la hidra

CÓMO TRAMITAR UN UNICORNIOSOLUCIONES PARA UNA GESTIÓN CULTURAL DESDE LO PÚBLICO

ZARAGOZA6-7 abril

www.tramitarunicornio.com#tramitarunicornio

La Hidra Cooperativa es una empresa política que realiza servicios de formación, consultoría e investigación aplicada que, en conjunto, tienen como objetivo producir herramientas útiles para una crítica a la economía política urbana, particularmente de Barcelona. Temas como la gestión comunitaria de recursos urbanos, el papel de las élites en la economía de la ciudad o la estigmatización de las periferias urbanas, son los que hemos venido trabajado durante este último año. La Hidra forma parte de La Fundación de los Comunes, una red de escala estatal formada por centros sociales, espacios de autoformación y empresas políticas de base local.www.lahidra.net

Experiencia

Logros DificultadesIntentamos ser un espacio participativo. Identificarnos como “empresa política” refiere a tener un compromiso directo con las comunidades de acción política de nuestra ciudad y, a su vez, con principios de gestión democrática de nuestras decisiones, sean sobre contenidos, ámbitos donde intervenir o reparto de rentas. A su vez, la democracia participativa no es solo una preocupación que integramos en nuestra empresa y en nuestra red (Fundación de los Comunes) sino que es un espacio de trabajo en el que actuamos a nivel urbano.

Si por participación entendemos distribución del poder, toda acción que busque cambiar las dinámicas en una organización económica (empresa convencional o cooperativa) y en una ciudad capitalista, es una acción conflictiva. A nadie le gusta perder poder. En ese sentido, las principales dificultades tienen que ver con las inercias ya establecidas en los espacios en los que actuamos. Es decir, infinitas dificultades. Todo tipo de privilegios de clase y género se reproducen en espacios que, por emancipatorios que nos declaremos, son fundamentalmente espacios formados por clases medias cualificadas.

Logros Dificultades

Participación

Dentro de nuestra empresa, la reproducción de un perfil social bastante cerrado (sujetos blancos, de clase media precaria, con estudios universitarios, etc.) es constante. Tenemos pocas o ninguna herramienta para cambiar ese signo de distinción. Lo que sí intentamos hacer es que, en los servicios que realizamos y en los proyectos en los que estamos comprometidos políticamente, se rompan las asimetrías de poder típicas de los espacios de participación o de, por ejemplo, las prácticas de gestión comunitaria de espacios y recursos urbanos. No sabríamos cómo medir los logros en ese tipo de acciones.

Es alarmante que los espacios cooperativos y comunitarios de la ciudad que más voz tienen en los cambios institucionales, no reflejen la diversidad social de los barrios en los que actúan. Se producen verdaderas “burbujas activistas” en las que hablamos sobre el papel de clases subalternas o invisibilizadas o de la necesidad de cambios en las formas de producción, distribución y consumo de bienes básicos, pero donde es difícil encontrar voces y cuerpos diversos. Todo esto se soluciona si el discurso de la participación es simplemente “dar voz” o “representar al otro”.

Logros DificultadesDesde hace dos meses no tenemos espacio propio. Estamos buscando un espacio más grande compartido con otros colectivos de la ciudad. El espacio que teníamos era un local alquilado en el barrio del Raval de Barcelona. Lo pagábamos a medias con otro colectivo centrado en investigación en cultura (zzzinc).

Las dificultades para encontrar alquileres asequibles en Barcelona es portada en los periódicos cada semana, así que es fácil imaginarlas. Todos los barrios cercanos al centro histórico han visto como el precio del alquiler de inmuebles para uso residencial –y podemos incluir, para fines comerciales– se ha disparado en los últimos meses. Una amiga hace poco comentaba que es realmente difícil entender porqué los autónomos y freelances de Barcelona no están okupando locales. No es una mala pregunta.

Logros Dificultades

Financiación

La vía de sostenimiento económico de La Hidra es a través de los servicios que realizamos. Ya sea a entidades públicas (áreas de ayuntamientos) o privadas (universidades y fundaciones). Respecto a la autoformación, los cursos que realizamos se sostienen a partir de los pagos de la gente que se apunta. No contamos con financiación pública ni cuotas de socios ni otra entrada de dinero que no sea a través de, por decirlo a la vieja usanza, vender nuestra fuerza de trabajo. Esto no es un principio moral, sino que es la forma que hasta ahora hemos visto más efectiva para trabajar con cierta autonomía.

La Hidra es una organización política y económica bastante joven (apenas dos años desde su nacimiento y año y medio con actividad más o menos regular) a la que le falta ensayar todo tipo de estrategias, tanto políticas como económicas. Creemos que estrategias más colectivizadas, como crowdfunding o cuotas de socios, son lógicas en espacios que cuentan con una comunidad local amplia y que se siente retribuida por el trabajo de una empresa política. De momento, no es nuestro caso.

Logros DificultadesOtros

Realizamos servicios de formación, consultoría e investigación aplicada que, en conjunto, tienen como objetivo producir herramientas útiles para una crítica a la economía política urbana, particularmente de Barcelona. Estamos realizando proyectos como la asesoría para producir un reglamento jurídico para garantizar usos comunitarios de equipamientos públicos de la ciudad, así como talleres de participación en planes económicos urbanos, etc. También realizamos tareas de producción y gestión de presentaciones públicas de libros, trabajos de investigación que nos parecen relevantes políticamente y que pueden jugar un papel en la transformación social de nuestra ciudad.

Por el tipo de enfoque político que le damos a nuestra organización económica, el principal problema es articular de manera productiva ese enfoque con el sostén económico de nuestras vidas. Si la misma plataforma desde la que hacemos política ha de ser la que sostenga nuestra existencia, esto produce decenas de contradicciones. Las únicas respuestas que podemos encontrar a esa pregunta tan pesada provienen de dos vías. Bien aprendiendo de la experiencia de otros proyectos hermanos –como la editorial Traficantes de Sueños, el proyecto Katakrak de Pamplona o el Ateneu Candela de Terrassa– o bien en la estricta práctica y reflexión diaria sobre lo que hacemos y cómo lo hacemos.

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