l Hombres 20 años cotizando sin pausa hasta los 65 = $251.400

l Mujeres mismas condiciones $198.000ingreso x jubilación.

Fuente: Informe de la OCDE, Pensions at a Glance 2013.

eljacobinoideas y prácticas para cambiar Chile y el Mundo

E4141014

[ [Chilenos con vejez de mierda

.clUnidad + unidad

[ [l El secreto de la libertad radica en educar a las

personas, mientras que el secreto de la tiranía está en mantenerlos ignorantes. Maximilien Robespierre

Aprenderde la historia

Un nombre en las estrellas

Hoy lo comprobamos al apreciar la dico-tomía entre aquellas opciones políticas de muchos en nuestra sociedad. La necesidad de reformas necesita ese actuar de Martí y fundamentalmente con unidad. Asimismo, el dinero se colisiona con políticos que no trepidan en utilizar cualquier método (represivo, comunicacional, detener el país económica y socialmente) para defender sus intereses. Frente a ello es necesaria una amplia unidad de los sectores progre-sistas. P.2.

“Más importante que el decir es el actuar” afirmaba con fuerza José Martí.

Plebiscito vinculante

Hoy es el momento de superar los temores a perder el control político P.3.

El accionar del MIR estuvo orientado a llevar a cabo las cuarenta medidas de la

Unidad Popular, oponiendo la vía de la movilización a la de la consolidación de los

logros. P.4.

miedo & drogadosENFERMOS DE

A nosotros nos queda la responsabili-dad de hacer carretes lúcidos que son algo así como lo que antes se llama-ba, la conciencia crítica. P.7.

l Del fanatismo a la barbarie media solo

un paso. Denis Diderot

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Colectivo El JacobinoComité: Coral Pey, Marta Yañez, Jorge Coloma, Francois Richard,

Nicolás Yañez, Patricio Rifo, Enrique Correa, Sergio Navarrete. Invitados:

Jaime Coloma, Ramón Castillo, Sergio García, Felipe Michea, Fernando

Viveros, Tamara Lobos, Juan Guillermo Ossa, Paul Walder y María

Paulina Soto.

Las opiniones vertidas en esta publicación son de exclusiva

responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la

línea editorial de El Jacobino.

Derechos reservados 2014.

reflexión

unidad, unidad, unidad

mem

oria

popu

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“Más importante que el decir es el actuar” afirmaba con fuerza José

Martí. Hoy lo comprobamos al apreciar la di-cotomía entre aquellas opciones políticas de muchos en nuestra sociedad. La necesidad de reformas necesita ese actuar de Martí y con unidad.

La reforma educacional es un bastión que la exige. Esencialmente basada en la mo-vilización social aprobada con más de un 80% de la sociedad. Al parecer lo enviado por el ejecutivo no plasma esa necesidad, porque en la coalición gobernante no existe uniformidad para aprobar los tres ejes fundamentales del proyecto reforma-dor. Además, se dificulta este panorama, al aparecer, por la división entre los estudian-tes. Esto facilita que una clase empresarial, lucradora de la educación, recurra a todos los medios para alterar el real sentido de la reforma.

rio. La clase responsable de la marginación mapuche, pretende reimplantar la Ley Antiterrorista y aumentar la represión.

Para ello, se coluden y no les importa des-prestigiar aún más la política: Hoy, se ven involucrados en el escandaloso negocio del grupo Penta. Sin embargo, apoyados en sus medios, tratan de desprestigiar ejemplos de transparencia política como lo representa Giorgio Jackson. La bancada estudiantil junto a Vlado Mirosevic -por el contrario- hace propuestas para financiar las des-iguales campañas políticas; para impedir el financiamiento de empresas.

El dinero se colisiona con políticos que no trepidan en utilizar cualquier método (represivo, comunicacional, detener el país económica y socialmente) para defender sus intereses. Frente a ello es necesaria una amplia unidad de los sectores progresistas.

Unidad y consenso en sus propuestas para un país más justo y democrático. Des-de este fundamento es posible negociar hasta con los sectores conservadores de la sociedad, sin alterar la necesaria coheren-cia entre el decir y el actuar que exigió la ciudadanía para superar la desigualdad en el país

El dinero se colisiona con políticos que no trepidan en utilizar cualquier método (represivo, comunicacional, detener el país económica y socialmente) para defender sus intereses. Frente a ello es necesaria una amplia unidad de los sectores progresistas.

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Abraham Lincoln

"Somos más bien los vivos los que debemos consagrarnos aquí a la gran tarea que aún

resta ante nosotros: que de estos muertos a los que honramos tomemos una

devoción incrementada a la causa por la que ellos dieron la última medida colmada de celo. Que resolvamos aquí

firmemente que estos muertos no habrán dado su vida en

vano. Que esta nación, Dios mediante, tendrá un nuevo

nacimiento de libertad. Y que el gobierno del pueblo, por

el pueblo y para el pueblo no desaparecerá de la Tierra».

Abraham Lincoln, Discurso de Gettysburg (19.11.1863)

Apoyándose en los medios e invirtiendo grandes sumas de dinero moviliza a sus pares ideológicos. Busca deslegitimar el sentir mayoritario de educación gratuita, de calidad para todos, poniendo fin al lucro y a la segregación. En otro ámbito social, sectores reaccionarios intentan boicotear la comisión de salud que intenta frenar el lucro en esta actividad. El diálogo entre fuerzas progresistas dentro y fuera de la Nueva Mayoría es imperioso.

Por otro lado, la violencia, un germen que tanto daño ha provocado en la sociedad, y en especial a los más desposeídos, vuelve a estar muy presente con los atentados en el Metro y otros lugares de congestión popular.

Las víctimas son trabajadores (as). Aún no está claro quiénes son los responsables de estos hechos. Sin duda han provocado angustia y miedo en la gente sencilla. Las fuerzas conservadoras aprovechan esta coyuntura para exacerbar las decisiones represivas.

Así lo quieren hacer en la Araucanía. Esta región sigue siendo un foco de rebelión y violencia frente a la desesperanza de encontrar justicia en un conflicto centena-

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plebiscito vinculantenecesidad comunal y de país

ciudadanojorgecoloma

Nadie puede dudar que la forma más de-mocrática y directa de gobernar un país

es aquella donde se instala un sistema “del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. Es la forma más participativa de soberanía popular, ya definida en 1863 por Abraham Lincoln.

Consecuentes con este principio, podríamos resolver los problemas esenciales de nuestra

vida nacional como comunal a partir de ple-biscitos vinculantes, tanto para el necesario cambio constitucional como para diseñar las transformaciones que necesitan nuestros barrios. Con ellos, promoveríamos una for-ma de tomar decisiones políticas priorizan-do la decisión ciudadana y dignificando a la clase política para diseñar en conjunto el país que queremos.

Sin embargo, la aplicación del plebiscito no es de aceptación unánime en el conjunto de las fuerzas progresistas. Se ha impuesto una forma de hacer política –hoy despresti-giada- que da prioridad a los consensos con la derecha (de origen dictatorial) por sobre aquellos factibles de realizar con el “pue-blo”. Hoy dominan prácticas centralizadas y temerosas de las decisiones populares que son propias de una forma de hacer política post- dictatorial.

A través de la Constitución del 80, se insta-

laron las condiciones para una democracia que impide hasta ahora -por proporciones de mayoría en el Congreso- el cambio demandado por la ciudadanía. Si se sigue la línea institucional de votación parlamentaria, aceptando los 3/5 o los 2/3 exigidos, no va a ser posible un cambio constitucional que represente la voluntad popular. Cada una de las alternativas va a necesitar de quienes son soportes y beneficiarios de la Consti-tución ilegítima del 80, con los consiguien-

tes acuerdos que desvirtuarían el cambio requerido. Se deben abrir otras opciones. Estas opciones se abren, por un lado, con la significativa votación ciudadana marcando “AC” en la última elección presidencial. Por otro y desde un análisis constitucionalista, se propone modificar al art. 15 de la Constitución para que a través de un plebiscito, se haga posible el cambio constitucional (Fernando Atria). De otra forma, las fuerzas conjuntas que están por el cambio constitucional no cumplirán con su objetivo. Específicamente, Nueva Mayoría, no cumplirá con el programa para el cual fue elegida.

En la vida cotidiana de los barrios se va im-poniendo una pérdida de la calidad de vida a través de un nuevo paisaje urbano: los Malls y las vías rápidas impactan en las comunas con su respectiva delincuencia, “tacos”, destruc-ción de áreas verdes, de la pérdida de la vida en barrios. La ciudadanía requiere participar. Las alcaldías progresistas y sus consecuentes

concejales están conscientes de ellos. El ple-biscito vinculante es una opción para resolver tales problemas comunales. Sin embargo, las iniciativas progresistas todavía no tienen el consenso necesario para dar curso a esta decisión democrática y participativa. Hay una fuerte tendencia oficialista que prefiere el camino de los acuerdos supra estructurales o el control de la iniciativa ciudadana.

Para ello utiliza una supuesta participación

popular a través de los llamados cabildos o diálogos ciudadanos, captando selectivamen-te la opinión de asistentes que se traducen en un texto acorde a los organizadores. Todo preparado de antemano, con preguntas factibles de responder en el tiempo que le dejan a la “ciudadanía” las exposiciones latas de “expertos”. Lo peor, con una participación no representativa de la comunidad. Esta me-todología facilita el control de la participación y no la participación real.

Hoy es el momento de superar los temores a perder el control político para que desde las comunas y su proyección a nivel nacional se produzca el diálogo ciudadano a través de su instrumento más participativo: el plebiscito vinculante. Así, podremos diseñar la vida que queremos, mejorando la calidad de vida “del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” desde la misma comuna y, final-mente, haciendo posible el cambio constitu-cional que se le ofreció al país

Hoy es el momento de superar los temores a perder el control político.

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vivelohoy.com

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en las estrellasciudadanacoralpey

Mario Amorós publica libro sobre Miguel Enríquez

UN NOMBRE

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Sucedió en las postrimerías de septiem-bre, cuando la memoria se exacerba

con el 11 y los muertos están más vivos que nunca: el historiador español Mario Amorós, llenó las librerías de esta capital con su libro “Miguel Enríquez: un nombre en las Estre-llas. Biografía de un revolucionario.” Este hecho, junto a los múltiples homenajes y actividades de reflexión en los más variados espacios, desde universidades, centros de estudio, teatros y plazas. Entre las últimas, la inauguración de una que llevará su nom-bre en la población La Bandera, en el mismo lugar de la emblemática toma de terrenos durante la dictadura.

Vale la pena mencionar la presentación del libro en el salón de honor de la Casa Central de la Universidad de Chile, con el rector a la cabeza, como uno de los expositores.

Como el mismo autor ha señalado, tuvieron que pasar varias décadas para contrarres-tar la leyenda negra que en Chile se ha ido tejiendo durante 40 años contra el MIR y contra Miguel Enríquez. Leyenda negra que, como señaló el rector de la Universidad de Chile en el acto de lanzamiento, forma parte de lo no dicho, del silencio que ha habido en nuestro país con respecto a todos aquéllos que pensaron que el tema del poder pasaba por el enfrentamiento armado y se prepara-ron para todas las formas de lucha.

Así, el MIR estuvo consignado a círculos ideologizados, en el que el aspecto militar era lo central, por sobre cualquier otro plano del quehacer político, a lo que, por supues-to, contribuyeron ex dirigentes o personajes que en algún momento estuvieron vincula-dos al movimiento, los que ante la prensa sensacionalista no tuvieron la capacidad ni voluntad de centrar sus reflexiones a lo medular de sus aportes a la historia de este país: el haber sido la primera organización de izquierda en desligarse de la política de bloques durante la guerra fría, y volverse hacia América Latina, reconociéndose en las

luchas de los movimientos de liberación na-cional que se estaban librando en la región; en el sentirse herederos de la concepción del Ché de la revolución como un proceso integral, y su idea del hombre nuevo.

Fundamentalmente, en plantear la creación de poder popular en fábricas, poblaciones, campos y escuelas, trabajando codo a codo con los más pobres, para que, a través de la organización, “los pobres del campo y la ciudad” cambiaran sus condiciones mate-riales de vida.

Como algunos, certeramente a nuestro juicio, han planteado, el accionar del MIR es-tuvo orientado a llevar a cabo las cuarenta medidas de la Unidad Popular, oponiendo la vía de la movilización a la de la consoli-dación de los logros, en un escenario muy complejo. Con la debida distancia que los años brindan, llama la atención el que no haya formado parte del gobierno de la Unidad Popular, el más digno y audaz de la historia de este país.

Pero este espacio político, con sus aciertos y errores, fue quizás la expresión más extrema de una generación, la de los años 60 y 70, que planteó una crítica integral al sistema capitalista y la sociedad de consumo y quiso cambiar el mundo. Y ello es digno de destacarse en un presente donde la política, por lo general, se ha convertido en una ac-tividad degradada; donde la política ha sido reemplazada por la tecnocracia y donde lo popular es algo profundamente desconoci-do y subvalorado.

De ahí que cobre pleno sentido la pregunta que en dicho acto en la Casa de Bello plan-teaba Gabriel Boric: si esta nueva genera-ción, signada por las gigantescas moviliza-ciones del 2011, recoge lo mejor de la de los años 60 y 70, que se las jugó por cambiar las cosas desde un compromiso activo, una nueva épica para una nueva ética, la de la coherencia

El accionar del MIR estuvo orientado a llevar a cabo las cuarenta medidas de la Unidad Popular, oponiendo la vía de la movilización a la de la consolidación de los logros.

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ciudadanaenriquecorrea

Los niveles de desigualdad a los que se está llegando en la gran mayoría de los países y a nivel global, alejan a la humanidad de los

ideales democráticos de igualdad política surgidos de las revolucio-nes americana y francesa hace poco más de dos siglos, básicamente porque la desigualdad económica trae aparejada una distribución desigual del poder.

Nunca antes ha habido más riqueza pero tampoco tanta desigualdad. Según informes OCDE, en EE.UU. el 1 % de la población con más ingre-sos acapara el 20% de las riquezas, un porcentaje que duplica la cifra de 1981 y que hace dormir al sueño americano. Esta misma fuente sostiene que el 1% de los ciudadanos más ricos de los países OCDE totalizan el 49,2 % del PIB de todo el planeta. 

La mala noticia para la democracia es que esto no es una fatalidad de las fuerzas del mercado o de la naturaleza. Al contrario, los mercados están condicionados por las leyes, normativas e instituciones, que provienen del sistema político democrático. Y es este sistema el que ha ido configurando y reforzando una economía que funciona en beneficio de los de arriba y en perjuicio de la mayoría. En el campo de batalla político, el 1% más rico ha venido ganando sistemáticamente en las últimas décadas, pagando menos impuestos, beneficiándose de la desregulación a la circulación de capital financiero, contando a su favor con leyes laborales pro empresa, etc. Así han construido un poderoso círculo virtuoso (para ellos) en el que los mercados y la economía están determinados por la política, pero esta a su vez está determinada por el poder económico.

Los caminos por los cuáles las poderosas minorías económicas se transforman en mayorías políticas haciendo empalidecer el principio democrático de “una persona, un voto”, son relativamente conocidos: control de los medios de comunicación para “construir” opinión públi-ca cuando no consensos en torno a los intereses del 1%, financiamien-to privado secreto de la política, ingeniería electoral y manipulación de los distritos electorales, puertas giratorias entre la actividad política

¿Revolución en la democracia o

y la empresarial, grandes inversiones en imagen y relaciones públicas, no regulación del lobby, etc.

Así, las democracias liberales se van transformando en democracias electorales, donde la capacidad de cambio asociada al voto cada vez es menor. Esta impotencia democrática ha traído como consecuencia el alejamiento de la ciudadanía de las urnas y la esclerosis de las insti-tuciones democráticas y sistemas políticos en muchos países.

¿Qué hacer? La verdad es que para muchos países, las posibilidades de revertir esta tendencia siguiendo las reglas del sistema democrá-tico son escasas, pues las reglas del juego ya no son limpias (¿alguna vez lo fueron?). La concentración del poder económico y político es el arsenal nuclear que amenaza la democracia.

Algunos se resignan al hecho que no se conoce un sistema mejor y se preparan a una larga travesía de reformas parciales con resultado incierto. Otros apuestan a la crisis capitalista como fuente de cambios radicales y no sin razón. El premio Nobel de economía Joseph Stiglitz en su libro “El precio de la desigualdad” señala que “La última vez que la desigualdad se aproximó al alarmante nivel que vemos hoy en día fue durante los años previos a la Gran Depresión”. Y la crisis de 1929 hizo irrumpir y mantenerse al Estado de Bienestar en todos los países capitalistas avanzados durante más de 50 años.

Probablemente será una combinación de factores y luchas las que generen el cambio hacia una democracia del siglo XXI. Para el capital financiero el planeta ya es una aldea, un único mercado global.

Los estados y las fronteras son líneas en un mapa que en nada lo de-tienen. Así, las regulaciones de carácter internacional al capital, son un ámbito que deberá fortalecerse, en particular respecto a los paraísos fiscales, impuestos a las transacciones financieras (Tasa Tobin), etc. Pero las luchas de carácter y de base nacional son insustituibles. La multiplicidad de movimientos y voces surgidas en cada país luego de la crisis de 2008, tienen un largo y necesario camino de articulación por delante

democracia en la revolución? II

killedheart.wordpress.com

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jackson, mirosevic y boric:

dinero & política

ciudadanofrancoisrichard

El 9 de octubre, en el seminario “Sala de máquinas” de la Universidad Alberto

Hurtado, los diputados Giorgio Jackson, Vla-do Mirosevic y Gabriel Boric presentaron sus ideas de modificación legal sobre el financia-miento electoral.

“En Chile, tenemos un especie de plutocracia” dijo claramente Mirosevic al presentar este proyecto. O sea, no es el pueblo que manda, en la política chilena, como debería ser en democracia, sino es el dinero. La propuesta fundamental de estos diputados es prohibir a las empresas aportar dinero en las campa-ñas electorales, porque las empresas no son ciudadanos y no tienen derecho a voto. Si las empresas aportan dinero a las campañas electorales, no es para promover o difundir ideas, sino para hacer una inversión política que les significa aumentar sus ingresos y sus rentabilidades. Otro punto clave que defienden los tres diputados, es terminar con el secretismo previsto en el concepto de los “aportes reservados”, porque impi-de el control social. En 2013, el 90% de los fondos privados recibidos durante el proceso electoral por los candidatos de y sus partidos políticos, tuvo un origen secreto, a través de aportes “reservados”. Para Jackson, la gran promesa de la democracia, es que todos los ciudadanos tengamos igual poder. Considera que el abandono del sistema binominal es

muy necesario, pero no es suficiente para devolverle el poder al pueblo. Promueve enér-gicamente la transparencia, única medida que puede permitir evitar y controlar el tráfico de influencia. Considera también que todos los gastos electorales deberían ser mucho más restringidos, ya que los gastos de difusión de ideas han bajado casi a cero con internet.

Al comentar la propuesta de los diputados, Marcela Ríos, oficial de gobernabilidad del PNUD, señaló en particular que Chile es el único país del mundo en cual existen estos “aportes reservados” para el financiamiento electoral. Indica también que el 96% de las donaciones electorales, en 2013, fueron a solo el 19% de los candidatos, principalmente a la UDI y a RN, lo que demuestra que las donaciones no son una práctica democrática, sino una clara intención de influir en política y apoyar con dinero a ciertos políticos. Estos aportes en política son claramente, para las empresas, una inversión. Reiteró también el apoyo del PNUD a la reforma del sistema binominal, como lo ha hecho personalmente el 1° de octubre en el Senado.

El otro comentarista, en cambio, Lucas Guerra, defendió el sistema de los aportes reservados. Considera que, como el voto secreto permite impide el cohecho, los fondos reservados, evitando la certidumbre de la donación, pueden disminuir la corrupción y la extorsión, y permitir un voto más informado.Gabriel Boric le respondió que el voto infor-

mado es un “wishful thinking”, y que es fun-damental igualar al máximo las condiciones y bajar los montos entregados en los fondos reservados, de manera que no sea el marke-ting y el dinero que decide del resultado de las elecciones, sino las ideas propuestas.

El debate sobre dinero y política no es nuevo. Tiene por lo menos 2500 años. La respues-ta que habían encontrado los griegos para solucionarlo era utilizar el sorteo en vez de las elecciones.

Estos tres diputados, Giorgio Jackson, Vlado Mirosevic y Gabriel Boric, dan una muestra concreta de la nueva forma de hacer política que tantos queremos en Chile. Electos hace menos de un año, a miles de kilómetros de distancia, y apoyados por tres distintas orga-nizaciones políticas, representan una esperan-za para la política chilena. Ojalá tengan éxito en sus generosas propuestas y sepan ejercer un verdadero liderazgo sobre estos distintos movimientos, que los han apoyado para ser electos, y no se sientan comprometidos ni limitados por ellos, como Michèle Bachelet. Esperemos que sean capaces de conducirlos superando sus pequeñas diferencias para tra-bajar juntos a la formación un Frente Amplio de todas las fuerzas progresistas de Chile

Relacionados: http://ciperchile.cl/2014/10/08/el-90-de-los-aportes-privados-a-las-campanas-politicas-es-secreto/). http://www.cl.undp.org/content/chile/es/home/presscenter/articles/2014/10/01/pnud-expo-ne-sobre-reforma-al-sistema-electoral-ante-co-misi-n-del-senado-de-chile/ )

defeyrazon.com

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ciudadanamaríapaulinasoto

“Nos tienen enfermos de miedo”. Esa frase se la escuché a fines de los

años 90s a Claudio di Girólamo Carlini, un sabio amigo que pronto cumplirá 85 años. Entonces, ya estaba instalado en Chile el dispositivo comunicacional que repetía incesantemente que nuestro mayor proble-ma era la “inseguridad ciudadana”. Era tan evidente que se trataba de una campaña de modelamiento de la opinión pública y sin darnos cuenta, fuimos naturalizándolo. Esa y otras consignas se sucedían cotidianamente en los medios de comunicación masivos y con la eficacia asegurada de la persistencia de baja intensidad y las mediciones regula-res para subrayar sus logros.

Resultados: estados de alerta y descon-fianza en el otro, tan bien descritos por el informe de desarrollo humano del PNUD para Chile, del año 2002. “Sabemos de los sentimientos de inseguridad y desconfianza social que exhiben los chilenos”. Así partía un artículo de Norbert Lechner a propósito de este estudio. Más adelante y para explicar la indiferencia de casi un 50% de la pobla-ción respecto del régimen democrático pro-ponía: “Lo específico del caso chileno parece ser la disparidad entre los avances exitosos del desarrollo socio-económico del país y la percepción subjetiva de los chilenos”.

No es que no haya hurtos; robos; asaltos; intereses bancarios desmedidos; colusión de precios en las cadenas de provisión de drogas legales y en las productoras de pollos; gastos reservados secretos de parte de nuestros representantes políticos; y todo tipo de apropiaciones indebidas de la propiedad privada, y pública por sobre todo. Pero creo que estos son síntomas de algo peor: la adicción al dinero que explica muchas de estas conductas que alimentan la percepción subjetiva.

Efectivamente, miedo, inseguridad, descon-fianza, indiferencia, han acompañado nues-tra percepción subjetiva del ser y estar jun-tos en Chile, en las últimas décadas. ¿Pero se trata sólo de una percepción subjetiva modelada por los medios de comunicación masivos y monopolizados por los amantes de los privilegios? Creo que sí, pero también creo que la adicción al dinero y a las cosas,

ha hecho su propio trabajo.

Los analistas datan en el año 2008 el ascenso de los movimientos sociales en América Latina. En el caso de Chile, la burbuja que mantenía a la sociedad en un estado de ánimo resignado y pusilánime, es decir, drogada, estalla en 2011. Es un escenario post terremoto y acompañado del desplazamiento electoral de la coalición de gobierno responsable de la transición de dictadura a democracia y desde entonces, los discursos de la “inseguridad ciudadana” se han tornado insuficientes para recuperar el control social y han avanzado sobre la opinión pública como una especie de correa transportadora de mensajes y símbolos que amenazan los escasos reductos de paz que nos quedan. Esa paz que se logra con muchas horas de televisión hipnotizante; la ilusión de la conectividad móvil; todas las tarjetas de crédito por si acaso; y bastantes estímulos gozosos varios.

Y es que la sofisticación que han alcanzado las estrategias de manejo de la opinión y de los estados de ánimo social, son abruma-doras. Las campañas se suceden y como si todavía pudiésemos dudar de que las palabras crean realidad, los símbolos y el poder de la estética, tiene un amplio camino abierto para la manipulación.

El último juguete para estos fines, es Plaza Pública Cadem, “la primera plataforma de opinión pública en Chile que busca aportar, semana a semana, información, datos y aná-lisis sobre los más diversos temas de interés público”. Los metodólogos sabemos lo cos-toso que son este tipo de dispositivo, pero es que los otros se habían tornado insufi-cientes. Para mostrar un ejemplo contingen-te de su poder y velocidad de incidencia. En una portada del 13/10/2014, se señala: “43% de los chilenos cree que de aprobarse la reforma educacional los colegios particu-lares subvencionados se transformarán en particulares pagados, 22% cree que cerrarán o venderán, y 21% que se transformarán en fundaciones sin fines de lucro.(…) Los cole-gios particulares subvencionados presentan un alto nivel de confianza para la población (54%), 13pts. más que los liceos municipales (41%), 14pts. más que el movimiento estu-diantil (40%) y 23pts. más que la confianza que tiene la opinión pública en el Ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre (31%)”.

La “mala clase política” no puede hacerlo todo y para apoyarla están todos estos otros mecanismos para la mantención de los privilegios. A nosotros nos queda la res-ponsabilidad de hacer carretes lúcidos que son algo así como lo que antes se llamaba, la conciencia crítica

miedo & drogados

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A nosotros nos queda la responsabilidad de hacer carretes lúcidos que son algo así como lo que antes se llamaba, la conciencia crítica.

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educación¿Cómo ha de hacerse para salir del círculo del resentimiento y la venganza, para así abrir nuevamente el futuro en quienes vivieron algo como aquello? En el conversatorio con los invitados al finalizar la exhibición se escucharon agradecimientos diciendo, “gracias, porque esto que han hecho nos abre nuevas esperanzas”.

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Las Fuerzas Alternativas de La Reina (FALR) exhibieron mientras se desarro-

llaba el partido Bolivia-Chile el documental: “PISAGUA… una historia no contada” pro-tagonizada por el humanista y defensor de los DD.HH. Fernando Lira H., sobreviviente de dicho campo de tortura y exterminio durante la dictadura en el norte chileno.

El marco dado por la película dirigida por el italiano Carlo Mesina y la atmós-fera creada por las FALR, permitieron la transmisión de sus experiencias persona-les y las marcas dejadas por la detención forzosa, el abuso, la injusticia, los golpes…, y sobre todo la vivencia de no saber si continuarían viviendo el minuto siguiente o acrecentarían el número creciente de víctimas desaparecidas que veían pasar por su lado a diario, tanto en Pisagua como en

tantos centros de la muerte que regó, por todo el territorio nacional, la dictadura de Pinochet. Era un reto, había que competir con un partido internacional de nuestra selección de fútbol muy publicitado, (que muy probablemente permitió que estuviera libre el recinto ese martes 14) y salvar la gran dificultad existente para muchos, de volver sobre la memoria hacia aconteci-mientos muy desafortunados de nuestra historia reciente. Bien es cierto que no son muchas las oportunidades de escuchar y conversar sin intermediación con quienes son sobrevivientes de una experiencia de esta naturaleza... el teatro se llenó.

Los invitados

Fernando Lira Haquin de 67 años, vecino de La Reina en 1973, permaneció más de

un año junto a otros tres compañeros del Movimiento Humanista en Pisagua. Jorge Coloma Andrews que tenía 25 años al mo-mento de su detención, vecino de La Reina y miembro de las FALR, detenido y conde-nado a 541 días, trasladado engrillado con destino a Pisagua, campo de concentración al que no llegó. Omar Camacho Orellana también vecino de La Reina, contó cómo estando en Iquique con 23 años, fue detenido, torturado, llevado a Pisagua y posteriormente a otros centros. Conmovi-do relató lo vivido ante la desaparición de muchos compañeros del PC que nombró y que fueron cayendo uno tras otro tras su primera detención en septiembre de 1973.

La reconciLiación es posibLe

Una gran emoción se propagó invadien-do todo el recinto. “…tienen que hacer muchas cosas como esta”, se escuchó en varias ocasiones, porque si bien el tema es duro de ver y comentar, el marco de intimidad y proximidad que marcó este evento, resultó ser el adecuado para el intercambio de experiencias tan fuertes. Una menor de 12 años, emocionada tomó la palabra para declarar lo importante que para ella había sido el saber de primera mano lo que pasó, dado que nada de ello se traspasa a las nuevas generaciones como ella.

Una sentida intención operó como trasfondo. Podría sintetizarse a modo de pregunta-respuesta: ¿Cómo ha de hacerse para salir del círculo del resentimiento y la venganza, para así abrir nuevamente el futuro en quienes vivieron algo como aquello? Cosa por cierto nada fácil de ha-cer, pero dado los relatos de los sobrevi-vientes invitados, aquello que parecía im-posible, se vio posible. En el conversatorio con los invitados al finalizar la exhibición se escucharon agradecimientos diciendo, “gracias, porque esto que han hecho nos abre nuevas esperanzas”.

La actividad, de esta magnitud, fue la pri-mera organizada por FALR, tal que podría considerarse como su presentación social en La Reina y en el país, aunque su pre-sencia fue manifiesta en los actos que se realizaron el 11 de septiembre en memoria de los desaparecidos y en el conversatorio acerca del Plano Regulador Comunal. Las FALR agradecieron la colaboración del municipio de La Reina y de la Corporación Cultural de La Reina

Exhibición de video y debate con sobrevivientes de campo de tortura y exterminio de Pisagua:

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Desde hace meses, la economía ha ingre-sado en el cauce de la política. Un to-

rrente iniciado hace poco más de un año con la campaña presidencial, recargado en marzo con el anuncio de las reformas, abultado más tarde con las cifras de la actividad económi-ca, empantanado desde hace unas sema-nas con los casos cascadas, las colusiones avícolas y coronado finalmente por el grupo Penta. La imbricación entre economía y polí-tica nunca había sido tan evidente. Nunca su exhibición e impudicia tan palmaria.

El líder de los empresarios, Andrés Santa Cruz, que en su discurso gremial intenta negar esta relación, lo que hace cada semana es afirmarla. Lo hace con su defensa apasio-nada del lucro, en su reivindicación deses-perada de las ganancias, en sus constantes elogios al sector privado. Sin empresas no hay economía. Sin lucro no hay mercados. Sin utilidades no hay inversiones. Lo hace desde su tribuna gremial, como si la econo-mía fuera una extensión de la naturaleza y el sector privado su único gestor. Como si la economía, como entidad divina y también terrenal, les perteneciera por derecho propio.

La desaceleración económica es culpa del

ciudadanopaulwalder

gobierno. Esta sentencia, levantada cual profecía autocumplida por el empresariado desde las elecciones presidenciales, se ha ido expresando día a día. Es un deseo rabioso levantado y difundido por columnistas, edi-toriales y titulares en la prensa corporativa. Un pensamiento voluntarioso divulgado y amplificado cual realidad. Como si los ciclos económicos globales fueran una hipótesis, como si la economía chilena estuviera radi-cada en otro planeta. Hace poco más de diez años la economía nacional sufría los efectos de varias crisis globales. La argentina, rusa, mexicana y la más letal de todas, la asiática. El producto nacional se contrajo durante largos meses y el desempleo saltó a los dos dígitos. El empresariado gritaba, pataleaba, denunciaba y arrinconaba al gobierno. Un truco barato con jugosos resultados. Hoy po-demos recordar en aquellos años una nueva vuelta de tuerca al modelo neoliberal, con aquella agenda pro crecimiento y su paquete de nuevas desregulaciones, concesiones y bancarizaciones. Una doctrina del shock de bolsillo, tal vez el último piso del andamiaje antes de la fatiga de su material.

El resto de la historia es el descrédito empre-sarial y su implacable visión. Un modelo que

transparenta sus obscenidades, que mantie-ne sus tasas de ganancia por el abuso, las es-tafas, la compra de la política. Una economía que se sostiene con repactaciones unilate-rales, comisiones arbitrarias, colusiones para la producción y los precios, informaciones privilegiadas para armar suculentas estafas y millonarios favores políticos. El modelo neo-liberal ha derivado en modelos de negocios basados en la ilegalidad.

El gran empresariado, aquellos sectores rentistas que apoyan sus ganancias en la ex-plotación de recursos naturales y en la espe-culación inmobiliaria y financiera, ha perdido el impulso y ha agotado sus mercados. Hoy reclama no sólo por el congelamiento de las reformas, sino una nueva agenda corporativa que les regale nuevos espacios de negocio. ¿Política? No, es simple economía. Política, para ellos, son las reformas, la regulación, la investigación y las sanciones.

La crisis económica no está en la desacele-ración, que es un simple ciclo o el efecto de flujos globales. La verdadera crisis está en la descomposición de un modelo económico que ha basado su crecimiento y concentra-ción en el abuso y la estafa

¿desaceleración económica

o descomposición empresarial?

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Se han denunciado crímenes de guerra en el desarrollo de la última crisis

en la Franja de Gaza. Un alto al fuego se ha logrado, una vez más, con la remota esperanza de que los odios atizados por el extremismo religioso serán superados y reine la cordura y una voluntad de convi-vencia entre judíos y palestinos.

Visto en perspectiva, podría afirmarse que el conflicto palestino-israelí en sus orígenes, no tuvo un carácter religioso. Desde la aparición de los movimientos de liberación palestina, a mediados del siglo XX, la agenda del conflicto tuvo más bien un marcado sesgo político-militar-nacio-nal, a pesar de las condiciones religiosas que impulsaron el éxodo judío hacia la reivindicada “Tierra Prometida”.

Pasadas las décadas, sin embargo, cada día las motivaciones para el conflicto armado han adquirido una peligrosa e

ciudadanosebastiánjans partir de las primeras décadas del siglo XX, hasta que lograron el reconocimiento de la ONU en 1948 para existir como Estado, en un territorio que no estaba solo habitado por judíos.

El político socialdemócrata y laico David Ben Gurión, por aquellos días, no vaciló en buscar el apoyo de los partidos religiosos para formar su gobierno, debiendo aceptar la promulgación de leyes que impusieron la observancia religiosa y que dieron privile-gios a la comunidad religiosa más ortodoxa. Así, se establecieron las fiestas nacionales sobre la base de las festividades religiosas, y se impuso el shabat como día de descanso. También se liberó a los estudiantes de las escuelas rabínicas de las inexcusables obli-gaciones militares de todo ciudadano israelí.

Aun así, las concepciones políticas del labo-rismo israelí, con una fuerte mirada aconfe-sional, impusieron la idea de la construcción de un Estado moderno, laico y con una afir-mación en torno a una identidad nacional más diversa que aquel fundado en el relato

confrontación ante su demanda de que los buses de transporte urbano debían ser segregados, siendo la parte trasera para las mujeres y la parte delantera exclusi-vamente para los hombres. Es más, la de-manda ultraortodoxa exigió que hubiese buses separados para hombres y mujeres.En años recientes incluso han apareci-do grupos de choque, para atacar a los comerciantes que venden ropa “inade-cuada” a las mujeres (blusas y pantalones ceñidos, faldas cortas, etc.). En esa esca-lada muchas mujeres “vestidas en forma impropia”, han sido atacadas con pintura.

El presente año occidental, en tanto, se inició con un escándalo político-religioso. El hijo del Primer Ministro Netanyahu, elegido con el apoyo de los grupos políticos-religiosos fundamentalistas, fue objeto de reprobación producto de estar saliendo con una muchacha noruega. El partido Shas llevó el pandero poniendo en evidencia que la familia del gobernante debía ser fiel a las tradiciones y las obliga-ciones ortodoxas. Dirigentes del partido

inmanejable justificación religiosa.

Son los grupos religiosos los que han ido copando la escena y dan el calibre y alcance de los eventos de violencia, al punto que, en el tiempo, bien podría hablarse de una gue-rra de religiones, sobre todo en la medida que los Estados sigan siendo subordinados, de manera cada vez más creciente, al de-terminismo de los clérigos y de los grupos religiosos más radicales.

Lejos están los días en que la OLP y Arafat ejercían un liderazgo laico de la reivindica-ción palestina, como también aquellos días en que la mirada laica socialdemócrata era el eje de la política israelí. Sin embargo, bien sabemos, la impronta religiosa fue la médula de la fundamentación política reivindicativa del territorio para un Estado de Israel. La reivindicación de la tierra prometida, sin duda fue un elemento constituyente del re-lato que estimuló el asentamiento de comu-nidades judías en los territorios palestinos, a

abrahámico. Sin embargo, los sectores conservadores, desde Begin en adelante, impulsarán una política que privilegiará el protagonismo e influencia de las comuni-dades religiosas más comprometidas con la ortodoxia excluyente del judaísmo.

De tal manera que, en las últimas décadas, organizaciones y movimientos como Gush Emunim, Shas, Likud y el Partido Nacional Religioso han logrado poner su agenda en la política israelí de un modo omnipre-sente, y son el factor determinante que ha permitido el triunfo de los sectores con-servadores en las elecciones, lo que termi-na frustrando todas las negociaciones de paz a que se ha visto conminado el Estado de Israel por la comunidad internacional.Resulta impresionante constatar cómo en las últimas décadas, los grupos religiosos han adquirido una importancia tan avasa-llante sobre la sociedad israelí.Hace poco más de un año, los fundamen-talistas religiosos desataron una dura

Likud se lamentaron con amargura ante lo sorpresivo de la constatación. La crisis política bordeó la estabilidad de Netanyahu, que salió a aclarar con rapidez, que lo de su hijo solo se trataba de una relación de amigos.

Como podemos ver, las reglas de los cléri-gos judíos y musulmanes se homologan más allá de las diferencias de los fundamentos sectarios de su doctrina.

Por el lado opuesto, también se ha consta-tado la creciente y desmedida influencia de la fundamentación religiosa y la subor-dinación política a la visión de los clérigos. La constatación de corrupción en la OLP, fue uno de los factores fundamentales que permitirá el protagonismo y la influencia de Hamas, en la lucha de liberación y la demanda por un territorio bajo un Estado Palestino

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“No cabe duda que la paz solo será posible en la medida de que los protagonistas religiosos pierdan su influencia y se opte por la laicidad”

L A I C I D A DLa paz solo podrá darse en la

Publicado en revista Iniciativa Laicista, septiembre 2014.

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& doctrina de seguridad nacional

522 años han transcurrido desde aquel día en que comenzará el calvario para los

pueblos originarios en Abya Yala. Genocidio, terror, esclavitud y pobreza son solo algunas palabras que describen lo vivido por los pue-blos desde ese entonces y que en Chile tiene plena vigencia hasta nuestros días, solo por dar un ejemplo el día 14 de septiembre del presente año, el Estado y todo su aparataje represor se constituyeron en la comunidad Coñomil Epuleo para desalojar un fundo que comuneros mapuches mantienen ocupado en el marco de los procesos de recuperación territorial.

El Estado desde la dictadura militar no ha dejado de aplicar por medio del aparataje policial y militar lo aprendido por miles de uniformados en la Escuela de las Américas,

sufriendo los estudiantes, trabajadores, los sin tierra, indignados, rebeldes pobres, entre otros, la cara más dura de la violencia estatal.

Sabido es que en la Araucanía descansa la fuente de riqueza para las familias más poderosas de este país, quienes mediante la industria territorial y la política del despojo, patrocinada y amparada por el Estado, se llevan gran parte de la torta del patrimonio nacional. Por ello no es de extrañar que ante la posibilidad de disminuir su fortu-na, los grandes grupos económicos, sus familias y trabajadores se organicen para mantener su estatus quo, siendo el llamado movimiento “Paz en la Araucanía” la última expresión de este fenómeno.

Lamentablemente la respuesta del Es-

tado ante reivindicaciones territoriales y autonómicas ha sido la criminalización, la tortura, el terrorismo de Estado y la cárcel, sin entender efectivamente el trasfondo del mal llamado conflicto. Todo parece indicar que el pueblo mapuche y todo aquel catalogado como rebelde o adherente a su lucha es el nuevo enemigo interno, y que la doctrina de seguridad nacional seguirá aplicándose al pie de la letra. Ante este crudo escenario, las comunidades en resistencia y diversos grupos de apoyo a lo largo de Chile y el mundo ha adoptado seguir luchando y resistiendo dignamente contra esta política de asimilación genocida colonizadora, alzando la voz cada vez que sea necesario para defender a la madre tie-rra y avanzar hacia una efectiva liberación para los pueblos

Las comunidades en resistencia y diversos grupos de apoyo a lo largo de Chile y el mundo ha adoptado seguir luchando y resistiendo dignamente contra esta política de asimilación genocida colonizadora, alzando la voz cada vez que sea necesario para defender a la madre tierra y avanzar hacia una efectiva liberación para los pueblosra

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Hace poco más de 500 años hubo 2 mi-radas que se encontraron, justo en este

mes de octubre, que ni siquiera imaginaban de su existencia. Uno todopoderoso con la fuerza y la arrogancia del conquistador el otro ingenuo, nervioso, inquieto. Los sucesos acontecidos a continuación fueron de guerra cruenta en que los ingenuos demostraron una capacidad guerrera impensada que terminó por derrotar a la corona española y determinar la entrega a la nación mapuche de los territorios al sur del río bio-bio en el pacto de Quilín el año 1641.

Luego de terminada la guerra del Pacífico, los mapuches sufrieron los embates de la nación chilena y ese conflicto continúa hasta la fecha.

Respetar es una palabra que proviene del la-tín respeciare. El latín es un idioma eminente-mente ejecutivo y didáctico y para entender el concepto, es preciso deducirlo de los vocablos sospeciare que es mover la cabeza lentamente de abajo hacia arriba, despreciare que es el mismo movimiento pero de arriba hacia abajo, en cambio respeciare es mirar a igual altura, sin movimiento hacia arriba o abajo.

Respetar tiene a su vez el equivalente en el término considerar, que proviene del griego sidere, estrella, es decir contemplar las estrellas.

encuentro de dos miradas del mundo

El hombre es quizás el único animal que logró desarrollar la capacidad de mover la cabeza casi en 90º hacia arriba. Ese movi-miento de cuello tardó millones de años en lograrlo, la raíz de la humanidad está en ese simple hecho de tener la capacidad de ejecu-tar ese movimiento para juntarse a observar juntos las estrellas.

Ese inmenso avance de la humanidad se termina y vuelve a la etapa pre-barbárica, a la situación de bestia, cuando se atropellan y no respetan los derechos humanos. Quizás no mitigó la crueldad, pero sirvió para darse cuenta que la dignidad es un derecho que se puede terminar en cualquier momento si no se tiene aprehendido sólidamente su esencia.

Nuestra consecución de anhelos debe estar plena de gestos como aquellos que se esfor-zaron para lograr mirar juntos hacia el espa-cio infinito, quizás allí con mucho esfuerzo, aguzando la mirada, podremos encontrar el camino que nos ayudará a ser más fraternos y a luchar por el respeto de los derechos de todo ser humano y de la naturaleza que se vulneran con tanta facilidad en este conflicto, entonces y sólo entonces podremos sentar-nos en una noche estrellada a contemplar el firmamento y conectarnos quizás con todo aquello anhelado y no obtenido, allí estarán nuestros antepasados observando el encuen-tro con las raíces que nos hicieron crecer para tener una vida más digna

Ese inmenso avance de la humanidad se termina y vuelve a la etapa pre-barbárica, a la situación de bestia, cuando se atropellan y no respetan los derechos humanos.

¡Alerta! Cuando la derecha ve

amenazado sus intereses y el poder de sus medios,

económicos, políticos, legales, no logran imponer sus condiciones, comienzan a construir las bases para desatar su violencia a cara

cubierta y descubierta. Este panfleto, entregado en Temuco hace algunos días, forma parte de las

estrategias desplegadas en la Araucanía para infundir terror y desestabilizar más la zona.

doctrina de shockDESATADA & EXTREMADA

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SMOG (Eliana Pulquillanca nahuElPán)

Este no es el humo de mi canelo,este no es humo de fogón que abrigaron mis pies,no es humo sereno y libre que danzaba en mi rukano es humo de leña de ulmo. ¿Dónde están lasbrazas?

Este no es el humo que llenó de aroma mi infancia,no es humo que acunó en mi kupulwe,no es humo que besó mi rostro cuando yo callaba.Este no es humo que bebí en cada mate de yerbashermanas,

No es el humo de la machi,no es humo Lafkenche,no es humo Huilliche,este no es humo Pikunche, no es humo Pehuenche.

¡Este es humo del veneno,es humo fabricado,es humo hambriento que corrompe mentes,este es humo intoxicado de las ruedas,es humo exportado de los gobernantes,es humo encendido de maldad,es humo irritado, marcado en patentes,humo fétido, humo hiriente,humo ajeno embalsamado.Este es humo que no abraza.es humo acumulado, humo enfermo,humo que hace llorar,humo que hace la muerte.

Este es humo de la conquista,de la colonización,humo de la independencia,este es el humo que arrastró Pedro de Valdivia,es humo del atropello.Este no es el humo que defendió Michimalonko!

No es el humo del altiplano,no es el humo de las llanuras,de Los Andes, de las montañas,de los canales australes.No es humono es aguano es tierrano es fuegono es aire

no es humo…

Desde 1981 reside en la región Metropolitana donde se vinculó a grupos culturales, organizaciones mapuche, sociales y grupos literarios.

2003: publican sus textos en Doce gritos en el silencio. (Centro Cultural La Barraca, CONACE y gobierno de Chile).

2004: Publica su primer libro llamado Raíces de canelo (editorial Julio Araya Toro).

2005: Invitada al Foro Social Mundial ”Puxirum de los pueblos originarios, en Brasil.

2007: publican sus textos en la antología de poesía Indígena Latinoamericana Los cantos ocultos, Editorial LOM, Chile.

2008: es publicada en “UL Mapu” revista literaria y arte indígena (CONADI Chile).

2008: Se publican sus textos en el libro Nuestras universidades y la educación intercultural, departamento de educación de la U.de Chile.

2009: publica su segundo libro llamado: Azul Gris; Palabra e imagen mapuche en la ciudad.

Antología ** Trafkindungun: intercambio de palabra (CONADI Chile).Antología ** Hilando en la memoria Epu Rupa 14 mujeres mapuche (Editorial cuarto propio Chile).

Eliana Pulquillanca nahuElPán