veneno irresistible

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Resumen: Bajo la influencia de una pocin de amor, Draco aprende que un veneno no siempre acarrea la muerte -- hay otras formas peores de sufrir y vivir.

Captulo 1: Vino del Cielo Vino envenado del CieloUn amor antinatural, y un odio aun m s antinaturalHarry caminaba silenciosamente a travs de los terrenos de Hogwarts, rumbo a la lechucera. Iba solo y lanzaba miradas cautelosas sobre su hombro, el suave crujido del pasto bajo sus pies se amplificaba una docena de veces en el silencio de su mente. Los rboles llenos de nudos del Bosque Prohibido formaban siluetas tenebrosas y siniestras contra el oscuro cielo de la noche, dndole una sensacin de incomodidad.

Sin su capa de invisibilidad, se senta expuesto y vulnerable, como si cada sombra huyera a su paso y lo dejara perfectamente visible bajo la luz de la luna. Le haba prestado la capa a Sirius, ya que ste segua escondindose y necesitaba la proteccin de la invisibilidad mas que l. Desde entonces, Harry haba tenido que interrumpir sus escapadas nocturnas, pero esta noche no haba podido conciliar el sueo y haba1

decidido enviarle una carta a su padrino. Como Ron ya se haba dormido, tuvo que aventurarse solo.

El aire de la noche era fresco, ola a roco y a hierba cortada y estaba matizado con la aromtica esencia que emanaba de las exticas floraciones nocturnas del Bosque Prohibido que se encontraba cerca. Harry respir profundamente, saboreando el sutil aroma que reflejaba el alma del agitado Bosque: extraamente refrescante y oscuramente tentador; todo al mismo tiempo.

De pronto, atrajo su atencin un trmulo destello plateado a su derecha, mismo que desapareci tan rpido como haba aparecido. Mir atentamente en esa direccin, mientras escuchaba un suave susurro que confirm sus sospechas. Haba movimiento en los oscuros arbustos a unos cuantos metros de l. Sujet su varita y se acerc con cautela. Conforme se acercaba, el cielo se despej un poco permitiendo pasar un generoso rayo de luz, y se qued boquiabierto cuando sus ojos se posaron en la figura ante l.

"Malfoy?!"

La esbelta figura se sacudi en respuesta y Harry capt el breve destello plateado de unos ojos conocidos que voltearon a verlo, cubiertos con una inusual expresin de completa sorpresa. Abri mucho los ojos al recorrer rpidamente el cuerpo de Malfoy y por un momento se qued sin habla mientras lo miraba con genuino asombro.

Cuando al fin pudo pronunciar palabra, su voz era dbil.

"Malfoy - qu ests haciendo desnudo?"

Quera ser invisible.

Parado en medio de la noche, entre los setos que bordeaban el Bosque Prohibido y que se perdan en la oscuridad, se senta ms invisible que nunca. Lo cobijaba el cielo aterciopelado mientras dbiles rayos color marfil se dibujaban vagamente a travs del oscuro lienzo de la noche.

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Pero por supuesto, desde otro punto de vista, como sera el de las lechuzas que dominan los cielos, estaba lejos de ser parte de la noche que lo rodeaba. Su cabello rubio brillaba como plata lquida a la luz de la luna, y su complexin plida estaba teida de un resplandor sobrenatural, como si emanara de su interior, recortando su silueta contra la noche austera. Se destacaba elegante y arrogante, no con una actitud enferma, sino con ese aire nico de alguien que es diferente.

Las botas de Draco avanzaban lentamente en el lodo hmedo y el pasto cruji en bienvenida conforme se acercaba al Bosque, radiante y lleno de vida en la tranquilidad de la noche. Con la mano derecha sujet fuertemente un pequeo frasco que contena un liquido incoloro, claro como el cristal pero que bajo la luz de la luna despeda un brillo opaco. Sus dedos delgados sujetaron firmemente el pequeo recipiente y observ con cuidado el precioso liquido mientras se aproximaba sigilosamente al Bosque.

Haba estado trabajando en esta pocin en absoluto secreto durante las ltimas semanas, reuniendo meticulosamente todos los ingredientes necesarios - tomndolos del armario privado de Snape o comprndolos a un personaje sombro en un callejn de Hogsmeade. Nunca haba sabido de una pocin tan difcil de preparar - no entenda por qu se tenan que agregar determinados ingredientes, pero las instrucciones eran bastante claras y l las haba seguido al pie de la letra. En mas de una ocasin se haba preguntado si valan la pena tantos riesgos y esfuerzos y cada vez la respuesta haba sido afirmativa.

Tena pocas aspiraciones en la vida y aparte de aquellas que le haban sido impuestas, haba una que surga desde el fondo de su ser, el deseo de ser invisible. Poda decir con sinceridad que no era con intenciones voyeuristas - haba deseado esta habilidad desde que era un nio y ese anhelo se haba ido haciendo mas fuerte conforme dejaba atrs la infancia, independientemente de las posibilidades.

Todo lo que quera era la capacidad de desaparecer por un rato, esconderse y ser l mismo. Quera poder apartarse y observar a otras personas sin que ellas lo notaran, escaparse sin que nadie supiera a donde iba. Por supuesto, ser invisible abra todo un mundo de oportunidades - podra hacer muchas fechoras - pero esas no eran las razones principales por las que quera tan desesperadamente la invisibilidad.

El verano pasado haba encontrado un libro de hechizos en la vasta biblioteca de su padre - era antiguo y estaba muy maltratado, tan viejo que los nmeros de las pginas estaban escritos en nmeros romanos. Prcticamente se estaba deshojando, lo nico que lo mantena unido era un frgil cordn que se haba deshilachado en cuanto trat de abrirlo y esto haba ocasionado que las amarillentas hojas de pergamino cayeran al suelo. Rpidamente las alz y se fue a su cuarto para leerlo. Las pginas estaban rasgadas y manchadas por el uso y no todas estaban numeradas claramente porque las orillas del3

papel se haban deteriorado con los aos, pero se las haba arreglado para examinarlo cuidadosamente y para su mayor deleite, encontr una pgina descolorida, medio rasgada, que detallaba una pocin para la Prdida de Sustancia - lotera.

El hechizo result ser extremadamente difcil - pero se supona que era un hechizo muy poderoso de Artes Oscuras y si hubiera sido tan simple como para hacerlo con un movimiento de varita, Draco hubiera dudado de su autenticidad. Con determinacin, se las arregl para reunir los elementos necesarios para la parte final de la pocin, con excepcin de uno. Una rosa negra salvaje. Haba resultado ser el ingrediente ms difcil de obtener; registr las tiendas florales de Hogsmeade en busca de una rosa negra original y no cultivada por medio de magia. Incluso mand una lechuza a Calyx & Corolla (la empresa mejor establecida con servicio de rdenes por lechuza), pero eran mas caras de lo que incluso l poda pagar, debido a que eran de temporada y solo se daban en Escocia en esta temporada del ao.

Finalmente alguien le dijo que buscara en el Bosque Prohibido, donde todas las variedades de vegetacin florecan abundantemente (as como tambin la fauna ms salvaje), particularmente al caer la noche.

As que aqu estaba, poco despus de la media noche, acercndose al Bosque con muchsimo cuidado, rezando interiormente para que pudiera encontrar la rosa negra cerca de la orilla y no tener que aventurarse mas adentro (desde su primer ao en la escuela, le haba agarrado un profundo miedo al bosque de noche.)

Estaba de suerte; su corazn lati apresuradamente cuando sus aguzados ojos se posaron en unas flores oscuras situadas a la sombra del Sauce Boxeador. Teniendo cuidado de no tocar el rbol, Draco se puso de rodillas y observ con ojos entrecerrados los ptalos de la rosa, cuyo color era casi indistinto al de la noche.

Sus dedos temblaron ligeramente al alcanzar la flor, sintiendo las afiladas espinas raspar su piel cuando con mucho cuidado la arranc del suelo con sorprendente facilidad. Sacudiendo la tierra suelta del tallo, Draco la sostuvo a la altura de sus ojos para verla mejor - los ptalos aterciopelados de un negro puro capturaron la lechosa luz de la luna pero no reflejaron nada.

Sonri satisfecho. La ms bella rosa, pintada con el color de la noche.

Antes de ponerse a trabajar, admir durante un momento la perfecta flor que tena en la mano. Solo necesitaba los ptalos (de textura como de negro satn contra sus dedos), con extremo cuidado los removi del tallo y los dej caer, uno por uno, dentro4

del frasco con la pocin que haba preparado con los otros ingredientes. El lquido claro se volvi de repente carmes - no haba rastro del color negro de la rosa, sino un rojo vibrante. Estaba lista - y tena que ser ingerida inmediatamente. No haba vuelta atrs, no ahora.

Respirando profundamente, Draco cerr los ojos y tom la pocin entera de un solo trago. Quemaba. Quemaba como fuego debajo de la piel, lacerando sus nervios con una sensacin tan desconocida que lo hizo jadear. Senta la sangre como astillas de hielo bajo su clida piel, como ondas de calor sobre las venas fras. Intent abrir los ojos, pero los volvi a cerrar rpidamente cuando el vrtigo se apoder de l nublando su visin. El pelo de su nuca se eriz y su cuerpo entero se encendi con un repentino calor, como un aliento caliente estremeciendo su espina, arrasando el fro inicial como si corriera mercurio en su sangre.

El calor era sofocante; Draco se pregunt vagamente si sa era una seal de que el hechizo estaba funcionando y buscando a tientas los botones de su camisa, de un tirn abri el cuello y respir un poco ms fcil cuando el fro aire de la noche golpe contra su desnuda y brillante piel, calmando el calor que le haca estragos por dentro. En un arrebato, sus dedos abrieron los botones restantes y la camisa blanca cay al suelo. Entorn los ojos y levant las manos ante s, tratando de ver si se haba vuelto incorpreo, pero un persistente zumbido dentro de su cabeza distrajo su concentracin. Un calor punzante lo quemaba en aquellas partes donde todava estaba vestido y estaba a punto de desvestirse totalmente de la cintura para abajo, cuando el fuerte ruido de ramas secas crujiendo bajo unos pies hizo que se detuviera a medio movimiento.

Alguien se estaba acercando.

Draco se dio la vuelta y qued cara a cara con Harry, quien estaba boquiabierto con una expresin de sorpresa en sus ojos verdes y lo miraba fijamente, incrdulo.

"Malfoy - qu ests haciendo desnudo?"

Una fugaz expresin de alarma cruz por los rasgos de Draco, parcialmente ocultos por la oscuridad y se hizo un silencio breve y tenso antes de que finalmente hablara.

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"Puedes verme?" no pudo ocultar el desconcierto en su voz, que casi encajaba con la expresin asombrada de Harry.

Ahora Harry se vea disgustado "Claro que puedo verte. El problema es que no puedo ver tu ropa donde debera estar. Qu diablos ests haciendo?"

Malfoy se mir con una mezcla de consternacin e incomprensin, luego mir a Harry otra vez.

"Realmente puedes verme?" repiti, confundido y algo inusual en l, turbado. Se agach instintivamente para recoger su camisa que estaba en el pasto hmedo.

"Ests aqu afuera desnudo, sera difcil no verte!" Harry se oa molesto, resuelto le dio la espalda a Malfoy. "Ponte algo quieres?"

"No estoy desnudo" replic Draco con toda la dignidad posible. "Estoy vestido de la cintura para abajo, si no te has dado cuenta"

"No, no me di cuenta, aunque doy gracias a dios por eso." Harry hizo una pausa y le dirigi una mirada asesina a Draco, quien estaba ocupado cerrando los botones de su camisa, sin darse cuenta de que haban quedado mal. "Qu diablos ests haciendo dando de brincos en el bosque con el torso desnudo Malfoy? Te has vuelto loco?" Harry movi la cabeza con desconcierto fingido. "Siempre he tenido sospechas sobre ti Malfoy, pero nunca hubiera pensado que estuvieras tan loco como para correr por todo Hogwarts en cueros."

"Si, porque podra tropezarme con Filch, no? Y esta es su especialidad." dijo sarcstico, retando a Harry con una mirada igual, mientras se ajustaba el cuello que estaba chueco. "Aprecio tu preocupacin Potter, pero puedes hacerme un grandsimo favor y largarte ahora mismo."

"Puedo reportarte" dijo Harry con calma.

"Si, y puedes explicar tambin que hacas t caminando por el Bosque a estas horas de la noche." Contest impaciente. Estaba ansioso por librarse de Harry tan pronto como pudiera, ya que no tena idea de cuanto tiempo le quedaba despus de haber tomado la pocin, para que sta surtiera efecto, y tendra que explicar mucho mas si6

Potter lo vea desaparecer en el aire ante sus ojos.

La expresin de Harry no se alter en lo absoluto. "Qu ests haciendo Malfoy?" pregunt otra vez, tranquilo. Pareca mucho ms compuesto ahora que Draco estaba completamente vestido y aparentemente no iba a irse a ningn lado sin la respuesta que estaba buscando.

"No es de tu maldita incumbencia, Potter" escupi Draco, con un tono amenazante pero perceptiblemente desesperado "Lrgate." Hizo una pausa y luego con intencin de intimidar a Harry, dijo "O te lanzar una maldicin y no creas que no lo har"

"Y t no creas que no me desquitar," una nota de enojo se oy en la voz de Harry, que entorn los ojos tratando de enfocarlo en la oscuridad, ya que una nube haba tapado la luna y la miserable luz que qued pareca neblina.

Harry dio un paso adelante, sujetando la varita entre los dedos. Draco se tens, cada msculo de su cuerpo estaba listo para entrar en accin, sus nervios estaban alterados por la pocin que flua por su sangre. Era una sensacin extraamente excitante, en parte haba esperado sentirse etreo, como un sueo, como si estuviera flotando en una nube y su forma fsica se hubiera evaporado. Pero lo que ahora senta era completamente diferente, completamente nuevo - se senta mas denso, como si estuviera absolutamente inmerso en su cuerpo, como nunca antes. Sus sentidos estaban intensificados, afilados como la punta de una espada y el tenue murmullo de la intranquila noche resonaba como un pulso ensordecedor al mismo comps que los latidos de su corazn.

Se senta... raro. Y mal.

Draco retrocedi, una sensacin de inquietud creca inexorable dentro de l, una ansiedad y miedo salvajes lo abrumaban, parecidos al pnico que sentira si estando volando en una alfombra a la mitad de Arabia, de pronto recordara que dej la estufa prendida en casa. Ahora lo ms importante en su cabeza era deshacerse de Harry antes de que algo ms sucediera.

"Potter, te lo juro, si no te..." comenz a decir con voz enojada, cuando de pronto las nubes se abrieron mostrando la luna una vez ms y los rayos aperlados recorrieron el oscuro cielo nocturno, cayendo oblicuos sobre la cara de Harry, iluminando sus rasgos con una luz plida, antinatural y Draco se detuvo abruptamente.7

El deslumbrante destello de luz abras su mente sin advertencia, no estuvo acompaado de dolor alguno, mas bien seguido por otra sensacin desconocida, intensa y pura, que vaci su ser completo, una mezcla de incomodidad y xtasis al mismo tiempo. Se le nubl la visin momentneamente, luego pudo volver a enfocar - poda ver los rboles al fondo, iluminados por la luz de la luna, y...

... y a Harry.

Harry estaba parado frente a l, observando nervioso su extrao comportamiento y lo nico que Draco pudo hacer fue mirarlo fijamente, indefenso ante la dolorosa sensacin que corra rpidamente por sus venas devorndolo. Haba dejado su mente sacudida, pero inquietantemente clara, como si cada fibra de su cuerpo se rindiera a esta aterrorizante y nueva sensacin que se haba apoderado de l.

El horror brill en los aterrados ojos grises de Draco que seguan fijos en Harry, a quien la luz de la luna le caa sobre los hombros como perla lquida.

"Malfoy?" comenz a decir inseguro Harry y elev la mano derecha para apartarse el pelo de los ojos, pero para Draco fue como si lo hubiera agarrado del pecho, obligndolo a acercarse y se adelant atnito, sin voluntad propia, hacia Harry.

Antes de que Draco supiera que estaba pasando, haba reducido la distancia entre ellos en silencio. Sus manos sujetaron la asustada cara del otro muchacho, y al momento siguiente se encontraba besndolo de lleno en los labios, duramente, de manera apasionada, totalmente desesperada.

Harry apenas tuvo tiempo de reaccionar, su protesta fue ahogada por los labios de Draco cerrndose sobre su boca, y la fuerte impresin lo paraliz por unos momentos, dejndolo inmvil. Los labios de Draco quemaban los suyos, besndolo con el fervor de alguien que ha cado en una peligrosa adiccin y pas bastante tiempo antes de que su mente le gritara en medio de la confusin Malfoy te est besando! y lo hiciera entrar en accin.

Lo empuj violentamente y tropez jadeante, se cubri la boca con las manos mientras la dulce sensacin del beso permaneca en sus labios.

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"Malfoy!" grit completamente aturdido, sin aliento por la intensidad del beso. "Maldita sea! Qu diablos ests haciendo?!" Harry raramente maldeca, a menos que fuera absolutamente necesario y esta situacin lo ameritaba.

Cuando sus ojos encontraron los de Draco, vio que su sorpresa era mucho ms grande que la suya.

Draco tena en la cara una expresin de consternacin y repulsin que impidi que Harry siguiera hablando. Se vea miserable y el gesto de ahogo que tena hablaba ms elocuentemente que mil palabras. Mir fijamente a Harry, disgustado e incrdulo.

"Qu, qu acaba de pasar?" su voz sonaba trmula y sin expresin alguna.

"Dmelo t" contest Harry furioso, la impresin inicial iba dando paso a la indignacin. "Maldita sea, Qu diablos ests tratando de hacer, Malfoy?"

"Acabo de -besarte?" dijo en el mismo tono de voz.

"Si, por Dios que lo hiciste" la respiracin de Harry an era rpida y superficial, estaba tratando de recuperar la compostura y se apoy contra el tronco de un rbol cercano, ya que no se senta muy firme. "Qu fue eso?"

Draco no pareci or la pregunta de Harry. "Eso fue asqueroso."

La voz de Draco segua sin entonacin, casi hueca. Cerr los ojos, sintindose extraamente ecunime a pesar del frentico horror que creca dentro de l. Saba lo que acababa de pasar, pero no quera pensar en ello, ni siquiera volver a recordarlo jams.

La rabia encendi las mejillas de Harry. "Asqueroso? Tu fuiste el que se abalanz sobre m y dices que es asqueroso?" Pareca que quera ahorcarlo, pero dado lo que sucedi la ultima vez que sus cuerpos estuvieron en contacto, solo un momento atrs, pareci pensarlo mejor. Furioso pas el dorso de la mano sobre su boca "Eres repugnante Malfoy".

Draco estaba a punto de contestar una larga protesta coloreada con palabrotas9

cuando las palabras de Harry lo apualaron, hacindolo sentir una desconocida y dolorosa punzada interior, muy parecida a la sensacin que lo estremeci antes, cuando sucedi lo que no quera recordar.

Que esta pasando? Qu me esta pasando?.

Esas preguntas demandaban respuestas, pero tendran que esperar. Por el momento, tena que enfrentarse con un lvido Harry que pareca estar a punto de golpearlo en cualquier momento y considerando su actual estado de aturdimiento, Draco no estaba muy seguro de poder responder.

Busc la mirada de Harry y nuevamente ocurri, como una sacudida elctrica a travs del cuerpo, solo que ms intensa y penetrante atravesando su piel y llegando hasta su alma. Se sobresalt y un suave jadeo involuntario escapo de sus labios; record la misma sensacin ardiente que amenazaba con...

Poda sentirse cayendo en esos fros ojos color esmeralda, el color del jade destellaba a travs de su mente, el color del deseo, la pasin, el odio, la urgencia y el horror, todos mezclados en una cuerda alrededor de su corazn que lo arrastraba hacia Harry, o a Harry hacia l...

Vete de aqu. Ahora.

Con una exclamacin apagada que son parecida a "Oh Dios," Draco apart furioso la mirada de Harry, sintiendo al hacerlo, un dolor sordo que lo rasgaba, y antes de que olvidara lo que tenia que hacer, se dio la vuelta y se alejo en direccin opuesta. No se molest en amortiguar el sonido de sus pisadas y corri por el terreno sin mirar atrs tan rpido como sus piernas se lo permitieron.

Harry se qued ah parado sin comprender, asombrado, mirando fijamente a Draco, mientras el muchacho giraba abruptamente sobre sus talones y hua. Extrao, pens confundido, cay de rodillas en el suave pasto y recogi un objeto que brillaba a la luz de la luna. Era un frasco de vidrio completamente vaco, excepto por rastros de un lquido rojo vibrante, que Harry pens suspicaz pareca sangre, aunque no crea que lo fuera.

El calor remanente del beso todava hormigueaba en sus labios y Harry sacudi la cabeza completamente desconcertado. Draco Malfoy era la ultima persona que l hubiera10

esperado besar en su vida.

Frunci el ceo, Oh, esto es absolutamente enfermo. Malfoy, de entre toda la gente. Habiendo tenido suficientes sorpresas desagradables para una noche, decidi regresar a la torre de Gryffindor, antes de que otra cosa extraa ocurriera y no le permitiera llegar completamente ileso. Lo nico que s, es que si me vuelvo loco o desarrollo alguna enfermedad crnica ms adelante, pens lgubre, ser debido a esto.

Meti el frasco en su bolsillo, con la carta de Sirius completamente olvidada y regres lentamente a la Torre de Gryffindor, donde en silencio subi al dormitorio y fue hasta su cama. Pero fue solo despus de mucho tiempo de haberse acostado, que el sueo lo venci.

Oh Dios. Qu acaba de pasar? Oh Dios.

Las palabras bullan en su mente como un mantra fervoroso. Draco cerr los ojos mientras entraba abruptamente al bao, cerrando la puerta de golpe sin importarle si despertaba a alguien. Lo mas extrao era que su mente haba estado clara y despejada durante todo el incidente, as que no poda alegar haber estado confundido, aunque su cuerpo estaba angustiado - con una extraa e irreal agona, como si lo persiguiera el recuerdo de una pesadilla aterradora.

Se cepill los dientes cinco veces para limpiar de su boca el sabor de Harry, hasta que le dolieron las encas y empezaron a sangrar. El sabor metlico de la sangre en la lengua despert sus sentidos, haciendo aflorar la sensacin de pnico otra vez.

Qu acaba de pasar?

Saba perfectamente bien lo que acababa de pasar. Haba besado a Harry Potter, eso haba pasado. Recordarlo le hacia sentir nauseas, aunque al mismo tiempo, en el fondo, una parte de su ser anhelaba el perverso y prohibido placer de volverlo a hacer.

Qu sali mal? Por qu la pocin no funcion como deba? Con la lengua lastimada y hormigueante por la pasta dental de menta, regres a su dormitorio, busc el viejo libro de hechizos y lo llev consigo a la sala comn de Slytherin. Estaba oscuro y11

hacia fro, tal como se senta en ese momento y apunt su varita hacia la chimenea. Esta se encendi con un crujido de llamas anaranjadas y aunque el calor se extendi a travs de l calmndolo, no disip la persistente punzada que lo segua atormentando: el dolor del vaco.

Se sent en el suelo apoyndose en un costado del sof y abri el libro, acariciando distradamente el nudo que haba hecho en el cordn. Busc la pgina donde se detallaba la pocin de la Perdida de Sustancia y se encontr mirando fijamente la lista de los ingredientes. La recorri cuidadosamente con el dedo, verificando cada elemento que haba usado, repitiendo otra vez el procedimiento mentalmente, tal como el libro indicaba. La pocin haba sido preparada a la perfeccin.

Sus aguzados ojos siguieron su dedo ndice hasta el final de la pgina y not una oracin que no haba visto antes, la cual, estaba seguro, no estaba la ultima vez que haba buscado, pero ahora estaba escrita en una descolorida tinta azul oscuro.

Draco se inclin hacia delante y entrecerr los ojos, la escritura era cursiva y estaba ligeramente borrosa, pero la frase escrita en latn poda ser leda con claridad:

Traicit et fati litora magnus amor.

La mir fijamente y parpade. Incrdulo, agarr el libro y verific las pginas frentico, pero debido al uso excesivo, los nmeros de las pginas estaban demasiado borrosos para ser entendidos. Su cuerpo entero se puso rgido con un miedo fro al llenarlo un profundo terror que se filtr en su mente al comprender la frase:

Un gran amor puede cruzar los lmites del destino

Mir el libro, los dedos le temblaban. Una pgina deca 'Pocin Para La Prdida De Sustancia' junto con una breve descripcin, las siguientes pginas detallaban el procedimiento. Pero algo estaba definitiva e innegablemente mal.

La oracin en latn, la extraa sensacin que haca estragos en su cuerpo, ese - ese sentimiento.

De pronto se dio cuenta, la violenta comprensin atraves su mente como astillas12

de vidrio: No, no puede ser.

No era una Pocin Para La Prdida De Sustancia - de alguna forma debi haber mezclado las pginas cuando arregl el libro - en vez de eso, haba preparado una... una...

En ese momento ni siquiera fue capaz de recordar una maldicin, debido al fuerte impacto de darse cuenta de lo que haba preparado y que se haba inflingido a s mismo, un impacto que lo atravesaba aullando como si fuera viento del desierto...

"Qu he hecho?" murmur horrorizado; pero tena demasiado miedo de la respuesta.

Captulo 2: FragmentadoEl amor es algo muy fragmentadoHarry se despert tarde a la maana siguiente y se olvid de los acontecimientos de la noche anterior mientras se apresuraba a bajar a desayunar para ir a clases. Solo cuando entr en las mazmorras para la clase doble de Pociones con los de Slytherin, vino a su memoria lo ocurrido, al ver entrar a Malfoy tranquilamente y dirigirse hacia el otro lado del saln.

Lo observ con ojos entrecerrados, pero el rubio jams volte a verlo. Era como si nada hubiera ocurrido, aunque Harry intua que algo haba cambiado entre ellos: la falta de la usual y franca hostilidad, la ausencia de las sonrisas cargadas de desprecio, todo lo que se haba convertido en parte constante de la clase de Pociones.

Definitivamente algo era diferente.

Conforme el final de la clase se acercaba, Ron le dio un codazo a Harry cuando Snape les dio la espalda. "Casi ha terminado la clase y Malfoy no ha tratado de sabotear13

nuestras pociones o de hacer explotar nuestro caldero ni una sola vez." Le dirigi una mirada suspicaz a travs del saln a Malfoy. "Qu le pasa?"

Harry estaba a punto de contarle a Ron lo ocurrido la noche anterior, pero sospech que su amigo podra armar un escndalo apocalptico justo ah en el saln, as que mejor decidi no hacerlo. Quiz despus.

Se encogi de hombros con tanta indiferencia como pudo y replic verazmente, "No s que le pasa."

"Mejor no hablemos antes de tiempo," dijo Ron sombro "la clase todava no termina."

Minutos despus son la campana y concluy la ms extraa, ms tranquila clase de Pociones que Harry pudiera recordar. Sus pensamientos se desviaron al recuerdo de Malfoy besndolo, pero rpidamente se control. Eso era lo que deba hacer para no recordarlo durante mucho tiempo, de preferencia hasta despus de muerto.

Pero, porqu no pareca ser capaz de olvidarlo?

En el otro extremo del saln, Draco se encontraba alzando sus libros y limpiando su caldero, manteniendo los ojos aparte todo el tiempo, sintiendo el peso de la mirada inquisitiva de Harry. Saba que el Gryffindor lo haba estado mirando furtivamente durante toda la clase, pero tan cobarde como pudiera parecer, no se haba atrevido a levantar la mirada, simplemente porque no estaba seguro de lo que podra hacer si lo vea.

Descubri que estaba ms sensible hacia las emociones de Harry y se pregunt si era debido a la pocin, o si solamente era que nunca se haba dado cuenta de lo expresivo que era el otro muchacho. Poda sentir la tensin que reinaba entre ellos, el suave desconcierto en la mirada de Harry cada vez que lo vea de pasada, y que traa a su cuerpo un fugaz y extrao calor.

Y cuando Harry abandon las mazmorras acompaado de Weasley y Granger, Draco experiment el mismo sentimiento otra vez, un anhelo contenido que creca cada vez ms mientras los pasos del otro muchacho se alejaban, arrancando implacablemente su corazn...

14

Frustrado golpe la mesa y tir a una botella con bilis de armadillo. No le import; apoy la cara entre las manos, que ahora estaban temblando y baadas de un sudor fro. Todava estaba ah, ese - ese sentimiento.

Trat de sobreponerse. La noche anterior cuando se dio cuenta de cul era la pocin que realmente haba bebido, haba estado vomitando durante casi una hora, tratando de sacar de su cuerpo la mayor cantidad posible del brebaje.

Pero segua all. En su sangre, recorriendo sus venas como hielo plateado.

Agarrando con furia su mochila, Draco sali del saln sin hacer caso de los gritos de Crabbe y Goyle que le pedan que los esperara.

Ese mismo da por la tarde, finalmente se las arregl para arrinconar a Harry, cuando ste se diriga a la prctica de Quidditch. Lo abord cuando lleg a una esquina camino al cuarto donde guardaban las escobas.

La sorpresa inicial de Harry dio paso a un gesto de adusto reconocimiento. "Qu quieres, Malfoy?"

Draco ignor la repentina oleada de sangre en su cabeza y fij la mirada en Harry. "Necesito hablar contigo." Mir ansioso sobre su hombro al or voces acercarse y aadi, "En privado."

"Para qu?, Para que puedas hacerme obscenidades otra vez?" pregunt Harry framente, retrocediendo un paso y viendo a Draco con suspicacia.

Draco apret los puos y un tenue rubor cubri sus mejillas. "Lo disfrut tanto como t, Potter," dijo entre dientes, con una nota de disgusto.

"De veras? Nadie podra imaginarlo." Dijo Harry con el mismo tono de voz.15

"Cllate, Potter" solt Draco y se mordi el labio con fuerza, tratando de concentrar sus pensamientos en los latidos que

senta en la cabeza, como olas rompiendo "Fue un maldito error." Enfatiz cada palabra. Un terrible, terrible error.

Harry lo mir de soslayo. "Y vienes a disculparte?"

"No." Contest automticamente Draco y vio como se endureca la mirada de Harry.

"Bueno, maldita sea, deberas disculparte." Se irgui, era casi de la misma estatura que Draco, pero su creciente molestia lo hizo parecer ms alto. "No tenas derecho a hacer lo que hiciste, y - "

"Oh, cunto lo siento," lo interrumpi mordaz, sintiendo la rabia hervir dentro de l, "debera haberte pedido permiso primero. Fue completamente desconsiderado de mi parte. Lo tendr en mente la prxima vez."

Las fosas nasales de Harry se dilataron. "No habr prxima vez!" Mir incrdulo a Draco. "Qu te pasa, Malfoy? Hasta donde recuerdo tu me odias y yo te odio, y estoy de acuerdo en que siga as!"

Permanecieron mirndose furiosos por un largo momento, sin decir palabra. Harry golpeaba impaciente el piso con el pi. Finalmente,

"Y bien?"

Draco le devolvi la mirada feroz. "Y bien, qu?"

"Qu fue lo de anoche? Estabas tratando de ahuyentarme? Por que recuerdo claramente que tu fuiste el que sali huyendo con la cola entre las patas."

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Draco cerr los ojos. Lo que menos necesitaba en ese momento era una imagen mental de cualquier cosa entre las piernas de alguien. El exasperante zumbido en su cabeza no daba seales de desaparecer, mas bien se estaba haciendo ms intenso, como si al estar cerca, los rodeara una esfera cargada con electricidad, que estaba perturbando sus impulsos nerviosos y enviaba las ms raras sensaciones por todo su cuerpo.

Respir hondo. "Es una larga historia."

"No, no lo es. Tu me sujetaste y me besaste. Fin de la historia, y no es un final feliz, debo aadir."

Draco abri los ojos y de inmediato se enfrent a esos ojos verde esmeralda profundo, escudados detrs de un par de lentes, que hacan que el aire se atorara en su garganta, dejndolo momentneamente sin habla.

De cualquier forma, A qu haba venido,? A confesar toda la situacin y quedar como un tonto? De cualquier modo, l no entendera. Qu esperaba que hiciera Potter, cuando la verdad era que no haba nada que pudiera hacer ni l ni nadie? Para que lo busc entonces?, Por qu pas casi todo el da tratando de encontrar un momento para estar con l a solas?

No saba por qu. De hecho, s saba y tambin saba que tena que alejarse de l lo antes posible.

"Oh olvdalo." Murmur y una expresin de indefensa frustracin asom a sus ojos al alejarse, pero repentinamente una mano firme lo sujet del brazo y lo retuvo, pero no por la fuerza contenida, sino por el estremecimiento que sacudi todo su brazo.

Retrocedi instintivamente alejndose del contacto de Harry, herido, con una fugaz mirada salvaje en los ojos grises. Harry parpade brevemente sorprendido, antes de que una expresin de determinacin delineara sus rasgos. Rode a Draco para bloquearle el camino, acorralndolo en una esquina del almacn de las escobas.

"No vas a ir a ninguna parte hasta que me des una explicacin Malfoy." Su voz era suave, aunque con un tono amenazante.

17

Draco le dirigi una mirada retadora que casi logr disfrazar su confusin interna. "O qu?" lo provoc arqueando una ceja.

"De veras quieres que te conteste?"

"Si, porque si no, no es una amenaza."

"O ir directamente con Dumbledore con esto -" meti la mano en su bolsillo y sac el frasco vaco, "y tendrs un buen pblico cuando expliques qu estabas haciendo afuera del castillo anoche."

Draco apret la boca y entrecerr los ojos. "No lo haras, porque eso significara que tu tendras que explicar tambin que estabas haciendo afuera." Sonri desdeoso, permitiendo que una saludable cantidad de sarcasmo fluyera en sus palabras. "Y no creo que nuestro Chico Dorado quiera que su expediente quede manchado por algo as, verdad?"

"Lo peor que podra pasarme sera una detencin y una reprimenda por andar vagando de noche." Los ojos de Harry brillaron con determinacin, que le record a Draco la forma en la que Harry miraba cuando volaba tras la Snitch; resuelto, concentrado, casi despiadado. Vacil ligeramente.

Harry lo mir suspicaz, como si pudiera leer sus pensamientos, luego continu, "Pero tu, t tendrs suerte si logras salir con solo una detencin si esto se sabe." Levant el frasco nuevamente, los restos del rojo vibrante brillaron como rayos de sangre contra la luz del sol. " No s que sea esto - parece sangre, pero no lo es, por que para este momento, debera estar seca. Estoy seguro de que Snape estar interesado en hacer algunos experimentos para averiguar lo que es, aunque su entusiasmo decaer cuando los resultados sirvan para incriminar a su estudiante favorito."

Y por la expresin de genuino miedo que cruz por la cara de Draco, una rara oleada de emocin que se encendi y muri en lo que dura un respiro, Harry supo que lo haba atrapado.

Draco recuper su frialdad habitual rpidamente. Levant el mentn desafiante, hacindole una mueca de desprecio a Harry. "Ve entonces Potter. Mustraselo a18

Dumbledore. Tal vez podra ser mermelada de fresa. Disfrutar mucho vindote quedar como un tonto."

"Me arriesgar." Dijo Harry regresndole la mirada. "Si caigo yo, me asegurar que tu caigas conmigo." Encar a Draco abiertamente, viendo que bajo la aparente calma, herva una gran confusin en su rostro. "T decides Malfoy."

"Slo lrgate Potter." Sise Draco con un tono de urgencia en la voz. "No quieres saberlo, creme."

"Claro que quiero." Harry dio un paso hacia delante, fuego ardiente en jade puro, Draco cerr los ojos casi con dolor. "Intntalo, por qu no?"

"Vete al diablo Potter -" escupi Draco viendo como se tensaba Harry, "puedo manejar esto yo solo."

"Qu bien lo manejas! Corriendo en mitad de la noche medio desnudo besando a la gente como un luntico degenerado. No me malinterpretes Malfoy, si quieres ser un psicpata delirante, por m no hay ningn problema, solo no me involucres."

"Entonces, no te involucres." Replic articulando claramente cada palabra, en sus ojos arda un extrao brillo. "Gira 180 grados, empieza a caminar y no te detengas hasta que llegues a Hogsmeade, o cete en el lago, lo primero que ocurra. Mi punto es, slo vete."

"No hasta que me digas que diablos est pasando." Dijo Harry negndose a irse.

Una pausa, entonces muy suave, "No quieres saberlo."

Harry explot. "No me digas lo que quiero o no quiero saber! Ni siquiera -"

"Obviamente no puedes verlo por ti mismo, verdad?"

"Mira," dijo Harry violentamente, empujando a Draco contra la pared. "Si tu me19

hubieras, digo, dado un golpecito en el hombro o tirado de la manga, podra dejarlo as. Pero cuando unes tu boca a la ma, totalmente sin mi consentimiento debo aadir, se convierte en un asunto completamente diferente."

"Qu?, nunca te haban besado as antes Potter?" Draco vio un casi imperceptible parpadeo en los ojos verdes de Harry y sus labios se curvaron en una sonrisa burlona. "Entonces te hice un favor, no es as?"

Harry se vea un poco asqueado. "Si consideras que besarme es un favor Malfoy, entonces no quiero estar en deuda contigo nunca."

Draco sonri astuto y la creciente tensin entre ellos se aliger un poco. "Si estuvieras en deuda conmigo Potter, creme, te hara mucho ms que eso."

Harry ahora se vea disgustado. "Oh, cllate y djate de rodeos Malfoy. Estoy esperando."

La sonrisa de Draco se ensanch. "Qu? Otro... "

"Tu explicacin," Harry se apresur a interrumpirlo, retrocediendo un paso, observ a Draco con algo ms que una sospecha. "Qu diablos te pasa? Por qu andas tan besucn de repente?"

Se desdibuj la sonrisa del rostro de Draco y la hostilidad reapareci instantneamente. "No soy un besucn." Dijo mordaz.

"Esta bien, entonces creo que la descripcin 'caliente' basta." Harry sonri victorioso cuando vio los ojos de Draco oscurecerse y continu, "Es as como consigues accin Malfoy? Merodeando medio vestido por ah y abalanzndote sobre vctimas desprevenidas?"

"Eso es brillante, viniendo de alguien que ni siquiera haba besado antes." En los ojos de Draco se asom una ira creciente. "Y que hay de ti, Potter? Qu estabas haciendo tu en el bosque?"

20

Justo entonces Draco se dio cuenta que el molesto zumbido de su cabeza se haba calmado y no lo haba notado porque estaba absorto hablando con Harry. Entonces, otra vez, una parte de su mente le dijo que se haba calmado, porque haba estado hablando con Harry durante los ltimos cinco minutos, a menos de dos pasos de distancia de l.

"Ese no es el punto en este momento, o s?" los ojos de Harry emitieron un brillo color jade, reflejando la luz del crepsculo. "Sultalo, Malfoy, quiero orlo."

Draco lo mir a los ojos, renuente y desesperado al mismo tiempo. "Es complicado."

"Ya lo dijiste antes y es una excusa pobre. Ests insultando mi inteligencia."

"De seguro te tom mucho tiempo sacar esa conclusin." Replic Draco placidamente. "Eso confirma mi punto."

Pero poda sentir que su determinacin flaqueaba, que sus mordaces comentarios perdan fuerza, se volvan dbiles, y todo esto mientras daba evasivas, buscando una forma de explicarlo y no encontraba alguna. De repente se sinti cansado, como si estuviera aguantando un estornudo difcil de soltar, senta un torrente de lgrimas amenazando con salir de sus ojos, y todo eso lo estaba desgastando.

La boca de Harry se volvi una lnea delgada de adusta determinacin. "Hablar contigo es como tratar de sacar sangre de una piedra." Retrocedi un paso ms, moviendo la cabeza molesto. "Olvdalo, quiz Dumbledore sea capaz de obtener respuestas ms claras de ti."

Harry intent retirarse, pero Draco se lo impidi agarrndolo de la mueca izquierda. Harry se detuvo y lo vio con una mirada fra y calmada a la vez, sin decir nada, en una muda pregunta.

Draco sinti el electrizante hormigueo del pulso en la mueca de Harry y respir hondo. "Realmente quieres saberlo?"

"S." Contest Harry con exasperada impaciencia en su respuesta.

21

"Cuando digo que es largo y complicado, hablo en serio." Haba en su voz una nota de urgencia y mir alrededor ansioso, preocupado de que los otros jugadores de Gryffindor pudieran venir a buscar a Harry. Se preguntaba cunto tiempo haban estado hablando, la verdad es que no tena idea, porque estando con l, los minutos parecan volar, aunque senta que le faltaban horas para terminar.

As es como (se record amargamente) se siente la gente cuando est - enamorada.

Lanzando otra mirada furtiva a su alrededor, Draco habl en un susurro. "Encuntrame en el saln de los Trofeos, a la media noche, te lo explicar entonces." Levant los ojos mirando directo a los de Harry con una emocin incierta en sus iris de gris mstico. "Y desde ahora hasta entonces, piensa en todo lo que quieras preguntar, y no digas que no te previne, Potter. Diez galeones a que te arrepientes de haber preguntado, as que si recuperas el buen sentido, hazte un favor y no vengas."

"Buen intento Malfoy." Harry retrocedi, vigilando la expresin de Draco con una mirada crtica. "Muy atemorizante y todo, excepto porque es el truco ms viejo y nada convincente en tu caso. Desde cuando te preocupa lo que es bueno para m?" Harry le dedic una sonrisa despectiva, entonces sin previo aviso, levant su varita, apuntando a la mano de Malfoy que estaba todava sosteniendo su mueca, y murmur un hechizo:

"Manicam inice."

Un chorro de luz plateada sali de la varita de Harry; Draco gimi asustado y retir la mano que le escoca. Mir hacia abajo - y con horror encontr alrededor de su mueca una esposa.

La mir fijamente, incrdulo. Solo haba una esposa, debidamente cerrada, el delgado metal rodeaba su mueca izquierda y unos cuantos eslabones burdos se trazaron despus.

Harry se vea decepcionado. "Demonios, funcion a medias."

"Qu...? " Draco mir nuevamente a Harry con desmayo. "Para qu diablos es esto? Qutamela!"

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Harry sonri angelical. "Claro. Esta noche. Es la forma de asegurarme de que vayas." Levant la mueca de Draco, inspeccionando su trabajo, Draco en estado de shock lo dej hacerlo. "Bueno, slo una esposa se form, pero se ve bastante segura. Djame advertirte que cualquier intento de removerla, fsica o mgicamente, solo lograr que se ajuste ms y ms."

"Y esperas que ande por la escuela con esto?" Draco se vea horrorizado todava. "Qu pervertido Potter, no saba que fueras sdico."

Harry ignor ese ltimo comentario. "Algrate de que el otro extremo no est atado a, oh, no s... los postes del campo de Quidditch, por ejemplo. Definitivamente eso es mucho ms llamativo, debo decir."

"Vete al diablo Potter," escupi Draco, el coraje reemplaz al asombro. "Pagars por esto."

"Te falta cierta perversidad, ya que eres t quien tiene la esposa puesta." Harry se hizo a un lado gilmente, una sonrisa de triunfo curv sus labios de una forma bastante atractiva pens Draco. "Y tu pensabas que los Gryffindors no tenan ideas creativas."

"Oh, los Slytherins tienen ideas creativas tambin." Dijo entre dientes, con la voz apenas controlada. "Solo que ms violentas y expresivas, que generalmente incluyen cuchillos, ltigos, tortura y usualmente mucho dolor." La boca de Draco se curv en una sonrisa cnica y sin humor. "Pero veo que definitivamente te gusta la tcnica de la humillacin, que tambin es muy efectiva. Felicidades."

Algo cruz por la cara de Harry, una muda sorpresa, mezclada con pesadumbre, y Draco observ que se vea avergonzado. "No hago esto solo para humillarte Malfoy." Busc la mirada de Draco, los ojos de Harry eran sinceros, desoladoramente sinceros. "Solo me aseguro de que tu no te retractes."

"Cre que el punto en cuestin era si tu iras."

Los ojos de Harry se endurecieron, los restos de emocin se fundieron en slidas piedras de esmeralda. "No confo en ti Malfoy. No creas que no recuerdo lo que trataste de hacernos en primer ao. Y desde entonces, los dedos de mis manos y pies, sumados a23

los tuyos no son suficientes para contar las veces que has tratado de meternos en problemas." Sonri adusto, aunque arrogante. "Y has fallado en cada ocasin, debo aadir." Draco frunci el ceo e inclin ligeramente la cabeza, le dirigi una mirada crtica a Harry. Haba estado haciendo eso subrepticiamente durante la conversacin, como si notara por primera vez ciertas cosas de Harry; la forma en que se paraba, su pie izquierdo siempre unos centmetros mas adelante que el derecho. La forma en que mantena los hombros rectos, erguidos, con la confianza y el aplomo de alguien que tiene el mundo a su disposicin, alguien que no quiere ms de lo que tiene.

"Y crees que una esposa alrededor de la mueca asegurar que est ah esta noche?" se las arregl para que su voz sonara tranquila, aunque se estaba derrumbando por dentro. "Creo que no Potter. Lo nico que puede garantizar mi presencia sera que me ataras a ti mismo, y eso no sera bueno para la prctica de Quidditch, verdad?"

Para su sorpresa, en la cara de Harry apareci una sonrisa, una sonrisa sabia. "Mira ms de cerca tu nuevo accesorio cuando tengas tiempo." Seal con la cabeza la esposa, pareca framente incongruente en la mueca de Draco, aunque el metal plateado combinaba bien con su cabello rubio platino.

Antes de que Draco tuviera oportunidad de inspeccionar la esposa detalladamente, Harry continu, "No creo que la esposa te haga acudir, no creo en tu palabra tampoco, pero" y aqu Harry se permiti una pequea sonrisa de triunfo, "tal vez llevar una esposa con mi nombre te haga pensar dos veces antes de intentar faltar a nuestra cita esta noche."

El corazn de Draco se detuvo momentneamente y su mirada se dirigi al cruel brazalete que cea su mueca, sus ojos se abrieron en completa incredulidad. "Qu- "

La sonrisa de Harry se hizo mas amplia, una brillante sonrisa en el ocaso. "No creo que te guste andar maana por la escuela etiquetado como propiedad de Harry Potter, o si?"

Y en ese momento algo se hizo aicos en la cara de Draco, algo fundamental, algo tan natural e innato que se filtr a travs de cualquier mscara de emocin, una base que se fragment al impacto de las palabras de Harry. Una pualada de angustia cruz como un rayo por sus rasgos, volvindolo frgil en un imposible dolor, una sombra de terrible desesperacin, aunque en un parpadeo, sta desapareci, como se borran las marcas en la playa bajo las olas del mar implacable.

Harry se sorprendi cuando vio pasar la cruda emocin por el impasible rostro de24

Draco, parpade y mir otra vez, pero se haba ido. Como una herida curndose sola; un engao de sus ojos, un juego de la luz inclinada que se reflejaba en el cabello rubio de Draco.

O quiz, pens Harry, un engao de su mente.

Cuando Draco levant la mirada, sus ojos eran grises sombras vacas. Harry not que tena tan fuertemente apretadas las manos que sus nudillos estaban blancos.

Draco no dijo nada, solo mir fijamente a Harry durante un largo rato, gradualmente la fra llama de emociones fluy de nuevo a sus ojos, frialdad ardiente y distante, y dolor vulnerable al mismo tiempo.

"Como quieras Potter." Dijo suavemente, aunque su voz se oa resentida; sus ojos destilaban odio, amargura y un dejo de dolor.

Con esto, dio media vuelta y se fue.

Harry lo mir fijamente por un momento, todava sospechoso y completamente confundido. La mirada que Draco le dirigi al final todava lo haca sentir particularmente trastornado - fue algo que haba dicho?

Movi la cabeza desconcertado y renunci a seguir dndole vueltas al asunto, se fue a tomar su escoba, lo que, segn recordaba era su intencin original. Gracias a Malfoy, ahora estaba retrasadsimo para la prctica de Quidditch y ese pensamiento lo hizo dejar todas sus preguntas para esa noche.

Solo cuando lleg al santuario de su dormitorio, Draco se permiti derrumbarse en su cama, respirando dolorosamente, la frialdad de la esposa contra su mueca atravesaba su piel como mercurio envenenando su sangre, fro y calor separados por la imperfeccin de la carne.

Era igual a los lmites entre los que se encontraba atrapado ahora, la frontera25

donde el odio y el amor se tocaban, la fina lnea ahora borrosa, por la alteracin qumica que la converta en prcticamente nada. No senta nada ms que la cansada tensin en su cuerpo, destilaba deseo, deseo puro, y se estaba convirtiendo en algo totalmente fuera de control, por lo menos, no el suyo.

Gir la esposa y la observ, el metal destellaba chispas de luz de una fuente desconocida, le lastim los ojos y parpade. Levantando la mueca para poder inspeccionar la esposa, vio la intrincada inscripcin no hecha por manos humanas, un fino y burln grabado color humo plateado deca - H J Potter.

Una marca de posesin. Marcado con hierro. Propiedad de alguien.

Cerr los ojos, calado hasta los huesos por la silenciosa vergenza.

No creo que te guste andar maana por la escuela etiquetado como propiedad de Harry Potter, o si?

Las palabras de Harry se repetan una y otra vez en su mente y su propia mortificacin lo corroa por dentro.

No hago esto para humillarte Malfoy.

Completamente humillado, Draco se acost boca abajo sobre las almohadas, el fro metal de la esposa alrededor de su mueca lo calaba hasta los huesos. Miedo y un deslumbrante terror se desataron dentro de l, un duro recordatorio de algo que era demasiado real para ser creble: lo que se haba inflingido a s mismo, lo que Harry le haba hecho, y de lo que quiz jams se pudiera liberar.

Captulo 3: Sin remordimientos26

El amor vive en botellas selladas de remordimiento.Conforme iba cayendo la tarde, con gran molestia, Draco encontr que lograr tener un poco de privaca en la sala comn de Slytherin o an en su propio dormitorio era tan posible como encontrar una forma de no pensar en Harry. Se estaba volviendo cada vez ms difcil mantener oculta de los dems su mano esposada, as que finalmente decidi ir a la biblioteca para encontrar un poco de paz y tranquilidad.

Casi eran las ocho de la noche cuando lleg a la biblioteca, una sensacin de desconfianza se apoder de l cuando observ las cuatro paredes que se cerraban sobre l, y su claustrofobia sali a la superficie. Se dio cuenta de que se senta como en la biblioteca de su casa, como un cangrejo en la parrilla mientras el calor lo abrasa. Era una reaccin instintiva - se senta atrapado.

La biblioteca de Hogwarts, sin importar lo pintoresca e impecablemente amueblada que estaba, le recordaba demasiado la austera biblioteca de su padre; todo el cuarto de dibujo lleno con nada ms que cajas de libros apiladas unas tras otras hasta el techo, con estante tras estante de libros, todos ellos relacionados de una forma u otra, con las Artes Oscuras. Una gran parte de sus vidas, la vida de un Malfoy. Una gran parte de l.

Draco record con un estremecimiento las explcitas advertencias que su padre le haca constantemente sobre las muchas diferentes maneras de caer en desgracia y, por supuesto, la siniestra sentencia de nunca, mientras tuviera un aliento de vida con sangre Malfoy corriendo por sus venas, nunca traer el ms ligero reproche sobre la familia. O algo peor.

O algo peor. No era una implicacin sutil, o algo que se pudiera dejar a la imaginacin. Era un veredicto definitivo, predeterminado, dicho como adelanto a la trasgresin. No haba espacio para la negociacin, para pedir clemencia, mucho menos perdn.

Pero esto. Draco pens que an su padre podra encontrar difcil de etiquetar este nivel de pura degradacin que hara estragos en el preciado nombre de la familia. Si Lucius se enteraba de esto antes de que pudiera encontrar una forma de revertirlo, Draco esperaba fervientemente que la impresin acabara con su padre, debido a que en caso de que no fuera as, probablemente tendra que implementar el plan B, el cual era muy simple, el noble camino del suicidio.

27

Este pensamiento grave y maniaco depresivo lo estimul a ponerse en accin y camin resuelto hacia los estantes de la extrema derecha, donde, hasta donde saba, se encontraban los libros de magia ms avanzados. Pero cualquier cosa siquiera remotamente til solo podra encontrarla en la Seccin Prohibida y conforme se acercaba a sta, una encolerizada Madam Pince le sali al paso, pidiendo una nota firmada que le permitiera el acceso a los libros. Por supuesto Draco no tena una nota firmada, aunque en ese momento podra haberle dado a Madam Pince una nota suya, que hubiera sido breve, y mucho, muy ordinaria.

Dndose por vencido sali de la biblioteca. Los libros no ayudaran - tendra que encontrar l mismo la forma de explicar a Harry lo que haba pasado, y tendra que encontrar tambin otra forma an mas hbil de salir de este embrollo completamente.

De cualquier forma, Por qu se molestaba siquiera en explicarle esto a Harry? se pregunt. No entendera. No haba la posibilidad de que entendiera, an Harry, el Chico Que Haba Hecho Un Hbito De Frustrar Los Planes De Voldemort. Esta era una lucha completamente diferente, de muchas formas ms siniestra que el hecho de enfrentar al Seor Tenebroso, porque era un conflicto entre la mente y el corazn, una lucha autodestructiva que estaba condenada, cualquiera que fuera el lado que ganara.

No. No quera, no necesitaba la ayuda de Harry. Todo lo que le haba pedido a Harry era que se mantuviera alejado de l, lo ms alejado que se pudiera de cualquier posible encuentro labial, de forma que Draco pudiera ingenirselas para arreglar esto, revertir el hechizo y ser l mismo otra vez.

El encuentro que tendra en la noche con Malfoy, regresaba continuamente a su cabeza, y Harry inconscientemente se alegr cuando la prctica de Quidditch lleg a su fin. Despus de regresar su escoba al almacn (en donde not, iluminado por la luna, el pasto aplastado donde se haban enfrentado esa misma tarde), Harry se encamin de regreso a la Torre de Gryffindor, se ba y cambi y luego se sent a esperar a que llegara la medianoche.

Se preguntaba si Malfoy lo dejara plantado - una sonrisa confiada se curv en sus labios al recordar la pequea esposa que Malfoy querra gustosamente le quitara antes de que llegara la maana. Eso incrementaba en gran medida las posibilidades de que fuera; Harry pens que era ms seguro ir sin tener que preocuparse de que lo estuviera esperando Filch en lugar de Draco.

28

Faltando diez minutos para la media noche, Harry se levant y se puso una tnica y resinti una vez ms la falta de su capa de invisibilidad. Al dirigirse hacia la puerta sin hacer ruido dud, no se le haba ocurrido pedirle a Ron que lo acompaara en esta expedicin nocturna, por la simple y sencilla razn de que habra tenido que enterarlo de lo que haba pasado entre l y Malfoy la noche anterior (la no muy accidental colisin de sus labios, para ser exacto), y no estaba precisamente rebosando de alegra como para relatar el incidente, al menos no en voz alta. Aunque Harry se haba sorprendido algunas veces durante el da repasando el episodio una y otra vez en su mente - algo que ya de por s, not con agitacin, era bastante inquietante.

Con pasos silenciosos se dirigi al cuarto de trofeos ocultndose entre las sombras de los corredores. El pulso de Harry se aceler con anticipacin al acercarse a la puerta, al sujetar el pomo - Si Malfoy no est aqu, pens lgubre, me asegurar de que -

Al abrir la puerta vio a Draco sentado en la pulida orilla de la mesa de roble ubicada al centro del cuarto, con las manos sobre el regazo, los dedos estirados y la cabeza ligeramente inclinada. El cuarto estaba baado de un tenue brillo azul celeste, que provena de un fuego prendido por arte de magia, colocado en un ngulo estratgico de tal forma que su luz cruzara el cuarto de una esquina hasta casi llegar a la otra. Era una iluminacin tranquila y relajante, y los ojos de Harry se ajustaron rpidamente a la plida, casi irreal atmsfera.

Draco levant la cabeza en el momento en que Harry entr, su cuerpo pareci tensarse e intent relajarse, aunque no lo logr del todo. Pareca una pantera enjaulada, paseando de un lado a otro en medio de la noche y sus ojos delataron cautela e incertidumbre al ver a Harry mientras ste se deslizaba silenciosamente dentro del cuarto y cerraba la puerta detrs de l.

Harry no se sorprendi de encontrarlo ah; lo que lo sorprendi fue la momentnea desesperacin que cruz por sus rasgos, como si estuviera - decepcionado de que Harry hubiera ido. La pregunta de qu era lo que estaba ocurriendo lo carcoma an ms.

Harry cruz el cuarto con pocos pasos, parndose frente a Draco.

"Y?" fue su pequeo recordatorio, complementado con una dura mirada de desconfianza. Cul es el gran secreto?"

"No cre que vendras." Dijo Draco con voz neutra, aunque su habitual29

imperturbabilidad no era tanta.

"No me perdera esto por nada del mundo Malfoy." Harry sigui mirndolo a la defensiva y seal bruscamente el antebrazo izquierdo de Draco con la cabeza. "De cualquier forma, no cre que quisieras andar maana por la escuela con esa esposa, o s?"

"No cre que te importara." Los ojos de Draco estaban casi del color del cobalto debido al fuego mgico y parpade hasta encontrar los de Harry. "Pens que no vendras precisamente por eso, as, habra tenido que andar maana por la escuela con esta espantosa cosa en la mueca."

Harry lo mir ligeramente indignado. "Crees que te dejara eso intencionalmente solo para - para avergonzarte?" Harry pareca tener problemas para entender la situacin. "No me malinterpretes, Malfoy, tu ego es demasiado grande para lo que vales, alguien debera hacrtelo ver algn da, pero humildad y humillacin son dos cosas completamente diferentes."

Draco hizo un gesto de fastidio. "No me sermonees Potter."

Harry lo mir duramente. "Quieres decir que si fuera al revs me dejaras la esposa solo para humillarme?"

Draco no contest, solo baj la mirada.

La expresin de Harry se volvi de disgusto. "No lo puedo creer." Se golpe la cabeza con furia. "Tpico de ti, Malfoy."

Draco no contest, solamente levant la mano haciendo que la esposa le resbalara por la mueca y la sostuvo tranquilamente frente a Harry. Sombras de azul metlico se reflejaban en la esposa y Draco elev la barbilla casi desafiante, en sus ojos haba una pregunta silenciosa y esper.

Harry no se movi de momento, solo mir la mano que Draco le enseaba. Luego suspir con enfado, tom su varita y la dirigi hacia la esposa, murmurando "Clavis Finge."

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La esposa se hizo ms ancha, colgando floja de la mano de Draco, deslizndose unos centmetros sobre su antebrazo.

Draco mir a Harry, los ojos le brillaban como joyas manchadas y entonces sin decir una palabra se quit la esposa de la mano y la guard en el bolsillo. Se par de la mesa, camin unos pocos pasos y se par de frente a la pared.

Harry cada vez se convenca ms de que Draco se estaba volviendo loco. Dud brevemente antes de preguntar con un tono que esconda sus sospechas, "Entonces, qu es lo que queras decirme?"

"Yo no quera decrtelo. T eres el que quera saber."

Se le estaba empezando a acabar la paciencia a Harry, de hecho, ya casi no tena. "Sultalo ya, Malfoy. No tengo toda la noche."

"Est bien." Draco segua de espaldas a l y cuando habl, lo hizo de frente a la pared. "Quieres la versin completa, o solo los hechos concretos?"

"Como quieras. Solo quiero orlo - ahora."

Draco respir profundo, era ms difcil de lo que haba imaginado. Por qu? Porque se senta obligado a decirle a Harry sobre el hechizo? Slo porque l haba preguntado? a Draco generalmente le produca un gran placer negarle a Harry cualquier cosa que quisiera.

Pero saba porqu. Era porque no crea que lo pudiera soportar solo durante mucho tiempo ms. Debido a que lo estaba desgarrando por dentro, sabiendo lo que haba pasado, pero sin saber qu haba que hacer. Y necesitaba decrselo a alguien.

"Bueno..." empez lentamente, sintiendo que le faltaban las palabras, de pronto no saba por dnde comenzar, no quera dar la vuelta y ver a Harry a los ojos mientras hablaba. "Bsicamente, estaba tratando de hacer algo, pero se enred completamente y termin siendo otra cosa, y..."31

"Hay mucha ambigedad e imprecisin en tus palabras," lo interrumpi abruptamente Harry. "Se supone que tengo que llenar los espacios en blanco?"

Draco gir, en sus ojos haba furia y un silencioso dolor. "Solo cllate y escucha Potter," gru sin humor en la voz.

Harry le dirigi una mirada asesina. "Entonces, ve al grano."

"Bien." Chasque Draco, su resistencia se estaba debilitando y las palabras salieron de su boca como un secreto largamente guardado, crudo, sincero, amargo. "El punto es que estoy enamorado de ti. En esencia eso es todo lo que necesitas saber."

Sigui un largo silencio a sus palabras, casi se poda sentir la tensin de la impresin y la incredulidad entre ellos. Era como si el momento se hubiera suspendido en el tiempo infinitamente, mientras el significado de sus palabras caa, fluyendo como agua helada sobre roca impermeable. El nico sonido que se oa en el cuarto era el crepitar del fuego, sonando como ltigo en medio del tenso silencio.

Cuando Harry finalmente habl en su voz se oa la sorpresa.

"Ests bromeando, " no era una pregunta, era una afirmacin, como si la sola idea fuera imposible de ser considerada.

Draco se vea enojado y algo apenado al mismo tiempo. "Bromeara con algo as?"

Su voz albergaba tan sincera gravedad que, en opinin de Harry, sonaba incongruente con la situacin, y empezaba a sentir que como si estuviera soando despierto, un sueo etreo y absolutamente, absolutamente increble.

Se encogi de hombros. "No lo s, tienes un retorcido sentido del humor."

"Bueno, si, me gusta atormentar a Longbottom y hacer estallar su caldero, me hace morirme de risa," Draco apret los dientes, tratando de mantener la calma, "pero estar estar enamorado de ti no es para nada divertido. De hecho, creo la pura idea es lo32

suficientemente traumatizante como para volverme un completo psicpata en mi prxima vida. Si es que logro llegar."

"Me - me amas? Repiti Harry, su voz se oa hueca, tena la expresin como si se hubiera tragado un vomitivo o un frasco de cucarachas enteras.

"No Potter, estoy enamorado de ti." La voz de Draco era afilada como una espada. "No me fui enamorando de ti, aunque esa opcin es an menos atractiva que caer de un precipicio, y ciertamente no te amo. Hay una gran diferencia.

"Realmente no la veo." La nota de suspicacia haba vuelto a la voz de Harry. "Mira, no te creo. Es alguna clase de broma? Qu quieres decir exactamente?"

"Has estado escuchndome siquiera?" Draco estaba exasperado. "Porque siento que el eco de las paredes me da una respuesta mas inteligente."

"Claro que te o." Harry sonaba irritado. "Pero lo que estas diciendo son puras tonteras." Mir crtico a Draco, como si fuera una bomba de tiempo a punto de explotar. "Ests seguro de que no te drogas, Malfoy? Porque estas hiperventilando y tus ojos estn dilatados, como cuando Hedwig tiene diarrea."

"Gracias por el vvido ejemplo y por tu preocupacin y quisiera que todo esto fuera una terrible resaca, pero no, no me drogo." Hizo una pausa. "Aunque en este momento no dira que no, si es que tienes algo."

Harry lo observ dudoso, y todava se oa escptico. "Pero tu - me odias."

"Bien, lo notaste Potter. Siempre pens que era demasiado sutil. Listo de tu parte que lo notaras, diez puntos para Gryffindor por una rara demostracin de cerebro."

"Cllate Malfoy. Bien sabes que tampoco yo te soporto."

"Me alegra que hayamos aclarado eso." Draco lade ligeramente la cabeza. De una forma extraa, estaba entrando en calor con su acostumbrado hbito de insultar a Harry, tanto que casi haba logrado distraerlo del hecho de que actualmente abrigaba una33

peligrosa y voltil lujuria por l. Pero la sensacin segua ah, como si corrientes vivas se alimentaran bajo su piel. "Sabes algo curioso acerca de ti Potter? Casi corriste gritando cuando te bes, pero ahora permaneces perfectamente calmado mientras te digo que posiblemente estoy enamorado de ti."

"Estoy reservndome todo el impacto de la impresin para poder despertar a todo el colegio cuando finalmente lo asimile. Lo que puede suceder en cualquier momento, as que mejor date prisa en hablar."

"No hay nada ms que decir." Draco lo mir de soslayo y entonces un estremecimiento familiar lo recorri, como si estuviera embriagado; se recarg en la orilla de la mesa para encontrar algo de apoyo y dijo suavemente, "Creo que deberas marcharte."

"Nada ms?" Harry lo mir incrdulo. "Por todos los diablos que hay ms! Para comenzar, no me has dicho porqu ests enamorado de m." Medit durante un segundo y luego continu, "Creo que debe haber sido alguna clase de hechizo amoroso, porque si no, tienes garantizado un lugar en San Mungo."

Draco quera replicar que probablemente solo los residentes del Hospital San Mungo de Enfermedades y Heridas Mgicas podran enamorarse de Harry, pero se dio cuenta de que debera incluirse tambin, y repentinamente se sinti muy - cansado, como si su energa hubiera sido drenada solo por estar con Harry y dada su ltima experiencia, su cansancio generalmente vena acompaado de una clase totalmente diferente de energa - deseo.

Draco dej caer los hombros y cedi. "Tienes razn," dijo con voz derrotada. "Es una pocin amorosa."

"Pocin amorosa?" repiti Harry, con una voz tan impresionada como curiosa. "No son ilegales?"

"Si me vas a dar un interminable sermn moralista de las leyes mgicas, ahrramelo, porque ya me siento bastante mal as como estn las cosas."

Harry todava no se vea convencido. "Exactamente que pas?" Mir crtico a Draco. "Si ests inventando esto, djame que te lo diga, es bastante inverosmil. Si no lo ests inventando, bueno, tienes muchas cosas que explicar. Y te lo advierto Malfoy, si34

ests tratando de hacerme - "

"Oh, cllate y djame hablar por un momento s?" lo interrumpi Draco con una mirada asesina.

Para su sorpresa Harry se call y un silencio expectante se hizo entre ellos.

Draco respir aliviado, pero ahora ya no haba vuelta atrs y la verdad era, que realmente quera contarle a Harry lo que haba pasado - en este punto cualquiera hubiera sido una buena audiencia, an la Seora Norris. Senta como si hubiera estado aguantando la respiracin durante mucho tiempo y solo deseara respirar normalmente otra vez, sin el golpeteo de su corazn contra el pecho.

Vio la mirada impaciente de Harry y respir profundo. Algo le deca que iba a necesitar todo el oxgeno que pudiera reunir. "Est bien. Esto fue lo que pas"

Draco comenz con su narrativa sobre los eventos de la noche anterior, aunque de forma vaga. No dijo la mitad de lo que pensaba - la historia qued reducida a pequeos fragmentos de un monlogo que corra apresuradamente por su cabeza y dijo solo las partes necesarias para unir cronolgicamente los eventos.

Habl brevemente sobre la pocin, tocando muy por encima los detalles hasta la parte donde haba estado apunto de beberla. Relat como haba resultado ser una pocin amorosa y cmo antes de que lo supiera, la primera persona a la que haba visto despus de tomrsela era Harry.

Harry tena un punto a su favor, saba escuchar - haba permanecido callado mientras Draco hablaba con tonos bajos y urgentes, con las palabras saliendo de su boca como lluvia de verano. Harry todava tena una expresin escptica en la cara, pero al mismo tiempo estaba escuchando cuidadosamente las palabras de Draco, observando su lenguaje corporal, sopesando el grado de veracidad, sabiendo que probablemente por una vez en su vida, y quiz la nica, Draco Malfoy le estaba diciendo la verdad.

Cuando Draco hizo una pausa para recuperar el aliento, Harry finalmente lo interrumpi.

"Qu pocin queras preparar originalmente?" pregunt mirndolo a los ojos.35

"No me digas que realmente pretendas hacer una pocin amorosa desde el principio."

"Qu parte de la frase el hechizo sali mal no entiendes?" replic Draco malhumorado. "Por supuesto que no pretenda hacer una pocin amorosa - no seas baboso Potter, en serio." Resopl burln.

"Bueno, entonces qu estabas tratando de hacer?" lo presion negndose a pasarlo por alto.

"Una Pocin para la Prdida de Sustancia." Dijo reticente, como si acabara de ser obligado a divulgar un secreto muy embarazoso. "Te hace... bueno, desaparecer."

"Qu?" Harry mir a Draco incrdulo, con el horror asomndose en su mirada. "Prdida de Sustancia? Dnde Malfoy, aqu?" seal su sien. "Qu estabas pensando?!"

"No lo s!" estall Draco, con furia en la voz. "No crees que no he estado pensando en eso? En qu estaba pensando? Demonios, desde anoche no he hecho otra cosa mas que pensar lo estpido que fui para mezclar el hechizo, cmo diablos fui a tener la mala suerte de que los hechizos estuvieran separados solamente por una pgina? y cmo, maldita sea se supone que voy a salir de sta!"

Harry parpade, estupefacto ante el repentino estallido de Draco y casi se sinti culpable por haberlo provocado. Se puso muy serio, haba algo en la forma en que Draco miraba y se oa que lo sacuda inmensamente, hacindolo pensar dos veces acerca de lo que Malfoy estaba diciendo, lo que estaba tratando de decirle.

Harry mir a Draco de nuevo, ms grave esta vez, notando el dolor velado que se dibujaba en sus delicados rasgos, una cierta miseria que en silencio acentuaba la gravedad de la situacin.

Se pregunt por qu estaba creyendo siquiera lo que Draco deca. Desde cundo Malfoy le deca la verdad? Que tal si era una elaborada trampa para... bueno, no poda saber con exactitud de qu podra ser parte esto, pero estaba seguro de que no sera agradable. Entonces, Porqu se inclinaba por creerle a Malfoy?

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Sus ojos. Lo mir otra vez, larga y calculadoramente. En sus ojos.

Y tambin se percat de que Draco tena unos ojos muy bonitos, intensos y llenos de sentimiento, aunque frecuentemente estaban velados con fra arrogancia y desdn. Pero en muy raras ocasiones como esta, eran inocentes y dolorosamente sinceros, joyas de un gris profundo, con lneas plateadas por la luz del fuego.

Oh, basta. Es Malfoy. Deja de observar sus ojos.

"Bueno..." Harry sacudi ligeramente la cabeza para aclarar sus pensamientos, "Porqu ests contndome esto?"

Draco entrecerr los ojos, boquiabierto por la indignacin. "Creo recordar que tu me lo pediste. De hecho, no me lo pediste, me hostigaste hasta el cansancio y me pusiste esposas para forzarme a contrtelo. Y ahora preguntas, Porqu me ests diciendo esto?"

Harry lo traspas con la mirada, "Quiero decir, qu esperas que haga yo?"

"Nada." Contest rpidamente Draco, desviando la mirada, pero no la atencin, hacia la plida flama azul que crepitaba y brillaba. Su voz son triste. "No hay nada que puedas hacer."

"Bueno, hay algn contrahechizo? algo que lo pueda revertir?"

"No lo s."

"Pasar el efecto despus de algn tiempo? o puedes tomar un antdoto o algo para neutralizar el efecto?"

Un gruido. "No lo s."

Harry se vea irritado. "Pareces tremendamente desinteresado en salir de este desastre, Malfoy. La ignorancia realmente no ayuda. Crees que si te rehsas a buscar37

ms acerca del hechizo logrars que desaparezca?"

Los ojos de Draco se volvieron mordaces hacia Harry, brillando con ferviente intensidad, casi descorazonadoramente desesperados. "No tienes idea de cunto quiero quitarme esta cosa de encima Potter." Su voz temblaba por la falta de control. "As que mejor cllate y pirdete."

Harry se qued boquiabierto, ciertamente no esperaba tal hostilidad y sus ojos color esmeralda se oscurecieron por la creciente ira. "Solo estoy tratando de ayudar malagradecido. Casualmente este es tu problema."

Draco le sostuvo la mirada tranquilo, sus ojos ya no mostraban emocin. "Tienes razn Potter. Este es mi problema. Y no necesito tu ayuda. No es de tu incumbencia."

"Claro que es de mi incumbencia Malfoy, porque sucede que me escogiste para enamorarte de m." Harry dio un paso hacia delante con una firme determinacin en los ojos.

"Te escog Potter? Escog?" Draco pareca asqueado. " En algn momento mencion que te haba escogido? Lo hice?" Cerr los ojos, tena los hombros cados y se cubri la cara con las manos. "Oficialmente, este es el peor desastre del mundo mgico. En aos venideros, se ensear en las escuelas, como un caso de estudio Hechizos que Salieron mal con consecuencias peores que la muerte y tendrn los restos de mi cabeza como una reliquia."

Harry se mordi el labio inferior, disimulando una sonrisa. An en esa situacin, el humor de Malfoy era bastante divertido.

"No es divertido Potter," escupi, "borra esa sonrisa de tu cara antes de que la haga desaparecer para siempre - con magia o sin ella."

La sonrisa de Harry desapareci y su boca se volvi una lnea dura. "No me culpes por esto Malfoy. Este asunto no es ni remotamente mi culpa."

"Claro que es tu culpa. Si no hubieras andado por ah, esto nunca hubiera pasado."

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"Ahora soy culpable por existir?" parpade Harry molesto. "Ests siendo poco razonable Malfoy y - "

"Claro que estoy siendo poco razonable," lo interrumpi Draco, con los ojos destellando ira y frustracin. "Estoy enamorado de ti para empezar. Eso va contra las leyes de la razn, vuela el techo de lo irracional y se catapulta a la galaxia de la locura." Hizo una pausa para respirar. "Y es totalmente tu culpa."

Harry estaba a punto de replicar, pero entonces Draco hizo algo que impidi que las duras palabras salieran de su boca.

Mirando de soslayo a Harry, Draco lentamente gir y camin hacia el lado opuesto del saln. Apoy un brazo en la pared y descans la frente en el pliegue de su codo: haba algo en su postura que lo desvisti de su habitual arrogancia, luca desolado, una figura derrotada contra la iluminacin intermitente.

Harry estaba casi tan sorprendido como si Draco lo hubiera besado otra vez. Se qued ah parado un momento, inseguro de qu hacer y se dio cuenta de que no saba que decir, porque la comunicacin con Draco siempre era una respuesta a sus provocaciones. Y por todas esas veces en que Draco lo haba hecho enojar, por todas las ocasiones en que haba contenido la rabia, cuando Draco se las arreglaba para burlarse de l durante las disputas verbales, esta era la oportunidad perfecta para vengarse, ahora que estaba vulnerable, con las defensas bajas.

Pero Harry simplemente no poda hacer algo as, ni siquiera a Malfoy. No lo pudo hacer durante el duelo que tuvieron en segundo ao, cuando se abstuvo de hechizar a Malfoy mientras estaba cado, aunque ste no haba tenido escrpulos para atacarlo sin respetar las normas deportivas. Y ahora segua sin poder decir algo hiriente, ni siquiera sarcstico.

Harry frunci el ceo y se mordi nuevamente el labio sin saber que hacer o decir, solo se qued ah, sintindose incmodo.

"Deberas irte." Dijo finalmente Draco, su voz sonaba cansada, un cansancio que no era del todo fsico. "Es tarde."

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Harry dud y mir la mueca desnuda de Draco. "Puedo quedarme un rato ms."

"No quiero que te quedes." La voz de Draco se oa ahora framente tranquila. "De hecho, quiero que te mantengas fuera de esto, alejado de m, imagino que no te costar mucho trabajo, o s? Eso es todo lo que quiero."

"Crees que es as de fcil?" pregunt Harry sin rencor.

"Mantenerte alejado de m? Pareces haber cultivado una gran cantidad de disgusto por m a travs de los aos Potter, estoy seguro de que puedes hacerlo." Draco segua con la cara vuelta hacia la pared, su voz sonaba ligeramente apagada.

"No, me refiero a esto. Crees que alejarse es la solucin?

"Es la solucin para ti." Draco levant la cabeza y muy despacio se volte y apoy la espalda contra la pared, como si cada parte de su cuerpo estuviera dolorosamente exhausta. "Y eso es todo lo que debera preocuparte."

Harry respir profundo. "Debe haber una forma de revertirlo."

"Y que pasa si no la hay?" explot, la irritacin y dolor reprimidos salieron a la superficie, salpicando con furia sus ojos, iluminados por la angustia. "No todo tiene un contrahechizo! Y este es - diferente de otros hechizos porque no es externo, est dentro de m, en mi sangre. Todava no he ledo mucho al respecto, pero s acerca de este tipo de maldiciones y la mayora de ellas son incurables excepto por la muerte."

La ltima palabra qued suspendida de forma significativa en el aire, ominosa. La posibilidad de la muerte trajo repentinamente la gravedad de la situacin. Los dos se quedaron quietos por un momento, el inmenso dolor de las palabras de Draco llen la atmsfera, haciendo el aire denso, con una sensacin de ahogo.

Finalmente Harry habl, tranquilo. "Es una maldicin?"

Draco le dirigi una mirada incisiva, "De qu otra forma puedes llamarlo?"

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Harry pens en voz alta. "No lo s. Solo no crea que pudiera ser clasificada como una maldicin. Amor y maldicin no estn comnmente relacionados."

"No es amor Potter, es un hechizo de amor. Se alimenta del amor no correspondido y te vuelve loco porque anhelas algo que sabes que no quieres, y que nunca podrs obtener. La gente normalmente se vuelve loca bajo el efecto de los hechizos de amor. Si esto no es una maldicin, entonces el Avada Kedavra es una cancin de cuna."

Harry quera decirle a Draco que no fuera tan melodramtico pero algo dentro de l, le hizo temer que despus de todo, no estaba exagerando.

Harry suspir. "Qu sugieres que hagamos?"

"Ya te lo dije. Nosotros no vamos a hacer nada. Yo voy a arreglarlo y tu no hars absolutamente nada." Una expresin de dolor cruz por los rasgos de Draco, proyectando sombras plidas de fatiga y exasperacin. "Cuntas veces tengo que decrtelo Potter?, no quiero tu ayuda. Este no es tu problema y aunque s muy bien que disfrutas mucho metindote en los problemas de los dems, la situacin est lo suficientemente complicada sin ti."

"Y crees que puedes manejar esto tu solo?" Harry respondi con furia. "Solo mira lo que has hecho hasta ahora!, absolutamente nada. Ni siquiera sabes con seguridad si no hay un contrahechizo." Le lanz una mirada asesina. "Puedes creer que no me importa Malfoy y francamente tal vez no, pero esto es muy serio y no voy a dejar que te metas en ms problemas de los que ya tienes."

Los ojos de Draco no reflejaban nada mas que una emocin indefinida, que brill dbilmente a travs del gris lquido. Cuando volvi a hablar, su voz careca de tono. "Realmente quieres ayudar Potter?"

Harry respir controladamente antes de responder, consintiendo con su silencio, porque no poda hablar. Malfoy se estaba poniendo nervioso y Harry tena que conservar la calma, recordndose una y otra vez que el estado mental de Draco era frgil.

Por toda respuesta asinti suavemente, luego lo mir directo a los ojos.41

Draco permaneci quieto, vindolo fijamente durante un instante, con la cabeza ligeramente inclinada hacia un lado, su expresin era casi contemplativa, como si considerara la oferta, el silencio rein otra vez entre ellos.

Una dbil sonrisa amarga, extremadamente triste, asom finalmente a sus labios. Con un elegante movimiento se apart de la pared, camin resuelto hacia la puerta y la abri, sealando la salida con un ademn.

"Entonces comienza a ayudar." Dijo con ojos desafiantes, con un inconfundible dolor.

Harry lo mir conmocionado durante un momento y la poca simpata que haba sentido dio paso a la rabia.

"Bien!" dijo enojado, no poda soportarlo ms: tambin l tena dignidad, maldicin!. Pas airadamente junto a Draco y cruz la puerta hacia el oscuro corredor, entonces se volvi. "Ests por tu cuenta Malfoy. Resulvelo tu mismo - Me importa un comino."

Sin mirar atrs Harry se alej, dejando a Draco parado en las sombras de la noche que reflejaban perfectamente la oscuridad de su alma.

Captulo 4: Indiferencia42

Lo contrario al amor no es el odio, es la indiferencia.Draco se las arregl para encontrar un poco de tiempo a solas en la biblioteca, despus de enviar a Crabbe y Goyle a la cocina a robar comida y a aterrorizar a los elfos domsticos. Pareca estar haciendo esto mucho ltimamente, evitando a sus compaeros de Slytherin, pasando tiempo en privado, encontrando un triste consuelo al estar solo, aunque nada extingua la sensacin de estar desesperadamente incompleto.

No ayudaba el hecho de que no estuviera durmiendo bien (no haba podido dormir de forma decente las ltimas dos noches), especficamente desde esa noche en el Bosque Prohibido, ya fuera porque se haba estado preguntando un milln de veces como haba podido equivocarse de esa forma, o porque haba permanecido despierto pensando en Harry. Cualquiera de las dos opciones estaba actuando en detrimento de su buena salud mental.

Estaba estudiando desganadamente el grueso libro que tena enfrente, el olor a encerrado del pergamino le haca sentir ligeras nuseas. Todos los libros de Hechizos tenan una caracterstica: olan a viejo, y le recordaban la fra biblioteca de su padre, rodeada de oscuros secretos, donde haba mordido el anzuelo, donde todo haba comenzado, con ese maldito libro.

Draco haba aprendido a vivir su vida sin reconocer sus errores.

Pero cuando el error te atormenta a cada segundo, despierto o dormido, cuando amenaza con acabar con tu salud mental, derrumbando a su alrededor todo lo que has construido, mas el doloroso conocimiento de que todo fue tu culpa, es difcil no admitir que ests mal.

Haban pasado dos das desde que haba hablado con Harry, desde que le haba dicho que se mantuviera alejado de l, y haba que reconocer que Harry haba cumplido y no se haba acercado mucho a l desde entonces; aunque la separacin fsica no mejoraba para nada su desolacin mental.

Haba pasado una extraordinaria cantidad de tiempo pensando en Harry ltimamente. Pensar no era la palabra, era ms bien una contemplacin vaca, desprovista de sentimiento, un tipo aislado de emocin. Era como si su mente estuviera llena de nada ms que imgenes de Harry (como miraba, el color de sus ojos, su cabello negro azabache, su sonrisa juvenil) pero Draco era incapaz de pensar conscientemente en estas43

imgenes fugaces para darles profundidad y realismo.

Pero por supuesto, estas memorias intangibles se fundieron y adquirieron forma cuando Harry entr caminando a la biblioteca, acompaado de Ron y Hermione.

Draco aspir bruscamente, pero el aire se le ator en la garganta; Harry tambin lo vio y vacil un poco, ocasionando que Ron chocara contra su espalda.

"Qu pasa Harry?" Pregunt curioso Ron.

Su mirada tranquila se pos durante un momento en Malfoy, un momento que pareci congelarse en el tiempo, mientras la tensin se cristalizaba entre ellos, miradas que reflejaban su tregua hostil. Harry no pudo ver las manos de Draco, apretadas debajo de la mesa; el momento pas, sentido y olvidado, y Harry desvi la mirada y se encamin hacia otra mesa al final de la biblioteca, lejos de donde estaba sentado Draco.

En respuesta a Ron, Harry sacudi la cabeza casualmente. "Nada." Dijo sobre su hombro, "Casi olvido algo, eso es todo."

En los ltimos dos das, distrado por las prcticas de Quidditch y una enorme cantidad de deberes, Harry casi haba logrado olvidarse de Malfoy y su problema de la pocin amorosa. Haba sido relegado al fondo de su mente, mostrando nicamente su habitual rechazo hacia l en los pasillos y durante las clases (y Malfoy se lo haba facilitado.)

Se pregunt otra vez si Malfoy estaba tratando de engaarlo, si todo esto no era mas que una estpida maquinacin para ponerlo nervioso por nada. Pero el dbil rastro de emocin en sus ojos cuando sus miradas se cruzaron fue demasiado crudo para ser fingido y demasiado real para ignorarlo.

Harry volte hacia la mesa de Malfoy, pero estaba vaca. Draco se haba ido.

Sinti una punzada de culpabilidad, una sensacin de responsabilidad, pero entonces record las palabras de Draco, todava frescas en su memoria, palabras dichas con amargura y odio: mantente alejado de m. No quiero tu ayuda.

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Muy bien. El resentimiento volvi a surgir en l y elimin todo pensamiento sobre Malfoy de su mente, Malfoy y sus ridculas pociones de amor con una dosis de locura. Que lo resuelva por s mismo. No me importa.

Cerr los ojos y respir profundamente. Realmente no me importa para nada.

Draco se sent en su cama con el libro apoyado en su regazo, completamente olvidado. Apenas si poda poner su atencin en algo por ms de cinco minutos sin que su mente se distrajera invariablemente hacia Harry Potter.

Potter tena una cara agradable, reflexion ausente, olvidando que supuestamente no iba a pensar en l. Harry tena ese tipo de encanto intrnseco que haca que la gente le dirigiera una segunda mirada; no es que fuera guapo, pero definitivamente era atractivo.

Lo que probaba que su odio hacia Harry era solo un hbito adquirido.

Meti la mano en su bolsillo, y sus dedos sintieron el fro metal, que le trajo a la mente un recuerdo an mas fro. Lentamente sac la esposa, que emita chispas de fuego esmeralda al reflejar las llamas de la chimenea junto a su cama; esmeralda, un color demasiado familiar.

Acercndola a la luz, la inspeccion de cerca por primera vez, no la haba visto bien mientras la tena puesta (solo se haba atrevido a mirarla ligeramente, porque cuando lo haca le daban ataques de histeria y lo atemorizaba la idea de recordarlo todo otra vez.)

Se haba sentido inmensamente sorprendido y aliviado cuando Harry se la haba quitado; en su interior haba tenido miedo que se rehusara, tanto por venganza como por malicia o solo por despecho. Despus de todo, los papeles se haban invertido y no estaba seguro de que l hubiera accedido tan de buena gana como Harry lo haba hecho. No sin antes sacarle todo el jugo al momento.

Pero Harry no era como l. Y Draco estaba secretamente agradecido por eso.

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Recorri con el ndice el nombre grabado, escrito con una extravagante letra cursiva sobre el metal, no en el interior, sino en la superficie. Casi burln, un mudo insulto a su dignidad, una marca de indisputable posesin.

H J Potter

Presion fuerte sobre la superficie grabada de la esposa, tan duramente que las letras quedaron impresas en la piel de la yema de sus dedos, al revs. La pura implicacin del nombre, pareca sangrar a travs de su piel, un crudo recordatorio de la realidad, de las cadenas invisibles del veneno plateado que corra por sus venas, atando cuerdas intangibles alrededor de la nica cosa verdadera que no conoce lmites: el amor.

Era una burla, en verdad.

Era la prdida del control, porque el amor era la ms ntima eleccin y le haba sido arrancada, por una imprudente y no planificada coincidencia, era completamente horrorizante. La incredulidad persista entre los ltimos vestigios de esperanza, la delgada esperanza de que todo esto fuera un terrible sueo, que quiz la pocin que haba tomado era realmente un potente alucingeno y que su obsesin con Harry era solo un espejismo de su mas grande miedo vuelto realidad.

O quiz su ms profundo anhelo.

Ya no saba cul era la diferencia. As era como la pocin amorosa lo estaba corroyendo lentamente por dentro, confundiendo ilusin con realidad hasta que eran una mezcla perfecta, indistinguibles una de la otra, salpicadas por odio y resentimiento, que alternadamente vacilaba y llameaba.

Odiaba a Harry. Pero al mismo tiempo, lo amaba tambin. Dos violentos oponentes atrapados dentro de l, unidos inconcebiblemente, como hielo polar arrojado al corazn de un volcn. Era un enorme peso encima, una creciente tensin que amenazaba con explotar a la ms ligera provocacin.

Draco cerr los ojos, y casi pudo escuchar el hielo romperse, agrietndose y astillndose como vidrio hecho pedazos, dejando solamente espejos rotos de silencio en su mente. 46

"Maana nos toca Defensa Contra Las Artes Oscuras" gru Ron sacando su pluma y alisando la mitad de un rollo de pergamino sobre la mesa. "No he terminado todava mi ensayo sobre la maldicin Imperius."

"Tampoco yo," contest Harry tallndose los ojos mientras repasaba el captulo de la Maldicin Imperius en el libro. "Creo que todava me faltan dieciocho centmetros."

Para delicia de todos, el profesor Lupin haba regresado al principio del trimestre para ensear Defensa Contra Las Artes Oscuras a los alumnos de sptimo ao. Harry estaba muy contento de estar aprendiendo su tema favorito con el mejor maestro de Artes Oscuras que jams hubieran tenido, especialmente porque siendo su ltimo ao en Hogwarts, iban a aprender como luchar contra las formas ms avanzadas de Magia Oscura.

Naturalmente, uno de los primeros temas que tena que ser cubierto era el de las Maldiciones Imperdonables. Desde el incidente con el falso Ojo Loco Moody en el que mostr las Maldiciones a unos aterrorizados alumnos de cuarto curso, Dumbledore haba aplazado el tema para que lo vieran solo los alumnos en sptimo ao. Dumbledore no haba autorizado a Moody a comenzar sus clases con una demostracin de la Maldicin Imperius.

De acuerdo con su creativa forma de dar clase, cuya intencin era profundizar los temas, el profesor Lupin les haba pedido que escribieran un ensayo sobre la Maldicin Imperius. La tarea no consista solamente en exponer la historia y la funcin de la maldicin, sino tambin en exponer puntos de vista personales y hacer un anlisis crtico sobre porque pensaban que la Maldicin Imperius era tan mortalmente efectiva.

"Luchar contra las Maldiciones Oscuras no es solamente memorizar contrahechizos," haba dicho sabiamente Lupin. "Para repeler exitosamente una maldicin tienen que entenderla. Tienen que conocer la fuente de su potencia, cmo ataca a su objetivo hasta l