la devastaciÓn de la ciudad de orÁn a partir de la enfermedad

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Page 1: LA DEVASTACIÓN DE LA CIUDAD DE ORÁN A PARTIR DE LA ENFERMEDAD

UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MACHALA

Calidad, Pertinencia y Calidez

UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MACHALA SISTEMA NACIONAL DE NIVELACIÓN Y ADMISIÓN

AREA DE CIENCIAS E INGENIERÍA

ASIGNATURA:

INTRODUCCIÓN A LA COMUNICACIÓN CIENTÍFICA

CURSO V02

PASTICHE LA DEVASTACIÓN DE LA CIUDAD DE ORÁN A PARTIR

DE LA ENFERMEDAD

RESPONSABLE LUIS ALBERTO CORREA MOREIRA

DOCENTE ING. BERTHA E. MAZÓN O., MG.SC.

PERIODO 2013 - 2014

MACHALA – EL ORO – ECUADOR

Page 2: LA DEVASTACIÓN DE LA CIUDAD DE ORÁN A PARTIR DE LA ENFERMEDAD

La devastación de la ciudad de Orán a partir de la Enfermedad

En el presente pastiche, se logrará dar el mayor enfoque posible respecto a la

enfermedad que se arraiga con el paso del tiempo en la ciudad de Orán

causando una gran tensión en la población debido al número de muertes que

se ve incrementado a medida que la plaga se va extendiendo, así como la

irrelevante controversia que se da entre la población llegando a tal punto de

la destrucción casi total de la estructura de la ciudad llegando a ser excluidos

de los pueblos aledaños lo cual genera aún más preocupación y desesperación

principalmente en las autoridades y en los doctores del sitio, que tratan de

buscar una cura para la enfermedad.

También se necesitará tornar un tanto distinto las acciones de los personajes

principales como el Dr Rieux ye el resto de doctores que se encuentran

inmersos en la lucha contra la peste, de manera que este cambio de perspectiva

generará un cambio casi total durante todo el desarrollo del presente texto,

haciendo que se torne más interesante y más impactante debido a la

perseverará un tanto de sentimentalismo rodeado de una presión notable

durante todo el desarrollo.

La ciudad de Orán, la mayoría de las veces se asemeja a una pasa,

simplemente arrugada, triste y fea debido a su aspecto desleñado propio de

Francia, en la cual vive la gente de mayor estrato social, personas vigorosas

en dinero, que no se preocupan por el futuro, ya que en su presente tienen y

consiguen cuanto más pueden. A pesar de existir una notable riqueza en este

pueblo, también se encuentra rodeado de pobreza, personas sin un techo para

poder dormir, sus caras lángidas llenas de ojeras que trastornan y desfiguran

totalmente sus caras y sus almas,, dan a conocer que la ciudad no es muy

distinta respecto a otras.

De la misma manera existen lugares de lujuria, en donde acuden personas de

todo tipo de edad, niños, adultos, gente de la alta alcurnia y uno que otro pobre

que deambula en busca de pan, para poder llevárselo a la boca, así es Oran

fructífero por excelencia aunque pobre a causa de las ciudades vecinas que le

entregan sus habitantes míseros para que puedan mendigar y en esta tierra

bendecida la cual en poco tiempo se transforma en un caos total.

Page 3: LA DEVASTACIÓN DE LA CIUDAD DE ORÁN A PARTIR DE LA ENFERMEDAD

El Dr Rieux, encargado del hospital más grande de toda Orán, era un hombre

maduro, con una personalidad perfectamente establecida, ya que durante toda

su niñez había sufrido demasiado, uno de aquellos martirios que trascendió

durante la etapa más crucial del ser humano, fue la pérdida de su padre, esto lo

impulso tras largas noches de sufrimiento y rebeldía a levantarse junto a su

madre y estudiar la universidad, razón por la que principalmente quiso seguir

la carrera de doctor en medicina, debido a su gran afinidad de querer ayudar a

los más pobres de ésta manera.

Cierto día cuando caminaba por las calles de esta triste ciudad siguiendo el

camino que lo dirigiría hasta su casa, cuando se encontraba a pocos metros

cerca de la puerta, nota una abismal envestida animal, hacia una pequeña

mendiga, la cual gritaba desesperada a causa del dolor que les proporcionaban

las terribles y filudas muelas, provenientes de unas grotescas ratas forajidas,

las mismas que tenían ojos penetrantes y diabólicos con garras nunca antes

vistas, las cuales se complementaban con un odio incesante de destruir todo lo

que se encontraba a su paso. Rieux al notar la terrible trama que estaba

sucediendo acudió inmediatamente agitando su gran bastón para poder

destripar o por lo menos ahuyentar a los mamíferos rastreros, quienes se

quitaron debido a la presencia de varios curiosos quienes también acudieron a

la ayuda de la desdichada niñita.

Más tarde, la gravedad del problema poco a poco se vio incrementando, por lo

que las ratas invadieron a la población, huyendo grandes y chicos hasta tal

punto de salir corriendo despavoridos sin saber qué hacer, parte de las

personas se reúne y realizan huelgas, los encargados de mantener el orden del

lugar se movilizan a la plazoleta central de Orán en donde mueren niños en

medio de la contienda, y gente inocente que se encontraba nada más que

asustada, preocupada por el problema que cada vez era más amenazador.

El Gobernador Franz Durand sale eufórico al ver la terrible matanza y trata de

calmar a la multitud desde el balcón de su palacio, casi yéndose por la ventana

por la adrenalina que sentía al escuchar los gritos que provenían de las afueras

de su lugar de trabajo y que indicaban desesperación, alzó su voz para

exhortar a toda la ciudad, resultando efectivo su llamado de calma, puesto que

los guardias bajaron sus armas y seso la matanza inhumana.

Page 4: LA DEVASTACIÓN DE LA CIUDAD DE ORÁN A PARTIR DE LA ENFERMEDAD

Luego de lo ocurrido la ciudad volvió a la calma por un par de días, mientras

las cifras de los ataques de las ratas iban creciendo, Rieux junto con sus

colegas del hospital logran elaborar unas bombas de gas, puesto que tenían

conocimiento gracias a que el muy reconocido doctor había estudiado

Química y sus dotes de genio no los había empleado desde hacía ya varios

años hasta entonces.

Las terribles armas químicas, colocadas en las esquinas de las afueras de Orán

y en el centro del palacio, en donde pasaba a menudo el Gobernador Franz

Durand, otro de los puntos que se creía conveniente en esos instantes era en

las letrinas de cada casa, por lo que la participación de todas la gente jugó un

papel importantísimo para tratar de alcanzar el objetivo de esta tan grave

operación ¡la de acabar con las ratas!. Pocas personas que quedaban tuvieron

que salir dejando en sus casas carne fresca que atrajo a las ratas.

Ya cuando todas las personas del lugar habían salido de sus casas, esperaron

pacientemente un lapso de tiempo, para que los animales feroces olieran la

fétida carne repugnante para los pobladores debido todo lo pasado y vivido en

aquellos meses, en una pequeña covacha que armó Rieux y demás autoridades

importantes entre los que se encontraba el gobernador y su familia

permanecieron cuando un soldado especializado del mismo lugar dio la señal

afirmativa, que revelaba la casi total agrupación de los animales rastreros, acto

seguido Rieux detonó las bombas que actuaron rápidamente sobre el lugar

previsto a tal punto que huían las ratas más fuertes pero no llegaban ni 20

metros cuando quedaban tiesas en el suelo sufriendo tal y como lo hicieron sus

víctimas.

Las personas pese a las pérdidas tal como la del colega de Rieux, quien vio

morir a su propia esposa y muchos muertos más, fortalecieron sus lazos no

solamente de amistad sino que también respecto a la cooperación y

reestructuración de todo el pueblo que quedó casi reducido a escombros, como

producto de los estallidos que detonaron a las afueras de Orán.

Rieux orgulloso de haber podido ayudar a la solución del problema, fue

invitado a los restos que quedaban del palacio del gobernador en donde con

voz triunfante y enérgica se dirigió a los habitantes en el mismo balcón en el

cual daba los discursos Franz Durand antes de toda la desgracia sucedida,

Page 5: LA DEVASTACIÓN DE LA CIUDAD DE ORÁN A PARTIR DE LA ENFERMEDAD

para poder expresar su alegría junto con sus amigos y sobrevivientes a la

acechanza masiva de las ratas, en todo ese día las personas bebieron té y

comieron pan, obsequios de las ciudades vecinas que conmovidos decidieron

ayudarlos para así poder volver a ser la gran Orán, majestuosa rica y fecunda.