Download - Enseñanzas del papa francisco no.78
Enseñanzas del Papa Francisco .No.78
Enseñanzas del Papa Francisco .No.78
El 27 de octubre dijo: …“La familia cristiana, la familia, el matrimonio,
nunca fue tan atacado como ahora”...
El 27 de octubre en parte de su homilía dijo:
…“A las personas se les reconoce por sus palabras”….¿Cuál es, por tanto la palabra de los Santos,
es decir la de los hijos de la luz?
“Lo dice San Pablo: ‘Háganse imitadores de Dios: caminen en la caridad; caminen en la bondad; caminen en la mansedumbre. ‘Sean misericordiosos perdonándose
recíprocamente, como Dios los ha perdonado a ustedes en Cristo. Háganse, por lo tanto, imitadores de Dios y caminen
en la caridad’, caminen en la misericordia, en el perdón. Ésta es la palabra de un hijo de la luz”.
Hay cristianos “luminosos, llenos de luz” con la que tratan de servir al Señor; así como hay “cristianos
tenebrosos” que conducen “una vida de pecado, una vida alejada del Señor” …
“hay un tercer grupo de cristianos”, que no son “luminosos ni oscuros”
En el Apocalipsis el Señor rechaza a estos cristianos. “‘Pero no, tú no eres ni caliente,
ni frío. Ojalá fueras caliente o frío. Pero porque eres tibio – tan gris – estoy por vomitarte de mi boca’. El Señor es fuerte con los
cristianos grises. ‘Yo soy cristiano, ¡pero sin exagerar!’ dicen, y hacen tanto mal,
porque su testimonio cristiano es un testimonio que, al final, siembra confusión, siembra un testimonio negativo”.
“No dejarse engañar por las palabras vacías, pues “oímos tantas, algunas bellas, bien
dichas, pero vacías, sin nada adentro”.
“Comportémonos en cambio como hijos de la
luz”. “Nos hará bien hoy pensar
en nuestro lenguaje y preguntarnos: ¿Soy cristiano de la luz?
¿Soy cristiano de la oscuridad? ¿Soy cristiano
gris? Y así podemos dar un paso adelante para encontrar al
Señor”.
El 28 de octubre dijo: María Madre y Educadora“…María es la que sabe transformar una cueva de animales en casa de Jesús con unos pocos trapos y una montaña de
ternura. Y es capaz también de hacer saltar un chico en el seno de su madre como escuchamos en el Evangelio. Ella es capaz
de darnos la alegría de Jesús.
No se puede concebir ningún otro título de María que no sea ‘la Madre’.
Ella es Madre porque engendra a Jesús y nos ayuda con la fuerza del Espíritu Santo a que Jesús nazca y crezca en nosotros. Es la que
continuamente nos está dando vida. Es Madre de la Iglesia. Es maternidad.
No tenemos derecho, y si lo
hacemos estamos equivocados, a tener psicología de
huérfanos. O sea, el cristiano no tiene
derecho ‘a ser huérfano’. Tiene Madre.
Tenemos Madre.Madre. Es Madre no sólo que nos da la vida sino que nos
educa en la fe. Es distinto buscar crecer en la
fe sin la ayuda de María. Es otra cosa.
Es como crecer en la fe sí, pero en la Iglesia orfanato.
Una Iglesia sin María es un orfanato…
…María es la que ayuda a bajar a Jesús.
En el abajamiento de Jesús. Lo trae del cielo a convivir
con nosotros.Y es la que mira, cuida, avisa.
…En el momento, en los momentos de turbulencia
espiritual, no queda otra que acogerse bajo el manto de la Santa
Madre de Dios. Es la que protege, la que
defiende.
Acordémonos del Apocalipsis, la que sale con el chico en
brazos corriendo para que el dragón no devore al chico. Por más que conozcamos a
Jesús, nadie puede decir que es tan maduro como para prescindir
de María. Nadie puede prescindir de su
madre.
El 30 de octubre dijo en parte de su homilía: …“la vida en Dios se debe defender,
se debe luchar para llevarla adelante», se necesita fortaleza y valentía
“para resistir y anunciar”. Para “ir adelante en la vida espiritual se debe combatir.
No es una simple lucha, sino un combate continuo”.
…Los enemigos de la vida cristiana son el demonio, el mundo y la carne. Entonces “¿de qué me tengo que defender? ¿Qué tengo que hacer? ‘Revístanse con la
armadura de Dios’ nos dice San Pablo.
Es decir que lo que es de Dios nos defiende, para resistir a las insidias del diablo.
… No se puede pensar en una vida espiritual, en una vida cristiana,
sin revestirse de esta armadura de Dios, que nos da fuerza
y nos defiende”.
San Pablo subraya que esta lucha no es contra las cosas pequeñas,
“sino contra los Principados y Potestades, contra los Soberanos de este mundo de tinieblas,
contra los espíritus del mal. Es decir, contra el diablo y los suyos”.
Sin embargo,
“a esta generación y a muchas otras se les ha hecho creer
que el diablo era un mito, una figura, una idea,
la idea del mal ¡pero el diablo existe y
nosotros debemos combatir contra él!
¡Lo dice San Pablo, no lo digo yo!
¡Lo dice la Palabra de Dios! Aunque no estamos muy
convencidos de ello”.
Además “San Pablo dice cómo es la armadura de Dios, cuáles son las diversas armaduras, que conforman esta
armadura de Dios. Y señala: ‘Permanezcan de pie, ceñidos con el cinturón de la verdad y
vistiendo la justicia como coraza’. Ésta es la armadura de Dios: la verdad”.
“El diablo es mentiroso, es el padre de los mentirosos, el padre de la mentira”
“no se puede ser cristianos, sin trabajar continuamente para ser justos. No se puede”.
“Nos ayudaría mucho preguntarnos ¿creo o no creo? ¿creo un poco sí y un poco no? ¿soy un poco mundano y un
poco creyente? Sin fe no se puede ir adelante,
no se puede defender la salvación de Jesús”.
“Necesitamos el escudo de la fe, porque el diablo no nos tira flores,
sino flechas encendidas, para asesinarnos”. Por ello, “tomemos el casco de la salvación, y la espada del
Espíritu, que es la Palabra de Dios y “elevemos constantemente toda clase de oraciones y súplicas, animadas por el Espíritu”.
“La vida cristiana es una lucha, una lucha bellísima,porque cuando el Señor vence en cada paso de nuestra
vida, nos da una alegría, una felicidad grande: esa alegría que el Señor ha vencido en nosotros, con la gratuidad de su
salvación”.
“Pero todos somos un poco perezosos, en la lucha, y nos dejamos llevar por las pasiones, por algunas
tentaciones. Es porque somos pecadores ¡todos! Pero no se
desalienten. Ánimo, valentía y fortaleza, porque el Señor está con
nosotros”.
El 31 de octubre dijo: El cristiano inhala la oración y exhala la misión, la
importancia del rezo en la vida del católico, pues gracias a este recibe “el aire fresco del Espíritu”.
“La respiración tiene dos fases: inhalar, o sea meter el aire dentro y exhalar,
esto es, dejarlo salir. La vida espiritual se alimenta, se nutre con la oración,
y se manifiesta en la misión: inhalación, la oración, y exhalación. Cuando respiramos, en la oración, recibimos el aire fresco del
Espíritu y al exhalarlo proclamamos a Jesucristo suscitado por el mismo
Espíritu. Nadie puede vivir sin respirar”.
“Lo mismo sucede con el cristiano: sin alabanza y sin la misión no vive como un cristiano.
…Esto forma parte de la respiración: la alabanza y la adoración”.
… “la alabanza es la inspiración que nos da la vida, porque es la intimidad con Dios que cada día crece con
la alabanza”…
1 de noviembre dijo al presidir el rezo del ángelus: “…En efecto, celebrando a todos los Santos y conmemorando
a todos los fieles difuntos, la Iglesia peregrina en la tierra vive y expresa en la Liturgia el vínculo espiritual que la une a
la Iglesia del cielo”.
“Hoy alabamos a Dios por la multitud innumerable de los santos
y de las santas de todos los tiempos: hombres y mujeres comunes, simples,
a veces ‘últimos’ para el mundo, pero ‘primeros’ para Dios”.
Al mismo tiempo que a los santos “recordamos a nuestros queridos difuntos visitando los cementerios: ¡es motivo de gran consolación pensar que ellos están en compañía de la
Virgen María de los Apóstoles, de los mártires y de todos los santos y santas del
Paraíso!”.
…“¿Qué significa la comunión de los santos?” “es la unión común que nace de la fe y une a todos
aquellos que pertenecen a Cristo, gracias al Bautismo”.
“Se trata de una unión espiritual - ¡todos estamos unidos!
- que no se quiebra después de la muerte, sino prosigue en la otra vida. En efecto, subsiste un lazo indestructible entre nosotros vivientes en
este mundo y cuantos han cruzado el umbral de la muerte”.
“nosotros aquí en la tierra, junto con los que han entrado en la eternidad, formamos una sola gran
familia. Se mantiene esta familiaridad.
Esta maravillosa comunión, esta maravillosa unión común entre tierra
y cielo se actúa de forma más elevada e intensa en la Liturgia y, sobre todo,
en la celebración de la Eucaristía, que expresa y realiza la unión más profunda entre los miembros de la Iglesia”.
“En la Eucaristía, en efecto, nosotros encontramos a Jesús vivo y su fuerza,
y a través de Él entramos en comunión con nuestros hermanos en la fe:
aquellos que viven como nosotros aquí en la tierra y aquellos que nos han precedido en la otra vida, la vida sin fin”.
““esta realidad nos colma de alegría: es hermoso tener tantos hermanos en la fe que caminan a nuestro lado, nos
sostienen con su ayuda y junto con nosotros recorren el camino hacia el cielo”.
“Y es consolador saber que hay otros hermanos que ya han alcanzado el cielo, nos esperan y rezan por nosotros, para que juntos podamos contemplar en la eternidad el rostro
glorioso y misericordioso del Padre”.
“en la gran asamblea de los Santos, Dios ha querido reservar el primer lugar a la Madre de Jesús. María está en el centro de comunión de los santos, como singular custodia del vínculo de la Iglesia universal con Cristo,
del vínculo de la familia”.
“Ella es la Madre, Ella es la Madre nuestra,
nuestra Madre”. “para el que quiere seguir a Jesús por la
senda del Evangelio, Ella es la guía segura, porque es la
primera discípula. Ella es la Madre que acorre en seguida,
siempre atenta, a la cual confiar todo anhelo y
dificultad”.
“¡Recemos junto con la Reina de todos los Santos para que nos ayude a responder con generosidad y fidelidad a Dios que nos llama a ser santos como Él
es Santo!”.
El 2 de noviembre dijo al presidir la Misa en la fiesta de todos los santos: …Cuánta necesidad tenemos de la fuerza del Señor para que nos selle con su amor y con su fuerza
para detener esta loca carrera de destrucción. Destrucción de aquello que Él nos ha dado;
de las cosas más bellas que Él ha hecho por nosotros, para que nosotros las lleváramos adelante, las hiciéramos
crecer, dar frutos.
…El hombre se ha adueñado de todo, se cree Dios, se cree el Rey.
Y las guerras, las guerras que continúan, no precisamente sembrando semillas de vida. Para destruir. Pero, es la
industria de la destrucción. Es un sistema, también, de vida, que cuando las cosas no se
pueden arreglar,se descartan: se descartan los chicos, se descartan los
ancianos, se descartan los jóvenes sin trabajo.
Esta devastación ha hecho la cultura del descarte.
…La bendición del Señor que todavía tenemos: la esperanza. La esperanza que tenga piedad de su pueblo, que tenga
piedad de aquellos que están en la Gran Tribulación. También, que tenga piedad de los destructores y se
conviertan.
Y así, la santidad de la Iglesia va adelante: con esta gente,
con nosotros que veremos a Dios como Él es. Y ¿cuál debe ser nuestra actitud, si queremos entrar en
este pueblo y caminar hacia el Padre, en este mundo de devastación, en este mundo de
guerras, en este mundo de tribulación? Nuestra actitud,
lo hemos escuchado en el Evangelio: es la actitud de las Bienaventuranzas.
Solamente este camino nos llevará al encuentro con Dios.
Solamente este camino nos salvará de la destrucción, de la devastación de la tierra, de la creación, de lo
moral, de la historia, de la familia, de todo. Solamente este camino: pero nos hará pasar cosas feas, ¿eh? Nos
traerá problemas. Persecuciones.
…Solamente este camino nos llevará adelante. Y así, este pueblo que tanto sufre hoy por el egoísmo de los
devastadores, de nuestros hermanos devastadores, este pueblo va adelante con las Bienaventuranzas,
con la esperanza de encontrar a Dios, de encontrar cara a cara al Señor,
con la esperanza de hacernos santos, en aquel momento del encuentro definitivo con Él.
El Señor nos ayude y nos de la gracia de esta esperanza, pero también la gracia de la valentía para salir de todo aquello que es destrucción, devastación, relativismo de
vida, exclusión de los otros, exclusión de los valores, exclusión de todo aquello que el Señor nos ha dado:
exclusión de paz. Nos libre de esto, y nos de la gracia de caminar con la esperanza de encontrarnos un día cara a
cara con Él. Y esta esperanza hermanos no defrauda.
El 2 de noviembre dijo al presidir el rezo del ángelus en la fiesta de los fieles difuntos: “la muerte no es la última
palabra sobre el destino del ser humano”. “El hombre está destinado a una vida sin límites,
que tiene sus raíces y su realización en Dios”.
…“Jesús mismo reveló que la muerte del cuerpo es como un sueño del que Él nos despierta”. “Con esta fe nos
detenemos - incluso espiritualmente - en las tumbas de nuestros
seres queridos, de cuantos han deseado el bien y han hecho el bien”.
…“estamos llamados a recordar a todos, incluso aquellos de los que no se acuerda nadie”.
…“La tradición de la Iglesia siempre ha instado a rezar por los difuntos,
en particular, ofreciendo por ellos celebración Eucarística: esa es la mejor ayuda espiritual que podemos dar a sus
almas, especialmente a los más abandonados”.
“Con esta fe en el destino último del hombre, nos dirigimos ahora a la Virgen María, que sufrió bajo la Cruz el drama de
la muerte de Cristo y ha participado en la alegría de su resurrección”. Pidamos el auxilio de la Virgen María, “Puerta del Cielo”, para poder
“comprender cada vez más el valor de las oraciones de sufragio por los muertos.
¡Están cerca de nosotros!”.
“Ella nos apoya en nuestra peregrinación diaria en la tierra y nos ayuda a no perder de vista el objetivo final de la vida
que es el Paraíso. Y nosotros con esta esperanza que no defrauda, ¡vamos a
seguir adelante!”.
En twitter dijo:
Ayudemos a los demás a descubrir la alegría del mensaje cristiano: un mensaje de amor y de
misericordia.
La misión principal de la Iglesia es evangelizar:
llevar la Buena Noticia a todos.
¡Cuánto bien podemos hacer con el buen ejemplo
y cuánto mal con la hipocresía!
Si deseas recibir mails, relacionados con la Iglesia: que contienen diapositivas, vida de Santos,
Evangelio del Domingo, etc . :Escribe a
con el título suscripciones . Servicio Gratuito.
Que Dios te llene de bendiciones. Y que permanezcamos unidos en el
amor a Jesús.
Si deseas recibir mails, relacionados con la Iglesia: que contienen ,diapositivas, vida de Santos
Evangelio del Domingo, etc . Escribe a:
con el título suscripciones . Servicio Gratuito.
Que Dios te llene de bendiciones.Y que permanezcamos unidos en el
amor a Jesús.