manual practico de ecologia domestica

20
m A n u A L P R á C t i c O d E E c O L o G í A D o m é S t i C a Virginia S. del Casllo

Upload: strarius-wk

Post on 23-Jul-2016

220 views

Category:

Documents


1 download

DESCRIPTION

Un guia practica sobre ecologia.

TRANSCRIPT

Page 1: Manual practico de ecologia domestica

mA n u

AL

P

R

áCticO dE

Ec

OL o G í A D

om

éS

tiCa

Virginia S. del Castillo

Page 2: Manual practico de ecologia domestica

Nota: Si te interesa tener este manual impreso en papel ecológico, hecho con caña de azúcar y papel reciclado, encuadernado artesanalmente y cosido a mano, podes pedirlo a [email protected] el costo es de una colabora-ción consciente, que será destinada para realizar más copias y difundir el material. Desde ya se agradece la difusión de la información presente en este escrito.

Page 3: Manual practico de ecologia domestica

Manual Práctico de Ecología doméstica

Virginia S. del Castillo

Page 4: Manual practico de ecologia domestica

Agradecimientos

Especial agradecimiento a Sandra Castro y a Silvia Suau que gracias a su contribución y el tiempo dedicado, tanto con la crítica constructiva como con su análisis, ayudaron a mejorar la compresión y contenido de este texto. Gracias a Silvia por las correcciones. Muchas Gracias a Sandra que nos hizo el regalo de imprimir este manual. A Johanna Manresa que hizo posible el acceso a éste papel ecológico, en un momento en el que no me era posible adquirirlo por mis propios medios y por su constante apoyo. Gracias a Eliana Falugue y Florencia Alvarez por su incondicional apoyo y por ayudarme a encuadernar este manual . Gracias a Eli por plantar en mi la semilla de conciencia. Gracias a Paula, a Flor y a Mile por hacer realidad nuestro sueño de vivir en una casa ecológica. Gracias a Estefania Novoa por su colaboración. Gracias a los acampantes del 15M, a los aldeanos de Velatropa y a muchas otras personas que han compartido sus conocimientos, sin los cuales hubiera sido imposible escribir este texto. Gracias a mi familia y amigos por todo el apoyo que siempre me han dado. Muchas gracias a vos, por tomarte el tiempo de leerlo.

Page 5: Manual practico de ecologia domestica

INTRODUCCIÓN

Son evidentes los efectos que la raza humana como especie ha causado en los hábitats del planeta entero, aunque políticos y empresarios se han esforzado mucho en ocultar las consecuencias de sus políticas de sacar <<más provecho>> a menor precio, se torna evidente que los únicos que han sacado <<más provecho>> son ellos y sólo a costa de nosotros lo han logrado, explotando hasta casi agotar los suelos fértiles de nuestra tierra, tirando desechos en cada arroyo y río que han podido, contaminando hasta el aire que respiramos.

Nacimos en una era de auge tecnológico donde creemos que dejar de contaminar es retroceder en el tiempo, los invito a que pongamos a nuestra disposición las tecnologías que tenemos y dejemos de ser sus esclavos. Usemos nuestra capacidad de discernimiento, aportemos nuestra empatía hacia el planeta y a las generaciones venideras y difundamos una conciencia ecológica por una CULTURA PERMANTE.

La Ecología, como ciencia que estudia la relación entre las especies y sus hábitats, nos incita a mantener una relación más justa con el ambiente que nos rodea, a hacer un uso más consciente de los recursos con los que la naturaleza nos provee y a movernos hacia una responsabilidad por los desechos que generamos. No es cuestión de meter la basura “bajo la alfombra” ¿Cuantas veces nos preguntamos a dónde van los materiales que descartamos como basura? Parece que no muchas. Nos educan para que tiremos ¡el papelito al tacho! Sin importar si son cascaras de papa, el envoltorio de un alfajor, el pasto que cortaste a la mañana o las sobras de ayer, todo va a parar a una misma bolsa. Es más si es posible ¡tu conciencia a la bolsa también!

Cada vez más personas se están interesando en proteger el hábitat más inmediato que los rodea, justamente este pequeño manual es una compilación de las cosas que me han enseñado, las que he descubierto, algunas producto del ingenio y muchas otras de búsquedas y horas de estudio. Lo que intento con esto es ayudarnos a que gradualmente podamos implementar técnicas y metodologías que nos lleven a armonizar con el medio en el que cohabitamos.

La PERMACULTURA o CULTURA PERMANENTE, a mi manera de ver las cosas, es un conjunto de conceptos que nos ayudan a planificar de manera consciente desde la construcción y el manejo de nuestro hogar (tanto su consumo energético como sus “desechos”) hasta la obtención de energías, buscando siempre que estas sean eficientes, limpias y renovables. Además, también trata temas como el diseño de la huerta, de invernaderos y la creación de modelos que se ajusten a nuestras necesidades y recursos. En todo sentido, a lo que nos referimos cuando hablamos de PERMACULTURA, es de utilizar nuestras capacidades, la amplia gama de herramientas de las cuales disponemos y todo el peso de la sabiduría de los que nos precedieron para así conservar en equilibrio los ecosistemas del planeta y preservar los hábitats de manera permanente. Si no fuera por el terrible impacto del ser humano en la Tierra, no sería necesario preservar nada porque la naturaleza ya hace su trabajo por sí sola.

En este manual vamos a tratar específicamente las acciones que podemos realizar desde nuestro hogar sin hacer grandes modificaciones en él, considerando que nuestra casa se encuentra en una ciudad. Sólo con pequeños cambios se puede hacer un uso más responsable de los recursos y de los desechos, mejorando la relación con el entorno e incrementando la calidad de vida. Ante todo cabe mencionar que lo principal será expandir nuestra visión y así, convertirnos en consumidores conscientes para luego ser consecuentes en nuestras acciones y responsabilizarnos por ellas.

Page 6: Manual practico de ecologia domestica

PRIMERA PARTE

DESECHOSEvitar tirar todo al mismo tacho nos va a dar conciencia de la cantidad de “basura” que generamos, “basura” entre comillas porque muchas veces nuestros desechos se convierten en ésta desde el momento en que los juntamos a todos en una misma bolsa y de hecho lo que es un descarte para mi puede ser materia prima para otro, o una salida laboral, incluso los materiales para construir un hogar, muebles u otros utensilios, si bien la solución a este problema no es específicamente encontrarle a todo un uso posterior, será una técnica que quizá implementaremos hasta dejar de producir éstos desechos.

Envoltorios, paquetes y envases plásticos

Entre los desechos plásticos tenemos una gran variedad de ellos, básicamente casi todo lo que se produce es de plástico, además existen tantos tipos y composiciones que en consecuencia sus posibles reciclados son diferentes entre sí. Si observamos cada envase o paquete plástico está señalizado con un símbolo de reciclado y un número, el cual se refiere al material o materiales que lo componen, lo que permite identificarlo para su posterior reciclado, si bien es algo difícil encontrar lugares donde realmente se vallan a reciclar todos esos tipos de plásticos, es posible que encuentres algún centro de reciclado cerca de tu hogar.

Mientras tanto la primera medida que podemos tomar es dejar de tirar los envoltorios plásticos a la bolsa, evitando así que vayan a parar a un basural, porque tarde o temprano terminarían volando por los aires o nadando en nuestros océanos, mares o ríos. En uno de esos bidones de agua de 5 o 6 litros de boca ancha, puede ser cualquier bidón o botellón que sea descartable (no usar uno que sea retornable), colocaremos todos los envoltorios y envases plásticos. Podemos escribir con marcador indeleble o pegar un cartelito que diga “PLASTICOS” para que cada vez que alguien lo vea sepa o intuya para que es.

Con un palo, que entre por la boca del bidón, compactaremos el contenido cada tanto hasta que ya no se pueda más. Si hacemos un buen compactado, un bidón nos puede durar unos seis meses hasta que lo llenemos completamente, dependiendo de la cantidad de envoltorios que coloquemos a diario.

Page 7: Manual practico de ecologia domestica

Obtendremos un bidón muy resistente (podríamos saltar encima de él sin ocasionarle daño), el cual se puede usar como ladrillo o relleno en construcciones, es cuestión de encontrar donde llevarlo para su futuro uso ya que es posible que produzcamos dos o tres al año. ¡Se acabó tener que sacar la basura todos los días!, y este es el primer paso para conseguirlo. En el caso de que no sea posible llevarlo a algún lugar para su reutilización o reciclado, lo colocas en el cesto de basura para que los lleven otros recicladores o el camión recolector de tu zona ya que al estar en la botella es menos probable que estos plásticos terminen sueltos por el aire, agua o tierra. De la misma manera, también pódes ponerte de acuerdo con amigos, vecinos o familiares y turnarse en llevar los bidones al lugar más cercano de reciclado o hacer algún sillón o mueble con ellos1.

Cuando consumamos productos envueltos en papel film o plástico (incluso las bolsas del mercado, si es que todavía no usamos las de tela), es posible que estos plásticos se ensucien por ejemplo con dulce de membrillo, en ese caso antes de colocarlos dentro del bidón, en un tachito con agua vamos a enjuagar y luego dejar secar. Si es el caso del envoltorio sucio de un alfajor, si se pasa un trapo húmedo será suficiente y así evitaremos que no se descompongan orgánicos dentro del botellón. Según se prefiera, también se podría limpiar con cenizas.

No olvidemos que la mejor forma de ecologizar es disminuir o evitar los productos que, después de consu-mirse, dejan un residuo que tardaría 100 mil años en desintegrarse. Además, se debe tener en cuenta que, aunque se deshagan, no desaparecen del todo. Es decir, no vuelven a ser tierra.

1En la web, hay vídeos que explican cómo construir muebles con casi cualquier material.

Page 8: Manual practico de ecologia domestica

¿Es necesario que el envoltorio del alfajor que se come en unos pocos minutos tarde en desintegrar-se miles de años? ¿Por qué las empresas en su <<gran labor>> por mejorar su posición en el mer-cado y superar las ventas anuales hacen envoltorios más y más llamativos al mismo tiempo que son cada vez más grandes y con menor contenido? De forma muy lenta, determinadas marcas comien-zan a reflejar nuestro interés en el medio ambiente proponiendo envases más ajustados al producto o, incluso, realizados con materiales reciclados en distintos porcentajes.

Invito a detenernos en las góndolas del supermercado y buscar con que materiales están hechos los paquetes, encontrando así cuales son los que ofrecen mayor cantidad en envases de menor tamaño.

Se puede reducir el consumo de papel Film, de uso tan muy común hoy en día en los supermercados, ya sea para envolver pedazos de dulces, quesos, trozos de carne o fiambres y hasta verduras. Es recomendable siempre comprar en cantidades grandes, por ejemplo, el dulce de batata, que se puede hallar directamente en cajón o lata. Estos dulces por su alto contenido de azúcar se pueden tener mucho tiempo sin problemas. Al queso lo adquirimos en hormas o también en quesitos tipo de campo, los cuales se consiguen en los lugares de productos regionales. Puede parecer exagerado, pero si se calcula la cantidad consumida en el transcurso de un mes por una familia, se observará que se puede ahorrar y producir menos residuo. Si no está dentro de nuestras posibilidades comprar en cantidad, podemos ponernos de acuerdo con algún familiar, amigo e incluso un vecino y hacer una compra colectiva. Cuando nos referimos a los vegetales, fácilmente podemos evitar aquellos que han sido envueltos en papel film y consumir tan sólo los que podemos ver que están respirando aire (las frutas, verduras y plantas siguen respirando incluso cuando ya fueron cortadas de la planta o arrancadas de la tierra).

Existe un uso generalizado de bolsas plásticas, tan masivo que hasta por comprar un chupetín nos dan una bolsa. En este y en otros sentidos, veremos que volver a viejas costumbres va a ser la mejor opción. Me refiero con esto a que, antes nuestras madres y abuelas (también padres y abuelos) cuando iban al almacén a comprar, salían acompañados de la bolsa de los mandados o del changuito. Indiscutiblemente, es una buenísima elección para transportar desde el mercado a casa las mercaderías de las cuales nos proveemos. En mi generación buscando una solución al consumo masivo de bolsas plásticas descartables se han regenerado las bolsas de los mandados en diferentes diseños y materiales; desde la arpillera hasta ¿porque no? el uso de la mochila (de hecho es la que más utilizo a la hora de comprar por una cuestión de comodidad). Así mismo, las bolsas naranjas de red que los verduleros tiran son muy resistentes para trasportar verduras. Por ejemplo, hay bolsas de tela para traer el pan, incluso, varias marcas de yerba ecológicas utilizan bolsas de tela en lugar del tradicional paquete de papel. También exiten canastas de mimbre o hechas con tiras de botellas PET, las cuales tienen una gran resistencia y durabilidad. Hay que tener en cuenta que, en esta región denominada Argentina, estamos utilizando anualmente 1,3 millones de toneladas de plásticos, según la Cámara Argentina de Reciclado de Plásticos, del cual sólo se recicla el 15%. Por lo tanto eliminar el consumo indiscriminado de bolsas plásticas (que tardan unos 150 años en degradarse) es un paso enorme. En los casos que la usemos por necesidad, al menos, desechémosla de manera responsable.

Ahora cuando hilamos más fino y nos referimos a bolsas más pequeñas como para 200 gramos de aceitunas por ejemplo o un cuarto de pasas de uvas, se vuelve complicada la cosa. Vuelvo a repetir la lógica utilizada con el papel film: siempre podemos tratar de sacarle el mayor provecho a esas bolsas comprando en mayor cantidad e incluso optar por esos productos que tengan frascos reutilizables y/o reciclables. De todas maneras, es posible que no sea fácil evitar del todo estas pequeñas bolsas, pero no es tan difícil reducir su consumo. Si es de tu interés ir más lejos en tu compromiso con el medioambiente, pódes llevar bolsitas de tela al lugar a donde vas a comprar o frascos (los tarros de dulce de leche de cartón bien lavados son excelentes para compras en cantidad ya que son muy livianos). Así mismo, también sugerir a nuestros comerciantes el uso de bolsas de papel reciclado, es una buena opción.

Page 9: Manual practico de ecologia domestica

Optar por las botellas retornables, tanto plásticas como de vidrio y preferir envases familiares evita la mayor producción de estos <<descartables>>. Además, elegir productos que vengan en potes de vidrio, tales como mermeladas y conservas son todas opciones válidas para disminuir la producción de plástico. Es muy conveniente dar preferencia a envases de vidrio o hechos de cartón y papel reciclados.

Si utilizamos botellas descartables luego las sacamos a la calle por separado para que así los recolectores las lleven a los lugares donde se reciclan o, sencillamente, las llevamos nosotros. También podemos dárselas a esos comercios del barrio donde se venden productos sueltos como los de limpieza y, de esta manera, reducimos la producción de envases y al mismo tiempo logramos darles un uso más a las botellas descartables (no es recomendable reutilizarlas para uso alimenticio, ya que las botellas hechas con PET si se reutilizan rellenándolas con agua u otras bebidas, con el tiempo liberan partículas tóxicas para nuestro cuerpo). Para disminuir la producción de PET en vez de comprar todo el tiempo bebidas en botellas descatables, en la calle podemos consumir aquellas que vengan en envases de vidrio en lo posible retornables, o en el mejor de los casos utilizar un termo irrompible de acero inoxidable ya que son reciclables, livianos, están libres de productos químicos, se pueden utilizar con líquidos calientes sin peligro y los hay de diferentes tamaños. En el caso de potes o vasos descartables si los compactamos se pueden meter dentro del botellón.

Por otra parte, existen otros objetos de plástico de uso común, tales como encendedores y lapiceras. En ambos casos, podemos sustituir el comprar lapiceras y encendedores descartables por recargables. Por ejemplo encendedores a benzina o gas y lapiceras que tengan cartuchos recargables o repuestos. También se pueden recargar los marcadores que, por lo general, son de plástico (también existen de metal). Simplemente los abrimos y echamos la tinta en la almohadilla del cartucho, se debe prestar atención al tipo de tinta que se va a recargar (indeleble o no). Existen dos tipos y se consiguen en la librería.

También podemos actuar de forma ecológica al seleccionar maquinitas de afeitar. Hay dos opciones: la opción “A” es que elijas liberarte y dejar de afeitarte. Si esta no te convence, la “B” consiste en realizar una compra consciente y escoger entre aquellas que no sean descartables. Algo que nos puede ayudar es contestarnos la siguiente pregunta ¿Qué es más ecológico a largo plazo? Muchas veces lo ecológico en determinado plazo también es económico. No es necesario que tomemos todas estas medidas de un día para otro, pero sí que nos movamos con la mayor velocidad posible a la hora de responsabilizarnos por la preservación de los ecosistemas. Todo esto se puede aportar con las elecciones más inmediatas desde casa el día a día, así como también exigir que envoltorios, envases y paquetes sean cada vez más ecológicos para llegar al momento que queden únicamente los rastros de esta era plástica.

La solución se basa en cambiar nuestras costumbres, prefiriendo las posibilidades de consumo que nos aportan una medida ecológica. No nos olvidemos que disponemos de total libertad a la hora de comprar: no sigamos permitiendo que las empresas elijan por nosotros. Después de todo, el cliente siempre tiene la razón y se debe exigir que los productos que se nos ofrezcan sean acordes a nuestra conciencia. Quizá se requiera tiempo para moverse hacia una vida saludable con nuestro entorno, pero cambiar de perspectiva y alterar de manera responsables nuestros hábitos acelera el proceso. En lo que se refiere a mí personalmente opte por prescindir de muchos de estos productos (algunos porque ya no los elijo y de otros prescindiré hasta que den opciones más de acuerdo con mi conciencia). Con el tiempo, he notado que evitar consumir estos productos ha mejorado mi bienestar físico y he logrado armonizar mucho con cada acción que fui adoptando.

Tampoco es cuestión de cambiar de un día para otro, pero cada pequeña elección que sea en favor del ecosistema aporta. Así que no importa cuántas de estas alternativas se utilicen, hasta algo mínimo, a escala mundial no es poco: cada cosa que se haga es un ejemplo para el resto, ya sea para tus amigos, tu familia o tus hijos. Tenemos una gran oportunidad de cambiar el mundo que nos rodea y,

Page 10: Manual practico de ecologia domestica

de hecho, el mundo entero cambiará por completo.

Papel y Cartón

En el caso de papel y cartón con disponer de una caja donde colocar todos los papeles y cartones que desechemos, exceptuando el papel sanitario, será suficiente. Una vez que se ha llenado la caja, la sacamos a la calle y los recolectores de papel harán el resto. También se pueden llevar a un lugar donde se reciclen o se pueden vender. El consumo discriminado de papel y cartón es clave. Es importante tener conciencia al respecto ya que, cada papel que usamos fue parte de un árbol. Si queremos seguir usándolo, es fundamental que cooperemos en su reciclado. Una vez más una buena alternativa es volver a las viejas costumbres. En casa podemos disminuir y, si es posible, eliminar el consumo de servilletas de papel reemplazándolas con las antiguas servilletas de tela, ¿porque no volver a los pañuelos de tela también? Miramos en la televisión propagandas de rollos de papel mostrando lo súper absorbentes que son, pero si es posible optar por usar una rejilla o un trapo, ¿porque nos convencen con publicidades extravagantes de <<lo maravilloso>> que es tal rollo de cocina? Los desafío e incluso me desafío a abandonar nuestra pasiva sumisión a las propagandas evasivas y así descarriarnos del rebaño que guían las multinacionales. No olvidemos que miles de hectáreas de bosques se talan por día nada más para que podamos limpiarnos el culo. Si queremos reducir la cantidad de papel higiénico que utilizamos una opción muy válida por supuesto es el bidé o mi preferida, sobre todo en el verano una ducha. Incluso (no hace falta que sean así de radicales), en los días de calor hacer pis en la ducha directamente ya que los 10 litros de agua que usaría la mochila del baño, se invierten en un duchazo refrescante. Así, los días pasan frescos y sin la necesidad de usar más que las ventanas abiertas y un ventilador.

Algunas marcas de papel, fósforos y otros exponen en sus envases que las materias primas que utilizaron para la elaboración de sus productos o paquetes son de árboles reforestados y/o papel reciclado. Tenemos que estar atentos a la diferencia que existe entre talar árboles que fueron sembrados especialmente para este fin en lugares descampados (en estos casos son jóvenes y no producen la misma cantidad de oxígeno que un bosque natural de miles de años) y en talar árboles muy antiguos plantando nuevamente otros (reforestar), ya que afecta gravemente al ecosistema porque, hasta dentro de miles de años, estos árboles nuevos producirán el oxígeno que generaban los que se talaron.

Siempre es más recomendable usar papel reciclado y preferir estos productos ya que, además de ayudar al medioambiente, incentiva a las empresas a ofrecernos alternativas más ecológicas, aunque sea por mejorar sus ventas. Los envases familiares y los productos que ofrecen mayor cantidad en el mismo tamaño de paquete reducen en determinado porcentaje la cantidad de papel, cartón o plásticos que se utiliza en el empaque, es cuestión de detenernos a examinarlos. Desde la perspectiva del tiempo necesario para que el papel se degrade, es muy recomendable preferir la utilización de papel y cartón siempre y, sobre todo, si aportamos a su reciclado. También es importante mencionar que existen otras alternativas para la fabricación de papel y cartón que por conveniencias económicas de determinadas industrias, empresas y naciones por estos lados del mundo están ocultas y o prohibidas. Una alternativa es el uso industrial del cáñamo que, con su producción, terminaría con la tala masiva e indiscriminada de nuestros bosques y ayudaría a contrarrestar el calentamiento generado por el exceso de dióxido de carbono en la atmosfera (esta planta al igual que cualquier árbol toma del aire el CO2, dióxido de carbono, absorbiendo el carbono y liberando O2, oxígeno). De hecho, los usos que se le puede dar como materia prima al cáñamo son muchos y muy ecológicos. Sin embargo, determinadas industrias perderían ganancias o, directamente, irían a la quiebra y parece que es mejor quebrar todos los ecosistemas antes de perder un solo dólar. A esto le podemos agregar que también se pueden fabricar papel a partir de caña de bambú y de arroz, entre otros materiales. Este manual, por ejemplo, está impreso sobre papel hecho con caña de azúcar y papel reciclado. Se

Page 11: Manual practico de ecologia domestica

consiguen resmas de papel ecológico en internet o en librerías de insumos.

Por supuesto, nos queda exigir a nuestros gobiernos y a las empresas que sean más sensatos con los productos y paquetes que ofrecen al mercado y con sus políticas de persuasión, evitando así un consumo desenfrenado de materiales extraídos de seres tan esenciales para la salud del planeta como son los árboles. Esto es muy importante ya que todos sabemos que se puede vivir sin comer algunas semanas, también sabemos que se puede vivir sin agua algunos días y sabemos también que sólo se puede vivir sin oxígeno pocos minutos.

Orgánicos

A las cáscaras de frutas, verduras, huevo, las sobras de comida, papel, telas, pelo, pasto, plantas, ramas, hojas, etc. los vamos a denominar desechos orgánicos. Es importantísimo que separemos especialmente los orgánicos del resto de lo que desechamos, porque, al mezclarlos y mandarlos a parar a los basurales, se convierten en productores de gases nocivos para la salud, empeorando y disminuyendo toda la calidad de vida de su alrededor. El índice de cáncer de piel y enfermedades respiratorias en los lugares circundantes a los tiraderos aumenta día a día, sin contar el caldo de cultivo que proporciona a otras enfermedades. Tengamos en cuenta que, muy próximas a estos sitios, viven familias enteras debido a que no tienen otra alternativa de vivienda. Nuestro aporte a que esta situación continúe o cese es realmente significativo, quizás, nos lleve tiempo acostumbrarnos y un poco de trabajo, pero puedo asegurar que vale la pena y la alegría.

Cuando hablamos de otro tipo de desechos, los plásticos, por ejemplo, es posible que, con el tiempo, disminuyamos la emisión pero ¿cómo hacemos para reducir la cantidad de cáscaras de fruta o verdura? Tal vez sí podamos disminuir la cantidad de sobras de comida o dárselas a alguien que las pueda aprovechar o a los perros y gatos que siempre andan dando vueltas por el barrio. Pero el resto de desechos orgánicos que generamos difícilmente los reduzcamos. La propuesta es convertir esos desechos en tierra negra o en humus. En el caso de contar con una porción de terreno, podemos realizar tanto una pila de compost como un lumbricario. Si solamente contamos con un espacio pequeño en la casa, un balcón o patiecito, nos conviene un lumbricario. Con éste, obtendremos tierra fértil en menos tiempo, ya que el trabajo que hacen las lombrices acelera el proceso y mejora la calidad de la tierra. De hecho, muchos insectos lo aceleran también.

Para comenzar nuestro lumbricario casero con una maceta grande, cajón o balde esos de 20 litros será suficiente, ponemos en el fondo si tenemos pasto, ramas y hojas, luego un poco de tierra y agregamos algunas lombrices, que se encargaran de transformar todos los desechos orgánicos en humus.

Lo ideal es poner lombrices rojas californianas, con unas pocas será suficiente ya que se multiplican rápidamente. No es estrictamente necesario que sean estas lombrices pero, en caso de usar sus servicios será de mayor calidad la tierra resultante. De todas formas, lo importante es dejar de aumentar la contaminación ambiental, si fuera el caso de que quisiéramos comercializar la tierra, sería muy conveniente utilizar las lombrices mencionadas con anterioridad, la cuales podemos conseguir en un vivero o huerta. Si no las conseguimos, cualquier lombriz estará bien. Si las conseguimos chiquitas rojas, mejor. Posteriormente, iremos llenando la maceta con los orgánicos que desechemos y, en lo posible, tapando con tierra, pasto, ramitas, hojas, ya que esto

Page 12: Manual practico de ecologia domestica

hace que quede más aireado el recipiente y evita que produzca olor desagradable. También podemos dejar secar la yerba del mate a parte e ir tapando con eso cada vez. Pasado aproximadamente un mes en la parte inferior de la maceta, comenzaremos a tener humus que podemos utilizar mezclándolo con tierra común.

Si usar un balde de 20 litros nos queda pequeño o, simplemente, contamos con el espacio para tener un lumbricario más grande, se pueden utilizar bidones de 50 o 100 litros, a los cuales les podemos hacer también una tapa-puertita e incluso agregar ruedas para poder moverlos con facilidad. También podemos hacer una pila de compost en el patio o hacer un cajón grande de material, adobe o madera con tapa, e ir sacando la tierra o dejarla ahí para que algún árbol cercano tome esos nutrientes.

Se pueden utilizar macetones apoyados directamente sobre la tierra o cortar el fondo del balde y disponerlo sobre ella (de esta manera, no hace falta agregar las lombrices ya que estas vienen solas). Es decir, podemos hacer un lumbricario nosotros mismos en cualquier rincón con lo que tengamos, lo importante es que las lombrices lleguen o, si no, las colocaremos directamente. En el caso de que optemos por realizar directamente un pilar de compost, lo que vamos a hacer es buscar un lugar donde depositar los desechos.

Vamos ir mezclándolos con ramas, pasto seco, hojas así como serrín o viruta de madera, tierra y, en lo posible, una mezcla de todos o varios de estos. De esta forma, logramos que el compost esté bien aireado y evitamos aromas indeseables. Si nuestra compostera o lumbricario emite olor feo significa

Page 13: Manual practico de ecologia domestica

que dentro hay bacterias anaeróbicas (las cuales viven sin oxígeno). Si esto sucede lo solucionamos removiendo el compost, así oxigenamos y las bacterias mueren.

Desechos varios

Las latas y los metales los podemos juntar en una caja y, cuando se llene, sacarla a la calle para que los recolectores las lleven a la chatarrería para su reciclado. En el caso de los tetra pack, de uso muy común para envasar pulpa de tomate o jugos de fruta, leche o bebidas alcohólicas, se pueden utilizar para diversas cosas. Una vez limpios, podemos juntarlos con el resto de cartón o por separado y facilitárselos como materia prima a otros: sólo es cuestión de averiguar quién los utiliza. Los tetra pack se pueden utilizar en la construcción de techos ecológicos, ya que están tratados para ser impermeables. Así, algunos recicladores los usan como material para hacer billeteras, monederos y otros estuches o, simplemente, para hacer tapas duras a cuadernos y libros.

Otros desechos como el telgopor y el isopor son muy contaminantes, tanto en su producción y como en su residuo, ya que tardan muchísimo tiempo en degradarse. Lo importante es que no los dejemos libres por ahí, sino que, o los podemos meter en botellas, o juntarlos para darles un nuevo uso nosotros mismos o facilitándoselos a otro. En lo posible, tratemos de evitar consumir productos que vengan en envases, vasos o bandejas hechas con estos. Se pueden juntar los potes de helados lavados o los empaques de electrodomésticos, desgranar el telgopor con paciencia y, luego, rellenar almohadones e incluso se puede usar para rellenar muñecos y pelotas para los chicos.

Cada litro de aceite usado que tiramos por la pileta de la cocina contamina miles de litros de agua. En el caso de no elegir dejar de comer frituras, lo recomendable es ponerse en contacto con alguna organización o persona que lo reutilice ya que después de usarlo en la cocina se filtra y es materia prima para hacer jabón vegetal o biocombustible.

Se calcula que los pañales que usan a diario nuestros niños tardarían unos 300.000 años en degradarse. Similar es el caso de las toallitas femeninas o los protectores diarios. ¿Para qué necesitamos productos que duran tanto si tan sólo precisamos su servicio no más de dos o tres horas? Este es un tema delicado porque, además de ser algo íntimo, es un problema a gran escala: no sólo es contaminante para nuestro planeta el uso de estos productos descartables, sino que están tratados con geles, blanqueadores y colorantes que, al usarlos de manera prolongada, podrían producir efectos colaterales a nuestro cuerpo, además de ser cuna de un gran número de bacterias mientras los tenemos puestos, no permitiendo que nuestra piel respire por ser de plástico. En este caso, se recomienda volver nuevamente a las viejas costumbres, en la actualidad en el mercado se ofrecen pañales reutilizables de lo más variado, hipo-alergénicos y fabricados en diferentes materiales y tamaños. Están hechos especialmente para que cumplan con la misma función que los descartables, pero sin geles, ni blanqueadores, siendo fáciles de lavar ya que están pensados para los tiempos actuales, donde no se puede perder ni un minuto de más y son muy seguros para la piel y la salud de los bebés. Lo mismo recomiendo en el caso de las toallitas femeninas: podemos usar las lavables que están hechas especialmente para no producir alergia ni efectos colaterales, no contienen geles ni blanqueadores. También se consigue en el mercado un producto llamado copa menstrual siendo mucho más fácil y práctico su lavado se adecua más a los ritmos actuales. Además, si sentís que tu conexión con la tierra te lo dicta, podés poner las toallitas o la copa menstrual que usas durante tu ciclo en un recipiente con agua, antes de lavarlas. Posteriormente, se retiran para regar las plantas o algún árbol, ya que los nutrientes que tiene el ciclo son muchos puesto que hubieran sido la primer comida del bebé. Para conseguir estos productos, pueden buscarse en Internet, en mercados de productos orgánicos, en ferias artesanales o autogestionadas como la FLIA.

Page 14: Manual practico de ecologia domestica

SEGUNTA PARTE

CONSUMO A CONCIENCIAEn la medida que vallamos incorporando conocimientos de lo que utilizamos y los efectos que se causa al medioambiente con ello, vamos convirtiéndonos en consumidores conscientes. Es importante elegir que utilizar, lo cual se logra, únicamente, conociendo como son las cosas y cuáles son las diferentes opciones con las que contamos. Muchas veces, producto de la propia inercia cultural o mismo por ignorancia, no nos preguntamos si son necesarias o inútiles las cosas que consumimos o usamos. Así mismo, por no ir contra la corriente, a veces, dejamos que nos arrastre, incluso cuando de antemano sabemos que ésta sólo nos conduce a la autodestrucción. De muchas maneras nos mantienen dormidos y anestesiados procurando que nos inmunicemos a cualquier acto de violencia para así, convencernos de <<lo bueno>> que es auto violentarnos. Ya que de ninguna manera permitiríamos la agresión hacia el exterior sin antes permitirla hacia nosotros mismos, nos adiestran para que introduzcamos a nuestro organismo todo tipo de sustancias completamente nocivas para nuestra salud, alegando que es la <<única forma>> de compartir con amigos, que es <<la mejor forma>> de sentarse a la mesa como familia, convenciéndonos de lo <<mágico>> que es tal producto o del instantáneo efecto de automedicarse. El cambio más profundo en nuestra cultura será pues, primero, un cambio profundo en nosotros mismos.

Jabones y detergentes

Son de uso tan común los Jabones y detergentes que rara vez nos preguntamos si es necesario utilizarlos, por ejemplo si usamos una taza para tomar un té ¿es necesario usar detergente para lavarla? La verdad es que el detergente hace de conector entre materias grasas y agua, porque, naturalmente se repelen. Se encontró una forma química de unirlos y, así el agua arrastra el aceite y la grasa de los materiales a la que están adheridos. Pero ¿qué pasa si no se usa ningún tipo de grasa o aceite? ¿Hace falta ponerle detergente que, además de tener colorantes y perfumes, no es biodegradable? Queda al criterio de cada uno en cada caso. También, si evitamos el consumo de aceites y grasas, no hará falta lavar todo con detergente y será más saludable para nosotros mismos. De todas formas, no se puede eliminar del todo el uso de jabones y detergentes… ¿o sí?

La propuesta es conseguir productos biodegradables, que se consiguen en el mercado, en la web o en mercados de Orgánicos o ecológicos. Por ejemplo, los platos y utensilios de la cocina, en lugar de lavarlos con detergente, se pueden lavar con una esponja de metal y con eso no existe problema a la hora de dejarlos limpios. Esto se puede hacer si no se consume nada con grasa (los productos con aceite como nueces, almendras y maní no ensucian nada). Sin embargo, si consumimos aceite, se puede utilizar un jabón neutro biodegradable, que se puede usar tanto para los platos como para la ropa o para bañarse. Si bien la mejor opción es tratar de contaminar lo menos posible, en los casos que no se pueda evitar el uso de productos, siempre podemos investigar que opciones tenemos a disposición. Es cuestión de interesarse.

Productos de aseo personal

Entre los productos de aseo personal encontramos desodorantes, pasta dental, jabón de tocador, champú, acondicionador y, desde ahí, la lista se puede hacer interminable. Obviamente a <<Mercado>> le conviene que ni nos alcance el espacio a tanto producto de limpieza. Será que la naturaleza nos hizo muy sucios o que el sistema reinante de “Consúmelo TODO hoy”, nos ensucia por un lado y nos convence de estar sucios por el otro, para después vendernos tantos limpiadores.

Page 15: Manual practico de ecologia domestica

Cuando hablamos de algo tan personal como el propio aseo, tendremos que analizar nuestra situación y decidir de qué estamos dispuestos a prescindir y que podemos reemplazar por cosas naturales. Sirve acordarse que, hace 50 años atrás y ni hablar de 100, todo era muy distinto. Podemos investigar como se las arreglaban nuestros abuelos con los recursos de sus tiempos. Por suerte, en nuestra generación, todavía tenemos a quien preguntarle, pero es posible que nuestros nietos ya no conozcan a nadie que allá vivido fuera de este sistema de consumismo desenfrenado.

De todas maneras, ya tenemos opciones en productos fabricados conscientemente y que su uso no causa daño al planeta ni a nosotros. Existen líneas de productos ecológicos, pasta dental libre flúor, jabón hecho con materia prima menos nociva y biodegradable. Tenemos también algunas marcas en el mercado que tienen alguna línea con fórmulas ecológicas. En la web, podemos conseguir cualquier tipo de producto hecho artesanalmente y con materias primas naturales, desde jabones hasta cremas muy superiores a las hechas en súper laboratorios con la diferencia, quizás, de que no tienen tal vez envases tan vistosos y lujosos, seguramente porque no es necesario alardear con el empaque ya que es bueno lo que está en el interior de ellos.

También se pueden reemplazar muchos productos. Por ejemplo, no usar pasta dental. De hecho, un dentista profesor de la facultad de odontología, me recomendó que no usara dentífricos. Me dijo que era mucho mejor tener el hábito de cepillarme bien los dientes y encías, en lo posible fuera del baño y por un rato largo. Por ejemplo, mientras vemos una película, antes que cepillarse sólo 5 minutos con pasta dental. Se puede reemplazar el enjuague bucal por buches de té de manzanilla o, si te gusta, directamente tomar un té. Los desodorantes se consiguen producidos de manera artesanal y de componentes que no son nocivos para nuestra salud y tampoco para nuestra atmósfera. Por ejemplo, se pueden usar los ya conocidos bicarbonato de sodio o limón que son fáciles de conseguir.

Aerosoles

Si bien en cada envase de aerosol encontramos la leyenda “NO DAÑA LA CAPA DE OZONO”, la realidad es que el efecto que causamos usándolos es muy evidente. Las temperaturas en diversas regiones del planeta se hallan totalmente fuera de estación y encontramos en cada día una estación, incluso, dentro del mismo día las variaciones climáticas son grandes. Los aerosoles contienen un componente que desprende las moléculas de ozono de nuestra atmósfera, haciéndola cada vez más delgada y produciendo, en consecuencia, una subida de la temperatura del planeta. Así mismo, expone a todos los seres vivos a tener un mayor contacto a determinados rayos de la luz solar que sin esta aislación, producida por la capa de ozono, son perjudiciales para la salud. Creo yo que no es muy complicado dejar de consumir productos en aerosol y elegirlos en atomizador o en crema. Hay muchas otras opciones válidas que fácilmente pueden suplantar al envase en aerosol sin tener que dejar de usar esos productos, a menos que te des cuentas que ya no necesitas ninguno de ellos y eso sería realmente un ¡golaaaazooo!

Alimentos ORGANICOS

En los tiempos en los que corremos, ¿adónde? ¡No sé!, ¡El tiempo es oro! ¿En dónde se cambia? Tampoco sé, pero sí sé que todos se rigen en el ahorro constante. Creerán que su jubilación será mayor si ahorran mucho tiempo en el banco de la vida, creyendo que en algún momento su tiempo ahorrado se convertirá en algún tipo de ventaja para, finalmente, desilusionarse al caer en la cuenta de que no hay registro del tiempo ahorrado y, de hecho, en el único lugar donde se lleva bien las cuentas es en la tierra donde vivimos y, justamente, la deuda es nuestra.

Tal vez, algunos ya saben que existen empresas multinacionales como Monsanto que en la actualidad

Page 16: Manual practico de ecologia domestica

son laboratorios donde se modifican genéticamente semillas para que sean resistentes a químicos, con las cuales son tratadas y, posteriormente, a los pesticidas con que las pulverizaran con el fin de que no las ataquen plagas. Además, al realizarse tantos monocultivos en la misma tierra, esta no tiene nutrientes y como solución se la “nutre” con más químicos, haciendo así a las plantas más vulnerables todavía al ataque de todo tipo de plagas. En consecuencia, así continúa el círculo vicioso y es necesario rociar con más químicos y, por supuesto, esos químicos finalmente son llevados a nuestra mesa cada día acompañando casi todos los alimentos que comemos.

Porqué los productores han decidido cosechar de esta manera no es un enigma, la realidad nos muestra que los antiguos campesinos, que trabajaban sus tierras y producían algún tipo de excedente para poder vender, fueron reemplazados por agro-empresarios (que están muy lejos de ser campesinos). Así, a los trabajadores de la tierra se les ha sustituido por máquinas y a todos los procesos naturales por químicos y modificaciones genéticas, asegurándoles a los empresarios del campo un crecimiento ilimitado de sus ingresos a costa de agotar los recursos naturales de la tierra, alterando los procesos naturales de las plantas, animales y de los insectos, tan importantes en el equilibrio planetario.

La cosa es así de simple, no hay que ser un genio para notar que nunca se necesitó de la mano del hombre para que los árboles y plantas crecieran y den fruto. De hecho, fue así por millones de años. Las plantas tienen perfectas interrelaciones entre sí, con insectos y animales, lo cual hace que todo surja y prospere de forma equilibrada. Eso es así hasta que alguien mete mano y cuanto más toqueteemos los hábitats, más dependiente se va volviendo la supervivencia de las especies.

Tenemos por un lado Productores que piensan que sus intereses son ganar el mayor dinero con la menor inversión y quieren que sea en el menor tiempo posible. Esto da como resultado gigantescas plantaciones de lo mismo, monocultivos, y cuando únicamente permanece una especie en lugares tan grandes, se vuelve muy vulnerable. En la naturaleza se da tal equilibrio que, siempre que crece una planta, cerca de ella crece otra que la protege de un insecto o del viento o del sol, etc. o, si un aroma atrae a un insecto peligroso para la planta, el mismo aroma o color atrae a un insecto que es predador del anterior… si sólo dejáramos que todas las cosas siguieran su curso natural y se equilibrasen de nuevo, podríamos pensar en lo que podemos ahorrar, ya que no harían falta de modificaciones genéticas, químicos ni pesticidas. Se ahorrarían millones en dólares y, por supuesto, tiempo.

Hay quien dice que los efectos hacia nuestro organismo de los restos de químicos y pesticidas en el pan, las frutas, verduras y cereales que consumimos son casi nulos. No obstante, hay muchas pruebas de que no es así. De todas maneras, queda al criterio de cada uno la elección del tipo de sustancias que ingresa a su organismo. Basta con hacer la prueba del sabor de un alimento crecido de manera natural respetando su tiempo de siembra y cosecha, sin la aplicación de ningún químico y comparar con el que compramos en el mercado para notar la diferencia.

De lo que no hay dudas es de los efectos colaterales que producen en los ecosistemas del planeta en que vivimos el uso de pesticidas y químicos. Por ejemplo, muchas especies de aves y sapos tienen que migrar hacia otras zonas en busca de alimento por el hecho de que no hallan la suficiente cantidad de insectos para alimentarse, desencadenando en súper plagas de, por ejemplo, mosquitos que, a falta de predadores que se coman las larvas o a los adultos, terminan luego por ser un invasión en otras regiones.

A todo alimento cultivado (desde la obtención de la semilla hasta nuestro hogar), de manera saludable, sin alteraciones genéticas intencionadas, sin químicos, ni pesticidas, sin cámaras de frío y sin radiación se lo denomina orgánico. Consumiendo productos orgánicos, además de cuidar al medioambiente de sustancias que desequilibran todo a su rededor, mejoramos nuestra calidad de vida en todos los sentidos. Los podemos encontrar en algunos mercados, donde pequeños productores se acercan a vender sus cosechas. Además de conseguir frutas, verduras y hongos, se consiguen productos

Page 17: Manual practico de ecologia domestica

elaborados como panes integrales, dulces y chocolates. También podemos encontrar artículos de limpieza ecológicos, bolsas de tela, pañales y toallitas femeninas ecológicas, jabones y detergentes biodegradables y hasta ropa de algodón orgánico.

Gas Metano

La crianza masiva de vacas es el factor de mayor impacto a nivel de calentamiento global. Las vacas emiten un gas llamado Metano, que es el más abundante entre los gases causantes del efecto invernadero. Es decir, la crianza excesiva de vacas para obtención de carne y sus derivados es el principal causante de la subida de la temperatura del planeta. De hecho, las vacas contaminan más que los autos. En la actualidad se están planteando diferentes alternativas para corregir este efecto <<colateral>>. Por ejemplo, se están probando técnicas mediante las cuales se captura el Metano, se envasa y luego se usa como combustible. Ya se están utilizando autos sustentados por este gas. También se plantea cambiar la alimentación de estos animalitos para evitar que emitan este gas en sus eructos, flatulencias y materia fecal. Mientras tanto, si elegís comer carne de vaca, podés bajar su consumo ingiriendo lo necesario según tus actividades diarias. Por supuesto, no hace falta comerse un churrasco de 300 grs si la única actividad que vas a realizar ese día es estar sentado. Cada uno verá cual es la cantidad de consumo requerida en cada caso pero se estipula que, con comer 3 veces a la semana carne es más que suficiente. Es importante saber que gran parte de los productos de origen animal que se consumen habitualmente contienen restos de hormonas y antibióticos con los que son tratados los animales.

Si bien se puede reemplazar el consumo de carne roja por la de pescado por ejemplo, prescindir de carne animal y sus derivados, es decir, optar por el veganismo, además de dejar de contribuir al calentamiento global, termina con la violencia innecesaria hacia los animales y en consecuencia hacia nosotros mismos2. Al mismo tiempo que llevar una vida vegana nos permite tener una considerable calidad de vida en todos los sentidos.

Consumo de Cigarrillos industriales y colillas

El tabaco sembrado de forma masiva requiere del uso de cientos de pesticidas. Estos son pulverizados sobre la planta, lo cual hace que gran parte se volatilice y quede suspendido en el aire: una parte irá a parar a la tierra y, la que no, se volatilizará en el momento en el cual se queme ese tabaco. Además, la realidad es que éste es nuevamente tratado con químicos, después de cultivarse, para su <<mejor conservación>>. Cuando prendemos uno de estos cigarrillos, no sólo intoxicamos nuestro cuerpo inhalando el humo, si no que ayudamos activamente a contaminar el aire que todos respiramos, humanos y el resto de animales y plantas. La mejor opción es, sin duda, el amor propio, hacia los demás y dejar de fumar. Si esta no es tu elección, podés respetar un poco más el espacio que compartimos entre todos y consumir tabaco cultivado de manera orgánica. De esta forma, no se liberarían los agro-tóxicos con los que está tratado el tabaco y disminuiría así el daño en la salud del planeta en general y de los seres que vivimos en él en particular.

Por otro lado, las colillas están fabricadas con lana de vidrio y no se degradan en más de 10 años, incluso, puede que utilizarlas sea lo más dañino para el fumador. Tampoco debemos olvidar que la obtención y la fabricación del papel donde está envuelto el tabaco tampoco son saludables. Así que también se puede colaborar en el caso de ser fumador optando por el uso de pipas, por ejemplo, o de papelillos hechos de caña de bambú o papel de arroz y, en lo posible, prescindir del uso de colillas.

2Además es importante saber que gran parte de los productos de origen animal que se consumen habitualmente contienen restos de hormonas y antibióticos con los que son tratados los animales.

Page 18: Manual practico de ecologia domestica

También se pueden reemplazar las colillas por boquillas. Tengamos en cuenta el siguiente concepto: no sirve de nada ni sentirse culpable ni sobre exigirnos. Expongo todo esto con el fin de que, paso a paso, mejoremos nuestra relación con nosotros mismos y con el planeta en el que vivimos. Si podemos implementar todas estas cosas está bien y si la aportación es de una sóla acción, también está bien. Cualquier medida que tomemos en beneficio de la salud del planeta, por mínima que sea, es buena y está muy bien.

Transporte de productos

Cuando se piensa en una Cultura permanente, es decir, que se mantenga en el tiempo, que se sustente, también se tiene en cuenta el transporte de los productos que se consumen. Algunas personas o comunidades pueden incluso ponerse un límite de distancia máxima al que acceder. Por tanto, si el producto que necesitan se encuentra a más de una distancia X, prescindirían de él o buscarían la manera de producirlo en la propia comunidad. Esto vuelve a quedar, una vez más, al grado de exigencia de cada uno, al compromiso que logramos mantener y también al trabajo en equipo con el que podamos contar. Si optamos por consumir lo que se produce localmente, ayudamos en gran medida a la economía de nuestra región, reducimos el consumo de petróleo (y el humo que produce al quemarse) y así se disminuye la producción de monóxido y dióxido de carbono. Además, dejamos de destinar nuestro dinero al apoyo de las guerras por petróleo ya que, obviamente, los productos que compramos habitualmente en la verdulería, si los trajeron de San Juan, de La Rioja, de Tucumán, tuvieron que ser transportados y, por supuesto, el valor del transporte está sumado al total del valor ¿se puede ver cómo se va entretejiendo la red?

Al consumir productos regionales, evitamos consumir alimentos tratados con radiación o congelados en cámaras frigoríficas, que los mantienen durante meses al parecer <<intactos>> pero es suficiente con morderlos para darse cuenta que ni gusto tienen o, por ejemplo, cortarlos para ver que muchas veces por dentro no tienen color. Si optamos por los alimentos que se cultivan en las zonas cercanas a nuestro lugar de residencia, es muy probable que la frescura de estos sea mayor y también nos posibilita el contacto directo con el productor. De la misma manera, nos puede dar una mayor conciencia de las formas de cultivo, además de alentar las pequeñas producciones ecológicas.

Utilización consciente de Agua

Tengo que acordarme de respirar cada vez que estoy en casa de algún familiar o amigo y veo como dejan correr el agua mientras lavan, mientras charlan, mientras hacen diferentes cosas e, incluso, una vez presencié la labor de una cocinera que dejaba el agua corriendo todo (¡absolutamente todo!) el tiempo que estuvo cocinando. Con el pretexto de servirme agua, iba hasta la cocina y cerraba la canilla, para que a los dos minutos volviera abrirla y, de nuevo, me volvía a servir agua y cerraba la canilla. Así seguí hasta que esta señora terminó de cocinar.

Sinceramente, en las ocasiones que presencio estos actos de inconsciencia o, quizás, de apatía, trato de mantenerme neutral y respetar el nivel de cada uno. Sin embargo, con este pequeño manual, he intentado ir más lejos y tomar una postura algo más activa. Si bien puede ser que no todos sigan lo que propongo, me encantaría que, por lo menos, seamos conscientes de lo que estamos causando con nuestras costumbres, actitudes e ignorancia ¿Realmente es necesario dejar correr el agua mientras enjabonamos los platos? Nos causaría tanto esfuerzo cerrar el grifo cuando no necesitemos el agua... Para esto tengo un lema “AGUA QUE NO HAS DE BEBER, NO DEJES CORRER”.

Antiguamente (y no tan antiguamente) se utilizaba una palangana o fuentón donde se enjabonaban todos los cacharros y, posteriormente, se enjuagaban. Aunque ya casi no se utilice esta técnica en

Page 19: Manual practico de ecologia domestica

las ciudades, en algunas regiones del planeta se sigue usando porque no todos tienen acceso a tanta agua como para dejarla correr. Si bien algunas personas y comunidades, por conciencia, sí utilizan el fuentón, todavía no son la mayoría. Te invito a que te sumes a cerrar la canilla cuando no necesites el agua y así, en algún momento, logremos ser mayoría. Cuando lavamos las rejillas o trapos, podemos utilizar un recipiente chico con agua en vez de la canilla abierta. También podemos usarlo para lavar la cocina o limpiar la casa. Lo mismo si lavamos ropa a mano: usaríamos menor cantidad de agua si usásemos un balde, es cuestión de buscar la manera de no derrochar. No es que no haya agua suficiente para todos, sólo se trata de usar la necesaria. También se puede aplicar esto mismo cuando lavamos verduras o cualquier otra cosa. Incluso, si no nos ataca pachorra podemos usar el agua del último enjuague que, por lo general, está casi limpia para regar o para remojar otra cosa.

Esto lo podemos aplicar a cualquier recurso del que nos valgamos: no porque exista la abundancia sea necesario derrochar. Por ejemplo, hay quien deja todos los aparatos electrónicos encendidos, incluso cuando se va de la casa. No es que esto esté mal, pero genera un consumo de energía innecesario. Lo mismo se puede aplicar al gas o a cualquier cosa que se consuma de forma derrochadora. Esto no quiere decir que un día no nos demos el lujo de un derroche pequeño, pero basar nuestra cultura en este provoca que dure un lapso muy corto en el tiempo.

Electrodomésticos y chatarra electrónica

Tal vez alguno todavía no sepa lo que es obsolescencia programada. Lea el siguiente diálogo, quizás este le dé una idea: …

_ ¿Significa esto que, desde la construcción de los aparatos que compramos, ya está planificado el tiempo de vida útil?

_ Sí.

_Lo que quiere decir esto es que ¿primero se construyen lavarropas, televisores, heladeras, lamparitas, etc. que durarían mucho, mucho tiempo y luego se hace un estudio del menor tiempo de utilidad del aparato aceptable por el consumidor, con el pretexto de que esto ayude a la economía y también con la idea de que el hombre necesite cada determinado tiempo cambiar sus electrodomésticos para ser feliz y, así, se ajustan los diseños para que duren un determinado rango de tiempo sanos?

_Sí.

_ ¡No más preguntas!

Este es el sistema en el que vivimos, cada uno decidirá en qué medida participa de él y en qué medida lo alimenta tal cual es, o lo guía, para que se ajuste más a su consciencia. No sólo se venden productos con vida útil planificada, sino que intentan convencernos para que compremos cada vez en menos tiempo uno nuevo, y no porque ello ayude a la economía mundial, ni tampoco para que nos haga más felices, sino porque algunos se pueden hacer cada vez más ricos con la menor inversión, tercerizando sus producciones, consiguiendo así productos de las más diversas calidades al menor costo. No obstante, nos lo cobran como si fueran oro, aunque algunos de ellos no nos duren sanos más de 15 minutos en la mano. En algunos casos, las exageradas ganancias que generan las ventas de estos productos en el mercado mundial se utilizan en producir armas de destrucción masiva. Todos jugamos al TEG sin siquiera notarlo, haciendo muchas veces de aliados de las súper-potencias que, ni bien quieren, nos descartan como si fuéramos nada. No hablo de dejar de utilizar la tecnología por completo pero vuelvo a repetir: seamos seres conscientes de nuestras acciones y no compremos un buzón. Veamos cuales cosas nos son realmente útiles y cuáles no contribuyen a nuestra felicidad.

Page 20: Manual practico de ecologia domestica

Cualquier tipo de aparato electrónico que ya no nos sea de utilidad es denominado de manera común chatarra electrónica. Puede ser desde un celular roto, un joystick sin funcionar hasta una tv dañada. La cuestión es que si buscamos las indicaciones marcadas en algún lugar del aparato, veremos que no son aptos para tirarlos a la basura. Es decir, que debemos averiguar donde se reciben y llevarlos nosotros mismos o bien podemos acercárselos a algún técnico (quizás le sirva algo de repuesto).

Pilas y Baterías

Por suerte, en estos momentos tenemos otras alternativas al uso de pilas, hecho que quizás hace 15 años no estaba al alcance de nuestra mano. Cada vez se encuentran más productos que se recargan con la energía del sol, supliendo así el uso innecesario de pilas descartables. También podemos utilizar, por ejemplo, linternas a dínamo que son muy económicas en comparación con las de LED, que se cargan con luz solar. Las baterías de Litio, si bien son totalmente reciclables, lo son si las llevamos a reciclar. De todas maneras, debemos tener en cuenta que la obtención del Litio para hacer estas baterías está muy lejos de ser ecológica y es una de las acciones más contaminantes en varias regiones de esta parte del globo denominada Argentina. Las pilas alcalinas y las recargables, cuando ya no sirven, son contaminantes si tienen Níquel y, entonces, deberíamos encontrar un lugar donde las reciban. Las pilas ácidas comunes están hechas de Magnesio y Zinc y las plantas pueden absorber lo que sea necesario de estos componentes sin problemas. Con esto no quiero decir que enterremos una docena de pilas ácidas AA en nuestro patio todos los meses, sino que son preferibles éstas antes que las alcalinas, recargables o las de reloj, hechas con Níquel. De todas maneras, se encuentran en el mercado pilas recargables sin Níquel… sólo que hay que buscar.

Lo mejor en lo posible es directamente eliminar el consumo de pilas o al menos disminuirlo. También es importante tener en cuenta que cuando compramos aparatos con baterías de litio, si estos son de baja calidad, la vida útil se sus baterías será muy poca, es el caso de los mp3, por ejemplo, por eso es mejor comprar los de mejor calidad y así producimos menos cantidad de chatarra electrónica.