serie del recienvenido

11/7/2014 Ricardo Piglia: Hablamos en contra de un mercado que todava no hemos construido

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LITERATURA Viernes 24 de mayo de 2013 - 24/05/13 - 19:39

Ricardo Piglia: Hablamos en contra de un mercadoque todava no hemos construidoMientras cuenta detalles de su nuevo libro, un trabajo autobiogrfico que saldr a laventa en agosto, Piglia responde sobre las colecciones que dirige y las que quisieradirigir, sobre su tarea de divulgador (o canonizador) y sobre el auge del policial.Adems, celebra el trabajo de las editoriales chicas frente al avance de los gruposconcentrados.

Por Horacio Bilbao

Esta entrevista fue hecha en el vrtigo de la Feria del libro, de un modo exprs, al paso, como la

mayora de los encuentros que ocurren en ese espacio infernal. Ricardo Piglia llegaba a La Rural

casi corriendo, y en los pocos minutos que restaban para su presentacin, se sent a charlar con

nosotros, Revista , para luego s rumbear hacia su acto, enfocado en la Serie del

Recienvenido la coleccin que l mismo dirige y que publica Fondo de Cultura Econmica

(FCE). Sus ttulos, entre otros Nanina (Germn Garca), Minga! (Jorge di Paola) o El mal

menor (C. E. Feiling) hablan por s solos, pero Piglia los respalda con su autoridad. Recupera

autores que cayeron en el olvido, o que no tuvieron la circulacin que merecan y para ello usa

como criterio su valoracin personal. Aunque esta sea una entrevista exprs, al frente est uno

de los grandes referentes de la literatura argentina, y entonces los temas se disparan solos, se

superponen. El autor de Respiracin artificial ya no ensea en Princeton, pero su

hiperactividad es envidiable. Televisin, prlogos como el que acaba de escribir para los

Cuentos completos de Rodolfo Walsh, colecciones como la de FCE, charlas y una nueva novela

que saldr en agosto. Es una autobiografa de Renzi, un personaje que aparece en mis libros. Se

va a los Estados Unidos y all vive una experiencia que lo marca. Entonces escribe esa novela

que es el rastreo de esa experiencia, que en algn punto es la ma, dice. Y empezamos a

lamentar que est sea una nota exprs.

Qu significa para vos haber puesto de nuevo en circulacin y lectura estos

libros?

Yo creo que hay un dficit en la reedicin de textos. Hay un doble dficit. Estos textos deberan

haberse reeditado hace mucho tiempo. Pero el mercado funciona de una manera errtica, muy

sobre el presente, con esa idea de que un libro publicado hace seis meses ya es viejo. Si tenemos

un libro de los 60 o de los 80, parece que hablramos del siglo XIX. La coleccin, bsicamente,

est integrada por los libros que a mi me gustara leer o releer, me gui por mi propio gusto.

Tienen una capacidad de construccin estilstica que le da a la narracin la potencia que debe

tener.

Son superadoras de lo que ves en el presente?

Son textos que, publicados en otra poca, resuenan hoy. Es como si se hubieran conectado con

el presente. Pero tambin me gustara encarar una coleccin de primeras novelas. Soy un lector

de primeras novelas bastante continuo, y eso me mantiene al tanto de lo que se est escribiendo.

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Lo interesante es que todava no son escritores quienes las escriben. Estn en una escena

incierta, escucho una voz nueva cuando las leo.

Y no van a tener un gran lugar en este mercado acelerado y sobredimensionado

S, y nosotros nos quejamos mucho del mercado con razn, pero en un sentido conceptual.

Porque en Argentina no hay un mercado. Me parece que hablamos en contra de un mercado que

todava no hemos construido. Deberamos construir un espacio de circulacin de la literatura

que permitiera las reediciones, que hiciera lugar a textos que no estn en la velocidad de la

circulacin. Por el momento lo que encontramos es una renovacin de los catlogos y de las

mesas donde los libros se exhiben a una velocidad tal que es muy difcil hacerse una idea de qu

est sucediendo en esta produccin un poco abrumadora por momentos.

Esta coleccin, quieras o no, entra en la misma vorgine, qu espacios hay para

sortear esa encerrona?

Miro con mucho inters y simpata lo que hacen las editoriales chicas o independientes, una

alternativa a la concentracin de los grandes grupos que trabajan con criterios globales y no se

ocupan tanto de los escritores nuevos o de los poetas. All editoriales como Mansalva, Entropa,

La bestia equiltera, Eterna Cadencia, que hacen un trabajo muy interesante en la lnea de lo que

venimos hablando.

El acto de leer se parece cada vez ms al de mirar televisin?

Vos sabs que Macedonio hablaba del lector salteado, all en los aos 30. Hay algo de eso, pero

yo creo que tenemos dos prototipos de lector, el que se encierra, se evade, el modelo de la isla

desierta, como si solo se pudiera leer en una isla desierta porque no hay otra cosa que hacer. Y

por otro lado estamos los que leemos mientras hacemos cada vez ms cosas. Miramos

televisin, contestamos mails. Yo creo que esa lectura interferida, intervenida, es un poco la

lectura contempornea.

Se dice, ms bien se sabe, que has hecho mucho por muchos autores. Quiz Saer

sea el mejor ejemplo de esto, empujaste la difusin de su obra.

Lo que ms ayud fueron los libros que escribi.

Claro, pero sents un peso de canonizador a la hora de hablar de otros autores?

Todos los escritores, como lectores, leemos un libro que nos gusta y se lo queremos pasar a un

amigo. Entre los escritores funcionamos as, con una actitud de generosidad en estas

actividades que nos gusta compartir. Despus otra cosa es el efecto que eso pueda tener Qu es

la canonizacin? Y es una problemtica que surge para ordenar el mercado. Es una respuesta a

esta circulacin acelerada de la que hablbamos.

Pero puede haber una canonizacin virtuosa

S, pueden ser de toda ndole. Hay tantos canones que ya, prcticamente, cada uno tiene el

suyo.

Perdn que insista con esto, pero otro autor con quien tuviste una relacin de

este tipo fue con Andrs Rivera, cuya obra, a pesar de ser conocida, no alcanz la

magnitud de Saer. Sents que podras haber hecho ms por algunos autores?



Nunca lo he hecho a modo de poltica, sino a partir del entusiasmo que me despertaban los

libros que estaba leyendo. En el caso de Saer ramos muchos los que pensbamos que era una

injusticia. Vena escribiendo textos extraordinarios desde haca 20 aos y slo un grupo

pequeo de lectores estaba al tanto. Pero s, est esa sensacin de que es preciso divulgar

algunas obras. Despus, los escritores hablamos de aqullos autores que tienen algo en comn

con nosotros, con lo que hacemos. No es una cuestin de generosidad abstracta. Eso est muy

claro en Borges, que defenda a escritores muy menores porque no quera ser ledo con el

modelo de la novela de Tomas Mann. Entonces hablaba de Chesterton, Stevenson, la novela

policial, y as estaba ayudando a que sus textos tuvieran otro contexto, que no fuera el de

Dostoievsky o Mann.

El policial parece haber hecho pie entre los autores argentinos. Recuerdo una

entrevista con David Vias, en la que l me dijo. Viejo, mir si estar mal la

literatura, que hasta Piglia escribe policiales. Se refera a Blanco Nocturno, creo,

pero vos ya lo hacas desde Respiracin artificial

(Risas) S, claro. Pero yo recuerdo la poca en que nos veamos muchsimo con David, a l, pese

a que en un momento escribi policiales para ganarse unos pesos, no le gustaba ese asunto.

Consideraba que la literatura policial, con tanta violencia, tena algo de fascista. Y esa visin

circulaba mucho en algunos sectores de la izquierda. Nosotros leamos los policiales justamente

al revs, como una gran literatura social. Esos textos tienen un elemento cnico, pero es un

elemento cnico romntico, de alguien que ha perdido las esperanzas, como Marlowe. Pero en

este tiempo el policial ha encontrado otro espacio, se incorporan al gnero autores que no

escriben en ingls, los nrdicos, los franceses, italianos. Ha empezado a universalizarse el

gnero.

No tendr que ver tambin el mercado?

Si no entendemos el mercado siempre como una especie de maldicin. Porque hay estrategias y

estrategias en el mercado. Ahora pareciera haber un pblico que no tiene las caractersticas del

lector de policiales en los Estados Unidos, que es un pblico que por lo general slo lee

policiales.

Escritor, divulgador, profesor, con cul de estos roles si es que se pueden

separar ten sents ms cmodo?

Circulo por ah. Es una caracterstica de los intelectuales y escritores en la Argentina. Hacemos

periodismo, damos clases y nos ganamos la vida como podemos. Me parece que todo eso que a

primera vista puede sealarse como algo que interrumpe el trabajo creativo, finalmente lo

alimenta.

Revindicas entonces la figura del escritor intelectual, muy venida a menos?

Yo la reivindico. Me gustan esa clase de escritores. Pero sabs que soy un gran admirador de la

literatura policial, donde los escritores pueden ser un maquinista de tren, un nadador

profesional. El escritor puede hacer lo que sea para ganarse la vida, pero despus hay que ver

los libros que escribe.

Pero ahora el escritor que sale de Letras, con formacin acadmica, no tiene ya

ese perfil, quiz s unos juegos lingsticos, otros recursos

Pero esa tradicin, la del escritor intelectual, es muy argentina. Desde el siglo XIX, incluso en el

XX, con Borges mismo, a quien podemos considerar un intelectual en el sentido ms amplio.



Etiquetado como: Feria del Libro 2013

Ahora, la tensin entre los escritores surgidos de un ambiente acadmico y los otros, la

hablamos en otra entrevista.

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