The most important thing. Retratos de una huida.

Nicol Andrea Montilla Hueso

Tercero de periodismo. Fotografía informativa.

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Índice

I. Introducción

II. Ficha de la exposición

III. Comentario de la exposición en su conjunto

IV. Comentario de fotos particulares

Primera foto

Segunda foto

Tercera foto

V. Conclusión

VI. Bibliografía

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I. Introducción.

¿Qué es lo más importante que te llevarías si de repente tuvieras que huir de tu hogar y de tu

país? Aunque en principio esta pregunta pueda parecer sencilla de responder, no lo es así para

los refugiados. Brian Sokol, fotoperiodista estadounidense, nos lleva a hacernos esta pregunta

mediante las fotografías que durante años ha hecho a refugiados de Mali, Siria, Sudan del Sur y

la República Centroafricana.

“The most important thing. Retratos de una huida” es el título de la exposición de estas

fotografías de refugiados en las que el común denominador no es otra cosa más que el objeto

con el que huyeron de sus casas, sus objetos más valiosos.

II. Ficha de la exposición.

III. Comentario de la exposición en su conjunto.

En el mundo, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR),

14 millones de personas han tenido que huir de sus hogares a campos de refugiados u otros

lugares más estables. Un tercio de esas personas han tenido que cambiar de país para dejar

atrás la guerra, ellos son refugiados. Esta exposición está compuesta por la historia de 24

personas de carne y hueso –aunque en la página web del fotógrafo http://briansokol.com/ se

pueden ver más fotografías del mismo tema- que tuvieron que huir de sus lugares de origen

junto a sus familias para poder salvar sus vidas.

“The most important thing. Retratos de una huida” nos muestra a los refugiados como lo que

son, seres humanos que han tenido que escapar de la guerra para encontrar cierta seguridad.

En este sentido, Sokol lo que quiere conseguir con sus fotografías es ponerle nombre a las

The most imortant thing. Retratos de una huida.

Lugar: CaixaForum Madrid. Paseo del Prado, 36.

Fecha: del 27 de febrero al 31 de mayo de 2015.

Horario: todos los días, de 10 a 20 horas.

Precio: entrada gratuita.

Autor: Brian Sokol.

Colaboran: la Obra Social 'la Caixa' y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para

los Refugiados (ACNUR).

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Abdou Ag Moussa (34) junto a su familia. El estrés le ha provocado tener canas a una edad muy joven.

personas y contar la historia de cada una de ellas para alejarnos de las estadísticas que

deshumanizan a sus protagonistas.

Como se puede observar, todas las instantáneas que componen la exposición están a blanco y

negro. Y otra curiosidad, todos sus protagonistas posan con un mismo fondo: una tela negra.

Es obvio, a mi parecer, que el fotógrafo estadounidense lo que consigue con estos dos recursos

es dejar que las personas sean las únicas protagonistas. Si se elimina el fondo y el color, la

mirada se centra en las personas. No hay nada que pueda distraer al espectador. De hecho él

admite que realizó los retratos a blanco y negro por tres motivos: el primero es que en muchos

de los países de donde son las fotografías, la ropa suele ser muy brillante y los colores muy

llamativos, por lo que puede darse una sensación de festividad cuando en realidad es todo lo

contrario; “el segundo motivo es que el color de una fotografía es como una fecha: permite

ubicar una foto en el tiempo con bastante precisión” y él no quería que se encasillaran las

fotos en el tiempo porque los desplazamientos forzosos de personas se repiten a lo largo del

tiempo; y por último, no quería que la gente pensase en si las fotos están manipuladas o no,

simplemente que reflexionara en los mensajes de las mismas.

Una de las cosas que más me llamó la atención en todas las fotografías es la forma en que la

guerra afecta físicamente a las personas. Cuando me encontré enfrente de las 24 instantáneas

me propuse adivinar la edad de las personas que aparecían en ellas. El resultado era siempre el

mismo: ponía más años de los que en realidad le correspondía a cada persona. Este ejercicio

puede parecer frívolo, pero en realidad es una secuela de todo lo malo por lo que han tenido

que pasar los refugiados. De hecho, una de las personas retratadas admite que el estrés que

ha sufrido ha hecho que su pelo empezará a tener canas.

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Otra de las cosas que pude observar en estos retratos es la gran cantidad de sentimientos que

puede expresar una misma persona. Estos instantes congelados en el tiempo nos muestran la

tristeza por todo lo que se ha sufrido, la fuerza y capacidad de superación por seguir adelante,

el no rendirse, la valentía, la esperanza por un futuro mejor…, en definitiva nos demuestran

que es verdad eso de que una imagen vale más que mil palabras.

Sin embargo, lo más importante que nos hace plantearnos estos retratos de una huida es el

valor de las cosas materiales. Se suele preguntar, en los cuestionarios mundanos que abundan

en las revistas, qué tres objetos nos llevaríamos a una isla perdida, pero en cambio a estas

personas no les dio tiempo a que les preguntasen que se llevarían si tuvieran que huir de sus

hogares. Ellas simplemente lo hicieron. Es muy fácil pensar en frío que te llevarías tú, pero

ellos lo hicieron sobre la marcha. Es muy probable que se dejaran atrás más cosas importantes

de las que se llevaron. Yo aún sigo pensando mientras escribo estas líneas que me hubiera

llevado en su lugar y sigo con la misma incógnita.

Con todo esto quiero decir que, para mí, “The most important thing. Retratos de una huida” te

hace pensar un poco en lo verdaderamente importante, en ser menos egoístas. Sobre todo te

acerca a los refugiados con esa pregunta que nos plantea al principio de la exposición: ¿Qué es

lo más importante que te llevarías si de repente tuvieras que huir de tu hogar y de tu país?

Esta cuestión nos hace ponernos en la situación de millones de personas, nos hace reflexionar

sobre lo que podemos hacer para ayudarlas. Es verdad que no podemos hacer grandes cosas

de manera individual, pero si podemos aportar nuestro granito de arena ya sea informándonos

de lo que sucede en los lugares que se encuentran en guerra, porque si ignoramos estos

conflictos, la ayuda nunca llegará para ellos, o mediante ACNUR hacer algún voluntario o

donar.

Por último, la Obra Social “la Caixa” organiza algunas actividades educativas en torno a la

exposición que creo que son muy importantes para concienciar a los jóvenes sobre este tema.

IV. Comentario de fotos particulares.

Las fotos que recojo en este apartado no las escojo por su valor estético –que sin dudarlo lo

tienen al igual que el resto de la exposición-, sino por la historia personal de cada uno de sus

personajes. Es verdad que a lo largo de esta exposición, todos los refugiados fotografiados

tienen una historia conmovedora que los llevó hasta el campamento donde ahora viven, pero

las imágenes que elijo en concreto, aparte de transmitirme ese sentimiento de

sobrecogimiento, también me enseñan la fuerza de estas personas, su insistencia por

superarse y que en ocasiones los objetos por muy caros que sean no son lo más importante.

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Primera foto: Alia, huyó de Siria a Iraq.

Alia es una refugiada siria en el campamento de Domiz en Kurdistán, Iraq. Esta chica, que en el

momento en el que se realizó la fotografía tan solo tenía 24 años, tuvo que huir de Daara

cuando comenzaron los ataques. Nosotros como espectadores podemos ver que está en silla

de ruedas, pero lo que no se sabe si no lees su historia es que además es ciega. Cualquier

persona que no tenga ninguna minusvalía siente temor al vivir en un lugar en guerra, pero para

Alia había otro temor: que su familia la abandonase.

Lo único valioso que se llevó consigo fue su alma <<nada más, nada material>> porque para

ella su silla de ruedas no es un objeto, es una extensión más de su cuerpo.

De Alia me quedo con su capacidad para desprenderse de lo material siendo sin embargo una

persona que podría necesitar de la ayuda de diferentes objetos para sobrevivir.

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Segunda foto: Fideline, huyó a la República Democrática del Congo desde la República

Centroafricana.

Esta pequeña de 13 años –en el momento de la fotografía- tuvo que huir junto con su familia

hacia Batanga. El hecho que les hizo tomar esta decisión, fue el asesinato de un hombre de

negocios enfrente de Fideline y sus amigos.

Fideline posa con su cuaderno, su tesoro más preciado y lo único que le dio tiempo a coger

antes de dejar atrás su casa. Ella comenta que no pudo coger ni su cartera de la escuela, ni sus

zapatos, ni las cintas de colores para el pelo, pero sí cogió sus cuadernos y su bolígrafo. Eso es

lo que más me ha hecho simpatizar con Fideline, que para ella estudiar es importante para ser

alguien en la vida.

En Occidente, los jóvenes por lo general suelen tener todo lo que necesitan al alcance de sus

manos y no valoran sus estudios como lo hacen los niños que no pueden ir a una escuela por

equis motivos.

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Tercera foto: Dowla, 22 años, con dos de sus seis hijos.

Esta fotografía esté hecha en el campamento de Doro en Sudán del Sur. Dowla tuvo que

marcharse de su pueblo natal, Gabanit, en el estado del Nilo Azul en Sudán del Sur por los

constantes bombardeos que había en la zona.

El palo de madera que lleva en los hombros fue su objeto más preciado al huir de su pueblo,

pues con el pudo transportar en su viaje de 10 días a sus seis hijos cuando se encontraban

cansados. Sin lugar a dudas esta mujer es una persona fuerte y luchadora, y por supuesto,

digna de toda mi admiración y me atrevería a decir que de cualquiera.

V. Conclusión.

Actualmente somos dependientes de los móviles, tener internet, un coche bonito, unas

vacaciones en la playa en un hotel de lujo, en pocas palabras somos víctimas del consumismo.

“The most important thing. Retratos de una huida” me ha hecho reflexionar en lo que

verdaderamente es importante para mí. No voy a negar que todas esas cosas que he

nombrado, y otras que no he mencionado pero que también podrían encajar en el

consumismo, son de mi agrado. Por supuesto que cualquier persona desearía poder permitirse

lujos, pero con estos retratos he aprendido a valorar lo que sí tengo –porque por desgracia

otras personas no lo tienen- e intento no quejarme por lo que no tengo. Creo sinceramente

que es un ejercicio que deberíamos hacer todos.

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VI. Bibliografía.

http://obrasocial.lacaixa.es/nuestroscentros/caixaforummadrid/themostimportantthing_es.ht

ml (consulta: 6 de abril de 2015)

http://obrasocial.lacaixa.es/deployedfiles/obrasocial/Estaticos/pdf/Nuestros_centros/caixafor

ummadrid/diptico_the_most_important_thing.pdf (consulta: 6 de abril de 2015)

http://prensa.lacaixa.es/obrasocial/exposicion-most-important-thing-retratos-huida-brian-

sokol-caixaforum-madrid-esp__816-c-21694__.html (consulta: 6 de abril de 2015)

http://www.quesabesde.com/noticias/brian-sokol-refugiados-entrevista_13001#comentarios

(consulta: 6 de abril de 2015)

http://www.rtve.es/noticias/20150227/exposicion-sobre-refugiados-brian-sokol-algo-mas-

objeto/1105828.shtml (consulta: 5 de abril de 2015)

http://briansokol.com/ (consulta: 5 de abril de 2015)