políticas Étnicas y estado nación en uruguay

Upload: hecsil-coello

Post on 03-Mar-2016

234 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

El siguiente es un trabajo que reflexiona sobre el concepto de identidad en el contexto migratorio.

TRANSCRIPT

Universidad de la Repblica

Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educacin.

Maestra en Ciencias Humanas, Opcin: Lenguaje, Cultura y Sociedad

El problema de la identidad cultural y la identidad lingstica como proceso de construccinLa tensin entre la identidad y la diferenciaEn el contexto de la migracin internacional en UruguayTrabajo final para aprobar el curso: Polticas tnicas y estado nacin en Uruguay

Profesores Dra. Pilar Uriarte

Dr. Nicols Guigou

Maestranda: Hecsil Coello Milln

Fecha 21 de marzo de 2015ndice1. Introduccin

2. El problema de la identidad cultural

3. Tensin entre la identidad y la diferencia

4. La identidad con una perspectiva lingstica

5. La identidad lingstica como parte de la narrativa de la identidad

6. La migracin internacional en Uruguay

7. La ley migratoria en Uruguay

8. La migracin peruana en Uruguay9. ConclusionesConozco ntimamente los dos lugares, pero no soy completamente de ninguno.

De manera curiosa, la postcolonialidad me prepar para vivir

en [] una relacin diasprica con la identidad(Stuart Hall, 2010)IntroduccinEn el siguiente trabajo hago una exploracin histrica en las nociones de identidad cultural e identidad lingstica para comprender cmo y desde cul perspectiva ha sido interpretada la identidad y cmo esto ha influido en el conocimiento de los grupos sociales. Para ello exploro en primer lugar, cuatro ejes de la nocin de identidad, segn las perspectivas de 1) la raza y lo tnico; 2) la subalternidad; 3) el reconocimiento del otro en el multiculturalismo y 4) la identidad como narrativa. En segundo lugar, exploro tres ejes con los cuales la Lingstica antropolgica ha estudiado la lengua como cultura, segn las perspectivas 1) del Relativismo lingstico; 2) la Etnografa de la comunicacin y 3) el Anlisis del discurso.En primer lugar quisiera partir de la pregunta qu es la identidad cultural? y tomar el postulado de Fredrik Barth como el punto de partida de esta reflexin terica. En 1967 Barth present en Bergen, Noruega un simposio en que participaron antroplogos sociales europeos escandinavos-, interesados en analizar y comprender lo que era un grupo tnico. Este simposio dio lugar al libro Los grupos tnicos y sus fronteras, donde Barth propone estudiar los componentes culturales de los grupos, entendiendo que cada cual tiene caractersticas que lo diferencian de otros. A esas diferencias Barth las llam frontera tnica. Para Barth la cultura no es sino una forma de describir la conducta humana, se podra concluir que existen grupos discretos de individuos, es decir, unidades tnicas correspondientes a cada cultura (1976: 12). Barth entiende que un grupo social es portador de cultura y, como tal, tiene rasgos culturales por los cuales los reconocemos. Barth entiende los grupos tnicos como formas de organizacin social al que se adscriben, por propios y extraos, caractersticas. Esas caractersticas son tnicas dado que una persona es clasificada, en palabras de Barth por su identidad bsica, por ejemplo su origen o su lengua. Ahora bien, en la medida en que los actores utilizan las identidades tnicas para categorizarse a s mismos y a los otros, con fines de interaccin, forman grupos tnicos (bid: 15). De lo que podra decirse que para Barth la identidad tnica como identidad bsica, da paso a la formacin de grupos sociales tnicos, es decir, de organizacin tanto en cuanto sus miembros comparten esa identidad.

El problema de la identidad

El postulado de Barth nos deja saber que entre el yo y el otro hay diferencias. Este posicionamiento basado en la diferencia ha sido, y sigue siendo, debatido. En el primer eje aqu planteado, se encuentra el entendimiento de la identidad como lo racial o lo tnico. En esta perspectiva los estudios poscoloniales, entendidos como aquellas reflexiones tericas sobre el orden social moderno establecido por la hegemona de los estados-nacin europeos, agudizan su entendimiento sobre la identidad como las caractersticas de las que habla Barth aunque referidas a los rasgos fsicos de la persona. As la identidad tnica es entendida como identidad racial; el sujeto entendido como objeto al que se le conoce mediante pares mnimos como blanco/negro; primitivo/civilizado; naturaleza/cultura; lengua/dialecto. Un autor referente de los estudios poscoloniales es Franz Fanon quien escribe y reflexiona sobre el hombre colonizado visto como otro, racializado lo que entaa, explica Fanon, una violencia social, cultural y psquica.

En el marco de los estudios poscoloniales Homi Bhabha, escribe sobre la hegemona de la cultura dominante y reflexiona sobre la otredad o alteridad que produce dicha dominacin. Si bien Bhabha arguye que la hegemona entraa la diferencia, profundiza en que la diferencia entre yo y el Otro produce una identidad subalterna. En El lugar de la cultura (1994, [2002]) Bhabha explica que la identidad cultural, entendida en el marco de la diferencia cultural proveniente del discurso de la dominacin, produce que el otro pierda poder para establecer su propio discurso, para enunciar, para significar. En consecuencia, el otro construye su identidad mediante un proceso de identificacin simblica. La exploracin en ese proceso hace pensar en la identidad cultural no desde la diferencia sino desde la diversidad cultural. La visibilidad de lo diverso nos lleva al tercer eje planteado: el reconocimiento del otro en el multiculturalismo. El multiculturalismo y la diversidad cultural son ampliamente discutidas. Al respecto Bhaba afirma que () La diversidad cultural es el reconocimiento de contenidos y usos ya dados () da origen a ideas liberales de multiculturalismo, intercambio cultural o de la cultura de la humanidad (2002: 54-55). Sin embargo, autores como Balibar y iek plantean que la interpretacin del multiculturalismo y de la multiculturalidad est anclada en el discurso de la dominacin. iek, contextualiza el multiculturalismo y su ideologa en el capitalismo global de fines de siglo XX. Lo entiende como un universal filosfico en tensin porque la diversidad cultural no puede y no est integrada a la totalidad, representada en el yo hegemnico (una nacin, una cultura, una lengua). iek plantea que la ideologa del multiculturalismo est construida en la diferencia por un discurso hegemnico y dominante. Que, sin embargo, se ha enunciado y, por ende, construido a s mismo con el discurso de la tolerancia lo que propicia la caracterizacin de las particularidades del Otro. Para iek la identidad multicultural es una ficcin en la que hay una identidad primaria con la nacin hegemnica y dominante y una identidad secundaria con una comunidad local. Una identidad secundaria y en este sentido, podra decir, tnica hacia la que hay fidelidad tanto en cuanto la identidad primaria (hacia la hegemona) permita la ostentacin de la identidad tnica particular, para lo que hay que enunciarse, significarse y hablar en la clave de la identidad tnica particular. En este debate, Bhabha propone entender la identidad cultural de una forma no homogeneizante y diferencia entre la identidad cultural y la identidad histrica de la cultura, entendida como fuerza homogeneizadora y unificante, autentificada por el pasado originario, mantenida viva en la tradicin nacional del pueblo (2002: 58). Bhabha propone entender la cultura sin exotismo, entender la articulacin de la hibridez de la cultura.Por su parte, en Mxico, Miguel Alberto Bartolom reflexiona, desde la perspectiva del pluralismo cultural y las relaciones interculturales, sobre la relacin histrica entre identidad y cultura. Explica la confusin de entender la identidad como objetivo del discurso del estado-nacin a partir del referente cultural. Concuerda con Bhaba y iek en que la identidad tnica es una construccin ideolgica que requiere de los referentes culturales para construirse y narrarse como tal. Bartolom cuestiona el postulado esencialista de los lmites y de la frontera tnica de Barth, distinguiendo entre identidad y conciencia tnica. Con esta distincin lo organizacional no se desvincula de lo cultural porque lo cultural adquiere significacin. En consecuencia, concuerda con Bhabha en que la identidad se construye por apropiacin simblica; hacindose emblema de una colectividad y agrega que la identidad tnica es una representacin colectiva, derivada de la percepcin e interpretacin de la cultura en trminos de la diferencia. Es decir, la representacin colectiva de nosotros y los otros como alteridad. Esta interpretacin da paso a la narrativa identitaria. Para profundizar en este postulado, Bartolom hace una diferencia histrica entre la identidad tnica como representacin social colectiva y la etnicidad como asuncin poltica de la identidad.La tensin entre la identidad y la diferencia

En sintona con que la diferencia cultural proviene del discurso hegemnico con el cual el sujeto pierde poder para establecer su propio discurso. Con que esto produce que el sujeto, mediante un proceso de identificacin simblica, construya su identidad como alteridad y esto suponga una asuncin poltica de la identidad; Stuart Hall, desde la perspectiva de los estudios culturales, se preguntar si puede la identidad repensarse y revivirse en y a travs de la diferencia. Para responder, Hall contextualiza el poder hegemnico, en el poder de la globalizacin sobre las actividades y prcticas culturales de lo local. En el contexto de lo global y lo local, Hall propone profundizar en la reconceptualizacin de la identidad.Hall comienza explicando que la identidad individual y la identidad social se han fragmentado. Explica que las categoras: clase, raza, nacin, gnero e incluso occidente se han fragmentado porque no pueden pensarse ms de forma homognea. Dice Hall no podemos saber lo que somos simplemente a travs de sumar nuestras posiciones con relacin a ellas (2010: 318), como una suerte de comunidad orgnica. Entender la identidad como el origen del humano o como la concepcin de nosotros mismos, es entender la identidad como una esencia finita y no como un proceso. Hall coincidiendo con Bhabha propone pensar la identidad individual o colectiva de forma no homogeneizante y agrega que ha de pensarse a partir de la erosin. La erosin supone un proceso de identificacin que contiene una ruptura entre lo que uno es y aquello que el otro es. En consecuencia, Hall propone pensar en la identidad desde el sujeto y la subjetividad; como un proceso, la identidad como subjetividad. Ahora bien, la ruptura entre lo que uno es y lo que el otro es no se refiere a la relacin ambivalente y binomial yo y el otro, reconocido a partir de caractersticas externas, fsicas o tangibles. Hall se refiere a la identidad articulada en un doble discurso, esto es, en la mirada del yo interior y en la mirada del otro por lo que Hall explica: la nocin de que la identidad est relacionada con personas que se parecen, que se sienten lo mismo, que se llaman lo mismo, es una tontera. (bid: 321). As la identidad no es una sustancia, no es un universal, es un proceso de construccin con ms de un discurso. As, para Hall la identidad cultural no ha de pensarse en la diferencia no jugando con la diferencia, ni encontrando noches tranquilas en las cuales descansar cobijado por la identidad, sino viviendo en la tensin de la identidad y la diferencia (bid: 322). Ha de pensarse a travs de la diferencia; pensar la identidad, la propia cultura como mecanismo de resistencia. Ello supone un proceso de redescubrimiento de la bsqueda de las races (bid: 324) con el cual las personas se reidentificaran, se reterritorializaran para resistir la exclusin y la marginalizacin. Por lo que Hall le da gran importancia al pasado, a la memoria como recurso para narrar el pasado. Hall entiende la identidad como un proceso que da lugar a una narrativa: la narrativa de la identidad. As, sta es entendida en un sentido plural y no en uno multicultural. Dado que la pluralidad est inacabada mientras que el multiculturalismo fija al individuo en un lugar. Por eso, para Hall la identidad est dentro del discurso, dentro de la representacin () la identidad es una narrativa del s mismo, es la historia que nos contamos de nosotros mismos para saber quin somos (bid: 345).

Esta identidad es denominada por Hall nueva etnicidad un acto de recuperacin cultural (bid: 347), hecho a travs de la memoria. En la nueva etnicidad la persona no es objeto de representacin sino sujeto de sus propias representaciones. El pasado es narrativizado, recuperando la historia por los testimonios orales de personas que no han sido consideradas como sujetos productores de historia. El individuo por medio del lenguaje, significa su identidad.El ltimo eje propuesto para profundizar sobre la nocin de identidad cultural como etnicidad erosiona la concepcin que la Lingstica ha dado a la lengua como cultura. Por eso, tratar de hacer un paralelismo entre los aportes de los estudios poscoloniales y los estudios culturales y las lneas de investigacin de la Lingstica antropolgica. Comenzar explicando que esta disciplina se ha enfocado en estudiar la relacin entre la lengua, la cultura, la sociedad y la comunicacin. Estos estudios interdisciplinarios han enfatizado o bien lo antropolgico o bien lo lingstico. En el primer caso, la Antropologa ha estudiado la evolucin del lenguaje y del humano as como la evolucin de las lenguas y de las culturas. En el segundo caso, la Lingstica se ha preocupado por reconstruir la historia de las lenguas y de las familias lingsticas y ha estudiado la comunicacin y el lenguaje en el contacto cultural. As, tres de las temticas de la Lingstica antropolgica han sido las lenguas y culturas de tradicin oral; la elaboracin de lxicos; la situacin del contacto lingstico y cultural en relacin con los procesos identitarios. Para profundizar al respecto tomar los tres paradigmas planteados por Alessandro Duranti en su estudio de la lengua como cultura (2003).La identidad con una perspectiva lingstica

El primer paradigma surge a fines del siglo XIX, con las investigaciones de Franz Boas para quien el estudio de la lengua permita comprender la cultura. Esta lingstica antropolgica estudi la diferencia entre las lenguas, especialmente las no indoeuropeas. El objetivo fue describirlas. Este paradigma dio paso al relativismo lingstico, acuado por el antroplogo y lingstica Edward Sapir y su discpulo Benjamn Lee Whorf, segn el cual hay una relacin directa entre lengua y pensamiento tanto en cuanto la lengua provee a los hablantes de predisposiciones para interpretar la realidad lo que tiene un impacto en su conducta. Lengua y pensamiento se influyen entre s. Segn este paradigma, la lengua se entiende como un conjunto de reglas, como sistema simblico arbitrario. En el cual la Lingstica describe las lenguas y encuentra patrones gramaticales. Las unidades de anlisis son pues los fonemas, los morfemas, las oraciones y las palabras as como textos provenientes de la literatura oral. En este paradigma, puedo decir, la lengua es la identidad del individuo.El segundo paradigma es contrario al relativismo lingstico al no entender la cultura como un fenmeno mental. Este paradigma hace hincapi en el habla, estudiada en el contexto y en la situacin comunicativa. El antroplogo, sociolingista y folclorista Dell Hymes, bajo esta perspectiva acu el trmino competencia comunicativa, entendida como la capacidad de una persona para formar enunciados socialmente apropiados segn una situacin comunicativa dada, el contexto y la comunidad de habla. Trmino ste, muy vinculado al de competencia comunicativa, acuado por los lingistas y antroplogos que desarrollaron la etnografa de la comunicacin. Segn lo cual un grupo social comparte la misma variedad de lengua y los patrones de uso de esa variedad. El lingista Jhon Gumperz, define comunidad de habla como un grupo social () unificado por la frecuencia de interaccin social estructurada y separado de las reas circunvecinas en trminos de comunicacin (Gumperz, 1974: 238). En suma, este paradigma estudia la comunicacin en trminos de los usos lingsticos entre los miembros de una comunidad de habla. Est interesado en el estudio de los grupos sociales que usan determinada variedad de lengua. Est interesado en la variacin social del lenguaje: las variedades de la lengua para entender cmo es usada en la vida social. Un importante legado de este enfoque son los estudios lingsticos urbanos de Labov a partir de 1960 con los que surgi la Sociolingistica. Los mtodos de recoleccin de datos en este paradigma son la observacin participante, las entrevistas y grabaciones de habla espontnea.En el segundo paradigma, la teora de base es la variacin lingstica. Se hace descripcin gramatical y etnografa, se observan patrones en la actividad de habla. Es decir, la lengua es el centro de la investigacin. Por su parte, el tercer paradigma entiende la lengua como uno de los recursos semiticos para la produccin del significado por no es la principal preocupacin en las investigaciones. Sino un instrumento para acceder al estudio de los procesos sociales. Lo que conlleva al tercer paradigma a contextualizar las investigaciones en marcos tericos ms amplios. La unidad de estudio en este paradigma es la concepcin de sujeto, persona e identidad.La identidad lingstica como parte de la narrativa de la identidadEn el contexto entre lo global y lo local, plateado por Hall y en el marco del tercer paradigma propuesto por Duranti, propongo estudiar la identidad lingstica como un proceso y no como un dominio culturalmente organizado y organizador de lo cultural. No estudiando el contacto cultural y lingstico en una comunidad de habla sino a travs de las identidades individuales y sociales fragmentadas. No entendiendo al grupo a priori como una comunidad de habla relativamente homognea desde su conformacin, en la que sus miembros estn reunidos por rasgos lingsticos determinados. Propongo estudiar una identidad (etno)lingstica, como propone Hall, a travs de la diferencia como parte de la narrativa de la identidad. Lo que supone estudiar el proceso de reidentificacin y reterritorializacin, el discurso de la representacin de la identidad por medio de la narrativa. Estudiar la identidad (etno)lingstica, entendiendo la lengua como uno de los recursos semiticos para la produccin del significado de las palabras que se generan en los procesos sociales, entendiendo que el individuo (por medio del lenguaje( significa su identidad.Luego de entender la identidad (etno)lingstica como parte de la narrativa de la identidad. Me gustara contextualizar el estudio de la identidad cultural y la identidad (etno)lingstica en el marco de la migracin internacional. Un espacio transnacional en el que las identidades se fragmentan y los sujetos pueden hacer el proceso de reidentificarse y reterritorializarse para recuperar su cultura y contarse a s mismos quines son. Para ello, tomar el escenario de la migracin internacional en Uruguay y el caso de la comunidad peruana en Montevideo.La migracin internacional en Uruguay

El Censo de 2011 (INE) evidencia que entre 2000 y 2011 Uruguay recibi 2,4% (24.512) de extranjeros, de los cuales 71,2% (17.463), proviene de pases latinoamericanos. En el cuadro 1 puede verse la distribucin de esta poblacin por pas de origen. Cuadro 1. Distribucin de 2,4% extranjeros en Uruguay, por pas de origen

Pas de nacimientoPorcentaje

Latinoamrica

Argentina34,9

Brasil17,5

Otros pases de Sudamrica5,5

Per4,0

Paraguay2,8

Chile2,7

Mxico1,5

Caribe1,4

Centroamrica1,0

Otros pases

Estados Unidos9,0

Espaa7,7

Otros pases de Europa2,8

Asia2,0

Alemania1,7

Italia1,5

Francia1,3

Canad0,8

Reino Unido0,7

frica0,6

Oceana0,5

Ignorado0,1

Total100

Fuente: Elaboracin propia en base a datos del Censo 2011, Instituto Nacional de Estadstica.El resultado del censo de 2011 ha suscitado la discusin sobre el saldo migratorio positivo de hoy en Uruguay. El stock de poblacin censada nacida en el exterior asciende al 2,4% de la poblacin total. Los flujos recientes de inmigrantes renovaron el stock acumulado y compensaron la prdida de migrantes pertenecientes a las corrientes europeas llegadas en la primera mitad del siglo XX por efecto de la mortalidad, (Koolhaas y Nathan, 2013: 3). Este debate puede ubicarse temporalmente en torno al ao 2009 y en la coyuntura (que parece revertir la tendencia migratoria negativa(, producida por el freno de la emigracin, al retorno de uruguayos al pas y a la tendencia a recibir migracin internacional, especialmente de pases latinoamericanos.Sin embargo, para comprender esta tendencia migratoria en el Uruguay actual hay que enmarcarla en un contexto ms amplio. Por una parte, la migracin internacional latinoamericana de las dos ltimas dcadas. Por otra parte, la migracin regional enmarcada en convenios derivados del Mercosur, referidos especialmente a las polticas migratorias implementadas en Uruguay desde 2008.

La migracin internacional latinoamericana ha sido atribuida a las recientes crisis econmicas (a partir de 2008( de los tradicionales pases de destino, tales como Estados Unidos o Espaa. Al respecto el Banco Mundial ha estudiado esta movilidad humana dentro del contexto de la migracin Sur-Sur (Banco Mundial, 2007). Entendida, esta ltima, como la movilidad humana entre Latinoamrica, Asia y frica. Por su parte la Organizacin Internacional para las Migraciones ha caracterizado la migracin internacional latinoamericana como migracin intrarregional (OIM, 2012a). Dichos organismos explican que esta migracin tiene causas referidas a la proximidad geogrfica entre los pases, a la conformacin de redes comunitarias y redes familiares en el pas receptor (lo que reduce los costos y las vicisitudes de emigrar(; al impacto de la legislacin migratoria de los pases receptores y, finalmente, al nivel de insercin laboral de los migrantes en las economas de los pases receptores.

Si bien, en lo que va del siglo XXI, la migracin intrarregional o migracin internacional latinoamericana se ha consolidado en Argentina, Brasil y Chile la Organizacin Internacional para las Migraciones afirma que otro pas que muestra signos de una revitalizacin de los flujos inmigratorios es Uruguay () con una acentuacin a partir de 2011 (OIM, 2012b: 19). Los datos de la Direccin Nacional de Migraciones (Anuario, DNI, 2011, 2012 y 2013) muestran un aumento en las residencias permanentes concedidas a partir de 2011 cuando se emitieron 898 residencias permanentes a migrantes provenientes de pases latinoamericanos; en 2012 1.610 y en 2013 3.672. Para lo que va de 2015, se han otorgado 1.137 residencias a migrantes provenientes de Estados Partes y Asociados a Mercosur, (Ministerio de relaciones Exteriores, febrero 2015).

Ley migratoria en UruguayAparecimos diciendo: Ustedes dijeron que esta era la madre patria. Bien, acabamos de llegar a casa.

Ahora somos un recordatorio permanente de las historias olvidadas, suprimidas y escondidas.

Cada vez que ellos caminan por la calle, alguno de nosotros el Otro est all.(2010, Stuart Hall)

Artculo 1.- El Estado uruguayo reconoce como derecho inalienable de las personas migrantes y sus familiares sin perjuicio de su situacin migratoria, el derecho a la migracin, el derecho a la reunificacin familiar, al debido proceso y acceso a la justicia, as como a la igualdad de derechos con los nacionales, sin distincin alguna por motivos de sexo, raza, color, idioma, religin o conviccin, opinin poltica o de otra ndole, origen nacional, tnico o social, nacionalidad, edad, situacin econmica, patrimonio, estado civil, nacimiento o cualquier otra condicin. (Ley, 18.250)Adems del contexto global, es necesario comprender la migracin internacional en Uruguay en el marco local de las reformas migratorias que han tenido lugar en 2008 y 2014. Para enero de 2008 Uruguay aprob una nueva norma migratoria, La Ley 18.250, basada en el reconocimiento de los derechos humanos de los migrantes. Esta Ley ha favorecido la migracin regional, en el grfico 1 puede verse que de 1.071 residencias permanentes concedidas en 2011 y de 2.340 concedidas en 2012, la mayor parte (898 residencias (en 2011) y 1.610 residencias (en 2012)( corresponde a migrantes latinoamericanos, especialmente a los provenientes de los Estados Miembros y Asociados al Mercosur.

Grfico 1. Distribucin de residencias concedidas aos 2011 y 2012

Fuente: Direccin Nacional de Migracin, Anuario 2011 y 2012.En septiembre de 2014 fue aprobada la Ley 18.254 para favorecer la residencia permanente en Uruguay, especialmente a los migrantes provenientes de estados parte y asociados al Mercosur. As el artculo 33 expone:

ARTCULO 33.- Tendrn la categora de residentes permanentes:

a) Los cnyuges, concubinos, padres, hermanos y nietos de uruguayos bastando que acrediten dicho vnculo.

b) Los nacionales de los Estados Partes del MERCOSUR y Estados Asociados que acrediten dicha nacionalidad.

La solicitud de trmite de residencia podr ser presentada ante el Ministerio de Relaciones Exteriores o las Oficinas Consulares de la Repblica.

()

El Ministerio de Relaciones Exteriores deber expedirse sobre el otorgamiento de la residencia solicitada en un plazo no mayor a treinta das hbiles.No obstante, frente a las leyes migratorias es interesante estudiar el caso de las comunidades migrantes en el Uruguay actual para contrastar las acciones legales con la situacin de las comunidades.

Migracin peruana en UruguayEntre los migrantes latinoamericanos en Uruguay, el censo de 2011 establece que 1.005 son provenientes de Per. Si bien no es la poblacin extranjera ms numerosa, dado que la lista est encabezada por argentinos (8.587) y brasileos (4.239), esta poblacin es la ms creciente y sostenida desde 2000, (Pellegrino, 2009; Task, 2010; Diconca y De Souza, 2012; Censo 2011).Cuadro 2. Aumento de la poblacin peruana de 2011 a 2014AoResidencias concedidas

201148

2012157

Residencias solicitadas

2014-2015417

Fuente: Propia, basada en datos de la Direccin Nacional de Migraciones y el Ministerio de Relaciones exteriores, segn residencias permanentes concedidas y residencias solicitadas.La migracin peruana en Uruguay comienza en la ltima dcada del siglo XX y aumenta a partir de 2008. Segn el Perfil Migratorio del Per (OIM, 2012) la emigracin peruana ha sido sostenida, debido a crisis econmicas y polticas ocurridas desde las ltimas dcadas del siglo XX. El informe afirma que esta emigracin responde a la bsqueda de mejores condiciones de vida por lo cual es calificada como migracin de carcter laboral. El Perfil migratorio de Uruguay (OIM, 2012), por su parte, atribuye el nuevo flujo migratorio de peruanos al crecimiento econmico de Uruguay y a la baja tasa de desempleo, ubicada en 5,4% para febrero de 2011.

El perfil de esta migracin comprende una poblacin proveniente mayormente de dos zonas: Chinclayo, capital de la Regin Lambayeque, a 770 Km al norte de Lima y a 509 Km al sur de la frontera con Ecuador. Y Piura, capital de la Regin Piura, a 981 Km al norte de Lima, prxima a la frontera con Ecuador.

Fuente: Berganza y Purizaga, (2011) La edad promedio es de 25 a 45 aos, mayormente femenina. A pesar de la feminizacin de esta migracin, la tendencia en la conformacin de hogares es la integrada por parejas con o sin hijos. Segn el Perfil migratorio de Uruguay (OIM, 2011), el nivel educativo es el secundario y el terciario. Los migrantes peruanos en Uruguay se radican principalmente en Montevideo, especialmente en la Ciudad Vieja y en zonas del centro de la ciudad.

Diconca y De Souza (2012) destacan la vulnerabilidad de la comunidad con respecto a la vivienda. Clasifican cinco tipos de viviendas o estrategias habitacionales referidas a: a) alquiler colectivo; b) alquiler en pensiones; c) refugios; d) casas de hospedaje con asistencia, e) casas de empleadores y f) casas abandonadas. Slo en el caso a) la vivienda tiene un carcter permanente, lo que supone que los migrantes experimentan una alta rotacin de vivienda en cortos perodos de tiempo y poca movilidad social. Con respecto a las prcticas laborales, tanto Diconca y de Sousa (2012) como Taks (2010) afirman que las mismas estn fuertemente divididas entre hombres y mujeres. Los hombres trabajan en el sector de la pesca, la construccin y la agricultura mientras que las mujeres trabajan en el servicio domstico, dndose una divisin tnica del trabajo (Taks, 2010: 163).Diconca y de Sousa mencionan la existencia de redes comunitarias y familiares que inciden en las prcticas culturales. La comunidad se congrega en restaurantes cuyos dueos son peruanos. Estn ubicados principalmente en la Ciudad Vieja. Entre ellos pueden mencionarse Contigo Per, El rincn peruano, Los caminos del Inca, Mixturas, 12-12, El Tumi y Per 26. Lugares de reunin tanto en el mbito pblico como en el privado, en los que se celebran fechas nacionales, tradicionales y eventos familiares.ConclusinEn este trabajo he hecho una reflexin terica sobre el entendimiento de los conceptos de identidad cultural e identidad lingstica. Con el objetivo de construir un marco terico con el cual plantear estudios lingsticos, enmarcados en problemticas relacionadas con contextos globales y locales, y sus desafos. He tomado como asunto la migracin internacional y como ncleo de estudio la cuestin de la identidad en un espacio transnacional.

Al respecto he concluido que el anlisis terico de Hall en el contexto entre lo global y lo local y el tercer paradigma propuesto por Alessandro Duranti para estudios de Lingstica antropolgica son productivos para estudiar la identidad desde una perspectiva (etno)lingstica. Dado que Hall entiende la identidad cultural como un proceso de recuperacin cultural mediante el cual se da la narrativa de la identidad. Lo que conduce a estudiar 1) el proceso de reidentificaran y reterritorializaran y 2) el discurso de la representacin de la identidad a partir de los sujetos. A partir de lo cual propongo estudiar la identidad problematizando el trmino (etno)lingstica, entendiendo la lengua como uno de los recursos semiticos para la produccin del significado de las palabras que se generan en los procesos sociales, entendiendo que el individuo por medio del lenguaje, significa su identidad.Por otra parte, he presentado un panorama de la migracin internacional en Uruguay, tomando el caso de la comunidad peruana en Montevideo. Planteando as, cmo los estudios de la Lingstica antropolgica contribuyen al estudio de los procesos sociales. En este caso, el conocimiento de la migracin internacional y los nuevos asuntos que esta implica; prestando atencin al contexto social de Uruguay como sociedad receptora de migrantes; reflexionando sobre el proceso de integracin social y construccin de la identidad individual y colectiva con una perspectiva lingstica de derechos humanos. Finalmente, esta reflexin terica y la propuesta de Duranti segn la cual el tercer paradigma en los estudios de Lingstica antropolgica se pregunta en qu contribuye el estudio de la lengua a la comprensin de la problemtica sociocultural que quiere investigar? me han conducido a nuevas preguntas: Por qu lo tnico importa en el contexto global de la dispora?; est la cuestin de la identidad cultural en el debate poltico en Uruguay?; cmo se aprende sobre la migracin en las escuelas? Dada las leyes 18.250 y 19.254, hay en los planes de estudio actual la enseanza-aprendizaje sobre la migracin reciente? Si hay nios migrantes, se considera la enseanza de la lengua para los no hispanohablantes? En cuanto a los nios migrantes hispanohablantes, se considera la variedad lingstica como concepto de lengua? Entendiendo que una lengua es la suma de sus variedades.BibliografaBarth, F (Comp.) (1976). Los grupos tnicos y sus fronteras. La organizacin social de las diferencias culturales. Mxico: Fondo de Cultura Econmica.

Bartolom, M. A. (2006). Los laberintos de la identidad. En: Procesos interculturales. Antropologa poltica del pluralismo cultural en Amrica Latina. Mxico: Siglo XXI.

Bazalote, A; Ramos y M; Valverde, S (Eds.) (2003). La Antropologa y el estudio de la cultura. Buenos Aires: Biblos.

Berganza y Purizaga, (2011). Migracin y desarrollo. Diagnstico de las migraciones de la zona norte de Per. Regiones de Tumbes, Piura, Cajamarca y Lambayeque. FALTA EDITORIAL

Bhaba, H. (2002). El lugar de la cultura. Buenos Aires: Ediciones manantial SRL.

Comunicacin e Informacin Pblica Ministerio de Relaciones Exteriores. (2015) Informe sobre implementacin de la Ley N 19.254 residencias permanente Mercosur y familiares de uruguayos extranjeros. Tomado de: http://www.mrree.gub.uy/frontend/page?1,embajada-eeuu,ampliacion-embajada,O,es,0,PAG;CONC;442;5;D;informe-sobre-implementacion-de-la-ley-no-19-254-residencia-permanente;1;PAG; [Rescatado el 30-2-2015].

Diconca, B y Campodnico, G (Comps.) (2007). Migracin uruguaya: un enfoque antropolgico. Uruguay: Universidad de la repblica.

Diconca, B. y De Sousa, L. (2012). Caracterizacin de las nuevas corrientes migratorias en Uruguay. Inmigrantes y retornados: acceso a derechos econmicos, sociales y culturales. Montevideo: Ministerio de Desarrollo Social.

Duranti, A. (June 2003). Language as Culture in U.S. Anthropology; Three Paradigms. In: Anthropology 44(3), (pp.323-347).

Fanon, F. (1963) Los condenados de la tierra. Mxico: Fondo de Cultura Econmica.Gumperz, J.J., 1962 (1984), Tipos de comunidades lingsticas. En: Paul L. Garvin, P. y Lastra de Surez, Y. (Eds.), Antologa de estudios de etnolingstica y sociolingstica, 2a. ed. (pp. 234-246). Mxico: UNAM.

Hall, S (2010). Sin garantas: trayectorias y problemticas en estudios culturales. E. Retrepo, C. Walsh y V. Vich (eds.). Bogot: Pontificia Universidad Javeriana; Quito: Universidad Andina Simn Bolvar; Lima: Instituto de Estudios Peruanos.

Instituto Nacional de Estadsticas. (2006). Encuesta Nacional de Hogares Ampliada. Montevideo: INE.

Instituto Nacional de Estadsticas. (2011). Censo de poblacin y viviendas. Montevideo: INE.

Jameson, F y iek, S. (1998). Estudios Culturales. Reflexiones sobre el multiculturalismo. Buenos Aires: Paids.

Koolhaas, M. y Nathan, M. (2013). Inmigrantes internacionales y retornados en Uruguay: magnitud y caractersticas informe de resultados del censo de poblacin 2011. Uruguay: OIM-INE.

Ley 18.250. Migracin. Poder Legislativo de la Repblica Oriental del Uruguay. Montevideo, 17 de enero de 2008.

Ley 19.254. Residencia permanente en la Repblica. Poder Legislativo de la Repblica Oriental del Uruguay. Montevideo, 04 de septiembre de 2014.

Macadar, D. y Pellegrino, A. (2007). Informe sobre migracin internacional en base a los datos recogidos en Mdulo Migracin de la ENH ampliada en 2006. Montevideo: Instituto Nacional de Estadsticas.

Organizacin Internacional para las Migraciones (2011). Perfil migratorio de Uruguay 2011. Buenos Aires: OIM.

Organizacin Internacional para las Migraciones (2012a). Perfil migratorio del Per 2012. Lima: OIM.

Organizacin Internacional para las Migraciones (2012b). Panorama migratorio de Amrica del Sur.

Pellegrino, A. (2001). Migrantes latinoamericanos y caribeos. CEPAL/CELADE y Programa de poblacin. Facultad de Ciencias Sociales. Montevideo: Universidad de la Repblica.

Pellegrino, A. (2009). Las migraciones internacionales. Impacto en el Mercosur: tendencias y caractersticas. En: Las migraciones humanas en el Mercosur. Una mirada desde los derechos humanos. (pp. 17-26). Montevideo: Observatorio de Polticas Pblicas de Derechos Humanos en el Mercosur.

Ratha, D. y Shaw, W. (2007). South-South Migration and Remittances. Washington, DC: Banco Mundial.

Taks, J. (2010). Antecedentes y desafos de las polticas de migracin en Uruguay. En: Zurbriggen, C. y Mondol, L. (Coords.). Estado actual y perspectivas de las polticas migratorias en el Mercosur. (pp. 153-176). Montevideo: Flacso. Es importante explicar que adems de las regiones mencionadas, el Banco Mundial entiende por Sur aquellos pases con ingresos medianos altos, medianos bajos y pases de ingresos bajos. Lo que se opone a pases conformados por pases de ingresos altos.

18