revista much cine abril 2015
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1.- Críticas
Crítica de ‘Selma’ por Gerardo
Medina
Década de los 60. Un período de la historia americana que supuso
enormes cambios para un colectivo de su sociedad que hasta
entonces había sufrido de los males de la discriminación y la
xenofobia. En un país en el que Lyndon B. Johnson mandaba
soldados negros a un recóndito lugar del mundo llamado Vietnam
a luchar por una nación que no les defendía en casa, una persona
de color no podía ni siquiera ir a votar, y eso le impedía formar
parte de un jurado constituido en su totalidad por blancos. Un
hombre cambió esto para siempre. Y ocurrió en una pequeña
ciudad, convertida en bastión de la lucha por los derechos civiles.
“Selma” no es la biografía de un buen pastor que guió a su pueblo
hacia la reclamación de un derecho que les pertenecía, aunque sí
que es un acertado retrato de su personalidad y su excelente
capacidad de oratoria y para liderar a las masas hacia
resoluciones pacíficas. Es la historia del periplo de toda una
comunidad hacia esa reivindicación, simbolizada por una marcha
que les llevó desde la localidad que da nombre a la cinta hasta
Montgomery.
Por ello, estamos ante un film de enorme importancia histórica,
una especie de dossier que recoge los archivos más destacados
de ese viaje, con un tono bastante objetivo a pesar de cierta
tendencia hacia la caricaturización de determinados dirigentes
políticos que no salen demasiado bien favorecidos en la película.
Pero, sobre todo, es una cinta que desprende un enorme orgullo
por la historia que cuenta y cómo lo cuenta, y sobre todo por sus
propias raíces y quienes ayudaron a forjar un sueño.
Ava Duvernay ofrece un trabajo con un acabo impecable a nivel
cinematográfico. Un guión solvente, muy buenas interpretaciones
–mención especial para David Oyelowo, transmutado en el Martin
Luther King perfecto-, sobresaliente ambientación y una banda
sonora de lo más adecuada. La cineasta muestra un buen pulso
tras la cámara y ofrece momentos de enorme potencia e impacto,
como la escena del asentamiento ante la Oficina de Registro o la
del restaurante, que llegan a impactar y causar dolor en el
espectador por lo que se muestra en pantalla.
Sin embargo, Duvernay se muestra incapaz de mantener este
tono durante toda la propuesta, y el conjunto presenta altibajos
y pérdidas de ritmo. Lo que resulta en general es una película de
intensidad moderada, y que obliga a pensar en la triunfadora de
los Oscar del pasado año, “12 años de esclavitud”, que sin ser un
prodigio sí poseía mayor intensidad que la que nos ocupa. Y
también, por supuesto, que da la sensación de que la nominación al
Oscar a mejor película le ha venido grande, aunque por ello no
deja de ser una cinta de aconsejable visionado y que muestra un
enorme orgullo por su pueblo, pero también la otra cara, la de los
prejuicios más dolorosos que hacen avergonzarse de ser humano.
NOTA: 6 sobre 10
Crítica de ‘Desterrado’ por Gerardo Medina
El cine de los proscritos
China se está convirtiendo en el nuevo reducto de salvación para
muchas producciones hollywoodienses. Cada vez con mayor
asiduidad, la Meca del Cine pone su empeño y esfuerzo en
estrenar por todo lo alto sus proyectos en el país asiático,
asegurándose no pocos réditos en taquilla. Pero además, China se
ha convertido en refugio de varias estrellas venidas a menos,
convertidas en parias en su propia tierra. Ahí están Tim Robbins
y Adrien Brody en “1942”, o este último, junto a John Cusack, en
la superproducción “Dragon Blade”.
Como si su propio título fuera en sí mismo un reflejo y un toque
de atención hacia esa industria que defeca a sus propios astros
tan fácilmente como los exprime, si bien algunos de ellos se
merecen vivir en el ostracismo, “Outcast” –en España
“Desterrado”- viene a ser un nuevo ejemplo de producción china
que adopta a actores expatriados como reclamo para atraer a
espectadores a las salas.
Y lo demás está de más. Ni siquiera la ampulosidad de sus medios
artísticos –la ambientación de la China medieval está bien
conseguida- importa. Lo que prima es poner a sus dos estrellas
principales al servicio de la historia y pasearles por la pantalla. El
guión, sencillamente, no existe. Todo es previsible y tosco. Dos
caballeros templarios desterrados defendiendo la vida del futuro
rey, perseguido por su hermano traidor. Por el camino, alguna
historia de amor secundaria mal presentada y peor desarrollada,
y una nula mano para dirigir a los actores y las escenas más
íntimas por parte de Nicholas Powell, que sí demuestra su
experiencia en el campo de los especialistas con escenas de
combate bastante bien coreografiadas.
Lo dicho, aquí lo relevante es hacer desfilar con orgullo a un soso
Hayden Christensen y al eternamente sobreactuado Nicolas
Cage, cuyo peinado imposible –aunque el estilo punk de su
compañero no se queda atrás- y su histrionismo vuelven a desviar
la atención del resto de la película. Al menos, eso sí,
“Desterrado” no es ni mucho menos la peor película que el
intérprete nos ha regalado en esta última etapa de su carrera.
Por lo menos, ésta entretiene mínimamente, aunque se olvide con
suma facilidad. Pero sí que es el enésimo ejemplo
cinematográfico del proscrito en el que se ha convertido.
NOTA: 3 sobre 10
Crítica de ‘Focus’ por Gerardo Medina
Ningún as bajo la manga
La campaña de promoción de esta película se ha centrado en la
que a priori parece su mayor baza, la química en pantalla de su
pareja protagonista. Y es un acierto, porque realmente existe
esa química. Se nota la complicidad en sus miradas, se
compenetran a la perfección en las escenas dramáticas y en las
cómicas, así como en las más subidas de tono. Will Smith, aunque
ha perdido la estrella de antaño, sigue resultando
tremendamente carismático, la cámara le quiere. Pero es Margot
Robbie la que acapara la atención. Puede ser frágil y a la vez
sexy, es un portento de actriz que aúna belleza, seducción y
dotes interpretativas. Ambos juegan con la cámara. Cada uno a su
manera.
Si “Focus” se hace amena es precisamente por esa química, por lo
bien que ambos se desenvuelven en esta historia de estafadores
con escrúpulos, de timadores tan blandos como una nube de
algodón. La trama por la que se mueven ya le sonará a más de uno,
porque no evita hacer uso de los tópicos del subgénero. Su
primera mitad es tan ágil como el movimiento de manos de un
carterista, está bien narrada y montada, pero no aporta nada a lo
ya visto en otras cintas de este estilo, como “Ocean’s Eleven”,
“Los timadores” o “El golpe”, todas ellas mejores que la que nos
ocupa.
Y pese a esa tópica, pero entretenida, primera mitad, acabas
lamentándote de que la propuesta no siguiera esa senda en lo que
resta de metraje. El ritmo baja, el tono se relaja, y comienza un
film romántico destinado a explotar esa química entre sus dos
actores principales que va decayendo en interés. Y si no fuera
por el buen trabajo de ambos, y lo bien que se compenetran, este
segundo tramo se haría más pesado de lo que ya es. Hacia el final
parece acordarse de que juega con el subgénero de los timadores
con algún que otro giro de guión más o menos imprevisible –
aunque no es difícil descubrir la trampa-, pero el clímax aún así
carece de emoción.
Lo peor que le puede pasar a una cinta de estas características
es no guardar ningún as bajo la manga. Lo nuevo del dúo formado
por Glenn Ficarra y John Requa, que despuntaran hace unos años
con la irregular, aunque valiente, “Philip Morris ¡Te quiero!”, no
posee ninguno. No hay chispa, no hay sorpresa, todo se basa en
juntar a dos actores que hacen explotar nuestras retinas con lo
bien que compaginan. Cualquiera se dejaría embaucar por estos
dos. Pero no por esta película.
NOTA: 4 sobre 10
Crítica de ‘Citizenfour’ por Gerardo Medina
La América post 11-S
Ya en sus primeros minutos, Laura Poitras nos avisa de la
persecución a la que fue sometida tras el estreno de su primer
documental en solitario, centrado en la Guerra de Irak, de cómo
fue detenida e interrogada en las fronteras de Estados Unidos,
pasando a formar parte de una lista negra secreta de individuos
a seguir por el Gobierno. Todo ello después del día en que
Estados Unidos cambió para siempre, de la fecha en que los
controles aeroportuarios se volvieron más restrictivos y
exhaustivos, de que toda una nación viviese constantemente
amenazada y necesitase reforzar su seguridad a toda costa.
“Citizenfour”, ganadora del Oscar a mejor film documental, viene
a completar la particular trilogía de la directora sobre la
América post 11-S, una radiografía acertada del concepto que
tiene el país sobre los mecanismos de seguridad del estado para,
a priori, evitar posibles ataques terroristas. O al menos, ésta es
la excusa. Porque la América que Poitras refleja en esta película
hace todo lo posible por garantizar la seguridad nacional, a
cualquier precio.
El documental utiliza la figura de Edward Snowden, el hombre
que desveló los planes ocultos en materia de vigilancia
cibernética por parte de la Agencia de Seguridad Nacional, que
fue acusado de espía y de anti patriota por el propio presidente
por revelar secretos de estado, para tocar temas
tremendamente ambiciosos: hasta qué punto está siendo vigilada
la población estadounidense y mundial, hasta qué extremo se nos
intervienen conversaciones telefónicas, correos electrónicos o
búsquedas en Internet, o si es lícito violar la privacidad del
individuo en pos de asegurar la seguridad de todo un pueblo.
Pese a todos estos temas, lo difícil en un documental es
mantener el ritmo y el interés del espectador, algo que la
realizadora no consigue. Es paradójico que lo que viene a centrar
buena parte de su metraje, los ocho días que Poitras y su
compañero del diario The Guardian Glenn Greenwald pasaron con
Snowden, se convierta en lo más tedioso y pesado de su nuevo
trabajo, y que la sensación sea la de que sobra metraje, la de que
le falta ir al grano, algo que sí consigue durante sus primeros y
últimos veinte minutos. Tan paradójico como el hecho de que
aquellos en quienes depositas tu propia seguridad son justamente
los que atentan contra tu privacidad. Pero no deja de ser una
obra interesante sobre esa gran mentira que es la América
demócrata de Obama, la que nació bajo los cimientos del 11-S, la
que tiene más razones que nunca para vivir con miedo. No de la
amenaza externa, sino de lo que tiene en casa. La mayor
dictadura se esconde precisamente en eso que llamamos
democracia.
A favor: los interesantes temas que trata
En contra: las entrevistas a Snowden se pueden volver pesadas
Calificación ***
Merece la pena
Crítica de ‘Pasolini’ por Gerardo Medina
El arte que imita al arte
El Coliseo Cuadrado, en Roma, dedica en su fachada unas palabras
al pueblo italiano, un pueblo de artistas, poetas, héroes,
navegadores, pensadores, científicos y santos, convirtiéndose,
casi de manera inconsciente, en un monumento alzado en defensa
de la cultura de todo un país. Atrás quedan ya los años en que
Mussolini encargase su construcción, en que se convirtiera en un
icono del fascismo.
Así, con esta contraposición de ideas, presenta y culmina Abel
Ferrara su particular retrato de uno de los más grandes
cineastas de la cinematografía italiana, Pier Paolo Pasolini. Un
edificio que representaba, al menos en sus comienzos, una
ideología totalmente contraria a la que el cineasta defendía. Y
una historia, la suya propia, que transcurriría marcada por la
anécdota de que su propio padre había salvado al mismísimo
dictador de morir en un atentado.
Pero más allá de esta doble paradoja socio-cultural, lo que
Ferrara busca también es la provocación. Porque Pasolini era un
director arriesgado, subversivo, provocativo hasta el exceso. Y el
encargado de “Teniente corrupto” busca provocar y arriesgar con
su nuestro trabajo. Su “Pasolini” no es un biopic al uso, no recoge
la vida de su protagonista, sino que se hace eco de las últimas
horas de vida del maestro, sus últimas entrevistas, en las que
hablaba precisamente de los peligros del fascismo. Así, su
película no se limita a mostrar una vida que bien daría para una
serie de filmes, sino que trata de plasmar en imágenes las
inquietudes del escritor y poeta, lo que le pasaba por la cabeza al
realizador, enfrascado por aquel entonces en el doblaje al
francés de su obra más transgresora, “Saló y los 120 días de
Sodoma”.
Pero todo riesgo tiene un precio. Y es que Ferrara cree que
homenajear consiste en mirarse al ombligo, y pretende
convertirse en el reflejo contemporáneo del personaje al que
retrata. Se mete en su mente y fantasea con ofrecernos en
imágenes la que podría haber sido su siguiente película, o en
mostrarnos cómo él mismo habría rodado sus fantasías y relatos,
con toda la violencia gráfica y explicitud sexual de las que hacía
gala Pasolini. Trata de emularle en un ejercicio de soberbia y lo
que le queda es una propuesta para unas minorías pertenecientes
a clubes muy selectos, tediosa y aburrida.
Y lo peor, que se queda a medias en su retrato. Ni emociona ni se
convierte en un retrato acertado del artista, no consigue
acercarnos a él. “Pasolini” es un homenaje ensimismado al que
parece que le falta metraje. Dura ochenta minutos y parece que
dura el doble, y aún así parece un montaje final cortado. Lo único
salvable de ella es el trabajo de Willem Dafoe, metido en la piel
de su personaje a pesar de su marcado acento inglés de
Wisconsin –algo que la versión italiana intenta remediar doblando
al actor con la voz de otro intérprete italiano, siendo el resultado
aún peor-, en un ejercicio de imitación del artista, muy
convincente. Incluso en este aspecto este proyecto es un ejemplo
de arte que imita al arte.
NOTA: 2.5 sobre 10
2.- Estrenos de Cine
Destacados del mes de
abril
En lugar de publicar todos los estrenos del mes en la revista
como hemos venido haciendo en la mayoría de números
anteriores.
Vamos a seleccionar los que a priori parecen los 3 mejores
estrenos del mes. Y podéis consultar todos los estrenos en la
sección de cartelera de la web (www.muchcine.com).
Los seleccionados de este mes son:
1.- ‘Vengadores: la era de ultrón’
2.- Fast & Furious 7
3.- El maestro del agua
Título original
The Avengers: Age of Ultron (The Avengers 2) aka
Año 2015
País Estados Unidos Estados Unidos
Director Joss Whedon
Guión Joss Whedon (Cómic: Stan Lee, Jack Kirby)
Música Brian Tyler
Fotografía Ben Davis
Reparto
Robert Downey Jr., Chris Evans, Mark Ruffalo, Chris Hemsworth, Scarlett
Johansson, Jeremy Renner, Alexis Denisof, James Spader, Aaron Johnson,
Elizabeth Olsen, Thomas Kretschmann, Paul Bettany, Josh Brolin, Samuel L.
Jackson, Hayley Atwell, Don Cheadle, Claudia Kim, Andy Serkis, Idris Elba,
Tom Hiddleston
Productora
Marvel Studios
Género
Fantástico. Acción. Ciencia ficción. Aventuras | Superhéroes. Cómic. Marvel
Comics. Secuela. 3-D
Sinopsis
Cuando Tony Stark intenta reactivar un programa sin uso que tiene como
objetivo de mantener la paz, las cosas comienzan a torcerse y los héroes
más poderosos de la Tierra, incluyendo a Iron Man, Capitán América, Thor,
El Increíble Hulk, Viuda Negra y Ojo de Halcón, se verán ante su prueba
definitiva cuando el destino del planeta se ponga en juego. Cuando el villano
Ultron emerge, le corresponderá a Los Vengadores detener sus terribles
planes, que junto a incómodas alianzas llevarán a una inesperada acción que
allanará el camino para una épica y única aventura.
SINOPSIS LARGA
1919. Ha pasado un año del final de la Gran Guerra, aunque sus
repercusiones aún se sienten por todo el planeta.
En el Mallee, en la Australia rural, JOSHUA CONNOR (Russell
Crowe), un rudo granjero y zahorí, tiene que vivir con el
demoledor hecho de que, cuatro años después de la batalla de
Galípoli, lo único que ha recuperado de sus tres jóvenes hijos es
un pequeño paquete envuelto en papel marrón con un diario sucio
y ajado, unas cuantas cartas y fotos.
Una repentina tragedia, provocada por la larga sombra del dolor,
proporciona a Connor el estímulo que necesita para decidirse a
viajar más de 14 000 kilómetros con el fin de recuperar los
cuerpos de sus hijos y llevarlos de vuelta a casa. Es el único acto
casi imposible que cree que honrará el recuerdo de los jóvenes y
le traerá paz a él.
En Constantinopla, una ciudad a caballo entre dos continentes que
se hunde bajo el peso de un Imperio otomano que se desmorona,
Connor se ve sumido en un mundo completamente distinto del
suyo... o eso cree. Se siente aún más inquieto por la presencia de
AYSHE (Olga Kurylenko), la hermosa y compleja mujer cuya
otrora gran familia es propietaria del hotel en que se aloja
Connor.
En Galípoli, los cuerpos se van recuperando laboriosamente del
devastado escenario. El TENIENTE CORONEL HUGHES (Jai
Courtney) solicita ayuda al héroe de guerra turco
COMANDANTE HASAN (Yilmaz Erdogan). A estos antiguos
enemigos los une un respeto mutuo, ya que ambos lucharon en
esta batalla. La locura de la guerra no tomó partido por nadie.
La burocracia, en forma del británico CAPITÁN BRINDLEY (Dan
Wyllie), impide a Connor el acceso a Galípoli y a los restos de sus
hijos, pero su determinación es inquebrantable y no tiene
intención de rendirse. Se vale de los instintos que lo convierten
en un zahorí para sentir su presencia, pero parece que uno de sus
chicos no descansa en este arrasado lugar. ¿Podría el mayor de
sus hijos seguir con vida?
Para descubrir la verdad, deberá aprender a confiar en Hasan, en
JEMAL (Cem Yilmaz), uno de los sargentos de Hasan, y en Ayshe,
cuyo destino parece cada vez más ligado al suyo propio.
Mientras las tensiones políticas desatan una nueva oleada de
violencia, y los británicos lo obligan a marcharse, Connor deberá
emprender una carrera contra reloj, con peligros acechándolo
por todas partes, para descubrir la verdad sobre su hijo y la
naturaleza de la verdadera amistad y el amor.
ACERCA DE LA HISTORIA - UNA FORMA DE VER GALÍPOLI
Mientras se documentaba para un proyecto sobre historia de
Australia, el autor y guionista de Melbourne Andrew Anastasios
se topó con una carta de un individuo llamado Cyril Hughes, un
teniente coronel que fue parte fundamental de la Comisión
Imperial de Tumbas de Guerra, que llevó el orden al abandonado
campo de batalla de Galípoli en los años inmediatamente
posteriores a la Primera Guerra Mundial.
En esa carta encontró una frase sumamente interesante:
“Un tipo logró llegar aquí desde Australia, en busca de la tumba
de su hijo”.
Esa línea fue toda la inspiración que necesitó para incitar la
creación de una increíble historia de pérdida abrumadora y amor
incontenible.
Galípoli se ha representado con frecuencia en las pantallas
australianas (e internacionales). A las pocas semanas de los
desembarcos de 1915, ya se habían realizado dos recreaciones
por parte de compañías cinematográficas australianas.
Ha hecho falta mucho tiempo para que se produjera en Australia
una película sobre la leyenda de los ANZAC (acrónimo de los
Cuerpos de Ejército de Australia y Nueva Zelanda, por sus siglas
en inglés) que no se centrara en la naturaleza icónica de la
batalla, sino que pretendiera recoger la intimidad y el patetismo
de la búsqueda de un hijo que emprende un padre. EL MAESTRO
DEL AGUA toma esa búsqueda como punto de partida y, lo que
también es importante, muestra la batalla y sus consecuencias
desde el punto de vista de ambos bandos y en un contexto más
amplio.
De hecho, la película no empieza con los ANZAC, sino con los
turcos que, como los Aliados, son una mezcla de soldados
veteranos y “chicos aterrados”. La experiencia supuso un trauma
devastador, para ambos bandos.
EL MAESTRO DEL AGUA ofrece una visión de la historia de
Galípoli decididamente centrada en el perdón, tanto a los demás
como a uno mismo. La abrumadora presión de la culpa que siente
Joshua Connor casi acaba por dominarlo, pero descubre que el
poder curativo del amor puede dotar a alguien de una fuerza,
resistencia y determinación sobrehumanas.
1919: EL MOMENTO, EL LUGAR
Joshua Connor intenta encontrar a su hijo entre los restos de un
viejo mundo, a partir del cual se está creando violentamente un
nuevo mundo. Está rodeado de una gran devastación, de una gran
ruina, pero de ella surgirá ese nuevo mundo.
En 1918, la humanidad intentaba recuperarse del final de la Gran
Guerra, mientras presenciaba el desmoronamiento de otrora
grandes imperios. El Imperio otomano, de seiscientos años de
antigüedad, ha caído derrotado y Anatolia es ocupada y dividida,
dejando lo que acabaría convirtiéndose en la Turquía moderna.
Constantinopla, ahora Estambul, en la que debe ahondar Joshua
Connor, siempre ha sido una de las ciudades más significativas
del mundo, capital, en distintos momentos de la historia, de
cuatro imperios, por la que se ha luchado durante siglos, por su
situación estratégica en la Ruta de la Seda y como única ruta
marítima entre el Mar Negro y el Mediterráneo.
Un tratado de octubre de 1918 concedió a unos victoriosos
Aliados el derecho a ocupar fuertes que controlaban los
estrechos de los Dardanelos y el Bósforo. Los británicos
afirmaron no tener intención de ocupar Constantinopla pero, en
noviembre, una brigada francesa entró en la ciudad, seguida de
navíos británicos, franceses, italianos y griegos, que desplegaron
tropas sobre el terreno. Y así empezó la ocupación moderna de
Constantinopla, que duraría cuatro años.
En 1919, se funda la Sociedad de Naciones y se producen una
serie de acontecimientos a escala mundial, cuyas repercusiones
aún se siguen sintiendo en la actualidad; en febrero, tropas
soviéticas avanzan para ocupar Ucrania.
Los rusos, británicos, italianos, franceses, griegos y armenios
reclamaron todos ellos los territorios de Anatolia, pero los
turcos étnicos empezaron a resistirse. La campaña griega por
Anatolia Occidental se inicia en mayo de 1919, con el desembarco
de tropas griegas, encabezadas por los evzones, en Esmirna. Las
tropas griegas empiezan a avanzar desde Esmirna y comienza la
Guerra de Independencia turca.
Mustafá Kemal (Atatürk), oficial del ejército durante la Primera
Guerra Mundial y cabecilla del Movimiento Nacional Turco, dirige
el bando turco en esta batalla por su identidad, que acabará con
la instauración de la República de Turquía en 1923.
Pese a todas estas fuerzas en conflicto y a las precarias
lealtades en constante cambio, Joshua Connor encuentra un
verdadero amigo en el COMANDANTE HASAN, y juntos se
abrirán paso por un país asolado por la guerra en busca de los
hijos de Joshua.
EL RODAJE
Aunque apenas una quinta parte de la historia de EL MAESTRO
DEL AGUA se desarrolle en Australia, fue la base de casi tres
cuartas partes de la filmación de la película.
El rodaje empezó en diciembre de 2013 con tres semanas en
Sídney, sobre todo en platós de estudio, para las escenas
ambientadas en un hotel de Estambul, y con un par de días en
lugares cuidadosamente seleccionados y decorados de las partes
más antiguas de la ciudad.
Después continuaría en enero y febrero de 2014, con cinco
semanas en Australia Meridional, tanto para las escenas de la
campiña australiana, como con la costa sur haciendo las veces de
Galípoli y ciertas localizaciones casi desérticas haciendo de la
Turquía rural. Se encontraron con un entorno complicado, a veces
brutal, en el calor del verano, con condiciones meteorológicas
impredecibles. Sin embargo, esa experiencia sólo sirvió para
reforzar la determinación del reparto y del equipo de ser, en
palabras de Russell Crowe, infatigables.
El productor Keith Rodger comenta: “Sabíamos que íbamos a
rodar en mitad del verano, pero no creo que nadie se esperara el
calor tan extraordinariamente intenso que nos encontramos en
esa zona de Australia Meridional”.
“Un día estábamos a 49,5 ºC en el set, mientras rodábamos una
emboscada a un tren en un remoto paraje campestre. Eso ya es
algo difícil de manejar en un buen día, se sale totalmente de lo
normal y, evidentemente, la seguridad es lo primero. Luego, en el
set del campo de batalla y las trincheras, en el Valle McLaren,
nos pilló el otro extremo: unas lluvias torrenciales que obligaron a
detener el rodaje”.
El actor Yilmaz Erdoğan (COMANDANTE HASAN) recuerda
sobre la experiencia: “Filmar en Australia tuvo sus desafíos.
Cuatro estaciones en un día, con calor, viento y una tormenta de
arena. La primera semana no fue fácil, porque no nos
esperábamos nada así. Me hice a la idea de que seguía un ciclo de
calor, viento, tormenta, lluvia, ¡pero por suerte nuestro vestuario
incluía abrigos!”.
El productor Andrew Mason explica: “Los equipos de rodaje son
duros, pero cuando ves a sus miembros claramente afectados por
el calor, no queda más remedio que renunciar al resto del trabajo
de ese día... y lo mismo sucede cuando llueve en una cantera y el
set del campo de batalla queda hecho un desastre en el que es
imposible trabajar. Ninguna de estas cosas son buenas; pero
aportan cierta dureza al proceso de filmación”.
Miembros clave del reparto y del equipo australianos se
trasladaron entonces a Turquía para otras tres semanas de
rodaje, tanto en puntos emblemáticos de Estambul, como en
lugares antiguos de la costa mediterránea. Allí se incorporó a la
filmación un equipo turco de tamaño considerable, así como
muchos nuevos actores al reparto, y se forjó al instante un
vínculo entre todos los miembros, ayudado por el deseo de todos
ellos de hacer que el proceso fuera lo más fluido posible y las
escenas resultaran memorables.
Las autoridades turcas se mostraron absolutamente
colaboradoras y permitieron al equipo de rodaje filmar en el
palacio de Topkapi, en las atestadas calles del barrio de Balat de
Estambul, e incluso en la emblemática y maravillosa Mezquita
Azul.
La posproducción se realizó en Sídney, con un equipo de montaje
al que se unieron un equipo de primera de artistas de efectos
visuales, compositores, un equipo de sonido y especialistas en
color.
EL REPARTO Y SUS PERSONAJES
RUSSELL CROWE (JOSHUA CONNOR)
Russell Crowe es uno de los actores más alabados del panorama
cinematográfico actual.
Tras saltar a la fama con su papel en “Romper Stomper” (1992),
no tardaría en hacerse conocido por la intensidad de sus
interpretaciones, su dedicación absoluta a su oficio y la riqueza y
variedad de los papeles que elegía.
Ha ganado un Óscar (“Gladiator”, 2001), un Globo de Oro y un
premio BAFTA (“Una mente maravillosa”, 2002) como “mejor
actor” y ha sido nominado en otras ocho ocasiones más en esa
misma categoría de estos galardones. Entre sus 40 premios
significativos a la interpretación de distintos lugares del mundo,
figuran 5 galardones del Australian Film Institute (Instituto del
Cine Australiano, o AFI, por sus siglas en inglés).
Sus estrenos más recientes incluyen “Noé”, de Darren
Aronofsky, y “Cuento de invierno”, de Akiva Goldsman, y pronto
será posible verlo también en “Fathers and Daughters”, frente a
Amanda Seyfried, Diane Kruger y Octavia Spencer. En la
actualidad, se encuentra rodando “The Nice Guys”, con el
director y guionista Shane Black, frente a Ryan Gosling y Kim
Basinger.
OLGA KURYLENKO (AYSHE)
Olga Kurylenko nació en Ucrania, donde estudió arte e idiomas y
pasó siete años aprendiendo piano en una escuela local de música,
así como ballet durante 13 años.
A los 13 años, Olga fue descubierta en Moscú por un agente, que
la abordó en una estación de metro y le ofreció trabajo de
modelo. Después de disfrutar de una carrera de gran éxito como
modelo internacional, se presentó en una agencia de actores,
decidida a hacer también carrera en la gran pantalla. Debutó
como protagonista principal, en el papel de ‘Iris’, de la cinta
francesa de 2005 “L’annulaire (The Ring Finger)”, y luego
aparecería junto a Elijah Wood en “Paris, je t'aime” (2006),
frente a Daniel Craig en “Quantum of Solace” (2008) y como
‘Julia’ en “Oblivion” (2013), frente a Tom Cruise y Morgan
Freeman. Entre sus trabajos más recientes, se encuentran el
thriller de espionaje “La conspiración de noviembre”, frente a
Pierce Brosnan, la adaptación juvenil “Vampire Academy” y “Un
día perfecto”, de Fernando León de Aranoa, con Benicio del Toro
y Tim Robbins.
Olga Kurylenko comenta: “Es una historia preciosa, me quedé
prendada de mi personaje. Cuando me estuve documentando,
conocí a una viuda en Turquía, que me dijo que incluso hoy día se
sintió presionada para casarse con el hermano de su marido, y
que ella también se negó a hacerlo. Para ella lo más importante
era la protección de sus hijos. Me di cuenta de que era igual para
Ayshe. Connor, al mostrarse cariñoso con Orhan, se gana la
confianza de Ayshe”.
En cuanto a la película y su director, Olga aporta lo siguiente:
“Russell es un director maravilloso. Creo que es porque es actor.
Cuando me da indicaciones, no sólo las oigo, también puedo
sentirlas”.
JAI COURTNEY (TENIENTE CORONEL CYRIL HUGHES)
Jai Courtney, natural de Sídney y graduado por la Western
Australian Academy of Performing Arts, ha saltado a la fama en
los dos últimos años, tras darse a conocer inicialmente frente a
Tom Cruise en “Jack Reacher” (2012). Desde entonces, ha
aparecido en “La jungla: Un buen día para morir”, con Bruce
Willis, “Divergente”, con Shailene Woodley, volvió a nuestra
cartelera la pasada Navidad con “Invencible (Unbroken)”, dirigida
por Angelina Jolie, y regresará pronto con “La serie Divergente:
Insurgente”, así como con “Terminator Génesis”, quinta entrega
de la clásica franquicia.
En cuanto a su labor de documentación para el papel, Jai explica:
“Cyril Hughes vio mucho durante la guerra y luego asumió la
enorme responsabilidad de planificar y crear lo que conocemos
hoy día como Galípoli. Lo que la gente ve allí cuando va es un
monumento conmemorativo que se convirtió en la obra de toda
una vida. Yo sentía curiosidad por saber qué clase de hombre
hace falta ser para dedicar tu vida a eso”.
“Leí cuanto había sobre su personalidad; había algunos detalles
personales básicos, pero, más allá de eso, fue una figura
enigmática. Tuve que tomar lo que sabía y, dadas las
circunstancias, crear el personaje casi desde cero”.
En cuanto a trabajar con Crowe, Jai recuerda: “Conocí a Russell
mucho antes de enterarme de que estaba trabajando en este
proyecto. Había leído que estaba preparando un guión, así que me
puse a intentar conseguir un papel, nos reunimos en Sídney y le
interesaba tanto como a mí. Así fue como empezó”.
“Hubo un día en que tuvimos que hacer mucho juntos; fue
entonces cuando me di cuenta de que estaba pasando de verdad,
estás intercambiando líneas de diálogo... nada menos que con
Russell Crowe; es increíble. Puede hacer una escena y no sólo
tomar decisiones para sí mismo, y hacer algún ajuste a tu
interpretación, sino que está pensando a la vez en todos los
demás elementos”.
“Lo primero que me dijo Russell en la primera reunión fue:
‘¿Sabes montar a caballo?”. Le respondí que sí, pero él sabía que
le estaba mintiendo. Me dijo que las dos cosas sobre las que
suelen mentir los actores son que saben montar a caballo y que
saben tocar la armónica. Pero la cuestión era que ese es el tipo
de cosas que definen un personaje para mí, llegas con unos
instintos básicos y se los aplicas al material”.
YILMAZ ERDOĞAN (COMANDANTE HASAN)
Yilmaz Erdoğan, es un cineasta, actor y poeta nacido en Hakkari,
Turquía, especialmente famoso en su país de origen por su
comedia que batió récords de taquilla “Vizontele” (2001), la serie
de televisión “Bir Demet Tiyatro”, así como “Vizontele Tuuba”
(2004) y “The Butterfly's Dream” (2013).
Yilmaz recuerda: “Uno de mis estudiantes de Estambul me dijo:
‘Russell Crowe quiere llamarte’, a lo que respondí: ‘¿Qué clase de
broma es esta?’. Cuando me encontré hablando con él por
teléfono, seguía pensando que era una broma. Hablamos del
proyecto y, tres meses después, me ofreció el papel”.
Siente una fuerte conexión con la historia, no sólo por haber
trabajado ya en su propio guión sobre Galípoli, sino por tratarse
de algo que ya había empezado cuando aún era niño. “Es un tema
muy importante para nuestros dos países. Cuando te crías en
Turquía, desde que tienes siete años empiezas a conocer este
acontecimiento, pero me di cuenta de que los australianos no
saben mucho sobre lo que perdimos nosotros. Fue una gran
sorpresa para mí”.
Para el personaje del COMANDANTE HASAN, Yilmaz se centró
en su humanidad esencial. “Mientras interpretaba este papel, no
dejaba de pensar en los 70 000 hombres que murieron allí y cómo
él lo presenció. Lo dirigió todo y los mató (al enemigo). No es una
experiencia fácil. Mi interpretación trata de pensar en él y en
defenderlo puesto que, en mi opinión, la gente (los personajes) es
defendible en todas las circunstancias. No es bueno para la vida
real, pero es bueno para la interpretación, intentar defender a
mi personaje”.
En cuanto a Russell Crowe, Yilmaz comenta: “Russell hace que
parezca que esta es su décima película. Yo no estaba tan
tranquilo durante el rodaje, pero intento aprender de su forma
de comportarse, ya que no se deja llevar por el pánico. Conoce los
detalles, te da unas breves instrucciones con lo que necesitas
exactamente. ¡Es un chef perfecto!”.
Sobre Cem Yilmaz (JEMAL), señala: “Esta es nuestra primera
película en inglés juntos. Nos conocimos en 1995, en 2000
trabajamos en nuestra primera película, que dirigí yo. Soy un
gran admirador suyo, y es mi amigo. Mi personaje es muy serio y
él es muy gracioso, a veces tengo que decirle que no quiero que
me haga reír”.
En lo referente a cómo ve la película ahora que está acabada:
“Hay dos cuestiones. Una es que es una película excelente. Y la
otra es que es muy especial para nosotros, no tenemos más que
una película (“Gallipoli”), que acaba cuando empieza la guerra.
Esta es una historia, de la posguerra, que creo que será muy
buena para todos nosotros, especialmente en Turquía, puesto que
es el centésimo aniversario; será muy emocionante verla”.
CEM YILMAZ (SARGENTO JEMAL)
“Me llamo Cem Yilmaz, soy un cómico de Turquía, pero no soy muy
gracioso, y ese es el problema”.
Pese a esta afirmación, Cem ha trabajado en más de 4 000
espectáculos de comedia, en varias comedias de éxito para la
gran pantalla, como “Vizontele”, de Yilmaz Erdoğan, y en la
parodia de ciencia ficción “G.O.R.A.”, de la que también fue
guionista. Sus incursiones en el terreno del drama han sido más
recientes, pero eso no disuadió a Russell Crowe de ofrecer a Cem
el papel de JEMAL.
Cem explica sobre su personaje: “Cuando leímos el guión, desde la
primera página me sentí inspirado por la línea: ‘Es un león
derrotado’, que no piensa en otra cosa más que en luchar en esa
escena. Cuando rodamos esa primera página, a Yilmaz, el otro
actor principal turco, y a mí nos pareció muy realista, nos pareció
que estábamos en la guerra. Es fácil crear una leyenda inventada
de cada historia, pero esto no es así, esto es una situación real,
una lucha real”.
“La parte humana del guión es que la historia no está ahí para
servir a nadie; no está más que sirviendo a la humanidad y al
aspecto humano de las secuelas de una guerra. En esta película no
hay villanos, hay víctimas. Connor tiene principios, pero los turcos
otomanos tienen principios y objetivos, y el inglés del caballo
tiene un objetivo futuro que cumplir”.
“La guerra es un sinsentido. Todo el mundo puede hablar de ella,
de su país. Puedes amar a tu patria, pero la guerra es otra cosa.
El año que viene se cumple el centenario, visité el lugar dos o tres
veces, y vi a los ANZAC y los turcos yaciendo juntos. Es una
historia muy triste, no se puede enseñar a la gente a olvidar”.
En cuanto a Crowe, Cem aporta: “Me sorprendió lo sensato que
es. Todo el mundo tiene su idea de cómo es, pero estaba muy
centrado y se tomaba el proyecto y su responsabilidad como
director muy en serio. Demostró ser un buen ejemplo de cineasta
serio”.
En cuanto a Yilmaz Erdoğan, Cem confiesa: “Ya había trabajado
con él en dos películas que él mismo dirigió, es un buen amigo y, al
estar juntos, nos dimos mutuamente seguridad”.
RYAN CORR (ARTHUR CONNOR)
En 2011, Ryan Corr, natural de Melbourne, recibió la prestigiosa
beca ‘Heath Ledger’ de Australians in Film. Ryan terminó en 2009
sus tres años de estudios en el NIDA (Instituto Nacional de
Arte Dramático de Australia) convertido en uno de los graduados
más prometedores de su promoción. Entre sus créditos para
televisión figuran “Bajos fondos”, “Tangle”, “Redfern Now”, y el
papel de ‘Coby’ en la serie de gran éxito de Seven Network “De
vuelta al nido”.
Sus créditos cinematográficos incluyen “Not Suitable For
Children”, frente a Ryan Kwanten, por el que fue nominado como
“mejor actor de reparto” en los premios AACTA de 2013 y
recibió el premio al “mejor actor de reparto” del Círculo de la
Crítica Cinematográfica, y la cinta de Spike Jonze “Donde viven
los monstruos”.
Ryan comenta sobre su personaje: “Arthur es el mayor de tres
hermanos, un chico de campo. Se han criado en una granja,
valiéndose de su imaginación, no contaban con las cosas que
tenemos hoy día para distraernos. Sus hermanos se alistan para
luchar en la guerra, pero Art no va a permitir que vayan solos. Su
trayectoria en esta película consiste en tener que afrontar la
culpa por no conseguir cumplir lo que se comprometió a hacer con
su padre, que era cuidar de sus hermanos”.
“Fue el proceso de selección más duro por el que he tenido que
pasar nunca, fueron nueve fases y Russell quería poner realmente
a prueba nuestra capacidad para hacer todo cuanto nos pedía.
Sabíamos que se esperaba mucho de nosotros y, por consiguiente,
nos hemos esforzado todos al máximo”.
En cuanto a la experiencia en el campamento de instrucción, Ryan
recuerda: “Lo que Russell nos dijo fue ‘cuando estás hundido,
sudando, agotado y ya has hecho la toma treinta veces, cuando
has dado y has dado y ya no puedes dar más, y lo que quieres es
rendirte e irte a casa, lo único que se espera de ti es que sigas
dando’, y nos inculcó profundamente esa mentalidad”.
“Pasamos de apenas poder mantenernos sobre el caballo a ser
capaces de ir al galope sobre ellos con una sola mano. Contamos
con algunos de los mejores armeros y especialistas del mundo, y
con uno de los mejores actores del mundo confiando en nosotros
la experiencia de contar la historia. La mejor parte es tener la
suerte de tener oportunidad de formar parte de esto”.
“Creo que fue algo que le dijo Ridley Scott: ‘Si vuelvo y me dices
que se te ha ocurrido una idea a posteriori, te mato’, así que, por
favor, cualquier cosa que se te ocurra, exponla, por favor. Nos
sentimos creativamente muy involucrados en el proceso y se nos
han ocurrido ideas sobre nuestros personajes que se han
incorporado al guión”.
BEN O’TOOLE (HENRY CONNOR)
Ben O’Toole comenta: “EL MAESTRO DEL AGUA para mí trata
sobre un hombre que intenta superar el miedo a no saber”.
Ben ha aparecido en numerosos cortometrajes, así como en la
serie de televisión “Love Child”. Debuta en la gran pantalla con EL
MAESTRO DEL AGUA. Ben tiene lo siguiente que decir sobre su
papel: “Henry es el hijo mediano, y ha tenido que hacer cosas
para llamar la atención. Es el más fuerte físicamente de los tres
y yo diría que es un tanto revoltoso. Es el primero en alistarse,
con el beneplácito de su padre”.
“Ryan (Corr - ARTHUR) y yo somos buenos amigos, hemos
trabajado antes juntos y también conocía a James (EDWARD).
La camaradería entre los hermanos es un factor fundamental”.
“Nunca sabremos realmente cómo fue de verdad, pero en eso
consiste mi trabajo, en ponerme en esa situación y pensar: ‘tengo
un hermano pequeño’... Dicen que el hombre que no tiene nada por
lo que vivir es el que da más miedo, pero no estoy de acuerdo. Eso
es lo que hizo de los turcos un adversario tan formidable, porque
lo tenían todo que perder, tenían sus mujeres, sus hijos, sus
familias, todo que perder”.
La percepción que tiene Ben sobre la veracidad de la película y su
papel resulta impropia de alguien de tan corta edad: “Es muy
importante que interpretemos con absoluta veracidad, que lo
tienes todo que perder en ese momento. Espero que resulte
convincente (para los espectadores). Me costó mucho separar no
sólo la documentación, sino el vínculo emocional que sentía. Te
sientes obligado a convertirte en una clase de persona que jamás
querrías ser. Se dejaron llevar por la grandeza, la ilusión de ir a
la guerra para convertirse en héroes, pero la realidad que se
encontraron fue muy distinta”.
En cuanto a Russell, Ben opina: “Crecí viendo sus películas y es
uno de los actores que hizo que quisiera convertirme en actor. A
menudo he pensado que, si pudiera retroceder en el tiempo y
darme un golpecito en el hombro mientras veía ‘Gladiator’ para
decirme: ‘algún día, tendrás ocasión de conocerlo, de trabajar
con él y de interpretar a su hijo’... no me lo habría creído”.
“Me reuní con él, pero no llegó a hablar en ningún momento del
proyecto, simplemente nos sentamos y pasamos el rato, sentados
en su balcón, y me pareció surrealista conocerlo sin que estuviera
interpretando ningún personaje, ni lo estuvieran entrevistando,
sino estar simplemente sentado, de charla, con alguien a quien he
admirado desde pequeño. A lo largo de todo el proceso, se ha
mostrado sumamente generoso y cortés con su tiempo y era muy
importante para él que nos sintiéramos cómodos”.
JAMES FRASER (EDWARD)
James Fraser es especialmente conocido por sus papeles en las
producciones australianas “Los chicos de diciembre” y “Sleeping
Beauty”, así como la serie de televisión “Double Trouble”. En
opinión de James, EDWARD, el menor de los tres hermanos, “es
un joven bastante entusiasta. Quiere experimentar el mundo, ver
cosas y hacer cosas, y es esa inocencia lo que se pierde cuando
hay una guerra, y eso es lo que hace interesante para mí el viaje
de su personaje”.
James comenta sobre el período de ensayos y el grado de
inmersión que conllevó: “Tuvimos al último artesano de arcos en
activo de Inglaterra, que fabrica unos arcos largos increíbles,
enseñándonos arquería, y a dos de los mejores arqueros del
mundo enseñándonos a disparar, todo en el tiempo estipulado por
el sargento de instrucción Russell, lo que fue genial, nos lo
pasamos todos fenomenal”.
“Vivimos juntos durante dos semanas, así que nos volvimos
rápidamente como hermanos y nos llevamos todos muy bien. Lo
estupendo es que hubo tanto tiempo entre el primer ensayo y el
rodaje, que tuvimos ocasión de conocernos bien”.
En cuanto a Russell, James asevera: “Es una persona
increíblemente generosa y desprendida. El hecho de llevar tanto
tiempo cosechando éxitos como actor lo convierte en un director
muy compasivo y complaciente; sabe lo que va a resultarnos más
difícil, o más fácil, y también cómo conseguir lo que quiere de
nosotros”.
“Lo que más me gustó, que resultó a la vez alucinante y
aterrador, fue cabalgar en un animal a 75 km/h directo hacia
material de filmación valorado en miles de dólares. No nos salió
bien a la primera y tuvimos que hacerlo dos o tres veces hasta
que lo conseguimos; fue un subidón, muy emocionante, algo que
recordaré durante mucho tiempo”.
STEVE BASTONI (OMER)
Steve Bastoni, nacido en Roma, Italia, es especialmente conocido
en Australia por sus numerosos trabajos para televisión, además
de películas como “Matrix Reloaded” y “15 Amore”, por la que fue
candidato a un premio del AFI al “mejor actor”. Además de EL
MAESTRO DEL AGUA, también tiene pendientes de estreno
“The Half Dead”, con John Rhys-Davies, y “Broke”, con Brendan
Cowell.
Steve, que conoce a Russell Crowe desde hace más de 20 años,
comenta sobre él: “Se exige muchísimo, más que ninguna otra
persona que conozca. Espera esa clase de compromiso de todos
cuantos lo rodean, y puedes verlo como un inconveniente si te
toca ser el blanco de sus atenciones, pero puedes verlo de otra
forma, que es que conseguirás resultados que anteriormente
podrían haber sido inalcanzables para ti”.
En cuanto a su papel de OMER, Steve comenta: “Aprendí turco, y
fui a Turquía para hacer lo que yo llamo una inmersión cultural, no
sólo para mejorar mi turco, sino para entender mejor a Omer,
cómo podría haber vivido y desarrollado sus actitudes”.
DYLAN GEORGIADES (ORHAN)
El personaje de ORHAN es el primer papel cinematográfico de
Dylan, que explica que es su “primer papel importante, he hecho
algunos sketches de “Rove”, y he sido extra en un sketch de
Shaun Micallef y otras cosas menores, ¡pero esto no tiene nada
que ver con el set de ‘Vecinos’!”.
“Tengo un agente, que me consiguió una audición ante la cámara.
Me volvieron a llamar, así que fui a casa de Russell, lo que fue
muy divertido. Estaba un poco nervioso, pero lo superé rápido.
Me fui a un campamento del colegio un par de semanas después y,
al día siguiente de irme al campamento, mis padres se enteraron
de que había conseguido el papel. Me costó un poco darme cuenta
de que no estaban de broma”.
Dylan apunta sobre ORHAN: “Es descarado como yo. Siempre
está contento, pese a haber perdido a su padre, porque tiene la
esperanza de que siga vivo”.
“Tuve un profesor de turco que vino a mi casa cada día durante
dos horas y me enseñó el idioma. Aprendí mucho sobre Turquía,
su cultura y su lengua”.
En cuanto a Russell Crowe como director, Dylan opina: “Russell
puede convertirse en Connor muy rápido, igual que en todas sus
demás películas. Aquí es más difícil, porque también es director,
pero lo hace con facilidad”.
“Nunca fui muy llorón de pequeño, así que me costó hacer la
escena en la que tengo que llorar. Russell me ayudó mucho, me
motivó en todo momento, es la razón por la que me salió bien esa
escena”.
Fast & Furious 7
Sinopsis: Séptima entrega de la franquicia automovilística.
Título original: Furious 7
Año: 2015
País: Estados Unidos
Duración: ? minutos
Género: Acción, crimen, suspense
Estreno en España: 02-04-2015
Estreno en USA: 03-04-2015
Director: James Wan
Reparto: Vin Diesel, Dwayne Johnson, Jason Statham, Paul Walker, Michelle
Rodriguez, Kurt Russell, Lucas Black, Djimon Hounsou, Tyrese Gibson,
Deepika Padukone, Nathalie Emmanuel, Nathalie Kelley, Tony Jaa, Ronda
Rousey.
Guión: John Michael McDonagh.
Producción: Vin Diesel, Michael Fottrell y Neal H. Moritz.
Música: Brian Tyler.
Fotografía: Stephen F. Windon.
Montaje: Leigh Folsom Boyd, Dylan Highsmith y Christian Wagner.
Diseño de producción: Bill Brzeski.
Vestuario: Sanja Milkovic Hays.
Productoras: Universal Pictures, Relativity Media, Dentsu, Fast 7
Productions, Legendary Pictures, One Race Films y Original Film.
Distribución en España: Universal Pictures.