leccionuniversitarios

EL FRUTODEL ESPÍRITU

UGUÍA DE ESTUDIO

DE LA BIBLIA PARA JÓVENESPublicada por el Departamento deEscuela Sabática / Ministerios Personales

de la Asociación General

Editora: Lyndelle Brower ChiomentiEditora adjunta: Shirlee J. Ingram

COMITÉ DE REDACCIÓNJames Black / May-Ellen Colón / Kwabena Donkor /Falvo Fowler / Viola R. Hughes / Jonathan Kuntaraf /Armando Miranda / Kiskia Missah / Julio C. Muñoz /Tim Poirier / Luis A. Schulz / Bonita J. Shields / Gary Swanso

EL UNIVERSITARIOEsta GUÍA se publica en inglés

con el nombre de Collegiate Quarterly

Traducción: José I. PachecoDiagramación: Jaime Gori

ASOCIACIÓNPUBLICADORAINTERAMERICANA

Impreso porGrupo OP, S.A.

Bogotá, ColombiaPrinted in Colombia

PRIMER TRIMESTRE 2010

ENERO-MARZO

Copyright © 2010 Departamento deEscuela Sabática / Ministerios Personales,Asociación General de los Adventistas delSéptimo Día, 12501 Old Columbia Pike,Silver Spring, Maryland 20904 EE. UU.

ENERO - MARZO 2010

2905 NW 87 Ave., DoralFlorida 33172 EE. UU.

Tanya Fowler nació en la región cen-tral de Estados Unidos. Como miem-bro de una familia de evangelistas tuvola oportunidad de conocer numerososestados de la Unión norteamericana.En la actualidad trabaja en el departa-mento de publicidad de una compañíade alimentos ubicada en Litlle Rock,

Arkansas. Tanya nos dice: «Le agradezco a diario a Dios porsus bendiciones y porque tengo un trabajo que me agrada.Nuestro mundo está cambiando rápidamente y sé que el tiem-po se acorta. Aprecio que mediante mis talentos puedo recor-darles a mis hermanos cristianos que tenemos la obligación decompartir nuestra fe con el mundo que nos rodea».

EDICIÓN ENESPAÑOL

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1. Por su fruto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6Abba Gifty Amakye, Annet Juanson, Adedotun Makinde,Ezekiel Okofo-Boansi, Eric Pilmoor, Albert A. C. Waite

2. El fruto del Espíritu es amor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16Esther Aoko, Bob Collins, Flora Kurema, Joash Oketch,Tony Philip Ores, George Otieno

3. El fruto del Espíritu es gozo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26Gianluca Bruno, Santhosh S. Jackson, Stephanie Sahlin Jackson,Melissa Sahlin, Monte Sahlin, Norma Sahlin

4. El fruto del Espíritu es paz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 36DLamm B. Fanwar, Joy Kuttappan, Esther Synthia Murali,Divya Selvaraj, Benji Stephen, Stenoy Stephenson

5. El fruto del Espíritu es paciencia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46Marc Chambers, Patricia Haakmat, Andre B. Henry,Beverly I. Henry, Carl Henry, Mark Henry

6. El fruto del Espíritu es bondad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 56Maganjo Kimani, Caleb Muasya, Caroline Mwelu,Charles Nyaranga, Susan Nzyoki, Viola Ayoo Odipo

7. El fruto del Espíritu es benignidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 66Patty López, Miguel A. López, Carlos A. Quintana,Patricia Flores Sauza, Paul Kevin, Wells, Timothy A. Whitley

8. El fruto del Espíritu es fidelidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 76Jackline Achieng, Alice Adhiambo, Beatrice Akinyi,Saline Khavetsa, Samson Oguttu, Rose Otuttu

9. El fruto del espíritu es mansedumbre . . . . . . . . . . . . . . . . . . 86Francis Bissereth, Mackenson Bissereth, Gladys S. Kelley,Samuel Pegus, Andrew Gregory Stoner, Kendall Turcios

10. El fruto del Espíritu es dominio propio . . . . . . . . . . . . . . . . 96Edinor Lindiwe Donda, Khaka Gomba, Nkosazana Uviwe Maxhela,Sipiwe Nelani, Khwezi Yanga Toni, Xhantilomzi Perseverance Mlamleli

11. El fruto del Espíritu es justicia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 106Braden Blyde, Larissa Gredig, Kate Hollingsworth,Desré Nikolich, Katelyn Reed, Lincoln Steed

12. El fruto del Espíritu es verdad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 116Jason Gibson, Kimberly A. Hudgens, Stacey-Ann Montañez,Kathleen Nelson, Neville and Keisher Peter, Daniel Smith

13. El fruto del Espíritu es la esencia del carácter cristiano . . . 126Kimberley Cadogan, Alicia Haynes, Greig Jordan,George McCullum, Lisa Thorne, Terry Williams

PÁGINA

EL FRUTODEL ESPÍRITU

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EL UNIVERSITARIO intenta ser un vínculo vivo connuestros jóvenes lectores. Probablemente has notadouna nueva apariencia que esperamos haya sido de tuagrado.

Deseamos resaltar algunos portales de Internetvinculados a la fe adventista que pueden ser deinterés, instructivos y amenos. Quizá algunos yalos conoces. Si sabes de otros que deseascompartir con los lectores de EL UNIVERSITARIO

puedes enviarnos la referencia por correo elec-trónico a:

[email protected].

Obviamente no nos hacemos responsables por lasopiniones o ideas expresadas en algunas de las pá-ginas que aquí citamos. La referencia que hacemosa las mismas no conlleva aprobación o endoso delmaterial que ellas contienen.

http://www.3abn.org/tc_latino.cfm

Esta es la página del Departamento de la red de Radioy Televisión Los Tres Ángeles. Tienen videos y músicacristiana en línea. Aunque su programación es ma-yormente en inglés hay una sección en español.

http://cq.adventist.org/languages/pages/spanish.htm

Aquí aparecen las lecciones de EL UNIVERSITARIO enespañol y en otros idiomas. Además encontrarásen este portal otros recursos y vínculos.

http://ssnet.org/qrtrly/qrtrly.html

Portal de la Escuela Sabática. Presenta entre otros, lasGuías de Estudio en varios idiomas, incluyendo la ver-sión para los maestros.

http://www.hogarysalud.com/

Entre los variados y útiles vínculos que encontra-rás en este portal se encuentra la red Advenir,una entidad televisiva que nace en Bolivia en elaño 2002. En ella encontrarás videos cristianos,juegos bíblicos, programas televisivos y las lectu-ras de la devoción matutina en audio en cuatroversiones.

http://new.hopetv.org/home/

Canal de televisión adventista que transmite las24 horas del día. La programación está disponi-ble en varios idiomas. Esperanza TV representa lasección en español.

http://dialogue.adventist.org/index_s.htm

Diálogo es una revista de fe pensamiento y acción de-dicada especialmente a estudiantes universitarios. Pu-blicada por la Asociación General.

http://www.insightmagazine.org

Una revista publicada semanalmente por la Iglesiapara estudiantes de secundaria y universitarios. Te-mas variados. En inglés.

http://sja1844.tripod.com/egw.htm

Sesenta y cuatro libros de Elena G. de White en es-pañol.

http://www.amigosadventistas.org

Una oportunidad para que grandes y chicos co-nozcan personas de su misma fe. Hay más de cin-cuenta mil miembros registrados.

http://www.biblegateway.com/?language=es&version

Aquí encontrarás diferentes versiones de la Bibliaasí como diccionarios y concordancias.

http://www.interamerica.org

El portal de nuestra División. Aparece en varios idio-mas.

http://www.aula7activa.org

De gran utilidad, pues ofrece libre acceso a algunasobras teológicas de máximo interés, así como a laversión en español de revistas como Ciencia de losOrígenes (Origins).

¿¿ Cuántos deCuántos deestos conoces?estos conoces?


Para que aprovechesal máximo EL UNIVERSITARIO

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DETALLES QUE CONVIENE CONOZCAS

EL UNIVERSITARIO se basa en la convicción deque la Palabra de Dios ofrece un poder transfor-mador, y que el estudio en grupo es una maneraimportante de conectarnos con dicho poder. Elpropósito de EL UNIVERSITARIO es proporcionarlesa los jóvenes adventistas un recurso para el estu-dio personal que luego pueda ser usado en la dis-cusión colectiva durante la clase de Escuela Sabá-tica. Muchos que utilizan la Guía de Estudio dela Biblia para Adultos, encuentran que, debido aque EL UNIVERSITARIO trata los mismos temas, sir-ve para enriquecer con perspectivas novedosas elestudio diario de la lección y el repaso general enla clase.

Alrededor de cuatrocientos jóvenes adventis-tas contribuyen a EL UNIVERSITARIO cada año. Lagran variedad y repetición ocasional del conteni-do refleja la gran diversidad de sus colaboradoresalrededor del mundo, los cuales reaccionan al temade manera creativa e independiente.

La circulación de EL UNIVERSITARIO es de unos80.000 ejemplares en inglés y español.

IDEAS PARA EL ESTUDIO

Por medio de la oración, predispón tu mentea la conducción del Espíritu mientras estudias.

Los textos de la Biblia sobre los cuales se basacada lección aparecen en el encabezamiento y enlos subtítulos de la sección «Logos» de cada do-mingo.

Los textos de la Biblia para la semana normal-mente aparecen divididos en secciones en la pá-gina de «Logos». Cuando estudies dichas seccio-nes, lee cuidadosamente los textos de la Biblia queaparecen al comienzo, antes de leer los comenta-rios que siguen.

EL UNIVERSITARIO Y LA IGLESIA

EL UNIVERSITARIO es la GUÍA PARA EL ESTUDIO DE

LA BIBLIA aprobada por la Asociación General pa-ra los jóvenes. Aunque apoya las creencias de laIglesia Adventista del Séptimo Día, su contenidono debe considerarse como un pronunciamien-to oficial de la Iglesia.

En EL UNIVERSITARIO las citas bíblicas se toman de la Nueva Versión Internacional (NVI) de la Sociedad BíblicaInternacional, aunque por lo general en los nombres propios se da preferencia a la versión Reina-Valera.Cuando se citan otras versiones se hace utilizando las siguientes siglas:

BJ Biblia de Jerusalén, Desclée de BrouwerDHH Dios Habla Hoy, Sociedades Bíblicas UnidasNBE Nueva Biblia Española, Ediciones CristiandadNRV Nueva Reina-Valera, revisión de 2000, Sociedad Bíblica EmanuelRV95 Reina-Valera, revisión de 1995, Sociedades Bíblicas UnidasEn las ediciones citadas de las obras de Elena G. de White las versiones generalmente utilizadas son la revi-sión de la Reina-Valera de 1909 (RVA) y la revisión de 1960 (RV60); las siglas VM corresponden a la llamadaVersión Moderna de H. B. Pratt de las Sociedades Bíblicas en América Latina, 1893.

SÁBADO INTRODUCCIÓN Para estimular tu interés y concentrar tus pensamientosen el tema de la semana.

DOMINGO LOGOS Guía para el estudio directo de los pasajes de la Bibliapara la semana.

LUNES TESTIMONIO La perspectiva de Elena G. de White sobre el tema de lalección.

MARTES EVIDENCIA Temas suscitados por la lección desde una perspectivahistórica, científica, filosófica o teológica.

MIÉRCOLES CÓMO ACTUAR La aplicación de los conceptos abstractos de la lección ala vida cotidiana.

JUEVES OPINIÓN Un punto de vista personal respecto de la lección queestimula a un estudio y análisis más profundo.

VIERNES EXPLORACIÓN Sugerencias para estimular la imaginación y ver el temade la lección semanal de forma creativa.

Presta atención al propósito de cada parte de la lección:


Lección 126 de diciembre al 1º de enero

Por su fruto

«Así que por sus frutos los conocerán».Mateo 7: 20


¿Qué frutosmuestras tú?

7Adedotun Makinde, Reading, Reino Unido

Sábado26 de diciembre

INTRODUCCIÓNSalmo 34: 8; Mateo 7: 16

El plátano o banano es una de las frutasde mayor consumo en el mundo. ¿Podríamosidentificar a un bananero en algún país tropi-cal? Esto quizá no sea nada difícil para alguienque vive en los trópicos. Sin embargo, mu-chos de los habitantes de Inglaterra, EE. UU.,Francia o Canadá no podrán distinguir unaplanta de guineos o bananos de una de pláta-nos, siempre que las mismas estén desprovis-tas de su fruto. Por otro lado, no sería difícilidentificarlos si tuvieran frutos. Uno puede re-conocer un árbol por el fruto que tenga. Elbananero no intenta demostrar su identidad alproducir bananos. El asunto es que no puedeproducir otra cosa.

Jesús dijo en Mateo 7: 16: «Por su frutoserán conocidos». ¿Te has dado cuenta quepuedes determinar con rapidez si te sientesbien en la presencia de algún extraño? Pro-bablemente los catalogas de acuerdo a sucomportamiento: el fruto que muestran du-rante la primera media hora que pasas en sucompañía.

Por lo general un árbol únicamente da unsolo tipo de frutos. Sin embargo, si se injertandos variedades de manzanos tendremos dostipos de frutos diferentes. El árbol seguirá pro-duciendo manzanas y seguirá siendo unman-

zano, tomando en cuenta sus frutos. Sería difí-cil para una persona poco versada reconocer aprimera vista que dicho árbol ha sido injerta-do, a menos que lo vea en tiempos de cose-cha. De igual forma, no es fácil diferenciar unárbol de naranjas agrias de uno de naranjasdulces. Pero una vez que el fruto se forma,o se cosecha, es más fácil distinguirlos. El

Salmo 34: 8 dice: «Prueben y vean que elSeñor es bueno». El árbol que produce frutosdulces únicamente dará un tipo de frutos. Deigual forma, podemos confiar en Jesús porqueúnicamente él representa algo positivo paranosotros. Pero la Biblia nos aconseja que nodebemos confiar en los seres humanos porquecomercian con el mal y «han comido el frutode la mentira» (Ose. 10: 13). Debemos, enconsecuencia, ser prudentes al analizar elfruto que da una persona, antes de decidiramistarnos con él o ella.

A todos se nos conoce por nuestro fruto.Esto significa que de la misma forma que eva-lúo a los demás, ellos también evaluarán misfrutos. Al estudiar este trimestre acerca de losfrutos del Espíritu, pregúntate: ¿Qué frutos venlos demás en mi vida?

A todos se nos conocepor nuestro fruto.


Percepción y anatomíadel fruto espiritual

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Domingo27 de diciembre

LOGOSLucas 13: 6-9;Juan 11: 1-4; 12: 28; 15: 1-16; 2Timoteo 3: 1-53

Por su fruto (2 Tim. 3: 1-5)Un fruto incluye la semilla y todo lo que

la cubre; es un resultado, producto, rendi-miento, cosecha o realización de una espe-ranza.1 Jesús utiliza este símbolo con el fin deayudarnos a entender el proceso mediante elcual crecemos como cristianos, así como la

forma en que somos transformados a su se-mejanza. El fruto que producimos es el resul-tado de pasar tiempo con él mediante la ora-ción, el estudio de la Biblia, el servicio y otrasactividades.

El fruto cristiano describe en forma espe-cífica al árbol, a la enredadera o al arbustoque representa. Hablamos de un árbol demanzanas, de una vid o de un arbusto de ce-rezas. En sentido general, los frutos sustentany ayudan a la preservación de la vida de sereshumanos y de animales. Por tanto, se supo-ne que cuando la gente nos observe nos con-siderará como cristianos al observar nuestrosfrutos.

Leer y meditar (Juan 15; 1-6)¿Qué otros ejemplos puedes identificar

con los «frutos» cristianos? ¿Cómo evalúas aun cristiano que no lleve frutos? ¿Por qué esimportante que los demás vean frutos en

nuestras vidas cristianas? ¿Cómo ilustraríasel concepto expresado en Juan 15: 1-6 sinreferirte a la agricultura?

El árbol sin fruto (Luc. 13: 6-9)La parábola de Lucas 13: 6-9 tiene una

implicación que va más allá de una búsque-da de alimentos. Es una urgente advertenciacontra la hipocresía, la presunción y la tibie-za. Es un mandato para que la gente deje deengañarse a sí misma. Es una voz de alertapara que despierten aquellos que están ale-targados espiritualmente.2

Cristo es la vid y los creyentes son lasramas, no los frutos. Aun así, su referencia alhecho de llevar frutos (Juan 15: 1-10) revelaalgo importante: el propósito de que crezcanramas. Las ramas desprovistas de fruto im-plican una baja productividad. En conse-cuencia, deberán ser podadas para que otrasmás saludables ocupen su lugar. Sin embar-go, el agricultor deberá estar interesado enobtener frutos. Incluso proveerá un apoyofísico para sostener a las ramas que estánsobrecargadas. ¿Es el fruto de esta parábolaun fin en sí mismo, o un medio; aun cuandoel énfasis esté colocado en las ramas portado-ras de frutos?

Llevando fruto en conjunto(Juan 15: 1-16)

Lee Juan 15: 1-16 una vez más y pien-sa en lo que significa que las ramas produz-can frutos. ¿De dónde viene en realidad elfruto? ¿De las ramas o del árbol? Motiva turespuesta. Si la rama pudiera producir fru-tos a voluntad, ¿por qué aun necesita deltronco? ¿Qué nos dice lo anterior respec-

Al igual que algunas semillas,nuestras vidas rebosande posibilidades.


9Ezekiel Okofo-Boansi, Reading, Berkshire, Reino Unido

Existe una relación positiva entre crecer enCristo y trabajar por él. «Aunque nuestrasnumerosas actividades no garantizan la sal-vación, también es cierto que la fe que nosune con Cristo motivará a las almas a quese pongan en acción».3

Meditando (Juan 11: 1-4; 12: 28)¿Qué influencia tiene tu vida en los

demás, aun cuando no te des cuenta de ello?Generalmente es bastante difícil reconocer elpotencial propio. No obstante, al igual quealgunas semillas, nuestras vidas rebosan deposibilidades. Por tanto, si vivimos en formaapropiada podríamos colaborar con la obrade Dios y acelerarla. Recuerda, las ramas nopueden sobrevivir sin el tronco; pero el tron-co puede echar ramas nuevas.

«El estar en Cristo significa recibir cons-tantemente de su Espíritu, una vida de en-trega sin reservas a su servicio. El conductode comunicación debe mantenerse conti-nuamente abierto entre el hombre y su Dios.Como el sarmiento de la vid recibe constan-temente de la savia de la vid viviente, asíhemos de aferrarnos a Jesús y recibir de élpor la fe la fuerza y la perfección de su pro-pio carácter».4

________________1. Gran diccionario de uso del español actual.2. Matthew Henry, Comentario bíblico. Notas respecto a

Lucas 13.3. Nuestra elevada vocación, p. 121.4. El Deseado de todas las gentes, p. 645.

to al papel de la iglesia para ayudar a quelos miembros lleven fruto?

Estableciendo una conexión(Juan 15: 1-16)

¿Qué entiendes cuando Jesús dice queél es la vid y nosotros las ramas? Al leer lossiguientes versículos trata de identificar otrasformas en que se manifiestan los frutos:Mateo 28: 19, 20; Romanos 15: 25-27;2 Corintios 8: 1, 2 y 9: 12; Gálatas 5: 16,22, 23; 2 Pedro 1: 5-8; Hebreos 13: 15.

¿Cómo puede algún malentendido res-pecto a la necesidad de llevar fruto afectarnuestra libertad en Cristo? Entre los cristia-nos modernos se enfatiza mucho la libertadsin trabas. Sin embargo, esa es una libertaddesprovista de responsabilidades, una liber-tad que no rinde cuentas. En Lucas 13: 6-9,Jesús revela el amor íntimo que tanto el agri-cultor como el asalariado manifiestan res-pecto al árbol que no lleva fruto. No obs-tante, ambos aceptan que el árbol debe sercortado si continúa sin producir frutos.

Como creyentes, nuestra motivaciónpersonal para acudir a Cristo será diferenteen cada caso. Sin embargo, mientras másnos acerquemos a él, más expresarán nues-tros motivos la idea de asemejarnos más aél. En esto consiste el crecimiento espiri-tual. Se espera que todo cristiano lleve fru-tos espirituales. Esto será una muestra delcontinuo proceso de crecimiento espiritual.


pelear las batallas del Señor. La obra másimportante es sujetar los gustos, el apetito,las pasiones, los motivos, los deseos, a laselevadas normas morales de justicia. Laobra debe comenzar en el corazón. Elmismo debe ser puro, plenamente sujeta-do a la voluntad de Cristo; de otra forma,

al abrigar la pasión, algún hábito o defec-to, se convertirá en un poder destructor.Dios únicamente aceptará la totalidad delcorazón».2

«Si todos los que profesan seguir aCristo aprovechasen el tiempo mientrasestán libres de reuniones para conversar dela verdad, espaciarse en la experiencia cris-tiana, escudriñar su propio corazón y enferviente oración ante Dios suplicar subendición. Se realizaría una obra muchomayor de la que se ha visto hasta aquí. Losincrédulos, que acusan falsamente a los quecreen en la verdad, quedarían convencidospor causa de su buena “conversación enCristo” (1 Ped. 3: 16). Nuestras palabras yacciones son el fruto que llevamos; “porsus frutos los conoceréis” (Mat. 7: 16)».3

PARA COMENTAR¿Cómo podemos aceptar la oferta divinapara ser transformados?_________________

1. El Deseado de todas las gentes, p. 148.

2. Review and Herald, 21 de junio 1887.

3. Testimonios para la iglesia, t. 2, p. 529.

Da un paso al frentey alístate

TESTIMONIOEzequiel 36: 26, 27;Juan 3: 1-21; Corintios 5: 17

¿Cómo puede alguien nacer de nuevodespués de llegar a viejo? Nicodemo men-cionó que el hombre natural no asimilaconceptos espirituales, a no ser que se losprovea el Espíritu de Dios. Repasa Juan3: 5, 6.

«Por naturaleza, el corazón es malo, y“¿quién hará limpio de inmundo? Nadie”.(Job 14: 4) Ningún invento humano pue-de hallar un remedio para el alma pecami-nosa. “La intención de la carne es enemis-tad contra Dios; porque no se sujeta a laley de Dios, ni tampoco puede”. “Del cora-zón salen los malos pensamientos, muer-tes, adulterios, fornicaciones, hurtos, fal-sos testimonios, blasfemias” (Romanos 8: 7;Mateo 15: 19). La fuente del corazón debeser purificada antes que los raudales pue-dan ser puros. El que está tratando de al-canzar el cielo por sus propias obras obser-vando la ley, está intentando lo imposible.No hay seguridad para el que tenga solouna religión legal, solo una forma de lapiedad. La vida del cristiano no es una mo-dificación o mejora de la antigua, sino unatransformación de la naturaleza. Se produ-ce una muerte al yo y al pecado, y una vidaenteramente nueva. Este cambio puede serefectuado únicamente por la obra eficazdel Espíritu Santo».1

«El cristiano fiel llevará mucho fruto;es un obrero; no será perezoso, sino que sevestirá con toda la armadura con el fin de

«Nuestras palabras y accionesson los frutos que llevamos».

10Eric Pilmoor, Binfield, Berkshire, Reino Unido

Lunes28 de diciembre


¿Qué frutosse ven en tu vida?

EVIDENCIALucas 13: 6-9; Juan 15: 1-10

En algunos hogares se acostumbra a colo-car diferentes frutas en una fuente o canasto.En caso de estar vacía la fuente, o de tenerpocas frutas, es algo que también se notará.

Existe un elemento común a los sistemaseducativos en diversas partes del mundo: lapublicación de los resultados de las pruebasescolares. Por ejemplo, en Inglaterra y enGales los resultados de los exámenes finales delas escuelas secundarias (GSCE) se publicantodos los años a finales de agosto. En el mesde septiembre también se publican las evalua-ciones de los centros escolares en base a loslogros alcanzados por sus alumnos. El públi-co puede de esa forma determinar el nivelescolástico de cada centro y determinar dóndesus hijos obtendrán una mejor educación.

Muchas escuelas obtienen buenas califica-ciones, mientras que otras no. El fruto de susesfuerzos se refleja en las calificaciones obteni-das por sus alumnos. En Juan 15: 1-10 elénfasis está colocado en el individuo: «todarama».

11Albert A. C. Waite, Riseley, Berkshire, Reino Unido

Martes29 de diciembre

Según Cristo, se les debe conceder unanueva oportunidad a los alumnos que noestudian con diligencia, o que se ocupan entareas poco productivas. En Lucas 13: 6-9, lahiguera estéril debía ser cortada porque esta-ba desperdiciando el espacio que ocupaba.Sin embargo, el jardinero dijo: «Señor, permí-teme que cave alrededor de las raíces y laabone durante un año más. Luego, si no dafruto, podemos cortarla».

Dios espera que hagamos esfuerzos porayudarnos mutuamente a llevar fruto. Perocada uno de nosotros tiene la responsabilidadde esforzarse para aumentar su producciónde frutos. El reino de los cielos será heredadopor gente que lleve fruto. Algunos llevarán untreinta, otros un sesenta y aun un cien porciento de frutos (Mat. 13: 8). Sin embargo,todos estarán allá porque mediante la ayudadel Espíritu Santo, sus canastos mostrarán elmáximo para cada caso individual.

PARA COMENTAR1. Repasa Lucas 13: 7, 8. ¿Durante cuánto

tiempo debe extenderse una segunda opor-tunidad?

2. El cielo, será en gran medida un lugar demucha diversidad. ¿Será esto algo justo?Explícate.

3. Repasa Mateo 7: 20. ¿Durante cuanto tiem-po debes tratar a alguien para confiar en élo en ella como amigo?

Cada uno de nosotros tienela responsabilidad de esforzarsepara aumentar su producción

de frutos.


Viviendo al igualque Jesús

12Annet Juanson, Bracknell, Berkshire, Reino Unido

Miércoles30 de diciembre

CÓMO ACTUARJuan 15: 1-10; Gálatas 2: 20

Si moramos en Jesús, será algo evidentepara los demás. Desearemos hablar de suamor, de su bondad y de sumisericordia. Lomás interesante de todo es que si moramosen él, podremos pedirle cualquier cosa que

sea buena para nosotros y él nos la dará. Lotriste del caso es que si no moramos en él,no llevaremos frutos de calidad y al finalseremos «cortados».

¿Cómo podremos evitar ser «cortados»?En Juan 15, Jesús hace tres importantes se-ñalamientos que si los implementamos nosmantendrán firmemente atados a él.• UUnniiddooss aa mmíí.. EEssccuucchháánnddoollee.. En Juan 10,Jesús recalca que sus ovejas escuchan suvoz y lo siguen. También nos recuerda queél conoce a quienes lo siguen (vers. 14).Adicionalmente él nos garantiza la salva-ción y que nadie nos podrá separar de él.Por tanto, se espera que vivamos una vidade obediencia.

• PPeerrmmííttaannmmee vviivviirr eenn uusstteeddeess.. Invitémoslo aque viva en nosotros. Cuando invitamos a

Jesús a que entre en nuestras vidas, él mo -rará en nosotros. (Repasa Gál. 2: 20). Invi -tar a Jesús a nuestras vidas significa quedeseamos vivir como él desea que vi va mos.Entonces, los demás notarán la formadiferente en que nos desenvolvemos. Cuan -do nos entreguemos a su voluntad, la vidano siempre será más fácil. Pero me diantela fe y la confianza, podremos estar se -gu ros de que él nos guiará a través de lastormentas.

• OObbeeddeezzccaann mmiiss mmaannddaammiieennttooss..Mantenién do -nos en contacto con él. La obediencia a laPalabra de Dios es un requisito para quelas características de Jesús se manifiestenen nuestras vidas. No basta con tan solodecir que creemos en él. (Lee Juan 14: 15).Cuando obedecemos los mandatos deJesús, nuestros hábitos, nuestros frutos,mos trarán que le pertenecemos.

¿Cómo podemos vivir de la mismaforma que Jesús? Decídete a seguirlo y aaceptar la ayuda que él nos ofrece.

PARA COMENTAR1. Además de las formas mencionadas ante-

riormente, ¿cómo podemos mantener tam -bién una relación apropiada con Jesús?

2. ¿Piensas que la gente puede ver el frutodel Espíritu en tu vida?

3. ¿Piensas que guardar los mandamientos es,o no es, importante? ¿Qué crees? ¿Por qué??

Cuando obedecemos los mandatos de Jesús, nuestros hábitos, nuestros

frutos, mostrarán que le pertenecemos.


La fuente

13Ebba Gifty Amakye, Berkshire, Reino Unido

Jueves31 de diciembre

OPINIÓNJuan 15: 1-10

Había viajado desde Inglaterra hastaÁfrica. Ahora me encontraba a la sombrade un árbol en el Jardín Botánico Aburi enGhana. Sobre mi cabeza colgaban grandestoronjas verdes al lado de ellas me parecíaver toronjas anaranjadas más pequeñas. Lepregunté al guía acerca de aquellas frutasde diferente color y tamaño. Él me contes-tó: «Oh, esas son naranjas».

Esta era la primera vez que yo veía unárbol con dos tipos de frutas diferentes.Me preguntaba cómo podría ser esto. Lue -go supe que al injertar dos especies simi-lares en un mismo patrón, podrían obte-nerse aquellos resultados.

Cristo utiliza la ilustración de llevarfruto con el fin de animarnos a permane-cer en él. Lee Juan 15: 5. Al igual que lasnaranjas y las toronjas, no podremos lle-var fruto alguno a menos que hayamossido «injertados» en Cristo.

Aunque el árbol que vi llevaba dos fru-tos diferentes de la misma familia, todosellos recibían su alimento del mismo tron-co. De igual forma el fruto, alimento o«comida» debe proceder de una mismafuente: del Espíritu Santo. Durante el cre-cimiento del árbol, las ramas que no lle-van fruto son cortadas con el fin de quenuevas ramas puedan ser injertadas en eltronco. Lee lo que Pablo dice de esto enRomanos 11: 1-24, al relacionarlo con laiglesia de Dios.

El profesor Darrell Sullivan de la uni-versidad de Nuevo México afirma que lacapacidad de un árbol para llevar frutoresponde a la salud de las raíces, del am -biente, de su ciclo de floración y de lasprácticas del jardinero.* Ninguno de esosfactores puede ser controlado por las ramas

(tú y yo), o por el árbol, sino por el jardi-nero (Dios). La producción de buenos fru-tos implica una entrega a Dios. Debemospermanecer en Cristo, glorificando a Diosy convirtiéndonos en discípulos fortaleci-dos por su poder. Lee la aseveración dePablo que se encuentra en Filipenses 4: 13.Ese versículo nos proporciona confianzaen la fuente de nuestro alimento espiri-tual. El fruto que llevemos es un testimo-nio de nuestra entrega total a Cristo y delpoder del Espíritu Santo para cambiarnuestras vidas.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo podemos ser «injertados» en Cristo?2. ¿En qué forma indica tu vida que estás pro-

duciendo frutos?_________________

* D. Sullivan, «Why Fruit Trees Fail to Bear» (Colegio de

Agricultura y Economía del Hogar, Universidad de Nuevo

México [1994]), p. 1.

Cristo utiliza la ilustración de llevar fruto con el fin deanimarnos a permanecer en él.


¿Qué clase de rama eres?

14Allison Zollman, Fort Oglethorpe, Georgia, EE. UU.

Viernes1º de enero

EXPLORACIÓNMateo 7: 20, Juan 15: 1-16

PARA CONCLUIRCristo nos dice en Juan 15: 5 que él es

la vid y sus seguidores las ramas. Si ellospermanecen unidos a él producirán bue-nos frutos. En Mateo 7: 20 se nos dice que«por sus frutos los conocerán». Los verda-deros seguidores de Cristo, aquellos quepermanecen unidos a él, serán conocidospor quienes los rodean por sus acciones,sus palabras y sus buenas obras. No ten-drán que anunciar: «Soy un seguidor deCristo. ¡Mírenme!» Su conexión con la vidserá algo evidente para todos los que a dia-rio se relacionen con ellos.

CONSIDERA• Crear un afiche o ilustración de una ban-

deja con frutas. Escribe junto a cada frutauna cualidad que crees poseer y que me -diante la cual podrías ser identificado oidentificada, como un seguidor de Cristo.

• Analizar las fortalezas y debilidades rela-cionadas con tus «frutos» personales. Con -

centrarte en tus debilidades, formulandoun plan con el fin de fortalecerlas.

• Parafrasear Juan 15: 1-16 con el fin de pre-sentar el texto en una clase de niños de laEscuela Sabática. Pensar en alguna activi-dad que puedan realizar en sus casas quetenga el objetivo de reforzar la enseñanzaanterior.

• Componer una breve canción o corito quete ayude a recordar las ideas expresadas enMateo 7: 20, o en Juan 15: 1-16. Ensé -ñasela a tu clase de Escuela Sabática o a ungrupo de niños.

• Entrevistar a varios amigos respecto a labendición que pueden haber recibido dealgunas personas que «llevan frutos».Pensar en la forma en que podrías aplicaresos frutos a tu vida.

• Observar algunas plantas o árboles en tuentorno que producen diferentes frutos.Ob serva qué tipo de hojas se relacionancon los «buenos frutos».

PARA CONECTAR

� La vida santificada, cap. 10, «El caráctercristiano».


Lección 22 al 9 de enero

El fruto del Espíritu es amor

«Ahora, pues, permanecen estas tres virtudes: la fe, la esperanza y el amor. Pero la más excelente

de ellas es el amor».1 Corintios 13: 13


Dios es amor

17Bob Collins, Nairobi, Kenia

Sábado2 de enero

INTRODUCCIÓN1 Juan 4: 8, 16

Los colonos británicos solían vivir en elpoblado de Gilgil, ubicado en el Valle deRift, en Kenia. El mismo se encuentra alnorte de Nairobi y tiene aproximadamentediecinueve mil habitantes. En Gilgil haynu merosas empresas de mediano tamaño.En ese lugar también se extrae trípoli obarro de diatomea, un polvo fino formadopor los restos fosilizados de plantas acuáti-cas microscópicas.1

Gilgil es también conocido por un trági-co acontecimiento: Alice de Janzé, tambiénconocida como Alice de Trafford era una adi-nerada heredera norteamericana que pasómuchos años en Kenia formando parte delgrupo de colonos radicados en Happy Valley.Ella estuvo involucrada en numerosos escán-dalos, incluyendo un intento de asesinato en1927 y luego un asesinato en el año 1941.Su alocada vida estuvo marcada por nume-rosos actos reñidos con la moral así como

con varios intentos de suicidio. En el año1941 puso fin a su vida utilizando un armade fuego.2

Algunos piensan que el nombre deGilgil puede relacionarse con las letras ini-ciales de frase del inglés «Dios es amor»,repetidas dos veces. Esta semana estudiare-mos acerca del amor como un fruto delEspíritu Santo que debemos desarrollar alcrecer en Cristo. Consideraremos a travésdel desarrollo de la lección, que ese amor esel eje del carácter cristiano mientras nosmantenemos luchando con el pecado. Lostemas secundarios para la lección nos mues-tran que el amor que viene del cielo es uningrediente esencial del fruto del EspírituSanto. Tomando en cuenta que el Espí ri -tu Santo es parte de la Trinidad (Juan 4: 24),llegamos a la conclusión de que Dios es todoamor. Con el fin de aprender a desarrollar elfruto del amor, asegúrate de leer la parte dia-ria en la lección de esta semana._________________

1 ¿Qué es el trípoli? http: //www.ima-eu.org/fileadmin/down

loads/minerals/

http://www.diatomid.com/tierra_de_diatomea.

2. Alice de Janzé en : http: //en.wikipedia.org/wiki/ Alice_de_

Janzé.

«Dios es todo amor».


Las facetas del amor

18

Domingo3 de enero

LOGOSDeuteronomio 6: 5; Mateo 5: 43-48; 7: 12; 22: 35-40; Lucas 10: 25-37; 1 Corintios 13: 4-8

Hoy en día, la gente piensa que elamor significa diferentes cosas. Amamosde terminadas comidas. Amamos algunosdeportes. Amamos determinado color, oal gunas prendas de vestir. Sin embargo, laBiblia describe el amor de una maneramuy diferente.

Amor por el Creador (Deut. 6: 5)Jesús tuvo varios enfrentamientos con

los fariseos durante la primera parte de suministerio. Ellos intentaban una y otra vezatraparlo en alguna contradicción. Un díale preguntaron que cuál era el mayor detodos los mandamientos. En vez de discu-tir con ellos, él los remitió a la ley queMoisés les había dado a sus antepasados,registrada en el libro de Deuteronomio(repasa Deuteronomio 6: 5). Aquella era lavoz de Cristo hablándoles a los fariseos através de Moisés. El fracaso de estos últi-mos al no obedecer los mensajes de Diosenviados mediante sus mensajeros, hizoque odiaran más a Cristo. El amor de Diosdebe arropar nuestras mentes y corazonescon el fin de que no nos suceda lo mismoque a los pobres fariseos quienes se consi-deraban maestros de la ley, pero que fraca-saban al no reconocer la mayor de todaslas leyes.

¿Qué se necesita con el fin de amar aDios con todo nuestro corazón y con todanuestra mente? «Se prohíbe al hombre dara cualquier otro objeto el primer lugar en

sus afectos o en su servicio. Cualquiercosa que nos atraiga y que tienda a dismi-nuir nuestro amor a Dios o que impidaque le rindamos el debido servicio es paranosotros un dios».1

Nuestro amor por Dios debe se con-sistente con los principios expuestos en el

Decálogo. Observa cómo se bosqueja eseamor en 1 Corintios 13: 4-8. Los fariseosno tomaron nada de eso en cuenta. En laactualidad la gente se preocupa más porsu interpretación personal del amor. Des -cuidan el amor genuino que se le debebrindar al Creador, algo que incluye guar-dar sus mandamientos. Lee Juan 14: 15.

Ama a tus semejantes (Mat. 22: 39; Luc. 10: 25-37)

Los Diez Mandamientos armonizanple namente entre sí. En conjunto, ellos re -saltan la importancia de la relación de losseres humanos con Dios así como entre sí.Los mandamientos nos estimulan a amar aDios y a nuestro prójimo.

Lee Levítico 19: 18. Esas fueron lasmismas palabras que Jesús les dirigió a losfariseos cuando señaló al más importantede los mandamientos: el amor a Dios y alprójimo. La coexistencia humana implicauna interdependencia. No podemos triun-far sin la ayuda de nuestros semejantes.Necesitamos el amor de Dios y el apoyo de

Necesitamos el amor de Diosy el apoyo de amigos y familiares con el fin de alcanzar el éxito.


19Tony Philip Oreso, Nairobi, Kenia

sesperada. Dejó su gloria, para venir aredimirnos. Nos halló a punto de morir yse hizo cargo de nuestro caso. Sanó nues-tras heridas. Nos cubrió con su manto dejusticia. Nos proveyó un refugio seguro ehizo completa provisión para nosotros asus propias expensas. Murió para redi-mirnos. Señalando su propio ejemplo, dicea sus seguidores: “Esto os mando: Que osaméis los unos a los otros”. “Como os heamado, que también os améis los unos alos otros”. (Juan 15: 17; 13: 34)».2

PARA COMENTAR

1. ¿Cuál de los tres aspectos del amormencionados anteriormente, has dejadode practicar? ¿Qué puedes hacer paramostrar un amor proveniente del cielo?

3. ¿Examínate con el fin de descubrir quéte está alejando del amor por Dios?¿Qué puedes hacer para librarte deesos impedimentos?

4. ¿Cuándo fue la última vez que actuas-te como el Buen Samaritano? ¿Qué tellevó a actuar así? Prepárate para com-partir esa experiencia con tu clase deEscuela Sabática.

______________

1. Patriarcas y profetas, p. 277.

2. El Deseado de todas las gentes, pp. 473, 474.

amigos y familiares con el fin de alcanzar eléxito. El relato del Buen Samaritano (Luc.10: 25-37) expresa una importante pre-gunta: ¿Quién es mi prójimo? Cristo relatóesta historia para enseñarnos que debemosayudar al necesitado, sin importar queellos pertenezcan a nuestra familia, círculoescolar, iglesia o comunidad.

Amando a tus enemigos (Mat. 5: 43-48; 7: 12)

Con el fin de alcanzar la perfeccióncaracterizada por nuestro Padre celestial,debemos adoptar su forma de ser. Al piede la cruz el terreno se nivela para todosy las oportunidades son las mismas (leeMateo 7: 12). Esta ley nos lleva a practi-car el amor divino, un amor que no sedeleita en la maldad sino que se regocijacon la verdad.

Cuando mostramos amor por quienesnos odian, traspasamos las barreras delegoísmo para amar de la misma forma enque Dios lo hace. «Mediante la historiadel Buen Samaritano, Jesús pintó un cua-dro de sí mismo y de su misión. El hom-bre había sido engañado, estropeado, ro -bado y arruinado por Satanás, y abando-nado para que pereciese; pero el Salvadorse compadeció de nuestra condición de -


El amor como acción y verdad

20Esther Aoko, Kendu Bay, Kenia

Lunes4 de enero

TESTIMONIO

1 Juan 3: 18

«El destino del hombre será determi-nado por su obediencia a toda la ley. Elamor supremo a Dios y el amor imparcialal hombre son los principios que debenpracticarse en la vida».1 Esa clase de amordemanda que reconozcamos la grandezade nuestro Creador y que andemos con-forme a sus leyes divinas. El amor impar-cial implica servir en forma desinteresada anuestros hermanos y hermanas en Cristo,así como a nuestros enemigos. Cristo rela-tó una historia con el fin de ilustrar esto:

«Al ir de Jerusalén a Jericó, el viajerotenía que pasar por una región del desier-to de Judea. El camino atravesaba una hon-donada despoblada y peñascosa, que esta-ba infestada de ladrones, y era a menudoteatro de violencias. Era allí donde el viaje-ro fue atacado, despojado de todo lo quetenía valor, herido y magullado, y dejadomedio muerto junto al camino. Mientrasyacía en esta condición vino el sacerdotepor ese camino; pero dirigió tan sólo unamirada de soslayo al herido. Luego apare-ció el levita. Curioso por saber lo que habíaacontecido, se detuvo y miró al doliente.Estaba convencido de lo que debía hacer;pero no era un deber agradable. Deseabano haber venido por ese camino, para nohaber necesitado ver al herido. Se persua-dió de que el caso no le concernía».2

El aspecto más importante del relato esla falta de caridad manifestada por el levi-ta y por el sacerdote. «Estos dos hombrespertenecían al oficio sagrado y profesabanexponer las Escrituras. Pertenecían a la

clase especialmente elegida para represen-tar a Dios ante el pueblo. Se debían "com-padecer de los ignorantes y extraviados,”(Hebreos 5: 2) a fin de guiar a los hombresal conocimiento del gran amor de Dioshacia la humanidad».3

En la actualidad, el Espíritu de Diosnos llama a practicar ese mismo amor. Ellevita y el sacerdote escucharon a Jesúshablar del amor, pero ellos no pusieron enpráctica lo que el Maestro había predicado.

De igual forma, a menudo mal interpreta-mos el significado del amor. Sin embargo,«El amor de Dios en el corazón es la únicafuente de amor al prójimo. “Si alguno dice,Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano,es mentiroso. Porque el que no ama a suhermano al cual ha visto, ¿cómo puedeamar a Dios a quien no ha visto?” Amados,“si nos amamos unos a otros, Dios está ennosotros, y su amor es perfecto en noso-tros”».4

PARA COMENTAR1. Si nos apoyamos en el relato del buen

samaritano, ¿quiénes representarían en laactualidad al sacerdote y al levita?

2. ¿Qué grado de amor deberíamos manifes-tar a quienes son parte de nuestra familia ya los extraños?

_________________


2. Ibíd., p. 471.

3. Ibíd.

4. Ibíd. p. 475

«Se persuadió de que el caso no le concernía».


Un fruto del Espíritu

21George Otieno, Mbita, Kenia

Martes5 de enero

EVIDENCIAGálatas 5: 13

El Espíritu Santo, la tercera persona de laTrinidad, es nuestro maestro, instructor y con-solador. Dios requiere que sus hijos vivan unavida santa y libre de pecado. Eso es algo que lohonra a él. Él nos concede el Espíritu Santopara que nos ayude a vivir en forma conse-cuente.

El Espíritu Santo imparte cualidades que alser recibidas por el ser humano, dan comoresultado un cambio de vida. Una de esas cua-lidades es el amor que viene de Dios. Ese amorestá asociado con la paz, la tranquilidad y elgozo. Si el amor no hubiera sido parte del frutodel Espíritu, los demás no existirían, porque elamor de Dios los incluye a todos ellos.

Pablo les predicó el evangelio a los gálatasdurante su ministerio y tuvo que esforzarsepara explicarles en qué consistía el fruto delEspíritu. Galacia era una provincia romana ubi-cada en Asia y estaba habitada mayormentepor personas que no eran de origen judío. Ellostenían dudas respecto a seguir a Cristo. Muchoscreían que la clave para ser cristianos consistíaen observar la ley de Moisés. Sin embargo,Pablo refutó esa creencia y los convenció deque únicamente la fe, acompañada de buenasobras, era lo que distinguía a un cristiano.

En la sociedad actual, podríamos mencio-nar un número de sucesos en los que la falta

del amor de Dios tuvo como consecuenciaterribles resultados. Por ejemplo, en Ruanda amediados de la década de los noventa, en Iraka principios de los noventa y luego en la prime-ra parte del siglo XXI, incluso en Kenia mi paísnatal en el 2008. La ausencia del amor divinoconduce al odio, a la destrucción, a la muerte ya todo aquello en lo que Satanás se complace.

En Gálatas 5: 15, Pablo nos advierte que lafalta de amor celestial puede hacer que noscomportemos como seres irracionales, deta-llando los resultados en los versículos 19 al 21.

Recordemos que Pablo no se dirigía única-mente a los gálatas. Él se proponía establecerun fundamento sobre el cual las futuras gene-raciones de cristianos se apoyarían. Por tanto,también somos responsables por manifestar elamor de Dios. Un amor de ese tipo es el primerpaso en el desarrollo de un carácter semejanteal de Cristo.

PARA COMENTAR¿En qué forma actúas como un agente delamor divino en tu escuela, iglesia, comuni-dad y país?

La ausencia del amor de Dios puede hacer que nos comportemos como seres irracionales.


¿Qué tiene que ver con esoel amor de Dios?

22Joash Oketch, Nairobi, Kenia

Miércoles6 de enero

CÓMO ACTUAR1 Juan 4: 18

Recuerdo muy bien el día cuandoalguien trajo la noticia de la muerte de nues-tra madre quien se encontraba de viaje.Aque lla inesperada nueva fue un tragoamargo, y nos preguntábamos cómo podrí-amos enfrentar al mundo sin ella. Horas

más tarde, supimos que la noticia habíasurgido de una confusión. Sin embargo, senos hizo difícil borrar los sentimientos quehabían surgido en nuestras mentes a raíz deaquel suceso. Buscamos ayuda con el finde disfrutar de nuevo de paz y tranquili-dad. Todo aquello estuvo motivado ¡por elamor que existía entre no sotros y nuestramadre!

Pero, ¿qué diremos del amor de Dios odel fruto del Espíritu? Como cristianos, de -beríamos saber qué es lo que constituye eseamor. A continuación mencionamos algu-nos de los aspectos que se enriqueceráncuando comencemos a entender mejor esefruto del Espíritu.

• HHeecchhooss ((11 JJuuaann 33:: 1188)).. EEl amor de Diostransforma nuestras acciones mundanaspara convertirlas en una actuación guiadapor el Espíritu: plenitud de paz, de fe yde una paciencia que nunca falla (1 Cor.13: 7). El amor de Dios nos inspira a amarincluso a nuestros enemigos de la mismaforma que Jesús lo hizo. Igualmente noslleva a realizar buenas obras a favor de losnecesitados.

• PPaallaabbrraass ((EEffee.. 44:: 2299)).. Las palabras puedendestruir o edificar. Cuando crezcamos enel amor divino, nuestras palabras estimula-rán a otros a que se acerquen a Dios.

• RReellaacciioonneess ((22 CCoorr.. 55:: 1177)).. Pablo les mencio-nó a los corintios que cuando un frutoespiritual crece eso implica un cambio,una transformación vital. Las cosas vie-jas son dejadas atrás para ser sustituidaspor las nuevas (2 Cor. 5: 17). Por lotanto, el amor que proviene del Espíritunos ayuda a alejarnos de las relacionesmalsanas y a desarrollar vínculos saluda-bles con la gente que nos ayudará a acer-carnos a Cristo.

PARA COMENTAR1. ¿En qué aspectos de la vida necesitas mani-

festar más amor de tipo celestial?2. ¿Cómo puede el amor genuino ayudarnos

en actividades diarias como relaciones amo -rosas, estudios, asuntos financiero y otros?

Cuando crezcamos en el amor divino, nuestras

palabras estimularán a otrosa que se acerquen a Dios.


Un amor que traspasa fronteras

23Flora Kurema, Kakamega, Kenia

Jueves7 de enero

OPINIÓN1 Timoteo 1: 5

Dios no ha cambiado los Diez Man -damientos. Continúan siendo los mismos,desde aquel momento cuando se los entregóa los israelitas. Ellos permanecen invaria-bles ante las fuerzas del mal. Pablo dice en 1Timoteo 1: 5: «que el amor brote de un cora-

zón limpio, de una buena conciencia y deuna fe sincera». La instrucción dada a Ti mo -teo está expresada en el versículo 3. Sin em -bargo, po demos afirmar que el objetivo oideal de los Diez Mandamientos es el amor. Elamor por Dios en los primeros cuatro y el amoral prójimo expresado en los últimos seis. Losmandamientos nos afectan en lo personal, ex -hortándonos a que practiquemos el amorme diante un corazón puro, una buena con-ciencia y una fe sincera. La mayor parte denosotros sabe que es más fácil amar a quienesse encuentran en el círculo de nuestra in -fluencia. Ellos pueden ser familiares, parien-tes o amigos. Sin embargo, la mayor parte dela gente también reconoce que es difícil amara nuestros enemigos. La Biblia nos enseñaque si verdaderamente se ha de testificar porCristo, no debemos devolver «mal por mal niinsulto por insulto; más bien, bendigan, por-

que para esto fueron llamados, para heredaruna bendición» (1 Pedro 3: 9). Amar a losenemigos es un ejercicio que implica un gransacrificio. Sin embargo, con la ayuda de Diospodemos lograrlo. Hemos de seguir las pisa-das de Cristo quien fue nuestro ejemplo.

«La contemplación del amor de Dios ma -nifestado en su Hijo conmoverá el corazón ydespertará las facultades del alma como nin-guna otra cosa puede hacerlo. Cristo vino paracrear de nuevo en el hombre la imagen deDios; y cualquiera que aleje a los hombresde Cristo los aleja de la fuente del verdaderodesarrollo».*

Mi objetivo principal como cristiano esejercer mi fe en Cristo con sinceridad, de formaque pueda ser un hacedor de la Palabra y no unoidor (Sant. 1: 22). La única forma de amar aDios es de acuerdo con su Palabra. Extender elamor celestial a la familia, a los amigos, a losvecinos o a nuestros enemigos, únicamentepuede lograrse en la forma ex puesta en lasEscrituras. ¡Que Dios nos ayude a logarlo!

PARA COMENTAR1. ¿Puedes amar a tus enemigos sin perdo-

narlos? Motiva tu respuesta.2. Si tuvieras que escoger entre Dios, tu per-

sona, tu familia, tus amigos, tus vecinos otus enemigos, ¿a quién amarías pri me ra -mente y por qué?

______________

*El Deseado de todas las gentes, p. 453.

Los mandamientos nos afectan en lo personal.


Únicamente necesitas amor

24Sergio Torres, Miami, Florida, EE. UU.

Viernes8 de enero

EXPLORACIÓNRomanos 13: 10

PARA CONCLUIR«All you need is love» son las palabras

de una conocida canción de los Beatles; yes cierto, lo único que necesitas es amor.Sin embargo, a menudo se nos hace difícilaceptar esa verdad porque consideramosque el amor no es parte integral de nuestranaturaleza humana pecaminosa. El apóstolPablo nos dice que «el amor es el cumpli-miento de la ley» (Rom. 13: 10). De allíque cuando tú amas estás cumpliendo(obe deciendo), la ley. Manifestamos nues-tro amor por Dios al amar a nuestros pró-jimos, a nuestros enemigos, a nuestros ami-gos y a nuestra familia.

CONSIDERA• Memorizar 1 Corintios 13: 4-8. Ora men-

cionando dicho texto durante toda una

semana. Observa si ocurre algún cambioen tu trato con los demás.

• Leer algunos de los Cien sonetos de amor dePablo Neruda para luego escribir un párra-fo acerca de la definición que hace el poetadel amor.

• Hacerte miembro de alguna organizaciónque pretende ayudar a niños en diferen -tes partes del mundo. Puedes visitar lapágina de Internet de una de ellas: www.dejandohuellas.org/.

• Ofrecer tu ayuda voluntaria durante unmes a alguna clínica destinada a ayudar aenfermos del sida.

• Colaborar con algún proyecto o programade alfabetización.

PARA CONECTAR

� Dick Tibbits, Forgive to Live.� Madre Teresa, No Greater Love.� Peter Scazzero, Emotionally Healthy Spiri -

tua lity.



El fruto del Espíritu es gozo

«Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa».

Juan 15: 11


La fuente del gozo: una parábola

27Norma Sahlin, Springboro, Ohio, EE. UU.

Sábado9 de enero

INTRODUCCIÓN

Gálatas 5: 22

Había dos amigos que a diario trabaja-ban desde al alba hasta el anochecer. Ensus afanes lo único que lograban era man-tenerse a flote.

Aunque la vida representaba un desa-fío, disfrutaban de las cosas más sencillas,incluso de los rayos del sol. Igualmente dela lluvia que regaba los campos y de loscantos de los pájaros, así como las estacio-nes del año. Durante la primavera, las flo-res lo adornaban todo y los campos seteñían de verde. Al llegar el verano los fru-tos comenzaban a madurar y ya en el otoñoal llegar el tiempo de la cosecha se tranqui-lizaban un poco. Durante el invierno, aun-que sentían el frío se sentían descansadosy renovados. Esto les ayudaba a apreciaraun más el milagro de la primavera.

Una tarde, al regresar de sus labores,encontraron una bolsa con dinero debajode un arbusto. Notificaron a las autorida-des y luego esperaron dos meses, y aununo más, en espera de que alguien llegaraa reclamar aquella fortuna. Debido a quenadie se presentó, las autoridades les en -tre garon el dinero a los dos amigos. Ellosdieron gracias a Dios y organizaron unafiesta para todos los vecinos. En aquellaocasión anunciaron que ya no tendrían quetrabajar más. ¡La vida les sonreía!

Con el paso del tiempo, la novedad desuplir las necesidades de sus familias se fuediluyendo. La vida se amoldó a un nuevopatrón, aunque por eso no dejaba de ser

un patrón. Continuaron dándole la bien-venida a las estaciones del año. Devol vie -ron sus diezmos y continuaron alabando aDios. Ahora más bien se dedicaban a con-tar su dinero. Sin embargo, aquella no erauna tarea agotadora. El placer se habíacon vertido en una rutina.

No obstante, la felicidad tocó a suspuertas de nuevo cuando comenzaron ahacerles regalos no anunciados a sus próji-mos. Era algo satisfactorio ayudar a los

más necesitados de la comunidad, propor-cionándoles alimentos o dinero. Prontono taron que el número de casos iba enaumento. Poco a poco la novedad delasunto también se fue disipando.

En cierta ocasión, el estudio de la Bibliaen su iglesia se centró en Gálatas 5: 22: Allíse afirma que el fruto del Espíritu es amor,alegría, paz, paciencia, amabilidad, bon-dad, fidelidad, humildad y dominio pro-pio. De repente su forma de ver las cosascambió. Se dieron cuenta de que el gozoque experimentaban no podía ser obteni-do mediante sus propios esfuerzos y que elmismo únicamente proviene de la presen-cia del Espíritu Santo en la vida. Reco no -cieron que esa es una muestra del amortransformador de Cristo.

Al estudiar la lección de esta semana,pregúntate cómo puede ese gozo transfor-mar tu vida.

El gozo verdadero provienede la presencia del Espíritu Santo.


Dios ama nuestra compañía

28

Domingo10 de enero

LOGOSSalmo 139; Lucas 15: 4-24; Juan 15: 10, 11; Hebreos 11: 16

El capítulo 15 de Lucas encierra tresrelatos conocidos: la oveja perdida, la mo -neda perdida y dos hijos perdidos. Po -demos identificarnos con los tres relatosporque en algún momento quizá noshemos sentido perdidos. En ese capítulo,Jesús describe a la gente como algo perdi-do, no como pecadores. El énfasis está enla condición de perdido, no en alguna acti -vidad o actuación. Jesús considera a lapersona, no a la actuación.

Una mirada más cuidadosa¿En qué sentido se diferencian los pro-

tagonistas? La oveja extraviada se había ale-jado. Se extravió del rebaño al ir en buscade pastos más verdes. Quizá resbaló yquedó atascada en un arbusto espinoso.Cuando baló pidiendo ayuda, se sorpren-dió al hallarse sola. Es un hecho de que aloscurecer los animales feroces comienzan amerodear.

En el segundo incidente, la moneda notiene la culpa de su extravío. No llegó co -rriendo hasta un rincón y se escondió de -bajo de un canasto o de otro objeto casero.La persona que estaba supuesta a cuidarlay protegerla, la había manipulado con des-cuido o la había perdido de forma acciden-tal. Sin importar la verdadera causa, la per-sona encargada había fallado.

El tercer incidente tiene que ver condos hijos perdidos. Uno que en forma deli-berada desafío a la familia y a su cultura alquerer independizarse marchando a una

región lejana, y el otro que aun cuandoquedó en casa se extravió a causa de susprejuicios.

Los tres relatos tienen que ver con laidea de separación: del pastor y cuidador,del guardián y del padre. También refle-

jan la soledad: la del pastor y las noven-ta y nueve ovejas, la del mayordomo y susotras nueve monedas y la del padre queesperaba y aguardaba mientras sus hijosluchaban con sus problemas y sus vidas.

La acción es un concepto fundamental.En cada relato se busca algo que está perdi-do. El pastor, el administrador y el padrebuscan activamente a lo que está perdido.Se preocupaban por los perdidos y experi-mentaban un profundo vacío que nopodría ser llenado hasta que los perdidosfueran encontrados.

El finalCada relato concluye con una fiesta.

Lucas 15 presenta un cuadro de gozo. «Novisualizamos a Dios como alguien gozoso.Por tanto, nuestra teología es rígida, infle-xible y desabrida. Sin embargo, en los tresrelatos Jesús nos presenta a un Dios a quienle agradan las fiestas. Es Jesús quien orga-niza la fiesta para recibir a los pecadores ya los rechazados. Es Dios quien da inicio alas festividades. En el texto se le concedemás énfasis al gozo, al regocijo, a las fiestasque al hecho de estar perdido, ser buscado

¿Por qué será que Dios dedica tanto tiempo a celebrar el rescate de los perdidos?


29Monte Sahlin, Springboro, Ohio, EE. UU.

En otras ocasiones experimentó una sensa-ción de pérdida, algo que no podía definir.Al contemplar el pasado se convencióde que Dios estaba utilizando «saetas degozo que le había disparado desde suniñez» con el fin de penetrar su ensimisma-miento, para inspirarlo a que mirara máslejos y vislumbrara la fuente eterna degozo: a Dios mismo.

El proceso de su conversión tomó va -rios años. A pesar de sus variados senti-mientos, el gozo predominó. «En ciertosentido, el tema principal de mi vida es uno[…] representa un deseo insatisfecho queen sí mismo es más deseable que cualquierotra satisfacción. Lo denomino gozo, que esun concepto técnico y debe ser radicalmen-te diferenciado de la felicidad y del placer».3

PARA COMENTAR

1. ¿Cómo nos hacemos merecedores derecibir el fruto del Espíritu Santo?

2. Si es una celebración de Dios, ¿por quénos quejamos constantemente respectoa los detalles como es el caso de los invi-tados o su idoneidad?

3. ¿Cómo te han ayudado las «saetas degozo» a acercarte a Dios, la fuente de todobien?

______________1. Caleb Rosado, «What Is God Like? Renew Your Acquaintance

With a Compassionate God» (Review and Herald, 1988),p. 46.

2. Ibíd., p. 57.3. C. S. Lewis, Sorprendido por la alegría, pp. 214-219.

o ser encontrado. Ante un amor de esa na -turaleza no se podría esperar otra cosa.¿Acaso no es el gozo el segundo fruto delEspíritu, el resultado del amor?1

¿Por qué será que Dios dedica tantotiempo a celebrar el rescate de los perdi-dos? «El que más sufre es el dueño de laoveja, el dueño de la moneda, el padreanhelante. Es Dios quien más sufre cuandoestamos perdidos. Aunque también es Diosquien se regocija más cuando un perdidoes encontrado […] ¡Nuestro Dios ama lasfiestas!»2

¿Cuántas veces habremos leído Lucas15 sin entender su verdadero significado?Me atrevería a decir que la mayor parte detodo lo que se ha escrito acerca de Lucas 15refleja la naturaleza egocéntrica de los sereshumanos. Muy pocos han pensado en loque Dios siente por sus hijos e hijas quese marchan a un país lejano, distante delEdén, dedicándose allí a consumir la comi-da de los cerdos. Dios nos provee todo enabundancia. Mientras que nosotros escoge-mos las sobras. ¡Cuánto debe sufrir! Élanhela concedernos un gran gozo, mien-tras que nosotros tercamente insistimos,como inexpertos niños, en marchar pornuestra propia senda.

C. S. Lewis (1898-1963), describió superegrinación desde el ateísmo al cristianis-mo. Él recuerda la marcada pero fugaz sen-sación de gozo que experimentara el díaque un hermano le mostró una réplica deun jardín construida en un caja de metal.


El gozo revelado en nuestras vidas

30Santhosh S. Jackson, Laurel, Maryland, EE. UU.

Lunes11 de enero

TESTIMONIOGálatas 5: 22, 23

«Él es un sarmiento de la Vid verdade-ra y produce ricos racimos de fruta paragloria de Dios. ¿Cuál es el carácter delfruto producido? El fruto del Espíritu es“caridad”, no odio; “gozo”, no descontentoy aflicción; “paz”, no irritación, ansiedad ypruebas fabricadas. Es “tolerancia, benig-nidad, bondad, te, mansedumbre, tem-planza”».1

«El gozo de Cristo, en su humillacióny dolor, consistía en saber que sus discípu-los serían glorificados con él. Son el frutode su sacrificio propio. El desarrollo de supropio carácter y espíritu en ellos es su re -compensa, y será su gozo por toda la eter-nidad. Este gozo lo comparten ellos con éla medida que el fruto de su trabajo y sacri-ficio se ve en otros corazones y vidas».2

«“Mas el fruto del Espíritu es amor,gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad,fe, mansedumbre, templanza” (Gálatas5:22, 23). Estas preciosas gracias son sólolos principios de la ley de Dios cristaliza-dos en la vida».3

«Trabajar con un corazón generoso,ennoblecido por ser participante de lossufrimientos de Cristo, compartiendo sussimpatías, ayuda a aumentar el flujo y re -flujo de su gozo y añade honor y alabanzaa su exaltado nombre».4

«¿Será acaso posible que nos gocemosal obedecer a Cristo? Ese es el único gozoverdadero que cualquier alma podría dis-frutar. Usted pudiera disfrutar de algo quedenomina “momentos agradables”, perosu gozo únicamente consistirá en una tontacomplacencia mental que no está apropia-damente servida por el Espíritu de Dios».5

PARA COMENTAR1. Un viejo refrán dice que «aunque no hay

dos piedras iguales, cada una tiene sulugar en el templo». ¿En qué se pareceesta idea a los dones espirituales descritosen Romanos 12: 6? ¿En qué se diferen-cian?

2. ¿Cómo puedes saber que tienes el gozode Cristo y no sencillamente que te agra-da el compañerismo de los demás cristia-nos?

____________

1. Obreros evangélicos, p. 304.


3. Reflejemos a Jesús, p. 88.

4. Testimonios para la iglesia, t. 6, p. 309.

5. Review and Herald, 3 de septiembre, 1895.

¿Será acaso posible que nos gocemos al obedecer a Cristo?


«El gozo de los redimidos»

31Melissa Sahlin, Mason, Ohio, EE. UU.

Martes12 de enero

EVIDENCIAIsaías 35: 1, 2, 10

El capítulo 35 de Isaías habla del gozode los redimidos. «Se alegrarán el desiertoy el sequedal; se regocijará el desierto y flo-recerá como el azafrán. Florecerá y se rego-cijará: ¡gritará de alegría!» (Isa. 35: 1, 2).

Gedeón estaba trillando cuando unángel se le presentó (Jue. 6: 11). Por lo ge -neral se trillaban los cereales en un lugar aldescubierto y que tuviera un piso duro. Sinembargo, Gedeón lo hacía en un lugaroculto a causa de los madianitas. En Ruth2 podrás leer acerca de lo que implicaba lacosecha de un cereal. Nota que en aqueltiempo los segadores dejaban espigas enlos extremos del campo con el fin deque los pobres pudieran obtener algode granos para sustentarse.

En muchos casos nuestros alimentosson producidos por grandes empresas,debido a ello no estamos al tanto de lo queimplica la producción agrícola. Tenemosuna idea general, pero ninguno de nosotrosproduce todo lo que consume, ni tampocoestá en grave peligro de sufrir de hambre.

En los tiempos bíblicos era necesariotrabajar muy fuerte para producir cual-quier tipo de alimentos. La gente pasabagran parte del día agenciando su sostén.Los rebaños eran reubicados de acuerdocon las estaciones del año. Los pastores via-jaban desde las colinas de Judea en elnorte, al desierto que se encontraba al surdel Mar Muerto, una zona donde acecha-ban animales feroces y sufrían a causa de

las adversas condiciones climáticas. La su -pervivencia implicaba una lucha diaria.

Sin embargo, en los versículos tres ycuatro de Isaías 35, se nos dice que lasmanos débiles serían fortalecidas y que losde corazón temeroso serían también forta-lecidos: «Sean fuertes, no tengan miedo.Su Dios vendrá, vendrá con venganza; conre tribución divina vendrá a salvarlos» (vers. 4).

Luego en el versículo seis leemos lasrazones concretas para regocijarse: «Porqueaguas brotarán en el desierto y en el seque-dal». Al final del capítulo, las vidas imper-fectas son transformadas: «y entrarán enSión con cantos de alegría, coronados deuna alegría eterna. Los alcanzarán la alegríay el regocijo, y se alejarán la tristeza y elgemido» (vers. 10).

Ciertamente, el gozo va mucho másallá que la experiencia personal. No puedeser legislado u obligado, porque es Diosquien nos colma de gozo.

PARA COMENTAR1. ¿En qué sentido podría una corona de

gozo cambiar tu vida?2. ¿Es difícil aceptar el profundo y constan-

te gozo divino? Motiva tu respuesta.

Ciertamente, el gozo va mucho más allá

de la experiencia personal.No puede ser legislado

u obligado.


Experimentando gozo

32Gianluca Bruno, Mason, Ohio, EE. UU.


CÓMO ACTUARJuan 14:14-17; 17: 13; Hechos 2: 1-4, 46; 1 Juan 1: 3, 4

El gozo es un componente del frutodel Espíritu Santo. Es una muestra de queel Espíritu mora en nosotros. ¿Cómo nosllenaremos de él?

En 1 Juan 1: 3, 4 se nos presenta unaimportante declaración: «Les anunciamoslo que hemos visto y oído, para que tam-bién ustedes tengan comunión con noso-tros. Y nuestra comunión es con el Padre ycon su Hijo Jesucristo. Les escribimos estascosas para que nuestra alegría sea com-pleta».

¿Cómo podrá ser completa nuestraalegría o nuestro gozo?• PPrriimmeerroo,, aacceeppttaa qquuee ssiinn JJeessúúss nnoo ssoommooss

nnaaddaa ((JJuuaann 66:: 6633)).. Es él quien te concedela vida eterna ya que pagó por tus peca-dos. No importa lo que hagas, nuncapodrás cumplir todos los requisitos.Cero. Nada.

• SSeegguunnddoo,, iinnvvooccaa ssuu nnoommbbrree ((JJuuaann 1144:: 1144))..Deja el yo a un lado. Esto pareciera sercontradictorio, porque nuestra culturaestá basada en los logros personales.Pero no podrás completar esta tarea, sinimportar cuanto te afanes.

• TTeerrcceerroo,, oobbeeddeeccee ssuuss mmaannddaammiieennttooss ((JJuuaann1144:: 1155)).. Esto significa que debes estudiary seguir estudiando. Repasa a diario ellibro de texto llamado Biblia, detenién-dote en especial en la vida de Jesús.Como resultado, él solicitará que Dios te

conceda el Espíritu Santo, el consola-dor que te llevará a toda verdad (Juan14: 16, 17). Tendrás un tutor especial endicha asignatura. Jesús al mismo tiempote dirá cómo todo esto contribuye a queseamos llenados de gozo (Juan 17: 13).

• CCuuaarrttoo,, eessttuuddiiaa eenn uunniióónn aa oottrrooss ccrreeyyeenn--tteess ((HHeebb.. 1100:: 2255)).. Debes congregarte deforma regular con el fin de completar esta

tarea: un proyecto que demuestra amistadcon Dios (Hech. 2: 1-4, 46; Rom. 5: 10).Es un trabajo fuerte. No permite que nadiese distraiga ni que haya un marcado figu-reo. Uno para todos, todos para uno.¡Adelante!

PARA COMENTAR1. Compara y contrasta las expectativas

de la sociedad respecto a tu comporta-miento, con lo que Dios espera de ti.¿Cuáles son las similitudes? ¿Cuálespiensas que son las diferencias?

2. ¿Cómo actuarías en caso de que en tugrupo de estudio algunos no demues-tren los necesarios atributos cristianos?¿O en el caso de que apoyen una inter-pretación diferente respecto a determi-nado pasaje bíblico?

3. ¿Cómo podrías mostrar un mejor espíri-tu de cooperación en tu iglesia?

Tendrás un tutor especial en dicha asignatura.


Desprovistos de gozo

33Stephanie Sahlin Jackson, Laurel, Maryland, EE. UU.

Jueves14 de enero

OPINIÓNJuan 15: 11, 16

Las universidades e instituciones de pos-grado se manejan mediante una rígida estructu-ra. Cada prontuario de clases presenta los requi-sitos de la materia en cuestión, los parámetrospara las tareas, los textos requeridos, las normasde calificación y otros datos. Dicho documentoseñala toda actividad de los profesores y de losalumnos. Su objetivo es el aprendizaje. algo quese medirá utilizando diferentes métodos. No esde extrañarse que los alumnos estén preocupa-dos respecto a la calificación que obtendrán, notan solo en el medio académico sino en la socie-dad. Sus sentimientos están sujetos a un granvaivén. Si obtienen una buena calificación sealegrarán. Si entregan tarde una asignación otarea, se sentirán atemorizados. Y esto se repitecada trimestre o semestre.

En cierta ocasión se presentó en un conoci-do programa de televisión un episodio en el quese mostraba una cafetería donde servían sopapara consumir en casa. Se veía a un grupo declientes haciendo una fila que incluso llegaba ala parte de afuera del establecimiento. Sin em -bargo, no todos llevaban un recipiente con sopaal salir. Los que estaban más cerca del mostra-dor notaban que el propietario les ordenaba aalgunos que salieran del establecimiento, ne -gándose a venderles sopa. Aquel dictadorzuelogritaba con una fuerte voz «¡Para usted no haysopa!» Se negaba a despachar a cualquier clien-te por diversos motivos. ¡Qué estresante!

La vida está repleta de momentos azarosos,llenos de ansiedad. Son situaciones que noshacen sentir infelices, y que muchas veces sur-gen de forma inesperada. Podemos pensar enlos ataques terroristas en Mumbai en la India,las bombas en el metro de Londres, o el perpe-

trado contra las torres gemelas en Nueva York.Podríamos asimismo mencionar desastres natu-rales como huracanes, terremotos y tsunamis.O el colapso del mercado hipotecario que oca-sionó el fracaso de grandes instituciones finan-cieras, compañías de inversión y las bolsas devalores con su secuela de inseguridad y desem-pleo. La desestabilización ha arropado almundo, afectando a países grandes y pequeños.¡Qué triste!

Sin embargo, Dios nos presenta un caminohacia el gozo y la felicidad: «Les he dicho estopara que tengan mi alegría y así su alegría seacompleta. […] No me escogieron ustedes a mí,sino que yo los escogí a ustedes y los comisionépara que vayan y den fruto, un fruto que per-dure» (Juan 15: 11-16).

¡Estas son buenas noticias! Dios prometecompartir su gozo y alegría con nosotros en con-traste con los mensajes negativos que el mundoofrece. Un Dios todopoderoso y omnisapientelevanta un cerco protector alrededor de sushijos. No importa las empresas que puedan fra-casar podremos confiar en Aquel que nos soco-rre. El gozo no está sujeto a la casualidad.

PARA COMENTAR1. Imagínate que alguien estuviera di cien -

do: «¡Para ti, no hay gozo!». ¿Cómo tesentirías?

2. ¿Cuál es la diferencia entre un estilo devida y una transformación efectuada porel Espíritu?

La vida está repleta de momentos azarosos, llenos de ansiedad.


Un regalo sorpresivo

34Jennifer Morgan, Newfoundland, Canadá

Viernes15 de enero

EXPLORACIÓN

Lucas 15: 4-24; Juan 15: 10-16

PARA CONCLUIREl gozo no es algo que podemos susci-

tar mediante nuestra propia voluntad. Enlas parábolas de la oveja perdida, la mone-da y el hijo, Jesús explicó que Dios se gozacuando un alma perdida regresa a él. Lareciprocidad en el amor engendra gozo. EnJuan 15, Jesús explicó que el amor viene deDios. Lo amamos porque él fue el primeroen amarnos. De la misma forma, vivir en suamor nos transforma para que amemosdesinteresadamente a los demás. El acto deamar al prójimo produce un gozo impere-cedero. Como el hermano mayor de la pa -rábola, únicamente podremos participar dela fiesta de Dios cuando disfrutemos lacom pañía de sus hijos.

CONSIDERA• Recordar la última vez que experimen-

taste un verdadero gozo. Escribe un pá -rrafo describiendo lo que sentiste. ¿Te pro -duce alegría recordarlo?

• Hacer una lista de las formas en que po -drías compartir tu gozo durante la próxi-ma semana. Escoge una para ponerla en

práctica. ¿Cómo crees que te afectará elhecho de compartir tu gozo?

• Realizar algo que disfrutas. Comparte luegoese talento con alguien.

• Pedirle a alguien que sabe hacer algo mejorque tú, que comparta su talento contigo.Déjale saber a esa persona que la apre-cias.

• Disfrutar algún aspecto de la naturaleza.Escribe un párrafo, un poema, una can-ción, al respecto.

• Identificar en alguna revista o en Internetuna foto o ilustración que ilustre el con-cepto del gozo. También puedes tratar deidentificar una canción que te haga sen-tir alegre o lleno de gozo. Comparte conlos demás miembros de tu clase dicha fotoo canción.

PARA CONECTAR� «Surprised By Joy» una canción interpre-

tada por Carolyn Arends.� Brennan Manning, «A Touch of Folly»,

en: The Ragamuffin Gospel: Embracing theUnconditional Love of God.

� Henri Nouwen, Turn My Mourning intoDancing: Finding Hope in Hard

� Ellen G. White, «That Your Joy Might BeFull», Signs of the Times, 11de agosto de1909



El fruto del Espíritu es paz

«La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedescomo la da el mundo. No se angustien ni se acobarden».

Juan 14: 27


El significado de «mi paz»

37Divya V. Selvaraj, Puna, India

Sábado16 de enero

INTRODUCCIÓNJuan 14: 27

La vida de una dama surafricana lla-mada Ellen Tipnar es algo conmovedor.Uno no puede imaginar todas las tragediasque la afectaron. Ella perdió la vista a unatemprana edad. Al acudir a un examenmédico la enfermera le puso ácido en susojos, en vez de las gotas indicadas. Al pocotiempo tuvieron que amputarle una pier-na. Más tarde contrajo lepra. Mientras es -taba recluida en un leprosario, su hijofalleció víctima del polio. Casi de inmedia-to, su esposo murió afectado por el cáncer.

Cuando le dieron de alta del leprosa-rio, estaba tan desfigurada que casi nadiela reconocía. Para cuando cumplió 55 añoshabía sufrido 56 operaciones de regular en -vergadura. ¡Qué vida tan poco feliz! Sinembargo, a pesar de todo, nadie nunca lavio con un semblante triste. Nunca des-perdició la oportunidad para compartir elamor de Dios y todo lo bueno que él lehabía concedido.

La Biblia habla de un hombre inocen-te llamado Jesús. «Despreciado y rechaza-

do por los hombres, varón de dolores,hecho para el sufrimiento. Todos evitabanmirarlo; fue despreciado, y no lo estima-mos» (Isa. 53: 3). Únicamente los peorescriminales sufrían la muerte de Jesús, Teníasuficiente poder como para pedirle a suPadre una legión de ángeles para que loprotegieran. (Mat. 26: 53). En vez de ello,se sometió a la voluntad de Dios, mostran-do de esa forma de hecho y no de palabra,el significado de la paz verdadera.

Jesús dijo: «La paz les dejo; mi paz lesdoy. Yo no se la doy a ustedes como la da elmundo. No se angustien ni se acobarden»(Juan 14: 27). Por lo tanto, cuando surja unaprueba, no debemos decir: «¿Por qué mepasa esto a mí?», sino «¡Pruébame Señor!».

Esta semana, al estudiar la paz comouno de los frutos del Espíritu, piensa en laforma en que este concepto puede cambiartu vida.

Sin embargo, a pesar de todonadie nunca la vio con un semblante triste.


Una paz que protege y transforma

38

Domingo17 de enero

LOGOSSalmo 34: 12-16; Mateo 8: 23-27; 11: 28, 29; Marcos 4: 35-41; Juan 14: 27; Romanos 5: 1-11; 12: 9-21; Colosenses 3: 13-15;Hebreos 12: 14

Nuestro Señor es el «Príncipe de Paz»(Isa. 9: 6) y su presencia en nuestras vidasgenera un estado de tranquilidad espiri-tual. Muchas veces esa presencia nos ayudaen situaciones difíciles. Este es el eje prin-cipal de nuestro estudio para esta semana.

Una calma que sigue a la tormenta (Mat. 8: 23-27;Mar. 4: 35-41)

Algunos incidentes son motivo de re -cuerdos atemorizantes. Por ejemplo, lo queles sucedió a los discípulos mientras atra-vesaban el Mar de Galilea. Ellos se sintie-ron aterrorizados cuando las olas anegabanel bote en que viajaban. En aquel momen-to clamaron a Jesús el creador de todo, re -conociendo el poder destructor de la na -turaleza (Col. 1: 16).

«Sus clamores despertaron a Jesús.Pero al iluminarle el resplandor del rayo,vieron la paz del cielo reflejada en su ros-tro; leyeron en su mirada un amor abne-gado y tierno, y sus corazones se volvierona él para exclamar: “Señor, sálvanos, queperecemos”».1 Jesús se mostró tan calma-do como de costumbre. Le ordenó al marque se aquietara. El Señor quien había lla-mado a sus discípulos para que lo acom-pañaran en el bote, también nos llama aestar con él, asumiendo la responsabilidadde llevarnos sanos y salvos a la otra orilla.

Por tanto, no desfallezcas como los discí-pulos porque él puede calmar cualquiertormenta que surja (Sal. 107: 29). Nosconforta saber que él nos llevará a salvohasta donde podamos descansar (Sal.107: 30).

Descanso para los afligidos(Mat. 11: 28, 29)

Jesús nos extiende una invitación paraque acudamos a él con el fin de descansar.En Mateo 11: 28, 29 Cristo no está hablan-do de esfuerzos físicos, sino de descansopara el alma y la mente.2 Esa invitaciónejerció un efecto especial en aquellos quelo escucharon, porque la religión de losjudíos había llegado a convertirse en unacarga. Guardar las reglas y las normasimpuestas por los fariseos era algo trabajo-so para quienes intentaban de esa formaalcanzar la salvación mediante las obras.3

El pecado es nuestra mayor carga y única-mente el yugo de Cristo ofrece un aliviopara la misma. Cristo habló de «su yugo»refiriéndose a una forma de vida a la quedebemos someternos. Este estilo de vidase resume en la ley de Dios.4 Descansa re -mos mental y anímicamente de nuestrascargas al guardar la ley de Dios gracias a laayuda del Espíritu Santo que mora ennosotros.

Teniendo paz con Dios mediante Jesús (Rom. 5: 1-11)

Pablo inicia Romanos 5 afirmando queal ser «justificados mediante la fe, tene-mos paz con Dios por medio de nuestroSeñor Jesucristo» (Rom. 5: 1). Cuando


39Joy Kuttappan, Puna, India

san dificultades. Sin embargo, Pablo nosaconseja que bendigamos a quienes nospersiguen (Rom. 12: 14). Debemos ale-grarnos con quienes están alegres y llorar

con los que lloran (Rom. 12: 15). Debe -mos apreciar todo lo bueno y vivir enarmonía con todos procurando la paz(Rom. 12: 14-17; Sal. 343: 14).

La paz de Cristo (Col. 3: 13-15; Juan 14: 27)

La paz de Cristo no es una virtud está-tica. Es un poder activo. Nos ayuda a viviren tranquilidad en medio de las situacio-nes más difíciles de la vida. Cuando acep-tamos la paz de Cristo, él se convierte enel capitán de nuestras vidas para guiarnosal seguro puerto celestial.5

PARA COMENTAR1. Comparte alguna situación difícil que

venciste utilizando la paz de Cristo.2. ¿Qué esfuerzos estás haciendo con el

fin de tener paz con Dios y con quie-nes te rodean?

____________


2. Comentario bíblico adventista, t. 5, pp. 378, 379.

3. Ibíd.

4. Ibíd.

5. Ibíd., t. 7, p. 213.

tenemos una paz de ese tipo no habránada que se interponga entre nosotros yDios. Confiaremos en la gracia divina quehemos adquirido mediante la fe en Cristo.Esto no implica que nuestros problemas osufrimientos desaparecerán. Lo que signi-fica es que aunque experimentemos difi-cultades, encontraremos paz en el hechode que Jesús permanece a nuestro lado.Aun cuando éramos pecadores, Cristomurió por nosotros. ¡Qué amor! Cuandoaceptamos ese amor, somos justificadospor su sangre y salvados de la muerte eter-na. Somos reconciliados con Dios. Luegopodremos regocijarnos confiadamente por-que hacemos las paces con él medianteJesucristo (Rom. 5: 9-11).

En paz con los demás (Heb. 12: 14;Rom. 12: 9-21; Sal. 34: 12-16)

La relación de paz que sostengamoscon Dios mediante Jesús, se reflejará ennuestra relación con los demás. De allíque Pablo nos aconseje a que busquemos«la paz con todos» (Heb. 12: 14). Cuandobuscamos la paz bajo la dirección del Espí -ritu Santo, nuestro amor estará desprovis-to de hipocresía; daremos el primer lugara los demás; serviremos voluntariamente alSeñor; supliremos las necesidades de losdemás (Rom. 12: 9-13).

Una vez que nos reconciliemos conDios, parecerá que enfrentamos más prue-bas; y en nuestra debilidad humana nosinclinaremos a maldecir a quienes nos cau-

La paz de Cristo no es una virtud estática. Es un poder activo.


Hacia una paz perfecta

40Esther Synthia Murali, Chennai, India

Lunes18 de enero

TESTIMONIOMateo 11: 28, 29

El mundo está cansado y cargado de penas,creámoslo o no. La carga más pesada quellevamos es la del pecado. Si tuviéramosque llevarla sin ayuda alguna, nos aplasta-ría. Sin embargo, hay alguien que está dis-puesto a quitar esa pesada carga de nues-tros hombros. «Jesús es nuestro amigo;

todo el cielo está interesado en nuestro bie-nestar; y nuestra ansiedad y temor apesa-dumbran al Santo Espíritu de Dios. […]No es su propósito sacar a su pueblo delmundo de pecado e iniquidad, sino quenos señala un refugio siempre seguro.Invita a los cansados y agobiados».1 «Es sudesignio dar paz y descanso a quienes acu-dan a él en busca del pan de vida».2 «El sem-blante cambia. Cristo que habita en el cora-zón, brilla en el rostro de aquellos que leaman y guardan sus mandamientos. La ver-dad queda escrita allí. Se revela la dulce pazdel cielo. Se expresan allí una bondad habi-tual, un amor más que humano».3

«La religión de Cristo significa más que elperdón del pecado; significa la extirpaciónde nuestros pecados y el henchimiento delvacío con las gracias del Espíritu Santo.Sig nifica iluminación divina, regocijo enDios, Significa un corazón despojado delyo y bendecido con la presencia perma-nente de Cristo. Cuando Cristo reina en elalma, hay pureza, libertad del pecado. Secumple en la vida la gloria, la plenitud, latotalidad del plan evangélico. La acepta-ción del Salvador produce un resplandorde perfecta paz, y amor perfecto, de perfec-ta seguridad. La belleza y fragancia del ca -rácter de Cristo, reveladas en la vida, testi-fican de que Dios ha enviado ciertamente asu Hijo al mundo, para ser su Salvador».4

PARA COMENTAR1. ¿Qué es lo que hace que un cristiano

lleve fruto? ¿Por qué es que a menudollevamos frutos no santificados?

2. Compara los símbolos de la cruz y elyugo. ¿Por qué será que no podemosseguir a Cristo si no llevamos su yugo ycargamos su cruz?

____________1. Patriarcas y profetas, p. 266.2. El camino a Cristo, p. 71.3. Palabras de vida del gran Maestro, p. 74.4. Ibíd., pp. 345, 346.

«Jesús es nuestro amigo; todo el cielo está interesadoen nuestro bienestar».


Reconciliación y paz

41Lamm B. Fanwar, Puna, India

Martes19 de enero

EVIDENCIA

Romanos 5: 1-11

Al concluir la creación del mundo,Dios vio que todo «era bueno en granmanera» (Gén. 1: 31). La paz absoluta rei-naba en el mundo. Los seres humanos es -taban en constante comunión con Dios.Sin embargo, aquella paz no duró mucho.Después que la serpiente actuó, la paz fuesustituida por el antagonismo y la separa-ción (Isa. 59: 2).

El Dios de paz a quien adoramos, nofue sorprendido ni estaba poco preparado.

Él había formula un plan desde elmismo momento de la fundación delmundo (Efe. 1: 3, 4; 1 Ped. 1: 17-20; Apoc.13: 8). La obra de restaurarnos a la rela-ción original de paz constituyó su priori-dad original. Aun cuando éramos pecado-res, Cristo murió por nosotros (Rom. 5: 8).Su muerte en la cruz, no solamente nosredime sino que nos reconcilia con Dios.

Cuando Dios nos reconcilia con él,espera que también nos reconciliemos connuestros semejantes (Rom. 2: 10). No esposible que nos reconciliemos con Dios ymostremos el fruto de la paz si mostramosenemistad entre nosotros. Lee Juan 4: 11,20, 21. Allí encontramos un poderosoman dato de parte de Dios. Hebreos 12: 14presenta el concepto en forma clara y di -recta: «Busquen la paz con todos, y la san-tidad, sin la cual nadie verá al Señor».Cuando existe una reconciliación entreDios y los seres humanos, así como entreestos últimos, el fruto de la paz se pondráde manifiesto.

Jesús reveló otro aspecto de la paz, quecompleta la descripción de ese fruto. LeeJuan 14: 27. La paz es de Dios. La paz pro-viene de Dios. La paz es un don que Diosnos concede. La paz surge en nuestrasvidas únicamente cuando estamos en lapresencia y en la santidad de Dios (Mat.11: 28).

PARA COMENTAR1. ¿Por qué Dios siempre insiste en el

componente humano como una con-dición para las relaciones espirituales?

2. ¿Cuán duradera es la paz de Dios?¿Cuán efectiva es la misma?

La obra de restaurarnos a la relación original de paz constituyó su prioridad original.


Una vida rebosante de paz

42Stenoy Stephenson, Puna, India


CÓMO ACTUARMateo 11: 28, 29; Hebreos 12:14;Santiago 2: 14-26

No es fácil vivir una vida llena de pazpor uno mismo. Sin embargo, cualquiercreyente puede lograr la paz plena al afe-rrarse a la Fuente de la paz. Los siguientespasos pueden ayudarte:

• AAccttúúaa ppoorr ffee.. Una fe dinámica es funda-mental con el fin de afrontar los proble-mas de la vida. Cuando Jesús les pidió alos discípulos que se dirigieran a la otraorilla del Mar de Galilea, ellos comenza-ron la travesía de manera obediente. Sinembargo, cuando la furia de la naturalezalos puso a prueba ellos fracasaron al noejercer su fe. Sin embargo, Jesús vino ensu ayuda, no sin antes decirles «Hombresde poca fe —les contestó—, ¿por qué tie-nen tanto miedo?» (Mat. 8: 26). Esta pre-gunta nos enseña que en situaciones difí-

ciles, no tenemos por qué dejar de actuarpor fe. Por el contrario, necesitamos ver-daderamente ejercer fe. Lee Santiago2: 14-26. Aquí aprendemos que la fe sinobras es muerta (vers. 26). Por tanto,actúa por fe en todo momento con el finde vivir en paz.

• CCoonnffííaa eenn aaqquueell qquuee lllleevvóó ttuuss ccaarrggaass.. Siestás llevando una pesada carga yalguien te ofrece ayuda, qué feliz y alivia-do o aliviada te vas a sentir. Lo mismosucede en la vida cristiana. Llevamosuna pesada carga: la del pecado. Sinembargo, Jesús ofrece llevar todo el pesode la misma (Mat. 11: 28, 29). Su yugose refiere a su estilo de vida.* Y ese esti-lo de vida implicaba someter su volun-tad a la voluntad de su Padre.

• PPoonn eenn pprrááccttiiccaa llaa ppaazz.. Practicar la paz querecibimos de Jesús es un proceso de todala vida. Es por eso que el apóstol Pablonos dice: «Busquen la paz con todos, y lasantidad, sin la cual nadie verá al Señor»(Hebreos 12: 14). Con el fin de disfrutaruna vida llena de paz, necesitamos poner-la en práctica con nuestros semejantes através de palabras y acciones.

____________*Ver Comentario bíblico adventista, t. 5.

Si estás llevando una pesadacarga y alguien te ofreceayuda, qué feliz y aliviado o aliviada, te vas a sentir.


Sin Cristo no hay paz

43Benji Stephen, Puna, India

Jueves21 de enero

OPINIÓNColosenses 3: 13-15

Sin Cristo no puede haber paz en elmundo. La gente se preocupa, espera, duday codicia. Desea. Necesita. Exige. Sin la di -rección divina, permite que se arraiguen lasnecesidades y las esperanzas espurias queno son de Dios. Luego se quejan de él ydudan cuando sus oraciones egoístas noson contestadas. El resultado es una falta depaz. Para resolver este problema, la gente amenudo intenta crear una falsa paz utili-zando el alcohol, las drogas, el sexo o cual-quier otra adicción. Algunas veces niegansus pecados y rechazan la convicción delEspíritu Santo. Dejan de sentir el toque co -rrector de Dios en sus corazones. Por tanto,son abandonados a sus propios deseos.

La paz verdadera únicamente puede serobtenida al hacer la voluntad de Dios. Lapaz verdadera es un don de Dios, que serecibe mediante Cristo. Cuando Dios moraen tu vida, la paz verdadera siempre serátuya. Tenemos un maravilloso amigo quesiempre se preocupa por nosotros, que noscuida. Debido a ello no tenemos nada porqué preocuparnos.

La Biblia dice que Dios es un Dios depaz (Heb. 13: 20). Nada lo perturba o inco-moda. Ninguna tormenta terrenal puedeturbar la santa calma de su presencia. Siem -pre permanece tranquilo. Contempla el fin

desde el principio mediante una visión per-fecta. ¿Puedes acaso imaginar que Dios seencuentre angustiado? ¡Imposible! No exis-te problema alguno para el cual él no tengauna solución. ¡Nada es demasiado difícil oimposible para el Señor! (Jer. 32: 17). ElHijo de Dios es llamado «Príncipe de paz»(Isa. 9: 6). «Y la paz de Dios, que sobrepa-sa todo entendimiento, cuidará sus corazo-

nes y sus pensamientos en Cristo Jesús»(Fil. 4: 7). Una paz de este tipo es uno delos ricos dones de su amor. Todos nosotrospodremos tenerla si lo buscamos y la prac-ticamos.

PARA COMENTAR1. Dios siempre disfruta de paz. Con templa

el fin desde el principio mediante unavisión perfecta. Pero la paz no pre valeceen todo lugar del ámbito mundial. EnOrissa, India, los cristianos están siendoperseguidos. Piensas que la paz comoun fruto del Espíritu podría ponerse demanifiesto en lugares como Orissa? Mo -tiva tu respuesta.

2. ¿Qué podrías hacer en lo personal, ocomo miembro de tu familia, si recono-ces que no existe la paz en tu hogar?

Dios es un Dios de paz.


Una paz que sobrepasa todo entendimiento

44René Coffee, Gobles, Míchigan, EE.UU.

Viernes22 de enero

EXPLORACIÓNFilipenses 4: 7

PARA CONCLUIRMientras que el mundo nos estimula a

buscar continuamente actividades excitan-tes, Jesús nos invita a que nos apartemos adisfrutar de su paz. La paz, como cual-quier otro fruto del Espíritu, únicamentese hace posible cuando somos guiados porel Espíritu Santo. La paz no depende denuestro entorno o circunstancias, sinode permitirle a Dios que controle todo as -pecto de nuestras vidas.

CONSIDERA• Dibujar o modelar un símbolo que re -presente el concepto de la paz.

• Tomar algunas fotos de escenas que ilus-tren el concepto de la paz.

• Investigar los efectos del estrés o la ausen-cia de paz, en el organismo.

• Buscar en la sección de gozo y paz delHimnario Adventista para escoger algu-

nos himnos que hablen del tema. Cantao repite las palabras de dichos himnos.

• Compartir con un amigo o compañerode trabajo la forma en que Dios te hadado paz en estos tiempos inciertos.

• Identificar algún momento del pasadocuando no disfrutabas de paz. Analiza larazón para la ausencia de la paz. Con si -dera luego, el momento o período cuan-do disfrutaste de una paz plena. ¿Quépuedes hacer con el fin de vivir una vidallena de paz durante la semana próxima?

• Pasar al menos treinta minutos en con-tacto con la naturaleza. Identifica laforma en que Dios utiliza ese segundolibro para proporcionarnos un sentidode paz y bienestar.

PARA CONECTAR� El camino a Cristo, cap. 3.� Luis Palau, Una vida de alta definición,

«Un don gratuito».� W. Tozer, The Best of A. W. Tozer, pp. 149-

152.



El fruto del Espíritu es paciencia

«Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido».

Hebreos 10: 36


¡Tengamos paciencia!

47André B. Henry, Durham, Carolina del Norte, EE. UU.

Sábado23 de enero

INTRODUCCIÓNÉxodo 34: 6; Isaías 40: 31; Habacuc 2: 3; 1 Corintios 13:4;Hebreos 12: 1, 2; Apocalipsis 14: 12

«¡Lo quiero y lo quiero ahora!» «¡Dateprisa porque no puedo esperar todo el día!»Aun los niños pequeños utilizan estas ex -presiones. Esas son las palabras que escu-chamos, pensamos o hablamos con fre-cuencia a diario. La paciencia no parece seruna cualidad de nuestra generación, quizáporque hemos crecido utilizando cerealesinstantáneos, hornos electrónicos, mensa-jes de texto y teléfonos celulares. No esque haya algo malo respecto al ahorro detiempo relacionado con lo anterior. Cuan dopedimos algo por lo general deseamos quenos lo entreguen de inmediato: ya seaque venga de nuestros padres, nuestrosprofesores o aun de parte de Dios. Debidoa él posee todas las respuestas y todo re -curso, el debería conseguirlo todo con granrapidez. Deseamos nuestras respuestas dela misma forma en que él cerró la bocade los leones cuando Daniel fue lanzado alfoso; o cuando entró al horno ardientejunto a los jóvenes hebreos, Pensándolobien. ¿Necesitamos que se nos conteste tanrápido, o es que acaso aquellas rápidas res-puestas eran las apropiadas para aquellascircunstancias?

¿Habremos olvidado los siguientes tex-tos?: «Pero los que confían en el Señor re -novarán sus fuerzas» (Isa. 40:31). «Aquíestá la paciencia de los santos» (Apoc.14: 12). «El amor todo lo sufre» (1 Cor.13: 4) «Aunque parezca tardar, espérala;porque sin falta vendrá» (Hab. 2: 3). Dioshizo que Moisés aprendiera a cuidar ovejas

porque sabía que iba a necesitar aquellaexperiencia de cuarenta años para enfren-tar los desafíos de una peregrinación por eldesierto dirigiendo a los hijos de Israel.Pasó ante Moisés y proclamó que él era«clemente y compasivo, lento para la ira ygrande en amor y fidelidad» (Éxo. 34: 6).El Señor se mostró misericordioso y pa -ciente con los hijos de Israel durante la tra-

vesía hacia Canaán. También fue pacientecon David en su «deambular», hasta queeventualmente aquel rey de Israel fue lla-mado un hombre «conforme a mi cora-zón» (Hech. 13: 22).

Cristo nos mostró por su ejemplo quepodemos ser semejantes al Padre. «Corra -mos con perseverancia la carrera que tene-mos por delante. Fijemos la mirada enJesús, el iniciador y perfeccionador denuestra fe, quien por el gozo que le espe-raba, soportó la cruz» (Heb. 12: 1). Alestudiar la lección de esta semana intentaencontrar respuestas para las siguientespreguntas.

PARA COMENTAR1. ¿Por qué como cristianos en muchas

ocasiones carecemos de paciencia?2. ¿Qué plan o determinación necesitamos

con el fin de cultivar el fruto del Espí -ritu?

3. ¿Podemos asumir que algún día se ago-tarán la paciencia la misericordia deDios?

Cuando pedimos algo deseamos que nos lo entreguen de inmediato.


La salvación y la paciencia

48

Domingo24 de enero

LOGOS

Éxodo 34: 6; Marcos 4: 26-29; Lucas 21:16-19; Romanos 5: 3; 15: 5;Efesios 4: 1, 2; 2 Corintios 6: 3-10;Colosenses 1: 9-11; Santiago 1: 2-4

Salvando tu alma (Luc. 21: 19)Jesús mencionó las dificultades, pruebas

y tribulaciones que los discípulos habrían deenfrentar antes de su regreso a la tierra: «Uste -des serán traicionados aun por sus padres,hermanos, parientes y amigos, y a algunos deustedes se les dará muerte. Todo el mundolos odiará por causa de mi nombre. Pero nose perderá ni un solo cabello de su cabeza.Si se mantienen firmes, se salvarán» (Luc.21: 16-19).

Para el cristiano, la paciencia no es úni-camente un requisito para las relacioneshumanas llevaderas; es la diferencia entre lavida y la muerte. Nuestra seguridad eternaestá salvaguardada por la paciencia. La pa -ciencia se define como la posesión o la de -mostración de una tranquila perseveranciaaun bajo alguna prueba o molestia. As imis -mo se compara con la tolerancia, la ternura ysoportar calladamente cualquier provoca-ción. Es la capacidad para esperar tranquila-mente cualquier resultado.1

Esto nos proporciona una abarcantevisión de lo que significa ser paciente. Esta esuna virtud que Cristo exalta como un ele-mento preservador de la experiencia cristia-na. Se requiere paciencia para soportar lasdificultades y reveses así como para mante-ner la confianza en la fidelidad divina. Serequiere paciencia para soportar a los opre-sores, abusadores y perseguidores, especial-

mente cuando somos las víctimas. Se necesi-ta paciencia para permanecer confiados ytranquilos respecto al futuro, aun cuandopareciera que hemos sido abandonados comoresultado de mantener en alto la Palabra deDios (1 Tim. 6: 6). Hace falta mucha pacien-cia cuando hemos sido injuriados o privadosde lo que legalmente nos pertenece. Pa cien -cia para poner en las manos de Dios nuestrosderechos, confiando que en su momento élnos devolverá lo que es nuestro. Una vidasantificada, una vida cristiana, implica pa -ciencia.

El terreno apropiado (Rom. 5: 3)La paciencia únicamente puede ser culti-

vada en el terreno apropiado. El mismo debeposeer abundancia de determinados elemen-tos: inconvenientes, molestias, injusticias,opresión, persecución y tribulación. Esosnutrientes deben ser absorbidos en presenciade un agente que es esencial para el creci-miento de la paciencia. Nos referimos a laperseverancia. Debemos aprender a soportar,a tolerar, a sufrir, a esperar. A. B. Simpson,un predicador del siglo XIX dijo: «Amados,¿han pensado que algún día no tendrán quiéno qué los ponga a prueba, o que los insulte?En el cielo no habrá oportunidad alguna paraadquirir o demostrar paciencia, para sopor-tar y sufrir. Si ustedes desean practicar algu-nas de estas cosas, debe ser aquí».3

La clave para cultivar la paciencia(2 Cor. 6: 3-10; Col. 1: 9-11)

Thomas A. Kempis declaró: «Quien úni-camente está dispuesto a sufrir lo que consi-dere apropiado, y a escoger cuándo, no mere-ce ser considerado como alguien paciente.


49Marc Chambers, Mandeville, Jamaica

(Rom. 8: 24, 25; 15: 4; Heb. 6: 11, 12; 10: 36,37; 12: 1-8; Rev. 14: 12)..

Únicamente aquellos que esperan enDios con paciencia y esperanza encontraránseguridad para sus almas. Quienes «perseve-ren hasta el fin serán salvos» (Mat. 24: 13).«Pero los que confían en el Señor renovaránsus fuerzas […] correrán y no se fatigarán,caminarán y no se cansarán» (Isa. 40: 31).Jesús dijo que quienes «se mantengan fir-mes, se salvarán» (Luc. 21: 19).

PARA COMENTAR1. ¿Cómo has estado reaccionando ante las

circunstancias difíciles y ante la gente, entu diario vivir?

2. ¿Posees todo aquello que se necesita paraser un paciente y humilde discípulo deJesús?

3. ¿Cuán dispuesto o dispuesta estás para em -plear los ingredientes y las oportunidadesque se te han concedido con el fin de desa-rrollar tu paciencia, fe y esperanza en Dios?

4. ¿Cómo podrías conseguir un buen terrenopara que la paciencia prospere?

5. ¿Cómo puede alguien desarrollar una acti-tud paciente?

____________

1. Gran diccionario del español actual.

2. Ilustraciones para sermones en: www.sermonillustrations.

com/a-z/p/patience.htm. Consultado el 29 de septiembre

del 2008.

3. Ibíd.

Quien es de veras paciente no le ruega aquien lo atormenta, ya sea su superior, supar, o alguien por debajo de él […] Él loaceptará todo como proveniente de la manode Dios y lo tendrá por ganancia, sin impor-tar quién, cuánto o cuán a menudo se lehaga daño.

En vista de la anterior declaración, con-sidera lo que Pablo les dijo en sus cartas a loscreyentes de Corinto y Colosas respecto acultivar la paciencia (2 Cor. 6: 3-10; Col.1: 9-11).

Una total asimilación (Sant. 1: 2-4)Dios les concede a todos los cristianos

oportunidades para desarrollar la paciencia.Él provee el terreno apropiado (las circuns-tancias), así como los nutrientes (las di fi cul -tades). Luego, pide que las comamos (reci-bamos o aceptemos) y las asimilemos paraque desarrollemos la paciencia. El agente de ladigestión es la persistencia. Debemos apren-der a esperar hasta que Dios se convenza deque su objetivo (permitir que las dificultadesnos afecten) ha sido alcanzado. Jesús declaróque nuestras almas se nutren de la paciencia.Dios nos ha manifestado muchas promesas,todas ellas se convierten en algo verdaderomediante Jesús (2 Cor. 1: 20). Heredamosesas promesas mediante la paciencia y la fe

El agente de la digestión es la persistencia.


La paciencia y las pruebas

50Patricia Haakmat, Mandeville, Jamaica

Lunes25 de enero

TESTIMONIOSantiago 1: 2-4; 12-16; Filipenses 4: 6, 7

«No es necesario caer bajo la tentación,porque la tentación nos sobreviene paraprobar nuestra fe. Y la prueba de nuestra feobra paciencia, y no mal humor ni murmu-ración. Si ponemos nuestra confianza enJesús, él nos protegerá en todo tiempo y

será nuestro baluarte y escudo. Debemosaprender lecciones valiosas de nuestrasprue bas […] Cuando hablamos de desáni-mo y lobreguez, Satanás escucha con enor-me gozo, porque le agrada saber que nos hapuesto en servidumbre. Satanás no puedeleer nuestros pensamientos, pero puede vernuestras acciones y escuchar nuestras pala-bras; y gracias a su largo conocimiento de lahumanidad, puede dar forma a sus tenta-ciones para sacar ventaja de los puntos dé -biles de nuestro carácter».1

«Algunos de nosotros […] somos pro-pensos a pensar y a actuar como un relám-pago; pero nadie debe pensar que no puedeaprender a ser paciente. La paciencia es unaplanta que crecerá rápidamente si se lacuida con esmero. Al conocernos entera-mente y combinar la gracia de Dios con unafirme determinación de parte nuestra, po -dremos vencer y lograr la perfección entodo, sin carecer de nada. La paciencia pue -de derramar el bálsamo de paz y amor en laexperiencia hogareña.2

Moisés debía adquirir paciencia, domi-nando sus pasiones. Debía aprender a obe-decer. Su corazón debía estar en armoníacon Dios antes de que pudiera ser un maes-tro en Israel. Mediante su propia experien-cia debía ser adiestrado.

«El ser humano se habría evitado eselargo periodo de trabajo y oscuridad, porconsiderarlo como una gran pérdida detiempo. Pero la Sabiduría infinita determinóque el que había de ser el caudillo de supueblo pasara cuarenta años haciendo elhumilde trabajo de pastor. Así desarrollóhábitos de atento cuidado, olvido de símismo y tierna solicitud por su rebaño, quele prepararon para ser el compasivo y pa -ciente pastor de Israel. Ninguna ventaja quela educación o la cultura humanas pudiesenotorgar, podría haber substituido a esta ex -periencia».3

La paciencia de Jesús se puso de mani-fiesto cuando todo el abuso que recibió nofue motivo para que saliera de sus labios niel más mínimo murmullo.4

PARA COMENTAR1. ¿Cómo pueden los jóvenes y los mayo-

res adquirir paciencia los unos de losotros?

2. ¿Será posible evitar las tentaciones y aunadquirir paciencia?

3. ¿Cómo podemos mantenernos gozososen medio de la tentación?

_____________

1. A fin de conocerle, p. 281.

2. La maravillosa gracia de Dios, p. 97.

3. Patriarcas y profetas, pp. 225, 266..


«La paciencia es una plantaque crecerá rápidamente si se la cuida con esmero».


Tomad mi yugo

51Beverly Henry, Mandeville, Jamaica

Martes26 de enero

EVIDENCIAGénesis 6: 3; Números 12: 3; Salmo 37;Mateo 11: 29; Hebreos 10: 36

¿Puedes imaginarte portando un yugo li -teral en tu cuello y que te une a alguien quees más lento, más alto o más bajo que tú?Jesús dijo: «Aprendan de mí, porque soymanso y humilde de corazón, y encontrarándescanso para sus almas» (Mat. 11: 29). Deesa forma sugería que él era un ejemplo de lo

que significaba ser paciente. La Biblia nospresenta varios ejemplos de lo paciente quepuede ser Dios.

Adán y Eva desobedecieron la orden divi-na y comieron del fruto prohibido. Si lo hacían,iban a morir. Sin embargo, Adán murió 930años después. Seis mil años después de lacaída del hombre, Cristo continúa suplicandoque nos arrepintamos y aceptemos su salva-ción.

Noé advirtió a los antediluvianos de uninminente diluvio que cubriría la tierra. Peroellos se burlaron del profeta. Después de todo,jamás había llovido. Noé predicó durante 120años, repitiendo pacientemente la adverten-cia y la forma de salvación que había sidohabilitada.

Moisés aprendió a ser paciente mientraspastoreaba ovejas. Eso lo preparó para ser «elcompasivo y paciente pastor de Israel».1

David nos aconseja en el Salmo 37: 7 queconfiemos en Dios y que «esperemos en élcon paciencia», Esto sugiere que a pesar delos desafíos que enfrentamos, la respuestaque deseamos puede demorarse por lo quedebemos ser pacientes. Pero al final, Dios nosconcederá todo lo que anhelamos. Elena G.de White nos recuerda que debemos ser pa -cientes, porque Dios «tiene un canto que en -señarnos, y cuando lo hayamos aprendidoentre las sombras de la aflicción, podremoscantarlo perpetuamente».2

PARA COMENTAR1. ¿Cuáles son algunas de las formas en que

podemos demostrar paciencia en elhogar, en la escuela o en nuestro trabajo?

2. ¿Por qué parece más fácil ser pacientecon las personas que no son miembrosde nuestra familia?

3. ¿Cómo muestra Cristo su preocupaciónpor salvarnos, así como su voluntad parasoportarnos a pesar de nuestra increduli-dad?

4. ¿Cómo podemos alcanzar lo que Diosdesea que logremos respecto a la pacien-cia?

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2. El ministerio de curación, p. 374.

Seis mil años después de la caída del hombre, Cristo continúa suplicando que nos arrepintamos y aceptemos su salvación.


Alcanzando la paciencia

52Mark Henry, Phillipsburgh, Nueva Jersey, EE. UU.


CÓMO ACTUARGénesis 6: 3; Éxodo 34: 6; Marcos 4: 26-29; Romanos 15: 5;Efesios 4: 1, 2; Hebreos 10: 36;Santiago 1: 2-4

En Gálatas 5: 22 la paciencia aparececolocada entre la paz y la bondad. ¿Seráesto una coincidencia? ¿O será una rela-ción progresiva que conduce de uno alotro concepto? Con el fin de ser paciente¿deberíamos estar en paz con nosotrosmismo y con los demás?

A veces nuestra impaciencia se echa dever no solamente en el trato con los demássino con nosotros mismos. En tonces, ¿cómopodemos ejercer esa pa ciencia con los demásy con nosotros?• OOrraannddoo..Hazle conocer tus deseos a Dios.Lee los siguientes textos: Salmo 62: 8;Filipenses 4: 6; Santiago 1: 6, 7. Recuer -da las oraciones de Daniel, José, Ester,Ruth y Juan.

• OOrraa yy eessttuuddiiaa llaa BBiibblliiaa..La Biblia testifica deCristo y nos enseña cómo obtener la vidaeterna (Juan 5: 39). Mateo 11: 28, 29 nosrecuerda que en Cristo podemos hallardescanso. Mientras esperamos la venidadel Señor para que nos libre de todos lascargas de este mundo podemos recordaralgunos pasajes: Isaías 9: 2-7; 53; Salmo22; Mateo 24; y 2 Tesalonicenses 1: 3-2: 12.Permite que estos pasajes te consuelenmientras esperas pacientemente la segun-da venida. Lee también respecto a la pa -

ciencia y el sufrimiento de aquellos queaprendieron a ser pacientes gracias a laspruebas.

• MMeeddiittaa eenn llaa vviiddaa ddee CCrriissttoo.. Piensa en lasocasiones cuando él mostró una granpaciencia y perseverancia. También leeacerca de las vidas de otros personajesque mostraron una gran paciencia.

• ««LLaa vviiddaa eessppiirriittuuaall ssee ffoorrttaalleeccee ccoonn eell ccoonn--fflliiccttoo.. Las pruebas, cuando se las sobre-lleva bien, desarrollan la firmeza de ca -rácter y las preciosas gracias espiritua-les».* Jesús afirmó: «No se angustien.Confíen en Dios, y confíen también enmí. En el hogar de mi Padre hay muchasviviendas; si no fuera así, ya se lo habríadicho a ustedes. Voy a prepararles unlugar. Y si me voy y se lo preparo, vendrépara llevármelos conmigo. Así ustedesestarán donde yo esté» (Juan 14:1-3).

Podemos adquirir paciencia al estudiarla vida de Cristo, adoptando sus costum-bres y recordando su misericordia hacianosotros: «Aun cuando éramos pecadores,Cristo murió por nosotros» (Rom. 5: 8).

PARA COMENTAR1. ¿Cómo debemos orar con el fin de ad -

quirir paciencia?2. ¿Cómo nos pueden ayudar otras lectu-

ras, fuera de la Biblia, en nuestra bús-queda de paciencia?

3. ¿Sería conveniente que meditemos comomonjes o monjas con el fin de desarro-llar un carácter paciente? Motiva tu res-puesta.

____________

* Palabras de vida del gran Maestro, p. 42.

«Las pruebas desarrollan la firmeza de carácter».


Señor ¡ayúdame a ser paciente!

53Carl Henry, Biloxi, Misisipi, EE. UU.

Jueves28 de enero

OPINIÓNJob 38-42; Isaías 40: 31; Romanos 8: 28

Quizá pensemos que la paciencia es paracierto tipo de personas. A lo mejor personaspobres que se han acostumbrado a su situa-ción y que por tanto saben «cómo esperar enel Señor». ¿Entendemos acaso las pruebas dequienes están afectados por alguna graveenfermedad, mientras sus familias sufren conresignación?

He oído decir a algunas personas en formade chiste lo siguiente: «La paciencia es unavirtud, pero demasiada paciencia puede indi-gestarte». Me pregunto si algunos de noso-tros, que piensa de esa forma, no podría sen-tirse desencantado con los demás o consigomismo. También podemos decir al igual queJob, que «aunque me mate seguiré confiandoen él» (Job 13: 15). ¿Creemos verdaderamen-te que a los que Dios aman «todas las cosaslos ayudan a bien» (Rom. 8: 28) y que pode-mos confiar que él hará lo que más conviene(Job 38-42)?

¿Por qué cuestionamos a Dios cuandohay personas buenas que sufren, cuando hay

niños que son maltratados, o cuando ungrupo de jóvenes muere en algún accidente?¿Acaso la respuesta será tan sencilla comopensar que vivimos en un mundo afectadopor el pecado? Sin embargo, en el mismo ins-tante que preguntamos ¿por qué?, parecieraque se necesita una respuesta más profunda ymás abarcante.

No siempre sabemos por qué es necesa-rio que suframos calamidades y desafíos. Noentendemos la razón de los tsunamis, hura-canes y tifones que asolan ciudades y países,destruyendo hogares y vidas. Sin embargo,podemos vivir confiando que Dios cuida denosotros y se preocupa por cada uno. Po de -mos estudiar la Biblia, un libro que encierranumerosos ejemplos y enseñanzas que nospermiten entender el carácter compasivo deDios.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo podemos aconsejarle que sean

pacientes a quienes enfrentan circuns-tancias adversas?

2. ¿Crees que la paciencia es una virtud?Explícate.

3. ¿Crees que Dios realmente se preocupapor los millones de personas que sufrenpor diversos motivos? ¿Por qué? ¿Porqué no?

¿Por qué cuestionamos a Dios?


¡Dame paciencia!

54Bárbara Manspeaker, Luray, Virginia, EE. UU.

Viernes29 de enero

EXPLORACIÓNApocalipsis 14: 12

PARA CONCLUIRMuy a menudo nuestras oraciones in -

cluyen la idea, aunque no las palabras:«Señor dame paciencia, y que sea pronto».Aprender a ser paciente en cualquier situa-ción es la obra de toda la vida. Cuandopiensas que dominas el tema, ¡bang! La irase desborda, la frustración se pone de ma -nifiesto y surge la depresión. «Lo hice otravez. Volví a lo mismo. Nunca voy a apren-der!» ¡Pero olvidamos lo paciente que esDios! Su nivel de paciencia es algo «fuerade serie». Él anhela poder ayudarnos. Loúnico que debemos hacer es pedir suayuda. No una vez, dos o tres, sino cadavez que Satanás no presente una zancadi-lla. Cuando cedas ante la impaciencia pí -dele a Jesús que te levante y te ayude aseguir luchando.

CONSIDERA• Hacer una lista de las situaciones que más

te incomodan. Pídele a Jesús que te ayudea encontrar la mejor solución para enfren-

tar la ira, la frustración o cualquier otrosentimiento negativo.

• Dramatizar en unión a un amigo o amiga,situaciones en las que sientes que tu pa -ciencia es puesta a prueba. Luego discutecómo podrías manejarlas de forma crea -tiva.

• Investigar cuáles personajes bíblicos trata-ron de hacer las cosas a su manera, en vezde esperar pacientemente la intervencióndel Señor.

• Confeccionar un colage de situaciones opersonas que demostraron actitudes opues -tas. De un lado, coloca aquellos o aquellasque no ejercieron paciencia; del otro laspersonas o situaciones que fueron un ejem-plo de paciencia.

• Memorizar algún himno o corito que pue-das cantar en los momentos que te parez-ca estás perdiendo la paciencia.

• Observar las costumbres de algunas aves.¿Cómo se comportan cuando están co -mien do? ¿Cómo actúan cuando están ani-dando o construyendo un nido?

PARA CONECTAR� Proverbios 14: 29; 16: 32; 19: 11; 25: 15.� Charles Swindoll, Visión para vivir.


Lección 630 de enero al 6 de febrero

El fruto del Espíritu es bondad

«Por lo tanto, como escogidos de Dios, santos y amados, revístanse de afecto entrañable y de bondad, humildad, amabilidad y paciencia».

Colosenses 3: 12


Para bien o para mal

57Charles Nyaranga, Nairobi, Kenia

Sábado30 de enero

INTRODUCCIÓNProverbios 15: 1-5; Colosenses 3: 12-14

Numerosas historias relatan cómo actosde bondad han salvado las vidas de muchos.Charles Nyaranga experimentó eso mismoen carne propia. Charles pasó un veranocom portando en algunos poblados en el in -terior de Noruega, mientras estudiaba en elSpicer College. Mientras iba de puerta en

puerta en el Valle Halingdal presentando suslibros, se encontró con alguien llamadoAmund Granli. Este sujeto le gritó a distan-cia «No creo en Dios, nai tak». Nai tak signi-fica: «no, gracias». Dicha expresión puedeser una señal de desagrado, especialmentepara un vendedor que va de puerta en puer-ta; o algo todavía peor para alguien de teznegra como Charles. El joven se detuvo en elportón, y de forma inocente le dijo en suchapurreado noruego: «Por favor, concéda-me un minuto para decirle qué me hizo venirdesde mi hogar en Kenia hasta su casa».

Charles nos cuenta que mucha gente enNoruega no cree en Dios. Y que su respuestafue algo significativo. En Proverbios 15 lee-mos que una «blanda respuesta» quita la

ira. Luego el sabio continúa diciendo en elversículo 4: «La lengua que brinda consueloes árbol de vida». Cualquier palabra o actoque impacte la vida de alguien tendrá unefecto positivo o negativo.

El Sr. Granli luego le confesó a Charlesque le había permitido entrar a su casa debi-do a la cortés respuesta que el joven le dio.Ellos conversaron por algunos minutos. ElSr. Granli compró algunos libros, e incluso lemostró a Charles algunas técnicas para tocarla guitarra.

Es un privilegio alegrar la vida de algunaspersonas mediante actos y palabras bondado-sas. La bondad une a los seres humanos conel cielo. Incluso fomenta la paz. El pueblo deDios debe propiciar la paz siendo bondadoso.Pablo nos dice en Colosenses 3: 12 que debe-mos revestirnos de bondad de la misma formaen que al iniciar el día nos ponemos ropa.Cualquiera que haya sido llamado a la salva-ción eterna es también llamado a la bondad.Al estudiar la lección de esta semana, piensaen los actos de bondad que Jesús te llama arealizar. Asegúrate de actuar, además de pen-sar en ellos. Sé asimismo, bondadoso.

PARA COMENTAR¿Cómo te han impactado las palabras bon-dadosas que has expresado o escuchado?

Asegúrate de actuar.


Fortaleza o debilidad

58

Domingo31 de enero

LOGOS2 Samuel 9: 1-13; Proverbios 15: 1-5; 25: 11-15; Mateo 5: 43-48; Lucas 6: 35, 38; Efesios 4: 32; Colosenses 3: 12-14

Una mujer le daba quejas de continuo asu marido respecto al desaliño de su vecina.A través de la ventana podía observar unacantidad de ropa sucia tendida en el portal dela casa de al lado. Una mañana, aquella damadirigió la mirada hacia la casa vecina y se sor-prendió al ver lo limpia que se notaba la ropatendida en la baranda de la vecina.

—¡Mira! ¡Fíjate! —le dijo a su esposo.Parece que aprendieron a lavar bien la ropa.¿Quién los enseñaría?

El caballero se sonrió y le susurró a suesposa:

—Me levanté temprano esta mañana ylimpié nuestras ventanas.

Un rasgo noble (Col. 3: 12-14)En nuestra epoca muchos consideran que

ser bondadoso es una señal de debilidad. Sinembargo, la Biblia nos enseña que eso no escierto. La bondad es un rasgo que implica no -bleza; es amor en acción, porque el amor nopuede existir por mucho tiempo sin manifes-tarse. Por tanto, podemos concluir que la bon-dad es lo mismo que amor puesto en práctica.

El término griego chrestotes se traducecomo «bondad», «amabilidad» y «excelencia»(Rom. 3: 12; Gál. 5: 22; Efe. 2: 7). «Esta pala-bra expresa amor en acción (1 Cor. 13: 4).Describe una consideración amable, llena degracia, tanto en la actitud como en los actosque se enfocan en la necesidad ajena».1

Hace aproximadamente dos años enfren-tamos en Kenia uno de los momentos más

difíciles de nuestra historia. Kenia siempre hasido un remanso de paz aun cuando cuentacon más de cuarenta tribus y dialectos. Sinembargo, a fines de diciembre del 2007, el paíseligió a nuevos dirigentes. Los resultados de laselecciones fueron cuestionados y muchos sevolvieron contra de sus vecinos. Durante laprimera parte de aquel nuevo año los habitan-tes del país se mataron entre sí y destruyeronlas propiedades ajenas. El miedo y el pánico sehicieron sentir en toda la nación.

En determinado lugar numerosas perso-nas se refugiaron en una iglesia luego que otroslugares supuestamente seguros fueran incen-diados. Sin embargo, aquella iglesia fue tam-bién incendiada. Una señora, que pudo esca-par del edificio en llamas con su hijo, fue atra-pada por una turba que estaba frente al edifi-cio. La dama y su hijo fueron macheteados ydescuartizados y sus cuerpos lanzados al edifi-cio en llamas. En vez de encontrar la paz y elamor de Dios en aquel templo, los allí refugia-dos sufrieron una muerte horrible.

Pablo escribió: «Por lo tanto, como esco-gidos de Dios, santos y amados, revístanse deafecto entrañable y de bondad, humildad,amabilidad y paciencia» (Col. 3: 12). Aquí elapóstol enfatiza la necesidad de realizar unacto voluntario por medio del cual los cristia-nos asumen la apariencia de Cristo así comosu carácter. Al llamarnos «escogidos» de Dios,está diciendo que somos ciudadanos del reinode los cielos. Todos los que aceptan a Cristo,sin importar su origen social, religión, raza opreparación, son parte de ese grupo. Pablo nosestimula a revestirnos de «afecto entrañable».En griego el concepto «entrañable» se refiere alas partes internas del cuerpo, «la fuente de lasemociones». Nuestras vidas deben estar cen-


59Caroline Mwelu, Nairobi, Kenia

realizar un acto u otro. Ser bondadoso nuncadebe tomar en cuenta si nos vamos a benefi-ciar de nuestras acciones, sino más bien consi-derar cómo se beneficiarían los demás sinimportar lo que nos cueste a nosotros.

Como cristianos debemos asegurarnosque nuestras palabras y acciones reflejan elcarácter del Salvador. Aprender de él a diarionos ayuda a estar al tanto de su carácter y delo que él espera de nosotros. Una de las cosasque él espera es que seamos bondadosos. Re -cordemos siempre que el amor y la verdad sonlas bases de su reino. La amabilidad sincera esuna muestra de eso mismo. Es el aspecto prác-tico de nuestra religión.

PARA COMENTAR1. ¿Cuáles actos de bondad te tientan a anali-

zar los posibles beneficios que se derivande ellos, y por qué? ¿Qué habría sucedidosi Jesús hubiera realizado ese análisis?

2. El cielo lleva un registro de toda acciónbondadosa que realizamos en forma since-ra. Si tú llevaras un registro similar ¿coin-cidiría con el del cielo? De no ser así, ¿quéexplicación tendrías para las diferencias?

____________1. Ver el Comentario bíblico adventista a 1 Corintios 13.2. Ibíd.

tradas en Cristo. Nuestros caracteres debenhablar de aquel que nos llamó.

Una medida del reino de Dios (2 Sam. 9: 1-13; Juan 13: 1-30)

En 2 Samuel 9: 1-13 encontramos un rela-to que nos muestra el significado de ser bon-dadoso. El rey Saúl quería matar a David. Sinembargo, después de la muerte de Saúl yrecordando a Jonatán el hijo de Saúl, Davidpregunta si quedaba alguien de la familia delrey con el fin de ayudarlo. La respuesta fueafirmativa. Había un hombre llamado Me fi -boset, un hijo de Jonatán que era lisiado. Leeese conmovedor relato si es que no lo conoces.

También podemos mencionar la bondadmanifestada por Jesús respecto a Judas, el dis-cípulo que lo entregó. Cristo sabía lo queJudas iba a hacer. Sin embargo, al lavar los piesde Judas Jesús realizó un acto reservado a losesclavos extranjeros. Si aquel humilde acto nolo podía convencer del amor de Jesús, nada loharía. Quizá el consideró como una señal dedebilidad el comportamiento del Maestroaquella noche: una acción que no le corres-pondía a alguien que profesaba ser su rey.

En la actualidad la mayor parte de la genteconsidera que los actos bondadosos son unamuestra de debilidad. Sin embargo, debemosrecordar que dichos actos, cuando son el re -sultado de nuestra relación con Cristo, sonregistrados en los libros del cielo. Nunca debe-mos involucrarnos en un análisis de costos ybeneficios con el fin de decidir si hemos de

Nuestras vidas deben reflejar a Cristo.


De la boca para afuera

60Maganjo Kimani, Nairobi, Kenia

Lunes1º de febrero

TESTIMONIOProverbios 31: 26; Mateo 5: 43-45

En cierta ocasión me topé con un vehí-culo del transporte público que estaba des-compuesto. Los pasajeros no querían ba -jarse y empujarlo para que el conductorpu diera ponerlo en marcha. Así que el con-ductor nos pidió a mí y a otros transeúntesque lo ayudáramos; algo que hicimos gus-tosamente.

Los actos de bondad deben ser unaparte normal de nuestras vidas diarias.Esto únicamente se logrará si el EspírituSanto mora en nosotros. Cuando estamosllenos de su presencia, ni siquiera tendre-mos que esperar a que la gente nos pidaayuda. En vez de ello, manifestaremos unaactitud bondadosa en cualquier momentosin necesidad de que se nos estimule ahacerlo.

Elena G. de White escribió: «Su in -fluencia alcanza el alma; usted no tocacuerda alguna que no transmita su vibra-ción a Dios […] Usted debe ser cristianoen el sentido más elevado de la expresión:“semejante a Cristo”. Es mediante cuerdasinvisibles que lo atraen a usted a otrasmentes que podrá causar una impresiónque ejerza un sabor de vida para vida, siem-

pre que esté en constante contacto conDios. De otra forma, si usted es egoísta, ose exalta a sí mismo; si usted tiene inclina-ciones mundanas, sin importar su posi-ción, su experiencia previa o cuánto cono-ce; si usted no posee la ley de la bondad ensus labios o una dulce fragancia de amorque brote del corazón; no podrá hacernada de lo que debe ser llevado a cabo».*

No debemos ser selectivos respecto alas personas con quienes debemos ser bon -dadosos. Lee en Mateo 5: 43-45, lo queJesús dijo respecto a la discriminación.

Debemos ser bondadosos con quie-nes no estamos obligados a ayudar. En 2Samuel 9: 1-13, leemos que David quisoser bondadoso con cualquier miembro dela familia de Saúl aun cuando este tratóde matarlo. Asimismo, Jesús mencionó aun hombre que fue atacado por los ladro-nes y abandonado a la orilla del camino. Elsacerdote y el levita, supuestamente bue-nas personas, no lo socorrieron. Un sama-ritano, miembro de una etnia desprecia-da por los judíos, lo llevó a una posada,pagó su alojamiento y estuvo dispuesto acubrir cualquier otro gasto adicional (Luc.10: 30-37).

PARA COMENTAR1. ¿Cuántas veces te has incomodado para

realizar un favor a alguien con quien notenías obligación alguna?

2. ¿En qué sentido imitas los actos de bon-dad descritos en la Biblia?

____________*Meditaciones matinales, p. 178.

No debemos ser selectivosrespecto a las personas con quienes debemos ser bondadosos.


El amor dicho de muchas maneras

61Caleb Muasya, Nairobi, Kenia

Martes2 de febrero

EVIDENCIA1 Juan 3: 17-19

Quienes aprecian más la belleza de lasrosas que sus espinas seguramente valora-rán lo mucho que la bondad puede hacerpor los seres humanos. El título de la sec-ción para hoy establece un contraste entreel comportamiento y las palabras. Segúnalgunos diccionarios, la bondad es la habi-lidad para mostrarse amistoso, generoso yconsiderado. Los actos de bondad por logeneral hablan más fuerte que las palabrasbondadosas.

Gálatas 5: 22 afirma que la bondad esun fruto del Espíritu. ¿Significa esto queúnicamente los cristianos pueden poneren práctica dicha virtud?

Una posible respuesta es que Dios noscreó a su imagen y que a pesar del pecado,si nos acercamos a él mediante la obra delEspíritu Santo nos convertiremos en per-sonas más amables y bondadosas.

Por otro lado, alguien pudiera decirque Dios puede usar a cualquier persona,suceso o cosa para suplir las necesidadesde su pueblo. Las Escrituras nos muestranque él utilizó a personas que no creían enél, incluyendo a animales, con el fin de

cuidar y proteger a sus hijos. Lee 1 Reyes17: 1-6 y Josué 2: 1-22.

En 1 Juan 3: 17-19 se expresa claramen-te que Dios espera que hablemos menos yactuemos más. Cuando amamos en obrasy en verdad, obtenemos la certeza de la rea-lidad de nuestra conversión. De allí quenuestros propios frutos nos comuniquen loge nuino de nuestra profesión de la mismaforma que las vidas de los demás dan testi-monio de su sinceridad (Mat. 7: 16-20).1

«Las palabras hermosas nunca susti-tuirán a las buenas obras. Ningún discursorespecto al amor cristiano sustituirá a unacto bondadoso para beneficiar a alguienen necesidad, un acto que involucre algúntipo de sacrificio personal; porque endichos actos el principio de la cruz se ponede nuevo en práctica».2

PARA COMENTAR1. Observa cómo Jesús ministró a los

demás mientras vivió en la tierra. Luegocompara o contrasta sus actos de bon-dad con los tuyos y con tus motivacio-nes. Pídele a Dios que te ayude en aque-llos aspectos que crees necesitas la di -rección del Espíritu Santo.

2. Medita en Filipenses 4: 13. ¿Cómo pue -de este texto proporcionarte esperanzasrespecto a una vida de bondad?

____________

1. Ver el Comentario bíblico adventista a Mateo 7.

2. William Barclay, Las cartas de Juan y Judas.

«Las palabras hermosasnunca sustituirán a las buenas obras».


Una expresión sincera

62Viola Ayoo Odipo, Nairobi, Kenia

Miércoles3 de febrero

CÓMO ACTUAREfesios 4: 32

La bondad, como un fruto del Espí -ritu, debe ser manifestada por todo cristia-no. La bondad se demuestra mediante laspalabras y la conducta; al igual que otrosfrutos espirituales no puede existir de ma -nera independiente.

Muchas personas murieron en Keniadurante la violencia postelectoral a finesdel año 2007. Las zonas más afectadas fue-

ron aquellas donde prevalecía uno de lospartidos políticos, el llamado ODM. Laregión de Kibera, sufrió la peor violencia.Una de las zonas tenía una considera-ble proporción de miembros de la tribuKikuyu. Cuando estalló la lucha fraticida,ya tarde en la noche, la mayor parte de loskikuyus no pudieron escapar de la furia delos miembros del partido ODM quienesaullaban con ansias de sangre. La airadaturba irrumpió en las viviendas destruyen-do vidas y propiedades. Muchos kikuyusfueron ocultados por sus vecinos quieneseran sus enemigos tradicionales. Durantetoda la noche la iracunda turba iba de casaen casa buscando a los kikuyus. Sin em -bargo, ¡muchos fueron salvados por losactos de bondad de sus enemigos!

¿Cómo podríamos perdonar a quienesdesean dañarnos, o aun peor matarnos?1. Es imposible perdonar si no somos bon-

dadosos Es difícil que quienes perdie-ron a sus familiares puedan perdonar alos asesinos. La bondad es un fruto delEspíritu Santo. Por tanto, necesitan queel Espíritu los ayude a cumplir el man-dato de Jesús encontrado en Mateo5: 43-48.

2. Con la ayuda del Espíritu Santo podre-mos perdonar a quienes nos han hechodaño. Hablándoles en forma bonda-dosa a quienes están airados, podremoshacer que se calmen. Lee Proverbios15: 1; 25: 11. Siempre que hablamos,nuestras palabras deben estimular y ani-mar a los demás.Él nos promete que nos recompensará

si somos bondadosos con quienes no loson con nosotros. Lee Mateo 10: 40-42.

PARA COMENTAR1. Piensa en alguien a quien debes perdo-

nar. Basándote en el estudio de hoy, con -sidera en oración cómo podrías hacerlo.

2. Considera algún suceso que haya ocu-rrido en tu propio país. ¿Se pusieron demanifiesto algunos actos de bondad du -rante dichos sucesos?

3. Piensa en algunas ocasiones en que fuisteobjeto de algún acto de bondad. ¿Cómote sentiste? ¿Te ayudaron esos hechos oactos a ser una mejor persona?

Nuestras palabras deben estimular y animar a los demás.


Una lista de cotejo

63Susan Nzyoki, Eldoret, Kenia

Jueves4 de febrero

OPINIÓNEfesios 4: 32; Colosenses 3: 12-14

El amor implica caminar una segundamilla incluso a favor de quienes no lo me -recen. Es otro aspecto dinámico del amor.No existe algo que pueda ser llamado bon-dad pasiva. Es una parte del amor quesiempre está empeñada en hacer el bien.La bondad es amor puesto en práctica.Dios siempre les expresa a sus hijos su ine-fable bondad. La bondad siempre está dis-puesta a transitar una segunda milla. Estoes así porque la misma surge como un frutodel Espíritu. Quienes son fuertes espiri-tualmente son bondadosos por naturaleza.Nadie puede amar y no ser bondadoso;tampoco ser bondadoso con los demás yno amar. La bondad no conoce condicio-nes porque es amor en acción. El amor de -muestra bondad en cualquier circunstan-cia de la vida, amistosa o no. «La bondades un termómetro gracias al cual se mide elamor».

Si somos bondadosos, actuaremos bon-dadosamente a favor de los demás sin es -perar recompensas o reconocimientos. Esdifícil ser bondadoso con quienes noshacen daño o hablan mal de nosotros.Cuan do el Espíritu Santo hace que se ma -nifieste la bondad en nuestras vidas encon-traremos que es más fácil ser amables auncon quienes nos maltratan. Para un cristia-no, la bondad no debe conocer límites.Seremos amables con creyentes y no cre-yentes, con nuestros enemigos así comocon nuestros amigos.

Esto me recuerda la historia de unadministrador que no simpatizaba con uno

de sus empleados porque este último eracristiano. El jefe terminó por degradarloafirmando que dicho empleado no estabacalificado para el puesto, que se ausentabaa menudo y que no asistía a las reunionesconvocadas.

Un día, la esposa del jefe dijo quenecesitaba ir a una ciudad lejana que no leera familiar, con el fin de visitar algunosfamiliares. La única persona que conocíabien aquella ciudad era el empleado a

quien el jefe detestaba. El empleado seenteró de la necesidad que tenía la señorade su patrón, así que él se acercó a él ofre-ciendo su ayuda. El patrón se sintió aver-gonzado al recordar que aunque había tra-tado injustamente a aquel hombre, él ahoraofrecía su colaboración. Con gratitud, elpatrón aceptó la oferta de ayuda de suempleado.

¿Qué fue lo que motivó a aquel emple-ado a actuar bondadosamente? Un amorincondicional. Él sabía que su salvador fuebondadoso con todos mientras vivió eneste mundo, aun con aquellos que lo trata-ron injustamente.

PARA COMENTAR1. ¿Por qué no es natural que seamos ama-

bles con quienes nos tratan injustamente?2. ¿Por qué es imposible ser amable cuan-

do no tenemos a Cristo en nuestro cora-zón?

«La bondad es un termómetrogracias al cual se mide el amor».


Un mundo más amable

64Leslie Oosterbaan, Silver Spring, Maryland, EE. UU.

Viernes5 de febrero

EXPLORACIÓNZacarías 7: 9; Gálatas 6: 10

PARA CONCLUIRAl escuchar o leer las noticias podre-

mos darnos cuenta que la bondad escaseaen nuestro planeta. La bondad que Cristomostró incluye a la amistad, a la generosi-dad, así como a la cortesía en el habla y enla conducta. Es un aspecto práctico delcristianismo y por tanto debe involucrar atodas las facetas del diario vivir. Debemosser amables no tan solo con las personasque nos agradan, sino con la gente queconsideramos de poco fiar. Tampoco debe-mos esperar algún pago o consideraciónpor algún acto bondadoso. Piensa cómosería el mundo si más personas, incluyen-do los cristianos, fueran más bondadosas.¿Qué noticias mostrarían los periódicos?

CONSIDERA• Diseñar un afiche para ilustrar la defini-

ción de bondad.• Hacer una lista de los textos bíblicos que

se refieren a la bondad. Puedes utilizar unaconcordancia, consultando: amabilidad,bondad o bondadoso. Lee algunos de losversículos que aparecen en los resultados,analizando el contexto de cada uno. ¿Qué

te dicen los mismos respecto a ese peculiarfruto del Espíritu?

• Investigar los resultados que tienen losactos de bondad en la salud física y men-tal. En caso de hacer una búsqueda enInternet puedes digitar el nombre «AllanLuks».

• Cantar algún himno o corito que hable dela felicidad. Considera la forma en que elamor puede ayudarnos a ser bondadosos yamables.

• Organizar un grupo de «Caras risueñas»en unión a algunos amigos. Puedes conse-guir información al respecto en: http://www.helpothers.org/story.php?sid=10369.

• Realizar algún acto bondadoso durantecada día de la próxima semana, aun cuan-do sea algo pequeño como levantar delpiso algo que hayan dejado caer. Llevar undiario de tus acciones cotidianas, anotan-do las respuestas de los demás así comotus reacciones.

PARA CONECTAR� Pay It Forward Foundation, http: //www.

payitforwardfoundation.org/educators/index.html.

� The Healing Power of Doing Good: The Healthand Spiritual Benefits of Helping Others, porAllan Luks.

� Testimonios para la iglesia, t. 3.


«Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesúspara buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano

a fin de que las pongamos en práctica».Efesios 2: 10

Lección 76 al 13 de febrero

El fruto del Espíritu es benignidad


¿Lo saben los demás?

67Patty López, Arlington, Texas, EE. UU.

Sábado6 de febrero

INTRODUCCIÓNTito 2: 11-13

Son las ocho de la mañana. He comidomi plato de avena. Mis zapatos están máso menos lustrados y tengo mi Biblia amano. Me dirijo al auto y todos entramosen él. Hoy es sábado y estamos en caminoa la iglesia. Antes de entrar al auto, noto

que nuestro vecino nos mira con una mez-cla de curiosidad y sorpresa. Me preguntoqué estará pensando de nosotros. ¿Quié -nes creerá que somos? Somos gente tran-quila. Precisamente la semana pasada leentregué un paquete que se le había que-dado en el estacionamiento del edificiodonde vivimos.

Pero la pregunta abarca mucho más.¿Se da cuenta él que vamos rumbo a laiglesia? ¿Sabrá que somos cristianos? Claroque lo sabe, me digo a mí mismo. Pero siacaso sabe que somos cristianos ¿cómo lohabrá averiguado? ¿Será porque llevamosuna Biblia al salir de casa los sábados en lamañana? ¿Será por nuestras acciones? ¿Seráporque soy un «tipo bien» o «una personaeducada»? ¿Quién define los rasgos quedebe poseer una buena persona? De hecho,él es muy buen vecino, quizá el mejor en

todo el vecindario; pero, hasta donde yosé, él no asiste a ninguna iglesia.

Al alejarnos, lo saludo moviendo elbrazo, y me pregunto: ¿Sabrá él que yo estoytratando de tener una relación especial conDios?

Parece obvio que existe una cercanarelación entre la bondad y el comporta-miento externo. Sin embargo, deberíamospreguntarnos si poseemos el conceptoapropiado. ¿De qué depende el hecho de«ser bueno»? ¿Cuál es la fuente de la bon-dad? ¿Qué puede motivar a alguien a serbueno? ¿Nos basamos acaso en conceptosterrenales? ¿O acaso estamos más cerca dela bondad de Jesús? Esto es especialmenteimportante, porque la bondad de Jesússiempre pone de manifiesto su relacióníntima con el Padre.

En resumen, debemos preguntarnos sinuestra «bondad» proclama nuestras accio-nes, nuestra religión o nuestra relaciónactual con Dios. «El testimonio que debe-mos dar por Dios no consiste solo en predi-car la verdad y distribuir impresos. No olvi-demos que el argumento más poderoso afavor del cristianismo es una vida semejan-te a la de Cristo, mientras que un cristianovulgar hace más daño en el mundo que unmundano».* Al estudiar esta semana acercade la bondad, pregúntate qué es lo que temotiva a cultivar este fruto del Espíritu.____________

* Testimonios para la iglesia, t. 9, p. 18.

¿De qué depende el hecho de «ser bueno»?


Un fruto en forma de corazón

68

Domingo7 de febrero

LOGOSSalmo 51: 10, 11; Juan 14: 9; Romanos 3: 12-20; 7: 7-12; Tito 2: 14; Hebreos 1: 2, 3

Problemas del corazón (Sal. 51: 10, 11)

Después que David fue «denunciado»por el profeta Natán a causa de su relaciónadúltera con Betsabé, hizo algo que seríapoco común entre los actuales funciona-rios gubernamentales que han sido sor-prendidos en circunstancias similares. Élreconoció su pecado. Me imagino que élhizo algo parecido a mirar a las cámarasde la prensa y confesó su desliz.

Cuando David fue enfrentado con supecado, reconoció lo que había hecho envez de justificarlo llamándolo una equivo-cación o un error. Tampoco se internó enun centro de rehabilitación con el fin delibrarse de alguna sustancia que podíahaber nublado su entendimiento. Así sepuso de manifiesto claramente la obra delEspíritu Santo. Cuando el fruto del amorredentor de Dios comience a manifestarseen nosotros, se nos capacitará para reco-nocer quiénes somos realmente, entoncespodremos confesar nuestras faltas sin temoralguno. Es más, podremos reconocer quenuestros pecados son algo más que ofen-sas cometidas en contra de los demás. Enúltima instancia son transgresiones en con-tra de Dios mismo.

En la confesión de David encontra-mos evidencias de que él así lo reconoció:«Contra ti he pecado, sólo contra ti, y hehecho lo que es malo ante tus ojos (Sal.51: 4). Él no dijo que había pecado contra

Betsabé, a quien había seducido y embara-zado; o contra Urías el marido de ella, aquien había hecho matar en una batalla.Clamó a Dios y pidió que él lo perdonara.

Cuando David pidió un nuevo cora-zón, utilizó el vocablo hebreo bara, quesignifica «crear» (Sal. 51: 10). Esta es la

misma palabra que se utiliza en el relatode la creación encontrado en Génesis 1.En cierto sentido David le pide a Dios queforme algo de la nada, de la misma formaque creó al mundo. No deseaba únicamen-te que Dios limpiara lo que estaba sucioy lo adecentara. Él deseaba un corazónnuevo que obedeciera a Dios.

Cuando enfrentamos la realidad deun corazón pecaminoso, no necesitamoscorrer y escondernos llenos de vergüenza.Podemos confesar con libertad nuestrospecados sin tener que preocuparnos porlo que Dios va a hacer con nosotros. Po -demos pedir que el Espíritu Santo nostransforme, que haga el milagro de crearun corazón nuevo en nosotros que se ase-meje al de Cristo.

Contemplando al Padre, contemplándonos a nosotros(Juan 14: 9)

En cierta ocasión Felipe le pidió aJesús que les mostrara al Padre. Podemosleer la respuesta de Jesús en Juan 14: 9.Esto es algo que más adelante lo enfatizael redactor del libro de Hebreos quien des-

No te desvíes de la sendacomo hacen algunos.


69Paul Kevin Wells, Grand Prairie, Texas, EE. UU.

cia (Rom. 3: 12). Naturalmente, respon-demos de esa forma cuando enfrentamosnuestros pecados. Adán y Eva culparonrápidamente a Dios cuando él los incre-pó. Todos hemos hecho lo mismo a par-tir de aquel día. Pero el Espíritu puederomper ese ciclo y concedernos la pleni-tud de vida que Jesús prometió.

Considera el fruto de la bondad ypiensa cuánto mejor sería tu vida si labondad de Dios transformara tu cora-zón. No te desvíes de la senda comohacen algunos al pensar que son dema-siado malos y que Dios ya no puede hacernada por ellos. Cuando aceptamos elhecho de que somos salvos por la graciade Dios manifestada en Cristo en imple-mentada por el Espíritu Santo, podre-mos disfrutar de la paz que Jesús prome-tió en Mateo 11: 29, 30.

PARA COMENTAR1. ¿En qué formas podrías estar ocultándote

de Dios?2. ¿Cómo mejoraría tu vida si se la entrega-

ras a él?3. ¿Cómo tratarías a los demás si le entrega-

ras toda tu vida al Señor?

cribe a Jesús como la misma imagen deDios y el sustentador de todas las cosas.Lee Hebreos 1: 1-3.

Debemos entender que con el fin deconocer a Jesús, y por ende al Padre, elEspíritu Santo tiene que hacer su obra ennosotros. El Espíritu desempeña un papelindispensable al revelarnos los caminos deDios, y por tanto el carácter de Dios (Juan16: 5-15).

Todos hemos pecado (Rom. 3: 12-20; 7: 7-12)

Si pudiéramos aceptar el hecho deque todos somos pecadores, sería másfácil para nosotros desarrollar una mayorconsideración mutua. La mayor parte delos cristianos reconoce su pecaminosi-dad. El problema es que muy a menudomenospreciamos y contemplamos congran disgusto a los demás pensando quesus pecados son peores que los nuestros(Mat. 7: 1-6).

Tratamos de justificarnos imaginan-do que si somos sorprendidos en algo nosería tan malo como el caso de cualquierotra persona. Las Escrituras, sin embar-go, niegan en forma categórica esa fala-


El Dios mío

70 Carlos A. Quintana, Arlington, Texas, EE. UU.

Lunes8 de febrero

TESTIMONIOJuan 14: 9

«La gloria de Dios es su carácter. MientrasMoisés se encontraba en el monte interce-diendo fervorosamente con Dios, oró: “Teruego que me muestres tu Gloria”. En res-puesta Dios declaró: “Yo haré pasar todo mibien delante de tu rostro, y proclamaré el

nombre de Jehová delante de ti; y tendré mi -sericordia del tendré misericordia, y seré cle-mente para con el que seré clemente” (Éxo.33: 18, 19). »La gloria de Dios -su carácter-,fue revelada entonces: “Y pasando Jehová pordelante de él, proclamó: ¡Jehová! ¡Jehová!fuerte, misericordioso y piadoso; tardo parala ira, y grande en misericordia y verdad; queguarda misericordia a millares, que perdonala iniquidad, la rebelión y el pecado, y que deningún modo tendrá por inocente al malva-do” (Éxo. 34: 7).-ST 3-9-1902.

Este carácter fue revelado por la vida deCristo. Para que pudiera condenar al pecadocon su propio ejemplo en la carne, tomósobre sí la semejanza de la carne de pecado.Constantemente contempló el carácter deDios; constantemente reveló ese carácter almun do. Cristo desea que sus seguidores re -velen en su vida ese mismo carácter. .

»En su oración intercesora en favor desus discípulos declaró: “La gloria [el carácter]

que me diste, yo les he dado, para que seanuno, así como nosotros somos uno. Yo enellos, y tú en mi, para que el mundo conozcaque tú me enviaste, y que los has amado aellos como también a mí me han amado”(Juan 17: 22, 23)».1

«La iglesia es muy preciosa a la vista deDios. El la aquilata, no por sus ventajas exter-nas, sino por la sincera piedad que la distin-gue del mundo. La estima de acuerdo con elcrecimiento de los miembros en el conoci-miento de Cristo, de acuerdo con su progre-so en la vida espiritual. »Cristo anhela recibirde su viña el fruto de santidad y abnegación.Busca los principios de amor y bondad. Todala belleza del arte no puede compararse con labelleza del temperamento y del carácter quese han de revelar en los que son representan-tes de Cristo. La atmósfera de la gracia querodea el alma del creyente, el Espíritu Santoque trabaja en la mente y el corazón, son losque hacen de él un sabor de vida para vida, ypermiten que Dios bendiga su obra».2

«En la historia del buen samaritano,Cristo ilustra la naturaleza de la verdaderareligión. Muestra que esta no consiste en sis-temas, credos, o ritos, sino en la realizaciónde actos de amor, en hacer el mayor bien aotros, en la bondad genuina».3

PARA COMENTARSi la gloria de Dios es su misericordia,¿cuál debería ser la gloria de la iglesia y decada creyente?____________1. La maravillosa gracia de Dios, p. 322.2. Palabras de vida del gran Maestro, p. 239.3. El Deseado de todas las gentes, p. 469.

«En la historia del buen samaritano, Cristo ilustra la naturaleza de la verdadera religión».


Haciendo lo correcto

71Timothy A. Whitley, Houston, Texas, EE. UU.

Martes9 de febrero

EVIDENCIAEfesios 2: 19-22

«El hombre que trata de guardar losmandamientos de Dios solamente por unsentido de obligación —porque se le exigeque lo haga— nunca entrará en el gozo de laobediencia. El no obedece. Cuando los re -querimientos de Dios son considerados comouna carga porque se oponen a la inclinaciónhumana, podemos saber que la vida no esuna vida cristiana. La verdadera obedienciaes el resultado de la obra efectuada por unprincipio implantado dentro. Nace del amora la justicia, el amor a la ley de Dios. La esen-cia de toda justicia es la lealtad a nuestroRedentor. Esto nos inducirá a hacer lo buenoporque es bueno, porque el hacer el bienagrada a Dios».* El respeto legítimo no pue -de ser legislado. Debe ser ganado. Igual men -te, la obediencia verdadera no puede ser for -zada. Hacer lo que es correcto debe surgir dealgún lugar donde alguien sepa que haceresto o aquello es algo que le conviene al«hacedor». Para llegar a ese punto se re -quiere desarrollar un importante precursor:la confianza.

Cualquier padre de un niño pequeñoenfrenta una tarea crítica: enseñarle al niñoque se cepille los dientes explicándole las ra -zones para hacerlo. Si un niño no desarrollauna buena higiene bucal temprano en su vida,es difícil que se recupere más tarde. Es deesperar que algún día el niño o la niña

reconozca que cepillarse los dientes es algoque debe hacer.

Pregúntate a ti mismo por qué te cepillaslos dientes a diario. Estoy seguro que larespuesta no será «porque mis padres me lo

inculcaron». Los esfuerzos de tus padrespara enseñarte eso no tenían el objetivo decoartar tu libertad, sino de asegurar que ten-drías una dentadura que duraría hasta tusaños maduros.

Desarrollar un buen carácter es exacta-mente lo mismo. Tu Padre celestial obra dili-gentemente con el fin de enseñarte lo quedebes y lo que no debes hacer. No intentaavasallarte o controlarte, sino protegerte ytransformarte en algo maravilloso: una per-sona que refleja su carácter y su belleza.Cuando tú aceptes que ese es su único moti-vo, esa transformación se llevará a cabo.

PARA COMENTAR1. ¿Cuales son algunos ejemplos prácticos

relacionados con hacer lo correctoporque es apropiado?

2. ¿Cómo puedes utilizar esos ejemplospara esparcir el mensaje del amor deCristo?

____________*Palabras de vida del gran Maestro, p. 70.

La esencia de toda justicia es la lealtad a nuestro

Redentor.


No trates de ser bueno

72Patricia Flores Sauza, Iztapalapa, México


CÓMO ACTUARFilipenses 2: 13

No existe ninguna receta humana quepueda ayudarnos a ser buenos. Sencilla -mente es algo que no es parte de nuestranaturaleza pecaminosa (Jer. 13: 23; Rom.3: 10-12; 7: 18-25). Muchos sistemas reli-giosos se basan en el esfuerzo para ser bue-nos. Esto es algo peligroso, porque de esaforma no tendríamos que ceder el controlde nuestras vidas a ningún ser superior. Sinembargo, desarrollar el fruto de la bondad

implica permitirle al Espíritu Santo de Diosque obre en nosotros (Eze. 11: 19, 20). Elsecreto reside en rendirnos al EspírituSanto. Esa entrega requiere fe. Cuando tie-nes fe en Dios, él puede iniciar el desarro-llo de su carácter en ti. Entonces la bondadcomenzará a germinar en tu corazón. Acontinuación encontrarás algunas de lascosas que pueden ayudarte a entregar tuvida a Dios:• IIddeennttiiffiiccaa ttuuss nneecceessiiddaaddeess.. El mundo nosenseña que debemos tener confiar ennosotros mismos con el fin de alcanzar eléxito. Sin embargo, como cristianos de -bemos reconocer que nuestra naturalezapecaminosa nos controla más de lo quepensamos. No podemos confiar en noso-tros mismos si deseamos entregarnos aDios. La solución es depender de él.

Reconocer que lo necesitamos debe con-vertirse en nuestra principal prioridad(1 Juan 3: 4-7).

• MMaannttéénn vviivvaa llaa ccoonneexxiióónn..Observar el méto-do orar-estudiar-obedecer-compartir-alabar esla forma de permitir al Espíritu Santo efec-tuar la renovación de tu naturaleza. Estotambién es el medio que él utiliza para ayu-darnos a fortalecer nuestra fe (Juan 15: 4).

• SSee ssiinncceerroo ccoonn DDiiooss.. Ser transformados a suimagen puede ser algo frustrante o algoexcitante. A veces él nos lleva por sendasque no deseamos transitar. Sé sincero entu trato con él. Cuéntale cómo te sientesalgunas veces. Después de todo, él es tumejor amigo (Sal. 77; 88: 6, 9).

• EEnnttrrééggaattee ttoottaallmmeennttee aa ééll.. Entrega tus pla-nes, ideas, proyectos y sueños. Conver -tirnos en la arcilla que moldean susmanos es una maravillosa aventura (Efe.3: 20, 21; Jer. 29: 11).

PARA COMENTAR1. ¿Qué papel desempeña el libre albedrío

en el caso que le entreguemos a Dios elcontrol de nuestras vidas?

2. Dios nos ha concedido a todos la libertadde elección. ¿Cuál debiera ser nuestraactitud respecto a quienes no practican labondad como nosotros la entendemos?

3. ¿Qué dirías respecto a las leyes que prohí-ben la eutanasia o el aborto? ¿Se oponendichas leyes al don del libre albedrío?¿Por qué? ¿Por qué no?

Mantén viva la conexión.


Una doble misión

73Miguel A López, Arlington, Texas, EE. UU.

Jueves11 de febrero

OPINIÓNSalmo 14: 3; Romanos 3: 12

Muchos de los habitantes del mundohan decidido no relacionarse con la reli-gión. Incluso cuestionan la validez de lasdiversas religiones así como a sus seguido-res. El cuarto mandamiento de una socie-dad de ateos afirma: «No olvidarás las atro-cidades cometidas en el nombre de Dios».1

Ellos basan esta declaración en los deplora-bles actos cometidos durante la Inquisicióno las Cruzadas. Preguntan: «¿Cómo pudoun Dios amante permitir atrocidades de esetipo?»

Esto me hace pensar en el Salmo 14: 3:«Pero todos se han descarriado, a una sehan corrompido. No hay nadie que haga lobueno;¡no hay uno solo!» ¿No habremosfracasado al representar el verdadero carác-ter y la naturaleza de Dios?

Debemos recordar al menos dos cosas:1. «El argumento más poderoso en favor

del Evangelio es un cristiano amante yamable».2 No será la retórica o nuestrateología, sino nuestras vidas lo que atrai-ga a la gente a Dios. La verdadera reli-gión nos ayuda a semejarnos a Cristo. Laverdadera religión es aquella que Jesúsvivió y enseñó, una religión en la que«ser bueno» es mucho más importante

que «portarse bien». Es una religión enla que somos embajadores de Cristo ycartas abiertas que testifican de su graciay amor.

2. En cierto sentido, el cuarto mandamien-to de los ateos no está lejos de la verdad.No debemos olvidar las atrocidades co -metidas en nombre de Dios. Debemosre cordarlas para que no sucedan denuevo. Una violencia de ese tipo desa-credita lo que creemos así como la mi -sión y la obra de Jesús quien «se entregópor nosotros para rescatarnos de todamaldad y purificar para sí un pueblo ele-gido, dedicado a hacer el bien» (Tito2: 14).La misión de ser buenos tiene dos

aspectos. Si somos buenos impactaremospositivamente a un mundo carente de bon-dad y hará conocer la verdadera naturalezade Dios, quien es amor por encima detodo. Si el Espíritu Santo mora en nuestroscorazones seremos transformados en per-sonas del todo buenas. El salmista escri-bió de forma elocuente: «Crea en mí, ohDios, un corazón limpio, y renueva la fir-meza de mi espíritu. No me alejes de tupresencia ni me quites tu santo Espíritu»(Sal. 51: 10, 11).

¿No piensas que ya es tiempo de querevolucionemos al mundo con nuestrabondad?____________

1. Ethical Atheist. «The Ten Commandments». http: //www.

ethicalatheist.com/docs/ten_commandments.html#4.

2. El ministerio de curación, p. 373.

«Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio».


Un vaso abundante

74Dan Solís, College Place, Washington, EE. UU.

Viernes12 de febrero

EXPLORACIÓN2 Pedro 1: 2-11

PARA CONCLUIRLa bondad no se relaciona únicamente

con un comportamiento correcto. Puedehaber muchas explicaciones para el mismo.Alguien pudiera actuar correctamente pormotivos egoístas. Otros quizá han actuadoapropiadamente con el fin de obtener unaherencia, o convencer a algunos familiaresrespecto a un interés de tipo romántico.Otros más podrían actuar correctamenteporque les es más fácil comportarse bienque obedecer a los impulsos bajos. Unavez que se eliminen dichos limitantes, elverdadero carácter de la persona se pondráde manifiesto con resultados sorpresivos ychasqueantes. La verdadera bondad, sinem bargo, fluye de un corazón transforma-do, un corazón cambiado por Dios. Es uncambio que ocurre debido a que la perso-na ha experimentado el incomparable amorde Dios.

CONSIDERA• Orar pidiendo que Dios desarrolle en ti las

virtudes mencionadas en 2 Pedro 1. Oraespecíficamente pidiendo una de ellastodos los días de la próxima semana. Pí -dele a Dios que te haga un vaso abundan-te en gracia y bondad.

• Hacer una caminata un sábado en la tardeen algún parque o lugar donde puedas

observar el amor de Dios expre4sado en sucreación. Considera cómo puedes reflejaresos atributos divinos al mismo tiempoque cuidas del ambiente donde te ha toca-do vivir.

• Escuchar algún himno que hable de trans-formar el corazón. Medita en lo que nece-sitas hacer para que los obstáculos existen-tes en tu vida puedan ser removidos y asíllegues a rebosar de bondad.

• Entrevistar a un dirigente de la iglesia co -nocido por su bondad. Trata de identificarqué motiva a esa persona a realizar buenasobras.

• Redactar algunos mensajes alentadores di -rigidos a personas cuyos actos bondadososhan sido motivo de inspiración.

• Analizar el impacto de alguna buena obraque ha sido dirigida a algún miembroadulto de la iglesia. Contrasta su actitud ocomportamiento antes y después de dichoacto.

• Dibujar un vaso o fuente que contengadiversas frutas. Discute con algún amigo oamiga cuál de los frutos representa mejorlas virtudes mencionadas en 1 Pedro 1.

PARA CONECTAR� René Pache, La persona y la obra del Es -

pí ritu Santo, Editorial CLIE, cap. 9.� Billy Graham, The Holy Spirit, caps.

14-17.� El camino a Cristo, cap. 9.



El fruto del Espíritu es fidelidad

«No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debidotiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos».

Gálatas 6: 9


Probando la fe y la fidelidad

77Alice Adhiambo, Homa-Bay, Kenia

Sábado13 de febrero

INTRODUCCIÓNÉxodo 14: 14

La escena ocurre en un campamentoen el desierto, en las cercanías de Pi Hahirot,entre Migdol y el Mar Rojo. Los israelitashan escapado de la esclavitud de Egipto ysus patronos están incómodos. El faraónhabía asumido una actitud de intransigen-cia y ahora ha enviado a su ejército paraque persiga a los antiguos esclavos.

Los israelitas se dan cuenta del peligroque está a sus espaldas y comienzan a cul-par a Moisés por aquella situación: el MarRojo delante de ellos y detrás el ejércitoque los persigue. Moisés tiene que sopor-tar los insultos de su propio pueblo. Sinembargo, acude a Dios en quien ha confia-do desde el suceso de la zarza ardiente(Éxo. 3, 4). No serían capaces de derrotara sus poderosos enemigos. No obstante,Moisés les asegura que todo saldrá bienaun cuando está incómodo con ellos. Res -pecto a esa misma experiencia, leemos que«Moisés se turbó grandemente al ver quesu pueblo manifestaba tan poca fe en Dios,a pesar de que repetidamente habían pre-senciado la manifestación de su poder enfavor de ellos. ¿Cómo podía el pueblo cul-

parle de los peligros y las dificultades de susituación, cuando él había seguido el man-damiento expreso de Dios?»*

La fidelidad es una característica quelleva a la gente a mantenerse apegada a suspromesas y a sus tareas. Como cristianos,hemos entrado en un pacto con Cristo ynos hemos comprometido a actuar segúnsus mandatos. Aunque vivimos en un

mundo materialista y egocéntrico, nuestracapacidad para ser fieles dependerá de laconfianza que pongamos en Cristo.

Esta semana aprenderemos más de lafidelidad como un fruto del Espíritu Santo.Analizaremos asimismo algunos de loscom ponentes de la fe. Al estudiar cada unode los temas de la lección, recuerda quedebemos aferrarnos por fe de la mano deCristo, confiando totalmente en él.

La vida cristiana debe ser una expre-sión continua de fe. Una firme confianzaen Cristo que traerá paz y seguridad alalma.____________

* Patriarcas y profetas, p. 256.

La vida cristiana debe ser unaexpresión continua de fe.


El óleo de la fe

78

Domingo14 de febrero

LOGOSMateo 25: 1-13; Lucas 16: 10; 1 Tesalonicenses 5: 23, 24; 2 Timoteo 3: 1-5; Hebreos 11

Cristo utiliza en Mateo 25 la parábolade las diez vírgenes para referirse a la fide-lidad del pueblo de Dios para el tiempo dela segunda venida. Quienes están apercibi-dos para la segunda venida son aquellosque se han preparado.

La lealtad (Mat. 25: 1-13)Cuando nos unamos a Cristo debe-

mos hacerlo con un sentido de lealtad yconfianza. Estas dos características no so -lamente nos ayudarán a crecer en él, sinoque también nos permitirán mantener bue-nas relaciones con nuestra familia, amigosy compañeros de trabajo. Si no somos lea-les a nuestro Padre celestial y a nuestroSalvador, no podremos adorar en la formacorrecta. En lugar de ello, seremos comolos fariseos y los escribas que fracasaron alno demostrar una sólida fidelidad al Diosque aseguraban servir (Mat. 15: 1-20).

Constancia (Luc. 16: 10; 1 Tes. 5: 23, 24)

Según fue creciendo la iglesia, los cre-yentes iban vendiendo algunos de sus bie-nes con el fin de ayudar a los miembros quetenían muy poco o nada (Hech. 4: 32-36).Ese comportamiento demostraba una granfidelidad a la causa de Dios y reflejaba elcarácter de los verdaderos creyentes. Porotro lado, el carácter de Ananías y de Sa -fira su esposa, mostraba a las claras elfruto que Satanás deseó sembrar en los

corazones de la gente desde el mismoprincipio (Hech. 5: 1-11). A menudo,debemos decidir si hablaremos o vivire-mos conforme a la verdad, o si le daremosla espalda a la necesidad de quienes nosrodean.

Cristo desea que mostremos fidelidad,sin titubear, de la misma forma que él nosla muestra en la alegría y en el dolor. Si nosomos fieles, no podremos ser considera-

dos dignos de las bendiciones que estánreservadas para los santos. La fidelidadnos ayuda a purificar nuestros corazonesreemplazando el mal con el amor cristia-no que es también parte de los frutos delEspíritu.

«Como dador de todas las bendicio-nes, Dios reclama una porción determina-da de todo lo que poseemos. Esta es laprovisión que él ha hecho para sostenerla predicación del Evangelio. Y debemosde mostrar nuestro aprecio por sus donesdevolviendo esto a Dios. Pero si retenemoslo que le pertenece a él, ¿cómo podemospretender sus bendiciones? Si somos ma -yordomos infieles en las cosas terrenales,¿cómo podemos esperar que él nos con-fíe las celestiales? Puede ser que aquí seencuentre el secreto de la oración no con -testada».*

La salvación únicamente será un concepto hasta

que la pongamos en prácticamediante actos firmes, dedicados y dignos de confianza.


79Saline Khavetsa, Nairobi, Kenia

lo mismo debemos examinarnos a la luzde las Escrituras. ¿Saldremos airosos de esaprueba? Al escuchar las palabras de Jesúsrecibiremos la seguridad de que todo aquelque tenga fe en ellas, así como en Dios elPadre, habrá pasado de muerte a vida (Juan5: 24).

Al acercarse la segunda venida deCristo, nuestra fe debe dar muestras de bue -nas obras. La salvación únicamente será unconcepto hasta que la pongamos en prác-tica mediante actos firmes, dedicados ydignos de confianza. Eso es lo que Pabloles comunicó a los creyentes romanos di -ciendo: «Pero el que tiene dudas en cuantoa lo que come, se condena; porque no lo hacepor convicción. Y todo lo que no se hace porconvicción es pecado» (Rom. 14: 23). EnHebreos 11 se nos dice que «sin fe es impo-sible agradar a Dios, ya que cualquiera quese acerca a Dios tiene que creer que él exis-te y que recompensa a quienes lo buscan»(Heb. 11: 6). No existe una fe genuina queno muestre actos de fidelidad. Por otrolado, donde no hay fidelidad surge la des-lealtad, la incertidumbre, la falta de deter-minación y la condenación.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo podemos evitar caer en la infi-

delidad?2. ¿Cuáles son los requisitos de la fideli-

dad?3. ¿Cómo podemos testificar fielmente a

quienes no son de nuestra misma fe?____________

*Palabras de vida del gran Maestro, p. 110.

Determinación (Hebreos 11)En el Antiguo Testamento se considera

que la fe es una respuesta a la revelacióndel mismo Dios en la historia y aconteci-mientos humanos (Gén. 15: 6; 2 Crón. 20:20; Hab. 2: 4). Es por esa razón que los pa -triarcas y los profetas mantuvieron viva suesperanza en Dios. Ellos decidieron confiaren la voluntad divina, sin dudar en mo -mento alguno.

En el Nuevo Testamento la fe continúaapoyándose en Dios el Padre, mediante suHijo Jesús (Mat. 9: 22, 29; Juan 8: 30;Hech. 3: 16). Incluso en el caso de los dis-cípulos, su fidelidad respondía a la firmedeterminación de buscar aquello que «es -peraban, la demostración de lo que nohabían visto» (Heb. 11: 1).

La fe les ayuda a todos aquellos queacuden al Señor en busca de salvación aaceptar el don de la gracia divina (Efe. 2: 8).Mediante la fe es que mejor entendemossu carácter y podemos hacernos más se -mejantes a él. Nuestra época se caracterizapor una decadencia moral y espiritual se -mejante a la existente en los tiempos de losprofetas y los apóstoles, quienes a pesar deello se destacaron por su fe. Somos igual-mente llamados a mostrar esa misma feque nos ayudará a triunfar en nuestra luchacontra el pecado.

La fidelidad (Juan 5: 24)En la actualidad muchos hombres y

mujeres afirman que son salvos. Sin em -bargo, antes de que podamos proclamar


Creyendo a ojos cerrados

80Jackline Achieng, Nairobi, Kenia

Lunes15 de febrero

TESTIMONIOSantiago 5: 17

«Por ser Elías un hombre de mucha fe,Dios pudo usarlo en esta grave crisis de lahistoria de Israel […]. Esta es la fe quenecesita el mundo hoy, una fe que se aferrea las promesas de la palabra de Dios, y seniegue a renunciar a ellas antes que el

Cielo responda. Una fe como esta nos rela-ciona estrechamente con el Cielo, y nosimparte fuerza para luchar con las potesta-des de las tinieblas […]. Y por la fe hemosde llegar hoy a las alturas del propósitoque Dios tiene para nosotros. “Si puedescreer, al que cree todo es posible” […] Lafe es un elemento esencial de la oración queprevalece. “Porque es necesario que el que seacerca a Dios, crea que él existe y que re com -pensa a los que lo buscan”».1

Las palabras anteriores salidas de lapluma de Elena G. de White nos enseñanlo importante que es la fidelidad. Ellasmuestran que no podemos únicamente es -tudiar respecto a la fe. Debemos ser fieles.Con el fin de que nuestra fe obre y dé re -sultados, los actos de fidelidad deben cons-

tituir el cimiento de nuestras vidas. Dichosactos son una demostración de fe. Ellosson el cemento que aglutina nuestras creen-cias y nuestro comportamiento. Si somosfieles a Cristo cuidando las cosas peque-ñas, él hará que nuestra fe se ponga de re -lieve como la del centurión romano.

«El noble quería ver el cumplimientode su oración antes de creer; pero tuvo queaceptar el aserto de Jesús de que su peti-ción había sido oída, y el beneficio otorgado.También nosotros tenemos que aprenderesta lección. Nuestra fe en Cristo no debeestribar en que veamos o sintamos que élnos oye. Debemos confiar en sus prome-sas. Cuando acudimos a él con fe, toda pe -tición alcanza al corazón de Dios. Cuandohemos pedido su bendición, debemos creerque la recibimos y agradecerle de que lahemos recibido. Luego debemos atendernuestros deberes, seguros de que la bendi-ción se realizará cuando más la necesite-mos».2

PARA COMENTARDefine los conceptos fe y fidelidad, utilizan-do tus propias palabras.____________1. Profetas y reyes, pp. 104, 105.2. El Deseado de todas las gentes, p. 176.

También nosotros tenemosque aprender esta lección.


La fidelidad y las obras

81Beatrice Akinyi, Ndhiwa, Kenia

Martes16 de febrero

EVIDENCIASantiago 2: 18

La Biblia compara la fe sin obras conun cuerpo muerto. Un cuerpo desprovistode espíritu está muerto (Sant. 2: 26). Estosactos u obras son la consecuencia de loque creemos. Constituyen pruebas de fe

personal. Por ejemplo, cuando oramos sinfe nuestras peticiones difícilmente tendránun resultado positivo. Sin embargo, cuan-do tenemos fe que Dios contestará nues-tras oraciones él nos oirá y nos dará la res-puesta que más nos conviene.

«Cuando las sinceras y humildes ora-ciones de los pecadores ascienden al tronode Dios, Cristo mezcla con ellas los méri-tos de su propia vida de perfecta obedien-cia. Nuestras oraciones resultan fragantesgracias a este incienso. Cristo se ha com-prometido a interceder en nuestro favor, yel Padre siempre oye al Hijo».1

La Biblia registra muchos ejemplos depersonas que demuestran ser fieles auncuando las probabilidades parecen estar ensu contra y al final salen victoriosos. Unode ellos fue Enoc quien «caminó con Dios»(Gén. 5: 24). Sus sencillos actos de fe locapacitaron para ello. «El andar de Enoccon Dios no era en arrobamiento o en vi -sión, sino en el cumplimiento de los debe-res de su vida diaria … En el seno de la

familia y en sus relaciones con los hom-bres, como esposo o padre, como amigo ociudadano, fue firme y constante siervo deDios».2

Hasta los demonios creen (Sant. 2: 19).Por tanto, son las acciones las que de -muestran si nuestra fe es genuina o no.Antes que Elías triunfara en su lucha con-tra Baal en el Monte Carmelo (1 Rey. 18)aprendió a depender de Dios por completo.Él necesitaba demostrar lo que creía me -diante sus acciones. Al igual que Elías, losdemás campeones de la fe tuvieron queutilizar en sus vidas la fidelidad con el finde triunfar en las pruebas.

«Recorre por la fe la senda que él tetraza. Tendrás pruebas; pero sigue avan-zando. Esto fortalecerá tu fe, y te prepara-rá para servir. Los anales de la historiasagrada fueron escritos, no simplementepara que los leamos y nos maravillemos,sino para que obre en nosotros la misma feque obró en los antiguos siervos de Dios.El Señor obrará ahora de una manera queno será menos notable doquiera hayacorazones llenos de fe para ser instrumen-tos de su poder».3

PARA COMENTAR1. ¿Cómo puede ayudarte a testificar por

Cristo una fe que obra?2. ¿En qué maneras podrías mejorar tu

fidelidad?____________

1. Hijos e hijas de Dios, p. 24.


3. Profetas y reyes, p. 117.

Son las acciones las que demuestran si nuestra fe

es genuina o no.


Una fe abundante

82Rose Oguttu, Dagoretti, Nairobi, Kenia


CÓMO ACTUARRomanos 10: 4

La fidelidad es imprescindible paramantener una relación sólidamente arrai-gada con Dios y con nuestros semejantes.Para disfrutar de esa relación que producebuenas obras, debemos confiar en Dios enlos tiempos buenos y en los malos. Élanhela estar a nuestro lado en tiempos dedicha y de dolor como un verdadero amigo.¿Cómo podemos adquirir esa fidelidad?

• OObbeeddeecciieennddoo llooss mmaannddaattooss ddiivviinnooss.. La Bibliaes la mejor guía que jamás haya existido.No podemos saber qué es fidelidad si noobedecemos la Palabra de Dios.

• AAcceeppttaannddoo aall EEssppíírriittuu SSaannttoo.. El EspírituSanto, la tercera persona de la Trinidad,constituye la presencia de Dios en nuestrasvidas. Si no le damos la bienvenida, no reci-biremos su ayuda en nuestro diario vivir. Laprincipal función del Espíritu Santo es ayu-darnos a poner en práctica nuestra fe.

• PPeerrmmaanneeccee eenn llaa vveerrddaadd.. Jesús es la ver-dad (Juan 14: 6). Debemos aceptarlo

como nuestro salvador personal y per-mitirle que nos transforme mediante suverdad si queremos desarrollar algúngrado de fidelidad. Cuando esto suceda,nuestra fe resplandecerá mediante actosde fidelidad.

• AAggrraaddeeccee aa DDiiooss.. Un corazón que acos-tumbra a expresar agradecimiento en pa -labras y acciones es un corazón bendeci-do. No podemos ser fieles y desagradeci-dos al mismo tiempo. Nuestro Padre ce -les tial ansía que apreciemos todo lo queél hace por nosotros.

• CCoonnffííaa eenn CCrriissttoo.. La fe en el Salvador y lafidelidad en la vida son cosas íntimamenterelacionadas. Uno de ellos no puede existirsin el otro. La fe en Cristo dará como resul-tado una vida fiel. Al aprender a vivir fiel-mente, nuestra fe en Cristo aumentará.Si observamos las recomendaciones an -

teriores podremos experimentar la plenitud dela fe, un entendimiento que guiará nuestravida, especialmente en momentos de pruebas.

PARA COMENTAR1. Explica cómo puedes adquirir la fidelidad,

aportando ideas adicionales a las presenta-das en la lección para hoy.

2. ¿Cuáles son los frutos de la fidelidad?

La fidelidad es algo imprescindible.


Una vida rebosante de fe

83Samson Oguttu, Dagoretti, Nairobi, Kenia

Jueves18 de febrero

OPINIÓNHebreos 11: 23-29

Cuando era alumno de secundaria ter-minaba mis cartas con la expresión: Aten -tamente. Era sencillamente una forma dedespedida, nada más. Sin embargo, al irconociendo más de la vida me di cuentaque dicho concepto está relacionado conla fidelidad. Uno de los relatos bíblicos quemás me ha enseñado respecto a la fideli-dad es la historia de Moisés.

La vida de Moisés, un levita por naci-miento, está repleta de actos de fe y defidelidad desde sus mismos inicios. Élnació para el tiempo en que el faraón habíadecretado que mataran a todos los bebésvarones que nacieran en los hogares hebreos.Durante ese tiempo, las mujeres hebreas lopasaban muy mal; pero la fe en Dios forta-lecía sus corazones y «no tuvieron miedodel edicto del rey» (Heb. 11: 23). De esaforma Moisés vivió para librar al pueblo dela esclavitud de Egipto.

Gracias a la fidelidad de sus padresMoisés sobrevivió. Gracias la misma fideli-dad fue adoptado por la hija del faraón.Por la fe, al crecer rechazó ser llamado hijo

de la hija del faraón. Gracias a su fidelidadescogió sufrir con el pueblo de Dios en vezde disfrutar los poco duraderos placeresdel pecado. Por fe consideró la suerte deCristo de más valor que todos los tesorosde Egipto. Por fe, intentó lo imposible mar-chando adelante sin desmayar hasta que elpueblo de Israel fue librado finalmente dela esclavitud.

Moisés venció las proyecciones másne gativas gracias a su fe y fidelidad. ¿Quédirías de ti mismo o de ti misma? Las vi -vencias que marcan la trayectoria de Moisésno son tan diferentes de las nuestras. Lu -chamos en contra del mal en diversos fren-tes de batalla: la familia, la educación, eldinero, el desempleo, etc. Incluso en laiglesia tenemos que luchar ocasionalmentecon el diablo. Necesitamos la fe y la fideli-dad de Moisés para cruzar los mares rojos yllegar a la Tierra Prometida celestial.

PARA COMENTAR1. ¿Será posible tener en la actualidad una

fe semejante a la de Moisés? De ser así,¿cómo podríamos adquirir dicha fe?

2. ¿Por qué piensas que algunas personasque dicen ser cristianas no practican lafidelidad? ¿Cómo puedes evitar que lomismo te suceda a ti?

3. Explica cómo reaccionarías frente a unprofesor, un compañero de trabajo o unpastor que no sea fiel a su profesión o aDios.

Las vivencias que marcan la trayectoria de Moisés no son tan diferentes de las nuestras.


Mi fidelidad

84Allison Zollman, Fort Oglethorpe, Georgia, EE. UU.


EXPLORACIÓNSantiago 2: 18

PARA CONCLUIRLa fidelidad constituye un don del

Espíritu Santo concedido a los seguidoresde Cristo. Sin embargo, este don no es algoque los cristianos pueden sencillamenteafirmar que lo poseen. Deben manifestar lafidelidad en todas sus acciones. Los verda-deros cristianos deben manifestar la fideli-dad a través de sus vidas, tomando encuenta que seremos reconocidos por nues-tros frutos (Mat. 7: 16). Practicar la fideli-dad es algo fácil mientras todo va bien. Esfácil mantener la confianza en el Señor si lavida nos sonríe. Sin embargo, nuestra fide-lidad es realmente probada cuando el mun -do parece desplomarse a nuestro alrede-dor.

CONSIDERA• Anotar en tu diario algunos incidentes que

te llevaron a dudar así como la forma enque lograste sobreponerte a los mismos.Concéntrate en tus emociones y reaccio-nes durante el transcurso de dichas expe-riencias.

• Preparar una lección para una clase deniños de la Escuela Sabática que expliqueel concepto de la fidelidad. Preparar algu-

na actividad práctica en que se ponga elejemplo de «tener fe», como sería el casode caminar con los ojos vendados, entreotras .

• Componer un corito que tenga como temala fidelidad. Luego puedes enseñarlo a tuclase de Escuela Sabática.

• Comentar con algún amigo acerca de lasocasiones en que has visto fortalecerse tufe. Comparte algunas ideas respecto aman tener fuerte tu fe en momentos deduda.

• Identificar alguna foto o ilustración quepuede servir de motivo al tema de la fide-lidad.

• Reflexionar en las consecuencias que hantenido en tu vida algunos actos de fe. De -dica algún tiempo a pensar cómo tus reac-ciones ante dichos acontecimientos fueronun reflejo de tu fe.

• Leer en su totalidad el libro de Job. Hazuna lista de las ocasiones en que la fe deJob pudo haber flaqueado, pero no lohizo. Prepara otra lista de los momentosen que tu fe pudo haber sido probada.Compara tus experiencias y reacciones conlas manifestadas por Job.

PARA CONECTAR� Max Lucado, Enfrente a sus gigantes.� El camino a Cristo, cap. 6.



El fruto del Espíritu es mansedumbre

«Dichosos los humildes, porque recibirán la tierra como herencia».

Mateo 5: 5


¿Qué pensarán?

87Francia Bissereth, Hyattsville, Maryland, EE. UU.


INTRODUCCIÓNLucas 6: 43-45

Un sábado un grupo de adventistasque iba de regreso a su casa después desalir de la iglesia se topó con un retén de lapolicía, en una de las calles de PuertoPríncipe, Haití. Cuando los adventistas seacercaron, uno de los agentes dijo que nohabía necesidad de revisar a aquel grupoporque estaban bien vestidos y llevabanBiblias en sus manos. Los creyentes les die-ron las gracias y siguieron su camino.

Mientras me dirigía a casa después deltrabajo observé que una mujer abría lapuerta de su auto en una intersección queestaba en rojo. Ella no se sentía bien y esta-ba comenzando a vomitar. Como me en -contraba cerca, fui en su ayuda. Al acercar-me, escuché que la gente decía que ellaestaba embarazada y que apenas había co -

mido en todo el día. Me sorprendí a verque en el auto había otras personas que sesintieron agradecidas mi sencilla ayuda. Nome di cuenta en aquel momento que lleva-ba puesta mi ropa verde de enfermera.

Esos pocos minutos debajo de aquel se -máforo, quizá habrían sido motivo para quealguien pensara que se le debía cierto agrade-cimiento. Sin embargo, el único reconoci-miento necesario fue la mirada agradecida deaquella persona que necesitaba ayuda.

¿Qué piensa el mundo cuando te ob -serva? ¿Cómo crees que los demás te cata-logan? ¿Pensarán ellos que eres alguien quelleva frutos cristianos, o que eres un árbolestéril? Realizar algún sencillo acto servicialque sabes producirá poco o ningún recono-cimiento de quienes te rodean, pero queserá identificado con un acto de humildad.Recuerda que Jesús afirmó que sus discí-pulos serían conocidos por sus frutos (Luc.6: 44). ¿Qué clase de frutos llevas en laactualidad?

La lección de esta semana nos ayudaráa entender mejor los frutos de la humildadasí como la forma de cultivarlos.

No me di cuenta en aquelmomento que llevaba puestami ropa verde de enfermera.


Un fuerza controlada

88


LOGOS

Génesis 50: 15-20; Mateo 5: 5; 11: 29;Romanos 12: 3; Gálatas 6: 1; Filipenses 2: 1-3

Entendiendo la mansedumbre(Mat. 5: 5; 11: 29)

La mayor parte de la gente que escuchala palabra mansedumbre piensa en un fideomojado. Un amigo nuestro bromea dicien-do: «Los mansos heredarán la tierra… silos demás se lo permiten». Sin embargo,cuando consideramos el término griegopraus, encontramos que tiene un significa-do diferente. El primer concepto describeun equilibrio entre extremos emocionales.En otras palabras, mansedumbre significaun equilibrio entre demasiado enojo y muypoco de lo mismo. Cuando la Biblia decla-ra «si se enojan no pequen» (Efe. 4: 26),quiere decir que existe una forma justifica-da y apropiada del enojo. Como cristianospodemos apropiadamente incomodarnosante la injusticia, pero erramos al reaccio-nar «al rojo vivo» si se nos ofende en algo.Este concepto enfatiza ese mismo equili-brio entre extremos emocionales.

El segundo significado de la manse-dumbre es algo más profundo. Describe ladinámica de un caballo o un buey queacepta cierto grado de control de parte desu dueño. Estos son animales poderososque podrían aplastar a su amo pero que sedejan conducir, adiestrar y dirigir. La Biblia,al establecer la humildad como un indica-dor de la vida dirigida por el Espíritu,apunta al cristiano que se somete a la volun-

tad de Dios aun cuando él o ella posea cier-to grado de determinación personal.

Rechazando la mansedumbre (1 Cor. 2: 14)

La naturaleza pecaminosa muestra suhorrible faz a través del egoísmo. La naturale-za carnal no permitirá que algo, o alguien, ladomestique o subyugue. En el Jardín delEdén, Eva dudó de Dios al escuchar la voz dela serpiente, oponiendo su voluntad a la delSeñor. Al hacerlo se alejó de lo que constitu-ye el espíritu de mansedumbre. No permane-ció en sujeción a Dios. La mayor parte de lagente está de acuerdo con la idea de que noses difícil someternos a otro ser. El origen delpecado nos muestra que Dios nos concedió eldon de la mansedumbre para que permane-ciéramos en sujeción a su voluntad.

Imitando a Jesús (Mat. 11: 29)Jesús, nuestro ejemplo perfecto, vino al

mundo para mostrarnos la senda de la salva-ción. Su vida constituyó una entrega total yuna confianza plena en su Padre. La Bibliamenciona cuán a menudo oraba durante todala noche con el fin de obtener las fuerzas paracumplir con su misión. De allí que nos invitea considerar su yugo. En aquellos tiempos unyugo no era algo que se podía comprar enuna tienda por departamentos en Jerusalén,donde había una cantidad de yugos colgandodel techo. Un yugo era algo hecho a la medi-da por un carpintero especializado. Requeríamedidas específicas con el fin de acomodarsea los animales que lo utilizarían para realizarpesadas tareas. El yugo no era una carga en símismo, sino el instrumento que hacía másfácil la tarea a realizar. Por eso Jesús dice:


89Kendall Turcios, Houston, Texas, EE. UU.

abnegado que reina allí, donde todo corazóncorresponde al Corazón del amor infinito, noharía vibrar en su alma cuerda alguna de sim-patía. Sus pensamientos, sus intereses y mó -viles serían distintos de los que mueven a losmoradores celestiales. Sería una nota discor-dante en la melodía del cielo. El cielo seríapara él un lugar de tortura».*

Jesús fue un ejemplo en esa entrega y nosinvita a imitar su mansedumbre.

La promesa de los mansos (Gén. 1: 28; Sal. 37: 11; Mat. 5: 5; Gál. 5: 22, 23)

Si alguna vez te has preguntado por quélos mansos heredarán la tierra, no eres elúnico. En el libro de Génesis Dios les ordenóa nuestros primeros padres que poblaran latierra. El pecado cambió todo aquello. Sinembargo, en la siguiente promesa del Anti -guo Testamento también encontramos unainvitación para que los hombres sometan denuevo su voluntad a Dios. «Pero los despose-ídos heredarán la tierra y disfrutarán de granbienestar» (Sal. 37: 11). La vida de Jesús enla tierra nos mostró el significado de la legíti-ma mansedumbre. En Gálatas la promesa delos mansos heredando la tierra se reafirmapara que mediante el Espíritu podamos reci-bir ese fruto.

PARA COMENTAR1. ¿Qué te impide vivir en mansedumbre?2. ¿Cuáles son las implicaciones para los

cristianos mansos de que ellos hereda-rán la tierra? ¿Tendrá un impacto inme-diato o futuro esa promesa? Motiva turespuesta

____________

*El camino a Cristo, p. 26.

«Permíteme entregarte un yugo para que loutilices siempre que tengas que llevar esacarga. Y, dicho sea de paso, mi yugo es fácil».El Maestro también lo dijo de otra forma:«En este mundo afrontarán aflicciones, pero¡anímense! Yo he vencido al mundo» (Juan16: 33).

Jesús no solamente predica , sino que esla personificación de la mansedumbre. En suobra de salvar al mundo él nos muestra laúnica forma en que podemos establecer unarelación correcta con Dios, experimentandoun gozo verdadero: sometiéndonos a él conmansedumbre. Jesús pudo utilizar su poderpara liquidar a todos sus enemigos. Sin em -bargo, mantuvo dicho poder en sujeción ala voluntad de Dios. Constituye un engañopensar que podemos ser felices separados dela voluntad divina. La verdadera felicidadpuede encontrarse únicamente en la entregaa Dios.

«En su estado de inocencia la mujer y elhombre, gozaba de completa comunión conAquel “en quien están escondidos todos lostesoros de la sabiduría y del conocimiento”.Pero después de su caída, no pudieron en -contrar gozo en la santidad e intentaron ocul-tarse de la presencia de Dios. Esa es todavíala condición del corazón que no ha sido rege-nerado. No está en armonía con Dios, niencuentra gozo en la comunión con él. Elpecador no podría ser feliz en la presencia deDios; le desagradaría la compañía de los seressantos. Y si pudiera ser admitido en el cielo,no se sentiría feliz allí. El espíritu de amor

Jesús no solamente predica,sino que es la personificación

de la mansedumbre.


La mansedumbre como una evidencia

90Lauren Halstrom, Saginaw, Míchigan, EE. UU.

Lunes22 de febrero

TESTIMONIOJuan 3: 1-21; 15: 1-6

«La mansedumbre es un fruto del Espí -ritu y una evidencia de que somos ramasdel Dios viviente. La presencia de la man-sedumbre es una innegable evidencia deque somos ramas de la Vid verdadera, yde que llevamos mucho fruto. Es una evi-dencia de que por fe contemplamos al reyy a su belleza mientras somos transforma-dos a su semejanza. Donde hay bondad,las tendencias naturales están bajo controldel Espíritu Santo. La mansedumbre no esuna especie de cobardía. Es un espíritu queCristo manifestó cuando fue injuriado,cuando soportó insultos y abusos. Sermanso no implica que tenemos que re -nun ciar a nuestros derechos sino que im -plica ejercer el dominio propio aun cuan-do se esté sometido a provocaciones. Lamansedumbre no permitirá que la pasiónasuma el control.

»Cuando Cristo fue acusado por lossacerdotes y los fariseos mantuvo su com-postura, aunque se mantuvo firme en afir-mar que sus acusaciones eran falsas. Él lesdijo: “¿quién de ustedes me convence depecado?” “Si he hablado mal, testifica enqué está el mal; y si bien, ¿por qué me gol-peas?” Él sabía que estaba en lo correcto.Cuando Silas y Pablo fueron azotados yechados en prisión sin un juicio o una sen -tencia, no renunciaron a su derecho de sertratados como correctos ciudadanos. Lue -go hubo un gran terremoto, los cimientos

de la cárcel fueron sacudidos, las puertasse abrieron, las esposas de las manos detodo prisionero se soltaron, entonces los ma -gistrados les enviaron un mensaje a los pri-siones para que se marcharan en paz. Enaquel momento Pablo protestó diciendo:“Después de azotarnos públicamente sinsentencia judicial y siendo ciudadanosromanos, nos echaron en la cárcel, ¿y ahora

nos liberan encubiertamente? No, por cier-to, sino vengan ellos mismos a sacarnos[…] Fueron y se excusaron; los sacarony les pidieron que salieran de la ciudad”.Gracias a la acción de Pablo y Silas elnombre de Dios fue magnificado y las auto-ridades humilladas. Fue necesario que lahonra de Dios fuera vindicada en aquelmomento».*

PARA COMENTARProbablemente estés afrontando una si -tuación que demande la mansedumbreque Cristo, así como Pablo y Silas, de -mostraron. Considera cuidadosamente tusituación. ¿Cómo reaccionarías en unaforma mansa para que la honra de Diossea vindicada sin renunciar a tus dere-chos y manteniendo el dominio propiocon la ayuda del Espíritu?_________________*Signs of the Times, 22 de agosto de 1895.

«La mansedumbre no es unaespecie de cobardía».


Mansedumbre o debilidad

91Samuel Pegus, Adelphi, Maryland, EE. UU.

Martes23 de febrero

EVIDENCIAMateo 5: 5

La mansedumbre no es lo mismo que ladebilidad o la cobardía. Si así fuera, seríaimposible que alguien débil heredara la tie-rra. A simple vista, los personajes bíblicosque se destacaron por su mansedumbreaparentaban ser sumisos y titubeantes antela autoridad. Sin embargo, las cosas nosiempre son lo que aparentan. La manse-dumbre tiene sus raíces únicamente en lalealtad y la obediencia a Dios quien es nues-tro rey y juez.1 Recordemos que los cristia-nos sufren pruebas y tribulaciones porcausa de su obediencia. Los mansos ten-drán preocupaciones, no obstante se comu-nicarán con Dios y encontrarán descanso yfortaleza en su Palabra. La lectura de laBiblia y la oración los guiarán. Ese es el tipode personas que heredará la tierra.

Una característica de alguien «manso»implica que esa persona «se sometió». Seasume que hay una fuerza o fortaleza queha sido colocada bajo control. «Cuando sedomestica un caballo, se lo entrena paraque un jinete puede montarlo, o para quetire de un arado. El término correcto paradescribir ese proceso se refiere al hecho deque el animal ha sido «amansado», conver-tido en manso o domado. Se someterá aljinete o al arnés. El animal ahora mostraráuna fuerza controlada».2 Abraham eramanso. Si hubiera confiado en sus fuerzas,no habría aceptado el sacrificio de su hijo.Tampoco habría abandonado su hogar paramarcharse a un paraje desconocido. Jobpudo haber tenido preguntas y dudas en

medio de su tribulación, pero con humil-dad y mansedumbre pudo decir: «¡Benditosea el nombre del Señor!» (Job 1: 21). Si Jobhubiera confiando únicamente en su forta-leza, habría maldecido a Dios y esperado lamuerte (Job 2: 9). La mansedumbre hizoque Juan dijera: «A él le toca crecer, y a mí

menguar» (Juan 3: 30). ¿Acaso no es esto lamejor muestra de mansedumbre? La forta-leza de Dios es perfecta, y él nos fortalecerási se lo permitimos.

Pedro nos recuerda que somos «linajeescogido, real sacerdocio, nación santa, pue -blo adquirido por Dios, para que anunciéislas virtudes de aquel que os llamó de lastinieblas a su luz admirable» (1 Ped. 2: 9).Abraham y Pablo sabían que eran miem-bros de ese real sacerdocio. Ellos se gozabana causa de su condición privilegiada. Pre -viamente habían estado en oscuridad, perouna vez que se sometieron mansamente a lavoluntad de Dios entraron a la luz divina.Anhelaban el reino que se les había prome-tido.

Por lo tanto, mi amigo o amiga, practi-ca la mansedumbre.

_________________

1. God’s Word to Women, «What Is Meekness?» http: //

www.godswordtowomen.org/lesson %2052.htm (con-

sultado el 4 de diciembre, 2008)

2. What is Meekness? http: //healtheland.wordpress.com/

2007/11/15/what-is-meekness/ http: //healtheland.word

press.com/2007/11/15/what-is-meekness/

La fortaleza de Dios es perfecta.


Una pequeña diferencia

92Gladys S. Kelley, Laurel, Maryland, EE. UU.


CÓMO ACTUARFilipenses 2: 3-5; 1 Pedro 3: 4

Hay un antiguo proverbio que dice:«Mans o pero no menso». La diferencia entrelos conceptos manso y menso es tan solo unavocal. Sin embargo, en la práctica existe todoun abismo de separación entre alguien humil-de y un tonto. Para muchos cristianos el con-cepto expresado por Jesús; «manso y humildede corazón» (Mat. 11: 29) es uno de los donesmás difíciles de aceptar e implementar. Quizála razón no radica en la falta de voluntad, sinoen la interpretación del concepto mansedumbre.

Un diccionario define la mansedumbrecomo la capacidad para no reaccionar conviolencia o agresividad ante una ofensa o unataque. Esta definición, y otras tantas, poseeun sesgo negativo. Pareciera que los mansosson una especie de alfombra donde se limpialos pies la gente de carácter fuerte y decidido.Si somos sinceros, ninguno de nosotros seofrecería voluntariamente para desempeñarel pues to de alfombra para una puerta deentrada.

No obstante, en 1 Pedro 3, Jesús afirmaque la mansedumbre es muy estimada porDios. Por tanto, es crucial que la obtengamos.Mediante del ejemplo de Jesús, aprendemosque la mansedumbre no se pone de manifies-to en las cosas que hacernos, sino en la formao manera en que las realizamos. Nuestra acti-tud determinará si somos mansos o mensos.Ser manso implica tener la capacidad para daruna respuesta áspera y no hacerlo. Esto puedelograrse únicamente si seguimos el ejemplo demansedumbre dado por Jesús. Hay varias for-mas en que podemos lograrlo:• Entregándonos a Dios de un todo (Juan5: 30). Aunque Jesús era uno de los miem-

bros de la Deidad, se entregó por completoal Padre y al Espíritu Santo. Cuando enfren-temos una situación difícil, nuestra relacióncon Dios desempeñará un papel importan-te en la forma en que respondemos.

• Poniendo a los demás en primer lugar (Fil.2: 5-7). ¡Jesús entregó todo lo que él era pornosotros! Cuando veamos a los demás en -frentar alguna prueba difícil y tengas los re -

cursos para ayudarlos, asegúrate de hacerlo,aun cuando esto te coloque en una situacióndesagradable.

• Caminando humildemente con Dios (Miq.6: 8).Cuando observemos los requisitos esti-pulados en Miqueas 6: 8, actuaremos comoagentes de cambio en las vidas de los demás.

Dios desea que seamos pacientes y humil-des, pero que estemos listos para pelear labuena batalla de la fe. De acuerdo con las nor-mas de la sociedad, podremos aparentar quesomos tontos. Sin embargo, el Espíritu deDios será quien incline la balanza haciendoque todo sea diferente.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo actuarías si tuvieras que lidiar con

un jefe o compañero de trabajo insoporta-ble? ¿Cuál es la diferencia entre respondery reaccionar?

2. Piensa en los ministerios en que te en -cuentras involucrado o involucrada en laactualidad? ¿Qué te ha motivado para ser-vir en ellos?

El Espíritu de Dios será quienincline la balanza.


La paz genuina y la humildad

93Andrew Gregory Stoner, Takoma Park, Maryland

Jueves25 de febrero

OPINIÓNMateo 11: 29, 30

Muchas veces dudamos antes de acep-tar el consejo ajeno. En caso de que vaya-mos a hacerlo, nos gustaría conocer prime-ramente la experiencia del consejero, suscreencias y otros aspectos. Porque, des-pués de todo, ¿acaso conocen el tema delcual están hablando? ¿Han experimentadoel problema que estás enfrentado? ¿Te co -nocen en verdad?

Sencillamente, es difícil creer y obede-cer: descartando todas tus vivencias pre-vias. Igualmente, pensar que alguien pue -de ayudarnos a responder adecuadamenteante una crisis o dificultad. Además, ima-gínate que la persona que ofrece el conse-jo también dice: «Hazme caso y toma miscargas». Eso sería mucho pedir ¿no es cier-to? Implica que te humilles y creas quequien te aconseja es de toda confianza,alguien leal, y sobre todo que desee tu bie-nestar.

Nuestro salvador, maestro, amigo ySeñor Jesucristo nos dice: «Carguen conmi yugo y aprendan de mí, pues yo soyapacible y humilde de corazón, y encontra-rán descanso para su alma» (Mat. 11: 29).En el versículo 30, Jesús afirma que su cargaes liviana. Pienso que Jesús dijo esto por-que nos conoce. Él sabe que nuestra pri-mera reacción podría ser: «¿Tomar tu yugo?¡Nada de eso! ¡Ya tengo suficiente con mispropias cargas!»

Jesús conoce nuestras cargas. Las mis-mas no son nada si las comparamos con

las de él como creador y sustentador delmundo. También sabe que cuando acepte-mos su yugo nuestra carga se aligerará.Podemos aprender de él cómo hallar des-canso para nuestras almas, siendo amablesy humildes en lugar de ser altaneros y cri-ticones.

La paz verdadera no la podremos en -contrar acumulando posesiones, dineroo poder personal. Encontramos pruebasde ello en la vida de cualquier estrella deHollywood. El mundo puede despojarnosde las cosas materiales tan rápido como noslas da. Nuestra naturaleza codiciosa es auto -destructiva y únicamente proporciona do -lores y problemas. Jesús predica con elejemplo y nos muestra que únicamente alhumillarnos podremos heredar el reino delos cielos.

El Maestro es nuestro ejemplo. La pazes un don que Dios nos concede. No pode-mos ganarla mediante la realización debuenas obras o gracias a una saludablecuenta bancaria. Todo lo que podemoshacer es humillarnos, alabarlo, y crecer enel fruto de la mansedumbre modelada pornuestro Señor quien además es nuestro sal-vador, rey y amigo. Únicamente entoncesencontraremos una paz duradera y unavida que es eterna.

La paz verdadera no la podremos encontraracumulando posesiones,dinero o poder personal.


Un concepto difícil

94Sergio Torres, Miami, Florida, EE. UU.


EXPLORACIÓNFilipenses 2: 5-8

PARA CONCLUIRSer manso significa varias cosas. Im -

plica ser amable y bondadoso o bondado-sa. A ser mansos no tendremos que ganartoda disputa. Significa que actuaremosmenos a la defensiva. Es pensar primeroen los demás y ayudar a quienes te rodean.Ser manso es aceptar que no siempre ten-dremos la razón. Ser manso es conocer yvivir la verdad de que todo ser humano esalguien valioso. Ser manso es parecerse aCristo. No es de extrañase que mansedum-bre sea un concepto difícil.

CONSIDERA• Utilizar la frase Bienaventurados los mansos

en tus oraciones personales durante la se -mana próxima. Piensa en la forma en que lamansedumbre puede cambiar tu vida.

• Asistir a una iglesia de otra cultura o etniadurante todo un mes. Trata de establecerallí vínculos de amistad con un mínimo detres personas.

• En caso que tengas un auto o moto, inten-ta no tocar la bocina durante toda una

semana. Al final de dicho período observasi se efectuó algún cambio en tu forma demanejar.

• Dedicar algún tiempo a la semana paracompartir con alguien o con un grupo depersonas que tienen necesidades especia-les. Puedes unirte a alguna organización deservicios de tu comunidad. Al participar enuna agrupación de ese tipo, ¿podrías decirque aprendiste algo respecto a la manse-dumbre? ¿Crees que tu vida podría cam-biar como resultado de dicha experiencia?Trata de llevar a cabo en forma regular estetipo de actividades.

• Estar más dispuesto a aceptar las opinio-nes de los demás durante alguna reuniónfamiliar.

• Practicar diariamente la disciplina del si -lencio durante diez minutos durante todauna semana. ¿Qué te dijo Dios duranteesos momentos de silencio?

• Involucrarte en alguna actividad que inten-te ayudar a los pobres de tu comunidad.

PARA CONECTAR� El discurso maestro de Jesucristo, «En la lade-

ra del monte».� El ministerio de curación.


Lección 1027 de febrero al 5 de marzo

El fruto del Espíritu esdominio propio

«Más bien, golpeo mi cuerpo y lo domino, no sea que, después de haber predicado a otros, yo mismo

quede descalificado».1 Corintios 9: 27


El dominio propio

97Edinor Lindiwe Donda, Pretoria, Suráfrica


INTRODUCCIÓNProverbios 25: 28; Gálatas 5: 18, 24, 25.

El dominio del carácter es el principaltema de Proverbios 25: 28. Los muros de unaciudad se edificaban para proteger a los habi-tantes de la misma. Una ciudad desprotegidaestaba expuesta a un sinnúmero de peligros.De igual manera, una persona que no se con-trole se expone a muchos males. El dominiopropio es la capacidad para actuar comedida-mente sometiéndose a la voluntad divina.

«El mundo ha tenido sus grandes maes-tros, hombres de intelecto gigantesco y abar-cante espíritu investigador, hombres cuyasdeclaraciones han estimulado el pensamiento,y abierto a la vista vastos campos de conoci-miento; y estos hombres han sido honradoscomo guías y benefactores de su raza; pero hayUno superior a ellos. Podemos rastrear laascendencia de los maestros del mundo hastadonde alcanzan los informes humanos: peroantes de ellos estaba la Luz. Así como la luna ylos planetas de nuestro sistema solar brillanpor la luz del sol que reflejan, los grandes pen-sadores del mundo, en lo que tenga de ciertosu enseñanza, reflejan los rayos del Sol deJusticia. Todo rayo del pensamiento, todo des-tello del intelecto, procede de la Luz delmundo.

»En estos tiempos se habla mucho de lanaturaleza e importancia de la “educación su -perior”. Aquel con quien están “la sabiduría yel poder” y de cuya boca “viene el conocimien-to y la inteligencia”, imparte la verdadera edu-cación superior.

»Todo verdadero conocimiento y desarro-llo tienen su origen en el conocimiento deDios. Doquiera nos dirijamos: al dominio físi-co, mental y espiritual; cualquier cosa que con -

templemos, fuera de la marchitez del pecado,en todo vemos revelado este conocimiento.Cualquier ramo de investigación que empren-damos, con el sincero propósito de llegar a laverdad, nos pone en contacto con la Inte li -gencia poderosa e invisible que obra en todaslas cosas y por medio de ellas. La mente delhombre se pone en comunión con la mente deDios; lo finito, con lo infinito. El efecto que

tiene esta comunión sobre el cuerpo, la mentey el alma sobrepuja toda estimación. En estacomunión se halla la educación más elevada.Es el método propio que Dios tiene para lograrel desarrollo del hombre. “Vuelve ahora enamistad con él”, es su mensaje para la huma-nidad». En esto consiste la manifestación de laobra de Dios en nosotros mediante el EspírituSanto. La falta de dominio propio es la causade muchos de los problemas de la sociedadactual. La falta de amor por Dios y por su Pa -labra tiene como consecuencia la ausencia dedominio propio (2 Tim. 3: 1-4)».1

¿Cómo adquirimos ese dominio propio?«A fin de saber cómo podemos comportarnoscon circunspección, debemos seguir a Cristopor donde nos conduzca».2 Aprendemos adominarnos al entregarnos por completo alSeñor. Ser controlados por Cristo es reconocerque le pertenecemos a él. Que esta semana tuoración sea: «Mantén mis pies firmes en tussendas» (Sal. 17: 5)._________________

1. La educación, pp. 13, 14.

2. Hijos e hijas de Dios, p. 156.

Aprendemos a dominarnos al entregarnos por completo al Señor.


Temperancia

98


LOGOSJueces 13-16; 1 Corintios 9: 24-27;Filipenses 4: 8; Colosenses 3: 1-10;Hebreos 12: 1, 2; 1 Juan 2: 15, 16

El significado de la temperancia(Sal. 101: 3; 1 Cor. 9: 24-27;Gál. 5: 23; Fil. 3: 8, 9)

La temperancia al igual que la educa-ción es «el desarrollo armonioso de las fa -cultades físicas, mentales y espirituales».1

Es el dominio de todas nuestras acciones,pensamientos, sentimientos, hábitos, ape-tito, deseos y pasiones. La temperancia odominio propio significa morir al yo ypermitirle a Cristo asumir el control detodos los aspectos de nuestras vidas. No -temos que este fruto describe una relaciónque sostenemos con nosotros mismos.

Adquiriendo el dominio propio(Gén. 37-39; Jue. 13-16; Dan. 1; Luc. 2: 52)

«Durante la niñez y la juventud el ca -rácter es muy moldeable. El dominio pro-pio debe ser adquirido durante ese perío-do. Los hábitos formados en los añosmozos, más que cualquier otro talento,de cidirán si una persona triunfará o serávencida en la batalla de la vida. Una prue-ba de esto se manifiesta en las vidas deJesús, Daniel y sus compañeros así comoen la de José. Muchos aconsejan disfrutarla vida mientras se es joven. Luego, cuan-do se llegue a viejo, se puede comenzar avivir correctamente. Sin embargo, esto nofunciona. Considera las vidas de Sansón,

Nerón y Alejandro el Magno. Dios nosenseña que debemos buscarlo en los díasde nuestra juventud (Ecle. 11: 9; 12: 1).«El joven que encuentra gozo y placer enla lectura de la Palabra de Dios y en la ora-ción será continuamente refrescado porlas brisas de la Fuente de la vida. Alcan za -rá una estatura de excelencia moral y unaamplitud de miras que los demás no po -drían siquiera concebir».3

La mente y el habla (Prov. 4: 25, 26; Mat. 6: 19, 20;Col. 3: 2, 3; 1 Juan 2: 15, 16)

«La mente controla al hombre entero.Todos nuestros actos, buenos o malos, tie-nen su origen en la mente. Es la mente laque adora a Dios y nos une con los serescelestiales».4 Lo que decimos y hacemostiene su origen en la mente. La forma enque respondemos a los estímulos del am -biente por lo general se origina en la mente.Si la mente suya está enfocada en el mun -do, usted actuará y pensará en la mismaforma que el mundo lo hace. El apóstolPedro nos exhorta a controlar nuestrasmentes (1 Ped. 1: 13). Si queremos pensaren determinada forma, necesitamos enfo-carnos en cosas que estén asociadas con lomismo (Prov. 4: 25, 26) ya que por mediode la contemplación somos transforma-dos. Debemos espaciar nuestras mentesen las cosas de lo alto, guardando nuestrostesoros en el cielo, y no amando al mundo.Debemos meditar en Cristo (Isa. 26: 3)aprendiendo a pensar en la forma que éllo hace ya que él es nuestro ejemplo per-fecto. Una vez que aprendamos a contro-


99Khwezi Yanga Toni, Ciudad del Cabo, Suráfrica

lar la mente, será más fácil controlar nues-tras palabras. La Biblia nos anima a sazo-nar nuestras palabras con gracia de talforma que los demás puedan ser conduci-dos a Cristo (Col. 4: 6; Rom. 15: 18). Orapidiéndole a Dios que cuide tus labios(Sal. 141: 3). Recuerda siempre que laspa labras reflejan nuestros pensamientos.

El apetito (Heb. 12: 1; 1 Cor. 6: 19, 20; 10: 31)

Nuestros cuerpos son templos deDios. Por tanto, no debemos consumir ali-mentos o bebidas que nos contaminen.En Hebreos 12: 1 se nos exhorta a presen-tar a Dios nuestros cuerpos como sacrifi-cios vivos.

Lo que comemos afecta la forma enque pensamos. «Ningún cristiano debein troducir en su cuerpo comidas o bebi-das que nublen sus sentidos, o que tien-dan a afectar su sistema nervioso. El tem-plo de Dios no debe ser contaminado. Lasfacultades del cuerpo y de la mente debenser mantenidos en salud con el fin de quepuedan ser utilizados para la gloria deDios».5

Los frutos (Mat. 19: 26;Juan 15: 5, 16; Gál. 5: 22-25; Fil. 4: 13)

En una vid son las ramas son las queproducen frutos. El fruto y las ramas de -penden de la vid. Cristo dijo que él es lavid y nosotros las ramas. Si como ramaspermanecemos conectados a él, llevare-mos mucho fruto. Sin él no podremos lle-

var el fruto del Espíritu. Sin él, no podre-mos ejercer el dominio propio. El frutodel Espíritu Santo únicamente puede cre-cer en nosotros cuando dependamos deCristo (Mat. 19: 26; Fil. 4: 13).

Una rama no produce frutos para con-

sumirlos ella mismo, sino para beneficiara los demás. De igual forma, llevamos elfruto del Espíritu Santo con el fin de ben-decir a los demás y llevarlos a Cristo. «De -bemos vencer los deseos de la carne ypracticar la temperancia, mientras hace-mos el bien a los demás».6 «Porque ningu-no de nosotros vive para sí mismo, ni tam-poco muere para sí» (Rom. 14: 7).

PARA COMENTAR1. ¿Piensas que la temperancia tiene úni-

camente que ver con asuntos de salud?Si tu respuesta es afirmativa ¿qué po -drías hacer con el fin de cambiarla?

2. Considera tus hábitos o la falta de ellos.¿Cuáles de ellos muestran algún gradode dominio propio o la falta del mismo?¿Cómo podrías desarrollar hábitos másapropiados?

_________________

1. La educación, p. 14.

2. Meditaciones matinales, p. 79.

3. Ibíd., p. 83.

4. Mente carácter y personalidad, t. 1, p. 72.

5. La temperancia, p. 18.

6. Adventist Review, 26 de octubre de 1995, p. 19.

La Biblia nos anima a sazonarnuestras palabras con gracia.


Determinando el futuro

100Khaka Gomba, Pretoria, Suráfrica

Lunes1º de marzo

TESTIMONIO

1 Corintios 9: 27

«¿Qué puede hacerse para detener lamarea de enfermedad y crimen que estáarrastrando nuestra especie a la ruina y a lamuerte? Como la gran causa del mal ha dehallarse en la complacencia del apetito y lapasión, la primera y gran obra de reformadebe ser aprender y poner en práctica laslecciones de la temperancia y el dominiopropio.

»Si ha de efectuarse un cambio perma-nente para el mejoramiento de la sociedad,la educación de las masas debe empezar enla época temprana de la vida. Es casi segu-ro que los hábitos formados en la infanciay la juventud, los gustos adquiridos, el do -minio propio logrado, los principios incul-cados desde la cuna, han de determinar elfuturo del hombre o de la mujer. El crimeny la corrupción resultantes de la intempe-rancia y las costumbres relajadas podríanser evitados por la debida educación de lajuventud.

»La salud física perfecta es una de lasmás grandes ayudas para formar en la ju-ventud caracteres puros y nobles, fortale-ciéndolos para dominar el apetito y refre-nar los excesos degradantes; y, por otraparte, estos mismos hábitos de dominiopropio son esenciales para el manteni-miento de la salud».1

«Los que no vencen en lo pequeño notendrán fuerza moral para resistir las tenta-ciones mayores. Todos los que deseanhacer de la honradez el principio rector desus negocios diarios en la vida deberáncuidar de no codiciar “ni plata, ni oro, nivestido de nadie”».2 »Mientras se sientan

satisfechos con los alimentos y los vestidosadecuados, será fácil encontrar la manerade mantener alejados el corazón y las manosde la desviación de la codicia y la desho-nestidad».3

Sin duda alguna tendrán que enfrentarcosas que los pondrán a prueba, pero conla fuerza de Jesús podrán vencer.

PARA COMENTAR1. ¿Qué pasos prácticos podemos dar con el

fin de guardar las avenidas de nuestrasmen tes?

2. ¿Cuánto daño ha causado en nuestras co -munidades la falta de dominio propio?

____________1. Mensajes para los jóvenes, p. 231.2. Testimonios para la iglesia, t. 4, p. 567.3. Ibíd.

«La primera y gran obra de reforma debe ser

aprender y poner en prácticalas lecciones de la temperan-cia y el dominio propio».


Autocontrol o autodestrucción

101Sipiwe Nelani, Ciudad del Cabo, Suráfrica

Martes2 de marzo

EVIDENCIAFilipenses 4: 8

Los detalles que rodean la muerte deAlejandro el Magno no están del todo cla-ros. Una versión afirma que se enfermómientras organizaba un proyecto para irri-gar las costas del Golfo Pérsico utilizando elagua del río Éufrates. Estando en una fiestacayó enfermo de repente. En aquella fiestase conmemoraba más de un acontecimien-to. Se dice que durante la celebración Ale -jandro llenó de vino un gran recipiente yque lo bebió de un golpe. Esto le causó ungran malestar. En aquellas circunstancias,nadie pudo ayudarlo por lo que se hacíaevidente que fallecería. En vista de lo graveque estaba sus compañeros le preguntaron:«¿A quién le dejarás el reino?» A lo que con-testó: «Al más fuerte». Esas fueron sus últi-mas palabras. Al atardecer del diez de juniodel año 323 a.C., luego de estar postradodurante unos diez días, Alejandro murió enel palacio de Nabucodonosor.1

Uno de sus nombres fue Alejandro elGrande, aunque también fue llamado Ale -jandro el Magno; pero no fue precisamenteel más grande respecto al dominio propio.Conquistó al mundo, pero no pudo con-quistar sus pasiones. Se cree que el consu-mo de alcohol fue una de las causas de sumuerte.

De acuerdo con las evidencias científi-cas actuales y las creencias espirituales, elbienestar físico depende más de la capaci-dad para mantener en sujeción las fuerzasinternas que de controlar las circunstanciasy acontecimientos externos. Esto no consti-tuye nada nuevo. Esto es algo común en

muchas culturas y religiones. «La gran ver-dad que el control de los pensamientos de -termina la calidad de vida ha sido un hechoconocido desde los mismos inicios de lahistoria humana».2 El control de los impul-sos internos determina el resultado de lasexperiencias externas.

En la primera parte de 2 Samuel 11 semuestra a David observando a una jovenque se bañaba al aire libre. Las consecuen-cias de aquel primer acto y los siguientes

llevaron a David a asesinar al esposo deBetsabé. Aquella muerte demuestra otroacto extremo de falta de control. En otro co -nocido caso vemos lo opuesto. José ejercióun gran dominio propio cuando la mujerde Potifar quiso seducirlo. Aun cuando lasmentiras de ella llevaron a José a la cárcel, elresultado final de su rechazo a la tentaciónfue de una gran relevancia: José contribuyóa salvar a toda una nación de morir de ham-bre.

PARA COMENTARLa frase dominio propio puede ser engañosa.¿Es que acaso podemos dominarnos? ¿Enqué sentido puede ayudarnos a contestar lapregunta anterior el hecho de que el domi-nio propio sea uno de los frutos del Espíritu?____________1. «Alejandro Magno» en: http://es.wikipedia.org/wiki/Ale

jandro_Magno.2. Csíkszentmihályi, Mihaly. Flow: The Psychology of Opt -

imal Experience. (Harper and Row, 1990), p. 20.

«El control de los pensamientosdetermina la calidad de vida».


Cuando nadie esté mirando

102Nkosazana Uviwe Maxhela, Ciudad del Cabo, Suráfrica

Miércoles3 de marzo

CÓMO ACTUARJueces 13-16; 1 Corintios 9: 24-27;Filipenses 4: 8; Colosenses 3: 1-10;Hebreos 12: 1, 2; 1 Juan 1: 15, 16

Eres la única persona que está en lahabitación de tus padres. ¡Adivina qué seve en la mesa del vestidor! ¡Dinero! Comoque te estaba llamando por tu nombre.¿Lo tomarías marchándote rápidamente, oresistirías la tentación?

Resistir una tentación puede represen-tar una lucha, especialmente cuando nohay testigos. Jesús reconoció que en oca-siones nuestro espíritu desea hacer lobueno, mientras que la naturaleza carnales como un viento que nos empuja (Mar.14: 38). En el momento de la prueba, Dioste ve aun cuando pienses que nadie te estámirando. Él desea que ejerzamos el domi-nio propio, controlando nuestros tempe-ramentos aun cuando seamos provocados(Rom. 12: 19-21). Él desea que seamoscuidadosos con lo que comemos y quepensemos en lo que es santo y aceptable asu vista. Dios dejó una huella para que lasiguiéramos según vamos desarrollandodominio propio. La senda está claramenteseñalizada. A continuación encontrarás al -gunas señales• AAbbrróócchhaattee eell cciinnttuurróónn ((IIssaa.. 5599:: 11))..Al hacer-lo, aseguraremos firmemente nuestrosco razones al trono de la gracia. Esto lolograremos orando fervientemente y po -niendo nuestra confianza en el Todo po -deroso cuyo brazo no se acorta para sal-var. Al mantenernos en constante comu-nión con él, haremos que sus palabras se

graben en nuestros corazones. Entoncesel Espíritu Santo podrá librarnos.

• MMeeddiittaa ((FFiill.. 44:: 88)).. Si llenamos nuestrasmentes de pensamientos puros, estare-mos mejor preparados para resistir lastentaciones. Según vayan germinando yarraigándose en nuestras mentes las se -

millas que representan los buenos pen-samientos, estaremos mejor capacitadospara resistir cualquier ataque en contrade nuestro dominio propio. Resistir elmal se convertirá en algo que haremospor principio.

• AApprreennddee aa hhaacceerr eell bbiieenn ((IIssaa.. 11:: 1177))..Ayudaral prójimo es una de las mejores vías paraescapar de la tentación. Cuando enfrenta-mos una situación difícil, mantente firmedel lado de Dios, da una vuelta completay haz lo correcto. Los actos de bondad seopondrán a la tentación y te mantendránenfocados en la fortaleza divina, en vezde poner de relieve tu debilidad.

• SSaall ccoorrrriieennddoo ((SSaanntt.. 44:: 77))..Huir de la tenta-ción no es una señal de debilidad. Es unamuestra de dominio propio. Dios diceque debemos evitar al diablo porque labatalla no es nuestra, sino de él. Cuandonos alejamos corriendo, reconocemos sugracia salvadora y su poder para salvar-nos. Corre, y deja que él se ocupe de tustemores.

Dios dejó una huella para que la siguiéramossegún vamos desarrollando

dominio propio.


103Xhantilomzi Perseverance Mlamleli, East London, Suráfrica

OPINIÓNSalmo 101: 3

Muchos cristianos no están conscien-tes de los peligros que se nos presentan através de los medios de comunicación. Latelevisión, la radio, las revistas y muchosportales de Internet tienen como objetivocontrolar nuestras mentes aun cuando nonos demos cuenta de ello. «Cualquier in -formación programada para impactar tumente en forma subliminal no encontraráningún tipo de resistencia. Esta informa-ción de índole subliminal se almacenaráen tu cerebro con una identificación quedisparará una alarma retardada capaz deinfluir en tu comportamiento».1 Mensajesde este tipo no los reconoceremos en formaconsciente porque se nos presentan dema-siado rápido como palabras impresas, imá -genes o voces. Reconocer que existe infor-mación programada para alcanzarnos deforma subliminal le concede un mayor sig -nificado al texto para hoy. Es como si elsalmista hubiera entendido plenamenteque el subconsciente puede absorber mu -chas cosas sin darse cuenta de ello.

Los medios de información intentanredefinirnos la realidad. Gran parte de eseesfuerzo tiende a presentar al pecado enformas atractivas.

Es como si quienes trabajan en los me -dios de comunicación hicieran un esfuer-zo especial para degradar nuestras habili-dades mentales y espirituales. El peligroque enfrentamos es que los valores de unmundo de pecado fueran moldeando deforma gradual nuestra forma de pensar asícomo la manera en que vivimos. De allí

que surja una lucha que involucrará eldominio propio. Los medios informativospueden también adormecer nuestro inte-rés y disposición para meditar en la Pa -labra de Dios. Un autor, que es también ungran lector, nos relata su experiencia per-sonal. «La Internet pareciera estar demo-liendo con leves golpes mi capacidad de

concentración y contemplación. Mi menteanticipa recibir información en la formaque la Red la distribuye: en una especie defragmentos que fluyen como en una cinta.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo podrías rehuir el engaño de los

medios de comunicación2. Evalúa lo que lees, ves, la música que

escuchas, y el tiempo que dedicas a laInternet. ¿Cómo puede todo lo ante-rior influir en tu capacidad para estu-diar la Biblia y aplicar las verdades deella a tu vida? ¿Qué necesitas cambiarpara estudiar de manera más efectiva ypracticar la Palabra de Dios?

3. ¿Por qué la Biblia requiere que nos abs-tengamos de toda apariencia de mal?(1 Tes. 5: 22).

____________

1. Steven Jacobson, Mind Control in the United States.

2. The Atlantic. «Is Google Making Us Stupid? [¿Está Google

convirtiéndonos en estúpidos?] Nicolas Carr. http://www.

theatlantic.com/doc/200807/google .Consultado el 12

de diciembre, 2008.

Los medios de informaciónintentan redefinirnos

la realidad.

Un dominio propio debilitado

Jueves4 de marzo


EXPLORACIÓNGálatas 5: 16-25; Colosenses 3: 1-10

PARA CONCLUIRUna vida temperante es aquella que

ma nifiesta dominio propio en forma habi-tual. Esto es fácil si la persona desarrollahábitos saludables desde una edad tempra-na. Sin embargo, mediante la gracia de Diostodos podemos vivir vidas felices y equili-bradas siempre que pongamos en prácticabuenos hábitos. La temperancia no consisteen las cosas que no hacemos. Tiene que vercon las buenas cosas que de cidimos hacer.Nuestras vidas producirán el fruto del Espí -ritu si ingerimos comidas saludables, nutri-mos nuestras mentes con temas positi-vos, llenamos ojos y oídos con las prome-sas de Dios y el tiempo libre con actos degenerosidad.

CONSIDERA• Leer algún poema o texto que hable del

dominio propio, meditando en el conse-jo que nos ofrece Pablo en sus cartas a losGálatas y a los Colosenses respecto al do -minio propio.

• Identificar una nueva receta utilizandoingredientes saludables para compartirla

con algunos de los miembros de tu clasede Escuela Sabática.

• Hacer una lista de las cosas que realizaste entu tiempo libre la semana pasada. Evalúacada actividad tomando en cuenta su rele-vancia. Contrasta las actividades positivascon las negativas en tu lista. Da seguimien-to a aquellas de naturaleza positiva.

• Encontrar algún amigo que te ayude apracticar un nuevo hábito de índole positi-va. Pueden ir a caminar o trotar juntos,com partir alguna dieta, música, libros ocualquier otra actividad similar. Compro -métete con tu amigo o amiga a realizar laactividad en cuestión durante los próximoscuarenta días.

• Pedirle a algún amigo o amiga cercana queidentifique algún hábito o costumbre nega-tiva que puede estarte perjudicando a ti o alos demás. Considera cómo podrías cam-biar tu comportamiento, formulando unplan para lograrlo.

• Leer una biografía respecto a alguna perso-na que haya vencido un hábito nocivo.

PARA CONECTAR� Ellen G. White, El ministerio de curación.� Ben Carson, Manos consagradas.

� Rick Warren, Una vida con propósito (Zon -dervan).

Decisiones saludablesViernes5 de marzo

104Jennifer Morgan, Newfoundland, Canadá


Lección 116 al 13 de marzo

El fruto del Espíritu es justicia

«Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados».

Mateo 5: 6


Belleza interior

107Katelyn Reed, Melbourne, Australia

Sábado6 de marzo

INTRODUCCIÓN

Mateo 23: 25-28

En muchas partes del mundo se colo-ca un marcado énfasis en el mejoramientoy en la apariencia personal. Mucho deldeseo de verse joven y atractivo es esti-mulado por la industria publicitaria cuyomensaje parece ser: «Si te ves bien, te sen -tirás bien y alcanzarás ma yores logros en tuvida». Como consecuencia muchas perso-nas invierten tiempo y recursos en dietas,cirugías cosméticas, subscripciones a gim -nasios y en una amplia gama de recursospara el mejoramiento personal con el finde verse rejuvenecidos.

En el mes de octubre del 2008 meofrecí como voluntaria para un viaje misio-nero de dos semanas de duración. Fuimosa la Academia Adventista Aore en Vanuatu,donde ayudamos a reacondicionar variosde los edificios de la institución. Fue unainteresante experiencia ayudar a devolver-les a aquellos edificios a su apariencia ori-ginal. Nuestro grupo llegó a la conclusiónde que se había beneficiado más que quie-nes habían sido objeto de nuestras labores.Es cierto que fue una dura tarea removertoda la pintura vieja del exterior de los edi-ficios antes de que pudiéramos pintarlos.Pero no fue tanto el trabajo lo que enrique-ció nuestras vidas. Fue el tesoro que des-cubrimos en el interior de aquellos edifi-

cios: los corazones sinceros y amantes delos alumnos.

Jesús comparó a los escribas y a losfariseos con «sepulcros blanqueados. Porfuera lucen hermosos pero por dentroestán llenos de huesos de muertos y depodredumbre» (Mat. 23: 27). En otras pa -labras, el exterior se veía muy bien, pero

adentro todo estaba muerto y descompues-to. Recordemos que una demostración dejusticia o santidad, incluye tanto el interiorcomo lo externo.

No podemos esperar que la justiciasurja como un fruto del Espíritu al poneren práctica nuestra fortaleza personal, re -cursos o logros. Probablemente nuestrosmejores esfuerzos únicamente alcanzaránel nivel de aquellos a quienes Jesús criticóenconadamente. Únicamente lograremosuna apariencia externa de justicia.

La justicia es un hermoso fruto delEspíritu, tanto en lo externo como en lointerno. Jesús es el autor de esa justicia yúnicamente cuando le permitimos al Espí -ritu que nos ayude a crecer y estimular lajusticia de Cristo en nuestras vidas es quenos convertiremos en un tesoro para Dios:hermosos por fuera y por dentro.

La justicia es un fruto del Espíritu que es hermoso.


Una causa justa

108

Domingo7 de marzo

LOGOSMateo 23: 25-28; Romanos 3: 28; 8: 1-4; 10: 1-3; Gálatas 3: 6; 1 Juan 2: 3-6

Recibiendo la vida eterna (Mar. 17: 22)

Una de las preguntas más difíciles deenfrentar es la siguiente: «¿Qué debo hacerpara alcanzar la vida eterna» (Mar. 10: 17).El joven rico, le hizo esa pregunta a Jesúsaunque él ya conocía la respuesta. Él pen-saba que su cuidadosamente preparadalista de buenas acciones ya le garantizabansu objetivo. Sabemos que se marchó en -tristecido cuando Jesús le añadió un ele-mento más a su lista: deshacerse de todassus posesiones.

A menos que el relato sea leído correc-tamente, lo único que hará es profundizarel misterio relacionado a alcanzar la vidaeterna. Lógicamente, debemos reconocerque el joven rico carecía de una justiciapráctica, aun cuando hubiera entregado alos pobres todo lo que poseía. Él podíahaber estado en la senda correcta para lle-gar al conocimiento de Jesús: una fórmulaque los teólogos hacen más confusa y ladiscuten incesantemente, pero que es eleje mismo sobre el cual pivota la salva-ción.

Jesús dedicó unos tres años a sus dis-cípulos. Pero, ¿acaso lo conocían ellos almomento que los alguaciles lo apresaronen el huerto? Sí, lo reconocían como ungran maestro. En cierta ocasión Pedropuso de manifiesto que él creía que Jesúsera el Mesías, el Hijo del Dios vivo. Esto

sucedió después que Jesús asustara amuchos potenciales discípulos al hablarlesde su venidero martirio. ¿Lo que entendíaél respecto a lo que había dicho se resumeen el comentario que hiciera Jesús de queaquello no venía de fuentes humanas, sinoque le había sido revelado a Pedro. Escierto que Pedro utilizó rápidamente unafuerza prohibida a intentar salvar a Jesús,y luego huyó de la escena del apresamien-to para más tarde negar su fe en medio derepetidas maldiciones. Él conocía a Jesúslo suficiente bien como para sentirse des-corazonado por la pérdida de un amigo.Pero, tuvo que esperar al Pentecostés para«entender» lo que en realidad quiso decirJesús.

¿Qué tiene que ver eso con la obediencia? (Juan 2: 3)

Juan pone al revés lo que conocemosrespecto a la obediencia en su primeraepístola. «¿Cómo sabemos si hemos llega-do a conocer a Dios? Si obedecemos susmandamientos» (1 Juan 2: 3). Gran partede la vida cristiana no es percibida confacilidad. De hecho, como en el caso deljoven rico, se notará de inmediato quecuando alguien afirma ser bueno o perfec-to lo que hace es resaltar sus deficiencias:revela ante todo su orgullo, el mismo pe -cado original de Lucifer. No obstante, unamuestra de que conocemos a Jesús es queguardamos sus mandamientos.

A veces pienso que hemos explicadodemasiado la dinámica de la obediencia,la perfección y la justicia. La validez y le -galidad de la salvación es algo que estámuy claro. Lo perdimos todo a causa del


109Lincoln Steed, Hagerstown, Maryland, EE. UU.

La fe sin obras es muerta, eso es lo queSantiago nos dice en su epístola. Juan nosha mostrado que la fe es la dinámicaactual de la creencia y la acción, algo quedemuestra la justicia de Dios en nuestrasvidas. Sin esta dinámica, no podremos sersalvos. Sin ella, ponemos de manifiestoque jamás hemos «visto» a Jesús. Sin ellano podremos comenzar a imitar a nuestroSeñor y a vindicar la confianza que él hapuesto en nosotros.

Dicho de otro modo, la justicia quenos concierne no se relaciona con lo bue-nos que tenemos que ser. Lo único quepodemos hacer es juzgar pobrementenuestras propias acciones. Debemos seguira Cristo, la luz del mundo. Ese es un lla-mamiento bastante elevado. Gracias a Diosque contamos con el poder el EspírituSanto para que inspire y moldee no tansolo nuestras acciones, sino también nues-tras actitudes.

PARA COMENTAR1. ¿Podríamos decir: soy salvo en un pre-

sente continuo? ¿En qué otra forma po -dríamos decirlo?

2. ¿Somos salvos porque obedecemos? ¿Oacaso obedecemos porque somos sal-vos? ¿Podemos ser salvos sin obedecer?Motiva tu respuesta.

3. Juan parece colocar un gran énfasis enla relación emocional establecida por lavida y la muerte de Jesús. ¿Cómo se ex -plica esto?

4. Si estamos obligados con Dios, ¿en quépunto damos cumplimiento a sus ex -pectativas?

pecado de Adán y de nuestra propensióna repetir el mismo acto. Mediante unavida de obediencia llevada a sus últimasconsecuencias, hasta la misma cruz; Jesu -cristo, el Dios hecho hombre nos redimió

de las consecuencias del pecado. De esaforma le concedió a nuestro Creador el de -recho moral a redimirnos de nuestra con-dición de desobediencia. En todo aquellono tuvimos nada que ver. Fue un favorinmerecido de parte del Creador. La con-fusión surge respecto a la forma prácticaen que nos reintegramos a él.

En 1 Juan 5: 1 leemos que: «Todo elque cree que Jesús es el Cristo, ha nacidode Dios». Esta creencia es mucho más queun asentimiento. En el versículo 6 Juanhabla de agua y de sangre. Allí se habla delEspíritu. Esto, desde luego, es una repeti-ción de lo que Jesús le dijo a Nicodemo alafirmar que para ser salvo hay que nacerde agua y del Espíritu. En 1 de Juan se nosrecuerda que el agua significa morir a lavida vieja. Sin embargo, para Jesús signifi-có «sangre», una muerte real que tiene unvalor práctico en el proceso de nuestratransformación. Todo esto recibe el sellodel Santo.

Existe un maravilloso triunfalismo enlas palabras de Juan. «Todo el que ha naci-do de Dios vence al mundo. Esta es la vic-toria que vence al mundo: nuestra fe»(1 Juan 5: 4).

Ese es un llamamiento bastante elevado.


El amor es un verbo

110Kate Hollingsworth, Coldstream, Victoria, Australia

Lunes8 de marzo

TESTIMONIO1 Juan 4: 16

«La justicia es santidad, semejanza aDios; y “Dios es amor”. Es conformidad a laley de Dios, “porque todos tus mandamien-tos son justicia” (Salmo 119: 172), y “el amorpues es el cumplimiento de la ley” (Romanos13:10). La justicia es amor, y el amor es la luzy la vida de Dios. La justicia de Dios está per-sonificada en Cristo. »Al recibirlo recibimosla justicia.

«No se obtiene la justicia por conflictospenosos, ni por rudo trabajo, ni aun pordones o sacrificios; es concedida gratuita-mente a toda alma que tiene hambre y sed derecibirla».1 La justicia es el amor de Dios quees su carácter y ley. No es la sencilla ausenciadel pecado en nuestras vidas. Debido a queel amor es un verbo, la justicia equivale a unaentrega a Dios permitiendo que su amor y subondad se manifiesten a través de nosotros.Es confiar que provienen de Dios las oportu-nidades, la sabiduría, los talentos, los recur-sos y la capacidad para amar en forma prác-tica. Es escuchar los reclamos del Espíritu,siendo un canal mediante el cual Dios suplediversas necesidades.

Jesús aprecia todas las cosas prácticas. Élayudó a sus fatigados amigos a capturarpeces, sanó a aldeas enteras. Se acercó a losparias y se mostró compasivo con una mujer

tomada en adulterio. Él sufrió nuestra muer-te para que su justicia nos cubriera y ahoraune su justicia a nuestras oraciones y se laspresenta al Padre.

Sin embargo, no siempre se muestra con-descendiente y susurrante en su amor. Jesúsechó a los negociantes que estaban en la casade su Padre porque dejaron de honrar a Diosy asimismo pronunció verdades llenas deamor que eran difíciles de escuchar. El amornecesita ser claro con el fin de ser bondado-so, estableciendo límites y protegiendo a lagente para que no los viole y se haga daño. Elamor equivale a decir «no», aun cuando nosea algo popular decirlo. El amor puede seralgo complicado, difícil y cansón. Amar deesa forma requiere fe, que a su vez ¡es unfruto del Espíritu!

Jesús es nuestro ejemplo de justicia ynuestro sustituto. Continuemos meditandoen su vida porque «al percibir la perfeccióndel carácter de nuestro Salvador, desearemostransformarnos renovarnos completamente asemejanza de su pureza».2

PARA COMENTAR1. ¿Qué parte tenemos en el acto por me -

dio del cual somos declarados justos?2. ¿Qué nos motiva a escoger y aceptar la

justicia divina?3. Piensa en algún aspecto de tu vida en el

que necesitas mostrar más de la justicia deCristo.

____________

1. El discurso maestro de Jesucristo, p. 20.

2. Ibíd.

Jesús aprecia todas las cosas prácticas.


Mucho más que las apariencias

111Larissa Gredig, Warburton, Victoria, Australia

Martes9 de marzo

EVIDENCIAMateo 23: 25-27; Romanos 3: 28

En los tiempos del Nuevo Testamento esespíritu de legalismo se había identificadocon la religión judía, específicamente con elespíritu y las enseñanzas de los fariseos. Ellostendían a concederle mayor im portancia alos actos externos que a la disposición delcorazón, algo esto último que pasaban poralto.* Creían que observan las innumerablesleyes que habían inventado demostraríanque eran judíos consagrados y que por tantotenían un puesto asegurado en el cielo.

Jesús había estado enseñándole a lagente respecto a la importancia de hacer locorrecto. Los fariseos al escuchar que lossaduceos no habían podido entrampar aJesús con sus preguntas, decidieron que erael turno de ellos para intentarlo. Jesús con-testó sus preguntas y a la vez los recrimi-nó. «¡Ay de ustedes, maestros de la ley yfariseos, hipócritas! Limpian el exterior delvaso y del plato, pero por dentro están lle-nos de robo y de desenfreno» (Mat. 23: 25).

Jesús les reprocha a aquellos dirigentes,en el capítulo 23 de Mateo, que están másinteresados en aparentar rectitud, honesti-dad y santidad que en implementar esosmismos conceptos.

Romanos 3: 28 profundiza más en eltema, afirmando que la salvación se ob tienemediante la fe en Dios y no por obede-

cer normas o leyes. Lee también Romanos3: 29, 30.

Esos mismos debates los observamosen nuestras iglesias, escuelas y aun en nues-tros hogares. Todavía hay algunos que pien-san que lo que hacen es más importanteque lo que creen y que si actúan como cris-tianos, pueden llegar a serlo.

Sin embargo, los textos que hemos con-siderado en el estudio de hoy presentan cla-ramente que debemos ser «puros» interna-mente y que ninguna cantidad de obras,

muestras de humildad y caridad, o actoscristianos nos ayudarán a llegar al cielo. Loúnico que necesitamos es aceptar el don gra-tuito de la salvación. Lee Romanos 5: 16, 18.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo le explicarías a un no creyente el

texto de Romanos 3: 28?2. Hacer buenas obras es importante, pero

¿cómo podemos asegurarnos de que nocon vertimos nuestra fe en una religiónbasada en las obras?

____________

* Ver el artículo «Fariseos» en el Diccionario bíblico adventista.

Todavía hay algunos que piensan que lo quehacen es más importanteque lo que creen.


La forma correcta

112Braden Blyde, Adelaide, Australia


CÓMO ACTUARRomanos 10: 3

Siempre que adquiríamos algún aparatoelectrodoméstico mi madre se desesperaba.El asunto es que por lo general mi padre, mishermanos y yo tratábamos de armarlo o po -nerlo a funcionar sin leer previamente el ma -nual de instrucciones. En algunos casos acer-tábamos. Creo que esto es parte de la natura-leza humana. Incluso respecto a la justifica-ción, la gente ha ideado sus propios procedi-mientos y experimentos. La inmensa canti-dad de iglesias y organizaciones religiosas queexisten en el mundo, son una prueba de ello.Dejamos el manual de instrucciones de Diosdentro de la caja y luego nos preguntamospor qué nuestras vidas así como la iglesia noson lo que debieran. Entonces, ¿cómo podre-mos cultivar el fruto de la justicia? A conti-nuación encontrarás algunas ideas tomadasde la Palabra de Dios:• CCoommiieennzzaa ccoonnttiiggoo mmiissmmoo.. Cuando pensamosen la forma de «arreglar las cosas», fácilmen-te miramos a los demás. Pero de acuerdo conMateo 23: 26, arreglar lo visible de nuestrasvidas no es la clave del asunto, muchomenos lo relacionado con las vidas ajenas.

• DDeejjaa ddee iinntteennttaarrlloo.. Esta no es una invitaciónpara que te rindas, pero la idea es «dejarlotodo y dejar que sea Dios…». No podemosgenerar justicia utilizando nuestras propiasfuerzas. Debemos dejar que sea Dios quienlo haga por nosotros (Rom. 3: 28).

• EEssttáá ddiissppuueessttoo ppaarraa eell ssaaccrriiffiicciioo.. Conseguirque todo marche bien no significa obteneralgo real. Más bien tiene que ver con dar. En1 Juan 2: 6 se enfatiza una vida modeladaen Cristo que fue el mejor ejemplo de unavida de sacrificio.

• NNoo dduuddeess eenn ppeeddiirr aayyuuddaa.. Cuando todoparezca ser inmanejable no tenemos queconformarnos con el fracaso. Pide ayuda.Busca respuestas en la Biblia, en el EspírituSanto, en personas en quien puedes con-fiar. Claro que es humillante, pero la humil-dad puede ser la respuesta que persigues.

A pesar de haber estado casado duranteveinticinco años, mi padre aun se enfrenta acualquier nuevo aparato sin consultar elmanual de instrucciones. Y mi madre, buenocreo que ella ya no intenta que él haga lascosas en forma diferente. En lo que respecta aentender la dualidad de la justificación, quees algo imputado e impartido, se hace obviopor qué nuestros propios esfuerzos se van aquedar cortos, al igual de lo que le sucedía ami padre.

Recordemos que hay, y siempre ha existi-do, un plan. Lo único que necesitamos haceres dejarnos guiar.

PARA COMENTAR1. ¿Qué aspectos de tu vida has intentado

que sea Dios quien los controle?2. ¿Por qué siempre pensamos que tenemos

la mejor respuesta?3. ¿En qué aspectos específicos podemos

aprender de la vida de Cristo?4. ¿Cuán importante es para la vida y la expe-

riencia cristiana que entendamos el con-cepto de la justificación?

Conseguir que todo marchebien no significa obtener

algo real.


La contabilidad divina

113Desré Nikolich, Sydney, Australia

Jueves11 de marzo

OPINIÓNRomanos 6: 23

Se conoce como creatividad contable laforma de manejar las cuentas de una empre-sa de forma que los recursos sean distribuidosajustándolos a las necesidades, absorbiendocualquier diferencia y haciendo que las parti-das aparenten estar balanceadas. ¿Sabías queDios en cierto modo ha sido «creativo» en sucontabilidad? En su caso, sin embargo, lo queha hecho es acreditar nuestras cuentas.

Las cuentas son las partidas relacionadascon nuestra justicia. Cuando el pecado entróal mundo la condena requerida era la muerte(Rom. 6: 23). El pecado desequilibró la justi-cia divina ocasionando una gran pérdida. Elproblema era, y todavía es, que Dios no tansolo considera la justicia como parte de sucarácter y de su reino, sino que también tomaen cuenta el amor. Debido a que la estimadivina por el amor se oponía a sus valores dejusticia, algo tendría que ceder. En su miseri-cordia y amor él exclamó: «¿Cómo podríaabandonarte […] ¡el corazón me da vuelcos!»(Oseas 11: 8). El amor de Dios ni siquieratomaba en cuenta la destrucción de los sereshumanos. Así que para Él poder corregir «elproblema» del pecado, tuvo que utilizar unacontabilidad de tipo creativo. Jesús, quien eraDios en la carne, vino a morir en lugar nues-tro y a vivir una vida perfecta muriendo lamuerte que merecíamos. A través de este pro-ceso, él asumió el costo del pecado que es lamuerte eterna.

«La gracia de Cristo y la ley de Dios soninseparables. En Jesús la misericordia y la ver-dad se encontraron, la justicia y la paz se besa-ron».* «Porque la paga del pecado es muerte,mientras que la dádiva de Dios es vida eterna

en Cristo Jesús, nuestro Señor» (Rom. 6: 23).Este don es para todo aquel que acepte lamuerte de Jesús por sus pecados.

Todos tenemos la oportunidad de esco-ger entre la justicia natural y la justicia divina.La justicia natural es la que tiene lugar cuan-do la paga del pecado se hace efectiva en la

muerte eterna. La justicia divina se origina enel sacrificio de Jesús, permitiendo que el LibroMayor pueda ser reconciliado o balanceado.El costo del pecado se ha tomado en cuenta yseguirá siendo contabilizado. Existe, sin em -bargo, un factor limitante. Esa limitación notiene que ver con Dios ya que el costo ha sidocubierto, sino con los seres humanos. Se hahecho provisión para que todos puedan sersalvos. No obstante, Dios con el fin de ser ver-daderamente justo, nos permite aceptar sudon o rechazarlo.

Nuestra justicia ya ha sido comprada,pero todo será verificado cuando las cuen-tas se revisen mediante una auditoría. Nues -tra justicia es totalmente inadecuada. Única-mente cuando vivimos en Jesús y aceptamossu justicia es que somos justificados. La con-tabilidad «creativa» divina será motivo de es -tudio durante toda la eternidad.

PARA COMENTARSi nuestra justicia depende de Jesús ¿cuáles nuestro papel?____________

*Mensajes selectos, t. 1, p. 410.

Debido a que la estima divina por el amor se oponíaa sus valores de justicia, algo tendría que ceder.


Cristo nuestra justicia

114Renée Coffee, Gobles, Míchigan, EE.UU.

Viernes12 de marzo

EXPLORACIÓN

Romanos 3: 21-23

PARA CONCLUIRLa justicia es el resultado de someternos

a Dios, no de la obediencia a la ley. CuandoJesús vivió en la tierra, entregó su vida aDios y siguió las instrucciones de su Padre.Si queremos vivir vidas justas, de bemoshacer lo mismo. Cada mañana te nemos unaopción. Podemos sentarnos en el trono denuestro corazón, o podemos dar un paso aun lado y permitirle a Jesús que sea nuestroMaestro. «Conságrate a Dios todas las ma -ñanas; haz de esto tu primera tarea. Sea tuoración: “Tómame ¡oh Señor! como ente-ramente tuyo. Pongo todos mis planes atus pies. Úsame hoy en tu servicio. Moraconmigo y sea toda mi obra hecha en ti”.Este es un asunto diario. Cada mañana con-ságrate a Dios por ese día. Somete todostus planes a él, para po nerlos en práctica oabandonarlos según te lo indique su provi-dencia. Podrás así poner cada día tu vida enlas manos de Dios y será cada vez más se -mejante a la de Cristo».*

CONSIDERA• Diseñar un pequeño afiche con las pala-

bras Cristo es mi justicia u otro lema similar.

Colócalo en un lugar donde puedas verloa diario.

• Escribir en una hoja de papel dos encabe-zados: «La justicia es» y «La justicia noes». Al repasar la lección de esta semanaselecciona frases que completen la lista decada columna.

• Escribir una definición de lo que significa«conocer» a Jesús.

• Cantar o repetir las palabras del himno«No yo, sino él», que se encuentra en elHimnario adventista. Intenta añadirle unaquinta estrofa.

• Pedirles a varias personas que expresenuna definición de «justicia». Luego intentadefinirla tú mismo o tú misma.

• Meditar en lo que podrías hacer la próxi-ma semana con el fin de adquirir una vi -sión más clara de Jesús y de su justicia.

PARA CONECTAR� Joseph Stowell, Pasión por Cristo.� Ellet J. Waggoner, Cristo y su justicia. � Warren W. Wiersbe, Be Right, «The Wrong

Righteousness».____________

* El camino a Cristo, p. 104


«Me buscarán y me encontrarán, cuando me busquen de todo corazón».

Jeremías 29: 13


El fruto delEspíritu es verdad


¿Harás lo correcto?

117Daniel Smith, Orlando, Florida, EE. UU.

Sábado13 de marzo

INTRODUCCIÓN2 Crónicas 25: 1, 2

William miró por la ventanilla del trenque tomaba a diario para regresar a sucasa. Le parecía que los postes del teléfonopasaban en sucesión ante su vista. Se pre-guntó: «¿Adónde se habrán ido todos estosaños? Me parece como que hubieran des-filado igual que estos postes de teléfono.¿Qué podré hacer ahora?»

Una vez todos lo llamaban «William elsabio». Se había graduado con honores ensu grupo, al obtener una Maestría en Admi -nistración de Harvard. Pronto obtuvo unempleo con un sueldo que sobrepasaba loscien mil dólares al año. Aquel apodo loobtuvo en Wall Street, era un genio de lasfinanzas. William disfrutaba del sueño nor-teamericano: un buen empleo, una resi-dencia en un lugar exclusivo, una bellaesposa. Pero llegó el momento cuando losbancos comenzaron a quebrar. Su empleoy su negocio se fueron a pique. Perdió todosu dinero, sus inversiones así como la mag-nífica residencia que él y su esposa tantodisfrutaban.

Aquellas ideas le cruzaban por la mentecuando se bajó del tren para luego caminarel resto del trayecto hacia la casa que pron-to tendría que abandonar. Exclamó: «¡OhDios! Por favor ayúdame. He sido un fielcristiano. Tú siempre me has bendecidodándome mucho más de lo que necesito.No he orado por un buen tiempo, pero túconoces mi corazón». Lo que había co -menzado como un día típico en la vida de

William, se había convertido en su peorpesadilla. Mientras atravesaba una arbole-da que conocía muy bien en la ruta haciasu mansión, descubrió que un camión detransporte de valores se había despeña-do por un barranco. Los ocupantes no

se veían por parte alguna, aparentementehabían ido en busca de ayuda. Como acinco pasos de distancia William vio dosbolsas, cada una marcada con la siguientefrase: 1 Millón de Dólares.

William pensó: «¿Será esta la respues-ta a mis oraciones?» Nadie va a saber queyo tomé estas bolsas. Podría saldar mi casay salir de deudas». Se detuvo por un mo -mento que le pareció una eternidad, anali-zando aquel peculiar dilema.

«Hola. ¿Es el servicio de 911? Deseoreportar un accidente. Voy a esperar aquíhasta que lleguen las autoridades». Alcerrar el teléfono, un texto bíblico le vinoa la mente como si alguien lo recitara envoz alta. «Amasías hizo lo que agrada alSeñor, aunque no de todo corazón» (2Crón. 25: 2). Aunque se había visto tenta-do a quedarse con aquel dinero, él sabíaque como cristiano debía hacer lo correc-to. Esta semana, ¿crecerá en tu corazón elfruto de la verdad, así como lo hizo enel corazón de William el día que los ban-cos fracasaron?

«¿Será esta la respuesta a mis oraciones?»


¿Podrás manejarlo?

118

Domingo14 de marzo

LOGOS2 Crónicas 25: 2; Salmo 51: 17; Jeremías 29: 13; Juan 7: 16, 17; 14: 6; 17: 3; Hebreos 5: 14

La religión puede ser algo atemorizan-te. Todo grupo religioso afirma poseer laverdad. Muchos individuos al confundirsehan decidido seguir la corriente a cual-quier verdad que les parezca correcta, deallí el crecimiento del espiritismo y la bru-jería. Las teorías, las tradiciones y la expe-riencia del pasado desempeñan un papelimportante en lo que consideramos comola verdad. Como cristianos, ¿qué verdadaceptamos y cómo podemos reaccionarante ella?

Cristo, la verdad (Juan 14: 6)La mejor forma de encontrar la verdad

es mediante nuestro Señor y Salvador Je -su cristo. Tomás se dio cuenta de esto cuan -do le preguntó a Jesús que a qué lugarpensaba él marcharse (Juan 14: 5). La res-puesta de Jesús reveló algunos datos acer-ca de su persona. Para Tomás tener accesoal lugar adonde su Maestro se dirigía,debía primeramente saber que Jesús era elcamino, la verdad y la vida (Juan 14: 6).La única forma de llegar al Padre es me -diante su Hijo.

Una prueba legítima (Juan 7: 16, 17; 2 Crón. 25: 2)

A través de la Biblia, Dios ha corrobo-rado sus palabras mediante acciones. Dioses razonable y justo y no desea que crea-

mos en él sin antes hacer una decisiónestudiada. Todos los milagros bíblicos rea-lizados por Dios y por Jesús dan señas deser acontecimientos verídicos. Jesús de -mostró eso mismo cuando vivió entre no -sotros. En una ocasión cuando estuvo enel templo enseñando, la gente le preguntócómo era que había aprendido o conocidolo que él enseñaba (Juan 7: 14, 15). Su res-puesta fue algo grandioso. Le dijo a la genteque ellos tendrían que vivir lo que él ense-ñaba para darse cuenta si lo que él predica-ba era verdadero o falso (Juan 7: 16, 17).

Piensa que sucedería si como cristia-nos, todos viviéramos de acuerdo con lasenseñanzas de Jesús. Muchos serían ben-decidos por nuestra forma de vivir, y laverdad se fijaría y sellaría en las mentes deellos. A veces nos anestesiamos a causa dela rutina y las tradiciones, aun cuando te -nemos la verdad de Dios. Es posible queconozcamos la verdad de Dios y hagamossu voluntad con corazones dispuestos.«Amasías hizo lo que agrada al Señor, aun-que no de todo corazón» (2 Crón. 25: 2).Este texto habla del rey Amasías de Judá,quien implementó la ley sin tenerla en sucorazón. Si estamos dispuestos, el EspírituSanto transformará nuestros corazones dehierro.

Un intercambio (Sal. 51: 17; Jer. 29: 13)

Con el fin de aprender algo nuevo,debemos descartar algo a cambio. Paraad quirir el conocimiento de un ingenieromecánico, es necesario que sacrifiquemosnuestro tiempo con el fin de estudiar mate-


119Jason Gibson, Orlando, Florida, EE. UU.

temas espirituales que aun no puedencomprender. No es prudente construir unacasa sin cimientos, porque sin ellos las pa -redes se agrietarán y la casa podría de -rrumbarse. Lo mismo sucede con el hechode enseñarles la verdad a los demás.

La vida eterna (Luc. 4: 18; Juan 17: 3)

El Salvador, cuando vino al mundo amorar con los seres humanos dedicó suvida totalmente a su misión: sanar a losenfermos y afligidos, predicar el evangeliode salvación (Luc. 4: 18). Sobre todo, vinoa dar su vida para que todos podamosvivir eternamente con él. La vida eternanos suena como algo maravilloso a quie-nes estamos sujetos al dolor, al sufrimien-to y a la muerte. Jesús reveló la verdad res-pecto a la vida eterna cuando al mirar alcielo dijo: «Y ésta es la vida eterna: que teconozcan a ti, el único Dios verdadero, y aJesucristo, a quien tú has enviado» (Juan17: 3). Este texto encierra grandes verda-des. Afirma que la vida eterna consiste enconocer la verdad respecto al Padre me -diante su Hijo Jesús, quien a su vez es elcamino.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo cambió tu vida cuando encon-

traste la verdad en Cristo?2.¿Qué otras cosas dijo, o hizo Jesús con elfin de demostrar su dominio de la ver-dad?

máticas y conceptos científicos. Tendría -mos que pagar a alguna institución educa-tiva con el fin de recibir clases. ¿Qué esta-mos dispuestos a sacrificar con el fin deconocer a Cristo? Debemos rendir nues-tras costumbres egoístas, humillarnos y

arrepentirnos. «El sacrificio que te agradaes un espíritu quebrantado; tú, oh Dios, nodesprecias al corazón quebrantado y arre-pentido» (Sal. 51: 17). Entonces buscare-mos a Dios y lo hallaremos (Jer. 29: 13).

Como un niño (Heb. 5: 14)Por lo general los niños nacen sin dien-

tes. Según crecen pueden ir comiendo di -ferentes alimentos: primero líquidos, lue -go comidas blandas y cuando les salen losdientes, comidas sólidas. Cuando recibi-mos las primeras lecciones respecto a laverdad, somos como recién nacidos. Serequiere tiempo y madurez espiritual conel fin de aprender todo lo que Cristo deseaenseñarnos. En muchos casos tendremosque esperar que nos salgan los dientes es -pirituales antes de que podamos ingerir laparte sólida de la verdad divina. Con la ma -durez, podremos discernir la verdad y portanto diferenciar el bien del mal (Heb.5: 14). Pablo explicó este concepto con elfin de que podamos predicar la verdad aquienes nos rodean sin atosigarlos con

Jesús reveló la verdad respecto a la vida eterna.


Una verdad cambiante

120Neville y Keisher Peter, Orlando, Florida, EE. UU.

Lunes15 de marzo

TESTIMONIO

Juan 16: 13, 14; 1 Corintios 2: 10, 11

Si le permitimos al Espíritu Santo quenos dirija, la verdad nos será revelada. Estaha sido mi experiencia al igual que la demi esposa.

Cuando se crece en un hogar adventis-ta, el estudio de la Biblia y el conocimientode las doctrinas de la iglesia se conviertenen algo obligatorio. Estos requisitos se cum-plen más como una obligación que comoun deseo que brota del corazón. Como re -sultado, una vez que crecí me alejé de laiglesia. Sin embargo, al cumplir los veinti-cinco años acepté a Cristo como mi Señory Salvador. Poco después de eso, alguienme obsequió un CD que contenía la Biblia.Lo escuchaba prácticamente a diario. Fuedespués de escuchar la Palabra de Dios conun corazón dispuesto, que ocurrió unatransformación en mi vida.

Mi esposa creció en un hogar católico.Cuando tenía unos veinte años las circuns-tancias hicieron que buscara al Señor enun ámbito que no era el de su propia reli-gión. Por tanto, comenzó a leer la Biblia. Alreconocer que algo faltaba en su iglesia,comenzó a asistir a una iglesia pentecostal.Después de tres años de frecuentar aquellaiglesia, todavía sentía un cierto vacío. En -tonces comenzó a orar al respecto. Pocodespués, escuchó hablar del mensaje ad -ventista. Durante tres meses, estudió por símisma con la ayuda del Espíritu Santo.

Finalmente, la verdad que ansiaba conocerle fue revelada.

Ninguno de los dos recibimos estudiosbíblicos formales. Confiamos en la direc-ción del Espíritu Santo quien nos condujoa la verdad.

«El quiere que aun en esta vida las ver-dades de su Palabra se vayan revelando decontinuo a su pueblo. Y hay solo un modo

por el cual se obtiene este conocimiento.No podemos llegar a entender la Palabra deDios sino mediante la iluminación del Es -píritu por el cual fue revelada. “Así mismonadie conoce los pensamientos de Dios,sino el Espíritu de Dios” (1 Corintios 2: 11);“pues el Espíritu lo examina todo, hasta lasprofundidades de Dios” (1 Corintios 2: 10).Y la promesa del Salvador a sus discípulosfue: “Cuando venga el Espíritu de la verdad,él los guiará a toda verdad; porque [...]tomará de lo mío, y se los dará a conocer austedes”» (Juan 16: 13, 14)».*

PARA COMENTAR¿Qué gran verdad personal te ha revelado elEspíritu? ¿hay algo que necesitas cambiar? Deser así, ¿cómo piensas lograr ese cambio?____________*El camino a Cristo, p. 164.

Confiamos en la dirección del Espíritu Santo quien nos condujo a la verdad.


Practica la verdad

121Kimberly A. Hudgens, Orlando, Florida, EE. UU.

Martes16 de marzo

EVIDENCIAJuan 8: 31, 32; Juan 14: 6, 16, 17; 17: 17

Jesús proclamó que él es «el camino,la verdad y la vida» (Juan 14: 6). Él tam-bién le pidió al Padre que enviara al Espí -ritu Santo, el Consolador, quien es el Es -píritu de toda verdad (vers. 17). Debido aque no somos capaces de ver físicamen-te a Jesús o hablar con él como hicieronlos discípulos, el Espíritu Santo llega amorar en nuestras vidas guiándonos a laverdad que Cristo enseñó. La historia nosenseña que no basta con conocer la verdad.Sin embargo, debemos aplicar la verdad anuestras vidas ¿Cómo podremos lograresto? Juan 1: 17 dice: «Tu Palabra es la ver-dad». Consideramos que la Palabra de Dioses la verdad. Las Escrituras nos revelan elcarácter de Dios. A través de Jesucristo nosconvertimos en nuevas criaturas al hacerparte de nuestras vidas las verdades de laPalabra de Dios.

Ya que la Palabra de Dios es la verdad,y tomando en cuenta que incluye a losDiez Mandamientos, podemos llegar a laconclusión de que la verdad se manifiesta alobservar la ley. Jesús dijo en Mateo 7: 16:«Por su fruto serán conocidos». Los frutosconstituyen el carácter de una persona.Dicen lo que él o ella hace. Por tanto, latransformación de nuestro carácter cuandovivimos de acuerdo a la ley de Dios pondráde manifiesto a los frutos del Espíritu. Esefruto se muestra cuando ponemos en prác-tica a la Palabra o a la ley. El ejemplo deCristo nos enseña cómo debemos observar

la ley. No seamos como los fariseos queconocían la verdad pero la aplicaban enuna forma incorrecta. Por tanto, debemospedirle al Espíritu Santo que nos ayude aentender las palabras divinas y a aplicarlasen nuestras vidas cotidianas.

Si perseveramos en la Palabra de Diosy guardamos su mandamientos, seremosconsiderados sus discípulos, conoceremosla verdad y seremos libres (Juan 8: 31, 32).Debemos aplicar la verdad al guardar la ley

de Dios. Entonces disfrutaremos de unaverdadera libertad espiritual y de una ge -nuina felicidad, al estar en paz con Dios ycon los demás. La obediencia a su Palabranos libra de culpa, de condenación y dolor.Jesús llenará luego ese vacío con el fruto desu carácter que es amor, gozo, paz, benig-nidad, paciencia, bondad, fe, mansedum-bre y dominio propio (Gál. 5: 22, 23). Esefruto es un don que Dios desea concedér-selo a todo creyente. Necesitamos meditara diario en su Palabra, ser obediente a loque el Espíritu Santo nos revela al estudiar,y compartir la verdad que aprendemos conlos demás.

PARA COMENTAR¿Cuáles son algunas formas prácticas enque podemos mostrar la verdad a quienesno conocen a Jesús?

Los frutos constituyen el carácter de una persona.


Cristo en nosotros

122Stacey-Ann Montañez, Orlando, Florida, EE. UU.


CÓMO ACTUARSalmo 15: 1, 2; 119: 11; 3 Juan 1:4; Apocalipsis 19: 11; 22: 6, 7

Para ser semejante a Cristo debemosbuscar la verdad, obedecerla y creer en supoder. La Biblia contiene la verdad. A tra-vés de los siglos la Palabra ha hecho que-dar mal a sus muchos detractores, ya quelas profecías se han cumplido y continúancumpliéndose en nuestros días.

Juan 1: 1, 14 afirma que «en el princi-pio ya existía el Verbo, y el Verbo estabacon Dios, y el Verbo era Dios» y que elmismo «se hizo hombre y habitó entre no -sotros». El Espíritu Santo de Dios cubrió auna virgen e hizo que se cumpliera la pre-dicción dada al profeta Isaías (Isa. 7: 14;Mat. 1: 18-23). Jesús, nacido de mujer yde Padre divino, manifestó las característi-cas anunciadas en la Palabra. Juan se refie-re a Jesús como el Fiel y Verdadero. A tra-vés de su experiencia personal muchoscristianos han reconocido que Jesús esexactamente eso mismo. Es más, esas sonlas mismas características que se le aplicana la Biblia. Jesús, al igual que la Palabrade Dios, es fiel y verdadero (Apoc. 3: 14; 19:11; 21: 5; 22: 6).

Como hijos de Dios, también debemosser fieles y verdaderos (1 Juan 3: 1-3, 18, 19).

A continuación, algunas de las formas enque podemos mostrar el carácter del Padrey adorarlo en espíritu y en verdad.• CCoonnffiieessaa.. En Santiago 5: 16 se nos dice quedebemos confesarnos nuestros pecadosmu tuamente y orar los unos por los otros.Es algo apropiado tener amigos confiablescon quienes podamos hacer lo anterior.Sin embargo, hay personas en quienes nopodemos confiar; igualmente hay algunospecados que sería conveniente confesarlosúnicamente a Dios. Él siempre está dis-puesto a perdonarnos, a limpiarnos depecado y a ayudarnos a no pecar de nuevo.Lee: Salmo 32: 5; 1 Juan 1: 9.

• AAcceeppttaa eell ppeerrddóónn ddee DDiiooss.. Él es fiel y justopara perdonar nuestros pecados, y elEspíritu Santo tiene el poder de limpiar-nos de toda maldad (1 Juan 1: 9).

• DDíí llaa vveerrddaadd.. Cuando nos sintamos ten-tados a decir una mentira, aun cuandosea muy pequeña, recordemos quién esnuestro Padre; luego digamos la verdad.Dios hará el resto si confiamos en él. LeeColosenses 3; 8, 9; Apocalipsis 22: 14, 15.

PARA COMENTAR1. Cristo dedicaba tiempo a buscar la ver-

dad del Padre en lo que hoy llamamos elAntiguo Testamento. Él decidió obede-cer y confiar en esa verdad en cada mo -mento de su vida. ¿Cómo podríamoshacer lo mismo hoy en día?

2. Piensa en alguna situación en que po -dríamos decir fácilmente una mentira,en vez de la verdad.

Recordemos quién es nuestroPadre; luego digamos

la verdad.


¿Un cristiano secreto?

123Kathleen Nelson, Altamonte Springs, Florida, EE. UU.

Jueves18 de marzo

OPINIÓNJuan 17: 3

¿Recuerdas haber dicho en alguna oca-sión una mentira blanca? Quizá estabas tra-tando de proyectar una buena imagen, oevitar algún castigo. ¿Qué dirías de unquerido amigo o familiar quien en formaconsistente fabrica mentiras con el fin desatisfacer sus ansias de grandeza? Es algodecepcionante y doloroso saber que un díatras otro las mentiras surgen como en unacadena interminable. Es doloroso, porquelas mentiras tienen la capacidad de des-truir relaciones. Es algo frustrante, porquetodo es una muestra de la condición espi-ritual de dicha persona.

Al meditar en el concepto verdad, medoy cuenta que conocer la verdad no nosayuda a menos que la apliquemos perso-nalmente. En el Jardín del Edén Dios lereveló a la primera pareja la verdad respec-to a comer del fruto prohibido. Sin embar-go, ellos decidieron creer las mentiras deSatanás y conocemos los resultados: dolor,destrucción y muerte que continuarán hastael fin de los tiempos.

En su sabiduría, y motivado por elamor que siente por nosotros, Dios ideóuna forma de comunicar la verdad de unageneración a otra. Para los cristianos quenos preparamos para la eternidad, es tanimportante aplicar la verdad a diario anuestras vidas como conocerla. Con el finde ser practicantes de la verdad debemostener a Jesús en nuestros corazones. Él nosconcederá la capacidad para ser veraces.«Y conocerán la verdad, y la verdad los

hará libres» (Juan 8: 32). «Todo aquel querehúsa entregarse a Dios está bajo el domi-nio de otro poder. No es su propio dueño.Puede hablar de libertad, pero está en lamás abyecta esclavitud. No le es dado verla belleza de la verdad, porque su menteestá bajo el dominio de Satanás».*

Cuán importante será entonces esta-blecer y mantener una relación personalcon Dios que incluya a diario una entregacompleta a él. Nuestro caminar, forma dehablar, de vestir, apariencia y toda fibrade nuestro ser deberían reflejar a Cristo.

Jesús les dijo a sus discípulos: «Yo soyla vid y ustedes las ramas. El que permane-ce en mí, como yo en él, dará mucho fruto;separados de mí no pueden ustedes hacernada» (Juan 15: 5). Cuando la bendicióndivina fluye en forma continua y sin impe-dimentos, cosecharemos una abundanteporción de la verdad.

PARA COMENTAR1. ¿Cómo podrías ayudar a alguien a cam-

biar su búsqueda de logros personalespor el anhelo de conocer a Dios?

2. ¿En qué forma podría nuestro sobregira-do estilo de vida ser el resultado de insu-ficientes depósitos espirituales?

____________

*El Deseado de todas las gentes, p. 440.

Nuestro caminar, forma de hablar, de vestir, aparienciay toda fibra de nuestro

ser deberían reflejar a Cristo.


Dos significados

124Bárbara Manspeaker, Luray, Virginia, EE. UU.

Viernes19 de marzo

EXPLORACIÓNProverbios 11: 3

PARA CONCLUIRNo importa cómo definamos la ver-

dad, todo se resume en la ausencia de fal-sedades. Debemos enfrentar a diario la ver-dad en nuestras vidas bajo el nombre deintegridad. ¿Debo llamar a mi trabajo di -ciendo que estoy enfermo o enferma, pen-sando en la gran venta que tienen en unalmacén de la ciudad? ¿Debo decirle a miprofesor que estoy tarde a causa de la con-gestión en el tránsito, cuando en realidadno me levanté temprano? ¿Debo decirle ala compañía de seguros que un vehículodesconocido me chocó el auto y se dio a lafuga cuando en realidad fue un descuidomío al dar marcha atrás?

Así como no hay pecados grandes ope queños, tampoco hay «mentiras blan-cas» o «exageraciones». El pecado es peca-do. La integridad es integridad. Lo mismopuede decirse de la Palabra de Dios. Todaella es verdad. No nos corresponde esco-ger o seleccionar lo que nos interesa creer.Los cristianos serán conocidos por su inte-gridad. Por la forma en que viven, en lamedida que «verdaderamente» represen-ten a Jesús en sus vidas diarias.

CONSIDERA• Examinar y comparar una flor natural con

una artificial del mismo tipo. ¿Qué hace ala flor natural diferente o superior a la arti-

ficial? Establece la misma comparaciónentre las personas que muestran integridady quienes no siempre lo hacen. ¿A cuál es -cogerías como amigo o amiga? ¿Por qué?

• Relatar en unión a algunos amigos, algu-nas historias que mezclen la realidad conla fantasía. Pídele a quienes te escuchanque identifiquen los relatos verídicos alobservar tu lenguaje corporal, tus expre-siones faciales y el tono de tu voz. ¿Quéaprendiste de dicha experiencia?

• Enviarle un mensaje de correo electrónicoa algunos amigos, haciéndoles las siguien-tes preguntas: ¿Qué significa para ti la inte-gridad? ¿En qué sentido es parte de tuvida? ¿Por qué desearías que tu mejoramigo o amiga sea una persona íntegra?

• Meditar en los sucesos de la semana pasa-da al hacerte las siguientes preguntas:¿Aca so fui completamente veraz? ¿Porqué? ¿Por qué no? ¿Es este un problemaque necesita la ayuda de Jesús?

• Buscar en Internet el concepto integridad.¿Cuántos elementos encontraste? ¿Quéaprendiste de algunos de los artículos queleíste?

PARA CONECTAR

� Henry y Richard Blackaby, Llamado a ser unlíder de Dios: Cómo Dios prepara a sussiervos para el liderazgo espiritual.

� Elena G. de White, Mente carácter y perso-nalidad, t. 2..



El fruto del Espíritues la esencia delcarácter cristiano

«A estos Dios se propuso dar a conocer cuál es la gloriosariqueza de este misterio entre las naciones, que es Cristo

en ustedes, la esperanza de gloria».Colosenses 1: 279


Un destino fugaz

127Kimberley Cadogan, St. Philip, Barbados

Sábado20 de marzo

INTRODUCCIÓNMateo 7: 18-20; Efesios 6: 6

En el año 1987 el equipo de baloncestode una de las escuelas secundarias del esta-do de Georgia realizó un descomunal esfuer-zo para obtener el campeonato estatal, yaque venían desde muy abajo en la compe-tencia. Sin embargo en el registro de la pre-miación existe una nota singular ya que losdirigentes de aquella escuela notificaron a lasautoridades que uno de sus jugadores, quienno era elegible debido a motivos académi-cos, participó durante unos cuarenta y cincosegundos en el primer juego de la serie final.El entrenador del equipo dijo que ellos noestuvieron al tanto de la situación sino des-pués del día del juego. Incluso, mucha gentele dijo que se olvidara del asunto ya que laparticipación del jugador en cuestión nohabía tenido impacto alguno en el resultadofinal y que solo había durando unos cuaren-ta y cinco segundos. Sin embargo, el entre-nador dijo que él actuaría de acuerdo a losreglamentos. «Les dije a los miembros delequipo que siempre debemos actuar conhonradez. La gente olvidará el puntaje de unjuego de un baloncesto, pero no olvidarán elcarácter nuestro», afirmó el entrenador.1

Muchos presentan una falsa cara con elfin de disimular la realidad, sin embargonuestros caracteres reales se revelan en loque hacemos cuando pensamos que nadienos está viendo. He escuchado que la razónprincipal para que la gente no crea en Dioses porque tantos cristianos lo profesan consus labios y lo niegan con sus vidas.

Sin embargo, no hay que perder las es -peranzas Mediante la obra del Espíritu ennuestras vidas podremos recibir un nuevo

carácter (2 Cor. 5: 17) y ser injertados enJesús (Juan 15: 5). Durante este trimestrehemos estudiado los componentes del carác-ter cristiano. Entre ellos el amor, el gozo, lapaciencia, la bondad, la fidelidad, la manse-dumbre, el dominio propio, la justicia y laverdad. Estos atributos celestiales, aunqueno surgen mediante un esfuerzo consciente

de parte nuestra, se perfeccionan cuandoperseveramos en hacer lo correcto. Esto últi-mo incluye devolver el dinero extra que uncajero nos entregue así como no imitar lasactuaciones incorrectas de la gente.

Nos guste o no, estamos siendo observa-dos cuidadosamente. A todos se nos conocepor nuestro fruto (Mat. 7: 20). «Cuando noscomportamos incorrectamente, o dejamosde comportarnos bien, lo que hacemos esconferirle al cristianismo un viso de incredu-lidad ante el mundo que nos rodea».2 Elmundo no solamente nos observa deseandoencontrar un ejemplo de índole moral, sino¡que lo espera!

Si siembras un hábito cosecharás uncarácter; pero, siembra un carácter y cose-charás un destino. La gente nunca olvida losrasgos de tu carácter. ¿Qué harás entonces?Tienes muy poco tiempo para reaccionar…cuarenta y cinco segundos para ser exactos.____________

1. Relato aparecido en el periódico New York Times. Con su -

ltado el 5 de octubre del 2008.

2. C. S. Lewis, Mero cristianismo, p. 173

Nos guste o no, estamossiendo observados cuidadosamente.


Restaurando su carácter

128

Domingo21 de marzo

LOGOSMateo 6: 33; Juan 15: 8; Romanos 3: 20-26; 14: 17; 1 Timoteo 6: 11; 1 Juan 2: 15

El espíritu de desobedienciaLa joven pareja había comenzado a

disfrutar de la vida que Dios le había con-cedido, pero fue corta su felicidad ya quela troncharon al probar una tentadora fruta.Antes de que el sabor de la misma se disi-para, el carácter de su creador se disipóhasta el punto de que únicamente él po -dría ser capaz de restaurarlo. Adán y Evaperdieron el carácter de Dios al comer delfruto del árbol de la ciencia del bien ydel mal. La desobediencia no solamentemanchó la pureza de su carácter, sino quehizo que perdieran su hogar, su estimapropia y el deseo de comunicarse con sucreador. Sin embargo, Dios no los desterrófuera de su alcance o misericordia. Fue abuscarlos, deseando restaurar su carácterasí compartir con ellos la eternidad (Gén.3: 8, 9; Sal. 139: 7-10).

El espíritu de desobediencia que des-plaza a la justicia divina y nos aleja de supresencia, debe ser reemplazado por elfruto del Espíritu. Esta es la única posibi-lidad de restaurar su carácter en nosotros,de forma que cumplamos su voluntad. Elsacrificio de Jesús en la cruz hace todoesto posible.

Restauración (Rom. 5: 21)El carácter de Dios se restablece en

no sotros mediante la obra del EspírituSanto que a su vez se basa en los méritos

del sacrificio expiatorio de Jesús. Todoaquel que posea el carácter de Dios seráuna nueva criatura guiada por el EspírituSanto (Juan 3: 3-7). Los pensamientos ylas acciones serán dirigidos por el Espí -ritu. La nueva persona no será alguienmás, sino un individuo pacífico, lleno degozo, amante, paciente, leal, controlado yveraz.

Cuando la mujer samaritana fue trans-formada, dejó de ser considerada como loque antes era. «Vengan a ver a un hombre

que me ha dicho todo lo que he hecho.¿No será éste el Cristo?» (Juan 4 : 29). La«antigua» mujer evitaba el contacto conlos demás aldeanos, pero la «nueva» mujerse acercó a ellos con un mensaje capaz detransformar la vida. Esto era algo inusualen la «vieja» mujer por dos razones. Ellano deseaba ver o ser vista por los aldea-nos, especialmente por aquellos que co no -cían su turbio pasado. Además ella teníaun mensaje acerca de Jesús para quienes ladespreciaban.

De esa forma el mensajero se convirtióen una nueva persona, con una nuevamisión en su vida. La Biblia no nos dicecuántos salieron a escuchar a Jesús comoresultado de la invitación de aquella mujer,pero sí nos dice que aquel esfuerzo evan-gelizador fue todo un éxito. Quizá Jesúspasó por alto la hora de la comida a causade lo entusiasmado que se sintió por su

La persona transformadasiempre estará dispuesta

a testificar.


129George McCallum, St. Philip, Barbados

ces podremos reflejar su carácter en casa, enla escuela y en nuestro trabajo (Sal. 34: 2-8).La persona transformada siempre estarádis puesta a testificar del poder restauradordel Espíritu, adjudicándole todo el créditoa la gracia de Dios.

Para ser transformado (Rom. 12: 1, 2)

Mientras que Pablo se encontraba enCorinto, pensaba en Roma. Él anhelabaque el evangelio de Cristo echara raíces enaquella ciudad que era la capital delmundo. Qué gozo debe haber experimen-tado mientras descansaba en Corinto, alcomprobar que: «Los creyentes corintios,una vez tan propensos a perder de vista sualta vocación en Cristo, habían desarrolla-do fuerza de carácter cristiano. Sus pala-bras y hechos revelaban el poder transfor-mador de la gracia de Dios, y eran ahorauna poderosa fuerza para el bien en esecentro de paganismo y superstición».2

¿Qué revelan tus palabras y acciones?¿Son ellos una fuerza para el bien?

PARA COMENTAR1. ¿Piensas que quienes no han sido trans-

formados por el Espíritu Santo podrántestificar por el Señor de manera efecti-va? ¿Por qué? ¿Por qué no?

2. De acuerdo con las lecciones de este tri-mestre, ¿piensas que es posible ser comoCristo?

3. ¿Cuáles son algunas de las cosas quepudieran impedirte hacer una entregatotal al poder del Espíritu Santo?

____________

1. El ministerio de curación, pp. 69, 70.

2. Los hechos de los apóstoles, p. 277.

éxito en aquel lugar (Juan 4: 30-34). Sesintió satisfecho con aquella transforma-ción y se gozó al confirmar que el EspírituSanto comenzaba su obra en ella. «Tanpronto como halló al Salvador, la mujersamaritana que habló con Jesús junto alpozo de Jacob, trajo otros a él. Así diopruebas de ser una misionera más eficazque los propios discípulos».1

Una nueva criatura (2 Cor. 5: 17)

Todo el que acepta a Cristo será trans-formado por el Espíritu Santo. Habrá es -cogido la santidad en vez de las cosas delmundo (1 Juan 2: 15). Con el fin de pose-er un carácter semejante al de Cristo debeocurrir primeramente una entrega total alEspíritu Santo.

Las mariposas pasan por cuatro eta-pas en sus vidas, pero únicamente sonma riposas en la última. Una mariposaadulta pone un huevo. Del huevo saldráuna oruga. La oruga se convierte más tardeen una crisálida. Finalmente la ma ri posasurge de la crisálida.

No es nada raro que una oruga seconvierta en mariposa. Sin embargo, seríaextraño que se comporte como una mari-posa. Una hermosa mañana esa nuevacriatura emprenderá el vuelo sin poseerla más mínima idea del proceso me dian teel cual ha sufrido todo aquel cambio. Elfruto del Espíritu representa a la nuevacriatura que es la mariposa y no al proce-so. De igual forma, cuando el mi lagrode la transformación ocurre me dian te elpoder del Espíritu Santo, nos asemejare-mos a Cristo y tendremos el deseo de na -vegar en el esplendor de su justicia. Enton -


Amando los frutos

130Lisa Thorne, St. Philip, Barbados

Lunes22 de marzo

TESTIMONIOMateo 22: 39

Ellen G. White afirma que: «Siempreque hay unión con Cristo, hay amor. Novalen nada cualesquiera sean los otros fru-tos que demos, si falta el amor. El amor aDios y a nuestros prójimos es la misma

esencia de nuestra religión. Nadie puedeamar a Cristo sin amar a los hijos de él.Cuando estamos unidos con Cristo, tene-mos la mente de Cristo. La pureza y elamor brillan en el carácter, la humildad yla verdad rigen la vida. La misma expre-sión del rostro es cambiada. Cristo, quehabita en el alma, ejerce un poder trans-formador, y el aspecto externo da testimo-nio de la paz y del gozo que reinan en lointerior».1

«Son las cosas pequeñas las que prue-ban el carácter. Dios mira con una sonrisacomplaciente los actos humildes de abne-gación cotidiana, si se realizan con un co -razón alegre y voluntario. No hemos devivir para nosotros mismos, sino para losdemás. Sólo olvidándonos de nosotrosmismos y abrigando un espíritu amable yayudador, podemos hacer de nuestra vidauna bendición. Las pequeñas atenciones,

los actos sencillos de cortesía, contribuyenmucho a la felicidad de la vida, y el descui-do de estas cosas influye considerablemen-te en la miseria humana».2 En Gálatas 5:22, 23 Pablo habla acerca del «fruto delEspíritu» que llevaremos en forma naturalsi somos guiados por el Espíritu. Un senci-llo análisis de este texto muestra que elfruto combinado será el amor, la esenciadel carácter divino. Lee 1 Juan 4: 7-21.

Hay una poderosa expresión en el libroLa educación que dice: «La edificación delcarácter es la obra más importante quejamás haya sido confiada a los seres huma-nos».3

«Nuestro Señor Jesucristo vino a estemundo como siervo para suplir incansable-mente la necesidad del hombre».4 «Cristoestá tratando de reproducirse a sí mismoen el corazón de los hombres; y esto lohace mediante los que creen en él. El obje-to de la vida cristiana es llevar fruto, la re -producción del carácter de Cristo en el cre-yente, para que ese mismo carácter pue dareproducirse en otros».5

PARA COMENTAR¿Cómo piensas que Cristo puede manifes-tarse en tu corazón?_____________1. Mensajes selectos, t. 1, p. 394.2. Patriarcas y profetas, pp. 137, 138.3. La educación, p. 226.4. El ministerio de curación, p. 11.5. Palabras de vida del gran Maestro, pp. 46, 47.

«El objeto de la vida cristiana es llevar fruto».


Árboles estériles

131Greig Jordan, St. Philip, Barbados

Martes23 de marzo

EVIDENCIAJuan 15: 1-5

Una de las cosas más interesantes de lavida en los trópicos es la abundancia defrutos y árboles frutales. Todos sabemosque si hay muchos frutales habrá abun-dancia de frutos. Cosechar frutas frescasen un huerto es una experiencia maravi-llosa.

Adán y Eva, nuestros primeros padres,fueron muy bendecidos al vivir en el Huer -to del Edén donde había abundancia defrutos (Gén. 1: 29; 2: 16). En aquel lugarno había árboles estériles. Es el plan deDios que todo árbol produzca frutos. Sinembargo, el pecado ha dado como resulta-do la esterilidad.

En algunas culturas el jardinero u hor-telano, coloca un clavo de hierro en el tron-co de árbol estéril esperando que así lleva-rá frutos para la próxima temporada. Comocristianos no necesitamos preocuparnos

porque se nos vaya a herir con un clavoporque ya hemos sido redimidos de la mal-dición del pecado y de la esterilidad, gra-cias a la preciosa sangre de Jesucristo. Él esla vid verdadera (Juan 15: 1-5).

Si no llevamos fruto corremos el riesgode que los poderes del mal tomen pose-sión de nuestras mentes y afectos.

Si moramos en Cristo disfrutaremos desu bondad, de su fragancia, de su luz.Cristo es la luz del mundo. Él brilla ennuestros corazones y su luz se verá en nues-tros rostros. Al contemplar la gloria deCristo seremos transformados a su seme-janza.

PARA COMENTARHaz una lista de las cosas que llenan tumente, tus afectos y tus actuaciones. Enreferencia a esa lista ¿dirías que te inclinasal mundo o a Dios? Si te inclinas hacia elmundo, ¿qué podrías hacer para dirigirte aDios?____________

*Truth.net «Biblical Archeology of the Exodus», http: //

www.truthnet.org/biblicalarcheology/5/Exodusarcheolo

gy.htm. Consultado el 6 de noviembre, 2008.

Es el plan de Dios que todoárbol produzca frutos.


El artículo genuino

132Terry Williams, St. Philip, Barbados


CÓMO ACTUARJuan 15: 8; Filipenses 1: 6

Sin dinero sería imposible suplir nues-tras necesidades básicas. Lamentablementeel dinero no crece en los árboles. Natu ral -mente, es algo valioso debido es un recursolimitado. La gente que muestra el fruto delEspíritu es algo raro y valioso en un mundolleno de miseria, infelicidad e indiferencia.

Sin embargo, siempre que haya algo devalor existirán falsificaciones. Los falsifica-dores tratan de engañar a los demás bus-cando su beneficio personal. Cuando lagente inocente cae víctima de los productosfalsos, los resultados pueden ser en extremonegativos. En el ámbito religioso, quienesprofesan ser seguidores de Cristo pero secomportan de manera inconsistente respec-to a los valores cristianos pueden hacer ungran daño. Dos técnicas utilizadas para de -tectar las monedas falsas son útiles tambiénen el ámbito espiritual.• AApprreennddee aa rreeccoonnoocceerr eell ddiinneerroo aall ttaaccttoo.. Elpapel utilizado para imprimir los billetestiene una consistencia especial. Si teacostumbras a reconocer el dinero legíti-mo al tacto, fácilmente te darás cuentacuando tengas un billete falso en lamano. Lo mismo sucede con los cristia-

nos genuinos. Poseen algo único queayuda a detectarlos, especialmente cuan-do están mezclados con las falsificacio-nes: gente que afirma ser cristiana, peroque no han desarrollado el fruto delEspíritu.

• AApprreennddee aa iiddeennttiiffiiccaarr llaass ccaarraacctteerrííssttiiccaass ddeellddiinneerroo lleeggííttiimmoo.. La moneda de curso legalposee algunos rasgos distintivos que per-miten diferenciarla de las falsificaciones.Esas características incluyen marcas deagua, altorrelieves, hologramas y núme-ros de serie. Un grabador especializadodiseña una plancha de metal con las ca -racterísticas de lugar. Esto hace más difí-cil que todas sean imitadas con determi-nado grado de exactitud. Cuando unaplancha se completa, todos sus detallespodrán transferirse al papel. Por lo tanto,el producto final será siempre una répli-ca del grabado original.De la misma forma los cristianos genui-

nos demuestran ciertos rasgos: el fruto delEspíritu. El grabador es Cristo mismo. Sucarácter es nuestro modelo y nuestro papeles permitirle que complete el desarrollo delfruto en nuestras vidas. Según se van desa-rrollando esos frutos, nos iremos convirtien-do en testigos poderosos ante un mundoque necesita desesperadamente el amor deDios.

PARA COMENTAR¿Cuáles son los peligros que representanlas falsificaciones del evangelio?

El grabador es Cristo mismo.Su carácter es nuestro

modelo.


El fruto del espíritu

133Alicia Haynes, St. Philip, Barbados

Jueves25 de marzo

OPINIÓNJuan 4: 1-42; Gálatas 5: 22

El fruto del Espíritu es amor, gozo, paz,paciencia, compasión, bondad, fidelidad,amabilidad y dominio propio.

Esta lista enfatiza los rasgos de carácterque los cristianos deben desarrollar. Jesúses un modelo de cada uno de esos frutos.Por tanto, él es nuestro ejemplo. Mientrastanto, el Espíritu Santo nos ayuda a seguirsu ejemplo. Hay muchos casos en el NuevoTestamento en los que vemos al Señor de -mostrando esos dones al interactuar conquienes él vino a salvar. Por ejemplo, con lamujer samaritana que encontró a la orillade un pozo mientras cruzaba por aquellaregión. En aquel tiempo los judíos y lossamaritanos eran declarados enemigos.Ade más, los hombres no hablaban con lasmujeres en público. Sin embargo, Jesúspasó por alto aquellas arraigadas costum-bres. Le mostró a aquella mujer su amor, sucompasión, su amabilidad y su bondad.Fue también paciente mientras ella presen-taba su versión de las cosas. ¿Podrías imagi-nar la paz que debió haber experimentadoella cuando se dio cuenta de que sus peca-dos habían sido perdonados? ¿Qué diremosdel gozo que ella demostró al dejar el cán-taro de agua junto al pozo para ir rápida-mente a la aldea con el fin de contarles atodos acerca de su entrevista con Cristo?Aquella experiencia la animó a aceptar alSeñor.

«Esta mujer se hallaba en un estado deánimo que le permitía apreciar las cosas.Es taba dispuesta a recibir la más noble

revelación, porque estaba interesada en lasEscrituras, y el Espíritu Santo había estadopreparando su mente para recibir más luz».*

Se nos invita a imitar a Jesús en la formaque se acercaba a todos aquellos que lo ne -cesitaban. Que todos con quienes tenemoscontacto a diario, o en forma ocasional,puedan ver la luz que brilla en nosotros.Que el mundo experimente el amor de Dios

mediante el fruto del Espíritu Santo queestemos cultivando. Amémonos los unos alos otros, y prometamos que a partir de estasemana le permitiremos al Espíritu Santocultivar el crecimiento de dicho fruto ennuestras vidas. Permítele a Dios que obreuna poderosa transformación en tu vida deforma que los demás puedan ver a Cristoen ti «la esperanza de gloria» (Col. 1: 27).

PARA COMENTAR1. Piensa en dos o tres situaciones en las que

Jesús demostró el fruto del Espíritu al inte-ractuar con quienes vino a salvar. ¿Qué teimpactó especialmente respecto a cada si -tuación?

2. Observa que el fruto comenzó a crecer deinmediato en el caso de la mujer samarita-na. ¿Qué nos dice esto acerca de la natura-leza del fruto y de la obra del Espíritu Santoen nuestras vidas una vez que pedimos sertransformados?

_____________*El Deseado de todas las gentes, p. 166.

Aquella experiencia la animó a aceptar al Señor.


Reflejando a Cristo

134Alden J. Ho, Berrien Springs, Míchigan, EE.UU.

Viernes26 de marzo

EXPLORACIÓN2 Samuel 12: 1-13; Hechos 13: 22; Apocalipsis 22: 11

PARA CONCLUIRJesús vino no tan solo a morir por nues-

tros pecados, sino a mostrar mediante suejemplo cómo debemos vivir.

Según hemos estudiado esta semana,cuando nuestro carácter es modelado segúnel fruto del Espíritu, estaremos reflejandola imagen de Cristo. El llamado que se noshace es a salir del mundo y a apartarnos.Debemos estar dispuestos a seguir a Jesússin reservas. Algo menos que eso nos harásentir que nos falta algo.

CONSIDERA• Utilizar un papel cuadriculado para regis-

trar el progreso de tu vida espiritual. Co -mienza desde el momento en que fuistebautizado o bautizada, hasta llegar al mo -mento presente. Registra los puntos altosasí como los bajos. Establece un blancorespecto al punto donde te gustaría hallar-te, relacionándolo con tu situación actual.Pídele a Dios que te ayude a parecerte mása él.

• Hacer una lista de las personas a quienesno has perdonado. Pídele a Dios que teconceda las fuerzas para hacerlo, sin im -portar lo que te hayan hecho. Recuerdaque este es un proceso continuo.

• Analizar algunas de las relaciones más des-tacadas que se presentan en la Biblia. Hazuna lista de las características que hicie-ron de las mismas algo débil o fuerte.¿Cuáles de esas características observas entus relaciones personales? ¿Cuáles de esosbuenos rasgos necesitas desarrollar? ¿Cuálesnecesitas desechar? Ora pidiendo la ayudadel Espíritu en ambos casos.

• Compartir con alguien que no conoces, loque Cristo ha hecho por ti.

• Leer Juan 14: 21 y Mateo 24: 14; 28: 19, 20mientras te encuentras en un lugar públi-co. Observa las personas que se en cuen -tran a tu alrededor y ora por ellas.

• Meditar en el texto de Juan 3: 16, Luego,según te inspire el Espíritu Santo escribetus impresiones respecto a la muerte deCristo por ti y por los demás, incluyendo ala persona más despreciable que conozcas.

PARA CONECTAR� Maranatha, caps. 32-60.� Félix a Lorenz, The Only Hope.� W. D. Frazee, Another Ark to Build.


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