misa del beato juan pablo ii

5/12/2018 Misa Del Beato Juan Pablo II - slidepdf.com

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Textos Eucológicos

Misa de BeatoJuan Pablo II

ARQUIDIÓCESIS DE MÉXICO-TENOCHTITLAN



Misa del Beato Juan Pablo II

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RITOS INICIALESReunido el pueblo para celebrar la memoria del Beato Juan Pablo II, el sacerdote con los ministros va al altar,mientras se entona el canto de entrada.Cuando llega al altar, el sacerdote con los ministros hace la debida reverencia, besa el altar y, si se juzgaoportuno, inciensa la cruz y el altar. Después se dirige con los ministros a la sede.

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan, mientras el sacerdote dice:En el nombre del Padre, y del Hijo,y del Espíritu Santo.

El pueblo responde:

Amén.

SaludoEl sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pueblo con las siguientes palabras:

La paz de Jesús resucitado,

esté con todos ustedes.El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

El sacerdote, el diácono, u otro ministro idóneo, puede hacer una monición muy breve para introducir la misadel día.

Bienvenidos a celebrar la Eucaristía en la que damos graciaspor la Beatificación de S.S. Juan Pablo II y por el gran don querepresenta para la Iglesia.

Acto PenitencialA continuación se hace el Acto penitencial.El sacerdote invita a los fieles al arrepentimiento.

En silencio, reconozcamos con humildad que somos pecadoresy arrepintámonos sinceramente de todo lo que hemos ofendido alSeñor. (Silencio).

Se hace una breve pausa en silencio.Después, hacen todos en común la confesión de sus pecados.

Yo confieso ante Dios todopoderosoy ante ustedes, hermanos,que he pecado muchode pensamiento, palabra, obra y omisión.

Golpeándose el pecho, dicen:

Por mi culpa, por mi culpa, por mi grande culpa.




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Luego prosigue:

Por eso ruego a santa María, siempre Virgen,a los ángeles, a los santosy a ustedes, hermanos,

que intercedan por mí ante Dios,nuestro Señor.

El sacerdote concluye con las siguientes palabras:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros,perdone nuestros pecadosy nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén.

Siguen las invocaciones, Señor ten piedad, a no ser que ya se hayan utilizado en alguna de las fórmulas delacto penitencial

. Señor, ten piedad. . Señor, ten piedad.. Cristo, ten piedad. . Cristo, ten piedad.. Señor, ten piedad. . Señor, ten piedad.

A continuación, si la Liturgia del día lo prescribe, se canta o se dice el himno:

Gloria a Dios en el cielo… Acabado el himno, el sacerdote, con las manos juntas, dice:

Acabado el himno, el sacerdote, con las manos juntas, dice:

Oremos.Y todos, junto con el sacerdote, oran en silencio durante unos momentos. Después el sacerdote, con las manosextendidas, dice la oración colecta. La colecta termina siempre con la conclusión larga.

ORACIÓN COLECTAh Dios, rico en misericordia,que has querido que el beato Juan Pablo II, papa,

guiara toda tu Iglesia,

te pedimos que, instruidos por sus enseñanzas,nos concedas abrir confiadamente nuestros corazonesa la gracia salvadora de Cristo, único redentor del hombre.Te lo pedimos por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,que vive y reina contigoen la unidad del Espíritu Santo y es Dios

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por los siglos de los siglos.

Al final de la oración el pueblo aclama:

Amén.

LITURGIA DE LA PALABRAEl lector va al ambón y lee la primera lectura, que todos escuchan sentados.

PRIMERA LECTURA Los creyentes vivían unidos y todo lo tenían en común.

Del libro del Profeta Isaías: 52, 7-10

¡Qué hermoso es ver correr sobre los montes al mensajero que anunciala paz, al mensajero que trae la buena nueva, que pregona la salvación, quedice a Sión: “Tu Dios es rey”!

Escucha: Tus centinelas alzan la voz y todos a una gritan alborozados,porque ven con sus propios ojos al Señor, que retorna a Sión. Prorrumpan engritos de alegría, ruinas de Jerusalén, porque el Señor rescata a su pueblo,consuela a Jerusalén. Descubre el Señor su santo brazo a la vista de todas lasnaciones. Verá la tierra entera la salvación que viene de nuestro Dios.

Para indicar el fin de la lectura, el lector dice:

Palabra de Dios.Todos aclaman:

Te alabamos Señor.El salmista o el cantor proclama el salmo, y el pueblo intercala la respuesta, a no ser que el salmo se digaseguido sin estribillo del pueblo.

SALMO RESPONSORIAL Del salmo 95. Cantemos la grandeza del Señor. Aleluya.

Cantemos al Señor un nuevo canto, que le cante al Señor toda la tierra;

cantemos al Señor y bendigámoslo..

Proclamemos su amor día tras día, su grandeza anunciemos a lospueblos, de nación en nación, sus maravillas..

Alaben al Señor, pueblos del orbe, reconozcan su gloria y su poder ytribútenle honores a su nombre..




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“Reina el Señor”, anuncien a los pueblos, él afianzó con su poder elorbe, con toda rectitud rige a los pueblos..

Si hay segunda lectura, se lee en el ambón, como la primera.SEGUNDA LECTURA Cumple tu trabajo de evangelizador y desempeña a la perfección tu ministerio.

De la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo: 4, 1-5

Querido hermano: En presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha devenir a juzgar a los vivos y a los muertos, te pido encarecidamente, por suadvenimiento y por su Reino, que anuncies la palabra; insiste a tiempo y adestiempo; convence, reprende y exhorta con toda paciencia y sabiduría.

Porque vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la doctrinasana, sino que, arrastrados por sus propias pasiones, se rodearán de maestrosque les halaguen el oído; se harán sordos a la verdad y sólo escucharán lasfábulas.

Tú, en cambio, sé siempre prudente, soporta los sufrimientos, cumple tutrabajo de evangelizador y desempeña a la perfección tu ministerio.

Para indicar el fin de la lectura, el lector dice:

Palabra de Dios.Todos aclaman:

Te alabamos Señor.

Sigue el Aleluya.

ACLAMACIÓN AL EVANGELIO Jn 10, 14. Aleluya, aleluya.

Yo soy el buen pastor, dice el Señor;

yo conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí..Mientras tanto, si se usa el incienso, el sacerdote lo pone en el incensario.Después el diácono (o el concelebrante que ha de proclamar el evangelio en la misa presidida por el Obispo),inclinado ante el sacerdote, pide la bendición, diciendo en voz baja:

Padre, dame tu bendición.El sacerdote en voz baja, dice:




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El Señor esté en tu corazón y en tus labios, para que anuncies dignamente su

Evangelio; en el nombre del Padre y del Hijo + , y del Espíritu Santo.

El diácono responde:

Amén.

Después del diácono (o el sacerdote) va al ambón, acompañado eventualmente por los ministros que llevan elincienso y los cirios; ya en el ambón dice:

El Señor esté con ustedes.El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

El diácono (o el sacerdote):

Lectura del santo Evangelio según san Juan: 21, 15-17Y mientras tanto hace la señal de la cruz sobre el libro y sobre su frente, labios y pecho.El pueblo aclama:

Gloria a ti, Señor.El diácono (o el sacerdote), si se usa el incienso, inciensa el libro.Luego proclama el evangelio.

EVANGELIOOcho días después se les apareció Jesús.

En aquel tiempo, le preguntó Jesús a Simón Pedro: “Simón, hijo de Juan,¿me amas más que éstos?” Él le contestó: “Sí, Señor, tú sabes que te

quiero”. Jesús le dijo: “Apacienta mis corderos”.

Por segunda vez le preguntó: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas?” Él le

respondió:“

Sí, Señor, tú sabes que te quiero”

. Jesús le dijo:“

Pastorea misovejas”.

Por tercera vez le preguntó: “Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?” Pedro seentristeció de que Jesús le hubiera preguntado por tercera vez si lo quería, y lecontestó: “Señor, tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero”. Jesús le dijo:“Apacienta mis ovejas”.

Acabada la lectura del evangelio, el diácono (o el sacerdote) dice:

Palabra del Señor.

Todos aclaman:Gloria a ti, Señor Jesús.

Después el diácono lleva el libro al celebrante, y éste lo besa diciendo en secreto:

Las palabras del Evangelio borren nuestros pecados.O bien, el mismo diácono besa el libro, diciendo en secreto las mismas palabras.Luego tiene lugar la homilía; ésta es obligatoria todos los domingos y fiestas de precepto y se recomienda enlos restantes días.

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Homilía

Credo

Acabada la homilía, si la Liturgia del día lo prescribe, se hace la profesión de fe:

Creo en Dios, Padre todopoderoso…

Plegaria universal

Después se hace la plegaria universal u oración de los fieles.

lenos de gozo por la santa resurrección del Señor, purificadosnuestros sentimientos y renovado nuestro espíritu, supliquemos

con insistencia al Señor. Respondamos a cada petición cantando:

Cristo, rey vencedor de la muerte, escúchanos.

1. Que la Iglesia, que vive de la Eucaristía, memorial del sacrificio pascual,reúna a los renacidos en el Bautismo, para que todos sean uno. Oremos.. Cristo, rey vencedor de la muerte, escúchanos.

2. Que nuestro Santo Padre Benedicto, que anuncia a todos con humildefranqueza el esplendor de la Verdad , se sienta sostenido por la consolanteintercesión de la Madre del cielo y del custodio del Redentor . Oremos. . Cristo, rey vencedor de la muerte, escúchanos.

3. Que los cristianos perseguidos y vilipendiados abran sin temor el corazón aCristo y, perseverando en la hora de la prueba, se sientan partícipes de lamisma misión del Redentor a favor de la humanidad. Oremos. . Cristo,

rey vencedor de la muerte, escúchanos.

4. Que los responsables de los pueblos y de las naciones se dejen mover porla preocupación social de la Iglesia y descubran la urgencia de vivir el

Evangelio de la vida. Oremos. . Cristo, rey vencedor de la muerte,

escúchanos.

5. Que los discípulos del Señor, hoy aquí reunidos en el gozo y en la alabanzapor el don del testimonio evangélico del Beato Juan Pablo II, orientados

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por la fe y la razón, busquen constantemente la verdad sin desfallecer.Oremos.. Cristo, rey vencedor de la muerte, escúchanos.

6. Que el pueblo de México, a quien el Beato Juan Pablo II demostróconstantemente su amor, se mantenga siempre fiel bajo la protección de

Santa María de Guadalupe. Oremos. . Cristo, rey vencedor de la muerte,escúchanos.

adre de inmensa bondad, que quisiste que el Papa Juan Pablo IIfuera mensajero de paz, artífice de unidad, mensajero de Cristo y

Romano Pontífice, escucha nuestras oraciones y haz que podamosalegrarnos contemplando una civilización del amor. Por nuestroSeñor Jesucristo, que vive y reina, inmortal y glorioso por los siglos

de los siglos.. Amén.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDASe presentamos, Señor, estas ofrendasen honor de tus santos,

seguros de que su protecciónnos librará de todos los males presentes y futuros.

Por Jesucristo, nuestro Señor.O bien:

ue el sacrificio que quita los pecados del mundoy que hoy vamos a ofrecerte

en la fiesta del Beato Juan Pablo II,nos aproveche, Señor, para salvarnos.Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio de los santos pastores, p. 350..

LITURGIA DE LA EUCARISTÍALa Liturgia de la Eucaristía se desarrolla como de costumbre, cf. Ordinario de la Misa pp. 292-402.

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RITO DE LA COMUNIÓNEl Rito de la Comunión se desarrolla como de costumbre, cf. Ordinario de la Misa pp. 403-408. Excepto laoración después de la comunión que se dice como sigue:

Oremos.Y todos, junto con el sacerdote, oran en silencio durante unos momentos, a no ser que este silencio ya se haya

hecho antes.Después el sacerdote, con las manos extendidas, dice la oración después de la comunión.La oración después de la comunión termina con la conclusión breve.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓNeñor y Dios nuestro,que la recepción de este sacramento avive en nosotros

el mismo amor que impulsó al beato Juan Pablo IIa entregarse por completo al servicio de tu Iglesia.Por Jesucristo, nuestro Señor.

O bien:

eñor, que la fuerza de este sacramentoproduzca en nosotros su fruto,

y nos obtenga hoy que celebramos al Beato Juan Pablo II,tu ayuda en esta vida y el gozo eterno en el cielo.Por Jesucristo, nuestro Señor.

El pueblo aclama:

Amén.

RITO DE CONCLUSIÓNEn este momento se hacen, si es necesario y con brevedad, los oportunos anuncios o advertencias al pueblo.

Después tiene lugar la despedida.En algunas ocasiones y en determinadas misas rituales puede usarse una de las bendiciones solemnes o de lasoraciones sobre el pueblo.El sacerdote extiende las manos hacia el pueblo y dice:

El Señor esté con ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

ue Dios misericordioso,que por la resurrección de su Hijo unigénito

los ha redimido y hecho hijos suyos,

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los llene de alegría con su bendición.. Amén.

ue por Cristo redentor,

por quien recibieron el don de la libertad perpetua,les conceda tambiéntener parte en la herencia eterna.. Amén.

ue por sus buenas obrasmerezcan unirse en el cielo

a Aquel para quien, profesando la fe,han resucitado en el bautismo.

. Amén.El sacerdote bendice al pueblo, diciendo:

Y la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo y Espíritu Santo,descienda sobre ustedes.

El pueblo responde:

Amén.

Luego el diácono o el mismo sacerdote, con las manos juntas, despide al pueblo diciendo:Anuncien a todos la alegría del Señor resucitado.Pueden ir en paz. Aleluya, aleluya.

El pueblo responde:

Demos gracias a Dios.

Después el sacerdote besa con veneración el altar, como al comienzo, y, hecha la debida reverencia con losministros, se retira a la sacristía.Si sigue inmediatamente otra acción litúrgica, se omite el rito de despedida.

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Celebración Eucarística de la Conmemoración de laBeatificación del S.S. Juan Pablo II. Preparado por la Oficinade Ministerio de Celebraciones Litúrgicas de la INBG, bajola dirección del Pbro. Dr. Ricardo Valenzuela P., Dir. De laComisión Litúrgica y Maestro de las CelebracionesLitúrgicas. Para uso exclusivo de la Arquidiócesis deMéxico.

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