• Juan en los primeros 17 versículos nos da a entender los propósitos del milagro.

• En los versículos del 17 al 27 en el encuentro con Marta nos enseña como nuestra fe es limitada por el poco conocimiento de Cristo, pero a medida que se conoce más de El, la fe aumenta y se fortalece.

• En los versículos del 28 al 37 en el encuentro con María nos ilustra las necesidades de los hombres, y la falta de comprensión de Jesús.

• En los versículos 38 al 46 en el encuentro de Jesús con Lázaro muerto,, vemos el poder de Jesús sobre la muerte.

• En este pasaje Juan señala un estado emocional de Jesús muy humano, lo describe como “profundamente conmovido”, como un hombre capaz de estremecerse ante el dolor que provoca la muerte; pero al mismo tiempo, nos muestra la fe inquebrantable de Jesús en el Padre, de quién sabía que era capaz de volver a los muertos a la vida, y que siempre le escuchaba.

• Juan 11:38-41

• 38 Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta encima. 39 Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días. 40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? 41 Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído.

• Juan 11:32-37

• 42 Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú me has enviado. 43 Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera! 44 Y el

que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario.

Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir.

• Jesús se estremeció. Esta palabra implica “estremecido en lo íntimo de su ser”. Traducido también “estremecido en su espíritu”, o “dolido hasta el alma”. Hace más énfasis en la intensidad más que en la emoción.

• Jesús vio la pena de Marta, María, y de sus queridos amigos.

• El sabía el temor y la gran esclavitud que la muerte causaba sobre su querido amigo Lázaro.

• Jesús fue al sepulcro. Lázaro fue sepultado en una “cueva” y tenía puesta encima una piedra.

• Al parecer había tres clases de sepulcros entre los judíos.

a) En ocasiones, pero muy pocas veces, eran agujeros excavados en la tierra, como las nuestras.

b. La mayoría de las veces eran cuevas escavadas horizontalmente en la roca con una piedra para ocluir la abertura. Probablemente este fuera el tipo de sepultura en el que fue depositada nuestro Señor.

c. Otro tipo eran cuevas en desnivel con una pendiente descendiente. Parece que la descripción del sepulcro donde fue sepultado Lázaro se ajusta a estas características, porque dice: “tenía una piedra puesta encima”

• Lázaro estaba en una tumba.

• Marta se opuso a que quitaran la piedra, porque había muerto hace cuatro días.

• Ella no estaba segura de que la acción de Jesús fuera sabia y tuviera los mejores resultados.

• Estaba inquieta por lo que Jesús estaba pidiendo.

Jesús dijo: “Quitad la piedra”. Enseñaba que:

a) El milagro sería auténtico. El que ayudó a levantar la piedra lo recordaría y sería testigo de ello. Podría decir: “Yo mismo ayudé a levantar la piedra”

b) La sencilla lección de que desea que el hombre actúe en la medida de sus posibilidades. El hombre es incapaz de resucitar el alma y conferir vida, pero generalmente puede quitar la piedra”.

• “Martha, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días.”

• Esta expresión:

a. Nos enseña la certificación de que Lázaro estaba muerto. Declara ante la multitud que llevaba muerto cuatro días.

b. Nos enseña que no había impostura o engaño concertado entre la familia de Betania y nuestro Señor.

c. Nos enseña la incredulidad que hay en el fondo del corazón del creyente. Marta declaró su fe diciendo que Jesús era El Señor, El Mesías, el Hijo de Dios, pero su fe se derrumba. Cuestiona impulsivamente y con angustia, y manifiesta el tiempo que lleva muerto su hermano.

• Tal vez Marta pensó que Jesús deseaba ver el rostro del muerto por última vez, y declaró “hiede ya”, y esto nos lleva a la reflexión de que la corrupción de un cuerpo tras la muerte es tan triste y doloroso que hasta aquellos que nos aman sienten alivio al enterarnos y perdernos de vista”

• Marta con esa expresión no quería que la situación cambiara.

• Estaba satisfecha con las cosas como están, con Lázaro descansando en paz.

• Marta necesitaba ser confrontada pero al mismo tiempo no perturbada.

• Así también, hoy muchos quieren dejar las cosas como están, sintiéndose felices así. Solo quieren lo suficiente de Cristo para darles comodidad, seguridad y tranquilidad.

• Quieren tener poco a nada que ver con las exigencias de Cristo y la confrontación con el pecado y la muerte del mundo. Como:

Negarse a sí mismo. Dejar que la mente Cristo llene sus pensamientos cada día. Humillarse cada día al punto de la muerte, Dar muerte a su voluntad, sus deseos, sus necesidades, sus

ambiciones. Seguir a Jesús y hacer su voluntad durante todo el día. Etc. Etc.

• V/. 40 40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?

• En otras palabras ¿No te he dicho que si creyeres verás la honra majestuosa de Dios?

• Jesús desafió a Marta a dar un gran paso de fe. Quería conquistar sus quejas y dejar a un lado sus objeciones. Quería que ella confiara en El, que dejara de cuestionar lo que El hacía.

• Jesús quería que Marta confiara en:

Su juicio y voluntad.

En Su conocimiento y comprensión.

En Su Palabra e instrucciones

• En otras palabras, quería que confiara en El, que no ponga límites a su fe, que descansara en El.

• La promesa a Marta era: Si ella creía y simplemente descansaba en El, ella vería la gloria de Dios”.

• Por gloria entendemos la misericordia y el poder de Jesús, el amor y el cuidado sobre esta tierra. Y también se aplica al mundo venidero.

• La persona que de un paso atrás y deje que Dios actúe a su voluntad, la persona que realmente descansa en Dios, verá la gloria de Dios en este mundo y en el venidero.

•¿Qué es descansar en Dios? •Es tener fe y descansar en la liberación y salvación. •Es descansar en la Palabra de Dios. •Es comprometer la vida de uno al llamado y propósito de Jesucristo.•Es un descanso de paz acerca del futuro.•Es una fe que no cuestiona ni se queja. Es una fe que cree y confía en Dios.

• La piedra había sido retirada de la boca de la cueva.

• Nuestro Señor se encuentra ante el sepulcro abierto y la multitud le rodea esperando con inquietud lo que sucederá a continuación.

• No sale nada del sepulcro.

• No hay señales de vida, pero todos observan y escuchan expectantes.

• Jesús ora enseñándonos que toda oración debe ser una oración con propósito.

• El estaba orando por un propósito específico y al hacerlo demostró el propósito y el poder de la oración.

• Cuando un hombre ora con propósito, recibe la respuesta a su oración y es testigo del poder de la oración

• Nuestro Señor se dirige a su Padre en el cielo de una manera sumamente solemne, alzando los ojos y hablando en forma audible ante la multitud.

• Estando a punto de obrar su mayor milagro declara una vez más en público que no hacía nada independientemente de su padre, y que, en esto y en todas sus obras, hay una unión entre su Padre y EL.

• Jesús pidió a su Padre que hiciera algo: “siempre me oyes”.

• No se menciona lo que pidió, pero por el contexto podríamos deducir que tuvo que ver con: “el poder de conquistar la muerte, el fortalecimiento de la fe de los que estaban alrededor mirándolo y la motivación de otros para creer y confiar en EL”.

• Jesús ofreció una acción de gracias al Padre, alabándolo por el glorioso privilegio de la oración y por ser oído y que sus respuestas fueron respondidas.

• Esto nos enseña que a Dios se le debe alabar por la oración, por el acceso abierto que EL permite a su Presencia y por el glorioso hecho que EL nos escucha y nos contesta.

• Jesús expresó un conocimiento perfecto y confiado en Dios: “Yo sabía que siempre me oye. EL sabía perfectamente que Dios oía sus oraciones siempre.

• Jesús brindó testimonio a través de la oración. El oró para demostrar la estrecha relación personal entre EL y Dios y para motivar la creencia de que EL era el enviado de Dios.

• También podemos afirmar de que Jesús estaba a punto de orar por la resurrección de Lázaro. El Padre lo escuchó antes de que orara; su petición fue concedida antes de ser hecha; y por ello comienza a dar las gracias.

• Es necesario mencionar que hay una gran diferencia entre la forma en que Dios escucha a Cristo y como nos escucha a nosotros. Cristo y su padre tienen una sola esencia, una sola naturaleza, y una sola voluntad.

• Todas las miradas estaban puestas en el sepulcro y en el Señor.

• La multitud miraba expectante; y entonces, mientras miraban, tras asegurarse de que prestaban atención, Nuestro Señor pide a Lázaro que salga del sepulcro:

• Lo dijo a gritos porque coincidía con la enormidad del milagro.

• Acentuaba el enorme poder requerido para resucitar al muerto.

• El grito de Jesús es personal. Gritó el nombre de Lázaro. No gritó solamente “ven fuera”. Gritó “Lázaro, ven fuera”.

• Esto simboliza que Jesús conoce a todos, a cada uno por su nombre.

• Los resultados del grito de Jesús fueron dobles.

a. Una persona que estaba muerta salió. El Hijo de Dios habló y él salió. No había forma de que permaneciera en el sepulcro, ningún poder podía retenerlo allí. Salió inmediatamente, perfectamente, obedientemente, visiblemente, tal como era, e incuestionablemente

b. La persona que fue resucitada recibió la atención personal de Jesús. EL dijo “desatadlo y dejarle ir”. Esto no enseña que el servicio a Dios era, y siempre será, el servicio a todo hombre.

• La resurrección de Lázaro simboliza nuestra resurrección, pues nosotros estábamos muertos espiritualmente.

• Estuvimos en una tumba a obscuras donde no estaba la luz del mundo (JESUS). Estando en la oscuridad nos herimos y maltratamos buscando una salida.

• Nuestro estado era de descomposición y teníamos un hedor de muerte.

• En su misericordia Jesús envió a alguien que moviera la piedra para que podamos ver la luz; ESE ALGUIEN FUE LA PERSONA QUE NOS PREDICO EL EVANGELIO Y NOS DIO A CONOCER LA OBRA DE JESUCRISTO.

• Jesús da gracias al Padre por nuestra salvación, porque sus oraciones fueron escuchadas.

• Entonces Jesús nos llama por nuestro nombre y nos invita a salir y pasamos de MUERTE A VIDA.

• Cuando recibimos la vida salimos atados en pies y manos y nuestro rostro envuelto en un sudario.

• Las ataduras en las manos simbolizan las cosas que hemos hecho y que nos es difícil dejarla; la atadura de los pies significa que no podemos caminar correctamente, necesitamos una dirección; el rostro envuelto en un sudario simboliza que aún no podemos ver la voluntad de Dios agradable y perfecta.

• En el caso de Lázaro, Jesús dio instrucción a sus discípulos: “¡desatadle y dejarle ir!” .

• Esto simboliza el trabajo de la iglesia con los nuevos creyentes.