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PREPARACIONe R u S T A "C E

Somero conceptos zoológicos.

Den tro de los grandes gruposzoológicos en que se consideran di-vididos los animales hay un tipodenominado ARTROPODOS, que secaractertza por presentar sus míem ,bros locomotores segm en ta dos .

No sólo tal característica se notaen sus miembros sino que tambiénes .observable en su cuerpo, pueséste está formado por anillos tam-bién segrnentados, dispuestos enseries lineales. En ciertos casos es-tos segmentos pueden IJ.nirse enuna extensión mayor o menor desu cuerpo, de manera que formanregiones en que la disposición seg-mentada ya no puede ser observa-da tal como sucede en la cerato ,to¡:ácica (cabeza y tronco) de loslangostinos ..

Existe empero una característicaesencial que domina toda la orga-nización de los' artrópodos, y es laexitencia de un revestimiento quí-tÍll.OS0, grueso, continuo y más omenos rígido, que se extiende sinninguna in terrupción en "toda la su-perfi.cie 'del cuerpo. A tal revesti-miento se le llama quítína (delgr. chiton: revastímíen to) .

La composición química de laqu ítíua no está definida en formaexacta, pero .parece resultar de lacombinación de un albuminoide yde un hidrato de carbono, presen-tando en algunas especies, los crus-táceos superiores incrustacionesde carbonato dec~lcio.

La quitina no sólo reviste la par-te exterior del cuerpo, sino que seextiende por los orifidos natura-les llegando también a interesar lasca~idades internas.

Este revestimiento no presentaen todas sus partes igual rigidez,

por el J"":>rofesorCARLOS MORGANTI

DEo S

pues si así fuera el animal se ve-ría imposibilitado de realizar cual;quier clase de movimientos. Porello en ciertas partes del cuerpo lacap;;' quttíuosa es más delgada yflexible, como sucede en la línea deseparación de los segmentos delcuerpo, mientras que en la regiónsuperior de los mismos la quitinaes gruesa y dura.

Comó ya he dicho, algunas vecespermanece blanda y flexible, cons-tituyendo una membrana articularque puede extenderse y replegarsealternativamente, para permitir laextensión o la flexión de los anillosque enlaza Para notar claramen-te tal propiedad obsérvese la parteiÍlferior de la región abdominal deun langostino.

El espesor y dureza de la capaquitinosa de los artrópodos impide

la existencia de pestañas vibrátiles,elemento principales de locomociónpara todos los tipos que le prece-den en la escala zoológica. El tra-bajo de locomoción en los artr ópo ,dos es reservado a apéndices espe-ciales.

Ellos se hallan, ubicados en lacara ventral de los diversos seg-mentos del cuer.po . Generalmenteexiste un par de apéndices por ca-da segmento.

Como la función de los mismoses locomotriz, no pueden llenar supapel más que a condición de estarformados por partes articuladas en-tre sí. Esta circunstancia es la queha dado origen al nombre de estetipo, Artrópodos, (Arthron: arti-culación; pous: pies).

Estos elementos se van luegoadaptando a los papeles más díver-

P¡"xas /)jd"clild~

-I--<1--/fPATAS AM8ulAroRI14s

HaKi/iprzdo

PATASA800MI"'ALCS~=----""""

lSQUEMA DE lOSPRINCIPALES

APENDICES DE VI'/.ARTROPODONADIlDERA CAUDAL -------,k,

Fig. 1

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CAPARAZOH

Fig. 2Desprendimiento del caparazón.

sos: tacto, respiración, aprehensióny masticación.

Los apéndices se clasifican porsu ubicación en tres clases:

Apéndices cefálíoos: (de la cabe-za). Se encuentran los apéndicessensoriales y los de apreh ensi ón ymasticación.

Apéndices torácicos: (del tórax).Se encuentran los órganos locomo-tores (patas ambulatorias).

Apéndices abdominales: (del ab-domen). Se adaptan a las funcio-nes de reproducción, natación o res-piración, aunque en a.lguas especiesse encuentran atrofiados.

El gráfico que reproducimos acontinuación nos dará una idea dela disposición de estos apéndices.

En general y considerando sola-mente un snbtipo de artr-ópodos, ve-mos que se diví deri en:

~RTROPODOS

I Acuáticos I. (braquedos)

\

provistos de CRUSTACEOSdos pares de

antenas ,

IAéreos 1(traque~os) :r-rIRlAPODOSprovistos deun solo par INSECTOSde antenas.

ler. Subtipo

Dada una idea general respectode los animales sobre los cuales va ,mos a trabajar, entraremos en ma-teria .

. CRUSTACEOS SUPERIORESPara embalsamar los mismos v

los procedimientos a seguir, estu-diaremos la realización de esta ta-rea sobre algunos de sus ejempla-res más comunes: cangrejos, Ia.n.,gostinos, langostas, centollas.

Preparación de los cangrejos1) Llmpíeza. - Para proceder a

la limpieza de estos animales se in-troduce en la región posterior desu caparazón un bisturí o corta-

plumas (figura 2), ejerciendo unapequeña presión hacia arriba, tra-tando de levantarla. Si ello no fue-ra suficiente, recorramos esa re ,gión posterior en toda su extensión,cortando y presionando con el bis-turí. Llegará así un momento enque el caparazón será desprendi-do, .levantándose hacia adelante, talcomo si destapáramos una caja conbisagras (en nuestro caso, las bisa-gras estarían dadas por los órga-nos bucales del cangrejo). La ope-ración realizada nos lleva rá a la po-sición que se muestra en el esque-ma de la. figura 3.

PATASPARTE. lNTE.RNA

DEL. CUt:.R.PIJ -c

Fig. 3 - Forma en que se levantael caparazón.

Fig. 4 - Vista interna. del capara-zón ~'a limpio.

Tiremos del 'caparazón hacia arrLba para separar-lo de la región don-de se encuentran alojadas las pa-tas (en otras palabras, del cuerpodel cangrejo).

Se procede luego a la limpieza de

esta pieza, oper acron muy fácil derealizar, pues toda la parte carno-sa ha quedado en el cuerpo. CQn-siste en someterla a un pequeño ras-pado y lavado, hasta que quede sinninguna adherencia (figura 4) .

La limpieza de lo que resta delcuerpo es más trabajosa. Con el bis-turí o cortaplumas, se desprende-rán las vísceras y la carne. Parasimplificar la labor conviene queesta operación se realice bajo unchorro de agua a efectos de quearrastre los tejidos desprendidos.

En el raspado, encontraremospartes más o menos duras, con as-pecto de cartilagos (figura 5), queforman el armazón o esqueleto delcangrejo y que no son otra cosa quelas partes quíttn osas que caracteri-za a estos animales.

En el raspado cuidaremos muyespecialmente éstas, tratando de noromperlas ni forzar las . Extraídacompletamente la carne, nos que-dará este armazón en forma de cú-pula. partida por su medio.

Si las dimensiones del ejemplarson más o menos grandes será ne-cesario sacar los músculos (Ia car-ne) del primero y segundo par delas patas delanteras. Para realizaresta operación se introduce en lapata y por el interior del cuerpo,un alambre con un pequeño ganchoen uno de sus extremos y haciéndo-lo girar con un movimiento de va.í ;vén arrancaremos toda la carne queen las mismas se encuentre.

Las pinzas didáétilas (figura 6)como se podrá observar, presentanuna parte abultada, donde se alojaasimismo mucha carnosidad que esnecesario sacar siempre, cualquierasea el tamaño del cangrejo. Es,pues, esta operación, necesaria entodo ejemplar que se trate. Parasu limpieza procedemos así: debe-

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Fig. 5 - Vista parcial del cuerpolimpio.

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PINZA

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Fig. 6 - Pinza ilidáctila desai-tt-,culada.

m os desprender de la pinza d idác-tila, su parte movible, es decir, lasuperior, por medio de tirones la-terales realizados en forma suave.Estos tirones relajan los músculosque la mantienen y que se han con-traído por la cocción a que se so-mete a estos animales antes de servendidos en los comercios de pes-querías. Juntamente con esta par-te movible, viene una porción o p ro-longación tegumentaria (a). Seraspará cuidadosamente e¡¡ta parteevitando toda rotura, pues ella nosservirá posteriormente, cuando rea-licemos el armado, para colocar yadherir la pieza desprendida en sucorrespondiente lugar.

Por la parte de la pinza que que.,da abierta, (b j , introduciremos unapinza y extraeremos todas las car-nosidades que contenga.

Limpiado el caparazón, el cuer-po las patas delanteras si fuere ne-ce~ario y ambas pinzas d ídáct ilas,sumergimos el conjunto en una so-lución de formol, que tiene comomisión destruir todos los residuoscarnosos que hubiesen quedado pordescuido como así también la deaq uellas' partes a las cuales no hu-biésemos podido llegar. Es uecesa-rio advertir que el .propósito de es-te trabajo es obtener la destruccióncompleta de toda materia orgánicasusceptible de descomposición, quede no ser así atentada contra nues-tro propósito, que tiende precisa-mente a la conservación de unejemplar con apariencias de natu-ralidad y vida.

La solución de que hago referen-cia es la siguiente:

PREPARADO No 4

Líquido conservador

Formol .. 10 gramosAgua ... ' " 70

En este baño se deja el animalde 5 a 7 horas.

Los ojos del cangrejo y en gene-ral de todo crustáceo. no deben ex-traerse, pues se conservan los na-turales perfectamente, adquiriendoel brillo perdido cuando en el aca-

bado general se le pasa una manode barniz.

2) Armado - Una vez que elcrustáceo ha sido sacado del bañoindicado corresponde que lo arme-mos, vale decir, lo reconstruyamostal cual su estado natural en vi-da' Debe trabaíarss apenas extraí-do del baño, cuando el animal estéaún húmedo, pues el formol tienela propiedad de endurecer los car-tílagos. Dejarlo secar traería enconsecuencia el endurecimiento pre-maturo del animal y 1'01' lo tantonuestro trabajo se echarí a a perder.

Fig . 7 - Posición inclinada qu.edebe darse al cuerpo.

El armado se debe realizar sobreuna plancha de corcho o en su de-fecto en un trozo de madera muyblanda, fácil de pinchar, pues laposi ción del cangrejo debe ser da-da con alfileres destinados a soste-ner en posición conveniente todassus partes. Coloquemos previamen-te, en su posición normal, la partedesarticulada de las pinzas didácti-

Fio·. 8 - Posición que debe darsea la pinza J a la pata.

las. Para asegurar las se pegan concola adhesiva (secotine).

Luego se acomorá el cuerpo delanimal sobre la plancha de corchode tal manera que su parte ante-rior quede más levantada que laposterior, formando un cierto án ,gulo como así se indica en el es-quema de la figura 7. Ello se lo-gra levantando, por medio de untrozo d3 madera, corcho o cartón,al parte anterior de!' animal.

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La pai·te posterior no debe tocarla plancha de corcho, debiendo es-tar separada de ésta en más o me-nos 1 ó 1y, centímetros

Se procederá luego a la d isposí ,ción y fijado conveniente de las pa-tas ambulatorias que realizaremospor medio de aÜileres cruzados aefecto de mantenerlas en posiciónadecuada. El esquema de la figuraX muestra cómo se deben disponerlas mismas o sea en forma de arco.Hay que tener en cuenta, que elprimer par, o sea el correspondien-te a las pinzas didáctilas debe colo-carse 01 posíclón levantada tal co-mo lo indica el mismo esquema,

Las pinzas didáctilas como se vese encuentran en posición bien dis.,Unta a las restantes. A este res-pecto ·debemos tener en cuenta lasiguiente indicación: la que corres-ponde a nuestra Izquier da, mirandoal cangrejo de frente, debe quedaralgo más levantada que la otra,pues es ésta la postura habitual deestos -animales .

Las demás patas ambulator+as,turno podrá observarse en la foto-grafía que publicamos quedan enforma de arco irradiadas.

En la cavidad correspondiente alcuerpo se colocará luego un algo-dón empapado en formol, con el ob-jeto de que no sólo la rellene si-no también par a -mejor conserva-ción del ejemplar.

Los alfileres utilizados en estetrabajo podrán adquirirse en las ca-sas del ramo, debiendo ser de unalongitud de 5 a 6 cms . y provistosde una cabeza más o menos abul-tada para su mejor manejo.

La observación de los gráficosque ilustran este trabajo darán unaidea más o menos aproximada dela posición normal. En esta posí ,ción se deja secar.

El caparazón antes de ser colo-cado se sumerge en trementina,pues este Iiqu id o tiene la funciónde fijar los pigmentos de aquél.

Cuando observemos que la por-

Fig. 9 - Perfil esquemático de laposición definitiva del ejemplar .

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cí ón armada se halla perfectamenteseca se colocará sobre ella el capa-razón en posición adecuada Y se lofija con cola adhesiva. Figura 9.

Pasaremos luego a todo el ejem-plar una serie de manos de formolque endurecerán los cart ílagos, dán.,dotes una perfecta rigidez. Poste-riormente se quíta rán los alfileresque lo sostienen.

Como complemento del armadose pasará una ligera mano de bar-niz natural que dará al ejemplarbrillo, -adqu í ri en do en consecuenciamayor vistosidad.

Para su exhibición se lo colocarásobre un trozo de vidrio o un rec-tángulo .de madera lustrada, a lacual irán adheridas las patas pormedio de secotine o cola similar.

Puede asimismo construirse unacaja de vidrio que lo contenga, dedimensiones convenientes

• 'Eutre los seres más extraños que puedenenconrrarse en las playas o junto a lasrocas del litoral, figuran ciertos caracoli-tos que de pronto vemos trasladarse, conmovimientos bruscos "l' rápidos de un sitioa otro. Si nos fijamos en ellos con más de-tenimiento, observaremos que, si bien el ca-parazón es indudablemente la de Un

caracol, el animal que lo ocupa. nada tieneque ver con los de este grupo, ya que estáprovisto de antenas finas y largas y variospares de fuertes patas.

"t Qué son, por lo tanto, estos curiososseres! Sencillamente unos cangrejos, losermitaños, que utilizan los caparazones va-cíos de los caracoles para resguardar sucuerpo, que por ser blando y jugoso es co-diciada presa para los pececillos y otrosanimales. que viven en los mismos lugares".

l/Si ~l 'e;mita'ño' ~ec~si'ta' ~o~er'se' a~a~z~su cuerpo fuera del caparazón . y saca suslargas patas que le permiten trasladarsede un sitio a otro en busca de alimento.

'tSobre el caparaz ón que les sirve a modode portátil vivienda llegan a veces, fuerte-

•Fig', 10

Dos aspectosdel trabajoterminado

y listo paracolocar en

la caja.

•

mente adheridas, vistosas auémonas o flc-res de mar, de llamativa. coloración, Estaunión de animales tan distintos no respondea un hecho casual, sino que de ella salenambos beneficiados, Las flores de mar loson porque el ermitaño, al moverse de unsitio para OtTO, las transporta, llevándolaslt. llUe\TOS lugares en que puedan encontrarmás fácilmente su alimento, El ermitañopor su parte, resulta en cierto modo pro-tegido por la anémona de mar, ya que éstatiene sobre sus numerosos y móviles tentácu-los cen tenares de órganos urbican tes muyapropiados para la defensa y dispuestossiempre para ser lanzados sobre cualquierser peligroso, Tales órganos han valido a 1&::-anámonaa el nombre de ortiga de mar, COlJ

que tamb ién se las conoce"."De tiempo en tiempo, a medida que'

el ermitaño va creciendo, ha de buscar nue-\'0 alojamiento, nuevo caparazón en que que-pa. su cuerpo, cada vez más voluminoso,Utiliza para este objeto, unas veces, algunaconcha que encuentre vacta, POI' habere-muerto el molusco que la formó; pero enotras ocasiones sostiene encarnizados com-

bates con éstos, disputándoles su inexpug-cable fortaleza, y en esta. lucha no siempreresultan vencedores los ermitaños, que enmuchos casos han de ret irarse maltre-

ellos" .I 'Es muy interesante el hecho de que el er-

mitaño, cuando efectúa UDO de esos ca.mbiosde domicilio, no olvida a sus buenas amigaslas flores de mar que estaban adheridassobre su antigua vivienda, sino que pareceper-su ad ir-las de que deben desprenderse deella, puesto Que va a quedar vacía, y lastraslada con todo cuidado sobre su nuevamorada, a la que se fijan fuertemente, Du-rante esta operación la anémona de mar noof:!"ece la menor reaistencia ni utiliza susmolestos órganos urticantes contra el can-grejo" .

'1 Asociados a los ermitaños, vemos ~D

otras ocasiones a distintos seres mar-inos.a más de las anémonas de mar mencionadas.y entre ellos es frecuente encontrar a cierta.esponjas, como las denominadas pan dt'gaviota, que en ocasiones cubren por com-pIeto la concha que encierra al cangrejo,daudo al conjunto extraño aspecto".

LOS CANGREJOS ERMITAÑOS(Del libro "LA VIDA DE LOS CRUSTACEOS" de BOLlVAR PIELTA1N)

Consejos para la Estufa SalamandraDamos a nuestros lectores un

procedimiento que les permitiráquemar leña en las estufas defuego continuo, tipo salamandra.

Bastará con disponer por en-cima del enrejado del aparatode calefacción un trozo de teji-do metálico de mallas exagona-

les, de dimensiones apropiadaspara formar una especie de ca-nastilla que afecte la forma delbrasero u hogar.

Este enrejado metálico tienepor objeto impedir que los tro-citos de leña encendidos puedanpasar a través 'de la reja y caer

en el cajón sin arder por com-pleto. Esto no impedirá quepueda utilizarse de tiempo entiempo y como es habitual, an-tracita a guisa de combustible.El único inconveniente que pre-senta el empleo de la leña en es-tas estufas es la necesidad depreparar-la del tamaño de la bocade carca de la estufa.