mirlo acuático cinclus cinclus - transición ecológica · de los ríos, es otra de las...
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DISTRIBUCIÓN
Mundial. Se distribuye por zonas montañosas del centro y sur de
Europa, las Islas Británicas y Escandinavia, áreas del Cáucaso y los
Urales. En el norte de África en el Atlas Atlántico. En Asia desde el
Himalaya hasta el este de China. Se describen hasta 14 subespe-
cies diferentes. En Europa su población se estima en 120.000-
330.000 pp. (BirdLife International/EBCC, 2000).
España. Su distribución en la Península se centra allí donde exis-
ten ríos limpios y de curso permanente. Debido a estas preferen-
cias de hábitat, es más abundante en la España húmeda, y está
completamente restringida a la existencia de ríos y arroyos de
montaña en las dos mesetas, Levante y sur de la Península. No
aparece en Baleares, Canarias, Ceuta ni Melilla. En zonas óptimas
puede encontrarse prácticamente al nivel del mar. Para criar pre-
fiere los arroyos de más de tres metros de anchura pero puede
presentarse en los de menos de un metro. Selecciona positiva-
mente aquellos cursos de agua con una pendiente entre 2-15%,
poca profundidad y con abundantes piedras en su curso. Se han
citado dos subespecies en España, la nominal en el NO y norte de
Mirlo AcuáticoCinclus cinclus
Catalán Merla d'aiguaGallego Merlo rieiroVasco Ur zozo
Cobertura
1.035
%
18,5
R. posible
332
%
32,1
R. probable
174
%
16,8
R. segura
529
Información 1985-1997
227
Información 1998-2002
808
%
51,1
R. posible (1998-2002)
R. probable-segura (1998-2002)
R. posible (1985-1997)
R. probable-segura (1985-1997)
406
1-9 pp. 10-99 pp.100-999
pp.1.000-
9.999 pp.>9.999
pp. Sin cuantificar
la Península, y aquaticus en el este y sur (Cramp, 1988). Con res-
pecto al anterior atlas (Purroy, 1997), su distribución parece
haberse reducido de manera generalizada en áreas de
Extremadura, Galicia, Asturias, Andalucía occidental, Comunidad
Valenciana, Cataluña, Aragón, Madrid, Murcia y Castilla-La
Mancha, donde ha desaparecido de amplias zonas, aunque las
diferencias pueden ser debidas en parte a la distinta cuadrícula de
referencia en ambos mapas. No obstante, aparecen en algunos
puntos localidades nuevas, o se incrementan las ya descritas ante-
riormente, como sucede en Murcia, Jaén, Málaga, Granada y
Ciudad Real, quizás por el mayor esfuerzo de prospección en el
actual trabajo.
POBLACIÓN Y TENDENCIA EN ESPAÑA
Según los datos de este atlas se estima una población mínima de
3.310 pp., pero no hay datos del 19% de las cuadrículas. La estima
nacional en el anterior atlas señalaba una población de 6.200-
8.000 pp. (Purroy, 1997). Las zonas de mayor densidad son los
Pirineos y la cornisa cantábrica, donde abundan los arroyos que
presentan condiciones óptimas para la especie. Puede presentar
densidades altas en zonas adecuadas y se han citado medias de 3-
10 pp./10 km de río en Galicia (Santamarina, 1991a), 4-7 pp./10 km
en Castellón (Gómez-Serrano, 2002a) o 5,42 pp./10 km en ríos de
Salamanca (Peris et al., 1991a), donde se han detectado densida-
des de hasta 2,5 pp./km (V. López Alcázar, datos propios). Las esti-
maciones de 74-81 pp. obtenidas para Madrid (S.C.V., 2000), 50-
100 pp. en Palencia (Jubete, 1997), 200-400 pp. en Burgos
(Román et al., 1996) o 22-28 pp. en la cuenca del Alagón en
Salamanca (V. López Alcázar, datos propios) parece indicar que la
población actual es algo más baja de lo estimado anteriormente.
En Navarra, Esteban & Campos (1998) estiman densidades
medias de 5 pp./10 km, y tendencia decreciente en los últimos
diez años. En la Comunidad Valenciana, aparece como un ave
muy escasa y localizada (Urios et al., 1991), y se han contabiliza-
do entre 45-50 pp. en Castellón (Gómez-Serrano, 2002a y b). Para
toda Castilla y León, Sanz-Zuasti & Velasco (1999) estiman una
población de 1.100 pp. Aunque no hay datos concretos sobre la
evolución de la población de Mirlo Acuático en España, parece
que la tendencia es decreciente debida a la progresiva contami-
nación y alteración de las zonas donde habita.
AMENAZAS Y CONSERVACIÓN
Su existencia y abundancia está directamente relacionada con la
existencia de ríos y arroyos de aguas limpias, con pendiente fuer-
te o moderada, poca profundidad y con piedras en su curso, lo
que hace que sea muy vulnerable a las diferentes alteraciones de
su hábitat. Su alimentación básicamente de larvas de efemerópte-
ros y tricópteros, hace que sea muy sensible a la acidificación de
las aguas, parámetro con el que está directamente relacionada su
abundancia y distribución (Vickery, 1991; Tyler & Ormerod, 1994).
De hecho, la acidificación de los ríos, en muchas ocasiones debi-
do a la reforestación de las cuencas con coníferas, ha supuesto un
grave impacto en numerosas zonas de Europa (Tyler & Ormerod,
1994), ya que la disminución del pH del agua desencadena proce-
sos como la disminución de la densidad de aves (Peris et al.,1991a; Tyler, 1992), reduce la disponibilidad del hábitat, modifica
la fenología reproductiva, reduce el tamaño de las puestas, polla-
das y la productividad (Vickery, 1992) o afecta a la condición cor-
poral (Ormerod & Tyler, 1990). Además Ormerod et al., (1991)
han obtenido un menor crecimiento en aves que habitan en ríos
con pH inferior al habitual, lo que sugiere que podrían existir
carencias de calcio para la formación de huevos y huesos. La con-
taminación por nitratos, fosfatos y sulfatos procedentes de fertili-
zantes, residuos de granjas o aguas residuales, también influyen en
la disminución del número de Mirlos Acuáticos (Tyler & Ormerod,
1994). Las condiciones que supongan excesiva turbidez, como la
deforestación de riberas con el consiguiente arrastre de arenas,
también le afectan negativamente. Numerosas puestas se pierden
por molestias humanas, hasta al menos un 25% (Shaw, 1978), si
bien algunas parejas son capaces de permanecer ocultas ante la
presencia de pescadores o bañistas. La existente y cada vez mayor
red de embalses, canales, tomas de agua, etc., de los cursos altos
de los ríos, es otra de las principales causas de pérdida de hábitat
del Mirlo Acuático en la Península. En lugares como Sicilia, ésta ha
sido la principal causa de que se encuentre en peligro de extinción
(Tyler & Ormerod, 1994).
Vicente López Alcázar, Xabier Vázquez Pumariñoy Miguel Ángel Gómez-Serrano
Mirlo Acuático Cinclus cinclus
407
645 208 6 0 0 176