente Peleguer. – 1819. En recuerdo de su nombramiento como Ministro de la Orden de San Francisco.

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En la época constitucional de 1820 a 1823, se produce la persecución del clero en España. A finales del año 1822, el mediodia de Francia estaba abierto a los proscritos españoles, acogiendo diariamente a numerosos sacerdotes y religiosos perseguidos, aumentando el número de éstos por un decreto de las Cortes, sancionado por Fernando VII en 1º de diciembre de 1822, y que suprimía todos los conventos colocados en los lugares donde no habia mas de cuatrocientos cincuenta vecinos. El padre Cirilo Alameda general de los franciscanos y predicador del rey, llegó el 30 de diciembre a Bayona. “Fernando VII le nombró su Predicador, Teólogo consultor por la Junta de la Inmaculada Concepción, y Consejero honorario de la Santa Inquisición. Publicada la Constitucion fue buscado varias veces, y particularmente se le hizo temer ser asesinado el 23 de octubre de 1820. Retirado en el pueblo de su naturaleza, permanecio hasta el 1822, en el que por su firme resistencia a sujetarse a la llamada ley de Regulares fue expatriado, dandole cuarenta y ocho horas para salir del territorio español, y comunicádose ordenes a los milicianos locales para que le condugera, si en el acto de recibir la orden no salia de su pueblo, y emprendia su viage fuera del Reino.” Colección eclesiática española – 1824. A poco de haberse verificado la restauración política de 1823, el Padre alameda fue nombrado por Fernando VII consejero de estado. A la vez conservaba el cargo de jefe superior de los religiosos de su órden en España, pues al cesar en el de monistro general, por bula del Papa Leon XIII quedó con el carácter de vicario general para estos reinos. “Real decreto creando una junta auxiliar del consejo de Ministros, con el nombre de Real junta consultiva de Gobierno, para atender a los importantes negocios de la monarquía que se expresan. …Compondrán esta junta desde luego las personas siguientes:… el reverendo P. Fr. Cirilo Alameda, vicario general de la orden de S. Francisco:…En San Ildefonso a 13 de setiembre de 1825.” El Mercurio de España – setiembre de 1825. “Real decreto sobre el consejo de Estado, y personas que deben componerlo…. Reverendo P. Fr. Cirilo Alameda;…En Palacio a 28 de diciembre de 1825”. El Mercurio de España – 1826. En 1826, 27, 28, 29, 31 continuará como teólogo consultor y miembro de la junta consultiva. En el convento de San Diego de Alcalá, en el que invirtió grandes sumas en su engrandecimiento, consiguió que se celebrase el 29 de abril de 1830 un capítulo general de toda la órden de los franciscanos, y en la sesión principal hizo dimisión de su cargo de vicario general. Poco después se efectuó la presentación de Cirilo Alameda para el arzobispado de Santiago de Cuba, considerándose como un destierro político quizás por oponerse al cuarto matrimonio de Fernando VII en el consejo de Estado. Fue elegido Arzobispo de Santiago de Cuba el 30 de septiembre de 1831 y recibió la consagracón en la Catedral de Sevilla el 12 de marzo de 1832.

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El 9 de abril de 1832 expone estar tramitando su licencia para pasar a su archidiócesis y solicita licencia para las personas que lleva en su compañía: su secretario Francisco Delgado, presbítero, Marcelo López, Joaquín Faria, y José Girón, pajes, Miguel Antonio Mutuberría, mayordomo, José Palacios, oficial de la Secretaría del Arzobispado, y Ramón Frial, criado. Archivo General de Indias – Licencias de embarque a la isla de Cuba. En 1833 y 37 aparece como jubilado del consejo de estado, y como Arzobispo de Cuba. Sus posiciones absolutistas le hicieron ser considerado un peligro para la causa liberal en 1837, después de que el motín de la Granja de San Ildefonso permitiese la derogación del Estatuto Real de 1834 y la restitución de la Constitución liberal gaditana.

Siendo arzobispo de Cuba había procurado levantar en la isla la bandera de la rebelión, y se vio precisado por esta causa a huir. Terminó en Francia apoyando al pretendiente carlista Carlos María Isidro de Borbón al trono de España en la guerra civil frente a la reina Isabel II.

“Por Real orden de 6 de abril último se sirvió S.M. declarar al arzobispo de Cuba don Cirilo Alameda estrañado de estos reinos, mandando que

se le ocuparan las temporalidades, y que en su consecuencia procediera el cabildo al nombramiento de gobernadores de la diocesis…” Eco del Comercio – 29 de diciembre de 1837. El 24 de Diciembre de 1836 se produce la victoria del general Espartero en el puente de Luchana, y se levanta el sitio de Bilbao. Y el 18 de junio de 1837 se promulga la constitución progresista. “Alcala de Henares 6 de febrero.- Ayer se celebraron en esta las exequias por las víctimas de la inmortal Bilbao. … dandose principio a las honras en medio de un numeroso concurso, y cual pocas veces se ha visto. Terminadas estas, pronunció una elocuente oracion fúnebre el virtuoso y patriota cura de Daganzo de abajo D. Juan Eustaquio Frutos, bien conocido en esta comarca por sus sentimientos liberales. … El Español – 9 de febrero de 1837. “Irun 16 de abril.- Supongo que para cuando vds. Reciban esta estarán orientados de que el P. Cirilo Alameda fue detenido en Bayona al tiempo de querer repasar la frontera para reunirse al pretendiente y sus secuaces. La llegada del tal fray Cirilo

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da que hacer, pues tras ser personage y agente del despotismo, las circunstancias son muy sospechosas y no dan margen a creer sino que su venida es valor entendido con los carlistas y sus ostentadores.” “El Faro de Bayona del ultimo correo dice: efectivamente fue arrestado el 10 del corriente entre Arcangues y Sare el padre Cirilo, arzobispo de Cuba, que caminaba en direccion de la frontera. Traido a esta ciudad (Bayona) ha sido internado, designandole por punto de residencia la ciudad de Tours.” Eco del Comercio – 24 de abril de 1838. “El P. Cirilo de la Alameda, el P. Gil Ramirez de la Piscina, Marcos del Pont y otros personages pasaron el 3 a Durango. Tratabase de nombrar al P. Cirilo presidente del Consejo.” El Guardia Nacional – 16 de enero de 1839. Se le acusa de intervención en el “Abrazo de Vergara”, y después de firmar este convenio el 29 de agosto de 1939 que dio fin a la primera guerra carlista, emigró a Francia y pasó mas tarde a Italia, donde permaneció hasta 1848, regresando en plena restauración moderada.

“Caballeros grandes-cruces existentes en la real y distinguida orden española de Carlos tercero … 1848. Don Fray Cirilo de la Alameda, Arzobispo de Cuba, en 27 de noviembre...” “Parece que el gobierno español espera recibir muy pronto de Roma dos capelos, uno para el padre Cirilo Alameda, arzobispo de Burgos, …” La Epoca – 25 de julio de 1849. A pesar del triunfo isabelino en la guerra, se le consideró reintegrado en la sociedad española, siendo prpuesto por la reina como arzobispo de Burgos en 1849, y fue elegido senador vitalicio.

“S.M. la Reina por reales decretos de 6 del corriente mes se ha servido nombrar senadores del reino a…Don Cirilo de Alameda y Brea, arzobispo de Burgos.” El Clamor público – 9 de octubre de 1849. “Ha pasado desapercibido un hecho parlamentario de cierta importancia. Aludimos al acto de jurar y tomar asiento en el alto cuerpo colegislador el venerable arzobispo de Burgos, Fr. Cirilo Alameda. Bien conocida es la historia de este prelado, que fue firme sostenedor de la causa carlista, y el cual acaba de jurar en el Senado fidelidad a la reina, y a la Constitución de la monarquia.” El Ancora – 19 de noviembre de 1850. Más tarde fue igualmente propuesto y obtuvo el arzobispado primado de España de Toledo en 1857.

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“Se asegura con la mayor certeza que en el próximo consistorio que va a celebrar en Bolonia nuestro santo padre Pio IX, será nombrado cardenal de la Santa Iglesia Romana el Excmo. e Illumo. Sr. D. F. Cirilo de la Alameda y Brea, arzobispo de Burgos y presentado de Toledo.” Escenas contemporaneas – abril 1857. “Parece indudable que el gobierno se ocupa en el importante asunto de la provisión de las sedes episcopales vacantes, y que las metropolitanas está ya acordada en la forma siguiente: trasladando a Toledo al Sr. D. Fr. Cirilo Alameda, arzobispo de Burgos;…” La Epoca – 15 de abril de 1857. “El consistorio que el Papa celebrará en Bolonia, tendrá mucha importancia para España, puesto que en él se creará cardenal, entre otros, al arzobispo de Toledo, el padre Cirilo de Alameda. Por aquí se asegura que con motivo del Concordato monseñor Bennelli hizo nombrar al padre Cirilo, arzobispo de Burgos, que actualmente es el confesor de S.M.C. la Reina.”

Cuadro de Cirilo Alameda

fechado en 1849 existente en la Iglesia de

Ajalvir.

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El Clamor Publico – 16 de junio de 1857. Para la protección de las Ciencias surgió la Real Academia de Ciencia Exactas, Físicas y Naturales, e inmediatamente después se decidió que se hermanase esa creación con otra orientada hacia las Ciencias Sociales, bajo el título, de tradición francesa, de Ciencias Morales y Políticas. Se crea por Real Decreto del 30 de septiembre de 1857. Cirilo de Alameda fue académico en su primera composición: “Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Medallas de los Excmos. Señores Académicos de Número y relación de los Individuos que sucesivamente las han poseído … 34 – I. D. Fray Cirilo de Alameda y Brea Cardenal-Arzobispo de Toledo. Nombrado por R. D. de 30-1X-1857.” “Se asegura que la candidatura del arzobispo fray Cirilo Alameda para presidente del Senado cuenta con muchas probabilidades. No lo extrañamos.” El Clamor Publico – 6 de octubre de 1857.

El cardenal de Alameda y Brea, Arzobispo de Toledo. Grabado de Bernardo Blanco Pérez.

Litografía de Santos González.

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Después de la desamortización, el Palacio Arzobispal de Alcalá de Henares paso al Estado, que instaló en sus dependencias el Archivo Central de la Administración. El 2 de marzo de 1859, mediante escritura pública, el arzobispo de Toledo, fray Cirilo Alameda y Brea, cedió en usufructo el histórico palacio para instalar en él el citado Archivo, creado por Real Decreto del 17 de julio de 1858. La diócesis se reservó la propiedad y una pequeña parte del edificio. Comenzó a funcionar el 1 de febrero de 1861. El Archivo se creó para recoger, además de la documentación de las suprimidas Cámara, Consejos y sus Presidentes, las de los Ministerios. Desapareció en 1939, al explotar el material militar almacenado en el patio. Al final de sus dias tenía 140.000 legajos distribuidos en 76 grandes salas del palacio, la mayor parde de los cuales se perdieron, salvánsose solo la que había sido enviada con anterioridad al Archivo Histórico Nacional. Volvió a apoyar la causa carlista con ocasión de la intentona del alzamiento de la Rápita el 1 de abril de 1860, apoyando expresamente al general Ortega, junto con el pretendiente Carlos Luis de Borbón y su hermano Fernando de Borbón, para destronar a la reina Isabel II y proclamar al pretendiente carlista. El 8 de julio de 1869, el cardenal-Arzobispo primado de Toledo, el franciscano Cirilo Alameda, ofició la misa en la inauguración de la reformada Iglesia de San Francisco el Grande de Madrid, siendo presidida por la reina Isabel II.

La Ilustración española y americana – 8 de julio de 1872. Con motivo de su fallecimiento.

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Fotografía de Jean Laurent, Madrid.