maranatha octubre 2009

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“Entonces, respondiendo Jesús, le dijo: Bienaventurado eres, Simón hijo de Jonás, porque no te lo re-veló carne ni sangre, mas mi Padre que está en los cielos” (Mt. 16:17).

LA INDISPENSABLE REVELACIÓN DIVINA

La categoría de la Biblia nunca podrá ser comparada con ningún

otro libro, no importa qué tan po-pular o famoso pudiera ser este úl-timo. La razón que me asiste para decir esto, es que solamente de la Biblia se puede decir (y decirse con las pruebas correspondien-tes), que “no fue traída por vo-luntad humana, sino los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo” (2 P. 1:21). Siendo por tanto la Bi-blia. “EL LIBRO DE DIOS”, es

imposible que los múltiples mis-terios de que en sus páginas se nos habla puedan ser entendidos o interpretados solamente con una intelectualidad netamente huma-na. (1 Co. 2:14)No ha existido, ni existe hu-mano (fuera de Aquel Hombre, JESÚS de Nazareth), que pueda reclamar (y decir verdad) que ha entendido todos los misterios

Por: Pastor Efraim Valverde, Sr.

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2M a r a n a t h aRevista Internacional

que se encuentran en la Palabra de Dios, el mismo apóstol Pablo, habiendo sido llamado por el Señor para desempeñar un ministerio muy único, un ministerio que se ha agigantado a través de todos los siglos de la edad de la Iglesia, exclama con un profundo y reverente reco- nocimiento “¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría de Dios! ¡Cuán incompren-sibles son Sus juicios e inescru-tables Sus caminos!” (Ro. 11:33)

Dios mismo nos advierte en Su Palabra que: “las cosas secre-tas pertenecen al Señor nuestro Dios, mas las reveladas son para nosotros” (Dt. 29:29). Y agrega también diciendo que: “el secreto del Señor es para los que le te-men, y a ellos hará conocer su alianza” (Sal. 25:14). Declaramos pues, que en el Libro de Dios,

hay muchos misterios, pero tam-bién declaramos que muchos de estos misterios ya no lo son para aquellos a quienes Dios ha querido revelarlos. Pues Él mis-mo afi rma esto cuando exclama: “¡Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, que hayas escon-dido estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las hayas reve-lado a los niños¡” (Mt. 11:25).

En esta exclamación el Señor confi rma dos verdades de suprema importancia: (1) Para entender los misterios de Dios que encon-tramos en la Biblia, la revelación Divina es indispensable. (2) Esta revelación no se adquiere como todos los demás conocimien-tos humanos, con la capacidad intelectual únicamente, mas con la humildad de un niño, sin arrogancia, donde toda la honra pertenece solamente a Dios.

El Texto que encabeza este es-crito es un ejemplo muy propio de lo dicho. Cuando el Señor Jesús hizo la pregunta: ¿”Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre”?, el inculto pero intrépido Pedro respondió: “Tú eres el Cristo el Hijos del Dios Viviente”. Y así, con esta res-puesta el apóstol describió a Aquel personaje místico quien en ese en-tonces se conocía como Jesús de Nazareth. Mas esta respuesta es precisamente una de las muchas porciones bíblicas en las que, cu-ando se leen superfi cialmente, y sin revelación Divina correspon-diente, no podrá nunca el lector mirar su profundidad, ni mucho menos entender el misterio que allí se encontrare escondido.

GRANDE ES EL MISTERIO DE LA PIEDAD

Hasta hoy, después de casi veinte siglos la grande mayoría del cris-

tianismo, leyendo la respuesta de Pedro sin tener la revelación Divina correspondiente, acepta en ella la interpretación comple-ta para describir la Divinidad de nuestro Señor Jesucristo. Multi-tudes de confesantes cristianos, sin ver su profundidad, aceptan la aparentemente sencilla res-puesta del apóstol como la solu-ción defi nitiva del Misterio Su-premo. Mas la respuesta no es tan sencilla como a la simple vista pa-rece, pues tras ella está escondido el misterio mas grande en la Biblia.

Este misterio hoy, después de cerca de dos mil años, sigue siéndolo para multitudes de pro-fesantes cristianos. Mas la reali-dad innegable es que desde los meros principios del cristianismo, tanto en Pedro como a todos sus demás compañeros en el aposto-lado, y en lo general a todos los

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Bendiciones en el nombre del Señor Jesús a todo el pueblo de Dios que recibe esta revista con aprecio y buen sentir. Se aprecia a los que están respaldando este trabajo con oraciones y ofren-das. El trabajo de letra era una pasión fuerte en el corazón de mi abuelo. En su amor a Dios, a Su

Palabra y Su pueblo. Esta car-ga lo puso por obra por mas de más de 40 años. Hoy seguimos publicando estos mensajes que fueron inspirados por el Espíritu Santo a un hombre que amaba apasionadamente al Señor y Su Palabra.

Esta pasión no solo lo mantuvo encendido por una vida, sino que El Señor lo usó para encender a otros con lo mismo. Estas verdades de la Palabra de Dios que el Señor lo usó para hablar, grabar y escribir son verdades Eternas. No se pueden parar de hablar y escribir. No son solo información, sino revelación y lo que provoca al hijo de Dios a hambre, a conocer, a apasion-arse, a caminar agradecido con su Señor para servir y compartir con todo su corazón.

“Ya está muerto, ya no leas los escritos de un muerto”, “hay que solo leer la biblia”, estas y otras expresiones son las mur-muraciones de unos y otros. Primeramente Dios no es Dios de muertos sino de vivos (Ma-teo 22:13, Hebreos 13:7-9). En esta escritura El Señor menciona quienes estaban dormidos desde cuando, los patriarcas. ¿Porque los mencionó? Porque no estaban muertos para Él, aunque para los demás sí. Para Dios no existe la muerte. La muerte es la separa-ción del hombre interior del exte-rior. No es lo que normalmente se piensa de que ya alguien para de existir. Es lo que Satanás quisiera. Además la Escritura dice que solo duermen. Sobre lo otro, si solo va a leer la Biblia el predica-dor, entonces solo lea la letra de la Palabra, palabra por palabra,

calle y siéntese, porque todo lo demás que diga de comentario, explicación o aplicación aparte de lo que está en su Biblia no es la Biblia. ¡Qué tontería! En las cartas del apóstol Pablo hay ex-plicaciones y revelaciones de lo que estaba escrito en el Primer Testamento. Los que se oponen a la lectura de las verdades solo son instrumentos de Satanás para desanimar y hacer el trabajo del acusador para que no se despierte un hambre, una sed y pasión para nuestro Dios.

El trabajo sigue y confi amos en el Señor de que una vez mas esta revista sea de confi rmación, ilu-minación y bendición en Él.

Pastor Efraím Valverde, III

EDITORIAL


miembros de la Iglesia primitiva, les fue revelado en su plenitud el tremendo misterio de que el mismo Dios, en Su cuerpo vi-sible de gloria (Col. 1:15, He. 1:3) “ha sido manifestado en carne”(1 Ti. 3:16). Pues la maravillosa verdad es que el Señor Jesús no es solamente “el Hijo” (o “la Se-gunda Persona de la Santísima Trinidad”), como cree hasta hoy la grande mayoría del cristia-nismo. El Libro de los Hechos de los Apóstoles, las epístolas apostólicas, y el mismo libro del Apocalipsis, nos da razón que los cristianos de la iglesia primi-tiva entendieron que el Señor Jesús es “Emmanuel... Dios con nosotros” (Mt. 1:23). Entendie-ron que Aquel “niño (que) nos es nacido”, no es solamente el “ Hijo (que) nos es dado”. Sino el mis-mo “Padre Eterno” (Isaías 9:6).

OTROS MISTERIOS MAYORES EN LA BIBLIA

Pedro mismo, a su debido tiem-po fue inspirado por el Espíritu Santo para referirse al Señor Jesús no solamente como “El Cristo, El Hijo del Dios Vivien-te” mas aun como “nuestro Dios y Salvador Jesucristo” (2 P. 1:1). Tomás postrado, reconociéndole y adorándole, le dijo: !”Señor mio y Dios mio”! ( Juan 20:28). Pablo se refiere a nuestro señor Jesucris-to diciendo: “Y sin contradicción grande es el misterio de la pie-dad: Dios ha sido manifestado en carne” (1 Ti. 3:16). Y él mismo, en su carta a Tito, se refiere al Señor como el “Gran Dios y Sal-vador nuestro Jesucristo” (Tito 2:13). Y Juan dice “Y estamos en el verdadero, en Su Hijo Jesu-cristo. Este es el verdadero Dios y la vida eterna” (1 Juan 5:20)

El misterio de LA DIVINIDAD es el más “grande”, maravilloso y supremo entre todos los miste-rios bíblicos, Sobre el pudiére-mos escribir llenando hoja tras hoja, y no alcanzaríamos nunca su profundidad. En esta ocasión he descrito ya en breve algunos razonamientos al respecto, pero a la vez lo estoy usando como un poderoso ejemplo para probar el hecho antes enfatizado de que para entender “los misterios del reino de los cielos” (Mt. 13:11), tiene invariablemente que haber un grado de revelación de parte de “el Padre” (el Espíritu Eterno)

Pues la innegable realidad es que todo lo que tuviéremos de conocer y entender de parte de “nuestro Dios y Salvador Jesucristo”, de Sus verdades y Su voluntad, tiene que venirnos por revelación Divina. Continúo, pues, enumerando otros de los misterios mayores de los que se nos habla en la Palabra de Dios. Y digo “mayores”, porque los mis-terios bíblicos varían en promi-nencia. De los mayores depende la salvación misma del presunto creyente en el Señor JESÚS, y el ignorarlos o no entender su verdadero significado puede aca-rrearle a éste, daño espiritual y aun juicio. En cambio hay otros muchos que pueden ser aun muy interesantes, pero que el ignorar-los o no entenderlos no afecta la vida espiritual del creyente.

EL MISTERIO DE ISRAEL

En “este misterio” (Ro. 11:25) está escondida una verdad vitali-cia como lo es la relación que ex-iste entre Israel, el Pueblo Judío, y la Iglesia cristiana entre nosotros

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“Después vi otra bestia que subía de la tierra, y tenia dos cuernos semejantes a los de un cordero, mas hablaba como un dragón” (Apoc. 13:11) En las sagradas Escrituras, los cuernos simbolizan diferentes cosas. El cuerno de la abundan-cia, como su nombre lo indica, es popular aun entre otras culturas. El cuerno (shofar) que se usaba en Israel para entrar en batalla o para anunciar victoria, aún se usa en las celebraciones sagradas. En los simbolismo Bíblicos, los diez cuernos de la bestia (Apoc. 12:3) tipifican poder de fuerza bruta, de tipo policiaco o militar, (Por otra parte, las cabezas tipifican poder mental, de tipo intelectual, de ideas, de influencia sobre otros por medio de la voz).

Por tanto la combinación de las cabezas y los cuernos implican una operación doble de poderes que según el caso que nos ocupare, pueden ser positivos o negativos. El mismo Señor Jesucristo está simbolizado como. “El Cordero de Dios”. En el caso del Señor, la cabeza como cordero tipifica la in-fluencia poderosa de Su mensaje de expiación del pecado, y los cu-ernos describen el tremendo poder que reside en Su Nombre. Por la otra parte, al diablo, ese espíritu que representa todos los poderes malignos y todas las influencias negativas, se le personifica con una

figura semihumana, con patas de chivo, y con cuernos.

La bestia segunda de que nos habla el texto citado opera en sujeción y a favor de la primera bestia. Es un poder religioso que funciona como cristianismo, pero es un cristianismo falso, de apa-riencia. Pues da una cierta seme-janza como que es cristianismo verdadero y genuino, por razón de que “tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero” (apariencia de evangelio) “mas hablaba como un dragón”. Es un cristianismo auto-distinguido como Evangélico, y otros distintivos Bíblicos, pero que su mensaje solamente aparenta ser el de la voz del Cordero.

Este segmento del cristianismo es parte de la apostasía universal que durante los siglos ha aparecido ante el mundo como la poseedora de la sabiduría divina. Pero siendo que habla como dragón, entonces la sabiduría que presenta “no es la que desciende de lo Alto, sino terrena, animal y diabólica” (Sant. 3:15). Y aunque sus mensajes fueren falsos o fingidos, “el dios de este siglo” (2 Cor. 4:4) usando a las “bestias brutas” ( Jud. 10) con esa sabiduría, ha podido engañar a multitudes de cristianos incautos que no saben hacer la diferencia entre lo real y lo falso, entre la ver-dad y la mentira. Pues, inclusive,



los gentiles. Gran segmento del cristianismo hasta hoy niega o ignora esta tremenda verdad, mas nuestro Señor Jesucristo mismo declara que nuestra “salvación viene de los Judíos” ( Juan 4:22). Este misterio es el ejemplo perfecto para com-probar lo antes dicho, pues muy específi camente está dicho que el “ignorarlo” produce “arrogan-cia” en la vida de los cristianos, y esto les daña. Pues todo cono-cedor de la Palabra de Dios sabe que la arrogancia, que es gemela de la “soberbia” (Mal 4:1), trae juicio de condenación a cual-quiera que tuviere de vivir poseí-do por ella, y no se arrepiente.

LA HUMANIDAD DEL SEÑOR:

De este MISTERIO es muy muy poco lo que se entiende o se habla entre el cristianismo. Pues el niño Jesús, quien fue conce-bido por la operación divina del Espíritu Santo, se da por hecho que fue originado en el óvulo producido por los ovarios de la virgen María. Tal cosa nunca pudiera ser posible, porque en semejante caso el cuerpo hu-mano del Señor Jesús hubiera sido mitad divino y mitad peca-dor, necesitando Él mismo de la salvación de Dios, y a nosotros nunca nos hubiera podido sal-var. Mas la célula originadora de Su humanidad (con las 46 respectivas cromosomas origi-nadoras de todo ser humano) no vino como todos nosotros, de la simiente contaminada de peca-do de nuestros primeros padres, Adán y Eva, sino directamente de parte del Espíritu Eterno, el Padre. Pues esta dicho: “Porque tal pontífi ce nos convenía, san-to, inocente, limpio, apartado de

los pecadores, y hecho más su-blime que los cielos” (He. 7:26).

EL MISTERIO DE LA IGLESIA (Ef. 3:5-10)

Ya por muchos siglos, ma-yormente durante los últimos 16 de la apostasía, la grande ma-yoría entre el cristianismo tiene establecido en su mente la idea hasta hoy común de que la Iglesia de nuestro Señor Jesucristo consiste en cierta o cual denominación u orga-nización religiosa. El misterio para ellos continúa, pues tal interpretación es completa-mente errónea. La Iglesia del Señor Jesús no es un sistema político, sino un cuerpo cuyos miembros estamos unidos por el Espíritu y el amor de Dios. La Iglesia es Una, y su Dueño es el Señor (Mt. 16:18), y Él es el “Pastor y Obispo de nuestras almas” (1 Pe. 2:25). La Iglesia es el conjunto total de “el pueblo de los santos del Altísimo” (Dn. 7:27), integrado por el Israel fi el y el cristianismo fi el. El principio de la Iglesia no fue en aquel histórico día del Pen-tecostés, como comúnmente se cree y se enseña, sino desde el principio del Tiempo mismo.

ORIGEN DE LOS HIJOS DE DIOS (He. 2:14):

La idea universal preva-leciente sobre este tema entre nuestro ambiente evangélico-pentecostal (las organizaciones “del Nombre” incluidas) es que el creyente comienza a ser hijo de Dios hasta que se bautiza, y se hace ofi cialmente miembro de algún grupo religioso. La real-



está dicho que “muchos seguirán sus disoluciones” (2 Ped. 2:2).

Hoy son multitudes entre el cristianismo los que hablan del anticristo, de la bestia, de la mar-ca, y demás que en realidad no saben lo que están diciendo. Pues por lo regular todo lo que hacen es repetir las interpretaciones er-róneas e ilusorias que alguien en algún tiempo pasado compuso. Y muchos de ellos así engañados adoran la imagen de la bestia y viven marcados con su número, el fatídico 666 y no se dan cuenta del error en que están. La desa-gradable pero innegable realidad es que la infl uencia negativa de la voz del dragón es fuerte. Mas ésta no solamente puede ser neu-tralizada, mas aún contrarrestada por la voz del Cordero.

Las Escrituras nos declaran que hoy existen dos dioses: El Dios Todopoderoso, y “el dios de este siglo”. Dos cristos: Cristo Jesús el Señor, y el anticristo. Dos marcas: la de Dios, y la de la bes-tia. Dos sabidurías: la de lo Alto, y la “terrena, animal, diabólica”. Dos iglesias: la verdadera, y la apóstata. Dos pueblos: “hijos de Dios, e hijos del diablo” (1 Juan 3:10). Entendidos de lo dicho, tenemos que aceptar entonces el hecho de que existen dos infl u-encias originadas en dos voces: La negativa es la voz del dragón, mas la positiva es la voz del Cor-dero.

La infl uencia de la voz del dragón provoca en el cristiano la soberbia. Y como consecuencia el desvío. Y estando ya bajo esa infl uencia, fácilmente se anida en su vida el odio y el aborrecimien-to, la arrogancia y la rebeldía, el fi ngimiento y la hipocresía, la envidia y la rivalidad, la injusticia

y la ventaja, etc... En cambio, la la infl uencia de la voz del Cor-dero produce en la vida del fi el hijo de Dios exactamente todo lo opuesto a la lista anterior. A las obras y sentimientos de la in-fl uencia negativa, en las Sagradas Escrituras se les llama “tinieblas”. A los frutos de la infl uencia pos-itiva se les llama, “luz”. Y donde hay luz es imposible que puedan habitar las tinieblas. Donde re-side en verdad el amor de Cristo el Señor, es imposible que exista el odio, el aborrecimiento, etc.

El Señor Jesús dijo:”Mis ove-jas oyen Mi Voz, y me siguen”. Estos son los “hijos de luz”, quié-nes por todas las edades y hasta hoy, han sabido reconocer la voz del Cordero y han estado y están dispuestos a oírla y a obedecerla. Repito que la voz del dragón es fuerte ciertamente. Tan fuerte ha sido que por los siglos “ha ce-gado los entendimientos de los incrédulos” (2 Cor. 4:4). Mas la voz “del cordero de Dios” es la suprema. Es la voz que tiene el poder para contrarrestar todas la voces negativas, y al Cordero le ha placido que su maravillosa voz salga también de las bocas de Sus santos, de los labios de los justos.

Si tú, mi hermano(a), en me-dio de todos tus defectos y fal-las sabe Dios que has anhelado el hacer justicia y amar a tu her-mano (1 Juan 3:10), acepta que eres uno de esos justos y que la voz del Cordero sale de tu boca. Por mi parte, no me detengo hoy para testifi car que el Señor me mostró en forma inequívoca en estos últimos días que ha sido la voz del Cordero, no la mía la que os ha hablado.

Cuernos como de Cordero...viene de la pág . 3


idad es que los hijos de Dios ven-imos aquí a “participar de carne y sangre” , de acuerdo con el texto citado y otros muchos más, ha-biendo sido engendrados antes por primera vez en “el principio” ( Juan 1:1), “desde la fundación del mundo” (Mt. 25:34), junta-mente con “el primogénito entre muchos hermanos” (Ro. 8:29). Y estando aquí en humanidad, contaminados con “las inmundi-cias de la carne” que no podemos evadir (1 P. 3:21), hemos tenido necesidad de “nacer otra vez...de agua y del Espíritu” ( Juan 3:3-5), para ser restaurados y ser así nue-vamente “participantes de la na-turaleza divina” (2 P. 1:4), por la “Palabra de Dios” ( Juan 10:35).

EL GOBIERNO EN LA IGLESIA (Mt. 20:25-28):

De esto podemos decir lo mis-mo que de la misma Iglesia. Pues el cristianismo ya por muchos si-glos ha aceptado como de origen divino el sistema de gobierno hu-mano que opera en forma de una pirámide, con todos los aspectos políticos correspondientes inclu-yendo astucias, ventajas, intrigas, etc... En este sistema de gobierno, prohibido por el Señor, el pueblo está abajo, y en la parte de arriba de la piramide estan los “grandes” reconocidos popularmente hasta hoy como “autoridades eclesiásti-cas”. Y éstos, “se enseñorean sobre ellos... y ejercen sobre ellos potestad”, contrariando así lo que enseñaron los apóstoles (1P. 5:1-3 y Hch. 20:28-30).La Iglesia del Señor no esta desor-ganizada. Tiene un sistema de gobierno superior, y este es el go-bierno Teocrático. Mediante este gobierno Dios verdaderamente preside, dirige, ordena y con-trola a Su pueblo, pues está pre-

sente para hacerlo (Mt. 28:20).

RESURECCIÓN DE LOS MUERTOS (1 Co. 1:51):

Comúnmente se enseña que en la resurrección, los creyentes se levantan en cuerpos espiri-tuales y se van para el cielo. (Y ésto aplica más particularmente en el caso de la popular pero fic-ticia teoría del rapto misterioso.) La interpretación popular men-cionada, ignora el molde de la re-surrección del Señor Jesús, quien primeramente levantó Su cuerpo humano corruptible transfor-mándolo en un cuerpo inco-rruptible. En ese cuerpo testificó por cuarenta días a sus discípulos (Lc. 24:36-43), confirmándo-los de Su poder sobre la muerte. Después de usar así Su cuerpo humano resucitado en incorrup-ción, volvió por Su parte nueva-mente a Su estado original, o sea a Su cuerpo espiritual de gloria ( Juan 17:5) en el cual lo habían visto antes Isaías (6:1) y Daniel (7:9), y a Su debido tiempo tam-bién Pedro, Juan y Santiago (Mt 17:1-2), en el monte de la trans-figuración, Su ejemplo es nuestro molde y esperanza (1 Juan 3:2-3).

EL MISTERIO DE INIQUIDAD (2 Ts. 2:3):

Tratando de interpretar este misterio sin la revelación correcta se ha fomentado, más particular-mente durante el último siglo, una escuela de interpretación bíblica, conocida como “El Futurismo”. Ésta enseña que: (1) Los crey-entes se desaparecen en un Rapto Misterioso. (2) Hay más de una Venida del Señor. (3) Una sema-na de Tribulación de 7 años lite-rales. (4) La Iglesia no pasa por

ninguna tribulación. (5) Los que no se fueron en el Rapto son sal-vos por su propia sangre. (6) Las bodas en el cielo durante el mis-mo tiempo. (7) El anticristo es un hombre misterioso que apa-rece al final del tiempo. (8) A la mitad de la semana este hombre se convierte en “la Bestia”. (9) La bestia marca literalmente con el número 666 a la humanidad en-tera. (10) Engañando a los Judíos, y ayudado por los Gentiles, el an-ticristo edifica el Templo en Je-rusalem y “se asienta en él como Dios, haciéndose parecer Dios”. La verdad en la palabra de Dios es que: (1) No existe el rapto. (2) Sólo hay una Venida. (3) Ya existe tal semana literal de tribu-lación. (4) La Iglesia ha sufrido siempre tribulación. (5) Sólo la sangre de Cristo puede salvar. (6) No existen tales bodas en el cielo por ese tiempo. (7) El anticristo es el mismo Satanás, “el dios de este siglo”. (8) Las bestias pasa-das fueron imperios. La actual civilización es la bestia presente. (9) La marca 666 es espiritual, en la mente. (10) El templo violado es el pueblo de Dios engañado por Satanás el anticristo. Con las interpretaciones ficticias señala-das anteriormente y más, han sido aprisionadas hoy las mentes de multitudes de profesantes cristianos.

Y esta regla incluye no sola-mente los misterios más grandes y profundos, mas también los de menor prominencia. Inclu-sive aplica a aquellas cosas que al cristiano fiel, en su diario cami-nar, le parecieren como las más comunes y sencillas. Pues a esto precisamente se refiere el Señor cuando nos dice: “Porque sin Mí, nada podéis hacer” ( Juan 15:5).

EL TRIBUNAL DE CRISTO (2 Co. 5:10):

Regularmente se enseña que todos los creyentes en el Señor tendremos que aparecer al final ante este tribunal, como literal-mente se lee. Mas el mismo após-tol Pablo nos dice que: “ninguna condenación hay par los que es-tán en Cristo Jesús (Ro. 8:1). Por tanto estos últimos no tienen nunguna necesidad ya de apa-recer ante un tribunal futuro. La razón de ello es que los cristianos fieles que en verdad, estuvieron de acuerdo en obedecer aquí las leyes del tribunal entendiendo que, el que entonces será el Juez allá, hoy en este vida es nuestro Abogado. Arreglados aquí, ya no hay cuenta pendiente allá.

ALGUNOS OTROS MISTE-RIOS EN EL APOCALIPSIS

(Capítulos 2 y3) Los mensajes a las iglesias, más que dispensacio-nes, son niveles espirituales entre el presente cristianismo. (Cap. 7) La multitud que nadie podía contar son el total del pueblo fiel de Dios (en Israel y la Iglesia), ya victoriosos. (Cap. 11) Los dos testigos no son dos personajes individuales que operan en la inventada última semana literal, sino símbolos de los dos pueblos (Israel fiel y la Iglesia fiel), que han testificado ante la humani-dad entera que: nuestro Dios UNO es, durante el curso de los siglos. (Cap. 12) La mujer vesti-da de sol no es María. Es la raza Judía cuyo dolor de parto tuvo su cumplimiento en el Holocausto que produjo el nacimiento del moderno Estado de Israel, que para estas fechas (octubre 1997) está por cumplir los 50 años sim-bólicos del Jubileo. (Cap. 17) La mujer vestida de púrpura es sim-bólica del cristianismo apóstata




Anteriormente a lo expresado en el párrafo de antes, adop-

té la costumbre de asistir a las di-versas actividades de la iglesia, la mayoría de las veces acom-pañando a mi abuelita María, madre de mi papá. Temprano me levantaba por las mañanas e iba yo a ayudar al párroco en la misa. El mismo me había ense-ñado las respuestas de la misa en latín, aunque yo ciertamente no entendía nada. Por la noche lo ayudaba también durante las ceremonias del rosario a la vir-gen María. Me agradaba hacer todo lo anterior, especialmente cuando se celebra la fi esta anual en honor de la virgen del Carmen, cuando las bandas de música to-caban, mientras eran lanzados al aire los cohetes voladores que desparramaban en las alturas sus luces de colores. Formando un bello espectáculo en medio de la oscuridad de la noche. Llegó por

fi n el día de entrar al seminario. Una cierta curiosidad me impul-so a ir allá. El Sr. Cura llegó a mi casa el día fi jado y entonces me despedí de mis padres. Jun-tamente conmigo iban otros dos o tres chamacos, hicimos el viaje en tren, o sea Los Ferrocarriles Unidos de Yucatán. Una corta jor-nada en dicha transportación nos llevó a Mérida, capital del estado Mexicano de Yucatán, fundada en 1542 sobre las ruinas del anti-guo lugar Maya de Ichcansihoo. Los conquistadores españoles le pusieron ese nombre porque las ruinas mayas existentes ahí les

recordaban las de Mérida, Es-paña. Fueron ellos los primeros que encabezaban una larga lista de personas que vieron liga o rel-ación entre las civilizaciones del viejo y del nuevo mundo. Pero el parecido de un arco romano con la bóveda corbelada apenas si existe. Mérida, como cualquier

otra ciudad de Latino América, se alza siguiendo un diseño en forma de parrilla, con una gran plaza en el centro, foco de la vida social de generación tras generación de meridanos. En el lado oriental de la plaza está la catedral, maciza estructura del siglo 16 con aspecto de fortaleza, fl anqueada por 2 torres asimétri-cas. En el costado sur se levanta la casa de los Montejo, conquis-tadores de Yucatán. En los dos lados restantes se encuentran edifi cios con arquetas que en la actualidad dan albergue al pala-cio del gobernador y al palacio

municipal. En aquella época la plaza estaba adornada con árbo-les de follaje denso y oscuro que allí se conocen con el nombre de Laureles, pero cabe decir que tenían una grandeza monumental difícil de igualar. Reanudando nuestro relato, una vez que descendimos del tren,

nos encaminamos al palacio arzo-bispal, comúnmente llamada así la residencia del arzobispo que entonces era Martín Tritschler y Cordova, un venerable anciano que ya tenía entonces muchos meritos a su favor. Estando ya en la residencia del arzobispo, salió a nuestro encuentro dicho señor y tal como nos había aleccionado el cura Cayo Castillo Suárez, besa-mos el anillo de su excelencia, doblada una de nuestras rodillas, luego nos sentamos e inmediata-mente se entabló la plática. Re-cuerdo más o menos entre otras cosas que el arzobispo preguntó si éramos nosotros los que for-mábamos el grupo escogido para ingresar al seminario. El padre Cayo Castillo afi rmó y luego nos despedimos, deseándonos el arzobispo que ojalá y pudiéra-mos llegar algún día a realizar nuestros sueños de ser sacerdotes. Tenía entonces menos de 12 años de edad, era el 15 de septiembre de 1932. Cuando ya casi se ocul-taba el sol hicimos nuestro arribo al edifi cio denominado Villa Do-nata, situado en lo que entonces era el lugar donde se educaban los seminaristas Yucatecos. Sa-ludamos al rector del seminario de nombre Juan Arjona y Cor-rea, quien nos dio la bienvenida y también nos hizo un pequeño examen gramatical, lectura y aritmética. Luego el padre Cayo

Testimonio de ex -sacerdote(PARA CONTINUACION EN LA EDICION DE OCTUBRE DE 2009)


CONTINUACION DEL TESTIMONIO DE UN EX-SACERDOTE QUE ENCONTRO LA VERDAD (3ra. Parte)


de los siglos, que incluye hasta hoy tanto a la MADRE como a todas sus hijas que llevan su semejanza tanto en su estructura política, como en sus doctrinas (Cap. 18) “La grande Babilonia” no es solamente una ciudad como comúnmente se interpreta. Pues no existe una ciudad en lo parti-cular que puede ejercer un con-trol universal como esta ciudad simbólica. La grande Babilonia representa las civilizaciones que han existido durante los siglos del tiempo de los Gentiles, el tiempo de la Iglesia, particularmente la presente que es la civilización que pronto está ya por caer. (Cap. 21) La Jerusalem celestial no es una ciudad física de oro y piedras finas de materia corruptible. Es una Ciudad espiritual, “la Esposa mujer del Cordero”, el pueblo de los Santos del Altísimo, el Tem-plo de Dios Vivo, fundada sobre “la principal Piedra del ángulo, Jesucristo mismo, y edificada con las demás “piedras vivas”, desde los apóstoles, hacia atrás (He. 11:39-40), y hasta nosotros.

IFORMACIÓN PARA “LOS ENTENDIDOS” (Dn. 12:10)

Sabe el Señor que no es mi intención ofender a nadie con lo escrito, mucho menos el enjuiciar o condenar a quienes creyeren en forma diferente a lo explica-do. Pues he llegado a un tiempo en mi vida en el que reconozco que nuestro Dios, en su soberana voluntad, da de Su revelación en diferentes grados. Y el que recibe más no es porque sea mejor que el que recibe menos, y el que re-cibe menos no es porque fuere peor. Porque Dios (y este es tam-bién otro misterio), ciertamente no hace acepción de personas en el juicio, pero si hace acepción de personas en lo que toca a la vo-cación y llamamiento, púes “del que quiere tiene misericordia, y al quiere endurece” (Rom. 9: 11-21).

Basados en esta tremenda de-claración hecha por Dios mismo, es importantísimo el reconocer que en lo referente a las revela-ciones de misterios Divinos, es Dios quien las da, a quien Él quiere. Es pues imperativo en-tender que Dios hace esto no solamente para que el recipiente se goce en conocerlos, mas aun para que éstos hagan un efecto positivo en su vida, y así los com-

parta en forma efectiva. Digo esto porque me consta ya por una vida que son muchos los que hablan y predican las verdades de Dios pero que sus dichos no con-cuerdan con sus hechos porque, “no hacen justicias, ni aman a sus hermanos” (1 Juan 3:10).

Entre el mismo ambiente del pueblo de “EL NOMBRE” (que es el mío propio), me consta que son miles (y esto lo digo a una escala mundial) quienes cometen, consciente oinconscientemente los pecados citados. Usan la sublime revel-ación de la Unicidad de Dios, del bautismo en el Todopode-roso “Nombre que es sobre todo nombre” JESUCRISTO EL SEÑOR, y la recepción del maravilloso don del Espíritu Santo con la respectiva evidencia de las nuevas lenguas, para glori-arse en sí mismos, para enjuiciar y aun condenar sin misericordia a quienes no han sido participantes de los mismos, y mayormente si estos no fueren miembros de su respectiva denominación, grupo u organización religiosa. Creo que puedo decir sin te-mor a equivocarme, basado en la Palabra de Dios, que todas las revelaciones, juntamente con

todo lo demás que hubiéremos recibido departe del Señor, para nada nos vale si en nosotros no estuviere la “caridad” (que es el mismo Señor Jesús) (1 Co. 13:1-8) el “primer amor” (Ap. 2:2-5), “la sabiduría que es de lo Alto” (Stg. 3:17), y “este sentir que hubo también en Cristo Jesús” (1 Co. 2:16). “ Y la escritura no pu-ede ser quebrantada” ( Juan 10:35).

Lo aquí escrito es solamente una breve introducción de cada uno de los temas referidos, un “aperitivo” espiritual para provo-car en los hijos de Dios, el ham-bre y deseo de “comer” las Pal-abras del Señor que “son Espíritu y son vida. Mi Dios por miseri-cordia ha querido darme luz en Su Palabra para poder entender tanto los misterio referidos como otras maravillosas verdades más. Sobre todo ello he escrito y hablado en forma intensa y ex-tensa por todos mis años, y asis-tido por los muchos hijos en la fe que el Señor me ha dado, sigo ofreciendo esta ministración a todos los que abren su corazón para recibirla.


“Estuve mirando hasta que fue-ron puestas sillas, y un Anciano de grande edad se sentó, cuyo vestido era blanco como la nieve, y el pelo de su cabeza como lana limpia. Su silla llama de fuego, sus ruedas fuego ardiente. Un río de fuego procedía y salía de del-ante de Él…” (Dan. 7:9-10).

Meditando en lo que

en estos tiempos el Señor me ha movido para escribir so-bre la violencia espiritual, y a consecuencia de ellos hacer la CONVOCACIÓN que aquí re-imprimimos, en un rapto de en-tendimiento vino a mi mente la visión del río de fuego que vio Daniel proceder de delante del Eterno. Conecté la visión con la visión de Isaías quien, “con un

carbón encendido, tomado del altar”, le fue “quitada su culpa, y limpio su pecado” (Isa. 6:1-7), y pude ver la maravillosa realidad y conexión que estas visiones tienen con la Iglesia del Señor. En el Antiguo Testa-mento vemos ese fuego oper-ando en diversas ocasiones. De las más mencionadas es en la zarza donde Dios habló a Moi-

sés. También en Sinaí, cuando el Señor dio por Moisés la Ley a Israel. Cuando Elías retó a los profetas de Baal, y el fuego del cielo consumió el holocausto y el mismo altar. Cuando el Señor le apareció a Manoa, padre de San-són diciéndole que su mujer iba a



Por este medio le doy gracias a mi Dios por permitirnos otro año aquí en la ciudad de Oxnard y haber tenido el privilegio de celebrarlo con una Confraternidad de Igle-sias hermanas de California en donde nuestro deseo era que no nomas nos juntemos para comer y estar juntos sino que pueda haber un propósito en nuestras juntas y Dios nos visitó con su Espíritu y con la visita de hermanos compa-ñeros que pudimos vivir el Salmo 133 donde nos dice “Mirad cuan bueno y delicioso es habitar los hermanos igual mente en uno”. ¡Aleluya!

Con el mismo sentir pudimos tener un día de celebración en donde se pudo tener 2 estudios de los libros del Pastor Efraím Valverde, Sr. El primer Estudio por el pastor: Alfredo Tienda so-bre que tan importante es “CON-OCER A NUESTRO ENEMIGO, y el Segundo estudio por el pas-tor: Fernando Lazcano sobre “EL TRIBUNAL DE CRISTO”, pudi-mos realizar que tan importante es el mensaje que Dios nos ha dado que son las sendas antiguas que predicaron los profetas y los após-toles y enseguida un culto especial para los Jóvenes con cantos y la

Palabra traída por el muy amado hno. Daniel Perez, enseguida tu-vimos un receso en donde las her-manas de la localidad prepararon comida junto con algunos herma-nos de la Iglesia local y comimos con alegría y sencillez de corazón, luego tuvimos un servicio general con la participación de la Palabra de Dios traído por nuestro hno. Daniel Ybarra a quien aprecia-mos y amamos. El día fue abun-dante en todas las actividades, los hermanos locales nos quedamos con la bendición, tanto que el día siguiente Dios tenía algo muy es-pecial para nosotros, hubo sanidad espiritual y Dios nos dio fuerzas para poder derrotar a nuestro en-emigo que había tratado de entrar como ladrón de noche a robarnos la bendición . “Mas vosotros her-manos no estáis en tinieblas para que os sobrecoja como a ladrón” (I Tes. 5:1-5). Esa fue la palabra que hizo un impacto en nuestra vida, porque esa escritura la usamos para el tiempo del fi n, pero la pal-

abra se aplica también para el tem-po presente en donde el enemigo viene a poner barreras, pero Dios que es grande en misericordia nos ha dado la palabra para tener fuer-zas para derrotar todas las barreras del enemigo, y así poder no estar en tinieblas sino sacar a luz nues-tra necesidad para que el diablo quede derrotado y nosotros libres para seguir adelante y hacer el trabajo que Dios nos ha encomen-dado. Pido las oraciones por esta congregación de Oxnard, Califor-nia para seguir apoyando el traba-jo que fue legado por nuestro an-ciano pastor Efraím Valverde, Sr. Y oremos por los vasos que Dios a puesto con carga, por la obra de Dios empezando por el pastor Efraím Valverde, III y los compa-ñeros que seguimos en el mismo sentir que hubo en nuestro Señor Jesucristo, ¡Amén! Los amamos en el precioso amor de nuestro Se-ñor Jesucristo, ¡Aleluya! Su hermano, Jaime C. Vidal.

Reporte de la Confraternidad en Oxnard, California8 de agosto, 2009

Les saludamos con la Paz de nuestro Señor Jesucristo a todos nuestros amados hermanos lec-tores de Maranatha. Damos gra-cias a Dios por permitirnos llevar a cabo la segunda confraternidad en este lugar, siendo una vez mas el mismo Señor Jesucristo quien derramo de su presencia y nos habló de una manera muy especial a través de sus siervos. Iniciando el sábado por la mañana donde predicó el pastor Pedro Men-diola de Valley Center, CA dan-do una enseñanza para nuestros

jóvenes. También predicó el pas-tor Martin Gil y el pastor Efraím Valverde, III nos predicó de la importancia de quebrantarnos en la presencia del Señor y perman-ecer despiertos como verdaderos hijos de Dios, terminando por la tarde con una bendición espe-cial que al enemigo de nuestras almas no le gustó, tanto que se hizo presente, pero Dios que es fi el a su Palabra, hizo que en su nombre huyera el demonio (Marcos 16:17). El día domingo fi nalizamos con la salvación de 7

personas que aceptaron el llama-do de nuestro Señor Jesucristo y fueron bautizados. Las enseñan-zas las cuales fueron acerca del poder de la oración, y la fe así como el milagro mas grande que el Señor Jesús puede hacer que es cambiar la mente y corazón

del hombre. Gracias hermanos por todas sus oraciones para que el Señor nos siga manteniendo fi rmes en la verdad que es Cristo Jesús.Atte. Su hermano en Cristo Pastor Armando Alavés Matías

Iglesia “Isla de Patmos”de San Juan del Rio Querétaro.

REPORTE DE ACTIVIDADES


A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí…de manera que

del que quiere tiene misericor-dia, y al que quiere, endurece” (Rom. 9:13 y 18)

Estando en cierta congregación pregunté: ¿Hace Dios acepción de personas? ¡NO!, dijeron to-dos. A ésto yo contesté que Dios sí hace acepción en la elección, pues dice: “A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí”. Pasé luego a ex-plicar lo que en Rom. 9:10-21 Pablo dice respecto a la forma de elección Divina. Forma que en toda la historia del pueblo de Dios y hasta hoy, no ha variado. Cité luego lo que en cambio el mismo Apóstol dice con respecto al juicio: “Porque no hay acep-ción de personas para con Dios” (Rom. 2:11). Concluímos recon-ociendo que ciertamente Dios NO hace acepción en el juicio, pero SI hace acepción en la elec-ción. Concientes de esto con-cluímos entonces que ninguno de los que en verdad han sido “elegidos por Dios” lo han sido por sí mismos, o porque ellos mismos lo hayan pedido. Nunca ha sido tampoco por méritos pro-pios del elegido. La elección ha sido siempre por determinación absoluta del Soberano Dios. Pues Él escoge a quien Él qui-ere, cuando Él quiere, donde Él quiere, y le da lo que Él quiere. El ejemplo supremo de lo dicho es la elección de Jacob. Ante los ojos de los que ignoran la sober-anía de Dios tal cosa aparecerá como una arbitrariedad, más esto es precisamente lo que Pablo nos previene en el verso 20. (Por

cierto que cualquier individuo que reclamare ser objeto de la elección Divina en alguna forma diferente, a su debido tiempo el Señor, quien ha dicho “que por sus frutos los conoceréis” (Mat. 7:20), tendrá de dar razón que tal elección no fue de parte de Dios. En tales casos, lo mas común es que la elección ha sido hecha por otros hombres, o que tal indivi-duo se haya elegido a sí mismo.

¿En Qué Consiste Este “Pro-blema”?. La elección auténtica-mente Divina lleva consigo “un problema”, un estigma doloroso inevitable. Este ha distinguido siempre a Israel como pueblo es-cogido, y entre el Cristianismo a los fieles elegidos: “Somos esti-mados como ovejas de matade-ro” (Sal. 44:22 y Rom. 8:36). A nosotros como Cristianos entre los gentiles, el Señor Jesucristo mismo nos lo anticipa diciendo: “Seréis aborrecidos de todos por causa de Mi Nombre” (Mat. 24:9). Con éstas, y otras muchas Escrituras más a lo largo de todo el Libro Santo, Dios confirma la existencia de este “problema”. Un problema que en realidad es una bendición disfrazada. Pues mientras el pueblo de Dios milita en este mundo, el Señor ha usado y sigue usando el padecimiento como una marca especial para distinguir a Sus elegidos. (Fil. 1:29). El principal ejemplo de esto dicho lo encontramos cump-lido precisamente en el Pueblo Judío, en Israel quien ha sido for-mado y elegido por Dios como Su pueblo (Éxo. 4:22). Dios, en Su soberana Voluntad los eligió

no porque ellos lo pidieren o lo merezcan, y a consecuencia de tal elección el mundo hasta hoy los aborrece y los estima “como ovejas de matadero”. Por cuatro milenios ya, el distintivo aludido ha sido manifiesto inexorable-mente en ellos. Hoy, ante la vista del mundo entero es innegable el hecho de que el Pueblo Judío (en Israel y en la Diáspora) continúa cargando sobre sí esta marca, este “problema”. A diferencia del Pueblo Judío, donde el “problema” op-era como si se tratare de un solo hombre, está la Iglesia donde ésto opera individualmente. Pues Israel ha sido elegido por Dios como nación, como un pueblo en conjunto. En cambio en la Iglesia la elección es hecha por el Señor individualmente (Mat. 22:14). Así que en la vida de cada Cris-tiano gentíl en quien la elección Divina ha sido genuina y perma-nente, tendrá invariablemente de operar este distintivo. Pues es a éstos escogidos, quienes aman y sirven al Señor Jesucristo con to-das las fuerzas de su ser, a los que de una manera muy particular les está dicho: “Porque a vosotros es concedido por Cristo no sólo que creáis en Él, sino que también padezcáis por Él” (Fil. 1:29). Concluímos que la elec-ción en Israel fue nacional, con-firmada ésta con la Ley dada por Dios para sujetar con ella a toda la Nación Judía. En cambio en la Iglesia la elección es por Gracia. Es una experiencia personal con nuestro Señor Jesucristo, un lla-mamiento individual de acuerdo con el mensaje del Evangelio. Pero en ambos pueblos hasta

hoy, el distintivo que aquí hemos llamado un “problema”, es el mismo. Lo que sufre Israel como una nación por ser elegido de Dios, lo tiene de sufrir también individualmente entre el cristian-ismo cada creyente fiel. Y más cuando éste estuviere contado entre los vasos elegidos por Dios para ser usados con ministerios especiales.

La Razón Para Este “Problema”El “problema” aludido implica la existencia de dos clases de gente en el mundo: Por una parte están los que son afligidos, y por la otra están los que causan esa aflic-ción. Los que son atribulados, y “los que os atribulan” (2da. Tes. 1:5-7). Están los que son vituper-ados y perseguidos por causa de la justicia Divina, y los que vi-tuperan y persiguen (Mat. 5:11). Están los que aborrecen y maldi-cen, y los que aman y bendicen, los que causan el problema, y los que lo sufren. Quienes causan siempre “el problema” son los que no temen a Dios, e invari-ablemente los que lo sufren son los escogidos, los que aman y te-men a Dios. Juan describe la extrema diferencia que existe entre estas dos clases de gente en el mundo cuando en forma cortante dice: “En esto son manifiestos los hi-jos de Dios, y los hijos del diablo: cualquiera que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios” (1ra. Juan 3:10). Esta declaración está terrible, pues implica vida o muerte. El Cris-tiano que ésto desestimare de-

El “Problema” de Ser Elegido por Dios


“

�0M a r a n a t h aRevista Internacional

Los campamentos siempre han sido algo muy especial en la

vida de los cristianos que han asistido. No fue diferente este año. Lo que lo hizo tan especial fue que como antes, una vez mas fuimos visitados del Señor. Había momentos en que solo deseaba yo el estarme quieto. Sentía yo una grande necesidad de Dios que no quería que la presencia de Dios nos dejara. También fui movido por los jóvenes que me rodeaban al estar frente al altar. El poder ver jóvenes buscar a Dios con tanta intensidad, era de aun mas inspiración. Tengo muchos cam-pamentos que he atesorado. El haber sido ministrado por nuestro pastor anciano por tantos años, su

ausencia ha dejado un profundo vacio en mi corazón. Todavía recuerdo los mensajes que nos compartió. Uno en particular que tengo en mi mente que lleva el título: “El Poder de La Mente”. Ese mensaje y muchos otros mas todavía retumban en lo profundo de nuestras almas. El poder dejar nuestras tareas cotidianas con el

único propósito de buscar a Dios, siempre producirá el mismo suceso: “Lo Hallaremos”. Cu-ando nos proponemos en buscar a Dios con todo nuestra fuerza, Él se allegará a nosotros. Lo otro que también ha hecho especial los campamentos es el hecho de que nos reunimos para confrat-ernizar juntos y unirnos en una unidad verdadera. Porque para esas reuniones el Señor ordenó una bendición (Salmo 133:1-3). Todos sabemos que al regresar de la montaña tenemos trabajo que hacer. Que preparemos nuestro corazón para inquirir en la ley y ponerlo por obra, y enseñar en el Reino de Dios Sus estatutos y justos juicios (Esdras 7:10). Por

favor mantengan a nuestro pastor y su familia en sus oraciones. A él se le ha dado la tarea de seguir los pasos de su abuelo. No es una tarea fácil de realizar, especial-mente cuando se considera la vida de ese gran hombre y todo lo que tuvo de experimentar en su vida ministerial. Pero su amor y pasión por su Creador ha sido el mentor y un recordatorio de que si se puede imitar. Nuestro pastor vive en un constante recordatorio de aquellas cosas que su abuelo enseñó. Mantengámoslo enton-ces, junto con su familia, cerca de los oídos de Dios.

Hermanos lectores de este periódico fraternal, los

saludo en el glorioso nombre de Jesucristo nuestro gran Dios y Salvador. En este viaje Dios me permitió a mí y al hermano Agustín Partida (Pastor en Mexi-cali B.C.), estar con nuestros hermanos en la Ciudad de Hi-dalgo, en el estado de Chiapas, México, en el mes de enero del año presente. Conocimos a nuestros hermanos de esta ciudad por primera vez y después de que compartimos la Palabra divina que por medio de las enseñanzas

que de nuestro amado hermano Efraím Valverde, Sr. recibimos, uno de los pastores se acercó conmigo para expresar palabras de gran interés y aprecio por las enseñanzas nuevas que nunca había escuchado y me dijo in-cluso que había otros herma-nos hambrientos de esta comida en ese lugar. Estuvimos con nuestros hermanos tres días en que se compartieron las verdades en la Palabra de Dios. Estoy con-sciente del trabajo de nuestro hermano Pablo Alvarenga quien Dios ya había llevado para abrir

esa puerta con nuestros herma-nos de Chiapas. Pero más con-sciente estoy que las enseñanzas que Dios le dio a nuestro amado Pastor Efraím Valverde, Sr. son las que han dado luz al corazón y mente de los que de Dios les ha sido dado que entiendan. Sin ellas no pudiéramos hacer el tra-bajo que hacemos. Bendito sea el nombre del Señor Jesús por estos tesoros. En este viaje tu-vimos el gran privilegio de bau-

tizar a nuestros hermanos en el nombre de nuestro Señor Jesús. Dos pastores algunos ministros y miembros de las congregacio-nes que de Dios les fue dado el entender la Unicidad de Dios y el bautismo bíblico, el bautismo que salva en el nombre que es sobre todo nombre.Bendiciones hermanos oremos los unos por los otros. Pastor Fred Griffi th Lake Elsinore, Ca.

Hno. Daniel Ybarra.

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Acordaos de vuestros pastores, que os hablaron la palabra de

Dios; la fe de los cuales imitad, con-siderando cuál haya sido el éxito de su conducta. 8 Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos”. (Hebreos 13:7,8) Me acuerdo de la primera ves que viaje al area de Valle De San Quentin, BCN yo sentí algo especial y después de 20 años anque en un sitio diferente todava siento el mismo sentir porque Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. Es nuestra ancla de nuestra fe.

El Pastor Nestor Quintanar del es-tado de Oaxaca Mexico ministró el viernes en la tarde sobre la historia interesante del discípulo Apollos aunque este varon elocuente tuvo

una transformacion sincera tuvo que ser instruido por el apóstol Pablo en la verdad de la gracia de Dios. Ex-plicó que siempre Dios a usado va-rones valientes para traer el mensaje de verdad para ayudar los discípulos en la enseñanza y el sentir correcto. El sábado el Pastor Jaime Vidal ense-ño sobre el fundamento que Dios Es

Uno y la segunda porción era sobre la escritura antes mencionada acordaos de los pastores que nos instrulleron. Hizo mención como el Pueblo de Is-rael recuerda y honra a sus patriar-

cas y líderes en una forma especial. usó la escritura biblica Mateo 22:32: “ Yo soy el Dios de Abraham, y el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob, Dios no es Dios de muertos, sino de vivos” Tambien mencionó que aunque el pastor Efraim Valverde Sr. se fue con el Señor, su trabajo y su obra sigen con nosotros. “Y oí una

voz del cielo que me decía: Escribe: Bienaventurados los muertos que de aquí adelante mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, que descansarán de sus trabajos; porque sus obras con ellos siguen.” ( Apoc. 14:13: ).El sábado tomo el lugar su servidor y use la escritura Hebreos 6:19 y Dan-iel 7:2 . Estamos viviendo en un mundo siem-pre está cambiando pero el hijo(a) fundado sobre la ancla no cambia de doctrina ni sentir. Hay que apoyar a nuestro Pastor E Valverde, III; ore-

mos por él porque la carga que está en sobre hombros está tremenda, y también por su ep-osa Hna Claudia y sus hijos.El viernes el Pas-tor E Valverde, III habló sobre la guerra espiritual que está alrededor de nosotros. “Aho-ra pues, ninguna condenación hay para los que están

en Cristo Jesús, los que no andan conforme á la carne, mas conforme al espíritu.” (Romanos 8:1: ) “Sed templados, y velad; porque vuestro adversario el diablo, anda cual león rugiente, buscando á quien devore” (1a Pedro 5:8) continuo el mismo tema sábado en la noche usando el librito escrito por Pastor Sr. Un Reto a los Cristianos Violentos “Por eso pues ahora, dice El Señor, convertíos á mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y llanto” (Joel 2:12). En general la iglesia está dormida y no hay el llanto lloro y quebranta-miento que El Señor esta buscando como dice en Jueces 21: 25: “cada uno hacía lo recto delante de sus ojos.” Gloria a Dios, el día Domingo 7/26/09 12 fueron bautizados en el Nombre de Jesucristo, hay gozo y fi-esta en el cielo; Que Dios bendiga al pastor Eladio López y todos sus compañeros que organizaron esta bonita fiesta spiritual; nos gozamos mucho y nos doy animo para seguir caminado en el camino del Señor.

tener un hijo, y luego desapareció en una flama, etc.

Pero en el tiempo antiguo las manifestaciones del fuego de Dios operaron en individuos es-cogidos y en lugares particulares de la purificación del pecado de Isaías. Mas llegando el tiempo establecido por el Eterno, el río de fuego que brota de delante de Su Trono se convirtió en un río que inundó toda la tierra. Un río que descendió sobre los primeros cristianos en aquel memorable día del Pentecostés “en lenguas…como fuego”, que a continuación se extendió por el mundo, y que después de 20 siglos ha estado “quemando” hasta hoy.

Joel profeta anunció que ese fuego del Espíritu Santo, Dios lo derramaría en toda carne, ya no solamente en forma individual. De ello somos testigos multitudes hoy, habiendo sido participantes de la recepción de ese fuego di-vino. Fuego celestial que, siendo genuino y verdadero, mueve a los hijos de Dios para dar lo frutos propios del Espíritu Santo. Fuego que quita la timidez y la cobardía, y que mueve a los creyentes para amar al Señor con intensidad y también para amarse unos a los otros. Fuego que quema “la ba-sura”, en aquel que lo recibe.

Que nos “inunde” el Señor en este río de fuego, es la petición principal que tenemos hoy delan-te de Dios, pues a consecuencia de ello vamos a ver también “que sanidades y milagros, y prodig-ios” serán hechas en el Nombre de JESÚS, el Señor.

Un Rio de fuego...Viene de la pág . 7

Vista Parcial de Pastores que asistieron a esta fiesta.

“


muestra con tal actitud que algo anda mal en su vida espiritual, y que está en peligro de perder el privilegio de su elección o po-niendo en duda el que ésta fuere de Dios. Lo común entre los gen-tiles es el amar y hacer justicia a aquellos a quien ama. Mas el Señor a Sus escogidos nos or-dena que ésto debemos hacerlo a todos, sin acepción de personas; tanto a los que nos amen, como a los que nos maldigan y persigan. Ciertamente que entre un ambi-ente del propio círculo, fuere fa-miliar o religioso, es fácil amar y hacer justicia. Pero en lo gen-eral, donde estuvieren incluídos

nuestros enemigos gratuitos, no es fácil el amar y hacer justicia. Allí sólo podrán hacerlo aquellos en quienes está en realidad la plenitud del amor de Dios. Sólo podrán hacerlo los elegidos, lo hijos fi eles del Señor. Juan nos dice: “Sabemos que somos de Dios, y el mundo está puesto en maldad” (1ra. Juan 5:19). Inclusive está dicho que “el dios de esta siglo” (2 Cor. 4:4), Satanás, ejerce una tremen-da infl uencia en las mentes de to-dos los humanos. (Exceptuando por supuesto a los fi eles hijos de Dios, quienes tienen promesa de la protección Divina.) Pues al diablo, como “príncipe de este

mundo” (Juan 12:31), le ha sido dada hasta hoy la potestad

para incitar a sus hijos para que éstos a su vez aborrezcan y afl i-jan “al pueblo de los santos del Altísimo” (Dan. 7:27). Inclusive el diablo ha podido usar siempre a muchos entre el mismo pueblo de Dios (como lo hizo con Ju-das), turbándolos con el odio, la envidia, la avaricia y otros demo-nios semejantes, para que hagan mal a sus propios hermanos. Satanás sabe muy bien quienes son y donde están los es-cogidos de Dios, y nos odia con odio mortal. Y ese odio lo enfoca más intensamente contra los que sirven al Señor con intensidad. Mayormente cuando se tratare de vasos escogidos para ministe-

rios especiales, porque si para to-dos los elegidos existe “el prob-lema”, con mas razón para éstos últimos. Mientras vivamos en este mundo los verdaderamente elegidos por Dios, tenemos que aceptar el hecho de que vamos a ser aborrecidos por el mundo. Y no sólo por los que no conocen a Dios, mas también por los que no tienen el mismo “sentir que hubo en Cristo Jesús” (Fil. 2:5). Aquellos que viven “teniendo apariencia de piedad, mas habi-endo negado la efi cacia de ella” (2da. Tim. 3:5). Si tu eres un cristiano fi el nunca te ilusionará la idea de vivir aquí tranquilo y el evitar EL “PROBLEMA” DE SER ELEGIDO POR DIOS.

El “Problema” de ser Elegido por Dios...viene de la pág . 9

Reporte por el hno. Hilario An-tonio García, ministro de la

congregación local.Damos gracias al Señor Jesucristo por concedernos llevar a cabo esta fi esta espiritual. El viernes 31 de julio dimos prin-cipio a las 7 de la tarde. En ese día nos habló el hno. Efraím Valverde, III pastor en Salinas, California y nos habló sobre el tema de “La Obediencia y la Doctrina de la Resurrección”. Ya habían llegado varios hermanos. La actividad con-tinuó con otros hermanos de dife-rentes lugares que llegaron desde Sur Carolina, Tennesee, Indiana, Michigan y Virginia. Nos ministró el grupo musical: “Amigo Eter-no”. Después de las alabanzas nos compartió la Palabra el hermano Rosendo Santana, pastor en Jack-son, Michigan. Él nos habló sobre tema: “El Fundamento Sólido”. El hermano Rosendo nos incitó a que edifi quemos sobre la Roca cada día. A las 3 de la tarde nos ministró el hermano Efraím Valverde, III, nos compartió sobre el tema de la Res-urrección de “Los Justos y los In-

justos”. También nos explicó sobre “El Pecado de la Tibieza”, y movi-do por el desinterés y conformismo que se veía en el pueblo. Dios usó sus palabras para causar en nosotros un despertamiento y responder al problema que tan fácil nos toma presos. El hermano Efraím nos en-fatizó la necesidad de buscar a Dios con fervor y espíritu ardiente. Que Dios bendiga a este hombre de Dios y a los demás pastores y hermanos hombres de Dios que se preocupan por el pueblo de Dios y nos sacu-den para que no nos durmamos. Al fi nal de la actividad del día sábado

fuimos movidos para clamar a Dios juntos en el altar. El día domingo resumimos con la última parte de la confraternidad danzando y ala-bando a nuestro Dios. Después de este tiempo de alabanza se le dio el lugar al Rabino Shimon Menajem y nos habló del tema: “La Gracia es Mayor que la Ley”. Se nos explicó que la salvación es por gracia no por ritos ni por costumbres exclu-sivas para el pueblo Judío. La ley fue dada al pueblo de Israel, pero los miembros de la iglesia gentil fuimos alcanzados por la gracia de Dios y nuestra salvación fue paga-

da por la sangre del Cordero. Di-mos muchas gracias a Dios por las explicaciones que oímos en labios de este miembro del primer tes-tigo (Apoc. 11). Terminamos con mucho gozo en nuestro corazón por lo que pudimos experimentar en esta fi esta espiritual. No quería-mos que aquello se terminara. Por último la congregación local nos reunimos y fuimos confi rmados en las verdades de la Palabra de Dios por nuestro hermano Andrés Rosales originario de Salinas. Los estudios basados en la Palabra de Dios que los libros del anciano pas-tor Efraím Valverde, Sr. contienen mucha enseñanza que nos edifi ca para un mayor entendimiento de los misterios divinos. Esperamos en Dios que nos conceda volvernos a ver el año que viene con nuestros hermanos que les sea posible asistir. Saludos a todos nuestros hermanos de diferentes lugares en los conti-nentes donde llega este periódico de sus hermanos de Chambersburg, Pennsylvania. Les amamos y que Dios los bendiga. Amen.

Reporte de Confraternidad en Chambersburg, Pennsylvania31 de Julio al 2 de agosto del 2009 / Pastor Lázaro Pascual


Dios bendiga a todos mis her-manos que tienen el privile-

gio de leer la revista Maranatha. Le doy gracias a mi Señor Jesús por permitirnos llevar acabo nuestra confraternidad, la cual fue de mucha bendición tanto para nosotros la congregación local como para los hermanos que nos visitaron, gracias a to-dos los hermanos que estuvieron presentes y en especial al pas-

tor Fernando Lazcano que nos compartió la palabra del Señor confirmándonos en las verdades que Dios nos reveló por me-dio del pastor Efraím Valverde,

Sr. Que bendición es reunirnos para comer comida solida y no solo emocionarnos unos minutos sin el alimento que tanta falta le hace a nuestra alma. También le doy gracias a Dios por los bau-tismos que se llevaron a cabo. Todo fue una bendición especial.¡Gloria a Dios por ello!

Que Dios los bendiga, José Covarrubias.

Orando también juntamente por nosotros, que el Señor nos abra

la puerta de la palabra, para hablar el misterio de Cristo” (Col. 4:3). Agradezco a mi pastor Efraim Val-verde III, por darme la oportunidad de escribir estas letras, que van dirigidas a todos nuestros hermanos y amigos que leen Maranatha. Con un corazón triste pero a la misma vez gozoso, comunico a mis hermanos y amigos en la fe, que ya de tiempo el Señor ha estado poniendo en mi corazón el sentir y deseo de salir de Salinas para ir a México y ayudar a nuestra familia que radica en Sala-manca, Guanajuato, para que se afir-men en su caminar con el Señor, ya que sabemos que nos queda poco tiempo hasta la Segunda Venida del Señor en gloria. A la misma vez, mi deseo es juntamente con mi compañera, y uno de nuestros hijos, el poder servir a nuestros hermanos y compañeros que han entendido el mensaje que Dios le

dio a nuestro anciano amado, Efraim Valverde, Sr. Mi ruego delante el Señor es que me ayude para siempre recordar y hablar las enseñanzas que recibí de nuestro viejo, también le pido al Se-ñor que me ayude a caminar con “temor y temblor” delante de Él y que pueda ir “andando y llorando llevando la preciosa simiente”. El Señor sabe que nuestro pensar o sen-tir no es ir hacer lo que comúnmente se dice: Desarrollar nuestro ministe-rio o comenzar un nuevo ministerio. En ninguna forma. Seguimos unidos en mente y corazón con el ministe-rio que el Señor le dio al “abuelo”, y el cual ahora el Señor ha puesto la responsabilidad de seguir con ello so-bre los hombros de mi pastor, Hno. Efraim Valverde III y ministros de ese lugar. Hace 21 años que el Señor me movió a mudarme de Lubbock, Texas, para venir a Salinas a unirme

con la congregación y con el equipo que estaba respaldando en una forma más directa a este ministerio de servi-cio. Le doy gracias a los hermanos que me ayudaron en una manera especial al llegar a Salinas. Destaco profun-damente mi agradecimiento especial al Señor por “Pa” (como le decimos de cariño al Hno. E.V. Sr.), y por “Ma Katie” por su amor y sus consejos, así como también su hijo E.V. II, su es-posa y familia cuando estuvieron en Salinas. Y le doy muchas gracias al Señor por mi Pastor Efraim Valverde III y su esposa Claudia, que nos han sido de mucha ayuda y bendición a mí y a mi familia. Le doy gracias al Señor también por el Hno. Eddie Valverde y a su esposa Irene que me mostraron su amor y también me hospedaron por un tiempo. También gracias al Hno. Da-vid Zertuche y a su esposa, Eva, que también abrieron su casa para que me quedara con ellos un tiempo. También gracias al Hno. Ángel Encinas y a su esposa que me hospedaron. Y al fi-nal gracias a mi Hno. y amigo, Felipe Nava y su esposa Carmen y a su famil-ia que me adoptaron como parte de su familia, proveyéndome cariño, amis-tad, y reposo. Fue de su casa donde me salí cuando me casé con mi esposa Laura. Nunca podré pagar a mis es-tos hermanos y a todos los demás que nos han ayudado, tanto en lo material, como en lo espiritual. Sería imposible mencionar la parte de todos, y tampo-co no quiero correr el riesgo de olvidar a alguno, pero de una manera especial agradezco a todos los pastores que me brindaron su confianza y amistad cu-

ando tuvimos oportunidad de vernos, muchas gracias, porque en verdad hemos recibido ayuda y bendición de muchos. A la misma vez estamos anticipando estar con la familia y los hermanos en México para estrechar nuestras manos a nuestros hermanos y compañeros que ya conocemos, y para establecer nue-vas amistades con las que no hemos tenido el privilegio de conocer.

Oren por mi familia y por nuestro hijo mayor, Andrés, para que pronto se reúna con nosotros también. Que podamos ser de bendición a nuestros hermanos a donde el Señor nos per-mita llegar, y con la ayuda del Señor vamos a guardar nuestras mentes y corazones, y seguiremos anunciando “las virtudes de Dios” (mensajes) que recibimos de parte del Hno. Efraim Valverde, Sr., ya que hemos visto en el transcurso de los años a tantos que es-cucharon el mensaje de Dios a través de este hombre, pero con el tiempo han cambiando y aun algunos de ellos se han vuelto “enemigos”. Algunos de ellos aun han regresado a Babilonia, y otros han llegado al punto de predicar mensajes “dizque” refutando los men-sajes que el Señor le dio al Hno. Efraim Sr. Pero, con la ayuda de nuestro Se-ñor Jesús, yo y mi casa vamos a seguir en lo mismo: anunciando las verdades primordiales: Quién es Dios, Quién es Israel y Quién es la Iglesia, y los demás mensajes que Dios encomendó al varón de Dios que usó en nuestros medios. Shalom.

Reporte de Confraternidad en Tijuana, MéxicoPastor: José Covarrubias

Pastores: José Covarrubias yFernando Lazcano.


Castillo se despidió de nosotros y cuando se cerraron las puertas después de retirarse sentí como si me estuviere tragando un pa-lacio de encantos, como el pa-lacio del adivino o Castillo del adivino en Chichen Itza. Pronto me invadió la nostalgia de mi querido Motul, con el recuerdo de aquella estación del ferroca-rril donde trabajaba yo, después de salir de la escuela, ven-diendo a los pasajeros del tren los sabrosos panuchos motuleños, salbutes, cotzitos, los cuales eran deliciosos al paladar, una vez que este se acostumbraba al increíble picante de la amplia ración de chile habanero con que se aderezaba. (dicha estación del tren ya no existe en la actuali-dad). Recordaba también el tem-plo, la casa cural y los patios por donde correteaba, haciendo mis travesías de niño. La parte que corresponde al antiguo convento ya no pertenecía a la iglesia, sino que había sido incautado por el gobierno federal. Fue en el con-vento de Motul que aquel nota-ble Franciscano Fray Antonio de ciudad real, escribió alrededor de 1580, su gran calepino de la lengua Maya de Yucatán, gener-almente conocido como el dic-cionario Motul, (un vocabulario Maya-Español fue agregada por un escrito de años posteriores). Este libro es un verdadero tesoro de informaciones sobre la lengua Maya Yucateca y las costumbres y usos de los mayas. Como les decía anteriormente, quedamos ya establecidos en aquel semi-nario en donde íbamos a perman-ecer quien sabe por cuánto tiem-po, pues entonces, niño al fi n y al cabo no podía llegar a compren-der cuanto tiempo iba yo a perse-verar en aquel lugar. Por lo pron-to, comenzó a deslizarse mi vida

en una nueva manera, muy dife-rente a la que había llevado en el pueblo. La vida en el seminario es quieta y sosegada. Aparte de la formación religiosa que le van infundiendo al seminarista, por medio de pláticas espirituales y místicas; y también por medio de cierto tipo de meditaciones de tipo contemplativo. Se exigía al aspirante al sacerdocio que lle-vara una vida de disciplina diaria las 24 horas al día. Por lo que toca a la parte intelec-tual, baste decir que se sigue el mismo sistema de estudios aca-démicos de las universidades. Sin faltar desde luego los es-tudios netamente eclesiásticos consistentes en la dedicación a la teología, tanto moral como canónico, historia de la iglesia y las religiones comparadas. No se hacía énfasis en el estudio de la Biblia. Aunque, desde luego, a ocultas de los superiores, no fal-taban estudiantes no muy buenos que se diga, antes al contrario se enorgullecían y hasta blasonaban de ser autores de actos delictuo-sos e inmorales, llegando a veces a extralimitarse cometiendo osa-damente actos homosexuales. Era entonces, cuando aquel cen-tro de instrucción y formación de jóvenes que aspiraban el sacerdocio, se convertía en an-tro de impudicia y de vicios nefastos. Es así que, aun antes de ser ungido sacerdote, aquel individuo se presenta manchado interiormente y con semilla de malicia dentro de su corazón, la cual repercutirá indudablemente en toda su vida. En cuanto a mi sacerdocio, mucho tengo que decir, aunque viéndolo bien, necesito unas pocas palabras para expresar mi punto de vista sobre este particular: o sea, fui feliz y no feliz. Al menos, pienso

que fui feliz, aunque de hecho eso fue apenas los primeros años. Aquella felicidad durante mis años en el seminario se convirtió en un castillo de Naipes que se derrumbó precipitadamente. Una vez enterado de la debilidad de los fundamentos de aquellas doc-trinas católicas que entre otras cosas no me ofrecían ninguna seguridad de mi salvación. Si a esto añadimos las fallas de tipo moral y espiritual que se refl eja-ban de la mayor parte de nosotros los sacerdotes de aquel tiempo, realmente me sentí entonces arrepentido de haber llegado a ser sacerdote, poniéndome así en las manos de mandatarios con-venencieros y distantes de ser siervos de Jesucristo, sino mas bien personajes caciques políti-cos y exploradores de la gente en general y también de sus mismos sacerdotes haciendo con estos lo que les daba la gana. Con esto no quiero ni es mi intención fal-tar el respeto ni ofender a estos elementos clericales que nunca supieron ponerse a la altura de sus responsabilidades. Ellos ten-drán que responder ante Dios por sus perversidades y malos actos. Dios tenga misericordia de ellos. La vida me ha enseñado a ser un poco reservado en todas mi cosas. Pero cuando se trata de defender la verdad no suelo perdonar per-sonajes ni las dignidades que suelen ostentar como si de ellas dependiera la salvación de sus almas. Resumiendo las causas que me indujeron a separarme del sacerdocio, y consecuen-temente de la iglesia católica, las puedo concretar en dos: falta de fundamento en la doctrina ense-ñanza de la Biblia. Y en segundo lugar, una moral bastante defi -ciente de la conducta del clero, principalmente. (Favor de leer el Salmo115).

Dando muchas gracias a Dios nuestro Señor por su miseri-cordia y por su bondad, por el amor tan grande que ha tenido para conmigo, me dispongo en este momento a presentarles este humilde testimonio que les va a hablar a ustedes acerca de la conversión de un sacerdote que perteneció por algunos años a la Iglesia Católica Apostólica y Romana. Espero que al leer este relato testimonial, sientan la pre-sencia de Dios nuestro Señor y puedan ellos también hacerse el propósito de servir a Dios, y así es como recibirán su recompensa en el último de los días. Esperan-do que Jesucristo nuestro Señor que murió y derramó Su sangre por nosotros con muerte de cruz, tenga piedad y misericordia de usted y de mí, y que por fi n este-mos presentes para servirlo, para adorarlo, ya no solo aquí en el tiempo, sino también en la eter-nidad. En un humilde pueblecito del estado de Yucatán, México de nombre Motul de Carrillo Puerto, fue donde nació el que les presenta este testimonio. Esta no pretende ser una historia de mi vida o de la tierra donde nací, sino más bien un relato de los in-cidentes que acompañaron la ni-ñez, juventud y adolescencia del autor. Mis padres jamás llegaron a pensar el futuro que tenía reser-vado al mayor de sus hijos que Dios les dio. Teniendo en cuenta aquella educación católica que habían recibido de sus ances-tros, se veían obligados desde luego a seguir impartiéndola a sus herederos…y así como ellos obedecieron las costumbres reli-giosas que sus padres les habían enseñado, así también, el autor de este relato, siguió las tradiciones religiosas de sus progenitores.

Testimonio de ex-sacerdote...viene de la pág . 6

Continuará en la próxima Edición.


“Amados hermanos(as) estad firmes y constantes crecien-do siempre en la obra del Señor porque vuestro trabajo en el Señor no es en vano” (1 Corintios 15:58).Un día leyendo la Palabra de Dios me encontré con este texto que me gusto mucho. Yo como esposa de pastor empecé muy joven y conforme ha pasado el tiempo me doy cuenta que es un privilegio trabajar para el Señor, ahora si Dios me quitara de este trabajo mi vida sería muy triste y aun sin sentido, ya que nuestro Señor Jesús se merece todo. Tu mi hermana trabaja con todo tu corazón, busca en que servir en la iglesia, trabajo hay mucho, no vivas amargada por las cosas que no tienes o que has perdido recuerda que todo es vanidad, lo mejor de todo es servir al Señor y servir al Señor es servir a los hermanos. Esto lo aprendí del querido pastor Efraím Valverde, Sr.Muchas veces el Señor nos da el sentir de trabajar pero se van los días y no hacemos nada, hermana no detengas la ben-dición que el Señor te quiere dar recuerda que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.Muchas gracias doy a mi Señor por cada una de mis hermanas

de la congregación en Tijuana pues Dios nos ha dado el traba-jar con un mismo sentir.También bendigo a Dios por el amor y la paciencia que él nos ha dado, a mi esposo, a mis tres hijos y a mí, ya que nosotros vivimos en San Diego y vamos casi todos los días a Tijuana, y a pesar de las largas filas que ten-emos que hacer para nosotros es un gusto el poder estar con nuestros hermanos y servirles y a la vez recibimos de ello fuer-za y animo para seguir hacién-dolo sin quejarnos porque es un privilegio¿Tú mi hermana deseas que tus hijos sirvan al Señor con todo su corazón?, debes hacerlo tu primero.

Que Dios te bendiga. Tu Hermana:Carmen Covarrubias

Dios les Bendiga. Mi nom-bre es Josué Covarrubias,

tengo 19 años y me congrego en Tijuana, México. Dios me dio el gran privilegio de nacer en una familia cristiana y hasta el momento sigo caminando por la gracia y misericordia del Señor. Le doy gracias al Señor por permitirme escribir en la sección juvenil y quisiera compartirles algo de lo que he aprendido tanto de mi padre como de otros pastores y her-manos. Esto es el cultivar nues-tra amistad con hijos de Dios y poder entender que es como un tesoro tener amigos cristianos que amen al Señor con todo su corazón. En este tiempo de mi vida el Señor me ha permitido el estudiar en la universidad donde hay gente que piensan de muchas diferentes formas. Sin embargo, Dios me ha ayudado para que mi mente no cambie y me ha protegido de las ma-las influencias. Todos como jóvenes estudiantes estamos expuestos a ser influenciados

por otros jóvenes que no aman al Señor. Por eso son tan im-portante nuestros amigos cris-tianos, ya que es una bendición el orar juntos, el convivir y aun el platicar sobre nuestras luchas y pruebas. Te invito hermano/a joven que amas al Señor a que busques la amistad de otros hi-jos de Dios y que pongas todo de tu parte para cultivarla. Poco a poco vas a experimentar la bendición y protección de una amistad sincera donde el tema común es amar y servir al Se-ñor. Por otra parte si cierras la puerta a las amistades que tu sabes que no te benefician te vas a evitar muchos conflictos y problemas. Busquemos al Señor con todo nuestro corazón. Hay que probar a nuestros herma-nos/a jóvenes que se han dado por vencidos o están pensando el darse por vencidos de que sí se puede ser mas que vencedor y que hay esperanza en Dios. Únete a los que estamos luchan-do al lado de nuestros padres y hermanos para no ser vencidos por las fuertes influencias que han infestado esta generación con ideas profanas, revueltas de bueno y malo. Donde te en-cuentres lleva en alto la prueba y el testimonio vivo de espe-ranza a los demás jóvenes de que todavía hay jóvenes que no han doblado sus rodillas ante el modernismo y las nuevas formas de pensar, Dios te Ben-diga.


Shalom hermanos, les saluda su hermano Elías Murillo desde

Guadalajara deseando que la ben-dición de el Señor nuestro Jesu-cristo no deje de llenar sus cora-zones.Doy gracias al Señor Jesús porque por medio de mis hermanos del ministerio en Salinas Ca. me con-cede poder escribir estas líneas para darles informes sobre la re-unión de pastores y ministros que ya por cuarta ocasión se lleva a cabo en esta ciudad de Guadala-jara. Las actividades comenzaron por el día jueves 17 de septiem-bre como a eso de las dos de la tarde contando para esa hora con un buen grupo de hermanos de diferentes estados que se dieron el tiempo para escuchar juntos la instrucción de la palabra del Señor por medio de los labios de nuestro hermano Efraím III quien una vez más llegó acompañado por un gru-po de pastores y ministros compa-

ñeros de los Estados Unidos. Los temas que se impartieron en-tre otros puntos muy importantísi-mos fueron: La humanidad del Señor Jesús y el tribunal de Cristo este ultimo impartido por nuestro hermano Felipe Nava. los temas fueron profundos y extensos diser-tando sobre los temas nuestros her-manos sin apartarse de la palabra de nuestro Señor escrita en el li-bro santo quiero hacer un hincapié acerca de que los temas señalados fueron tomados de los escritos de nuestro amado anciano Efraím Valverde, Sr. a quien aunque ya no está entre nosotros, lo recordamos con mucho cariño. Escritos que cabe señalar están respaldados por multitud de pasajes escriturales. Es una tristeza que el cristianismo de este tiempo no este interesado en el conocimiento de la Palabra de Dios, ya que el escudriñar la Palabra es importantísimo (Juan 5:39). Algo que es de mucha im-

portancia para nuestro Señor hacia sus hijos es el que podamos en-tender Sus misterios (Deut. 29:29). Que podamos entender quien es Él, cuáles son sus promesas y cuáles son sus mandamientos (Col. 1:9-10). Ya que al entender departe de Dios todas estas cosas y ponerlas por obra con el sentir correcto nos asegura la estancia en la eter-nidad al lado nuestro gran Dios Y Salvador Jesucristo. Además porque es imperativo para mirar con claridad y estar plantado en la enseñanza (Efes.2:20). Afi rmando nuestra mente día con día para no ser movido de ningún viento de doctrina y hacerle frente a un sin número de falsos maestros con sus falsas enseñanzas que ningún fun-damento tienen en la Palabra de Dios, enseñanzas que son producto de la imaginación de hombres que torciendo las escrituras a su forma de pensar, arrastra a muchos hacia la perdición (2 Pedro 3:15-16). Por

eso estemos atentos mis hermanos (2 Pedro 1:19), para no ser parte de ese gran numero (sin dejar de orar por ellos) que abarca pastores ministros y congregantes que les da lo mismo una enseñanza que otra y dicen amen a todo lo que oyen. Mis amados hermanos en conclusión a esto lo importante es estar donde está el mensaje de ver-dad porque donde está la verdad, está el Señor porque el mismo Se-ñor és la verdad (Juan 8:32).Las actividades siguieron hasta el día 20 de septiembre como hasta las 2:p.m. No dejando nuestro her-mano Efraím III de amonestarnos y provocarnos a seguir en este caminar, buscando al Señor con todo nuestro corazón y peleando siempre por ser sinceros tratando de andar en justicia. Cabe mencio-nar que aunque la asistencia fue un poco menor que el año pasa-do se manifestó fuertemente la presencia de nuestro Señor Jesús en varias ocasiones infl amando nuestros corazones, llenándonos de su presencia en medio de un ambiente fraternal.Mi mayor deseo es que el Señor nuestro Jesucristo los llene de su conocimiento y bendiciones para su familia, esperando que el próx-imo año el Señor nos conceda el poder estar juntos nuevamente. De nuevo desde Guadalajara !SHALOM.¡

Les saludo en el nombre de Jesucristo. Damos gracias a

Dios por habernos concedido lle-var a cabo el primer campamento juvenil en la Sierra de Chihuahua durante el pasado mes de julio, el cual fue de grande bendición para todos los que tuvimos la oportunidad de estar presentes. Asistieron aproximadamente 60

jóvenes de los estados de Chi-huahua y Sinaloa, durante el mismo, 2 jóvenes de la ciudad de Chihuahua fueron bautizados en el nombre de nuestro Señor Je-sucristo. Esto fue una experien-cia nueva para nosotros. A raíz de esto Dios puso una carga mayor en nosotros por nuestros jóvenes; ya que la juventud de este tiempo

esta siendo atacada fuertemente por el enemigo usando todos los medios a su disposición. Les rogamos de sus oraciones a nuestro Padre celestial para poder seguir llevando a cabo esta actividad cada año. Tam-bién les invitamos para que estén con nosotros en nuestro próximo campamento a llevarse a cabo en

julio del 2010 y del cual estare-mos ampliando la información por este mismo medio o si lo de-sean pueden comunicarse al tel. 011 52 6355891305.Que nuestro Señor Jesucristo les bendiga y les guarde.

Hno. José Estrada PérezBasuchil Gro. Chihuahua

Reporte del 1er. Campamento Juvenil en Basuchil, Chihuahua“Mas que Vencedores”


Saludo en el nombre del Señor Jesucristo. Agradeci-

endo a todos los hermanos por el apoyo para la realización de la confraternidad el pasado 22 y 23 de agosto del 2009 en Villa Purificación. Contamos con la visita del hermano Nestor Quin-tanar quien nos compartió temas muy interesantes para nuestra edificación. También estuvieron los hermanos Alfredo Corcoles, Erasmo García, Juan Baltazar, Juvenal Cisneros y más herma-nos que nos visitaron de diferen-tes lugares. Gracias doy a mi Dios por los pastores compañeros que están plantados en lo que hemos

aprendido, me son de gran ayuda. Tuvimos también una visita muy importante para nosotros que fue

la manifestación del Señor quien obró en grande manera para que hermanos entregaren su vida al Señor Jesús. Fueron bautizados como manda el Señor en Hechos 2:38. Reciban saludos hermanos de Salinas y nuestros hermanos que están en diferentes lugares que no conocemos pero el Señor si conoce a los que son de Él. Quiero aprovechar para pedirles las oraciones por su servidor y hermano, José Pelayo García. Mi salud no está bien, necesito que mi Dios me haga el milagro de echar andar mi riñón. Sé que Él puede si Él quiere. Oren también por las congregaciones de Villa

Purificación y de Casimiro Cas-tillo, Jalisco.

Reporte de Confraternidad en Villa Purificación, JALISCOPastor José Pelayo García

“¿Dónde está la promesa de Su advenimiento?”(II Ped. 3:4).Esta pregunta la oyó el apóstol Pedro allá en los principios de la Iglesia. Después de 19 siglos seguimos oyendo lo mismo en-tre el cristianismo “profesional” que nos rodea. Son muchos los que hoy, entre nosotros mismos, piensan como los incrédulos del tiempo de Pedro apóstol. Pues lo que uno diga no es lo que vale, sino lo que uno haga. Y la frívola y “profesional” manera en que “sirven a Dios” esos muchos a que me refiero, es la innegable prueba de lo que estoy declar-ando. (Léase I Co. 13:1-3 y Ap.

2:2-4). Yo ya sé que “ninguno de los impíos entenderá, pero entenderán los entendidos” (Dn. 12:10) Por tanto este breve co-mentario va dirigido a los fieles hijos de Dios quienes, en medio del cristianismo de “apariencia de piedad” (II Tim. 3:5) que nos rodea, viven hoy tratando de aju-star a diario sus pasos al molde ordenado por el Espíritu Santo (Léase Fil.2:3-5 y Stg. 3:17,18). Hoy son abrumadoras las por-tentosas señales que nos gritan que el Señor viene pronto. Los acontecimientos en Israel (que es el reloj del tiempo profético del Eterno), son el cumplimiento

hoy de lo anticipado en Zacarías 12 versos 2 y 3 y capitulo 14 verso 2. Pues por éstas y otras muchas Escrituras más, Dios nos declara que el destino de todas las naciones (gústeles o no) está ligada con Jerusalem. La conmo-ción universal que prevalece hoy en todos los aspectos de la vida humana, política, económica, militar, social, moral, espiritual y demás, imposible me es enume-rar aquí., “los impíos” no la ven, o la ignoran. Pero (la estamos viendo) “los entendidos”. Ruego al Señor sostenga despiertos has-ta el fin a Sus hijos fieles. Que no quiten su vista de estas pro-

fecías sobre las que ya mucho he estado llamando su atención. Así que por lo que toca “a los que se salvan, es a saber a nosotros” (I Co. 1:8), no importa el tiempo que pasare, y qué tantos fueren los que dudaren hoy, segui-mos “esperando aquella es-peranza bienaventurada, y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesu-cristo” (Tito 2:13). Y mientras esperamos “al Esposo”, “las vír-genes prudentes” (Mt. 25:1-12) seguiremos aquí sirviendo a es-tos mis hermanos “pequeñitos” (vs. 34-36).


“ Él entonces pidiendo luz, entró dentro, y temblando, de-rribóse a los pies de Pablo y de Silas; y sacándolos fuera, les dice: Señores, ¿qué es menester que yo haga para ser salvo? Y ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú, y tu casa” (Hechos 16:29-31). Anticipo que este breve mensaje no es para todos. Es solamente para aquellos que ya se han convencido de que ninguna de las muchas cosas que este mundo ofrece ha podido darles esa paz interior que sus al-mas anhelan. Tampoco es para ha-cer adeptos tratando de convencer a alguien para que deje su religión y acepte alguna otra. Antes es más bien, para aquellos que ya han vivi-do la experiencia de que ninguna re-ligión ha podido cambiar sus vidas. Este mensaje es con el fi n de ayu-dar a aquellos quienes, a causa de las miserables circunstancias en que están viviendo hoy, fueren éstas, en-fermedades, problemas conyugales o familiares, vicios, traumas, prisio-

nes, etc., han llegado a la conclusión de que solamente Dios puede librar-los. Es para aquellos a quienes les ha llegado el momento en sus vidas en que se están preguntado hoy lo mismo que el carcelero de Filipos preguntó una vez a Pablo y a Silas: “¿Qué es menester que yo haga para ser salvo?” Si tú eres uno de ellos, en el amor de Cristo el Señor paso enseguida a explicarte el plan de la salvación de Dios exactamente de acuerdo como está descrito en la Santa Biblia. PRIMER PASO: Necesitas reconocer y confesar tu miseria y necesidad delante de Dios y arre-pentirte con una verdadera sinceri-dad de todos tus pecados. Sin este paso fundamental todo lo demás sería en vano (Hechos 3:19). SEGUNDO PASO: Necesitas ahora aceptar al Señor Jesús como el Salvador de tu alma y creer que por Su gracia y por Su sangre de-rramada en la cruz Él puede limpiar todos tus pecados, no importa cuán

negros éstos fueren (Isaías 1:18). TERCER PASO: El hacer y creer lo anterior es la prueba de que ahora has sido participante del mila-gro de haber “nacido otra vez” (Juan 3:3), del milagro de ser “nacido de Dios”, de ser “engendrado de Dios” (1 Juan 5:18). CUARTO PASO: Ahora es im-perativo que seas sumergido en las aguas del bautismo como el Señor mismo lo hizo, asegurándote que al hacerlo sea invocado sobre ti el Nombre de nuestro Señor Jesucristo (Hechos 2:38 y 4:12). QUINTO PASO: Siendo aho-ra un hijo de Dios (Juan 1:12), “una nueva criatura en Cristo” (2 Corintios 5:17), permite que el mis-mo Señor, quien ahora vive en ti, te enseñe cómo has de vivir, qué es lo que debes de hacer y lo que no te conviene. SEXTO PASO: El Señor ha prometido el poder de Su Santo Es-píritu a cada uno de Sus hijos para ayudarnos a vencer y dar los “fru-

tos del Espíritu” (Gálatas 5:22-23). Pídelo juntamente con la señal de “hablar en otras lenguas” (Hechos 2:4). SÉPTIMO PASO: Ejercítate ahora en leer la Palabra de Dios para que crezcas espiritualmente y tu fe se afi rme. Procura orar al Señor lo más que puedas. Ocúpate hasta donde fuere posible en servir, haciendo las obras de Dios. PASO FINAL: Procura ahora el vivir el resto de tu vida en paz, en santidad, amando a todos y en co-munión con los que aman al Señor así como tú lo amas ahora. Pro-cura hasta donde fuere posible la compañía de aquellos quienes vi-ven “esperando aquella esperanza bienaventurada, y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo” (Tito 2:13). CONCLUSIÓN: Si nosotros no te conocemos, Dios sí te co-noce, y nuestra oración es que Él te bendiga. Pedimos a la vez, al Señor Jesús, que obre para que lo descrito aquí pueda traer a tu vida el cambio que deseas. Si el Señor pone ahora en tu corazón el deseo de que te ayude-mos en alguna forma que nos fuere posible, estamos para servirte.

La doctrina del bautismo es un tema de importancia capital, y se ha con-siderado como tal durante todos los siglos que han pasado desde que la Iglesia fue fundada por nuestro Se-ñor Jesucristo, pues Él mismo dio prominencia a este sacramento cu-ando lo ordenó diciendo: “El que creyere y fuere bautizado será salvo, mas el que no creyere será conde-nado” (Mar. 16:16), y: “por tanto id, y doctrinad a todos los gentiles, bautizándolos en el nombre del Pa-dre, y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mat. 28:19). Además, Él mismo enfatizó la importancia de ser bau-tizado, encami-nándose hasta el Río Jordán donde Juan bautizaba para ser bautizado, diciendo: “deja aho-ra, porque así nos conviene cumplir toda justicia” (Mt. 3:15). Muchos líderes religiosos en el tiempo presente enseñan que el bau-

tismo no es algo de importancia, contradiciendo así al mismo Señor a quien profesan obedecer y servir, haciendo lo mismo que hicieron los Fariseos y los sabios de la ley, que desecharon el consejo de Dios con-tra sí mismos, no siendo bautizados de Juan (Lucas 7:30). Pero en fi n, este breve tratado no va dirigido a los que fueren contrarios, sino a los cristianos sinceros, quienes con un corazón limpio y sencillo quieran obedecer a la Palabra de Dios, tanto a lo que ordena el Señor directa-mente, o por instrumentalidad de sus apóstoles, a quienes a su vez au-torizó diciendo: “el que a vosotros

recibe, a Mí recibe” (Mt. 10:40). Agregamos además que al insistir sobre el tema del bautismo, no es con el fi n de conseguir adeptos para cierta denominación u organización religiosa, sino para que el cristiano sincero y obe-diente, sea quien fuere y estuviere en donde estuviere, re-ciba de Dios la plenitud de su sal-vación. Estando por tanto claros en estas verdades básicas, ahora pasemos a considerar las siguientes preguntas: ¿Para qué es el bautismo? El Señor dijo que: “el que creyere y fuere bautizado, será salvo” (Mar. 16:16). En el Día de Pentecostés el Espíritu Santo, por labios de Pedro

dijo: “Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros…para perdón de los pecados” (Hechos 2:38). Pablo, hablando del sacrifi cio de Cristo, dice que se entregó por su Iglesia “para santifi carla LIMPIÁNDOLA en el lavacro del agua (bautismo) por la Palabra” (Efe. 5:26). Pedro, hablando de la salvación de Noé por agua en el arca, dice: “a la fi gura de la cual, el bautismo que ahora cor-responde NOS SALVA” (1 Ped. 3:21). ¿Cómo se administra el bautismo? Pablo nos explica que el bautismo es



a la fi gura del que ha-biendo muerto es sepultado, pues nos dice así: “¿Qué no sabéis que todos los que somos bautizados en Cristo Jesús, somos bautizados en su muerte? Porque somos SEPULTADOS juntamente con Él a muerte por el bautismo” (Rom. 6:3-4). También nos dice otra vez que: “Somos “SEPULTA-DOS juntamente en el bautismo, en el cual también resucitásteis con Él” (Col. 2:12). De acuerdo con estas escrituras, el bautismo es una sepul-tura simbólica donde el creyente, ya muerto para el mundo (arrepentido), es sepultado en las aguas y sale de ellas para andar en una nueva vida en Cristo. Por lo tanto, el bautismo debe administrarse por inmersión, sumergiendo el cuerpo del penitente completamente en el agua, conforme el dechado que nos marca el mismo Señor quien entró al Río Jordán para ser bautizado: “y Jesús, después que fue bautizado, SUBIÓ DEL AGUA” (Mt. 3:16). De igual manera cuan-do Felipe bautizó al eunuco Etiope, dice que: “DESCENDIERON am-bos al agua, Felipe y el eunuco, y bautizóle, y como SUBIERON DEL AGUA…” (Hech. 8:38-39). ¿Qué nombre se invoca en el bautismo? El Señor mandó a sus discípulos a que bautizaran a “los gentiles, en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mt. 28:19), y cu-ando los apóstoles pusieron por obra

el mandamiento del Maestro, bau-tizaron a miles y miles de creyentes en el Nombre de Jesucristo. Ellos no desobedecieron al Señor como hay quienes se han atrevido a decir, an-tes ejecutaron fi elmente lo que se les ordenó, por la razón de que entendi-eron que el Nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo, es JESÚS el Señor, y que Él es Uno. Entendi-eron cuando el Señor les dijo: “el que me ha visto, ha visto al Padre” (Jn. 14:9). Entendieron que, “Dios ha sido manifestado en carne” (1 Tim. 3:16). Entendieron que Jesús es el Mesías de Israel, y que no podía ser otro sino el mismo Dios, porque no hay más que un Dios (Deut. 6:4, Is. 44:6). Entendieron que sólo el Dios YHWH puede salvar, y les fue dada revelación para entender que Jesús es el mismo Dios, pues el Nombre de Dios dado a los hombres para ser salvos es JESÚS (Hech. 4:12). Es el Nombre “que es sobre todo nom-bre” del cual estaba profetizado: “y será que cualquiera que invocare el Nombre del Señor, será salvo” (Fil. 2:9, Joel 2:32). Las siguientes citas bíblicas dan testimonio de que los creyentes originales de la iglesia fueron todos bautizados invocando el Nombre de Jesucristo, nunca los pronombres Padre, Hijo, y Espíritu Santo: Hechos 2:38, 8:16, 10:48, 19:5, y 22:16; Romanos 6:3 y Gála-tas 3:27. El bautismo invocando los pronombres Padre, Hijo y Espíritu

Santo no se usó en el tiempo apos-tólico ni en los primeros si-glos de la iglesia, sino que fue una interpre-tación posterior que vino juntamente con todas las demás doctrinas falsas, fruto de la apostasía, y que fueron aceptadas y confi rmadas por el Con-cilio de Nicea en el año 325 D.C. ¿Para quiénes es el Bautismo por inmersión invocando el Nombre de Jesucristo? . Lea usted mismo la respuesta: PARA LOS JUDIOS (Hech. 2:36 y 38); PARA LOS SA-MARITANOS (Hech. 8:14 y 16); PARA LOS GENTILES (Hech. 10:45-48); PARA LOS CREYEN-TES YA ANTES BAUTIZADOS CON OTROS BAUTISMOS (Hech. 19:1-5). “Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos y para todos los que están lejos; PARA CU-ANTOS EL SEÑOR NUESTRO DIOS LLAMARE” (Hech. 2:39). Para fi nalizar: Estimado hermano y amigo, si usted ama al Señor y es uno de aquellos a quienes le interesa el estar bien seguro de la salvación de su alma, le invitamos atentamente en el amor de Cristo para que piense detenidamente en este importantísi-mo tema doctrinal, y considere que no se trata solamente de algún ar-gumento de tipo denominacional, sino de una orden señalada muy es-pecífi camente por el mismo Señor, nuestro Jesucristo, quien dijo que: “el que creyere y fuere bautizado, será salvo”.

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PROGRAMA RADIALEl Evangelio Eterno

RADIO TIGRE 1570 AM: Domingos de 9:00 a 9:30 am. (cubre los condados de Monterey, Santa Cruz y San Benito, California).RADIO ALFA Y OMEGA 1400 AM: Domingos de 8:00 a 8:30 am (cubre el Valle de Coachella y parte del Valle Imperial en California).RADIO KPAS 103.1 FM: (Inspirational Gospel). Miércoles y Viernes de 7:30 a 8:00 am (cubre el área de El Paso, Texas.RADIO BUENA: 101.9 FM: Sábados de 9:30 a 10:30 am (cubre los condados en el Estado de Geor-gia, EUA: Whitfi eld, Murria, Gordon, Gilmer, Wal-ter y Catoosa, así como los condados de Hamilton y Bradley en el Estado de Tennessee, EUA).

maranatha octubre 2009

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