los amorreos

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LOS AMORREOS El periodo de anarquía en que se vio envuelta Mesopotamia al final del tercer milenio facilitó una nueva invasión del territorio por una nueva oleada de pueblos semitas. Éstos se llamaban a sí mismos Amurru, pero actualmente son más conocidos como Amorritas o Amorreos. La invasión no fue tan traumática como las anteriores, en parte porque esta vez el caos de la región no lo habían ocasionado ellos, en parte porque su lengua era muy similar al acadio, por lo que fueron asimilados fácilmente y no se les tuvo por odiosos extranjeros, como había sucedido con los guti. Tal vez no sería exagerado afirmar que los amorreos, pese a su falta de cultura, impusieron el orden necesario para que la cultura mesopotámica siguiera floreciendo. No obstante, fueron necesarios unos dos siglos para que la vida volviera a ser la de antes. Los amorreos se asentaron en lo que había sido Acad y también en Canaán. La ciudad más importante tras la caída de Ur fueIsin. El reino de Elam también ejercía su influencia sobre las ciudades mesopotámicas más cercanas. Más al norte destacaban las viejas

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Los Amorreos

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Page 1: Los Amorreos

LOS AMORREOS SIGUIENTE

El periodo de anarquía en que se vio envuelta

Mesopotamia al final del tercer milenio facilitó

una nueva invasión del territorio por una nueva

oleada de pueblos semitas. Éstos se llamaban a sí

mismos Amurru, pero actualmente son más

conocidos como Amorritas o Amorreos. La

invasión no fue tan traumática como las

anteriores, en parte porque esta vez el caos de la

región no lo habían ocasionado ellos, en parte

porque su lengua era muy similar al acadio, por lo

que fueron asimilados fácilmente y no se les tuvo

por odiosos extranjeros, como había sucedido con

los guti. Tal vez no sería exagerado afirmar que

los amorreos, pese a su falta de cultura,

impusieron el orden necesario para que la cultura

mesopotámica siguiera floreciendo. No obstante,

fueron necesarios unos dos siglos para que la vida

volviera a ser la de antes. Los amorreos se

asentaron en lo que había sido Acad y también en

Canaán. La ciudad más importante tras la caída

de Ur fueIsin. El reino de Elam también ejercía

su influencia sobre las ciudades mesopotámicas

más cercanas. Más al norte destacaban las viejas

Page 2: Los Amorreos

ciudades de Mari y Assur, así como la ciudad

deEshnunna. No fueron ocupadas por los

amorreos, pero parece que dependieron

seriamente de ellos.

Los amorreos no introdujeron muchas novedades.

Se limitaron a asimilar la cultura preexistente. Ni

siquiera introdujeron nuevos dioses, pues la

similitud de su lengua con el acadio favoreció que

sus dioses se identificaran con algunos de los ya

existentes. Tenían un dios nacional, Amurru, que

pervivió como un dios secundario.

Page 3: Los Amorreos

También hubo movimientos en el norte. Los

indoeuropeos domesticaron el caballo. Hasta

entonces los únicos animales de carga eran los

bueyes y los asnos. El caballo, aun domesticado,

no servía para estos fines, pues los arneses

primitivos les oprimían la tráquea y los

asfixiaban. Durante un par de siglos tal vez fue

usado únicamente como alimento. Ya hacía

tiempo que un pueblo indoeuropeo se había

asentado en el norte de Grecia, y ahora otro se

asentó al sureste de Anatolia. Se les conoce

como Hititas. Como es habitual, tanto los hititas

como los griegos tardaron varios siglos en

asimilar la cultura de la zona y durante este

periodo dieron poco que hablar.

Al mismo tiempo, la civilización empezaba a

cuajar en dos zonas de América: En México

aparecen los primeros núcleos urbanos con

viviendas rectangulares de techos de paja. En las

ciudades se desarrolló una economía

autosuficiente basada en la agricultura, caza,

pesca y recolección. El metal era desconocido. En

Perú los avances fueron más espectaculares, allí

las ciudades contaban con edificios públicos para

ceremonias y en Las Haldas destaca un templo

Page 4: Los Amorreos

piramidal compuesto por siete terrazas

superpuestas. No conocemos muchos detalles

sobre la sociedad que llevó a cabo estas

construcciones, pero en cualquier caso podemos

deducir que había excedentes económicos y una

organización social estratificada que regulaba la

actividad comunal.

La isla de Creta se convirtió en una nueva

potencia. Ya llevaba mucho tiempo comerciando

por mar con Egipto y Canaán principalmente,

pero ahora la isla se unió bajo un gobierno

poderoso, cuya capital fue la ciudad

de Cnosos. Ahora los barcos comerciales

cretenses estaban protegidos por una flota militar.

La prosperidad y la influencia de la isla fue

aumentando gradualmente en los siglos

siguientes. La Grecia continental fue ocupada por

un pueblo indoeuropeo que implantó una cultura

homogénea en la región, típica de las primeras

fases de la Edad del Bronce. No obstante esta

cultura no llegó al Peloponeso ni a las zonas

costeras, que continuaron habitadas por una

población nativa bajo la influencia de Creta.

Page 5: Los Amorreos

Egipto estaba en los mejores días del Imperio

Medio. Los reyes Mentuhotep IV y Mentuhotep

V tuvieron un capaz primer ministro

llamado Amenemhat, de origen tebano. De algún

modo se rebeló y en 1991 se convirtió en rey con

el nombre de Amenemhat I, inaugurando así

la XII dinastía. Trasladó la capital del imperio

a Lisht, cerca de Menfis, pues debió de juzgar

que Tebas estaba demasiado al sur para controlar

eficazmente el Bajo Egipto. La construcción de

pirámides continuó, si bien éstas nunca volvieron

a alcanzar las proporciones de las del Imperio

Antiguo. Amenemhat reforzó el dominio egipcio

sobre el Sinaí, restableció el comercio con el sur

y mantuvo controlada a la nobleza. Así mismo

ordeno la limpieza y restauración del canal que

unía el Nilo con el lago Moeris, lo que aumentó

considerablemente la fertilidad de la región.

La XII dinastía fue considerada en épocas

posteriores como la Edad de Oro de la literatura

egipcia. A esta época corresponden los ejemplos

más antiguos que conocemos de literatura de

ficción no relacionada con la mitología, como el

cuento del náufrago que se encuentra con una

serpiente monstruosa, o el cuento de Sinuhé, que

Page 6: Los Amorreos

cuenta la vida de un exiliado egipcio entre las

tribus nómadas de Siria. También las ciencias

progresaron. Se conoce un papiro que explica

cómo operar con fracciones, así como el cálculo

de ciertas áreas y volúmenes. Hay recopilaciones

de refranes y proverbios. Se cree que uno de ellos

fue escrito por el propio Amenemhat I para su

hijo. Parece que la vida de palacio no era del todo

fácil, pues entre otros consejos leemos:

Ten cuidado con tus subordinados... ten cuidado

con tu hermano, no conozcas al amigo y no

intimes con nadie...

En 1971 Amenemhat I fue sucedido por su

hijo Sesostris I, quien conquistó la región de

Nubia, situada al sur de la primera catarata del

Nilo. Los nativos eran un pueblo primitivo que no

tenía nada que hacer frente al ejército egipcio.

Quince siglos después, cuando Egipto había

perdido su poderío, los sacerdotes contaban

historias legendarias sobre las extraordinarias

hazañas de los reyes del pasado, que habían

conquistado todo el mundo conocido, y el mayor

de todos los conquistadores era Sesostris I.

Page 7: Los Amorreos

Mientras tanto, en Mesopotamia, la ciudad

de Larsa se liberó de la dominación de Elam,

en 1924 derrotó a Isin y tuvo su propio siglo de

grandeza. Podemos decir que hacia 1900 los

sumerios habían desaparecido de la historia. No

fueron exterminados ni expulsados. Simplemente

perdieron su identidad nacional. Ya nadie hablaba

sumerio, si bien la lengua se conservo como

"lengua culta" en los rituales religiosos (algo

similar a lo que le sucedería al latín mucho

después). Durante 2.000 años los sumerios habían

inventado el transporte con ruedas, la astronomía,

la matemática, la empresa comercial, la

construcción con ladrillo a gran escala y la

escritura, y a partir de este momento fueron

paulatinamente olvidados, hasta tal punto que no

se volvió a saber de su existencia hasta los

descubrimientos arqueológicos del siglo XIX d.C.

A esta época corresponden los sucesos narrados

en la parte final del libro del génesis, en la Biblia.

El génesis fue escrito por sacerdotes judíos más

de mil años después. Su primera parte es una

versión de los mitos sumerios sobre el Diluvio y

las épocas anteriores, drástica y sistemáticamente

adaptados para dejar como único protagonista al

Page 8: Los Amorreos

dios judío, que en la época que tratamos ahora no

existía todavía. Por ejemplo, se conserva una

tablilla sumeria de esta época que hace referencia

a un conflicto entre un dios pastor y un dios

agricultor, en los que no es difícil reconocer a los

que la Biblia presenta como Caín y Abel. Los

diez reyes legendarios de antes del Diluvio son

sustituidos por diez patriarcas de Adán a Noé.

Luego viene la adaptación de la leyenda sobre los

hombres que querían construir una torre que

llegara al cielo. Ahora es el dios judío el que lo

impide haciendo que cada cual hablara una

lengua distinta. La Biblia sitúa la historia en la

ciudad deBabel o Babilonia. Al parecer los

judíos encontraron una falsa etimología que

relaciona el nombre con la palabra "confusión",

cuando en realidad Babel es una derivación

de Bab-Ilum (puerta de Dios), nombre de una

pequeña ciudad mesopotámica que tomaron los

amorreos y que pronto iba a destacar en la región.

Tras una larga lista de descendientes de Noé, el

génesis prosigue con la historia del

patriarca Abram. Las fuentes de esta última parte

ya no son mesopotámicas, sino cananeas. No se

conoce ninguna otra versión más que la de la

Page 9: Los Amorreos

propia Biblia. En principio, toda la historia de

Abram podría ser una invención muy posterior,

pero hay indicios de que existe un sustrato que se

remonta realmente a los finales del siglo XX o

principios del XIX. Por una parte, se describe una

situación política que cuadra con la realidad

histórica:

Aconteció por aquel tiempo que Amrafel, rey de

Senaar; Arioc, rey de Elasar; Codorlahomor, rey

de Elam y Tadal, rey de Naciones, hicieron la

guerra contra Bara, rey de Sodoma, y contra

Bersa, rey de Gomorra, y contra Senaab, rey de

Adama y contra el rey de Bala, la misma que

después se llamó Segor. Todos estos vinieron a

juntarse en el valle de las Selvas, que ahora es el

mar salado. Y el motivo fue que, habiendo estado

doce años sujetos a Codorlahomor, al

decimotercero sacudieron el yugo. (Gen. XIV, 1-

4)

Senaar es el nombre que la Biblia da a

Mesopotamia, mientras que Elasar debe de ser

Larsa y, obviamente, el mar salado es el mar

Muerto. Las ciudades de Sodoma, Gomorra, etc.

eran cananeas. Debían de estar cerca del mar

Page 10: Los Amorreos

Muerto, pues la Biblia sigue explicando que allí

tuvo lugar el enfrentamiento como consecuencia

del cual fueron derrotadas y saqueadas. En el

texto hay una aparente contradicción, pues parece

que Elam es la potencia más poderosa (era la que

tenía sometidas a las ciudades cananeas),

mientras que a Amrafel se le presenta como rey

de Mesopotamia. Probablemente Amrafel era rey

de Babel, y se le atribuye el gobierno de toda

Mesopotamia anacrónicamente, pues poco

después la ciudad dominaría en verdad toda la

región.

Otro indicio del valor histórico de la última parte

del Génesis es que la historia de Abram parece

haber sido modificada varias veces, en particular

para encajarla con el siguiente libro de la Biblia,

el Éxodo. Así, los protagonistas cambian de

nombre de forma repentina y a veces muy

forzada. El propio Abram (padre excelso) pasa a

llamarse Abraham (padre de una multitud

excelsa), su mujer Sarai (señora mía) pasa a

llamarse Sara (señora) y sus nietos Esaú (velloso)

y Jacob (que echa la zancadilla) pasan a llamarse

Edom e Israel. Estas modificaciones sugieren que

Page 11: Los Amorreos

existía una primera versión que fue necesario

conciliar con la que más convenía a los judíos.

El núcleo de la historia de Abram es el siguiente:

Abram parte de Ur con su padre, su mujer y su

sobrino y se asienta en Canaán (donde muere el

padre). Durante un periodo de hambre viajan a

Egipto, donde son bien recibidos por el rey, pero

Abram le hace creer que Sarai es su hermana, el

rey la toma como esposa y Dios castiga a Egipto

con terribles plagas. Cuando el rey se entera de

que Sarai es la mujer de Abram, le invita a

marcharse de sus tierras con ella y toda su

familia. Vuelven a Canaán. Abram se asienta en

la ciudad de Hebrón, a mitad de camino entre la

costa y el mar Muerto, mientras que su sobrino

Lot se asienta en Sodoma, que debía de estar

junto al Jordán, al norte del mar Muerto.

Entonces tuvo lugar el enfrentamiento descrito

más arriba, en el cual Lot fue hecho prisionero

por Codorlahomor. Abram se entera, recluta un

ejército, persigue y derrota a Codorlahomor,

librando así a Lot y restituyendo a Sodoma sus

prisioneros y riquezas incautadas. Luego Abram

pasa a la ciudad de Gerara, donde nuevamente

hace creer a su rey que Sarai es su hermana y se

Page 12: Los Amorreos

repite el mismo incidente que en Egipto, pero esta

vez se aclaran las cosas y el rey de Gerara

permite a Abram que ocupe la parte de su

territorio que más le plazca. Pero la parte más

importante de la leyenda es que, en varios

momentos, Dios promete a Abram que entregará

a sus descendientes toda la tierra de Canaán. A

partir de aquí, los distintos apaños posteriores de

la leyenda parecen intentos de unos y otros por

considerarse descendientes directos de Abram y,

por consiguiente, legítimos propietarios por

voluntad divina de la tierra de Canaán.

El primogénito de Abram es Ismael y la Biblia

afirma que sus descendientes poblaron la costa

arábiga del mar Rojo. (Más de dos mil años

después, Mahoma se consideraría descendiente de

Ismael.) Pero resultó que no era hijo de Sarai, la

mujer legítima, sino de una esclava, luego el

verdadero primogénito era Isaac. A su vez, éste

tuvo dos hijos gemelos, Esaú nació primero y

Jacob nació después cogiéndolo por el tobillo

(como intentando nacer antes, de ahí su nombre).

Teóricamente, la posesión de Canaán

correspondía a Esaú, pero éste la vendió a su

hermano por un plato de lentejas y, mediante un

Page 13: Los Amorreos

engaño, Jacob logró que Isaac ratificara el trato

en su lecho de muerte.

Un posible análisis de esta fábula sería el

siguiente: El hecho de que Abram pudiera

reclutar un ejército indica que en realidad debía

de ser un rey de alguna ciudad o bien un caudillo

de una de las tribus amorreas que llegaron de

Arabia. La procedencia de Ur no es verosímil.

Tras todo el folletín de la descendencia de

Abram, los judíos terminaban siendo

(obviamente) sus legítimos herederos. Son

muchos los pueblos que remontan su origen a un

personaje concreto, y siempre tratan de atribuirle

un origen ilustre. Cuando se escribió el Génesis,

la ciudad de Ur conservaba la leyenda de su

antigua fama, y es natural que los judíos la

eligieran como patria de su antepasado. Lo más

razonable es que Abram fuera un caudillo

amorreo que no consiguió un buen territorio en la

invasión, por lo que llevó a sus hombres hacia

Egipto con la esperanza de encontrar mejores

oportunidades. Allí se encontró con un poderoso

Imperio Medio que debió de rechazarlo sin

apenas esfuerzo. Naturalmente los hombres de

Abram debieron de silenciar rápidamente esta

Page 14: Los Amorreos

parte de la historia, por lo que se convirtió en un

punto oscuro que los judíos rellenaron con

fragmentos posteriores: por una parte, las plagas

de Egipto están tomadas del siguiente libro

bíblico, el Éxodo, y el incidente entre Sarai y el

rey tiene toda la traza de ser una duplicación del

incidente análogo con el rey de Gerara. Es

probable que los hombres de Abram se sintieran

descontentos con un caudillo que los llevaba de

un sitio a otro infructuosamente. Tal vez Abram

los aplacó con alguna historia sobre un dios

portentoso enfadado con los cananeos y los

(restantes) amorreos y que estaba dispuesto a

usarlos a ellos como brazo de su venganza, de

modo que con su ayuda conquistarían todo

Canaán. No podemos saber nada sobre el dios de

Abram, pues la Biblia atribuyó toda intervención

divina al dios de los judíos, eliminando cualquier

resto de otra religión. En cualquier caso, parece

que los hombres de Abram cobraron ánimo y, de

vuelta en Canaán, tuvieron alguna victoria

destacada (probablemente no tan importante

como derrotar al rey de Elam). Finalmente

pudieron asentarse en Gerara (la historia de que el

rey les ofreciera voluntariamente su territorio es

Page 15: Los Amorreos

increíble). Fuera así o de otro modo, es plausible

que los amorreos de alguna ciudad de Canaán se

formaron la leyenda de que un dios les había

otorgado el territorio que ocupaban a través de un

pacto con su primer caudillo, Abram. Tal vez

fueron muchos los toscos invasores amorreos que

se sentían acomplejados frente a la cultura de los

pueblos conquistados, por lo que acogieron

gratamente la historia y se apresuraron a

encontrar líneas genealógicas que los remontaran

al patriarca y legitimaran así (con la voluntad

divina) su posición dominante. La genealogía de

Abram que recoge la Biblia es posterior, pues

termina con pueblos que todavía no habían

entrado en escena.

Otro hecho notable que narra el Génesis es la

destrucción de Sodoma y Gomorra. Es posible

que la caída de un meteorito o, más

probablemente, un terremoto acabara con estas

ciudades. Naturalmente una catástrofe de esta

envergadura debió de suscitar muchas historias

cuya conclusión natural era el castigo divino. De

todos modos no debía de haber muchos detalles

(o los que había debían de discordar mucho de la

religión judía) porque para describir la vida

Page 16: Los Amorreos

pecaminosa de Sodoma y Gomorra los autores

bíblicos tuvieron que adaptar una historia

posterior contenida en el libro de los Jueces sobre

unos hombres que trataron de sodomizar a un

levita (capítulo XIX) y en su lugar éste les ofreció

a su mujer para que la violaran. (Irónicamente,

los pecados que los judíos atribuían a los

sodomitas están basados en historias sobre los

propios israelitas.)

Por esta época, las ciudades más importantes del

sur de Canaán eran Siquem, Betel, Salem,

Hebrón y Beersheba. Salem no debía ser la más

destacada por estas fechas, pero tal vez era la

mejor emplazada, sobre una colina con fuentes de

agua, lo que la hacía fácil de defender y la

capacitaba para resistir asedios. Más adelante

cobraría importancia bajo el nombre modificado

deJerusalén. En general, lo amorreos pasaron los

siglos XX y XIX entre tensiones y disputas.

Durante el siglo XIX la ciudad de Kish tuvo una

época de predominio, pero no tardó en cedérselo

a Babel. En 1850 los amorreos tomaron la ciudad

de Assur, que por aquel entonces era una próspera

ciudad comercial.

Page 17: Los Amorreos

En 1842 murió el rey de Egipto Sesostris

III, poco después de haber sometido a su dominio

a todo Canaán. Le sucedió su hijo Amenemhat

III, que extendió la hegemonía egipcia a algunas

ciudades interiores de Siria. La ciudad de Biblos

se benefició de su larga tradición de buenas

relaciones con Egipto, y gozó de una especial

protección. Hacia el sur, Egipto dominó el curso

del Nilo hasta la tercera catarata. Por esta época

debió de implantarse en Canaán la circuncisión,

un rito egipcio tal vez relacionado con la

fecundidad que los cananeos terminarían

interpretando como símbolo del pacto entre

Abram y su dios. Aunque no sabemos nada a

ciencia cierta sobre este dios, el hecho de que los

cananeos se circuncidaran en su nombre es

indicio de que ser identificados como

descendientes de Abram era de suma importancia

para ellos.

Amenenmhat III construyó dos pirámides junto al

lago Moeris, además de numerosas estatuas

colosales con su imagen y un complejo grupo de

palacios, todo ello rodeado de un mismo muro. Al

parecer la construcción contaba con tres mil

quinientas habitaciones, la mitad de las cuales

Page 18: Los Amorreos

eran subterráneas y se usaban como cámaras

funerarias. Al parecer el rey trató de burlar a los

ladrones de tumbas escondiendo las momias y los

tesoros en un complicado sistema de pasadizos en

lugar de bajo una mole de piedra. Los egipcios

denominaron a esta construcción con una palabra

que significa "el templo a la entrada del lago",

pero los griegos de tiempos posteriores la

deformaron a Labyrinthos, esto es, Laberinto. El

Laberinto egipcio debió de ser una obra

imponente, hecha de mármol blanco, con una

cuidada ornamentación, si bien no cumplió su

cometido, pues todas las tumbas que contuvo

fueron saqueadas con el tiempo. También la

ciudad de Tebas fue embellecida con nuevos

templos, estatuas y otros edificios notables.

En 1822 ocupó el trono de Larsa el rey Rim-

Sin, que tuvo que luchar frecuentemente con Isin

para mantener la supremacía de su ciudad sobre

la región. En 1814 un amorreo consiguió hacerse

con el poder de Assur, fundando una dinastía que

iba a gobernar durante mil años. Se

llamaba Shamshi-Adad I. Sometió a Mari, que

por entonces era la otra gran potencia comercial

del entorno, y dominó así el norte de

Page 19: Los Amorreos

Mesopotamia, formando un pequeño imperio que

más adelante crecería y sería conocido como

el Imperio Asirio.

ANTERIOR BABILONIA SIGUIENTE

A principios del siglo XVIII el norte de

Mesopotamia empezó a sufrir los ataques de

los hurritas, un pueblo que contaba con una

nueva arma de guerra: el caballo. Este animal era

completamente desconocido en el mundo

civilizado, pero hacía ya tiempo que los

indoeuropeos lo usaban como alimento. Ahora los

hurritas (aunque no eran indoeuropeos) habían

resuelto los problemas técnicos que impedían

usarlo como animal de tiro. Diseñaron nuevos

arneses, así como nuevos carros de dos ruedas,

más ligeros y maniobrables, consistentes en

apenas una plataforma para el auriga. Incluso las

ruedas fueron perfeccionadas, pues las nuevas

eran anulares con radios en lugar de macizas. Con

los carros, las incursiones nómadas multiplicaron

su eficiencia. Podían desplazarse mucho más

rápidamente que un ejército de infantería, que a lo

sumo contaba con pesados carros tirados por

asnos para transportar la carga pesada. Podían

Page 20: Los Amorreos

elegir los lugares más desprotegidos, atacar y huir

con el botín antes de que llegaran las defensas.

No obstante, en un primer momento estos pueblos

carecían de la organización y la amplitud de

miras necesarias para ser algo más que una lacra

dolorosa. Por el momento, el rey asirio Shamshi-

Adad I seguía fortaleciendo su imperio y sirvió de

pantalla contra los ataques hurritas, pero la

llegada de una invasión seria era sólo cuestión de

tiempo.

En 1794 Rim-Sin, el rey de Larsa, venció

definitivamente a Isin y unió bajo su dominio el

sur de Mesopotamia. Dos años después,

en 1792 subía al trono de Babilonia el sexto rey

de su I dinastía (instaurada con la invasión

amorrea). Se llamaba Hammurabi. Su situación

era delicada, pues su pequeña ciudad estaba entre

dos grandes potencias: Asiria al norte y Larsa al

sur. Sin embargo, Hammurabi era joven y los

reyes Shamshi-Adad I y Rim-Sin eran ya

mayores. Hammurabi se sometió a Shamshi-Adad

I y, bajo su protección, arrebató a Larsa las

ciudades de Ur e Isin.

Page 21: Los Amorreos

En 1790 murió el rey de Egipto Amenemhat III.

No se conocen bien las causas, pero el Imperio

Medio se desmoronó y el país se sumió en la

confusión. Los egipcios registran dos dinastías

que debieron de reinar simultáneamente: la XIII

dinastía gobernó el Alto Egipto desde Tebas y

la XIV dinastía gobernó el Bajo Egipto

desde Xois, en el centro del delta del Nilo.

En 1782 murió Shamshi-Adad I, y bajo su

sucesor el poder asirio declinó. Hammurabi

aprovechó para concentrar sus fuerzas contra

Larsa. En 1762, tras un año de guerra, aplastó a

Rim-Sin y se hizo con el control de lo que había

sido Sumer. Después se dirigió hacia el norte.

En 1758 saqueó Mari, en 1755 se apoderó de

Eshnunna y, tras unos años de resistencia,

hacia 1754 Assur se hizo tributaria de Babilonia.

Su rey conservó el trono, con lo que la dinastía

fundada por Shamshi-Adad I no se vio

interrumpida.

En 1750 la cultura cretense inició un periodo de

apogeo. Se construyeron grandes palacios,

construcciones complejas con salas de uso

religioso, de ceremonias y de banquetes. Había

Page 22: Los Amorreos

almacenes con reservas de vino, aceite, grano,

lana, metales, etc. Alrededor de los palacios

estaban los talleres de los artesanos metalúrgicos,

de los grabadores y los alfareros. Se conservan

magníficas piezas de cerámica y orfebrería. La

influencia de Creta sobre las islas del Egeo y el

sur de Grecia debió de reforzarse en esta época.

Probablemente, fue este periodo el que dio origen

a la leyenda griega sobre un poderoso rey

cretense llamado Minos, al cual los atenienses

debían pagar anualmente un tributo humano para

alimentar al Minotauro, un monstruo, hijo de

Minos, con cabeza de toro. Ciertamente en Creta

se celebraban rituales con toros.

Mientras tanto un grupo de pueblos indoeuropeos

que se llamaban a sí mismos Arios (nobles)

comenzó a descender sobre la India. Parece ser

que la invasión se produjo lentamente a lo largo

de varios siglos, pero es posible que hubiera una

primera oleada especialmente violenta, ya que la

civilización del Indo, que ya contaba con más de

medio milenio de historia, se extinguió

repentinamente. Se ha constatado que uno de sus

centros principales, la ciudad de Mohenjo-Daro,

fue víctima de una cruenta matanza. La lengua de

Page 23: Los Amorreos

los arios era el sánscrito. Eran pastores de

rebaños bovinos. Habían domesticado el caballo y

conocían el uso del arado. Tenían muchos dioses,

pero el principal era Idra, que les ordenaba la

guerra santa para dar muerte a los dasa (los

aborígenes de la India), que tuvieron que

desplazarse hacia el sur. Las ciudades fueron

destruidas y sustituidas por pequeños poblados de

pastores.

Aún más al este, en

China, tras el largo

periodo de la

dinastía Xia, se

instauró la primera

dinastía de la que se

tiene un auténtico

conocimiento

histórico: la dinastía

de los Chang. Su capital estaba en la ciudad

de Erlitou y dominaba una buena parte del valle

del río Amarillo. La organización política era

rudimentaria y no estuvo exenta de tensiones y

luchas con los vecinos. Durante el reinado de los

Chang se fijaron los rasgos específicos de la

antigua China: la escritura, el transporte mediante

Page 24: Los Amorreos

carros, la fundición del bronce, y una

organización política estructurada en torno al rey

y la capital.

Volviendo a Babilonia, Hammurabi murió

en 1750, siendo rey de un territorio tan extenso

como el que había gobernado el acadio Naram-

Sin seis siglos atrás. El ascenso de Babilonia tuvo

muchas consecuencias en todos los ámbitos.

Desde su fundación, el dios principal de

Babilonia había sido Marduk, totalmente

desconocido fuera de su entorno inmediato.

Cuando los amorreos tomaron la ciudad,

adoptaron también a su dios y lo pusieron a la

cabeza de su panteón. El segundo dios en

importancia fue Nabu, que era el dios principal

de una ciudad situada un poco más al sur,

llamada Borsippa. Las victorias de Hammurabi

se reflejaron en un ascenso análogo de Marduk en

el cielo mesopotámico. Al final de su reinado la

epopeya de la creación ya no era la misma que

habían imaginado los sumerios. Ahora el dios

Anu ya no lograba vencer a la oscura Tiamat,

sino que retrocedía mientras Marduk (que, por

cierto, resultó ser hijo de Ea) se enfrentaba sin

temor a la diosa del caos y la mataba. Así,

Page 25: Los Amorreos

Mesopotamia se enteró de que en realidad fue

Marduk el heroico dios que creó el Universo y,

por consiguiente, su legítimo gobernante. Nabu

acabó siendo hijo de Marduk, con la notoriedad

que ello conllevaba. No obstante, esto no era así

en Assur, cuyos habitantes se aferraron al culto

del dios Assur, que daba nombre a la ciudad.

Al igual que ya habían hecho muchos reyes

anteriores, Hammurabi puso por escrito las leyes

de su reino. El llamado código de

Hammurabi es el sistema de leyes más antiguo

que conocemos en su integridad. Fue inscrito en

una estela de diorita de casi tres metros de altura.

En lo alto hay una imagen de Hammurabi

arrodillado ante Shamash, el dios del Sol, que al

parecer fue quien le dictó el código. En una fina

escritura cuneiforme, la estela contiene las casi

trescientas leyes de que constaba el código,

indudablemente basadas en las legislaciones

precedentes. La estela estaba situada en el templo

de Shamash de la ciudad de Sippar, al norte de

Babilonia. Podía ser consultada por cualquiera

(que supiera leer), lo que garantizaba en cierto

modo la objetividad de la justicia.

Page 26: Los Amorreos

La ley dividía a los hombres en tres categorías:

nobles, campesinos y esclavos. Las diferencias de

clase están cuidadosamente estipuladas: era

mayor la pena por dañar a un noble que a un

campesino, y ésta era a su vez mayor que la pena

por dañar a un esclavo. Por otra parte, un noble

debía sufrir un castigo mayor que un campesino

por el mismo delito. Los esclavos eran marcados

en la frente, y estaba prohibido ocultar la marca.

Había métodos por los que los esclavos podían

comprar su libertad, así como leyes que los

protegían de un trato abusivo. El código de

Hammurabi tiene un pronunciado carácter

comercial: considera los contratos como

compromisos sagrados, da leyes sobre la

posesión, venta y transferencia de bienes, regula

el comercio, los beneficios y los alquileres,

prohíbe el engaño en el peso, los artículos de

mala calidad y los fraudes en general. También

regula el matrimonio, el divorcio y la adopción.

El marido podía divorciarse a voluntad, pero

debía restituir la dote a la esposa. Las mujeres y

los niños gozaban de protección legal. Se

legislaba incluso sobre los delitos pasionales. Los

hombres eran responsables de los diques y

Page 27: Los Amorreos

canales. Si por negligencia se producía una

inundación, el culpable debía pagar fuertes

multas. En cuanto a las penas, la más frecuente

era la mutilación: Si un hombre golpeaba a su

padre, se le cortaba la mano, si un carpintero

construía una casa, ésta se derrumbaba y moría el

inquilino, el carpintero debía morir, pero había

atenuantes por accidente. Se regulaba la profesión

médica, su ética y sus honorarios. Un cirujano

inexperto podía perder la mano.

A la vista de este código, podemos afirmar que la

moral de los babilonios (y, probablemente la de

los mesopotámicos en general) era muy similar a

la moral moderna, con las diferencias obvias

(esclavitud, rigor en las penas, etc.) Durante

mucho tiempo ha existido una falsa imagen de

perversión en las culturas paganas motivadas por

las difamaciones de la Biblia. En realidad, la

única diferencia notoria entre la moral babilónica

y la judía parece ser el exacerbado puritanismo de

ésta en materia sexual.

Hammurabi estableció una compleja y eficiente

red administrativa que él mismo supervisaba.

Bajo su reinado el acadio se convirtió en una

Page 28: Los Amorreos

lengua literaria, si bien el sumerio continuó

siendo una lengua culta. En 1749, tras la muerte

de Hammurabi, ocupó el trono su

hijo Samsuiluna, que conservó bastante bien su

herencia. El acoso de los hurritas era por entonces

mucho más intenso. En1720 Samsuiluna

consiguió rechazar una oleada hurrita que arrasó

Canaán, bien provista de carros, arcos y flechas.

La horda no se detuvo, sino que siguió hacia el

sur, engrosada con cananeos, y llegó hasta

Egipto. Por aquel entonces, Egipto estaba

desmembrado y débil, por lo que no pudo oponer

ninguna resistencia. Los egipcios

llamaron hicsos a los invasores (que, al parecer,

significa "extranjeros") y contaron a sus reyes en

las dinastías XV y XVI. No sabemos gran cosa de

los hicsos, pues los egipcios los odiaron

profundamente y no escribieron nada sobre ellos,

salvo algunos pasajes difamatorios. Los hicsos

formaron un imperio que comprendía el Bajo

Egipto y Canaán. Su capital estuvo

en Tanis, sobre la rama más oriental del Nilo en

el delta. Al parecer, el delito de los hicsos a ojos

de los egipcios (aparte del hecho de que eran

extranjeros y su invasión había herido el orgullo

Page 29: Los Amorreos

nacional) fue que no adoptaron los dioses y el

culto nativo. Egipto era un pueblo firmemente

arraigado a su tradición y no podía concebir otra

forma de vida decente que no fuera la suya.

Acusaron a sus conquistadores de ateos y crueles

y nunca dejaron de mostrarse hostiles con ellos.

El imperio hicso tenía su capital en Egipto, pero

su fuerza estaba en Canaán, donde fueron bien

aceptados. Los hicsos no extendieron su dominio

sobre el Alto Egipto, pero lo dejaron sumido en

un estado de caos del que tardaría en recuperarse.

Mientras tanto, los hititas, que tiempo atrás

habían ocupado Anatolia, empezaban a dar

muestras de organización. El primer rey del que

tenemos noticia se llama Anitta, rey

de Kussara, que emprendió un proceso de

conquista y unificación del territorio.

Hacia 1700 dominaba la mitad de la península.

Los hititas adoptaron la escritura cuneiforme y la

adaptaron a su lengua indoeuropea. Mientras

tanto, los nómadas de los montes Zagros,

llamados ahora casitas, aprendieron la técnica del

carro y el caballo e iniciaron un proceso de

incursiones sobre el Imperio Babilónico.

Page 30: Los Amorreos

Por estas fechas un terremoto sembró la

destrucción en la isla de Creta, que perdió

temporalmente su hegemonía en el Mediterráneo.

Es posible que los griegos aprovecharan la

situación para infligir una derrota a los cretenses.

Tal vez esto diera pie a la leyenda sobre Teseo, el

príncipe ateniense que mató al Minotauro y liberó

a su ciudad del tributo que debía pagar al rey

Minos de Creta.

Hacia 1645 la ciudad de Tebas estaba recuperada

de los estragos de los hicsos. El dios principal de

la ciudad era Amón, y sus sacerdotes lograron

restablecer el orden y eligieron entre ellos un rey,

el primero de la XVII dinastía, que coexistió con

la XVI dinastía hicsa. Los reyes tebanos se

consideraban los reyes legítimos de todo Egipto,

Page 31: Los Amorreos

si bien en la práctica sólo dominaban la ciudad y

sus alrededores.

Hacia 1640 el rey Hattusil I de Kussara logró

dominar a los hititas del oeste de Anatolia y a los

hurritas del norte de Siria, formando así un reino

poderoso con capital en Hattusa. Con el tiempo,

la capital se convertiría en un importante centro

cultural. En 1610 Hattusil I fue sucedido por su

nieto Mursil I, que reafirmó su poder en la región

y puso su mirada en Babilonia. De este modo,

Babilonia se vio enfrentada simultáneamente a

los hititas al noroeste, a los

ANTERIOR EL NUEVO IMPERIO EGIPCIO SIGUIENTE

Durante el siglo XVI, la isla de Creta se recuperó

de su declive. Se volvieron a construir palacios

más grandiosos que los de los tiempos anteriores.

Los nuevos palacios tenían un gran patio central

con gradas monumentales para espectadores,

donde se celebraban competiciones de lucha (algo

similar al boxeo, aunque también se golpeaba con

los pies) y juegos rituales con toros: unos atletas

saltaban sobre los animales y, tras una voltereta,

caían de pie. El toro tenía una gran importancia

Page 32: Los Amorreos

religiosa en esta cultura. La parte de la leyenda

griega sobre el Laberinto, que el rey Minos había

hecho construir para encerrar al Minotauro,

parece remontarse a esta época. Las casas

particulares tenían hasta cinco plantas con

escaleras interiores. Se conservan pinturas de

escenas cotidianas, en las que los hombres juegan

a un cierto juego de tablero mientras el ama de

casa teje lana, hay escenas de caza, otras de

hombres acompañados de perros y gatos, etc. Los

cretenses tenían un dios principal poderoso e

iracundo, pero también había una diosa Madre a

la que se podía rogar que aplacara a su hijo. El

rey era descendiente de este dios y, de hecho, era

éste quien le decía en cada momento lo que

convenía hacer, de modo que oponerse a una

orden real era oponerse a la voluntad divina.

Todo esto es lo que se desprende de las

numerosas pinturas de la época. De los

testimonios escritos no se puede concluir nada,

pues no se conoce la lengua cretense. La escritura

del periodo anterior (la que terminó en 1700) era

pictográfica, pero ahora se usaba una nueva en

forma de líneas onduladas irregulares

(escritura Lineal A).

Page 33: Los Amorreos

La cultura cretense se extendió por las

islas Cícladas y por el Peloponeso, cuyas

ciudades principales a la sazón eran Micenas,

Tirinto y Argos. Otras ciudades que más

adelante adquirirían importancia

eran Esparta y Corinto y, ya fuera del

Peloponeso, Atenas y Tebas.

En 1595 el rey hitita Mursil I tomó Babilonia. No

obstante, no pudo controlar la ciudad, pues los

casitas aprovecharon la ocasión, descendieron

definitivamente de los montes Zagros e

impusieron su dominio sobre lo que había sido el

Imperio Babilónico. Una vez más, la región pasó

Page 34: Los Amorreos

por un largo periodo de decadencia mientras los

bárbaros invasores fueron asimilando lentamente

la cultura mesopotámica y la versión babilónica

de la religión sumeria. En 1590 Mursil I fue

asesinado por su cuñado y sucesor, Hantil I.

Por otra parte, las ciudades civilizadas habían

aprendido de los hicsos el uso bélico del caballo,

con lo que éste dejó de ser una ventaja para los

pueblos nómadas. Los reyes tebanos del Alto

Egipto tenían caballos y los usaron para combatir

a los invasores. El último rey de la XVII dinastía

fue Kamosis, que redujo el dominio hicso a las

vecindades de su capital. En 1570 fue sucedido

por su hermano Ahmés (que, por algún extraño

motivo, los egipcios catalogaron como primer rey

de una XVIII dinastía). Ahmés libró una batalla

decisiva en el Delta, en la que derrotó a Apofis

III, el último rey hicso. El ejército hicso huyó a

Palestina, pero Ahmés lo siguió y lo volvió a

derrotar. Indudablemente, los hicsos ya no eran

entonces los toscos guerreros de antaño, sino que

habían asimilado los lujos egipcios y se habían

debilitado. A partir de aquí desaparecen de la

historia: la mayoría de ellos permanecieron en el

Page 35: Los Amorreos

territorio entre los fenicios, cananeos, amorreos,

etc., pero ya sin ninguna identidad que los uniera.

Con sus victorias, Ahmés logró imponer su

autoridad sobre un Nuevo Imperio

Egipcio. Parece que las tensiones entre el rey y la

nobleza quedaron atrás. Ahora Egipto tenía carros

y caballos, así como un nuevo orgullo nacional.

El rey ya no sólo era sacerdote y dios, sino

también un gran general. Su autoridad era

indiscutible. Una muestra de la nueva reverencia

que se le reservaba es que los egipcios ya no se

referían a él como "el rey", sino con el

circunloquio más pomposo de "la gran casa" o "el

palacio", voz que ha derivado en la

expresión Faraón. Aunque anacrónicamente se

llama faraones a todos los reyes egipcios, lo

cierto es que este título surgió con el Imperio

Nuevo.

En 1560, el rey hitita Hantil I fue asesinado junto

a su hijo y sus nietos por su yerno y

sucesor Zidanta I, que años atrás había sido su

cómplice en la conjura contra Mursil I. Las leyes

hititas no establecían claramente la fórmula de

sucesión del rey, por lo que las conjuraciones

Page 36: Los Amorreos

eran cada vez más frecuentes. A los pocos años

de subir al trono, Zidanta I fue asesinado por su

hijo Ammuna.Los desórdenes dinásticos, unidos

a una grave sequía sumieron al reino en una

profunda crisis.

En 1545 el faraón Ahmés

fue sucedido por su

hijo Amenofis I, quien

retomó Nubia, el Sinaí y

todo Canaán hasta Fenicia,

como en los tiempos del

Imperio Medio. Al oeste, los

pastores libios

protagonizaban frecuentes

incursiones en territorio

egipcio desde tiempos de los

hicsos. El nuevo faraón puso

fin a esta situación ocupando una buena franja del

desierto libio.

En 1525, tras la muerte de Amenofis I ocupó el

trono Tutmosis I, quien extendió el control

egipcio sobre el Nilo hasta la cuarta catarata,

mucho más allá que en cualquier época anterior.

En Canaán llegó hasta la ciudad de Karkemish, en

Page 37: Los Amorreos

plena siria, a orillas del Éufrates. Los soldados

egipcios quedaron fascinados por la abundante

lluvia: "un Nilo que cae del cielo". El propio

Éufrates fue también causa de sorpresa, pues los

Egipcios usaban la misma expresión para

referirse al Norte que para decir "río arriba". Así,

el Éufrates era un río que, "fluyendo hacia el

norte, fluye hacia el sur".

La ciudad de Tebas gozaba ahora de más

prestigio que nunca. Tutmosis I construyó

grandes templos, y cada uno de los reyes

posteriores trató de superar a los precedentes. La

construcción de pirámides se abandonó

definitivamente (todas habían sido saqueadas por

los ladrones de tumbas). En su lugar, Tutmosis I

optó por ocultar su mausoleo tras una compleja

red de túneles excavados en la roca de una colina

cercana a Tebas. Durante los últimos años de su

reinado gobernó junto a su hijo y

sucesor, Tutmosis II.

Mientras tanto, hacia 1500, los hurritas, que

llevaban hostigando a Mesopotamia desde hacía

tres siglos, finalmente se organizaron en un

estado conocido como Mitanni, que ocupó una

Page 38: Los Amorreos

buena parte de lo que había sido el ahora

decadente Imperio Asirio. Asur conservó su

independencia, pero fue tributaria del nuevo

reino. Mitanni arrebató también a los hititas gran

parte de sus dominios, mientras éstos seguían

bajo monarquías débiles que se disputaban el

poder. El rey Telibinu trató de establecer una ley

de sucesión clara, pero no pudo evitar que el

reino hitita sucumbiera ante los hurritas de

Mitanni.

En la actual Guatemala se estaban formando las

primeras comunidades agrícolas.

En 1490 murió el faraón Tutmosis II. Siguiendo

una costumbre egipcia, éste se había casado con

su hermana Hatshepsut (probablemente, los

orgullosos reyes egipcios consideraban que

ninguna mujer era digna de ellos salvo que fuera

de su propia familia). Fue ella quien realmente

gobernó el Imperio desde la muerte de Tutmosis

I. Por su parte, Tutmosis II había tenido un hijo

con una concubina, Tutmosis III, a quien

teóricamente le correspondía el trono, pero era

menor de edad y su tía y madrastra quedó como

regente. Hatshepsut es la primera mujer

Page 39: Los Amorreos

gobernante conocida en la historia. En los

monumentos que construyó se representa a sí

misma con vestimentas masculinas, sin pechos y

con una barba postiza. Bajo su mandato dejó de

lado la expansión militar y, en su lugar, fomentó

el comercio, las minas y la industria. En aquella

época estaba de moda la construcción

de obeliscos gigantes: finas columnas de piedra

de tal altura que todavía no está claro cómo

conseguían erigirlas sin que se rompieran.

Originalmente fueron erigidos en honor al dios

Ra, en tiempos del Imperio Antiguo, pero

entonces no eran especialmente altos: unos tres

metros y medio. En el Imperio Medio se

construyeron obeliscos de más de 20 metros de

altura, Tutmosis I construyó uno de 24 metros y

Hatshepsut llegó a los 30 metros.

Hatshepsut murió en 1469, cuando Tutmosis III

tenía unos veinticinco años. Indudablemente,

debió de vivir oprimido por su madrastra, pues

tras su muerte ordenó eliminar su nombre de

todos los monumentos en los que aparecía,

sustituyéndolo por el suyo o por el de su padre o

su abuelo. Incluso dejó su tumba incompleta, que

Page 40: Los Amorreos

es la mayor venganza que podía tomarse, de

acuerdo con la mentalidad egipcia.

El periodo pacifista de Hatshepsut había

acrecentado a las ciudades cananeas. El nuevo

faraón había sido un títere de su madrastra, así

que los cananeos debieron de pensar que sería un

monarca débil y que era el momento idóneo para

librarse del yugo egipcio. El reino de Mitanni

fomentó la rebelión, que fue encabezada por la

ciudad de Cadesh, tal vez el último resto del

Imperio Hicso.

Sin embargo, el nuevo monarca resultó ser un

buen general. En 1468 se enfrentó con un ejército

cananeo en Megiddo, un enclave estratégico para

la defensa de Cadesh. Tutmosis III aprovechó que

el grueso del ejército se encontraba en otra parte

(pues tomó una ruta diferente a la que sus

enemigos habían conjeturado) y consiguió así una

primera victoria. Dejó parte de su ejército

sitiando la ciudad y siguió avanzando. A los siete

meses Megiddo cayó en poder egipcio. Año tras

año, Tutmosis III reanudaba sus campañas en

Canaán, hasta que en 1462 llegó a la misma

Cadesh y la destruyó. Luego cruzó el Éufrates y

Page 41: Los Amorreos

se internó en Mitanni, pues Cadesh no habría

resistido tanto tiempo sin su ayuda. No obstante

no se atrevió a ocupar permanentemente una

región tan alejada. Durante un siglo, el dominio

de Egipto sobre Canaán no tuvo discusión.

Mientras tanto, el dominio de Creta sobre el

Mediterráneo fue decayendo en favor de la

civilización micénica. Hacia 1450 se aprecian

signos de destrucción en muchas ciudades

cretenses, e incluso periodos de ocupación

griega.

En 1438 murió Tutmosis III y fue sucedido por su

hijo Amenofis II, que continuó la política de

expansión de su padre y reprimió dos

levantamientos en Asia.

Hacia 1430 el reino hitita encontró finalmente un

gobierno estable bajo el rey Tudhaliyas I, que

logró algunas victorias sobre Mitanni.

Amenofis II reinó hasta 1412, cuando fue

sucedido por su hijo Tutmosis IV. Éste promovió

una política de paz con Mitanni, y llegó incluso a

tomar por esposa a una de sus princesas (algo

completamente inusitado hasta entonces). Con

Page 42: Los Amorreos

Tutmosis IV empezó a cobrar importancia un dios

que hasta entonces sólo había desempeñado un

papel secundario en el panteón egipcio, el

diosAtón. Es probable que en ello influyera la

reina. La religión hitita era mucho más simple

que la egipcia, por lo que tal vez a la reina le

resultó más fácil identificar sus creencias con el

culto a un dios modesto como Atón frente al

sofisticado culto a Amón-Ra. En cualquier caso,

lo cierto es que Tutmosis IV le rindió un

ostensible homenaje.

Hacia 1400 murió el rey hitita Tudhaliyas I, que

fue sucedido por su yerno Arnuanda I.

hurritas al norte y a los casitas al este. El fin

estaba cerca.