Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: ¡Señor,

sálvanos, que perecemos!Él les dijo: ¿Por qué teméis,

hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los

vientos y al mar; y se hizo grande bonanza. Mateo 8:25-26

Hay dificultades que continúan en este año.

Echemos un vistazo:

Una enfermedad: Una dolencia es motivo de

mucha preocupación ¿Verdad?

Pero usted está en las manos de Dios y él no lo abandonará.

¿Lo cree?

Falta de recursos:¡Ah, los recursos!

Esto afecta a todos o casi a todos los cristianos en todas partes.

Pero no olvide que Dios es nuestro proveedor.

Crisis familiar:Esto es un tema generalizado; muchos hogares están siendo

afectados.

Pero Dios es Padre de misericordias y Dios de toda consolación.

Desinterés Espiritual:Este estado es muy peligroso, ya que no

solo ataca a lo físico, sino a lo espiritual, su efecto es devastador, lo aleja de la de la comunión con Dios.¡Cuidado usted caiga en ese estado!

¿Qué hacer en medio de una crisis?¿Qué hacer cuando todo salga mal?

Solo hay una opción:

Dejar nuestros asuntos en las manos de Dios, esto es dedicar un tiempo a

solas con Dios.

Que las tormentas en este nuevo año no debiliten nuestra fe.

Antes por el contrario, sean fortaleciéndola, sabiendo que su

venida está cerca.Daniel Zambrano V.