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y las serpientes de la discordia

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Si buscas aventuras, viajes y misterios, no te pierdas las divertidas historias de Los Cachorros

y de su archienemiga la malvada bruja Corneja.

También en la televisión y en el cine.

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Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra (www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 45).

© Creación de personajes e ilustraciones, Gruppo Alcuni srl © de esta edición: Grupo EDEBÉ, 2011Paseo de San Juan Bosco, 6208017 Barcelona (España)www.edebe.com

Dirección editorial del proyecto: Reina DuarteDirección audiovisual: Eva FontanalsRedacción de los textos: José Antonio FrancésSupervisión de textos: Anna ManfioDirector creativo: Javier GalánDiseño: Francesc Sala

ISBN 978-84-683-0293-5Depósito Legal: B. 23933-2011Impreso en EspañaPrinted in Spain

Cuccioli (Los Cachorros) es una marca del Gruppo Alcuni srlLibro basado en la serie Cuccioli (Los Cachorros),de Sergio y Francesco ManfioDirigida y realizada por: Sergio ManfioProducción ejecutiva: Francesco ManfioIdea original de Sergio Manfio y Francesco Manfio

En el tenebroso Castillo de la Magia, la malvada bruja Corneja prepara un plan para acabar con los Cachorros...

— ¡Tengo que encontrar un hechizo potente para terminar con esa pandilla de estúpidos animales! ¡Solo entonces seré la maga más poderosa del mundo!

—¡Puedes contar conmigo para dar un escarmiento a los Cachorros, amada Corneja! —dijo Cuncún muy servicial.

—¡Amada Corneja! ¡Qué expresión más ridícula! ¡Eres el criado más pelota que conozco!

—replicó Cambaluc burlándose de su amigo—. ¡Cuenta conmigo para tus planes, bruja Corneja, y no con este armiño bobo!

—¡Tú sí que eres ridículo y patético, y estúpido y esdrújulo...!

—¡Esdrújulo! ¡Ahora te vas a enterar...!

4

Los dos armiños se enzarzaron en una ridícula y patética y esdrújula pelea, pero la bruja no parecía disgustada con sus criados... Todo lo contrario: en su cara lucía una sonrisa malévola, como si hubiera tenido una de sus temibles ideas...

5

Mientras tanto, los Cachorros pasaban una tranquila mañana en la biblioteca.

—¿Por qué venimos a la biblioteca, Portátil? —preguntó Cilindro—. ¡Podríamos ir a jugar a la pelota, con el buen día que hace!

—Cuando no tenemos ninguna aventura entre manos, también debemos aprovechar el tiempo y estudiar los antiguos libros...

—Portátil tiene razón —añadió Oly—. Hace mucho tiempo que Corneja no nos sorprende con uno de sus hechizos y debemos estar preparados.

6

—¡Este conejo solo piensa en jugar! —dijo Diva con aire de superioridad—. Podías hacer como yo y ocupar tu cabeza en cosas importantes. Por ejemplo, ¡pintarse las uñas!

—Bueno, Diva, no creo que pintarse las uñas sea tan importante —respondió Cilindro un poco confundido.

—¡Cómo que no! Con las uñas pintadas y repintadas puedo recordarte, conejo tonto, que no «pintas» nada...