Julia Muñiz Sánchez RELIGIÓN Y MORAL CATÓLICA

TEMA 9: LA ENSEÑANZA CRISTIANA SOBRE

LA VIDA DESPUES DE LA MUERTE

Mt 25, 34 “tomad posesión del reino preparado para nosotros

desde la creación del mundo”.

En temas anteriores hacíamos una diferencia entre el campo de

actuación de la ciencia y el de la religión. Mientras la ciencia resuelve cuestiones sobre el Cómo de las cosas, la religión lo hace sobre su Por

qué o su Para qué. A la cuestión sobre por qué existe el hombre la religión nos responde que existe porque Dios lo creo; a la pregunta de para que lo creo, el cristianismo responde que lo creo para que fuese

feliz. Dios crea al hombre para que sea feliz, pero no solo en esta vida si no

también en la vida después de la muerte, o como dicen algunos en la vida después de la vida.

Ya desde el principio de los tiempos la vida está organizada para que

el hombre participe de una vida junto a Dios después de la muerte. (“Preparado para nosotros desde la creación del mundo”). Esto es lago

que forma parte de la estructura misma de la vida. Hch 32, 32 “A este Jesús Dios lo ha resucitado y de ello somos

testigos todos nosotros”.

Para estar junto a Dios tenemos que estar, “limpios”, “sin pecado”, un

ejemplo de esto es el hecho de que nos confesemos antes de comulgar. Los hombres necesitamos ser salvados de nuestros pecados.

A pesar de que esta vida nueva forma parte del plan creador de Dios, el hombre necesita ser salvado por Dios. La resurrección de Jesús nos trajo a todos los hombres esta salvación.

De la resurrección de Jesús son testigos los apóstoles. La mayoría de

los apóstoles no entendieron la fuerza del mensaje de Jesús hasta que no vieron a Jesús resucitado. Después de su muerte los apóstoles se escondieron, tenían miedo y entendían que con su muerte todo había

terminado. Solo querían esconderse para salvar la vida, pues a ellos también les perseguían. Solo después de la resurrección de Jesús y gracias a la acción del Espíritu Santo, comprendieron el mensaje de

Jesús y comenzaron a predicar su palabra.

1 Cor 15, 14 “Si Cristo no ha resucitado la fe carece de

sentido”.

La resurrección de Jesús es el centro incuestionable del cristianismo. “Si Cristo no ha resucitado vana es nuestra fe”. “Si Cristo no ha resucitado somos los más miserables de todos los hombres”. Si no se

cree en la resurrección no se es cristiano, Jesús sufrió por ser fiel al plan salvador del Padre, sufrió por nosotros, murió y resucitó; y porque Él resucitó nosotros resucitaremos. Su resurrección es un anticipo a

nuestra propia resurrección. 1 Cor 15, 20 “Cristo ha resucitado de entre los muertos como

anticipo”.

Porque Él resucitó nosotros resucitaremos. Jesús es completamente hombre y completamente Dios. Como hombre murió, pero como Dios

pudo resucitar. Entregó la vida por nosotros, por fidelidad a la misión del Padre que era la de salvarnos. Resucitando nos salvó permitiéndonos participar de una vida nueva junto a Dios.

No debemos olvidar que esta unión con Dios no se limita a una vida después de la muerte, si no que ya en esta vida podemos mantener una relación de unión con Dios. No solo en la Eucaristía, si no siempre que

nos esforcemos por la construcción de un mundo mejor. 1 Tim 2, 4 “Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen

al conocimiento de la verdad”.

-El ser humano depende del amor y del perdón de Dios para salvarse. -Es un Dios misericordioso.

-Dios quiere que todos los hombres se salven. Si Dios quiere que todos los hombres se salven y además es un Dios

misericordioso entonces sólo es necesario que el hombre quiera ser perdonado para recibir el amor y el perdón misericordioso de Dios.

IES JUAN D’OPAZO RELIGIÓN Y MORAL CATÓLICA

TEMA 9: LA ENSEÑANZA CRISTIANA SOBRE

LA VIDA DESPUES DE LA MUERTE

Al hablar de la vida después de la muerte surgen una serie de

términos que aclararemos en este tema. El Reino de Dios es el centro del mensaje de Jesús. Jesús hablaba

del reino y anunciaba su venida. El reino de Dios no es un lugar es el hecho de vivir con ayuda de Dios una vida plena y feliz donde reine la

justicia y la paz. Jesús comparaba el reino de Dios con una semilla. Ya existe, pero

todavía no en su total plenitud. Igual que tenemos que cuidar y regar

una semilla para que crezca, tenemos que trabajar por instaurar el reino de Dios. El hombre solo no puede hacerlo, es un regalo de Dios y sin Dios el hombre no puede construir el reino.

El momento en el que el Reino quede establecido por voluntad de

Dios en su plenitud se llama parusía. El tiempo hasta la parusía es el tiempo de la Iglesia. Mediante el

Espíritu Santo Dios nos acompaña y nos llama a trabajar por la mejora

del mundo en la construcción del reino de Dios. Otra expresión que ha de tenerse en cuenta es la de juicio final.

Cuando hablamos de juicio final pensamos en justicia, pensamos en un juicio con abogados y jueces. Pero Dios no es un Dios justo, es un

Dios misericordioso. Cuando en la Biblia se hace referencia a un juicio al final de nuestras vidas no lo hace según nuestra idea de justicia, si no que lo hace entendiendo justicia como justificación. Por ello al

hablar de juicio no tenemos que pensar en que Dios nos juzga si no en que nos justifica.

Dos preguntas que suelen hacerse son ¿qué pasará con todas las

cosas creadas? Y ¿cómo seremos nosotros?

Cuando hablamos de una vida distinta en la que reine la justicia y la

paz no nos referimos solo a los seres humanos si no a la creación

entera (animales, naturaleza,..), Pues toda ella es sagrada y querida por Dios.

¿Cómo seremos nosotros? Nuestra condición será parecida a la de

Jesús resucitado. La persona es sagrada, cada uno de nosotros lo

somos por tanto es necesaria una continuidad de nuestra identidad.

IES JUAN D’OPAZO RELIGIÓN Y MORAL CATÓLICA

TEMA 9: LA ENSEÑANZA CRISTIANA SOBRE

LA VIDA DESPUES DE LA MUERTE

Escribe una frase utilizando todas las palabras de cada grupo. /Reino / Justicia / Semilla /

/Parusía / Completo / Reino /

/ Juicio / Justificación / misericordioso /

/ Continuidad / persona / sagrada/

O S T R Z O D T I A C A M E S I D

T O S O I D R O C I R E S I M I A

A B A C E D A D U B R E A S I S N

B T U N I O N A S A D E S I G R O

R E B O L A G O T E R J Ú S T I D

E S O I E S D L O Q Y O S O M O R

A E S C I A I B E S O D E L O Q E

V E A C C E O A H G Q A J Y A H P

E R M E U R S M A U V N N A D A S

C B P R C S M P V T T O D O S Z A

R M S R R U A O O D I D D E N I B

D O I U E S N T S A R R E A G L I

E H M S A C E I D L D E A L E E T

S T U E E V I D A A A P P O C F E

Z A Y R I T E O L S E T R E U M R

- Dios crea al hombre para que sea ____

- No solo en esta vida, si no también

después de la __________.

- Pero para estar junto a Dios para siempre,

tenemos que estar limpios de ________.

- Jesús _____ con su vida el _______ por

nuestros pecados.

- Los apóstoles solo comprendieron esto

después de ver a ______ resucitado.

- Con su muerte nos salvó por nuestros

pecados, con su ________ nos _____ el

camino a nuestra propia resurrección.

- Tras su resurrección el hombre estará en unión con ________.

- Pero esta unión con Dios no se limita solo a una _______ después de la muerte.

- ______ en esta vida (aunque no sea plenamente )podemos participar de una ____________ con Dios en los

sacramentos, siempre que trabajemos por mejorar el mundo o cuando defendamos los valores que Jesús

defendió.

- para participar de una vida eterna junto a Dios el hombre necesita ser amado y ___________ por Dios.

- Jesús nos muestra que Dios es ________________, que nos quiere a todos y nos perdona siempre.

- Dios quiere que _________ los hombres se salven por lo tanto solo es necesario que el _________ quiera ser

perdonado para recibir el amor y perdón de Dios, y así poder participar de una vida eterna junto a Él. .