DÍA INTERNACIONAL DE LA

MUJER

Trótula de Salerno

Trótula de Salerno fue una gran

médica hace muchos años.

Nació en la cuidad de Salerno y

creció muy feliz con su familia.

La cuidad de Salerno era muy

importante, porque tenía un puerto

marítimo donde llegaban alimentos,

telas, metales y libros.

También existía una escuela muy

importante: La Escuela de

Salerno. Era una escuela de

medicina.

En la escuela de Salerno, hombres y

mujeres estudiaban juntos.

Esta escuela no creía en la magia

ni en la religión. Creía en la

naturaleza y en la experiencia.

Las mujeres que estudiaron en la

escuela de Salerno fueron conocidas

como las Damas de Salerno. Entre

ellas está Trótula.

Las mujeres que se dedicaban a la

medicina en aquella época eran

consideradas brujas.

En esa época el mundo estaba

pensado solo para los hombres.

Trótula sabía que las mujeres necesitaban a médicas para

contarle sus males. Las mujeres no eran capaces de

mostrar sus dolencias a los médicos. Sentían mucha

vergüenza. Por eso Trótula estudió cómo ayudarlas.

Trótula ayudó a muchas mujeres.

Las ayudó a no sufrir cuando no podían quedarse embarazadas. Ellas no tenían por qué ser las culpables. El hombre también era responsable.

Cuando quedaban embarazadas,

las ayudaba a cuidarse durante el

embarazo y a dar a luz.

Les enseñó lo importante que era

la higiene para estar sanas.

También descubrió lo importante que

era la alimentación en la mujer a

todas las edades, y sobre todo durante

el embarazo.

Después del parto ayudaba a las mujeres a

estimular a sus hijos con la mirada y el oído.

También les hacía pomadas para calmar al

bebé cuando le salían los dientes.

Las mujeres debían practicar deporte

para estar sanas. El deporte no era

solo para los hombres.

Le explicó a las mujeres que tuvieran

mucho cuidado con lo que utilizaban

en su piel para estar guapas. Podía ser

peligroso.

Trótula sabía que los padres podían

cuidar a sus hijos y a sus hijas igual

de bien que las madres.

Las mujeres pasaban en aquella época mucho tiempo

solas. Se sentían muy tristes. Trótula las ayudaba a

volver a sentirse felices, gracias al estudio y a las

artes.

Pero Trótula también sufrió mucho.

Su marido Giovanni la ayudó a publicar todo

lo que Trótula había aprendido sobre cómo

ayudar a las mujeres. No creían que una

mujer pudiera ser tan inteligente.

Durante muchos años, los grandes

conocimientos de Trótula se enseñaron en

las universidades de medicina, pero sin

saber que los había desarrollado ella.

Hoy, hombres y mujeres pueden practicar la medicina en igualdad. Nos ayudan a estar sanos.

Gracias Trótula, por no rendirte y

por enseñarnos tanto.