josé luis pinillos_instintos
TRANSCRIPT
-
7/25/2019 Jos Luis Pinillos_Instintos
1/6
zLB
PrinciPios
de
Psicologa
formas
prefijadas de
responder
a
la rcalidad'
que
el
aprendi4aie
pre'
supone
y
con
las
que
eventualmente
interacta.
I.
Los instintos
En un escaln evolutivo superior al de los tropismos, las
kine'
sias
v
las
taxias
aparecen
esal
complejas
acciones
vitales
todavla
poco' penetradas
d
razn,
que
reci6en
usualmente
el
nombte
de
instintor.
En
la
psicologa animal
del
siglo
pasado
y-comienzos
ie
ste,
la nocin
d
instinto
se
utiliz
con
bastante
profusin,
y
toda-
va
hoy, en
el
lenguaje
ordinario
y
en
buena
parte de
la
psicologla
clfnica,
se
contin
haciendo
uso
de este
concepto,
aunque
sin
ex-
cesivo
rigor
las ms
de
las veces'
Si
alguien
se.quema
a.mano
y
la
retira
inrediaiamente,
se
nos dice
quiz
que
lo ha
hecho
instinti-
vamente;
si
un nio
se
refugia
en el
regazo de
su
madre
al ver
una
c"ru
deronocida
lo
ha hech
por
instinto,
y
si
el
padre
se
lanza
al
^gva
par^
salvar
a un
hijo
qrr
te
le est ahogando,
es
-asimismo
el
istinto la causamisterosaque le ha impulsado a hacerlo' La 9gte'
sin,
el suicidio,
la
guerra
se
explican
tmbin
recurriendo
al ins-
tinto
de
muerte,
a
li
par
que
el
instinto
gregario
puede
dar
cuenta
de
la cooperacin
sociil
entre
los
animales
y
los
hombres.
El
ins-
tinto,
en
irr-a,
trrtge
a menudo
como
explicacin
misteriosa
de
las
ms variadas
conduitas,
sin
que
naturalmente
aada
un
adarme
de
claridad
a
la
mem descipcin
de lo
que
sucede.
Significa
eso
que
la
psicologaactual
ha de-renunciar
a la
nocin de
instinto?
Puede,
poi
el cotrario,
competir
el
instinto con
los
hbitos
en
la tarea
de
explicar
el
comportamiento
animal
y humano?
Tendr
razn
Skin-
n.r, o valdrn-ms
las teoras
de
Lorenz?
A
qu
ca-rta
quedarse
cundo el
psicoanlisis habla de
las
pulsiones instintuales
del
hom'
bre? Todo ello bien merece quiz unos minutos de reflexin.
1.
La nocin conuencional
de
instinto
Nada
menos
que
Charles
Darwin
mantenfa
la
opinin
d9
9ue
los
instintos er"n
latt
importantes
como
la estructura
corporal
para
la supervivencia
de
las especies.
Un
prrafo
entresacado
de
El origen
de las
especes
os
puede
servir
para
tomar
un
primer
contacto
con
la
nocin de conduta
nstintiva,
tal
cual se
utilizaba
por
aquel
en-
tonces.
Todo
acto
-escriba
Darwin-
cuya
ejecucin
equiereen
el
hombre
un
aprendizaje,es una accin instintiva desde el momento en.que. se ejecuta, sin
experiencia'
alguna,
por
un
animal
jov..
y
es
repetida del
mismo
rnodo--por
mrr.hor
individluos,
sin
que
sepan
a finalidad
que
petsiguen
con
ella.
(Cap.
VIII.)
5.
El aprendizaje
2L9
Denffo de esta
concepcin,
or
instintiva se entendla,
pues,
una
conductade catcter
supervivencial,
o aptendida
como
la
cons-
truccin
de un
nido, la reproduccin
la
defensa-,,
cuya
ejecucin
se rcaliza
ndeliberadamente, de
la misma forma,
por
todos
los
miembrosde una especie
ue
se encuentran n
la misma situacin.
La
tentacinde aplicat ese
conceptoal
mundo de la accin
humana
era demasiadouerte como para ser tesistida,y as|, 7illiam James
lleg
a
proclamarque
el
hornbre
posea
ms nstintos
que
cualquier
otro animal, aun cuando,eso sf,
podlan
ser
modificados
or
el h-
bito.
Ms radical
todavla
ue
\illiam.
McDougall,
que
en su
influ-
yente
Psicologia ocial
(1903)
propuso
una
interpretacinclaramen-
te
principialista
del
instinto, al
que
consideraba
omo
taiz disposi-
cional e
impulsora
que
inicia
y
mantiene
desde
dentro
las
pautas
conductuales
ue
se manifiestan
en
la accin
humana.
En
esta
in.
fluyente
definicin,
que
reproducimos cto
seguido,el
lector
puede
advertir el tono
-
7/25/2019 Jos Luis Pinillos_Instintos
2/6
220
PtinciPios
d
Psicologla
repertorios
de
instintos
fijos
por la
ms
econmica
I F:lbt T:"
;:t"
J;
t*
conceptos
.
h?bit"
y drioe
(impulso)' Pero
s
debe-
*rrl
""
1r*io,
upro*.h"r
l"
ocasin
para
precisar
en
lo
posible
il;""r;;;;i;r:
d.
.r"
"o.in
conveicionil
d.
instinto,
to.ava
;;;;;
;igonu
*9d,,
v
ptottdtt
luego
a
su
crtica
cientfica'
'-
E;
fineas"gener"k;;;;
.o"dott^
insiintiva
cabal
tendra
que
.,-r-pii.,-t"gn"ese critrio que comentamos, on los siguientes
e-
quisitos:
d
Ser
nnata,
esto
es,
ejecutable
in
el
concurso
de
experiencia
o
aprendizaie
lguno'
" -'[l--
Srr'estereotipad,
es
decir,
rcalizarce
on
arreglo
1-"1."t
pauts
iias,
bsicamnte
nvariables
n
su
lorma
y orden
cle
ele-
cucin.
"*;t
Ser
especfica'
sea
compartid
por todos
los
miembros
de
l,
.ri..i.
-y'h"r,u
.ito
p"n'o
por
los
de
las
especit:,: ":1'^-.,
l
Desencadenarse
ndeliberadamente
nte
clerto
tlpo
o
es'-
mulos
externos
/o
intraorgnicos.
-_
t^-^^^^.1^^^.1
"'-';; 'il*rr. l"rru su consumacin, na vez desencadenada,
"n
ut"n
-in.t"to
de
la
estimulacin
ue
la
provoc'
- -
)
Poseer
"n
gto .
copleiid"ti
tttpeiior
a
la
del
simple
re-
fleio.
il Tener
un
sentido
supervivencial
am el
individuo-
9u9.
'
.i.ilr,
t"
ot'tt-.tp..i.
il*tido
del
que sin
embargo
l
indivi-
duo
no
es
consciente).
-"-
hi
Finalmente,
egn
algunos
autores'
ser
saciable's'
:l?
?
ms
difciles
de
provocar
ras
estimulaciones
epetldas
lo
cual'
sln
;.r;;;:-;f..i
h.
i;'--;;v
i'tint'
a
la
coducta
de
deferisa
o
ut"q,r.]
que a
la copulatoria
alimentaria)'
Una
mera
oieada estos- cho puntos revelaen seguidaa com-
pleiidad
del
concepto
y1i
f^ti^
de
iigor
con
que usualmente
e
apli
:;:'":
;;tr'i.;.;
qu"-ttit
al"respecto
a
psicologla ctual
v
otras
ciencias
afines.
"'-;;;;",
Y
por lo
que
re.specta.
l
carcter
nnato
del
instinto,
se
sabe
que
la
^
y*ii
d -
as
llat"adas
onductas
nstintivas
equie-
;.";;;;i;;i;;;
;^",
u
*"'udo--muv
considerable'
har"
il
fiffi;,";"il1;"pot"i9'
como
illiam
H'
Rivers'
an
hecho
notar
.mo
;i;;;^,
iribu-s
primitivas
el
llamado.instintc
;;;;id.
u-tor"puar..
desha'cerse
rutalmente
de
los
hijos
i""""
f"
furniiu
no-p"de
alimentarJog
tiene'
simplemente'
a
rmchosdel mismo ;,.;; ;; necesidad e ir a buscarejemplos
an
distantes,
u
*ir*u
,o.i"dud
actual,
on
su
creciente
prcticadel
aborto.
nos
indica
;
J"ri..'.t
amot
maternal
eit
mediado
5.
El aprendizaie
221
por
valores
y procesos
ulturales
que
tienen
muy
poco
que
vef
'con
ia
hetencia
biolgica.
Cierto
que
en
algunos
animales
una
inyeccin
de
prolactinu
r1upu"
de
susitar
comportamientos
maternales
lpi-
cori
p.to,
incluso en
el
mundo
animI,
experiencias
omo
las
de
Beacfi
(
1956)
han demosuado
hasta
qu
punto
la
experiencia
-es
indispensable
al:-
que
las
hembras
en
este
caso,
ratas-
cuid:n
de
ss cas
y-no
l
devoren
poco
despus
e
nacet.
En
una ttibu
de NuevaGinea,por poner oiro ejemplo,Margaret-Mcadenconr
que
a aficin
a sh,tecas
que
ofreclla
los
nios
de la comunidad
dru
-^yor
en
los vafones
que
en
las hembras caso,
segn
nos
cuenta,
porque
eran
los
padres,
y
no
las
madres,
quienes
criaban
a
los
hijos-.
-Pensar
que
l lucha
o
la
guerra es
un instinto
del
hom-
bte
parece
asimismo
estar
en contradiccin
con lo
que
han descu'
bietb
antroplosos
como
Franz
Boas entre
los indios
cuaquiutel,
qu'
zanjan .rt
i'if.t.o.ias
mediante
iestas
en vez
de
geleas,
o
con
lo
q.r.
nos han dicho
Ruth
Benedict
o
Alexander
Goldenweiser
a
profrito
del
modo en
que
los
indios
zuni o ciertos
-esquimales
c'
io.[u.n sus
con{lictos
nterpersonales;
n
efecto,
Goldenweiser
pa-
rece
haber encontrado
ribs
esquimales
onde
las
disputas
petso-
nales se dirimen a avn de concursos e canto, en que los votos
de
la
mayorla
designan
l vencedor.
En definitiva,
esto
significa.que
muchos
e
los
sedientes
nstintos
animales
humanos,
por
no decir
casi
todos,
estn
mediados
por
la experiencia
vaan
en funcin
de
ella.
Se
dan,
en vetdad,
algunas
onductas
enuinamente
nn4tas,
como
la del
matsupial
Didelphis
uirginiana,
que
nada
ms
nacer,
sin
ayuda
de
la
madre
ni aprendizaje
lguno,
trepa velozmente
por
el
curpo
de
sta
hasta
efugiarse
en la bolsa
o
marsupio
don'le
per-
mun..
hs
primeras semanas
e su vida;
pero
conductas
asl,
que
renan
a
la^vez
odos
los requisitos
de
la instintividad,
son
franca'
mente
diflcles
de
encontrar.
Las
experiencias
e troquelado
efec-
tuadas Dor etlososcomo Konrad Lorenz han revelado,
por
ejem"plo,
el efecto
su-til,
pero
casi
indeleble,
que ejercen as primeras
e*oeriencias
e
los aimales
n sus
ulteriores
onductas
nstintivas.
La indisoluble
reciprocidad
que guardan entre s
la
maduracin
y
el
aprendizaje
erniiten,
por
otra
parte,
comprender
que
una.detet-
minacin
exclisiuamente
genticade
la conducta
es
en
prilcipio
imposible,
aun cuando
en
algunos
casos
-el
ejetcicio
po-stnatal
re-
cis
para
rcalizar
un acto
tea tan
insignificante
que
podamos
califi'
carlo
de
innato
a efectos
prcticos.
Respecto
la
condicin
que
hemos
lamado estereotipia,
s
muy
cierto
que
hay estlmulos
releasers
desencadenadores
n
la trmi;
nologla-
etolgica)
qrre
desencadenan
autas
fijas de
accin
(PFA)
que poseen na figura prefiida,que se rcalizacon un orden secuen-
clal innegable.
Entre
los muchos
ejemplos
posibles
al
respecto
es
-
7/25/2019 Jos Luis Pinillos_Instintos
3/6
222
PrinciPios
de
Psicologa
obligado
mencionar
los estudios
de Niko
Tinbergen
(1951)
con,los
*".Lot del
pez
espinoso'k,
cuya accin
agresiva se
desencadena
en
presencia
de
modelos o
reclamos muy
toscos, siempre
y
cuando
estn
ptovistos
de un
vientte rojo,
que
es
al
patecet
el
,releaser
o desencadenador
e sus ataques.
Las
conductas
estereotipadas,
ms
frecuentes en
las especies
poco
evolucionadas
que
en
las superiores,
y
ms
frecuentes tambin
en las
primeras fases
de
la ontogenia
que
en las avanzadas,constituyen por descontado una realidad, en la
que
justamente
se func{an
muchos
zologos
para
identificar pida'
mente
la especie de
un animal.
Los ornitlogos
proceden
a menudo
de esta manera,
quiz
debido
a
que
las
aves manifiestan
con bastante
claridad estas
PFA. Por
supuesto,
ales
pautas
no son absolutamen-
te uniformes,
y
el animal adapta
siempre
-mejor
dicho, casi siem-
pre-
sus PFA a la
circunstancia
concreta
en
que ha de operar,
como agudamente
hizo notar
von
Allesch
(1942)
hace muchos
aos.
Sin
embargo,
insistimos, es muy
cierto
que
los complejos
y
vistosos
rituales con
que
se inicia
la reproduccin
en
muchas
parejas
de aves
y
peces,
o las cuidadosas
secuencias
de actos
con
que muchos
p-
jaros consuyen sus nidos, son, a no dudarlo, ejemplos nequvocos
de
que
existen PFA ruzonablemente
'niformes. Otra
cosa
muy
dis-
tinta es, no obstante,
asumir
su carcter
exclusivamente
nnato.
Acabamos
de indicar
que
los
animales no
siempre
adaptan
sus
PFA a la circunstancia
concreta
en
que
tienen
que
operar.
Cierta-
mente,
en la mayora
de los casos
s lo hacen,
o de otro
modo
la
vida
animal seta
inconcebible;
pero
las bien conocidas
acciones
n
ua:cuo
Tinbergen,
1951)
que
se
ponen
de
manifiesto
cuando
una
ardilla,
por
ejemplo, efecta
todos
los movimientos
precisos para
enterfaf
una nuez en
un suelo de
madera, demuestran,
a la
par
que
la estereotipia
y
el carcter
ndeliberado
de la
accin, su
desconexin
del contexto
y,
en
definitiva, su
falta de sentido
adaptativo
concreto'
Las PFA devienen as esquemas gidos sin valor supervivencial.
La
especificidad
de las conductas
instintivas tiende
en
general
a cumplirie,
hasta
el
punto
de
que
algunos
etlogos
prefieren
hablar
de conductas
especficas
species-specific
ebauior)
que
de conductas
instintivas. Tambin aqu
acontece,
sin embargo,
que
la experiencia
introduce
variantes
locales, como en el
canto de
pjaros
pertene-
cientes a
la misma especie.
Excepto clespus
de una
cuidadosa
n-
vestigacin
comparada es
arriesgado,
por
tanto,
asegurar
que
una
determinada
conducta es compartida
de
igual
modo
por
todos
los
miembros de una especie.
Sin duda,
las coductas
nstintivas difieren
de
los tropismos,
las
kinesias y las taxias, en que propenden a continuarse hasta su
con-
*
Gasterosteas
culeatus.
5.
El aprendizaie
223
sumacin,
sin
necesidad
que
el
estmulo
desencadenador
siga
ac-
tuando.
La dificultad
estriba
aqu en
que
esta
nota
es'-
por
una
par-
te,
comn
con
los
reflejos,
y por ott"
-tiende
a
cumplirse
ms
lite-
raimente
en
conductas
muy estereotipadas,
omo
los
actos
n
t)actto,
l
r.
.t
acciones
ms
compleias
comb
el
ataque
o
la reptoduccin'
inr"r.
simplemente
.r,
.,r.rt*
veces
os er"rc.ot
copulatorios
de
los
perros
,
int.r..tmpen
por rnil causas
accidentales,,o
una
perse-
c.rcin iniciada se detiene de improviso en un animal,,sin rnotivo
anarente.
por
descontado,
el
.ui.tut
propositivo
de
la conducta
instintiva
tiene
aigo
de
maquinal,
se
asemeia
a, una
secuencia
auto-
mtica
que
una viz
iniciad
se
desarrtlla
fatalmente
hasta su
tr-
mino
previsto;
pero
a
la vez
es
claro
que,
de
hecho,
-muchas
de
las
conduitas
insiintivas
aparecen
mezcladas
con actos
de
carcter
su-
perior,
o
circunstanciaies,
que
desvirtan.
su
supuesta
fozosidad.
rto ..roltu
tanto
ms .uid*t.
cuanto
ms
se
asciende
en
la escala
evolutiva,
en
cuyos
niveles
superiores
las
acciones
nstintivas
se
complemntan
y
*p.ru.r
gradualmente
mediante
conductas
adquiridas.
El so del
hmbre
es'
a
este
respecto;
sumamente
claro'
De
aqul
- que los intentos de dar cuenta del iompoltamiento
humano
apelando
-
or.oro,
y ptimitivos
instintos
se contemplen
hoy en
la mayofia
de
los crculos
cientficos
con
notorio
recelo.
En
definitiva,
y
esto
ha ocurido
ms
de
una
vez
en
la
historia
d.l o.nrumi.rrro'rr-urro,
dar
por supuesto
que a. todo
trmino
;;"
;,
significado
ha de
corresponder
una
realidad
objetiva
precisa,
;;;r;i,"
naturalmente
un
crssimo
error.
Sin
,necesidad
de
des-
;;iifi.";'p",
completo
el
trmino
instinto,
reducindolo
a
un
mero
ilirit
,"it,.,
obuio,
sin
embargo,
que
con
l se alude
de
manera
har-
;;;p;i;
a
.orrdotas
m,ry
di-utrts
v
con
frecuencia
mal conocidas'
;;l;;;t
Je
lu,
u...,
ni
cumplen
los
requisitos
de
la
instintividad
ni prr.den incluirse en
una
misma
categora'
Si
a esto
se agrega
que
la
iristoria
del
concepto
comporta
un cierto aire principialista'. que
tt".
"
la
*emoria
las
famosas
uirtutes
de
la
ciencia
medieval'
se
.o-pt.n.
que
para
hablar
de
instintos
haya
que
hacer
hoy
en
da
*rr.'h",
pr..irio.r'
Acaso
por esto,
muchos
psiclogos
hayan
op-
tado
sinplemente
por no
hablar
de
ellos'
2.
lnstintos
Y
relleios
Si
el
instinto
se
define
como
regulacin
innata
de
la
conducta
'
d.
;;r-;tp;cie,
sin
ms
aclarucionesl
esulta
entonces
que la
fron-
i. i" .n,r.^.I
istinto
y
el
reflejo
se
hace
bortosa'
pot,cuantortam-
bin los refleios incondicionados,y sobre todo las cadenas erleJas
.
.i**
.-irt.jiu,
regulan
la conducta
animal
y humana
en
mu-
-
7/25/2019 Jos Luis Pinillos_Instintos
4/6
224
PrinciPios
e
Psicologa
chos
aspectos
mportantes.
lfasta
tal
punto
esto
es as
que
algunos
etlogoi
(Tinbergen,
I95l)
llan
optado
por
teservar
el trmino
ins-
tinto
para
designar
as
-
7/25/2019 Jos Luis Pinillos_Instintos
5/6
i l
226
4.
Los
instintos
del
bombre
Principios
de
Psicologa
con
una
expresin
feliz,,Portmann
calific
una
vez
al
hombre
.o-o
,.,
de
caiencias.
Le
faltan.
en
efecto,
ms
que
a
ningn
otto
t.t
.tut-pu"ras
fijas
de
accin-
,
por
lo
tanto,
cerradas',
qlre
convierterr
al
animal
en
un
sef
oenclasado,
que se mueve
con
relativa
seguridad
in
un
babita
donde
estimulacions
y
respuestas-guardan
una_co,rres-
pondencia prefijada tenazmentepor la evolucin de la-especie'El babt-
i;;l;l";bre
es,
insistimos,'mucho
ms
indefinido
v
abieto;
.es'
en
definitiva,
la
tealidad
entera
y no una
potcin
limitada
de
el a.
E;"bgi.;;",.,
a
hombre
es
un
ser
ecumnico;
en
cualquier
medio
;d-Jh*.t
,
.uru,
lo cual,
vuelto
por-pasiva,
significa.
que en
realidad
carece
de
una
oika
natural
como
los
dems
animales
y
ne-
cesafiamente
tiene
que hacrsela.
El hombre,
para decirlo
escueta-
mente,
es
un
ser
"i
qn"
la
natutaleza
ha,
expulsado
de su-
seno,
forzidole
as a
inveniarse
su
propio
mundo
o
a
perecer; ms
que
un ser
de
respuestas
s,
pues,
un
ser
de
propuestas;
un
homo
agens
ms
que
reagens,
un
ser activamente
abierto
*'
En este r d" mxima plasticidad y mnimas pautas-fijas es l-
gi*
qrr. los
instintos
no encuentren
conveniente
acomodo'
De aqu
q"" t"
psicologa
cientfica
actual
no
fe mucho
en
las
concepciones
uit"lir,u,
que
ponen
como
fundamento
regulativo
.
del
comporta-
miento
humano
los
grandes
nstintos
como
-bros
o
lnatos..bl
amof
"-ll
*".rr..
qu
dua
cabe,
forman
parte de
los
grarides
temas
de
L
^"fJ"l-.o-
nadie
duda
ampoco
.
q,r.
el
llamado
instinto
de
conservacin
juega
en
alguna
trlt.r"
un cometido
central
en
la
con-
ducta
de
todo
ser
vivo.
Peto
una
cosa
es
aceptar
que semelantes
proposiciones
poseen
un
sentido
en
el
lenguaj
ordinatio
o
en
la
poesla,
y otra
muy
distinta
es
pretende^r
convertidas
en
proposi-
Iio*t'.."tific* cn valor explicativo' Afirmar que el hombre' pon-
n*t oot
caso,
destruy.
o *
suicida
porque le
impulsa
a
ello
un
il;;;
V
profudo
insiinto
de
muerte
es
incurrir
de
nuevo,
pero
;;;;,
;
ia vieia
tautologa
de
afitmar.
que
la
adormidera
duerme
porque
posee una
oculta
virtud
dotmitiva'
'
htg"not
movimientos
psicolgicos
contemporneos,
como
ll
pli
.ourrlrir,
han
incurrido,
*ul
ql't les
pese,
en
este
vicio
de,
fondo'
asravado
adems
por
la
circunitancia
dt
ttt
justamente
el
hombre
aiuel
organismo
onde
Ia
plasticidad-del
sistema
nervioso
alcanza
,ri
*itiu
expresin
y la creacin
cultural
es
una
necesidad
biol-
gica. De
ello,'porque
es
un
tema
grave,
nos volveremos
a
ocupar'
*Cf.a l fespectoelestudiodeX.Zubir i :.
(Reu.
e
Occidente,
963,I.)
J.
El
aPtendizaie
227
pero
es
obvio
que
la
apelacin
al
instinto
como
recurso
explicativo
:tr;t"l;.;"'d.
1rrg,,
que en
ffnguna
parte
en
el
estudio
del
hombre.
5.
Algunas
conclusiones
La oerfeccin
con
que animales
tan
simples
como
los.
insectos
.i...,"'J^r'#"i""r1il;?"-as, como u.consiroccin
e
tneles,
a
orientacin
n
.t
"rpr.o
o
lu'tt"nt-isin.de
informacionesrecisas'
ha
maravillado
siempr*e
"i ""t"tulitta.
o
simplemente
guign
h1-5-
iil;i;il;
sobre
el'problema.
Conductas
an
sorpfendentes
omo
la
mieracin
.
ru
.iir,ii;;-;
e.la
tortuga
de
las.c9st11
{el
il';:ii:'4il.d"ilT;'-;;;
nada
asta
a
pequea
sla
de
La
r."lil,
p..idu
"n1f-ifa"iico
Sur,
a
ms
de
dol
mil
kilmetros
.-irt"".i
del
punto
de
partida,
han
inducido
a
pensar
que
estos
"*-rL'."-;i";;
d"
,rnu
forma
.rn
tanto
misteriosa
por alguna
disposicin
especial
Ji
iit"tt-
que
la naturaleza
cultaba
celo-
,"i""i.1'u-br.r"".iJ"
;
i;,
h.rmanos..Asumida
a
existencia
e
.r"'*i"*1"r" ""il"i
i-;;";
;;
complet
el
proceso
de
reifica-
ii"l"J"i"J"r; i.-;;';iri. .'u,riu"ro,
-'
o menosazonables
que
reflejaran
u
tu.i'i.
Iti"Apicl
los
caracteres
ms
destacados
e
las
conducta,
our.rurd',i
;;;'
il-t;i;ralstas'
exploradores'
cazao'
res,
etc.
Dada
la
tfi;;d
de
semeiantes.
onductas v
el
poco rigor
de
las
observaciones,';;;t;;tt*l"'lttt
lu
nocin
de
instinto
discu-
rriera
por el
camino
i.
Ut
ttint^ciones
poco
precisas
y acabam
por
encontrar
*ul
u.o-oi;
;;
i;;i;tu
oit
heco'
observaciones
ms
;i;;;;
uun
d.*o,t.""ao,
p- de
pronto'
que la
sedicentes
con-
ductas
instintivas
no
constitu.ven
un
grupo
iomognto,
y
que
ade-
ms
suelen
.on..r.ri,
;"tli;;'
;"*.,"d'*ot'
esgucturas
regula-
tivas
innatas
y
uaq,ririu,
dt
-i'tit'to'
niveles
y condiciones'
Dicho
;;;;i;,ati;ffi :"ql'Rl:;,i'ifJ'f.[f"*:','"Ti:::
na
unidad
emprica
constatada
por
ra
(
il;'q*
J
to,",..p,o
de
instinio
no
constituye
quiz.
un
locus
idrr.o
para
orientar'la
investigacin
de
la
conducta
animal'
y mu'
cho
menos
la
humana.
Probablmente
resulte
ms
fecundo
el
tratar
de
analizar.n
d.tud
6';;,,
las
e-ctructuras
uncionales
que
de
hecho
ntervi.n.n
n".ili.itit-t
tJ"
clase
e
conducta'
,lytq"
;;;;i;
G
todas
ellas
son
reguladas
or
unos
supuestos
rlncl-
pios
instintivos.
Dentro
cle
los
usos
todava
vigentes,
el
lector
precavico
puede
tener
presente
que ti1t*i"t
insiinto.
po"t
atepciones
diferentes'
de las cuales acaso
;t';;;;;';t
tt
ti
ms
notorias'
Ante
todo'
no
debedescarrar 'i.rit"iri-afi .-g"g lu p3labra esigne_condncta
.;-";
d;;*rd.
marsupial
idelphis
i:rginiana'
ue se
alustan
'I
-
7/25/2019 Jos Luis Pinillos_Instintos
6/6
228
Principios de
Psicologla
bastantea la definicin
convencional
e la conducta
nstintiva.
En
la mayorlade los casos,
in
embargo,
el ttmino
alude a otras
for-
mas conductuales
ue
slo anlogamente
abe considerat
nstintivas,
como son os actos
eflejos, as PFA, los actos
n aacuo,
as conduc-
tas especlficas
omplejas odavla
mal conocidas algunos
compor-
tamientos humanosdonde
lo teflejo, lo emocional
y
lo adquirido
se mezclande manera
confusa.
En
todos estos
casosconviene,
na-
turalmente, nterpretar os pasajes no concederal trmino instinto
su
sentido
fuette de estructura egulativa
nnata
que,
indeliberada-
mente
y
de modo
prefijado,
conduce
a la consecucin
e un
fin
vital
especlfico e
cierta
complejidad.
La verdad es
que
la
mayorlade los
llamados nstintos no
son sino
conductascomplejas
mal
conocidas
(Thorpe,
I96t\.
II. Los reflejos
En un tema
donde
os
reflefoscondcionados
esempean
n
pa-
pel
tan
relevante
como
en el aptendizaje,
s
del todo
indispensable
fijar algunos onceptos obre os reflejos ncondicionados absolutos.
1.
La historia
Probablemente
ingn otro
concepto
isiolgico
ha
influido tan-
to sobre
la
psicologa-modema omo el de
reflejo. S-e
comprende
que,
en
un clima
mecanicista,
na estructura
anatomofisiolgica
an
recortada
omo el
arco
teflejo se
acogiera
ubilosamente
or quienes
deseaban
toda costa
dar con
los tomos
o elementos
bsicos
del
psiquismo.
Desdeel siglo
xvrr,
y
aun
antes, a
idea de
que
la activi-
ad
de
los animales
se ejercla
de un
modo automtico,
sin
el con-
cursode la voluntad y la ruzn, estabaya en la calle; pero fue, sin
embargo,
a obra
de Renato
Descartes
o
que
definitivamente
acab
de
poienciatla,
haciendo
de ella la
unidad
bsica de
anlisisde
la
conuch.
Aunque el
trmino
tefleio fue
utilizado expresamente
or
vez
primera,
segn
se cree,en
1682,
pot
un
mdico
lamado lillis,
fue
Descartes
quien
estableci
de forma clara,
como
decimos,
a
unidad fisiolgiCa
e anlisis
e la conducta
nvoluntaria,
que
hoy
conocemos
on ese
nombre.
Evidentemente,
a fisiologla de
que po'
dla disponet
el
gran
frlsofo
francs
enla
que
ser
rudimentaria
en
gtado
Jumo,
pero
pese
a ello
el esquema
artesiano
del refleio
era
iustancialmenie
orrecto.
Una llama,
nos decla,-excita
n nervio,
el
cual a su vez transmite
al cerebro
una corriente
ascendente
e espl
ritus animales; all, esosesptitus penettan por los poros de una
cavidad,
donde ncitan
a otros espdtus
de
refuerzo a
descender
l
5.
El
aprendizaje
luear
de
la
quemadura,
atamover
el
msculo
ue sirve
para etirar
dei
f,rego
el
miembro
afectado.
e esta
orma
explicaba.l)escartes
.J-
fu'*quina
corporal
upuede
ser
incitada
pot
los
obietos
exte-
tio
q""
aiectan
a
ios
rganos
de.
sus
sentidos
a
mover
sus
miem-
t-t
mil
diferent.,
..r"r,,
(De
homine,
1'662)'
Por
desco'
tado,
Descartes
unca
afirm
que
todas
as
acciones
umanas
pudte-
rn
*pli.utre
de
esta
rnun.tui
a su
juicio,
el
alma
era
lo
que
en
el
il;;: ;;iigutubu la conduta,altrando.las
conexiones
ntte
los
.rii-ufo"
y
la"s
espuestas
tenor
de una libre racionalidadde que
carecan
s
animalis'
Para
poder
explicar
cmo
stos
eran
capaces
J.
"duptur
sus
conexion.r
.fl.;ur
a
la
infinita
variedad
de
las
cir-
Jrrr,".i^
"Ul.ri"tlr,
faab
todava
la
gran aportacin
paulo'
viun,
d.l
reflejo
condicionado;
sin embargo.,
l.
planteamiento
ar-
iesiano
alumbr
unas
posibilidades
e
im'estigacin
que
tueron
des'
rottu,
durante
os
iiglos
siguientes,
n
un sentido
crcientemente
;tfri;;.
F.uring
(191)
ha."historiaclo
ofmenorizadamente
sta
proilemtica,
uet
qu
sio
cabe
enunciar'
Baste
decir
que
a
medida
q". tt idea
e'
reflejo
se.fue
consolidando
natomofisiolgi:-"T:1::'
"
t.rus
de
las
inveitigaciones
de
hombres
como.
(/hytt,.
P'
Marshall Hall o Johannes Mller, fue creciendo tamblen
.i.".iu
de
su
relevncia
psicolgica.
,.a
cima
de
este.
roceso
de
flgit
"il.*it
fsicolgica
"f
t.ii";8
te
alcanz
on
Sechnov
.(L1s
il "
; ; ;-; ;-;r; ;bro,ig6)\,
para
quien toda.
a
conducta,:tanto.la
i
irrr"iir-.r*o-L
u"l"ita,
ira
explicable
en
trnilnQs
reflejos.
reaccin
contra
esta
tesis
evidentemente
exagerada
\i;
se
hizq
rar,
y
el
conocido.
rabajo
i:^lgbt
Dewey
obt:
"\.:Tffi
.i.1,
i.iLi.
en
psicolog"
tgg6),
que
subraya
a actii'ida--edn-
tinuidad
de
la
onducta,
uele
considerarse,
omo-
jemplo
de^la
Je-
sistencia
a
admitir
un.-p'r;.ioga
quehaga
del
reflej,
y
en
definitiva
de
la
conexin
estmulo-respuesta,
a
pieza
bsica
de
la
conducta'
ritf.-."i", iu r"*
de
l
.,e,trfisioioga
de
los
reflejos
incondi-
.ir"t,
se
lranz
por obra
de las invstigaciones.de sir Charles
i.oil
Sn.ttington,
iuya
Accin
int-egrad.ora
el
sistema
neruioso
(1906)
representa
rr,
',ito-en
la
problimtica
,que
analizamo:;
Y?,1
partit'delrt.
-o-"tto
el
giro dado
por Pavlov
a
la
investlgacln
ie
los
refleios
orient
las
cosas
por otros
caminos'
2.
La estrucfura
de los
relleios
ncondicionados
absolutos
El simole
refleio
incondicionado,
oncebido
como
la
respuesta
.1.*f
i
directa'
de.
un
efector
a la
estimulacin
de
un
receptor,
;;;^;#
"""-
ripUncacin
didctica
de
procesos
.bolgicos
bas'
tante ms complejoi.El reflejo patelar,por-ejemplo,uno de los
mr
ti-pl"t
q.re abe
encontrar
en
los
mamferos,
se
provoca nof-