loma

51
"Pónmelamanoaquí,Macorina,pónmelamanoaquí" . Macorina,justoesdecirlo,estabahastaaquídequePitole estuvierasiemprecantandolomismo,asícomoDomitilanun- casecansabadequePapitolecantaralode"dónde,vas, Domitila,dóndevas,conmantóndemanila,dóndevas" .Era unaclaudicaciónsecretaantesusencantos,porquesibien Domitilaexhibíaunamasaenormedegrasaqueestimulabay reconfortabaaPapito,maridodelagordaCintia,Macorina amasabalapastadelasfriturasconlaseñoraquehacefrituras debajodedondevivíaPitoeltracaleroyDomitila,lagordota delmantóndemanila .Así,aPitoleatraíanesasmanosque habíanamasadoharinaparacasitodalaLomasinhaberen- venenadonuncaanadie .YesoqueMacorina,cuandosudaba, selimpiabaconelíndiceyluegosacudíaeldedosobrela masa .Talvezesofueraloquehacíalasempanadasdela señoraquehacefriturasmásricasquelasdeaquellaotraque tuvoqueclausurarsunegocioporquenovendíaniunacari- mañola .YPitoeltracalero,cadavezquesalíadesucasapara iratracalear,sepasabaporlacasadelaseñoraquehace friturassilbandopónmelamanoaquí,Macorina,pónmela manoaquí,yMacorina,lacosteñadepiedra,duracomoel mármol,sefueablandando .Alprincipioseacordabadela mamádePito,quemuriódehidrocefaliaylallamabanla Cabezona,perodespuéssefueacostumbrandoyya,alfinal, sesorprendíacuandonopasabaPitosilbándoleesaespecie decontraseña .YaMacorinanopodíacontenerlarisasólo 107

Upload: jack-shane-rodriguez

Post on 03-Oct-2015

19 views

Category:

Documents


6 download

DESCRIPTION

Loma

TRANSCRIPT

  • "Pnme la mano aqu, Macorina, pnme la mano aqu" .

    Macorina, justo es decirlo, estaba hasta aqu de que Pito le

    estuviera siempre cantando lo mismo, as como Domitila nun-

    ca se cansaba de que Papito le cantara lo de "dnde, vas,

    Domitila, dnde vas, con mantn de manila, dnde vas" . Era

    una claudicacin secreta ante sus encantos, porque si bien

    Domitila exhiba una masa enorme de grasa que estimulaba y

    reconfortaba a Papito, marido de la gorda Cintia, Macorina

    amasaba la pasta de las frituras con la seora que hace frituras

    debajo de donde viva Pito el tracalero y Domitila, la gordota

    del mantn de manila . As, a Pito le atraan esas manos que

    haban amasado harina para casi toda la Loma sin haber en-

    venenado nunca a nadie. Y eso que Macorina, cuando sudaba,

    se limpiaba con el ndice y luego sacuda el dedo sobre la

    masa. Tal vez eso fuera lo que haca las empanadas de la

    seora que hace frituras ms ricas que las de aquella otra que

    tuvo que clausurar su negocio porque no venda ni una cari-

    maola. Y Pito el tracalero, cada vez que sala de su casa para

    ir a tracalear, se pasaba por la casa de la seora que hace

    frituras silbando pnme la mano aqu, Macorina, pnme la

    mano aqu, y Macorina, la costea de piedra, dura como el

    mrmol, se fue ablandando. Al principio se acordaba de la

    mam de Pito, que muri de hidrocefalia y la llamaban la

    Cabezona, pero despus se fue acostumbrando y ya, al final,

    se sorprenda cuando no pasaba Pito silbndole esa especie

    de contrasea. Ya Macorina no poda contener la risa slo

    107

  • pensando dnde quera Pito que le pusiera la mano, y cuando

    moldeaba las carimaolas se rea, y la seora que hace frituras

    tena que llamarle la atencin, por lo que opt por hacerla

    moldear slo la masa de las tortillas que, siendo planas, no le

    hacan ninguna gracia. Secretamente le deca Pitus o tracalei-

    ro, porque haba ledo una vez algo en portugus, aunque no

    se acordaba dnde, porque haca ya burda de tiempo que no

    lea el peridico y ni siquiera las fotonovelas de Corn Tella-

    do, aunque se la reconoca como una de las ms pudientes de

    la Loma. Macorina iba del trabajo a su casa y de su casa al

    trabajo, no se le conoca novio ni vicios y las malas lenguas

    decan que ella era seria de cara y relajada de culo, pero slo

    la conoca bien la seora que hace frituras y ella nunca dijo

    nada de Macorina . Pito tena por oficio tracalear . El tracalero

    no es un estafador, sino un mete-piezas . No es un ladrn ni

    un pillo ni un bribn ni un truhn ni un malhechor . El traca-

    lero es un individuo que hace negocios turbios pero que cae

    simptico, que siempre anda viendo cmo clava a alguien con

    un objeto inverosmil, p .e ., una llanta de tractor, que vende

    por diez reales y se la compran ; luego resulta que en todo el

    pas no hay un tractor al que le pueda poner la llanta . Pito

    sala a tracalear todos los das . Ya deba haberle metido la

    pieza a medio mundo, pero todava segua tracaleando . Se

    autollamaba el Vivazo, pero todos los de la Loma lo conocan

    por el Tracalero y decan que le quera tracalear la entrepier-

    na a Macorina con el pnme la mano aqu . Pero, realmente, a

    Pito le gustaba Macorina porque ola aceite barato y no a

    manteca cara como su concubina . A Pito le gustaba ese aire

    sano de muchacha sana, nueva, ese swing de portobelea y

    ese acento a caribe que la haca mencionar lad en lugar de la

    r. Pero Macodina, como secretamente le deca l, era una tipa

    legal, bien tranquila, chvere, sweet, rareza, era una guial ah.

    Realmente no pareca costea, como la Petra, por ejemplo .

    Costeos son los de la costa caribe, porque los de la costa del

    Pacfico son interioranos . Pito no quera ni por un momento

    tracalearle nada a Macorina . Slo pensaba en el revul que iba

    a armar Domitila a cuenta de un romance y el panorama no le

    atraa. Si la Petra noqui a Domitila, seguro que Macorina no

    108

  • le iba a aguantar a la gordota uno de sus clsicos mameyazos .

    Pero estaba tan sweet! Algo tena que hacer para tracalear a

    Domitila y tener un lelel con la ayudante de la seora que

    hace frituras. Pnme la mano, aqu, Macorina, pnme la ma-

    no aqu. Seguro que se la pondra donde quisiera. Si Papito

    estuviera fuera de la crcel fuera otra cosa, porque l podra

    preparar una escena de celos y mandar a la gordota con vien-

    to fresco. Pero nadie quera levantarse a la del mantn de

    manila y todos, aunque inconscientemente porque era peli-

    groso hacerlo a conciencia, deseaban ms el backside de la

    canyacera Cintia que la manteca flotante de su ballena que,

    para colmo de males, estaba siempre en celo. Volva, pues,

    tarde a su casa, porque la volcnica Domitila lo estaba espe-

    rando con sus grasientas caricias y su roncar tenebroso. No .

    Seguramente Macorina fuera ms dulce y lo acariciara como

    si fuera una empanada o, por lo menos, con ms dulzura . No

    seran caricias grotescas y risibles. Pnme la mano aqu, Ma-

    corina, pnme la mano aqu .

    Nadie supo decirle a la gordota Domitila dnde rayos se

    haba metido su tracalero del alma aquel cuatro de julio cuan-

    do los chombos se haban ido de pie nic para celebrar la

    independencia de USA . Pito no era yanquista y ms de una

    vez le haba vendido gato por liebre, en el sentido literal de la

    palabra, a los gringos, cosa que no hara un chombo. Una vez

    le vendi un borreguero a un General de buce de estrellas

    dicindole que era una iguana, y el tipo se fue tan contento

    por poder incrementar su coleccin de fauna tropical . No,

    Pito no se haba ido de pie nic, y sin decrselo, menos . Pero

    Pito estaba de pic nic con Macorina en el lago, en la parte del

    lago reservada a los negros y latinos, porque los gringos esta-

    ban del otro lado y no queran contaminarse . Como aquellos

    parisinos que iban a Versalles a ver comer a Luis XIV,el

    Rey-Sol . Macorina haba llevado cerca de veinte frituras y

    Pito haba tracaleado diez dlares y comprado cervezas, en

    un kiosco donde las venden ms baratas y encima tienen ms .

    El lago tena tres porciones de tierra en donde se celebraba el

    nacimiento del dueo-amo : All, enfrente, los norteamerica-

    1 09

  • nos bailaban soul, rubios y bonitos ; aqu, al lado de ac, los

    chombos bailaban son, despreciando a los latinos que, de

    este otro lado, bailaban cumbia y guarachas y no miraban ni a

    los gringos ni a los chombos . The spanish people always with

    their cumbia and with their bullshits. iHey, Shirl, put ano-

    ther expirience ovadier! Pero a Pito el tracalero no le impor-

    taba que se estuviera tocando cumbia, bullshits, o soul . Los

    latin people estaban ah porque haba que cepillar a los chif-

    anchif gringos, que ni siquiera reparaban en ellos, pero por si

    acaso . . .

    La noche cay, y Macorina volvi del monte con Pito,

    justo a tiempo, just-a-time, para subir al autobs latino que

    volva a la ciudad . Los otros treinta y nueve autobuses y los

    casi doscientos automviles que salieron del lado de ac del

    lago eran de chombos . En el autobus latino se cantaba en

    espaol . En los autobuses chombos se cantaban calipsos con

    ukeleles y las mujeres decan que iban a los stiets to bai som

    clots bicos al jav notin tu put uen al am got to a pic ni buai .

    Y la vecina le deca que di las taim al uen tu di stiets al brot a

    lot of fanci suts an den dei te[ mi al uas a licu yong, yu s, an

    di buais on di strt chout mi a lat, yu s. Y Macorina le

    pregunt a Pito que si quedaba encinta que qu haca y l le

    contest que nada. Y se miraron tiernamente a los ojos. Lue-

    go Pito le dijo que con las manos no iba a quedar encinta y

    ella dijo ah, menos mal . Y nadie le poda decir a Domitila

    dnde rayos se haba metido Pito ; por eso cuando lleg, solo

    y silbando el Cubanito, recibi un abrazo mantecoso al que se

    aada el sudor de la preocupacin y la desesperacin .

    Macorina y Pito siguieron vindose a escondidas, y luego

    en la casa de la seora que hace frituras porque era el ltimo

    lugar donde los podran buscar. La seora que hace frituras

    dijo que para eso haba quedado : de alcahueta y sin frituras .

    Pero, en el fondo, deseaba que alguien le hiciera el amor por

    lo menos una vez al ao y en fiestas de guardar o en peligro

    de muerte . Y as llevaba ya doce aos, haciendo slo tortillas,

    empanadas, carimaolas y hojaldas. Y no fue por mucho

    tiempo. Pito no volvi ms por su alcoba y Macorina le cont

    1 1 0

  • que iba a vacilar con Santo el taxero porque ms vala un

    soltero con carro que un amarrao con gorda . La seora que

    hace frituras sonri y le dijo que s, que tena razn .

    1 1 1

  • Ganchudo apareci por la loma un viernes a las seis de

    la tarde . Esto fue cuando todava estaba vivo el seor Miguel

    y antes de que Carmencita se mudara a la Loma con su viejito

    borrachn y con las ganas de salir adelante pegadas en la piel .

    No se supo nunca si era su nombre, su apellido o su sobre-

    nombre . Lo que s sorprendi el que trajera los pedazos de

    tabla preparados y numerados, por lo que el lunes en la maa-

    na empez a meter los pocos muebles que traa . Viviana dijo

    en una ocasin que un hombre as, si no fuera por el quiebre

    que tena en la mueca, sera lo que le hubiese gustado para

    Choni . No es que Ganchudo fuera guapo, no, pero tena una

    presencia imponente, aunque el deje que tena en la mueca

    lo haca fcilmente clasificable en un lugar como la Loma,

    donde no puede haber ni hay puntos intermedios : o se es

    hombre, o no se es . El hombre es el que bebe aguardiente a

    rejo limpio, el que fuma, el que huele a sudor y posee copro-

    lalia congnita, el que se culea a todas las mujeres y el que si

    no tiene una pelea a la vista la busca . El que no es hombre

    usa el pelo largo, lleva los pantalones apretados, usa colonia

    o, en su defecto, perfume, bebe coca-cola y si tiene que to-

    mar aguardiente lo hace rebajado con soda, el que no quiere

    que Chn lo motile a un cuara y va a la barbera, el que no se

    comporta como un patn, el que conversa con una mujer sin

    meterle mano, el que no cuenta cmo le meti mano, al que

    no se le para viendo una pelcula europea, y el que nunca

    busca pelea y si se la buscan trata de evitarla .

    1 1 3

  • Ganchudo no era hombre, eso estaba fuera de duda .

    Incluso iba algo ms all, casi casi llegaba hasta mujer, si no

    fuera por motivos de causa mayor, fuera de su alcance, y que

    no poda resolver . No basta con carecer de ms de cuatro

    cosas para ser mujer hay, adems, que estar indispuesto por

    lo menos una vez al mes, ser potencialmente madre y usar un

    sujetador sin relleno artificial . Ganchudo llevaba una melena

    hasta media espalda y usaba pantalones amarillo-limn ms

    ajustados que Silvia la zuncha, andaba siempre bien emperfu-

    mado y no se motilaba, si no que se haca un corte a navaja y

    hablaba de cine sin decir que tal artista est buenona y lea

    otras cosas que no eran Pimienta ni Playboy ni Penthouse .

    Ganchudo hablaba de Picasso como si hubiera sido su compa-

    ero de toda la vida, y los de la Loma no entendan que se

    hablara de un pintor cuando el cul de all abajo tambin

    pintaba y nadie deca nada de l y a veces no le queran ni

    pagar . A lo mejor el Picasso se pintaba las casas ms rpido .

    Ganchudo se rea muy finamente mostrando su dientecito de

    oro . Eso era lo que no le perdonaban a Ganchudo : que fuera

    rematadamente fino . Siendo maricn, pasaba ; pero siendo

    fino encima, ya pasaba de castao oscuro para meterse en

    negro. Cuando apareci por la Loma estaba dizque compro-

    metido con un tal Cristin, hijo del cnsul de un pas nrdi-

    co, donde eso de la libertad sexual entre todos los sexos est

    bien vista . Y se entendan a la mil maravillas, tanto que mu-

    chos matrimonios y arrejuntamientos mal avenidos les tenan

    envidia . Critin era fulo y bonito y la gente deca que era la

    mujer. La Lola Beltrn, el que antes de la llegada de Ganchu-

    do acaparaba la mariconada del barrio, trat de romper esa

    unin, pero su cultura era tan de la Loma, que lo aceptaron

    en su crculo ms por cuestiones sexuales que por otra cosa, y

    cuando discutan sobre el ltimo libro que se haban ledo,

    Lola recordaba que tena que hacerle un mandado a una

    prima suya y se marchaba cabizbajo. Y cuando hablaban de

    cine, ni siquiera tena el pretexto de decir que tal artista

    estaba como el pan nuestro de cada da, porque lo miraban

    asombrados y seguan comentando la fuerza social que tena

    tal o cual director y la talla de actriz que tena tal o cual

    1 1 4

  • estrella, y Lola se acordaba que tena que ir donde Ubalda la

    curandera para pedirle una hierbas medicinales .

    La Lola Beltrn manifest un da en la bodega que Cris-

    tin y Ganchudo se enfrascaban siempre en conversaciones

    peludas y la gente empez a llamarlo Ganchudo, el tueco

    peludo, sin aparente razn para ello : Ganchudo se depilaba a

    conciencia en una peluquera progre que quedaba en el cen-

    tro de la ciudad, en ese mundo donde los de la loma no se

    aventuraban a ir por miedo a quedar desplazados y de donde

    se saban tantas leyendas . Cristin suba desde el centro hasta

    la Loma en un cadillac rosado con placa de diplomtico . La

    Lola Beltrn estaba enamorad simo de Cristin, y la preferen-

    cia de ste por Ganchudo provoc un roce entre los maricolo-

    meros, como se haba empezado a llamarlos ltimamente .

    Porque los de la Loma son expertos en poner sobrenombres .

    Todos, absolutamente todos, en la Loma, tienen por lo me-

    nos un sobrenombre : el de sus amigos; muchos tienen el so-

    brenombre que le dan sus amigos sumados al que le dan sus

    enemigos . As, Ganchudo y la Lola Beltrn eran los maricolo-

    meros. Cristin era el Niobonito, la manzana de la discordia,

    el sarajevo, porque, en verdad, se esperaba una prxima con-

    flagracin en el barrio, semejante a la que aos despus en-

    frentara a la Petra y a la gordota Domitila, delante de la casa

    de la seora que hace frituras . Los observadores blicos por lo

    menos as lo presagiaban . Muchos fueron los que consultaron

    a Ubalda la curandera para que les dijera qu da, dnde y

    cmo se iba a producir, y salieron desilusionados cuando

    Ubalda les dijo que Ganchudo terminara empatndose con la

    Lola Beltrn . Y es que Ubalda conoca el destino de todo el

    barrio, y fue la que le pronostic a la Petra una pualada por

    lo menos, para despus que muriera el primo de Mireya, co-

    nocido por Meco. Los archivos de Ubalda la curandera eran

    inmensos, ordenados por nombres y apodos, y transcurran

    desde el momento del nacimiento (y su Tiempo Sideral de

    Nacimiento o T .S.N .) hasta que lo quemaba, cuando se pro-

    duca la muerte . Y eso sin que nadie se lo pidiera, Pero como

    tena un sentido muy alto del deber, se vea obligada a cono-

    cer la vida de cada sujeto an antes de que supiera andar. Y

    1 1 5

  • Ubalda la curandera tena una hija llamada tambin Ubalda,

    como ella, como su madre, como su abuela, como su bisabue-

    la, como su tataraabuela, como todos sus antepasados, que

    tambin sera curandera . Ubalda la curandera tena a Ubalda

    la hija de la curandera escondida, para que nadie creyera que

    haba muerto y no notaran la sustitucin . Beto tena rdenes

    estrictas de no divulgar el secreto y Ubalda saba, porque le

    haba hecho su horscopo desde que naci, que nunca le

    dira el secreto a nadie, pero s que su hija, Ubalda, sera la

    ltima de la dinasta, pero sera la nica que vivira casi los

    cien aos en plena lucidez. Por lo menos, la curandera de la

    Loma tendra otro siglo ms de vida y eso la confortaba .

    Entonces empezara otra dinasta de brujas en la Loma que

    no sera tan efectiva . Cuando Yolanda termin con el polica

    que tena catorce hijos, Ubalda le dijo a su hijo Beto: "Ahora

    es tu turno ; ve y hazle un hijo a Yoli, que cree que tiene la

    matriz cerrada" . Y pese a conocer a fondo la vida de todo el

    mundo, aspiracin mxima de los bochinchosos, Ubalda nun-

    ca se aprovech de ello, y guardaba la llave de sus archivos en

    un bolsillo expresamente elaborado en la parte interna de sus

    calzones, para que nadie, ni Beto, supieran dnde estaban .

    Ubalda, la hija, viva en los archivos, y los estudiaba hasta casi

    sabrselos de memoria, confrontndolos con los datos que su

    madre le llevaba desde el exterior a la hora de la comida . Las

    antepasadas brujas que se llamaron Ubalda no envejecieron

    nunca, pese a haber vivido cada una setenta y cinco aos

    justos: murieron todas el da de su cumpleaos. Ubalda la

    curandera era idntica a su hija de veintiocho aos, aunque

    ella tena setenta y tres y nueve meses. Slo le quedaban

    quince meses de vida, pero menos mal que Ubalda ya se saba

    todos los bochinches y a veces era ella la que sala a echar la

    suerte y a conjurar espritus para coger la prctica . Ubalda

    estaba satisfecha de Ubalda, aunque nadie saba que Ubalda

    no era Ubalda y seguan creyendo que Ubalda era Ubalda y

    que no mora nunca y que era joven siempre y que haba

    enterrado a tres maridos que se murieron de viejos y que era

    mejor no hacer nada que la pudiera disgustar y que vala ms

    que el cura y que el mdico etctera, etctera, etctera .

    1 1 6

  • Y, efectivamente, tres meses despus se reg que la Lo-

    ma era testigo de un gran amor : Ganchudo y la Lola Beltrn

    haban contrado nupcias y la Lola senta los sntomas de un

    inminente embarazo . Dijo luego que no, que era slo indiges-

    tin pero vaya susto que se haba cogido! Ganchudo expli-

    c, meses despus, que su ruptura con Cristin se haba pro-

    ducido a raz de a nacionalizacin del Niobonito pues, aho-

    ra que era un latinazo-latinn no poda quererlo, porque para

    querer a un latino prefera a la Lola Beltrn, que adems era

    carioso, aunque no tan culto, pero en algo era mejor que

    Cristin . Cuando e preguntaron en qu, se ech a reir mos-

    trando su dientecito de oro y sus ojos brillaron pcaramente .

    Porque Ganchudo era bien femenino : Se haba ledo un libro

    de Castilla del Pino sobre la mujer y exclam que "ese seor

    no tiene ni idea, no nos conoce en absoluto" .

    La Lola Beltrn era bastsimo ; para llegar al refinamien-

    to de Ganchudo le faltaba, por lo menos, un curso intensivo

    de noventa aos . Ganchudo era fino-fino casi desde el vientre

    materno, mientras que la Lola Beltrn se volvi un da que su

    novia, llamada La Lagarta, nadie sabe por qu, no le dio

    chance. Entonces decidi que era mejor un hombre, y Ceba-

    los, que usaba como apodo todo un smbolo, El Cueco, fue

    su iniciador en ese extrao esoterismo, mostrndole todos los

    ritos de esta religin del Doble, del Semejante, del Gemelo .

    Una vez iniciado la Lola, Ceballos muri de una rectitis gono-

    ccica que se le convirti en septicemia, dejando as como

    herencia a su discpulo el Arte y algunos reales para que se

    fuera defendiendo los primeros das, antes de conseguir un

    buen trabajo que le permitiera tener dinero suficiente para

    seducir a los ms exigentes. Cristin no se haba vuelto a

    aparecer por la Loma en su cadillac rosado con matrcula

    diplomtica. Y la felicidad de los Amantes de la Loma era

    ilimitada pero como dijo el Nervo ese, flores tan bellas no

    pueden durar y un da, saliendo del cine del barrio, donde

    haban ido a ver "Teresa & Isabel" unos plomazos se llevaron

    al ms all al Ganchudo, el tueco peludo . Result que haba

    un tiroteo contra un contrabandista de automviles que, em-

    1 1 7

  • parapetado detrs del ltimo Galaxie que haba introducido,

    responda vivamente a la balacera oficial . Finalmente cay,

    pero antes haba cado Ganchudo, para desesperacin de la

    Lola. El cielo se le cay encima, de pronto, simultneamente

    al suelo, que se haba levantado y haba chocado con el fir-

    mamento . La Lola se qued mirando al infinito, entre la

    ranura que quedaba entre el cielo y la tierra, una ranura que

    ocupaba el espesor de Ganchudo . Cuando recobr la lucidez,

    ya haban enterrado a su amante, y pens en matarse l, pero

    Jacinto, uno medioachinado que tena caderas de mujer, le

    dijo que no vala la pena . Y pesta .

    Ubalda la curandera saba que la Lola Beltrn olvidara

    muy pronto a Ganchudo, por el simple pestaeo de otra loca

    llamado jacinto . Y as fue en efecto . Dos semanas despus se

    mud Carmencita, la que lleg a viceministro otra vez . La

    Loma haba perdido a otro de sus personajes .

    1 1 8

  • Aquel judo que tena unos andares tan lentos que pa-

    recan de siglos, pas frente a su casa y la salud deferente .

    Ubalda mir su reloj-calendario : "Me faltan dos meses" El

    judo aquel prosigui su camino. El chango Sebastin lo vio

    pasar y sinti un escalofro. Era de noche y ola a ventecon-

    migo. El chango no recordaba ese olor a venteconmigo en el

    aire desde el da que apualearon a la Petra, cuando todava

    sus pelaos estaban en casa y Viviana todava tena ese cansan-

    cio infinito y ese dolor de crneo cuando le sala alguna cana .

    Cuando se mud a la Loma, todava su mujer, Viviana, tena

    el pelo negro negrsimo y slo tena una hija, la China . Hoy

    est solo . El Cholo viene a verlo cuando se escapa de Laura,

    su mujer mentirosa y presuntuosa, motor de su vida . La Chi-

    na, la viuda triste, la farmacutica, vive con Romelia en el

    centro de la ciudad, vendiendo potinges a quien quiera com-

    prarlos. Choni, su negra, vive con un hermano de Tot, el que

    vende hielo, en un pueblo lejos de la Loma, en donde. su

    marido (? ) es capataz de una finca de una bananera . Y Vivia-

    na ha muerto, ha sido merendada por los gusanos y el chango

    cree que ya ha sido la fiesta de su entronizacin en el cielo .

    Est uno solo y no sabe qu hacer : nada, absolutamente nada

    tiene sentido. Come uno mecnicamente, busca entre las som-

    bras el recuerdo de alguien y no encuentra ni el recuerdo, sale

    uno a la calle y es como si las calles no existieran . El chango

    sabe que todos vivimos para alguien ; cuando ese alguien nos

    falta vivimos para nada, y nada nos importa . El chango Sebas-

    tin no tiene una compaera a quien decirle que el mundo

    1 19

  • tiene los pies p atrs, negra, como la tulivieja . El chango

    tiene que hacerse su comida y comer solo, sin nadie, como el

    quetzal, que se muere de angustia cuando lo aprisionan . El

    chango es un quetzal, un quetzal de plumas de aire .

    Recuerda a Maribel . Cmo demonios logr tirrsela es

    un misterio! Slo una vez, pero vali la pena . Sus pantalones

    de cuadros cayeron al primer intento al primer reclamo .

    iViviana no se lo mereca! En ese Chrysler tan amplio, tan

    lujoso, ella no dijo nada cuando le puso la mano en el muslo .

    El chango piensa qu ser de Maribel, si se habr casado con

    el compadre de la comadre de Viviana . No lo creo . Maribel no

    es de las mujeres que se casan con su amante . Ella se haba

    ofrecido a llevarlo a casa, en vista que Hermenutico, Herme,

    haba salido y era l el que siempre lo llevaba, para luego irse

    a casa de Estebita el cocobolo . Y adems no dijo nada cuando

    le puso la mano en el muslo, y dej la ruta de la Loma para

    coger la ruta de la playa, siempre s ,n decir nada . El chango

    sabe que la Loma no es antes, que su historia est a

    punto de terminar, y comprende lo que dijo Viviana : Estoy

    consumida, ya no doy para ms . Fue el da antes que empezara a

    llover y que ella dijera que se iba a morir y se muri . Maribel

    tena unos muslos tersos y quiso que se los besara . Viviana

    nunca quiso que la besara en los muslos . La Loma, le parece,

    no da para ms. El da que muera Ubalda la curandera termi-

    nar la Loma, as como gru de agona los das en que

    muri Meco, comido por un tintorera, como para demostrar

    la hegemona del dios-pez, Piscis, sobre el dios-guila, Acua-

    rio, Maribel saba todos los trucos mejor incluso que Fabiola .

    Hizo acrobacias y el chango no comprendi cmo el padrino

    de Julito era capaz de satisfacer ese vientre voraz y esas entra-

    as que parecan no tener fondo y que conducan a la eterni-

    dad. La Loma nunca sera eterna, pens, porque le falta el

    dulzor de la entrepierna millonaria de quien no escatima o-

    portunidades para hacerse con lo que desea porque hace calor

    pero no importa porque Maribel quera qu fuera por atrs y

    yo le dije que a lo mejor despus y icarajo con los mosqui-

    tos! claro es que es poca de lluvia y a lo mejor me dejan

    1 20

  • hecho un colador qu aparato se jalaba la desgraci en el

    Chrysler pero ahora ya no tengo quien me pase un camarn

    porque tena las tetas bonitas ms bonitas que mi mujer pero

    las nalgas las tena mejor la Choni que ahora est en Guacha-

    pal del Norte como pig viviendo con el man se que es ms

    buena gente que el diablo y que tiene buco billete pero Mari-

    bel me di veinte bille por hacerte el trabajo y me sent como

    un fquin puto de mierda vendiendo mi leche como Fabiola

    en el barrio y si el Cholo se entera me dice que no puede ser

    porque el Cholo es ms recto que la lnea recta y no com-

    prende que uno tenga tantas debilidades y que quede cado

    con una jeva que no usa brasier porque es progre y tiene los

    corozos rosados y dice ay ay ay ay ay y se mueve como una

    guial de las de por ah pero el Cholo no comprende eso l

    slo comprende que no era su vieja y que yo era infiel a mi

    negra pero no sabe que tambin era infiel a mi gringa fula

    bonita de cuando yo era pelao y que Maribel quera que

    alguien le diera y yo le d y ella me pidi ms y yo le d ms

    pero el Cholo no lo entiende como la China no lo entender

    tambin que yo soy un hombre y que si una hembra se deja le

    doy retreta de gevo y que por eso uno se estima como

    hombre porque el Cholo qu se cree y si yo lo traje al mundo

    es porque soy un macho y que se lo diga Viviana mi inefable

    compaera que slo esa vez y con Maribel le fui infiel pero

    eso fue porque ella se dej ese da que le metiera la mano

    entre los muslos y luego me la meti ella a m y se form el

    lelel en el Chrysler se tan ancho que pareca una cama y

    luego ella me dio veinte bille y me dej en la Loma dicindo-

    me gracias chango he sido feliz y se fue y no la volva ver

    ms porque eso fue el ltimo da que fui a llevarle a Don

    Clodo sus vainas que me haba pedido y la Choni todava no

    estaba preada y el Juan Simn de mierda se la quera culear

    y ella la muy puta se dej y el buai le hizo tronco de pelao y

    menos mal que ahora tiene un marido legal que si no va de

    crneo sin freno y cuesta abaja y el chango se mira en el

    espejo, est viejo, solo y desganado . La vida tiene los pies p

    atrs, chango, como la tulivieja . No sabes si vas o vienes, si

    quedas o te ests moviendo, si vas a alguna parte o te quedas

    121

  • perdido en medio del camino . El chango suspira. Es de noche,

    tiene que cenar un pedazo de pan duro y unos huevos que le

    trajo la comadre de Viviana . Pronto terminar en el asilo de

    San Vicente . Qu destino! Para qu haberse culeado a

    Maribel si ahora no tiene ni qu comer? El chango retiene las

    lgrimas . Para qu llorar si las lgrimas no van a barrer los

    aos amargos ni traer los dulces? El chango Sebastin suspi-

    ra, ebrio de noche .

    122

  • Nicols tena diez hijos de Pascasia. Aunque intent ba-

    tir el rcord del polica que vivi con Yolanda, que tena

    catorce, no pudo hacerlo y tuvo que conformarse con la dece-

    na. Nicols era capataz en los aserraderos del oeste, y cada

    vez que llegaba a la Loma, y si poda, dejaba a Pascasia encin-

    ta. Ella deca que no era una mquina de hacer muchachos,

    pero l responda que hay que aceptar todos los hijos que nos

    mande Dios .

    En los aserraderos del oeste, Nicols era el jefe de los

    peones, lo que vulgarmente se llama capataz . No perciba un

    sueldo superior a sus subordinados, pero s recaan en l to-

    das las responsabilidades y el peso del rendimiento de su

    cuadrilla. A l le gustaba ser capataz porque se senta con

    mando y, claro, despus de once aos, bien vala la pena que

    se le respetara. Pero haca once aos que su mujer lo esperaba

    cada quince das, hecho un furia y un fiera, para que le diera

    la plata para mantener a la familia, que aumentaba invariable-

    mente. A su ltimo hijo le puso Benjamn porque le pareci

    que ya no daba para tanto . El polica que vivi con Yolanda,

    antes de que sta se empatara con Beto, haba tenido simult-

    mente tres hijos, uno de Albertina, otro de una cuada de la

    prima de Marta y otro de Griselda, la hermana de la comadre

    de Viviana y que ya tena un pelao con Meco . As, con venta-

    ja, cualquiera ganaba . Pero diez hijos con la misma mujer

    tambin tena su mrito, que no lo dudara nadie . Para Nicols

    se era un tributo a su virilidad, ms an que el ser jefe de

    1 23

  • treinta leadores que no creen ni en su padre . Lo nico que

    no le gustaba era tener que vivir, o pasar los seis das al mes

    que pasaba, en la Loma . S algn da pudiera llevarse con l a

    Pasqui y a la prole, cargara con los once para las selvas

    impenetrables y taponadas donde se desarrollaba su vida . Pe-

    ro no era posible : en el casero donde vivan, atacados por los

    mosquitos como Europa por los brbaros, desde los germanos

    hasta los rusos, era casi una proeza el sobrevivir entre tanto

    clima malsano y esas lluvias que duraban semanas y esa oscu-

    ridad pues el sol se mete a las tres de la tarde y aparece a las

    ocho y media de la maana . Y no es asunto de estar trayendo

    a una familia que se dice decente a vivir como anmales, sin

    cines, sin agua potable, sin una choza presentable, sin espa-

    cios abiertos para que corran los pelaos, con cucarachas carn-

    voras y canbales, con zancudos ms feos que los de la Loma,

    con lagartos durmiendo en las orillas de los ros, con ros

    malsanos y llenos de lodo y lianas cayendo como en las pel-

    culas de Tarzn pero de verdad y Nicols recuerda que una

    vez hoje La Vorgine y se despepit de risa porque era un

    cuento de nios para lo que l haba visto, odo y sentido .

    Pascasia no era lo que se dice una Miss Universo : diez

    hijos no podan hacer que nadie pensara en ello . Era una

    mam tpica de una familia desheredada : greas grises, caver-

    nas en las encas y en los pulmones, abdomen prominente,

    ropas de sptima mano y cansancio, un cansancio infinito,

    infinito, infinito. Su hijo mayor ya no iba a la escuela porque

    ya no se lo obligaba el gobierno y limpiaba zapatos para tener

    algn dinerito extra . Los dems estaban en la escuela, los que

    deban, o en casa dndole que hacer a Pascasia . Y menos mal

    que Nicols slo vena cada quince das, porque s no sera el

    acabse. En los aserraderos del oeste la vida deba ser muy

    dura, pues Nicols tena unas arrugas bien profundas que

    parecan canales y la piel seca y spera del calor, y curtida de

    los mosquitos . Sus compaeros lo llamaban Compa Nicols el

    capa. Y a l no le molestaba. Es que el respeto se muestra en

    otras cosas y no en la forma en que se dirigen para hablarte .

    Pascasa estaba satisfecha de que, despus de once aos, Com-

    1 24

  • pa Nicols el capa pudiera hacerse respetar sin emplear su

    descomunal fuerza . En la Loma no se respeta a nadie porque

    s. En la Loma hay que tirar la mano cada vez que alguien te

    falta el respeto, sin distincin de sexos . Pascasia nunca olvida-

    ra aquel da, llova, en que la Petra le peg una nudera a

    Beto el hijo de Ubalda la curandera, justo enfrente de su casa

    bruja, al lado del cementerio de carros, porque se hizo el

    manomuerta con ella. Beto se defendi como pudo, pero la

    Petra se dio gusto con l, porque no dio siquiera la talla de

    Domitila, que por lo menos le hizo frente, y casi la noquea .

    Beto viva con Yolanda, porque el polica se fue a vivir con su

    hijo mayor, de veinticinco aos, a un pueblo del interior .

    Yolanda pensaba que tena la matriz cerrada, porque no po-

    da tener hijos . Cuando vivi con el polica que tena catorce

    hijos esper por lo menos un par, pero su concubina se qued

    en la propaganda . De Beto no esperaba nada ms que placer :

    era holgazn, flojo, dbil, de reflejos lentos, flaco, de cerebro

    amodorrado y sin ninguna aspiracin en la vida . A veces Yo-

    landa Yoli, se encorajinaba y le deca que lo que pasaba era

    que estaba muy pegadito a la falda de Ubalda . "Ella lo sabe

    todo", deca Beto, tendido en la hamaca que Yolanda dispo-

    na para l en su tambo . Nada lo inmutaba, ni siquiera cuan-

    do Yolanda le dijo que a lo mejor iba a vacilar con el chombo

    que venda querosn, todo dependa del merolo . Pero lo cier-

    to es, que a su manera, lo quera, y bastante, adems . Beto lo

    saba porque se lo haba dicho Ubalda y estaba tan tranquilo .

    El saba que dentro de seis meses todo quedara en su sitio,

    porque se lo haba dicho Ubalda : Yolanda concebira y sera

    varn y se llamara Ubaldo o Waldo, daba igual . Yolanda

    querra ponerle Elvis o Marlon, pero al final se llamara Ubal-

    do o Waldo. Beto, a su manera, tambin la quera, y quera

    tener un hijo de Yolanda, pero nunca se casara con ella . No

    saba por qu, pero nunca lo hara : Ubalda le haba dicho

    que no se casara con ella y punto . A veces era rareza conocer

    el futuro de una manera exacta, pero a veces se quedaba uno

    sin vivir, existiendo vegetando . Beto no viva, como tampoco

    vivi Martin, el de Ger, el de Fabiola . No era lo mismo, pero

    la Vida los haba abandonado a ambos . No era la Muerte ni

    mucho menos, pero les faltaba ese Soplo, Man, que en el

    1 2 5

  • Edn turico dio origen a Adn del barro . Beto le pregunt a

    Ubalda que cmo Adn tuvo por compaera a Eva sin que le

    faltara ninguna costilla . Ubalda le contest que fue un parto

    por cesrea y que los hijos de Eva, Can, Abel y Seth, haban

    dado a luz a sus mujeres, salvo en el caso de cometer incesto

    y empezar la Humanidad a travs de su madre . El no termin

    de entenderlo. Cmo, si Eva era la nica mujer surgi toda

    la Humanidad? El cura, antagonista por excelencia de Ubalda

    la curandera en cuestiones del espritu, le dijo que era un

    misterio y que tena que creerlo as . Beto dijo que bueno y se

    qued tan tranquilo, pero Yolanda dijo que ah no haba

    ningn misterio, que Can, que era el malo y haba fundado

    una ciudad (? ) lo hizo a costa del vientre de Eva y la Lola

    Beltrn, que apareci en ese momento, dijo que Can fue pa-

    dre y madre de Enoch, porque a l le haba sucedido algo

    parecido, bueno, haba sido una indigestin, pero algo pareci-

    do. El cura se persign, pero fue incapaz de explicarle a esas

    gentes de cerebro sencillo que una sola mujer haba sido ca-

    paz de ser madre de TODOS los hombres teniendo slo hijos

    varones, tres, y uno de ellos muertos . La Petra dijo, unos das

    despus, que Can y Seth fueron amantes y dej zanjado el

    asunto al tomarlo por el lado jocoso. Ubalda siempre sostuvo

    que los primeros hombres podan parir a sus hijos y que el

    Diluvio les ahog, de una manera u otra, esa capacidad . El

    cura decidi cambiar de parroquia y no se lo permitieron . La

    Loma se haba vuelto un lugar mstico . Alguien pregunt

    luego que por qu Moiss, siendo egipcio, fue el conductor de

    los hebreos y qu deca de aquello Golda Meir . Otro le pregunt

    al cura que por qu el Diablo tena igual poder que Dios y si

    eso no era politesmo. El chango pregunt que a dnde se

    iban los que suban al cielo en cuerpo y alma, no deca los

    astronautas, claro. La Petra le pregunt si Pito el tracalero era

    descendiente de Jacob, que era capaz de engaar a su padre y

    tracalearle los derechos al imbcil de su hermano por un plato

    de lentejas . La Lola Beltrn preguntaba qu le queran hacer

    a los ngeles en Sodoma, porque la palabra . . . Y el cura se

    persignaba y se persignaba y se persignaba . Haba estado dan-

    do Historia Sagrada en cursillos gratis y este era el resultado.

    Que si No era judo y sus hijos eran judos, de dnde carajos

    1 26

  • haban salido los negritos, los chinitos y los indios . El cura los

    llamaba hombres de poca fe y alguien le pregunt si la Torre

    de Babel contaba con intrpretes, porque slo se sabe de ella

    en un idioma . Otros le preguntaron que si uno no era levita si

    poda ser sacerdote y otro le dijo que s, que l conoci un

    sacerdote negro y que se seguro que era levita . Otros volvie-

    ron a Eva y el cura empez a hablar en sueco o en latn o en

    arameo, porque no le entenda nadie, y un buen da apareci

    un cura vestido de negro que se deca Inquisidor General y

    que vena a ver qu pasaba en esta Loma, que al parecer

    haba hereja y tratos con el Maligno . Se llev a Ubalda la

    curandera, pero al da siguiente haban dos Ubaldas, una pre-

    sa y la otra echando la suerte . Nadie le dijo al Inquisidor

    dnde estaba y surgi una polmica interna en la Loma sobre

    quin tena la razn . La razn la tuvo Ubalda : su hija sera la

    ltima curandera de la Loma .

    1 2 7

  • (Los lamentos y los gritos no han podido evitar

    nada, Mireya. Meco muri y sus amigos se han

    aprovechado de todo lo que l am . Los lamentos

    son grises y ahogados entre tinieblas. Seis noches

    de velorio, y lo que reservabas para tu marido se

    perdi entre el ruido de los grillos, que dicen que es

    msica, y los balbuceos estpidos de un bombero y

    un oficinista con cara de mosquita muerta) .

    Arnoldo, el prieto chancero que vende los billetes casa-

    dos, sali con un compadre y dos amigos de la infancia, un

    da de Corpus Christi, a tomarse unos tragos por ah por la

    calle . Haban estado en el barrio de tolerancia, donde se tole-

    ra todo menos que no pagues . El compadre de Arnoldo, Ar-

    nl para los amigos, tena tiempo que no caa por la Loma, y

    esa casualidad, ese bendito son los ojos que te ven, haba que

    celebrarlo . Los dos amigos de la infancia se los encontraron

    en una cantina : no hay mejor lugar para recordar los viejos

    tiempos que en un antro abarrotado de palabrotas y olor a

    sudor, delante, o detrs, segn se vea, de una botella de cerve-

    za bien fra. Ah qu buena que est! Es la rubia de catego-

    ra! Y ponerse a hablar de aquella vez que nos pillaron ro-

    bando mangos en el cementerio y de la guialcita que vacilaba

    con su fren y que tena sarna y del boaicito que les haca la

    paja a todos y le daban un real para la soda y del yumeca que

    tena una plantacin de caa ah donde ahora est el super-

    1 29

  • mercado se, te arrecuerdas? y la maestra sa que estaba

    buenona y que la gentele pona espejitos debajo para verle

    hasta el ombligo y de la vez que estbamos volando cometas

    y se enred con la antena (le televisin del men se que, cmo

    se llama, que, s, hombre, se que, no te acuerdas?,bueno,

    ya nos acordaremos porque lo tengo en la punta de la lengua,

    y te arrecuerdas, claro, del tipo se que nos prest una vez la

    bike de carrera y result que se la haba yopiado . Y se pide

    otra botella, y otra, y otra . Y se habla de la poca en que no

    nos hablabamos porque t dijiste que yo no s qu y te dije

    que te iba a sacar la mierda y nos entramos a puete y luego

    lleg tu mam y te dijo que Si no me pegabas te pegaba ella a

    t,te

    arrecuerdas de eso? y que despus que me hinchaste

    un ojo te traje a rni hermano grande para que te pegara y t

    trajiste a tu pap. Luego llega un gorrn de los que nunca

    mancan y se torna un trago con uno, lo adula a uno un poco

    y se va a hacer lo mismo en otra mesa. Lo que es la vida,

    hermano! Antes te vea todos los das y ahora slo los das

    de fiesta. Y te acuerdas de la profe sa que te la tena

    velada? Pues ahora tiene dos pelaos que estudian con un

    primo de ni cuado, y ya le dije que lo cogiera de congo y lo

    quiara de parte ma, porque t eres mi fren y esas cosas no

    se olvidan . La noche pasa y pasa y pasa. Bueno, pues, ya nos

    veremos otro da, psate cuando quieras por mi casa, que ya

    sabes dnde me tienes, chao, hasta la prxima .

    (Leyendas que pasaron, Mireya . Ahora te toca olvi-

    dar a ti. Tus hijos ni tu marido deben saberlo, por-

    que eso pertenece a tu antigua vida, a la de pel

    tonta e ingenua . Los lamentos son grises y ahoga-

    dos entre tinieblas, como los abrazos vengados y

    los devaneos sin suerte en las rondas de lo incierto .

    Incinera tus recuerdos, olvida, olvida, olvida, olvi-

    da, olvida) .

    Arnoldo, el prieto chancero que vende los billetes casa-

    dos, volvi bien, pero bien tarde. Casi casi era temprano en la

    maana. Vena borracho y cantando My commanding wife

    con el sombrero sin ala que se caa para un lado y el hebilln

    1 30

  • ya ms abajo de la cintura y la leontina rodando por os

    suelos y la cadena, rota, en un bolsillo del pantaln caqui de

    big basta . Oh, my commandig wife, she want to destroy my

    fe . Su compadre trataba de llevarlo pero se caa a su vez .

    Los dos amigos de la infancia se haban encontrado con otros

    amigos de la adolescencia y, cuando se percataron de que

    Arnl y su compadre andaban limpios, se haban ido p casa

    que mi negrita me espera, djenme irme que es muy tarde ya .

    Subir la Loma, sobrio, es un dilema ; ebrio, es el ya-no-va-ms .

    Arnoldo se olvid del alambre para tender la ropa que hay

    enfrente de su casa, pero menos mal que su compadre lo vio

    porque la matada hubiera sido impresionante . La merola te-

    na la luz prendida . Qu raro! Pero, en fin, a la mujer no se

    le puede pedir ms de lo que da, porque no es vaciln el

    estarse levantando todos los das a las cinco de la maana

    para recoger las yerbas y arreglarlas para que parezcan otra

    cosa y poderlas vender en el mercado como yerbas medici-

    nales . A las seis, la merola iba a buscar el peridico, porque

    ella distribua a los periodiqueros el diario de la maana,

    oficio en el que se ganaba sus buenos reales, aunque nadie se

    imaginaba cmo . A las ocho, le cambiaba los peridicos que

    le haban sobrado del da anterior al viejito que pasaba con su

    carretilla vendiendo cocos y pipas . A las nueve, abra el kiosco

    donde venda agua de coco, lo que le empleaba una dos o tres

    horas. A las doce, se iba al restaurante Palo Duro, en otra

    barriada, a cocinar el arroz blanco que se vende a real y a freir

    el bistc que tambin se vende a real . A la una y media o por

    esa hora volva y le preparaba la comida a Arnl, que haba

    estado vendiendo chance casado desde las diez de la maana,

    pero que no entraba al "trabajo" otra vez hasta las tres . A

    veces lo iba a ayudar un pocoy a los ocho y media de

    la noche le deca I'm going to be, papacito, y se sumerga a

    cinco mil pies bajo la sbana, para levantarse a los cinco de la

    maana para disfrazar las yerbas y que parezcan otra cosa .

    (No ests segura nunca del olvido de los dems . Los

    dems olvidan slo cuando lo que has hecho puede

    perjudicarles . T eres joven, y si Cleopatra tuviera

    1 3 1

  • slo una teta de las que tienes t, hubiera descu-

    bierto Amrica en su gndola tirada por hipogrifos .

    No ames a tu marido si no quieres, pero por lo

    menos sle fiel, hasta que lo veas en una travesura,

    pero cercirate de que cuando salga de casa no

    pueda hacer ninguna porque est cansado) .

    Arnoldo, el prieto chancero que vende los billetes casa-

    dos, entr con cuidado a su casita bruja . Mir su reloj antes

    de entrar: las tres apenas. Cuando abri la puerta de su cuar-

    to, not la sombra que se deslizaba rumbo a la ventana . La

    merola no lo esperaba todava. La merola se tap como pudo

    con la sbana hmeda y retorcida . Arnoldo, Arnl, logr ver a

    Josesito, el hermano de la Petra, el que est loco el pobre,

    cuando corra sujetndose a medias los pantalones . El com-

    padre de Arnl, preso en los vapores del alcohol, tambin

    alcanz a verlo, pero de refiln : "Aqu, el que menos corre

    cansa a un venao" . Pero Arnoldo no estaba para bromas .

    Arnoldo se acerc a la ventana y trat de trepar, para perse-

    guir al sobrio y asustado Josesito . "Aqu, el que menos puja,

    puja una lombriz", dijo el compadre . Y la merola se senta

    como Mao Tse Tung oyendo misa en la Capilla Sixtina : fuera

    de lugar, "Aqu, el que menos corre, vuela" . Arnoldo cay

    dormido sobre la repisa de la ventana . La merola se levant a

    ayudarlo, pero no poda cubrirse y mover al prieto Arnoldo,

    descendiente en lnea directa de Arnold de Garth, un joven

    caballero de la Corte del Rey Arthur de Inglaterra, que mu-

    ri para que el Prncipe Valiente conociera los trucos de un

    sajn que los haba retado. La merola intentaba ms cubrirse

    que moverlo . El compadre se rea : "Tena aos que no vea

    algo semejante, comadre" . El negro descendiente de un ca-

    ballero de la Mesa Redonda (a ttulo pstumo) estaba inm-

    vil, inerte, como si ya hubiera dejado de existir . "Aqu el que

    menos suda, pare un huracn" . La merola logra levantar a

    Arnoldo, pero como en ese momento se le cae la sbana, lo

    suelta y Arnl da por tierra con su sombrero sin ala . El com-

    padre se acerc. La merola volvi a la cama, pero se dio

    cuenta tarde de que el compadre le haba pisado un extremo

    a la sbana. Cay desnuda encima del colchn . El compadre

    se la qued mirando fiiamente .

    1 32

  • (Canciones de cuna, canciones de amor . Enumerar

    todas las canciones de amor que han sido luego

    canciones de cuna sera muy largo, Mireya . A

    Choni el mundo se puso al revs porque hizo las

    dos cosas: no converses con el Toro antes de saber

    lo que opina el Viento, sigue siendo la Espiga que

    da a luz a los Gemelos, y desecha a los Sagitarios

    que quieran llevarte al reino del Arbol sin pasar por

    el Sol) .

    Arnoldo, el prieto que venda los chances casados, no

    volvi a ver a su mujer ni a su compadre . Josesito tuvo que

    esconderse una buena temporada, y fue cuando a la Petra se

    le ocurri que fuera a trabajar a USA con su primo Eulalio, el

    hermano de Zoraida, la que estaba casada con Meco, el primo

    de Mireya, al que se comi un tiburn en la baha una vez

    que no se saba qu estaba haciendo junto al mar . Aos des-

    pus, todava Arnoldo, Arnl para los amigos, envejecido pre-

    maturamente, buscaba a Josesito, loco el pobre, para darle su

    merecido. Sigui vendiendo su chance casado y coma en casa

    de Silvia la runcha que, siempre con su buen corazn y siem-

    pre tan runcha, no le haba negado la comida . Se habl de

    romance, pero como se trataba de dos derrotados, nadie le

    prest atencin . Lo cierto es que no lo hubo : Silvia slo

    amara a Clark Gable, su primer novio, y ya que l haba

    muerto, haba jurado no volverse a enamorar . Y cumpli su

    juramento .

    1 33

  • Lo que en un tiempo fueron columnas ticas admiradas

    y deseadas son ahora dos palos de corozo flcidos y llenos de

    espinas. Lo que en un tiempo fueron ojos amarillos que se

    tornaban morados de rabia y anaranjados de angustia, son

    ahora faroles apagados color del atardecer : inciertos . Lo que

    en un tiempo fue un cabello color de caf con mucha leche,

    es el remate deun trapeador llamado Fabiola. Cinco hijos han

    hecho el milagro : Candd, que lo metieron preso el otro da

    porque rob un pedazo de pan: Ed, que tiene la casa llena de

    rocas y quiere que lo llamen Ismael ; Carls, que necesita agua

    de mar y tiene la piel reseca y, segn el mdico, el metabolis-

    mo basa) disminuido; Tiby, que pareca un pescado y que la

    hizo cometer un hijocidio ; y Yun, el nuevo. Yun no tiene

    padre, o por lo menos, no lo tiene identificado. Fabiola no

    recuerda a ningn cliente con su cara . Yun se llama as por

    aquello del Eterno Retorno . Fabiola espera invocar su prime-

    ra juventud regresando al Nombre original . Pero ya no es

    posible: si hay algo que no perdona, es el Tiempo . Sus arrugas

    casi llegan hasta el hueso . Martin & Gerd . Yun 1 & Petra.

    Calito & Lotera. Riemnd & Fabiola . iRiemnd! El amor

    que dej ir, que ech porque quera ms y ms: su primer

    chulo, pero lo haca por amor . Ventolero, por ejemplo, la

    dominaba por el terror, Y nada. Yun 11 no habla todava y

    ya se rob una lmpara. Por qu? por qu? Por qu? Y

    ella que soaba tanto con vivir por lo menos decentemente .

    Por qu tener que cambiar su cuerpo por Vida? Era una

    especie de Eucarista a la inversa, viviendo por vivir, existien-

    1 3 5

  • do por existir, sin tener el valor, o cobarda, de acabar de una

    vez por todas y enfrentarse al juicio Final con la conciencia

    limpia y el cuerpo corrompido . Es difcil estar slo por estar,

    sin ninguna razn en especial, vagando entre las sombras de

    unos dlares que pagan los instintos y llorando entre clientes

    que llegan, se sacian y se van, sin tener siquiera alguien que le

    compre las horas, como el cura vasco, ni alguien que por no

    gustarle el precio sea capaz de matarla . As deben vivir los

    animales, esperando slo que los sacrifiquen y los usen para

    alimentar a los hombres . Si al perro se le ensea a sentarse y a

    dar la patita, es porque no lo van a usar para confeccionar

    alimentos. Los insectos slo existen para que los aplastemos o

    les echemos insecticida . Las aves sirven para que las matemos

    a perdigonazos slo por el placer de matarlas . Fabiola ya tiene

    una certidumbre : ella est en el mundo para mover las cade-

    ras por dos dlares y media hora de regateo . Cada uno tiene

    su funcin : sa es la suya, !!criar su matriz con espermas

    desconocidos continuamente y no descansar nunca, apretar

    muslos extraos con los suyos y pedir que acabe pronto este

    cliente para salir a la cantina a buscar otro : de su xito depen-

    de su pan y el de sus hijos . Ver a sus "retoos" una vez al

    da, y eso si no se ha llevado a alguno a casa, por ganar un

    dinerito extra. Por qu? por qu? '-por qu? La China se

    cas y tiene su farmacia, la Choni abrio las piernas, como ella

    diariamente, pero le fue bien. La Petra se levanta a cuanto

    man le parece y vive tan tranquila. Macorina empez con

    Pito, pero el que la desvirg fue Meco, y sigue tan tranquila .

    Mireya se va a casar despus que la violaron con un tipo de

    mucha plata . Griselda, la hermana de la comadre de Viviana,

    tiene dos pelaos y nunca le falta qu comer . Albertina tiene

    seis cachorros, bueno, uno se le muri de meningitis, y sigue

    tan campante . Domitila es gorda, fea y hedionda, pero tiene

    quien la mantenga. Pero, y ella? Su primer marido se fue

    con la Petra, el segundo quera que ella lo mantuviera, el

    tercero se gan la lotera y se fue para nadie sabe dnde, el

    cuarto, Ventolero, le pegaba ms todava que Calito, el que se

    gan la lotera . Cinco hijos, dos maridos, dos chulos : menu-

    do balance! Un hijo loco, uno idiota, uno ladrn, una muerta

    1 36

  • (? ) y otro que no se sabe lo que va a ser. Qu destino era el

    suyo? Por lo menos haba sido ms fuerte que Marta, y

    segua en la Loma. Pero eso no la complaca : y si la flaca

    culisa que estaba superbuena y que violaron dos yanquis bo-

    rrachos hubiera conseguido acomodo en donde estuviera?

    Cinco hijos, dos maridos y cinco veces los dolores de parto .

    Dos chulos . .. y uno ha sido su gran amor . . . dos veces mante-

    ner a los hijos y a un hombre. Qu destino era el suyo?

    Qu sombrilla, qu abanico?

    1 3 7

  • Bueno, Santo, bjate ahora de tu taxi y entra en tu casa .

    Asmate a una ventana, a cualquiera . Mira bien : ves dnde

    vives? Te acuerdas de cmo es cuando llueve? Ya sabes que

    si no tuvieras el taxi tendras que llegar hasta aqu en cayuco .

    Sabes t que los mosquitos de por estos lados son los ms

    gordos del pas? Mira ahora hacia all, hacia el resto de la

    Loma, tu Loma, harta de casas brujas y disentera . Ya lo has

    visto antes y seguramente habrs pensado en lo mismo pero

    crees t que es justo que hasta los mosquitos les chupen la

    sangre a todo ese carajal de gente? Y es que ya no tienen,

    Santo, pues toda se la dejan al patrn .

    Mira esa casita de ah al lado . Ves cmo hay que poner

    tablas para llegar a ella sin mojarse? Sabrs que all vive una

    seora de 74 aos que es tsica y que sus hijos no quieren

    saber de ella . S, como lo oyes. All vive Fabiola, all donde

    est el automvil a la puerta . No lo sabes, pero es el dcimo

    cliente que recibe esta noche . Y all arriba, ves la casa de

    luces rojas? Pues all vive Estebita el cocobolo y queman

    canyac como locos para ver la realidad desde otra realidad.

    Esas son cosas que no cambian los comunistas, porque estn

    impresas en la Persona . Pero mira : ah viene el radiopatrulla .

    Seguro que se lleva a alguien . Crees que sos dos que van

    all, al otro lado, con esa mquina de escribir se la robaron

    por gusto? Esas son cosas que s pueden cambiar los comu-

    nistas, aunque dudo que regalen cosas como hacen creer. Y

    aquel mozalbete que se entretiene en romper los faroles de las

    1 39

  • para el cataln Puig, verdad? Nicols slo viene dos veces al

    mes y cada vez que se va, y cuando puede, deja a la mujer

    preada. Y as tiene diez hijos y no le han subido el sueldo en

    todo el tiempo que lleva trabajando . Pero el hombre es feliz

    porque es capataz y manda a los obreros que estn a su cargo

    y los obreros le obedecen .

    Ahora, ve al otro agujero que dices que es ventana . Ob-

    serva la ciudad all a lo lejos : eso es lo que significa su nom-

    bre indio. Es una colmena de muertos de hambre que no lo

    dicen por orgullo propio . Ves aquella lucecita roja que ape-

    nas se divisa entre las moles de concreto? Es que como ests

    a ras de tierra no se nota tanto, pero es un farol que evita que

    los aviones choquen contra el edificio en el que est emplaza-

    do. Ese edificio es de oficinas . Ya sabes que para causar bue-

    na impresin a los turistas se llena el centro de la ciudad de

    rascacielos que albergan oficinas y a los pobres se los marida a

    los extrarradios porque estorban y dan mal aspecto . Ms all

    de ese edificio salen dos autopistas para que las usen los que

    tienen automvil . Aqu en la Loma, ardiente y con su ropaje

    solar, no hay aceras y hay que caminar sobre tablas para

    llegar a casa . T te salvas porque tienes el taxi, pero, y los

    dems?

    S, Santo; ests viviendo como en un sueo, flotando en

    una realidad de madera mientras te circundan cientos de men-

    tiras de cemento que son falsas incluso hasta para los que

    medran de ellas. Y mientras seamos colonia, as seguiremos,

    viendo crecer gigantes a lo lejos mientras en esta loma, ptri-

    da y ardiente, se consumen uno a uno seres humanos, como

    la madera de sus casas, que servirn de lea el da que ardan

    con ellos dentro . Y entonces los vers, Santo, iluminar la

    ciudad con las antorchas de sus pantalones calcinados y sus

    sueos derruidos en cinagas donde ni los mosquitos los acep-

    tan. Y entonces, y una vez ms, los vers saltar hacia el mun-

    do que la Iglesia de los ricos les promete : hacia la Nueva

    Jerusaln que San Juan (? ) revel como inicio de los Tiem-

    pos Nuevos, sucursal celeste de Wall Street, con doce puertas

    141

  • para los pobres y una sola, inmensa, para los ricos, que no

    puedan entrar en el Cielo de la Iglesia que ellos mantienen .

    Pero aqu y ahora, Santo, no despiertes de tu sueo

    porque te ser ms difcil luchar por Hispanoamrica que

    incitado por los rusos o por los gringos . Sigue pensando que

    la realidad de madera es necesaria para que existan esas men-

    tiras de cemento y que para que dos docenas vivan bien,

    cientos de miles de millones deben escupir sangre en las mi-

    nas, morir de fiebre amarilla y malaria, y padecer rema . Es

    por higiene mental . Sers un mrtir de los fros y nunca

    redimirs a tu tierra caliente, a tu Loma ardiente y baada de

    sol .

    1 42

  • O-yo-l ba-ri-hu

    co-co-le-le chmbal

    O-yo-l ba-ri-hu

    tumba-tumba bu-bu-h

    Ritmo africano en el aire, boleros de moda al son de la

    tumbadora y las maracas, los giros y la algaraba de agente

    sencilla . Es momento de mirar el calendario y asegurarse : si

    estamos en febrero, son carnavales ; si estamos en cualquier

    otra fecha del ao, son elecciones populares (para ejercitar el

    sufragio universal al que obliga la Constitucin) .

    Meses antes empiezan los preparativos y proyectos . Los

    partidos crean sus Centros y los que no tienen nada que hacer

    van a jugar domin y barajas sobre los asientos de madera en

    que parece uno estar en la sala de espera de un dispensario de

    sanidad cualquiera. Al fondo, invariablemente, hay un retrato

    inmenso del candidato a la Presidencia y otro, inmenso tam-

    bin, del candidato a la Asamblea que patrocina y mantiene

    el Centro. Siempre hay un aparato de radio que sintoniza la

    emisora del Partido y suena, entre la msica de moda, unas

    voces entusiastas con las consignas de Vote por Fulano que es

    el bravo, Es hora que sea usted libre as que vote por Zutano

    el paladn de la libertad bien entendida, No sea pendejo y

    vote por Merenganejo el ms vivo de los hombres-varones de

    este pas, Vote por Perengano y no se arrepentir .

    1 4 3

  • Para las ltimas elecciones, el Centro del Partido Reac-

    cionario Universal (PRU) quedaba al lado de la casa bruja de

    Meco, el primo de Mireya, que fue merendado por una tinto-

    rera . El Centro del Partido Autntico de la Oposicin (PAO),

    que nunca haba ganado unas elecciones, quedaba debajo de

    donde vivieron Pito el tracalero y la gordota Domitila, junto a

    la seora que hace frituras . La Coalicin de los Amigos de la

    Patria (CAP), formada por los partidos Social-Fascista de Iz-

    quierda, Agropecuario-Reformista y Revolucionario Eterno,

    tena su Centro Electoral frente a la casa de la Lola Beltrn,

    el tipo que estaba con Ganchudo el da que lo mataron . Los

    dems partidos no tenan sus Centros en la Loma porque eran

    de derecha y all, en la Loma ardiente y llena de moscas, no

    tenan casi afiliados .

    La poltica es el opio del pueblo, ms an que la reli-

    gin . Mientras la gente sencilla, el pueblo llano, llamado as

    porque todos pastan de l, se disputa su preferencia por los

    casi cincuenta partidos polticos, los candidatos, opuestos so

    lo en las nminas se beben un whisky juntos y hablan de

    todo menos de poltica porque da la casualidad que los casi

    cincuenta candidatos no tienen la ms remota idea de

    poltica. De cuando en cuando los partidos se enfrascan en

    alguna reyerta cuasicallejera porque el de un partido dijo que

    el candidato de otro partido era un ladrn ; entonces los can-

    didatos se encogen de hombros, se despiden de mal humor

    por tener que dejar los siempre interesantes coloquios sobre

    mujeres, y buscan al leguleyo que medra a su sombra para

    que los construya y elabore y cree un discurso mordaz que

    aplaste al otro candidato y que haga al pueblo rugir de placer

    y emocin . Se fabrica un mitin fantasma, con permiso auto-

    mtico, y se reparten gorritos y pauelos con los colores del

    partido -hay que ver las combinaciones que se pueden sacar

    del arco iris-, Y despus del mitin, los candidatos se reunen

    otra vez para continuar hablando de mujeres y contando chis-

    tes de doble sentido, mientras los fanticos, que son fanticos

    porque tienen algo en qu creer, vigilan los Centros celosa-

    mente e impiden hostilmente la entrada a todo el que no

    forma parte de su partido . De vez en cuando, uno de los dos

    1 44

  • cuyo retrato pende al final, en la pared del fondo, aparece

    por el Centro, y las viejas seguidoras incondicionales suyas

    lloran de alegra y si les estrecha la mano no se la lavan en

    das porque Don Fulano o Don Zutano me la choc. Y el

    candidato les pregunta por su familia, y si estn bien o si

    necesitan algo, y agradece las flores que han puesto alrededor

    del retrato bien hecho por cierto, y pide el nombre del artista

    para contratarlo, y se toma una fra con dos tipos que juegan

    domin y los llama parsieros y les pregunta que dnde traba-

    jan, y luego les dice que, claro, esto no puede seguir as, que

    cuando su nmina triunfe, que es casi seguro, gracias a Dios,

    se acabar el desempleo, porque los proyectos de su partido

    son inconmensurables, y luego se monta en su Lincoln Con-

    tinental y se dice al chofer que lo lleve a otro Centro donde

    dir exactamente lo mismo hasta que llegue la hora de comer

    y llegue a su casa cansado y se pegue una ducha y se vuelva a

    vestir porque tiene que asistir a una recepcin donde hablar

    de mujeres y contar chistes de doble sentido y mal gusto que

    todos le celebrarn porque todos le deben algn favor y no

    vale la pena irritarlo . Luego charlar con el otro candidato y

    le dir que ya hizo su buena accin de la quincea y el otro

    dir que a l le toca maana y que se pondr su vestido ms

    viejo para que no se lo ensucien y que sta es la peor parte de

    la Carrera Electoral : tener que visitar a la gleba para asegurar-

    se el voto ; si no fuera por los dividendos que da . . .

    1 45

  • El querido de Mercedita, la prima del negro Palmiro, se

    lanz a diputado en las elecciones que hubo dos aos, ocho

    meses y catorce das despus de haberse aprobado la Sexta

    Carta Sacra. No gan, pero la mayora de los votos que obtu-

    vo salieron de la Loma, el rabi que se levant la Petra en el

    bautizo de Julito y que se tiraba a Maribel, sali electo sin

    reunir los votos necesarios,

    Cristin, el que fue querido de Ganchudo y que le cedi

    su puesto a la Lola Beltrn, result ser suplente concejal,

    el Seor Luis, que venda cigarrillos de contrabando, se

    convirti en Secretario de Propaganda del CAP en la Loma,

    en los centros expresamente inventados para este Carna-

    val inverosmil haba msica, luz y color,

    Riemnd, el chombo que era medio busero, medio car-

    pintero, medio maloso y que haba sido el gran amor de

    Fabiola, regres a la Loma conduciendo triunfante un camin

    de sodas y cervezas, y cualquiera, pensara que lo haban elegi-

    do presidente o algo as, pues sonrea con su amplia boca,

    perlada ahora con dos dientes de oro,

    Mireya, al ver a Riemnd, pensaba en la tintorera que se

    haba zampado a su primo Meco,

    1 47

  • Estebita deca que el gobierno resultante tendra que ser

    limpio como su cabeza y porfiaba que si resultaba electo

    Lic . Encarnacin Valds para el cargo de Vicepresidente,

    por el PAO, le saldra de una vez por todas el pelo liso . Se lo

    tuvo que volver a afeitar porque la nmina del PAO, como

    era tradicional, sali derrotada, aunque el Lic. Valds pas a

    ocupar la cartera de Gobierno,

    el prieto Arnoldo se convirti enseguida en chofer del

    nuevo Ministro y le ech la limousine a Josesito una vez que

    lo vio jugando guerrilla-bate en la calle,

    Macorina segua las incidencias del proceso electoral

    oyendo las novelas radiadas, en la mueblera del gallego Pepi-

    o das Muleiras, que ahora era el novio oficial,

    Yolanda logr por fin tener un hijo de Beto, el hijo de

    Ubalda la curandera; lo pona a pelear con Tmi, el hijo fulo

    de la negra Juliana, y se rea porque Tmi ya era mayorcito y

    lloraba como una nia cuando Betito le daba su cacotazo,

    y cuando don Epifanio Hinostroza, candidato por el

    PRU a la ms alta Magistratura del pas, vino a echar su

    discurso, Zoraida, que haba vuelto precisamente ese da a

    buscar no-s-qu a su casa bruja despus de haber desapareci-

    do cuando muri su marido, pens que realmente vala la

    pena meterse a querida de un monogordo. Y se puso su traje

    ms excitante, se solt el pelo y lo dej caer sobre su busto

    macizo para que tapara lo que no tapaba la blusa, pues no

    precisaba sujetador y la blusa era blanca y transparente, y se

    sent a la puerta de su casa, cruz las piernas y con toda la

    afectacin que le fue posible, se puso a comer una melcocha .

    Don Epifanio cort el discurso justo cuando se dispona a

    decir que prometa cruzar gallinas con puercoespines para

    fabricar alambres de pas . Su vista se haba clavado en la

    boca de Zoraida, saboreando distrada y deliciosamente el

    caramelo. Llam a uno de sus guardaespaldas y le orden, so

    pena de despido, que contratara a la tipa sa medio acholada

    1 48

  • para la orga de esa noche . Si estaba casada? Pues se meta

    preso al marido por comunista y ya est . Y as, Zoraida, cor

    el aliciente de la melcocha, desapareci de la Loma un buer,

    da para ingresar en la alta poltica,

    el marido de la comadre de Viviana, ayudado por el

    viejo, solo y casi ciego chango Sebastin, fue nombrado Car-

    pintero Oficial de la tarima del que sera Presidente Constitu-

    cional, Don Augusto Bonaparte Campos, el ABC de la polti-

    ca, como rezaba su slogan . Se habl mucho por esos das del

    parentesco que poda existir entre don Augusto y Fabiola, la

    puta loca de la piel de leche con diez gotas de caf y el

    cabello de caf con mucha leche, madre de tres ladrones, un

    retrasado mental y una nia bizca desaparecida en circunstan-

    cias extraas y desconocidas. Pero la leyenda negra, autora de

    tal blasfemia, no tena visos de verosimilitud, toda vez que

    doa Gloria, madre de Don Augusto, es beata y ofrece una

    misa de accin de gracias diaria desde que su hijo result

    electo a la candidatura del PADUN (Partido Derechista Ultra

    Nacionalista) . Doa Gloria haba residido en el exterior du-

    rante casi toda la vida de Don Augusto. odiaba el mar, se

    que tanto llamaba a Fabiola, era viuda y respetable y hablar

    de ella (o de algn marino llamado Jos) era una calumnia,

    Carmencita no intervino en las elecciones ese ao y San-

    to no se aline con el PAR (Partido Agropecuario-reformis-

    ta), clula marxista de la oposicin,

    un tal Percy Slatter lleg como observador de la OEA y

    en una entrevista televisada en color dijo que a l le gusta

    mucho el pas porque l vivi aqu cuando nio y su cara de

    gringo fulo bonito hizo que el chango Sebastin, que vea la

    televisin en la mueblera del gallego das Muleiras, se llevara

    la mano al bolsillo izquierdo y se le despertara ms de un

    circuito reverberatorio . Manifest que su deporte favorito era

    el bisbol y que, cuando era pelao, jug segunda base con los

    Devils de Cambuto, un equipo local formado por paisanos

    suyos,

    1 49

  • Rato lleg con Mae a la cantina "Golden Yuplon" pi-

    diendo un trago por favor y nadie se lo dio, el cantinero, un

    individuo con cara de malas pulgas, los ech a la calle por

    sapos,

    y en la Loma, que eternamente parece un nacimiento,

    hubo carnaval . Carnaval de seres que al no poder salir de la

    mierda se divertan en ella, revolcndose en su miseria como

    los marranos en las porquerizas. Carnaval de hombres y mu-

    jeres que desafiaban los lmites de lo ilimitado para chupar de

    la teta de un gobierno que deban elegir y que, seguro de la

    victoria, ya corra con todos los gastos . Carnaval de chulos y

    runchas que saltaban las barreras del desenfreno para olvidar

    que, a pesar del jabn y el perfume barato, seguan oliendo

    mal porque estaban podridos y huecos. Carnaval de la Loma,

    cuna de ms pordioseros que la guerra de Indochina, Beln de

    obreros y vagos y maleantes y lo que sea, colina fatdica y

    pozo sin escaleras en donde hay que ascender con las manos,

    los pies, o cualquier otra parte de la anatoma . Colina de seres

    humanos que no son humanos, que no piensan y viven con y de

    sus instintos. Colina de crmenes pasionales y olor de multi-

    tud podrida y hedionda a gusanos . Carnavales de la Loma,

    elecciones en la Loma, elecciones en la Loma, carnavales en la

    Loma, vergel de prostitutas y ladrones, Getseman de muer-

    tos de hambre. Carnavales en la Loma, elecciones en la loma.

    1 50

  • Zoraida no es que fuera tan gorda como Domitila, por

    ejemplo, pero definitivamente no era flaca . Tena lo que en

    lenguaje ertico se llama exuberancia: era una mujer exu-

    berante. A Meco le gustaban obesas, y si no se empat con

    Domitila fue porque ella viva con Pito el tracalero y no le

    daba chance. Haba hecho una apuesta con Papito a ver quin

    se la levantaba primero y la haban perdido los dos .

    A Meco le creca el pelo, pero se le enrollaba y pareca

    que no le creca . Como a Papito, le gustaba Domitila : es ms,

    estaba decididamente enamorado de ella . La esperaba por las

    maanas cuando iba a la tienda del chinito a comprar michas y

    le decan que dnde vas, Domitila, dnde vas, con mantn de

    manila, dnde vas. Papito le deca lo mismo, exactamente

    igual, por las tardes y ella se mova como una ballena en celo,

    por las maanas y por las tardes, pero no les daba chance a

    ninguno de los dos . Y es que Domitila estaba completa y

    totalmente enamorada de Pito el tracalero, y deca, poniendo

    esa cara de hipoptama tan conocida, que Pito le haba traca-

    leado el corazn .

    Meco estaba casado con Zoraida porque estaba bien du-

    ra, y no usaba sostn porque le sobraba carne slida . Pero

    cuando descubri que ella era puro flintin y descuidaba la

    casa, se arrepinti . Empez de inmediato los trmites del

    divorcio y no los termin porque antes se lo comi un tibu-

    1 5 1

  • rn . Aos despus, Zoraida se haba convertido en querida de

    Don Epifanio Hinostroza, un monogordo que quiso ser pre-

    sidente .

    Meco no era marino y tampoco saba nadar . Era bombe-

    ro voluntario y compaero del que seis das despus de su

    muerte viol a su prima Mireya . Meco era un hacelotodo,

    trabajaba en lo que cayera, menos si tena que ver con el mar,

    y por esa circunstancia nunca le pagaba a Fabiola cuando iba

    con ella : Meco fue una especie de querido artificial de aquella

    de los ojos amarillos y la piel de leche con diez gotas de caf .

    (Meco haba vacilado con la Petra y tena un hijo

    por fuera con Griselda, la hermana de la comadre

    de Viviana. Haba vendido licores con Pepio das

    Muleiras, el gallego de la mueblera y haba partici-

    pado con la Seleccin Nacional de Baloncesto. en

    unos juegos Centroamericanos y del Caribe) .

    Nadie sabe, ni sabi ya nunca lo que estaba haciendo en

    el antiguo fuerte espaol que sujeta la punta de la ciudad

    como un bozal y desde donde se declar una de las tantas

    independencias que se celebran anualmente . Lo nico que se

    saba es que subi la marca estando el sitting in the dock of

    the bay wasting time y lleg la tintorera y izas! se lo llev

    como a un Jons moderno, pero sin posibilidades de retor-

    no .

    Zoraida no lo llor . No es que se quedara tan tranquila,

    pero, al fin y al cabo, l se quera deshacer de ella . Le pareci

    luego tan extrao el llegar y no encontrarlo siempre de buen

    humor, siempre bromeando, pero eso dur poco tiempo . Zo-

    raida, con su porte majestuoso, las caderas amplias, el pecho

    robusto, la cintura pequea, permaneci impasible los nueve

    das que dur el velorio . Y luego desapareci como quien no

    quiere la cosa, volviendo aos despus durante las elecciones,

    slo para hacerse querida de don Epifanio Hinostroza, como

    si el Destino, con esa sucursal suya llamada Fatalidad, Anan-

    1 52

  • k, hubiese decidido de antemano su alfa y su omega, holding

    de los Manuscritos de Qumrn, del Pika-dn o de Melquades.

    Y all, en el buche del escualo, Meco lanz una terrible

    maldicin porque

    seis das despus violaron a Mireya, su prima, un bombe-

    ro y un oficinista . Mireya se recuper del golpe, la Loma

    veng su virginidad irrecuperable, y un muchacho que tena

    un triumph para l solito se enamor de ella y le pidi que

    fuera su esposa,

    Fabiola mat a su hija bizca, Tiby, de un botellazo en la

    nuca,

    el hijo que tuvo con Griselda, la hermana de la comadre

    de Viviana, se cay de un poste de telfonos y se fractur la

    columna vertebral . Qued paraltico, pero como saba pintar,

    pues dizque se puso a hacer cuadros que venda y con los

    cuales mantena a Griselda y a su abuela, que se jumaban

    todas las noches y siempre andaban por ah metidas en fies-

    tas,

    Pito el tracalero, el que viva con Domitila, la gordota

    del mantn de manila, tuvo un ataque de lombrices que lo

    mat, pero ella, como ballea en celo al cabo, se busc otro

    amante que soportara su gordura, su fealdad y su olor a

    manteca cara, adems de su desbordante sensualidad,

    Macorina se hizo amante del gallego das Muleiras dos

    das despus que le diagnosticaron una sfilis que Meco, pre-

    cisamente, le haba pegado. Olvid aquel tiempo en que Pito

    la buscaba por la forma en que manejaba las manos y la dej

    virgen para que Santo el taxero la iniciara seis meses despus .

    Y olvid tambin que Meco le dej treponemas de herencia y

    deca que era feliz con su espaolito,

    la Choni empez a ganar peso a causa de vacilar con el

    pren del barrio, de nombre Juan Simn . Aos despus,

    1 53

  • todo se arregl y se fue con un tipo a vivir a Guachapal, y ya

    tenan su finquita y sus gallinas para vivir y no tener que

    depender directamente de nadie,

    la China qued viuda con Romelia, su testiguita de Jeho-

    v, y su nieta-mueca llamada Eva . No apareci ms por la

    Loma, lo que indicaba que todo le haba salido a pedir de

    boca o, por lo menos, no tan mal como para rebotarla al

    fango ardiente y vestido de sol,

    Viviana dijo un da que se iba a morir y se muri, sin

    que el chango Sebastin pudiera hacer nada para impedirlo .

    Entonces l, solo, viudo, hurfano, derrotado, sigui yendo a

    la mueblera del gallego a ver las series de detectives por

    televisin,

    Fabiola se fue retrayendo como un acorden de cum-

    biamba y se fue metiendo en s misma hasta que el mundo le

    lleg a ser extrao y se sentaba a la orilla del mar con las

    piernas abiertas llamando a un marino que se llamaba Jos y

    que muchos aos atrs haba desarticulado las caderas de una

    puta llamada Gloria . Empez a descuidarse tanto que se tra-

    gaba los dientes cuando se le caan y no se daba ni cuenta y

    sus cuatro pelaos vivos andaban por ah por la calle hechos

    unos pedazos de cualquier cosa y sucios y desarreglados mien-

    tras su mam gema da y noche noche y da en el malecn

    por la descomunal virilidad de su abuelo del que ellos slo

    saban que se llamaba Jos y que era marino y que vino al

    mundo nada ms para desarticularle la pelvis a su abuela y

    engendrar a Fabiola sa de ojos amarillos desteidos que lo

    llamaba da y noche y que se le hundan los ojos ms y ms y

    se le arrugaba la piel de leche con diez gotas de caf y el pelo

    de caf con mucha leche era ya como de estopa y deca que

    era su mam y gritaba Martn & Gerd, Yun, Calito, Carls,

    Jos Jos Jos y desde la panza de la tintorera Meco, cuyo

    recuerdo no exista, se regodeaba al ver a la ramera que no le

    cobraba abierta de patas frente al mar y saba que si ella

    evitaba a los marinos por lo menos perteneca al mar que se

    1 54

  • lo haba tragado a l y la crea suya y la saba suya y la senta

    suya y rea porque el mar la llamaba como aos despus

    llamara a sus hijos y a los hijos de sus hijos y a los hijos de

    los hijos de sus hijos per omnia secula seculorum amn .

    La Loma empez a apachurrarse y a convertirse en un

    cementerio de sueos y de bastardas ilusiones : la Loma se

    achurr de arriba abajo como se achurran los acordeones tpi-

    cos, como se aplastan los que tienen todo que perder, como

    se achurran los huevos que se estrellan contra las rocas, como

    se apachurr Europa ante el empuje de los buitres nazis y el

    Plan Marshall, como se apachurran todas las otras Lomas en

    el Continente ardiente y vestido de sol : sin piedad, sin con-

    miseracin ni esperanza .

    Fin

    Salamanca, 1973

    1 55

  • RAFAEL L. PERNETT Y MORALES

    Este formidable prosista colonense, mdico

    de profesin y novelista por vocacin, nos pre-

    senta, en Loma Ardiente y Vestida de Sol, las

    tremendas vicisitudes de los moradores de una

    barriada bruja que bien pudiera ser la de Curund,

    Coln o cualquiera de la estratificacin social de los

    estamentos ms golpeados del pas, en que nues-

    tros connacionales sufren hambre, desempleo,

    insalubridad, promiscuidad, discriminacin social y

    la consiguiente secuela de prostitucin y delito .

    El jurado que le toc la responsabilidad de

    evaluar el texto de esta obra cuando concurs para

    el Premi Mir que luego obtuvo, a travs de un

    eminente novelista de talla internacional como lo es

    el uruguayo Mario Benedetti, nuestro Rogelio Sinn

    y el extraordinario ensayista y orador Digenes de la

    Rosa cuya prosa ensaystica y oratoria poltica se

    caracterizan por el fino y castizo del vocablo preciso,

    hayan coincidido en afirmar "Resolvemos premiar

    Loma Ardiente y Vestida de Sol por su estilo

    dinmico, y calidad imaginativa" y "por la eficacia

    lograda al presentarnos una barriada popular como

    personaje colectivo usando hbilmente la irona y el

    grotesco" .

    Tomado del Peridico La Repblica del 7 de septiembre 1980

    Articulo de Luis Carlos Jimnez

    page 1page 2page 3page 4page 5page 6page 7page 8page 9page 10page 11page 12page 13page 14page 15page 16page 17page 18page 19page 20page 21page 22page 23page 24page 25page 26page 27page 28page 29page 30page 31page 32page 33page 34page 35page 36page 37page 38page 39page 40page 41page 42page 43page 44page 45page 46page 47page 48page 49page 50page 51