concepciónconcepciónpensiónpensión

concepciónpensión

concepcióncon

-Hola mi niñita¿Cómo estás?Eres súper ingrata Ni me llamaste para mi cumple¿Cómo te ha ido? ¿Que haces?¿Dónde estás viviendo ahora?Que bueno, me alegra mucho¿Y te llevas bien con ellos?

ALÓ?

-Eh...Tía, ¿le puedo hacer una entrevista?

Sandra Bahamonde, de 43 años, vive en la ciudad de Concepción y es dueña del Hostal Don Diego, una pensión estudiantil ubicada en el centro de la ciudad.“La tía”, como detesta que le digan, lleva diez años ofreciendo este servicio, por lo que ya se ha ganado cierta fama dentro del rubro. Debido a los años de experiencia muchos han pasado por este lugar, por lo que Sandra se ha enfrentado a conocer todo tipo de gente, jóvenes en su mayoría, y acumulado tantas anécdotas como para escribir “un libro de varios capítulos y sin censura” como ella misma ha dejado en claro. Es entonces, esta dueña de casa una especie de madre con una gran camada de “hijos postizos” además de ser una fiel testigo de la vida adolescente, o más bien, de una etapa de transición que enfrentan día a día estos jóvenes que se preparan para ser adultos independientes.

Sandra Bahamonde, de 43 años, vive en la ciudad de Concepción y

La sandra

¿Cómo es tu relación con los pensionistas?

“En diez años conoces a todo tipo de gente. Cuando digo todo tipo hablo de personalidad, así como también de apariencia.Siempre recuerdo cuando llegó a pedirme pensión un niño rasta. Obvio que lo miré de pies a cabeza, tu sabes como soy, pero igual le pasé una pieza. Era súper limpiecito, nada que decir. Igual una vez encontré la pieza pasada a marihuana, pero me mostró unos inciensos que tenían ese olor. Se salvó.Llegan unos que te caen bien, otros no los soportas. Lo que sí he aprendido es a no juzgar tanto por las apariencias, mira que me han tocado unas calladitas... sipo, de esas que dicen son las peores”Trato de ser súper mamá, preocuparme en donde están, si van a salir que me avisen y ese tipo de cosas. En parte me siento res-ponsable de su cuidado, aunque sé que no corresponde. Mi servicio es el de pensión, no de niñera. Me pongo en el lugar de sus fami-lias, ellos querrían que su hijo esté en las mejores condiciones”

he aprendido es a no juzgar tanto por las apariencias, mira que me han tocado unas calladitas... sipo, de esas que dicen son las peores”Trato de ser súper mamá, preocuparme en donde están, si van a salir que me avisen y ese tipo de cosas. En parte me siento res-ponsable de su cuidado, aunque sé que no corresponde. Mi servicio es el de pensión, no de niñera. Me pongo en el lugar de sus fami-lias, ellos querrían que su hijo esté en las mejores condiciones”

Gente, mucha gente¿Cómo es tu relación con los pensionistas?

Gente, mucha gente

“En diez años conoces a todo tipo de gente”“En diez años conoces a todo tipo de gente”

¿Cuánto tiempo aproximadamente se quedan ahí?

“Depende. Hay niños que llegan y duran un mes. No porque no les guste la pensión, sino que mayoritariamente los “mechones” son súper inseguros con las carreras que eligen. Al final del primer semestre suelen irse varios de los pensionistas por diferentes motivos. Generalmente es por algo relacionado con la Universidad, se cambian de carrera, o derechamente se echan todos los ramos. ¿Te acuerdas de la Romi? Ella duró 3 años en Derecho y recién tuvo la valentía de contarle a su papá que había perdido la carrera mientras viajaba a Concepción, a firmar el contrato de la pensión por el cuarto año.Uno trata de que se sientan como en su casa, otorgarles un ambiente familiar en el que se sientan cómodos. Yo converso con ellos, tiro la talla, los escucho y trato que no se sientan ajenos al estar ahí, o solos. Tuve pensionistas que eran de lejos y no conocían a nadie. Se encerraban en sus piezas algunos, otros no congeniaban con ningún niño de la casa y no pasaban nunca acá. Eso era fome porque igual hay que estar más o menos pendiente de dónde están. Luego les pasa algo y ¿Quién es la que recibe la culpa? Yo po’, y no deberían cargarme toda la responsabilidad. Ellos están bien pelúos como para cuidarse solos, aunque uno igual se preocupa. No sé”

¿Cuánto tiempo aproximadamente se quedan ahí?

“Depende. Hay niños que llegan y duran un mes. No porque no les

El paso

¿Cuánto tiempo aproximadamente se quedan ahí?

“Al final del primer semestre suelen irse pensionistas”

Lugares comunes¿Qué opinas de Concepción como un entorno

para estudiantes?

“Yo amo mi ciudad, así que te diré puras cosas buenas porque quiero quedar bien po ¿O esto no es como una promoción?En verdad Conce es una súper buena ciudad para estudiar, y es que se vive el ambiente universitario, hay lugares dedicados especial-mente para ellos, parques, locales para carretear, se vive mucho también lo que es la música y eventos culturales ad-hoc a lo que a ellos les gusta, toda esa onda media artesa, tu cachai”

Lugares comunes¿Qué opinas de Concepción como un entorno

para estudiantes?

“Yo amo mi ciudad, así que te diré puras cosas buenas porque quiero quedar bien po ¿O esto no es como una promoción?En verdad Conce es una súper buena ciudad para estudiar, y es que se vive el ambiente universitario, hay lugares dedicados especial-mente para ellos, parques, locales para carretear, se vive mucho también lo que es la música y eventos culturales ad-hoc a lo que a ellos les gusta, toda esa onda media artesa, tu cachai”

¿Qué opinas de ser parte y testigo de una etapa en la vida de tus pensionistas?

“Lo de ser ‘parte’ depende de la cercanía que tenga con cada uno de ellos. Hay algunos que no me pescan mucho, lo cual no es bueno ni malo, pero en esos casos no estoy muy involucrada en sus vidas y desarrollo. En cambio con aquellos que poseo un mayor apego sí me siento parte de su crecimiento. Yo los aconsejo cuando están en problemas o consuelo cuando están tristes, también los reto si es necesario, sobretodo cuando se ponen flojonazos para ir a la U o llegan con un par de copas de más. En esos casos no me enojo mucho, tengo paciencia, sé que durante esta etapa más de un curadito me va a ensuciar el baño, o una niña va a llegar llorando porque terminó con el pololo. Al final aprendes que todo esto es un pedazo de la vida, uno también pasó por estas cosas.Me llena de alegría el poder observar como van creciendo, más allá de que les salgan más pelos de la cuenta, y se vayan de a poco desenvolviendo como adultos. Me enorgullece verlos transformarse en profesionales, recordarlos cuando llegaron -unos pollitos- y luego verlos partir un poco más maduros.Me emociona... soy llorona en esa fase de sus vidas.

mucho, tengo paciencia, sé que durante esta etapa más de un curadito me va a ensuciar el baño, o una niña va a llegar llorando porque terminó con el pololo. Al final aprendes que todo esto es un pedazo de la vida, uno también pasó por estas cosas.Me llena de alegría el poder observar como van creciendo, más allá de que les salgan más pelos de la cuenta, y se vayan de a poco desenvolviendo como adultos. Me enorgullece verlos transformarse en profesionales, recordarlos cuando llegaron -unos pollitos- y luego verlos partir un poco más maduros.Me emociona... soy llorona en esa fase de sus vidas.

crecer

“Al final aprendes que todo esto es un pedazo de la vida, uno también pasó por estas cosas”

“Al final aprendes que todo esto es un pedazo de la vida,

En el sentido emocional, y debido al hecho de vivir en un lugar propio-ajeno, ¿Cómo ves que tus pensionistas enfrentan este hecho?

“Es complejo para los que viven más lejos porque primero, está el factor distancia y la imposibilidad de viajar cuando quisieran a ver a sus familias y segundo que por el hecho de ser de otras localidades acá no conocen mucha gente o a nadie (hablando de mechones), entonces la soledad los primeros días los pone medios tristones. Mucho llamar a la mamá a cada rato los primeros días.Eso sí, cuando llevan como dos semanas en la U ya están con ami-gos y todo, es impresionante lo sociables que pueden llegar a ser. Yo creo que porque todos están en las mismas.Los que viven en lugares más cercanos como Chillán o Los Ángeles suelen viajar los fines de semana así que no tienen ese problema de extrañar como los otros.Al final poco a poco se terminan acostumbrando a estar acá, a sentir que este es su hogar, y de alguna manera, todos los que conviven aquí (hasta 17 personas aprox.) pasan a ser su nueva familia. Su familia momentánea.

En el sentido emocional, y debido al hecho de vivir en un lugar propio-ajeno, ¿Cómo ves que tus

extrañar

“Se terminan acostumbrando a estar acá, a sentir que este es su hogar”

“Es obvio que uno se encariña al final con todos, hasta con los que me caen mal. En el fondo te acostumbras a convivir con la gente, y es tal la responsabilidad que cae sobre ti con respecto al cuidado de cada uno que pasan a ser como tus hijos, y pa’ que estamos con cosas, hasta hijos tenemos uno más regalón que otro.Es súper fuerte cuando te apegas mucho a alguien y se va. La mayoría de los pensionistas que he tenido son de otras partes, cercanas como Chillán, y tan lejos como Coyhaique o Iquique, entonces las posibilidades de ver a estas personas otra vez es súper pequeña. A veces recibo llamadas de gente que se acuerda de mi, imagínate, dos de mis pensionistas me han invitado a sus matrimonios, es un gesto que guardo con mucho cariño. Mantengo contacto con algunos, de otros no sé absolutamente nada pero los recuerdo a todos, siempre dejan su huella aquí, su historia, alguna talla. Siempre tengo algo que contar de cada uno, sea algo bueno o algo malo. Permanecen como pequeñas leyendas anónimas”

¿Mantienes contacto con los pensionistas?

El adiós

“A veces recibo llamadas de gente que se acuerda”