por lee h. baucom, ph.d. -...

Por Lee H. Baucom, Ph.D. Copyright 2000, 2001

Todos los derechos reservados

Por favor, no distribuir

Introducción

En primer lugar, permíteme asegurarte que tu relación puede cambiar, y para mejor. ¿Cómo lo sé? He sido el afortunado testigo de un gran número de transformaciones. . . las relaciones de algunas personas estaban listas para terminarse. Sin embargo, descubrieron la relación de sus sueños.

He trabajado durante una década y media ayudando a las parejas a encontrar maneras de crear y recrear sus relaciones. Durante ese tiempo, mis ideas de lo que ayuda han ido cambiando. Mi compromiso con las relaciones es infalible. Empiezo con la creencia fundamental de que las personas se encuentran unas a otras por razones muy profundas. De hecho, yo diría que la gran mayoría encuentra a la persona perfecta para él o para ella.

Es posible que desee volver a leer esta última frase. Encuentran a la persona perfecta para él o para ella, no a la persona perfecta. Esa persona no existe. La gente, en cambio, parece encontrar a la persona que tiene el potencial de crear una relación ideal. . . y el potencial de crear la relación más dolorosa. ¡Y todo ello en la misma persona!

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NOTAS:

Las personas a menudo vienen a mi oficina convencidas de que han encontrado a su archienemigo. Es claro para mí que están a tan solo un “cambio” de la relación perfecta. Esa es la profunda paradoja de las relaciones. El potencial de la mejor y la peor relación está envuelto en las mismas dos personas. La tarea de la relación es encontrar cómo llegar a la mejor.

El matrimonio es, entre otras cosas, un proceso psicológico profundo que sacude los cimientos de nuestra propia identidad. Somos, de acuerdo con la descripción bíblica a menudo citada, “dos que se convierten en uno”. Esto a pesar del hecho de que todos hemos sido educados en el mito de la “persona resistente”. Probablemente debido a este mito cultural, el matrimonio es a la vez seductor y aterrador. ¿Estás listo para el viaje a la relación de tus sueños?

Espero que te unas a mí en este texto para encontrar el camino a una nueva relación. ¿Creo realmente que las cosas pueden cambiar, aunque solo uno de ustedes haga el cambio? Claro que sí, porque el matrimonio no es de dos personas. Como descubrirás en las siguientes páginas, se trata de un sistema. Y como con cualquier sistema, si impactas una parte del sistema, impactará otras partes. Cambia tu forma de interactuar y cambiarás la forma en que el otro debe interactuar.

Algunos de estos son cambios en el comportamiento y otros son cambios en la percepción. Hay algunas cosas que serás capaz de cambiar en un


NOTAS:

abrir y cerrar de ojos. Otras tomarán tiempo y educación. Pero eso es el crecimiento. . . y el matrimonio se trata en parte de crecimiento.

Notarás que la escritura no es académica. Es una conversación. Obtendrás más provecho de esta conversación si realizas tu parte. He incluido un área a la derecha del texto para tu conversación. Escribe cuando algo te impacta. Discútelo conmigo en tu mente. Anota lo que deseas cambiar en tu relación. El espacio es tuyo para tu conversación. Y cuéntame qué descubres.

Me encantaría saber de ti, acerca de cómo ha cambiado tu relación. También hazme saber lo que te fue útil y lo que no de este e-book. Así que por favor, no dudes en enviarme un correo a [email protected].

mailto:[email protected]


NOTAS:

Capítulo 1 Por qué la terapia de pareja

tradicional falla

Al igual que un sinnúmero de otras parejas, es posible que ustedes ya hayan probado la terapia. . . y que hayan descubierto que su relación no está “fija”. Están en buena compañía. Según varios estudios, casi el 50% de las parejas que buscan terapia acaban divorciándose. Solo entre el 10 y el 20% de las parejas en terapia ve alguna ayuda significativa en el asesoramiento.

¿Sorprendido? Yo lo estuve cuando leí los estudios. Parece que creemos que la terapia es la solución automática para los problemas en nuestra cultura. Estas estadísticas no lo demuestran.

No te dejes atrapar por los números. Las parejas no son el problema. Es la terapia. Hay varios problemas con la terapia de pareja tradicional. En primer lugar, se basa en una suposición errónea central, y en segundo lugar, se basa en una idea que condena a una relación al fracaso.


NOTAS:

La suposición errónea

La terapia de pareja tradicional se basa con mayor frecuencia en la teoría de la comunicación. En pocas palabras, esta teoría dice que si una pareja tiene mejores habilidades de comunicación, tendrá una relación más saludable. Esta teoría asume que el centro de un problema es la incomprensión y falta de comunicación. Arregla la comunicación y habrás solucionado el problema.

A mi criterio, el verdadero problema es el error de percepción. Cómo nos percibimos unos a otros (y a nosotros mismos) crea muchos más problemas que la comunicación. Vamos a pasar una buena cantidad de tiempo analizando este error de percepción en las páginas siguientes.

Muchas parejas entran a mi oficina pidiendo ayuda con su comunicación. Ellos han escuchado (y leído) en otros lugares que este es su problema. Creo firmemente que si solo les enseño habilidades de comunicación, apenas voy a hacerlos más eficientes en sus peleas. Serán mucho mejores en el combate verbal, ¡pero con pocas esperanzas de resolución!

Para mí, la comunicación es más como las cañerías de una casa. Se trata de un método de entrega, un conducto para otra cosa. Cuando las cañerías de una casa funcionan bien, proporcionan los recursos hídricos básicos para los habitantes. Y si esas cañerías están conectadas a un manantial limpio, ¡los


NOTAS:

habitantes reciben agua fresca! Pero si esas cañerías se conecten a la red de alcantarillado. . . ¡eso es lo que reciben!

No me malentiendas. Como pronto verás, creo que la comunicación es un factor muy importante en el éxito de un matrimonio. Sin embargo, no es el factor principal. Es secundario. Aclara los errores de percepción y la comunicación se volverá más fácil. Trabaja en la comunicación primero y los errores de percepción envenenarán la comunicación.

Sin embargo, la terapia sigue insistiendo en trabajar desde el modelo de la comunicación. Hemos creado grandes recursos para ayudar a la gente a comunicarse mejor, pero como los estudios lo demuestran, esto no se traduce en mejores matrimonios.

Un ejemplo

A muchas parejas –siempre con buenas intenciones– les han enseñado a usar oraciones con “yo”. Puede que conozcas el patrón: “Yo me siento _____ cuando tú ______. A mí me gustaría que tú hagas _______ en su lugar.” Llena los espacios con una emoción, una acción y una acción preferida. Esa es la fórmula y, según muchos, la panacea para que las parejas tengan un matrimonio feliz.

El problema es que cuando se utiliza una oración con “yo”, la otra persona todavía sabe que estás


NOTAS:

enojado. Después de que se utiliza un par de veces, la afirmación “yo” tiene la misma respuesta defensiva que las discusiones creadas con el pre-“yo”.

La terapia está llena de trucos y técnicas que se ocupan de los problemas de comunicación en la pareja. El problema es que estas ideas no funcionarán a menos que las cuestiones básicas de la percepción y la comprensión se desarrollen primero.

La idea desafortunada

La terapia de pareja está estrechamente relacionada con la terapia individual. De hecho, la mayoría de los terapeutas de pareja son terapeutas individuales que deciden ver parejas. Incluso los terapeutas familiares a menudo se encuentran atrapados en la trampa de la psicología individual.

No hay nada necesariamente malo con las ideas de la terapia individual. Mucha gente la ha encontrado muy útil para mejorar su vida. Pero esas ideas fueron para ayudar a un individuo, y no a una pareja. Eso crea la trampa.

Así que aquí está la trampa: la psicología ha sido durante mucho tiempo la fuerza cultural que empuja a la gente a ser más de lo que es, para encontrar el enriquecimiento y la felicidad (“auto-actualizarse”, de acuerdo con las ideas de Abraham Maslow). No hay un problema inherente con esto. . . excepto en la forma en


NOTAS:

que compite con el objetivo de asesoramiento de la pareja, para que la relación sea lo más que puede ser.

Si bien estos dos objetivos no son necesariamente polos opuestos, pueden estar compitiendo. Si una persona en la relación siente que no está recibiendo todo lo que quiere de la vida, y la relación es parte de eso, las metas entran en competencia. Surge la pregunta: ¿quieres buscar la felicidad al dejar la relación o al honrar un compromiso con la relación y hacer que esta sea lo mejor que puede ser, lo que puede conducir a la felicidad personal?

Un buen terapeuta de pareja está plenamente comprometido con la relación. La felicidad personal se persigue a través de la relación, y no por la eliminación de la relación primero. Si bien cualquier persona realista reconocería que no todas las relaciones se pueden salvar, la buena terapia de pareja funciona bajo la suposición de que sí se puede, y después espera a ser probada de lo contrario.

Si no la terapia de pareja, ¿entonces qué?

Buena pregunta. En realidad, creo que la terapia puede ayudar. Pero tiene que ser una terapia dirigida en la dirección correcta. El contenido de este libro se ha creado con base en mi trabajo con parejas y mis estudios de lo que funciona.


NOTAS:

Es posible que una pareja encuentre maneras de mejorar, como mis clientes lo han comprobado. Sin embargo, es muy difícil si el punto de partida es la comunicación. Esto limita el potencial de cambio, debido a que aísla el problema a un área que es realmente un síntoma. La mayoría de las personas que vienen a mi oficina con ganas de trabajar en la comunicación ya saben cómo comunicarse.

El verdadero problema de la comunicación es que se ha vuelto destructiva. Ya no se trata de una función útil y de conexión para la pareja. La restauración de la conexión tiene menos que ver con la comunicación y más con el esclarecimiento de las percepciones erróneas. Verás que hacer frente a estos errores de percepción es un tema central en el texto siguiente.


NOTAS:

Capítulo 2 Pasando del tú y yo

al NOSOTROS

Los matrimonios exitosos son relaciones que han pasado al NOSOTROS. En más de quince años de ver parejas, aún no he visto una sola relación fallida que se basara en el NOSOTROS. De hecho, el rasgo central de los matrimonios fallidos es su fracaso en evitar la Trampa del Tú/Yo.

La Trampa del Tú/Yo puede ser sutil, pero es altamente destructiva. Cuando las parejas se ven atrapadas en la trampa, cada uno está preocupado por lo que él o ella están obteniendo de la relación. Es como un balance general o un libro de contabilidad: ¿ambos lados son iguales a cero? Si no es así, el que pierde se siente mal. Las empresas exitosas se construyen sobre un balance general. Los libros de contabilidad los mantienen. Los negocios sobreviven con base en estos principios contables.

Las relaciones exitosas nunca se basan en un libro de contabilidad. Un viejo adagio dice que el matrimonio no es 50/50, sino que es 100/100. Esto se refleja aquí. A veces uno da más y a veces el otro da


NOTAS:

más. Al final, no se trata de encontrarnos en el medio. Se trata de ir más allá.

La idea del libro de contabilidad es destructiva en un matrimonio debido a que niega la realidad de un NOSOTROS. Si bien puede tener un lugar en las amistades, rara vez un matrimonio puede sobrevivir manteniendo ese libro de contabilidad a largo plazo. El NOSOTROS es destruido por llevar el registro. El matrimonio nunca es un “ojo por ojo”.

(Y por cierto, “darlo todo” por el otro es exacto en raras ocasiones. A veces caemos en la trampa de ser mártires. El balance todavía puede estar allí. En otras palabras, los mártires tienen poder, a veces más que cualquier otra persona. “Después de todo lo que he hecho por ti” es un comentario que apunta hacia el libro de contabilidad y no al contrario).

Entonces, ¿qué es el NOSOTROS? NOSOTROS no es fácil de señalar. Es una entidad invisible pero muy real. Al tratar de crear un entendimiento, a menudo lo comparo con la idea de negocios de la creación de una empresa. La gente “constituye” a fin de crear una nueva entidad, una entidad comercial.

Una empresa solo existe sobre el papel, puede ser tratada como una entidad real. Procedimientos contables, procesos legales y el trabajo cotidiano construyen y refuerzan la realidad de la empresa. Cuanto más la empresa es tratada como una entidad real (recuerda, la palabra corporal se refiere al


NOTAS:

cuerpo), más real se vuelve. Las empresas toman sus propias personalidades y realidades.

Asimismo, más de un matrimonio es tratado como una entidad real, un NOSOTROS. Cuanto más real se vuelve para la pareja y otros, la entidad más adquiere su propia personalidad. El matrimonio comienza a crear límites que protegen el NOSOTROS. La relación toma la estabilidad que es imposible de alcanzar sin este sentido. Hay algunas cosas que se interponen en el camino del NOSOTROS. (Encontrarás más información sobre los límites y la estabilidad más adelante en el libro).

Controlado/Controlador

Una de las dinámicas que nos mantiene lejos del NOSOTROS es quedar atrapados en una trampa marital común: Controlado/Controlador. Este es el juego: uno trata de controlar al otro, y el otro se permite ser controlado.

“Sharon” y “Bert” vinieron a mi oficina con mucho dolor. Habían disfrutado de una relación amorosa, pero algunos patrones comenzaban a erosionar sus sentimientos. Sharon y Bert trabajaban juntos en un negocio que Bert había creado. La empresa le daba a Bert una gran satisfacción, pero pesaba sobre Sharon.

Sharon funcionaba como personal de apoyo, y Bert era el corazón del negocio. Bert funcionaba como


NOTAS:

“jefe” en el trabajo, y le costaba apagar el interruptor en casa. De hecho, era en parte una cuestión de personalidad. Le gustaba estar a cargo. Más exactamente, tenía que estar en control.

Como el ingeniero estereotípico, Bert tenía un gran desprecio por el desorden de la vida. Él prefería lo manejable y controlable. Y así, los problemas de control surgieron en la relación.

El comienzo fue con el embarazo de su primer hijo. Bert ya estaba pensando en 18 años por adelantado y se le fijó en la mente la matrícula de la universidad. Se asustó y se refugió en el trabajo. Sharon trató de mantener el ritmo, pero el trabajo no era su amor. Pronto comenzó a sentir el resentimiento.

Eso se cultivó durante años y a través del nacimiento de dos hijos más. Finalmente entró en erupción, y Sharon comenzó a empujar contra cualquier sugerencia o petición de Bert.

A veces, Bert expresaba su preocupación por Sharon. Sharon perdió el interés y solo sintió el control. De hecho, su relación se empantanó rápidamente en una lucha por el control. Por ejemplo, al dirigirse a una reunión, Bert ofreció llevar a Sharon. Le preocupaba que ella pudiera beber alcohol y se pusiera a sí misma (y a la empresa) en situación de riesgo. Se ofreció a llevarla, y Sharon inmediatamente se enfureció frente a su intento de “controlarla”.


NOTAS:

Bert logró expresar su preocupación. Ella lo interpretó como control. El problema era que a Bert le gustaba tener las cosas bajo control. Nunca se imaginó que “bajo control” no equivalía a “control del otro”. La respuesta de Sharon fue rebelarse. Acabó bebiendo y conduciendo esa noche, solo para que sirviera de lección.

Tuve otra pareja que vino a mí. “Sue” tomaba las decisiones. Decidía en lo que iban a gastar y dónde lo gastarían. A “Bob” no se le permitía una voz. Si necesitaba algo, tenía que “defender su caso”. Sue incluso mantenía una lista de reglas para Bob. Le ayudaba a saber cómo debía comportarse y sobre lo que debía tratarse su vida.

En varios momentos de su carrera, Sue decidió que Bob necesitaba un mejor trabajo. Bob dejó puestos que amaba por algo “mejor” (dícese, algo más prestigioso). La mayoría le dejó sintiéndose miserable.

Cuando Sue y Bob vinieron a mi oficina, Bob estaba cansado del ciclo. Se encontró retrocediendo más y más. Finalmente, terminó en los brazos de una compañera de trabajo. Fue entonces cuando se dio cuenta de lo avanzados que estaban los problemas.

Cuando los tres hablamos, a Bob rara vez se le permitía tener su opinión. Cuando él expresaba sus sentimientos, Sue respondía: “En realidad, no te sientes de esa manera”.


NOTAS:

La principal queja de Sue era lo poco que Bob compartía con ella, sobre todo acerca de sus sentimientos. Por lo general, él simplemente respondía con un “no sé”.

Cuando hablamos de las reglas escritas, Sue respondió: “Yo solo quiero que sea lo mejor que puede ser”. En cambio, Bob comenzó a ignorar las normas a escondidas y a actuar como un niño.

Esto tiene sentido, ya que Sue lo trataba como a un niño, como si fuera su madre. Cuando uno es la “madre” o el “padre”, el otro se convierte en el “niño”. Y una vez que el rol se ha puesto en marcha, el resto es inevitable.

He aquí el porqué: los niños crecen bajo el cuidado (y un poco de control) de sus padres. En algún momento, el niño comienza a empujar contra el control, a rebelarse. La rebelión es lo que ayuda a que el niño se vaya de la familia. Es la progresión natural. Empezamos con un niño que necesita ser cuidado, tener reglas. Ese niño será un adolescente que desprecia las reglas.

Lo mismo sucede en un matrimonio. Cuando uno se pone en el papel del padre, el otro puede desempeñar en el papel de niño, pero eso solo durará un cierto tiempo. Con el tiempo, habrá un “niño” rebelde enojado que se va a distanciar.


NOTAS:

Además, controlar a otra persona no suele ser el objetivo. Normalmente, la verdadera intención es controlar el mundo que nos rodea. El cónyuge simplemente pasa a ser el más cercano. Así que el cónyuge se convierte en el objetivo.

La necesidad o el deseo de controlar casi siempre se basan en el miedo. El miedo es raramente racional, es una fuerza dominante. Las personas pueden temer ser dejadas o perder algo. También pueden temer ser controladas, la pérdida de su propio control. En todo caso, las personas pueden engañarse a sí mismas en la creencia de que al tratar de controlar al otro, se evitarán estos sucesos. A veces, irónicamente, el control consigue exactamente lo que se estaba evitando.

Al tratar de controlar, las personas no tienen en cuenta la capacidad de otros de actuar de manera impredecible. A medida que uno intenta controlar, las áreas que pueden ser controladas empiezan a escasear, ya que la otra persona escoge respuestas que quizás no se le hayan ocurrido a la persona controladora. Al final, el intento de controlar es frustrado, a menudo con la persona sintiendo una falta total de control.

Es fácil ver el proceso evolutivo: uno intenta controlar y no tiene éxito, lo que alimenta el temor de perder el control. Este miedo a perder el control lleva a intentar un mayor control. La lección que demuestra que el control no funciona de alguna manera se pierde.


NOTAS:

Y el ciclo se repite con los intentos de control frustrados, elevando el temor, etc.

Por cierto, “se necesitan dos para bailar el tango”. Para tener la relación de controlador/controlado, uno debe estar de acuerdo con controlar y el otro con ser controlado. No quiero decir que este sea un acuerdo consciente. Funciona en un nivel más profundo. Es un acuerdo inconsciente. Sucede con el tiempo, desequilibrando lentamente la relación.

Si alguno decide no participar, la relación debe reconfigurarse lejos del vínculo de controlador/ controlado. Y si bien la decisión de participar es inconsciente, la decisión de no participar es siempre consciente. Se toma cuando el patrón se vuelve claro y uno o ambos deciden no participar.

Infra-funcionamiento/Sobre-funcionamiento

Una dinámica relacionada pero separada es el patrón del “infra-funcionamiento” y el “sobre-funcionamiento”. Esto es, uno sobre-funciona en ciertas áreas, permitiéndole al otro infra-funcionar. Uno infra-funciona, obligando al otro a sobre-funcionar. Estas áreas difieren según la pareja, pero pueden centrarse en torno a las emociones de la pareja o los deberes del hogar.

Cuando “Jack” y “Kay” vinieron a verme, fue claro que estaban atorados en este patrón de infra y sobre-funcionamiento. Kay estaba intentando


NOTAS:

constantemente atender las necesidades emocionales de Jack. Ella intentaba hacerlo feliz, animarlo y lograr que él se “abriera” con ella. Jack no tenía emociones. Se negaba admitir cualquier sentimiento (que no fuera molestia frente a las preguntas de ella sobre cómo se sentía).

Kay, por otra parte, cargaba con una cantidad excesiva de ira. También intentó obligarse a estar alegre todo el tiempo. Al final, lo único que logró fue estar enojada y exhausta.

Las respuestas de Jack a los “cómo te sientes” siempre eran “No lo sé”. Y no lo sabía. No tenía por qué. Kay sentía estas emociones por los dos. Su ira era más que suficiente para los dos. Ella seguía intentando llegar a los sentimientos de Jack, lo cual lo relevaba a él de esa responsabilidad.

Por su parte, Jack se negaba a mirar las emociones normales de la vida. En su lugar, obligaba a Kay a hacerlo por él. Esa es la clave. Estas dinámicas fácilmente se vuelven destructivas. Mientras que se culpan uno al otro, ambos participan en la dinámica. En efecto, se necesitan dos para bailar el tango.

El infra/sobre-funcionamiento puede tener lugar en torno a los deberes familiares. Por ejemplo, uno puede encontrarse a sí mismo con la mayoría de las responsabilidades al cuidar de los hijos, el hogar o las finanzas. Una clienta me contó que su esposo nunca


NOTAS:

quiso saber nada con las finanzas. Llevaba la cuenta a casa, se la daba a ella, y ella era responsable de pagarla.

Cuando llegaba el momento de tomar una decisión financiera, él decía “No lo sé, tú sabes lo que tenemos, así que tú decide”. Desafortunadamente, esto significaba que cuando las cosas no iban bien, él podía culparla. Por lo tanto, ella se sentía responsable en exceso por su bienestar económico. Cuando él abandonó la responsabilidad, la colocó toda en ella. Ella tenía que sobre-funcionar para que él pudiera infra-funcionar.

El proceso de infra/sobre-funcionamiento es importante porque a menudo es el comienzo de un cambio en el matrimonio de una manera que con el tiempo debilitará la capacidad de relacionarse.

Cuando “Tom” vino a verme, el problema en su relación tenía raíces profundas. Al principio, la relación de Tom con su esposa estaba bien equilibrada. Ambos tenían carreras que disfrutaban. Ambos disfrutaban pasar tiempo juntos.

Luego del nacimiento de su primer hijo y un accidente de auto, las cosas cambiaron. Tom experimentaba dolor constante por el accidente, y ambos se estaban adaptando a una nueva familia.

Con el tiempo, a su esposa se le pidió que se mudara a otro estado. De hecho, a otro país. Esta inmigración cambió la capacidad de Tom de trabajar.


NOTAS:

No era un problema dado que el trabajo de su esposa les brindaba el sustento suficiente. Entonces, Tom se quedaba en casa, ahora con tres hijos. Se convirtió en el “Señor Mamá”. El problema era que comenzó a hacer todo. Esto se justificaba en su mente como ayudar a su esposa en su carrera.

Pronto, la relación se desequilibró. Tom hacía todo en el hogar sin asistencia de su esposa. Entonces, Tom comenzó a cuidar todo lo emocional de la relación. Al poco tiempo, su esposa estaba respondiendo con dos palabras, o a lo sumo con dos oraciones.

Tom se quedó impactado cuando su esposa le dijo que el matrimonio “no estaba funcionando” y que quería mudarse a un apartamento. La esposa de Tom se había desconectado como resultado de lo mucho que estaba infra-funcionando.

Como respuesta, Tom le envió flores, le envió notas de amor y entró en pánico cuando cayó en la cuenta de que su esposa se estaba yendo. Trabajó duro, sobre-funcionando una vez más en un intento de recuperarla. Establecieron un patrón doloroso y destructivo. Su única posibilidad de recuperar la relación es comenzar a restablecer el funcionamiento entre los dos. Esto no es una tarea sencilla, dado que su esposa disfruta de su falta de responsabilidad en la familia.


NOTAS:

El patrón de infra/sobre-funcionamiento puede centrarse alrededor de las “cuestiones prácticas” de la vida familiar, hacer lo que debe hacerse, cuidar a los hijos, trabajar en la casa, generar ingresos, etc. También puede girar en torno a problemas emocionales: uno que se enfada por ambos, o que está feliz ambos o comprometido por ambos.

Las parejas no deciden entrar en un patrón de infra/sobre-funcionamiento. El patrón surge con el tiempo, a menudo de a poco. Decidir cambiar la relación es una decisión consciente. También puede ser un desplazamiento hacia la salud de la relación.

Todo esto no significa que todo ejemplo de infra/sobre-funcionamiento llevará necesariamente al deterioro de una relación. Algunas parejas pasan sus vidas enteras con este proceso activo. Por lo tanto, me refiero a relaciones en las cuales esto no funciona. Si los dos son felices con la manera en que su relación funciona, seguramente esto no cambie. Sin embargo, si este es el patrón que estás viviendo en tu relación y les está causando problemas, puede que desees realizar un cambio.

Luchas por el poder

Las parejas se encuentran a menudo atrapadas en luchas por el poder. En lugar de entregar el control, ambos están intentando luchar para quitarle el control al otro. Las luchas por el poder son el síntoma más importante de la falta del NOSOTROS en la relación.


NOTAS:

Lamentablemente, la vida le otorga a una pareja abundantes oportunidades de dejar que las luchas por el poder se lleven lo mejor de ambos. Los puntos de lucha se centran con frecuencia en esas áreas que son particularmente personales y simbólicas: sexo, dinero, hijos y carreras.

Cuando en una pareja ninguno de los dos cede, se encuentran paralizados y no pueden avanzar. Usualmente, el triunfo se siente vacío debido a su alto costo. Perder es doloroso por la misma razón. Y “ceder” se siente invasivo en áreas tan personales.

Las luchas por el poder son siempre un síntoma de la falta del NOSOTROS, porque un NOSOTROS no necesita que uno recupere el poder. Ve que ese poder nunca fue el problema. En su lugar, la pareja llega a comprender que ese poder es lo que los mantiene alejados del NOSOTROS.

La lucha es a menudo el resultado de sentirse impotente o abrumado. Mi experiencia indica que cuando una pareja se ve atrapada en una lucha por el poder, ambos se sienten subyugados, y por lo tanto, ambos están intentando recuperar su poder.

La realidad es que ninguno ha perdido poder, debido a que el poder no es el problema. La preocupación es la pérdida de control. Parte de esto es el fuerte sentido de individualidad que tenemos en occidente. Hemos sido criados para protegernos a nosotros mismos, para mantener nuestra autonomía.


NOTAS:

No me malentiendas, como verás en el capítulo sobre límites, no creo que la respuesta sea fusionarse con el otro y perder la identidad.

La respuesta está en ver la tercera opción, la interdependencia, en lugar de dependencia e independencia como las únicas dos opciones.

La dependencia es la pérdida de uno mismo, dando la sensación de sí mismo al otro. La independencia es una negación a dejar que el yo sea impactado. Implica pretender que el otro es innecesario. Esto también es insostenible en una relación.

Qué asunto interesante. Ambos se mueven para capturar el poder porque ninguno siente poder. Probablemente, ambos experimentan una sensación de verdadera impotencia. Esa es la naturaleza de la lucha por el poder. Si se escucharan uno al otro, descubrirían la sensación de impotencia entre ellos. Ambos eligen luchar para ganar poder. El patrón de dos fuerzas opuestas iguales tratando de ganar poder no es la receta para el éxito.

Nuestro sentido de impotencia viene de algo que se mencionó en las primeras palabras de este e-book. Nos criamos en una atmósfera que fomenta el espíritu


NOTAS:

individual. Nos criamos con el mito del “individuo resistente”. Esto está muy bien cuando se trata de destacar el espíritu de un país. Es menos útil cuando estamos tratando de crear una relación duradera.

El poder tiene su lugar. Si eres un encargado, necesitas cierto sentido de poder para hacer bien tu trabajo. Si estás liderando tropas, necesitas saber que responderán. Pero cuando el poder se mete en las relaciones íntimas, el resultado final es destructivo. Los matrimonios se basan en compartir y cooperar, no en el poder.

De nuevo, no me malentiendas. No creo que muchas parejas se encuentren a sí mismas atrapadas en una lucha por el poder por propia elección. Suceden cambios en la relación que la conducen por este camino. Con el tiempo, el cambio se vuelve más y más pronunciado. Cuando ocurre una crisis, lamentablemente, el cambio en el poder siempre aparece. La pareja se las ha arreglado para enfrentarse de maneras dolorosas.

La pregunta no es “cómo llegamos a esto”. Pueden pasarse una eternidad intentando descifrar eso. La pregunta es: ¿cómo salimos de esto?


NOTAS:

Tu turno

Antes de considerar cómo salir de esto, evalúa cómo estas interacciones ocurren en tu relación.

¿En qué grado uno o más de estos patrones emergen en tu relación?

¿Qué papel juegas en el patrón?

¿Qué inicia el patrón? (Por cierto, esta es una pregunta difícil, del tipo “el huevo o la gallina”. El propósito de preguntar esto es que tú examines activamente tu papel en el patrón).

¿Existen otros patrones que ves que debilitan el NOSOTROS?

La física del relacionamiento

Aquí hay una metáfora que puede ayudar. Imagina un velero. A bordo del bote (tu relación) hay dos personas intentando mantener un equilibrio. Probablemente, el equilibrio se siente precario en el bote. Cuando el peso se desplaza hacia un lado, el otro lado debe reflejarlo o siente que el bote se va a voltear.


NOTAS:

Cuando ambos están en posición vertical, el barco se siente muy seguro. La relación está en equilibrio, y ambos pueden sentirse seguros en su existencia. Tampoco es probable que se cansen.

Sin embargo, si uno se desplaza hacia atrás, el bote ya no se

siente seguro. De hecho, a menos que haya algún cambio, se sentirá que el bote está en grave peligro. La clave aquí es que se siente de esta manera. En realidad, este no es el caso. Pero la sensación de peligro crea las acciones que son intentos de estabilizar la relación.

La ansiedad es un sentimiento que surge en todas las relaciones. La ansiedad nos saca de nuestro equilibrio natural. También es la ansiedad la que moldea nuestra relación en la dolorosa dinámica que señalamos aquí.

Cuando aparece nuestra ansiedad, es probable que nos desplacemos en espejo con la otra persona para detener la sensación de peligro. Un desplazamiento en espejo es un cambio en la relación que es igual pero en sentido opuesto a la acción del otro.

Una vez que hemos hecho este cambio, hemos logrado que la relación recupere el equilibrio, aunque sea insostenible. Ambos


NOTAS:

cónyuges se cansarán de su posición. De hecho, ambos se agotarán rápidamente, sin embargo, ¡ambos se aferran para salvar su vida! La estabilidad se evapora de la relación, porque todos están incómodos, pero también están atrapados en un intento de mantener el equilibrio de la relación.

Esa es la mala noticia. La buena noticia es que el mismo efecto puede funcionar en la dirección opuesta. En otras palabras, si alguien que está “colgando” decide trasladarse a una posición vertical, el otro no tiene otra opción más que cambiar de posición.

El cambio hacia una posición vertical puede suceder cuando uno se da cuenta de que es la ansiedad la que mantiene a la gente en esa posición. En verdad, cualquier buen velero no se inclina por un desplazamiento en el peso. Una buena quilla y una forma de barco diseñada decentemente mantendrán el barco de vela en posición vertical. La tripulación puede cambiar el peso para “recortar” el bote y que este sea más eficiente. Esos cambios son temporales y se basan en las buenas prácticas marineras, no en la ansiedad.

A lo que apunta esta metáfora es hacia la “física” de una relación. Hay una interacción entre las dos personas, no un vacío. Por lo tanto, recuerda la física: “toda acción genera una reacción igual y opuesta”. Uno hace un cambio, y el otro tiene que hacer un cambio. Es la forma en que respondemos naturalmente.


NOTAS:

Hacer lo contrario, cambiar conscientemente, significa cambiar lo que se puede sentir como una respuesta “natural”. De hecho, puede significar sentir una gran ansiedad. Con el tiempo, sin embargo, los hábitos cambian. Y por lo menos en una relación, eres libre de violar las leyes de la física.

Enfócate en las maneras que puedes comenzar a desplazar intencionalmente el equilibrio de la relación. Recuerda, cuando los dos están colgando sobre el borde de la embarcación, no hay tiempo para ponerse de pie simplemente. Los movimientos deben ser equilibrados en algún grado. Perder el equilibrio en una relación toma tiempo. Tomará tiempo restablecer el equilibrio.

Mucha gente me dice que el mantenimiento de este equilibrio es el período más difícil. Acabo de hablar por teléfono con una clienta que está tratando de hacer estos cambios. Ella está empezando a volver a equilibrar el barco. Su lugar de cambio está en establecer límites (ver el capítulo sobre límites), a los que su marido no está acostumbrado. Así que él se resiste. Eso debería ser una sorpresa. Nunca los ha tenido. A veces, el cambio lleva tiempo. Dale el tiempo que precisa. Ten la seguridad de que hay otros cambios que ocurren en un abrir y cerrar de ojos.

Tu turno

Para terminar esta sección, considera estos puntos y actúa con base en ellos:


NOTAS:

¿Qué factores han separado continuamente tú y tu cónyuge?

¿Qué ejemplos de tu propia vida te vienen a la mente cuando lees el material, particularmente los dos ejemplos?

¿Cuáles son las 5 cosas que puedes cambiar que comenzarían a equilibrar lentamente? (Asegúrate de que sean a) realizables, y b) lo suficientemente incrementales para no destruir completamente el acto de equilibrio).

Recuérdate que tu pareja y tú no llegaron a este punto de la noche a la mañana, y tomará tiempo y esfuerzo recuperar el equilibrio natural.


NOTAS:

Capítulo 3

Receta para un matrimonio

exitoso

La ilustración anterior es un diagrama de Venn. Viene de las matemáticas, pero no dejes que eso te desanime. No es más que una buena manera de ver los


NOTAS:

elementos, los ingredientes de un matrimonio exitoso. Se muestran los elementos y la interacción entre ellos.

Hay tres componentes: percepción exacta, comunicación clara y acción correcta. Los tres están presentes en una relación exitosa. Cualquier combinación de dos elementos es importante, pero siempre falta algo si no está el tercero.

Percepción exacta

La percepción exacta indica que cada persona ve a la otra a través de lentes bastante realistas. ¿Qué significa “bastante realistas”? En honor a la verdad, como muestra la sección sobre paradigmas, es imposible tener una percepción absolutamente exacta de la realidad. Tenemos muchos lentes que sesgan nuestra visión.

En primer lugar, una percepción exacta en realidad se trata de comprender la visión del mundo o paradigma de un cónyuge. Vamos a buscar la forma de entender el paradigma de un cónyuge más adelante en este e-book.

En segundo lugar, se trata de darse cuenta que nosotros interpretamos las acciones de un cónyuge a través de nuestro propio paradigma, no del suyo. Por lo tanto, estas percepciones son erróneas e incompletas. Así, en tercer lugar, nos esforzamos por mantener de alguna manera nuestra respuesta en equilibrio con las intenciones de nuestro cónyuge.


NOTAS:

La percepción exacta viene de trabajar para ser intencionalmente conscientes de nuestras propias percepciones. La mayoría de nosotros se mueve por la vida sin estar al tanto de la frecuencia con que sacamos hipótesis y conclusiones que son solo en parte basadas en la realidad.

Comunicación clara

La comunicación clara evoluciona de la percepción exacta. De hecho, es imposible tener una comunicación clara hasta que haya una percepción exacta de un cónyuge. La comunicación se nubla demasiado por supuestos y malentendidos.

Como ya he dicho en las primeras páginas, la terapia de pareja siempre ha tenido un problema: pensar que la comunicación es el tema principal. Vuelve a aparecer aquí como problema. La comunicación es el la circulación sanguínea de un matrimonio, pero cuando las arterias se contraen por las percepciones, la circulación se complica.

La comunicación clara es una habilidad. Una gran parte de la habilidad surge naturalmente cuando uno se da cuenta de las percepciones personales. Por ejemplo, tengo una amiga que ve el mundo como si estuviera constantemente enojado con ella. Ella me dice repetidamente cómo tal y cual están enojados con ella y que a ella no le importa que estén enojados. Eso es realmente solo su percepción.


NOTAS:

Al estar en el exterior, soy muy consciente del hecho de que muchas veces el otro no está enfadado en absoluto con ella. En cambio, el otro puede haberle dado una respuesta que simplemente se sintió como enojo para mi amiga. Por desgracia, la comunicación se vuelve turbia. Como mi amiga percibe enojo de la otra persona, se comunica de una manera que funciona con base en esta percepción.

Mi conjetura es que a veces la otra persona sí se enoja con ella, sobre todo considerando que su comunicación se basa en la percepción de que están enojados. Por último, se produce la respuesta que ella esperaba.

Este no es un ejemplo de una comunicación clara. Está atada a la percepción de la gente, y responde a eso.

Una comunicación clara tiene otros componentes. Una comunicación clara toma tiempo, intencionalidad y ejecución, que se recordará por la sigla TIE. Los tres son necesarios para la salud de la comunicación en el matrimonio.

Hace algún tiempo, leí que el tiempo promedio que una pareja pasa junta en una conversación acerca de su relación por día es, no media hora, no 15 minutos, ni siquiera 5 minutos, sino 3 minutos y medio por día. Esa es el promedio. Eso significa que muchos pasan menos, y muchos pasan más. (Por cierto, si vas a una cita y hablas con tu pareja sobre varias cosas


NOTAS:

durante una hora, piensa en los días que equivale a ninguna discusión.)

Las relaciones no pueden prosperar en 3 minutos y medio por día. Por lo tanto, un factor importante es hacer tiempo para conversar con tu cónyuge. Esta es una prioridad importante que una pareja debe hacer.

En segundo lugar, la comunicación clara tiene intencionalidad. Las parejas deben hacer un esfuerzo consciente para relacionarse juntos acerca de su relación. De lo contrario, una pareja puede tomarse el tiempo y hallarse hablando de trabajo, los hijos, la hipoteca o cualquier otra cosa en lugar de su propia relación. La intencionalidad se refiere a hacer que la conversación incluya la relación.

¿Te has olvidado de cómo hacerlo? Tal vez puedas reflexionar sobre las cosas que hablaban cuando recién comenzaban con la relación. ¿Cuáles son sus esperanzas y sueños? ¿Cuáles son sus preocupaciones y temores? ¿Qué quiere cada uno de ustedes de la vida?

Por último, llegamos a la ejecución, la cuestión de la realización de la comunicación y convertirla en un hábito. Las parejas pueden crear el tiempo y la intencionalidad, y deben llevarla a cabo. La creación continuada de un hábito crea el crisol de la comunicación.


NOTAS:

A menudo, cuando las personas me dicen que se han “distanciado”, lo que me están diciendo es que sus esperanzas, sueños, preocupaciones, miedos y deseos no han sido compartidos en un tiempo tan largo que, sin el conocimiento de cualquiera de ellos, han ido divergiendo. Decide cambiar esto ahora. Siempre estarás más cerca ahora de lo que lo estarás en el futuro. Los caminos divergentes a menudo se separan más y más.

Volviendo a las metáforas, la Teoría del Caos surgió en la física, cuando la más mínima diferencia (1/10000 de una diferencia) en un cálculo cambió por completo el resultado de un modelo de computador meteorológico. Pequeñas variaciones en el comienzo serían imperceptibles en el clima. A medida que los cálculos continúan, las diferencias llegan a ser tan pronunciadas como para hacer que los puntos de partida similares sean imposibles de ver.

El hecho es que las parejas pueden tener solo pequeñas variaciones en las áreas de esperanzas y temores de la vida. Estas diferencias avanzan a una mayor varianza a menos que los integrantes de la pareja se mantengan en contacto uno con el otro. Esa es la acción correctiva. Cuando permanecemos en contacto unos con otros, los “cálculos” se mantienen en el camino, llegamos a “auto-corregirnos” en nuestra relación.


NOTAS:

Acción correcta

Acción correcta es un término tomado del pensamiento budista. Yo lo uso aquí para hablar de relacionarse de maneras intencionalmente saludables. Esto se opone a la acción destructiva. Aquí está la clave: cuando una pareja tiene percepciones precisas, comienza a comunicarse con claridad. Cuando se comunica con claridad, comienza a actuar de manera constructiva. Cuando empieza a actuar de manera constructiva, sus percepciones se vuelven más precisas. Y así el ciclo continúa.

La acción correcta sucede cuando cada persona toma las necesidades del otro en equilibrio con sus propias necesidades. En otras palabras, la acción correcta impulsa a la pareja hacia el NOSOTROS.

Para ser claros, la acción correcta no significa simplemente poner al otro primero. Es una cuestión de equilibrio, una práctica de contemplar el NOSOTROS y actuar en consecuencia.

A veces, la acción correcta nos invita a movernos uno hacia el otro, aun cuando no tenemos ganas. Este es un punto en el que podemos separar nuestro estado emocional y nuestras opciones. (Ver el capítulo, No preguntes si sigues enamorado).

Cuando esperamos que nuestras emociones nos lleven a la acción, podemos movernos a partir de la dirección incorrecta. La psicología ha sabido por


NOTAS:

mucho tiempo que el actuar de cierta manera te puede hacer sentir de cierta manera. En otras palabras, si actúas con amor, comenzarás a sentir amor. Si esperas a sentir amor, es posible que pierdas muchas oportunidades de enriquecer una relación.

Así que la acción correcta nos invita a salir fuera de nuestro patrón normal de sentir y luego actuar. Nos movemos en un sentido de actuación, no a pesar de, sino sin importar nuestro espacio emocional.

No es que crea que las emociones sean inútiles. Simplemente creo que si somos rehenes de nuestro estado emocional, nos hemos limitado a nosotros mismos y al potencial de nuestra relación.

La acción correcta a menudo conduce a un cónyuge alternativo. Ahí es donde puede comenzar el cambio. Incluso si un cónyuge no está deseando cambiar, uno puede cambiar la relación al responder y reaccionar de manera diferente, centrándose en la acción correcta.

Cuando salimos de una relación para ser golpeados por las acciones del otro, estamos muy cerca paralizarnos. Dependemos del otro para alimentar nuestras acciones/pensamientos/sentimientos. Y, dada la naturaleza cíclica de una pareja, esto comienza a ponernos uno en contra del otro. El resultado: dos personas congeladas en acción y emoción, esperando que el otro tome una acción que los libere. Depende de


NOTAS:

cada uno de nosotros comenzar el deshielo. La acción correcta es un camino para revertir esto.

Una vez que la pareja ha invertido el camino, la acción correcta mantiene a la pareja avanzando. Es uno de los lugares que pueden comenzar a cambiar el impulso.

La interacción

Cuando cualquier par de las tres áreas de percepción exacta, acción correcta y comunicación clara están presentes, hay una interacción entre esas dos. Esta interacción es un aspecto importante para poder entender los elementos.

Entre la percepción exacta y la acción correcta hay dirección. Cuando una pareja tiene percepciones exactas y se dedica a la acción correcta, la relación gana dirección. Es propulsada por las acciones, pero dirigida por las percepciones. Hay una dirección clara que se desprende de esta combinación.

Entre la acción correcta y la comunicación clara, hay conexión. La sensación de estar conectados se ve facilitada por la existencia de la acción cariñosa y la comunicación. Esto fomenta el sentido de ser apoyado y amado entre ambos. Esta conexión, de nuevo, comienza a aumentar el sentido del NOSOTROS en la relación.

Entre la comunicación clara y la percepción exacta hay entendimiento. Esta interpretación se basa


NOTAS:

en el hecho de que cada una de las personas se siente escuchada y aceptada.

Sentirse comprendido continúa reforzando el sentido del NOSOTROS, ya que comienza a tejer una sensación de estar “juntos en esto”. Cuando uno se siente comprendido, es muy difícil tener una sensación de “yo contra ti”. La falta de una comunicación clara y percepciones erróneas se prestan rápidamente a una ruptura de la relación. Se hace difícil ver el NOSOTROS.

Tirando para el mismo lado

A menudo nos esforzamos por tener ese entendimiento, conexión y dirección en una relación. Sin embargo, no somos capaces de ver que esto es el resultado de una interacción entre los elementos en que somos menos propensos a centrarnos.

Debemos encontrar el camino hacia la comprensión, la conexión y la dirección entre los elementos, como subproductos. Estos no son los puntos de partida, solamente los resultados.

Los puntos de partida son la percepción exacta, la comunicación clara y la acción correcta. Y centrarse en estos tres elementos en las formas señaladas en este e-book es descubrir los efectos secundarios resultantes, las áreas de superposición en el diagrama de Venn. El resultado final, un matrimonio exitoso, también se observa con la aparición del NOSOTROS.


NOTAS:

Cuando la percepción exacta, la comunicación clara y la acción correcta se encuentran, los resultados son comprensión, conexión y dirección. Cuando estos elementos están presentes, la relación encuentra fuerza y solidez. Y a medida que este proceso continúa, el resultado final es la relación ideal y el NOSOTROS.

Tu turno

¿En qué estás dispuesto a comprometerte para crear tiempo y espacio para la comunicación?

¿Cómo pueden programar tiempo juntos?

o Programar puede ser agendarlo.

o O Programar puede ser disponer de un tiempo en el día para conectarse (antes de irse a dormir, a primera hora de la mañana, durante el almuerzo, etc.)

¿Qué se te ocurrió cuando pensaste en percepciones que interfieren con tu comunicación?

Finalmente, ¿cuáles son las 3 cosas que puedes hacer que serían la acción correcta al relacionarte con tu cónyuge?


NOTAS:

Ejercicio: Yo, tú, NOSOTROS

Este ejercicio examina la forma en que tú y tu cónyuge ven sus vidas superpuestas, lugares que crean el NOSOTROS. Siempre hay partes de la relación que no se solapan. Estas áreas pueden ser diferencias en los intereses. Más que eso, es señal de que los matrimonios no abarcan todo lo que somos.

La cantidad de solapamiento puede variar de pareja a pareja. Realmente, puede haber cualquier cantidad de solapamiento. No hay una respuesta correcta. Sin embargo, los extremos pueden ser problemáticos.


NOTAS:

o

Los extremos de la escala son peligrosos porque están motivados por emociones similares: miedo. Las áreas que apenas se tocan están motivadas por el miedo a la intimidad, a estar conectado. En el otro extremo de la escala, la conexión total, que es una falta de individualidad, está motivada por el miedo a la separación.

Estas posiciones son peligrosas, pero no imposibles. Algunas parejas permanecen juntas sin mucha conexión. Muchos se refieren a esto como una relación de conveniencia.

En el otro extremo, los miembros de la pareja hacen todo juntos. Mantienen una relación de “súper pegamento”. La relación está en peligro cuando uno decide que a él o ella no le gusta todo lo que hace el otro. Debido a la intensidad de esta relación, puede encontrarse rápidamente en problemas.

Las relaciones sanas están menos enfocadas en cuánto es NOSOTROS, y en su lugar se centran en la fuerza del NOSOTROS. Así que el descubrimiento de este ejercicio es determinar hasta qué punto tú y tu cónyuge ven la superposición de arriba.


NOTAS:

A continuación se presentan dos círculos, uno que está marcado “Yo”, y uno debajo marcado como “Tú”. Dibuja otro círculo que haga que cada uno se vea similar a los dibujos anteriores. En otras palabras, utiliza los círculos para representar a tu relación. ¿Cuánta superposición ves? Ese es el primer dibujo. Entonces, haz que tu cónyuge complete el segundo, o complétalo como piensas que él o ella ven las cosas.


NOTAS:

Cuando las parejas tienen puntos de vista similares sobre la cantidad de superposición, es más fácil trabajar en el fortalecimiento del NOSOTROS. Cuando la cantidad de superposición tiene una gran diferencia, la pareja debe encontrar la manera de resolver esa diferencia primero. De lo contrario, los intentos de fortalecimiento serán frustrantes para uno o ambos. La persona que ve menos solapamiento se siente amenazada, y la persona que ve más superposición se siente distanciada.


NOTAS:

Capítulo 4 Encontrar la estrella polar

de tu relación

Uno de mis amores es la navegación a vela. Aunque no estoy calificado para cruzar el Atlántico, he leído acerca de la navegación. En la navegación, antes de la llegada del GPS (y aun hoy cuando las baterías mueren), un marinero utilizaba el cielo.

En el uso de los cielos, hay un componente central: la estrella polar. Sin importar dónde se encontrara, la ubicación de la estrella polar permitía que el marinero se orientara, y lo más importante, determinar hacia dónde se dirigía el barco.

Todos tenemos una estrella polar para nuestras relaciones. Sin embargo, hay algunas estrellas polares que permiten una orientación más exacta. A veces, miramos al cielo y elegimos una estrella que parece prometedora, pero nos llevará por mal camino.

Estrellas polares falsas

Recientemente, le pedí a un grupo de personas que respondiera a esta pregunta: “¿Cuál es el propósito del matrimonio?” El grupo me dio muchas respuestas interesantes, muchas de las cuales considero “estrellas polares falsas”. Aquí está la lista:


NOTAS:

Sexo Hijos Compañía Alivio tributario (¡Quizás no han oído la verdad!) Promesa y compromiso Apoyo Felicidad

Estas no son respuestas atípicas. De hecho, la mayoría de nosotros crecemos y somos criados en ambientes donde estas razones explican por qué nos casamos.

Entonces le pedí a este mismo grupo que calificara los propósitos o razones de matrimonio anteriores en una escala del 1 al 10, 10 siendo el más importante. Esto es lo que ocurrió:

Sexo - 8 Hijos - 8 Compañía - 9 Alivio tributario - 1 Promesa y compromiso - 7.5 Apoyo - 8 Felicidad - 9

Aquí está el problema con la lista que crearon: ¿qué hacer cuando uno o más de estos propósitos ha desaparecido? De hecho, ¿qué hacer cuando falta EL propósito elegido?


NOTAS:

Por ejemplo, cuando una pareja está en problemas, rara vez es feliz. Sin embargo, en la lista anterior, la felicidad califica con un “9”. Así que si no hay felicidad, pero esa ha sido la “estrella polar” de esa relación, termina no habiendo ninguna razón para el matrimonio.

La cantidad de personas que me dicen que están dejando una relación porque “no son felices juntos” nunca me sorprende. Supongo que me he acostumbrado a ella, pero consciente de la tragedia de la misma.

(Una nota al margen sobre la felicidad: un estudio publicado recientemente demostró que las parejas que “aguantan” en lugar de divorciarse cuando están descontentos dicen ser “felices” cuando se los encuesta seis años más tarde. Al parecer, esto tiene poco que ver con lo que ha sucedido en el ínterin. Así que, por supuesto, “aguantar” es a menudo la mejor opción).

Encontrar una verdadera estrella polar

De acuerdo, podemos ver lo que son las estrellas polares falsas. Echemos un vistazo a las verdaderas estrellas polares. Pero antes de “levantar el telón”, recordemos un poco sobre las estrellas polares.

Cuando los marineros navegan, ver la estrella polar no calma las aguas ni detiene la tormenta. Solo significa que el marinero puede encontrar su camino a través del océano áspero. Una estrella polar nos puede guiar hacia puerto seguro. No crea el puerto seguro.


NOTAS:

Conocer tu estrella polar de la relación no va a calmar las heridas, las discusiones o el dolor de una relación. Simplemente va a mantenerla en movimiento hacia delante, hacia mares más tranquilos.

Así que, ¿cuál es la estrella polar de una relación? Después de reflexionar sobre la naturaleza de las verdaderas y falsas estrellas polares, esto es lo que se le ocurrió al mismo grupo:

Superación personal Crecimiento espiritual Equipo Envejecer y amar juntos Ser todo lo que cada uno puede ser

Esta es una agrupación mucho más útil. Cada uno de estos elementos está dentro de nuestro control. Siempre podemos trabajar en la superación personal. A veces, el crecimiento espiritual surge del dolor con más fuerza que del placer. Los equipos pueden funcionar incluso cuando hay una diferencia de opinión. Nos volvemos viejos juntos cuando elegimos hacerlo. Y cuando nos decidimos a ser todo lo que cada uno puede tener, nos movemos en esa dirección.

Pero hay una pieza más de este rompecabezas, lo que considero que es la más verdadera estrella polar: el compromiso. Cuando empezamos con el hecho de que nos hemos comprometido, tenemos espacio para todos los otros puntos de navegación.


NOTAS:

A menudo he tenido parejas que me dicen: “Bueno, si no funciona, siempre podemos divorciarnos.” Mi predicción es que cuando esta es la mentalidad, el divorcio es casi seguro.

Cuando empezamos con la idea de que “estoy en esto a largo plazo” cambiamos de mentalidad. Nos movemos hacia hacerlo funcionar. Como un cartel que vi hace poco señala: “No te quedes mirando el problema, busca un remedio.”

La cultura ha reforzado en nosotros que el matrimonio no es permanente. Hemos creado el “divorcio sin culpa”. Hemos hecho más fácil divorciarse que casi cualquier otro proceso legal. Sin embargo, esto viola el compromiso, que es el fundamento del matrimonio.

Aquellos que nos casamos en una iglesia, probablemente nos comprometimos a seguir casados, independientemente de la salud, los buenos y malos momentos, con dinero o sin dinero, terminando solo con la muerte de uno o el otro. Pero tomamos ese compromiso a la ligera.

Yo diría que cuando el compromiso convierte en la estrella polar de una relación, honramos nuestro compromiso y actuamos de una manera que nos mueve hacia el éxito en lugar del fracaso en las relaciones.

Cuando el compromiso es la estrella polar, diseñamos nuestras vidas para arreglar los problemas en lugar de quedar empantanados. Vemos la relación


NOTAS:

como un reto, no un problema del que tenemos que salirnos.

Tu turno

¿Cuál ha sido la estrella polar de tu relación?

¿Es una estrella polar falsa o verdadera?

Si es una estrella polar falsa, ¿qué significaría para la relación cambiar el foco?

¿Cómo formuló cada uno su compromiso cuando se casaron?


NOTAS:

Capítulo 5 Tres secretos simples para

un matrimonio exitoso

Después de años de observar parejas, tanto exitosas como fallidas, he tomado nota de tres estrategias que parecen ser características de los matrimonios exitosos. Claro, hay otros factores que contribuyen, y no todos los matrimonios exitosos mantienen los tres secretos. La mayoría tienen al menos dos, y muchos tienen los tres. Síguelos y estarás más cerca del éxito.

Estas tres estrategias son, más que nada, cambios de perspectiva que conducen a cambios en el comportamiento. A un nivel más profundo, centrarse en estas tres áreas conduce a mayores cambios en otras partes. Eso sí, estos secretos no son fáciles de implementar. Valen la pena el esfuerzo. Y por cierto, si solo uno de ustedes desea tomar estas acciones, el otro se verá afectado.

Secreto Nº1: Dejar de discutir

Lo sé, puedes estar pensando “sin discusión, no hay comunicación”. Lo sé porque lo he escuchado de innumerables parejas.


NOTAS:

Por desgracia, muchas parejas se encuentran atrapadas en el hábito de discutir, y por lo general con poco éxito. Discutir no es comunicarse.

Discutir, reduciéndolo a lo básico, consiste en dos personas con dos puntos de vista diferentes que tratan de convencer al otro de que están en lo correcto. Se trata de un “tira y afloja” sin ganadores. Discutir tiene éxito en un solo escenario: el tribunal. Allí tendrás un juez para decidir qué punto de vista es el más exacto. Fuera de eso (y los hijos no cuentan como jueces) discutir es un caso perdido. Así que renuncia a ello. Encuentra algo más. ¿Qué más? Haz esta pregunta: “Ayúdame a entender, ¿cómo es que lo ves de esa manera?” Esta es una pregunta poderosa.

La pregunta nos aleja del triunfo y nos guía hacia la comprensión. La pregunta establece que no ven las cosas de la misma manera. Establece la existencia de una variedad de visiones del mundo.

Si bien puede parecer obvio, las parejas parecen olvidar que cada uno tiene una forma diferente de ver el mundo, un paradigma diferente, para usar una palabra de moda. Un paradigma no es ni bueno ni malo, simplemente es. Actúa como un filtro, impidiéndonos ver algunas cosas y haciendo que nos concentremos en otras.

Así que la tarea es comprender la visión del mundo del otro. ¿Cómo él o ella lo ven de esa manera?


NOTAS:

Conviértelo en un proyecto de investigación: ¿cómo ve el mundo mi pareja?

Y recuerda esta distinción crucial: puedes entender cómo alguien ve algo sin estar de acuerdo con él o ella. La comprensión no es lo mismo que estar de acuerdo.

¿No me crees? Considera esto. Es posible escribir un trabajo de investigación (piensa volviendo a la secundaria) sobre Adolf Hitler. En ese documento, es posible considerar todos los elementos que jugaron un papel en quien se convirtió. Es probable que tengas en cuenta los problemas familiares y los asuntos culturales de Alemania en ese momento. Puedes incluso considerar la posibilidad de que Hitler se vio envuelto en algo más grande de lo que podía controlar. Podrías notar todo esto y entender quién era Hitler sin estar de acuerdo con lo que hizo. Si uno puede hacer eso con Hitler, sin duda lo puede hacer eso con un cónyuge.

Secreto Nº2: Centrarse en la complementariedad

¿Recuerdas geometría en el colegio? Si bien es bastante vaga en mi mente, un concepto se destaca: ángulos complementarios. Imagina una línea recta (180°). El dibujar otra línea, lo cual crea un ángulo, deja otro ángulo complementario, que completa los 180°.


NOTAS:

En esencia, estos ángulos se complementan mutuamente. Ese es el núcleo de las relaciones de pareja. Nos completamos, nos hacemos un todo uno al otro. Por lo menos tenemos el potencial para hacer esto. También tenemos la posibilidad de destruirnos uno al otro.

Es interesante (y preocupante) observar la destrucción cuando las parejas se olvidan de cómo se complementan mutuamente. Ya que veo a muchas parejas durante la consejería pre-matrimonial cada año, sé que los integrantes son conscientes de la forma en que son complementarios antes de casarse. Puede que no hayan pensado en ello, pero pueden describir cómo se hacen un todo uno al otro. En otras palabras, ellos pueden hablar de cómo su debilidad es la fuerza del otro y viceversa.

Adelántate algunos años, y la pareja en problemas está en mi oficina. Lo único que me pueden decir es qué tan diferentes (de hecho, opuestos) son. Han perdido el carácter complementario de su relación.


NOTAS:

Por ejemplo, una pareja antes del matrimonio puede decirme cómo él es muy centrado y organizado, mientras que ella es espontánea y amante de la diversión. Qué cuadro del equilibrio, ya que pueden nombrar esto en la otra persona y ver cómo los hace mejores.

Vamos a suponer que regresan dentro de cinco a seis años. La vida les ha pasado factura, y su relación está en problemas. Por lo general vienen con una lista de quejas. Así que oigo que “Él es tan obsesivo. Cada detalle puntilloso tiene que pasar por él. Me está asfixiando.” Después oigo “Ella es tan irresponsable. Siempre llega tarde, siempre cambia los planes y nunca hace lo acordado.”

Sé que esta pareja ha perdido el sentido de la complementariedad. Pues si yo hago una simple pregunta: “¿Qué les atrajo del otro en primer lugar?” siempre consigo una mirada húmeda y lejana en sus ojos y me hablan sobre el enfoque y la organización o la diversión y la espontaneidad.

Como habrás adivinado, cuando se pierde de vista la complementariedad, se empiezan a separar más y más. Cuando las parejas son conscientes de su complementariedad, tienden a acercarse en el tiempo. Ellos encuentran que su vida es cuestión de equilibrio, y el cónyuge ayuda a crear ese equilibrio.

La complementariedad está realmente a un pensamiento de distancia. Recuerda cómo tus


NOTAS:

fortalezas complementan las debilidades de tu pareja. Lo que es más difícil, recuerda cómo los puntos fuertes de tu pareja complementan tus debilidades.

Hay dos métodos infalibles para descubrir las áreas en las que tú y tu pareja son complementarios entre sí. En primer lugar, céntrense en lo que originalmente les atrajo del otro. Estas zonas de atracción a menudo giran alrededor de los puntos de complementariedad.

En segundo lugar, ¡mira los puntos en los que él o ella te están volviendo loco/a! Sí, es cierto. Las áreas de conflicto y frustración a menudo apuntan a las áreas de complementariedad. Mirar estas áreas bajo una nueva luz, tal vez con palabras positivas, puede llevar a que veas las nuevas áreas de complementariedad.

Secreto Nº3: Toma decisiones basadas en lo que es bueno para la relación

Muchas veces nos vemos atrapados en el enlace de decisiones. Si tomamos una decisión que es mejor para mí, nos sentimos egoístas. Si tomamos una decisión que es mejor para ti, nos sentimos menospreciados. A veces, esto nos deja en una situación de perder o perder.

Hay una tercera opción disponible: tomar una decisión basada en lo que es bueno para la relación, el NOSOTROS. Eso crea una forma de evitar el dilema personal y nos obliga a ser más creativos. Por lo


NOTAS:

general, el tú/yo es fácil de crear. La elección del NOSOTROS es menos automática.

Cuando las decisiones se basan en lo que es mejor para la relación, la pareja se ve obligada a tratar a su relación como una entidad real. Esto hace que la relación salga de lo etéreo y la pone en práctica. Este es un ejercicio de gran alcance que puede cambiar la relación de maneras asombrosas.

Tomar decisiones que se basan en la relación impulsa a una pareja hacia un sentido más fuerte del NOSOTROS y crea un fuerte sentido de “estar juntos en esto”. Dado que las decisiones suelen hacer o romper una relación, consolidar este enfoque puede aliviar muchos puntos de tensión.

Esta sencilla técnica se aplica cuando debe tomarse una decisión. Simplemente hazte esta pregunta: “¿Qué sería lo mejor para la relación?” ¡Estate abierto a sorprenderte con la respuesta!


NOTAS:

Capítulo 6 Crea un ciclo ascendente

Las parejas a menudo se encuentran en un ciclo descendente. Con el fin de llegar a su mejor relación, verás que es necesario cambiar el impulso para que la relación se mueva hacia arriba. ¿Recuerdas la física? El impulso es la energía que empuja un objeto en la misma dirección en la que ya se dirige. En otras palabras, adonde sea que se dirige una relación, seguirá en esa dirección a menos que trabajes para cambiarla. La buena noticia es que el impulso funciona en ambos sentidos. Las buenas relaciones pueden recorrer una buena distancia con el impulso que va en una dirección positiva.

El impulso se puede cambiar a través de dos medios: 1) cambio de pensamiento o percepción, 2) cambio de acción. Ambos están entrelazados. Cambiar de acción cambia el pensamiento o percepción, y cambiar el pensamiento o percepción cambia la acción. (Por cierto, no hay que confundir el pensamiento o percepción con sentimientos o


NOTAS:

emociones. Son difíciles de cambiar, como se verá más adelante en el libro.)

La dirección del movimiento depende de ti, si te das cuenta o no. La mayoría de las personas descubren que no han optado por la dirección de la relación, al menos no de manera consciente. En cambio, esta ha tenido la oportunidad de ganar más y más poder y fuerza con el tiempo.

Sin duda, un impulso ascendente toma más energía que simplemente dejar que las cosas adquieran una tendencia descendente . . . al igual que la gravedad. La vida puede ejercer una tracción hacia abajo, pero siempre y cuando mantengas el impulso moviéndose en una dirección positiva, hallarás que la relación mantiene naturalmente esa dirección.

De hecho, la parte más difícil de trabajar en una relación es invertir el impulso y conseguir que vaya en la dirección correcta. Una vez que el impulso ha cambiado, la vida es mucho, mucho más fácil.

Cambio de impulso

Un cambio en el impulso comienza con un cambio en la relación. Y ese cambio en la relación puede ocurrir con una sola persona que haga un cambio en su percepción.


NOTAS:

Es por eso que el subtítulo del e-book es tan importante: “incluso si solo uno de ustedes quiere cambiar”. Una relación puede comenzar a cambiar, incluso si la otra persona no quiere o no puede invertir en el cambio.

Cuando uno empieza a relacionarse de manera diferente, el otro tiene que comenzar a relacionarse de manera diferente. Es simplemente parte de la naturaleza humana. No podemos evitar cambiar la forma en que respondemos cuando alguien cambia la forma en que él o ella están respondiendo a nosotros.

Piensa en un momento en el que estabas atrapado en una relación iracunda, sin embargo, uno de los dos decidió pedir disculpas. De repente, la relación cambia. Es posible que se hayan encontrado conectados de manera que parecen todo lo contrario al momento antes de la disculpa. Cuando uno cambia, el otro tiene que cambiar. Ese es el poder de las relaciones. Estamos conectados de maneras que nos hacen ser afectados por cómo responde el otro.

Como en gran parte de este libro, descubrirás que este cambio se trata principalmente de tomar una decisión consciente de hacer las cosas de manera diferente. A veces a pesar de tus emociones. En otras ocasiones te pediré que encuentres un punto de entendimiento sobre tu cónyuge. Y a veces descubrirás la importancia de elegir cómo y cuándo responder.


NOTAS:

Un cambio instantáneo

Déjame darte un ejemplo de un cambio que fue instantáneo y duradero. Una de mis clientas acudió a mí en parte debido a su matrimonio. Luchó con la relación, y aunque no era una parte de nuestra terapia en un principio, su marido tuvo un papel central.

“Amy” quería más de su marido de lo que “Jerry” estaba dispuesto a dar. Amy estaba molesta porque Jerry tenía más tiempo libre, pero no entendía su necesidad de “tiempo libre”. Ella quería más romance, más atención, más cuidado. No es exactamente una lista de necesidades y deseos nueva o diferente de la de muchas otras parejas.

Amy y yo luchamos juntos para ayudarla a obtener una comprensión clara de lo que quería y necesitaba de la relación. Nos centramos en los cambios que podía hacer que pudieran mejorar la relación. Finalmente, Amy invitó a Jerry a nuestras sesiones.

Para su sorpresa, aceptó. Debatieron sobre la forma en que podrían adaptarse a sus necesidades y deseos individuales en una relación viable. Sin embargo, a pesar de los cambios realizados por parte de Jerry, Amy siguió estando insatisfecha.

El impulso continuó empujando su relación hacia abajo. La insatisfacción de Amy ejerció en una dirección negativa para Jerry. Cuanto menos satisfecha


NOTAS:

estaba Amy con su relación, menos dispuesto estaba Jerry a trabajar para cambiarla.

El cambio se produjo de una manera espantosa. Jerry descubrió un bulto en su garganta. Fue al médico, y rápidamente se encontró atrapado en la telaraña de la comunidad médica. El bulto resultó ser canceroso. Dada la ubicación, los médicos estaban preocupados por la supervivencia de Jerry.

Cuando vi a Amy la siguiente ocasión, había tenido lugar un cambio radical. Se dio cuenta de lo insignificante que parecían los pequeños problemas de cara a la muerte. Los problemas que crearon tanta discordia en su relación desaparecieron. Lo que quedaba era el amor. Amy dijo: “Esas cosas no significan nada cuando pienso en no tener a Jerry conmigo.”

El impulso de su relación cambió y los llevó en una dirección positiva. El cambio ocurrió a raíz del miedo. Podría haber ocurrido en cualquier momento. Cualquiera de ellos podría haberse dado cuenta de lo preciosos que son su relación y su salud. Ambos podrían haberse dado cuenta de que la vida es demasiado importante para perder el tiempo en lo insignificante. Solo tomó una “llamada de atención” para sacarlos del trance.

Mi esperanza es que no esperes por esa “llamada de atención”. A veces llega demasiado tarde, y a veces ni siquiera llega. Y siempre las personas pierden


NOTAS:

tiempo valioso que podrían emplear en una armoniosa relación de amor y de apoyo.

Considera lo siguiente: ¿cómo necesita ser cambiado el impulso en tu relación? Más importante aún, ¿qué cambios estás dispuesto a hacer para crear el cambio? Recuerda, algunos son solo percepciones.

Una percepción que te insisto que cambies es la de que siempre hay tiempo más adelante para centrarse en la relación. Oigo a menudo a padres que han puesto su relación “en un segundo plano” en espera de más tiempo, recursos, energía, etc., para poner en la relación.

La ley del impulso está en movimiento. Esas relaciones comenzarán a ganar más y más impulso en la espiral descendente. Cuando ya la pareja podría optar por poner la relación “en un primer plano”, el impulso muchas veces es más difícil de cambiar. Aviso: dije “más difícil”, pero no imposible.

Haz que mantener un ojo en el impulso de la relación sea tu deseo, no sea que te encuentres que la relación se mueve más rápido en dirección negativa de lo que habías esperado.

Por cierto, la ley del impulso dice que los cambios en el impulso pueden suceder en pequeñas etapas. No tienes que dar vuelta una relación en un instante. En cambio, puedes optar por empujar lentamente la relación en un esfuerzo deliberado y concertado para


NOTAS:

crear un cambio. Un giro de 180° puede ocurrir en una vuelta rápida o en un círculo grande. De cualquier manera, es importante trabajar para lograr ese cambio.

Tu turno

¿Dónde estás?

¿Dónde está el impulso en la relación?

¿En qué dirección se dirige el impulso?

¿Sucedió algún cambio en tu comprensión mientras leías el material anterior? ¿Qué te vino a la mente?

¿Tuviste alguna idea mientras leías cómo cambiar tu percepción sobre tu cónyuge?

¿Qué es lo evita que realices un cambio de perspectiva? (Algunas personas sienten la necesidad de continuar pensando de la manera en que lo han hecho sobre su cónyuge, creyendo falsamente que esto les evitará ser lastimadas).


NOTAS:

Capítulo 7 No te preguntes si sigues

enamorado

El amor está a menudo vinculado con la emoción, no con la acción. Cuando nos preguntamos si todavía estamos enamorados, terminamos preguntándonos si todavía tenemos conexión emocional con la otra persona.

Lamentablemente, incluso la acción de cuestionamiento conduce a más dudas, no menos. Cuando nos planteamos la pregunta, empezamos a reflexionar sobre la pregunta. Cuando reflexionamos sobre la pregunta, a menudo podemos crear la respuesta.

Así que, en lugar de preguntarnos si amamos a nuestro cónyuge, es mucho más útil comenzar a tratar a nuestra pareja como si la amáramos. Al tratar a alguien “como si”, a menudo nos encontramos con que las emociones que sentíamos que faltaban, regresan. La pregunta tiene que pasar de “¿Lo/a sigo amando (emoción)?” a “¿Cómo lo/a amo (acción)?”

La simple tarea de hacernos esta pregunta cambia nuestra perspectiva. Cuando nuestra


NOTAS:

perspectiva cambia, la relación cambia. La esencia de mejorar una relación es por lo general un cambio de perspectiva. Es raro que la gente se “trabaje” a sí misma para llegar a un lugar mejor. En cambio, nos desplazamos hacia allí.

Hazte la pregunta: “¿Qué puedo hacer para mostrar mi amor?” Y aquí está la parte difícil: rara vez tenemos la mejor manera de demostrar nuestro amor al otro. Nuestras acciones por lo general provienen de una comprensión de lo que nos permite saber que somos amados. Y aquí, las especificaciones se dirigen en contra de la regla de oro: “Trata a los demás como te gustaría que te trataran a ti.” Para este punto, puede ser reformulada: “Muestra amor a los demás como a ellos les gustaría que se les mostrara”.

Todos tenemos diferentes maneras de sentirnos amados y aceptados. El problema es que muchas veces asumimos que nuestra forma de sentir amor es también el caso de otros. Hay muchas, muchas maneras de mostrar y de ser mostrado amor.

Algunos encuentran el amor en las palabras y otros en el contacto físico, otros en actos y otros en regalos. Dentro de esos amplios medios, hay muchos detalles específicos. Nuestra tarea como amantes es descubrir cómo el otro anhela ser amado. Esta es la tarea de aprendizaje de cualquier relación exitosa. Descubre esto y descubre los anhelos más profundos de tu cónyuge.


NOTAS:

¿Por qué no a las emociones?

Lamentablemente, todos hemos sido educados en una cultura que considera la noción romántica de que el amor es supremo. Claro, esos sentimientos nos unen en los primeros días de una relación. Pero las emociones no son la “estrella polar” de una relación. La vida no se puede navegar sobre la base de la presencia o ausencia de estos sentimientos. La verdadera estrella polar de una relación es el compromiso, que se basa en la acción, el “hacer” de una relación. Esto a veces implica continuar amando (acción) a alguien, incluso en ausencia del sentimiento de amor.

A un nivel básico, las emociones son reacciones en el laboratorio de química de nuestros cuerpos. Claro que son maravillosas cuando las experimentamos, pero el hecho de que falten no indica la muerte de una relación. ¡Aquí es cuando comienza el trabajo duro!

Aún más importante, cuando las emociones desaparecen, a menudo tratamos de encontrar alguna manera de recuperarlas. Esto es un caso perdido. Te estás moviendo en la dirección equivocada. Las emociones no son el objetivo, sino un efecto secundario (aunque bastante agradable) de la acción de amar.

Cuando uno actúa con amor hacia el otro, de forma natural comienza a sentirse más cariñoso hacia el otro. Los sentimientos siguen a la acción y no al revés. Más que eso, la mayoría de la gente se da cuenta de que es un caso perdido intentar “hacerse” sentir de


NOTAS:

cierta manera. Es más fácil y más eficaz optar por actuar de una manera determinada. Cualquier persona puede “hacerse” actuar de una forma determinada. A partir de esto, los sentimientos surgen casi sin falta.

Muchos de nosotros somos conscientes del hecho de que las emociones fluyen y refluyen en la vida de una relación. A pesar de este conocimiento, parece que lo olvidamos en el día a día. Cuando las emociones desaparecen empezamos a pensar: “Ya no estoy enamorado”. Cuando, en realidad, la relación se encuentra en un patrón de reflujo. El flujo, si se le permite, volverá. Es simplemente la naturaleza de las relaciones cuando no interferimos.

“Entonces, ¿qué debo hacer?”

En este punto, esa puede ser la pregunta que te estás haciendo. Si las emociones son un callejón sin salida, y nuestro primer instinto es el de mostrar el amor de la manera que deseamos ser amados, es posible que te estés preguntando, “¿Cómo puedo mostrarle amor a esta persona?” Dos respuestas: 1) considera lo que la otra persona hace (o hizo) para mostrar amor, 2) ¡PREGUNTA!

Incluso si los dos han perdido la costumbre de tratarse de manera amorosa uno al otro, es posible que tengas la oportunidad de pensar de nuevo en cómo se expresaba el amor antes en la relación, y en particular durante los períodos en que se puso de manifiesto el sentimiento de amor. Esto puede darte algunas pistas


NOTAS:

sobre cómo la otra persona se siente amada. Si muestras el amor en formas en que se te muestra amor a ti, puedes descubrir la clave de la mejor manera de mostrarle amor a esa persona.

Y lo mejor de todo, PREGÚNTALE a la otra persona como amarla. Piensa en ti mismo, ¿cómo sería si tu cónyuge te preguntara cómo te gusta ser amado? ¿No sería una discusión poderosa? ¿No te haría sentir amado, incluso solo por tener esa discusión?

Una trampa de las relaciones es asumir que tenemos que saber lo que el otro quiere, sino no es auténtica. “Leer la mente” es un estándar un poco alto para exigirle al otro. De hecho, ha sido la muerte de muchas relaciones. Renuncia a pensar en lo que tú o tu cónyuge se “supone” que deben saber y concéntrate en el descubrimiento de lo que tú y tu cónyuge no saben uno del otro.

Las relaciones no pueden sostenerse bajo la ilusión de que el otro debe “saber” si realmente es amor. En cambio, las relaciones sanas se tratan de descubrimiento y crecimiento. Convierte en tu tarea aprender sobre el otro, descubrir sus secretos. Y no te atrapes a ti mismo al esperar que sepa tus secretos. Compártelos. Busca que tu cónyuge comparta sus secretos contigo.

Descubrir los secretos de cada uno es la clave de las relaciones exitosas. Es un proceso de descubrimiento como ningún otro. Este es un cambio


NOTAS:

en la comprensión. Es la diferencia entre ver a un matrimonio en el que ambos están “en la misma onda” y ver el matrimonio como un descubrimiento de la onda del otro.

Tu turno

¿Cuáles son, específicamente, las tres maneras principales en que tu cónyuge se siente más amado? (Considera acciones específicas o modos de responder.)

¿Cuáles son, específicamente, las tres maneras principales en que tú te sientes más amado?

En la semana próxima, ¿cuáles son las 5 maneras en que te comprometes a mostrarle amor a tu cónyuge? (Escríbelas, con fechas específicas).

Cuando las emociones faltan

A veces, las emociones simplemente parecen habérsete escapado. Puedes sentirte completamente incapaz de sentir amor, pasión o cualquier otra emoción hacia tu cónyuge.

¡Te tengo buenas noticias! Hay algunas cosas que puedes hacer para volver a estar en contacto con las emociones que te faltan. Sin embargo, lo primero que debes hacer es comprometerte a aguantar. Como dije en la lección anterior, al hacer la pregunta de si aún amas a alguien se pierde por completo la parte de la acción de ser amoroso.


NOTAS:

Pero más peligrosamente, hacer esa pregunta continúa con la pérdida de la emoción. Puedes llegar a estar tan centrado en la falta de sentimientos que se te pasará la oportunidad de redescubrir las sensaciones.

Reconectándote con tus emociones

Aquí hay varias estrategias específicas para avanzar hacia los sentimientos.

1. Recuerda que en su esencia, los sentimientos y las emociones son cíclicos, algo así como la marea. Ellos entran y salen. Y hay algunas mareas extremadamente altas y bajas. Pero tan seguro como la fuerza de la gravedad, la marea baja pasa a marea alta, y viceversa.

Por lo tanto, cuando los sentimientos decaen, en lugar de preocuparte, escoge esperar. Pronto, los sentimientos se moverán en una dirección más positiva.

No te dejes atrapar en el por qué sucede. Basta con aceptar que es así, y seguir adelante. A veces, un cambio de emoción es tan simple como esperar que las emociones cambien por su propia cuenta.

2. Elige ser juguetón. Cuando la gente comienza a sentirse menos amorosa y cálida hacia su cónyuge, su primera reacción es de retraerse, ponerse seria y trabajar duro para cambiar el sentimiento.


NOTAS:

Esto termina siendo particularmente contraproducente. Pocas relaciones redescubren la pasión por trabajar más duro. Por lo general, el trabajo duro es lo que causa parte de la pérdida de la pasión en primer lugar.

Así que trata de encontrar algunas actividades que podrían ser más ligeras. Inicien un nuevo pasatiempo juntos. Tomen paseos, excursiones, campamentos, etc., juntos. Tal vez puedas pensar en las cosas que solían hacerles reír juntos; nadar desnudos en la piscina, escabullirse en busca un postre, lo que fuera. Recuérdalo y hazlo de nuevo.

3. Recuerda cómo comenzó la relación. Cuando estoy con una pareja que parece haber perdido su calidez, a menudo les hago una pregunta simple: “Háblenme de cómo empezó su relación”. De repente, su actitud cambia del todo.

Si bien en el pasado se criticaban uno al otro, de repente encuentran ojos amorosos (metafórica y literalmente). La sala se transforma, pasando de frialdad y distancia a calidez.

¿Esta conexión es fugaz? A menudo, lo es. Pero vuelve a conectar a la pareja con una sensación que ha olvidado cómo tener. A veces, solo necesitan que se les recuerde que los sentimientos siguen ahí, a pesar de que están enterrados.


NOTAS:

4. Me guardo el método más poderoso para el final. La psicología ha sabido por mucho tiempo que nosotros mismos creamos una parte de nuestra realidad. Sin saberlo, tenemos una gran cantidad de control sobre nuestra percepción de la realidad y las situaciones.

El secreto es conocido como “actuar como si…”Así es como funciona: imagina lo que estarías haciendo si te sintieras diferente, y actúa como si ese sentimiento estuviera ahí. Si sintieras amor hacia tu cónyuge, ¿qué estarías haciendo? ¿Cómo lo estarías mirando, actuando frente a él, respondiéndole? Haz esas cosas.

Lo sorprendente de esta técnica es que funciona en muchas áreas. Cuando alguien está hablando contigo (tu cónyuge incluido) sobre algo que no te interesa, actúa como si estuvieras interesado. Te garantizo que en 5 minutos realmente te interesará.

Cuando te sientes triste o deprimido, actúa como si estuvieras feliz y alegre, incluso con una sonrisa forzada. Dentro de 5 minutos tus sentimientos se habrán alejado de la depresión hacia la alegría.

Este poderoso truco puede transformar radicalmente una relación. Tu tarea consiste en descubrir las muchas maneras en que puedes “actuar como si…” en tu relación. Tu relación se


NOTAS:

transformará porque has descubierto un método para la transformación de tus sentimientos hacia la relación.

Tu turno

A medida que descubres la mejor manera de recuperar las emociones perdidas de tu relación, decide actuar en algunos de los siguientes puntos.

Crea una lista de 10 a 15 maneras en que tú y tu cónyuge se divertían en el pasado.

Escoge una para hacer en los siguientes tres días.

Toma una decisión consciente de no obsesionarte con el hecho de que las emociones no están. En su lugar y como experimento, confía en que las emociones son como una marea, y que la marea sí subirá.

Recuerda cómo comenzó tu relación. Quizás hasta puedas rememorar esos días con tu cónyuge.

Crea una lista de 20 maneras en que actuarías si te sintieras como quisieras sentirte hacia tu cónyuge. Comienza a actuar de acuerdo a ellas.


NOTAS:

Capítulo 8 Cuando las emociones son

equivocadas

A veces, el problema con las emociones en una relación no es que faltan, sino que son equivocadas; no son lo que deberían ser. En vez de amor, hay ira, en lugar de calor, hay frío.

Me gustaría dedicar un tiempo en esta lección discutiendo un patrón muy común que crea gran cantidad de molestias para las parejas. Para muchas parejas, se forma mucha animosidad a partir de este patrón.

Intimidad y abandono

La gente tiene un miedo inherente de dos cosas: la intimidad y el abandono. Tememos que las personas estén demasiado cerca y demasiado alejadas de nosotros. Pero todos tenemos diferentes niveles de este temor, y diferentes cantidades de cercanía y distancia que provocan el miedo.

El equilibrio entre los dos puntos de miedo termina siendo los límites de una relación. Estos dos puntos son conexión y distancia.


NOTAS:

En primer lugar, una breve explicación de cada miedo. La parte del miedo al abandono está relacionada con la preocupación de perder a quienes necesitamos para sobrevivir. Tiene sus raíces en el ser niños indefensos que dependen completamente de otros para toda ayuda, cuidado y crianza.

Desafortunadamente, es imposible para cualquier cuidador, no importa qué tan bueno sea, satisfacer todas las necesidades de un niño indefenso todo el tiempo. (Si eres padre, reflexiona sobre esta realidad.) Así que todos dejamos la infancia con algún nivel de miedo a perder gente que necesitamos desesperadamente.

Si bien este miedo tiene mucho sentido para el niño, es mucho menos útil para el adulto. Este miedo no tiene que ser un miedo racional (de hecho, no lo es) para que afecte nuestras vidas. Cuando somos capturados por el miedo al abandono, tendemos a aferrarnos a la persona que tememos nos dejará.

El miedo a la intimidad está en el otro extremo. Piensa en un niño de dos años. A medida que el niño de dos años está diciendo activamente “no” a cada


NOTAS:

paso, en realidad está estableciendo que es un ser separado y distinto de sus padres.

El temor a esa edad es que uno de los padres abrume al niño. Cuando el niño empieza a ser consciente de su separación, también es consciente de que un padre o madre es mucho más potente y capaz de infligir decisiones en contra de un niño.

Esta misma conciencia que es parte del desarrollo de un niño, descubriendo que existe una separación entre él y el resto del mundo, crea un temor a ser abrumado y perderse en la relación con otro. Una vez más, una respuesta perfectamente adecuada para un niño crea un miedo profundamente arraigado en el adulto de perderse en una relación.

Entre los miedos

Entre los temores de la intimidad y el abandono se encuentran los puntos de una relación: conexión y distancia. Cada relación se esfuerza por encontrar el punto adecuado y saludable entre tener conexión y distancia entre las dos personas.

Desafortunadamente, no hay un punto correcto para el equilibrio. Y, por desgracia, es poco probable que haya una correspondencia entre los dos miembros de la relación. En otras palabras, en diversos momentos, y sobre diversas cuestiones, las dos personas sienten diferentes necesidades de conexión y distancia.


NOTAS:

Con dos personas diferentes, y dos expectativas diferentes de distancia y conexión, el potencial de malentendidos aumenta rápidamente.

Las posibilidades comienzan a emerger. Cuando uno necesita más distancia, el otro puede desear más conexión, y viceversa. Los dos se hallan creando un tira y afloja para regular la cantidad de conexión y de distancia en la relación.

Ahora añade los dos puntos de miedo. Cuando uno necesita distancia, el otro puede descubrir un fuerte miedo al abandono. Cuando uno necesita más conexión, el otro puede descubrir un gran temor a la intimidad.

De repente, la danza de una pareja para mantener la cercanía y la distancia se llena de dificultades. Existen múltiples oportunidades de incomprensión, sentimientos heridos, necesidades no satisfechas y desconcierto total.


NOTAS:

Lidiando con la mezcla

Las emociones a menudo están equivocadas debido a esta poderosa mezcla de interacción. Con el tiempo, la imposibilidad de conciliar distancia y cercanía entre sí se transforma en dolor. Este daño a menudo se basa en resentimiento, especialmente cuando uno o ambos sienten que no se satisfacen sus necesidades.

Debido a nuestra cultura, es particularmente difícil que alguien le diga a otro que él o ella “necesita” algo. Hemos sido educados para rechazar nuestras propias necesidades. Desafortunadamente, esto tiene un efecto bumerán. Terminamos tratando de satisfacer nuestras necesidades de maneras manipuladoras e indirectas.

Los matrimonios se basan en parte en la voluntad de reconocer la existencia de estas necesidades, y enfadarse para satisfacer estas necesidades en conjunto. Y, por cierto, tener necesidades no es lo mismo que ser una “persona necesitada”.

Recientemente tuve una discusión con un grupo acerca de las necesidades. Uno de los miembros sentía que los matrimonios deben ser entre dos personas sin necesidades, independientes una de la otra.

Los pensamientos que compartí revelan que no creo que las personas estén diseñadas para ser islas,


NOTAS:

separadas unas de otras. En cambio, estamos diseñados para tener necesidades y ser necesitados. Si bien esto puede llegar a ser patológico, no es necesariamente así. De hecho, el exceso de independencia puede ser igual de patológico.

Entendiendo la ira

Muchas personas experimentan ira en su relación, pero se encuentran perdidas sobre cómo “deshacerse de ella”, como a menudo escucho. Parte de la dificultad de alejarse de la ira tiene raíces en la comprensión de lo que se trata la ira.

Dado que a menudo sentimos la ira como una emoción principal en una situación dada, empezamos a creer que la ira es la emoción primaria. En otras palabras, creemos que la respuesta de enfado se trata realmente de ira. ¡NO ES ASÍ!

La ira es una emoción secundaria. No es la emoción primaria. Pero como se siente tan fuerte, a menudo ahoga la verdadera emoción primaria. La emoción primaria es a menudo algo en la zona del dolor, desilusión o desaliento.

Esto no quiere decir que la ira no es una emoción importante. Lo es. Te permite saber que una parte de tu ser se siente atacado.

El papel de la ira es proteger al yo, alejar la amenaza percibida.


NOTAS:

Pero cuando nos olvidamos de la emoción primaria, esa emoción nunca se aborda. Con el tiempo, la relación se vuelve cada vez más arraigada en la ira y el resentimiento.

Pero esto pasa por alto la realidad de que la relación no cumple con las necesidades de los individuos. E igualmente importante, no alcanza la realidad de las heridas y decepciones que no se tratan.

La tarea del matrimonio es ir más allá de la emoción de la ira y hacia las verdaderas emociones primarias. Lidiar con las emociones hace que la ira se evapore. Pero cuando las emociones primarias son ignoradas, la emoción secundaria de la ira solo gana más fuerza en un intento de proteger al yo de cualquier daño adicional.

Tu turno

Cuando tu cónyuge te responde con ira, recuerda que esta no es la emoción primaria. Es tu tarea avanzar hacia la emoción primaria, no reaccionar a la ira.

Cuando tú respondes con ira, recuerda que hay una emoción primaria. Trabaja para identificar a esa emoción. Esa es la emoción que debe ser abordada en la relación. La ira a menudo impide que eso suceda.

Además, cambia tu comprensión de la ira de un ataque contra ti hacia la revelación de algo por la


NOTAS:

otra persona. Es un regalo, ¡aunque sea como un puercoespín! Sin embargo, hay algo blando en el interior, porque en realidad se trata de una persona compartiendo algo importante para ella.

Por último, trabaja en la aceptación de la idea de que lidiar con los sentimientos primarios hará que los sentimientos de enojo se disipen por su propia cuenta.


NOTAS:

Capítulo 9 Todos tenemos un

paradigma

Por favor, disculpa que use una “palabra de moda”. Es simplemente la mejor descripción del problema. Un paradigma es un modelo, una forma de ver el mundo. Nos ayuda a procesar la información sin que nos sobrecarguemos. Los paradigmas actúan como filtros, y cuando recibimos información que desafía nuestra visión del mundo, tendemos a ignorarla o reinterpretarla.

Los paradigmas son ni buenos ni malos, simplemente son. La gente no puede existir sin ellos. El reto de cada persona es examinar cuando un paradigma personal está fallando y estar dispuesta a cambiarlo.

Por desgracia, los paradigmas son más fáciles de apreciar en retrospectiva, y no en el momento. Por ejemplo, en un momento en la historia, la gente creía que el sol giraba alrededor de la tierra, el centro del universo.

Cuando los astrónomos observaron el movimiento de las estrellas, su movimiento no


NOTAS:

correspondía a la idea de que todos los cuerpos celestes giran alrededor de la tierra. Las estrellas se movían en direcciones aparentemente erráticas. Esto fue un reto porque la teoría hubiera realizado el seguimiento de los movimientos de manera ordenada.

Los científicos hicieron que sus observaciones “encajaran” en su modelo (o paradigma) del universo. No pudieron dejar que la evidencia desafiara su visión del mundo. Copérnico vio las cosas de manera diferente. Dejó que la evidencia desafiara el paradigma y determinó que la tierra giraba alrededor del sol.

Esta fue una idea revolucionaria en su momento, pese a que ahora podemos mirar hacia atrás y ver lo obvio que es. Pocas personas dirían que el sol gira alrededor de la tierra. Aquellos que lo hacen demuestran el potencial de mantener un paradigma a pesar de la evidencia insuperable de lo contrario.

Paradigmas como el señalado anteriormente se ven fácilmente. Podemos reírnos de aquellos que se negaron a ver la verdad, pero no nos damos cuenta de que todos vivimos en un paradigma. A todos se nos escapan hechos que desafían nuestra visión del mundo. Todos tomamos decisiones basadas en hechos que pueden o no estar completos.

El paradigma de un individuo no es ni bueno ni malo. Es, sin embargo, incompleto. En la universidad, tomé varios cursos acerca de experimentos


NOTAS:

psicológicos y sociológicos. Dos conceptos permanecen conmigo: validez y fiabilidad.

Al examinar un experimento, se considera válido cuando sigue una lógica y tiene sentido internamente. Te preguntas, “¿El experimentador probó lo que dijo que se estaba probando? ¿El experimento fue lógico en su construcción?” Si es así, tienes un experimento válido.

Un experimento es fiable si los resultados se pueden aplicar en cualquier otro lugar que el sujeto del experimento. En otras palabras, ¿los resultados experimentales crean mayor conocimiento que solo dentro del experimento?

Entonces, ¿cuál es el vínculo?

Todos tenemos paradigmas individuales. Ellos son el resultado de nuestras experiencias de vida, género, edad, educación, y una multitud de otras variables. Estos paradigmas son válidos, pero no son fiables. Los paradigmas son válidos porque tienen sentido para nosotros. No vemos las inconsistencias desde el interior del paradigma. Parece lógico y todo tiene sentido. Pero externamente, ningún paradigma es fiable. No se puede aplicar a todas las demás personas.

Yo suelo encontrar las inconsistencias en mi propio paradigma cuando mi esposa señala los lugares donde yo digo una cosa, luego otra, y no pueden ser ambas verdaderas. De repente, tengo que enfrentar el


NOTAS:

hecho de que mi paradigma es imperfecto, y puedo o ponerme a la defensiva o modificar el paradigma.

Podrás recordar de Psicología I la idea de la Ventana de Johari. La idea viene de un investigador, Johari, que creía que todos tenemos partes visibles y ocultas. Estas piezas suelen ser incluso invisibles para nosotros mismos. Hay partes que son visibles y conocidas por nosotros y por los demás. Hay otras partes que son visibles por los demás, pero no por nosotros. Hay partes que son visibles por nosotros, pero no otros. Y, por último, hay áreas que están ocultas, no solo a los demás, sino también a nosotros mismos.

Los paradigmas tienen este elemento. Nuestros paradigmas son un poco conocidos por nosotros, y un poco conocidos por otros. Pero no todo el paradigma es conocido tanto por nosotros como por los demás. Hay partes ocultas, desconocidas. Cuando la gente nos va conociendo, empieza a ver cada vez más la forma en que vemos el mundo. Es allí que otro puede ver las incoherencias de un paradigma.

Pero debemos reconocer que existen aquellas áreas que permanecen ocultas para todos, y siempre lo


NOTAS:

estarán. Esa es la naturaleza de los paradigmas. Operan en el fondo, un “sistema operativo de software”, que limita lo que reconocemos y cómo lo interpretamos. Tiene su lugar. Pero también hay debilidades.

El problema del paradigma

El problema con los paradigmas no es que tengamos uno, es que nos olvidamos de que tenemos uno. Empezamos a creer que nuestra forma de ver el mundo es la correcta, en lugar de una sola manera. Esto ocurre durante toda la vida, pero es particularmente doloroso en el contexto de un matrimonio. La mayoría de las parejas empiezan a asumir que ven las cosas igual. Cuando se hace evidente que este no es el caso, la pareja comienza a tratar de hacer que el otro “se reencamine”, que vuelva a ver las cosas igual.

Esto raramente tiene éxito, ya que ninguno de los dos veía las cosas de forma idéntica en el primer lugar. Claro, las parejas suelen ver muchas cosas de forma muy similar, lo que agrava el problema. Cuantas más cosas se ven de la misma forma, más fácil es asumir que están viendo las cosas por igual.

Un paradigma de los paradigmas de la gente

Cuando una pareja está tratando con los paradigmas del otro, puede ser útil contar con algún modelo (un paradigma) de comprensión. Advierto que


NOTAS:

esto es solo un modelo, y no está destinado a ser definitivo. Se trata de un “paradigma de comprensión” y por lo tanto es limitado.

La gente tiene tres capas diferentes en su paradigma. La capa superior consiste de “cosas” de nuestra vida cotidiana, como películas que nos gustan, libros que leemos, alimentos que comemos. En realidad es un reflejo de nuestras preferencias. En el esquema general de la vida, es lo que le da sabor a la vida. Sin embargo, en el esquema general de una relación, esto puede ser menos importante.

Curiosamente, es aquí que una pareja descubre por primera vez sus diferencias. Terminan sin gustarle las mismas películas, libros, etc. Sin embargo, una relación con alguna profundidad mirará más allá de esto. Cada uno de tratará de beneficiarse y aprender de los intereses del otro.

Las parejas pueden, si lo desean, avanzar rápidamente más allá de esta capa. Pueden decidir hacer las cosas por separado, o comprometerse por una película o un restaurante. Este nivel es el más fácil de navegar.

La siguiente capa comprende nuestra visión del mundo. Incluye nuestra forma de pensar sobre el dinero, lo que hacemos con nuestro tiempo y cómo hacer frente a los problemas.


NOTAS:

Esta es el área en el que a menudo se tropiezan las parejas. Llegamos a creer que estas áreas deben estar en concordancia para que una relación funcione. Este no es el caso. Hay más que suficiente espacio para las diferencias en la percepción y la visión del mundo en una relación. Sin embargo, las diferencias no pueden ser ignoradas. Debe hacerse espacio para ellas.

La capa inferior del paradigma de una persona es la más crucial. Contiene las propias creencias, normas y valores. Las normas son lo que esperamos de nosotros mismos, son la base de cómo vivimos nuestra existencia. Podemos ser capaces de renunciar a la capa superior y media, pero la capa inferior crea la base para la vida.

Cuando la materia de fondo no es muy similar para una pareja, los problemas surgirán. Por ejemplo, si uno de los miembros de la pareja espera honestidad e integridad y el otro no valora esto, los problemas surgirán. Los dos tomarán estas creencias en su comunicación, lo cual tendrá un gran efecto en el resultado de esa comunicación.

Un ejemplo más extremo: si uno cree en la fidelidad absoluta, pero el otro no valora esto, habrá


NOTAS:

una gran división entre ambos. Estos niveles de diferencia son muy difíciles de superar. Cortan la esencia de lo que somos como personas. Afortunadamente, la gente suele encontrar compañeros que tienen puntos de acuerdo muy similares en esta tercera capa.

Es verdaderamente la sección media, nuestra visión del mundo, la que parece darnos más problemas. Cuando las parejas aprenden a navegar por los temas paradigmáticos, a menudo se encuentran en su camino a una relación exitosa.

Tu turno

¿Qué se te vino a la mente mientras leías sobre los tres niveles?

¿Existen áreas en el nivel 3, el área relativa a los

valores fundamentales, que son diferentes entre los dos?

Si hay diferencias, ¿cómo pueden encontrar alguna solución? Existe una diferencia importante entre las sombras de diferencia y ver los problemas fundamentales en direcciones opuestas.

Trate de tomar conciencia de las diferencias en la capa media. Es menos importante resolver esas diferencias, pero mucho más importante tomar


NOTAS:

conciencia de las diferencias. La conciencia siempre precede a la aceptación, que precede a atesorar la diferencia.

Escapando a la trampa del paradigma

Hay una alternativa a quedar atrapado en el fango de los paradigmas que luchan. Esta alternativa requiere un despertar a la existencia e influencia de los paradigmas. Hay varios pasos en este proceso.

En primer lugar se reconoce la existencia de un paradigma. Nuestros paradigmas son el resultado de muchos factores, incluyendo nuestra raza, género, edad, educación, crianza y eventos de la vida. Y puesto que estos y otros factores crean un número infinito de variables, hay muchos paradigmas.

No discuto el hecho de que hay algunos aspectos básicos en que todos podemos estar de acuerdo. Por ejemplo, todos podemos ver un trozo de madera apoyado sobre cuatro patas, y ver fácilmente esto como una mesa sólida. Podemos estar de acuerdo en cuanto a esa definición (aunque la física cuántica podría cuestionar la solidez).

Pero asumamos que estoy de pie detrás de esta mesa. Podría preguntar: “¿Quién puso esta mesa para bloquear mi camino? ¿Quién está tratando de impedirme llegar a donde tengo que ir?” Me he metido de repente en mi paradigma.


NOTAS:

Con la misma facilidad podría haber preguntado “¿Quién puso esta mesa para apoyar mis libros?” Cualquier interpretación puede ser correcta (o ambas podrían ser incorrectas). Es a través de nuestro paradigma que hacemos la suposición.

El hecho es que pocos de nosotros entendemos lo mucho que nuestros paradigmas afectan la forma en que interpretamos el mundo. Algunas personas portan un paradigma de que el mundo no es de fiar. Ellos encuentran un montón de evidencia que los respalda. Otros encuentran el mundo confiable y lleno de oportunidades. Ellos encuentran la evidencia para respaldar esa suposición.

Nuestros paradigmas se convierten en gafas que nos olvidamos que estamos usando. Pensamos que vemos con claridad, pero siempre estamos viendo a través de lentes que alteran la realidad de forma diferente en que otros la ven.

¡Y todo el mundo lleva un par de gafas! Pero la mayoría lo han olvidado. ¿Cuál es tu paradigma? Esto nos lleva al siguiente aspecto de escapar de la trampa del paradigma.

El segundo aspecto es el reconocimiento de que tu propio paradigma no es el paradigma correcto, sino simplemente un paradigma. Una vez que esto sucede, te vuelves libre de ver que otra persona (especialmente un cónyuge) no es el paradigma incorrecto, sino


NOTAS:

simplemente otro paradigma. ¡Ah! ¡La libertad de ese descubrimiento!

¡Todos hacemos lo mejor que podemos!

Cuando me di cuenta, en verdad me di cuenta, de que todos vemos el mundo desde una perspectiva diferente, me di cuenta de algo aún más poderoso: ¡todos hacemos lo mejor que podemos, donde estamos! Eso no quiere decir que todos estamos operando a la capacidad óptima. Más bien, significa que en este lugar en el tiempo, dadas las circunstancias actuales, estamos haciendo lo mejor que podamos. Claro, todos podemos hacer algo más, algo diferente. Pero eso sería al cambiar nuestra comprensión. . . nuestro paradigma.

Si ese cambio sucede para ti, lo que puedes descubrir es una gran cantidad de compasión. Puedes darte más espacio a ti mismo, y a otros, para quedarse a cortos y volver a intentarlo. ¿Por qué? Debido a que esta perspectiva nos permite relajar nuestro lado prejuicioso y aceptar a las personas y a nosotros mismos donde estamos.

Todos operamos desde nuestra propia perspectiva

Mi esposa estaba asistiendo a una conferencia profesional. Todos los presentes eran terapeutas y trabajadores sociales (teóricamente una multitud consciente de sí misma). A la hora del almuerzo, se


NOTAS:

acercó a una mesa de extranjeros a unirse a ellos. Ella preguntó acerca de un par de asientos vacíos. Cada vez, la persona respondió que estaban “reservados”. Mi esposa se dio cuenta de que algunas cosas nunca cambian. De repente, era la secundaria de nuevo. La gente estaba guardando asientos para sus amigos; su zona de seguridad.

Hay una broma: “¿No has oído? ¡Es todo sobre mí!” Y eso es correcto cuando estamos examinando nuestra visión del mundo. Rara vez somos capaces de movernos fuera de nosotros mismos y ver con claridad desde la perspectiva del otro. Lo vemos desde nuestra propia posición.

Por ejemplo, cuando alguien nos critica, nos sentimos atacados al no ver que tiene que ver con la otra persona. Cuando alguien me dice que está enojado conmigo, puedo tomarlo como un ataque contra mí o verlo como una confesión de cómo está el otro. Su ira tiene que ver con ellos. Solo una parte se trata de mí.

Si bien yo soy responsable de mis actos, no es posible controlar la forma en que la otra persona responde a mis acciones. La reacción de la otra persona puede o no estar de acuerdo con mis acciones. Soy responsable, por lo tanto, de mis acciones. Ellos son responsables de sus reacciones.


NOTAS:

Hacértelo A ti vs. hacérselo PARA ellos mismos

Cuando nos sentimos menospreciados perdemos la noción de una distinción importante: el hacértelo a ti vs. hacérselo para ellos mismos. La gente rara vez hace algo a alguien tanto como hace algo para ellos mismos. Incluso cuando alguien ataca a otro, a menudo es en respuesta a la sensación de ser atacado. Se trata de una defensa.

Esta distinción es fundamental. Nos ayuda a darnos cuenta de que incluso los ataques personales no se pueden tomar como algo personal. En cambio, pueden verse en el contexto del estado de la otra persona. Cuando este es el caso, es posible ver más allá del ataque, para ver que la otra persona está respondiendo a cabo de su propia necesidad.

En nuestros momentos más altos, a menudo podemos trasladarnos fuera de nosotros mismos y reconocer el impacto de nuestras acciones y respuestas. Pero en medio de la tensión, esto rara vez es así. Nuestra respuesta más natural es el instinto de conservación. Esto crea la posición de actuar para (en defensa de) nosotros mismos.

Si bien podemos ir más allá de esto de forma consciente (que es la esencia de la empatía), puede ser importante recordar que solo porque la gente pueda ir más allá de sí misma, es posible que no lo haga en cualquier situación dada. Cuando nos sentimos


NOTAS:

menospreciados, es importante entender la diferencia entre a nosotros, lo que nos hace daño, y para ellos, lo que requiere la comprensión de la otra persona.

Lo que esto no significa

Bien, ahora tu comprensión puede estar cambiando. Cuando te sientas atacado o herido, ahora puedes empezar a reconocer el hecho de que el otro está respondiendo a su propia realidad. Puedes reconocer que en realidad se trata de ellos.

¿Eso significa que perdones el comportamiento? ¡NO! Simplemente significa que entiendes el comportamiento por lo que es. Todavía puedes hacer a esa persona responsable de su conducta. Esto nos lleva a la cuestión de los límites, que se encuentra en otro capítulo.

La implicación es que las personas realmente están haciendo lo mejor que pueden, dónde están. La gente rara vez es tan mezquina como la imaginamos. Sus acciones pueden parecer mezquinas para nosotros, pero a menudo tienen otra interpretación para ella. El significado para ella es probablemente mucho más benigno que el que le asignamos nosotros.

También nos quedamos con un claro entendimiento de que todos vivimos desde nuestra visión del mundo. Respondemos de maneras protectoras para nosotros mismos. Esto nos ayuda a cultivar una visión más compasiva de la otra persona.


NOTAS:

A la otra persona se le puede hacer responsable por sus acciones, y al mismo tiempo verla como inocente. ¡Qué paradoja!


NOTAS:

Capítulo 10 Límites: donde empiezas y

terminas

Los límites son un concepto importante. Es un concepto al que se le dedica muy poca atención en nuestra cultura. Me di cuenta de esto cuando me dirigí un taller sobre “equilibrio en la vida”. Una sesión se dedicó los límites. A la semana siguiente, mi teléfono estaba sonando sin parar. Estaba inundado con la gente dándose cuenta de cuánto en su vida giraba en torno a la falta de límites.

En pocas palabras, los límites son los primeros puntos de nuestra definición de nosotros mismos. Las personas con límites pobres encuentran que tienen poca definición de sí mismos. El hecho es que la elección no es entre tener límites o no. Se encuentra entre los límites saludables y límites pobres, que realmente es una elección entre ser dueño de nuestras propias vidas, o que otros sean dueños de nuestra vida.

Límites y estándares

En primer lugar, tengo que hacer una distinción importante que fue hecha por el coach de vida, Thomas Leonard: la distinción entre límites y estándares.


NOTAS:

Los límites son aquellas cosas que no vamos a permitir que se nos hagan, son los “no” de nuestras vidas: “No, no te dejaré…” Los límites permiten que la gente sepa cómo tratarnos, y también le ayuda a ver dónde termina y dónde comienza. Nuestros límites, ya sean débiles o fuertes, enseñan a otros cómo podemos y seremos tratados. Son las instrucciones de cómo otros pueden interactuar con nosotros.

Los estándares son a lo que esperamos estar a la altura. Definen quiénes seremos y cómo actuaremos. Son los “síes” de nuestras vidas: “Sí, voy a ser…” Los estándares crean las instrucciones de cómo vamos a tratar a los demás y a nosotros mismos.

Mientras que se pueden hacer cumplir los límites con los demás, los estándares son solo nuestros. Y por eso, es importante tener clara la diferencia entre los dos. Estándares y límites no pueden ser tratados por igual por este motivo.

Por ejemplo, es posible que crees un límite que consista en esperar total honestidad de aquellos que se comunican contigo. Si encuentras que alguien es deshonesto, entonces el límite se puede hacer cumplir. Sin embargo, no se puede colocar a otra persona el estándar de que será siempre honesta. Puedes esperarlo de ti mismo, pero no de otro.

Hago esta declaración, no como una idea filosófica, sino como una idea práctica. Cuando esperas que alguien sea honesto contigo, está dentro de tu


NOTAS:

control solo en parte. Si descubres su deshonestidad, puedes optar por responder a eso. Pero esperar que la otra persona sea honesta en todos los ámbitos de la vida se vuelve imposible cuando está interactuando lejos de ti.

Los padres a menudo descubren esta verdad dolorosa sobre sus hijos. No importa lo que hagan para inculcar un estándar, un día el hijo deberá adoptar este estándar o rechazarlo. Con los adultos, “inculcar” por lo general no es una opción.

Estableciendo límites en la relación

Estos son los cuatro pasos básicos para establecer un límite en una relación:

Informar

Pedir

Decir

Consecuencia

He aquí cómo funciona: cuando te das cuenta de que tu límite se ha violado, debes actuar para reafirmar el límite apropiado, dándole a la otra persona múltiples oportunidades para rectificar la situación.

El primer paso en el restablecimiento del límite es informar a la otra persona sobre la incursión. Se le hace saber lo que ha hecho (o está haciendo). Y le


NOTAS:

informas con una voz que acorde a reflexionar sobre el hecho de que el cielo es azul, es decir, sin pasión y sin levantar la voz. Sin ira, sin sarcasmo, simplemente decirles lo que han hecho.

Pensemos en un ejemplo por un momento. Supongamos que el límite que sientes que está siendo violado es que te ha gritado. Este es un límite bastante básico. Pero aquí está la otra persona gritándote. Primer paso: (en tu voz desapasionada, lógica) “¿Te das cuenta que me estás levantando la voz?”

En primer lugar, nota que no usé el término “gritando”. Este es un término bastante cargado para muchas personas, y es muy subjetivo. Lo que para ti es gritar puede no serlo para la otra persona, ¡y estará feliz de decirte esto! No te desvíes con esa discusión. Basta con observar que su voz se eleva.

En segundo lugar, asegúrate de que tu tono es el mismo que “¿Te das cuenta de que el cielo es azul?” Eso significa que estás respetando sus límites al no responder con gritos de nuevo.

Para muchas personas, y muchas circunstancias, esto será suficiente. La otra persona va a responder de inmediato al límite y la tranquilidad de tu voz. Pero otros no.

Así que el segundo paso es pedirle que no grite. Así que a medida que continúa, afirmas “Por favor, no levantes la voz cuando me estás hablando”. Una vez


NOTAS:

más, recuerda que el tono de voz de “el cielo es azul”. La razón por la que puedes usar el tono tranquilo y pacífico de la voz es porque sabes que todavía tienes opciones para resolver esto.

Muchas personas se sorprenderán por tu calma al solicitar una acción, y cumplirán. Otras pueden optar por continuar, especialmente si estás fuera de práctica en el establecimiento de tus límites.

Esto nos lleva al tercer paso, decirle a la persona que no viole ese límite. Puedes decir “No puedes elevar tu voz conmigo”. Una vez más, ten en cuenta el tono de tu voz.

Y agregas una parte más. Le informas a la otra persona lo que sucederá si decide no cumplir. “Si no te detienes, me voy de la casa por una hora”. Crea tu propia consecuencia. Solo asegúrate de que puedes vivir con las consecuencias con las que amenazas. De lo contrario, se te hará mucho más difícil establecer el límite en el futuro.

Pero esta persona sigue a pesar de que estás diciéndole cómo te trata. Esto nos lleva al cuarto paso, que se trata de aplicar la consecuencia. Si dijiste que tomarías un paseo, hazlo. Si dijiste que te irías por una hora, hazlo. Si dijiste que colgarías el teléfono, hazlo.

Este formato se adapta a cualquier cantidad de problemas de límites. Recuerda informar, pedir, decir,


NOTAS:

consecuencia, y recuerda tu tono de voz, y tendrás la caja de herramientas para restablecer tus límites.

Un límite que debo mencionar como fuera de los cuatro pasos es el de la violencia física. Si estás herido/a (o casi, o incluso amenazado/a con ser herido/a), tienes que abandonar el lugar inmediatamente. Establece tu límite en esto con una consecuencia inmediata, no tanto para que aprenda una lección (probablemente no lo haga), sino para que estés a salvo.

Una nota final sobre los límites: la mayoría de las personas descubre que cuando se empieza a trabajar en los límites, otros límites que se están violando se vuelven evidentes. Por ejemplo, una clienta que encontraba a sí misma como objeto de gritos, estableció un límite contra eso. Entonces se dio cuenta de que, incluso en una voz no elevada, los insultos no eran apropiados. Cuando llegó a manejar esto, él se puso creativo y comenzó a enviarle cartas para representar las palabras inapropiadas (más creativo en la violación de los límites, diría yo). Ella se mantuvo firme y estableció sus límites. Tú puedes hacer lo mismo.

Por qué los límites son importantes para ti

Así que ahora que tienes una idea de lo que son los límites y de qué se tratan los estándares, te estarás preguntando cómo se aplica a tu trabajo en tu matrimonio. Después de todo, he dedicado un poco de


NOTAS:

energía a exponer la idea de que los matrimonios se tratan de NOSOTROS.

Esta es la regla número uno de salvamento en el agua: no te arriesgues demasiado para salvar al otro. Te tirará hacia abajo y los dos se ahogarán. Cuando las personas trabajan para salvar una relación que lucha, puede que las tiren hacia abajo. En otras palabras, pueden hallar que han perdido su propia identidad con el fin de conservar o encontrar la paz o tranquilidad.

Por ejemplo, en un intento de no agravar a la otra persona, algunos piensan que es mejor no tener una discusión. El resultado final es que la persona pierde una parte de sí misma por ceder, y la otra persona cree que debe estar en lo cierto.

Tuve un cliente que se encontró a sí mismo pidiendo perdón por todo en una relación. ¿Por qué? Para mantener la paz y para que su esposa no se fuera. Con el tiempo, empezó a perder el respeto por él, a verlo como un felpudo. En los otros aspectos de su vida, nada podría estar más lejos de la verdad. Pero en su matrimonio, él había “tirado todo por la borda” para preservar la paz.

Como él cedió en sus límites, ella se adentró más y más dentro de sus límites, causando que él tuviera que dar más. Un día, se le ocurrió que no podía ser un “imbécil”.


NOTAS:

Incluso si él era mayormente un imbécil, eso debe dejar el 10% o más en el que ella tuvo la culpa. Sin embargo, ella se disculpó 0% de las veces. Y puesto que la mayoría de la gente pensaba que era un tipo bastante decente, él pensaba que era posible que ella le debiera una disculpa a él tal vez un 40 a un 50% de las veces.

Eso lo despertó. Ese día, comenzó a restablecer sus límites. ¡Sorpresa! Ella llegó a respetarlo, lo que llevó a un mayor acercamiento una relación saludable.

Este capítulo puede ser la información más importante en este e-book si estás tratando de convencer a un cónyuge de que permanezca en la relación. Si te esfuerces por salvar la relación, y al final, pierdes todo respeto por ti mismo y el respeto del otro, es probable que la relación no se salve.

Sin embargo, si uno de los temas en cuestión es la pérdida de respeto por parte de tu cónyuge, la creación de límites puede comenzar a revertir la marea. Al establecer y mantener límites, va a cambiar el equilibrio en la relación, ayudando a restaurar la salud de la situación.

Ejercicio de límites y estándares

La tarea de este ejercicio es comenzar a examinar las áreas donde haya que extender tus límites. A partir de ese punto, también es posible descubrir las áreas donde se pueden plantear estándares.


NOTAS:

Paso 1: Límites Usa el espacio de abajo para anotar 5 límites que necesitas hacer cumplir o mejorar que se violan sistemáticamente.

1)

2)

3)


NOTAS:

4)

5)

Cuando consideras estos límites, ¿qué sentimientos te invaden?

¿Cómo se relacionan estos límites? ¿Tienen un tema en común?


NOTAS:

¿Cuáles son 5 maneras en que puedes fortalecer estos límites?

1)

2)

3)


NOTAS:

4)

5)

Límites de la relación

Uno de mis clientes señaló la necesidad de que las relaciones tengan límites. Si bien yo ya lo había pensado un poco, me sorprendió ver que había dejado eso fuera hasta que él me lo señaló a mí.

Aquí es donde el concepto de límites afecta al NOSOTROS. Si el NOSOTROS es la entidad creada en un matrimonio, necesita su propia protección: cosas, acciones, etc., que deben ser evitadas o mantenidas a raya. Los límites elegidos crean los puntos de diferenciación entre lo que es aceptable en un NOSOTROS y lo que no lo es.


NOTAS:

Cada pareja debe decidir lo que es aceptable en términos de cómo cada uno interactúa con el mundo. Por ejemplo, algunas personas consideran una violación de los límites de la relación salir a cenar con una persona del sexo opuesto. Para otras parejas, eso estaría bien. En otras palabras, hay una amplia gama de lo que es aceptable o no.


NOTAS:

Capítulo 11 Las prácticas del

matrimonio

Las parejas tienen la oportunidad de hacer conscientemente varias prácticas una parte de su relación. Algunas de estas prácticas se extienden a la vida cotidiana y pueden llevar a la reanudación de la paz en la vida de uno.

No te preocupes. Ninguna es difícil. No te dejarán enredado en la meditación, pero son, en cierto sentido, prácticas espirituales. Son hábitos de la mente que pueden ser alimentados y desarrollados.

Practica el pensamiento del “beneficio de la duda”

A menudo sugiero que la gente cambie la forma en que ve a su cónyuge. Es interesante como a menudo caemos en la trampa de pensar que nuestra pareja en la vida no está de nuestro lado. En lugar de asumir que los malentendidos y los errores no son más que eso, pensamos que estas cosas suceden con intenciones hostiles.


NOTAS:

En la psicología, existe la idea del error de atribución. En pocas palabras, es lo siguiente: cuando alguien comete un error, le asignamos un defecto de carácter. Cuando nosotros cometemos el mismo error, lo vemos como un desliz momentáneo. Nosotros les atribuimos un defecto que no nos atribuimos a nosotros mismos.

El pensamiento del beneficio de la duda comienza con la suposición de que el otro no tenía la intención de hacernos daño. De hecho, se supone que el otro simplemente cometió un error.

En mis reuniones con parejas, esto ha surgido una y otra vez. Uno asume que el otro intentaba hacerle daño. Pero cuando le pregunto al otro, claramente no tuvo intención de causar ningún daño.

Por otra parte, la persona se siente herida porque el otro piensa tan mal de ella. En otras palabras, se devuelve la actitud. Los sombreros han cambiado, pero cada uno empieza a asumir que el otro tiene la intención de ser hostil.

Cuando las parejas viven con base en el pensamiento del beneficio de la duda, cada uno asume ya sea una postura positiva o neutral hacia el otro. Esto significa asumir que el otro no intenta hacerte daño. (Obviamente, estamos hablando de la población en general, ¡y no de los que abusan intencionalmente de su pareja!)


NOTAS:

Dicha posición significa que cuando estamos heridos, podemos comenzar a comprender al otro como causante involuntario de ese dolor. Esto es mucho más benigno, ya que no asigna culpa.

Muchas parejas asumen, sin embargo, la postura opuesta. Ellos asumen que el otro tiene la intención de hacerles daño, que está “apuntando” hacia ellos.

El pensamiento del beneficio de la duda entiende que la mayoría de nosotros operamos primero por nuestro propio interés y en segundo lugar por el interés de las personas más cercanas a nosotros. Cuando nuestra visión del mundo está amenazada, respondemos de maneras que la conservan. Cuando nos sentimos amenazados, respondemos de maneras que intentan minimizar la amenaza.

Por desgracia, parte de la dificultad con el pensamiento del beneficio de la duda radica en la evolución humana. Hace tiempo desarrollamos una técnica de supervivencia de “lucha o huida”. Esto funcionó efectivamente hace mucho tiempo. Cuando la amenaza esperaba en cada esquina, con un dientes de sable a la espera de la cena, el instinto mantenía a los humanos con vida.

El cerebro no puede distinguir entre las palabras de tu cónyuge y un dientes de sable. El cerebro solo registra una amenaza de la cual ser defendido, incluso cuando de las palabras no tienen la intención de


NOTAS:

amenazar. Es por esto que es necesario cultivar el pensamiento del beneficio de la duda.

El pensamiento del beneficio de la duda se pierde normalmente después de escuchar palabras y registrarlas como una amenaza. Una vez que comenzamos a interpretar estas palabras como una amenaza, siempre se registrarán como una amenaza.

Eso es parte de lo que hace al pensamiento del beneficio de la duda una práctica deliberada. No es automático. Debe cultivarse. Parte de esto es ser consciente de que no es instintivo.

Parte del proceso es recordarse a sí mismo de la necesidad del NOSOTROS. Cuando una pareja se centra en ser un NOSOTROS, el pensamiento del beneficio de la duda es mucho más natural y, a la inversa, cuando una pareja ejerce el pensamiento del beneficio de la duda, se mueve hacia el NOSOTROS.

Practica un sentido de gratitud

A menudo, cuando las relaciones se meten en problemas, empezamos a mirar a nuestra pareja, a la relación, incluso a nuestras vidas, desde un punto de ingratitud. Esto crea un ciclo que se perpetúa a sí mismo. La falta de gratitud nos lleva a buscar otras cosas que causan problemas; las demás cosas por las que no deberíamos estar agradecidos. Este es el ciclo que puede convertirse en la tendencia a la baja de una relación.


NOTAS:

La gratitud puede ser cultivada. Cuando empezamos a buscar cosas por las que estar agradecidos, otras aparecen en nuestro foco. Una vez que nos fijamos en algo por lo que estamos agradecidos, otras cosas parecen emerger. Nuestra percepción cambia de muchas maneras, liberándonos para cuidar y amar.

A continuación se muestra un gráfico de esta dinámica en funcionamiento. El punto de partida puede estar en la parte superior o la primera parada de la derecha. A partir de ahí, comienza el ciclo. Una vez que comienza el ciclo es difícil tener en cuenta el punto de partida. Pero tú puedes tomar la decisión de “hacerlo de otra manera”, de ser consciente de cómo proceder.

Practica el perdón continuo

Tal vez el resultado natural del pensamiento del beneficio de la duda y el pensamiento de gratitud es un proceso de perdón continuo dentro de la relación. El


NOTAS:

perdón continuo no espera un “lo siento” para comenzar el proceso de perdonar. Está integrado al tejido de la relación.

Cuando un “desaire” sucede dentro de la relación, es visto como un desaire, no un asalto. Y cuando uno es consciente de lo bueno en el otro, es más fácil superar los momentos en que el otro muestra su humanidad, en los errores.

El perdón no es beneficioso solo para la otra persona. Es beneficioso para el que perdona. De hecho, es probable que tenga un mayor beneficio para el indulgente que para el perdonado. Cuando no nos concentramos en el perdón, empezamos a acumular puntos de dolor a los que nos negamos a renunciar.

Nota: El perdón no es lo mismo que olvidar. Sin embargo, es un proceso de recordar de manera diferente. Es recordar sin estar conectado al dolor. Es recordar a través de ojos sin prejuicios.

De hecho, parte cultivar el perdón continuo es ver a la otra persona como una persona inocente. Tal vez no sea inocente de hacer algo. Sin embargo, todavía puede ser vista como inocente. Hacer y ser son cosas diferentes. Lo que la persona hace y por qué lo hace se separan. Alguien puede ser considerado responsable de una acción, pero aun así ser visto como inocente en su vida. La forma en que experimentamos el resultado es diferente de lo que podría haber sido su intención.


NOTAS:

Creo firmemente que pocas personas en el mundo tienen el único propósito de hacer daño a otro. Los que lo hacen son personas realmente heridas. Más a menudo, se crea el dolor sin querer o como reacción a la sensación de dolor.


NOTAS:

Capítulo 12 El camino hacia la intimidad

En su libro, The Different Drum, Scott Peck describe cómo nos movemos hacia una verdadera comunidad. Después de trabajar con su modelo con grupos, me di cuenta de que también es el camino hacia la verdadera intimidad de una pareja. Después de todo, la comunidad es la intimidad entre un gran grupo de personas. (He cambiado los títulos de las etapas de Peck, y las he aplicado a las parejas en lugar de un grupo, pero estoy agradecido por la inspiración de Peck.)

Hay cuatro etapas hacia la intimidad. Cada una se puede describir y sentir. Por desgracia, el camino no es recto, y ciertamente no carece de falsos caminos.

Etapa 1: Pseudo-intimidad

Aquí es donde todos empezamos. Casi toda relación comienza con la suposición de que “¡Somos iguales!” A veces, una pareja se sorprende al descubrir cosas tan comunes como las comidas favoritas, música, libros, películas, valores y creencias similares. Los integrantes de la pareja se ven el uno al otro con amor, sorprendidos de haber encontrado a alguien con esos intereses y amores similares.


NOTAS:

La pseudo-intimidad se basa en estos mismos intereses. De hecho, las personas pueden encontrar que a veces tienden a ignorar las diferencias, y pueden optar por acentuar las similitudes. Esto mantiene el sentido de conexión y de ser iguales.

El área de la pseudo-intimidad existe en el nivel superior del paradigma personal. A veces, se extiende a las zonas más profundas, pero los primeros puntos de conexión son a menudo alrededor de la capa superior (véase el capítulo sobre paradigmas para una mayor discusión de las capas).

Finalmente, uno toma un riesgo y decide estar en desacuerdo. Esto marca el principio del fin de la etapa de la pseudo-intimidad. Algunas parejas pasan años en un matrimonio antes de correr el riesgo. Otros encuentran esto en la primera cita. De cualquier manera, ambos se encuentran en una nueva relación. Esto conduce a la segunda etapa.

Etapa 2: Caos

De repente, la pareja es consciente de la sensación de, “Cambiaste. Tengo que recuperarte”. Esto sería mucho menos caótico si cada uno pudiera ver que estas diferencias estuvieron allí todo el tiempo, pero todos se aferran a la sensación de ser iguales.

Así que, se establece el escenario. Dos personas que son muy diferentes tratando de conseguir que el otro vuelva a ver las cosas como él o ella lo hizo. La


NOTAS:

etapa del caos está marcada por la lucha improductiva. Cada uno establece su punto de vista, pero no logra escuchar el del otro. ¿Por qué? Ambos están convencidos de que su visión es la visión correcta.

Y así luchan: discutiendo, debatiendo, arengando y suplicando, pero ambos han descubierto su voz y ninguna cede. (¿Por qué iban a hacerlo, ya que se sienten “en lo correcto”?) Al final, ninguno se mueve, pero ambos se sorprenderán de lo rápido que alguien puede cambiar.

Etapa 3: Vacío

Después de la etapa de caos viene la etapa más dolorosa, la etapa en la que es más probable que se abandone la relación. En el vacío, hay un profundo abismo en el estómago. Se siente como si la relación estuviera atrapada y perdida. Sin embargo, a buena noticia es que esto se produce justo antes de la verdadera intimidad, si aguantan.

Si el caos es el descubrimiento de las diferencias, el vacío es el

Etapa Significado

Pseudo-intimidad

“Somos iguales”

Caos “No somos iguales”

Vacío “¡No sé qué hacer contigo!”

Intimidad “No nos parecemos. ¡Genial!”


NOTAS:

descubrimiento de que “No somos iguales, y no tengo ni idea de qué hacer contigo”.

Por desgracia, la etapa del vacío es un punto muy vulnerable para la relación. Las personas a menudo asumen que “eso es todo”, a pesar de que esta etapa está tan cerca de la intimidad. Cuando el estómago se siente al borde del vacío, nos asustamos. Cuando no sabemos qué hacer con nuestra pareja, empezamos a perder la esperanza.

¡Genial! Eso significa que están listos para seguir adelante. No hay esperanza de cambiar a la persona de nuevo a algo que nunca fue. Sin embargo, es posible pasar a algo nuevo. Ese algo puede ser una relación renovada y plena.

Hay que esperar a que transcurra el vacío. No hay manera de evitarlo si el objetivo es la intimidad. Hay maneras de alargar la etapa del vacío.

Una forma de alargarla es decidir a regresar al caos. Por lo menos te sientes como si estuvieras haciendo algo. Tal vez la lucha es inútil e inservible, pero es activa. Desafortunadamente, este es un movimiento hacia atrás. A pesar de que se siente como una conexión, no hay conexión más profunda más allá del vacío, mucho más profunda que la conexión anterior.


NOTAS:

Volver al caos logra poco aparte de prolongar el movimiento hacia la intimidad. Pero es una estrategia que muchos intentan.

Otra estrategia es moverse hacia la pseudo-intimidad. Allí, la pareja sintió la conexión. Cada uno sabía cómo interactuar, aunque fuera solo en la superficie. Pero, de nuevo, la pseudo-intimidad no es ningún atajo. También prolonga el movimiento necesario. Hace de cuenta que las similitudes cotidianas son lo suficientemente profundas como para mantener una relación.

La única forma de intimidad es a través del vacío. Evitar el vacío es imposible, e ir hacia atrás es contraproducente.

Si te encuentras en la etapa del vacío, hay algunas estrategias que podrías usar para continuar moviéndote a través de los sentimientos del vacío.

Sugiero cuatro estrategias para avanzar por la etapa del vacío.

Decide aguantar. Cuando las parejas están experimentando la sensación de vacío, es fácil considerar el abandono, alejándose de la sensación. Toma la decisión de aguantar, de seguir avanzando a través de esta etapa. La gente a menudo no se da cuenta que puede tomar la decisión. Hay más destrucción al moverse hacia adelante y hacia atrás, vacilando sobre si dejar o


NOTAS:

aguantar. Toma la decisión de aguantar, y confía en que se trata de una etapa.

Decide que las cosas deben mejorar. Por desgracia, es en esta etapa que sentimos muy poca energía para mejorar la relación. De hecho, a menudo nos sentimos agotados por el sentimiento de vacío. Así que toma la decisión de que las cosas deben mejorar en la relación, y encárgate a ti mismo hacer algunos de estos cambios. Es posible dominar la situación sin dominar el problema.

Decide cómo volver a energizar, revitalizar y volver a apasionar la relación. ¿Qué haría falta para devolver la energía a la relación? ¿Qué se necesita para jugar más? ¿Necesitan una nueva perspectiva? ¿Qué traerá la pasión de vuelta? Parte del antídoto para el vacío es la plenitud. Devolver tu lado creativo a la relación la llenará.

Avanza hacia la aceptación del otro. Esta es la clave. Si la declaración: “No sé qué hacer contigo” marca la etapa del vacío, la respuesta es simple: aceptarse entre sí por lo que son. Ama al otro por sus diferencias, aprecia lo que aporta a la relación.

Estas estrategias les harán avanzar a través del vacío y pasar a la etapa final: intimidad.


NOTAS:

Etapa 4: Intimidad

Después de ver las tres primeras etapas, probablemente estés ansioso por saber la buena noticia. Esa sería la intimidad, el objetivo de este viaje. La intimidad es un reconocimiento de las diferencias, la comprensión de que estas diferencias hacen al crecimiento en ambos y añaden fuerza a la relación. En la etapa de la intimidad, el significado es “No somos iguales, y eso es lo que hace que nuestra relación sea tan maravillosa”.

La intimidad es un conocimiento pleno del otro. Es cuando nos movemos más allá de nuestras “proyecciones” acerca del otro y lo vemos por lo que es. Cuando estamos atrapados en nuestras proyecciones, lo vemos por lo que queremos que sea, lo bueno y lo malo. Algunas personas solo ven lo malo en el otro, mientras que otras solo son capaces de ver lo bueno. En realidad, ninguna de las dos opciones es totalmente correcta.

Sin embargo, la forma en que vemos a la otra persona afecta tan profundamente la forma en que la tratamos que hay que tomar el riesgo y verla por lo que es.

Nunca deja de sorprenderme conocer a la pareja de alguien que he visto en mi práctica. Cuando hay problemas entre los dos, y sobre todo cuando hay un divorcio en el horizonte, se sesga la vista de la pareja. Oigo hablar mal del otro, de su falta de amor, de


NOTAS:

bondad, etc. Sin embargo, cuando me encuentro con ellos, nunca encuentro los cuernos y la cola puntiaguda que habría esperado encontrar.

En cambio, me encuentro con otro ser humano que está tan herido y confuso como la persona en mi consultorio. Por razones profundas, no pueden ver al otro por lo que es. Esa es la tarea de la intimidad: ver a la persona por quién es esa persona y apreciarla.


NOTAS:

Capítulo 13 Relacionamiento desde el

estado de ánimo alto

Tiene una opción en la forma en que te relacionas. Puedes relacionarte desde un estado de ánimo bajo o un estado de ánimo alto. Sugiero el alto. ¿Cuál es la diferencia? Uno te guiará hacia los problemas, y el otro te alejará de ellos.

El relacionamiento desde el estado de ánimo bajo funciona desde una perspectiva de “lo que está mal”. Tiene sus raíces en el hecho de que solemos abordar los problemas en el peor momento posible: cuando nuestro estado de ánimo es el más bajo. Cuando nuestro estado de ánimo es bajo, nuestra perspectiva es limitada. Cuanto más limitada es nuestra perspectiva, menos vemos nuestras opciones.

Todos tenemos estados de ánimo. No tenemos más remedio que interactuar independientemente de


NOTAS:

nuestro estado de ánimo. Esta idea está más relacionada con el momento en que elegimos relacionarnos, sobre todo acerca de las cosas importantes. Cuando estamos en un estado de ánimo bajo, podemos elegir ser más cuidadosos en nuestra relación, sabiendo que no vemos las cosas tan claramente.

A menudo me encuentro parejas que me dicen que han elegido nunca irse a la cama enojados. Esto me provoca cierta preocupación. Entiendo el sentimiento, pero apostaría que a menudo están cansados y de mal humor al día siguiente. A veces, una buena noche de sueño nos da una perspectiva diferente sobre el problema. De hecho, a veces es posible que se nos haga difícil recordar cuál era el problema.

Esta táctica no se trata de ignorar un problema. En cambio, es un reconocimiento de que cuando solo nos relacionamos desde un estado de ánimo bajo, algunas cosas se convierten en problemas más grandes de lo que realmente son.

Enfócate en las opciones

Cuando nuestra atención se centra en los problemas, perdemos nuestra creatividad. Perdemos nuestras posibilidades. He aquí una cita importante:

La vida es un misterio que hay que vivir, no un problema que hay que resolver.

John Yates


NOTAS:

Esto se aplica a todo en la vida. Para nuestros propósitos, se aplica a nuestra pareja. ¿Y si viéramos a nuestra pareja no como un problema que hay que resolver, sino como un misterio que hay que vivir? ¿Cómo cambiaría nuestra perspectiva?

Cuando estamos atrapados en el relacionamiento desde el estado de ánimo bajo, vemos a nuestra pareja o a la relación como un problema a resolver. Paradójicamente, se pierde toda capacidad de resolver un problema. Cuando nos fijamos en algo como un problema, nos movemos hacia una mentalidad analítica.

Una mentalidad analítica no es, en sí misma, un problema. Si estás intentando balancear tu chequera, este modo de pensar es útil. Si eres un ingeniero que está calculando el peso que puede ser sostenido por un poste, la mentalidad es fundamental. Pero rara vez funciona cuando tomamos nuestra mentalidad analítica y la usamos para arreglar relaciones y el trato con la gente.

En terapia, solía ver gente que parecía estar de buen humor, lo que la hacía relacionarse con su cónyuge en forma positiva. Después, ellos venían a mi oficina y empezaban a decirme lo que era “malo” en su relación. En poco tiempo, el estado de ánimo había cambiado. El solo mirar sus problemas les bajaba el ánimo y los alejaba de una toma de conciencia de su salud.


NOTAS:

¿Significa esto que los problemas en la relación deben permanecer sin resolverse? Por supuesto que no. Pero en lugar de hacer la pregunta, “¿Qué pasa?”, puedes optar por hacer la pregunta, “¿Cuáles son nuestras opciones? ¿Qué es posible aquí?”

Esta pregunta comienza con la comprensión de que “aquí es donde estamos, y aquí es donde queremos estar”. Una pareja que entiende esta posición puede entonces preguntarse: “¿Qué es posible?” Este conocimiento abarca dificultades, pero también incluye las fortalezas y las alegrías de la relación. Si una persona se ha quedado atascada en el relacionamiento desde un estado de ánimo bajo, ver cualquier aspecto positivo puede ser imposible.


NOTAS:

Capítulo 14 Vivir una relación en el

presente

El tiempo es un concepto interesante. Por lo menos, es interesante para nosotros los seres humanos. Al resto de la biósfera no parece importarle un comino. Los humanos podemos encontrarnos existiendo en tres ocasiones diferentes posibles: el pasado, el presente y el futuro.

Muchas relaciones se quedan atrapadas en vivir en el pasado. Las relaciones más exitosas viven el presente con la mirada puesta en el futuro. Los que tienen más éxito en sus relaciones aprenden a vivir en el presente, dejando el pasado donde debe estar. . . en el pasado.

¿No crees que vivas en el pasado? La experiencia me dice que esto es un gran obstáculo para cambiar en una pareja. Puede que no vivan la mayor parte de su relación en el pasado, pero seguramente se trasladan allí cuando es el momento de cambiar.

Muchas veces, cuando trabajo con una pareja, creamos un posible plan de cambio, y luego pregunto: “¿Esto va a funcionar?” Y uno o ambos a menudo me


NOTAS:

dicen que no lo creen porque no funcionó. . . en el pasado. Esto elimina la posibilidad de un cambio.

Wayne Dyer utiliza una poderosa metáfora en su escritura y sus cintas. Dyer hace la pregunta, ¿qué empuja el barco hacia adelante? Es posible creer que la estela está empujando el barco, pero no es el caso. La raíz está en el pasado. El barco la deja atrás, en lugar de ser impulsado por ella. Es el motor que empuja el barco hacia adelante.

El cambio es libre de suceder en el presente y en el futuro. Esta noción no puede ser subestimada. Cuando te encuentras en un estado en el que crees que nada puede cambiar, por lo menos pregúntate si esa sensación se debe a una reflexión sobre el pasado.

Incluso me atrevería a advertir acerca de vivir hacia el futuro. Un cliente me estaba diciendo que esperaba pasar tiempo con su esposa cuando fueran mayores, pero también estaba preocupado. Su padre sufrió un trastorno cerebral debilitante que casi lo mata. Afortunadamente, la cirugía fue capaz de volverlo a la normalidad después de varios años de estar en estado prácticamente vegetativo.

Mi cliente temía ser despojado de tiempo por un problema como ese. Noté su problema de vivir en el futuro, no el presente. Me comentó que pensaba que estaba viviendo en el presente, ya que le preocupa que no hubiera futuro. Le dije que al abarrotar todos los eventos futuros en el presente, en caso de que el


NOTAS:

mañana nunca ocurra, estaba viviendo en el futuro. No es posible vivir todo en el presente desde el futuro. El presente simplemente es.

Eso no significa que no planees para el futuro. La falta de planificación te deja vulnerable. Haz tu planificación, y luego vive. Deja que la planificación se encargue de ello.

Vivir en el presente es aprender a tener una apreciación y conocimiento de lo que está sucediendo a tu alrededor. Cuando estás teniendo una conversación, es escuchar realmente lo que la otra persona está diciendo. Esto es diferente de lo que hacemos a menudo, escuchar lo suficiente para movernos a reflexionar sobre nuestra propia respuesta. De repente dejamos el presente y avanzamos hacia el futuro, ¿qué vamos a decir? O nos quedamos atrapados en el pasado, teniendo en cuenta lo que hemos dicho o lo que el otro dijo la otra vez.

Vivir en el presente es cultivar la conciencia de la comida que comemos, la diversión de jugar con un niño, la sensación del viento en tu cara. Se trata de una interacción íntima con tu entorno, una conexión que sale de tu cabeza y en tus sentidos.

Si bien las tesis doctorales tienden a ser algo bastante secas, un colega mío hizo una cita que recuerdo 10 años después. Él dijo: “Creamos el pasado y recordamos el futuro”. Qué giro en lo que esperamos.


NOTAS:

La mayoría de nosotros pensamos que recordamos el pasado y que el futuro es lo que creamos.

No según mi colega, John Gray (no el de Marte y Venus). John cree que usamos la percepción actual de interpretar los acontecimientos pasados. Esto crea el pasado. Luego, utilizamos lo que viene del pasado para dirigir nuestro destino. Nuestro futuro se “recuerda” como lo experimentamos.

En otras palabras, nuestras percepciones del pasado no son exactas. Son nuestros puntos de vista de los acontecimientos. Estos eventos han sido registrados a través de nuestros paradigmas, dejando puntos de vista imperfectos.

Además, nuestro futuro se ve afectado por ese pasado creado. Es entonces cuando escucho los comentarios de las parejas de que nada va a cambiar, ya que nunca lo ha hecho. El pasado es inexacto, y el futuro puede llegar a quedar atrapado en este punto de vista incorrecto.

La alternativa es vivir en el presente, permanecer en el momento. Cuando nos sentimos atraídos hacia el pasado, debemos recordar que se trata de una memoria imperfecta, y no del todo fiable.

Tirar hacia el futuro también se contrarresta mediante el reconocimiento de que podemos ser frenados por las limitaciones de nuestros recuerdos y percepciones. El futuro se despliega cuando se le


NOTAS:

permite desplegarse. De lo contrario, nos encontramos desarrollando nuestras vidas en formas costosas y dolorosas.


NOTAS:

Capítulo 15 El sexo se trata de

NOSOTROS

Hay dos áreas especiales de interés para saber cómo surge la lucha por el poder (y contra el NOSOTROS) en una relación. Estas dos áreas son el sexo y el dinero. Sin duda, estas dos áreas abarcan una gran parte de nuestra atención. Consiguen una gran cantidad de atención por parte de nuestro pensamiento y en su simbolismo.

De hecho, una teoría sostiene que las discusiones sobre dinero y sexo rara vez son sobre dinero o sexo. Pero las discusiones en otras áreas pueden ser sobre dinero y sexo. Ambas áreas tienen una gran cantidad de “antecedentes” emocional adjunto, así como el profundo simbolismo.

En el próximo capítulo, vamos a centrar nuestra atención en el dinero. Aquí, vamos a examinar el sexo. En particular, cómo el sexo nos mueve hacia o nos aleja del NOSOTROS.


NOTAS:

Muchas de las parejas previas al matrimonio con las que me encuentro son muy abiertas con los demás acerca de su sexualidad. Por alguna razón, esto parece cambiar con el tiempo. Lo mejor que puedo decir, esto parece ser la evolución de ese cambio:

En la primera parte de la relación, ambos son más abiertos sobre su sexualidad, ya que hay pocos “antecedentes” en la relación. Luego, con el tiempo, la frecuencia, el tiempo y el tipo de relación sexual se mueve hacia un estado más natural de los individuos.

Por desgracia, es imposible que nuestras preferencias de frecuencia, tiempo y tipo de relación sean una coincidencia directa. Siempre habrá una variación entre dos personas.

En algún momento, por lo general tarde en la noche, uno está interesado en hacer el amor, y el otro no lo está. Desafortunadamente, este parece ser el momento en que muchas parejas hablan (discuten) sobre su relación sexual.

Uno o los dos están heridos por el intercambio, la creación de un pequeño “corte” en la autoestima sexual. Ahora, esa autoestima sexual se mantiene más cercana y personal que muchas otras áreas de la autoestima. Con el tiempo, este pequeño “corte” cicatriza otra vez hasta que hay más tejido cicatricial que tejido sano. Pronto, las discusiones saludables sobre la sexualidad de la relación desaparecen. El silencio o el discutir es todo lo que queda.


NOTAS:

Sin embargo, el sexo es uno de los aspectos unificadores del matrimonio. Puede ser una fuente de intimidad o su demonio. Existe el antiguo mito griego que en un principio, la gente tenía dos cabezas, cuatro brazos y cuatro piernas. Pero estas personas siguieron tratando de llegar a los dioses. Con el tiempo, los dioses se cansaron de este comportamiento y decidieron dividir a la gente en dos. La separación dejó el hombre y la mujer. Y con el sexo, estamos tratando de unificar nuestras partes perdidas.

No tienes que creer en el panteón griego de los dioses para ver el simbolismo tan poderosamente representado en esta historia. Parte de la relación es un intento de brindarnos totalidad. Recuerda la idea de la complementariedad, la búsqueda de la plenitud en la relación. El sexo es el símbolo físico de esto.

En la fe cristiana, la idea de “dos son una sola carne” también se simboliza en la unión sexual. Aunque podríamos señalar con el dedo acusador a la iglesia por muchos de nuestras obsesiones sobre el sexo y nuestra propia sexualidad, la teología cristiana nos deja con una imagen de gran alcance para el potencial de la sexualidad.

La realidad de los problemas sexuales en el matrimonio

Muchas personas se sorprenden al descubrir que el sexo no es solo una forma de “calentarse”. Tiene el potencial de ser una experiencia profundamente de


NOTAS:

unión del NOSOTROS. Debido a la naturaleza sexualizada de nuestra cultura, esa parte se olvida a menudo.

En su lugar, creamos una ilusión de la relación sexual. Fantaseamos con base en las revistas, publicidad, películas, telenovelas y muchas otras áreas. Nuestros encuentros rara vez están a la altura de esas expectativas. . . ¡y que tener que estarlo! Desafortunadamente, por lo general, no tenemos entrenadores que trabajen para ayudar a crear los cuerpos perfectos, directores para crear la escena perfecta y escritores para que nos digan qué hacer.

El sexo es, contrariamente a la descripción de los medios, imperfecto, desordenado y más espiritual que lo que cualquier escena de amor podría retratar. En otras palabras, nos hemos perdido de mucho en nuestras relaciones sexuales porque hemos comprado el paquete de los medios.

Pero la sexualidad marital potencialmente tiene una profundidad mayor de la que muchas parejas nunca experimentarán; simplemente carece de las “cosas” que nos han vendido por los medios de comunicación. Si hallas que su relación sexual no es lo que deseas, puede que quieras hacer algunos cambios.

La energía de la sexualidad

La sexualidad y el sexo es cuestión de aprovechar nuestra energía sexual. Por desgracia, esta energía rara


NOTAS:

vez fluye tan libremente como debería. La mayoría de las personas tienen varios bloqueos en su sexualidad. Muchos de estos son el resultado de experiencias anteriores en la vida.

Pocos de nosotros somos criados en ambientes carentes de mensajes negativos sobre la sexualidad. De hecho, muchos encuentran su energía sexual reducida por la vergüenza. Muchos están avergonzados a edades tempranas sobre sus cuerpos, causando dificultades en permitir que su energía sexual sea comprendida en sus cuerpos.

Aun así, otros están avergonzados de su propia sexualidad, ya sea por abuso, burla o castigo por los puntos naturales de desarrollo. Cuando esto sucede, nuestra energía sexual se ve afectada de manera profunda. Se necesita un esfuerzo extra para recuperarnos y disfrutar de nuestra sexualidad natural.

A algunos de nosotros, la vergüenza nos deja incapaces de participar en la relación sexual con la frecuencia que nos gustaría. Para otros, la vergüenza tiene la acción opuesta. Esto nos impulsa a sexualizar todo en un intento de superar la vergüenza.

Y, por cierto, la terapia sexual tradicional puede ser de poca ayuda. El enfoque en la terapia sexual es en general para tratar de “impulsar” la sexualidad de una persona que tiene poco interés en el sexo. Muchos terapeutas sexuales recomiendan medios artificiales de creación de la excitación. Podrán proponer un vestido


NOTAS:

provocativo, pornografía, pérdida de peso u otros medios externos.

Pero eso no ve el hecho de que la energía sexual está bloqueada por una razón. Esa razón puede dejarse para que la persona la determine, pero los medios externos no solucionan el problema.

Un enfoque diferente

Eso puede llevarte a preguntarte cuál es la respuesta. Puesto que el sexo es a la vez un combustible para el NOSOTROS y un efecto secundario del NOSOTROS, el primer punto de la exploración es la condición del NOSOTROS. Si el NOSOTROS está en buena forma, lo más probable es que haya un “lugar de espera” para el relacionamiento sexual de la pareja. Si hay problemas con el NOSOTROS, es probable que haya problemas en la relación sexual.

Así que en primer lugar, intervén en las zonas donde hay problemas con el NOSOTROS y, a continuación, vuelve a explorar la relación sexual.

Si el NOSOTROS está en su lugar, considera estos puntos para explorar tu relacionamiento sexual:

1) Si no puedes decir que NO, no puedes decir que SÍ. Este es un punto central en los límites, y es también un punto central para la relación sexual. Hasta que no puedas decir “no” a las relaciones sexuales y a las peticiones de sexo, no podrás participar plenamente en el sexo.


NOTAS:

2) El sexo y la sexualidad crecen y se profundizan en el curso de una relación. Lo que muchas parejas interpretan como un “enfriamiento” de su relación es realmente una profundización de su conexión. Tal vez la intensidad física se ha desplazado a un nivel más bajo, pero la conexión psíquica probablemente haya aumentado. Una pareja, con el tiempo, aprende lo que funciona para el otro. La emoción del descubrimiento se sustituye con la comodidad de la familiaridad, lo que permite la intimidad más profunda.

3) “Nuevo y diferente” puede ser un intento de aumentar artificialmente la emoción. Eso nos mueve en la dirección equivocada. Si bien a menudo puede ser divertido encontrar diferentes formas de relacionarse y responder, el peligro existe cuando esto se convierte en una búsqueda con el fin de recuperar algo. “Nuevo y diferente” es la guinda del pastel, no es el método de tratamiento de una relación menos que satisfactoria.

4) El sexo es más profundo de lo que lo hacemos, y menos difícil al mismo tiempo. Las parejas pueden errar en ambos aspectos. Un “rapidito” rara vez satisface plenamente como el estándar. Puede ser agradable como parte de una vida sexual plena. El sexo requiere tiempo, no solo por el acto, sino también para generar la conexión necesaria para el cumplimiento del


NOTAS:

sexo. Al mismo tiempo, muchas veces perdemos oportunidades de conexión sexual por preocuparnos de que no haya suficiente tiempo. La mayoría de los estudios muestran que un período normal (en oposición al sexo “gourmet” de ocasiones especiales) toma de 15 minutos a media hora. A menudo actuamos como si necesitásemos toda la noche. Si esperamos hasta que tengamos toda la noche, no acontecerá mucho en la relación sexual de una pareja.

5) En términos generales, hay algunas diferencias de género en las relaciones sexuales. Para muchos hombres, el sexo es una forma de conectar, de construir la intimidad. Para muchas mujeres, el sexo es un resultado de la conexión. Es el subproducto de la intimidad. Si bien esto no es absoluto, es un tema lo suficientemente fuerte como para causar dificultades para muchas parejas. Supongamos que una pareja está tratando de volver a conectar después de un largo día. Él puede ver el sexo como una forma de crear esa conexión. Ella puede ver la necesidad de estar conectada antes de relacionarse sexualmente. Un conflicto puede surgir rápidamente. Irónicamente, ese conflicto es el resultado de dos personas que tratan de conectarse. Esa es la tragedia de esta diferencia de género.


NOTAS:

6) Crea momentos libres de conflicto para hablar de su relación sexual. Dado que muchas discusiones sobre el sexo se producen en medio de conflictos por el sexo, es importante que las parejas exploren su relación sexual cuando no existe conflicto. Esto puede permitir un intercambio más realista de sus sentimientos y preocupaciones. De hecho, estas discusiones son profundamente íntimas. Implican compartir partes de nosotros mismos que normalmente no confesamos ni siquiera a nuestros cónyuges.

7) Hacer el amor no se trata solo del coito. Si bien a menudo perdemos esto de vista, el coito es solo una parte de la relación sexual. Hacer el amor puede incluir toda la gama desde darse la mano y besarse hasta la relación sexual completa. Si limitamos el hacer el amor al coito, nos estamos perdiendo algunos grandes momentos de la relación. Acurrucarse en la mañana o besarse en el sofá, todo puede ser parte de hacer el amor. El problema es que cuando nos limitamos a mantener relaciones sexuales, estamos atrapados en la posición de ver si todas las acciones para conectarse llevan a eso. Pero, ¿qué pasa si ampliamos la definición? Entonces todos podemos encontrar momentos para esos instantes de conexión. El resultado es que nuestra energía sexual se libera y fluye más que en el momento del coito. El objetivo ya no es el orgasmo, sino la conexión—¡el NOSOTROS!


NOTAS:

El peligro de la sexualidad en la relación matrimonial es errar en ambos extremos: o se vuelve demasiado importante o no es lo suficientemente importante. Cada pareja debe luchar con el hecho de que no vamos a tener necesidades o preferencias idénticas a las de nuestro cónyuge. Una vez más, esa es la magia de una relación matrimonial. Nos empuja hacia el equilibrio cuando atendemos a lo que nuestro cónyuge suma a la relación. Cuando recordamos la lección de los paradigmas, reconocemos que nuestra sexualidad no la correcta, sino simplemente nuestra. No es mejor que la del otro, ni es necesariamente peor.

Nuestra tarea en el matrimonio es descubrir una relación sexual que resulta satisfactoria para ambos, y que impulsa la relación hacia el NOSOTROS. Parte de esa tarea nos enseña mucho acerca de nosotros mismos.


NOTAS:

Capítulo 16 Dinero, poder & NOSOTROS

El dinero es la segunda área en la que a menudo las luchas de poder emergen sobre el NOSOTROS. El dinero es un objeto muy simbólico. De hecho, es profundamente simbólico en la cultura. No debe ser ninguna sorpresa que este mismo simbolismo surja en el matrimonio.

El carácter simbólico del dinero ha evolucionado con el tiempo. Entiendo que el sacerdocio creó las primeras monedas. Una cara de la moneda contenía una imagen sagrada. La otra contenía una imagen del gobierno. Dentro de una misma moneda se encontraba lo sagrado y lo profano.

Libertad versus seguridad

Muchas parejas encuentran una zona céntrica de simbolismo para capturar sus luchas por dinero. El dinero a menudo tiene un significado polarizado basado en dos puntos: la libertad y la seguridad.


NOTAS:

Estas polarizaciones se caracterizan por los siguientes rasgos:

1) Libertad: las personas que ven el lado de la libertad del dinero quieren disfrutar de su dinero haciendo y teniendo. Tener dinero significa ser capaz de hacer cosas. Significa ser capaz de permitirse lujos, comprar cosas buenas, hacer excursiones agradables, comer buenas comidas fuera.

2) Seguridad: las personas que ven el lado de la seguridad del dinero tienden a verlo como una manera de no tener que preocuparse. A menudo planean para el futuro, aparten dinero para la educación de los hijos, la jubilación, etc.

Ninguna de las partes está mal. . . y ambos pueden estar equivocados. Tanto el lado de la seguridad y el lado de la libertad del dinero son importantes en una relación. Hay que estar seguro en la vida, pero es igual de importante tener un poco de libertad para disfrutar.

Y aquí está el problema: coloca a dos personas juntas y caerán en diferentes lugares de la polaridad libertad----seguridad. Y en cualquier momento dado, sus decisiones reflejan diferentes prioridades.

El problema no es que haya diferencias entre los dos. El problema es cómo se tratan estas diferencias.


NOTAS:

Es una fortaleza de una relación contener tanto una persona de libertad y una persona de seguridad. Los dos tienen algo que aprender el uno del otro.

Una vez trabajé con una pareja que tenía el dinero como uno de los puntos centrales de desacuerdo. Parece que no importaba lo que estuviera sucediendo, cuando todo se calmaba, su relación financiera resurgía.

“Cal” era un vendedor que sólo tenía que trabajar parte del día para cumplir con sus responsabilidades de trabajo. “Beth” trabajaba en un campo profesional, y se complacía en ser capaz de manejar las demandas de su trabajo.

Ambos ganaban buenos salarios, pero siempre estaban viviendo mes a mes. Esto a pesar de la planificación cuidadosa de Beth. ¿El problema? Cal estaba a favor de la libertad del dinero. Le encantaba salir a comprar un nuevo palo de golf o una corbata nueva. Le encantaba salir a una “noche en la ciudad”. Le encantaba pasar un buen rato. Y odiaba la planificación para el futuro. Claro, él quería asegurarse de que estuvieran seguros en el futuro, pero no a expensas de su disfrute diario.

Beth, por el contrario, se sentía culpable si compraba cualquier cosa para sí misma. Tenía problemas para disfrutar el tiempo libre (que no fuera parte de las vacaciones cuidadosamente presupuestadas que siempre se iban por encima del


NOTAS:

presupuesto). Cuando se trataba de libertad, veía el momento de libertad en algún momento en el futuro (como la jubilación).

Los dos “chocaban cabezas” continuamente sobre sus finanzas. Beth quería que Cal controlara sus gastos. Cal quería que Beth fuera más despacio y pasara un buen rato. Ellos querían que alguien les dijera qué camino tomar.

Imagina su sorpresa cuando les dije que cada uno necesitaba aprender del otro. Les pedí que exploraran lo que era atractivo sobre cómo el otro lidiaban con el dinero. Entonces me di cuenta que las cosas que eran atractivas eran las áreas sobre las que cada uno necesitaba aprender del otro.

¿Lo hicieron bien? No la primera vez. Cal decidió dejar que Beth hiciera su planificación (como siempre lo había hecho) sin quejarse. Beth decidió crear una cuenta de gastos para que Cal la gestionara; su “dinero loco”. El problema era que Cal siempre gastaba más que su cuenta y Beth nunca era capaz de ejecutar sus planes. Pensaron que podían engañar a su relación a creer que se habían comprometido.

Pero ninguno había aprendido del otro. Claro, estaban dispuestos a admitir que la perspectiva del otro tenía sentido. No estaban dispuestos a ser afectados por este punto de vista.


NOTAS:

Así que lo intentamos de nuevo. Le sugerí a Beth que Cal era la persona perfecta para enseñarle a pasar un buen rato sin culpa. Podría enseñarle a ser más un “espíritu libre”. Por otro lado, a Cal le serviría aprender la importancia de pensar ahora en el futuro. Podía aprender la lección de una planificación cuidadosa.

Esa idea les generó bastante miedo. No tanto por ver la validez de la lección, sino el miedo que uno podría hacer un cambio, y el otro se negaría.

Más exactamente, Beth temía que ella pudiera hacer un cambio, pero Cal solo usaría ese cambio para gastar más libremente. Y Cal temía fuera a hacer un cambio, pero al final, eso significaría que la diversión para ambos se vería comprometida. Se dieron cuenta que, en medio de su temor, Cal se estaba divirtiendo por los dos, y Beth estaba haciendo la planificación por los dos.

Sugerí que cada uno necesitaba hacer el cambio de aprendizaje, independientemente de lo que el otro hiciera. Incluso sugerí que hacer lo contrario sería replicar cómo llegaron a su posición actual. ¿Recuerdas la metáfora de los barcos? Cada persona comenzó a moverse hacia atrás, lejos de la mitad, en un intento de mantener el equilibrio. Pero cuanto más se desplazaban para mantener el equilibrio, más se movía el otro lado. Pronto, estaban en puntos polarizados en su trato con el dinero. Ninguno estaba en un punto saludable. Ambos se vieron personalmente fuera de equilibrio en un intento por mantener el equilibrio de


NOTAS:

la relación. La tarea, por lo tanto, era crear el equilibrio moviéndose hacia el centro, no en reacción a la forma en que el otro se movía. En lugar de eso, era ser proactivo. El resultado sería equilibrio para el individuo y equilibrio para la pareja.

El papel del dinero en la vida de una pareja

Le he pedido a la gente que me diga cómo lidian con el dinero. He recibido muchas respuestas, pero parecen caer en unas pocas categorías.

1) Ganancia/pérdida. Algunas personas ven las discusiones de dinero como algo que se gana o se pierde. Así que negocian para ganar. Este enfoque asume que hay una escasez de recursos, y debes tomar todo lo que puedas. De lo contrario, perderás puntos. Esto lleva a muchas parejas a realizar un seguimiento cuidadoso del dinero que entra y el dinero que sale. Las contribuciones permiten más poder en la determinación de los gastos.

2) Ignóralo. Las parejas en esta categoría quieren aparentar que no hay problemas de dinero. Avanzan sin darse cuenta de la deuda que van acumulando o de su situación financiera.

3) Reduce las facturas, luego págalas. Esto es más una estrategia. Se basa en la idea de que la responsabilidad fiscal se encuentra en la reducción de todas las facturas posibles, y luego,


NOTAS:

el pago de las mismas. Lo que sobra va hacia otra parte: ahorro, gasto, o ambas cosas.

4) “Mejor que esto no se puede esperar”. Las parejas se establecen en el presente como la única posición disponible para ellos. Cuando se instalan aquí, dejen sus esperanzas. Esto no quiere decir que crean metas poco realistas. Se limita a una posición auto-limitante. Las oportunidades se pierden cuando esta es la estructura.

Esto puede hacer que te preguntes: ¿Cuál es la alternativa?

La visión alternativa

La alternativa es que la pareja considere el dinero como una herramienta de auto-evolución. El dinero da la libertad y la seguridad, es ambas cosas. Pero más que eso, el dinero le permite a la pareja seguir sus pasiones. Puede abrir oportunidades, señalar opciones y permitirle a la pareja ampliar su relación de maneras sorprendentes.

Por ejemplo, cuando el dinero no se considera una limitación, se convierte en una herramienta de elección. Uno u otro, o ambos, pueden decidir ampliar dones y habilidades personales para avanzar sus vidas en diferentes direcciones. Cuando el dinero es una limitación, puede ser difícil ver cómo menos dinero podría ser beneficioso.


NOTAS:

Pero cuando una pareja ve las opciones disponibles, el dinero puede abrir puertas y permitir el crecimiento futuro. Esto significa que el dinero debe ser visto como una herramienta, no un fin. Es el medio para un fin. Ese fin es el crecimiento personal y de pareja.

Esto no significa que puedas decidir ser irresponsable. Todo lo contrario. Esto significa que comenzarás a ver el verdadero poder y el valor del dinero y lo que puede significar para el desarrollo personal.

Las parejas constantemente tienen disputas sobre compras pequeñas y desacuerdos monetarios menores. Rara vez estos desacuerdos financieros llegan muy lejos. La mayoría de los presupuestos se ajustan a esos gastos.

Las claves para una nueva perspectiva

En su gran libro, William Francis Devine (Women, Men, and Money) escribe que hay dos claves para el desarrollo de un enfoque que considera el dinero como instrumento de desarrollo.

1) Desarrollarse uno mismo. Las parejas con este enfoque trabajan en el desarrollo de sus habilidades, su arte y su intelecto. Trabajan en su relación y cómo se aman el uno al otro. Esto se convierte en su punto de partida en lo que aportan a la relación. La pareja tiene un


NOTAS:

compromiso con el desarrollo propio y de pareja.

2) Prestar atención a lo que aportas a otras personas. Cuando este es el enfoque, hay cambios de gran alcance en marcha. Esto libera el poder que está ligada a WIIFM (sigla en inglés para “¿Qué hay para mí en esto?”). Esta energía es liberada por la pregunta del servicio: ¿Qué puedo ofrecer a mis clientes? (Defina clientes de la manera en que tenga sentido para ti. Un cliente puede ser compañeros de trabajo, colegas, clientes, etc.) Cuando este es el enfoque, surgen oportunidades para ofrecer más y más. La creatividad empieza a surgir a medida que buscan formas cada vez mejores de proveer servicio a los clientes.

Esto se trata de un alejamiento de las ideas de escasez que parecen ser tan frecuentes en nuestros puntos de vista acerca del dinero.

Ejercicio: Tu autobiografía financiera

El siguiente ejercicio está diseñado para que puedas comenzar a explorar desde donde se formaron tus sentimientos sobre el dinero. Conteste cada pregunta de la manera más veraz posible. Deja que las respuestas se asienten por unos días y luego vuelve a leer lo que has escrito. Observa lo que emerge para ti. ¿Qué te sorprende? ¿Qué ideas surgen en ti con


NOTAS:

respecto a tu vida financiera? Escribe tus pensamientos.

Preguntas de María Nemeth, La energía del dinero: Una guía espiritual para alcanzar el bienestar económico y la realización integral

1) ¿Cuáles eran las circunstancias financieras de tu familia cuando naciste?

2) ¿Cuándo fue la primera vez que aprendiste acerca del dinero? ¿Aprendiste de tu padre o de tu madre? ¿Qué edad tenías? ¿Cuáles fueron las circunstancias?

3) ¿Tenías una mesada? ¿Tenías que trabajar por ella, o se te daba incluso si no hacías las tareas para ganártela? Si tienes hijos, ¿esto afecta la forma de manejar las mesadas con ellos?

4) ¿Cuándo fue la primera vez que compraste algo con el dinero que habías ahorrado? ¿Dónde estabas? ¿Qué compraste? ¿Fue dinero ganado o dinero que te dio alguien?

5) ¿Te acuerdas de tu primer sueldo? ¿Cómo lo ganaste? ¿Cuánto era? ¿Qué hiciste con él?

6) ¿Recuerdas haber perdido dinero alguna vez? ¿Cuándo fue la primera vez? ¿Qué sucedió? ¿Les ha pasado esto a tus hijos? ¿Cómo lo manejaste?

7) ¿Soñaste con algún día tener un trabajo o una carrera en particular? ¿Lo has logrado? ¿Por qué o por


NOTAS:

qué no? ¿La cantidad de dinero que puedes ganar es un factor en tu elección de carrera?

8) Si tu relación con el dinero fuera una relación personal, ¿cómo la describirías? ¿Sientes temor, amor, odio, dependencia, posesión o generosidad con el dinero? Solo tienes que escribir lo que te viene a la mente en este ámbito.

9) ¿Cómo te relacionas con la gente que tiene más dinero que tú? ¿Y menos dinero?

10) ¿Recuerdas la relación de tu madre o tu padre con el dinero? Si no viviste con ellos, elige a las personas que te cuidaron para esta pregunta.

11) ¿Cómo te afectó la relación de las personas anteriores con el dinero? ¿Tenían expectativas de ti? ¿Cuáles eran? ¿Hubo algunos aspectos del dinero que no se discutieron? Incluso si no se discutieron, se puede saber lo que eran. Si tienes hijos, ¿tienes las mismas expectativas de ellos? ¿Los tratas de la misma manera que te trataron? Si estás casado o en una relación comprometida, ¿estas expectativas afectan a tu pareja?

12) ¿Has cumplido una tarea o proyecto que involucra dinero importante? ¿Qué era? ¿Qué fue lo que hiciste que te hizo exitoso?

13) ¿Hubo un momento en que intentaste pero no conseguiste realizar una tarea o proyecto con respecto al dinero? ¿Qué era? ¿Qué hizo que no tuvieras éxito?


NOTAS:

14) ¿Alguna vez has dado o recibido dinero de regalo? Si es así, ¿cuánto? ¿Por qué motivo(s)? ¿Cómo te sientes acerca de esto?

15) Si fueras a caracterizar tu propia forma de “locura de dinero”, ¿cómo la describirías?

16) ¿Dónde quieres verte a ti mismo dentro de diez años con respecto al dinero? ¿Cuánto de ahorros? ¿Cuánto de inversiones? ¿Cuánto te ves ganando dentro de diez años?

17) Con relación al dinero, ¿por qué motivo quieres ser conocido? Si la gente estuviera hablando de ti y de tu relación con el dinero, ¿qué te gustaría que dijera?

18) ¿Tienes miedo de que el dinero no es lo suficientemente espiritual para ti o que tu camino espiritual no sea compatible con el éxito financiero?

19) ¿En qué gastas el dinero?

20) ¿En qué no gastas dinero?


NOTAS:

Capítulo 17 No te limites a crecer,

¡EVOLUCIONA!

Aquí estamos en el final. Hemos visto el poder de la percepción y la importancia del NOSOTROS. Nuestras observaciones se han centrado en las prácticas específicas que pueden ofrecer el cambio a una relación, examinamos algunos cambios importantes en la percepción y exploramos las áreas de crecimiento y desarrollo de una relación.

Quiero plantearte un desafío. Decide que no es suficiente limitarse simplemente a crecer. Debes ir más allá y evolucionar. Esta es una idea poderosa. El crecimiento es el desarrollo, pero la evolución es un salto.

Cuando crecemos, hay un proceso de maduración natural incorporado. Cuando nos desarrollamos, hay una posibilidad siempre presente para el cambio excepcional. A veces, ese cambio no es lineal. Ese es el poder de un cambio de paradigma.

Un cambio relacional sucede en el instante en que el modelo antiguo ya no funciona. Cuando eso


NOTAS:

sucede, una relación totalmente nueva comienza a existir. Esa es la evolución.

Piensa sobre la evolución de la naturaleza. Es una constante prueba para ver lo que tiene la mejor posibilidad de sobrevivir y prosperar en un ecosistema determinado. Lo que una vez fue el statu quo comienza a fallar. No es el más adecuado para la supervivencia. Otra especie emerge con el potencial para la supervivencia. Más tarde, es probable que sea reemplazada. Al final, la evolución escoge al competidor más fuerte para prosperar en ese escenario.

Así que la evolución es un cambio que puede ser marcado en contraste. La vieja relación puede haber sido lo suficientemente buena, apenas puede haber sobrevivido. De cualquier manera, cuando tu cónyuge y tú evolucionan, su relación evoluciona a un nuevo lugar, uno mucho mejor equipado para sobrevivir.

En ese instante, la nueva relación puede no parecerse en nada a la antigua. La relación adquiere un nuevo conjunto de cualidades que le permiten sobrevivir mejor que la anterior. Un día, ese modelo dejará de ser el mejor, y otro puede ocupar su lugar.

Ese es el ritmo natural para la supervivencia. Examinamos esta idea en profundidad cuando miramos paradigmas. Los paradigmas siempre se superan. Cuando finalmente se alcanza un punto crítico, el viejo paradigma es reemplazado por un


NOTAS:

nuevo paradigma. En ese instante, los pensamientos de la persona han evolucionado.

Las relaciones no son diferentes a estos paradigmas individuales. Lo que consideramos como las verdades de nuestra relación algún día serán menos capaces de llevar la relación hacia adelante. Se enfrenta a la elección de evolución o extinción. El crecimiento es demasiado lento para mantener el ritmo.

Pero a medida que la relación avanza, está buscando constantemente mejores lugares a los que puede ir. Nunca está en riesgo de ser obsoleta. En su lugar, siempre busca el nuevo punto de la verdad. Los que creen que hay una manera correcta de ser y hacer se sentirán decepcionados por estas palabras.

Sin embargo, el eminente psiquiatra, Carl Jung afirmó que “Lo que es cierto en la mañana es una mentira por la tarde.” Él aplicó esto a la mediana edad, pero es cierto en muchos otros momentos de la vida. Lo que sostenemos como verdad en un momento dado no será la verdad en otro punto. Cuando estamos muy estrechamente alineados con un punto de vista, perdemos la capacidad de cambiar a la nueva verdad.

La visión actual de las relaciones

Todos esperamos que (a pesar de la evidencia de lo contrario) nuestras vidas, nuestras finanzas y nuestras relaciones deben seguir un cierto camino hacia arriba, hacia mejor.


NOTAS:

Digo a pesar de evidencia de lo contrario, porque creemos que debe ser un proceso constante de mejora, y cada vez mejor. Pero la vida no parece apuntar en esa dirección. Les animo a renunciar a este modelo. En su mayoría conduce a la decepción y la frustración.

Hemos comprado el “sueño americano”: la vida, la libertad y la felicidad. Solo un recordatorio: tenemos garantizada la búsqueda de la felicidad. A veces, tenemos que luchar para descubrir la felicidad, pero es una tarea que merece el esfuerzo.

Por desgracia, cuando las relaciones se ven atrapadas en nuestra creencia de que deben seguir una dirección en constante mejora, nos decepcionamos constantemente cuando este no es el caso. Tal vez aún más perjudicial, nos quedamos sin los recursos para hacer frente al hecho de que este no es el caso.

Una visión paradigmática de las relaciones

En lugar de las relaciones que siguen el modelo de crecimiento constante, propongo y creo que las relaciones siguen un proceso paradigmático de


NOTAS:

desarrollo. En otras palabras, las relaciones, cuando se les permite, ¡EVOLUCIONAN!

Recuerda el modelo de los paradigmas: el desarrollo lento y constante del paradigma hasta que la evidencia erosiona la utilidad del paradigma. Luego, debe surgir un nuevo paradigma.

Emerger y evolucionar puede ser el mismo proceso. Cuando se aplica a las relaciones, los paradigmas pueden erosionar y destruir la relación; ¡puede extinguirse! O el paradigma puede erosionar, dejando espacio para un salto evolutivo en la relación.

La relación puede moverse a lo largo, sin mucho crecimiento. Pero con el tiempo, la relación comienza a empujar contra supuestos. Es como un cangrejo ermitaño atrapado en los confines de un caparazón muy pequeño.

Con el tiempo, el cangrejo debe dejar la seguridad del caparazón actual para encontrar una más grande y más capaz de sostener su cuerpo. En ese cambio, el cangrejo es vulnerable. Puede que pierda, o puede que encuentre un caparazón que le lleve hasta el próximo período de crecimiento.

Las relaciones a menudo se encuentran atrapadas en un ciclo de conflicto, desacuerdo, lucha o dolorosa existencia juntos. Al final de esta lucha, la relación puede ir en cualquiera de las dos direcciones. O bien la relación se mueve a un nivel superior de


NOTAS:

evolución, o las personas en la relación deciden ponerle fin.

En el transcurso de una relación, este proceso se produce una y otra vez. En retrospectiva, algunas parejas pueden mirar hacia atrás y ver la evolución.

En el momento, sin embargo, la pareja es más consciente de la lucha que les ocupa. Y ya que hemos sido llevados a creer que las relaciones deben seguir un grado constante de crecimiento, los puntos de conflicto se sienten como puntos problemáticos.

Son, en cambio, oportunidades de crecimiento. De hecho, son crisis, pero crisis que abren la


NOTAS:

oportunidad para el crecimiento. Me han dicho que en el idioma chino, el símbolo palabra “crisis” contiene los símbolos de “peligro” y “oportunidad” unidos.

Cada punto de crisis marca el lugar donde un viejo paradigma está fallando, y donde se necesita un nuevo paradigma. No es el fracaso de la relación, simplemente el fracaso del paradigma actual.

Cuando se produce el fracaso, es el momento para crear un nuevo paradigma, ¡y no volver al viejo! Desear volver al “como eran las cosas” puede ser un sentimiento natural, pero no es útil. El viejo paradigma no tiene ninguna posibilidad de ajuste.

El nuevo paradigma puede permitir que emerja más de cada persona en la pareja. Más de la individualidad de cada uno debe ser incluida en cada paradigma exitoso, abarcando más y más de la totalidad de cada uno.

Finalmente llegamos a un lugar donde se nos permite ser lo que somos. ¡Nos convertimos en lo que somos en el contexto de una relación que incluye donde el NOSOTROS está!


NOTAS:

Epílogo ¿A dónde voy desde aquí?

Es mi sincera esperanza de que este e-book haya dado lugar a algunos cambios en tu entendimiento acerca de tu relación. No espero que tu relación se resuelva en los momentos que tardaste en leer el material. Parte de la lectura tendrá que ser digerida. Surgirá con el tiempo. Hay partes que tomarán un esfuerzo de tu parte para cambiar tus hábitos.

Muchos querrán un poco de ayuda adicional en la solución de los factores que evitan que tu relación sea todo lo que puede ser y todo desearías que fuera. A continuación ofrezco varios recursos adicionales. Encontrarás maneras de ponerte en contacto conmigo para obtener más ayuda, así como algunas recomendaciones de lectura que me parecen útiles.

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NOTAS:

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NOTAS:

Libros y recursos

Hay una serie de excelentes recursos para una exploración más profunda de ti mismo y de tu matrimonio. Los recursos que se indican a continuación tienen enlaces para tu comodidad. Si estás conectado a Internet, haz clic en los elementos que te interesan. Serás llevado a las páginas web que ofrecen estos artículos. Los libros se ofrecen a través de Amazon.com.

Los siete principios para hacer que el matrimonio funcione Este libro de John Gottman se basa en su investigación sobre las causas del fracaso de las relaciones. Gottman realiza un programa de investigación en California que ha venido grabando y estudiando las parejas durante décadas. Sus principios cuentan con el respaldo de la investigación, a diferencia de gran parte de las bases teóricas de la terapia.

http://www.amazon.com/siete-principios-matrimonio-funcione-Spanish/dp/0307739708/ref=sr_1_3?s=books&ie=UTF8&qid=1376167666&sr=1-3

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NOTAS:

Women, Men & Money: The Four Keys for Using Money to Nourish Your Relationship, Bankbook & Soul Este excelente libro fue la base de mi comprensión acerca del dinero, tal como se presenta en este libro. Se ofrece un nuevo paradigma para manejar el dinero en mucho más detalles que el capítulo de este e-book. Actualmente se encuentra fuera de catálogo, pero a menudo hay copias usadas disponibles a través de Amazon.com.

Discovering Sexuality That Will Satisfy You Both Otro excelente libro que ofrece una visión alternativa para tu relación. Esto no es un libro de “cómo tener sexo salvaje”. En cambio, es un libro que pone la relación sexual sólidamente en el escenario del NOSOTROS. La autora no utiliza ese término, pero eso es lo que ella describe. En el libro también se

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NOTAS:

incluye una buena comprensión de la naturaleza destructiva de las adicciones sexuales para una relación. Puedes encontrar más recursos en la página de Recursos de este sitio web. Si estás conectado a Internet, HAZ CLIC AQUÍ.

http://www.savethemarriage.com/resources.html

por lee h. baucom, ph.d. -...

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