hysan ensayo
TRANSCRIPT
ALGO DE MÍ
Cada día comienzo un nuevo reto en nuestra vida, soy consciente que yo no fui la
excepción en este diario vivir. La vida nos presenta oportunidades y cada uno las
aprovecha de acuerdo a las circunstancias, Dios me brindó las mejores
oportunidades del mundo, y que sea esté el momento de reconocer a ese ser
quien me ha venido iluminando desde hace mucho tiempo, aunque fui incrédulo, y
créame que a veces, no tuve reparo para llegar a extremos de decir que Dios solo
era para los ricos y la más fácil Dios no existe, pero un día comencé hacer un
análisis de mi vida y comprendí que él siempre ha estado presente en mi vida.
Mi vida en un principio ha sido llena de dificultades y posteriormente de triunfos,
pero el paso que marco mi vida fue el darme la oportunidad de nacer, de haber
encontrado una madre como la de cada uno, con defectos y virtudes, pero sobre
todo con ese amor que solo ella prodiga, y a mí me toco una madre que supo
equilibrar entre el amor y lograr hacerme entender que la vida es bella pero se
construye con sacrificio. Fue difícil entender que tendría que llegar lejos, pero cada
vez que veía a mi madre sufrir, yo alimentaba el sueño de ser alguien diferente,
en ese momento es cuando comienzo a entender que tenía que luchar duro para
conseguir mis sueños
Siempre fui un estudiante hiperactivo, pero eso tuvo consecuencia en mi proceso
como estudiante, porque siempre fui señalado y eso fue una etapa muy difícil en
mi vida, fue arduo el lograr superar las estigmatizaciones que se hacían en una
educación tradicional, donde el docente era que el que tenía el poder, era la
autoridad máxima y no se le podía contradecir, cualquier información a un superior
era motivo de señalamiento y estaba condenado al escarmiento público, seguido
de las típicas represalias que tomaba el docente, cada vez que tenía la
oportunidad, sin embargo siempre me caracterizo la fortaleza para poder
continuar con ese karma, sin embargo logro culminar mi primaria, no sé cómo,
pero comienzo una etapa que ya enmarca otros matices, que como anteriormente
vuelven a señalarme y claro eso no es gratuito la educación no había cambiado en
nada, el docente seguía siendo autoritario, y el conocimiento se seguía
adquiriendo de memoria, y lo más triste que en matemáticas siempre fui un lastre
para entender los procesos que regían las matemáticas, recuerdo especialmente
de un profesor de matemáticas quien siempre llegaba con el argumento, “aquí solo
me pasan unos cinco” y entonces desde el inicio estábamos condenados a
padecer el calvario en nuestros hogares, que era la ley Lancasteriana “la letra con
sangre entra” al problema de no entender matemáticas se sumaba, una situación
más complicada que era que nuestros padres eran aliados de los docentes, sin
darnos la oportunidad de realizar descargos, por lo que uno siempre estaba
dispuesto a asumir las consecuencias y terminaba odiando al profesor, que en
ciertas manera ayudaba a que nuestros padres se envenenaran contra nosotros
con las consecuencias anteriormente mencionadas.
Este proceso fue superado cuando logro cambiar de colegio y me encuentro con
otra clase de profesores y otros ambientes escolares, desde la infraestructura y la
tecnológica que ayuda a nuestro proceso de orientación- aprendizaje, Es decir
existía la posibilidad de estudiar lo que a usted le gustara, es por eso que los
cambios que sufre la educación Colombiana, se dan a la luz de la creación de los
INEM en Colombia y siendo en Pasto es piloto en ese momento, lo que hace que
nuestra institución fuese la más importante en el departamento. Ahí es cuando
comienzo a ver la educación desde otra perspectiva, donde el estudiante tiene un
rol importante en el desarrollo del proceso cognitivo, terminando una ilusión que
desde niño se había fortalecido en mí, pero quien más disfruto este primer triunfo,
fue mi madre que a pesar de no haber tenido una educación primaria, siempre
entendió que educar a un niño era lo más importante.
Comienza a hacerse realidad lo que siempre soñé, que era ser un profesional, que
esté al servicio de una sociedad, que espera que sus hijos le devuelvan con
creces o por lo menos que sean honestos con su comunidad, es por esto que
ingreso a estudiar la licenciatura en matemáticas, para ver como es el trabajo con
la comunidad, y esto me da otra visión del mundo en que nos movemos,
comienzo a recordar todo el proceso que me tocó vivir, y no quería repetir esa
historia nefasta donde la señora autoridad, era el señor docente, sin tener en
cuenta los sentimientos de sus estudiantes, pero antes de continuar debo recordar
mi única profesora de primaria quien me conoció, como a un niño con dificultades
sociales, que en algún momento esta situación obstaculizara mi proceso de
orientación-aprendizaje.
Seguidamente ella comienza a tener un dialogo más íntimo sobre mi vida familiar y
se da cuenta que la situación era difícil que un niño con hambre estudie,
asumiendo una responsabilidad que no era de ella, pero me imagino que ella tenía
un compromiso social con la escuela y creyó que esa era una manera de aportar
con granito de arena y salvar a un niño de ser desplazado por la indiferencia
social, luego cada uno continua con su camino y yo con la mía que por cierto era
llena de incertidumbre. A veces pienso que ella se había tomado en serio la
profesión docente, y sabia los retos que implica ser docente, o porque no pensar
que alguna vez leyó la poesía “la culpa es de uno cuando no enamora” del escritor
Mario Benedetti del libro el inventario, creo que ahí radica el asunto, en el leer, y
más que leer, entender ese legado que nos dejó el maestro de maestro, tener la
paciencia y la sabiduría para comprender al prójimo, y como decimos, mi
profesora tenía clara la vocación, sin embargo en el año 2001, cuando me
encuentro a mi profesora, para ese entonces yo era dirigente sindical y social, y
estaba participando en la coordinación de dicho paro que estábamos realizando
los maestros, en defensa de la educación pública, y de esas cosas creo que la
profesora nunca espero encontrar un dirigente y sobre todo un profesional, cuando
nos miramos lo único que yo hice la abrace y le dije este es el estudiante al que
ayudaste algún día, lo único que se vio, fueron lágrimas de alegría y emoción, al
ver que ella había ayudado a un niño, ahora hecho un profesional que no
engrosara la fila de niño desplazados por estado y la sociedad, entonces yo me
pregunto ¿Qué pasaría si cada persona con posibilidad de ayudar un estudiante lo
hiciera?, la respuesta no necesita mucho tiempo para saber que los resultados
benefician a una sociedad carente de bondad y sobre todo de solidaridad, eso hay
que agregarle, a nuestros “ilustres dirigentes quienes nunca se han preocupado
por un proyecto serio en educación .
Espero que se contagien de mi emoción al poder evocar a mi docente que
permitió que un niño lograra consolidarse como profesional y logre desarrollar sus
sueños, un día cualquiera llega una información que se necesitaban docentes en
el departamento del Putumayo, recuerdo que habíamos cinco compañeros, de los
cuales fui el único que acepto y tomo la determinación de aceptar la propuesta, y
estoy seguro de que nunca me equivoque, cada vez que recuerdo ese instante,
expreso que fue la mejor determinación, asumiendo ese reto de trabajar en un
sitio que no conocía, que estaba estigmatizado por la violencia, una cruda
realidad, algo que no se podía esconder, llegando con la ilusión de primer trabajo
como docente, y no puedo esconder mi temor hacia un lugar que era desconocido
para mí, pero sin embargo la adaptación solo fue cuestión de días, porque
semanas después sentí el calor humano de la gente, de un población donde la
bondad y la humildad de un pueblo es la constante, olvidándose por unos
instantes, que había sufrido los embates de una violencia que nunca ha sido de
ellos pero sin embargo han tenido que participar en esta , y a mí me tocó hacer
parte de ese conflicto.
Paulo Freire nos recuerda nos recuerda cuando habla de la “pedagogía de la
esperanza” y esto lo que mantienen vivo a esta población que algún día todo va a
cambiar. Sin embargo como todo proceso fuimos entendiendo, que si bien es
cierto nosotros estábamos en una zona de difícil convivencia, también era claro
que nosotros debíamos acompañar y ayudar en esta problemática social,
después deduje que esa era una bendición de Dios, porque en nuestra profesión
hay que hacer patria, y es en estos lugares donde el estado, no tiene un propuesta
social sería, que permita mitigar el hambre, siempre se dan paliativos, que lo
único que logran es fomentar la mendicidad, solo se acuerdan de estos pueblos
cuando van por su riqueza, y en épocas de elecciones es cuando existe el pueblo
del Putumayo, Sin embargo hay que destacar a nuestros docentes que hemos
tenido la fortaleza para sacar adelante propuestas educativas.
Para mi especialmente haber llegado a la Institución Educativa Gabriela Mistral del
municipio de Orito, fue una de las grandes experiencias en mi carrera docente y
como ser humano luchador y soñador, que en Colombia todo es posible, me
atrevo a decir que ha Orito y las Instituciones donde laboré, me enseñaron a ser
docente, a creer en nuestra gente, en nuestros niños, y sobre todo que había que
apostarle a la paz, y la única manera de lograr un paz consolidada, es educando a
un niño, mi paso por la Institución Educativa Gabriela Mistral, está llena de
gratitudes, siempre recuerdo ese afecto de mis estudiantes y ese reconocimiento
que siempre me hacen mis ex alumnas, cada momento que tienen la oportunidad,
eso me llena de satisfacción, y como yo siempre digo, cada frase de elogio me
compromete cada día a ser mejor, cada expresión que sale de cada niña, es un
estímulo para continuar con esta labor tan digna que nos hemos comprometido, es
importante hacer un reconocimiento a esa población que me vio crecer como
profesional en mi área de matemáticas y quien me ayudo a crecer como persona,
a aceptar mis errores con grandeza y sobre todo a reconocer a una comunidad
digna de todo elogio, creo que a uno no le alcanzan los elogios para una
comunidad como la de orito. Reconocer en sus estudiantes ese espíritu por salir
adelante ante una angustia de su mismo pueblo que quiere salir adelante y la
única manera es preparándose, y creo que ellas lo han entendido muy bien, por
eso desde aquí quiero continuar motivando a esas mujeres que tanta alegría le
han brindado a mi Institución, y voy a citar un frase que forma parte de su misión
formar mujeres líderes gestoras de amor y paz, y creo que desde sus directivas,
pasando por los docentes y quienes han desarrollado ese legado sus egresadas,
para toda esa comunidad educativa llena de ilusión y esperanza, invitarlos a que
continúen con esa lucha incansable.
Sin embargo la vida cada día me ha ido preparando diferentes caminos en mi
profesión, siempre he pensado que el ir cambiando de ambientes debe ser una
motivación para el docente, creo que el crear pequeños feudos en las instituciones
no es bueno, sin embargo siempre hay que buscar nuevos horizontes, que nos
permitan crecer como personas y profesionalmente, y siempre he conseguido lo
que me he propuesto, y en esa lucha constante por conseguir mis objetivos, logro
trasladarme a la Institución Educativa Fray Placido de la ciudad de Mocoa, donde
fui recibido muy bien, mi trabajo se hacía notar poco a poco hasta lograr un
reconocimiento como una persona enamorada de su profesión, creo que mi
esfuerzo por hacer las cosas bien siempre se notó, deje un huella, que me ha
permitido aquí y en los lugares donde estuve dejar las puertas abiertas en una
Institución que tiene sus particularidades y eso hace que el trabajo en esta
comunidad Educativa se vuelva interesante y apasionante, siempre he reconocido
la labor del señor rector y mis compañeros, quienes con tesón y pasión, logran
desarrollar un proyecto educativo que se verá reflejado en unos años, de eso no
tengo duda.
Aquí en esta Institución se solidifico mi aprendizaje en pedagogía conceptual,
porque pese a que hice un diplomado con la Fundación Alberto Meranni, siempre
quedaron vacíos que solo se logran llenar cuando uno tiene la humildad de
continuar en este proceso de cada día conocer más.
Esta pedagogía me permitió asumirla con propiedad, y es así como logro en
formación de desarrollo institucional realizar la primera charla para docentes del
Municipio de Orito, la cual fue aceptada por mis compañeros, esto me llenó de
confianza, para continuar realizando la segunda charla en el municipio de Puerto
Asís, en la Institución Santa Teresa, luego se fortalece estos conocimientos con
charlas en la Institución, acordadas con la coordinadora académica.
Continuando este proceso viene el paso más importante en vida, que es la
consolidación en mi vida profesional como tutor, etapa que siempre soñé con
realizar charlas de formación: para mi este espacio es único, soy consciente de la
responsabilidad que esto implica, y siempre he sido un hombre de retos, que
siempre le apuesta a realizar cosas diferentes que ayuden al desarrollo de nuestra
sociedad, y en este caso a nuestros niños, que siempre los veo como a mis hijos,
a ellos les debemos entregar lo mejor. Y esta debe marcar la diferencia en cada
uno de nosotros donde cada uno va estampar su rúbrica para decir, yo fui parte
del proceso histórico que gestó el Ministerio de Educación Nacional en un
momento determinado de la historia, una apuesta en la que todos fuimos
cómplices y artífices de esta nueva Educación en Colombia.
Aquí no puedo dejar de mencionar a mi familia que ha jugado un papel importante
en este proceso, siempre han sido los sacrificados, pero ellos sin egoísmos
apoyaron mis decisiones, conscientes de que esto contribuirá en el desarrollo de
una educación de calidad y justa para nuestros país, a mi esposa que ha tenido la
paciencia para soportar toda esta ausencia, y que la ha asumido con la fortaleza
de las mujeres nariñenses con esa verraquera, y mis hijos quienes en algún
momento tuvieron que compartir ese amor que prodigamos los docentes para
nuestros estudiantes, a ellos decirles que todo esto siempre se hizo para tener un
bienestar y aporte a nuestra sociedad, solo me resta decir que por la educación ni
un paso atrás, siempre estaremos atentos a los cambios que beneficien nuestro
sistema educativo.