tesis vÍctor pÉrez leÓn noviembre de 2010
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UNIVERSIDAD DE PINAR DEL RÍO HERMANOS SAÍZ MONTES DE OCA FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS
PROCEDIMIENTO DE AGREGACIÓN PARA LA CONSTRUCCIÓN DE
INDICADORES SINTÉTICOS DE SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE
TURISMO DE NATURALEZA EN CUBA
Tesis presentada en opción al título de Doctor en Ciencias Económicas
VÍCTOR ERNESTO PÉREZ LEÓN
Pinar del Río, Diciembre de 2010
UNIVERSIDAD DE PINAR DEL RÍO HERMANOS SAÍZ MONTES DE OCA FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS
PROCEDIMIENTO DE AGREGACIÓN PARA LA CONSTRUCCIÓN DE
INDICADORES SINTÉTICOS DE SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE
TURISMO DE NATURALEZA EN CUBA
Tesis presentada en opción al título de Doctor en Ciencias Económicas
Autor: Lic. VÍCTOR ERNESTO PÉREZ LEÓN
Tutores: Prof. Tit. Lic. Rafael E. Caballero Fernández, Dr. C. Prof. Tit. Ing. Isis A. Camargo Toribio, Dra. C.
Pinar del Río, Diciembre de 2010
AGRADECIMIENTOS A mis tutores, el Dr. C. Rafael Caballero Fernández y a la Dra.C Isis Camago Toribio
por las orientaciones durante todo el proceso de investigación.
A mi familia, por todo el apoyo que he recibido, no solo en este momento, sino toda la
vida.
A la Dra. C. Flor María Guerrero Casas, Dr. C Francisco Javier Blancas Peral, la Dra.
C. Macarena Lozano Oyola y la Dra.C Mercedes González Lozano, por la contribución,
sin medidas, a mi investigación.
Al Dr. C Andrés Erasmo Ares Rojas, por el apoyo durante todos estos años.
Al Dr. C Juan Luis Alfonso Alemán, Dr. C Fernando Domínguez Goizueta, Dr. C.
Osvaldo Fosado Téllez, Dr. C Antonio Escarré Esteve, y Dra. C Gliceria Gómez
Ceballos.
Al MS.c. Alain Hernández Santoyo y a la Ing. Osmara Valdés por el apoyo
incondicional.
Al Departamento de Matemáticas y al Centro de Estudios de Gerencia, Desarrollo Local
y Turismo de la Universidad de Pinar del Río por su constante preocupación por el
desarrollo de la investigación.
Al Área de Métodos Cuantitativos e Historia Económica de la Universidad Pablo de
Olavide, España, y al Departamento de Economía Aplicada, Matemáticas, de la
Universidad de Málaga, España, por haberme acogido durante tanto tiempo para
desarrollar el trabajo.
A la Decana de la Facultad de Informática de la Universidad de Holguín, la Dra. C.
Carmen Pino.
A la Dirección de Desarrollo del Ministerio del Turismo de la República de Cuba
(MINTUR), a la Delegación del MINTUR en Santiago de Cuba, especialmente a la
Dirección Comercial, a la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el
Hombre, FORMATUR Granma y Pinar del Río.
A los compañeros de la Empresa Forestal Integral de Cienfuegos y Sancti Spíritus, por
su ayuda en la aplicación de los cuestionarios.
A la agencia de viajes ECOTUR en todo el país, por su contribución en la aplicación de
los cuestionarios.
A los compañeros de la Empresa Extrahotelera Palmares, Delegación Pinar del Río, y
TRANSGAVIOTA en Holguín.
A la Universidad de Oriente, la Universidad de Granma y la Universidad de
Guantánamo, por la ayuda durante los viajes debidos a la investigación.
A la Oficinas Territoriales de Estadística de cada provincia incluida en el estudio.
A todas las personas que he tenido la posibilidad de conocer durante el tiempo que he
estado investigando.
A la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), por
la aportación financiera para llevar a cabo la presente investigación.
A los Cros. Yanet Bejerano Torrens, Alicia Alonso Pérez y Yosvany Borrego Carmona
A mis amigos, por estar siempre y, sobre todas las cosas, por soportarme.
DEDICATORIA
A mis padres y mi hermana:
Vida y Alegría.
SÍNTESIS En la actualidad, la industria turística sobresale entre las de mayor crecimiento a nivel
mundial, proporcionando innumerables beneficios para las localidades receptoras; sin
embargo, provoca daños al entorno donde tiene lugar, por lo cual, se precisa garantizar
su desarrollo de forma sostenible.
Los indicadores sobresalen entre las herramientas diseñadas para este fin, y se pueden
emplear de forma individual, o por grupos; de este modo, el objetivo general del
presente estudio consiste en diseñar un procedimiento de agregación para la
construcción de indicadores sintéticos globales de medición de la sostenibilidad en las
zonas de turismo de naturaleza en Cuba, mediante el empleo de técnicas de
Programación Matemática y Análisis Multivariante, que contribuyan a la elevación de la
calidad del proceso de toma de decisiones en la planificación del desarrollo de esta
modalidad turística.
Como resultado, se obtiene un nuevo procedimiento para calcular medidas globales de
sostenibilidad que permiten sintetizar la información contenida en un conjunto inicial de
indicadores sociales, económicos y patrimoniales, y contribuyen a la elevación de la
calidad del proceso de toma de decisiones en la planificación del desarrollo de esta
actividad. Su validación se realiza mediante la aplicación en las zonas de turismo de
naturaleza en Cuba.
ÍNDICE Pág. INTRODUCCIÓN………………………………………………………………. 1
CAPÍTULO 1. EL DESARROLLO TURÍSTICO SOSTENIBLE Y LA
CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES SINTÉTICOS………………………..
10
1.1 Desarrollo turístico sostenible………………………………. 10
1.1.1 Turismo de naturaleza…..…………………………...... 15
1.2 Los indicadores como soporte de la toma de decisiones en el
turismo…………………………………………………..
18
1.2.1 Los indicadores como herramientas para medir la
sistenibilidad de los destinos turísticos……...………...
20
1.3. Enfoques para la medición de la sostenibilidad mediante el
uso de indicadores…… …………………………...…...........
24
1.3.1 El enfoque no agregativo………………….………...... 24
1.3.2 El enfoque agregativo………………….……….…...... 25
1.4 Procedimientos de agregación para la construcción de
indicadores sintéticos……………………………………......
27
1.4.1 Igual peso para cada indicador inicial………………… 28
1.4.2 Indicadores basados en procedimientos estadísticos:
Análisis de Componentes Principales…………………
29
1.4.3 Indicador basado en la distancia a una situación de
referencia: Medida de distancia P2…………………….
31
1.4.4 Análisis Envolvente de Datos (el enfoque del
beneficio de la duda)……...…………………………...
32
1.4.5 Indicadores sintéticos obtenidos mediante técnicas de
decisión multicriterio……...……………………..........
35
1.4.5.1 Teoría de la Utilidad Multiatributo (MAUT).… 35
1.4.5.2 Proceso Analítico Jerárquico (AHP).……......... 36
1.4.5.3 El método PROMETHEE. …………………… 37
1.4.5.4 Procedimiento basado en Programación por
Metas (PM)……..……...……………………...
39
1.4.5.5 Métodos multicriterio no compensatorios.......... 41
Conclusiones parciales. Capítulo 1………………………..…………………….. 44
CAPÍTULO 2. PROPUESTA METODOLÓGICA DEL PROCEDIMIENTO
DE AGREGACIÓN PARA LA CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES
SINTÉTICOS DE SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE TURISMO DE
NATURALEZA DE CUBA...………..……...…………… ………..……...…….
46
2.1 Diagnóstico...……………...…………..……………………. 46
2.1.1 La política del País a favor del desarrollo sostenible, a
través del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio
Ambiente.…………...…………..……………………..
48
2.1.2 El empleo de indicadores para medir la sostenibilidad
del turismo en Cuba……………..…..........................
51
2.2 Propuesta metodológica del procedimiento de agregación
para la construcción de indicadores sintéticos de
sostenibilidad...……………………………………………...
58
2.2.1 Premisas para el procedimiento de agregación. ……… 58
2.2.2 Procedimiento de agregación para la construcción de
indicadores sintéticos de sostenibilidad. ……………...
60
Conclusiones parciales. Capítulo 2..........…………………... ………………….. 77
CAPÍTULO 3. VALIDACIÓN DEL PROCEDIMIENTO DE AGREGACIÓN
PARA LA CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES SINTÉTICOS DE
SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE TURISMO DE NATURALEZA EN
CUBA..........…………………....…………………...……....……………………
79
3.1 Verificación de las premisas……....………………………... 79
3.2 Aplicación del procedimiento de agregación para la
construcción de indicadores sintéticos de sostenibilidad en
las zonas de turismo de naturaleza en Cuba. ……………......
85
3.2.1 Resultados de la agregación social……………………. 98
3.2.2 Resultados de la agregación económica………………. 102
3.2.3 Resultados de la agregación patrimonial. ……………. 104
3.2.4 Resultados de la segunda fase de agregación: El
Indicador Sintético Global.……………… …………...
108
3.2.4.1 Resultados de la segunda fase de agregación,
sin restricciones sobre los outputs virtuales.......
108
3.2.4.2 Resultados de la segunda fase de agregación,
con restricciones sobre los outputs virtuales......
110
Conclusiones parciales. Capítulo 3……………..………...……..………...…….. 113
CONCLUSIONES GENERALES...…...……….………………………………. 116
RECOMENDACIONES………………………………………………………… 118
BIBLIOGRAFÍA….………………...…………………………………………… 119
ANEXOS……………………………….....………………………...…………… 159
GLOSARIO DE ABREVIATURAS
ACP Análisis de Componentes Principales
AHP Proceso Analítico Jerárquico
CITMA Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente
DCP Indicador de Distancia por Componentes Principales
DEA Análisis Envolvente de Datos
DEACP Análisis Envolvente de Datos después de Distancia por
Componentes Principales
DEAPM Análisis Envolvente de Datos después de Programación por Metas
EIA Evaluación de Impacto Ambiental
IPM Indicador de Programación por Metas
IS Indicador Sintético
ISG Indicador Sintético Global
LA Licencia Ambiental
MAUT Teoría de la Utilidad Multiatributo
MINTUR Ministerio del Turismo de la República de Cuba
OCDE Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico
OMT Organización Mundial del Turismo
PM Programación por Metas
PROMETHEE Preference Ranking Organization Method for Enrichment
Evaluations
INTRODUCCIÓN
Desde el pasado siglo, el turismo ha devenido como alternativa de desarrollo para
muchos países, este, a decir de Choi y Sirakaya (2006), es reconocido por su capacidad
para generar ingresos, fortalecer las monedas y crear empleo. En él convergen las
necesidades sociales y educacionales, a la vez que se genera un poderoso flujo
económico (Gössling et al., 2008); además, es considerado un colaborador significativo
en el desarrollo de muchas regiones, y uno de los aspectos fundamentales en la
valoración del entorno y la conservación de la cultura local.
A pesar de sus reconocidas ventajas, esta actividad provoca daños al entorno donde
tiene lugar, a través de la infraestructura que se crea para su desarrollo, el consumo de
agua que requiere y la generación de residuos que suscita, entre otras. Además, se lleva
a cabo en zonas que sobresalen como las más frágiles, desde el punto de vista ecológico
(Williams y Ponsford, 2009), motivos por los cuales el término “turismo sostenible” ha
surgido como un concepto importante en el intento de integrar ambientalmente el
turismo y el desarrollo, pues las consecuencias que trae consigo el rápido crecimiento de
esta actividad, no pueden ser ignoradas por mucho tiempo (Gössling et al., 2002;
Yildirim et al., 2008).
El concepto de desarrollo turístico sostenible ha ido ganando prominencia desde
mediados de los años 80´s, surgido como panacea para los impactos destructivos del
convencional turismo de masas (Choi y Sirakaya, 2005; Weaver, 2005), lo que ha
propiciado el surgimiento de nuevas formas de turismo, vinculadas a la realización de
un viaje responsable, en el cual los visitantes son conscientes y tienen en cuenta los
2
efectos de sus acciones, tanto para la cultura local, como para el medio ambiente
(Brouse, 1992; Reichel et al., 2008) de la comunidad receptora.
Esta modalidad turística, caracterizada por el disfrute de los espacios naturales,
silvestres o poco desarrollados (Goodwin, 1996), es la denominada turismo de
naturaleza, que ha tenido un crecimiento notable en los últimos años, originado
principalmente por el aumento de la preocupación por la conservación de los recursos
naturales, del bienestar humano y, la conservación y la viabilidad económica a largo
plazo para las comunidades (Butler y Boyd, 2000).
Por ello, resulta fundamental garantizar su sostenibilidad, aspecto en el que deben
participar todos los factores de la localidad pues; el desarrollo turístico sostenible
depende, además de la calidad de los recursos naturales, de las relaciones sociales entre
los pobladores, y de las que se establecen entre las empresas del territorio, a fin de
convertirlo en un destino atractivo; sentido en el cual, los modelos de desarrollo
sostenible han puesto de manifiesto la necesidad de contar con herramientas de
evaluación para detectar la falta de sostenibilidad (Bossell, 1999) y, según el
diagnóstico, diseñar las actuaciones necesarias para alcanzar los objetivos fijados.
Entre los instrumentos empleados para gestionar la sostenibilidad, se destacan los
indicadores de sostenibilidad o de desarrollo sostenible (Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE, 2000), los cuales son ampliamente
reconocidos por su utilidad para tomar decisiones y facilitar la comunicación con el
público en general, llevando información de los diferentes países o regiones en campos
como el medio ambiente, la economía, la sociedad o el desarrollo tecnológico (Singh et
al., 2009), por lo cual se han venido realizando investigaciones para definir sistemas de
indicadores para la evaluación de la sostenibilidad en los destinos turísticos.
3
El empleo de los indicadores para la medición de la sostenibilidad suele llevarse a cabo
de dos formas diferentes: a partir del conjunto de indicadores iniciales seleccionados
(enfoque no agregativo) o consiguiendo una medida sintética de sostenibilidad mediante
una combinación (o agregación matemática) de los indicadores representativos de cada
una de las dimensiones de dicho concepto (enfoque agregativo).
A pesar de su utilidad, el enfoque agregativo tiene sus detractores, quienes consideran
que el proceso de ponderación y agregación que se emplee, llevará implícitos juicios
arbitrarios que responden a las características del analista o del decisor y, por lo tanto,
influyen en el valor de la medida obtenida; sin embargo, cuenta con una gran cantidad
de adeptos, que prefieren obtener una medida sintética, creando un indicador global que
resulte ideal para medir los conceptos multidimensionales que no pueden ser capturados
por un indicador simple.
De este modo, ante la utilidad reconocida de los indicadores de sostenibilidad y, dentro
de estos a los indicadores sintéticos, el problema científico radica en que el proceso
actual de medición de la sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba
no cuenta con un procedimiento de agregación para la obtención de un indicador
sintético global, que brinde los fundamentos científicos para la toma de decisiones, y
garantice el aprovechamiento equilibrado de las potencialidades sociales, económicas y
patrimoniales de estos territorios.
El objeto de estudio está enmarcado en los procesos de gestión de la sostenibilidad
turística y el campo de acción está conformado por los procesos de agregación para la
construcción de indicadores sintéticos de sostenibilidad en el turismo de naturaleza en
Cuba.
Teniendo en cuenta la diversidad de métodos analizados, y luego de asumir críticamente
sus ventajas e inconvenientes, el objetivo general consiste en diseñar un procedimiento
4
de agregación para la construcción de indicadores sintéticos globales de medición de la
sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba, mediante el empleo de
técnicas de Programación Matemática y Análisis Multivariante, que contribuyan a la
elevación de la calidad del proceso de toma de decisiones en la planificación del
desarrollo de esta modalidad turística. Para ello, se determinan los siguientes objetivos
específicos:
1. Analizar los fundamentos teóricos acerca del desarrollo turístico sostenible, los
indicadores como herramientas para la toma de decisiones y la evaluación de la
sostenibilidad, así como los diferentes procedimientos de agregación para la
construcción de indicadores sintéticos.
2. Caracterizar la situación actual de la medición del desarrollo turístico sostenible en
Cuba y el empleo de indicadores, y a partir de esta, se diseña un modelo teórico de
agregación para la creación de indicadores sintéticos de sostenibilidad.
3. Validar el procedimiento de agregación para la creación de indicadores sintéticos de
sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba.
De este modo, la hipótesis a defender consiste en que si se aplica un procedimiento de
agregación para la obtención de indicadores sintéticos globales de medición de la
sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba, entonces se podrá
sintetizar la información contenida en un conjunto inicial de indicadores sociales,
económicos y patrimoniales, conformando una medida global, cuyo análisis contribuya
a elevar la calidad del proceso de toma de decisiones en la planificación del desarrollo
de esta modalidad turística.
La novedad científica consiste en el diseño de un procedimiento de agregación para la
construcción de indicadores sintéticos mediante la aplicación del Análisis Envolvente de
Datos (DEA) sobre los indicadores sintéticos dimensionales DCP e IPM, obtenidos a
5
partir de una función que vincula el Análisis de Componentes Principales con la
distancia a una situación de referencia, y otra que emplea la Programación por Metas
(PM) respectivamente.
Los aportes que sustentan la novedad del trabajo son:
Desde el punto de vista teórico:
1. La creación de un procedimiento de agregación para la construcción de indicadores
sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba.
2. La construcción de indicadores sintéticos mediante el vínculo del Análisis de
Componentes Principales (ACP) y la distancia a un punto de referencia, para
obtener el indicador sintético de Distancia por Componentes Principales (DCP).
3. La construcción de indicadores sintéticos globales mediante la aplicación del
Análisis Envolvente de Datos (DEA) sobre el indicador de Distancia por
Componentes Principales (DCP) y el Indicador de Programación por Metas (IPM),
para obtener los indicadores sintéticos DEACP y DEAPM, que permiten realizar un
análisis global de la sostenibilidad.
Desde el punto de vista práctico:
1. La base de datos con los indicadores seleccionados para medir la sostenibilidad en
las zonas de turismo de naturaleza en Cuba, verificada como válida para realizar el
estudio, así como los pesos que representan su importancia relativa.
2. El valor de los indicadores sintéticos dimensionales y globales para cada una de las
zonas comparadas, confeccionados a partir de las ventajas de los algoritmos
descritos en la bibliografía consultada, y el programa IndiSin para su cálculo.
3. El análisis de sostenibilidad que proporciona la información necesaria para
contribuir al proceso de toma de decisiones por parte de los planificadores del
turismo de naturaleza, obtenido a partir de la identificación de los aspectos que
6
constituyen fortalezas y debilidades dentro de cada una de las dimensiones del
concepto evaluado.
El aporte metodológico está dado por la obtención del procedimiento de agregación para
la construcción de indicadores sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de
naturaleza en Cuba.
Para dar cumplimiento a los objetivos trazados, se utilizan diferentes métodos, técnicas
y procedimientos de investigación. Como método teórico general: el materialismo
dialéctico, observando la unidad de lo abstracto y lo concreto, con el uso de
formulaciones matemáticas representativas de las funciones de agregación; el análisis y
la síntesis, mediante la obtención de los indicadores iniciales y la creación de las
medidas sintéticas de sostenibilidad; lo cuantitativo y lo cualitativo, al cuantificar los
indicadores subjetivos para emplearlos en la agregación; y el histórico, al reseñar el
desarrollo de los actuales procesos de gestión de la sostenibilidad turística en Cuba a
partir del uso de indicadores, y la modelación para la construcción de las funciones
mediante las cuales se va a efectuar la agregación de la información. El método
sistémico se evidencia al garantizar la inclusión de todos los factores que intervienen en
el desarrollo del turismo en las localidades y en el establecimiento de los pasos que
conforman el procedimiento de agregación diseñado.
Como principal método empírico aparece la observación científica, mediante varias de
sus técnicas: análisis documental, entrevistas y encuestas. Las dos primeras, utilizadas
durante la etapa de diagnóstico, mientras que las encuestas se tuvieron en cuenta para
obtener los valores de los indicadores subjetivos. También se acude al método de la
medición, para describir y analizar el comportamiento de los indicadores en cada una de
las dimensiones y determinar la validez de estos como representativos del concepto a
evaluar, así como durante el manejo de la información estadística referente a los
7
indicadores seleccionados en el estudio y durante la aplicación de un muestreo
sistemático con arranque aleatorio y un muestreo bietápico: por conglomerados y
aleatorio, al aplicar las encuestas. Este método resulta de gran utilidad en la
presentación de los resultados concernientes a la aplicación del procedimiento.
Se explotan además técnicas estadísticas, principalmente en el empleo de la estadística
descriptiva, mediante la cual se realiza un estudio del comportamiento de los valores de
los indicadores. Para ello, se hace uso del programa SPSS, Versión 18.
El trabajo presentado se estructura en tres capítulos. El primero se titula “El desarrollo
turístico sostenible y la construcción de indicadores sintéticos”. En este el autor tiene
como objetivo analizar los fundamentos teóricos acerca del desarrollo turístico
sostenible, los indicadores como herramientas para la toma de decisiones y la
evaluación de la sostenibilidad, así como los diferentes procedimientos de agregación
para la construcción de indicadores sintéticos.
En el segundo capítulo: “Propuesta metodológica del procedimiento de agregación para
la construcción de indicadores sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de
naturaleza de Cuba”, el autor se plantea caracterizar la situación actual de la medición
del desarrollo turístico sostenible en Cuba y el empleo de indicadores para ello, a partir
de esta, se diseña un modelo teórico de agregación para la creación de indicadores
sintéticos de sostenibilidad.
El tercer capítulo: “Validación del procedimiento de agregación para la construcción de
indicadores sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba”,
se desarrolla con el fin de validar el procedimiento de agregación para la creación de
indicadores sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba.
Para finalizar se exponen las conclusiones, que son generalizaciones teóricas de los
principales resultados obtenidos y, sobre dicha base se proponen una serie de
8
recomendaciones. Se presentan la bibliografía empleada, y los anexos, necesarios para
una mejor comprensión de la investigación.
El trabajo se inserta en el marco del Proyecto de Investigación – Desarrollo e
Innovación Tecnológica: “Desarrollo local sustentable con eje central en el turismo en
Pinar del Río. Otras experiencias cubanas”, contratado por el Centro de Estudios de
Gerencia, Desarrollo Local y Turismo (GEDELTUR) de La Universidad de Pinar del
Río, el cual está insertado en el Programa Científico Técnico Nacional: “La sociedad
cubana. Sus retos y perspectivas frente al Siglo XXI”, específicamente en el Resultado
12: Rediseño y propuesta integral del producto turístico sustentable de la provincia de
Pinar del Río, con énfasis en la naturaleza, tomando como referencia el caso Viñales y
el estudio del resto de las zonas de desarrollo turístico de la provincia de Pinar del Río,
(…), con participación de la Cooperación Internacional.
La producción científica del autor sobre el tema de investigación se evidencia con la
participación en varios Congresos:
- XXI Reunión Asepelt – España, del 20 al 23 de Junio de 2007, Valladolid, España.
- X Congreso Nacional de Matemática y Computación COMPUMAT, del 21 al 23 de
Noviembre de 2007, Holguín, Cuba.
- I Taller Provincial Economía y Socialismo, el 29 de Octubre de 2007, Pinar del Río,
Cuba.
- II Taller Nacional de Economía el 12 de Diciembre de 2007. La Habana, Cuba.
- 8th International Conference on Operations Research del 25 al 29 de Febrero de 2008.
La Habana, Cuba.
- XI Congreso de Turismo, Universidad y Empresa del 10 al 12 de Abril de 2008,
Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, Universidad de Castellón, España.
9
- Reunión Preparatoria del 5to. Congreso de Ciencias Aplicadas al Turismo
TURICIENCIA, del 3 al 5 de Mayo de 2010, La Habana, Cuba.
- III Congreso Internacional Turismo y Medioambiente el 20 y 21 de Mayo de 2010,
Florencia, Italia.
- Trabajo aprobado en la XV Escuela Latinoamericana de Verano en Investigación
Operativa (XV ELAVIO), del 2 al 6 de Agosto de 2010 en Pacoti/CE-Brazil.
- XXVIII Reunión de ASEPUMA y VI Congreso internacional de Profesores de
Matemáticas para la Economía y la Empresa, en Santiago de Compostela, 16 y 17 de
septiembre de 2010.
Además, se han obtenido varias publicaciones vinculadas con la temática:
- Selección de Nuevos productos turísticos en Pinar del Río, Cuba. CD Anales de
Economía Aplicada 2007.
– Selección multicriterio de nuevos productos turísticos en Pinar del Río, Cuba Libro
de resúmenes II Taller Nacional de Economía, Pág. 2.
- Selección multicriterio de nuevos productos turísticos en Pinar del Río, Cuba. Revista
investigación operacional, Vol., 2, No. 2, 98-107., 2008.
- Evaluación de la sostenibilidad del turismo rural mediante indicadores sintéticos.
Investigación Operacional, Vol. 30, No.1, 40-51, 2009.
- Indicadores sintéticos de sostenibilidad turística para destinos rurales: El caso
Andaluz. Innovación, Creatividad y Nuevos modelos de gestión. XI Congreso
Internacional de Turismo, Universidad y Empresa, 487- 509.
- La gestión de la sostenibilidad de turismo de naturaleza en Cuba: el uso de indicadores
sintéticos. Anales de ASEPUMA No. 18, 802.
1
CAPÍTULO 1. EL DESARROLLO TURÍSTICO SOSTENIBLE Y LA
CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES SINTÉTICOS
CAPÍTULO 1. EL DESARROLLO TURÍSTICO SOSTENIBLE Y LA
CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES SINTÉTICOS
En el presente capítulo, el autor se propone analizar los fundamentos teóricos acerca del
desarrollo turístico sostenible, los indicadores como herramientas para la toma de
decisiones y la evaluación de la sostenibilidad, así como los diferentes procedimientos
de agregación para la construcción de indicadores sintéticos. Para su cumplimiento,
primeramente se aborda el tema relacionado con el desarrollo turístico sostenible, y
dentro del mismo, se trata la definición de turismo de naturaleza. A continuación se
analiza la utilidad de los indicadores como soporte para la toma de decisiones y su uso
para medir la sostenibilidad de los destinos turísticos. Luego se estudian los enfoques
para medir la sostenibilidad mediante el empleo de indicadores, y se analizan los
diferentes procedimientos de agregación para la construcción de indicadores sintéticos.
1.1 Desarrollo turístico sostenible.
El vocablo sostenibilidad, también conocido como sustentabilidad1, debido a su
traducción del inglés (sustainability), viene ocupando desde hace algunos años una
buena parte de la literatura social y empresarial, estableciendo un nexo de unión entre el
desarrollo de la propia sociedad y de los agentes económicos que en ella operan, en el
marco ambiental, sociocultural y económico que les rodean (Sancho et al., 2002).
Su vínculo con el desarrollo tiene como punto de partida la aprobación del informe
“Nuestro Foro Común” (Comisión Burtland) en 1987, al definir el desarrollo sostenible
1 Este término será empleado en la presente investigación solo cuando forme parte de alguna referencia o del título de algún artículo o proyecto que se mencione.
11
como “aquel que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad
de las generaciones futuras para satisfacer las suyas propias” (WCED, 1987).
Esta, según Van Broeck (2005), trata de una relación entre la economía y la ecología
con atención a los efectos sociales y culturales del crecimiento económico, que
constituye la definición más conocida de desarrollo sostenible (Ahn et al., 2002; Krajnc
y Glavic, 2005a, 2005b; Choi y Sirakaya, 2006; Singh et al. 2007, 2009).
No obstante, el autor coincide con Wheeller (1993) en que existen muchas
interpretaciones del término desarrollo sostenible, debido a la diversidad de
enunciaciones existentes, lo que propicia que también se aprecien diferencias en cuanto
a las dimensiones que engloba este concepto. Sin embargo, independientemente de
algunas planteadas (UICN et al., 1980; Bramwell et al., 1996; OMT, 2004; Van Broeck,
2005; Krajnc y Glavic, 2005a, 2005b; Choi y Sirakaya, 2006; Díaz y Norman, 2006;
Commission on Sustainable Development of the U.N., 2006; Brun y Hirsh, 2008), todas
abarcan la totalidad de los sectores de cualquier localidad, y sus relaciones en los
diferentes contextos.
En este trabajo se reconocen las dimensiones económica, social y patrimonial2 como las
representativas de la sostenibilidad turística, tal como se refleja en Díaz y Norman
(2006). Estas son las empleadas en el estudio que llevan a cabo el Ministerio del
Turismo de la República de Cuba (MINTUR), la Fundación Antonio Núñez Jiménez de
la Naturaleza y el Hombre (FANJ) y la Organización no Gubernamental WWF-Canadá
(World Wildlife Fund Canada), con motivo del establecimiento de la Zona de Turismo
Sustentable del Caribe (ZTSC), en la que se insertan cuatro destinos cubanos, de los
cuales, tres se incluyen en esta investigación. 2 (Díaz y Norman, 2006) La dimensión patrimonial abarca todo lo concerniente al medio natural y el medio cultural. La Ley 81 del Medio Ambiente de la República de Cuba reconoce el patrimonio como el medio ambiente (Artículo 2) y, dentro de patrimonio aparecen, el Patrimonio Forestal (Artículo 111) y el Patrimonio Cultural (Artículo 141), coincidiendo con la definición propuesta por Díaz y Norman (2006).
12
Desde el surgimiento del concepto de desarrollo sostenible, muchos han sido los
intentos de aplicar sus principios a las diferentes actividades económicas. Tal es el caso
del turismo, que sobresale como una de las que mayor atención requiere, pues desde
1945 se ha convertido en uno de los fenómenos económicos más sobresalientes a nivel
mundial (Deng et al., 2002), y se considera un colaborador significativo en el desarrollo
de muchas regiones, generando un poderoso flujo económico y un alto nivel de empleo
(Gössling et al., 2008); por ello, el término “turismo sostenible” ha surgido como un
concepto importante en el intento de integrar ambientalmente el turismo y el desarrollo.
La aplicación del concepto de desarrollo sostenible al turismo, se abordó inicialmente
en la llamada Río+5 Conferencia, en 1999. De igual modo, en la Conferencia de
Johannesburgo, en el año 2002, se mencionó la necesidad de un turismo más
“habitable”, que contribuya al bienestar para las comunidades indígenas y a la
conservación de la integridad cultural y ecológica. Así, desde la década de los 90´s, el
“turismo sostenible”, o el “desarrollo turístico sostenible”, es un concepto que
predomina en cualquier discurso sobre el turismo (Van Broeck, 2005).
Varias instituciones internacionales han trabajado para lograr una definición de
desarrollo turístico sostenible: Tourism Concern, una ONG del Reino Unido, 1989;
Congreso Mundial de Lanzarote (OMT, 1995); Agenda 21 para la industria turística
(OMT, 1995); Earth Council y WTTC (World Travel and Tourism Council); AEC
(2001); (United Nations Environmental Program), citada por Van Broeck (2005); OMT
(2004).
Igualmente, las investigaciones científicas han hecho su aporte al respecto, coincidiendo
en que el desarrollo sostenible del turismo debe, además de proveer beneficios
económicos para la industria y una experiencia de calidad para el visitante, proteger el
medio ambiente del entorno en que tiene lugar y garantizar un estándar de calidad de
13
vida para los residentes locales (Inskeep, 1991; McIntyre, 1993; Cater, 1996; Akis et al.,
1996; Stabler, 1997; Bramwell et al., 1998; Butler, 1999; Aronsson, 2000; Mowforth y
Munt, 2000; Waitt et al., 2003; Choi y Sirakaya, 2006; Larson y Herr, 2008). En Cuba,
la Ley 81 del Medio Ambiente, en su artículo 138 establece los lineamientos de acuerdo
con los cuales se debe desarrollar el turismo de forma sostenible.
La existencia de una gran variedad de definiciones sustenta el planteamiento de Stabler
y Goodall (1996) respecto a que la discusión acerca del significado del término
sostenible, al menos en el contexto del turismo, está garantizada; no porque no haya
definición, sino porque existen muchas.
De forma general, las enunciaciones analizadas comparten la necesidad de minimizar
los impactos negativos, ya sean sociales, económicos o patrimoniales; además de
maximizar los beneficios y la calidad de vida de las comunidades donde tiene lugar, por
lo cual los turistas, las autoridades y la población local, conjuntamente con las empresas
que representan al sector, tienen responsabilidad en ello.
Como resultado del análisis realizado para la presente investigación, se tomó como
referente el concepto propuesto por la Organización Mundial del Turismo (OMT, 2004)
que plantea que el objetivo del turismo sostenible se traduce en la consecución de
destinos turísticos donde el desarrollo de la actividad turística se caracterice por “dar un
uso óptimo a los recursos ambientales; respetar la autenticidad sociocultural de las
comunidades anfitrionas; asegurar unas actividades económicas viables, a largo plazo,
que reporten beneficios socioculturales a todos los interesados; lograr la participación
informada de todos los implicados relevantes en el proceso de planificación y gestión
del destino y, un alto grado de satisfacción de los turistas”.
Este concepto abarca todo lo que relacionan las definiciones estudiadas, ya sea de
instituciones, o de investigaciones científicas; sin embargo, como se aprecia, se desea
14
conseguir un buen desempeño para varios objetivos, motivo por el cual no se puede
hablar de óptimo pues, este, desde el punto de vista multicriterio, no existe, ni por tanto,
en la inmensa mayoría de las situaciones reales de decisión que se tienen en la
administración, debido a que cada decisión real consiste, de hecho, en un compromiso
entre diversas soluciones, cada una con sus ventajas e inconvenientes, dependiendo de
la posición que se adopte (Bárbara-Romero y Pomerol, 1997).
En ese sentido, se debe hacer notar que no hay optimización, sino compromiso,
equilibrio y legítima multiplicidad de puntos de vista (Romero, 1993), puesto que las
decisiones no se toman con base en un solo criterio, sino con varios, como en el
concepto asumido para la presente investigación. Por ello, el autor considera que,
teniendo en cuenta los objetivos que engloba la definición de la OMT (2004), de los
cuales algunos se contraponen3. El vocablo “óptimo” pudiera cambiarse por “eficiente”,
entendiendo por este, el punto de equilibrio en el cual, de acuerdo con las necesidades
de los implicados, se logre un valor de consenso para cada uno de los objetivos.
Otra observación al tema del turismo sostenible radica en que ha sido definido de
diferentes maneras, de acuerdo con las diversas condiciones políticas, económicas,
socioculturales y ambientales en las cuales se desarrollan los destinos (Bell y Morse,
1999; Ko, 2005) y no puede desvincularse de la política, de la sociedad y de sus
problemas; a partir de que existen diferencias significativas entre las necesidades de las
sociedades del norte desarrollado (de donde provienen los principales flujos turísticos) y
del sur subdesarrollado, donde se encuentran actualmente muchos destinos que han
3 Por ejemplo, en aumento de la actividad turística en un territorio, está relacionado con el incremento de la cantidad de visitantes, siendo este un criterio que se desea maximizar. Este elevado número de turistas exige una mayor utilización de los recursos naturales disponibles para el disfrute, lo cual contribuye a elevar al grado de afectación de los mismos, criterio que se desea minimizar. Los efectos sociales, culturales y económicos del turismo en una comunidad anfitriona están intrincadamente unidos. Pueden darse sinergias beneficiosas o relaciones inversas entre estas tres áreas de impacto (OMT, 2004, pág. 66).
15
apostado por el turismo, como impulsor de sus maltrechas economías (Jiménez e
Hirabayashi, 2003; Salinas y La O, 2006).
La búsqueda de la sostenibilidad en el turismo ha hecho aparecer las llamadas nuevas
formas de turismo, de modo que, mientras este es visto como fuente de desarrollo
económico, el convencional turismo de masas es asociado con numerosos efectos
negativos, tales como la destrucción de los ecosistemas ecológicos y la pérdida de la
identidad cultural. En respuesta a esta preocupación, argumentan Landsing y De Vries
(2007), en los años recientes ha surgido el término “turismo sostenible”, asociado a
prácticas más conscientes del desarrollo de esta actividad, como es el caso del turismo
de naturleza, el cual se aborda en esta investigación, coincidiendo con varios autores
(Lindberg, 1991; Aylward y Freedman, 1992; Hvenegaard, 1994; Waitt et al., 2003;
Mehmetoglu, 2007; Salinas et al., 2008).
En el apartado siguiente, se hace referencia al concepto de turismo de naturaleza. No
obstante, el autor sostiene, al igual que la OMT (2004) y Landsing y De Vries (2007),
que las prácticas y guías para garantizar el desarrollo sostenible del turismo son
aplicables a todas las formas de turismo en todos los destinos, pues los principios de la
sostenibilidad se refieren a los aspectos sociales, económicos y patrimoniales,
debiéndose establecer un balance entre las tres dimensiones para garantizar su
sostenibilidad en el tiempo.
1.1.1 Turismo de naturaleza.
Desde finales del pasado siglo, la industria turística se ha venido destacando como una
de las de mayor crecimiento a nivel mundial, tal como afirman Deng et al. (2002) y
Yildirim et al. (2008) y, ante la creciente preocupación por la degradación del medio
ambiente, los individuos han mostrado una tendencia hacia una mayor preocupación por
la naturaleza, y han aumentado los deseos de pasar el tiempo libre visitando y
16
recreándose en espacios naturales, agrega Wight (2002). Además, Teigland (2000),
citado por Nyaupane et al. (2004), explica que las recientes generaciones están
reemplazando valores, tales como: la seguridad y la prosperidad material por la
protección del medio ambiente.
Ello evidencia la afirmación de Nyaupane et al. (2004) de que la literatura ofrece cada
vez más, buenas razones por las cuales se ha incrementado la popularidad del turismo
de naturaleza, modalidad que devino notable en cuanto al número de visitantes
internacionales (Bureau Tourism Research, 1997, 1999) y como fuente de generación de
empleo (Priskin, 2001; Yildirim et al., 2008).
En lo que respecta a su definición, aún no existe un consenso general entre los
investigadores acerca de, qué es exactamente el turismo de naturaleza (Mehmetoglu,
2007). Debido a ello, muchos autores y organismos internacionales han intentado llegar
a un concepto de turismo de naturaleza (TIES, 1990; Valentine, 1992; UICN, citada por
Ceballos Lascuráin, 1994; Goodwin, 1996; MINTUR, CITMA MINAG, 1999;
Spenceley, 2003; Medina y Santamarina, 2004). En ese sentido el autor concuerda con
Huang y Confer (2009) en que su principal característica es el desarrollo
ambientalmente responsable del turismo y las actividades basadas en el empleo de los
recursos naturales. Además, las definiciones analizadas lo presentan como un modo de
garantizar la protección de los recursos naturales de las comunidades receptoras y, la
generación de ingresos que tributen al mejoramiento de la calidad de vida de estas.
No obstante, para la investigación, se asume el concepto referido por Goodwin (1996),
coincidiendo con varios autores (Fennell, 1999; Spenceley, 2003, 2008; Plummer et al.,
2006; Yildirim et al., 2008), al reconocerlo como “(…) todas las formas de turismo que
usan los recursos naturales en una forma silvestre o poco desarrollada – incluyendo las
especies, el hábitat, la tierra, el paisaje y los saltos de agua, etc. En fin, el turismo de
17
naturaleza es el viaje con el propósito de disfrutar áreas naturales poco desarrolladas
o la vida silvestre” (Goodwin, 1996).
Esta clase de turismo algunas veces se ha identificado con el turismo sostenible, y se ha
contrapuesto al turismo de sol y playa; en detrimento de este último, en relación con la
sostenibilidad. Sin embargo, en la práctica, no siempre, puede considerarse como una
tipología verdaderamente sostenible, aunque se intenta argumentar a su favor que se
apoya en modelos o productos en los que sí parece que exista un mayor nivel de
concientización medioambiental (Sancho, 2004). En ese sentido, esta modalidad
turística puede desempeñar un papel importante atrayendo soporte, tanto político como
financiero, para la conservación y el tratamiento de los espacios naturales (Ceballos-
Lascuráin, 1998; Gössling, 1999; Honey, 1999; López-Espinosa, 2002).
El turismo de naturaleza, afirman Goodwin (1996) y López-Espinosa (2002), puede
beneficiar de tres maneras fundamentales las zonas donde se desarrolla: (1) mediante la
generación de dinero para gestionar y proteger el hábitat natural y las especies, (2)
permitiendo a la población local obtener mejoras económicas a partir del empleo de los
espacios naturales, con lo cual garantiza el apoyo de estas personas a la conservación y,
(3) por último, ofreciendo los medios necesarios para sensibilizar a las personas con la
importancia de mantener un alto grado de conservación de las áreas naturales.
El futuro de esta forma de turismo depende completamente de los recursos naturales y
requiere una alta calidad medioambiental (Priskin, 2001), motivo por el cual la garantía
de la sostenibilidad resulta imprescindible. Esto, según Medina y Santamarina (2004),
implica la consideración conjunta de los aspectos económicos, ambientales y
socioculturales de cada destino. Para verificar el cumplimiento de este objetivo, el
empleo de indicadores resulta beneficioso, por cuanto, constituyen importantes
18
herramientas de soporte al proceso de toma de decisiones. En el siguiente apartado se
ofrecen detalles al respecto.
1.2 Los indicadores como soporte de la toma de decisiones en el turismo.
Los indicadores contribuyen al proceso de toma de decisiones, definido este como el
proceso de identificación y selección de la acción adecuada para la solución de un
problema específico (Stoner, 1997), pues en cada una de las funciones que integran la
administración (planificación, organización, liderazgo y control), resulta indispensable
tomar decisiones, principalmente durante la planificación, donde se fijan las metas, los
objetivos a cumplir, así como los programas para alcanzarlos en un determinado
período, y en la etapa de control, chequeando que las acciones conlleven al logro de las
metas programadas.
Para que el proceso de toma de decisiones sea eficiente, se necesita disponer de
información precisa y oportuna, de forma tal que los administradores puedan hacer un
seguimiento hasta el logro de sus metas, y modificar los planes dentro de la realidad.
Esto resulta posible, si se cuenta con un sistema de información administrativa que
ofrezca los datos necesarios para realizar los análisis pertinentes en tiempo real, sentido
en el cual los indicadores son de gran ayuda, pues al organizar y analizar los datos, los
transforman en un sistema de información útil para este fin.
Los factores a tener en cuenta en el sistema de información, según Stoner (1997), son su
calidad, oportunidad, cantidad y relevancia: Calidad, porque cuanto más exacta sea la
información, se podrá recurrir a ella con más confianza para tomar una decisión,
entendiéndose por información de calidad, aquella que no es falsa ni duplicada.
Oportunidad, para garantizar que la información esté disponible para ser tomada en el
tiempo indicado, para la acción apropiada, caso en el cual se desea contar con un
19
sistema de indicadores debidamente cuantificado y actualizado que permita contar con
la información exacta, en el momento adecuado.
Cantidad, para obtener la información suficiente que proporcione un eficaz proceso de
toma de decisiones, pues casi nunca se toman decisiones acertadas y oportunas, si no se
dispone de suficiente información. Ello se debe principalmente a que, de la cantidad de
información disponible, depende la calidad de las decisiones que se tomen; de modo
que, cuando la información es poca, estas se toman con cierto grado de incertidumbre;
mientras que si es mucha, queriendo abarcar una mayor cantidad de aspectos, lo que se
consigue es colmar a los administradores de información, y no se logra una correcta
toma de decisiones, además, puede ocurrir que estas se adopten con base en los aspectos
que resultan ser los menos importantes.
Por último, la Relevancia, que se refiere a la necesidad de que la información
proporcionada esté relacionada con las actividades que le conciernen a los implicados
en el proceso de toma de decisiones, lo que se consigue con la identificación de
indicadores representativos de las dimensiones que componen el concepto a evaluar.
De acuerdo con el objetivo propuesto, este trabajo se inserta en el proceso de toma de
decisiones en la administración de los destinos turísticos de naturaleza, en las funciones
de planificación y control y, específicamente, en el sistema de información empleado
para este fin. De modo que, dentro de la naturaleza de la información, se hace un aporte
en el manejo de la cantidad de información, garantizando el uso de su totalidad, o los
criterios más importantes en este proceso.
Como reconocen Singh et al. (2009), los indicadores son ampliamente reconocidos
como herramientas útiles para tomar decisiones y facilitar la comunicación con el
público en general, llevando información de los diferentes países o regiones, en
temáticas como el medio ambiente, la economía, la sociedad o el desarrollo tecnológico,
20
permiten medir conceptos como la sostenibilidad del turismo. En ese sentido, en el
apartado siguiente se hace referencia a la utilidad de los indicadores para la medición de
la sostenibilidad en los destinos turísticos.
1.2.1 Los indicadores como herramientas para medir la sostenibilidad de los
destinos turísticos.
En los últimos años, la medición de la sostenibilidad ha pasado a ser uno de los temas
más tratados en la literatura, tal como afirma Mitchell (1996), respondiéndose así a la
exigencia recogida en la Agenda 21 de la Cumbre de Río, donde se reconocía la
necesidad de desarrollar medidas adecuadas del grado de sostenibilidad mediante la
valoración de las interacciones entre los aspectos económicos ambientales y sociales
que determinan dicho objetivo (Pulselli et al., 2006).
En ese sentido, el uso de indicadores resulta beneficioso pues, según la OCDE (2000),
estos se definen como aquellas características que pueden ser medidas, cuyos niveles
absolutos y la dirección en que cambian, tienen como finalidad indicar si la región
analizada presenta una situación más o menos sostenible (Comisión Europea, 1996).
En este contexto, los indicadores son series cronológicas de información estratégica
para la sostenibilidad de un destino, sus activos, y en última instancia, el futuro del
sector turístico (OMT, 2004). Su importancia se complementa con el hecho de que
sobresalen entre las alternativas adoptadas para medir la sostenibilidad, al constituir
herramientas de evaluación que permiten chequear cuán exitosas han sido las acciones y
políticas seleccionadas (Hardi y Barg, 1997; World Bank, 1997; U.N., 1998; Farsari y
Prastacos, 2002), y si se está actuando adecuadamente en el camino hacia el desarrollo
sostenible. Traducen los conocimientos en módulos manejables de información que
facilitan la toma de decisiones y, según la OMT (2004), pueden medir a) cambios en las
21
propias estructuras turísticas y factores internos; b) cambios en los factores externos que
afectan al turismo, y c) las repercusiones del turismo.
Además, afirma la propia OMT (2004), que los indicadores permiten seguir los cambios
durante todo el ciclo de vida del proyecto, ayudan a conocer las implicaciones del
desarrollo, propias del sitio, para poder promover la sostenibilidad; y proporcionan una
orientación crucial a los dirigentes y a los responsables políticos para la toma de
decisiones. Por otra parte, ayudan a medir y calibrar la evolución de los objetivos hacia
el desarrollo sostenible, y pueden servir como un sistema de alerta precoz que, dando
señales de advertencia, posibilita prevenir daños económicos, patrimoniales y sociales.
Se destacan por su fiabilidad para describir situaciones, identificar problemas
potenciales y supervisar y evaluar las acciones tomadas (U. N., 1998; World Bank,
1997; Hardi y Barg, 1997); además, proporcionan información que sirve para la
prevención de problemas económicos, sociales o patrimoniales, para formular
estrategias y comunicar ideas (Berke y Manta, 1999; Lundin, 2003; Singh et al., 2009).
Permiten además controlar los impactos económicos, sociales y patrimoniales a todos
los niveles (Díaz y Norman, 2006). Las ventajas de contar con buenos indicadores y las
definiciones de estos a diferentes niveles, se hallan en OMT (2004).
Debido a su gran utilidad, se han realizado varios estudios para desarrollar indicadores
que sean representativos de cada una de las dimensiones de la sostenibilidad en los
destinos turísticos (OMT, 1995; U. N., 1998; Sancho y García, 1999; Miller, 2001;
Farsari y Prastacos, 2001, 2002; Twining y Butler, 2002; Hughes, 2002; OCDE, 2003;
CITMA-MINTUR, 2003; OMT, 2004; Gallego y Moniche, 2005; Choi y Sirakaya,
2006; Díaz y Norman, 2006; Sancho y García, 2006; Sancho et al., 2007).
De su análisis se puede llegar a la conclusión de que no existe una lista de indicadores
universales y unánimemente aceptados (Bakkes et al, 1994; Masera et al., 2000), que
22
pueden ser determinados mediante técnicas participativas, consultando a expertos, o a
través de las aspiraciones de los implicados en el desarrollo turístico en las comunidades
receptoras y, por consiguiente, son representativos de los intereses de los implicados.
Como un indicador describe un proceso específico de control (a diferencia de una
información exclusivamente numérica), ha de ser sensible a las percepciones de los
agentes implicados en el desarrollo del turismo, buscando un sistema que haga que los
resultados sean fácilmente interpretables y, a la vez, incluya las inquietudes de estos.
Así, los indicadores pueden ser clasificados en: cuantitativos (objetivos) y cualitativos
(subjetivos), los cuales no son excluyentes, sino complementarios; y en todo su
conjunto, pueden mostrar de manera más completa la situación de complejidad del
destino turístico en un momento determinado, en relación con los objetivos trazados
hacia la sostenibilidad.
Los indicadores cuantitativos se caracterizan por brindar información numérica,
expresando valores que se pueden ordenar, o que determinan rangos o grados de
cambios de un aspecto referido a la sostenibilidad. Los indicadores cualitativos, que
surgen particularmente de los métodos de investigación de las ciencias sociales (López
et al., 2003), se refieren a la manera en que se toma o se recolecta la información, a
partir de entrevistas en profundidad, la observación participativa, las mesas de expertos,
los mapas culturales, los juegos de roles, etc., generando datos relevantes que
difícilmente se pueden expresar en una medida numérica. Más bien expresan juicios de
valor, deseos, apreciaciones e interpretaciones, etc. y normalmente evalúan el nivel de
calidad de un aspecto determinado (OMT, 2004; Sancho y García, 2006).
Para obtener una medida analítica de sostenibilidad, mediante el empleo de indicadores
en determinado territorio, pimero: se analiza el objetivo general del desarrollo sostenible
identificando sus dimensiones conceptuales, procediéndose a fijar aquellos aspectos que
23
constituyen la base de cada una de ellas. Desagregado el objetivo global, se pasa a
seleccionar los indicadores que permitan medir cada uno de los aspectos señalados
anteriormente, quedando conformado un conjunto de indicadores para cada una de las
dimensiones conceptuales que componen el objetivo (Blancas, 2009).
Los indicadores incluidos en estos conjuntos se corresponden con aquellas medidas que
proporcionan la información necesaria para comprender mejor la sostenibilidad y,
aunque la elección de los indicadores depende de las características de la actividad
analizada, estos deben cumplir una serie de funciones básicas a tener en cuenta en esta
tarea (OCDE, 1997; Fricker, 1998): Deben ser representaciones empíricas que
simplifiquen la comprensión de la realidad, que proporcionen una cuantificación del
objetivo, de forma que puedan ser usados para comunicar información referente al
mismo y, finalmente, que resulten útiles para solventar problemas, evaluar programas de
acción y establecer objetivos específicos de actuación.
De esta forma, para garantizar que las mejoras en los valores de los indicadores
utilizados muestren avances hacia un estado más sostenible, los indicadores
seleccionados deben cumplir los siguientes criterios de selección según Romero et al.
(2003):
- Representatividad. - Relevancia. - Fiabilidad. - Transparencia.
- Sensibilidad. - Carácter predictivo. - Compensabilidad. - Cobertura geográfica.
- Comparabilidad. - Cuantificación. - Coste-eficiencia.
De este modo, se puede afirmar que la utilidad derivada de los indicadores para medir la
sostenibilidad, es debida, principalmente, a la posibilidad de organizar la información
referente a cada una de las dimensiones que engloba dicho concepto, y que permiten
mostrar, de manera más completa, la situación de complejidad del destino turístico en
un momento determinado, en relación con los objetivos trazados hacia la sostenibilidad.
24
En ese sentido, en el siguiente apartado se relaciona cómo se emplean los indicadores
para este fin.
1.3 Enfoques para la medición de la sostenibilidad mediante el uso de indicadores.
1.3.1 El enfoque no agregativo.
Para medir la sostenibilidad a través de los indicadores, se pueden emplear dos
enfoques: el no agregativo y el agregativo. Dentro del enfoque no agregativo, los
investigadores prefieren medir la sostenibilidad solo a partir del conjunto de indicadores
iniciales seleccionados, sin tener que recurrir a su agregación (Inskeep, 1991; Coccossis
y Parpairis, 1996; Garcia y Staples, 2000; Miller, 2001; Sirakaya et al., 2001). Estos
consideran que se debe detener el estudio una vez que se tiene el conjunto de
indicadores y no dar un paso más allá, que consistiría en crear un indicador sintético. Su
principal objeción a la agregación de la información es que, el proceso de ponderación
que se determina, llevará implícitos juicios arbitrarios (Sharpe, 2004; Nardo et al.,
2005a; OCDE, 2008) que responderán a las características del analista o el decisor, por
lo tanto, influyen en el valor de la medida obtenida.
Dentro de este enfoque sobresalen dos escuelas fundamentales (Bell y Morse, 1999;
Lundin, 2003; Reed et al., 2006). Los basados en la metodología de arriba hacia abajo
(top-down) o conocida por expertos (expert led), en la cual los expertos e investigadores
definen el concepto que se analiza y los indicadores para su evaluación con base en sus
conocimientos de la materia. Y la escuela basada en la comunidad (community-based) o
de abajo hacia arriba (bottom-up), en la cual el proceso de selección de los indicadores
se lleva a cabo a partir de las referencias de los grupos implicados en la zona. En Reed
et al. (2006) se ofrece una detallada descripción de ambas metodologías.
El uso de este enfoque para la toma de decisiones, en ocasiones, no suele ser el más
efectivo. Cuando se cuenta con un elevado número de indicadores, con diferencias en
25
cuanto a sus valores, resulta complicado evaluar el desempeño de un destino, por lo
cual, muchas veces, se recurre al empleo del enfoque agregativo. A continuación se
hace referencia a este enfoque, sus pasos básicos y las metodologías que existen para
agregar la información.
1.3.2 El enfoque agregativo.
Dentro de este enfoque, aparecen aquellos que prefieren obtener una medida sintética
del concepto evaluado mediante una combinación (o agregación matemática) de los
indicadores representativos de cada una de las dimensiones del mismo (Saisana y
Tarantola, 2002; Nardo et al., 2005b; OCDE, 2008), creando un “indicador sintético”
(IS) que resulte ideal para medir los conceptos multidimensionales que no pueden ser
capturados por un indicador simple (Nardo et al., 2005a; Nardo et al., 2005b; OCDE,
2008).
Un IS se define como “aquella función matemática de los indicadores parciales que
reúne un conjunto de condiciones que se juzgan necesarias para concretar una
medición expresiva del objetivo buscado” (Pena, 1978), o lo que es lo mismo, “una
función de un conjunto de variables e indicadores intermedios, cada una de las cuales
contribuye a cuantificar algún aspecto del concepto para el cual se quiere cuantificar
su magnitud” (López et al., 2003).
Estos dependen más de las habilidades del modelador que de las reglas universalmente
aceptadas para su creación (Nardo et al., 2005a; OCDE, 2008). Por lo tanto, quedan a
elección del analista los procedimientos que serán empleados para su construcción,
entre los que se sitúan la selección de los indicadores iniciales, la forma de agruparlos
conceptualmente, el uso o no de un método de normalización de la información, la
ponderación de la misma y, por último, el procedimiento de agregación de la
26
información. Estos constituyen aspectos en la definición de la medida sintética, que
resultan objeto de críticas por parte de los seguidores del enfoque no agregativo.
Sin embargo, a pesar de las críticas, en la práctica, los IS han sido muy utilizados como
herramientas en la toma de decisiones. Por una parte, constituyen instrumentos sencillos
y adecuados para llevar a cabo los análisis comparativos propios de los procedimientos
de planificación. Asimismo, resultan útiles para ilustrar y evaluar objetivos complejos
(como el desarrollo sostenible), facilitando la tarea a los agentes implicados.
Estas medidas permiten establecer tendencias para realizar procedimientos de control y
seguimiento y, de forma complementaria, facilitar la comparación con unidades líderes
en el sector donde se apliquen. No obstante, los IS solo deben suponer un medio de
captar la atención y centrar la discusión a la hora de adoptar decisiones en los procesos
de planificación. La obtención de un IS nunca debe constituir un fin en sí mismo, sino
una herramienta que contribuya a facilitar la decisión.
Su amplia utilidad ha propiciado la existencia de un gran número de métodos para su
creación, como se verá más adelante.Por ello, ante la inexistencia de un marco teórico
consolidado que permita alegar que un procedimiento es mejor que otro, se considera
que lo más factible es garantizar que los indicadores cumplan una serie de propiedades
que se suponen lógicas y razonables, en el sentido de que los valores obtenidos sean
medidas fiables del concepto que se pretende medir. Estas pueden ser consultadas en
Pena (1978), Zarzosa (1996) y Zarzosa et al. (2005).
I: Existencia y determinación. II: Monotonía. III: Unicidad.
IV: Invariancia. V: Homogeneidad. VI: Transitividad.
VII: Exhaustividad. VIII: Simetría. IX: Normalización
Ante la inexistencia de uniformidad en la creación de los IS, el cumplimiento de los
postulados relacionados con anterioridad asegura, en gran medida, la fiabilidad del valor
27
obtenido, independientemente de la metodología que se emplee para ello. Del mismo
modo, se han identificado un conjunto de pasos básicos comunes a adoptar por el
analista que son inherentes a cualquier procedimiento de elaboración de estas medidas
(Saisana y Tarantola, 2002; Sharpe y Salzman, 2003; Nardo et al., 2005a; OCDE, 2008).
Paso 1. Desarrollo de un marco teórico. Paso 6. Ponderación y agregación.
Paso 2. Selección de las variables. Paso 7. Robustez y sensibilidad.
Paso 3. Análisis de la estructura de los datos. Paso 8. Enlaces a otras variables.
Paso 4. Imputación de datos perdidos. Paso 9. Regreso a los detalles.
Paso 5. Normalización de los datos. Métodos
más empleados (Anexo 1).
Paso 10. Presentación y diseminación.
Una vez vistos los postulados que deben cumplir las funciones matemáticas mediante
las que se obtienen los IS, y los pasos fundamentales a seguir durante su creación, se
procede a realizar un análisis de las metodologías más empleadas para su cálculo,
destacando las debilidades y fortalezas de cada una. Estas se insertan dentro del “Paso
6: Ponderación y agregación”.
1.4 Procedimientos de agregación para la construcción de indicadores sintéticos.
Como se explicó con anterioridad, dentro del enfoque agregativo existen varios
procedimientos para calcular los IS. La diferencia entre las metodologías viene dada por
la función mediante la cual se agregan los indicadores iniciales, y cómo se establecen
las ponderaciones. En el presente apartado se describen varios de los algoritmos
empleados en la literatura, los cuales se analizan teniendo en consideración su
capacidad para reducir los aspectos que atentan contra la fiabilidad de los IS, tales
como: la interpretación del resultado obtenido por parte del usuario final y la
complejidad con que se desarrolla el algoritmo, entre otros. Para ello, se asumirá que se
28
parte de un conjunto finito de n unidades4 ),.....,2,1,( nidondeU i = evaluadas en m
indicadores simples ).....,,2,1( mjdondeI j = , de forma que se denota ijX al valor que
toma la i-ésima unidad cuando se evalúa en el j-ésimo indicador, con ni ≤≤1 y
mj ≤≤1 .
1.4.1 Igual peso para cada indicador inicial.
Este es el procedimiento en el que se otorga la misma importancia a cada uno de los
indicadores iniciales, de modo que el indicador sintético corresponde a la suma
ponderada de estos, previamente normalizados, y se calcula para cada unidad como:
∑=
=+++=m
jijimiii wXNwXNwXNwXNIS
121 ........
donde w representa el peso otorgado a cada indicador inicial con ,11∑=
=m
jjw
10 ≤≤ jw y ijXN es el valor normalizado del indicador j para la unidad i. El peso se
determina en dependencia del número de indicadores agregados, de forma que m
w 1= .
Este constituye el procedimiento de agregación lineal más extendido (Nardo et al.,
2005a), debido a la facilidad de su aplicación sobre cualquier base de datos, pero tiene
en su contra, que ignora las posibles relaciones causales existentes entre los indicadores
de partida, pues al otorgársele el mismo peso a indicadores con un alto grado de
correlación, se puede introducir un problema con doble contabilización de la
información.
Si los indicadores iniciales, con el mismo peso, están agrupados por dimensiones,
entonces tendrá mayor ponderación, aquella que más indicadores contenga, lo cual
puede ocasionar un desbalance en la medida sintética. Por otro lado, si se trata de 4 Conjunto de zonas, organizaciones o áreas analizadas. En este trabajo, como se verá en el Capítulo 3, se refiere a las zonas de turismo de naturaleza de Cuba.
29
otorgar el mismo peso a cada dimensión, existe la posibilidad de que no todos los
indicadores finalmente tengan el mismo peso; esto es, los que conforman la dimensión
de mayor tamaño, tendrán pesos menores que el resto. Además, los procedimientos de
agregación lineal suponen que no existe conflicto entre los aspectos que se evalúan, lo
cual resulta ser una suposición poco realista (Funtowicz et al., 1990; Munda y Nardo,
2007).
A pesar de los inconvenientes, varios indicadores sintéticos se han creado siguiendo esta
metodología. Entre ellos se pueden mencionar el Marcador de Innovación, desarrollado
por la Comisión de las Comunidades Europeas (Commission of the European
Communities, 2001), el Indicador Sintético para la Actividad Económica de la zona
euro (Rua, 2002) y el Indicador de Sostenibilidad Ambiental, desarrollado por la
Universidad de Yale y la de Columbia (Yale et al., 2005).
1.4.2 Indicadores basados en procedimientos estadísticos: Análisis de Componentes
Principales.
El empleo de técnicas estadísticas en el cálculo de indicadores sintéticos brinda la
posibilidad de eliminar dos de las debilidades asociadas a su construcción. Tal es el caso
de la duplicidad de información y la determinación de los pesos mediante juicios
subjetivos. Entre estas, el Análisis de Componentes Principales (ACP) sobresale como
una de las más empleadas.
El hecho de que no exista correlación entre las componentes principales permite
suponer que miden las diferentes dimensiones estadísticas de los datos (OCDE, 2008),
de ahí su aplicación para medir conceptos multidimensionales como el desarrollo
humano (Lai, 2000; 2003), la sostenibilidad ambiental (Yale et al., 2005; Khatun,
2009), la calidad de vida (Lun et al., 2006) y la sostenibilidad turística (Blancas et al.,
2007), etc.
30
El empleo del ACP para la construcción de indicadores sintéticos tiene asociadas varias
ventajas, entre las que cabe mencionar que no es necesario que se fijen los pesos de los
indicadores iniciales, puesto que el procedimiento permite obtenerlos. El analista solo
interviene para determinar cómo seleccionar el número de componentes principales y
cuál de los procedimientos es el que empleará para agregar la información. Además de
ello, se evita la doble contabilización de la información, por cuanto, las componentes
principales están incorrelacionadas entre sí, lo que garantiza que cada una aporte
información que no está contenida en las demás.
Para llevar a cabo este procedimiento no se precisa normalizar el conjunto de
indicadores iniciales; sin embargo, se recomienda realizarlo, con el objetivo de evitar la
distorsión en los resultados incluida por las diferentes unidades en que se miden los
datos, que constituye un elemento en contra de la calidad de la medida sintética, entre
otras desventajas.
Por ejemplo, el procedimiento es sensible ante cambios en el conjunto inicial de datos;
así, la introducción de nuevas observaciones o nuevos indicadores, o la simple
actualización de los datos existentes, puede ocasionar una variación en el conjunto de
pesos. De igual forma, la presencia de valores atípicos puede introducir variabilidad en
el conjunto de datos. Por otra parte, el IS obtenido no resulta de fácil comprensión por
los usuarios finales, pues al constituir las componentes principales combinaciones
lineales de los indicadores iniciales, resulta complicado analizar los efectos de estos
indicadores sobre el valor del IS. Esta metodología, además, minimiza la contribución a
la medida sintética, de aquellos indicadores menos correlacionados con el resto.
31
1.4.3 Indicador basado en la distancia a una situación de referencia: Medida de
distancia P2.
Este es uno de los procedimientos que se basa en la distancia a una situación de
referencia para calcular el indicador sintético, con el objetivo de facilitarle al usuario
final una mejor comprensión del resultado obtenido. Conocido como el indicador de
distancia DP2, diseñado por Pena (1978), por su utilidad en la medición del bienestar
social (Zarzosa, 1996; Sánchez y Rodríguez, 2003; López et al., 2003; Zarzosa et al.,
2005), y empleado para medir la sostenibilidad de los destinos turísticos costeros
españoles (Blancas et al., 2007) y de turismo rural en Andalucía (Pérez et al., 2009).
El indicador sintético DP2, se define para la i-ésima unidad como se muestra en el anexo
2 (a). Su valor varía cuando cambia el orden de entrada de los indicadores parciales
debido a los valores de los coeficientes de determinación, lo cual constituye la principal
desventaja asociada a este procedimiento. Esto obliga a establecer una jerarquización de
los indicadores parciales en función de la cantidad de información que cada uno de ellos
aporta al indicador sintético. Así, el orden de entrada de los indicadores estará
condicionado por la cantidad de información contenida en cada uno de ellos.
Entre las ventajas que ofrece este procedimiento, se destaca el hecho de que no se
necesita normalizar los valores de los indicadores iniciales, pues la división de la
distancia ijd entre la desviación típica de cada indicador, elimina los problemas
asociados a la heterogeneidad de las unidades de medida, al conseguir expresar el
indicador parcial en unidades abstractas (Sánchez y Rodríguez, 2003).
No es necesario fijar a priori el valor de los pesos, porque como se conoce, 21,...,2,1, −− jjjR
es el coeficiente de determinación, de manera que el término 21,...,2,1,1 −−− jjjR ,
denominado factor de corrección (Pena, 1978), permite que en este método se ponderen
32
las diferencias entre los indicadores y sus valores de referencia, por el porcentaje de
información nueva que proporciona cada indicador al incluirse en la medida global. Con
ello se elimina la información que proporciona el indicador j-ésimo que ya está
contenida en los j-1 indicadores precedentes (Zarzosa et al., 2005), elimina la duplicidad
de información.
Otra de las ventajas asociadas al procedimiento es que la medida obtenida es de fácil
comprensión para el usuario final, por ser un procedimiento de agregación basado en la
distancia a una unidad de referencia.
1.4.4 Análisis Envolvente de Datos (el enfoque del beneficio de la duda).
La aplicación de DEA (Análisis Envolvente de Datos) al campo de los indicadores
sintéticos, es conocida como el “Enfoque del beneficio de la duda” (Storrie y Bjurek,
1999; Storrie y Bjurek, 2000; Cherchye, 2001; Cherchye y Kuosamen 2002; Cherchye
et al., 2004; Cherchye et al., 2006; Cherchye et al., 2007), que fue originalmente
propuesto para evaluar el rendimiento macroeconómico (Melyn y Moesen, 1991).
En este enfoque, el indicador sintético se define como el ratio entre la suma ponderada
de los indicadores correspondientes a una unidad y la suma ponderada (con los mismos
pesos) de una unidad de referencia. Para la mejor situación, el valor de la medida
sintética será de 1, lo que indica que la unidad tiene un rendimiento igual a su unidad de
referencia, mientras que tomará valor 0 el caso que represente la situación menos
deseada.
Una de las ventajas asociadas a esta metodología viene dada, porque no se necesita
buscar unidades de referencia fuera del conjunto de unidades a evaluar, lo que garantiza
menor incertidumbre en el procedimiento, al no introducir información externa que
afecte los valores de las comparaciones. De modo que para cada unidad evaluada, la
33
unidad de referencia será aquella que, con los mismos pesos, obtenga la mayor suma
ponderada.
Como no se tiene información sobre el valor de los pesos, estos se determinan de forma
interna, momento en el cual se introduce el beneficio de la duda. Este proceso se maneja
para cada unidad por separado, otorgándoles mayor importancia a aquellos indicadores
para los cuales tiene un mejor valor con respecto al resto de las unidades.
Específicamente, se busca el conjunto de pesos que garantiza el mayor valor posible del
indicador sintético para cada unidad. Ello, en ausencia de información verificable,
indica que a cada unidad le fue otorgado el beneficio de la duda al asignarse cada una
sus propios pesos. De este modo, cualquier otro conjunto de pesos empleado pondría a
la unidad evaluada, en una peor posición con respecto a las demás.
Se deben agregar dos características más: Primero, la restricción de normalización, la
cual deja claro que ninguna observación puede alcanzar un valor mayor que 1 para el
indicador sintético. Esta restricción subraya la idea de la comparación con la unidad de
referencia, pues los pesos más favorables para la unidad evaluada son aplicados a todas
las demás, y así se puede determinar cuáles de las restantes unidades obtienen valores
peores, iguales o mejores, que la alternativa que se evalúa bajo el mismo conjunto de
pesos.
Segundo, la restricción de no negatividad de los pesos, que garantiza que el indicador
sintético sea una función no decreciente de los indicadores iniciales, de forma tal que su
valor queda acotado inferiormente. Esto es, 10 ≤≤ iIS para cada unidad, donde el
mayor valor representa una mejor posición relativa.
De esta forma el cálculo del indicador sintético, utilizando el enfoque del beneficio de la
duda, se resume a resolver un problema de programación lineal, por separado, para cada
34
una de las unidades del estudio (Anexo 2, b) (Cherchye et al., 2006; Cherchye et al.,
2007).
Un rasgo importante de esta metodología es que el valor del indicador sintético es
independiente de las unidades de medida de los indicadores iniciales, pues la
flexibilidad con que se determinan los pesos, hace que no influyan en la puntuación de
la medida sintética. Por esta razón, un procedimiento de normalización sería redundante.
Aunque el valor de la medida sintética no se afecte, el valor de los pesos sí depende de
las unidades de medida de los indicadores iniciales. Como consecuencia, se debe ser
cuidadoso al comparar los pesos obtenidos por el enfoque del beneficio de la duda, así,
el análisis se debe centrar en los valores virtuales de cada indicador ( )ijij Xw , que son
totalmente independientes de las unidades de medida y revelan cuánto contribuye cada
indicador al valor del indicador sintético y, por tanto, su importancia relativa.
Entre las ventajas que presenta esta metodología, se puede señalar que el valor del
indicador sintético será sensible a las necesidades de los implicados, pues ponderan con
mayor valor aquellos indicadores para los que la unidad obtiene una mejor posición con
respecto al resto de unidades evaluadas. Esto se debe a la determinación endógena de
los pesos, lo cual constituye a su vez otra ventaja, al no tener que fijarlos a priori. Las
ponderaciones se hallan de forma tal que las obtenidas para cada unidad bajo evaluación
le proporcionen el valor máximo posible para el indicador sintético. De este modo,
queda evidenciado el carácter flexible de este procedimiento al no exigir que todas las
unidades le concedan igual importancia a cada indicador (Martínez et al., 2005; Murias
et al., 2006).
A pesar de las ventajas señaladas, la metodología tiene asociadas varias debilidades,
dadas por la flexibilidad con la que se determinan los pesos. Entre estas se pueden
nombrar la aparición de situaciones extremas, como la obtención de indicadores
35
sintéticos basados en un único indicador inicial, la asignación de mayor ponderación a
indicadores que no son realmente los más importantes en el sistema, la diferencia entre
las ponderaciones obtenidas para los indicadores de cada unidad, y la obtención de
ponderaciones, cuyos valores sean inaceptables de acuerdo con la información existente
en cuanto a la importancia relativa de cada indicador.
1.4.5 Indicadores sintéticos obtenidos mediante técnicas de decisión multicriterio.
La Teoría de la Decisión Multicriterio permite realizar la comparación de un conjunto
de alternativas, y ofrecer una ordenación parcial o total de estas, teniendo en cuenta
varios criterios de evaluación, de los cuales, algunos están contrapuestos, tal como
sucede en la mayoría de los problemas de decisión a los que se enfrentan los
administradores. En ese sentido, los procedimientos basados en esta metodología son
ampliamente utilizados en la construcción de indicadores sintéticos, pues permiten
agregar todas las dimensiones, objetivos (o metas), criterios (o atributos) y medidas de
los criterios empleados.
Estos métodos pueden proporcionar una mejor comprensión del problema de decisión y
promueven el rol de los participantes en los procesos de toma de decisiones. Ayudan a
mejorar la calidad de las decisiones haciéndolas más explícitas, racionales y eficientes
(Pohekar y Ramachandran, 2004; Supriyasilp et al., 2009).
Para la construcción del indicador sintético empleando este enfoque, el papel del
analista implica la aplicación de la técnica que se considere adecuada, la asignación de
pesos a cada criterio y la fijación del procedimiento de agregación. A continuación se
relacionan algunas de las más empleadas.
1.4.5.1 Teoría de la Utilidad Multiatributo (MAUT).
Inicialmente aparece la Teoría de la Utilidad Multiatributo (MAUT), que goza de gran
popularidad en la selección de alternativas (Cracolici y Nijkamp, 2008), desarrollada
36
por Keeney y Raiffa (1976, 1993) a partir de la teoría de utilidad unidimensional de
Von Neumann y Morgenstern (1944), con el objetivo de expresar las preferencias del
centro decisor en términos de la utilidad que le reporta. Se emplea para ello una función
de utilidad multiatributo, que puede ser de tipo aditiva, multiplicativa o un híbrido de
ambas, aunque la más empleada es la función aditiva, dada su simplicidad (Hajkowikz,
2006).
La función de utilidad multiatributo asocia un número real (que representa la utilidad) a
cada alternativa. De este modo se logra llegar a una ordenación completa del conjunto
de estas, a partir de los valores de la suma ponderada de las utilidades parciales en cada
uno de los criterios. La valoración de las distintas unidades (función de utilidad) resulta
de sumar las contribuciones de cada uno de los indicadores iniciales, adecuadamente
ponderados en función de la importancia que representa cada uno para el centro decisor.
La principal ventaja del procedimiento radica en la facilidad con que se puede realizar,
siendo bastante explícito, lo cual genera transparencia. Sin embargo, tiene asociadas
algunas desventajas, como la selección del conjunto de ponderaciones y la construcción
de la función de utilidad que dependen de decisiones de los decisores y del analista,
respectivamente, basadas principalmente en la relación entre los criterios.
1.4.5.2 Proceso Analítico Jerárquico (AHP).
Otro de los procedimientos multicriterio ampliamente empleados lo constituye el
Proceso Analítico Jerárquico (AHP) (Saaty, 1977), que ofrece una forma sistemática de
resolver problemas complicados. Es fácil de utilizar e integra las opiniones de los
expertos y demás implicados (Fang-Mei et al., 2009). Este procedimiento facilita la
descomposición del problema en una estructura jerárquica y asegura que, tanto los
aspectos cualitativos como los cuantitativos, se incorporen al proceso de evaluación.
Además, ayuda a reducir los daños en el proceso de toma de decisiones y permite
37
minimizar los problemas que impiden que se realice una correcta elección (Ali y
Nsairat, 2009).
Este procedimiento presenta varias ventajas, entre las que se destacan la posibilidad de
aplicarlo, tanto a datos cuantitativos como cualitativos (Nardo et al., 2005a; Nardo et al.,
2005b; Singh et al., 2007, Loken, 2007). Otra de las ventajas viene dada por la
transparencia con la que se obtiene la medida sintética (Ananda y Herath, 2008) y la
facilidad para comprender el procedimiento, por lo cual es de gran ayuda para la toma
de decisiones. Además, facilita la definición de las prioridades y las preferencias de los
decisores, por lo cual, tiene una útil aplicación en el análisis de decisiones que involucra
múltiples centros decisores y objetivos (Saaty, 1980).
Tiene a su favor que es la única metodología que explícitamente trata el tema de la
jerarquía (Anexo 3) en los problemas de decisión (Munda, 2008). Además, constituye
una buena herramienta de decisión, sobre todo cuando el centro decisor está claramente
identificado, puesto que expresa sus preferencias y acepta la responsabilidad en las
decisiones tomadas.
A pesar de las ventajas mencionadas, el procedimiento tiene algunas debilidades, como
la complejidad que supone la solución de este tipo de problemas cuando el número de
comparaciones es elevado y el hecho de que los resultados que se obtienen dependen del
grupo de evaluadores escogidos, lo que constituye una debilidad asociada a la
introducción de juicios subjetivos.
1.4.5.3 El Método PROMETHEE.
Dentro de este enfoque se destaca también el método PROMETHEE (Preference
Ranking Organization Method for Enrichment Evaluations), como uno de los
sobresalientes entre los que emplean las relaciones de superación, que permiten ofrecer
una ordenación parcial o total de las alternativas en consideración (Queiruga et al.,
38
2008; Mohamadabadi et al., 2009; Tsoutsos et al., 2009, Behzadian et al., 2009). Su
referencia pionera está en Brans et al. (1984), pero las más completas y didácticas son
Brans y Vincke (1985) y Brans et al. (1986) (Bárbara-Romero y Pomerol, 1997).
Una de las ventajas del método PROMETHEE, frente al resto de sus competidores, es
que requiere información adicional que puede ser fácilmente obtenida por el decisor con
la permanente y activa ayuda del analista, con lo cual se facilita que la medida obtenida
sea de fácil comprensión por los decisores. Por otra parte, la función de preferencia de
cada indicador expresa sus valores en unidades abstractas, lo que hace innecesario un
procedimiento de normalización de los indicadores iniciales. Además, la construcción
de la relación de superación incorpora la fijación de una serie de parámetros que tienen
una interpretación fácilmente identificable por parte del centro decisor.
El estudio del método PROMETHEE se complementa con el proceso GAIA
(Geometrical Analisis for Intercative Assistance), un módulo de interacción visual
(Brans y Mareschal, 1988) que ofrece al decisor una descripción gráfica clara de su
problema de decisión, enfatizando los conflictos existentes entre los criterios y el
impacto de los pesos en la decisión final. Este análisis es más descriptivo que el método
PROMETHEE y está orientado gráficamente. Además, el procedimiento cuenta con el
programa DECISION-LAB, que permite realizar las operaciones de forma rápida y
sencilla. Mediante este se puede llevar a cabo el análisis de sensibilidad de los pesos de
cada criterio y determinar la robustez de los mismos.
La metodología tiene asociadas varias desventajas, entre las que sobresale la
introducción de juicios subjetivos en el procedimiento, provocados fundamentalmente
por la determinación del tipo de función a emplear, los valores de los umbrales de
preferencia e indiferencia y, sobre todo, la determinación de los pesos de cada
indicador. También, cuando el sistema está compuesto por un alto número de
39
indicadores, la interacción con el centro decisor al definir los criterios generalizados
incrementa la subjetividad del problema. Por otra parte, la interpretación del Plano
GAIA exige para el decisor un amplio conocimiento de la metodología.
1.4.5.4 Procedimiento basado en Programación por Metas (PM).
Otro de los métodos multicriterio empleados en la confección de indicadores sintéticos
ha sido desarrollado por Díaz-Balteiro y Romero (Diaz-Balteiro y Romero, 2004a) y
Nardo y Munda (Nardo y Munda, 2007; Munda, 2008), en los cuales el proceso de
agregación se basa en la distancia entre los indicadores y una situación de referencia
establecida por el analista al interactuar con el centro decisor. Esto está ocasionado,
porque en los problemas de programación multicriterio, no existe una solución que
optimice todos los criterios a la vez, dada la situación de conflicto entre ellos, por lo
cual, se deben encontrar soluciones de compromiso (Munda, 2008).
Tradicionalmente, la evaluación de las unidades se lleva a cabo mediante la distancia de
cada una a un punto ideal fijado, que puede estar representado por niveles de aspiración
que se desea que cumplan los indicadores del sistema, caso en el cual sobresale la
programación por metas, (Diaz-Balteiro y Romero, 2004a) introducen un procedimiento
de agregación basado en este algoritmo, con variables de decisión enteras [0,1] para la
construcción de indicadores sintéticos. La metodología que proponen determina de
forma flexible el sistema con mayor grado de sostenibilidad dentro de un conjunto de
unidades, teniendo en cuenta un gran número de indicadores, y de este modo,
proporciona un ranking de las zonas consideradas en el estudio.
El procedimiento de agregación propuesto, que se basa en determinar aquella alternativa
que presenta la menor distancia entre el valor de cada indicador y el nivel de aspiración
fijado. Para ello, se propone un modelo de PM que se describe en el anexo 2 (c) (Diaz-
Balteiro y Romero, 2004 b).
40
La función de distancia empleada depende del valor del parámetro de control λ , de
forma tal que si 1=λ , la función se corresponde con la medida de distancia para la
métrica L1, situación en la que se maximiza la suma ponderada de los logros de cada
indicador, o sea, un punto de máxima eficiencia. Cabe destacar que dicho valor puede
estar fuertemente desequilibrado debido a resultados muy pobres para algunos de los
indicadores del sistema.
Para un valor de 0=λ , la función entonces equivale a la medida de distancia para la
métrica ∞L , cuya solución subyace en la lógica de equilibrio en vez de eficiencia
(Romero, 1993). De la misma forma, para obtener las soluciones existentes entre la
distancia L1 y L∞, el analista no tiene más que otorgarle valores entre 0 y 1 al parámetro
λ , de forma que cuenta con un conjunto de soluciones alternativas.
En el procedimiento descrito, varios aspectos afectan la calidad del indicador calculado.
Entre ellos se pueden mencionar la determinación de los niveles de aspiración para cada
uno de los indicadores iniciales, la elección por parte del analista del procedimiento de
normalización y la ponderación otorgada al cumplimiento de las metas.
Se debe destacar que en estos, la agregación de múltiples criterios implica un carácter
compensatorio (Munda, 2008). Ello se interpreta como la existencia de tasas de
intercambio (trade-offs) entre los indicadores, lo que indica la posibilidad de preferir
empeorar en un criterio, a cambio de una mejora considerable en otro. Este carácter
compensatorio no es deseable en la construcción de indicadores sintéticos (Munda y
Nardo, 2007) y, en este sentido, proponen un procedimiento de agregación no
compensatorio que consideran necesario por razones de consistencia teórica, de forma
tal que, como exigen varios autores (Keeney y Raiffa, 1976; Bouyssou, 1986; Bouyssou
y Vansnick, 1986; Podinovskii, 1994), los pesos son empleados como coeficientes de
41
importancia, y no como tasas de intercambio, lo cual constituye la base de este tipo de
procedimientos de agregación.
1.4.5.5 Métodos multicriterio no compensatorios.
Dentro de los procedimientos de agregación multicriterio no compensatorios, aparece
como referente el desarrollado por Munda (2005, 2008); Munda y Nardo (2007) que
parte del sistema inicial propuesto para el estudio del que se conocen los pesos que
indican la importancia relativa de cada indicador. El procedimiento de agregación
propuesto se divide en dos pasos:
1. Comparación por pares de las unidades analizadas de acuerdo con el total de
indicadores, obtiendo la matriz E, cuyos elementos eik, con i ≠ k son el resultado de
la comparación de cada par de unidades Ui y Uk (Anexo 2, d).
2. Ordenación de las unidades mediante un completo pre-orden; esto es, sin relación
alguna de no comparabilidad.
Al realizar las comparaciones pareadas de las unidades con respecto a cada indicador
inicial, la metodología explicada permite emplear los pesos como coeficientes de
importancia, con lo cual, se elimina el carácter compensatorio en la construcción de los
indicadores. Además, no precisa de un proceso de normalización de los indicadores, al
emplear los valores ordinales en término de preferencia, lo que le imprime un carácter
menos subjetivo al proceso.
Por otro lado, presenta varias limitaciones, como la técnica empleada para ajustar las
escalas y la determinación de los pesos correspondientes para cada indicador inicial.
Además, al tomar la información de los indicadores de tipo ordinal, se pierde la
intensidad de preferencia mostrada por los valores absolutos de estos, lo cual resulta un
inconveniente, a cambio de reducir la compensabilidad. Esta limitación puede ser
42
salvada mediante la introducción de umbrales de preferencia e indiferencia durante la
realización de las comparaciones pareadas.
El empleo de los procedimientos analizados para construir indicadores sintéticos, tiene
como principal ventaja que contribuyen a medir la sostenibilidad de los destinos
turísticos, al permitir resumir en un único valor el desempeño de los mismos. Sin
embargo, en lo referente a la evaluación del desarrollo turístico sostenible, además de
ello, es necesario identificar los aspectos que constituyen fortalezas y debilidades que
mayor incidencia tienen en el comportamiento de los destinos, así como lograr un
desarrollo armónico de las dimensiones que componen dicho concepto.
A partir de aquí, se puede afirmar que, desde la elección del procedimiento mediante el
cual se va a agregar la información, se están tomando decisiones que afectan el valor de
la medida obtenida y, por consiguiente, provocan, en mayor o menor grado, dificultad
para comprenderla por parte del usuario final. Estas decisiones inciden en el resultado
obtenido, y deben ser adoptadas, aún partiendo de un sistema de indicadores
previamente establecido.
En primer lugar aparecen los factores de incertidumbre que determinan la variabilidad
del valor del IS obtenido en cada caso (Saisana et al., 2005; Nardo et al., 2005a);
entendiéndose por ello, aquellos aspectos del procedimiento de construcción que
dependen de una decisión subjetiva. En ese sentido, para facilitar la comparación entre
las metodologías, no se considerarán los factores asociados a la definición del sistema
de indicadores (la inclusión o no de indicadores en el sistema, la elección de las medidas
de cuantificación o de los procedimientos de estimación de valores perdidos, etc.), sino
que se tendrán en cuenta los aspectos siguientes:
- El método de normalización de los indicadores iniciales.
- La incertidumbre asociada a la determinación de los valores de las ponderaciones.
43
- Las decisiones adicionales a adoptar durante la aplicación del procedimiento
(estimación de parámetros, definición de funciones de preferencia, etc.).
Por otra parte, al elegir el procedimiento de obtención de los IS, se debe tener en cuenta
el grado de dificultad asociado a la interpretación de los resultados obtenidos. De modo
que interesa determinar si se trata de un procedimiento con una interpretación de los
resultados fácil o compleja. El grado de dificultad se analiza en función de cuestiones
tales como: la posibilidad de determinar objetivamente la influencia de cada indicador
inicial dentro del IS, o la fijación de una definición del IS que clarifique el significado
de los valores obtenidos.
De igual modo, se tendrá en cuenta la implicación con el usuario final durante el
proceso, bien sea adoptando decisiones, o aportando continua información para obtener
la medida sintética, que en cierto grado puede restar objetividad a los resultados
obtenidos. Por último, se le brinda atención a si los procedimientos incorporan o no
algún mecanismo que permita eliminar el problema de la doble contabilización de la
información. Así, se indican los procedimientos en los que puede existir un problema de
doble contabilización de la información que distorsione el valor del IS.
En el anexo 4 se muestra una tabla comparativa (Tabla 1) de las metodologías
analizadas, la cual permite afirmar que, entre las analizadas, ninguna sobresale como la
mejor para el cálculo de IS, por ello las actuales investigaciones están encaminadas a
elaborar procedimientos de agregación, cuyo resultado sea de fácil comprensión por
parte del usuario final, y que las puntuaciones de los indicadores sintéticos permitan
realizar análisis comparativos e identificar el aporte de cada uno de los indicadores o las
dimensiones, al valor del indicador sintético global, tal como se propone en el presente
trabajo.
44
En este contexto, un nuevo procedimiento debe permitir la obtención de ponderaciones
internamente, de modo que el valor de los pesos sea único, común para todas las
unidades, y no tenga asociados juicios que representen los intereses de algunos de los
implicados en su creación. Por otra parte, resulta conveniente que el mecanismo cuente
con algún procedimiento capaz de eliminar la información redundante.
Asimismo, las nuevas metodologías deben emplear pasos sencillos para la construcción
de los IS, contando con una herramienta informática que facilite la realización de los
cálculos asociados. Además, es necesario que no requieran de la adopción de decisiones
adicionales (ej. estimación de parámetros o definición de funciones de preferencia), para
que la implicación con el usuario final sea la mínima posible.
En cuanto a la normalización de los valores de los indicadores iniciales, las nuevas
metodologías deben ser tales que, o bien no necesiten un procedimiento de
normalización, o bien tengan incorporado en su formulación aquel que se considere el
más indicado de acuerdo a los objetivos propuestos, garantizando al usuario no tener
que elegir entre los procedimientos existentes.
Conclusiones parciales.
1. En la actualidad no existe una definición comúnmente aceptada de lo que es el
desarrollo turístico sostenible, pero todas las enunciaciones comparten la necesidad
de proveer beneficios económicos para la comunidad de destino, una experiencia de
calidad para el visitante, proteger el medio ambiente y garantizar un estándar de
calidad de vida para los residentes locales.
2. El desarrollo turístico sostenible consiste en el logro simultáneo de varios objetivos,
algunos de los cuales se contraponen, por lo cual se persigue encontrar un punto
eficiente que refleje el compromiso entre los criterios que engloba dicho concepto,
45
en función de las necesidades de los implicados, y sus prácticas y guías son
aplicables a todos los destinos.
3. Actualmente no existe una definición unánimemente aceptada de turismo de
naturaleza, aunque todas las enunciadas se apoyan en modelos y productos en los
que existe un mayor nivel de concientización medioambiental.
4. Los indicadores constituyen importantes herramientas para medir la sostenibilidad
turística, pues permiten obtener, tanto información numérica, como juicios de valor,
y brindan la posibilidad de tener en cuenta las necesidades de todos los implicados
en el desarrollo del sector, proporcionan la información necesaria en el momento
oportuno y contribuyen al proceso de toma de decisiones.
5. Actualmente no existe una metodología como la más acertada para la construcción
de indicadores sintéticos, por lo que, un nuevo procedimiento a elaborar para este
fin, debe contribuir a mitigar los aspectos que influyen negativamente en la calidad
del valor obtenido: que las ponderaciones se puedan determinar de forma interna;
que no requiera de un procedimiento de normalización de los valores de los
indicadores iniciales, y que se disminuyan al máximo las decisiones adicionales a
adoptar durante su creación. Además, que los resultados obtenidos sean de fácil
interpretación; que la implicación con el usuario final sea la mínima, y que el
algoritmo tenga incluido un mecanismo para eliminar la doble contabilización de la
información.
6. Los indicadores sintéticos contribuyen a medir la sostenibilidad de los destinos
turísticos al permitir resumir en un solo valor el desempeño de los mismos,
centrándose en los aspectos más importantes y con la menor pérdida de información.
CAPÍTULO 2. PROPUESTA METODOLÓGICA DEL PROCEDIMIENTO DE
AGREGACIÓN PARA LA CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES
SINTÉTICOS DE SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE TURISMO DE
NATURALEZA DE CUBA
CAPÍTULO 2. PROPUESTA METODOLÓGICA DEL PROCEDIMIENTO DE
AGREGACIÓN PARA LA CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES
SINTÉTICOS DE SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE TURISMO DE
NATURALEZA DE CUBA
En el presente capítulo el autor se propone, a través de los resultados del diagnóstico,
constatar la vigencia del problema científico planteado, para lo cual se realizó la
caracterización de la situación actual sobre el empleo de indicadores para medir la
sostenibilidad del turismo en Cuba. Posteriormente se expone la propuesta
metodológica de un nuevo procedimiento para la construcción de indicadores sintéticos
de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza, empleando para la agregación:
Análisis de Componentes Principales (ACP), Programación por Metas (PM) y Análisis
Envolvente de Datos (DEA), de forma tal que se favorezca la medición de este concepto
y se proporcionen herramientas que contribuyan al proceso de toma de decisiones.
Para el desarrollo del capítulo, se utilizaron técnicas y procedimientos correspondientes
a los diferentes métodos empíricos y teóricos seleccionados. A partir del diagnóstico
realizado, se propone un procedimiento de agregación para medir la sostenibilidad del
turismo, que permita obtener un indicador sintético para cada una de las dimensiones de
la sostenibilidad, y calcular un indicador global.
2.1 Diagnóstico
Con el propósito de analizar el modo de gestionar la sostenibilidad del turismo en Cuba,
por medio del CITMA, y la base legal establecida al respecto, se empleó el método
47
empírico de observación científica, basado en el análisis documental, lo cual permitió
identificar los siguientes resultados:
La isla de Cuba está considerada entre los 10 polos de mayor biodiversidad a nivel de
las islas, (Martín, 2009), y cuenta con un potencial para el desarrollo del turismo de
naturaleza compuesto por 64 áreas (Anexo 5), que ocupan en total 20 100 Km2 (18% de
la superficie del país), de ellas 62, que abarcan 19 900 Km2, son Áreas Protegidas de
diferentes categorías, seis Reservas de la Biosfera (Medina y Santamarina, 2004), tres
han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad (UNESCO), una es Sitio Ramsar5 y
una es Monumento Nacional (Herrera, 2000; MINTUR, 2003b).
Estas condiciones permiten, fomentar la práctica del turismo de naturaleza, el cual ha
devenido notable en cuanto al número de visitantes en los últimos años, pues pasó de
representar el 0,26% del total de visitas a Cuba en el 2004, a ocupar el 10,93% en el
20096 (MINTUR, 2004; ONE, 2010).
Las actividades que más se comercializan en Cuba son: la observación de aves,
senderismo, montañismo (trekking), cicloturismo, acampada, aventuras, cabalgatas,
espeleoturismo, la observación de naturaleza y cultura e historia, donde, más del 90% de
los senderos, caminatas y recorridos que se ofertan están en Áreas Protegidas
administradas por la Empresa para la Conservación de la Flora y la Fauna y por
dependencias del CITMA (Martín, 2009).
Dado que su principal característica es el disfrute de los espacios naturales, la garantía
de la sostenibilidad resulta imprescindible. La motivación de centrar este estudio en el
turismo de naturaleza viene dada principalmente porque:
5 Humedal de importancia internacional declarado por la Convención sobre los Humedales (Irán, 1971). 6 No fueron recogidos los datos del turismo de naturaleza correspondientes de los años 2005 al 2008, según la Dirección de Desarrollo del MINTUR, Cuba.
48
1. De los cuatro destinos propuestos por Cuba para el establecimiento de la Zona de
Turismo Sustentable del Caribe (ZTSC), tres son exponentes del turismo de
naturaleza.
2. Esta modalidad turística constituye la principal oferta de la provincia Pinar del Río.
3. El interés del país en potenciar el desarrollo del turismo de naturaleza, dado el
aumento creciente del número de viajes con motivo de su disfrute, y la necesidad de
diversificar la oferta ante los competidores de nuestra área geográfica.
Por ello, a continuación se hace referencia a la base normativa existente en Cuba para la
gestión en las diferentes actividades económicas, entre las cuales sobresale el turismo,
como una de las que más depende de la calidad de los recursos naturales.
2.1.1 La política del País a favor del desarrollo sostenible, a través del Ministerio
de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
En Cuba, es el CITMA el organismo encargado de dirigir, ejecutar y controlar la
política del Estado y del Gobierno (…) para contribuir al desarrollo sostenible del país;
este tiene a su cargo, entre otras acciones (Resolución No.132 /2009):
Dirigir y controlar la ejecución de la política encaminada a la protección del medio
ambiente y el uso racional de los recursos naturales.
Dirigir y controlar las actividades relacionadas con las Áreas Protegidas.
Aprobar las Evaluaciones de Impacto Ambiental que correspondan y otorgar las
Licencias y Permisos Ambientales.
No obstante, es menester de las administraciones locales, velar por el cumplimiento de
las legislaciones establecidas al respecto. Ello pone de manifiesto el interés de
garantizar el respeto al medio ambiente en todos los sectores. Tal es el caso, que la Ley
81 del 11 de julio de 1997 "Del Medio Ambiente", define en su artículo 9 inciso e),
entre sus objetivos, regular el desarrollo de las actividades de evaluación y control sobre
49
el medio ambiente, y en virtud de ello establece (…) las disposiciones generales del
proceso de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA), cuya dirección atañe al CITMA.
La EIA constituye uno de los instrumentos de la gestión de la política ambiental, cuya
implementación ha permitido introducir importantes variables para la protección del
medio ambiente y el uso sostenible de los recursos naturales en programas y proyectos
de obras o actividades, lo que ha permitido su consolidación como herramienta para la
toma de decisiones.
En tal sentido, la Resolución No. 132 /2009, establece en su Artículo 2 que la EIA tiene
los objetivos siguientes:
a) Asegurar que los potenciales impactos ambientales sean debidamente previstos en
una etapa temprana del diseño y la planificación del proyecto (…) y compensar los
posibles impactos negativos.
b) Examinar en qué forma el proyecto puede causar impactos a las comunidades, a otros
proyectos de desarrollo social y al medio ambiente en general.
c) Propiciar la evaluación y la valoración económica de los efectos ambientales
previstos y el costo de la reducción de los efectos ambientales negativos.
Por ello, cada proyecto, principalmente los relacionados con el turismo, debe tener
realizada, cuando proceda, la EIA, o la Licencia Ambiental (LA) con carácter previo a
su ejecución, tal como establece el Artículo 18 de la Sección Primera del Capítulo III de
la citada Resolución, pues la LA se exige a toda actividad susceptible de producir
efectos significativos sobre el medio ambiente o que requiera de un debido control a los
efectos del cumplimiento de lo establecido por la legislación ambiental vigente.
50
La base normativa analizada demuestra el interés del gobierno de la República de Cuba
por el cuidado y conservación del medio ambiente; además, este es reconocido por su
amplia preocupación en este aspecto7.
No obstante, a pesar de la inquietud por los daños que los proyectos puedan causar a las
comunidades, y la exigencia de la consulta previa a los pobladores, manifiesta en los
artículos 11, inc. e; 18, inc. t; 24, inc. a y g; 26, inc. q de la Resolución No.132 /2009, el
autor considera que su cumplimiento no se evidencia en la documentación referente al
otorgamiento de las LA o las EIA realizadas, lo cual atenta contra la veracidad de la
consecución del segundo objetivo de dicha Resolución. En ese sentido, se recomienda
que el procedimiento establecido para la realización de las consultas locales y la
obtención de la opinión de la ciudadanía en las EIA, aparezcan debidamente explicados
en la Resolución No. 132 /2009.
Otro aspecto a señalar, consiste en que la labor del CITMA se centra, principalmente, en
el cuidado y la protección del medio ambiente, lo cual, sin lugar a dudas, contribuye
directamente al bienestar social. Sin embargo, se precisa de instrumentos que gestionen
de forma conjunta las afectaciones de los diferentes proyectos, a la sociedad y a la
economía local, de forma tal que sean incluidos en el proceso de toma de decisiones
relacionadas con la sostenibilidad, en el mismo proceso de evaluación; de esta forma, se
analiza la repercusión que pueda tener una decisión en cualesquiera de estas
dimensiones y se pueda estudiar la relación causa-efecto de cada una de las adoptadas.
Para desarrollar esta propuesta, se sugiere el empleo de indicadores, tanto por la
facilidad que tienen para almacenar información, como por las posibilidades de análisis
7 Mathis Wackernagel, director ejecutivo de Global Footprint Network aseguró, en exclusiva a Prensa Latina, que el desarrollo sostenible solo es cumplido hoy, por Cuba, alegando además, que la Isla posee un índice de desarrollo humano alto, caracterizado por una alta esperanza de vida, un elevado nivel educativo y un ingreso adecuado para vivir, unidos a un consumo proporcional de sus recursos. Esto no significa, por supuesto, que Cuba sea un país perfecto, pero sí, que es el que cumple las condiciones para mantener un desarrollo aceptable y sostenible (López et al., 2010).
51
que permiten, pues estos son dos de los motivos por los cuales están reconocidos como
herramientas útiles para medir la sostenibilidad y contribuir al proceso de toma de
decisiones. De este modo, coincidiendo con el objetivo propuesto en la presente
investigación, en el siguiente epígrafe se hace un análisis de varias de las iniciativas que
se apoyan en los indicadores para medir la sostenibilidad del turismo.
2.1.2 El empleo de indicadores para medir la sostenibilidad del turismo en Cuba.
En este apartado se hace referencia a los principales estudios de sostenibilidad turística
que se han llevado a cabo en Cuba en los últimos años, pues a decir de Salinas et al.
(2008), últimamente se han originado algunas experiencias interesantes en el uso de
indicadores para evaluar la sostenibilidad del turismo en diversos destinos. Como parte
del análisis documental, fueron estudiadas cinco iniciativas.
La primera, corresponde al trabajo desarrollado por un grupo conformado por expertos
del MINTUR y del CITMA, en el año 2003, que se dedicó a la selección de indicadores
para medir la sostenibilidad del turismo. Como parte del procedimiento a seguir
(MINTUR, 2003a), se obtuvo un listado de indicadores que consideraron útiles para
medir la sostenibilidad (Anexo 6) y, entre los lineamientos propuestos figuraba su
aplicación en los destinos Topes de Collantes y Varadero.
En entrevista realizada a Telmo Lorenzo Ledo Llanes, Funcionario de la Dirección de
Desarrollo del MINTUR, se conoció que, debido al establecimiento de ciertas
prioridades por parte de su Dirección General, fue detenido momentáneamente el
proceso de aplicación. A pesar de ello, el sistema de indicadores propuestos se
considera pertinente como punto de partida, para medir la sostenibilidad de los destinos
turísticos, al ser identificados por un grupo de expertos (metodología “de arriba hacia
abajo”), señalando como insuficiencia, no considerar la opinión de los pobladores, que
resulta relevante para este tipo de trabajos.
52
Otra de las desventajas radica en que dichos indicadores no fueron cuantificados ni
validados en los destinos seleccionados. Además, no se empleó ninguna de las técnicas
propuestas en la bibliografía para analizar si son representativos del concepto a medir,
ni se establecieron los pesos que revelan el nivel de importancia de cada uno. En cuanto
a esto, a pesar de que, en términos de sostenibilidad, todas las dimensiones de dicho
concepto tienen igual importancia, puede ocurrir que para los tomadores de decisiones,
el orden de prioridad de los aspectos que representan los indicadores, no sea el mismo.
Por último, señalar que el modo de evaluar el desempeño de un destino, de un período
con respecto a otro, es mediante el análisis simultáneo del comportamiento de todos los
indicadores, lo cual puede resultar difícil para los tomadores de decisiones dado que, un
mejor (peor) comportamiento se registra solo cuando la mayoría, o la totalidad de los
indicadores, tienen una mejor (peor) actuación en términos de sostenibilidad, lo cual no
suele ocurrir con frecuencia en los procesos reales de toma de decisiones. Por ello, se
necesita establecer un procedimiento para agregar la información contenida en el
conjunto de indicadores, para el caso en que se requiera.
Como consecuencia, la planificación y la toma de decisiones para el desarrollo turístico
sostenible, en el MINTUR, se ven afectadas, pues esta entidad carece de un adecuado
sistema de información que le permita realizar un análisis conjunto de cada una de las
dimensiones de la sostenibilidad, y poder evaluar la relación causa efecto de las
decisiones futuras, ya sea dentro de una misma dimensión, o entre aspectos que
pertenezcan a dimensiones distintas.
Por otra parte, la carencia de valores registrados para los indicadores elegidos, provoca
que no sea posible medir el logro del cumplimiento de los planes trazados. Ello, sin
lugar a dudas, constituye una debilidad sustancial, por cuanto, la planificación es una de
las funciones más importantes dentro del proceso de administración, de esta dependen
53
las decisiones futuras acerca del desarrollo de esta actividad en cada una de las
comunidades y, por consiguiente, del desarrollo del país.
La segunda iniciativa, es el “Modelo aditivo lineal multiatributo para la evaluación de la
sostenibilidad local (SOSTUR)” desarrollado por Márquez et al. (2006), que ha sido
aplicado en instalaciones hoteleras del polo de Varadero y en destinos de sol y playa en
Venezuela. Esta se sustenta sobre la base del paradigma decisional multicriterio.
Las áreas clave y los indicadores, son seleccionados mediante juicios de expertos,
(metodología “de arriba hacia abajo”), lo cual garantiza que los indicadores sean
debidamente identificados, de acuerdo con las necesidades del trabajo, pero omite los
juicios de los pobladores locales, esenciales en el desarrollo turístico de la localidad.
Otra de las ventajas señaladas al modelo, consiste en el empleo de un método
multicriterio discreto (AHP)8 para determinar los pesos de las dimensiones que
componen el concepto a medir, pero a su vez tiene como inconvenientes su
complejidad, cuando el número de comparaciones es elevado, y que los pesos dependen
del grupo de evaluadores escogidos.
Por último, cabe destacar que el modelo incluye un procedimiento de agregación como
soporte a la toma de decisiones, lo cual constituye un aporte significativo. La propuesta
contiene dos fases de agregación; una por dimensiones, y otra de forma global. Sin
embargo, se emplea una función aditiva, que constituye el método de agregación más
empleado, dada su facilidad, pero tiene asociadas varias desventajas. Entre estas, el
hecho de ignorar las posibles relaciones causales existentes entre los indicadores de
partida, y el problema de la doble contabilización de la información.
La tercera iniciativa analizada se titula “Procedimiento para la planificación y gestión
integral del desarrollo turístico sostenible a escala local en Cuba”, desarrollada por el
8 Proceso Analítico Jerárquico (Analytic Hierarchy Process); Saaty, L. (1977).
54
Centro de Estudios Multidisciplinarios del Turismo (CEMTUR), de la Universidad de
Camagüey, propuesto por Betancourt et al. (2007).
Tiene como objetivo diseñar un procedimiento metodológico adecuado a las
particularidades de la economía cubana, que facilite la planificación y gestión integral
del turismo a escala local, y coadyuve a elevar su contribución al desarrollo local
sostenible. Este se aplicó en las provincias de Camagüey y Ciego de Ávila, mediante un
procedimiento dividido en cuatro fases.
El proyecto resultó de gran utilidad, pues se obtuvieron resultados tales como: la
facilitación de un instrumento para la acción, a la hora de plantear las pautas para el
desarrollo local sostenible del turismo en Camagüey, el plan de marketing de
Cubanacán en Santa Lucía, la evaluación integral de los impactos del turismo en la Isla
de Tariguanó y el presupuesto medioambiental en el Hotel Tryp Cayo Coco. También
cabe señalar que el trabajo se realizó a partir de la identificación de los agentes
implicados en el desarrollo turístico de cada destino, donde la comunidad local se
reconoce como el primero de estos, y a partir de ellos, se establecieron los indicadores a
emplear.
No obstante el procedimiento, el autor considera que en la segunda fase, durante la
confrontación de la información cuantitativa y cualitativa, además de recoger la
información en una tabla, y emplear un sistema de símbolos para facilitar su
comprensión, se puede utilizar un método de agregación fundamentado teóricamente, de
modo que se establezcan comparaciones entre los diferentes estados de la situación a
medir y se garantice una mayor fiabilidad y fortaleza a los resultados obtenidos.
Otra de las iniciativas analizadas es el Proyecto “Contribución a la Sustentabilidad del
Turismo en Cuba” que desarrolla actualmente, la Fundación Antonio Núñez Jiménez de
la Naturaleza y el Hombre con la colaboración del MINTUR y la ONG, World Wildlife
55
Fund Canada (WWF-Canadá), el cual tiene lugar en el marco del establecimiento de la
Zona de Turismo Sustentable del Caribe (ZTSC).
Su objetivo consiste en crear las bases para una política ambiental del desarrollo del
sector del turismo en Cuba que refleje las normas internacionales de sostenibilidad del
turismo. El ensayo se realiza en cuatro polos turísticos, a través de la elaboración de
indicadores adaptados a la realidad cubana: Parque Nacional Viñales y Complejo Las
Terrazas, en Pinar del Río; y en la Ciénaga de Zapata y Varadero, en Matanzas.
En una entrevista realizada al compañero Dr. C. Alfredo Norman Vega, autor del
“Manual de procedimientos para entrenadores en turismo sustentable”, y a la vez,
encargado de exponer el trabajo a realizar con los indicadores en los talleres ofrecidos,
se pudo constatar que no se ha establecido un procedimiento de agregación para evaluar
el comportamiento global de las zonas en cuanto a la sostenibilidad, pues en la fase
actual no se tienen los valores registrados de los indicadores, sino el listado de los
necesarios a partir de los problemas identificados. De este modo, el análisis en cada
territorio se realiza a partir de la solución de los problemas identificados, mediante el
cumplimiento de los indicadores seleccionados para cada uno, lo cual es competencia de
los actores locales.
Entre las ventajas asociadas, sobresale el modo de seleccionar los indicadores, pues
permite tener en cuenta los criterios de todos los implicados en el desarrollo del turismo
en las comunidades; además, los talleres realizados dotan a los actores locales9 del
conocimiento previo que se necesita para llevar a cabo el proceso, aunque se destaca la
ausencia de los trabajadores por cuenta propia en el turismo.
Entre las desventajas, mencionar la forma de análisis propuesta, que no permite realizar
una fácil comparación de los destinos, puesto que no se definieron herramientas que 9 Empresas –públicas y privadas-, organizaciones, instituciones o, agrupaciones o sectores poblacionales con un peso significativo en el territorio (Díaz y Norman, 2006).
56
permitan chequear de forma cuantitativa el desenvolvimiento global de cada zona, de
modo que el análisis se propone desde un enfoque no agregativo, lo cual resulta
complicado para el proceso de evaluación y toma de decisiones cuando el número de
indicadores es amplio. Además, no se especifica el modo de chequear si los indicadores
seleccionados en los diferentes territorios son los adecuados para medir el concepto
subyacente, ni se establecen los niveles de importancia de su cumplimiento; además, no
se definió un procedimiento de agregación, para el caso de necesitarse.
El último análisis se realiza sobre las “Metodologías para la evaluación de la
sustentabilidad territorial: El uso de indicadores en destinos turísticos de Cuba”, fue
desarrollada por Salinas et al. (2008), con la finalidad de comparar distintas
metodologías de indicadores de sostenibilidad en diversos espacios, cuyo rasgo común
es el predominio de la actividad turística: Litoral Norte de la provincia de Holguín,
Centro histórico de La Habana y el Archipiélago de los Canarreos, al sureste de la Isla.
Se parte, también, de un sistema de indicadores seleccionados por un grupo de
especialistas, que tampoco fueron ponderados, debido a la relación equitativa que debe
existir entre las dimensiones del desarrollo sostenible (Salinas et al., 2008). Su
principal ventaja, es que en todos los casos se cuenta con un sistema de indicadores
debidamente cuantificado para cada uno de los territorios analizados.
Sin embargo, se evidencia la ausencia de una herramienta que permita verificar la
confiabilidad de los indicadores para medir la sostenibilidad, así como un
procedimiento para agregar la información con mayor fiabilidad y justificado
teóricamente, pues como señalan Salinas et al. (2008), “si bien la creación de las
herramientas que proponen es operativa, se debe seguir investigando para poder aportar
más en términos cualitativos y cuantitativos con el fin de poder medir los avances” o
57
retrocesos en términos de sostenibilidad del turismo, coincidiendo con el objetivo de la
presente investigación.
El análisis realizado, permite afirmar que las diferentes iniciativas, de forma general,
presentan varias ventajas, principalmente relacionadas con el propio uso de indicadores,
como la posibilidad de agruparlos en subconjuntos que representan cada una de las
dimensiones de la sostenibilidad, y obtener un sistema de información debidamente
cuantificado y actualizado para tomar decisiones.
Sin embargo, existen debilidades relacionadas con el modo de seleccionar los
indicadores, pues, a pesar de emplear el criterio de expertos, se debe propiciar la
participación de los residentes locales. Ello permite tener constancia de sus
aspiraciones. Otra debilidad consiste en la determinación de los pesos, pues si bien
puede realizarse mediante una consulta a expertos, también sería conveniente contar con
un procedimiento que permita determinarlos de forma interna, de modo que se elimine
la introducción de juicios que representen solo los intereses de los participantes.
Resaltan además, la ausencia de un mecanismo para determinar si los indicadores
seleccionados son representativos del concepto que se pretende medir, ya sea por
dimensiones, o de forma general; y la carencia de un procedimiento para agregar la
información contenida en el conjunto inicial de indicadores, con la menor pérdida
posible, de modo que se contribuya al proceso de toma de decisiones, cuando se dispone
de abundante información, pues solo se aprecia en la segunda iniciativa analizada.
Por otra parte, no se menciona la ejecución de un análisis descriptivo de los datos a
partir del cual se observe el comportamiento general de los valores de los indicadores.
Asimismo, se echa en falta un mecanismo que elimine la doble contabilización de la
información, y el establecimiento de un modo de presentar los resultados que facilite su
interpretación.
58
En ese sentido, dada la facilidad de los indicadores para captar información, es
necesario identificar aquella que resulta necesaria para tomar las decisiones más
eficaces, pues, cuando es mucha, estas pueden ser tomadas a partir de los aspectos que
no son los más relevantes. Por ello, se hace necesario recurrir a la agregación, de modo
que se pueda emplear toda, o al menos, garantizar la menor pérdida posible.
2.2 Propuesta metodológica del procedimiento de agregación para la construcción
de indicadores sintéticos de sostenibilidad.
En el presente epígrafe se presenta un procedimiento de agregación que permitirá
construir indicadores sintéticos de sostenibilidad, a través de los cuales se evalúe el
desempeño de los destinos turísticos. Con la propuesta se pretende que:
- Los indicadores seleccionados sean representativos de los intereses e inquietudes de
los implicados en el desarrollo del turismo (población, empresas, visitantes, etc.).
- Que sean representativos de la sostenibilidad del turismo.
- Que el proceso mediante el cual se va a agregar la información sea sencillo, de fácil
aplicación y que los resultados se puedan interpretar fácilmente, permitiendo
identificar aquellos indicadores que mayor influencia tienen en el valor obtenido.
- Que se cuente con una herramienta informática para realizar los cálculos de forma
rápida y permita visualizar los resultados para garantizar una mejor comprensión.
- Que sea capaz de incluir la información de varios destinos, para poder establecer
comparaciones entre estos, o de un mismo territorio en diferentes períodos.
Para desarrollar el procedimiento resulta necesario el cumplimiento de las premisas que
se describen a continuación.
2.2.1 Premisas para el procedimiento de agregación.
Para el procedimiento de agregación, se precisa cumplir ciertas condiciones que
constituyen su punto de partida, entre las que figuran:
59
1. Identificar las zonas: Estas se definen, desde el Análisis Envolvente de Datos
(Charnes et al., 1978), como organizaciones que, mediante tecnología semejante,
utilizan múltiples inputs para producir múltiples outputs, caso en el que se puede hablar
de empresas, industrias, personas, regiones, países, etc. En la presente investigación, las
unidades están representadas por las zonas de desarrollo del turismo de naturaleza,
donde lo relevante será la modalidad turística que impera, sin discriminar por factores
como la extensión o el ciclo de vida de los productos.
2. Identificar y sensibilizar a los actores: Que sean representantes de cada una de las
instituciones del territorio, relacionados con el desarrollo del turismo. A partir de aquí,
se deberán realizar talleres, a través de los cuales se explique a los implicados, la
necesidad de garantizar la sostenibilidad turística, para que tengan claridad acerca del
concepto multidimensional que se desea medir y la estructuración del mismo de acuerdo
con sus dimensiones. No obstante, para garantizar mayor implicación de los
participantes, se debe exponer la incidencia que tendrá este proceso sobre cada uno de
los sectores que representan.
3. Determinar los indicadores iniciales a través de los cuales se va a medir el grado de
sostenibilidad de cada zona: Se emplean técnicas participativas y de trabajo en grupo,
como la tormenta de ideas, los debates colectivos, etc., a través de los cuales se realice
un diagnóstico general de territorio, en términos de sostenibilidad, y a partir de los
problemas identificados, seleccionar los indicadores mediante los cuales evaluar el
comportamiento general de la zona. Estos pueden ser objetivos, provenientes de fuentes
estadísticas de información, e indicadores subjetivos, que reflejan las percepciones de
los implicados en el desarrollo del turismo; además, verificar que sean susceptibles de
ser cuantificados de acuerdo con la información disponible.
60
La introducción de los indicadores subjetivos se debe a que, en los diferentes estudios
sobre sostenibilidad, se le concede un escaso protagonismo a la población local, como
un agente importante en el proceso de gestión turística, como señala Gursoy et al.
(2002) y, por otra parte, se le brinda demasiada importancia a los indicadores de
carácter objetivo, obviando el papel tan importante que los componentes subjetivos y
percepciones tienen en la satisfacción de los clientes internos (población local) y
externos (turistas) (Sancho y García, 2006; Sancho et al., 2007).
Una vez garantizadas las premisas, se estará en condiciones de dar paso al
procedimiento de agregación que se describe en el siguiente epígrafe.
2.2.2 Procedimiento de agregación para la construcción de indicadores sintéticos
de sostenibilidad.
El procedimiento de agregación que se propone consta de seis pasos (Anexo 7), y las
decisiones que se tomen en uno, pueden tener una implicación importante para el resto,
por lo que deben se cuidadosamente adoptados. En el anexo 8 se explica la necesidad
de cada uno.
La estructura comprende (1) la denominación del paso, (2) el objetivo, (3) quiénes
intervienen, (4) la descripción, aportando las herramientas o posibilidades para su
desarrollo, además de las sugerencias al respecto, y (5) el resultado.
Paso 1: Cuantificación de los indicadores.
Objetivo: Crear una tabla resumen con las características de los datos que demuestran
en comportamiento del concepto que se pretende medir, así como determinar, para cada
uno de estos, un valor que se considere el más adecuado (ideal) y, el valor que
consideran el peor (antiideal).
61
Intervienen: Analista10 y el decisor11.
Descripción: Se cuantifican los indicadores de acuerdo con las fuentes estadísticas de
información. A su vez, para el cálculo de los subjetivos, se pueden apoyar en la fuente
de recopilación de información que se considere más adecuada: encuestas, entrevistas
individuales o grupales.
Idealmente, este proceso debería basarse en obtener la información referente a aquellos
indicadores que son deseables medir, y no en los que estén disponibles, aunque esto
último sea lo más común en la práctica. El empleo de valores aproximados se puede
considerar cuando la información es escasa. El conjunto de datos debe cumplir
requisitos tales como: la relevancia, precisión, actualidad, accesibilidad,
interpretabilidad, y coherencia (Nardo et al., 2005a; OCDE 2008), pues la calidad del
indicador sintético está estrechamente ligada a los indicadores iniciales.
La selección del valor ideal y el antiideal de cada indicador se puede realizar a través de
valores establecidos en normas registradas y aprobadas nacional o internacionalmente,
mediante la identificación de los valores máximos y mínimos, o basados en el grado de
consenso de los actores.
Resultado: Un conjunto inicial de m indicadores simples ).....,,2,1( mjdondeI j = , para
cada una de las n unidades, ),...,2,1,( nidondeU i = , denotándose por ijX al valor que
toma la i-ésima unidad cuando se evalúa en el j-ésimo indicador, con ni ≤≤1 y
mj ≤≤1 . El valor ideal y el antiideal para cada uno de los indicadores de partida.
Paso 2: Análisis de la consistencia interna de los datos.
10 Encargado de llevar a cabo el proceso de cálculo dentro del procedimiento de agreación, puede se una o varias personas, incluidos los actores locales. 11 El decisor es considerado el usuario de la información final. Es el encargado de tomar las decisiones, una vez que se cuente con los resultados de la aplicación del procedimiento. Puede estar conformado por varias personas o entidades: MINTUR, CITMA, Tour operadores, Empresas, los actores que intervienen en el proceso de toma de decisiones, etc.
62
Objetivo: Verificar si el conjunto se indicadores seleccionados son representativos del
aspecto que se pretende medir.
Intervienen: Analista.
Descripción: La naturaleza de los datos necesita ser cuidadosamente analizada antes de
pasar a la construcción del indicador compuesto (Nardo et al, 2005a). Este paso
preliminar es muy útil para determinar la idoneidad del conjunto de indicadores.
Se puede tomar como apoyo, la opinión de expertos o la estructura estadística de los
datos, mediante el empleo del Análisis de Componentes Principales, el Análisis
Factorial o el Coeficiente de Alpha de Cronbach (c-alpha) (Cronbach, 1951) (Anexo 9),
que es el estimador más común de la consistencia interna de los datos.
Resultado: Queda demostrada la consistencia del conjunto de datos Si existe
inconsistencia, se regresa a la determinación del conjunto inicial de indicadores; de otra
forma, se marcha al siguiente paso.
Paso 3: Análisis descriptivo de los datos.
Objetivo: Estimar los valores perdidos, discutir la presencia de valores atípicos en la
base de datos y eliminar las variables que sean explicadas por las ya existentes.
Intervienen: Analista y el decisor.
Descripción: Un análisis previo de las relaciones existentes entre los indicadores
simples ayuda a su simplificación y reducción, así como a mostrar el comportamiento
general de los valores que componen la base de datos. En ese sentido, un estudio de
correlación entre los indicadores iniciales ayudaría a identificar aquellos de los que se
puede prescindir por estar relacionados directamente con otros, más importantes.
Este paso es aconsejable, además, cuando el procedimiento de agregación que se
empleará posteriormente no cuenta con una herramienta que permita eliminar la
63
duplicidad de información. Dentro de este, el uso de un programa informático le
garantiza al usuario mayor agilidad y eficacia en el proceso.
Resultado: Base de datos refinada, con un estudio general del comportamiento de los
valores de los indicadores y la eliminación de la información duplicada, eliminada de
modo que no se contabilice por partida doble en el proceso de cálculo.
Paso 4: Cálculo de un indicador sintético para cada una de las dimensiones de la
sostenibilidad.
Objetivo: Realizar un análisis de las unidades evaluadas con respecto a cada una de las
dimensiones que abarca el concepto medido.
Intervienen: Analista.
Descripción: Este paso comprende la ponderación y agregación de los indicadores
iniciales, y constituye uno de los más importantes, puesto que, la calidad del análisis y
las decisiones a tomar dependen del valor del indicador sintético.
Para determinar las ponderaciones, cualquiera de las técnicas existentes en la
bibliografía especializada es válida. Se puede optar por métodos estadísticos, debido a la
objetividad que aportan al estudio; o por aquellos que se estiman más influyentes según
la opinión de un experto, de forma que reflejen mejor las prioridades y políticas, o
aquellos factores teóricos que se quieran incluir en el análisis.
A consideración del autor, lo recomendable sería que el propio procedimiento
permitiera obtener el valor de las ponderaciones de forma interna; así, se garantiza que
estos no representen solamente los intereses de los participantes en este proceso y se
reduce el intercambio con los usuarios, aspectos que se señalan entre las debilidades de
la construcción de indicadores sintéticos.
El cálculo se puede realizar a partir del total de indicadores de cada dimensión, o de un
grupo representativo de cada una de estas; y el resultado obtenido debe permitir la
64
realización de un análisis por cada una de las dimensiones del concepto medido, de
modo que se puedan fundamentar líneas de acción específicas para conseguir los
objetivos planificados.
La función a emplear para la agregación debe ser tal, que garantice la ocurrencia de los
aspectos mencionados al final del primer capítulo. En ese sentido, a continuación se
proponen dos métodos que pueden ser empleados para el cálculo de los indicadores
dimensionales de sostenibilidad, confeccionados a partir de las ventajas y debilidades
señaladas a los procedimientos descritos en el epígrafe 1.4 del primer capítulo.
El primero de estos es el Indicador Sintético de Distancia por Componentes Principales
(DCP), y nace de la combinación del ACP y el concepto de distancia a un punto de
referencia (Lozano et al., 2009; Blancas et al., 2010). La elección está dada para
aprovechar las potencialidades del ACP para obtener de forma endógena las
ponderaciones que otorgan la importancia relativa a cada uno de los indicadores
incluidos en el cálculo. Mientras que, por otra parte, el uso del concepto de distancia a
un punto de referencia facilita la interpretación de los resultados, al poder fijar todas las
unidades con relación a este; así, el valor que se obtenga le permitirá al usuario
determinar cuán distante está de la situación que se considere la mejor.
Antes de realizar cualquier operación con los datos iniciales, se debe tener en cuenta la
dirección de mejora de cada uno de los indicadores, pues es frecuente que existan
indicadores positivos y negativos. De modo que lo primero que se debe realizar es la
homogeneización de la base de datos; esto es, en caso de que se tengan los dos tipos de
indicadores, convertirlos todos en positivos o negativos.
El hecho de no homogeneizar, traería como consecuencia que los efectos negativos de
algunos indicadores quedarán contrarrestados con los positivos de otros, de manera que
el indicador compuesto no reflejará la situación que se pretende medir.
65
Seguidamente, se elige uno de los valores de referencia tomados. Así, si se opta por el
vector ideal, una menor diferencia expresa una mejor situación de sostenibilidad. De
otra forma, si se opta por tomar como referencia el vector antiideal, un mayor valor de
esta diferencia indica un mejor comportamiento de la unidad (Anexo 10, a).
Como cada indicador inicial está expresado en su propia escala y unidad de medida, es
necesario aplicar un procedimiento de normalización a los datos. Para ello se puede
optar por cualquiera de los que se proponen en la bibliografía existente. En este caso, se
propone normalizar expresando la distancia inicial de cada uno de los indicadores en
función de la distancia registrada entre el valor ideal y antiideal de cada indicador,
denotándose como ijXN al valor normalizado del j-ésimo indicador (Anexo 10, b).
El procedimiento de normalización permite obtener los valores de los indicadores entre
0 y 1. De esta forma, cuando se normaliza por mínimos, las unidades que presentan
mejor situación son aquellas cuyo valor normalizado se encuentra cercano a uno,
mientras que cuando se normaliza tomando como referencia los valores máximos,
aquellas cuyo valor está próximo a cero son las mejores situadas.
Hechas todas las consideraciones generales sobre el conjunto inicial de datos, se
procede al cálculo del indicador sintético:
1. Se aplica ACP a los valores normalizados de los indicadores iniciales, del cual se
obtiene un grupo de componentes principales.
2. Se seleccionan las componentes que se tendrán en cuenta para el cálculo de la
medida sintética mediante el criterio del porcentaje de la varianza total explicada.
Este valor, depende, entre otras cosas, del número inicial de indicadores, o del
número de unidades a analizar.
3. Se determinan los pesos de cada indicador, que vienen dados por la suma total de
los productos entre la varianza explicada por cada componente principal
66
seleccionada y el valor absoluto de la correlación de cada indicador con cada
componente seleccionada. En este caso son tomados los valores absolutos de las
correlaciones, puesto que lo realmente importante es la cantidad de la relación
existente entre las componentes y los indicadores. De esta forma, se hace uso de la
máxima información que haya disponible en los indicadores.
4. Se calcula el indicador sintético a partir de la suma ponderada de las distancias que
fueron definidas para cada indicador. Así, se puede obtener el indicador sintético
DCP para la i-ésima unidad (Anexo 10, c).
El valor obtenido permite evaluar la distancia que existe entre cada unidad analizada y
una situación de referencia fijada en cada caso. Esta medida se corresponde con la
distancia L1, de forma que la solución que se obtiene muestra la suma ponderada de los
logros de cada indicador.
No obstante, el analista puede aplicar otra norma para el cálculo de la medida sintética,
por ejemplo, la norma L∞, caso en el cual el cálculo se realiza teniendo en cuenta aquel
indicador del sistema para el que la unidad muestra una peor situación. Así, se puede
desarrollar el procedimiento empleando esta norma, y tomando como referencia los
valores máximos o mínimos (Anexo 10, d). De esta forma el analista puede emplear
cualquier métrica p para establecer la distancia de cada unidad respecto a una situación
de referencia fijada (Anexo 10, e).
El indicador sintético DCP cumple con las siguientes condiciones:
1. Se reduce la implicación con el usuario final, por cuanto la interacción se limita a la
selección de los indicadores iniciales para el estudio, el criterio mediante el cual se
van a seleccionar las componentes y el procedimiento de normalización a aplicar.
2. El análisis previo de los datos permite tomar decisiones acerca de qué indicadores
son realmente necesarios en la medición del concepto evaluado y eliminar aquellos
67
que estén ampliamente explicados por otros que resultan de mayor importancia, con
lo cual se elimina la duplicidad de información.
3. Los pesos se determinan de forma interna, de modo que no se ven influenciados por
las necesidades de los implicados, así, cada indicador inicial se pondera por la
cantidad de información que le reporte a la medida sintética, de modo que esta se
aprovecha completamente.
4. El hecho de estar basado en la distancia a una situación de referencia, garantiza que
el indicador obtenido sea de fácil comprensión y denota transparencia en el cálculo;
pues, las componentes principales, en este caso, serán las combinaciones lineales de
las distancias entre los indicadores y sus unidades de referencia, de modo que lo que
se evalúa es la distancia al valor deseado de sostenibilidad, o la lejanía al valor no
deseado. Esto le proporciona mayor comprensión a los resultados del ACP para
construir indicadores sintéticos.
5. El analista tiene la posibilidad de obtener los resultados aplicando el procedimiento
para la métrica L1, L∞ o cualquier métrica comprendida en el intervalo, permitiendo
tener en cuenta las soluciones compromiso entre las dos mencionadas. Ello facilita
la obtención de diferentes soluciones, y el análisis desde distintos puntos de vista.
La segunda metodología se presenta a partir de Blancas (2009) y Blancas et al. (2009),
basada en la Teoría de la Decisión Multicriterio, específicamente en la Programación
por Metas (Charnes et al., 1955; Ijiri, 1965; Lee, 1972; Ignizio, 1976), y en el
procedimiento descrito por Diaz-Balteiro y Romero (2004b), de ahí su nombre:
Indicador Sintético de Programación por Metas (IPM). Para su desarrollo, se separan
los indicadores en dos conjuntos: positivos y negativos. De esta forma, se denotará por
+ijX al valor que toma la i-ésima unidad en el j-ésimo indicador positivo, con Jj∈ ,
68
donde J representa el conjunto de indicadores positivos, mientras que −ikX será el valor
que toma la i-ésima unidad en el k-ésimo indicador negativo, con Kk ∈ , conjunto de
indicadores negativos.
Seguidamente se deben establecer las ponderaciones que muestran la importancia
relativa de cada uno de los indicadores del sistema, para lo cual es válido cualquiera de
los procedimientos que aparecen en la literatura estudiada; de modo que se denominará
wj al peso fijado para el j-ésimo indicador positivo y wk al peso del k-ésimo indicador
negativo.
A continuación, se determina el nivel de aspiración para cada uno de los indicadores. A
la forma de determinarlos se le debe prestar importancia, pues esta decisión constituye
un relevante factor subjetivo que puede influir en el resultado final. En este caso se
propone fijar los niveles de aspiración como el valor medio de los indicadores del
sistema, multiplicado por un factor común para todos los que tengan la misma dirección
de variabilidad (Anexo 10, f).
Esta regla de determinación de los niveles de aspiración tiene la ventaja de que es
posible aplicarla, incluso para aquellos casos en los que, por no existir suficiente
conocimiento del concepto a medir, se hace difícil determinar con claridad las
características de la situación óptima. Aún así, se acepta como válido cualquier otro
procedimiento para fijar los niveles de aspiración.
Después de fijar los niveles de aspiración, se compara el valor que presenta cada unidad
en cada indicador, con respecto al nivel deseado. Para ello, se crean las metas a través
de la introducción de las variables de desviación n (por defecto) y p (por exceso), que
muestran, para cada unidad, la diferencia que existe entre su situación actual y el nivel
de aspiración deseado. Así, para la i-ésima unidad las metas quedan fijadas tal como se
muestra en el anexo 10 (g).
69
Establecidas las metas, se determinan las variables de desviación no deseadas para cada
una de estas; es decir, aquellas variables que se desea que tomen valor cero, lo cual
indica el cumplimiento de la meta propuesta (Anexo 10, h). Estos representan las
debilidades de cada unidad, pues cuando su valor es distinto de cero, indica la cuantía
en que la unidad no alcanza el valor deseado del indicador. De igual forma, la otra
variable de desviación representa las fortalezas; esto es, la cantidad en que la
correspondiente unidad supera el valor deseado del indicador en cuestión.
Las variables de desviación no deseadas difieren en dependencia del tipo de indicador.
Así, para los indicadores positivos, será la variable de desviación por defecto. En cuanto
a los indicadores negativos, esta será la variable de desviación por exceso. A partir de
aquí, y tomando como base los resultados que arroja el procedimiento, se pueden
calcular varias medidas sintéticas.
La primera, denominada Indicador Sintético de Programación por Metas Vectorial
(IPMV) (Anexo 10, i), se forma por un vector con dos componentes, (IPM+, IPM-),
ambas positivas, que intentan recoger las fortalezas y debilidades de cada unidad bajo
evaluación
La componente positiva, (IPM+), cuantifica las fortalezas de cada unidad indicando el
grado en que cada una cumple los niveles de aspiración fijados, de modo que el
indicador queda definido a partir de las variables de desviación para las que un mayor
valor muestra una mejor situación relativa: la variable de desviación por exceso ( +ijp )
para los indicadores positivos y, por defecto ( −ikn ) para los negativos.
La componente negativa (IPM-), mide, las debilidades de cada unidad. Para obtenerla,
se cuantifica el grado en que las unidades no cumplen los niveles de aspiración fijados.
Siendo el proceso similar al anterior; pero, en este caso, se agregan en la medida
70
sintética las variables de desviación no deseadas para cada tipo de indicador; esto es, la
variable de desviación por defecto )( +ijn para los indicadores positivos y la variable de
desviación por exceso )( −ikp para los negativos.
La componente positiva del indicador mide solo las fortalezas asociadas a cada unidad,
sin tener en cuenta las debilidades. De igual forma, la componente negativa se basa solo
en las debilidades. De aquí se deduce que, dado el carácter no compensatorio del
indicador IPMV, no posibilita la ordenación total de las unidades.
Por ello, aunque la información aportada por las componentes de este indicador
sintético, por separado, permiten realizar un análisis más realista y detallado, resulta
más fácil para el usuario final analizar las unidades a partir de un orden. Por tal motivo,
a continuación se proponen dos medidas sintéticas derivadas de la información que
brinda el indicador vectorial, que permiten establecer una ordenación.
El primero, se llamará Indicador Sintético de Programación por Metas Restrictivo
(IPMR), y tiene como base la idea de diferenciar aquellas unidades que cumplen todos
los niveles de aspiración, de las que no lo cumplen (Anexo 10, j). El valor del indicador
viene representado por la primera componente del indicador vectorial para aquellas
unidades que cumplen todas las metas: (IPM+) sus fortalezas; mientras que para las
unidades que incumplan al menos una meta, el valor del indicador vendrá dado por la
segunda componente, precedida del signo negativo (-IPM-). A partir de estos resultados,
es posible ordenar las unidades, y el indicador mantiene su carácter restrictivo al no
permitir ningún grado de compensación entre las fortalezas y debilidades.
Este procedimiento se acerca al propuesto por la AEC en la medición de la
sostenibilidad en la ZTSC, pues cada unidad tendrá su sostenibilidad, evaluada por el
valor total de los indicadores superados, en caso de que los cumplan todos, o por
71
aquellos indicadores que representen problemas por resolver; esto es, aquellos para los
cuales no se ha alcanzado el nivel deseado.
El segundo índice propuesto se denomina Indicador Sintético de Programación por
Metas Neto (IPMN) y está concebido para admitir la compensación entre las fortalezas y
debilidades. Este evalúa la situación relativa de cada unidad analizada, sin exigir el
cumplimiento de todos los niveles de aspiración para determinar que representa una
buena situación respecto al resto. Por ello, el IMPN para la i-ésima unidad se calcula
como la diferencia entre las dos componentes del indicador vectorial (Anexo 10, k).
Este método requiere de un análisis interno de los datos que permita eliminar la
duplicidad de información y analizar las relaciones existentes entre los diferentes
indicadores del sistema. Además, es preciso determinar las ponderaciones para cada uno
de los indicadores, y los niveles de aspiración deseados, aspectos a los que se les debe
prestar mucha importancia, porque inciden de forma relevante en el valor de la medida
obtenida. Entre sus ventajas aparecen:
1. No necesita de un procedimiento de normalización de los indicadores iniciales, pues
el propio algoritmo expresa el valor del indicador sintético en una escala
adimensional, al dividir por el nivel de aspiración. Ello contribuye a aminorar la
introducción de juicios subjetivos.
2. A través del establecimiento de las metas, se logra tener en cuenta las necesidades o
aspiraciones de todos los implicados en el proceso de toma de decisiones.
3. Su facilidad para ser aplicado y para interpretar los resultados.
4. Posibilidad de obtener varias medidas sintéticas empleando la información aportada
por las metas.
Como se aprecia, para el cálculo de los indicadores sintéticos dimensionales de
sostenibilidad, puede ser empleada cualquiera de las metodologías propuestas. La
72
elección de una u otra está en dependencia de los intereses del analista y los decisores.
Para ello, pueden apoyarse en la tabla que aparece en el anexo 11.
Resultado: Los indicadores sintéticos para cada una de las dimensiones de la
sostenibilidad, ya sea a partir del indicador DCP o del IPM.
Paso 5: Cálculo de un índice global de sostenibilidad.
Objetivo: Obtener un valor global representativo del concepto que se mide, que permita
establecer una comparación de las unidades evaluadas, o comprobar el desempeño de un
mismo territorio en diferentes períodos.
Intervienen: Analista.
Descripción: La obtención de un índice global de sostenibilidad para cada una de las
zonas bajo consideración, permitirá tener en cuenta, de forma conjunta, todos los
aspectos relacionados con el concepto medido. Esto se obtiene al agregar toda la
información disponible en los indicadores iniciales. La función para el cálculo debe
cumplir con las propiedades deseadas a toda función de agregación que fueron
enunciadas en el primer capítulo; además, se espera que el valor obtenido permita
realizar un análisis hacia atrás, por dimensiones, y por indicadores. Este paso se puede
aplicar a todos los valores, a un conjunto representativo de cada una de las dimensiones,
o a los dimensionales obtenidos previamente.
Para el proceso de cálculo, se presenta el Análisis Envolvente da Datos (DEA, siglas en
inglés de Data Envelopment Analysis), aplicado sobre los indicadores dimensionales, ya
sea mediante el indicador DCP o el indicador IPM. Esta constituye la segunda fase de
agregación, coincidiendo con la propuesta de Márquez et al. (2006) en la construcción
de un índice global de sostenibilidad.
DEA, conocido como el “Enfoque del Beneficio de la Duda” para el cálculo de
indicadores, (Storrie y Bjurek, 1999; Storrie y Bjurek, 2000; Cherchye, 2001; Cherchye
73
y Kuosamen 2002; Cherchye et al., 2004; Cherchye et al., 2006; Cherchye et al., 2007),
fue originalmente propuesto para evaluar el rendimiento macroeconómico (Melyn y
Moesen, 1991). En este enfoque, el indicador sintético se define como el ratio entre la
suma ponderada de los outputs (indicadores del tipo cuánto más mejor)
correspondientes a una unidad y la suma ponderada de los inputs (indicadores del tipo
cuanto menos, mejor). El objetivo es determinar, para cada unidad, el conjunto de pesos
o ponderaciones que le proporciona la máxima eficiencia, representada por el ratio
output virtual/input virtual.
Su elección está dada porque, al igual que el indicador sintético DCP, esta metodología
permite obtener el conjunto de pesos de forma interna; mientras que por otra parte, al
igual que el IPM, DEA no precisa de un procedimiento de normalización de los
indicadores incluidos en el cálculo.
Normalmente, DEA hace referencia a los términos input virtual y output virtual. El
primero se refiere a la suma ponderada de los inputs; en tanto que el segundo, de forma
análoga, representa la sumatoria del output ponderado. Para la unidad evaluada, los
valores de los inputs y outputs virtuales expresan información sobre la importancia que
una unidad atribuye a determinados inputs y outputs con el objetivo de obtener su
máxima puntuación de eficiencia (Boussofiane et al., 1991).
Dado que en la propuesta, los datos de entrada a DEA son los indicadores
dimensionales, se garantiza que todos sean positivos; así, representan los diferentes
outputs, y se asigna un input con valor uno a cada unidad, de modo que el valor del
indicador sintético se corresponde con el del output virtual. Este modelo es equivalente
al original modelo DEA-CCR orientado al input con rendimientos constantes a escala,
presentado por Charnes et al. (1978), tal como señala Despotis (2005), donde el valor
74
del indicador sintético se obtiene de la solución de un problema de Programación
Lineal, por separado, para cada una de las unidades (Anexo 10, l).
La función objetivo revela la interpretación del beneficio de la duda; esto es, el
problema escoge el conjunto de pesos ijw que maximiza el valor del indicador sintético
para la i-ésima unidad. Como resultado, el mayor valor del peso relativo, se le otorga a
los indicadores para los cuales la unidad tiene un mejor comportamiento (en términos
relativos) cuando se compara con el resto de las unidades evaluadas. De modo que para
la mejor situación, el valor de la medida sintética será uno, lo que indica que la unidad
tiene un rendimiento igual a su unidad de referencia, mientras que tomará valor cero el
caso que represente la situación menos deseada 10 ≤≤ iIS .
Los pesos no se conocen a priori, y la única restricción sobre estos en el planteamiento
es que tienen que ser no negativos (condición de no negatividad), lo que implica que el
valor del índice sintético es una función no decreciente de los indicadores iniciales. Para
garantizar una interpretación intuitiva del indicador sintético, se impone que ninguna
unidad del conjunto puede obtener un valor mayor que uno con el mismo conjunto de
pesos (restricción de normalización) (Cherchye, 2001; Cherchye y Kuosamen 2002;
Cherchye et al., 2004; Cherchye et al., 2006).
El valor de los pesos depende de las unidades de medida de los indicadores iniciales;
como consecuencia, el análisis se debe centrar en los outputs virtuales de cada indicador
( )ijj Xw , los cuales son totalmente independientes de las unidades de medida y revelan
cuánto contribuye cada indicador al valor de la medida sintética y, por tanto, su
importancia relativa.
Las ventajas derivadas de este procedimiento de agregación son las siguientes:
75
1. El valor del indicador sintético será sensible a las necesidades de los implicados,
pues pondera con mayor valor aquellos indicadores para los que la unidad obtiene
una mejor posición con respecto al resto de unidades evaluadas. Esto se debe a la
determinación endógena de los pesos, lo cual constituye a su vez otra ventaja, al no
tener que fijarlos a priori.
2. Las ponderaciones se hallan de forma tal que las obtenidas para cada unidad bajo
evaluación le proporcionen el valor máximo posible para el indicador sintético.
3. Se evidencia el carácter flexible de este procedimiento al no exigir que todas las
unidades le concedan igual importancia a cada indicador
4. Se puede prescindir del procedimiento de normalización.
5. No es preciso realizar nuevamente el proceso de selección de los indicadores para
crear la medida global de sostenibilidad, dado que se aplica sobre los indicadores
dimensionales obtenidos con el DCP y el IPM. Ello garantiza que se tenga en cuenta
toda la información contenida en el conjunto inicial de indicadores.
6. El empleo de DEA permite determinar las unidades de referencia, en cuanto a la
sostenibilidad turística, dentro del conjunto de zonas analizadas, facilitando la
comparación con el resto.
El hecho de que la única restricción sobre los pesos es que estos deben ser no negativos
resulta inconveniente, debido a que todo el peso relativo se le puede asignar a un único
indicador; así, el valor del indicador sintético dependerá de este solamente, sin importar
el resto. Ello demuestra la necesidad de una nueva restricción al modelo, sobre la forma
endógena de seleccionar los pesos, lo cual no es más que establecer valores entre los
cuales se pueden mover los outputs virtuales, de modo que se garantice al menos, un
mínimo para cada uno de los indicadores iniciales incluidos en el índice global.
76
Resultado: El indicador sintético de Sostenibilidad DEACP (Análisis Envolvente de
Datos después de Distancia por Componentes Principales) o el indicador sintético
DEAPM (Análisis Envolvente de Datos después de Programación por Metas), en
dependencia de si el procedimiento se aplica sobre el indicador DCP o el IPM,
respectivamente.
Una vez vistas las metodologías propuestas para el cálculo del indicador sintético,
(Pasos 5 y 6), en el anexo 12 se verifica el cumplimiento de los postulados enunciados
en el primer capítulo, que se exigen a las funciones mediante las cuales se efectúa la
agregación, para garantizar que el valor obtenido sea una “buena” medida sintética.
Paso 6: Presentación de los resultados.
Intervienen: Analista, decisores.
Objetivo: Garantizar la mayor comprensión posible del resultado obtenido, por parte del
usuario final.
Descripción: La forma en que los indicadores sintéticos se presentan no es algo trivial,
puesto que una apropiada visualización de los resultados es indispensable para
comunicar información de forma apropiada y transparente. Los indicadores sintéticos
están diseñados para comunicar información a los tomadores de decisiones y a los
demás usuarios de forma rápida y eficiente; por lo tanto, deben ser visualizados o
presentados de diferentes formas, de modo que se pueda guiar a los usuarios en su
interpretación, sentido en el cual se pueden emplear representaciones gráficas que
garanticen relevancia e interpretabilidad de los resultados. Una extensa relación de
herramientas de visualización se detalla en Nardo et al. (2005) y Tarantola (2008).
Resultado: Realización de un análisis del comportamiento de cada unidad en términos
de sostenibilidad y plan de acción para mejorar cada una de las actuaciones, en
dependencia de los valores obtenidos en cada uno de los índices calculados.
77
Una vez concluido el procedimiento, se procede a establecer políticas o líneas de acción
para mantener o mejorar los valores obtenidos de los indicadores calculados, a partir de
mejoras en el comportamiento de los indicadores iniciales. Esto será posible por el
hecho de haber posibilitado que el análisis se realizara con la totalidad o la mayor
cantidad de información disponible.
Conclusiones parciales.
1. El turismo de naturaleza en Cuba ha mostrado un aumento considerable en cuanto al
número de visitantes, en los últimos años.
2. En la documentación referente al otorgamiento de las LA y de la realización de los
EIA, no se evidencia con claridad el resultado de las consultas públicas realizadas
para determinar la aceptación del proyecto por parte de la comunidad receptora.
3. Existe poco empleo de herramientas fundamentadas teóricamente, para agregar la
información de los indicadores en la mayoría de los estudios analizados.
4. El proceso de planificación y de toma de decisiones sobre el desarrollo turístico
sostenible en el MINTUR, se ve afectado por la ausencia de un sistema de
indicadores debidamente cuantificados y ponderados.
5. El procedimiento de agregación propuesto permite analizar la consistencia del
conjunto de indicadores, estudiar el comportamiento de los datos y eliminar la
información duplicada; presenta dos alternativas para obtener las medidas
dimensionales de sostenibilidad y un modo de calcular el índice global fácilmente
interpretable por parte del usuario final. Además, cuenta con el programa IndiSin
para facilitar el proceso de cálculo y la presentación de los resultados para la toma
de decisiones.
6. El indicador DCP permite reducir la implicación con el usuario final, proporciona
los pesos de forma interna, tiene asociado un procedimiento de normalización que
78
facilita la comprensión del resultado obtenido y exonera al usuario de tener que
decidir cuál emplear; además, permite incorporar la mayor cantidad de información
disponible en el conjunto inicial de indicadores, y proporciona una mejor
comprensión del resultado obtenido.
7. El IPM prescinde del proceso de normalización, es de fácil aplicación y sus
resultados son cómodos de interpretar por el usuario final; además, considera las
aspiraciones de los implicados en el proceso de toma de decisiones y la evaluación
de la sostenibilidad a partir de varias soluciones, en dependencia de la interpretación
obtenida de la información extraída de las metas.
8. El empleo de DEA en la segunda fase de agregación, permite determinar la
influencia de cada una de las dimensiones de la sostenibilidad en el valor del
indicador sintético e identificar las fortalezas y debilidades de cada una de las
unidades bajo consideración, y la realización de comparaciones entre las unidades.
9. Los procedimientos de agregación propuestos cumplen con las propiedades exigidas
a las funciones mediante las cuales se va a efectuar el cálculo del indicador sintético,
permitiendo agregar la información contenida en el conjunto inicial de indicadores,
en una medida global de sostenibilidad, capaz de reflejar el comportamiento de cada
una de las unidades evaluadas y, por tanto, fundamentar el proceso de planificación.
1
CAPÍTULO 3. VALIDACIÓN DEL PROCEDIMIENTO DE AGREGACIÓN
PARA LA CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES SINTÉTICOS DE
SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE TURISMO DE NATURALEZA EN
CUBA
CAPÍTULO 3. VALIDACIÓN DEL PROCEDIMIENTO DE AGREGACIÓN
PARA LA CONSTRUCCIÓN DE INDICADORES SINTÉTICOS DE
SOSTENIBILIDAD EN LAS ZONAS DE TURISMO DE NATURALEZA EN
CUBA
El objetivo de este capítulo consiste en validar el procedimiento de agregación
propuesto, mediante su aplicación en las zonas de turismo de naturaleza en Cuba, para
lo cual se verifica primeramente, el cumplimiento de las premisas y, a continuación, se
detalla la realización de cada paso, mostrando (1) el nombre, (2) su desarrollo y (3) el
resultado obtenido; salvo el último, que será descrito de forma directa.
3.1 Verificación de las premisas
Premisa 1: Identificar las zonas.
Primero, se seleccionaron las zonas de turismo de naturaleza en Cuba, para lo cual se
realizó una entrevista a un funcionario de la Dirección de Desarrollo del MINTUR,
donde fueron escogidas 15 zonas, de las que se ofrece una breve descripción en el anexo
13. Estas, constituyen áreas priorizadas por este Organismo de la Administración
Central del Estado, para el desarrollo de esta modalidad turística en el país.
En este punto, el autor considera válido señalar, que salvo San Diego de los Baños, el
resto de las unidades están ubicadas, o contienen en su interior, áreas con algún grado
de protección, lo cual propicia el desarrollo del turismo de naturaleza y una mayor
concientización por parte de los pobladores, los visitantes y las empresas que operan en
el territorio pues, a decir de Vázquez (2009), la protección y el desarrollo de los
sistemas ecológicos y de los recursos naturales, así como la mejora continua del
80
patrimonio histórico y cultural, convierten a las regiones en espacios atractivos para
producir y vivir, y contribuyen a mejoramiento del bienestar de la población.
También se tuvo en cuenta, que en las zonas elegidas existieran instalaciones hoteleras
que ofrecen servicios de alojamiento al turismo internacional, con el objetivo de obtener
datos acerca de sus porcentajes de ocupación y los turistas-días12. Asimismo, en las
áreas que abarcan más de un municipio, se tomaron como representativos de esta los
que tuvieran instalaciones de alojamiento.
En este caso, se considera la zona como el municipio, pues según Jam (2007), este
constituye la unidad de desarrollo local, por cuanto representa la unidad básica de la
organización político administrativa del Estado. Tiene potencialidades para la
autogestión del desarrollo, las decisiones están más cercanas a la comunidad y presenta
menos complejidades que la provincia. Además, dispone de un sistema de información
que sirve de base para la evaluación de las condiciones sociales, económicas y
ambientales, al aportar información y estudios sobre diversos temas.
Premisa 2: Identificar y sensibilizar a los actores.
Una vez identificadas las unidades del estudio, se seleccionan los actores locales, en
representación de los cuales fueron tomados los especialistas y actores que participaron
en el Taller sobre Indicadores de Turismo Sostenible para el destino Viñales, celebrado
del 3 al 5 de Junio de 2008 en el municipio Viñales, Pinar del Río. En el mismo estaban
presentes dirigentes políticos, directivos de las instalaciones hoteleras del territorio y del
MINTUR, tanto provincial como nacional, representantes de la agricultura, de
patrimonio, de la biblioteca municipal, de la Empresa Comunales y de la Estación
Ecológica del CITMA, así como profesores universitarios con investigaciones 12 Es la suma día a día de las plazas que han sido ocupadas por los huéspedes nacionales y extranjeros durante un período determinado. En el caso de una habitación con dos plazas que sea ocupada por un solo huésped se considera una sola plaza ocupada (Oficina Nacional de Estadística).
81
relacionadas con la temática. De forma negativa, se destaca la ausencia de los
trabajadores por cuenta propia en el turismo, que tienen un peso significativo en el
desarrollo de esta actividad.
Como proceso de sensibilización de los actores, fue asumido el propio taller, donde se
estableció el marco teórico correspondiente a la sostenibilidad, y sus dimensiones:
social, económica y patrimonial. A partir de la información brindada, se realizó un
análisis colectivo del comportamiento del territorio en cuanto a la sostenibilidad, y cada
uno de los actores analizó la incidencia del sector que representa sobre las dimensiones.
Premisa 3: Determinar los indicadores iniciales.
Para la selección de los indicadores, ante la ausencia de un grupo previamente
establecido, se realizó una consulta a los especialistas y a los actores que participaban
en el taller, con el objetivo de que seleccionaran aquellos que consideraban importantes
para realizar un análisis de la sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza. De
este modo, se le entregó a cada participante un listado de los indicadores (Anexo 14)
para que le otorgaran, a cada uno, una puntuación de 0 a 10, donde 0 indicaba que no lo
consideran necesario para el estudio, y 10 significaba imprescindible, pudiéndose
seleccionar cualquiera de los valores intermedios. Se eligieron aquellos indicadores que
obtuvieron una puntuación mayor o igual que el valor de la mediana de las respuestas.
De este modo se consiguió un grupo de 59 indicadores, que se redujo a 39, a causa de la
disponibilidad de información para calcularlos. Este listado final quedó dividido en 11
indicadores sociales, 14 indicadores económicos y 14 indicadores patrimoniales,
relacionados en el anexo 15, donde, las dos últimas columnas de la tabla informan
acerca de la dimensión a la que pertenecen y el signo, respectivamente. Este último,
para mostrar si el indicador es positivo (cuanto más, mejor) o negativo (cuanto menos,
mejor). Al finalizar, el grupo final de indicadores fue consultado con los especialistas;
82
estos se corresponden con el concepto de desarrollo turístico sostenible de la OMT
(2004), pues reflejan eficazmente el contenido de dicha definición:
Los indicadores I1 e I2 se refieren a los beneficios sociales asociados al turismo, miden
el mejoramiento en las condiciones de vida de la comunidad como resultado de la
actividad turística.
Con el I3 se establecen los objetivos o límites con respecto al número de turistas que la
comunidad cree poder acoger, sin dejar de disfrutar de las opciones del territorio; puede
ser utilizado para obtener datos objetivos, que ayuden a decidir cuántos turistas son
demasiados, o muy pocos. Por su parte, el I4 se emplea debido a que el intercambio
diario con los turistas, y la creación de instalaciones y actividades relacionadas con
ellos, puede ocasionar cambios en la ocupación tradicional para trabajar en aspectos
relacionados con el turismo, o modificaciones en el comportamiento, que sean motivo
de insatisfacción por parte de los residentes y de los visitantes. Ambos indicadores
evalúan los efectos generales del turismo en la zona, analizando las consecuencias para
la comunidad.
El I5 se justifica en que la emigración hacia lugares con mayores oportunidades
económicas (especialmente en el caso de los jóvenes) es un problema habitual. De modo
que, altos valores del indicador pueden estar asociados a un amplio desarrollo del
turismo y una elevada participación comunitaria de sus beneficios.
Los cuatro indicadores siguientes (I6, I7, I8 e I9) son medidas de los beneficios
económicos para la comunidad de destino. En ese sentido, el I6 indaga sobre la
capacidad del turismo como generador de puestos de trabajo; el I7 es representativo de
la oportunidad de empleo para las mujeres y el I8 representa el porcentaje de personas
en edad laboral empleadas en el turismo. En fin, analizan las potencialidades del sector
83
como generador de empleo. Mientras que con el I9 se evalúa si los beneficios obtenidos
repercuten directamente en mejoras de la calidad de vida de los residentes.
El I10 se emplea, porque la decisión de adónde ir, depende de la percepción de seguridad
o peligro. Por ello, es necesario un buen sistema de seguridad y de atención
especializada al turista. Mientras tanto, el último indicador de esta dimensión (I11)
evalúa la percepción de la calidad de los servicios públicos en la comunidad pero, esta
vez, desde la perspectiva del visitante.
Desde el I12 hasta el I25 conforman la dimensión económica. El (I12, I13, e I14) se
emplean para obtener información acerca del nivel de satisfacción de los turistas, pues
de este depende que regresen al destino, lo recomienden a otras personas o, por el
contrario, desaconsejen a los demás que no lo visiten, y son indicadores principales de
la sostenibilidad turística a largo plazo.
Desde el I15 al I17 representan medidas directas del grado de estacionalidad del turismo,
pues muy pocos destinos disfrutan de un turismo estable durante todo el año, lo cual
resulta una condición deseada; mientras que el I18 mide estacionalidad del empleo.
El I19 es distintivo de la gama de servicios turísticos que se ofrecen, permite analizar los
atractivos de que se dispone para convertirse en un destino de referencia. El I20 evalúa el
diseño de la infraestructura y accesibilidad. Resulta importante, porque una gran parte
del éxito de un destino turístico está intrínsecamente ligado al acceso a este.
Los indicadores a partir del I21 y hasta el I24 miden el comportamiento general de la
industria turística, y son de relevante importancia, puesto que la información contenida
en ellos, se recabará durante el proceso de planificación y puede ser útil como lista de
referencia para los planificadores. Por su parte, el indicador I25 mide el porcentaje de
ejecución y cumplimiento del plan de ordenamiento territorial del municipio,
representativo del nivel de desarrollo deseado para cada territorio, a partir de sus
84
condiciones naturales, su infraestructura técnica, la actividad económico-productiva y
los sistemas de asentamientos humanos.
La dimensión patrimonial cuenta con 14 indicadores, desde el I26 hasta el I39. Los dos
primeros (I26 e I27) miden la gestión energética, y el empleo de fuentes renovables de
energía, respectivamente. Sirven para observar las tendencias del consumo energético y
supervisar el rendimiento. El I28 es de los necesarios para planificar el turismo en las
zonas, y el I29 sirve para medir la evolución del servicio de abastecimiento de agua
potable en los lugares de destino; pero su uso básico es mostrar la seguridad del
suministro de agua.
El I30 y el I31 abarcan lo relacionado con la generación de residuos, pues el envío de
materiales de desecho al vertedero representa una pérdida de recursos y su reposición
incrementa la emisión de gases de efecto invernadero durante la producción y el
transporte. El primer paso que debería darse es tratar de reducir las cantidades de
material utilizado (incluidos los embalajes), para luego pasar a considerar la
reutilización y, si esta no es posible, el reciclaje. Además, el I32 se utiliza, porque los
residuos abandonados sin ningún tipo de control pueden causar molestias a los turistas y
a los pobladores, al mismo tiempo que daña la imagen del destino.
Desde el I33 hasta el I35 miden las cifras de turismo en relación con los niveles deseados
de uso, y permiten estimar el momento en que se cumplirán las normas o se superarán
los umbrales establecidos. Los indicadores, desde el I36 hasta el I39 son subjetivos. Los
dos primeros miden los impactos ambientales del turismo en la comunidad; y los dos
restantes evalúan la identidad y cultura locales, analizando los efectos negativos
concretos en los recursos y bienes culturales. De este modo, se logra el cumplimiento de
las premisas establecidas y se procede a la aplicación del procedimiento de agregación.
85
3.2 Aplicación del procedimiento de agregación para la construcción de
indicadores sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en
Cuba.
Paso 1: Cuantificación de los indicadores.
Desarrollo: Los indicadores objetivos se obtuvieron a partir de fuentes estadísticas de
información:
- Delegaciones Territoriales de la Oficina Nacional de Estadística (Modelo 5200-03:
“Número de trabajadores por categoría ocupacional y sexo” y Modelo 1398-03:
“Indicadores seleccionados de la actividad turística en el territorio”).
- Oficinas Municipales de Acueductos y Alcantarillados.
- Unión de Empresas Recuperadoras de Materias Primas (UERMP).
- Centro Nacional de Áreas Protegidas (CNAP).
- Vicepresidencia de Museos del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural.
En el anexo 16 se muestra la forma en que se calcularon los indicadores (dos últimas
columnas). Cada uno, acompañado de un conjunto de medidas deseables para realizar
un estudio de sostenibilidad, según la bibliografía especializada.
En cuanto a los subjetivos, fue necesario aplicar una encuesta a los turistas, compuesta
por 20 ítems (Anexo 17) y otra a los residentes, con 17 ítems (Anexo 18), con el
objetivo de obtener las percepciones de unos y otros acerca de un grupo de aspectos que
se consideran importantes para el desarrollo del turismo.
Desde el punto de vista de los turistas, se evalúan aspectos como la calidad de los
servicios recibidos, el nivel de seguridad percibido, y sus percepciones sobre la limpieza
del destino, principalmente en lo referente a las áreas y los recursos naturales, entre
otros. Por parte de los pobladores, se deseaba conseguir sus percepciones acerca de los
86
beneficios o afectaciones, tanto sociales como económicos y patrimoniales, derivados
del desarrollo del turismo en su localidad.
Para realizar los cuestionarios sirvieron de base los modelos de encuestas, propuestos
por la OMT (2004), se consultaron los presentados por Díaz y Norman (2006), estudios
anteriores para la determinación de las percepciones de los visitantes a los destinos
turísticos como el de Sancho y García (1999) y modelos de encuestas aplicados por la
Agencia de viajes ECOTUR.
En cuanto a los visitantes, la población seleccionada fueron los turistas internacionales
que se encuentran en las zonas de turismo de naturaleza, ya sean excursionistas de un
día, o los que estuvieran alojados en el destino. El marco estuvo comprendido por los
establecimientos hoteleros de los que se disponen datos oficiales, tomado de la ONE, y
las unidades de investigación definidas, fueron los visitantes extranjeros.
Como método, se usó la encuesta directa, mediante un cuestionario autocumplimentado
por el entrevistado, presentado en manos de un entrevistador. Caso específico de la
“recogida clásica de información” (Santos et al., 2003) también denominada PAPI (de
Paper Assisted Personal Interviewieng o entrevistas personales con soporte de papel).
Para el diseño se tuvieron en cuenta variables cuantitativas, como las que preguntan
respecto del gasto de viaje, el gasto diario aproximado y la cantidad de personas que lo
acompañan, entre otras, y variables cualitativas, de percepción, llevadas a escala tipo
Likert, de 1 a 5, donde 1 significa que la valoración ofrecida es “pésima”, y 5 indica que
la percepción sobre el aspecto preguntado es “muy buena”.
Se empleó muestreo sistemático con arranque aleatorio (Santos et al., 2003), mediante
el cual se fueron seleccionando las unidades de muestreo, o sea, los individuos en los
puntos de encuesta. Dado el desconocimiento que existía, a priori, del tamaño de la
población en cada punto de muestreo, se optó por utilizar como población, la cantidad
87
de turistas que visitaron los establecimientos hoteleros, como promedio en una semana
del mes de mínima afluencia del año anterior (cantidad de visitantes a recibir, como
mínimo). Se seleccionó este tipo de muestreo debido a que los turistas encuestados
serían los que arribaran a las instalaciones. A partir de ahí, se determinó el tamaño
óptimo de la muestra (Anexo 19).
Para su cálculo, se fijó un error absoluto máximo aceptable que dependía de la
cuasivarianza de la población y del nivel de significación prefijado. Como no se conocía
la varianza poblacional, se aplicó un estudio piloto, durante el cual se puso a prueba el
cuestionario y se realizó la estimación de la varianza. Esta aplicación es factible, ya que
para estimar la varianza de un parámetro no se necesita una muestra demasiado grande
(Santos et al., 2003).
Durante la realización de la encuesta piloto, se apostó por el tamaño muestral que se
derivase de un esfuerzo uniforme en cada punto que se va a realizar la encuesta: mismo
número de encuestadores y de horas de encuestación. De esta forma, se llevó a cabo una
selección aleatoria de días y tramos horarios, que fueron asignados por igual a cada
entrevistador. Este estudio es de gran utilidad, pues sirve para probar el cuestionario en
el campo y corregir los posibles sesgos (Santos et al., 1999). Como resultado se obtuvo,
la necesidad de reducir el número de preguntas, debido al tiempo que tardaban en
responderlas, y la existencia de una alta correlación entre las respuestas de varias
preguntas, por lo cual se pudo prescindir de algunas.
Otras de las conclusiones extraídas del estudio piloto fueron la reformulación de varias
preguntas, porque se presentaban difíciles de responder por los entrevistados, además de
la fijación de horarios más adecuados para aplicar la encuesta. Se acordó que el estudio
se realizara a partir de las 9:00 horas hasta las 10:00 y luego en la tarde, entre las 14:30
88
y las 16:00 horas, que coinciden con los períodos en que los turistas llegan y
abandonaban las instalaciones de alojamiento respectivamente.
En concreto, se desarrolló el mismo procedimiento en cada una de las zonas. Se estimó
la varianza poblacional: la mayor de las varianzas de las preguntas expresadas en escala
Likert. Con esta se calculó el tamaño óptimo de la muestra. Luego de aplicar las
encuestas, se recalculó el tamaño de la muestra, tomando para ello, la varianza de las
preguntas. Se compararon las varianzas obtenidas, con la mayor de las varianzas
derivadas del estudio piloto, resultando mayor esta última, por lo cual se consideró
como válido el tamaño de muestra obtenido inicialmente.
Por su parte, en el cuestionario aplicado a los residentes, la población estuvo
conformada por las personas que residen en la zona donde tiene lugar el turismo de
naturaleza. Como marco se tomó la información de la Oficina de Estadística de cada
municipio, donde aparece la relación de Consejos Populares y la cantidad de habitantes,
separados por rangos de edades. El método empleado fue similar al de los turistas.
En el diseño, se emplearon solo variables cualitativas, de percepción, que en este caso
fueron llevadas a escala tipo Likert, de 1 a 5, donde el valor 1 significa que está muy en
desacuerdo con la afirmación hecha, y 5 indica que el entrevistado está muy de acuerdo.
Se realizó un muestreo bietápico: por conglomerados y aleatorio. En la primera etapa se
definieron los conglomerados, representados por los Consejos Populares en cada una de
las zonas, de los cuales se seleccionó aquel en que están enclavados los alojamientos
reglados para el turismo internacional, por ser aquellos que mayor flujo de turistas
reciben. Recordar que en muchas de estas zonas solo hay enclavado un hotel y la
población se dedica a otras actividades, principalmente las agrícolas.
Los Consejos Populares cumplen con las condiciones de un conglomerado, lo que
garantiza que cada uno sea una representación fiel de la población. La información
89
sobre estos también se consultó en la Oficina Territorial de Estadística de cada
municipio, que lleva el control de la cantidad de habitantes separadas por sexo y grupos
de edades. La segunda etapa consistió en seleccionar aleatoriamente las casas dentro del
Consejo Popular y aplicar el cuestionario a todos los comprendidos entre 19 y 70 años,
que representarían las unidades finales del estudio.
Para el cálculo del tamaño de muestra, se obtuvo la población residente en cada uno de
los Consejos Populares en los que están enclavadas las instalaciones de alojamiento. De
esta forma, se aplicó una encuesta piloto a un grupo comprendido entre 20 y 30
personas, para estimar la varianza y se determinó el tamaño muestral utilizando la
misma expresión que en el cuestionario de los turistas, e igual procedimiento para
verificar la necesidad de ampliación de la muestra, lo cual no fue necesario.
Como resultado del estudio piloto se eliminaron varias preguntas del cuestionario, pues
daban lugar a respuestas ambiguas, y otras que no resultaban de fácil comprensión para
muchos. En resumen, para realizar el cálculo de los tamaños de muestra en cada una de
las zonas, tanto para los turistas como para los residentes, se fijó un error absoluto del
5% ( 05,0=δ ) y un nivel de confiabilidad del 95%. Los valores obtenidos se muestran
en el anexo 19.
Dentro del mismo paso, se procedió a establecer el valor ideal y el no deseado para cada
uno de los indicadores seleccionados. En este caso, ante la ausencia de fuentes externas
de información, se determinó como vector ideal, aquel que contiene los valores de
referencia máximos para cada uno de los j indicadores del sistema ( )**2
*1 ,........,, jXXX y
el vector antiideal, el de los valores de referencia mínimos ( )jXXX *2*1* ,........, .
Resultado: Se obtuvo una base de datos con los valores de cada uno de los indicadores
iniciales y las situaciones de referencia.
90
Paso 2: Análisis de la consistencia interna de los datos.
Desarrollo: En este caso se optó por el empleo del Alfa de Cronbach (c-alpha)
(Cronbach, 1951) (Anexo 9), que fue calculado, para los indicadores que componen
cada una de las dimensiones, y para el conjunto como tal. Valores altos de (c-alpha),
denotan que los indicadores son adecuados para medir el concepto por el cual fueron
seleccionados. Nunnaly (1978), citado por OCDE (2008), sugiere 0,7 como un valor
aceptable, aunque algunos autores usan 0,75 o 0,80; mientras que otros suelen
considerar hasta 0,6. En general, esto varía por disciplina.
Si c-alpha ≥ 0,60, existe consistencia interna, de modo que se marcha al siguiente paso;
si c-alpha < 0,60, demuestra inconsistencia, por lo que se regresa a la determinación del
conjunto inicial de indicadores.
Resultado: Para la dimensión social se obtuvo un valor de 0,577455 que, a pesar de no
alcanzar el nivel a partir del cual se considera que es aceptable (0,6) (OCDE, 2008), se
sitúa bastante cerca de este. Ello, sumado a la dificultad de la aplicación de una consulta
a los mismos especialistas con los cuales se determinó el conjunto inicial de
indicadores, propició que fueran aceptados para el estudio.
Por su parte, para la dimensión económica y patrimonial, c-alpha resultó ser de
0,603559 y 0,693973 respectivamente, considerados como aceptables. Mientras que
para el total de indicadores se obtuvo 0,808342, por lo cual, de forma general, se puede
plantear que son representativos del concepto a medir.
Paso 3: Análisis descriptivo de los datos.
Desarrollo: Se empleó el sistema estadístico SPSS, versión 18.0, y el análisis se realizó
por dimensiones, mediante la determinación del valor máximo, mínimo, la media, la
desviación típica, el coeficiente de variación, la asimetría y la curtosis de los
indicadores. En cuanto a la eliminación de la información duplicada, ante la ausencia de
91
un mecanismo implícito en el procedimiento de cálculo, fue necesario apoyarse en el
programa IndiSin (Manual de Usuario), para analizar las relaciones entre los indicadores
de partida.
Este programa es una herramienta informática que constituye una nueva aplicación para
Windows, cuyo nombre responde al motivo por el cual fue elaborado: calcular
indicadores sintéticos a partir de un sistema inicial de indicadores. Además, el software
también permite obtener IS a partir del ACP y de la distancia DP2.
Resultado: Los valores obtenidos aparecen en el anexo 20, donde se aprecia que los
indicadores de la dimensión social (Tabla 12) presentan, en su mayoría, una baja
variabilidad para las diferentes zonas comparadas, al tener coeficientes de variación con
valores por debajo del 25%, incluso, algunos por debajo del 15%. El grupo con poca
variabilidad corresponde a los indicadores subjetivos, lo que da medida de la similitud
existente en las diferentes zonas en relación a la mejora de los servicios sociales a causa
del turismo. Los que mayor variabilidad presentan son los indicadores que hacen
referencia a la capacidad de carga social (I3) y a los beneficios económicos del turismo
para la comunidad de destino, los relacionados con la creación de empleo (I6 e I8).
Asimismo, se puede señalar que las distribuciones son, en su mayoría, asimétricas
positivas; salvo aquellas como la permanencia de los jóvenes en el municipio a causa
del turismo (I5), que es moderadamente asimétrica negativa, porque presenta un valor
cercano a cero y, otros como el aumento del nivel de vida a causa del turismo (I9), la
seguridad en el destino (I10) y la calidad de los servicios públicos percibida por los
turistas (I11), que tienen más concentrados los valores por debajo de la media. A su vez,
aproximadamente el 63% de los indicadores de esta dimensión tienen una distribución
leptocúrtica, lo cual significa que los valores tienen un alto grado de concentración
92
respecto a su valor medio (I2, I3, I5, I6, I10, I11), mientras que la distribución que sigue el
resto es platicúrtica, que indica lo contrario.
La dimensión económica (Tabla 13) presenta una mayor variabilidad, pues a pesar de
que existe un grupo (cinco indicadores) que presenta una variabilidad por debajo del
37%, hay otro conjunto que tienen un nivel de variabilidad por encima del 50% y, de
estos, algunos con valores de más del 80%. Entre los que componen el primer grupo se
encuentran los indicadores que miden el nivel de satisfacción de los turistas (I12, I13, I14),
el que mide la calidad del acceso al destino, y el que analiza el cumplimiento del plan de
ordenamiento territorial (I25). Los de mayor variabilidad son los representativos de la
estacionalidad del turismo (I17, I18) y varios de los que evalúan el comportamiento de la
industria turística (I21, I22, I24).
El 78% presenta asimetría positiva, es decir, sus valores se concentran por encima del
valor de la media, e igual porcentaje tiene un alto grado de concentración alrededor del
valor medio. Los restantes indicadores, (I12, I13, I14, I20) presentan asimetría negativa y,
los que tienen un menor grado de concentración alrededor de sus valores medios, son
los que conforman el siguiente conjunto (I15, I18, I19, I24, I25).
Para la dimensión patrimonial (Tabla 14), los indicadores se pueden dividir en dos
grupos fundamentales en cuanto a su variabilidad. El primero, al que pertenece el 57%
de estos, con un valor por encima del 90%; mientras que, en el segundo grupo, se
encuentran los que miden el acceso al agua potable (I29), la valoración sobre la limpieza
en el destino (I32), el control de los impactos ambientales, la oferta de actividades
vinculadas con los recursos naturales (I36, I37) y la valoración de las identidades y
culturas locales, conjuntamente con la conservación del patrimonio cultural en el
destino (I38, I39) con una variabilidad inferior al 25%.
93
En cuanto a la distribución, se aprecia que el 64% tienen los valores concentrados por
encima de su valor medio, mientras que todos aquellos que tienen poca variabilidad,
presentan una distribución asimétrica negativa, excepto el I39. Destacar que, además, el
57% tienen sus valores altamente concentrados alrededor de las medidas centrales;
mientras que los restantes, tienen un menor grado de concentración, como es el caso de
I28, I29, I32, I34, I36 e I38.
Paso 4: Cálculo de los indicadores sintéticos dimensionales (IS).
Desarrollo: Dada la posibilidad de obtener los indicadores sintéticos dimensionales, a
partir de cualquiera de las dos propuestas realizadas, se decidió calcularlos por ambas
vías, para de este modo, establecer una comparación entre los resultados, a fin de
analizar las diferencias. Para el cálculo se empleó el programa IndiSin, y como datos de
entrada, los indicadores de cada dimensión.
Para calcular el indicador DCP, inicialmente se homogeneizó la base de datos,
cambiando el signo a los indicadores negativos, convirtiéndolos en positivos;
Seguidamente, se expresaron los datos de partida en función de la distancia a los valores
de referencia mínimos, fijados de forma tal que fuera menor que los valores mínimos
del conjunto de datos analizados para cada unidad. Seguidamente se normalizó,
dividiéndolos por la distancia existente entre las unidades de referencia máxima y
mínima de cada indicador. El modo de fijar el valor de referencia garantiza que, al
realizar la normalización, ninguna zona obtenga valor cero. Así, aquella unidad que
mejor posición muestre será la que mayor valor alcance para el IS. Se calculó el IS para
cada dimensión, según la norma L1, que será la empleada en el análisis empírico.
Para el cálculo mediante la metodología IPM, primero se identificaron los indicadores
positivos y los negativos, seguidamente se fijaron los niveles de aspiración, quedando
para los positivos, como el 80% ( )8,0=α de su valor medio, mientras que para los
94
negativos se tomó el porcentaje recíproco ⎟⎠⎞
⎜⎝⎛ =
αβ 1 . De esta forma, se facilita el estudio
de los resultados, lo que permitió realizar un análisis de estabilidad al ir aumentando el
grado de exigencia a los indicadores del tipo cuanto más, mejor.
Para calcular las ponderaciones, ante la ausencia de fuentes de información, se decidió
aplicar una consulta a expertos (Método Delphi), definido por Linstone y Turoff (1975)
como un método de estructuración de un proceso de comunicación grupal que es
efectivo a la hora de permitir a un grupo de individuos, como un todo, tratar un
problema complejo, cuyas aplicaciones se pueden ver en Linstone y Turoff (1975),
IEAE (2001), Igarza (2008) y Cué (2009).
Se realizaron las cuatro fases fundamentales propuestas por Godet et al. (2000), que
consisten (1) la formulación del problema, (2) selección de los expertos, (3) elaboración
y aplicación de los cuestionarios y (4) análisis de los resultados y conclusiones
pertinentes. Siguiendo ese orden, el problema se enunció en el párrafo anterior.
La segunda y tercera fases se desarrollaron a la vez. Primero, se siguieron los estudios
realizados por investigadores de la Rand Corporation13 que señalan que si bien parece
necesario un mínimo de siete expertos, habida cuenta que el error disminuye
notablemente por cada experto añadido hasta llegar a los siete, no es aconsejable
recurrir a más de 30.
Ante la necesidad de que los expertos fueran amplios conocedores sobre el tema, se
decidió consultar personas que trabajaran en el MINTUR, la Escuela de Hostelería y
Turismo, Agencia de Viajes ECOTUR, en Pinar del Río, Grupo Empresarial
Extrahotelero Palmares, Delegación Pinar del Río, Fundación Antonio Núñez Jiménez
13 Norman C. Dalkey, Bernice Brown y S. Cochran, “The Delphi Method, III: Use of self rating to improve group estimates”. Technological Forecasting and Social Change, vol 1, 1970, pp. 283-291. Citado por Landeta, J (1999) op. cit.
95
de la Naturaleza y el Hombre, WWF-Canadá y profesores universitarios con trayectoria
investigadora en temáticas de turismo de naturaleza y sostenibilidad.
La metodología utilizada para la selección de los expertos fue la propuesta por Linstone
y Turoff (1975), aplicada en varios trabajos (Linstone y Turoff, 2002; Cué, 2009) y se
basa en la autovaloración de los mismos, por considerar que refleja sus competencias y
las fuentes que les permiten argumentar sus criterios (Anexo 21).
En el estudio fueron incluidos 16 posibles expertos, a los cuales se les contactó por
correo electrónico, haciendo uso de las herramientas en red que dan un soporte
tecnológico para la resolución de los problemas: tiempo, dinamismo, información y
participación. Luego del proceso de autovaloración, se excluyeron tres, por obtener una
baja calificación. El proceso mostró que el 31,25% del total posee un coeficiente de
competencia medio y un 50% correspondió a expertos con un coeficiente de
competencia alto, donde la media de los años de experiencia fue de 14,3.
La segunda y tercera fases fueron llevadas a la par, porque las preguntas de
autoevaluación acompañaron el primer cuestionario enviado (Anexo 22), para buscar
rapidez en la consulta, de modo que las respuestas de los que fueron eliminados no se
tuvieron en cuenta.
El análisis de los resultados se realizó de forma similar al propuesto por el Instituto de
Economía Aplicada a la Empresa de la Universidad del País Vasco (IEAE, 2001), a
partir del grado medio de dispersión, pues el reducido número de valoraciones por
indicador y las diferencias del tamaño entre los valores medios de estos permiten
seleccionar este estadístico, en lugar de otros más tradicionales como pueden ser el
recorrido intercuartílico o el coeficiente de determinación. Por consiguiente, se ha
calculado la desviación típica (σ) para cada indicador (de las estimaciones de los 13
expertos), y a partir de ahí la σ media, que inicialmente fue de 2,71.
96
Con el objetivo de buscar mayor consenso se realizó una segunda vuelta, en la cual se
ofrecieron los valores de la media de las respuestas para cada indicador, y se les
preguntó a los expertos su concordancia con ese valor para la ponderación. En caso de
desacuerdo, que propusieran otro. En este sentido, la diferencia de las desviaciones
típicas de la primera y la segunda ronda proporciona una idea de la variación del grado
de consenso conseguido.
Variación del grado de consenso = 21 σσ −
Después de aplicada la segunda ronda, se obtuvo una desviación media de 1,33 por lo
cual hubo una variación de 1,38 en el grado de consenso, indicando que después de esta,
los expertos llegaron a un mayor acuerdo. Una vez identificados los parámetros
necesarios, el programa IndiSin permitió obtener todas las medidas sintéticas del IPM,
descritas en el procedimiento.
Resultado: Los pesos de los indicadores iniciales, tanto para el DCP como los que
resultaron de la consulta a expertos, para emplearlos calculando el IPM (Anexo 23).
Estos, expresados como el porcentaje respecto a la suma total, permiten identificar que
la dimensión menos importante para ambos procedimientos es la social. Por su parte,
DCP le concede mayor importancia a la dimensión patrimonial, y en segundo lugar, la
económica, mientras que para los expertos funciona de forma inversa; esto es, primero
la económica y en segundo lugar la patrimonial.
También se obtienen los valores de los indicadores sintéticos dimensionales DCP e
IPM14 para cada una de las unidades evaluadas (Anexo 24, Tablas 16, 17 y 18)
conjuntamente con el número de insostenibilidades15 (última columna) para los
14 El valor del Indicador de Programación por Metas Neto (IPMN). 15 Cantidad de indicadores para los que determinada unidad no alcanza a cumplir los niveles de aspiración exigidos.
97
calculados con el IPM, así como los gráficos que devuelve el programa IndiSin para la
interpretación de los resultados (Anexo 24, Figuras 1-6).
Paso 5: Cálculo de un índice global de sostenibilidad (ISG).
Desarrollo: Mediante la expresión propuesta en el capítulo anterior, y tomando como
información de partida los indicadores sintéticos dimensionales, se calculó un ISG para
cada unidad. El proceso se realizó de dos formas. Inicialmente se dejó que el método le
proporcionara a cada unidad, libremente, los pesos que mayor valor de eficiencia le
concedían, principio del enfoque del beneficio de la duda.
Sin embargo, ante la posibilidad de que se omitiera alguna dimensión, se decidió hacer
otro cálculo en el que se le impuso a los outputs virtuales, la condición de que las tres
dimensiones estuvieran incluidas en el valor del ISG. Por ello, se introdujo una
restricción que impone una cota inferior de ω a cada output virtual, quedando como
sigue, para la i-ésima unidad:
nkmjXw kjij ,...1;,...,1 =∀=∀≥ω
En este caso, se programó para que el programa IndiSin impusiera un valor de 2,0=ω .
Resultado: Los indicadores sintéticos DEACP y DEAPM, representativos de la
sostenibilidad para cada una de las unidades analizadas (Anexo 24, Tabla 20), sin
restricciones, y con estas sobre los outputs virtuales.
Paso 6: Presentación de los resultados.
Para el análisis de los resultados, se tomaron como referencia las zonas mejor y peor
ubicadas en cada ordenación. A partir de ellas, se pretende hallar las características que
tienen en común los destinos más y menos sostenibles, de modo que se pueda llegar a
conclusiones que permitan fundamentar estrategias para mantener o perfeccionar el
comportamiento de las mejores, y conseguir un mayor grado de sostenibilidad para las
peores. El análisis se realizó por dimensiones, y luego de forma global.
98
El estudio de los valores obtenidos con el DCP se realiza a partir de las ponderaciones
obtenidas, que indican la importancia relativa de cada uno de los indicadores y, de sus
valores. Por otro lado, para las puntuaciones del IPM, se toma el IPMN, pues permite
evaluar la situación relativa de cada unidad analizada, sin exigir el cumplimiento de
todos los niveles de aspiración fijados, y la compensación entre los indicadores del
sistema. El razonamiento se basa en el cumplimiento o no de los niveles de aspiración
para cada tipo de indicador, revelando sus fortalezas y debilidades, y en los pesos
obtenidos en la consulta a expertos, que muestran la importancia relativa de cada uno.
3.2.1 Resultados de la agregación social.
En la tabla 16 (Anexo 24) aparece la posición de cada zona, de acuerdo con el valor del
DCP y del IPM para la dimensión social. Las dos primeras unidades coinciden, aunque
no en el mismo puesto; sin embargo, tienen en común que están situadas en provincias
con un amplio desarrollo en el turismo de forma general.
En cuanto a los resultados del DCP, las zonas mejor ubicadas son aquellas en las que,
de forma general, más se benefician, económicamente, las comunidades receptoras,
debido a que tienen la mayor cantidad de empleados en el sector (I6) y presentan, de
conjunto, un valor por encima de la media en el porcentaje de mujeres empleadas en el
turismo (I7). Estos son el 8vo y el 6to, en cuanto al valor del peso recibido. Otras de las
cuestiones en que sobresalen, es en el grado de seguridad percibida por los visitantes
(I10), y en la calidad de los servicios públicos (I11), el 10mo y 11no en importancia.
Para el resto de los aspectos, estas unidades presentan valores cercanos a la media, salvo
en el último, representativo de los efectos del turismo en la vida de la comunidad,
resaltando como aquellas en que el desarrollo del turismo no incentiva a los jóvenes a
permanecer en el municipio (I5), 9no según la ponderación obtenida.
99
Las unidades peor ubicadas son Topes de Collantes, San Diego y Guajimico, que solo
tienen un comportamiento aceptable en tres de los indicadores distintivos de los efectos
del turismo en la vida de la comunidad de destino: proporción entre turistas y población
en el mes de máxima afluencia (I3), la consideración de que los turistas no generan
efectos indeseables en el estilo de vida de la zona (I4), y la contribución de esta
actividad a mantener a los jóvenes en el municipio (I5), el 2do, 10mo y 9no por su peso.
El resto de los indicadores representan aspectos en los que estas zonas deben mejorar,
prestando mayor atención a la necesidad de demostrar mejor los beneficios sociales
asociados al turismo (I1 e I2), aumentar el número de mujeres empleadas en el sector
(I7), garantizar un mayor grado de seguridad para los turistas (I10) y lograr una mejora
de los servicios públicos (I11).
Las unidades mejor ubicadas por el IPM son en las que mayor empleo genera el turismo
(I6) y las de más oportunidad para las féminas (I7), siendo el 3ro y el 6to en cuanto al
peso obtenido. Además, priman en cuanto a nivel de seguridad percibida por los turistas
y la calidad de los servicios públicos (I10 e I11), 1ro y 2do por la ponderación obtenida, a
la vez que son las zonas donde el turismo no influye negativamente en el estilo de vida
comunitario (I4), 7mo por el peso obtenido.
La principal debilidad consiste en que, a pesar de ser las unidades con más empleados
en el turismo, estos no representan un número elevado con respecto a la población total
(I8), salvo en la Ciénaga de Zapata, la zona menos poblada. Sin embargo, dado el
carácter compensatorio que tiene el IPM, es posible que unidades con bajos valores en
algún indicador inicial, puedan tener posiciones destacadas en las ordenaciones.
Para esta metodología, no basta únicamente con satisfacer las metas establecidas, sino la
cuantía en que se cumplen, pues de las tres zonas mejor ubicadas, la primera en la
ordenación es Ciénaga de Zapata, que no satisface dos metas, mientras que Baconao
100
solo incumple una, y se ubica en la segunda plaza, tal como sucede con el Parque
Nacional Alejandro de Humboldt y Topes de Collantes, que no alcanzan el valor
deseado en solo una meta, y no ocupan las primeras posiciones. Ello se debe al
indicador (I8), el de mayor fortaleza para la Ciénaga de Zapata.
La diferencia entre Mayarí y Alturas de Banao radica esencialmente en que esta última
tiene un mayor número de empleados en el turismo (3ro por su peso en el IPM), cuestión
por la cual aventaja en el IPM, mientras que Mayarí cuenta con una mejor proporción
entre los turistas y la población autóctona (2do por su peso en el DCP).
Las zonas con peor desempeño social son Guajimico, San Diego y el Parque Nacional
Desembarco del Granma. Estas presentan como fortaleza, que son las de menor
proporción entre turistas y la población local (I3); sin embargo, tienen asociadas grandes
debilidades, principalmente relacionadas con la percepción de la mejora de los servicios
públicos con ayuda de los ingresos del turismo (I2), la cantidad de empleados en el
sector (I6), el porcentaje que estos representan de la población de la zona (I8), y la
percepción de seguridad en el destino (I10); el 10mo, 3ro, 5to y 1ro, según su peso.
Para establecer una mejor comparación entre los resultados, el análisis se complementa
con la representación gráfica de las posiciones obtenidas por cada una de las zonas
(Figura 1). El gráfico constituye una herramienta de amplio poder explicativo debido a
su fácil comprensión, pues el empleo de colores para las diferentes ordenaciones ayuda
a visualizar mejor el resultado (Nardo et al., 2005b; Tarantola, 2008). En él se
representan las posiciones de las unidades, según el indicador calculado.
Se evidencia que existe bastante consistencia entre las ordenaciones. El valor de 0,775
del coeficiente de Rho de Spearman16 (1904), demuestra una relación fuerte y positiva.
16 Coeficiente de correlación de Spearman, ρ (rho), se emplea para estudiar el grado de relación lineal existente entre dos variables cuantitativas. Oscila entre -1 y 1, donde -1 indica una relación lineal perfecta
101
La mayor estabilidad se observa en San Diego de los Baños y Guajimico, que
permanecen invariantes para ambos métodos. También las mejor ubicadas tienen buena
permanencia, pues difieren aproximadamente en una posición.
El mayor rango de variación se sitúa en torno a las cuatro unidades, presentado por el
Parque Nacional Caguanes y Hanabanilla, que empeoran con el valor del IPM, debido a
que el desempeño en los indicadores I9 e I10 le vale para obtener un buen lugar en la
ordenación mediante el DCP, pero en el IPM, estos no le compensan los bajos valores
en otros como el I6 y el I8. Algo inverso sucede con Soroa-Las Terrazas y Topes de
Collantes, que tienen peor posición con el DCP.
La estabilidad de los resultados del IPM se puede comprobar mediante el gráfico de las
ordenaciones (Figura 2), que permite observar la posición de cada una de las zonas al
aumentar los niveles de exigencia de las metas para los indicadores positivos. Este
denota poca variabilidad en las ordenaciones, lo que se corrobora con un valor promedio
del coeficiente de Rho de Spearman de 0,92214 de las ordenaciones para los diferentes
niveles de aspiración fijados.
Existen algunos movimientos, como el caso de Baconao y la Ciénaga de Zapata, que se
intercambian para ocupar los lugares primero y segundo, respectivamente, y mantenerse
en esas posiciones hasta el final del análisis. Entre los que mejoran con el aumento del
nivel de aspiración se encuentran Hanabanilla y Guanahacabibes, con tres y cuatro
posiciones, y el Parque Nacional Caguanes con tres. Las que decaen notablemente son
Soroa-Las Terrazas, que pasa al último lugar, y Topes de Collantes, al antepenúltimo.
Como se evidencia, el análisis de los resultados obtenidos para esta dimensión,
constituyen argumentos imprescindibles para fundamentar la planificación del
desarrollo de esta modalidad turística y el proceso de gestión en general del MINTUR negativa y 1 indica relación lineal perfecta positiva; un valor de cero, indica relación lineal nula (Spearman, 1904; Taylor, 1987).
102
como organismo rector de la actividad turística en el país, de modo que se garantice la
participación informada de todos los implicados relevantes en el proceso de
planificación y gestión del destino y la aceptación comunitaria del turismo.
3.2.2 Resultados de la agregación económica.
En la tabla 17 (Anexo 24) aparecen las ordenaciones para la dimensión económica, que
tampoco denotan mucha diferencia. Los dos procedimientos seleccionan a Topes de
Collantes como la más sostenible, y el Parque Nacional Alejandro de Humboldt aparece
entre las tres primeras unidades.
Las mejores zonas a partir del DCP, presentan un alto grado de satisfacción de los
turistas, matizado por la relación calidad-precio del alojamiento (I12) y de los
restaurantes (I13). Estos, según su ponderación, son el 13ro y el 12mo en importancia.
Sobresalen también en los temas referentes a la estacionalidad turística, siendo aquellas
donde más equilibrada está la afluencia turística (I16) y las que mayor estancia promedio
registran (I17). Este último, el más importante en la dimensión, mientras que el I16 es el
7mo en cuanto al valor del peso recibido. Sobresalen además, como las de mayor oferta
turística (I19), y en lo referente al comportamiento de la industria turística, son las de
mayor cantidad de visitantes (I21) y donde se generan los mayores ingresos (I22). Estos
tres indicadores, según su grado de importancia, son el 3ro, 2do y 6to respectivamente.
En el resto de los indicadores, estas zonas presentan valores cercanos a la media,
generalmente por encima, excepto en el relativo al cantidad de trabajadores contratados
en el sector (I18), que muestra las personas que, en determinado momento, pueden
quedar desempleadas, y el representativo del gasto diario por turista (I24), el 9no y el 5to
en cuanto a su ponderación. Por lo tanto, las políticas en estos destinos deben estar
encaminadas a disminuir el número de trabajadores contratados, incrementando el
103
empleo a plazo fijo, y a estimular el gasto diario de los turistas, tomando como base la
buena calidad percibida por estos en el alojamiento y en la gastronomía.
Las peores para el DCP son Mayarí, San Diego y Guajimico, que presentan de conjunto,
valores alejados de la media del total de unidades, principalmente en temas como la
duración promedio de la estancia (I17), y los típicos del comportamiento de la industria
turística, como la cantidad de turistas recibidos (I21) y los ingresos netos (I22), los cuales
según su importancia son el 1ro, 2do y 6to, respectivamente. En estos casos, las acciones
deben estar encaminadas, principalmente, a la promoción de las zonas, y al desarrollo de
iniciativas de productos capaces de aumentar la cantidad de visitas a estos lugares.
Los resultados del IPM mantienen a Topes de Collantes y al Parque Nacional Alejandro
de Humboldt entre las tres mejores ubicadas, y la Ciénaga de Zapata pasa al tercer
lugar. Entre las principales fortalezas, sobresalen la percepción de la calidad-precio del
alojamiento (I12) y la gastronomía (I13), 3ro y 8vo en importancia; además, destacan la
accesibilidad (I20) y la generación de ingresos (I22). Estos, según el criterio de los
expertos, son el 5to y 6to por el valor de su peso.
Su principal debilidad consiste, salvo para la Ciénaga de Zapata, en el bajo gasto medio
diario por turista (I24). En el resto de los indicadores, tienen valores elevados, o por
encima de la media del total de las unidades analizadas.
Las peores áreas, según el IPM, son San Diego de los Baños, el Parque Nacional
Caguanes y Guajimico, con pequeñas puntuaciones en la mayoría de los indicadores;
principalmente en los referentes al comportamiento de la industria turística (I21, I22 e I23)
que son el 9no, 6to y 1ro en cuanto a la importancia otorgada por los expertos.
Como se ha visto, desde el punto de vista económico, en ambas ordenaciones no existen
muchas diferencias (Figura 3): 0,95357 para el coeficiente de Rho de Spearman. En este
caso, las mayores variaciones ocurren en torno a las dos posiciones. La mejoría de la
104
Ciénaga de Zapata con respecto al DCP radica en el cumplimiento de la meta asociada
al gasto medio diario por turista (I24), siendo la segunda unidad que mayor valor
registra, este es el 2do en cuanto a la ponderación recibida.
Por último, se analiza el comportamiento de los diferentes destinos en dependencia del
aumento de la exigencia para los niveles de aspiración (Figura 4), donde se observa que
la variación no es mucha. Las tres primeras zonas permanecen invariantes como las más
consolidadas desde el punto de vista económico.
Entre las de mayor movimiento aparecen Soroa-Las Terrazas y Baconao, que empeoran
cinco y cuatro unidades respectivamente, para terminar en la decimocuarta y octava
posición; mientras que, para las que mejoran, el mayor salto lo dan Hanabanilla y
Guajimico, que disminuyen tres unidades para terminar en la séptima y decimosegunda
posición respectivamente. La estabilidad mencionada se demuestra con un valor medio
para el coeficiente de Rho de Spearman de 0,96.
En este caso tampoco coincide aquella zona que más metas satisface con la más
sostenible, pues el Parque Nacional Alejandro de Humboldt no alcanza el nivel de
aspiración fijado para un indicador y aparece en la segunda posición, mientras que
Topes de Collantes incumple en tres ocasiones, y es la primera.
De igual forma, los resultados obtenidos proporcionan, con relativa precisión, los
principales aspectos a tener en cuenta en el proceso de planificación de la sostenibilidad
de la actividad turística en su dimensión económica., por cuanto, se identifican las
principales debilidades y fortalezas de cada una de las unidades, en pos de asegurar unas
actividades económicas viables, a largo plazo para la comunidad receptora.
3.2.3 Resultados de la agregación patrimonial.
Las ordenaciones obtenidas para esta dimensión (Tabla 18, Anexo 24), son las menos
estables, con un valor de 0,68571 para el coeficiente de Rho de Spearman; donde solo
105
figura Baconao entre las tres primeras para ambas alineaciones. Por el DCP, las
unidades más sostenibles son Baconao, Mayarí y el Parque Nacional Desembarco del
Granma. Estas tienen como promedio, un elevado porcentaje de personas con acceso al
agua potable (I29), y son las unidades con mayor capacidad para absorber los residuos
que se generan (I31), aspectos que, según el peso obtenido, son el 10mo y 13ro.
Otra cuestión en la que sobresalen es en la relacionada con la intensidad de uso, siendo
este uno de los indicadores que más interés despierta en la administración del destino.
En estas áreas existe un bajo número de turistas por Km2 de sitio (I34) y poca presión
sobre el patrimonio (I35), debido fundamentalmente a que, salvo Mayarí, las otras dos,
son las de mayor extensión. Estos indicadores ocupan el 4to y 6to puestos en cuanto a
importancia, y representan los daños que se pueden ocasionar en un destino.
De forma general estas unidades presentan un comportamiento cercano a la media en el
resto de los indicadores, excepto en el consumo de energía proveniente de fuentes
renovables (I27) en que solo sobresale Baconao, mientras que las otras dos aparecen en
las últimas posiciones, siendo este el 2do indicador por el valor de su peso.
Por su parte, las peores zonas son Topes de Collantes, Viñales y Soroa-Las Terrazas,
según el DCP ocasionado principalmente por el mal desempeño en la intensidad de uso
(I34 e I35) y en la valoración de las identidades y culturas locales (I38 e I39); estos últimos,
el 11no y el 7mo en importancia. Ello demuestra la necesidad de prestar debida atención
al uso de los recursos naturales y del patrimonio disponible, además de estimular la
artesanía y las actividades que reflejen la cultura y tradiciones de la localidad.
Para el IPM, las mejores zonas resultaron Baconao, Ciénaga de Zapata y el Parque
Nacional Caguanes, cuyas principales fortalezas radican en la intensidad de uso (I34 e
I35) y en la conservación del los recursos culturales y el patrimonio (I39). Estos
indicadores, según el valor del peso obtenido, son el 12mo, el 8vo y el 2do.
106
Entre las debilidades, figura la gestión energética, pues son las zonas donde más energía
eléctrica se consume como consecuencia del turismo (I26) y, salvo Baconao, son estas
donde menos se emplea la energía renovable (I27), ocupando el 4to y 9no lugar en
importancia.
Los peores sitios señalados son San Diego de los Baños, Soroa-Las Terrazas y el Parque
Nacional Viñales, todos pertenecientes a la provincia Pinar del Río. Su única fortaleza
radica en que son las que menor consumo de energía eléctrica promedian por turista
(I26); sin embargo, tienen poca capacidad para asimilar los residuos derivados del
turismo (I31), una baja puntuación en cuanto a la imagen de limpieza (I32), y,
principalmente Soroa-Las Terrazas y Viñales, una elevada presión sobre el patrimonio
(I35). En cuanto al valor de los pesos, son el 4to, 10mo, 11no y 8vo respectivamente.
Una mejor vista de las posiciones se ofrece en la figura 5, donde la única zona que no
varía es Baconao. El resto, se mueve entre las dos y las cinco posiciones, a excepción de
Topes de Collantes, que del sexto puesto con el IPM, pasa al último con el DCP.
La amplia variación mostrada por Topes de Collantes se debe a comportamientos
extremos en algunos indicadores iniciales, además de las diferencias entre las
ponderaciones obtenidas, tanto por el DCP como por la consulta a expertos. Esta unidad
tiene el peor valor para los indicadores I26, I28, I30, I34 e I39, que según el DCP son el 5to,
1ro, 2do, 4to y 7mo en importancia, respectivamente. Por lo tanto, si se comparan estas
ponderaciones con las del IPM, se aprecia que, salvo el I39 (el de menor ponderación), el
resto recibe menor importancia. Ello ocasiona el bajo valor de Topes de Collantes para
el indicador patrimonial DCP.
En cuanto a los resultados del IPM, Topes de Collantes aparece en la sexta posición.
Esta zona es la de mejor comportamiento para el indicador que más ponderación obtuvo
(I36), más valorado por los expertos que por el DCP. Su mayor fortaleza radica en el I27;
107
esto es, aquel que en mayor cuantía sobrecumple el nivel de aspiración fijado. Este
indicador, según los expertos, es el noveno en cuanto a su importancia relativa, con
mejor peso que el obtenido del DCP; sin embargo, en él, Topes de Collantes presenta un
valor aproximadamente tres veces mayor que el de la unidad que le sucede, lo que le
garantiza un mejor grado de sostenibilidad.
En la figura 6 se percibe cómo varían las posiciones de las zonas, según el aumento del
nivel de exigencia, donde Topes de Collantes comienza en la sexta posición pero, a
medida que se incrementa el nivel de aspiración, va empeorando hasta ocupar el último
puesto, a causa de la incidencia de los indicadores en los que aparece como la peor
unidad.
Otra de las zonas que empeora, en torno a las siete posiciones, es la Ciénaga de Zapata,
mientras que Guajimico y San Diego de los Baños pasan de la oncena y decimotercera,
a la quinta y sexta, respectivamente, mostrándose como los movimientos más notables
en cuanto a mejorías. De todos modos, tomando como base el coeficiente de Rho de
Spearman para todas las ordenaciones obtenidas (0,8885) se puede concluir afirmando
que tienen una buena estabilidad.
La conservación de los recursos naturales y la cultura local, propician el desarrollo del
turismo de naturaleza, lo cual revela la importancia del análisis realizado en esta
dimensión, por cuanto, las medidas sintéticas obtenidas identifican las principales
cuestiones a considerar por los planificadores, con el propósito de garantizar la
sostenibilidad del turismo de naturaleza en el ámbito patrimonial, dando un uso
eficiente a los recursos ambientales y garantizando el respeto a la autenticidad
sociocultural de las comunidades anfitrionas.
108
3.2.4 Resultados de la segunda fase de agregación: El Indicador Sintético Global.
La segunda fase de agregación comprende el cálculo de los índices sintéticos globales
(ISG) mediante la aplicación del DEA sobre los indicadores dimensionales de cada una
de las unidades analizadas, a fin de evaluar su desempeño global. Estos constituyen un
reflejo del estudio realizado por dimensiones, y se basan en aquellas que representan
fortalezas y debilidades de cada unidad.
La exploración se realiza a partir de los valores de los outputs virtuales, que expresan
información sobre la importancia que las unidades le atribuyen a cada dimensión, con el
objetivo de obtener su máxima puntuación de eficiencia. De este modo, un mayor
output virtual, refleja un buen desempeño en esa dimensión, mientras que un valor bajo,
indica lo contrario. Inicialmente se describen los resultados del problema en que no
existen restricciones sobre los outputs virtuales. Más adelante, se detalla la solución
donde se exige que cada dimensión esté incluida en el ISG.
3.2.4.1 Segunda fase de agregación, sin restricciones sobre los outputs virtuales.
Los valores del DEACP (sin restricciones sobre los outputs) figuran en el anexo 25
(Tabla 19). Topes de Collantes y Baconao son las más sostenibles globalmente, con una
puntuación de uno. La diferencia radica en que, el valor de la eficiencia para Topes de
Collantes se debe solo al aspecto económico; mientras que Baconao solamente se la
atribuye a la dimensión patrimonial. Estas son las dimensiones en las cuales dichas
unidades sobresalen como las más sostenibles en la primera fase de agregación. Por otra
parte, la Ciénaga de Zapata es la que mayor valor le otorga al output virtual social,
descuidando el resto; sin embargo, no obtiene la máxima puntuación.
Únicamente el Parque Nacional Alejandro de Humboldt considera su eficiencia en base
a dos dimensiones, y ocupa la tercera posición, con un valor de 0,95047, del cual, el
109
88,89% corresponde al aspecto económico, y el 11,11% restante al patrimonial. El resto
de las zonas solo toma como base una dimensión en su eficiencia.
Las unidades pueden ser separadas en tres grupos, de acuerdo con la dimensión en que
tienen mejor desempeño (Anexo 25, Figura 7) según el valor del ISG. Así, para el 33%
(cinco zonas) solamente interviene su actuación social en el ISG, con un valor promedio
de 0,84848; el 13% (dos) se apoya en la dimensión económica, con una media de
0,92245, y el 54% (ocho), con un valor promedio de 0,90913 en la dimensión
patrimonial. De forma general, las que mejor grado de sostenibilidad presentan, según el
procedimiento DEACP, son las que tienen un mejor ejercicio económico.
Los resultados para el DEAPM aparecen en el anexo 25 (Tabla 20), donde la Ciénaga de
Zapata, Topes de Collantes y Baconao están empatadas como las más sostenibles.
Ciénaga de Zapata y Baconao se valen solo de la dimensión social y la patrimonial,
respectivamente, para alcanzar la máxima eficiencia; mientras que el valor Topes de
Collantes es debido a su comportamiento económico (52,58%) y patrimonial (47,42%).
La agrupación de estas (Anexo 25, Figura 8), según la dimensión que más aporta al ISG
demuestra que solamente el 7% (una) tiene como base la dimensión social, con valor 1;
para el 20% (tres) este depende solo de la económica, con un promedio de 0,53452;
mientras que el tercer y más numeroso grupo, formado por 11 unidades (73%), se
apoyan principalmente en la dimensión patrimonial para alcanzar su máxima eficiencia.
El valor promedio del output virtual patrimonial es de 0,57936.
Como se pudo observar, algunas unidades tuvieron en cuenta solamente la dimensión en
la que tenían la mejor actuación, de modo que es la única de la cual depende su ISG.
Este es precisamente el enfoque del beneficio de la duda, donde cada unidad es libre de
determinar el conjunto de pesos que mejor valor de eficiencia le garantice. En ese
sentido, el autor considera pertinente realizar un estudio en el cual se introduzca una
110
nueva restricción, que condicione que cada unidad tengan en cuenta todas las
dimensiones en su valor global de sostenibilidad. Por ello, se impuso una cota inferior
de ω a cada output virtual, de la siguiente forma, donde 2,0=ω :
nkmjXw kjij ,...1;,...,1 =∀=∀≥ω
3.2.4.2 Resultados de la segunda fase de agregación, con restricciones sobre los
outputs virtuales.
Los resultados para el DEACP se muestran en el anexo 25 (Tabla 21). Esta vez no
existen empates en la primera posición, donde sobresale Baconao como la más
sostenible. Su valor de eficiencia se reparte casi de forma equitativa entre las tres
dimensiones, pero sobresale la económica, a pesar de ser aquella en la cual no ocupa la
primera posición con el indicador sintético dimensional DCP. Esta es la que más aporta
a dicha unidad, pero no es en la que aparece como referencia frente al resto de las
unidades. Por ello, el éxito de la eficiencia se debe a que resulta la zona de mejor
desempeño social y patrimonial frente al resto de las zonas evaluadas, en las que resulta
la más sostenible según el DCP.
Solo Topes de Collantes y Guajimico ponderaron con el mínimo, las dimensiones
patrimonial y económica, respectivamente; son estas en las que presentan debilidades de
acuerdo al DCP. De este modo es posible, para cada zona, determinar las fortalezas y
debilidades mediante los valores de los outputs virtuales. En base a ello, se pueden
agrupar en tres grupos de acuerdo con el valor del output virtual de mayor puntuación,
que indica la dimensión en que tienen mejor ejercicio (Anexo 25, Figura 9).
El 27% (cuatro zonas) le atribuye mayor importancia a la dimensión social, el mismo
porcentaje, a la económica y el 46% (siete) se basa, mayormente, en la patrimonial. Del
mismo modo, la figura 10 (Anexo 25) muestra el comportamiento promedio de los
valores de los outputs virtuales de cada uno de los grupos antes mencionados.
111
Las que conforman el primer grupo, atribuyendo mayor importancia a la dimensión
social, como promedio, son mejores en el aspecto económico que en el patrimonial. Las
del segundo grupo, tienen mejor actuación económica, luego se basan en la social y, por
último, en la patrimonial. Mientras que el orden de importancia de las que componen el
tercer grupo, de forma decreciente es, patrimonial, económico y social. Tomando como
base el valor promedio del DEACP de cada grupo, el segundo es el más sostenible, le
sigue el primero y, por último, las unidades que conforman el tercero.
Para los resultados del DEAPM, el análisis es similar, pues tampoco hubo empates en el
primer lugar, ocupado nuevamente por Baconao, (Anexo 25, Tabla 22). La dimensión
que más valor aporta a su eficiencia es la social. Nuevamente se ubica Guajimico en la
peor posición, cuya mayor fortaleza está en la dimensión patrimonial, la única en que no
es la peor zona, según el IPM. Solo las cinco mejores unidades, tienen mayor valor que
el exigido para los outputs virtuales en todas las dimensiones, al igual el Parque
Nacional Guanahacabibes, que ocupa la décima posición. Para el resto de las zonas,
aquella dimensión en que tienen 0,2 como valor del output virtual, representa la
dimensión de peor comportamiento.
La figura 11 (Anexo 25) representa un resumen de las unidades, de acuerdo con la
dimensión que más aporta al valor del ISG, donde se identifican dos grupos, el 80%
(12), que tienen como fortaleza la cuestión social, y el 20% (tres) la patrimonial.
Centrando el análisis en los valores medios de los outputs virtuales (Anexo 25, Figura
12), el primer grupo, conformado por las unidades que tienen su punto fuerte en los
aspectos sociales, luego reconocen los patrimoniales y tienen como debilidad, las
cuestiones económicas. Este conjunto es el de mayor sostenibilidad. El segundo grupo
presenta como fortaleza la dimensión patrimonial, seguida, la social y, como punto
débil, la cuestión de tipo económica.
112
Las posiciones de acuerdo a los ISG se muestran en la figura 13 (Anexo 25), denotando
una elevada estabilidad, con 0,7786 para el Rho de Spearman, que indica una relación
fuerte y positiva. Entre las zonas que no varían están Baconao (1ra), Mayarí (6ta), el
Parque Nacional Caguanes (7ma), San Diego de los Baños (14ta) y Guajimico (15ta).
Las unidades que empeoran con el DEAPM, en mayor medida, son Guanahacabibes y el
Parque Nacional Desembarco del Granma, que se desplazan seis y cinco posiciones
respectivamente. Ello denota consistencia con los resultados de los indicadores
dimensionales, pues según los valores del DCP social, económico y patrimonial,
Guanahacabibes ocupa la 9na, 4ta y 4ta plazas, respectivamente; mientras que, de acuerdo
con el IPM, obtiene los lugares 12mo, 5to y 8vo en el orden social, económico y
patrimonial. Lo mismo sucede con el Parque Nacional Desembarco del Granma, cuyos
lugares, con el DCP, fueron el 10mo, 11no y 3ro, mientras que para el IPM resultaron 13ro,
11no y 5to.
Por otra parte, Alturas de Banao es la que más varía de forma inversa, es decir: mejora
con el DEAPM. Esto se debe a que para los valores del DEACP, esta zona se encuentra
entre las que tienen mayor output virtual social, el grupo que como media tiene peor
grado de sostenibilidad de acuerdo a este método; mientras que para el resultado del
DEAPM aparece en el primer grupo, pero con un mejor rendimiento promedio, lo que la
ubica en una mejor posición con respecto al resto de las unidades.
Además, si se analizan los valores de los indicadores dimensionales, con el DCP,
Alturas de Banao ocupó la 6ta, 9na y 4ta posiciones, en el orden social, económico y
patrimonial, respectivamente, mientras que para el IPM se situó en la 3ra, 7ma y 10ma
plazas, lo que le confiere, por lo tanto, un mejor valor con el DEAPM que con el
DEACP.
113
El análisis realizado permite identificar, para cada unidad, los puntos fuertes y débiles
en cuanto a la sostenibilidad. Estas se pueden agrupar de acuerdo con los aspectos que
comparten en común; de modo que en el proceso de toma de decisiones en la
planificación de los destinos turísticos de naturaleza, se señala la dirección en que debe
moverse cada zona, a fin de obtener un mayor grado de sostenibilidad, o permanecer en
las posiciones de referencia, como es el caso de Baconao, que tiene el mayor grado de
sostenibilidad entre las zonas comparadas.
Como se puede apreciar, el empleo de los ISG y el análisis de sus valores, contribuyen
significativamente al perfeccionamiento y a la calidad del proceso de toma de
decisiones en la planificación del desarrollo sostenible del turismo de naturaleza, por
cuanto, posibilitan identificar las diferencias entre los aspectos que componen las
dimensiones de dicho concepto y, por consiguiente, reducir las asimetrías identificadas
en cuanto al aprovechamiento de las potencialidades existentes en cada territorio, de
forma que propicien un desarrollo armónico de esta modalidad turística.
Conclusiones parciales.
1. Las zonas seleccionadas son reconocidas como las de mayor potencial de desarrollo
del turismo de naturaleza de Cuba, por parte del MINTUR, el CITMA y
Planificación Física.
2. Los indicadores seleccionados logran medir la sostenibilidad de los destinos
turísticos de acuerdo con el concepto de la OMT (2004) y, estadísticamente, son
representativos del concepto por el cual fueron escogidos.
3. La información estadística disponible para cuantificar los indicadores es insuficiente
para la realización de estudios como el que se presenta; no obstante, el método
empleado para obtener los valores de los indicadores permitió contar con datos
114
provenientes de fuentes estadísticas y con las percepciones de los visitantes y los
pobladores de las diferentes zonas analizadas.
4. Se demuestra la utilidad del procedimiento propuesto para la agregación de la
información contenida en el conjunto inicial de indicadores, por cuanto, permitió
realizar un análisis por cada una de las dimensiones, y de forma global, para las
unidades evaluadas.
5. Los resultados obtenidos de la aplicación del DCP destacan a Baconao como la zona
de mejor desempeño social y patrimonial; y Topes de Collantes como sobresaliente
desde el punto de vista económico, mientras que las de peor comportamiento son
Guajimico (social y económico) y Topes de Collantes (patrimonial).
6. Los valores del IPM destacan a la Ciénaga de Zapata, Topes de Collantes y Baconao
como las más sostenibles desde el punto de vista social, económico y patrimonial,
respectivamente; mientras que Guajimico figura como la de peor desempeño social
y económico, y el Parque Nacional Viñales por el patrimonial.
7. Los indicadores globales, sin restricciones sobre los outputs virtuales, ocasionan que
para algunas unidades, el valor de eficiencia se deba solamente a la dimensión en
que tienen un mejor comportamiento y permite empates en el primer lugar. Las más
sostenibles, según el DEACP son Topes de Collantes y Baconao, debido a la
dimensión económica y patrimonial respectivamente, mientras que la peor fue
Soroa-Las Terrazas, apoyada solo en el aspecto social.
8. Para el DEAPM (sin restricciones) un mayor grupo de unidades se basó en más de
una dimensión para obtener el indicador sintético, y también hubo empates en el
primer lugar, siendo la Ciénaga de Zapata y Baconao las más sostenibles por las
cuestiones social y patrimonial, respectivamente; además de Topes de Collantes,
debido al aspecto económico y al patrimonial.
115
9. Las restricciones sobre los outputs virtuales permiten que cada unidad obtenga un
valor del indicador sintético global en el que se incluyan todas las dimensiones del
concepto analizado y eliminan los empates en el primer lugar.
10. Los resultados de los indicadores sintéticos globales, con restricciones sobre los
outputs virtuales, destacan a Baconao como la más sostenible para ambos métodos,
cuyo nivel de eficiencia se debe mayormente al desempeño económico (DEACP) y
al social (DEAPM); mientras que Guajimico resultó la peor; y su valor está
representado mayormente por la dimensión patrimonial, la única en la que ocupa
una posición diferente a la última, de acuerdo con los indicadores dimensionales.
11. Existe bastante similitud en los resultados obtenidos, para los indicadores sintéticos
dimensionales calculados por ambos métodos, y entre las ordenaciones a partir de
las medidas globales.
12. Los valores de los indicadores sintéticos obtenidos permiten realizar un análisis de
la sostenibilidad de las zonas de turismo de naturaleza de Cuba, identificando las
dimensiones y, dentro de estas, los indicadores que, para cada unidad analizada,
representan puntos fuertes o débiles, constituyendo un relevante punto de partida
para los planificadores de la actividad turística en las zonas de turismo de naturaleza
en Cuba.
13. Se demuestra la validez del procedimiento de agregación para la construcción de
indicadores sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza en
Cuba.
116
CONCLUSIONES GENERALES
1. El desarrollo turístico sostenible plantea, principalmente, la necesidad de minimizar
los impactos negativos, ya sean sociales, económicos o patrimoniales; maximizar
los beneficios y la calidad de vida de las comunidades locales y lograr un amplio
disfrute por parte de los visitantes. Dentro este existen diversos criterios, algunos
contrapuestos, por lo que resulta complejo realizar su evaluación.
2. Dentro de los métodos existentes para la agregación, resaltan debilidades como la
doble contabilización de la información, la implicación con los usuarios, la
dificultad para interpretar sus valores, el modo de obtener la importancia relativa de
cada uno de los datos de partida y las decisiones adicionales a tomar dentro de su
proceso de cálculo; las cuales ocasionan que ninguno sobresalga como el más
acertado, y constituyen aspectos a tener en cuenta en la elaboración de nuevos
procedimientos de agregación.
3. La gestión del desarrollo turístico sostenible en Cuba carece de un procedimiento de
agregación, que permita obtener un único valor que englobe todas las dimensiones
de este concepto y tenga en cuenta las necesidades y aspiraciones de los implicados
en el proceso, determinar las fortalezas y debilidades en los destinos, y contribuya
con información útil al proceso de toma de decisiones.
4. El modelo de agregación propuesto posibilita determinar los indicadores iniciales,
tomando en consideración las necesidades de todos los implicados en el desarrollo
del turismo de naturaleza, representar los niveles deseados de consecución de los
117
objetvos planificados en determinado período, realizar un análisis por dimensiones,
y de forma general del concepto evaluado; dinamizar el proceso de cálculo, analizar
las relaciones entre los indicadores de partida, y presentar los resultados de manera
que garantice la mayor comprensión por parte de los usuarios finales.
5. Los resultados de la aplicación del procedimiento de agregación propuesto
constituyen importantes puntos de partida para los planificadores de la actividad
turística de naturaleza, por cuanto, permiten evaluar el desempeño social,
económico y patrimonial de cada una de las unidades analizadas, así como desde el
punto de vista global, e identificar los aspectos que generan un mejor/peor
comportamiento en cuanto a la sostenibilidad.
6. El empleo de los indicadores sintéticos globales contribuye significativamente al
perfeccionamiento y calidad del proceso de toma de decisiones en la planificación
del desarrollo sostenible del turismo de naturaleza, por cuanto, posibilitan identificar
las diferencias entre los aspectos que componen las dimensiones de dicho concepto
y, por consiguiente, reducir las asimetrías identificadas en cuanto al
aprovechamiento de las potencialidades existentes en cada territorio, de forma que
propicien un desarrollo armónico de esta modalidad turística.
118
RECOMENDACIONES
1. Que las entidades encargadas del manejo de la información turística (ONE,
MINTUR, CITMA) garanticen la disponibilidad de los datos de forma desagregada,
a fin de que se puedan desarrollar estudios para los cuales no sea necesario recurrir a
su estimación, permitiendo que los resultados obtenidos sean representativos de la
realidad existente.
2. Que el Ministerio del Turismo aplique el procedimiento propuesto en los procesos
de planificación del desarrollo de la actividad turística en los destinos de naturaleza.
3. Que el Ministerio del Turismo realice un estudio dinámico, a través de la aplicación
del procedimiento propuesto en diferentes períodos de la planificación, con el
propósito de evaluar el desempeño de cada una de las zonas de interés y garantizar
el desarrollo sostenible de las mismas.
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I
ANEXOS
Anexo 1: Procedimientos de normalización más empleados.
- Normalización mediante jerarquías, obteniendo las ordenaciones según el valor
absoluto de los indicadores iniciales, de forma que el valor normalizado del indicador
viene dado por la posición que tiene cada unidad en el ranking.
- Estandarización por z-scores, que consiste en expresar todos los valores en una escala
común con media cero y desviación típica uno.
- Normalización mediante una reescala (Min-Max) que se realiza llevando cada
indicador a tomar valores entre cero y uno utilizando para ello los valores máximos y
mínimos del indicador.
- Normalización mediante la fijación de una situación de referencia, en la que el valor
normalizado se halla a partir de la división del valor del indicador y de una unidad que
se tome como referencia.
- Normalización mediante escalas categóricas, que consiste en expresar los valores de
los indicadores en escalas comunes de tipo categórico, cuantitativas o cualitativas, en
función de cómo sea agregada la información y de cómo se interpreten los resultados.
- Métodos de normalización para los indicadores cíclicos, que se emplea cuando los
indicadores están expresados en series temporales. La transformación se puede
realizar restándole al valor absoluto la media a través del tiempo y dividiéndolo por el
promedio de los valores absolutos de las diferencias.
II
- Normalización por el porcentaje de las diferencias en años consecutivos, es decir, se
expresan los indicadores en los porcentajes de aumento o disminución con respecto a
un período de referencia.
Fuente: Booysen, (2002); OECD, (2003); Nardo et al., (2005a); Nardo et al., (2005b); OECD, (2008).
III
Anexo 2: Procedimientos de agregación.
a) Medida de distancia P2.
∑=
−− =−=m
jjjj
i
ij RRd
DP1
21
21,...,2,1.2 0con)1(
σ, donde
dij = es la distancia entre la unidad observada y una situación de referencia situada para
el j-ésimo indicador del sistema.
σj = es la desviación típica del indicador j.
R2j,,j-1, j-2,.…,1 = coeficiente de determinación múltiple de la regresión lineal del indicador
xj respecto a los xs indicadores del sistema, con { }1,.....,2,1 −−∈ jjs , siendo 021 =R .
b) Análisis Envovlvente de Datos
{ }
{ }mjw
nihXw
as
XwIS
ij
m
jhjij
m
jijijwi
ij
,......2,10
,..,,...2,11
..
max
1
1
∈∀≥
∈∀≤
=
∑
∑
=
=
Siendo:
ijw : Peso otorgado al indicador ijX en la unidad analizada.
IV
c) Procedimiento basado en Programación por Metas (PM).
{ }
( ) { }
{ } { }{ }{ }
[ ]1,0,......,10
,......,10,......,11,0
1
,.......,10
,.....,1
..
)()1(
1
1
1
∈
∈∀≥
∈∀≥∈∀∈
=
∈∀≤−+
∈∀=−+
++−=
∑
∑
∑
=
=
=
λ
λλ
mjp
mjnniY
Y
mjDpwnw
mjtNpnYXN
as
pwnwDISMin
j
j
i
n
ii
jpjj
nj
n
ijjjiij
jpj
m
jj
nji
donde:
iY = una variable binaria [0,1]; esto es, iY =1 si la alternativa se ha escogido, de otra
forma, iY = 0
jtN = el valor normalizado del nivel de aspiración fijado para el j-ésimo indicador.
jn = variable de desviación por defecto que cuantifica la falta de logro de la meta fijada
para el indicador j con respecto al nivel de aspiración.
jp = variable de desviación por exceso que cuantifica el sobrecumplimiento de la meta
fijada para el indicador j con respecto al valor de aspiración.
njw = el peso otorgado por el centro decisor que representa la importancia relativa del
cumplimiento de la meta del indicador j cuando jn es la variable no deseada (el j-ésimo
indicador es del tipo cuanto más mejor). De otra forma, 0=njw .
V
pjw es el peso otorgado por el centro decisor que representa la importancia relativa del
cumplimiento de la meta del indicador j cuando jp es la variable no deseada (el j-ésimo
indicador es del tipo cuanto menos mejor). De otra forma, 0=pjw .
D = la distancia máxima de cada unidad con respecto a la situación de referencia.
d) Métodos multicriterio no compensatorios (Munda y Nardo).
∑=
⎟⎠⎞
⎜⎝⎛ +=
m
jikjikjjk IwPwe
1)(
21)(
donde:
1=+ kiik ee
ikj Pw = Representa el peso del indicador j para el que Ui es preferida a Uk.
ikj Iw = Representa el peso del indicador j para el que Ui es indiferente a Uk y
Se define entonces R = { }sr , s = (1, 2,…,N!) al conjunto de todas las posibles
ordenaciones totales que se pueden obtener. Para cada ordenación rs, la puntuación
correspondiente será la sumatoria de todos los ike . Así, dicha puntuación se determina
como:
∑= ikr eϕ , donde !,.......2,1, Nski =≠ y sik re ∈
El ranking final r* es aquel que maximice la siguiente ecuación:
∑== jker max** ϕ
VI
Anexo 3: Estructura jerárquica para el indicador sintético obtenido mediante
AHP.
Indicador Sintético Global
ISi
Dimensión 1 ID1
Dimensión 2 ID2
Dimensión h IDh
Dimensión s IDs
Indicadores 1- 2- 3- 4- m-
Indicadores 1- 2- 3- 4- m-
Indicadores 1- 2- 3- 4- m-
Indicadores 1- 2- 3- 4- m-
UNIDADES ANALIZADAS
Fuente: Elaboración propia.
VII
Anexo 4: Comparación de los procedimientos de agregación.
Tabla 1 Comparación de los procedimientos de agregación analizados.
Factores de Incertidumbre Grado de dificultad asociado a la interpretación de los resultados
Normalización Determinación
del valor de los pesos
Decisiones adicionales
Interpretación de los
resultados
Implicación del usuario
final
Doble contabilización de información
Mismo Peso SÍ Interna NO Fácil Baja SÍ ACP SÍ Interna SÍ Compleja Baja NO DP2 NO Interna NO Fácil Baja NO
DEA: beneficio de la duda NO Interna SÍ Compleja Baja SÍ
MAUT SÍ Externa SÍ Fácil Alta SÍ AHP NO Interna SÍ Fácil Alta SÍ
PROMETHEE NO Externa SÍ Fácil Alta SÍ GP SÍ Externa SÍ Fácil Alta SÍ
Munda y Nardo NO Externa NO Fácil Baja NO Fuente: Blancas, 2009.
VIII
Anexo 5: Áreas ecoturísticas seleccionadas. Tabla 2 Àreas ecoturísticas Grupo I.
No. Provincia Área Ecoturística AP Est. Legal
PM OP Alguna Comerc
Observación
1 Pinar del Río Viñales PN Aprob X Si Patrimonio de la Humanidad y Sitios M Nac.
2 Pinar del Río Guanahacabibes PN Aprob X Si Enclavado en Reserva de la Biosfera
3 Pinar del Río San Ubaldo Sabanalamar
RFM Aprob X Si
4 Pinar del Río Sierra del Rosario APRM Aprob X Si Reserva de Biosfera
5 Ciudad de La Habana
Rincón de Guanabo
PNP Aprob X No
6 Matanzas Varahicacos RE Proc. X Si 7 Matanzas Cueva de Santa
Catalina END No X Si Monumento
Nacional 8 Matanzas Ciénaga de Zapata APRM Aprob X Si Incluye PN C. de
Zapata. R. Biosfera y Sitio Ramsar
9 Villa Clara Las Picuas RF Aprob X Si 10 Villa Clara Lanzanillo Pajonal
(Fragoso) RF Aprob X Si
11 Villa Clara Las Loras RF Aprob X Si Enclavada en R Biosfera B. Vista
12 Cienfuegos Guanaroca-Gavilanes
RF Aprob X Si
13 Cienfuegos Nicho NO ----- -- -- Si 14 Sancti Spíritus Caguanes PN Aprob X No Enclavada en R
Biosfera B. Vista 15 Sancti Spíritus Jobo Rosado APRM Aprob X Si 16 Camagüey Bosque Fósil de
Najasa END Aprob X Si
17 Camagüey Sierra del Chorrillo
APRM Aprob X Si
18 Camagüey Cayos Ballenato y manglares
RF Aprob X Si
19 Granma Delta del Cauto RF Aprob X No 20 Granma Desembarco del
Granma PN Aprob X Si Patrimonio de la
Humanidad 21 Granma Turquino PN Aprob X Si 22 Granma María del Portillo
NO ----- -- --- Si
IX
23 Santiago de Cuba
Siboney-Juticí RE Aprob X No Area Núcleo Reserva Biosfera Baconao
24 Guantánamo Hatibonico RE Aprob X 25 Guantánamo Alejandro de
Humbolt PN Aprob X Patrimonio de la
Humanidad, ubicada en R.B. Cuchillas del Toa
26 Isla de la Juventud
Los Indios RE No X Falta Resolución Csjo. Ministros.
27 Isla de la Juventud
La Cañada APRM Aprob X
Fuente: MINTUR, 2003b. Tabla 3 Àreas ecoturísticas Grupo II.
No. Provincia Área Ecoturística
AP Est. Legal
PM OP Acciones inmediatas.
1
P. del Río Mil Cumbres
APRM No
X
Definir su estatus legal. Requiere concluir algunos recursos de apoyo, como viales y terminar campamento
2
P. del Río San Felipe Los Indios
PN No
X
No compatibilizada la categoría de conservación. El P O no se corresponde con la categoría actual.
3 Matanzas Cañón del Río Canímar
PNP No X Definir estatus legal. Darle una concepción integral de área.
4 V. Clara Hanabanilla PNP No X Aprobar su estatus legal
5
V. Clara Cayo Majá RF No
-- --
No compatibilizada la categoría de conservación y en función de ello, definir estatus legal y elaborar PM
6 V. Clara Cayo Santa María
RF No Compatibilizar categoría y en función de ello estatus legal
7 Cienfuegos Guajimico Gavilanes
PNP No - - Aprobar estatus legal y elaborar plan de manejo
8 S. Spíritus Topes de Collantes
PNP No - X Aprobar estatus legal.
9 S. Spíritus Alturas de
Banao (Naranjal)
RE No - X
Aprobar estatus legal. Concluir algunos recursos de apoyo.
10 Loma de Cunagua
RF No - X Aprobar estatus legal.
11 Camagüey Río Máximo RF Si - - Aprobar diseño ecoturístico
12 Camagüey Tuabaquey,
Limones, S. de Cubitas
RE No - -
Aprobar estatus legal, definir administración.
X
13 Holguín Pico Cristal PN Si
X Falta concluir el total acondicionamiento para el uso público.
14 Santiago de Cuba
Gran Piedra PNP No X Aprobar estatus legal.
15
Gtánamo. Quibiján Duaba- Yunque de Baracoa
RE No
_ _
Aprobar estatus legal y definir administración
16 Isla de la Juventud
Punta Francés
PN No X
Aprobar estatus legal. No compatibilizada la administración.
Fuente: MITUR, 2003b. Tabla 4 Àreas ecoturísticas Grupo III. No. Provincia Area Ecoturística AP 1 Pinar del Río Sierra San Carlos RE 2 Pinar del Río Cañón del Río Santa Cruz END 3 La Habana Escaleras de Jaruco APRM 4 Matanzas Albufera Maya RF 5 Matanzas Cayo Mono- Galindo RE 6 Matanzas Bahía de Cádiz END 7 Villa Clara Los Caimanes PN 8 Cienfuegos Cueva Martín END 9 Ciego de Avila Centro y oeste de Cayo Coco RE 10 Ciego de Avila Jardines de la Reina PN 11 Camagüey Maternillo- Tortuguilla RE 12 Las Tunas Nuevas Grandes RE 13 Holguín Caletones RE 14 Holguín La Mensura PN 15 Holguín Cerros del Norte de Holguín END 16 Santiago de C La Bayamesa PN 17 Guantánamo Maisí RE 18 Guantánamo Cañón del Río Yumurí END 19 Guantánamo Baitiquirí RE 20 Isla de la Juventud Punta del este PN 21 Isla de la Juventud Cayo Largo RE Fuente: MINTUR 2003b. Leyenda: Est. Legal: Estatus Legal PM: Plan de Manejo OP: Plan Operativo Alguna Comerc.: Comercialización Adm. Administración F y F: Flora y Fauna CITMA: Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente
XI
RB: Reserva de la Biosfera AP: Área Protegida PN: Parque Nacional RFM: Reserva Florística Manejada APRM: Área Protegida de Recursos Manejados PNP: Paisaje Natural Protegido RE: Reserva Ecológica END: Elemento Natural Destacado RF: Reserva Florística NO: Sin grado de protección
XII
Anexo 6: Propuesta de indicadores MINTUR, Cuba. Tabla 6 Listado de indicadores CITMA-MINTUR
Indicador Medida Entidad que entregan la Información
Calidad de los cuerpos de agua marinos y terrestres
Norma Cubana 22/1999, 25/1999
Calidad de agua para consumo humano
Norma Cubana 93-03/1985 y 93-11/1986
INRH, Acueducto
Índice de consumo de agua M3/turista/días Instalación hotelera Cobertura de tratamiento del residual líquido
Número de establecimientos turísticos con sistema de tratamiento funcionando, entre el total de establecimientos (%)
Instalación hotelera
Carga Contaminante Carga Contaminante (Ton de DBO) dispuesta
Instalación hotelera
Vertimiento Número de instalaciones que cumplen la norma de Vertimiento (NC 27/99), entre total de establecimientos
Calidad del aire So2, NOx, SH2, composición de las partículas
Instituto de Meteorología
Eficiencia del sistema de manejo del residual sólido
Volumen Reciclado y Rehusado, entre el Volumen Total Generado (%)
Instalación hotelera
Índice de consumo energético
Kw/h/hab/día Kw/h/m2/año
Instalación hotelera
Índice de consumo de energía renovable
Total de Kw/h de energía renovable al año, entre el Total de energía consumida en el año (%)
Instalación hotelera
Desempeño Ambiental Número de Instalaciones con Reconocimiento Ambiental Nacional, entre Número total de instalaciones
CITMA
Control Ambiental Número de instalaciones turísticas que cumplan los programas de Monitoreo ambiental, entre el número total de instalaciones turísticas
CITMA e Instalación hotelera
Tasa de disminución de área forestal
Total del área deforestada, entre total del área forestal del destino
CITMA
Degradación del suelo Total de superficie de suelo afectada y no rehabilitada, entre el total de la superficie del destino
CITMA
Conservación del Ecosistema
Total de superficie con áreas naturales con acciones de protección, entre Total de superficie con áreas naturales Existencia de Plan de Manejo de las Áreas Protegidas, entre Áreas Protegidas (%) (ecoturismo)
CITMA
Biodiversidad # de establecimientos con inventario Instalación hotelera
XIII
Fuente: MINTUR, 2003a
de especies actualizado/ Total de establecimientos
Especies Focales # de establecimientos con evaluación actualizada de las especies focales/ Total de establecimientos en el destino
Instalación hotelera
Empleo turístico Número de trabajadores locales, entre el número total de trabajadores (%) Número de trabajadores nacionales, entre el número total de trabajadores (%)
Instalación hotelera
Índice de consumo de productos nacionales
Participación de la producción nacional en los consumos del turismo (%)
Instalación hotelera
Satisfacción del turista Número de turistas satisfecho, entre número total de turista (%)
Instalación hotelera
Ingresos Ingreso medio/turista día (USD) Instalación hotelera Utilidades Utilidad/turista día (miles de USD) Instalación hotelera Financiamiento en la Gestión y Protección Ambiental
Total de gastos en acciones y medidas de protección ambiental, entre total de inversiones
Instalación hotelera
Seguridad Número de delitos en los que están involucrados turistas, entre número total de turistas al año Número total de delitos en el destino, entre población total del destino
MININT
Instalaciones médicas Número por destino y # de servicios que ofrecen
MINSAP
Índice de escolaridad promedio
Número de trabajadores del nivel medio, entre el total de trabajadores; Número de trabajadores del nivel superior, entre el total de trabajadores (9no, 12vo, medio y superior)
Instalación hotelera
Autenticidad del diseño, ambientación y arquitectura
Número de instalaciones con diseño, ambientación y arquitectura local y nacional, entre el número total de instalaciones
Instalación hotelera
Indice de idoneidad # de trabajadores con idoneidad para sus funciones/ # total de trabajadores. Guías turísticos certificados/ # total de guías
Instalación hotelera
Presencia de espectáculos artísticos locales y nacionales
No. De instalaciones con espectáculos nacionales, entre No. Total de instalaciones
Instalación hotelera
XIV
Anexo 7: Procedimiento de agregación para la construcción de indicadores
sintéticos de sostenibilidad en las zonas de turismo de naturaleza.
Análisis Descriptivo
Sí
No
Procedimiento de Agregación para la Construcción de Indicadores Sintéticos de
Sostenibilidad
Premisas
Cuantificar los indicadores
Determinar los indicadores iniciales
Identificar y sensibilizar a los actores
Identificar las zonas
Consistencia
DCP Indicadores Sintéticos Dimensionales
IPM
DCPS
DCPE
DCPP
IPMS
IPME
IPMP
Indicador global: DEACP
Indicador global: DEAPM
Presentación de los Resultados
Fuente: Elaboración propia.
XV
Anexo 8: Pasos para la creación de los indicadores sintéticos y la necesidad de
aplicarlos.
Tabla 6 Lista de pasos para construir indicadores sintéticos.
Pasos Para qué se necesita
Paso 1. Obtener los valores de los indicadores de acuerdo a las fuentes de información existentes y los pesos que representan la importancia relativa de cada uno.
- Para crear una tabla resumen con las características de los datos; por ejemplo, disponibilidad, fuente, tipo de dato.
- Tener los valores de referencia de cada indicador incluido en el estudio.
Fijar con claridad los valores a los que se desea llegar, en dependencia de las condiciones del territorio en cuestión.
Paso 2. Comprobar si los indicadores seleccionados son suficientes para medir el fenómeno evaluado.
- Verificar si el conjunto se indicadores seleccionados son los adecuados para explicar en su totalidad la magnitud del fenómeno que se pretende medir.
Paso 3. Análisis de los valores de los indicadores y eliminación de la información duplicada.
- Para estimar los valores perdidos. - Para discutir la presencia de valores atípicos en la base de datos. - Eliminar las variables que sean explicadas por las ya existentes.
Paso 4. Cálculo de un indicador sintético para cada una de las dimensiones del concepto evaluado.
- Realizar un análisis de las unidades evaluadas con respecto a cada una de las dimensiones que abarca el concepto medido.
Paso 5. Cálculo de un índice global representativo del concepto que se pretende medir.
- Obtener un valor único que permita ubicar espacialmente la zona en cuando al concepto medido.
- Para tener la posibilidad de establecer una comparación entre los territorios seleccionados teniendo en cuenta la totalidad del concepto evaluado.
Paso 6. Presentación y diseminación de los resultados.
- Para identificar un conjunto de herramientas coherentes para realizar presentaciones a los implicados. - Para seleccionar la técnica de visualización que mejor permite ofrecer información. - Para presentar los resultados obtenidos con el indicador sintético de la manera más clara y precisa posible.
Fuente: Elaboración propia.
XVI
Anexo 9: Coeficiente de Alpha de Cronbach.
Coeficiente de Alpha de Cronbach (Cronbach, 1951). Evalúa cómo un conjunto de
indicadores mide un mismo concepto subyacente. Así, para un conjunto de m
indicadores que evalúan n unidades se define como:
( )⎟⎟⎟⎟⎟
⎠
⎞
⎜⎜⎜⎜⎜
⎝
⎛
−⋅⎟⎠⎞
⎜⎝⎛
−=
∑=
t
m
jj
c X
XVar
mm
var
)(1
11α
donde:
( )jXvar = es la varianza del indicador j.
Xj = suma para una misma unidad de todos los indicadores.
( )tXvar = varianza de la variable suma de indicadores.
Este mide la proporción de la variabilidad total de la muestra de los indicadores debida
a la correlación existente entre los mismos. Un valor cercano a 0 indica que los
indicadores del sistema son independientes, mientras que un valor cercano a la unidad
muestra una alta relación entre ellos.
XVII
Anexo 10: Procedimiento de cálculo de los indicadores sintéticos.
Indicador de Distancia por Componentes Principales (DCP).
- U: Conjunto inicial de n unidades, ),...,2,1,( nidondeU i = , evaluadas en m
indicadores simples ).....,,2,1( mjdondeI j = .
- ijX al valor que toma la i-ésima unidad cuando se evalúa en el j-ésimo indicador, con
ni ≤≤1 y mj ≤≤1 .
- ( )**2
*1 ,........,, jXXX Vector ideal, conformado por los valores de referencia máximos.
- ( )jXXX *2*1* ,........, Vector antiideal, conformado por los valores de referencia
mínimos.
a) Valores de referencia:
Vector ideal Vector antiideal
mjniXX ijj ≤≤≤≤− 11* mjniXX jij ≤≤≤≤− 11*
b) Normalización: ijXN Valor normalizado del j-ésimo indicador para la i-ésima unidad.
Por máximos Por mínimos
mjniXXXX
XNjj
ijjij ≤≤≤≤
−
−= 11
**
*
mjniXXXX
XNjj
jijij ≤≤≤≤
−
−= 11
**
*
c) Cálculo del DCP para la norma 1L :
∑ ∑= = ⎥
⎥⎦
⎤
⎢⎢⎣
⎡⎟⎟⎠
⎞⎜⎜⎝
⎛=
m
jqj
Q
qqiji CorrVEXNDCP
1 1
para i=1,2,….,n
donde:
n = número de unidades.
m = número de indicadores iniciales.
Q = número de componentes principales seleccionadas.
VEq = varianza explicada por la q-ésima componente.
Corrqj = correlación entre la q-ésima componente y el j-ésimo indicador inicial
XVIII
d) Cálculo del DCP para la norma ∞L :
Por máximos Por mínimos
nipara
CorrVEXNDCPQ
qqjqijji
,...,2,1
max1
=
⎥⎥⎦
⎤
⎢⎢⎣
⎡⎟⎟⎠
⎞⎜⎜⎝
⎛= ∑
=
nipara
CorrVEXNDCPQ
qqjqijji
,...,2,1
min1
=
⎥⎥⎦
⎤
⎢⎢⎣
⎡⎟⎟⎠
⎞⎜⎜⎝
⎛= ∑
=
e) Cálculo del DCP para cualquier métrica p:
pm
j
Q
qqjq
piji CorrVEXNDCP
1
1 1 ⎥⎥⎦
⎤
⎢⎢⎣
⎡
⎥⎥⎦
⎤
⎢⎢⎣
⎡⎟⎟⎠
⎞⎜⎜⎝
⎛= ∑ ∑
= =
Procedimiento de cálculo del indicador sintético de Programación por Metas
(IPM).
f) Niveles de aspiración:
0
0
≥⋅
≥⋅−
+
ββ
αα
conX
conX
k
j
Donde:
+jX representa el valor medio del j-ésimo indicador positivo y
−kX el valor medio del k-ésimo indicador negativo.
g) Establecimiento de las metas:
Indicadores Positivos: Indicadores Negativos:
0,0, =⋅≥
⋅=−+++++
++++
ijijijij
jijijij
pnpncon
XpnX α
+ijn : Variable de desviación por defecto.
+ijp : Variable de desviación por exceso.
0,0, =⋅≥
⋅=−+−−−−
−−−−
ikikikik
kikikik
pnpncon
XpnX β
−ikn : Variable de desviación por defecto.
−ikp : Variable de desviación por exceso.
XIX
h) Variables de desviación no deseadas:
Indicadores Positivos: Indicadores Negativos: +ijn −
ikp
i) Indicador de Programación por Metas Vectorial (IPMV):
Indicador de Programación por Metas Positivo (IPM+)
{ }∑ ∑∈ ∈
−
−
+
++ ∈∀
⋅+
⋅=
Jj Kk k
ikk
j
ijj niX
nw
X
pwIPM ,...,2,1
βα
Indicador de Programación por Metas Negativo (IPM-)
{ }∑ ∑∈ ∈
−
−
+
+− ∈∀
⋅+
⋅=
Jj Kk k
ikk
j
ijj niX
pw
X
nwIPM ,...,2,1
βα
j) Indicador Sintético de Programación por Metas Restrictivo )( RIPM :
⎪⎩
⎪⎨⎧
≠−
==
−−
−+
0
0
ii
iiR
IPMsiIPM
IPMsiIPMIPM
k) Indicador de Programación por Metas Neto (IPMN)
Indicador de Programación por Metas Neto (IPMN) −+ −= ii
Ni IPMIPMIPM
{ }∑ ∑∈ ∈
−
−−
+
++
∈∀⋅
−+
⋅
−=
Jj Kk k
ikikk
j
ijijjNi ni
X
pnw
X
npwIPM ,...,2,1
)()(
βα
Indicador Sintético Global DEACP y DEAPM
l)
)(,...,10
)(,...,111
1
dnegatividanodecondiciónmjw
iónnormalizacdenrestricciónkXw
asujeto
XwMaxIS
ij
m
jkj
ij
m
jij
ijwi
j
=∀≥
=∀≤
=
∑
∑
=
=
XX
Anexo 11: Comparación entre las nuevas metodologías DCP e IPM.
Tabla 7 Nuevas metodologías DCP e IPM. Comparación.
Aspecto \ Indicador DCP IPM Normalización Sí No Ponderación Interna Externa Decisiones adicionales No No
Facilidad de Interpretación de los resultados Menor Mayor
Implicación con el usuario Bajo Alto Doble contabilización de la información Menor Mayor
Fuente: Elaboración propia
XXI
Anexo 12: Propiedades de los indicadores sintéticos DEACP y DEAPM.
Los nuevos indicadores sintéticos se calculan mediante el Análisis Envolvente da Datos
(DEA), sobre las medidas dimensionales DCP e IPM, lo cual se traduce en la solución
de un problema de programación lineal para cada una de las unidades evaluadas, donde
los coeficientes de la función objetivo y de las restricciones son los indicadores
sintéticos dimensionales de las unidades bajo evaluación. Por ello, al tratarse de un
problema de programación lineal con todos los coeficientes de la función objetivo
positivos, siempre que la región factible no sea un conjunto nulo o vacío y la solución
no sea ilimitada se garantiza el cumplimiento de los postulados I, II, III, V, VI y VIII.
El indicador sintético DEACP cumple con la totalidad de los postulados; sin embargo,
el indicador sintético DEAPM cumple parcialmente la propiedad de invarianza, pues
ante un cambio de escala de los valores de los indicadores iniciales seleccionados, su
valor permanece constante, pero se ve afectado ante un cambio de origen.
Para demostrar el cumplimiento de este postulado en el indicador sintético DEAPM, es
necesario realizar el análisis en los valores de los cocientes entre las variables de
desviación y los niveles de aspiración, que son los que determinan el valor de la medida
sintética, pues el indicador sintético DEAPM para la i-ésima unidad se obtiene de la
solución del siguiente problema:
)(,...,10,,
)(,...,113
1
3
1
dnegatividanodecondiciónmjwww
iónnormalizacdenrestricciónkXw
asujeto
IPMwIPMwIPMwMaxIS
iP
iE
iS
jkj
ij
PiPE
iE
jS
iSwi
j
=∀≥
=∀≤
++=
∑
∑
=
=
donde:
XXII
PES IPMeIPMIPM , : Indicadores sintéticos dimensionales obtenidos por el IPM para
la i-ésima unidad.
iP
iE
iS wyww , : Pesos calculados por la i-ésima unidad para los indicadores sintéticos
dimensionales.
Como los indicadores sintéticos dimensionales son obtenidos a partir del IPMN, por
ejemplo, para el indicador IPMS la expresión de su cálculo, incluyendo los indicadores
correspondientes a la dimensión social, es como sigue:
{ }∑ ∑∈ ∈
−
−−
+
++
∈∀⋅
−+
⋅
−=
Jj Kk k
ikikk
j
ijijjNi ni
X
pnw
X
npwIPM ,...,2,1
)()(
βα
Por ello, para la comprobación de esta propiedad se realizará el análisis sobre uno de los
componentes del DEAPM, y la conclusión a que se llegue será aplicable a los
indicadores representativos de las otras dimensiones.
Inicialmente se comprueba el efecto del cambio de origen y/o escala sobre el valor
medio del indicador, que constituye el nivel de aspiración fijado en la presente
investigación, de modo que ante un cambio en el valor del j-ésimo indicador, el nuevo
valor de la meta quedaría como sigue:
j
n
jij
n
jij
j Xban
Xba
n
XbaX ⋅+=⋅+=
⋅+=
∑∑== 11'
)(
Como se aprecia, el valor medio del indicador queda afectado por el cambio de origen
y/o escala de los valores de los indicadores iniciales. Para comprobar la influencia de
este cambio en el cociente que determina el valor del indicador para cada unidad, se
supondrá que el indicador que se transforma es de tipo positivo. Además, se analizará
por separado el efecto del cambio de escala y origen, para garantizar mayor
comprensión.
XXIII
En el caso en que se cambie la escala del indicador positivo j la meta asociada quedaría
como sigue:
+++ ⋅⋅=−+⋅ jijijij XbpnXb α
Para aquellas unidades que superan el nivel de aspiración, la variable de desviación que
se tiene en cuenta es la variable de desviación por exceso, cuyo valor vendrá dado por:
)(++ ⋅−⋅= jijij XXbp α
De modo que el cociente entre el valor de esta variable de desviación y el nivel de
aspiración fijado para el j-ésimo indicador queda como sigue:
+
+
+
+
+
+
⋅
⋅−=
⋅⋅
⋅−⋅=
⋅⋅ j
jij
j
jij
j
ij
X
XX
Xb
XXb
Xb
p
α
α
α
α
α
)(
Así, ante un cambio de escala, el cociente que determina el valor del indicador sintético
se mantiene constante, con lo cual no se afecta el cálculo del indicador +IPM y, por
consiguiente, el valor del indicador sintético NIPM , lo que puede ser asumido también
para el DEAPM.
De igual forma, para aquellas unidades que presentan un valor del indicador inferior al
nivel de aspiración fijado, el valor del cociente entre las variables de desviación por
defecto y el nivel de aspiración que determina el valor del indicador sintético se
mantiene constante ante un cambio de escala, lo que garantiza que no se vea afectado el
valor del indicador sintético NIPM . El procedimiento para la demostración es análogo
al efectuado para los indicadores que tienen valores por encima del nivel de aspiración.
No obstante, los cambios de origen de los indicadores iniciales sí afectan el valor del
indicador sintético NIPM . En este caso, la meta asociada al indicador quedaría como:
( )+++ +⋅=−++ jijijij XapnXa α
XXIV
Así, para las unidades que presentan un valor del indicador superior al nivel de
aspiración, el cociente que determina el valor del indicador no mantiene su valor inicial:
+
+
+
+
+
+
⋅
⋅−≠
+⋅
⋅−+⋅−=
+⋅ j
jij
j
jij
j
ij
X
XX
Xa
XXa
Xa
p
α
α
α
αα
α )(
)1(
)(
Lo mismo ocurre para aquellas unidades que presentan un valor del indicador inferior al
nivel de aspiración. En ese sentido, el análisis realizado permite afirmar que al indicador
sintético NIPM no le afectan los cambios de escala de los indicadores iniciales pero sí
los cambios de origen, cumpliendo parcialmente la propiedad de invarianza. Sin
embargo, este incumplimiento puede resolverse tomando como niveles de aspiración los
valores normalizados, siguiendo la formulación presentada por Díaz-Balteiro y Romero
(Diaz-Balteiro y Romero, 2004b), tal como señala Blancas (2009).
Dicho esto, queda demostrado que los nuevos indicadores propuestos verifican las
condiciones propuestas con excepción de la propiedad de exhaustividad, lo cual queda
resuelto en uno de los pasos propuestos, mediante la realización de un análisis previo de
los datos, de modo que se pueda eliminar la duplicidad de información y seleccionar los
indicadores a incluir en las medidas sintéticas dimensionales. Además, durante la
segunda fase de agregación, en caso de que la medida obtenida solo se base en una
dimensión del concepto evaluado, el analista puede garantizar la inclusión de todas las
dimensiones añadiendo una restricción en la cual imponga una cota inferior a los
outputs virtuales; esto es, que cada una de las dimensiones del concepto estén incluidas
en el indicador sintético global.
Por otra parte se cumple parcialmente la propiedad de invarianza para el indicador
DEAPM. Este incumplimiento se puede resolver tomando como niveles de aspiración
en el cálculo del indicador sintético IPM, valores normalizados (Dias-Blteiro y Romero,
2004b).
XXV
Anexo 13: Zonas de desarrollo del turismo de naturaleza seleccionadas para el
estudio y su caracterización.
Tabla 8 Zonas de turismo de naturaleza seleccionadas.
Nº Nombre 1 Parque Nacional Guanahacabibes. 2 Parque Nacional Viñales (*) 3 San Diego de los Baños
4 Área Protegida de Recursos Manejados Reserva de la Biosfera Sierra del Rosario (Soroa-Las Terrazas). (*)
5 Área Protegida de Recursos Manejados Reserva de la Biosfera Ciénaga de Zapata. (*)
6 Paisaje Natural Protegido Hanabanilla. 7 Paisaje Natural Protegido Guajimico – Gavilanes. 8 Paisaje Natural Protegido Topes de Collantes. 9 Reserva Ecológica Alturas de Banao (El Naranjal). 10 Parque Nacional Caguanes. 11 Mayarí 12 Parque Nacional Desembarco del Granma. 13 Marea del Portillo. 14 Reserva de la Biosfera Baconao. 15 Parque Nacional Alejandro de Humboldt.
Fuente: Elaboración propia (*) Áreas incluidas en la Zona de Turismo Sustentable del Caribe.
Zona 1: Parque Nacional Guanahacabibes.
El Parque Natural está ubicado en la Península de Guanahacabibes en el municipio
Sandino, provincia Pinar del Río, la cual fue declarada Reserva de la Biosfera desde
1987. El Parque ocupa un área de 398,26 Km2, constituyendo la reserva forestal más
grande del país. De la capacidad de alojamiento existente en la zona, el 97% tiene
categoría igual o superior a tres estrellas. En la oferta de la zona sobresalen los senderos
ecoturísticos, avalados por unos 140 sitios arqueológicos y, el buceo, respaldado por
una plataforma marina constituida de ecosistemas de arrecifes de coral y el Centro
Internacional de Buceo María La Gorda, el de mayor reconocimiento en el país.
XXVI
Zona 2: Parque Nacional Viñales.
Parque Natural, situado en el municipio de mismo nombre en la Provincia de Pinar del
Río, declarado por la UNESCO, Paisaje Cultural Evolutivo Continuo. Posee una de las
cadenas de mogotes mejor representados de todo el país y uno de los más espectaculares
del mundo, que constituye su principal atractivo. Con una extensión de 114, 4 Km2,
concentra los más importantes sistemas de cuevas fluviales de Cuba, acompañado de
unos bosques descubiertos, de hasta 8 m de altura que rodea los tres hoteles con
categoría de 3 estrellas y un gran número de casas particulares que conforman el
servicio de alojamiento y posibilita el intercambio con los residentes locales.
Zona 3: San Diego de los Baños.
Se localiza en la parte centro oriental de la provincia de Pinar del Río, municipio Los
Palacios, en un entorno natural de gran belleza, flanqueado al norte por la Sierra de La
Güira y al este por el parque La Güira y la Cueva de Los Portales, de gran interés
histórico-natural. Este pueblo tiene uno de los balnearios de aguas minero medicinal
más importante de Cuba, conocido desde el año 1700 y el alojamiento corre a cargo del
Hotel Mirador, con categoría 3 estrellas. Entre las principales ofertas sobresalen el
senderismo, para la observación de la flora y la fauna locales, y las excursiones a
diferentes zonas de interés de la provincia.
Zona 4: Reserva de la Biosfera Sierra del Rosario (Soroa-Las Terrazas).
Área Protegida de Recursos Manejados declarada por su importancia, como Reserva de
la Biosfera, además. Cuenta con un área de 266,86 Km2, comprendidos entre los
municipios Candelaria, Bahía Honda y La Palma, por la Provincia de Pinar del Río y,
Artemisa, perteneciente a la Provincia La Habana. Para calcular los indicadores se
tomaron los datos del municipio Candelaria, por cuanto, es al que pertenecen las
instalaciones de alojamiento.
XXVII
Soroa cuenta con el mayor orquideario del País, con más de 20 mil plantas de 700
especies que lo convierten en un singular sitio. Por su parte, la Comunidad “Las
Terrazas” ocupa un espacio natural de unas 5 mil hectáreas, donde se desarrolla un
proyecto de economía rural sostenible, basado en la explotación turística racional de las
riquezas naturales. El 35% de las plazas en el alojamiento en la zona tiene categoría 4
estrellas, y las instalaciones fueron construidas respetando las condiciones naturales del
entorno.
Zona 5: Reserva de la Biosfera Ciénaga de Zapata.
Área Protegida de Recursos Manejados, constituye uno de los humedales más grandes y
valiosos del Caribe y el mayor del grupo insular de Las Antillas, el cual abarca un área
de 3874,34 Km2 y figura en la lista RAMSAR. La zona permite que se complementen el
turismo de sol y playa y el turismo de naturaleza. Cuenta con las mayores poblaciones
silvestres del cocodrilo cubano y un amplio grupo de aves endémicas. La oferta de
alojamiento está constituida por dos hoteles y, como lo más sobresaliente para el
disfrute se encuentra la laguna natural, ideal para la pesca y paseos en botes,
conjuntamente con 12 pequeñas islas comunicadas por un sistema de canales y puentes
que acogen al centro turístico de Guamá, único en el Caribe por su tipo de construcción
aborigen.
Zona 6: Hanabanilla.
Paisaje Natural Protegido de alto valor estético y paisajístico, con importantes recursos
de flora y fauna. Situado en el municipio Manicaragua, perteneciente a la provincia
Villa Clara, en el centro del País, dentro del macizo montañoso Guamuaya, o Sierra del
Escambray, como se le conoce popularmente. Cuenta con un lago artificial creado por el
cierre de dos ríos mediante presas, que constituye su principal atractivo, lo que lo
convierte en un paisaje singular en Cuba. En el lugar, la pesca de la trucha sobresale
XXVIII
como una de las actividades de mayor interés para los visitantes. La actividad de
senderismo incluye varias caminatas para la observación de la flora y la fauna, visitas a
viviendas rurales de la zona, recorridos por plantaciones de café, bosques de especies
maderables y saltos de agua. Las facilidades de alojamiento están dadas por el hotel
Hanabanilla, con categoría dos estrellas que goza de una excelente ubicación junto al
lago.
Zona 7: Guajimico – Gavilanes.
Paisaje Natural Protegido que se ubica en la zona sur de la provincia de Cienfuegos, en
el municipio Cumanayagua, con una extensión de 46,62 Km2, perteneciente también al
grupo montañoso Guamuaya, según su categoría de manejo es un Paisaje Natural
Protegido. En él se encuentra Villa Guajimico, una instalación hotelera con categoría 3
estrellas, situada en un paisaje conformado por la desembocadura del río La Jutía, lo que
permite perfectamente el disfrute del turismo de naturaleza, pues constituye una zona
ideal para el excursionismo. Además de su gran belleza paisajística, posee un área
marina con crestas arrecifales y pequeños humedales de gran importancia para el
mantenimiento del equilibrio de la diversidad biológica en toda la costa sur de
Cienfuegos.
Zona 8: Topes de Collantes.
Paisaje Natural Protegido perteneciente a la provincia de Sancti Spíritus, en el
municipio Trinidad, con una altura de 800 m. sobre el nivel del mar, en el mismo
corazón de la Sierra del Escambray. Constituye un pasaje de gran belleza y valor
científico para la botánica y la ecología cubana. Abarca un área de 294,25 Km2 en los
que habitan numerosas especies endémicas de la flora y la fauna. Distintas opciones
permiten disfrutar de la observación de la flora y la fauna, senderos interpretativos,
observación de aves, baños en pocetas naturales, saltos de agua y visitas a cuevas.
XXIX
Excelente sitio para el descanso, pues el 100% de la capacidad hotelera tiene categoría
de 3 y 4 estrellas, a lo que se le suman varios restaurantes que ofertan la tradicional
comida cubana.
Zona 9: Alturas de Banao (El Naranjal).
Reserva Ecológica localizada en el centro del País, en el municipio Sancti Spíritus, de la
provincia de mismo nombre, muy cercano a la ciudad de Sancti Spíritus. Estas alturas
están consideradas una localidad clásica de colectas botánicas del país por cuanto se
reporta la presencia de más de 900 especies vegetales. Además, se destaca gran
endemismo en cuanto a su fauna. El área posee un apreciable interés paisajístico
encontrándose en ella cascadas y otros atractivos accidentes geográficos, incluidas
algunas cuevas de fuerte desarrollo vertical. Sus 61,77 Km2 constituyen un lugar
especial para caminatas a través de los senderos. De la capacidad de alojamiento
disponible, 71% es de categoría de tres o cuatro estrellas.
Zona 10: Parque Nacional Caguanes.
Situado en la parte norte del centro del País, en el municipio Yaguajay, provincia Sancti
Spíritus, con una extensión de 204,88 Km2. Existen en este, más de 70 cuevas del tipo
Caguanes (localidad típica) con un alto valor espeleológico. Se puede apreciar Cayo
Caguanes, con solo 114 ha de extensión en las que se sitúan 35 cuevas, siendo uno de
los sitios con mayor densidad cavernaria del país y uno de los lugares más importantes
desde el punto de vista ecológico por estar ubicado en un manglar. Considerada una de
las principales ofertas turísticas de la región espirituana, Yaguajay cuenta con la Villa
San José del Lago, en la que se ofrece tratamiento con aguas termales a varias
enfermedades crónicas.
XXX
Zona 11: Mayarí
Municipio de la zona norte de la provincia de Holguín, en el que se encuentra Cayo
Saetía, declarado Paisaje Natural Protegido. Con sus 47,79Km2 es considerado el mayor
coto de caza del país y con amplia existencia de las más variadas especies. El islote
muestra más de la mitad del territorio poblado de bosques, lo cual sirve a su vez de
abrigo a una fauna diversa y decenas de variedades de aves migratorias. También cuenta
con una barrera coralina que bordea al cayo como uno de sus grandes atractivos. La
oferta de alojamiento la componen dos hoteles, uno en el mismo cayo, con categoría de
4 estrellas y otro en el área correspondiente al municipio, con categoría 2 estrellas.
Zona 12: Parque Nacional Desembarco del Granma.
Se localiza en el municipio Niquero, en la oriental provincia Granma, con una extensión
de 326,6 Km2. Es el primer sitio declarado por la UNESCO Patrimonio Natural de la
Humanidad en Cuba, en el año 1999. Entre los valores naturales del sitio se destaca el
hecho de ser el segundo y más conservado exponente mundial de los sistemas de
terrazas marinas. En su conjunto se puede catalogar al parque como un inmenso jardín
botánico. Tiene atractivos paisajes con cascadas, remansos de aguas y una gran
diversidad de la fauna. La oferta de alojamiento la compone el Hotel Niquero, con
categoría dos estrellas.
Zona 13: Marea del Portillo.
Localizado en la provincia Granma, en el municipio Pilón, representa la zona de mayor
potencial turístico de dicha provincia, muy cerca del Parque Nacional Desembarco del
Granma y del Parque Nacional Pico Turquino donde se encuentra la mayor altura de
Cuba: el Pico Turquino con 1974 metros de altura. Entre las opciones de los visitantes
aparecen los paseos a caballo, caminatas por senderos ecológicos que llevan a los saltos
de agua de los ríos Cilantro y Las Yaguas, recorridos en lancha, visitas a los cayos
XXXI
vecinos y la práctica de deportes náuticos. Una de las ofertas más tentadoras es que
desde allí se puede bucear por una preciosa barrera coralina. La zona tiene un área de
41,7 Km2 aproximadamente y el alojamiento corre a cargo del complejo Club Amigo
Marea del Portillo, con categoría cuatro estrellas.
Zona 14: Área Protegida de Recursos Manejados Baconao.
Reserva de la Biosfera situada en el municipio Santiago de Cuba, en la parte oriental de
la cordillera Sierra Maestra, en la franja que separa la Sierra Maestra del Mar Caribe,
desde las inmediaciones de la ciudad de Santiago de Cuba hasta la Laguna de Baconao
con una extensión de 848 Km2. Es un Área Protegida de Recursos Manejados que
comprende una densa vegetación y playas excelentes para el buceo, Baconao cuenta con
múltiples atracciones para el visitante: la observación de aves, paseos a caballo y
recorrido en botes. Cuenta con una infraestructura turística compuesta por hoteles y
villas, donde se organizan excursiones y largas caminatas que permiten escalar las
montañas que lo rodean y diferentes facilidades para la práctica del buceo. Tiene un
conjunto de hoteles para el disfrute de las modalidades de turismo de sol y playa y el
turismo de naturaleza de los cuales el 92% de la capacidad tiene categoría de más de
tres estrellas.
Zona 15: Parque Nacional Alejandro de Humboldt.
Situado en la región oriental de Cuba, con un área aproximada de 708 Km2 está
contenido en tres municipios de dos provincias diferentes: Moa, en Holguín, y Baracoa
y Yateras, en la provincia de Guatánamo, con el 90% de su capacidad de alojamiento
con categoría de más de tres estrellas, el Parque ha sido declarado por la UNESCO
Patrimonio Natural de la Humanidad y constituye el mayor polo de biodiversidad del
país, así como el más grande remanente de ecosistemas montañosos conservados de
Cuba.
XXXII
Anexo 14: Consulta a Especialistas.
Encuesta dirigida a los especialistas en el Turismo
A continuación se presenta un listado de criterios de medida de los indicadores de
sostenibilidad ofrecidos por organismos internacionales y varios autores. Seleccione, de
acuerdo a su experiencia, cuáles considera importantes para realizar un estudio de
sostenibilidad en las zonas de desarrollo del turismo de naturaleza en nuestro País.
Marque en la escala de valoración el grado de importancia que UD. considera, donde: 0
no lo considera importante y 10 es muy importante.
Organización a la que pertenece: Años de experiencia investigadora en el turismo:
XXXIII
Indicador/Criterio de medida o elemento de medición Escala de valoración 1 Empleo de residentes locales en la administración del sitio y operaciones turísticas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 2 Nivel de satisfacción de los residentes con el turismo. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 3 Número y capacidad de servicios sociales disponibles para la comunidad. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 4 Porcentaje de personas que opinan que el turismo ha ayudado a crear nuevos servicios o infraestructura. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 5 Porcentaje de personas que opinan que el turismo ha mejorado el nivel de vida de la comunidad. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 6 Duración media de la estancia. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 7 Percepción del impacto negativo del turismo en la comunidad. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 8 Porcentaje de mujeres/hombres con respecto al total de puestos de trabajo en el sector turístico. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
9 Porcentaje de sitios o estructuras que reúnen las condiciones para recibir la designación y son efectivamente designados. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
10 Cantidad de años de estudio del personal en establecimientos turísticos / personal total (en %). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 Calidad de los empleados en el turismo (Alojamiento, gastronomía y guías turísticos). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
12 Cantidad de puestos de trabajo en el turismo diseñado para ser ocupados solamente por mujeres/total de puestos de trabajo en el turismo. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
13 Valoración de los visitantes sobre la seguridad en el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 14 Nivel de satisfacción de los visitantes. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 15 Percepción de la relación calidad – precio del alojamiento en el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 16 Percepción de la relación calidad – precio de los restaurantes en el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 17 Porcentaje de visitantes que vuelven a visitar el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 18 Llegadas de turistas al mes o trimestre (Distribución a lo largo del año) (Mes de máx. afluencia). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 19 Proporción del número de turistas entre el mes de máx. y mín. afluencia. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 20 Tasas de ocupación al mes en alojamientos autorizados (oficiales) (distribución a lo largo del año). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 21 Número total de visitantes del parque y de los principales sitios. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 22 Porcentaje de ocupación total durante el trimestre (o mes) de máxima afluencia. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 23 Proporción entre turistas y población autóctona (mes de máxima aflulencia). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
24 Porcentaje de alojamientos y servicios abiertos todo el año (puede subdividirse, por ejemplo, en hoteles, atracciones, restaurantes, etc.).
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
25 Nº total de empleados en el turismo. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
XXXIV
26 Nº de empleados a tiempo parcial en el turismo 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 27 Proporción del empleo en el sector turístico respecto al empleo total. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 28 Número de residentes empleados en el sector turístico (y proporción entre hombres y mujeres). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 29 Satisfacción del empleado. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 30 Nº total de turistas recibidos (nacionales + internacionales). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 31 Cantidad de turistas nacionales registrados en establecimientos turísticos estatales /total de turistas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 32 Cantidad de turistas registrados en alojamiento privado/total de turistas que visitan la zona. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 33 Gasto medio diario por turista. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
34 Porcentaje de ingresos generados por el turismo con respecto a los ingresos totales generados en la comunidad. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
35 Cantidad de servicios recuperados o creados a partir del los ingresos por turismo/total de servicios. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 36 Número de atracciones diferentes en el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 37 Rentabilidad. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 38 Costos y Gastos por peso de ingreso. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 39 Utilidad por peso de ingreso. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 40 Concentración máx. y mín. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
41 Porcentaje de ejecución y cumplimiento del plan de ordenamiento territorial en el destino, de acuerdo con las metas trazadas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
42 Señalización (Señalética). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 43 Equipamientos. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 44 Calidad en los servicios. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 45 Calidad de los servicios públicos. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 46 Población turística asistida. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 47 Gama de servicios que ofrece el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
48 Cantidad de científicos e investigadores que realizan actividades de investigación para el desarrollo sostenible de la comunidad. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
49 Cantidad de rutas cubiertas/total de rutas necesarias. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 50 Porcentaje de proyectos que evalúan el impacto del turismo. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 51 Porcentaje de la comunidad local que trabaja en el sector turístico. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
XXXV
52 Extensión de las áreas protegidas de km2 (clasificadas según las categorías de la UICN). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 53 Consumo per. cápita de energía de todas las fuentes (general y por sector turístico, por persona-día). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 54 Porcentaje de consumo energético de fuentes renovables. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 55 Frecuencia de los fenómenos climatológicos. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 56 Total de CO2 producido a causa del consumo energético comunitario. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 57 Volumen total de agua consumida (y litros por turista y día). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 58 Porcentaje de la población local con acceso al agua tratada. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 59 Cantidad de residuos recogidos por persona al año. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 60 Volumen de residuos reciclados m3. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 61 Número de instalaciones de tratamiento de residuos. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 62 Extensión total de la red de carreteras. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 63 Erosión del suelo. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 64 Porcentaje del terreno dedicado al paisaje. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 65 Nº de turistas por m2 o Km2 de sitio. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 66 Número de especies únicas o raras presentes en el lugar (endémicas). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 67 Número de especies típicas de la zona presentes en el lugar. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 68 Número de especies endémicas en peligro de extinción. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 69 Porcentaje de la superficie del lugar habitada por especies raras o únicas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 70 Porcentaje de especies endémicas del lugar. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
71 Reconocimiento por los programas internacionales (Reserva de la Biosfera o sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO, Convención RAMSAR, etc.). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
72 Número de proyectos de investigación dedicados al desarrollo sostenible/numero total de proyectos. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 73 Cantidad de actividades representativas del patrimonio en la animación 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 74 Inventario de atracciones (características naturales sobresalientes: flora, fauna y paisajes) 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 75 Número de rutas de acceso en buenas condiciones para el uso turístico. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 76 Porcentaje de área protegida que ha sufrido erosión o degradación. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 77 Existencia de miradores (Nº). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 78 Evaluación del paisaje por los turistas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 79 Estado de los inventarios sobre la fauna, flora, construcciones, conocimientos. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
XXXVI
80 Superficie de zonas sensibles protegidas (en ha). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 81 Superficie de zonas sensibles explotadas con actividad turística (en ha). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 82 Nº de construcciones realizadas con técnicas tradicionales / conjunto de construcciones (en %). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 83 Oferta de actividades relacionadas con los recusos naturales. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 84 Valoración delos recursos culturales y el patrimonio por los turistas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 85 Existencia de una reglamentación especial (S / N). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 86 Cantidad de explotaciones agrícolas. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 87 Superficie de explotaciones agrícolas/Superficie total destinada para este fin (en ha). 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 88 Presión sobre el patrimonio. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 89 Preservación del sistema natural. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 90 Ambiente sociocultural. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 91 Satisfactorio intercambio cultural. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 92 Limpieza en el destino. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 93 Estímulo de la artesanía y la cultura local por parte del turismo. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
94 Grado de interés de la población local en la conservación del parque y en el desarrollo de turístico sostenible. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Fuente: Elaboración propia.
XXXVII
Anexo 15: Conjunto de indicadores seleccionados.
Tabla 9 Indicadores seleccionados para el estudio.
Nº Indicador Dimensión Signo
I1 Percepción de la población local respecto a si una mejora de las carreteras e infraestructuras de transporte es consecuencia del turismo. Social Positivo
I2 Percepción de la población local respecto a si una mejora de los servicios públicos es consecuencia del turismo. Social Positivo
I3 Proporción entre turistas y población autóctona (mes de máxima afluencia). Social Negativo
I4 Percepción de la población local sobre si los turistas tienen un efecto indeseable en el estilo de vida de la zona. Social Negativo
I5 Percepción de la población local respecto a que el turismo contribuye a mantener la población joven en el municipio. Social Positivo
I6 Número total de empleados locales en el turismo. Social Positivo
I7 Porcentaje de mujeres con respecto al total de puestos de trabajo en el sector turístico. Social Positivo
I8 Porcentaje de la comunidad local que trabaja en el sector turístico. Social Positivo
I9 Percepción de la población local sobre si aumenta el nivel de vida a causa del turismo. Social Positivo
I10 Valoración de los turistas sobre la seguridad en el destino. Social Positivo
I11 Valoración de los turistas de la calidad de los servicios públicos (iluminación, transporte, servicios en los bancos etc.). Social Positivo
I12 Percepción de la relación calidad – precio del alojamiento en el destino (Estatal y privado). Económico Positivo
I13 Percepción de la relación calidad – precio de los restaurantes en el destino. Económico Positivo
I14 Valoración de la calidad de los empleados en el turismo (Alojamiento, Gastronomía y Guías turísticos). Económico Positivo
I15 Grado medio de ocupación en alojamientos autorizados. Económico Positivo
I16 Proporción del número de turistas entre el mes de máxima y mínima afluencia. Económico Negativo
I17 Duración media de la estancia. Económico PositivoI18 Porcentaje de trabajadores contratados a tiempo parcial en el turismo. Económico NegativoI19 Oferta turística del destino. Económico Positivo
I20 Valoración por los turistas de la calidad de las rutas de acceso y la señalización de los atractivos. Económico Positivo
I21 Número total de turistas recibidos. Económico PositivoI22 Ingresos Netos Turísticos. Económico PositivoI23 Rentabilidad del destino Económico PositivoI24 Gasto medio diario por turista. Económico Positivo
I25 Porcentaje de ejecución y cumplimiento del plan de ordenamiento territorial en el destino, de acuerdo con las metas trazadas. Económico Positivo
XXXVIII
I26 Consumo de los portadores energéticos por turista y día. Patrimonial NegativoI27 Consumo energético de recursos renovables al año atribuible al turismo. Patrimonial PositivoI28 Volumen total de agua diario consumido por el turismo. Patrimonial NegativoI29 Porcentaje de la población local que tiene acceso al agua tratada. Patrimonial PositivoI30 Cantidad de residuos sólidos recogidos por día atribuible al turismo. Patrimonial NegativoI31 Reducción de residuos sólidos atribuibles al turismo. Patrimonial PositivoI32 Valoración de los turistas sobre la limpieza en el destino. Patrimonial PositivoI33 Extensión de las áreas de uso turístico. Patrimonial PositivoI34 Nº de turistas por Km2 de sitio. Patrimonial NegativoI35 Presión sobre el patrimonio. Patrimonial Negativo
I36 Valoración por los turistas de la oferta de actividades vinculadas con los recursos naturales del destino. Patrimonial Positivo
I37 Percepción de los pobladores sobre las afectaciones al medio ambiente y el deterioro de los espacios naturales provocado por los turistas. Patrimonial Negativo
I38 Percepción de la población local sobre si el turismo estimula de la artesanía y cultura locales. Patrimonial Positivo
I39 Valoración de los turistas sobre la conservación de los recursos culturales y el patrimonio en el destino. Patrimonial Positivo
Fuente: Elaboración propia.
XXXIX
Anexo 16: Cuestiones e indicadores deseados: Indicadores seleccionados y forma de calcularlos. Tabla 10 Medidas deseables para evaluar la sostenibilidad de los destinos turísticos, y forma de cálculo de los indicadores seleccionados.
Cuestión Indicador Teórico Forma de Calcularlo Nº Indicador Seleccionado Cálculo
I1
Percepción de la población local respecto a si una mejora de las carreteras e infraestructuras de transporte es consecuencia del turismo.
Cuestionario Residentes 3
Beneficios sociales asociados al turismo
-Nº de servicios sociales disponibles para la comunidad (porcentaje atribuible al turismo) -Porcentaje de personas que opinan que el turismo ha ayudado a creas nuevos servicios o infraestructuras. -Porcentaje de la arquitectura autóctona conservada
- Servicios sociales (por ejemplo, servicios médicos, escuelas) construidas con financiación de los ingresos del turismo. - Desarrollo general de la infraestructura gracias a la inversión turística o construcción de clínicas y escuelas sufragada por un hotel u operador turístico). - Opinión de la población autóctona sobre los servicios sociales.
I2
Percepción de la población local respecto a si una mejora de los servicios públicos es consecuencia del turismo.
Cuestionario Residentes 7
I3
Proporción entre turistas y población autóctona (mes de máxima afluencia)
sidentePoblaciónafluenciamáximadeMesdíasTuristas
Re)(
Efectos generales en la vida de la comunidad
-Proporción entre turistas y población autóctona (mes de máxima afluencia)
-Recuento del total de turistas -Tasa de ocupación en hoteles y
I4 Cuestionario Residentes 14Percepción de la
XL
población local sobre si los turistas tienen un efecto indeseable en el estilo de vida de la zona.
-Proporción entre turistas y población autóctona en eventos o ceremonias
alojamientos. -Porcentaje de residentes que han cambiado la ocupación tradicional por el turismo durante los últimos años;
I5
Percepción de la población local respecto a que el turismo contribuye a mantener la población joven en el municipio
Cuestionario Residentes 8
I6 Número total de empleados locales en el turismo
Suma de los empleados en el turismo
I7
Porcentaje de mujeres con respecto al total de puestos de trabajo en el sector turístico
turismoenempleadosdetotalNturismoenempleadasmujeresdeN
ºº
I8
Porcentaje de la comunidad local que trabaja en el sector turístico.
100*laboraledadenPoblación
TurismoenEmpleados
Beneficios económicos para la comunidad de destino:
-Número de residentes empleados en el sector turístico y proporción entre hombres y mujeres. -Proporción entre el empleo en el sector turístico y el empleo total. -Porcentaje de puestos de trabajo del sector turístico ocupados por residentes.
-Nº de empleados en el turismo -Cantidad de mujeres empleadas en el turismo -Cantidad de empleados en el turismo que residen en la zona
I9
Percepción de la población local sobre si aumenta el nivel de vida a causa del turismo
Cuestionario Residentes 6
Seguridad pública local
-Nivel de fuerzas de seguridad (policías por turista) -Número total de delitos denunciados en los que hay visitantes implicados
-Nº de delitos, -Nº de policías por turista, - Denuncias
I10 Valoración de los turistas sobre la seguridad en el destino
Cuestionario Turistas 8
XLI
-Percepción de los visitantes de la gravedad del problema de la delincuencia -Número de incidentes denunciados (y por turista y día).
registradas en los establecimientos turísticos -Cuestionario
I11
Valoración por los turistas de la calidad de los servicios públicos (iluminación, transporte, servicios en los bancos etc.)
Cuestionario Turistas 2
I12
Percepción de la relación calidad – precio del alojamiento en el destino (Estatal y privado)
Cuestionario Turistas 9, 10
I13 Percepción de la relación calidad – precio de los restaurantes en el destino
Cuestionario Turistas 11
Satisfacción de los turistas
-Percepción de la relación calidad-precio. -Reclamaciones recibidas. -Clasificación en guías/centros de viaje. -Nivel de satisfacción de los visitantes al marcharse
-Cuestionario con preguntas específicas sobre principales actividades y atracciones turísticas -Libros de quejas y sugerencias en los establecimientos.
I14
Valoración de la calidad de los empleados en el turismo (Alojamiento, Gastronomía y Excursiones)
Cuestionario Turistas 3, 4, 5
I15 Grado medio de ocupación en alojamientos autorizados.
100*sdisponibledíasesHabitacion
ocupadasdíasesHabitacion Estacionalidad
-Llegadas de turistas al mes (distribución a lo largo del año) -Proporción entre el número de turistas en el mes de máxima y
-Número de turistas por mes. - % de ocupación de los establecimientos por mes. I16
Proporción del número de turistas entre el mes de máxima y mínima afluenciaMínimademesfísiTuristas
afluenciaMáximademesfísiTuristascoscos
XLII
afluencia. (Ratio).
I17 Duración media de la estancia. cosfísiTuristas
díasTuristas
el de mínima actividad; -Tasas de ocupación al mes en alojamientos autorizados (oficiales) - Porcentaje de ocupación total durante el mes de máxima fluencia. - Proporción entre empleos a media jornada y empleos a jornada completa en el sector turístico
- Número de pernoctaciones por mes. - Cantidad de turistas en alojamientos particulares. - Trabajadores contratados a tiempo parcial.
I18
Porcentaje de trabajadores contratados por tiempo determinado en el turismo.
100*º
mindetºturismoenempleadosdetotalN
adoertiempoporscontratadodeN
Oferta Turística
-Suministro de toda la gama de servicios turísticos necesarios clasificados por tipos: Alojamiento, restauración, sitios del patrimonio cultural y natural, eventos, actividades) -Cantidad de establecimientos por capacidades/ categoría
-Nº y capacidad de hoteles, restaurantes, y entidades que brinda servicio al turismo. -Relación oficial de actividades que se ofertan en el destino.
I19 Oferta turística del destino
Suma de los hoteles, restaurantes y museos en los destinos.
Diseño de la infraestructura y accesibilidad
-Cuestionarios -Número y tamaño de los postes de señalización.
I20
Valoración por los turistas de la calidad de las rutas de acceso y la señalización de los
Cuestionario Turistas 6, 7
XLIII
-Extensión total de la red de carreteras
atractivos.
I21 Número total de turistas recibidos. Cantidad de Turistas Físicos
I22 Ingresos Netos Turísticos Ingresos Turísticos ONE 1398 (Fila 05)
I23 Rentabilidad del destino gastosyCostosimpuestosdeantesUtilidad
Comportamiento de la industria turística
-Gasto diario por visitante. - Ingresos generados por turismo - Fugas - Nº de turistas - Duración media de la estancia.
I24 Gasto medio diario por turista
1000*cosdíasTuristas
turístiIngresos
Territorio: Ordenamiento Territorial
Porcentaje de ejecución y cumplimiento del plan de ordenamiento territorial en el destino, de acuerdo con las metas trazadas
-Actividades que componen en plan de Ordenamiento territorial: Valor planificado y ejecutado en determinado período)
I25
Porcentaje de ejecución y cumplimiento del plan de ordenamiento territorial en el destino, de acuerdo con las metas trazadas
100*ReperíodoelenasplanificadsInversione
alessInversione
I26 Consumo de los portadores energéticos por turista y día díasTuristas
aguayfuerzaluzdeGasto ,
Gestión energética
-Consumo per cápita de energía de todas las fuentes (por persona-día) -Porcentaje de consumo energético de recursos renovables
-Porcentaje de la energía consumida en el sector turístico proveniente de fuentes renovables I27
Consumo energético de recursos renovables al año atribuible al turismo.
1* [Energía Renovable (tep)]
Disponibilidad y conservación del agua
-Agua utilizada: volumen total consumido y litros por turista y día -Ahorro de agua (porcentaje de agua
- Gasto diario de agua en los establecimientos que brindan servicios al turismo
I28 Volumen total de agua diario consumido por el turismo
2* [Agua Servida - Pérdida y Consumo no controlado]
XLIV
ahorrada, recuperada o reciclada)
Calidad del agua
-Cantidad de población que tiene acceso por lo menos a 20 litros de agua potable al día con relación al total de residentes en el destino. -Porcentaje de establecimientos turísticos donde el tratamiento del agua cumple las normas internacionales
-Existencia de programas para el mejoramiento del acceso al agua de la población residente -Frecuencia de aparición de enfermedades provocadas por el agua: -Porcentaje de visitantes que han comunicado enfermedades por este motivo durante su estancia
I29 Porcentaje de la población local que tiene acceso al agua tratada
% de población servida por las redes de acueducto
I30 Cantidad de residuos sólidos recogidos por día atribuible al turismo
3* [Residuos Sólidos recogidos Kg.]
Gestión y reducción de residuos producidos
-Volumen de residuos producidos por el destino. -Cantidad de residuos desparramados en la vía pública. -Residuos atribuibles al turismo.
- Recuento de basuras. - Volumen de residuos reciclados (m3)/ volumen total de residuos (m3) I31
Reducción de los residuos atribuibles al turismo.
100*ReReReRe
cogidossiduoscicladossiduos
Imagen de limpieza en el destino
-Cantidad de desechos recogidos en calles y zonas públicas. - Imagen de limpieza del destino
I32
Valoración de los turistas sobre la limpieza en el destino (Calles, aguas interiores y recursos naturales)
Cuestionario Turistas 17, 19, 20
XLV
(información basada en el cuestionario.
I33 Extensión de las áreas de uso turístico Km2 de sitio (áreas de disfrute turístico)
I34 Nº de turistas por Km2 de sitio (U) Área
turistasdetotalN º
Intensidad de uso
-Área o terreno dedicado al uso turístico.
I35 Presión sobre el patrimonio (U) patrimoniodenesinstituciodeN
turistasdeN
º365
º
I36
Valoración por los turistas de la oferta de actividades vinculadas con los recursos naturales del destino.
Cuestionario Turistas 18
Control de los impactos ambientales
-Emisión de gases de efecto Invernadero -Control de la contaminación del aire, suelo y agua. -Protección del paisaje a Flora y la fauna del sitio. -Existencia de una legislación en materia ambiental.
-Cantidad de dinero destinada al mantenimiento y conservación de los recursos naturales. -Porcentaje de sitio que ha cambiado (Pérdida o erosión del suelo, vegetación dañada, etc.)
I37
Percepción de los pobladores sobre las afectaciones al medio ambiente y el deterioro de los espacios naturales provocado por los turistas.
Cuestionario Residentes 15, 16
I38
Percepción de la población local sobre si el turismo estimula de la artesanía y cultura locales
Cuestionario Residentes 9
Valoración de las identidades y culturas locales
-Percepción de los turistas de la preservación de la autenticidad y conservación de las expresiones culturales.
I39
Valoración de los turistas sobre la conservación de los recursos culturales y el patrimonio en el destino
Cuestionario Turistas 13
Fuente: Elaboración propia.
XLVI
Costo total aproximado de este viaje a Cuba CUC Gasto diario aproximado por persona en el destino de naturaleza (Alojamiento, gastronomía y otros servicios)
CUC
Las cuestiones siguientes van encaminadas a evaluar la calidad de un grupo de aspectos, exclusivamente en el destino de turismo de naturaleza que usted visita. Por favor, háganos saber sus consideraciones empleando la siguiente escala:
1 2 3 4 5
1. La calidad de los equipamientos de uso público (Ej. equipamientos sanitarios, disponibilidad de aparcamientos seguros).
1 2 3 4 52. La calidad de los servicios en el destino (Ej. Iluminación, transporte, servicios en los bancos, oficinas de turismo).
1 2 3 4 53. La calidad de los empleados en los servicios turísticos de alojamiento.
1 2 3 4 54. La calidad de los empleados en los servicios turísticos de gastronomía (Restaurantes, Cafeterías, Bares)
1 2 3 4 55. Calidad de los guías turísticos (Senderismo, observación de aves) 1 2 3 4 56. La señalización de los atractivos turísticos. 1 2 3 4 5
Mujer Edad Superior Género Hombre País Medio Alojado en el destino Visitante
Nivel de Estudios
Básico
Marque con una X el tipo de alojamiento utilizado en dependencia del tipo de destino visitado. Hoteles Casas particulares Destinos de Sol y Playa Destinos de Naturaleza Destinos de Ciudad
Número de sitios visitados Destinos de Sol y Playa Destinos de Naturaleza
Destinos de Ciudad
Número de veces que ha visitado este destino de naturaleza Cantidad de personas con las que viaja Diga si estos son: (Marque con una X) Familia Amigos Familia y amigos
Motivo del viaje: Turismo Negocios Trabajo Visita a familiares Estudios
(1) Pésima (2) Mala (3) Aceptable (4) Buena (5) Muy buena
Anexo 17: Encuesta a los turistas.
Continúe por detrás
XLVII
7. Calidad de las carreteras de acceso al destino. 1 2 3 4 58. La seguridad en el destino. 1 2 3 4 59. La relación calidad-precio de los hoteles en el destino.
1 2 3 4 510. La relación calidad-precio del alojamiento privado en el destino 1 2 3 4 511. La relación calidad-precio de los restaurantes en el destino. 1 2 3 4 512. La oferta de actividades culturales en el destino
1 2 3 4 513. El grado de conservación de los recursos culturales (patrimonio) del destino. 1 2 3 4 514. La oferta de artesanía local en el destino 1 2 3 4 515. Calidad de la oferta turística en el destino. 1 2 3 4 516. El trato de la población local en el destino. 1 2 3 4 517. La limpieza del destino (calles y lugares públicos).
1 2 3 4 518. La oferta de actividades vinculadas con los recursos naturales del destino.
1 2 3 4 519. La conservación de las áreas y recursos naturales en el destino. 1 2 3 4 520. Limpieza de las aguas interiores (ríos, lagos) del destino.
Gracias por su cooperación.
XLVIII
Municipio: ____________________________________
En caso de ser trabajador estatal, especifique la categoría ocupacional (Marque con una
X):
Obrero_____, Técnico_____, De administración____, Servicios____, Dirigente____
En caso de ser trabajador por cuenta propia, indique su oficio o empleo:
________________
¿Algún familiar cercano trabaja en el sector del turismo? Sí____ No____
Las siguientes afirmaciones versan sobre sus percepciones sobre el turismo en su
municipio. Por favor, indique si usted está
con cada una de ellas.
No hay ninguna respuesta correcta o incorrecta, tan solo dé la respuesta que mejor
expresa su opinión. Muchas gracias.
1 2 3 4 51. El turismo genera puestos de trabajo principalmente para los residentes locales.
1 2 3 4 52. Los equipamientos públicos urbanos (aparcamientos, jardines, sanidad, etc.) son mejores y/o mayores por vivir en un destino turístico
1 2 3 4 53. Las carreteras e infraestructuras de transportes son mejores y/o mayores por vivir en un destino turístico
1 2 3 4 54. Los precios del municipio han aumentado a consecuencia del turismo 1 2 3 4 5
Estudiante Trabajador estatal Trabajador estatal en turismo Trabajador por cuenta propia
Ocupación
Trabajador por cuenta propia en turismo Jubilado Ama de casa
Superior (universitario) Medio (12 grado)
Nivel de
estudios Primaria (6to. Grado)
Femenino Género Masculino Edad años
(1) Muy en desacuerdo (2) En desacuerdo (3) Ni de acuerdo
ni en desacuerdo (4) De acuerdo (5) Muy de acuerdo
Anexo 18: Encuesta a residentes.
XLIX
5. El turismo solo beneficia a un pequeño grupo de la población local. 1 2 3 4 56. El turismo ha mejorado el nivel de vida de la población local
1 2 3 4 57. Los servicios públicos (farmacias, seguridad, bancos) tienen buena
calidad, en parte, gracias al turismo.
1 2 3 4 58. El turismo contribuye a mantener a la población joven en el municipio. 1 2 3 4 59. El turismo estimula la artesanía y la cultura locales.
1 2 3 4 510. Los medios culturales (cines, teatros) y recreativos: (polideportivos) son mejores y/o mayores por vivir en un destino. 1 2 3 4 511. El turismo ha incentivado la restauración del patrimonio local 1 2 3 4 512. El intercambio cultural con los turistas es una buena experiencia. 1 2 3 4 513. El turismo es el causante de los cambios en la cultura tradicional
1 2 3 4 514. Los turistas provocan un efecto indeseable en el estilo de vida del municipio
1 2 3 4 515. El turismo provoca efectos nocivos al medio ambiente en el municipio
1 2 3 4 516. El turismo ha incentivado la promoción y recuperación de los espacios naturales del municipio
1 2 3 4 517. El desarrollo turístico ha empeorado el entorno paisajístico del municipio
Gracias por su colaboración.
L
Anexo 19: Cálculo del tamaño de muestra.
:
222
22
donde
SkNSNkn
+=
δ
N es la población
k = 2
1α
−Z
S2 es la cuasivarianza poblacional.
δ es el error absoluto. Tabla 11 Tamaños de muestra para los turistas y los pobladores.
Tamaño de muestra Zonas Turistas Residentes Parque Nacional Guanahacabibes 136 192 Parque Nacional Viñales 295 273 San Diego de los Baños 18 309 Soroa- Las Terrazas 363 121 Ciénaga de Zapata 73 380 Hanabanilla 4 66 Guajimco 37 178 Topes de Collantes 304 172 Alturas de Banao 7 307 Parque Nacional Caguanes 178 251 Hacienda Cayo Saetía 16 155 Parque Nacional Desembarco del Granma 15 251 Marea del Portillo 2 228 Baconao 136 251 Baracoa 163 210 Fuente: Elaboración propia.
LI
Anexo 20: Estadísticos descriptivos de cada dimensión. Tabla 12 Estadísticos descriptivos dimensión social.
Nº Mínimo Máximo Media Desv. Típica.
Coeficiente de Variación Asimetría Curtosis
I1 2,00 4,13 2,79 0,67 0,241 0,80 -0,49 I2 2,00 3,70 2,49 0,41 0,167 1,77 4,86 I3 0,00 1,19 0,20 0,32 1,574 2,38 6,28 I4 1,65 2,28 1,96 0,20 0,101 0,25 -1,14 I5 2,05 3,43 2,80 0,37 0,131 -0,06 0,11 I6 31,00 4 278,00 643,60 1 050,93 1,633 3,33 12,01 I7 24,24 54,89 39,06 9,21 0,236 0,15 -0,62 I8 0,13 14,52 1,95 3,63 1,859 3,37 12,06 I9 2,33 4,03 3,18 0,48 0,151 -0,45 -0,18 I10 3,07 4,27 3,83 0,35 0,093 -0,88 0,22 I11 2,00 4,06 3,23 0,45 0,138 -1,00 4,33
Fuente: Elaboración propia.
Tabla 13 Estadísticos descriptivos dimensión económica.
Nº Mínimo Máximo Media Desv, Típica,
Coeficiente de Variación Asimetría Curtosis
I12 2,66 3,92 3,55 0,32 0,091 -1,67 3,29 I13 2,49 4,00 3,36 0,43 0,127 -0,65 0,60 I14 2,98 4,41 3,75 0,35 0,09 -0,41 0,95 I15 5,14 74,54 32,00 21,15 0,661 0,48 -0,67 I16 2,26 12,44 5,34 2,76 0,517 1,34 1,88 I17 1,21 8,50 2,63 2,07 0,786 2,23 4,51 I18 0,00 13,72 3,66 5,18 1,416 1,01 -0,76 I19 2,00 22,00 8,93 6,45 0,722 0,79 -0,55 I20 2,13 3,36 3,03 0,34 0,112 -1,56 2,49 I21 826,00 140 098 21 025,47 35 397,07 1,684 3,08 10,38 I22 375,50 12 855,10 2 890,78 3 272,35 1,132 2,25 5,98 I23 0,05 1,06 0,47 0,27 0,573 0,53 0,39 I24 37,16 366,64 133,48 119,83 0,898 1,12 -0,45 I25 51,72 98,95 70,34 14,14 0,201 0,62 -0,26
Fuente: Elaboración propia.
LII
Tabla 14 Estadísticos descriptivos dimensión patrimonial.
Nº Mínimo Máximo Media Desv, Típica,
Coeficiente de Variación Asimetría Curtosis
I26 3,47 47,39 14,58 13,86 0,951 1,40 0,97 I27 0,24 133,79 16,68 33,56 2,012 3,46 12,57 I28 0,68 299,85 41,27 74,65 1,809 3,36 12,10 I29 38,50 87,50 67,99 15,00 0,221 -0,72 -0,80 I30 2,07 484,24 85,49 124,09 1,451 2,66 8,11 I31 0,33 42,28 10,61 13,28 1,252 1,46 1,18 I32 3,02 4,40 3,79 0,36 0,095 -0,33 0,48 I33 14,38 3 874,34 493,70 966,93 1,959 3,47 12,68 I34 2,53 476,12 123,09 149,07 1,211 1,38 0,96 I35 1,13 118,35 29,44 37,94 1,289 1,59 1,35 I36 3,07 4,45 3,77 0,38 0,100 -0,14 -0,34 I37 1,05 1,71 1,56 0,16 0,104 -2,47 7,54 I38 1,85 4,36 3,36 0,72 0,213 -0,67 -0,03 I39 2,60 4,24 3,37 0,38 0,113 0,22 1,44
Fuente: Elaboración propia.
LIII
Anexo 21: Cálculo del coeficiente de competencia de los expertos.
La competencia fue medida de acuerdo al coeficiente de competencia de cada experto
(Kcomp), formado a partir del coeficiente de conocimiento (Kc) y el coeficiente de
argumentación o fundamentación (Ka) de la siguiente forma:
( )accomp KKK +=21 ,
donde:
Kc: Coeficiente de conocimiento que tiene el experto sobre la temática que se analiza,
determinado a partir de su propia autovaloración.
Ka: Coeficiente de argumentación a partir de la información brindada por el experto
sobre el grado de influencia (alto, medio, bajo) que tiene, según su criterio, cada una de
las fuentes señaladas.
De forma tal que:
Si 0.8 ≤ Kcomp ≤ 1.0 el coeficiente de competencia se considera alto.
Si 0.5 ≤ Kcomp < 0.8 el coeficiente de competencia se considera medio.
Si Kcomp < 0.5 el coeficiente de competencia se considera bajo.
LIV
Anexo 22: Primer cuestionario consulta a expertos. Estimado(a) experto (a): El presente cuestionario tiene como finalidad determinar los pesos que representan la
importancia relativa de un grupo de indicadores (criterios de medida) que serán
empleados para estableces una comparación de las zonas en las que se desarrolla el
turismo de naturaleza en Cuba. Este conjunto de indicadores que se relacionan fueron
obtenidos a través de una consulta realizapa a especialistas y participantes es una de los
talleres de sostenibilidad celebrados el pasado año 2008.
A modo de información indique:
1.Años de trabajo o investigación en temas relacionados con la de sostenibilidad: ___
2.Ofrezca una valoración de 0 a 10 acerca de sus conocimientos sobre el tema: ____
La primera tabla va encaminada a determinar cuál de las fuentes Ud. considera que más
ha influido en sus conocimientos sobre el tema; (solo debe marcar con una X la que
considere).
Tabla 1. Fuentes de argumentación. Fuentes de argumentación Grado de influencia de cada una de las
fuentes en sus criterios A (Alto) M (Medio) B (Bajo) Análisis teóricos realizados por usted Su experiencia en el tema Trabajos de autores nacionales consultados Trabajos de autores extranjeros consultados Su propio conocimiento del estado del problema en Cuba.
Su intuición En la tabla siguiente, indique con un valor entre 0 y 10 (ambos incluidos), la
importancia que, a su consideración, tiene cada indicador.
Donde:
0: Ausencia de importancia.
10: La mayor importancia recibida.
LV
Nº Indicador Seleccionado Importancia [0, 10]
I1 Percepción de la población local respecto a si una mejora de las carreteras e infraestructuras de transporte es consecuencia del turismo.
I2 Percepción de la población local respecto a si una mejora de los servicios públicos es consecuencia del turismo.
I3 Proporción entre turistas y población autóctona (mes de máxima afluencia)
I4 Percepción de la población local sobre si los turistas tienen un efecto indeseable en el estilo de vida de la zona.
I5 Percepción de la población local respecto a que el turismo contribuye a mantener la población joven en el municipio
I6 Número total de empleados locales en el turismo
I7 Porcentaje de mujeres con respecto al total de puestos de trabajo en el sector turístico
I8 Porcentaje de la comunidad local que trabaja en el sector turístico.
I9 Percepción de la población local sobre si aumenta el nivel de vida a causa del turismo
I10 Valoración de los turistas sobre la seguridad en el destino
I11 Valoración por los turistas de la calidad de los servicios públicos (iluminación, transporte, bancos etc.)
I12 Percepción de la relación calidad – precio del alojamiento en el destino (Estatal y privado)
I13 Percepción de la relación calidad – precio de los restaurantes en el destino
I14 Valoración de la calidad de los empleados en el turismo (Alojamiento, Gastronomía y Guías turísticos)
I15 Grado medio de ocupación en alojamientos autorizados.
I16 Proporción del número de turistas entre el mes de máxima y mínima afluencia. (Ratio).
I17 Duración media de la estancia.
I18 Porcentaje de trabajadores contratados por tiempo determinado en el turismo.
I19 Oferta turística del destino
I20 Valoración por los turistas de la calidad de las rutas de acceso y la señalización de los atractivos.
I21 Número total de turistas recibidos. I22 Ingresos Netos Turísticos I23 Rentabilidad del destino I24 Gasto diario por turista
I25 Porcentaje de ejecución y cumplimiento del plan de ordenamiento territorial en el destino, de acuerdo con las metas trazadas
I26 Consumo de los portadores energéticos por turista y día
I27 Consumo energético de recursos renovables al año atribuible al turismo.
I28 Volumen total de agua diario consumido por el turismo I29 Porcentaje de la población local que tiene acceso al agua tratada
LVI
I30 Cantidad de residuos sólidos recogidos por día atribuible al turismo I31 Reducción de los residuos atribuibles al turismo.
I32 Valoración de los turistas sobre la limpieza en el destino (Calles, aguas interiores y recursos naturales)
I33 Extensión de las áreas de uso turístico I34 Nº de turistas por Km2 de sitio (U) I35 Presión sobre el patrimonio (U)
I36 Valoración por los turistas de la oferta de actividades vinculadas con los recursos naturales del destino.
I37 Percepción de los pobladores sobre las afectaciones al medio ambiente y el deterioro de los espacios naturales provocado por los turistas.
I38 Percepción de la población local sobre si el turismo estimula de la artesanía y cultura locales
I39 Valoración de los turistas sobre la conservación de los recursos culturales y el patrimonio en el destino
LVII
Anexo 23: Comparación de los pesos de los indicadores. Tabla 15. Pesos obtenidos mediante el DCP y la consulta a expertos.
Indicadores Pesos DCP Pesos Delphi I1 0,03072 0,01987 I2 0,02778 0,01811 I3 0,02856 0,01494 I4 0,01577 0,02219 I5 0,02071 0,02127 I6 0,02232 0,03046 I7 0,02536 0,02558 I8 0,02471 0,02725 I9 0,02691 0,03009 I10 0,02681 0,03835 I11 0,01488 0,03128 I12 0,01260 0,03169 I13 0,01658 0,02769 I14 0,01564 0,03058 I15 0,03209 0,02579 I16 0,02400 0,02036 I17 0,03400 0,02235 I18 0,01808 0,02072 I19 0,03295 0,02662 I20 0,01215 0,02996 I21 0,03315 0,02663 I22 0,02936 0,02873 I23 0,02235 0,03455 I24 0,03200 0,03403 I25 0,01298 0,02790 I26 0,03620 0,02787 I27 0,04081 0,02452 I28 0,04109 0,02873 I29 0,02271 0,02474 I30 0,04085 0,01529 I31 0,01731 0,02170
LVIII
I32 0,01880 0,01843 I33 0,02604 0,01578 I34 0,03696 0,01597 I35 0,03485 0,02474 I36 0,02503 0,03428 I37 0,01606 0,02503 I38 0,02243 0,02497 I39 0,02841 0,03095
Fuente: Elaboración propia.
LIX
Anexo 24: Indicadores sintéticos dimensionales DCP e IPM. Tabla 16 Indicadores sintéticos DCP e IPM para la dimensión social. Nº Zonas DCP Zonas IPM Insost.1 Baconao 0,628 Ciénaga de Zapata 7,54 3 2 Ciénaga de Zapata 0,566 Baconao 7,13 1 3 Mayarí 0,565 Alturas de Banao 1,95 2 4 P. N. Caguanes 0,565 Mayarí 1,69 2 5 P.N.Alejandro de Humboldt 0,562 P. N. Viñales 1,65 3 6 Alturas de Banao 0,527 P.N.Alejandro de Humboldt 1,56 1 7 Hanabanilla 0,522 Soroa-Las Terrazas 1,28 2 8 P. N. Viñales 0,516 Topes de Collantes 1,2 1 9 P.N.Guanahacabibes 0,504 P. N. Caguanes 1,16 2 10 P.N.Desembarco del Granma 0,501 Marea del Portillo 0,77 3 11 Soroa-Las Terrazas 0,492 Hanabanilla 0,64 2 12 Marea del Portillo 0,486 P.N.Guanahacabibes 0,33 3 13 Topes de Collantes 0,463 P.N.Desembarco del Granma 0,17 3 14 San Diego de los Baños 0,441 San Diego de los Baños -0,36 4 15 Guajimico 0,411 Guajimico -0,86 5 Fuente: Elaboración propia.
Fuente: elaboración propia
Figura 1 comparación de las ordenaciones en la dimensión social..
LX
0
2
4
6
8
10
12
14
16
0,8 0,87 0,94 1,01 1,08 1,15 1,22 1,29 1,36 1,43 1,5
Niveles de exigencia
Posic
ione
sP.N.Guanahacabibes
P. N. Viñales
San Diego de los Baños
Soroa-Las Terrazas
Ciénaga de Zapata
Hanabanilla
Guajimico
Topes de Collantes
Alturas de Banao
P. N. Caguanes
Mayarí
P.N.Desembarco del Granma
Marea del Portillo
Baconao
P.N.Alejandro de Humboldt
Fuente: Elaboración propia
Figura 2 gráfico de metas para la dimensión social.
Tabla 17 Indicadores sintéticos DCP e IPM para la dimensión económica. Nº Zonas DCP Zonas IPM Insost.1 Topes de Collantes 0,554 Topes de Collantes 10,1 3 2 Baconao 0,529 P.N.Alejandro de Humboldt 5,11 1 3 P.N.Alejandro de Humboldt 0,508 Ciénaga de Zapata 4,26 4 4 P.N.Guanahacabibes 0,437 Baconao 3,83 4 5 Ciénaga de Zapata 0,430 P.N.Guanahacabibes 2,9 4 6 Marea del Portillo 0,398 P. N. Viñales 2,51 3 7 P. N. Viñales 0,396 Alturas de Banao 1,94 3 8 Soroa-Las Terrazas 0,394 Marea del Portillo 1,79 4 9 Alturas de Banao 0,386 Soroa-Las Terrazas 1,69 5 10 Hanabanilla 0,380 Hanabanilla 1,48 5 11 P.N.Desembarco del Granma 0,379 P.N.Desembarco del Granma 0,78 6 12 P. N. Caguanes 0,358 Mayarí 0,67 7 13 Mayarí 0,348 San Diego de los Baños 0,36 7 14 San Diego de los Baños 0,332 P. N. Caguanes -0,07 8 15 Guajimico 0,292 Guajimico -1,3 7 Fuente: Elaboración propia.
LXI
Fuente: Elaboración propia.
Figura 3 comparación de las ordenaciones en la dimensión económica.
0
2
4
6
8
10
12
14
16
0,8 0,87 0,94 1,01 1,08 1,15 1,22 1,29 1,36 1,43 1,5
Niveles de Exigencia
Posi
cion
es
P.N.GuanahacabibesP. N. ViñalesSan Diego de los BañosSoroa-Las TerrazasCiénaga de ZapataHanabanillaGuajimicoTopes de CollantesAlturas de BanaoP. N. CaguanesMayaríP.N.Desembarco del GranmaMarea del PortilloBaconaoP.N.Alejandro de Humboldt
Fuente: Elaboración propia.
Figura 4 gráfico de metas para la dimensión económica.
LXII
Tabla 18 Indicadores sintéticos DCP e IPM para la dimensión patrimonial. Nº Zonas DCP Zonas IPM Insost.1 Baconao 0,712 Baconao 5,76 2 2 Mayarí 0,661 Ciénaga de Zapata 3,76 3 3 P.N.Desembarco del Granma 0,659 P. N. Caguanes 3,57 4 4 P.N.Guanahacabibes 0,657 Mayarí 2,6 2 5 Marea del Portillo 0,640 P.N.Desembarco del Granma 2,2 5 6 P. N. Caguanes 0,633 Topes de Collantes 2,02 6 7 Ciénaga de Zapata 0,632 P.N.Alejandro de Humboldt 1,87 3 8 P.N.Alejandro de Humboldt 0,630 P.N.Guanahacabibes 1,77 3 9 Guajimico 0,627 Marea del Portillo 1,7 4 10 San Diego de los Baños 0,616 Alturas de Banao 1,58 3 11 Hanabanilla 0,606 Guajimico 1,4 4 12 Alturas de Banao 0,590 Hanabanilla 1,03 5 13 Soroa-Las Terrazas 0,540 San Diego de los Baños 0,99 5 14 P. N. Viñales 0,519 Soroa-Las Terrazas -0,45 5 15 Topes de Collantes 0,469 P. N. Viñales -0,78 5 Fuente: Elaboración propia.
Fuente: Elaboración propia.
Figura 5 comparación de las ordenaciones en la dimensión patrimonial.
LXIII
0
2
4
6
8
10
12
14
16
0,8 0,87 0,94 1,01 1,08 1,15 1,22 1,29 1,36 1,43 1,5
Niveles de Exigencia
Posic
ione
s
P.N.GuanahacabibesP. N. ViñalesSan Diego de los BañosSoroa-Las TerrazasCiénaga de ZapataHanabanillaGuajimicoTopes de CollantesAlturas de BanaoP. N. CaguanesMayaríP.N.Desembarco del GranmaMarea del PortilloBaconaoP.N.Alejandro de Humboldt
Fuente: Elaboración propia.
Figura 6 gráfico de metas para la dimensión patrimonial.
LXIV
Anexo 25: Indicadores sintéticos globales DEACP y DEAPM para cada unidad. Tabla 19 Indicador sintético global DEACP sin restricciones.
Nº Observación Indicador Global
Output Virtual: Social
Output Virtual:
Económico
Output Virtual:
Patrimonial1 Topes de Collantes 1 0 1 0 2 Baconao 1 0 0 1 3 P.N.Alejandro de Humboldt 0,95047 0 0,84490 0,10557 4 Mayarí 0,92831 0 0 0,92831 5 P.N.Desembarco del Granma 0,92516 0 0 0,92516 6 P.N.Guanahacabibes 0,92233 0 0 0,92233 7 Ciénaga de Zapata 0,90145 0,90145 0 0 8 P. N. Caguanes 0,89898 0,89898 0 0 9 Marea del Portillo 0,89866 0 0 0,89866 10 Guajimico 0,88129 0 0 0,88129 11 San Diego de los Baños 0,86576 0 0 0,86576 12 Hanabanilla 0,85151 0 0 0,85151 13 Alturas de Banao 0,83866 0,83866 0 0 14 P. N. Viñales 0,82118 0,82118 0 0 15 Soroa-Las Terrazas 0,78214 0,78214 0 0
Fuente: Elaboración propia.
Social33%
Económico13%
Patrimonial54%
SocialEconómicoPatrimonial
Fuente: Elaboración propia.
Figura 7 distribución de las zonas de acuerdo a los outputs virtuales.
LXV
Tabla 20 Indicador sintético global DEAPM sin restricciones.
Nº Observación Indicador Global
Output Virtual: Social
Output Virtual:
Económico
Output Virtual:
Patrimonial1 Ciénaga de Zapata 1 1 0 0 2 Topes de Collantes 1 0 0,52575 0,47425 3 Baconao 1 0 0 1 4 P.N.Alejandro de Humboldt 0,90266 0 0,43316 0,46950 5 P. N. Caguanes 0,88458 0 0 0,88458 6 P.N.Guanahacabibes 0,85845 0 0,39221 0,46624 7 Mayarí 0,84314 0 0,35080 0,49233 8 Marea del Portillo 0,83594 0 0,37164 0,46431 9 Alturas de Banao 0,83474 0 0,37436 0,46039 10 P.N.Desembarco del Granma 0,83268 0 0,35290 0,47978 11 Hanabanilla 0,80916 0 0,36582 0,44334 12 P. N. Viñales 0,79737 0,21192 0,58545 0 13 San Diego de los Baños 0,78706 0 0,34508 0,44198 14 Guajimico 0,77050 0 0 0,77050 15 Soroa-Las Terrazas 0,77046 0,15700 0,49236 0,12109
Fuente: Elaboración propia.
Social7% Económico
20%
Patrimonial73%
SocialEconómicoPatrimonial
Fuente: Elaboración propia.
Figura 8 distribución de las zonas de acuerdo a los outputs virtuales.
LXVI
Tabla 21 Indicador sintético global DEACP con restricciones.
Nº Observación Indicador Global
Output Virtual: Social
Output Virtual:
Económico
Output Virtual:
Patrimonial1 Baconao 1 0,30565 0,36182 0,33253 2 P.N.Alejandro de Humboldt 0,91691 0,27336 0,37500 0,26855 3 Ciénaga de Zapata 0,86505 0,30173 0,29385 0,26947 4 P.N.Guanahacabibes 0,85057 0,24502 0,29885 0,30670 5 Topes de Collantes 0,83431 0,22537 0,40894 0,2 6 Mayarí 0,82145 0,27484 0,23792 0,30869 7 P. N. Caguanes 0,81572 0,30091 0,24506 0,26976 8 P.N.Desembarco del Granma 0,81057 0,24370 0,25923 0,30764 9 Marea del Portillo 0,80733 0,23625 0,27225 0,29883 10 Hanabanilla 0,79711 0,25406 0,25990 0,28315 11 Alturas de Banao 0,79648 0,28072 0,26410 0,25167 12 P. N. Viñales 0,76673 0,27486 0,27060 0,22127 13 Soroa-Las Terrazas 0,76154 0,26180 0,26944 0,23030 14 San Diego de los Baños 0,72926 0,21461 0,22676 0,28789 15 Guajimico 0,69305 0,2 0,2 0,29305
Fuente: Elaboración propia.
Social27%
Económico27%
Patrimonial46%
SocialEconómicoPatrimonial
Fuente: Elaboración propia.
Figura 9 distribución de las zonas de acuerdo a los outputs virtuales.
LXVII
0
0,05
0,1
0,15
0,2
0,25
0,3
0,35
0,4
Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3
SocialEconomicoPatrimonial
Fuente: Elaboración propia.
Figura 10 media de los outputs por cluster DEACP.
Tabla 22 Indicador sintético global DEAPM con restricciones.
Nº Observación Indicador Global
Output Virtual: Social
Output Virtual:
Económico
Output Virtual:
Patrimonial1 Baconao 1 0,48331 0,21162 0,30507 2 Ciénaga de Zapata 0,98659 0,49800 0,21575 0,27283 3 Topes de Collantes 0,79000 0,27328 0,27172 0,24500 4 P.N.Alejandro de Humboldt 0,75249 0,28608 0,22387 0,24254 5 Alturas de Banao 0,73108 0,29977 0,2 0,23783 6 Mayarí 0,72630 0,29066 0,2 0,25434 7 P. N. Caguanes 0,71584 0,27174 0,2 0,26986 8 Marea del Portillo 0,68991 0,25798 0,2 0,23986 9 P. N. Viñales 0,68805 0,28913 0,2 0,2 10 P.N.Guanahacabibes 0,68573 0,24217 0,20271 0,24086 11 Soroa-Las Terrazas 0,67251 0,27611 0,2 0,20532 12 Hanabanilla 0,67139 0,25330 0,2 0,22903 13 P.N.Desembarco del Granma 0,66678 0,23654 0,2 0,24785 14 San Diego de los Baños 0,62453 0,21786 0,2 0,22833 15 Guajimico 0,59746 0,2 0,2 0,23506
Fuente: Elaboración propia.
LXVIII
Social80%
Económico0%
Patrimonial20%
Social
Económico
Patrimonial
Fuente: Elaboración propia.
Figura 11 distribución de las zonas de acuerdo a los outputs virtuales.
0
0,05
0,1
0,15
0,2
0,25
0,3
0,35
Grupo 1 Grupo 2
SocialEconómicoPatrimonial
Fuente: Elaboración propia.
Figura 12 media de los outputs por cluster DEAPM).
LXIX
Fuente: Elaboración propia
Figura 13 comparación de las ordenaciones globales DEACP y DEAPM (con
restricciones).