trompeta evangelizadora · bendición en el silencio estar en silencio (verso) el poder del...

Trompeta Evangelizadora

2011Julio

Silencio

El poder del silencioSilencio en la vida cotidiana

Bendiciones del silencio

22

4

5

6

7

8

10

12

13

14

15 15

16

TROMPETA EVANGELIZADORA - 07/2011

CONTENIDO

Bendición en el silencio

Estar en silencio (Verso)

El poder del silencio

Bendiciones del silencio (Verso)

Lo que mueve al corazón

Hipersensibilidad

Mensaje radial

¿Estamos en el correcto curso de la vida?

Ensañanzas bíblicas - fácil de comprender

La palabra de Dios Lección 7

Puedo

El poderoso Dios II

Página juvenil

Vence el mal

Roba el tiempo

Llenos del Espíritu Santo

Página infantil

¿Es siempre bueno Dios con nosotros?

Cuando el pequeño niño finalmente pronuncia sus primeras palabras con esfuerzo, toda su familia se alegra. Igualmente parece difícil, llegar al silencio en una vida agitada. Pero cuando se alcanza, se abre un oasis, un manantial de poder especial.

“Quien reparte, también debe recoger” ¿Cuál es el motivo por el cual, alguien, que voluntariamente comparte, reacciona con sensibilidad.

Victoria sobre el pecado no es ninguna ilusión o exigencia imposible. Jesús exhorta eso – y la Biblia nos muestra el camino para la victoria.

Una gran pregunta en un pequeño corazón. Y esta pregunta no solo llama la atención a los niños.

Para algunos, el silencio parece ser intolerable, otros en cambio, lo experimentan como un regalo. ¿Necesitamos motivación para el silencio?

Una alegoría

3

Editorial

3

18

1

Seminole, TX, USA 20

22

25

26

07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA

¡Querido Lector!

H. D. Nimz

Con que frecuencia anhelamos silencio. Velocidad, stress, ritmo frenético - El vocabulario de las personas modernas, no tienen lugar para la tan necesaria isla del silencio.

Matrimonio y familia

Bendición en la vida cotidiana

Educación fraternal

6

Perfil de la Iglesia

Sin amor

Pié de imprenta

Vale la pena

El salmista nos da en el Salmo 62.1 una palabra especial ya acertada para nuestro tema en esta edición de la trompeta evangelizadora: “En Dios solamente está acallada mi alma; De él viene mi salvación”. Si el Salvador nos debe ayudar, podemos y debemos dejar todo lo demás de lado, arrodillarnos y estar en silencio ante Él, si, estar quietos y en oración. Vivimos en un período tan agitado y turbulento. La vida cotidiana, el trabajo, la familia y muchas obligaciones y tareas que quieren perturbarnos la fortaleza y la paz. Agregados las preocupaciones, problemas y tentaciones – y esto, en abundancia. El apóstol Pedro nos alerta y escribe: “Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo” (1 Pe 5, 8-9) El adversario, Satanás hará todo lo posible para distraernos del silencio y la comunión con Dios, porque él sabe, que por medio de la ferviente oración, recibe el hijo de Dios fortaleza y gracia para superar, aguantar y perseverar. ¿Qué quiere devorar, quitar y robar Satanás? En primer lugar el silencio en la comunión con el Dios eterno. Luego, trata de quitarnos la alegría, la valentía y la fe en Dios, induciéndonos dudas, descontento, quejas y lamentaciones. El apóstol nos exhorta: “¡al cual resistid firmes en la fe!” Estimados lectores, es nuestro deseo, vemos sobre todo en este tiempo de recesos y vacaciones, reconocer la importancia, de llevarnos el tiempo, si, separarnos de todo lo que quiere perturbarnos el silencio delante de Dios. Necesitamos las horas de silencio en la oración, para profundizar la Palabra de Dios, silencio para sacar fuerzas y gracia, de modo que podamos decir: “Vuelve, oh alma mía, a tu reposo, porque Jehová te ha hecho bien” (Sal 116, 7).

Anuncios 25

4

Harold Mueller (Seminole, USA)


Bendición en el silencio

En la sala de estar de la casa de mi abuelo había un reloj Cucú. Cuando era niño a menudo me paraba ante él con asombro y lo observaba, al final de las cadenas grapadas colgaban unas pesas, y por encima de las agujas había una pequeña puertita. Mi abuelo señaló el reloj y dijo “pronto el pajarito va a cantar.” Y en efecto, la pequeña puerta se abrió y allí estaba el pájaro. El cantó con alegría “¡Cucú! ¡Cucú!” Y de repente se cerró la puerta y hubo silencio otra vez. “¿Donde quedó el pájaro?”, pregunté yo. “Está devuelta en su casa”, explicó el abuelo, “pero, después de un rato de silencio el volverá a decir su nombre”. Eran nuevamente las vacaciones de verano en la casa del abuelo, y a menudo me quedaba a la noche un buen rato despierto, observando el segundero del reloj, como sonaba suavemente el “Tic Tac”.

Recuerdo todavía que silenciosa era la casa de mi abuelo y como lamentaba su soledad. La abuela ya había fallecido, y en esta soledad pasó los últimos años de su vida. Lo que en aquel entonces no entendía, fue la bendición que el recibía en ese silencio.

En el salmo 46,10 leemos: “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.” Dos puntos importantes se nos da en esta advertencia. En primer lugar se nos recuerda quedarnos quietos, y en segundo lugar, que debemos reconocer a Dios. ¿Es realmente posible cumplir con la segunda advertencia sin cumplir con la primera? A menudo Dios ha hablado a personas a través del silencio y ellas han llegado a un conocimiento más profundo de Dios. Cuando Israel estaba en cautiverio egipcio, Moisés se encontraba en el desierto Sinaí. Allí en el silencio pastoreaba el rebaño de ovejas de su suegro, y probablemente pensaba sobre su vida. Que el estuviese vivo, ya era un milagro de Dios, pero el sentido de su vida, Moisés aun no lo había reconocido.

Un día cuando pastoreaba las ovejas, vio una zarza ardiente. Fuego en el desierto era una amenaza para el

rebaño, y como pastor miraba una y otra vez hacia la zarza ardiente. “Esto es extraño”, pensó para sí, “la zarza no se quema”. Al acercarse oyó una voz que decía “¡Moisés, Moisés! “¡Quita tu calzado de tus pies, porque el lugar en que tu estas, tierra santa es!” El estaba solo allí, pero la voz se oyó con claridad. Sin distracciones, en el silencio, Dios se reveló y le expuso ante él, su plan y su voluntad. Moisés apenas podía creer que él tenía que volver a Egipto, para liberar al pueblo. Más adelante, Dios también se le manifestó en silencio varias veces, y en estos momentos con el Señor recibió orientación y fortaleza. Por la noche se acostó a dormir el pequeño Samuel. El vivía con el envejecido sacerdote Elí en el templo de Dios. Leemos en 1. Samuel 3,3: “…Y antes que la lámpara de Dios fuese apagada.” La habitación estaba iluminada, y el niño podía ver los objetos de la casa de Dios: la mesa con el pan de la proposición, el candelero, el altar de oro y las cortinas colgadas en frente del arca. ¡Frecuentemente se arrodillaba el sacerdote ante este altar a orar!

En el tiempo que transitaban por el desierto, el tabernáculo era el santuario de Dios en el desierto, el lugar que también Moisés visitaba con frecuencia: “¡Señor, tu nos has sido refugio de generación en generación!” Aquí en el silencio el siempre ha buscado consejo y consuelo.

En el tiempo del pequeño Samuel, al parecer fue que Dios hablaba solamente en el pasado. El pueblo había pecado tantas veces ante Dios, y la palabra dice: “y la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia.” En el silencio estaba despierto. El no oyó un reloj, sino de repente una voz que le llamaba: “¡Samuel, Samuel!” “Vuelve y acuéstate”, le dijo Elí, “yo no he llamado.”Cuando la voz llamó su nombre por cuarta vez, Samuel hizo precisamente lo que Elí le había dicho anteriormente, y dijo: “Habla, porque tu siervo oye.” Y Dios se reveló a Samuel y le dijo lo que él iba a hacer.

507/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA

Julius Sturm

¡Silencio en Dios! Quien descansa en Él, siempre alegre está, con ánimo marcha,

por la noche y en tribulación,

Silencio en fe y no murmurar, donde murmurar no es bueno;

a la verdadera luz conéctate que el silencio de lo alto viene.

Silencio en amor, como el rocío,

que por la noche del cielo proviene. En la mañana en las hierbas se ve

brillando en miles gotas está.

Silencio en caminar, no corras

por riquezas, fama y poder. El que come pacíficamente su pan,

Dios, le ha revelado su plan.

Silencio en aflicción, “¡Así lo quiere Dios!”

¡Que tu lema sea éste! Los castigos, te hacen así,

imprimiendo su imagen en ti.

Si la cruz te oprime mucho,

la cual te ha puesto Dios, mírale a Él, cual ante ti lleva la sangrante cruz.

Él, la lleva con paciencia,

un héroe, sin igual, la lleva, con amor y clemencia

por ti, y por todo el mundo igual.

Estar en silencio

BENDICIÓN DEL SILENCIO

“¡Estad quietos, y conoced que yo soy Dios!” Samuel también experimentó la bendición en el silencio. La exhortación del Salmista es muy apropiada en la actualidad. La humanidad carece a menudo el conocimiento de Dios, y el tiempo de quietud ya casi ha desaparecido. Observa un poco la vida en nuestro tiempo. Muchas personas están casi atadas a los dispositivos electrónicos. Ellos piensan que ahorran tiempo y hace la vida más fácil, pero ellos están en su agitado ritmo sobrecargados. El tiempo está lleno de muchas actividades, pero, cual es el sentido de la vida, y lo que Dios ha planeado para cada individuo, apenas se reconoce. Me temo, que hay muchas personas que nunca encuentran la bendición que solo se puede obtener en el silencio. ¿Qué es lo que pierdes cuando el señor no te puede hallar en un lugar tranquilo? Quizás tu vida se asemeja a la de los discípulos, que estaban remando contra la tormenta. Las olas eran grandes y era casi imposible salir adelante. Ellos estaban al borde de sus fuerzas y abrumados por su situación. Cuando Jesús exclamó: “¡Calla, enmudece!”, volvieron la mirada hacia el maestro. Ahora en silencio, reconocieron el poder de Jesús. Leemos en Mateo 8,27:“Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué hombre es este, que aun los vientos y el mar le obedecen?” – “¡Estad quietos, y conoced que yo soy Dios!” El reloj, hace tiempo que no está más en la sala de mi abuelo. Las muchas horas pasadas en soledad en el hogar silencioso, finalizaron también para él. Lo que no me olvidé, es, como el abuelo ocupó este tiempo en silencio. El tiempo en oración y lectura de la palabra de Dios, eran bendiciones, que el valoraba profundamente. El buscaba en este silencioso tiempo, fuerzas, consuelo y las señales de su vida. La palabra de Dios le llevó a un profundo conocimiento de Dios, y en este silencioso tiempo, Dios le dio la oportunidad de reflexionar sobre sus verdades. En vista a Jesús encontramos, que Él también buscaba el silencio. El ordenó: “Donde yo estuviere, allí también estará mi servidor.” ¿Cuál es el significado de tu vida? ¿Qué espera Dios de ti? ¿Para qué te quiere usar y dónde? Estas preguntas Dios ha respondido a muchas personas en el silencio. Querido lector, busca el silencio, lee la salvadora y eterna palabra de Dios y te sorprenderás de las bendiciones que Dios ha preparado para ti. Si, también para ti tienen validez estas palabras: “¡Estad quietos, y conoced que yo soy Dios!”

6

El poder del silencio

“Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.” Salmos 46,10


Dios estaba en un silencioso y suave murmullo. ¿Hay alguna nota musical en toda la obra orquestal, que sea tan poderosa como una pausa expresiva? ¿Existe algo más conmovedor, mas penetrante que el extraño silencio que antecede a la tormenta? ¿O algo más terrible que la peculiar calma, que parece reducir a toda la naturaleza, con la conmoción que precede a un suceso natural? ¿Hay algo que toque o conmueva así nuestro corazón, como el poder del silencio? La más dulce bendición, que Cristo nos trajo es la paz del alma. El sábado del antiguo testamento nos es dado para ejemplo. El corazón que deja sus propias obras, encuentra aquí, “La paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento.” Una calma y confianza que es la fuente de todo poder, una paz que nada es capas de alterar. Una profunda tranquilidad que el mundo no puede dar, ni quitar. Existe en lo más profundo del alma un aposento de paz, donde vive Dios; si vamos a ella y hacemos callar todas las otras voces, podemos escuchar la dulce y suave vos de Dios.

Aunque la rueda esté girando a una alta velocidad, hay un punto en el centro de su eje donde no existe absolutamente ningún movimiento. Así puede haber en la más ocupada vida, un lugar, donde podemos estar en constante silencio con Dios. Este es el único camino, para reconocer a Dios. “¡Estad quietos, y conoced que yo soy Dios!” “Mas Jehová está en su santo templo; calle delante de él toda la tierra. (Hab. 2,20) Hace un par de años, un amigo me dio un pequeño libro, que provocó en mí un cambio. El título era: “Paz verdadera”. Tenía solo un pensamiento: Dios está esperando en lo profundo de mi ser, para hablar conmigo. Si, él espera que esté en silencio el tiempo necesario para escuchar su vos. Yo creí que eso sería algo muy fácil. Así que empecé a estar en silencio, y al hacerlo, llegó todo un ruido de voces en mí. Miles de voces ruidosas interiores y externas se dejaban escuchar, hasta que no pude oír nada más que su ruido y mucha inquietud. Algunas de ellas eran mis propias voces, otras mis propias preguntas, mis preocupaciones, algunas más, mis propias oraciones. Otras, los susurros del

Tentador. Parecía que había tanto por hacer, decir, pensar. Fui corrido, empujado y estirado en cualquier dirección por voces ruidosas y una ansiedad indescriptible. Parecía necesario que escuchara a alguna de ellas, y que contestara a otras. Pero Dios dijo: “Estad quietos y conoced que yo soy Dios.” Luego vinieron las batallas de ideas para el “mañana” con sus preocupaciones y obligaciones; pero Dios dijo: “Estad quietos” y lentamente cuando aprendí a escuchar y a obedecer, cerré mis oídos a determinadas voces, cuando las demás voces cesaron, o yo ya no las presté mas atención, después de un determinado tiempo encontré en lo profundo de mi ser una silenciosa y suave voz que empezó a hablar con una indescriptible ternura, fuerza y consuelo. Cuando la presté atención, se transformó en la voz de la oración, de la sabiduría y del deber. Y no me resultó difícil de pensar, orar, o de confiar. Aquella silenciosa y suave voz del espíritu santo en mi corazón, era el susurro de Dios en lo secreto y profundo de mi alma. La respuesta de Dios a todas mis preguntas. La fuerza y vida de Dios para mi alma y cuerpo.

7

Bendiciones del silencio

Cuando el rocío en la noche suave

Sobre la seca tierra cae,

para alabanza del creador

En miles de hierbas brilla,

Para que renovadas estén,

En el magnífico sol de la mañana.

Puedes con realidad ver

Que Dios a echo todo bien.

Note, que la bendición más grande

Dios, solo en silencio da.

A ti También te quiere dar,

Porque su amor, para ti está.

Por lo tanto, del tumulto

Busca tú, la soledad,

Donde se abre el cielo

En este tiempo con bondad.

Percibidlo en el alma,

Cuando el salvador te habla,

También, en tu constante inquietud

El te da consuelo y luz,

Así, como el rocío suave

Pone su mano sobre ti

Al finalizar el viaje terrenal

Preparada está, la morada celestial.

EL PODER DEL SILENCIO 07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA

El modo de hablar de Dios, se transformó en la sustancia de todo mi conocimiento, de mis oraciones, y de mis bendiciones. Porque era el mismo Dios viviente, mi vida y mi todo. Queridos, esta es nuestra mayor necesidad espiritual. De esta manera podemos reconocer a Dios. Solo así obtendremos refrigerio espiritual y alimento para el alma, así tenemos acceso al pan de vida. Por ese medio se nos sana el cuerpo. Nuestra alma toma del agua de vida, de la que nos habló nuestro Salvador resucitado. Salimos de las luchas de la vida y de los deberes cotidianos- como una flor, que en las sombras de la noche absorbe las frescas y cristalinas gotas del rocío. Pero como el rocío nunca cae en una noche tormentosa, tampoco caen las gotas del rocío de su gracia en un alma inquieta. No podemos estar renovados y fuertes, constantemente estar corriendo sobre trenes de alta velocidad. Necesitamos de las silenciosas oras de la oración, de los lugares secretos con el todopoderoso, tiempo de espera

en el Señor. Aquí se renuevan nuestras fuerzas, y aprendemos a volar como águilas, volvemos para correr y no cansarnos, para caminar y no fatigarnos. Lo mejor del silencio es: que Dios nos da en Él, una oportunidad de actuar en nosotros. “Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de la suyas.” (He. 4,10) Si dejamos nuestras propias obras, entonces obra Dios en nosotros, si dejamos nuestros propios pensamientos, entonces Dios nos llena de sus pensamientos. Cuando nos detenemos de nuestras incansables actividades, entonces Dios obra en nosotros el querer y el hacer de acuerdo a su voluntad, y nosotros solo debemos concretarlas. Amados, aceptemos el silencio de Dios. Vivamos bajo el abrigo del todopoderoso, y en los lugares secretos del altísimo, entremos en Dios y su eterno descanso. Llevemos al silencio a las demás voces, entonces podremos escuchar la apacible y suave voz de Dios.

Luego hay otro silencio, este silencio permite que Dios obre, y nosotros estemos en silencio. Un estar en silencio en nuestros propios planes, en autodefensa y auto justificación, en nuestra propia sabiduría y perspicacia. Dejamos que Dios provea y gobierne. El dará una respuesta a la palabra grosera, al duro golpe en su propio amor infalible y verdadero. Con cuanta frecuencia obstruimos la intervención de Dios, porque tomamos nuestra causa en manos propias, y queremos defenderla. En toda la Biblia, no hay imagen mas sublime que la del Salvador silencioso en medio de la gente que lo niega y maltrata. El podría con una mirada o una palabra, derribarlos al suelo con su poder divino. Pero se dejo decir y hacer lo peor, y permaneció en el poder del silencio – Santo silencioso Cordero de Dios. Dios nos conceda esta fuerza silenciosa, esta poderosa autoentrega.

8

C. W. Naylor

•Lo que mueve al corazón

Hipersensibilidad


Seguramente ya hemos oído alguna vez la siguiente declaración: “La persona es sensible como un huevo crudo” huevos deben tratarse con cuidado, se rompen con facilidad. Algunas personas son muy delicadas, por lo que se debe adoptar con cuidado el hecho o la palabra, con el fin de no herir u ofender. Nunca se está seguro de cómo van a interpretar la situación. Estas personas sufren dolor en sus sentimientos la mayor parte del tiempo, se ofenden fácilmente y se sienten agredidas. Si bien hay algunas personas que tienen un carácter muy sensible y sienten las cosas ordinarias con mayor intensidad que otros, acá se trata de otra cosa, se refiere a los sentimientos anormales y antinaturales que conducen a la sensibilidad antes mencionada. Se puede poner límite al carácter de sensibilidad y aprender a conducirlo con cuidado, pero las reacciones exageradas y enfermas deben ser rechazadas.

Algunas personas no tienen ningún problema escuchar burlas y murmuraciones de otros. Tal vez ven como alguno se siente dañado, no intervienen porque no les afecta y les resulta divertido. Pero tan pronto como son dirigidas este tipo de ataques a su persona, donde casi los destruye, al menos piensan ellos. ¿Cuál es la diferencia crucial en el mundo emocional? ¿Por qué la sensibilidad para ellos mismo son mas intensivos que la sensibilidad para otros? Si rastreamos la sensación desde su origen, descubriremos, que fue herido el amor propio. Si el amor al prójimo es tan grande como el amor propio, entonces se sentirá el dolor del prójimo como el de sí mismo. El amor propio hace que tengan fácil acceso los insultos y lesiones en las personas. Cuanto más ellos se estiman, más vulnerables son y asimismo fácil de ofender. El amor propio crea vanidad, se estremece violentamente en agonía frente a una mirada burlona y despreciativa, incluso una supuesta ofensa les angustia

profundamente. El amor propio produce fuertes emociones superficiales, lo que le hace ser hipersensible y delicado, La persona se siente constantemente tratada con falsedad e injusticia. ¡Oh, este amor propio! ¡Cuánto dolor trae consigo! ¡Cuantos insultos tiene que experimentar! ¡Con qué frecuencia se siente afectado! Estimado lector, ¿es usted también víctima de su amor propio? Si tus sentimientos te irritan fácilmente y te sientes a menudo atacado y herido, tu amor propio es la causa del problema. Si te liberas de él, entonces le das a tu prójimo la oportunidad de superar la distancia entre ustedes. Las personas que se concentran en sí mismos, se preguntan constantemente, que dirán o pensarán otros de ellos. Ellos desconfían y sospechan de sus semejantes, detrás de ellos hablan palabras hirientes o piensan mal de ellos. Cada conversación que no se puede seguir, conduce al temor, aún si el tema principal de la conversación sea negativo. Se está herido porque no se les incluyó en la confianza de los demás. Otros están involucrados en una causa, mientras que se nos ha excluido, es difícil superar esta situación. A menudo he escuchado declaraciones similares a esta: “Si nosotros no lo invitamos a fulano, le ofenderemos” Amor propio, es como una planta ligeramente irritable, la cual se marchita con facilidad. Podemos encontrar muchas excusas para nuestros sentimientos, pero si dejamos de lado las declaraciones y buscamos la raíz del problema, entonces descubriremos que Dios subraya esta sensibilidad con la palabra “egoísmo”. Incluso la actitud equivocada hacia los demás

9

En el año 1922 apareció el libro “Heart Talks” (Lo que mueve al corazón). El autor C. W. Naylor, en 13 años de escuela de sufrimiento y total dependencia de Dios, aprendió a confiar completamente en Dios y a tener una íntima comunión con Él para vivir. En este pequeño libro se reunieron diversos ensayos, que ya fueron de bendición para muchos.

LO QUE MUEVE AL CORAZÓN 07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA

El amor propio tiene una gran imaginación.Ve el mal donde ni siquiera existe.

aumenta nuestra sensibilidad. Se basa en la falta de confianza que los demás demuestran en las buenas intenciones para con nosotros. Si esperamos y miramos de otros el desprecio, burla y cosas similares, subordinamos nuestra comparación con esta actitud desde un principio. En realidad, no creemos que el otro tenga amor y sentimientos de amistad para nosotros, que sus acciones nos afecten, que sean compasivos y justos. ¿Hemos observado alguna vez a los niños, en la expresión: “No tuve mala intención”, han respondido: “Si, lo hiciste a propósito”? Desafortunadamente, muchos adultos están dispuestos a decir: “Esto me hicieron intencionalmente, seguramente me querían dañar”. “¡Este comportamiento es inmaduro, sin embargo, muchos cristianos, lamentablemente, tienen esta actitud!” Esa es la manera más segura para destruir la amistad y distanciar el amor en la armonía del pueblo de Dios. Esta actitud hacia nuestros hermanos espirituales es injusta. Es el enemigo de la unidad y la espiritualidad. Si nuestro pensamiento fuera con desinterés hacia el prójimo, no lo rebajaríamos, algo que nunca hubo en nuestra mente. El amor propio sale a la luz en todas las relaciones. Se glorifica y rebaja el valor de los hermanos. Los hijos santificados de Dios, deben poseer el espíritu de bondad, el amor misericordioso hacia los demás y no de maltratos e insultos. Sin embargo, si seguimos en la búsqueda de tales expresiones, no creemos que el otro nos quiera manifestar sentimientos cristianos. Dios quiere que pongamos más confianza en los hermanos, en lugar de acusarlos de un trato injusto. Si buscamos desprecios, encontraremos muchos, incluso si existen sólo en nuestra imaginación. Si esperamos lesiones, las vamos a experimentar, si bien nadie pretenda que nos toque a nosotros. El amor propio tiene una gran imaginación. Ve el mal donde ni

siquiera existe. La auto-exaltación es como un niño caprichoso y malcriado. Todavía recuerdo de un niño, del que se me dijo: “Si solo le levantas el dedo para corregirlo, comienza a llorar” Creía que era una exageración, e hice la prueba, y realmente el niño comenzó a llorar. Incluso personas adultas son fáciles de herir, son realmente “admiradores de si mismo” Pablo dijo: “Cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño” (1 Corintios 13, 11). Ya es tiempo en que otros sigan su ejemplo. Digamos, Cristo habría reaccionado en forma sensible; ¿habría sido capaz de salvar al mundo? ¿Podría Pablo, en esta condición, haber sobrellevado las persecuciones y peligros, soportar la adversidad y la incomprensión, para predicar el evangelio al mundo?, él no era sensible. Él no se preocupaba por las desconsideraciones. Delante de Dios era un hombre, de la verdadera grandeza. El secreto es, que él amaba a Cristo y a los demás más que a sí mismo, fue capaz de soportar mucho por sus hermanos, con tal de poder salvarlos. Se puede estar libre del amor propio y la sensibilidad, en cuanto se retira la mirada de si mismo y dirigirla hacia Jesucristo, mantener la mirada hacia arriba, hasta que reconozcamos que pequeño e insignificante somos nosotros y nuestros propios intereses. Mira a Jesús y verás cómo él es exaltado por encima de todas las sensibilidades menores. Mírarlo hasta que veas como su gran corazón de amor por ti y por otros hombres se desborda, Él no se ha tomado el tiempo para pensar en si mismo. Pídele, que te cambie y llene tu corazón con el mismo amor, hasta que tu mirada, tus pensamientos e intereses ya no estén en el centro de tu atención y que tu gran Yo, no colme todo tu horizonte. Tu corazón se volverá más y más hacia tu prójimo, hasta que el foco no está dirigido a ti. Este es el camino de la salud. Nadie debe tratarte mas “como un huevo crudo” Las personas están libres de las preocupaciones de ofenderte o lastimarte sin querer.

10

Friedrich Krebs, Kitchener (CDN)

Mensaje Radial Mensaje de Salvación

¿Estamos en el correcto curso de la vida?

E¿Estamos en el correcto curso de la vida? Isaías 35,8 y 30,20 s


El más alto y el único curso correcto de la vida es, el que Dios nos presenta la imagen de vida de Jesucristo.

n una canción que probablemente proviene de excursiones en barco, dice: “¡Nuestro curso va hacia el sur...!” Cada barco cuando entra a mar abierto, tiene que tomar el rumbo correcto, el rumbo, con el cual podrá llegar a destino. Cada capitán estará atento de llevar el timón en el curso correcto y permanecer en él. Pero, ¿hemos pensado alguna vez, que también para nuestra vida hay un específico y seguro curso (camino)? Visto en el aspecto general todos estamos en un camino. Y aquí quiero decir: ¡Este camino se dirige al “Oeste”, que significa: Él va hacia la “noche”! Nuestra vida es corta. Este hecho no puede ser alterado, y cada uno de nosotros sabemos esto. El Señor Jesús dijo en el profundo Sermón del Monte de otro hecho, es decir, del camino ancho y del camino angosto (vea Mat. 7:13-14). Y donde quiera que se nos presenten dos o más cosas, hay una posible elección. Por supuesto, de que cada persona tiene la libertad de elegir la variedad de caminos o posibilidades en su vida como le plazca. Pero viendo espiritualmente el Señor ha limitado esas oportunidades, son sólo dos caminos, y él los llamó el camino “ancho” y el camino “angosto”. Y esto es lo que nos permitió plantear la pregunta: “¿Estamos en el correcto curso de la vida?” Cada uno de nosotros debe considerar seriamente si en realidad ha elegido correctamente, y hacia donde nos lleva ese rumbo. El autor del Salmo 119 declara en el

verso 30: “Escogí el camino de la verdad; he puesto tus juicios delante de mí.” - ¿Podemos decir eso también nosotros? ¿Alguna vez prestamos mayor atención a las eficiencias de Jesús, tal como se nos presentan en los cuatro Evangelios del Nuevo Testamento? El lector atento reconocerá, que Jesús estaba tratando sin cesar de presentar el “camino angosto” a cada individuo, y llevar a todos por él. ¿Por qué? ¡Porque es el único y verdadero camino de vida para todos nosotros! Por lo tanto es según el plan y voluntad de Dios, el único y correcto curso para todos nosotros. Y de esto estaban convencidos, como se nos muestra con claridad en los versos arriba citados, los profetas del Antiguo Testamento. En referencia al camino de la salvación por medio de Cristo, Isaías dijo: “Y habrá allí calzada y camino, y será llamado camino de Santidad.” “Ningún impuro caminará sobre él, pero los redimidos del Señor caminaran sobre él, e incluso el torpe no puede extraviarse en esta calzada.” Es un camino claro ¿no es cierto? Y este hombre de Dios también declaró: ¡”Y habrá júbilo y alegría entre ellos, y los gemidos de dolor (la carga del pecado) se han ido. Y el Señor les dará pan en la aflicción y agua en la angustia (que significa la asistencia divina), y ellos verán a sus maestros y les oirán decir: “¡Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda!” ¡Así que Dios ha

11

07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORAMENSAJE DE SALVACIÓN

puesto a su pueblo un camino claro y correcto! ¡Qué importante es la pregunta si este es tu rumbo y el mío, y si permanecemos en este curso! Hablamos sobre el curso de los barcos: ¡Su orientación es la brújula! ¡Y cuan grave puede ser cuando esta unidad no funciona o no está absolutamente limpia! Informes procedentes del transporte marítimo, nos dicen que los barcos por pequeñas discapacidades en la brújula, han salido de su curso teniendo serios problemas e incluso algunos naufragaron. ¿No nos muestra esto lo importante y crucial que es el curso correcto? Nuestra pregunta principal es: ¿Seguimos aún en el camino correcto? ¿No es semejante nuestra vida a un pequeño bote en el vasto océano de la vida? ¿Y no sabemos todos de las amenazantes tormentas, de la resistencia de muchos, de las tentaciones y los peligros que existen aquí? Muchos de nosotros estamos en peligro de extinción, por medio de las ondas y olas de destrucción. Otros están encallados o naufragados, porque no tienen el verdadero curso, ni la verdadera brújula y son totalmente frágiles. Acá están niños y jóvenes piadosos, con padres temerosos de Dios en gran ventaja. Se les informó que en el mundo exterior la vida carece de fundamento y se les confió el correcto curso de la vida. Esta es una base fundamental muy importante, pero muy poco valorada y por la que se agradece muy poco.

Por ejemplo dos amigos de la escuela se encuentran después de varios años en una estación de tren, uno en una posición de prestigio, libre y feliz, el otro lo contrario, está en un estado de abandono y en las cadenas de las adicciones perecederas. La pregunta aquí es: “¿Cómo podría haber entre ellos tales diferencias?” La respuesta es obvia: ¡Está en las elecciones del curso de la vida! Y podemos ver en este ejemplo que cada uno tenía su propia elección. Quien está sentado en el tren equivocado, nunca puede alcanzar el destino correcto. Por lo tanto no es lo mismo si uno está en el camino correcto o en el camino equivocado. El más alto y el único curso correcto de la vida es, el que Dios nos presenta la imagen de vida de Jesucristo. Este es el único camino seguro para esta vida, y también el único camino que introduce a la vida eterna. Y recuerda: ¡Nuestro Señor Jesús no es sólo un guía, sino que Él es el camino! Y la brújula confiable para éste camino, es la palabra de Dios. Con relación a esto, Pablo escribe: “¡Asidos de la palabra de vida!” y Pedro menciona en otro párrafo: “Él (Cristo) nos ha dejado ejemplo para que sigamos sus pisadas” Con Isaías, queremos concluir diciendo: “Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda.” ¿Estamos todos en este camino? ¡Querida alma elige hoy para que no naufragues y te pierdas!

12

Dios es inmutable

Dios es omnisciente

Robert Witt, Gifhorn (DE)

Enseñanzas bíblicas- fácil de comprender

Enseñanzas sobre las Biblia Lección 7: El poderoso Dios II ¿Cuáles son las características sobrenaturales de Dios?

Lección 6: El poderoso DiosLección 7: El poderoso Dios IILección 8: El carácter de Dios

TROMPETA EVANGELIZADORA - 07/2011�

ENSEÑANZAS BÍBLICAS - FÁCIL DE COMPRENDER�

He. 4,13; Is. 42,9 Puesto que Dios es eterno y omnipresente, es una conclusión lógica, que sabe todo lo que sucede en el universo, lo que ha sucedido, y lo que sucederá. Conoce cada detalle, y no se olvida nada. El podría hacernos responsable, por cada palabra que hemos dicho. Su conocimiento es directo. El ha visto todo personalmente, no lo escuchó de algún otro. Su conocimiento es completo, nada ha sucedido sin que el lo sepa. Ya que puede leer nuestros pensamientos, no existe ningún secreto que no lo sepa. Su sabiduría es perfecta. El no solo sabe todas las cosas, sino que también las entiende. Porque hay una diferencia entre saber lo que sucedió, o si entendemos porqué pasó. El conoce todas las causas y motivos. El ha creado todo, por eso sabe lo que hay en las entrañas de la tierra, como suceden los procesos en el cuerpo humano. Como ya mencionamos, Dios también sabe que sucederá en el futuro. Vemos eso en las muchas profecías, y en la forma que han llegado. Así también

sabe, como terminará nuestra vida. También sabe en que día, vendrá Jesús nuevamente a la tierra. Y leemos en su palabra, que ese secreto no lo ha dicho a nadie, a ningún ángel, a ninguna persona, y no lo dirá. Este conocimiento previo de Dios, es para nosotros los seres humanos, difícil de entender. Y a menudo nos preguntamos, como puede ser esto compatible, con la bondad y la justicia de Dios. Queremos tratar eso mas adelante, en una próxima lección.

Mal.3,6; Sal.102,28 Dios no puede cambiar en sus capacidades, y en sus valores morales. El no se puede perfeccionar, porque es perfecto. El no se vuelve viejo y débil, porque es eterno. El permanece en ese estado perfecto y no cambia. Pero esto no debe ser entendido, que Dios no puede cambiar su actitud y comportamiento. Cuando Saúl desobedeció a Dios, y dejó de andar en su camino, cambió la actitud de Dios para con él. Le

dijo a Samuel, que estaba arrepentido de haberlo hecho rey. Otro ejemplo es Job. Dios retrajo su mano protectora y sus bendiciones, permitiendo a Satanás causar destrucción y sufrimiento en la vida de Job. Pero esto no se debía a que Job hubiera cambiado su relación con Dios. Dios cambia por diferentes motivos su conducta, pero en su naturaleza y carácter, es inmutable y perfecto. Nos llenamos de profundo temor en la meditación de estos atributos de Dios. Nos queda claro nuestra pequeñez y limitaciones. Estamos ante un enorme ser, y no existe nada que se le compare. Nosotros los seres humanos queremos ser el centro de nuestras vidas. Pero si consideramos a Dios así, rápidamente nos quedará claro, que solo El está en el centro de toda vida – debe estar. A El le corresponde la alabanza, el honor, el galardón, la gloria y majestad en toda la eternidad. ¡Amen!

13

Una Alegor{íííia

Autor desconocido

Roba el tiempo

07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORAROBA EL TIEMPO

El diablo convocó una asamblea mundial. En el discurso de apertura les dijo a sus demonios: “¡Nosotros, no podemos detener a los cristianos de ir a la iglesia. Tampoco podemos evitar que lean la biblia, y que por medio de ella conozcan la verdad. Pero podemos evitar que oren y desarrollen una relación personal con Dios. Porque si tienen esa comunión con Él, nuestro poder está en peligro. Por lo tanto, déjenlos ir a sus iglesias, déjenle su estilo de vida, pero róbenles su tiempo, de modo que no puedan construir esa profunda relación con Jesucristo, y por ningún motivo oren. Esta es mi orden a ustedes, ángeles del infierno!” “¿Como podemos hacer eso?”, preguntaron los demonios. “Ocúpenlos con esas muchas trivialidades sin importancia de la vida cotidiana, y piensen cada vez en algo nuevo, para dominar sus pensamientos”, les contestó el diablo. “Tiéntenlos a que gasten mucho, consuman mucho y derrochen. Persuadan a sus esposas, a que se concentren totalmente en su trabajo y pasen interminables horas en su lugar de trabajo. Convenzan a los esposos de que tienen que trabajar cada semana seis o siete días, y por lo menos 10 o 12 horas por día. Así podrán mantener su estilo de vida. Absténganlos de pasar tiempo con sus hijos y de orar por ellos. Y cuando finalmente sus familias estén destruidas, su hogar ya no le brindará ninguna protección. Mantengan sus cabezas tan ocupadas, que no puedan escuchar más la dulce y suave voz del Espíritu Santo. Sedúzcanlos a que constantemente enciendan la radio o el reproductor de casete, mientras viajan en auto. Logren que incesantemente el televisor, el reproductor de videos, el CD player, y la computadora estén siempre muy cerca. Y cuiden, que en ningún negocio, y en ningún

restaurante de este mundo, en cualquier momento del día o de la noche, se pueda escuchar algo de música cristiana. Todo esto indefectiblemente va a envenenar sus pensamientos, y va a entorpecer la unidad y la inherencia con Jesucristo. Inunden la mesa del desayuno con los periódicos y otras publicaciones. Martíllenlos las 24 horas del día con las noticias actualizadas. Cubran las calles con carteles descriptivos de cualquier producto. Inunden sus buzones con publicidad y ofrecimientos de productos gratuitos. Presenten en las revistas y en las portadas, hermosas y esbeltas modelos, para que los esposos crean cada vez más, que la belleza exterior es determinante, y encuentren a sus esposas inatractivas. Esto también resultará, para que matrimonios y familias se destruyan rápidamente. Tampoco permitan que estén en paz en sus vacaciones. Pongan todo su empeño para que vuelvan a sus trabajos estresados, llenos de preocupaciones e inquietudes. Vean que no se alegren por la naturaleza, y bajo ninguna circunstancia se maravillen por la creación de Dios. En vez de eso, condúzcanlos a los parques de atracciones, eventos deportivos, conciertos y cines. Su objetivo es mantenerlos ocupados, y que no pasen ningún tiempo con Dios. Y si se encuentran con otros cristianos, no los dejen hablar de Dios, sino que llenen sus conversaciones de chismes y pláticas superficiales. Y sobre todo les vuelvo a recalcar: cuiden de que no encuentren tiempo para orar, tiempo para alabar a Dios. Yo no puedo soportar ese gimoteo. No aflojen en su propósito. Ellos siempre deben estar demasiado ocupados, para que no organicen ninguna evangelización y por este medio puedan salvar personas. Entréguenlos a esa presunta falta de tiempo, con muchas buenas excusas, para que no busquen mas fuerzas en Dios. Pronto vivirán con sus propias fuerzas, y ofrecerán su salud, su familia por “la buena causa”. “¡Va a funcionar!” Era un gran encuentro. Los demonios se fueron con entusiasmo a cumplir con la orden, de mantener ocupados a los cristianos de todo el mundo, mucho más que hasta ahora. Y le susurran con éxito, que tienen que correr por aquí, y por allí.

14

Robert Witt, Gifhorn (DE)

Página juvenil @

Vence el mal

TROMPETA EVANGELIZADORA - 07/2011 SER JOVEN

Hace un tiempo pasé por una tienda de muebles y he visto en la pared, escrita la siguiente frase: “Todo puedo vencer – excepto la tentación” Verdaderas son estas palabras en la vida de muchas personas. Si yo no puedo vencer la tentación, entonces nada puedo vencer. Y así es en el mundo. Los hijos de las tinieblas no pueden vencer la tentación. ¿Cómo es contigo, querido joven? ¿Puedes vencer a la tentación? Juan escribe en su primera carta: “Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno”. Bien a nosotros, si experimentamos esto, en nuestra vida personal venciendo al mal. Si pensamos en las tentaciones, tenemos que ver quien esta detrás ellas, es decir, el tentador. Santiago escribe: “Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte.” Así como con Adán y Eva, estuvo detrás de

toda tentación, tras la apelación de los deseos y pasiones nuestro enemigo, el Diablo. Su objetivo es, llevar a las personas al pecado y a la muerte. ¿Cómo podemos vencer a este villano? ¿Cómo podemos tener victoria sobre cada tentación? En primer lugar tenemos que ser salvos del pecado. Nosotros, los humanos no podemos oponernos a los poderes oscuros de un ángel caído. Somos indefensos ante ellos, a menos que reivindiquemos el poder redentor de la sangre de Jesucristo, el hijo de Dios. Solamente así tendremos la fuerza de vencer la tentación. No es nuestra fuerza de voluntad, sino el poder de Dios que obra en nosotros. Y eso es lo que Juan dice cuando afirma: “…Porque sois fuertes”. El cita un escalón aún mas alto en el camino a la victoria sobre el mal: “…y la palabra de Dios permanece en vosotros”. En el evangelio de Mateo se nos presenta tres tentaciones de Jesús en el desierto. Y a cada una de estas tentaciones le respondió: “Esta escrito…”. Jesús levantó esta espada afilada de la Palabra de Dios y obtuvo la victoria. Si nosotros también queremos tener victoria, debemos ser habilidosos con el manejo de esta espada.

El tentador nos quiere hacer dudar. “¿Conque Dios ha dicho…?”, dijo una vez a Eva. Bien a nosotros, si sabemos realmente lo que Dios ha dicho, y lo que quiso decir. Y así debe quedar la Palabra de Dios en nosotros. No basta, con tener una Biblia. Ella debe estar en nosotros. Debemos interesarnos y conocer la palabra. Dijo Dios a Josué, cuando estuvo desalentado frente a la gran tarea, de llevar al pueblo de Israel a la tierra prometida: “Que el libro de la ley no se aparte de tu boca, sino medita en ella día y noche, para hacer todas las cosas de acuerdo a lo que está escrito en ella. Para que andes sabiamente y te vaya bien en el camino”. Aquí tenemos una promesa que está sujeta a una condición. La condición es que constantemente debemos interesarnos en la Biblia, la Palabra de Dios. La promesa, que nos irá bien en nuestro camino. ¿Quieres tener victoria? ¿Deseas que te vaya bien en el camino al cielo? Entonces deja en tus pensamientos la Palabra de Dios. Medita con disposición a obedecer todos los mandamientos y leyes que se encuentran en ella. ¡Entonces podrás tener la vida victoriosa de un vencedor!

15

Puedo

Llenos del Espíritu Santo

SER CRISTIANO� �07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA�

A menudo en nuestro tiempo, sobre todo los jóvenes, se hacen la pregunta: “¿Puedo yo como cristiano, hacer esto o aquello?” Parece que a los primeros cristianos les motivaba otra pregunta. Ellos nos muestran lo mucho que podemos dejar por el nombre de Jesús. En nuestro tiempo parece que queremos demostrar lo contrario, cuanto pecado podemos mantener en nuestra vida como cristianos y aún servir a Dios. Se preguntan si esto o aquello es pecado, y donde la Biblia prohíbe explícitamente. Generalmente, son cosas de las que se ocupan y están rodeadas personas del mundo. Por ejemplo dicen: ¿Es pecado jugar al pocker? ¿También bailar es pecado? ¿Jugar al Counter-Strike es pecado? Espera: ¿Qué nos revela esta pregunta? “Todo lo que hacéis, de palabra o de hecho,

hacedlo en el nombre del Señor Jesús”, dice el apóstol. Jesús no te prohíbe nada. Pero el nos muestra, lo que le causa tristeza cuando pecamos contra él. Estos son todos actos que interrumpen nuestra comunión con él, debilitan nuestra fuerza espiritual o nos iguala al mundo pecador. El Espíritu Santo trabaja en nuestra conciencia, para comprobar nuestras acciones. Si no tienes buen presentimiento sobre cierta cosa, o tienes dudas de que es agradable a Dios, renúncialo. Porque definitivamente hay peligro asociado. A menudo, es la suave voz del Espíritu Santo que nos advierte. ¿Acciones moralmente neutrales pueden ser pecaminosas y reprobables? Comer y beber es moralmente

neutral, pero puede ser pecado comer y tomar en demasía. Lo mismo sucede, con todas las cosas en la medida que no son correctas en el orden de Dios. Cuando el Espíritu de Dios pone un signo de interrogación al lado de nuestros hobbies, no importa que nombre tenga, y eso hace que nos preocupemos, entonces tenemos que examinarlo en ferviente oración. Pero en las cosas que contienen contaminantes de igualdad con el mundo, o entonar una melodía que contenga su tono, un cristiano no debería ni preguntarse si lo debe hacer, mas bien debe renunciarlo, por amor al Salvador. El hijo de Dios encontró algo mejor y más maravilloso, que todos los placeres que el mundo puede ofrecer: Una preciosa y eterna gloria, más allá de la medida.

En 1892, el joven misionero John Hyde acababa de abordar el barco que lo llevaría desde Nueva York, al campo de misión en la India. En su camarote encontró una carta de un amigo de su padre. A lo largo de su vida, tuvo el deseo de servir a Dios en el campo misionero. Pero Dios le había asignado un área de trabajo en el hogar. Las pocas líneas de de la carta decían algo así: “Yo no dejaré de orar por ti querido John, hasta que estés lleno del Espíritu Santo.” Las palabras llegaron a un corazón orgulloso. El enfadado lector, tiró la carta en el cesto de papeles. Como alguien podría suponer, que él no estaba lleno del Espíritu Santo. Él se había entregado totalmente a Dios, y estaba en camino hacia el campo

misionero. Una gran lucha se desató en su alma. John Hyde tomó nuevamente la carta. Le siguieron muchos días de ferviente oración y luchas internas. El Espíritu Santo, despertó una necesidad y un profundo anhelo por ese don. Dios abrió sus ojos y pudo ver la necesidad de su alma. Las oraciones fueron cada vez más fervientes, las luchas por la plenitud del Espíritu más apremiantes. Estaba decidido a no descansar, hasta que Dios cumpliera su promesa. Él, puso su vida y su futuro completamente a disposición de Dios. Dios lo escuchó y le dejó vivir la experiencia de la promesa divina. Lleno del espíritu de gracia y

de oración pudo llegar a su campo de trabajo. Dios lo pudo utilizar como una herramienta especial. La bendición de su vida, fue mucho más allá de la India. Su vida de oración, llena de una profunda fe, perseverante y fiel; hizo que la gente que lo conoció hablara de él, como el apóstol de la oración. Consagración, humildad y una fe inquebrantable, causaron una corriente de gracia y salvación por medio de él. En los veinte años de su ardiente servicio, pudo guiar a cientos o tal vez miles de almas inmortales hacia su Salvador. ¿Eres salvo? Para servir a Dios y serle útil, tienes que ser lleno del Espíritu Santo. Dios te lo quiere dar plenamente.

16 TROMPETA EVANGELIZADORA - 07/2011

Página infantil

¿Es siempre bueno Dios con nosotros?

Era un hermoso día de primavera. Elena jugaba en el jardín con su pequeño cachorro Mischa. El cachorro tenia solo 4 meces de edad y cada día con el era una nueva aventura. Elena había ocupado muchas horas tirándole una pelota al perrito, jugando a las escondidas y acariciándolo. Muchas veces, Mischa la hacia reír, y hacía más lindo así su día. Cuando su madre la llamó a la casa, miró a Elena. Ella estaba triste, porque el tiempo de jugar había terminado, aún así levantó al perrito, lo abrazó y se dirigió a la casa. “Es tiempo de ir a la cama Elena,” dijo su madre. “Llámame, cuando te hayas cepillado los dientes, entonces iré y haré el devocional contigo.” La madre recogió los platos de la cena. Ella no se dio cuenta de la expresión en el rostro de Elena, pero al entrar en su habitación con la biblia, ella vio que Elena no estaba contenta. “¿Dónde te aprieta el zapato, Elena?”, preguntó ella. “Yo pensé, que hoy te habías divertido mucho con Mischa”. “Si, eso hice.” “yo quiero mucho a Mischa, pero esta noche no tengo ganas de orar.” “¿Por qué no?” la madre reaccionó sorprendida a este comentario, Elena nunca antes había rechazado una historia bíblica o una oración. “Yo creo, que por el momento no quiero a Dios, y no quiero estar en su presencia.” Elena se sintió algo avergonzada después de haber escuchado lo que dijo, porque había hablado muy rápido. La madre abrazó a Elena. “¿Quieres contarme, por qué estas enojada con Dios?” Elena se quedó en silencio un minuto. Entonces dijo: “¿Te acuerdas de mi examen de matemáticas de

ayer?” “Yo realmente había orado fervientemente, para que Dios me ayude mientras estudiaba, porque en el examen me quería sacar una buena nota. Pero él no me escuchó, y como yo no entendía matemáticas, me saqué una mala calificación. Si Dios no escucha mi pedido, yo tampoco voy a hablar con él ahora. Yo le pedí ayuda, pero él no me regaló la nota deseada, aunque trabajé duro para ello.” “¿Por qué quieres tanto a Mischa?”, preguntó bruscamente la madre. Elena estaba sorprendida. Ella esperaba, que su madre la regañara, porque ella no quería hablar con Dios y ahora ella le hizo una pregunta acerca de Mischa. “Yo quiero a Mischa, porque es tan dulce y porque siempre esta feliz de verme. Es divertido y nunca se enfada conmigo. Es mi mejor amigo.” La cara de Elena se iluminó ante el recuerdo de su perrito. “Pero, ¿Qué beneficio te da él?”, preguntó la madre. “Ninguno,” dijo Elena. “El solo me demuestra lo mucho que me quiere.” La madre asintió. Entonces ella le preguntó: “¿Cómo puedes amarlo, si él no puede darte nada a cambio?” Elena se rió. “Esta es una pregunta divertida – El no me puede darme nada. Pero cuidaré de él.” La madre asintió de nuevo. “Esta bien, ¿Se enoja contigo, o se decepciona de ti, si cada vez no le das una recompensa?” Elena sonrió de nuevo. “No, mami. No tengo que darle ninguna golosina, para demostrarle que lo quiero. El me quiere así como así. El sabe que me preocupo por él, y que lo quiero.” La madre estuvo de acuerdo. Elena, nosotros no amamos a las personas, o a las mascotas, porque ellas nos darán algo, sino que los amamos por lo que son, y como son.” Esta vez asintió Elena: “Exacto. Mischa es mi pequeño cachorro y lo amo, simplemente porque nos

1717

Benita Tovstiga, Hamilton

PÁGINA INFANTIL �07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA�

pertenecemos. Y él me quiere porque sabe que me preocupo por él, porque juego con él, y también porque le doy un lindo hogar. No tengo que darle galletas para probarlo.” La madre sacudió la cabeza afirmativamente. “Tienes toda la razón, Elena. Y ahora veamos las cosas a cerca de Dios y de ti. ¿Tú perteneces a Dios, no es así?” Elena afirmó con la cabeza. La madre prosiguió: “¿Amas a Dios solamente porque te da todas las cosas?” “¿O lo amas porque es bueno, sabio, amoroso, y porque le perteneces?” Elena pensó en la pregunta y confesó: “Yo amo a Dios, porque es bueno, porque envió a su único hijo a la cruz para pagar mis pecados. Yo creo que no solamente amo a Dios porque me da mucho, aunque con frecuencia lo hace.” La madre afirmó nuevamente. “El te da tanto, porque te quiere mucho. Dios nos ama, a pesar de que no somos capaces de devolverle algo. Exactamente así como amas a Mischa, aunque él no te puede ofrecer nada. Por lo tanto tu amor a Dios, no debe depender de lo que él te de. Nosotros lo amamos como persona. Lo amamos porque es misericordioso, fuerte, santo y amoroso. Nadie es

mejor que Dios. Y eso no cambia una mala nota en matemáticas. Elena sabía, que su madre tenía razón. Ella comprendió, que Dios no siempre escuchaba sus oraciones como ella esperaba, pero él es siempre bueno. Voluntariamente se arrodilló junto a su madre, y pidió a Dios perdón por su descontento, y le agradeció que fuera tan bueno con ella. Piensa sobre esto: Elena creyó, que Dios escucharía su oración y le ayudaría a sacar una buena calificación, porque ella sabía que Dios siempre contesta las oraciones. Ella esperaba, que él recompensara su diligencia en el estudio y en la oración, regalándole una buena nota. ¿Tal vez recuerdes una oración que Dios ha respondido, de otra forma a la que tú esperabas? ¿Qué debemos hacer, cuando Dios nos da una respuesta diferente a la que esperamos? ¿Qué dice la biblia sobre eso? “Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia.” (Proverbios 3,5) “Porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad.” (Salmos 84,11) ¡Estos son excelentes versículos para aprender de memoria! Recuerda siempre esto: lo que a nosotros nos parece bueno, tal vez Dios no vea que sea lo mejor para nosotros. El es siempre bueno. Solo debemos aprender a confiar en el. El siempre nos dará lo que es mejor.

18

Silencio en la vida cotidiana


La familia es como un idilio silencioso, feliz, un lugar de paz y alegría – cuando los niños duermen y descansan, y los padres encuentran un tiempito para estar juntos. Pero apenas despierta el nuevo día, se ven las pequeñas y grandes preocupaciones, las distintas tareas del día, los problemas que deben ser solucionados. Padres y Madres son como directivos, que deben llevar sus propias y ajenas necesidades. Una y otra vez vienen grandes problemas que aparentan insolubles.

Vivimos en un tiempo presuroso, donde el trabajo y el producir nos quieren llevar cautivos. También como cristianos somos atacados por el ruido en nuestro tiempo, pero necesitamos del silencio, como el aire para respirar. Cada verdadero cristiano tiene el anhelo de una vida victoriosa, santa y agradable a Dios. Lamentable es, que algunos son desalentados en tribulación (aflicción) tentación o enfermedad, les falta fuerzas para vencer y Fe para superar. ¿No es la causa, muchas veces, que a personas les queda oculta la Fuente Divina que se encuentra en el silencio?

Dios a provisto en su orden de la creación un matrimonio bendecido, una familia feliz. Pero con pesar, vemos que no hay muchos matrimonios o familias verdaderamente bendecidas y felices. Para nuestra vida personal, la realidad nos lleva a estas preguntas:

¿Cómo obtengo la fuerza para vivir una vida victoriosa? ¿De dónde obtengo ayuda en situaciones difíciles?

¿Dónde consigue un matrimonio, o una familia, las instrucciones que les permita llevar una vida feliz y bendecida?

La respuesta es: ¡En el silencio con Dios!

Tomemos unos ejemplos extraídos de la Biblia que ratifican ésta afirmación:

1- El Rey David era un hombre valiente. Ya en su juventud, cuando aún era pastor, mató a un león y a un oso cuando atacaban su rebaño. (1 Samuel 17; 34-36). También derrotó al gigante Goliat, del ejército de los filisteos. (1Samuel 17; 49). Cuando se convirtió en Rey, cruzó por muchas luchas y dificultades, en las que necesitaba la ayuda y el poder de Dios.

¿De dónde recibió ésta ayuda?

En el Salmo 62, David nos revela la fuente de su poder: “En Dios solamente está acallada mi alma; De él viene mi salvación” ¡Aquí estaba el secreto de su éxito, y el poder de su vida victoriosa!

2- También al gran profeta Moisés, tuvo que aprender a estar en silencio en Dios. Cuando vivía en la casa del faraón, y aún no había sido llamado por Dios, mató a un egipcio en el celo por su pueblo. El quería lograr algo con sus propias fuerzas. Pero Dios no podía utilizar a éste Moisés. Tuvo que vivir como pastor por 40 años, y aprender a conocer a Dios en silencio y soledad. Cuando aprendió a estar en silencio en Dios, se le apareció Dios y le dio la orden de librar al pueblo de Israel del imperio egipcio.

Con mano poderosa sacó Dios a su pueblo por medio de Moisés de Egipto, pero al poco tiempo estaban en gran angustia, ya que el ejército de Faraón los perseguía. Cuando el pueblo en turbación, acusaba a Moisés, él les dijo: “No temáis; estad firmes, y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros; porque los egipcios que hoy habéis visto, nunca más para siempre los veréis. Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos.” (Éxodo 14; 13-14).

19

W.I.

�07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA�PÁGINA FAMILIAR

Educación fraternal

3- Muchos años más tarde, en la tierra de Canaán, cuando el Pueblo de Israel se apartó de Dios. Habló Dios al pueblo por medio del profeta Isaías: “En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza.” (Isaías 30; 15).

4- En 1. Reyes 18 leemos del profeta Elías, que estaba solo del lado de Dios, y declaró al pueblo y a los 450 ministros de Baal, que solo Dios es el Señor. Y Dios hizo un milagro: por la oración de Elías, descendió frente a todos, fuego del cielo y consumió el sacrificio. Y volvió a llover, luego de tres años y medio.

Pero cuando la Reina Jezabel esa noche, amenazó matarlo, Elías huyó al desierto por temor. Apareció Dios y le dijo: “… Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto. Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado.” (1 Reyes 19; 11-12).

No en el viento, ni en el terremoto y tampoco en el fuego, sino en un apacible y delicado silbo apareció Dios a Elías, lo animó y le mostró que no había quedado solo, había otros 7000 hombres en Israel, que no doblaron sus rodillas ante Baal. Aquí, en el silencio con Dios, recibió Elías la última orden que debía cumplir.

5- Cuando Jesús vino a la tierra, nos ha dado un ejemplo. Mateos 11; 23: “…subió al monte a orar aparte…”, y en Lucas 5; 16: “Mas él se apartaba a lugares desiertos, y oraba.”

En el sermón del monte, Jesús enseñaba entrar en la habitación, cerrar la puerta y orar al padre en secreto. Jesús no se refería solamente a llavear la puerta de la habitación, sino también a apartar el corazón del tumulto mundano y descender al valle del silencio. La divinidad del silencio, es la llave hacia la presencia de Dios. Allí recibimos ayuda, fuerzas y todo lo que nuestra alma desea.

Querido padre, querida madre ¿Conoces tú el lugar del silencio? No existe reemplazo para este tiempo en la presencia de Dios. Aquí podemos buscar fuerzas y sabiduría al igual que David. Y si nos encontramos en situaciones difíciles, recordemos la experiencia de Moisés: -Silencio en Dios, El quiere ayudar. ¿Qué hacer ante errores – pecados? El camino del arrepentimiento y silencio en Dios, nos servirá a nosotros y a nuestros hijos, para la salvación, como al pueblo de Israel. Muchas veces, grandes tormentos pasan por familias con hijos en crecimiento. Nuestra alma, puede estar débil y desanimada, pero en la presencia de Dios hay ánimo y nuevas fuerzas. Así lo experimentó Elías, y así también Dios nos ayuda hoy.

Amemos esta fuente y acerquémosla también a nuestros hijos. Dios responderá con ricas Bendiciones.

El Señor W. y su esposa excavaron y prepararon una pequeña huerta, un cantero había quedado vacío. El, en secreto sembró lechuga sobre él, para darle una alegría a su esposa. Al día siguiente, su esposa, en secreto plantó porotos. Todos los días iban, el hombre y la mujer, en secreto a desyugar el cantero, sin saber, uno del otro lo que habían sembrado. La mujer arrancaba la lechuga pensando que era yuyo; y el

hombre los porotos, de esta manera, el hombre no adquirió lechuga, ni la mujer porotos. Este es el resultado en la crianza de niños. ¡Si la madre permite lo que el padre prohíbe, y si el padre desyuga lo que la madre plantó y cuidó! Una vieja historia y buena lección que acontece a diario.

20

Seminole, Texas (USA)

Perfil de la Iglesia


“Dios quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.” (1 Tim. 2, 4) En el oeste del Estado de Texas se encuentra la pequeña ciudad de Seminole. En los años setenta, se trasladaron al lugar, alemanes procedentes de México, en busca de tierras para trabajar. Entre ellos se encontraban personas que tenían conocimiento de la doctrina de la iglesia de Dios, teniendo el deseo de escuchar aún más. En el año 1982 enviaron una carta a México con el deseo de comenzar con reuniones de la iglesia de Dios en Seminole. La iglesia de Aylmer, Ontario, Canadá y la misión de Neustäd en México tenían una estrecha relación, parientes y conocidos realizaban este recorrido de 3000 kilómetros en auto, el cual pasa por Seminole. Los hermanos Elke y Nimz visitaban a los hermanos de este lugar, de paso, en sus viajes de Canadá a México, realizando cultos. En 1985 los

hermanos alquilaron un local, y el hermano Kehler estuvo al servicio y les predicó por una semana. En los años siguientes se trasladó con su familia al lugar, comenzando con reuniones periódicas. En el primer verano se realizó la escuela bíblica de vacaciones, participando 28 niños. Con este trabajo no solo se ganó a los niños, sino que, en muchos casos, también a los padres. Así pasó a ser la escuela bíblica de vacaciones, que se realiza todos los años, una rama importante en la obra misionera hasta hoy. En el comienzo se alquiló para los cultos, una casa en la ciudad. Al poco tiempo, este lugar quedó muy pequeño. Con tiempo bueno, se realizaba la escuela dominical al aire libre. A principios de 1989 se pudo adquirir, con la ayuda de la iglesia de Benton Harbor, Michigan, una parcela de 10 acres (40 000 m²) fuera de la ciudad. Los hermanos de Seminole, acudieron con

ánimo a la labor. Recibiendo ayuda desde otros lugares, en el mismo año, para acción de gracias, pudieron inaugurar el nuevo templo. Para esta fiesta estaban invitados los hermanos Fritz Friedrich de San José, California (EE.UU.) y Joseph Jakobsh de Aylmer (CA). Los integrantes del coro de la iglesia de Swartz Creek, Michigan embellecieron los cultos con sus canciones. Los hermanos Kehler apoyaban mucho los esfuerzos de los hermanos para que los niños recibieran clases de música. El esfuerzo agregado ha sido un beneficio para las bendiciones. Se alegraban los padres y visitantes, cuando los niños demostraban sus talentos para la gloria de Dios. Después que los hermanos Kehler han servido en este lugar por ocho años, continuaron el trabajo los hermanos Ens de Aylmer, Ontario. El apóstol Pablo escribe en 1 Cor. 3: “Yo planté, Apolos regó, pero el crecimiento lo ha dado Dios.” Dios usó a sus siervos como colaboradores en su obra, para que la iglesia de Dios, la cual, Jesús ha comprado por medio de su sangre, sea construida y fortalecida. Con el tiempo, venían más y más personas de los pueblos alemanes de México a Seminole. Algunos de ellos visitaban los cultos en la iglesia.

21

Harold y Nettie Mueller

�07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA��PERFIL DE LA IGLESIA�

Algunos de los niños y jóvenes entendían solamente el dialecto alemán e inglés, pero muy poco el alemán puro. Por tal motivo se comenzó, una vez al mes, con cultos en inglés. Los hermanos Ens estaban al servicio de la iglesia diez años, recibiendo luego el llamado de los hermanos de Neustädt, México. En el año 2000, Dios nos llamó al trabajo espiritual en la iglesia de San José, California. Después de cinco años, los hermanos de Seminole, nos pidieron para continuar el trabajo junto a ellos. Hemos visto que fue la voluntad de Dios, respondiendo al llamado en enero de 2005. Hace algunos años, había una fuerte solicitud, que se realicen más cultos en el idioma del país. La congregación oró fervientemente para la guía de Dios en este tema. Los hermanos sintieron la necesidad de manera uniforme a ir por este camino. Dios bendijo el sentimiento común entre los hermanos y más personas asistieron a los servicios

religiosos. En septiembre de 2010 se nos permitió celebrar, como iglesia, nuestro 25 aniversario. Como Seminole está situado lejos de las otras iglesias locales, para muchos hermanos, esta fiesta fue una nueva experiencia. Los mensajes para esta fiesta nos trajeron los hermanos Semenjuk, Kehler y Ens. Desde Edmonton, Alberta (CA) viajó a un grupo de hombres y nos deleitó con himnos de bendiciones. También hemos dado la bienvenida a muchas visitas de México, Canadá y de otros estados. La palabra de Dios cayó sobre tierra fértil, almas han encontrado paz y ayuda en Dios. La fiesta fue de bendición y la concordancia entre los hijos de Dios, era para todos nosotros, un gran estímulo. Dos meses mas tarde celebramos una fiesta de bautismo, en la cual seis personas fueron bautizadas. Con los años el espacio de la casa de la reunión era demasiado pequeño. Después de varios años de oración y planificación, nos

propusimos, con la confianza en Dios, agregar una gran parte al edificio. Hermanos y hermanas se pusieron bajo esta carga, oraban, ofrendaban y construían. Podemos testificar, que el Señor es siempre fiel. También la ayuda financiera llegaba en el momento adecuado. Ahora, en la primavera de 2011 surge en el país una sequía, la cual no se vivió hace más de 50 años, Debido a que esta zona es muy dependiente de la agricultura, el futuro económico se ve muy opaco. Pero Dios sabe que es lo mejor y próspero para nosotros, como hijos suyos. Sabemos, que el Señor está más cerca en los valles. Mientras la sequía no llegue al alma, Dios, en esta situación nos dará su bendición. Nuestro deseo como iglesia local es, ser un faro, para anunciar a muchas almas el evangelio de redención, guiando del camino equivocado al de la vida.

2422

Sin amor


“Ahora sí que me harté”, refunfuñó para sí mismo con enojo el carpintero Steinhart, mientras se quitaba el abrigo. “¿A que te refieres, hombre?”, preguntó la señora Steinhart, quien justamente ponía la mesa. Pero ella no recibió respuesta. En lugar de eso salió con voz quejumbrosa de la boca del marido lo siguiente: “¿Por qué voy todavía en realidad allí? Se hacen llamar una reunión de cristianos y son tan fríos, tan fríos como…” “¿Es ese el efecto de lo que escuchaste hoy?”, interrumpió sonriente la esposa. “Ni el más mínimo amor está presente”, prosiguió furioso Steinhart, sin prestar atención a la observación de su esposa. “Ya en sus rostros puedes leerlo: No te necesitamos. ¡Nos arreglamos bien sin ti! Nadie que lo visite a uno alguna vez. Ninguna persona, que ni siquiera así un poquito” -un gesto demostrativo con la mano- “se interese en uno. No, yo no voy más. ¡Ya tengo suficiente de así una comunión!” Toda la noche no se modificó el estado de ánimo de Steinhart. El permaneció reservado y de mal humor, y cuando después de la oración de la noche - ¿había orado en realidad en esta noche? – se fue a la cama, no pudo conciliar el sueño por largo tiempo. Con el mismo mal humor se levantó a la mañana siguiente, tomó su café y fue a la carpintería. “¡Mal clima hoy!”, pensó Martín, el aprendiz de carpintería, quien en esta mañana no podía hacer nada bien para su maestro. Del “mal clima” debía conseguir en el transcurso de la mañana una prueba más precisa, pues cuando el se fue a la casa al mediodía, había una mancha roja en su mejilla izquierda. En el interior de Steinhart aún seguía fermentando. Al cepillar, martillar y serrar siempre le sonaban dos palabras en los oídos: ¡Sin amor! ¡Sin amor! Al anochecer, su decisión estaba tomada. El quería, en

cuanto su esposa hubiese ido a la cama, escribir a los hermanos y explicar su retiro de la congregación. Y el escribió: “¡Queridos hermanos!” Aquí se detuvo. ¿Se escribía así a personas que no tenían amor? No, eso no funcionaba. El tuvo que tomar una hoja nueva. “A los hermanos en…” Así estaba mejor. El continuó: “Por la presente declaro que ya no me considero perteneciente a su congregación por más tiempo. El motivo de mi retiro: No hay amor entre ustedes. Respecto a mi opinión sobre una verdadera vida en comunión fraternal, se debería encontrar más amor en ustedes. ¡Respetuosamente! Steinhart” “Sin amor” había firmado. Eso podía motivar a la reflexión. Pero una cosa había olvidado. Un versículo bíblico debía ser añadido. El pensó en un pasaje apropiado. Pero no era tan sencillo encontrar una palabra sobre “sin amor”. No se le quería ocurrir ni siquiera un pasaje. Después de todo el no leía mucho la Biblia. Generalmente sólo en la mañana o en la noche rápidamente un párrafo. Pero el poseía una concordancia. Ella le podía ayudar. La tomó ligeramente del estante y buscó “amor” y “amar”. ¡Cuántos pasajes había, que hablaban del amor! Muchos más de lo que él había pensado – ¡así que piedras suficientes para dar con ellas a los hermanos sin amor! Juan 13,35 – eso ya era palabra apropiada: “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos por los otros.” También Romanos 12,10 estaba bien: “Amaos los unos a los otros con amor fraternal.” O también Efesios 5,2: “Andad en amor.” Especialmente este último dicho le gustó, porque era tan corto. Luego 1. Pedro 4,8: “Y ante todo, tened entre

252123

�07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA��SIN AMOR�

vosotros ferviente amor.” Y ahí había pasado incluso sobre otro pasaje, Hebreos 13,1: “Permanezca el amor fraternal.” Siguiente: 1. Juan 4,20: “Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?” En esta parte Steinhart se puso un poco incómodo. El abrió aún en otros pasajes. ¡Mateo 5,46 y 47! ¿Qué decía ahí? “Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más?” Para Steinhart fue como si una flecha hubiera penetrado en su corazón. Rápidamente abrió todavía otro pasaje: 1. Corintios 13. En este capítulo se habla especialmente mucho sobre el amor. “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia.” Pensativo, Steinhart hizo una pausa por un momento. Entonces prosiguió con leer: “El amor no es jactancioso, no se envanece…, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor.” Steinhart quedó pequeño, muy pequeño. El continuó leyendo: “No se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.” Steinhart quedó aún más pequeño. Quedó sentado por un rato en silencio, absorto en sus pensamientos. Entonces cerró su Biblia y se fue a la cama. Pero la herida en su alma, la cual le había hecho la Palabra, la llevó consigo. En esta noche Steinhart pudo conciliar aún menos el sueño que la noche anterior. La Palabra de Dios, que es viva y es efectiva y es más cortante que cada espada de dos filos, le había alcanzado. El luchó una dura batalla consigo mismo. ¿Acaso no era cierto que faltaba amor entre los hermanos? ¿No eran todos, en efecto, muy fríos y faltos de amor? “¿Y tú?”, resonó de pronto en su interior. ¡Pero el Señor Jesús quiere que tengamos amor entre nosotros! “¿Y tú?”, preguntó nuevamente la voz. “¿Haz demostrado tú este amor?” “No”, se confesó honestamente, “yo no he amado como yo debía. Pero – pero – ellos también mataron mi amor.”

“¡El amor nunca deja de ser!” El reflexionó al respecto, sobre lo que él había experimentado. El modo de actuar de los demás simplemente no era para disculpar. “El amor no se irrita”, le hablaba en su corazón. ¿Entonces no podía esperar justamente que se diera más amor? “El amor no busca lo suyo”, le respondió en su interior nuevamente . ¡Pero cómo se le había herido por el comportamiento sin amor! Que el estuviese tan disconforme, no había sucedido por su culpa. “El amor no se irrita”, sonó nuevamente. ¿Pero de que serviría, si él cambiara? Si nada de atención se le daba. Ahí el podía hacer lo que él quería. Sería en vano. “El amor todo lo espera, todo lo soporta, el…” No, ¡eso no se podía soportar! La Palabra lo condenaba mucho más que a los otros. “¡Sin amor!”, se quejó en voz baja. “¡Sin amor!”, parecía que un eco realmente regresaba sonando. El ya no podía aguantar más en la cama. También la señora Steinhart se había levantado más temprano que de costumbre. En silencio la pareja tomó su café, y cada uno fue a su trabajo. En la carpintería Martín aún no había encendido el fuego, cuando el maestro apareció. Aún era temprano en la mañana. Steinhart se dirigió con enojo hacia el joven, y no faltaba mucho, entonces habría dado otra vez una bofetada. “¡Sin amor!”, sonó allí de pronto una voz. ¿Lo había dicho Martín? No, ¿cómo iba a hacerlo? Eran sus nervios. El estaba agotado y cansado. Steinhart se acercó a la ventana. “¡Sin amor! ¡Sin amor!”, le sonaba sin cesar en los oídos. En la gran carpintería, donde Martín hacía su trabajo quietamente y sin ruido, al maestro se le hizo demasiado pequeño. El fue al exterior, y Martín lo escuchó ir para su asombro al lugar de almacenamiento de la madera. ¿Qué le faltaba al maestro? Ahora que el pegamento estaba tibio, ¡se iba!

24 TROMPETA EVANGELIZADORA - 07/2011

En el depósito de madera estaba Steinhart sobre sus rodillas. Su cabeza descansaba sobre un bloque de madera. Por largo rato gimió y suspiró con pesar. Al fin vino una palabra de sus labios: “¡Oh, Dios! ¡Yo no tengo amor! ¡Dame tú amor en el corazón!” Después hubo silencio. También en el interior de Steinhart se había tranquilizado. Martín estaba contento de que había mantenido tibio el pegamento, pues el maestro entró de pronto otra vez en la carpintería. Apresuradamente quiso quitar la cacerola del fuego, pero, oh, susto, el enganchó con ella en la mesa de trabajo, la dejó caer, y ahí estaba el bello pegamento. Horrorizado miró al estricto maestro. ¿Qué sucedería ahora? Pero el maestro dijo nada más que: “¡La próxima vez debes ser más cuidadoso, Martín!” Cómo se asombró el aprendiz, de que el asunto se resolviera tan compasivamente para él. Pero no quedó ahí nomás en este único asombro. No, todo el día no sabía qué debía pensar del maestro. Tan amable jamás había sido hasta entonces. También los siguientes días le resultó agradable al muchacho el comportamiento completamente distinto del maestro. No le pasaba inadvertido, que el señor Steinhart acudía frecuentemente al depósito. Cuando regresaba de allí, cada vez había entonces una notable expresión serena en su rostro. Mucho tiempo no pensó Martín en la incógnita. Lo importante era que él lo tenía mejor. Era sábado a la noche. La señora Steinhart veía venir en esta noche el regreso de su esposo con lógica tensión preocupante. Seguramente ella también había notado que él era distinto que antes en estos últimos días, mucho más amable, agradable y mucho más cálido que hasta ahora. ¿Pero qué sucedería hoy? Ella había tenido mala suerte, doble mala suerte. En primer lugar se le había quemado la comida, y cuando la ropa fue traída a casa, ella había descubierto que no tenía ningún cuello almidonado – dos cosas en las cuales él era especialmente delicado. Cautelosamente ella le explicó, cuando se habían sentado a la mesa, sobre su percance. Pero cómo se sorprendió, cuando riendo dijo respecto a la comida, que ya iba a bajar, y sobre el cuello, que aparentemente el podría usar una vez todavía el del domingo anterior. ¿Se había transformado su marido en completamente otro? Pero su asombro iba a ser aún mayor. “Mujer, ¿vamos mañana ambos al culto?”, preguntó de pronto Steinhart.

Ahora la señora no se podía contener más. “Pues dime de una vez hombre, qué lo que sucede contigo. Ya toda la semana eres mucho más amable y cálido que de costumbre, y ahora quieres ir incluso al culto, del cual ya no querías saber más nada. ¿Cómo puedo entender todo eso?” “¿Es realmente así, que yo soy más amable, mujer?”, preguntó Steinhart y la miró con una sonrisa de felicidad. “Entonces te voy a decir qué es lo que sucedió.”

Y entonces la señora Steinhart escuchó lo que había ocurrido en el alma de su pareja, cómo el había escudriñado la Palabra de Dios, para encontrar en ella algo que él pudiera echar en cara a los demás, cómo por el contrario él mismo había sido puesto en su lugar a través de ella.

En esta noche los Steinhart leyeron juntos 1. Corintios 13, y antes de que fueran a descansar, oraron juntos que por medio de la fuerza del Espíritu ellos fueran ser capaces de andar en amor verdadero y ser desbordantes en ello.

A la mañana siguiente fueron a tiempo al culto. ¡Qué ánimo de felicidad tenían hoy!

Cuando Steinhart tomó el lugar al lado del anciano panadero, éste le dio un cálido apretón de manos. ¿Había sucedido eso ya normalmente? ¿O había recibido recién ahora un ojo para lo bueno? Antes de comenzar el culto Steinhart solía orar en silencio para sí mismo. Pero en esta mañana el oró diferente a lo normal. Esta vez el pidió no sólo bendición para sí mismo, sino también para que toda la congregación fuera bendecida y que el servicio a la Palabra estuviera sujeta a Dios. El cantó y escuchó hoy también diferente a como de costumbre. El hizo ambas cosas de todo corazón, de forma que la Palabra pudo alimentar su alma. El sintió que en todo lo que se decía, el amor hablaba. El hablaba también desde las exhortaciones. Antes el se molestaba por el exhortar. Ahora lo tomaba agradecido. Al final del culto Steinhart no salió tan apresuradamente como de costumbre. Él le pasó a éste y a aquél la mano todavía. Las personas le parecían totalmente distintas hoy. ¿Había cambiado Dios a todos juntos, o sólo a él? El estaba profundamente avergonzado, cuando recordaba, lo que todavía hacía ocho días él había dicho . El fabricante H., a quien él siempre tenía por un hombre arrogante, entabló una conversación con él.

25�SIN AMOR� �07/2011 - TROMPETA EVANGELIZADORA�

Paul Waltersbacher(Guíame Tu camino)

Pie de imprenta La TROMPETA EVANGELIZADORA es una escritura cristiana que se presenta clara y decididamente para la plena salvación en Cristo, la unidad de los hijos de Dios, y revelar todas las verdades de la Santa Palabra. Publicado en intereses de la Iglesia de Dios. Editor responsable: Hans-Dietrich Nimz Comité de Publicaciones: Alfred Brix, Siegfried Raash Y Reinhard Roessler. Los editores se reservan el derecho de resumir o no publicar los artículos recibidos.

Preguntas o sugerencias pueden ser enviadas a: [email protected] A journal of vital Christianity, published in the interest of the German Church of God by: Christian Unity Press, PO Box 527, York, NE 68467-0527, U.S.A. Tel.: (402) 362-5133 Fax: (402) 362-5178 Email: [email protected] www.evangeliumsposaune.org www.christianunitypress.com La Trompeta Evangelizadora es distribuida gratuitamente. Los costos se sustentan por donaciones.

Año 117

Kontaktadresse in Deutschland und Europa: Gemeinde Gottes Herford 32051 Herford Zimmerstraße 3 Tel.: 05221/762977 Email: [email protected] Traducido y editado al idioma castellano por miembros de la Misión de la Iglesia de Dios en Argentina. IGLESIA DE DIOS Bme. Mitre 466 3360 Oberá – Mnes. E-mail: [email protected]

En ella se trató una pregunta que no se podía resolver inmediatamente. Sin pensar mucho le preguntó por eso al hermano: “¿Tienes interés en venir hoy de noche un momento con tu esposa a nuestra casa?” El quiso agregar: “¿O voy yo a lo de ustedes?” Pero H. ya había aceptado. “Con mucho gusto”, respondió él. “Te agradezco por la invitación. Hace mucho tiempo habría ido a lo de ustedes, si hubiese sabido que les habría sido grato. ¡Hasta hoy de noche entonces!” En la noche ellos vivieron bendecidas horas. Los Steinhart se sorprendían una y otra vez de lo amables y lo fraternales que eran las finas personas. Y los visitantes se asombraban de la calidez y toda la forma de ser de los carpinteros, los cuales ellos hasta ahora veían como personas que sólo vivían para sí mismos. “Realmente uno no sabe antes cómo son las personas, hasta que uno las visita una vez en su casa”, le dijo el fabricante a su esposa en el camino a casa. “Yo estoy contento de que hayamos conocido un poco más de cerca a los Steinhart, y espero que mantengan su palabra y nos devuelvan la visita en ocho días.” Los Steinhart descubrieron que jamás habían vivido un día tan feliz en comunión con otros cristianos. El amor pues también causó comunión.

De este modo Steinhart se transformó en un verdadero orador. El oraba por todos sus hermanos en Cristo, no en un espíritu de autoridad, sino como el más simple entre los creyentes, con verdadero, santo amor y una y otra vez rogaba: “¡Oh, Dios, llena tú mi corazón con tu amor, y luego déjame ir y llevar este amor a otros!” Aún siguió abriendo frecuentemente su Biblia, para leer sobre “amor” y “amar”, pero nunca más para buscar piedras, las cuales pudiera tirar sobre otros. Solamente le interesaba ser instruido, enseñado y nutrido por medio del valioso alimento que el Dios del amor con tanto gusto ofrece en abundancia. “¿Sabes lo que he notado, mujer?”, le dijo a su esposa cuando estaban solos. “No hemos hablado sobre el amor en esta noche, pero lo hemos experimentado.” “Sí”, confirmó la señora, “realmente te hace mucho más feliz dar amor, que esperarlo para uno mismo. ¡Dios nos ayude a practicar más amor!” “Tienes razón”, confirmó con calidez el esposo. “¡Que aquel que es el amor, nos dé la fuerza para ello!”

Anuncios: Congreso Anual Buenos Aires (Argentina) Congreso Anual Oberá, Misiones (Argentina)

1 al 6 de Noviembre de 2011 Alsina 150; José L. Suarez Tel: +54 011-48471773

9 al 13 de Noviembre de 2011 Bartolomé Mitre 466; Oberá Tel: +54 03755-424582 E-mail: [email protected]

AÑO 117�

Vale la pena

Un hombre rico en la India puso a dos trabajadores, con

una determinada remuneración, con el fin de vaciar una

cisterna, Los dejó con la indicación, que volvería por la

noche para evaluar su trabajo.

Los baldes, que utilizan, no eran muy muy buenos.

Después que habían sacado y vaciados dos o tres baldes,

dijo uno de los trabajadores, indignado: “¿Para qué éste

trabajo inútil?, una vez que el agua está en el balde, cae la

mitad afuera”. El otro le respondió: “Si, pero de otra

manera no podríamos ganar nuestro jornal, si el trabajo

sirve o no, es cosa de nuestro jefe, no la nuestra” “Yo no soy

ningún necio, para estar sufriendo sin sentido”, dijo el

primero, tiró el balde y se fue.

El otro trabajador permaneció tranquilo en su trabajo,

haciéndolo, aunque con mucho esfuerzo, para lograr sacar

toda el agua hasta la noche. Cuando observó el fondo, vio

algo brillante en el interior de la cisterna, era un valioso y

costoso brazalete con diamantes.

¿No se perece, en muchas situaciones, que los trabajos son

totalmente en vano? Todos los esfuerzos parecen no tener

sentido y son ineficaces. Pero el maestro nos ha puesto allí,

Él sabe porqué lo hizo, si en todos los casos perseveramos,

recibiremos la recompensa de fidelidad.

trompeta evangelizadora · bendición en el silencio estar en silencio (verso) el poder del...

Documents