:\ f'1ZT^.CIACION DEL CABALLO : DF_FEC-TOS Y BELLE7_AS

Como aplicaciones prácticas del esttidio de laMorfó ogía, vzmos a considerar detenidamente elmodo dé apreciación, deduciendo, además de sumayor o menor belleza, sus aptitudes para reali-zar del mejor modo las distintas funciones econó-micas a que pued.n dedicarse, según se dediquea silla o a tiro„ en sus distintas modaIidades :carrera, paseo, guerra, tiro ]igero, semipesado ypesado.

En el tercio anterior debemos examinar la ca-beza en primer lug^r, en la cua^ consideraremoslos caracteres generales de la misma, así como losparticulares de cada órgano y de cada zona.

El perfil de la cabeza puecíe ser : recto, cóncavoo convexo, llamándose, en cad.•t caso, la caheza,cuadrada, chata }' acarnerada. Se ^li^cc cabeÑa devieja, cuando es larga y descarnada y tiene losójos hundidos; ^d^e lecla^^.za, si termin,•t én puntaafilada; cie riaro^r^o^nte, cuando es chata cerca delhocico, y^de liebne, si es convexa en la parte su=perior. La cab:za cuadrada o ligéramente achata-

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J3e14-r cabe<a de caballo árabe,

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da, como la del caballo uriental, es la de mayorhclleza y propia de los caballos de raza distingui-da. 1.a cabeza carnosa y de piel gruesa se llamaernpastada, y es propia de animales bastos y pocos^nsib.es al bocado, purque las harras Svn, como^l resto de la cabeza^ ^carnusas y gruesas. Yor r~^^onrs inversas, la cabez_r dc vieja es propia deanimales demasiado sensibles ; la de rinoceronteiudica dificultades respiratorias.

La cabeza debe presentar sus vasos sanguíneosbien patentes, que se transparenten a través de lapiel, lo que delatará la fu^ura de ésta; de tamañoarmónico con relación al resto del cuerpo, bíencolocada y dirigida.

La cabeza será rnás bien pequeña que grande,pues estl última indíca poca viveza y energía enel caballo, que de ordinario es pesado a la manoy se llama cargado de cabeza.

La dir^cción de la cabeza, detertninada por lade su perfit naszl, deberá ser de unos 45° aprorximadamente, diciéndose que el caballo despapa sieste ángulo es más abierto, o que se cngalla, cuan-do es más cerrado. En ambas posiciones, el caba-llo quiere escapar a la accíón del bocado, y puedefácilmente caer.

Se dice que la rabeza está bien puesta cuandose percíbe claramente, por medio de un surco, su

, separación con el cuello, pues de este modo ten-drá facilidad de movimientos. La nuca deberá serancha y•algo saliente, y el tupé„ pob.ado y sedoso..L.as orejas son una parte del animal con la queponen de manifiesto su carácter e intenciones;

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asi, cuando'.as dirigc hacia atr^is (guiñar), se prc-para a morder o coce.zr. Si las mueve alternati-ramente, rlennta inquietu^l e íucert:dun^hre, y tam-h.én niiopía si alza las ntanos 1^•ntan^ente. Si nute-^•e las arejas estirando la r.il^eza, indica miedo, ysi apenas tieneu mo^'imientn, iudic i sorrlera o lin-fatisnio. Las orejas bien puestas en la marcha sonlas inc'.inadas hacia adelante, y son las que indi-ran en^rgía y nobleza en rl cala^illo. Según las

fiormas de cabeza ^^ cuellu : r, Cabeza cuadrada y cue-llo de pichón ; 2, Cabeza chata y cuello de ciervo ; 3, Ca-

beza acarnerada y euello de cisne.

iormas de las orejas, se ias llama ,de c^rr^lo, si songruesas y colgantes; de lielrre, sí largas y delga-cias; de rvratrlct, si largas y grancles; de ^ou-ra, sipequeC^.1s y erectas, etc.

La frente deberá ser proporcionada. Las estre-chas indican poca inteligencia y docilidad; no es-tarán las sienes hundidas, como tatnpoco las cuen-cas o senos, parque; en caso contrario, dan al ani-mal aspecto de viejo o degenerado. Los ojos cons-tituyen otro órgano que deberá hacerse su exa-men con toda atención en la apreciación de uncaballo. Las órbitas deberán estar bien pobladas,sin pelos blan^cos, que indican vejez o go'pes su-

iri^los cn rcpctidas c^í^la5. Lvs ojos serán vit^r;s ^•cxpresivos, contribuy^ ndo pocieros :mcnte a la he-ller.a de ]a parte clel animal que nos ocupa ; nc>serán hundidos ni saltones, sino superficiale5 ^•graudes. Los ojo; pequrí`ios o de cerdo indicanmal carácter. Los grandes o d.^ buey quitan es-i,resión ai ananal, sicndo, en aml5os ca^os, cn-rrientes los defectos visuales.

Cara y carrillos o quijadas deberán tener eipelo fino y también ]a piel, clebienclo ser las qui-jadas pequeñas, para no hacer basta la cabeza.Los ollares serán amplios, para que el animal ten-ga una respiración fácil, sobre todo en las manchasy trabajos pesados. La boca no debe szr ni muyhendida ni tampoco pequeña, pues en cada casuse originan defectos, que se designan por tragar-se el bocado y por boquicoi^ejuno, que impid^nque el cah^llo se embride bien. Cuando, colocadoel bocado„ éste si.;nta bien y no molesta al ani-mal, produciéndose abundante espuma en la buca,se dice que el animal tiene boca fresca.

Las encías serán rojas y no descarnad^rs ; losasientos, ni muy carnosos ni muy sensib,es, y deuna altura tal que estén a iguai nivel que la len-gua, para que no resulte una boca dura al boc^uio.La lengua deberá ser fina ; los labios, ni gruesosni muy finos, ni colgante el posterior (b^lto). Labarbada o barboquejo no deberá ser muy plano,ni tampoco cortante, ni estar encillecido por lacadenílla, para que el bocado surta su efecto util.El canal exterior d^ las mandíbulas no estarálleno, para que el c<lballo no despape.

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:intes cle tcru^ínar rl cx-,mcn cle la c•aheza delcaballo, ciíremo; quc ^a signo de razas selectas lapresentación cíe una prominencia quc pueclc cxis-tir.e:n ^l frontal, especie de cuernos rudinteni^irioseub^^rtus pur lu picl, cj^ue en algwios ca=,os llet;auhasta 8 n^n^^. subrc c; p ano dc la frcute, com^.^ c]que cita el Sr. J.^nini en su nutable trabajo subrelos caballos ^spañolcs cou cucrnos, cjcmplar per-ten:ciente a la ganadería c:artujana dcl l7arquésde Casa-Dumc^cq. En los cal^allus de pura sangreo Thoroughbreds se han d,do numerusos cas^s.

Cuello. - La murha, o]wca longitud de estaparte dcl cuello influye poderosamente en su be-]leza, así cumo en sus aptitudcs. Un cuello largocon exceso y nial unido a la cabeza indica caba-llo de poco poder. Uti cuello corto y carnoso hacequa el c•il^llo se mande mal y es nada clcgante.El término medio adccuado, si nos atenemos a'aregla dada por los árabes, es quc el cuello tengasna longitud tal que el ^caballo pueda Leber elagua que curr:. por los arroyos sin tener que do-blar las rodillas. El c^iballu de silla tenclrá, pues,para pocícrse manclar bien, un cuello más bienlargo que cortu, de igual longitud que la cabeza,al decir dc a`gunos hipó_ogos.

El perfil clel cuellu es de cia7^u,, ;i es muy ntar-cado el arco en su inserci^ín con la cabeza. Deciervo revttelto a al y^evés, si et perfil es cóncavo.Se ]lama g^tv o gatillo una cerviz demasiado gru:.-sa, y gato 2^t^ci.do, si además de gruesa es colgan-te. EI perfil o cerviz de caballo que evite los de-fectos señalados s^. llama de pichán, y es el pro-

1zy __.

pio de las buenas razas, más aún^' si^ crí^ é.^'^^lloapreciamos las lanzadas, hacbazos o de ^a a;de que ya hemos hablado, aurulue;;^^`a deci ^^t^ad, .^no creemos tengan gran valor estas,señalcs. L,c^cahallos enteros tienen sietnpre el cu::Yk, gruesa ^-arqueado.

La cruz del^erá ser clescarnada ^ prominente,para que ]a silla se ajuste bien, y porqu^• ello essigno de energía y^ virilidad (]^^s ^ hembras sonsiempre más bajas de cruz que los machos), yen-do, en general, acompañado e ŝe carácter por unagran amplitud de pecho y una buena conforma-ción, en g^^neral, de todo el tércio anterior. I,acruz baja o re.donda^da no permitu sea bien en-sillado el anirnal, y fáci.mente se producen ma-taduras de muy difícil curación.

La éspalda nos denota, con su mayor o menorlongítud, oblicuidad y musculatura, si la aptituddel animal es plra ]a carrera o p<1ra el tiro, pue^sc comprende que la poca oblicuidad y longitud,así como la mucha musculatura, hagan difíci'e.^los movimieutos,•pero aumenten su potencia.

El brazo, como la espalla,! será oblicuo, ]argo^• musculoŝo para los .^^nimales a quienes se picíavelocidad. El codo será poco carnoso y bien ,cles-pegado de los costillares, para que los movimien-tos de las extremidades se realicen con toda hol-gu ra.

El antebra.zo tenclrá mítsculas bien aparentes, ytambién de bastante longitud, par^1 que el pasosea• largo sin eleva^r mucb0 los pies, lo cual, sipuede considerarse como elegante, es causa de

pawxuo sQmpo 9

^lue se fatigt^^^ mucho rl anintal ^• rle que adquíeracojeras cou fr.cueucia.

I^ rodilla será ^ mplía y aplauada pur su ^caraanterior, ^le tarnañ^^^ considerable y sin detornta-ci^^,ñe; que alferen lu, aplri^nos ciel caballu; <lebe-rá scr la canilla más bien corla que larga, paraque no rau'ten ^lébiles las extremiclarles, y lntendonrs quc c^^rren por ^letrás scrán fuertcs ^grnesos en tod•2 su longitt^d y hieu separados dcihuesU; si el tendón es más gru^'•so por la parte in-ferior que por la superior, el tendón es fallirl^. ;si no destaca el tendón, se dice de ternero.

El m;nudillo scrá grande y enjuto, alg;r incli-nado con relación al suelo y nunca en la direcciónde Ia caña y cuartilla, en rtrya caso tenemos elcaballo ^staquilla^do. Las cuartíilas han de ser delongitud proporcionada, pues !as muy ]argas snncótnodas para ]a silla, perry el caballo pisa de tostalones y sú llama j^an,dn, Si 1a cuartilli cs corta,los movimientos son muy rígidos y molesYos parael jinete, y el caballo pisa con ]as h^u^lrres, ]tamán-dose'.e t^opiuro. Es sientpre ]areferible ]a cuartillacorta, que índica cnergia y e.s propia de los bue-nos trotadores.

EI olsco, como se contprencle, merere un dete-nido examen, pues es este órgano esencial en elcaballo. Deben tener el tamafio adecuado, hienconformado; y su perfil nnterior det^e formar cr^nel suúlo, aproximaclamente, un ángulo de 4Ŝ°. tinángulo más agudo origina el casco p^n^do, }' ^ unángulo menos agudo, el casco topiino o ao^rta ,rtcluna.bres, L^ palma será cóncava y resistente, pues

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^i fues.^ l^lan<i, el cascr> se llanta /^a!rtl.itieso. Latal^a será ^dttra, Ittstrosa, ^cuhierta cl.^, barniz y decolor negro, mejor qtte blanco. La ranilla serábien patente, sin llegar a ser dernasi^^do abu'.tada.l^a cascu delata tamhién el origen de los animales;^>ueá si prcx;de <le terreu^^s htítuedus, el casco e;^raude } blando, }- si se han criado en la mon-taña, el casco es pequeño, estrecho }' ridrios^^(muleño), resistiendo bien el trabajo aun sin he-rrar.

El pecho amplio y musculoso es propio de 'osanimales cie tiro pesado, =pero no de los de silla;due necesitan mayor agi idad ; sin embargo, la es-trechez de pecho en d4rrtasía indira que el animales débil y se fatiga fácilmente.

Lxamteai rlel terrcf,o ^ttz^^+^io. - El dorao o líneadorsal debe ser horizontal o con una ligerísimaconcavidad e.n los caballos ^de silla, lo cttal da e:c-l;ancia al animal, se ensilla mejor y es más cómodo para el jinete. Un exceso de concavidaclproduce el defecto llZmado c^nsilksdn, que indi^caclebilidad en e1 caballo.

El dorso convexo„ por .el contrario, es propiucíe animales de earga y resistencia, y se llama clecamello, de mulo y también de gato. Los lomos oriñones serán cortos, amplios y no formarán esca-íón con la grupa.

Cuando la muscul:atura qu: se apoya en losapófisis vertebrales es muy potente, aparecén par-tidos los riñones, y se llaman cíobles, y es un ca-rácter propio de los anim.ales de tiro pesado. i.oscostilla.res t^ndrán la ^cúrvahtra convéniente, sin

^.iz .

:,er esccsit'a, ni tamlroco 1^]anr^s, pues en ambosc^isu; lus úrl;auo5 que encierran no encuentranholgura aclc^cuada a su clcsarrollo. 1:1 vientremuy voluminoso (cle vaca) es propio de animales^lc tiro pesa^lo }• quita toda cl^•gancia al animal.1'or el contrario, el muy enjttto o recogiclo (gal-gueñr> o cie liehre) da gr :n lif,rereza at cat^allo.pero n^u:'stra poca resistencia, siendo hropio d;caballos cle earreras. I?1 vientre cle vaca suele pre-sentar hundido el íjar, ^^ se Ilama trasijacio.

7^e^rcio posterior.-La grupa será redondeada,'.arg ^ y horizontal y carnosa, <loble en los caballr^s

C;rupa^ : raída, derribada o de cerdo, hori2ontal ^ re-' donda, respectivamcntc.

^le tiro pesado, que no necesitan gran agililad n`ligereza cie movimientos, como los de silla^. Cu-.n-^lo la grulra sea oblicua, se la llama ^d^lribrnc^a, t^de oi^^2^+^1^,, si es plano ^or ]os. costados: Las ancasno serán muy salient^s (alto de cuadriles), ni tam-poco mtry próaintas, pues contribuiráu a producirel defecto que se conaee con el nombre de grupaal^^e^tiid^rcxda o cle fl0IL0. St Utla caclera es más alta

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^iuc ]a otra, se Ilaux-^ 11r,^ta:nco a' aninxal, }^ e; títili^ara cl trabajo.

l,a cola clebe estar bien pttesta ; es decir, ciue nosea muy baja ui i^rga^la ; n^ clel>c niovrrsc cuandoniarcha. ni meuos cuan^lo e:^ nwntacl<> el anímal.pucs cllo indica e^^ceso de n^r^^osida^t o de floje-^lad en los riñones. La cola 2lcherá estar bieu po-blada desd"e el maslo y arqueacía en el origen,dando ]ugar a la cola del tipo ár^tbe que tantoembellece a esta raza.

Es indicio de vigor en el ĉaballo la resisten^ciaque pone la cola a s^r se}>aracía del tronco cuandr^de ella se 'tirl cou la mano.

Fsl ano no deberá estar hundido, sino saliente,cerrado, pues, de lo contrario, el animal es viejo 0enfermo. El mtxslo deberá presentar buena muscu-latura y ser largo y oblicuo, para quc: sus movi-mientos sean amplios. La rodilla dcbe ser amp]iay mostrará en reliev^ la rótula ^y sus múscul^ysadyacentes. La pierna será más o meno^ larga, se-gún el ser.vicio a que se destine el caballo.

El corvejón será ancho }^ seco„ sin carnosidadni piel basta que permita tnarcar bien los relieves^cusadores de los huesos y tendones que losorman.

No terminaremos sin cc^nsignlr qué es señal clelinura en las razas caballares la pequeñez de epolónes y espejuelos, que, sobre. todo en las extre-midadés posteriores, llegan a faltar en el caballoárabe, siempre tomado como maíelo, '

Los caballós de guerra que necesit^n los ejér-citos para su Caballería son de dos tipos : el uno

^.>a -

l;ara la ^alMllería ligera, yue rcalice exploracio-^nes y pueda p^rseguir al enemigr, derrot^do, y elotro til^, que sirve para carl,ra.r sobrc 1as masasarmacias yue se resisten.

Eu el pritu^_r caso áe necesitait rib^llo^ de pocatalla, nervioso, y ve:oces, cle e^tremida^les finas r^le potente musctilatura. L:n ei segunclo caso, ^enE^:esitln caballc^s de alzacla ^- de más volurn^-t^ t^potencía. ^

En ambos casos, el cabaliu de gtterra es el mis-mo caballo cie silla, pero rústico y sobrio, capazde soportar los rigores de una campaña con lacarga pesada del jinete y del arrnamento. El ca-ballo árabe sería él tipo ideal para caballo de gue-rra si no fuera demasiado pequeño y corto, porlo que se reutediatt tales inconveni'rntes cruzán-dolo con el inglés pura sangre.

Sun condiciones necesarizs del caballo de gue-rra la ob'icuidad de la espalda,; para galopar bien ;Ia cruz bi^zi desarrollada, para adaptar bien e]equipo y para comodidad dei jinete; peehu amplioy demás condíciones dél buen cabalio de silla ude camp^o.

La alzada deberá os^cilar en estos caballos d^i,5o a i,6o m., y la castración es m:uy convenietrte, dada la neceŝaria ducilidad cle que aquéllosdeben estar dotados.

Aptitu,d repu,adzrctona..-El ganado cíestinado ala raproducción deberá presentar bien marcadosaquellos caracterés qué corresponden a la especia-lización zuotécnica a que se le destine, según 11

raza a yue prrt::ncz.a, y adeuk-ís ac{uellos'cltte de-mnestren stt al^titucl {hlra la reproducción.

l.os inaehi^s cleherán ser ^^ig^ros^,^s : euello y ca-l^eza rol^^ustos, aiul>lia nuca y no ser de coloraciónh'anr i, pues el alhinismo uo sttele ser si^no d.•l^r^^lificiclacl. ^u clehercin pre^rutar los defectu^rc^nucicios con lus nouthre^ cle^ anorqttidia o caren-ria clc testí^culus, clc nton^crrc{tticlia o car^ncia cletutu^, u cle criptcirquidi^t o ret^nción <ic los testícu-lo; en el abdo-men.

1'eru la principal cir^cunstancia a yue debe ateu-elers^ en la apreriación cíe un reprocluctor es, co-mo y-t veremos, al examen de su ascéndencia yclescendencia,, si es posible, pues una ^e^^i^ze oárbol g^tealógi^co que cletnuestre la constaneia enla h•ansmisión de.]os raracteres yue nns interesees la mejor {;arantía clc• qtte esos caracteres suncieterminados por ^ factores ^^.néticos al eskadopuro u honaozig^ótici^, y por tanto seguirán trans-mitiéndose fielmente a su prc^le, lo que constituyee] objetívo esencial de toao sem ^tttal.

^Iucho se ha rriticaclo este tiistema cle aprecia-rión^ hasado eu 'vs caracteres externos dzl gana-cío; principalulente 17ar los iconoclastas sistemáti-cos, existentes en todos lus campos rle la acti^^i-c11c1 humana, a los cuales hasta, para ejercitar suactividad destructora, la eaistencia de algo ele^^a-do a'.a categoría de precepto o teoría por la ma-yoría de los mortales, sin 1>ensar qtte, como en elcaso presente, lo tnejor es e^nemigo de lo bueno,y que la apreciación extern-t de los anirnales e^ elqnjfrr cr2tc•rici posihle erl muK'hos casos, co1n0 sU-

^;if^ -.,

ced^, cn i^rias v utereadus, adeittrís de qtte. nuncason ciespreciahles los caracteres reputadns com^,^^lelahn•es ^le 2letertni^iadas funcioncs económicas.ya qui han ^i^lo cstablecidos por su corrr^laríúnc•^^n ellas, „ lx^ryue s<m su ^co'nsecuencia.

:APk1^,CIAC1(1\ UI^: LA EDAD

1^.1 e^amen de la boca c[c Ios animales nos pro-porciona datos precisos para determinar la eda^lde los mismos con la aproximación núce ŝaria p,rael gan^dero. No se trata de una snlución matem:z-tica, que cn mcxlo alguno es precisa, pues a vece^los errures son de a'guna intportancia si se apli-can las r^glas ^rorrientes a razás precocés rnej^r-iadas ; per^^ teniendo cuidado de distinguir unade otras, lus err+:,re5 ser^ín, en 1•i práctira„ inap^ e^ciab!es.

Ería^i ^dcl c^a^balGo.-El cahallo nace sin dientessaliendo las palas a los ocho días ; más t^rde, to^m^^dios, y al n^edio atio, ]os extremos. ,

Mientras los últimos dientes crecen, igualán-dose con los ya nacidos, éstos se cíesg^tstan y aca-han lwr rasar.

De los dos a2ias }' medio a los tres años empie- ^zan a nacer los dientes permanentes ; primera-_nente, las palas c> pinzas; luego, los medios, y.finalmente, los extremos, llanfándose a cada^ unade estas fases primera, segund^a y tercera mud1.lle los cuatr^o a los ^cinco ^ños se hace la ítltimsntucía; es dc^cir, cjue el an•im^al ^completa su denta-

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durrt permanente y^leja d^ scr hutrr^ para con-vertirse en caballo. ^

.1 los seis años einpieza.el enrase de !r,s inci,i-vos 1>ur el n^i5^no ^r^l^n cn ^luc nacieron; la tabla

Uentadura de potru a tos tres años.

dentaria se empieza a ava'.ar, y^ a los c^cho año,.el caballo ha enras^do tocíos sus dientes.

A los siete años, el gavil^in <iel inci^ivc^ etitreiu^^cl^ la mandíbula anterior eni}^ieza a m^ostrarse,para crecei gaulatinamente. .

A los nueve años aparece l^^. e5trella dentariaen las palas, y sucesivatr^ente en los demás incisi-

^entaduras de caballos a los nueve y siete años, res-pectivamente, pudiendo apreciarsc en la segunda el ga-

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(rluicxe añosj, y despu^s I^iangn'ares (a los dieci-IK'll^r^'fttntl' allCl^^.

\u, ]ieiu^^s referidu casi ^xclusivamenCC a l^,sdicnt:Rti dc la mandíbula inferi^^r, 1"^or ser la quemás cónwdantente se examina. }^, sobre todo, eiarco incisiv^. Los elemás datus yuc prol.>t^rc^o^ anlos coltnillos ^y ]os iuolares sott omitidos, parasimplifiear este estuclic, }' porque son de menosprecisión que los consignados. En el cuadro ante-rior resumimos los caracteres más importantes d^la boca, correspondientes a cada edad, habiendoredondeado las cifras para hacerlas aprender másfáci'mente y teniendo en cuenta el carácter prác-tico de este libro. ^

E^dad id^el ^iiuZo y,rlcJ^ ann.o.-Los dientes de es-tos a^^i-tnales, ^de forma cilíndrica, u^n tanto^ distin-ta que la clel caballo, experimentan un desgastPmucbr^ más ]ento que én éste, por ser mucho mátiresistentes, y, por tantci, sólo pademos asimilar lossignos cronométricos de todos estos équidos cuan-do se r^fieren a edades anteriores 1 los siete años.

Pasado este tiempo, es muy incierta la cieternii-nación de ]a edad en mulos y asnos, y scílo l^^tpráctica puede salvar tal dificultad.

Por otra 1>arte, el caballo puede present•tr ensu boca irregularicíades que enmascaran su edad,bien porquĉ natttralmente se produzcan, o porquc.artificiabnente s^, realicen con fines fraudulentos.

Cuando los incisivos .de ttna }' otra mindíbulano cointiden, el desgaste tio se realiza, y los ani-

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malcs nu acus^an su cdad en la Loca. Según quela mandíbula más saliente sea la infe,rior o la su-perior, el cab•illo se llama belfo a picón.

Tenemos también casas en que, por los anterio-t-es defectos, o por scr unos dientes más largos^^ue otros, o lwr una erupcióu irregular, los dien-tes couservan la neguilla por tiempo indefinida, ^^;e Ilama a estos caballoa cientívanos. -

llificultan igualm^trtc la determina,ción dc laedad del caballo ]os llamados dientes supernutne-rarios, apareciendo molares antes del tiempo de=hido, o se consérvan cuando debieran desaparecer,presentándose dos fi)as de dientes, que dificultansu nonnal desgaste.

También se presenta un desgast^, anonnal enlos anima'.es con fi,ro, pues los dientes aparecenbiseladós en su bor^de lingual al morder los pe-,ebres los caballos qu^^ padecen esta enfermedad.

Por últímo, pueden hacerse artificialmente ]asneguillas valiéndose cle un buril o de un hierrocanderite }' de tinta china (contramarca), y pue-ci2n arrancarse los ntedios o los extremos paraque los potros aparezcan con un aiio más. Tam-bién se les lima los ¢ientes para darles la formaconveniente, siendo intenninlbles el recuento, lasoperaciones análogas que realizan las gentes queen mercados y ferias trafican con el nohle caba-llo•. No es éste 'el lugar, ni disporlemfls de espa-rio necesario para detallarlos ni exponer el modode descubrirlos ; pero sí diremos que, can un pocode práctica, es fácil con^océr los cornetes artifi^cia-les, nunca iguales que, los naturales ni sittrados

tan céntricament^• ; qu^ las limaduras también secíescubren, por n^f clejar lisa del todo la superticiedel díente, y que los cíiente^s de leche arraucadosno presentan huella de los permZnentes que hande nacer, como en el caso dú la ^eaída natural.

^'o son sólc> lo; clícutes los brganos que n^^s cie-]atan, en su evoltuicín, la edad de ]os animales..^parte dc los signos suministrados por éstos,esisten otros que delatan también la ecíad av^n-zada del animal, tales como los pélos blancos enlas síenes, narices y cejas ; ías encías blancas ydescarnadas, los labios ^caídos y babosas, ojos tris-tes, euencas hundidas, las extremicíades d^ectuo-sas, el vientre caído, el ano hundído y]a fa'ta d.eenergíl, en general, que se descubre en movimien-tOS v aCtlttldeS.

* * *

La influencia qu^c tienc en el valor del animalla clase de capa o pelaj.^ que posca es, a veces, deimportancia, según se separé tnás o menos cle lafijada como típica cle la r1za, el capricho o modareinante, y también según las preocupaciones ogustos locales, a v^^ces pasajeros.

La superstición ha hecho estab'ecer preceptos_ yreĝas desprovistas de tado fundamento acerca dela c-tlidad de un auimal en relación eon su p^laje.

lYlucho se ha dícho acerca cíe los cabaltos cal-zados, según que las mallchas alcancen a uno 0más pies y qtte éstos fueran los derechos o losizqui^erdos. Así„ el caballo calzado dc la part^ pos-terior derecha era innoble y cíesdichado, y. ]o con-

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trario cl ca'zaclo dc la izquíerda:^^ Esrefrftn castellano que, refiriénclos::^ al nípatas calza^^las d^e ttn caballo y su íña}•or i^ ^tĥo-- .l^nclad, clicc: "tJna, bueno; dos, }^^ejt^r; tres, ^^^^malr^, }• cttatr^i, peor,. ^

Vr^ h^^n sido menores lus prejtticio; existentrsl,^^r lu qu:- al color cle l^^s caballo5 re^hocta, y nc^Pue^le negarse en aba+^luto la existencia de algúnfondo de verdad en estas intérpretaciones del vul-go, Los eaballos de saluci p^rfecta y de tempera-rnento sanguíneo són de color.es vivos, oscur^s ybrillantes, pelo•bi^n senta^lo y corta. Por el con-trario, los de colores pálidos y pelo basto son lin-fáticos y poco resistentes dz ordinario.

El caballo bllnco tiéne la propensión a pade^ertunivres melánicos, y es, en general, frío como se-mental. Los caballos pcrla son poco estimadas p^rlos aficionados, porque sueIen ser muy linfáticos,los ojos claros, cl^ ^-ista ciefectttosa, ti', cn crn^se-cuencia, asustadizns.

Como fina^, diremos sobre esta cuestiún clucbien podremos sentar, tomando, como tantas vé-ces, _al caballo árabe como prototipo de su espe-cie, que los p:.lajes de éste son los de m^yor vi-gor en los anima'es qué los presenten ; tales co-lores sou : el tordo, castaño y alazán.

La finura de la piel, su fácil separación delcuerpo, el p^lo fino, corto y brillante, es siempreun ^ bu^ena cualicíad en todos los anirnalés.

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APREC]AC1Ó^ Z00:^7^TRIC:1

]Ĵ l e^tudiu geométrico del caballu fué iniciadohace muchos aitos, lyreten<liéndose encontrar re-laeione5 entre cliv^rsas mc<lid^as a entre las direc-eiones cle las cli^^ersas palaucas óseas de esteanimal.

Ya Bourgelat, eii el siglo ^vIII, y ántes Gris^o-ner eu el h^^I, d^dujeron reglas que definían labelleza o bttena conformacíón del caballo, fijando]as longitudes quc , debían terier ]as principalespartes de su cuerpo, tomando ]a longitud de lacab^za por unidad. Así, la longitud de la cabezaclebe scr igu11 a la amplitu^l de la pelvis, a sulangitucl, a la distancia de la articulación coxcrfemoral a la rodilla, a la distancia entre rodillas,a la distancia de la nuca a la cruz, de la ^cruz alcodo, etc. I?1 diámetro escápulo-isquial será igttala ^,5 cahezas, etc.

Sanson consícl^ralaa. buena 1a conformación delcaballo cuando cumplía lo rluc él 11amó ley délparalelismo cle !as palancas y de la similitud delos ángulos que forman las mismas, ]os cua6es se-rán re^ctos, La figura nas muestra un aninial en elque se cumple esta I^y.

Ni el fundador de la Escuela Veterinaria deL^-ón, ni el celcbrado Profesor de Grignon, hicie-ron prosperar stts ideas en esta materia, que s^rndem-tsiaclo simplistas en re'ación con la compleji-dad del problema que pretenclían resolv^er.

La consideración de los índices ya ^definidos an-t^riormente es de gran importancia para darnos

cucnta de las aptitudes de los animales, sobretodo los índices dactilotorácicos, corporal y decompacicí-ul .

El ínclice dactilotorácico nos <la iclea de la finu-ra clel animal o escasez de esyuel^to, puesto que

laquema de .la llamada por Sansón ley dcl paralelismode las palancas y cle la similitud dc los ángtilos.

ré aciona e' volumen del animal, y su peso portanto, con el tamaño de los, huesos metacargianosque lo sostienen. •

El índice corporal nos expresa las relacionesentre la longitud y grosor de'. tronco, y rea?men-te, su mayor o menor largura. En los caballos de

U^NA00 ^QYINO ^ 10

1,^6 .._

tiro i^esadu, el in<lice no ^xced.'rá de 80, y en lascle carreras clcl>cr^í aproYimarse a ioo.

El ínrlice de coml^^aci<la^l relaeiona pesu y tallarle los animal^s, y por )o tantr^, nos muesh^a la ]i-g^reza o pesadez de lo^ rnismo^. Eu los caball rslongilíneo^, cl índice cle r^^,mlaacida<í no dcl>e serm•^.yur de io, y en 10^ l^reti-ilíneos llel;a hasta is.

El ínciice cle Baron nu^ prop.^rciona un mediode clasificar a los an;males coma ^cl^^ tiro o com ^de carrcra, pues ta^nl^ién nos relaciona el volu-mcn del pecho ccrn la .aizada det anitnal. Si elcoeficiente es mayor de z,^2, e^stamos en ^el pri-mer caso, y si es menor, en ei segundo.

Di^cen los áraUes que el bucn caballo ha det^ner:

Cuatro cosas anchas : fretite^ pecho, grup3 ycorvejones.

Cuatro cosas largas: cuello, vientre, caderas ypiernas.

Cuatro cosas cortas : riñones, orejas, cuartillasy co'a.

rl ploii^os. - I^1 cxamen de lcx aplomos dé losani^rtalcs es cuestión ya conocida desde muy anti-guo, y siempre se le dió la importancia que real-mente tiene; por sólirlas que sean las arti•cula,cio-nes y fuertes los ligamentos y múscu'os, e1 ani-mal no tendrá aptitu-des para el trahajo, ni e'.e-gancia en sus movimientos, si sus aplomos sondefectuosos.

EI aplomo dé] caballo es perfecto cuando l•1v^^•tical que parte de los encuentros divide enpartes iguales los miembros anteriores y toca al

^uclo algu ntás adelant^e clue ;as ltnnl^res de lo^rascos, y acíemás, cttandu la verticral que ^`lividelateralment^, en partes iguales, el nutehra-r_o, cíi-t^ide de i^ual fornla rodilla, caiia y tnenudillo, to-canclo al suelo algo tlctrás ^le los taloncs. );1 ^cuat•-to l^osterior está bíen aplomado cuanclo la vcrti-^al ^lue pasa por 1-t punta de la uali,Ya toca a 1.^ranilla en toda su longitud, dividiendu ^^n partesí^uales las extremidadcs que se examinau, y ade-más cuanclo la vertical qtte pasa por la punta clela rodill^ ]lega a tierra muy cerca de las ]unibr^:,.

Luando estas condiciones no se llenan, se pre-sentan los defectos que aquí vamos a exatninardetenidamente.

F_.rtp•em^idcAdes rnnte^riores.-V'ista. ide ^re^nte.-Sila dirección de los miembros anteriores se separade las verticales correspondientes, traz :das deslclas puntas tle la espalda, tendiendo a juutars ĉ, secíi^ce que el caballo es estrecho o cerrado de bra-zos ; y si, por el contrario, tienden a separarse, elanimal es abierto o desp^rramado de brazos o<le^lelante.

Si son sólo los cascos los que tienden a unirseo separarse, se dice que, el animal es estevado 0izquierdo, respectivamente. Si las rodalas son lasque se aproximan, tenemos el caballu zamhu ocon rodillas de buey; y si est•is articulacion^s seseparan, él animal es hueco de rc^cíillas.

T/ista Zaterczt o^de perfi,l.-Cuando, e^xaminacluel caballo de perfil, sus extremjdad.s anterioresno cump'^en las condiciones de aplomo perfécto,ya estudiado, podrá sucecler que qtiedan por de-

lante o por dctrás de la vertical yue s^rve paraeste caso, y entonces tenclremos que el caballoserá adelantado o remitido de brazos;, respectiva-mente. Si el perfil de 1as eYtremidad^es que esa-mii^am^s ^frece crnn^exidad hacia ad.lante, el ca-

/

_^glamos defectuosos de ,las manos del caballo (.los eincogrimeros casos se corresponden con los números delcuadro Keneral, }' el ní^mero 6 rrpresenta el de cuartillas

]argas).

balla es ror^^o; ^• si haci3 atrás, el caballo es tras-corvo o tiene manos d^c rordero.

Todos estos clefeetos indican : unos, clebilídaclen los remos (adelantado, ^corvo, estrecho o des-parramado) ; otros son causas de que el auimaltropiece (r^emetido de brazos) ; otros, e^n fin, dcque el anima] sé alcance, se toque o se roce (es-tevado), y todos hacen feo al animal que los pre-senta.

E.ra^uae^^a ^del t^-cio ^ostnrior.-i^ista ^d^e ,r^ebrcís.Visto por detrás un caballo y trazadas idealmentelas verticales que pasan por las puntas de las nal-gas, podrá suçeder que las piernas se separen deestas líneas, tendiencío a aproximarse una a la

otra o tendiendu a separarse. I^ti ambos casos, losal>'omos son defectuosos, y él animal se llan^a cr-rraclo y ahierto o clesparramado de atrás, resp.'c-t_ivatuente.

Pue^lt• rncoutrarse el ^lefrct^^ sólu en lus corvr-

Aplomos de las extremidades posteriures d^l caballu(las letras de cada uno se corresponden con las indica-

das en el cuadro general),

jones, y entonces se dice que el animal es zanca-joso o hueco dé corvejones.

h2sta latev-al ^a ,rl^e fie^rfil. - Tárt sólo importacousiderar el ángulo del corvejón„ que puede sermuy agudo o rntry abierto ; casos que se denomi-nan remétido de piernas o cluebrado de corvejo-nes y plantado de atrás.

Los animales desparramados de piernas son débiles de éstas ; los cerrados, se tocan o rozan, ylo mismo ocurru cuando estos defectos se réfié-ren a los corvejones.

L.os ^Cal>altos quebrados d^ corvejones son al.^rt>-

- tso -

pia<los para el trabajo, a;í c^tno los plantados dc•atrás lu son para las carreras y el salto. A conti-nuación resumimos er^ un cu^dro los defectu^

• cousidcrados e^i los a^>lvmos, para su m^ís fácilcompr^nsión :

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Yor últiiuu. es clato muy importante plra juzgar acerca de las aptitudes de los animale^^, c^p.^-cíalmente de '.os de trabajo, el peso de los mis-mos. Así, por ejemplo, el l:^eso dc 375-40o kiiosen lus cahallos e, adecuarle^ a]as caballos de silla :^5o-^00, lo es par^i los de tiro, y hasta los t.oa^kila.;, para los cíe tiro pesa^lo. ^

***

Todos los estudios morfológicos expuestus euestas lecciones sirven para efectuar la apreciaciónde conjunto de los animales, atendiendo a la to-talidad de sus caracteres éxternos. Bíen se com-prende que esta apreciación es muy defectuo-sa, por cuanto los anlmales domésticos no de-ben su valor exclusivamente a su aspecto ex-terior; c{ue, en gencral, no guardl r^lación exac-ta con sus aptitudes zootécnicas o económi-cas. Sin e^nbargo, en ]as razas de lujo o sportesta apreciación es esencial, y por ser más senci-!la que ]as que consideran, además, los caracte-res fisiológicos y genealógicos, ha sido la corrien-temente usada en los concursos ganaderos, tant,en Espafia coma en el éxtranjero.

Para hacer dicha apreciación se elige una serir.cíe caracteres o considerandos, en relación con 'aespécie y clase de anim^l, y a cada uno de éstosse asigna un valor relativo de i a io por apre-ciación persorial de peritos, o según tablas o nor-

. mas establecidas de antentano. Pero corno tpdo,jos cqnsiderandos nn deben influir de igual ruodo

-- t 53 __..

en la calificlción tinal, pues cada uuu cle ellostiene tm v^alor^ muy distinto, se afecta a cada ca-lificación parcial de un cueficicnte ►nayor o me-nur, según la ituportancia de cada carácter. I_asuma de los puntos obtenidos p-ircia'meutc ^;erála puntuación final, la cual ,e ha cnn^•eniclu qucnu pasará de too, consideranclo de tipo perfectoel animal que alcante esta cifra cle puntos. I'ararealizar esta convencióu b^sta que la suma cle to-cíoŝ los cueficientes adoptados sea igual a io, cual-quiera que sea el númera de considerancíos esta-blecidcs. Tanlbién se comprende que es equiva-lente decir que a un considerando se le asigna elcceficiente o,251 que decir que el níimero de pun-tos no podrá pasar de 2,g, y en esta forma sesuelen redactar muchas escalas de ptmtua.ción.

Para ,aclarar cuanto decinlos, a continuaciónconsignames una escala cle apreci-tción para caha-]los de silla.

Al" final (Apéndice' II) inc?uítuus .una tabla depttntuación integral, considerando los car^ctereszootécnicos •?• genealógicos.

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taC':U..1, 11t^: !'L'tiTUAC1^N Y.^11t.^ CABALLOSI^E SILL:1

.Coe(icientes Puntuación

roáti na

Alzada ......... ............................. 0,5 ;1_ínea dursal ............................... o,i 5_^nchura drl pechc^ ..................... i toHueco sttbestcrna] ...................... t,^ i;I)iámetro c,cápulo-i.quial ............ 0,5 5Yerímetro cie la caiia ..............._. i toPerímetro torácico ...................... i roCaracteres sexuales .................... 0,5 5Indice de compacidad ................. z•5 ^5Aplomos y conformación generaL - 2 zo

io,o ^oo

:lntes de proceder a juzgar el valor de un ani-ma] por c•ste sistema, se examina si no presentaa'gúu defecto de lt^s tlnr bastcn para descalifi-carlc.

Otra aplicaciún ii^teresante y útil <le los estu-dios morfológicus es para la redacción de 11s reseñas que cara^cterizan a cada animal; espécial-mente si se trata de ganado caballar.

R^eseyia si^nt,ple: Cab^tllo "Sevillano", entero, drseís años, siete dedos sobre ia marca, calza^lc^bajo del pie clerecho, careto, hierro ^.

Reseñ.a cant^plet^u: Caballo "Sevillano", entero,de seis años, con hierro H sobre el anca izquier-da, cabeza cuadrad-tr cuelló robusto, oréjas peque-ña^, grupa caída, cruz alta, dorso ensillado, ^s-

pal^ía larga ^^ ob'icua, ap'omos posteriores bueno;,.algo desl^arramado de brazos, c^.ñas fucrtes crnitendones l,icn patentes. Raza andaltiza, uacidu e+^Córdoba, Yeguada l^Zilitar, hijo de "Romanito X"^, "Estcr".

Coml^lementan las reseñas y contribuyen, portanto, ^+ ]a mejor ídentificación de los animale:las fotografía ŝ de las impresiones nasales, latimarcas a fuego y médiante tatuaje, y los botoneso pendientes metálicos, que a la vez sirven par^inumerar al animzl.

Estas reseñas, completadas con las fotografíasde los animales„^ ti la croquización de sus manchas,si son píos, datos zoométricos y cuantos puedanreunirse respecto a sus condiciones de produocíóny a sus antecedentes genealógicos, constituyen la^firhas de los mismos.

APRECIACIÓN DEL CABALLO EN EL 1fERCADO

Se trata eri este capítuln de uu asunto de granimportancia, pues si es dé interés comprar unbuen animál, lo es más aún camprarlo sano, quees sinónimo de útil. En toda compra de un animalse precisan algunos conocicnientos s^nitarios, puesno siempre s^ encue+rtra veterinario especializadoen ec^tas cuestiones; que es realmente el perito énla materia.

Pasaremos revista a las distintas partes delanimal, señalando los carlctéres que delaten losdefectos o enfermedades más corrientes.

T^e^r-cio rnn^terriorr o^dela^nt^c^u-o.-^n la cabeza re-

- r ĵb --

viste ]a ru^tl^vr imlwrtancia el esamen detenidade los órganc^^s del oido ^^ <le la vista, ac^í como dcla boca. También examinaremos el estado de lapiel y ci aspccto general de esta parte del aninral.

nr^ia^rros ^.d^^! i^ícf^o.--EI l^rabellón de la oreja cleI,crá preseutarsc linipio, sin seña'es ni cicatricr^,,que clenotar^ín el frecuente uso dei a^rial; s^n ^^c^-rrugas, chaiuros c^ caries, estc^s últhnos de difícilettracicín ; sín supuración ui exceso de cerumen,que deruostrarían otitis y c^tras enfermedadesmás o menos graves.

La sordera es bambiéu un defecto que tienemás o menos importancia;, según el uso a que scdestine el cat>alio. Se reconoce esta afeoción pc,rla inalterabilidad de sus orejau, inmóviles y echa-das hacia atrás, no debiéndo confundirse, s'nembargo, 1a sordera con la parálisie, en cuyocaso no hay prrsibilidad cle movimiento del pabe-]lón auricular,

Entre las artes cle chalanes ,y gitanos está elrecortado cle ]as orejas, para dar aspectu ntejora los caballos orejudos, y, por tanto, reconoccre-mas bien el borcle de estas órganos para hacer pa-tente la sapercheria.

Or^anos irlc !a vista..-Los caballos asustadizos,de ojos grandes con exceso o pequeños en demz-sía, quc levantan mucho los pies a] marchar„ o quellevan los ^ojos medio cerrados; los que padecende lagrimeo o présentan legañas, tienen segura-mente los ojos defectuosos, que precisa reconocermuy detenidan^ente.

La presbicia y la miupía c^uelen aco^npañar a

los ujos detnasiaclo saltoues r a los de cerdo 0muy chicos.

En la for^na temerosa de caminar y en los tr^-piezos con cuerdas u otros obstáculos que se pon-gan quedará patentizada la ceguera cíel animaL A]a vez que la rnarcha incierta, los movimient^^s clrlas orejas en todas direcci^nes poneu, de mani-fiesto este defecto. '

También dice ttn cono<:ido refráu que "caballoyue mira n^ucho, ve poco", puesto que, síendo elc-ampo visual ^del ojo del caballo tan amplio quepuede ver lo que pasa a su espalda sin apenasmover la cahezá, el que la mueve demasia<lo de-nota no tener un ojo normal.

A1 pasar de un sitio oscuro a otro de máa luz,hay que observar si la pupila se cierra lcntamen-te, contrayéndose el iris, pues caso de na ocurriresto, hay^ que supaner la insensibilidad de la re-tina (gota serena o amaurosis), con ceguera abscrluta e incurable.

La conjuntiva deberá ser ro;acia, pues c^i es pá-]ida dénata debilidad, vejc•r. o anemia, y si es de-masiado foja„ manifiesta estaclo congestiro, rata-rro, etc,

En .los ojos pueden presentarse manchas blan-cas más o menos generalizadas, como sun elpa"no, le nube, el pa.jazo, que si no cuhren la ptrpila, no inutilizau al anim ^l. Prczvienen de trau-matismas u objetos extraños.

Pero, sohre todo, son graves en el ojo las etrfermedades conocidas con los nombres de amau-rosis o^ota serena, fluxión periódica y catarata.

_.. t58 -

La am ittrosis, c1e que ya hemos liablado, e5debida a la parálisis clu la retina; el ojo aparecenorn^al, perv la ceguera es total.

l.a catarata cs una afección congénit^t o trau-ntátira qur prvduce la^ opaci^lad del cristalino 0de ^^u c^^psula, y quc genera;nlente aparece en loscios ojos.

La fluxióu pcriódica es una afetción clc la vistlquc se presenta ten^poralmente (cada veíntc días,genera'.mente), empezando por un estado conges-tívo del ojo, al que sigue otro^ en que éste apa-rece de color tabaca;a con un coágulc^ albuminosocaracterístico.

Fuera del período aguclo, sé puede reconocer laenferniedad porque el ojo está como deformado,sin pestañas, muy patenté el cuerpo clignotante yniuy marcado én la cara el surco producido porel lagrimea constante en las époc<^ de enferme-dad aguda.

Existe el llamado ojo uvero u cun roloracióngrisácel, que no tiene otra itnportancia que qui-tar belleza al anitnal, como igualniente las cíca-trices que se observen en párpados o en otra cual-quíer pzrte del órgano visual, y que sólo nos se-ñalarán afe^cciones ya pasadas.

Exaayt,e^n ,de la vaca.-En la boca hemos de exa-minar labios y lengua, sacancío ésta por una delas comisura^ IaUia es, para que así el animal nocierre la boca. La mucusa bucal y n•tsal, como to-<ías las sanas, deberá presentar co'qr sonrosado,sin cicatrices, chancros, aftas, etc. Los labios concicatrices indicarán el constante uso de apar-^tos

para dominar el animal resabiadu; las demás le-siones pueden ser sintomátícas de graves enier-medades, corno la glosopeda, maermu, etc.

Las callosidades en las barras o las heridas enéstas o en la iengua indican que el caballo no abe-dece a la acciGn del boca^do sino muy difícilmen-te„ que tiene boca dura.

"l arnbién puede presentarse parálisi'^ en la len-gua o labios, que fácilmente se percibe por suinmovilidad o no ocupar estos órganos la posi-ción que les corresponde.

La dentadura deberá estar bien conservada ysin presentar los defectos (belfo o picón) que ori-ginan un mal ajuste de las dos arcadas dentarias,tado lo cual hace que el caballo coma mzl y nodigiera ]os atimentos, con las consecuencias con-siguientes. Ue la edad reconocida por el examende la dentadura no hemos de ocuparnos en estelugar.

'1'amt^ién podremos reconacer por el examen delos dientes si el animll paddce la enfermedad ovicio, pues la cuestión no está muy bíen aclarada,que se conoce con el nombre de t^-o. Se llama asia un rui^do o eructo que hace el animal, a la vezque hace movimientos especiales, apoyándose omordiendo, el }^esebre o ronzal, o levantando lacabeza, como mirando ^al techo (tiro al aire).

Los incisivos, por efecto de este vicio, aparecendesgastados en bisel en los casos dé tiro conapoya ^

También examinaremos el estado de las glán-dulas que en la cabeza se encuentran, espécial-

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tuente !as parótidas (dehajo cie las orejas) y lassituadas en el canal cle 'as quijadas. ^lingunapresentará infarto o tumefacciones de'ator^s decnfermedacles cle niuy distinta importancia (pape-ras, amigclalitis, etc.).

(;onvendrá ta^uhién e^amínar cuidadosamcnteel estadc^ de la p:el, toda la cual no presentarározadurr,^;, pelos blancos;, cicatrices, marcas clecaídas, cie vejigatorios o emplastos, que serán de-bidas a enferniedades, yuizá aún latentes, que .exíjan o hayan exigido intervenciones quirúrgi-cas, ete. (traqueotornía, sangría, etc.), o que pro-duzcan vértigos cle tarde en.tarde.

En la nuca y cruz ^s muy importante que nc ^se presenten tumorés (talpa y mal dé la cruz),que fácilmente degeneran en fístu'as raquidianas,que pueden llegar a afectar la médula.

En general, no deberán aparecer heridas pro-ducida.^ por los arneses, <lue a veceti son rebeldesa todo tratamiento. '

La cabe•r.a, por último, nos in<licará, por supostura o viva^cidad, aparte de su ten^peramentoy vígor, si padece algtu^a enfertuedad nerviosa. •tales como el vértigo o locura, que hace aparecertristes a los animales, con la cabeza caída o apcr-}•ada en las paredes o pésebres; su expresión escle aturdidos o dístraíclos, hac^ta el extremo de pe-garse contra el pesebre, quedarse a médio comer,con el alimento parado en la boca, Ias patas malcolocadas o muy abiertas, o con tendencia a jun-tar las cuatro. ^1 animal no obedece fácilménte nirecula ; sus aires son descrtmpuestos y son fre-

cuentes los acce.;os clr locur.t propta^nuut,e dicft,us,por lo cual no tienen seguriclad ni^guna.^^, ^ ^

E.rPre,r^l,i,cfn^rfFS ^^tte^rioines.--Los c^^fectos^^o ta,r^sque cíc ordinario se presenfan en las extre^tti^^la-cles de los animales sc^n : unzs vetes, at,t'ofias muy-culares; otras, tumore+> óseos; otras, hitlartrosís,Yenclonitis, reuma articular, ete.

E^tas son las enfermerlacíes crónicas yue he-rnos de considerar, pues las agudas, n^otivadasl^r traumatism^o^, ipfecciones, heridas, etc., nocreemas deben estudiarse en este•iugar, pues ra-ramente se lIeva al rnercado un animal que laspadezca, y, por otra lado, es bien pall>able su pre-sencia, por el estadc> fehril que provocan o parlas lesiones orgánicas que suponeu.

Las atrofias musculares más frecuentes s^on lascíe los múseulos de espaida y brazuelos, prcxíur-toras de cojeras incurables.

Los tumores óseos o exóstosis son clebidos adel>ilidad del esqueleto ^ esfuerzos muy prolon-gados; el periostio clel hueso se írrita, Ios tejícíosdegeneran y se hipertrofiZn, itupregnándose clesales calizas y osifi^cánclose, por tanto. T3stas tarasn4 son héreditarias, .como algunos ^.,uponen, aun-que sí .la propensión a ellas, por serlo la dehilidaddel esqueleto.

Se presentan en clistintas zonas de los rniem-brosA y así, recibén nombres distintos, como t,m-bién su gravecíac] . es diferente, siempre relaciona-,da con uu extensión y su proximidad ^a las arti-culaciones. Son las principales la sobrecaria y so-hrehueso, éxó5tosis cle la caña en su cara extern i

OANADO BQ41N0 ^ 11

-- tóz ^

o interna ; sobreman ĉ, cti la porción autrrior dela coroua ; clavos en la parte de ]a cuartílla : sella^nan clavo^ pas^ulos si están cn los do5 la^lus.

Las ]tidartrosis sotl debida^ a la acutuu'acíónsinovial de las articulacion^s c^citadas por rau-

/

Ex^istosis e hidartrosis eu las earas externa e internade las cxtremidades anteriores del caballo: t, Vej^gatendinosa; z, Vejiga o lerdón; 3, Sobremano; 4 y g, Cla-voc ; 5, Sobretcndón ; 6, Sobrehueso ; 7, Sobrerrodílla ;

3, Sobrepínta (hiciartrosis},

sas diver;as, mu}• corr;cntet»eut^e pur excesb ^!e•trah^jo. 1Zer^^cen citarse la lttp'_a, veji^as, '.erda,ler<lón, etc., que hresentan en la rotlilla, mcntr,lí-]]o y en las partes laterales inferiores (externa t^interna) del atitehrazo.

J.a tencJonitis, inftan^acibn u iiidttración ^le lostendones (sobreténd^íu), e^ de mucha importanciaen ^1 tendóa flexor ^ maestro de ]as extrémidades:

las veji^as son simples si se presentan cn un

solcr laclo; pasantes, si en l^s clos; lencliuosas, ^ien la parte posterior, y aprorrilladas, si se llegana cndurecer,

Ll are^.;tín cs uua ulceración ^le la piel de lap^irtc infcrior de las estremidades, que segregantm humor féti^lo y se clepilan de moclo caracte-rístico.

Las grietas son afecciones anál^Ygas, situadasen la parte interna o pc^sterior de la cuartillá ymenudillo.

Alcances son contusiones o heridas de los ta-lones„ producidas por las herraduras de las ex-tremidades posteriores.

En los cascos son tanibién nwnerosas las en-fenne<lades o lesiones que pueden registrarse :unas, en la tapa, ocasionando hendiduras v.erti-cales, iale5 cotno la raza y el cu^rto, en Iumbresy cuartas partes, y otras en el interior del pie,como la infosttra o aguadura, que es la inflama-ción de las partes blandas del c^sco ; la escarza olesión circtmscrita a los candados, y el juaneté ^nexóstotis del tejuelo, que al exteriur se reconocepor eI abuItamiento de la paln^a.

Te^ci.o^ ^ruc^^io.-En el tercio medio merecen es-pecial atención 1os ^costillare^, el vientre, ]os ija-res y los órganos genitáles m^5culinas., Las costillas deberán ser bien arqueadas, pue,ello indicará la existencia de potentes órganosrespiratorios; el vientre no deberá ser muy volu-minoso, lo cual, aparte de ser indicio de raza or-dinária, puede indicar que el anim^tl padece cQnfrecuencia cólicas meteóricos ; tampoco será e'^

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vientre deu7asíado reducido, pues, a no tratarse deraza de carreras, este carácter puede ser cc,nse-cttencia cle paclecitnientos gástricns crónicos.

También se puecíen pre5entar cn el vientre he.-nias (inguin<il, umbilical, etc. j y edetnas o tumores sercx^os, verrugas c^ higus, qtte tiien fácilmenteson percibidos.

En los ijares hemns de poner toda nuestra aten-ci8n, pues que ellos nos marcarán si existe o nc^esa enfermedad tan temible llamacía huélfago. Encaso de enfermedad, tras de una inspíración nor-tnal, observaremos una espíración entrecortada oefectuada en dos golpeu.

Esta dificultad respiratoria se acentúa en lasmarchas, y no . se restab'.ece ]a normalidad en laslk^zradas en pocos minutos, como en tos rab111o;sanos. E! huélfagu o asma es debido a causas di-versas, no bien conocidas. actualmente.

También citaremos aquí el ronqttíclo o aninialesrortos ^rle restceJGo, afección debid-t a lesiones ett!as partes anteriores del aparato respiratorio.

En el miemhro podemus observar, ya en e1glatlde o en e] prepucio, chancros, granulaciones,"verrugas, etc.

Es también un defecto presentar la verg^a col-gante, y otro es el que sé conoce con el nombrecle mearse en bragar> u orinar sin sacar el ^lancir.fuera de su envoltura;; l^o que origina constantfirritación en este órgano.

Tercio past,nrior.-Examinando cle arrílxi ha-ci3 abajo esta parte del animal, iremos revisanclolos órganos siguientes :

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Cola.-Ln la parte interna ciel maslo puedenlrresentarse espundias o verrugas, y en su parteexterior una ulceración cara^terística de la faltarle aseo, que ocarsiona un int'ens^ prurito, que ohli-ga al aninial a rasc<irse contra los objetos que en-cuentra.

El ano deberá scr saliente y hien ^cerrado, puesel ano relajado indica afecciones medulares, veje-r.o diarreas frecuentes.

Además, pueden presentarse en el ano fístulasy tumores rrielánicos, o señaleŭ de su extirpación.Sé trata de tumores arracimados muy volumino-sos a veces, de ĉolor negro, que supuran un líqui-do negro y nauseabundo. Se presentan de ordi-nario en ios animales de pelo blanco o claro.

Ancas. - Es frecuénte el defecto de apareceruna más saliente que la otra, por rotura del coxalen • la j uventud del animal, al cual se llama en ^tonces lunanco o desancado. Es de€ecto capitalpara ]a ertética del bicho, péro de ordinario sirveéste para el trabajo.

• En los reinos posteriores sé presentln las exós-tosis siguientes: el sobrepié, en la parté anteriorde la corona ; la corva, en 'las cercanías del plie-gue del corvejón; la corvaza, debajo de la puntadel corvéján; el esparaván huesoso, en la partesuperior interna de la caña,.

La hidartrosis de las extremidades posterioresson Ias vejigas que se presentan en sus distintasarticula,cionés^ a excepción de la del corvejón, endonde se llama alifafes, que pueden ser simples,pasados o trasfollados. >;l agrión es un tumor

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blando de esta clase clue aparece en la punta delcorvejón, que acaba por endurecerse, y no tienegran importancia.

La sobrecorva u ecl^iua gr^ieralíz-:clo consisteen una gran hinchaz^^n cle la parte inferíor dé lasextremidades pc.^steri^^r^,, que e^ en las que de or-dinario se presenta ]a enferm^dacl.

Todas estas lesioncs y otras mucha^ más quepudiéramos citar, así como las análogas citad^sde las extremidades anteriores, tienen importan-cia, por ser causa de las ^cojeras, que és precisoponer de manifiesto en los reconocimientos deque tratamos. ^

Para ello haremos marchar al animal sobre tc-rréno en pendiente, y tlmbién ríeseribiendo círcu-los s^ubre uno horizontal. En las cuestac^ ahajo semarcarán las cojeras de las manos; eu cuesta^arriba, las de los pies ; en las vueltas de izquier-cla a derecha, 1as de las éxtremidades derechas,y en las de sentido inverso, las de las izquierdas.

En terrenos biandos se hacen más perceptibleslas cojeras altas, es decir, de rodilia o corvejoneshacia arriba, y en los terrenos duros; las c<,jerasbsjas se hacen más osten^,íbles.

No terminaremos este capítulo sin exponer quela mayor parte dé ]as cojeras de toda índole re-conocen por causa la abundancia de herradoresque no saben serlo, que cortan los cascos sin te-ner noción de lo que es un caballo y atendiendosólo a déjar un casco bonito, ^como si tallaran untrozo de madera.

^^l artíctalo r.49g d^l Código civil establece la

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nuliclad de los coutratos de compraventa clel ani-mal que padezca enferrnedades o defectos ocultos,llarnados redhibitorios. Se estáblece un plazo va-riable, segím las costumbres loc^les, para cadaen(erniecíad, quc de ordinario es cle nueve clías.pero que llega hasta cuarenta en los casos drduxiún periódica. lle no establccer dicho plazosel Uereclro consttetttd:nariu, c+l artículo i.496 del(:ódigo civil tnarca cuarenta ciías p^ra rec(arnarla ' rescisión.

No es nuestro oUjeto hacer aquí un estudio deesta cuestíón veterinario^legal„ y por eso no enu-meramos las enfermedades que de ordinario seconsideran como redhiUitorias, aunque, desde ]ue-go, lo son casi toclas la^ que llevlinos indicaclas ^en este capítula, y, en general, todas las que scconsicíere pueden pasar inadvertidas para perso-na no perita en .el acto de compraventa.Ĉomo final, sólo diremos que si el'animal conr-

pr^do muere antes del tercer día de poseerle elnuevo dueño, tiene éste derecho a la devolucióndel importe, si queda probado que la causa de lainuertc es anterior a1 acto de la compra.