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ARTHUR C . DANTO

DESPUESDEL FIN DEL ARTEEI arte contemporimeo y elllnde de la hlstorla

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Sumarlo

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Not Andy Warhol (Brillo Box) d e M ik e B idlo, C ed id a po r el a rrista )I Bruno

C tt 11pl. uo ....

Int .roducci6n:moderno ,posmodernoy eontemporaneo

Casi a l m isrno riem po, perc ignorando cada cual el pensarniento delotro, el hisroriador aleman del arte Hans Belting'Y yo publicamos rextosa cerca del fin de l arte .' C ada uno alcanzo 1 3 vivida sensacion de q ue h ab iare nid o lu ga r u n cambia hisrorico irnporranre e n la s c on dic io ne s d e p ro du c-c ion de las artes visuales auncuando, aparenrcmenre, los c omp le jo s i ns ti -rucionales del mundo del acre -galerfas, . eseuelas de arte, revistas, rnuseos,instiruciones criricas, comisarios-s- parecian relativamenre establecidos,Belting publico d esp ue s u n a so rn bro so lib ra q ue tra za la h isro ria d e la s im a-genes piadosas end Occidenrecr istiano desde los riempos rornanos ha~ta,a pro xim ad arn en re , e l 1 40 0 d.C, al c ualle dio el sorprend enee subrirulo deLa imagen antes de faera del arte..Eso no significaba queesas imagenes nofueran arte e n un se ntid oam plio , sino que s u co nd ic io n anisciea no f igu ra -ba en la elaboracion de las rnlsmas, dado que el concepto dearte.aun nohabia aparecldo realrnerue en [a conciencia colectiva, Enconsecuencia esasirna genes ---de heche iconos=- tuvieron un papel basrante diferente e n lavida. de la s persona s del que tuvieron las obras de a rtec uando esc conce p-to aparecio a l fin y c om enzo a regir nuestra relacion c on ellas algo se me-jan te a unasconsideraciones estericas. N i siquiera eran consideradas enel

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2 6 DE pul!.s DEL FIN DEL ARTE I TROQU 10: MODRNO, I'OSMODERNO Y ONTEMPOllANEO 27

s en rid o e le me nta l de haber s ide p roduci das par a rtis ra s (s ere h urn an os q uebadan rnarcas e n una s uperficies), ino que eran observadas como si uorigen f ue ra m i la gr os o, com o la irnpresion de la im agen de Jesus en el velad Veronica.! L uego e tiene que habet pro ducido una pro funda disco nri-nuidnd en la pracrica artisticas enrre el antes y el despue d el c omi en zod la r de l arre, dado que eI concepro de arrista no enrraba en 1a explica-. n d la imagene piado as.' in embargo, rna tarde, en el R enaci-m renro, el concepro de artista se volvio central hasra el punto de que ior-gl a a ri e sc rib io u n g ra n libra sobre la vida de 1 0 artists . A nte rendriaqu haber sido a 1 0 sum o so bre la s vidas de lo s santo .

S i esro es concebible enronces pudo exi tir o tra disco nrinuida d, nom cno profunda que esta, entre el arre producido en la era del arte y el artepI ducido eras esa era. L a era del arre no com enzo abruprarnente en 1400,i ra mp 0 a abo de golpe ha ia mediado de 1 0 aiios ochenra uando

aparecieron los rexros, de Belting y rnio, en aleman e ingles, respe 0-v mente. T al vez ninguno de nosorros tenia una idea clara de 1 0 que rrata-arne de decir, com o debem o tenerla hoy, diez afios despues, Pero ahoraIII Belting ha Ilegad a la idea de un arte anterior al com ienzo de arre,I b erno pe nsa r e n el arte despues del fin del arre, omo i e stuvie emos enuna transicion de de 1 3 era del arte hacia orra cosa, uya forma ye tructu-r e acta aiin e debe enrender,

N inguno de nosotros form ula sus observaciones a la rnanera de un jui-io ritico del arte de nuestro tiem po. E n los ano! ochenta ciertos ts:_odcoradicale consideraron el t~m a de la rnuerre de la pintura y basaron sus jui-

en L a a firrn ac io n d e q ue la p in ru ra v an gu ard is ra p are cia rn os tra r re doII ign de un a oram iento inrerno, 0, po r 1 0 m en os , u n lim ite m arc ad om alia del cual no era posible avanzar, e referfan a las pinturas blanca deR bert Ryman 0 tal vez a la monotones y agresivas pinruras rayada delartista frances D aniel Buren, y hubiera side dificil no considerar su ob er-a iones, en cierto s ntido, como un juicio critico obre estes do arrista yo bre la p in ru ra e n g en era l.

Pero era ba rante coherenre con el final de la era del arte tal com BeI-ring y yo 1 0 entendiamos, que el arte fuese extremadamente vig roy norno strase ningtin signo de a go ram ienro interne . L a nuesrra era un II. rna-da de atencion acerca de como un omplejo de pracrica dieron lug. r aorras, aun cuando 1a f orm a del nuevo com plejo perm anecfa (y todavia p .r-rnanece) oscura. N inguno de nosorro hablaba sobr la muerte d -I rtc,