5 a plauto pséudolo

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5/20/2018 5aPLAUTOPsudolo-slidepdf.com http://slidepdf.com/reader/full/5-a-plauto-pseudolo 1/36 PLAUTO. PSÉUDOLO. PERSONAJES. PSÉUDOLO, esclavo de Simón. CALIDORO, joven, hijo de Simón. BALIÓN, rufián. SIMÓN, viejo. CALIFÓN, viejo, amigo de Simón. HÁRPAX, criado de un militar. CARINO, joven, amigo de Calidoro. ESCLAVOS. CORTESANAS. UN JOVEN ESCLAVO DE BALIÓN. UN COCINERO. SIMIA, sicofanta. La acción transcurre en Atenas. PRÓLOGO. Más vale estirar las piernas y ponerse en pie, que es muy larga la comedia de Plauto que vamos a representar. ACTO I. ESCENA PRIMERA. PSÉUDOLO, CALIDORO. PSÉUDOLO: Si fuera posible que, sin que tú, amo, me dijeras nada, averiguara yo cuáles son las penas que te afligen de esa forma tan lastimosa, hubiera tenido el gusto de ahorrar al mismo tiempo un trabajo a dos personas, a mí el de preguntarte y a ti el de responderme; pero como veo que eso no puede ser, me veo obligado a preguntarte; contéstame: ¿cuál es el motivo por el que llevas ya tantos días con el alma en los pies, siempre con esa carta a cuestas, y la bañas con tus lágrimas sin dar cuenta a nadie de lo que llevas por dentro?. Habla, para qua sepa yo contigo lo que ahora ignoro. CALIDORO: Soy más desgraciado que desgraciado, Pséudolo. PSÉUDOLO: No lo permita Júpiter. CALIDORO: Este asunto no pertenece a la jurisdicción de Júpiter; es bajo, el dominio de Venus, no de Júpiter donde se me trae a mal traer. PSÉUDOLO: ¿Puedo saber de qué se trata? Hasta lo presente no habías tenido tú nunca secretos para mí. CALIDORO: Ahora tampoco. PSÉUDOLO: Hazme saber lo que te pasa; te ayudaré con dinero, o con mis servicios, o con un buen consejo. CALIDORO: Toma esta carta y entérate tú por ti mismo de cuál es la pena y cuáles son las cuitas que me consumen. PSÉUDOLO: Se te dará gusto. Pero, oye, por favor, ¿qué es esto? CALIDORO: ¿El qué? PSÉUDOLO: Tengo la impresión de que estas letras quieren tener descendencia: se montan las unas encima de las otras. CALIDORO: ¿Ya estás con tus bromas de siempre? PSÉUDOLO: Realmente creo que, si no es la sibila quien las lee, no hay otro que pueda descifrarlas.

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PLAUTO. PSUDOLO.

PERSONAJES.PSUDOLO, esclavo de Simn.CALIDORO, joven, hijo de Simn.BALIN, rufin.SIMN, viejo.CALIFN, viejo, amigo de Simn.HRPAX, criado de un militar.CARINO, joven, amigo de Calidoro.ESCLAVOS.CORTESANAS.UN JOVEN ESCLAVO DE BALIN. UN COCINERO.SIMIA, sicofanta.La accin transcurre en Atenas.

PRLOGO.Ms vale estirar las piernas y ponerse en pie, que es muy larga la comedia de Plauto que vamos a representar.

ACTO I.ESCENA PRIMERA.PSUDOLO, CALIDORO.PSUDOLO:Si fuera posible que, sin que t, amo, me dijeras nada, averiguara yo cules son las penas que te afligen de esa forma tan lastimosa, hubiera tenido el gusto de ahorrar al mismo tiempo un trabajo a dos personas, a m el de preguntarte y a ti el de responderme; pero como veo que eso no puede ser, me veo obligado a preguntarte; contstame: cul es el motivo por el que llevas ya tantos das con el alma en los pies, siempre con esa carta a cuestas, y la baas con tus lgrimas sin dar cuenta a nadie de lo que llevas por dentro?. Habla, para qua sepa yo contigo lo que ahora ignoro.CALIDORO:Soy ms desgraciado que desgraciado, Psudolo.PSUDOLO:No lo permita Jpiter.CALIDORO:Este asunto no pertenece a la jurisdiccin de Jpiter; es bajo, el dominio de Venus, no de Jpiter donde se me trae a mal traer.PSUDOLO:Puedo saber de qu se trata? Hasta lo presente no habas tenido t nunca secretos para m.CALIDORO:Ahora tampoco.PSUDOLO:Hazme saber lo que te pasa; te ayudar con dinero, o con mis servicios, o con un buen consejo.CALIDORO:Toma esta carta y entrate t por ti mismo de cul es la pena y cules son las cuitas que me consumen.PSUDOLO:Se te dar gusto. Pero, oye, por favor, qu es esto?CALIDORO:El qu?PSUDOLO:Tengo la impresin de que estas letras quieren tener descendencia: se montan las unas encima de las otras.CALIDORO:Ya ests con tus bromas de siempre?PSUDOLO:Realmente creo que, si no es la sibila quien las lee, no hay otro que pueda descifrarlas.CALIDORO:Por qu hablas de esa manera tan dura de unas letras tan lindas, escritas por tan linda mano en una carta tan linda?PSUDOLO:Oye t, es que acaso tienen manos las gallinas?, porque de eso no hay duda, esta carta es una gallina quien la ha escrito.CALIDORO:Te ests poniendo muy cargante; lee la carta o devulvemela.PSUDOLO:No, no, la leo de punta a cabo. Pon atencin.CALIDORO:Si tengo perdido el nimo.PSUDOLO:Pues ctalo, que comparezca.CALIDORO:No, mejor yo guardar silencio y hazle salir t de la carta, que ah tengo ahora puesta el alma y no dentro del pecho.PSUDOLO:(Mirando la carta.) Calidoro, estoy viendo a tu amiga.CALIDORO:Dnde est?PSUDOLO:Aqu, mrala puesta en la carta (sealando el nombre de Fenicio); est echada aqu en la cera.CALIDORO:Los dioses todos te...PSUDOLO:...guarden!CALIDORO:Como hierba de verano, as de efmera ha sido mi existencia; rpido sal a la vida y rpida ha sido tambin mi muerte.PSUDOLO:Calla mientras leo la carta.CALIDORO:Lee ya entonces!PSUDOLO:Fenicio saluda a su amante Calidoro por medio de esta carta, de esta cinta usadas para atar la carta y de estas letras, en espera de la salud que t me dars, entre lgrimas y sintiendo vacilar su alma, su corazn y su pecho.CALIDORO:Ay de m!, si no encuentro por parte ninguna salud que enviarle, Psudolo!PSUDOLO:Qu salud?CALIDORO:Monetaria.PSUDOLO:Pero acaso quieres enviarle un saludo metlico por uno de madera? (sealando las tablillas de la carta) Mira bien lo que haces.CALIDORO:Sigue leyendo, vers cmo te das cuenta entonces de la rapidez con que necesito encontrar dinero.PSUDOLO:Cario mo, el rufin me ha vendido por veinte minas a un forastero, un militar de Macedonia, que le ha entregado quince minas antes de marcharse; ahora, slo restan cinco minas. Por eso ha dejado el militar aqu una contrasea, el retrato suyo de su anillo impreso en cera, para que me dejen ir con el que traiga una contrasea igual que sta. El da fijado para la entrega es el de las prximas fiestas de Dioniso.CALIDORO:Eso es maana; cerca tengo mi perdicin si no es que me ayudas.PSUDOLO:Deja que acabe de leer.CALIDORO:Te dejo, porque me parece estar hablando con ella; lee, es una mezcla de dulzura y de amargor lo que me ofreces.PSUDOLO:Ahora, nuestros amores, todo a lo que estamos hechos y acostumbrados, nuestros juegos y nuestras bromas, las cosas que nos decimos, los dulces besos, nuestros estrechos abrazos de enamorados, los suaves mordisqueos en los blandos labios, las caricias en los henchidos pechos, todos estos placeres van a sernos arrebatados, destrozados, aniquilados a m e igualmente a ti, si no encontramos o yo en ti o t en m algn medio de salvacin. Yo he procurado que sepas esto tanto como yo; ahora llega el momento de ponerte a prueba si es que amas de verdad o si no haces ms que fingir.CALIDORO:Qu carta tan lastimosa, Psudolo!PSUDOLO:Oh, s, lastimossima!CALIDORO:Por qu no lloras?PSUDOLO:Mis ojos son de piedra pmez; no puedo convencerlos de que echen ni una sola lgrima.CALIDORO:Y por qu?PSUDOLO:Es que nuestra familia ha sido siempre de ojos muy secos.CALIDORO:No quieres ayudarme?PSUDOLO:Qu es lo que puedo hacer por ti?CALIDORO:Ay!PSUDOLO:Ay?, con eso, Hrcules, no tienes que andar ahorrando; yo te dar cuanto quieras.CALIDORO:Soy un desgraciado, no encuentro por parte ninguna dinero a prstamo.PSUDOLO:Ay!CALIDORO:Y en casa no tengo ni un cntimo.PSUDOLO:Ay!CALIDORO:El militar se llevar maana a mi amiga.PSUDOLO:Ay!CALIDORO:sa es la forma que tienes de ayudarme?PSUDOLO:Yo te doy lo que tengo, que de ayes tengo conmigo un tesoro inextinguible.CALIDORO:Hoy es el da de mi perdicin. Pero puedes t prestarme una dracma y yo te la devuelvo maana?PSUDOLO:Hrcules! yo creo que apenas podra ni que diera en prenda toda mi persona; pero qu quieres hacer con ella?CALIDORO:Comprarme una soga.PSUDOLO:Para qu?CALIDORO:Para colgarme. Estoy decidido a entregarme a la noche eterna antes de esta noche.PSUDOLO:Y quin va entonces a devolverme la dracma si te la doy?, es que quieres acaso colgarte precisamente para birlarme la dracma si te la presto?CALIDORO:Yo, desde luego, si se me separa de ella y se la llevan, no puedo seguir viviendo de ninguna manera.PSUDOLO:Por qu lloras, tontaina? Vivirs.CALIDORO:Cmo no voy a llorar, si no tengo una sola moneda ni esperanza de encontrar un cntimo en parte ninguna?PSUDOLO:Segn lo que yo deduzco de lo que dice la carta, si no le lloras al rufin con lgrimas monetarias, con esas otras que viertes ahora no vas a conseguir ni ms ni menos que echando agua en un cedazo. Pero no te apures, que yo no te los abandonar en tus amores. Tengo la firme esperanza de encontrarte una ayuda monetaria de donde sea, por buenos o malos medios; por arte de qu va a suceder no lo podra decir, lo nico que s es que ser as. Siento que me dan saltos las cejas, lo que dice la gente es un buen presagio.CALIDORO:Ojal que los hechos respondan a tus palabras!PSUDOLO:Hrcules, Calidoro t ya sabes cuando yo me lo pongo en campaa la clase y el tamao de los los que suelo organizar.CALIDORO:En ti tengo puestas ahora todas mis esperanzas.PSUDOLO:Te quedas contento si te pongo hoy a la joven en tus manos o si te entrego veinte minas?CALIDORO:Desde luego, supuesto que vaya a ser una realidad.PSUDOLO:Pdeme veinte minas, para que tengas as la seguridad de que voy a llevar a cabo mi promesa, venga, pdemelas, Hrcules, yo te lo ruego, que me muero por prometrtelas.CALIDORO:Me entregars hoy veinte minas?PSUDOLO:Te las entregar. Ahora ya no me fastidies ms. Y adems te digo otra cosa, no vayas a decir luego que no te he avisado: si no encuentro otro a quien estafar, estafar a tu padre.CALIDORO:Los dioses te me conserven siempre. Pero si es posible, en atencin a la piedad filial... si quieres, tambin a mi madre.PSUDOLO:Por lo que respecta a este asunto, puedes dormir tranquilo... sobre los dos ojos.CALIDORO:Los ojos?, las orejas, querrs decir..PSUDOLO:Bueno, pero es que lo primero no es tan corriente.PSUDOLO:(Al pblico.) Ahora, para que nadie pueda decir que no ha sido informado, os comunico a todos, a la asamblea en pleno, a todo el pueblo, a todos mis amigos y conocidos, que por el da de hoy tengan cuidado conmigo, que no me den crdito.CALIDORO:Chis, calla, Hrcules, por favor!PSUDOLO:Qu ocurre?CALIDORO:Ha sonado la puerta del rufin.PSUDOLO:Ojal fueran los huesos de sus piernas los que hubieran sonado!CALIDORO:Y sale l mismo en persona, el perjuro ese.

ESCENA SEGUNDABALIN, ESCLAVOS, CORTESANAS, PSUDOLO, CALIDOROBALIN:(A los esclavos.) Afuera, afuera, haraganes, intiles, malas piezas! Jams se os pasa por las mientes portaros como es debido, no hay medio de servirse de vosotros como no sea de esta forma (los golpea). Yo no he visto en mi vida hombres ms parecidos a los asnos, tienen las espaldas hechas un puro callo a fuerza de golpes; si los pegas, eres t el que te haces dao; verdaderamente que no se da abasto con ltigos para ellos, no tienen otra cosa en la cabeza, si se les presenta la ocasin, ms que venga a arramblar con lo que sea, a robar, a quedarse con todo, a rapiar, a beber, a comer, a darse a la fuga, esto es en realidad su oficio, de forma que preferiras poner lobos a guardar ovejas que no a stos tu casa. Y luego, si te fijas en ellos, no tienen aspecto de malos, es con sus obras con las que te engaan. Ahora, como no atendis a las rdenes que os voy a dar, como no desterris de vuestro pecho y de vuestros ojos el sueo y la pereza, os voy a dejar las costillas de tantos colores que vais a dejar atrs a los bordados de las colchas de Campania y a los tapices de Alejandra con sus figuras de animales. Ya ayer haba dado rdenes a todos y haba distribuido a cada uno su tarea, pero es que sois malos por naturaleza de forma que obligis a que se os recuerde vuestro deber a fuerza de latigazos; os conducs de manera que vencis por vuestra contumacia a la correa esta y a m; fjate, fjate, estn nada ms que en otras cosas Atended aqu, prestad atencin, escuchad lo que os digo, raza de apaleados! Os juro que jams ser ms duro vuestro pellejo que esta correa que veis en mi mano (los azota): qu, os duele? Ah tenis, as se hace con los esclavos que no hacen caso a su amo. Colocaos todos ah frente a m y atended bien a lo que os digo: t, el del cntaro, trae agua y cudate de llenar el perol del cocinero; a ti, el del hacha, te pongo al frente de los asuntos leeros.ESCLAVO:Pero es que esta hacha est embotada.BALIN:Djalo, tambin lo estis vosotros a fuerza de golpes y es que acaso me sirvo menos de vosotros por eso? (A otro.) A ti te doy el cargo de la limpieza de la casa; buena tarea te espera: deprisa, adentro. (A otro.) T, prepara los divanes, ten limpia la plata y ponla en la mesa. Encargaos de que me lo encuentre todo a punto cuando vuelva del foro, que todo est barrido, regado, limpio, preparado, fregado, guisado; porque hoy es el da de mi cumpleaos y vosotros todos debis celebrarlo junto conmigo. (A un esclavo.) Pon en agua el jamn, corteza de tocino, papada y tetilla de cerdo, te enteras? Quiero acoger a lo grande hoy en mi casa a personas de mucho rango, para que tengan la impresin de que nado en la abundancia. Entrad y daos prisa, que no haya que andar esperando cuando llegue el cocinero; yo me voy ahora al mercado, para comprar todo el pescado que haya al precio que sea. (Al esclavo.) Ve t por delante, chico; hay que andarse con cuidado de que nadie le haga un agujero a la bolsa... o no, espera, por poco se me olvida decir una cosa aqu en casa; me os?, a vosotras, jvenes, tengo que daros las siguientes rdenes: vosotras, que os pasis la vida en medio del lujo, la molicie, las caricias, en compaa de los ms altos personajes, vosotras, renombradas cortesanas, yo voy a saber ahora y a enterarme cul de vosotras trabaja por su libertad y cul no piensa ms que en su estmago, cul en sus intereses y cul slo en dormir; cul puedo calcular que ser mi liberta y a cul voy a poner a la venta. Ocupaos de que se den hoy aqu cita de parte de vuestros amantes un sinnmero de regalos para mi persona, que si no se me llena la despensa para todo un ao, maana mismo os pongo en la calle como fulanas pblicas. Ya sabis que hoy es el da de mi cumpleaos, dnde estn todos esos para quienes sois la nia de sus ojos, su vida, ay, encanto, dame un besito, ay, qu tetitas, dulzura ma. Tradmelos aqu enseguida ante la casa, un ejrcito de donantes cargados de regalos. Para qu, si no, pongo a vuestra disposicin vestidos, joyas y todo lo que necesitis?, qu otra cosa tengo de vuestro trabajo aparte de perjuicios, malvadas? No pensis ms que en el vino; con l os llenis la andorga, mientras que yo estoy aqu sin probar gota. Ahora lo mejor es ir llamando a cada una por su nombre, para que no me venga luego ninguna con que no ha sido advertida. Atended todas. Por ti empiezo, Hedilio, que tienes amigos entre los comerciantes en granos, que disponen todos en casa de montones de trigo como montaas: procura que se me traiga aqu grano suficiente para el ao para m y toda mi casa, y que nade en trigo de tal forma que la gente me cambie el nombre y que, en vez del rufin Balin, me llamen el rey Jasn.CALIDORO:No oyes lo que dice el maldito? Qu fanfarroneras!, eh?PSUDOLO:Desde luego, y no slo eso, sino, adems, tambin qu fechoras, pero calla y pon atencin.BALIN:Escrodora, t que tienes por amigos a los mulos de los rufianes, los carniceros, que al igual que nosotros se buscan sus ganancias de mala manera con sus perjurios6, (doble sentido de ius (iurandum) 'juramento' y ius 'salsa'.) escchame: si no tengo hoy en mi poder tres garabatos de carnicero cargados con lomos de buen peso, maana, como se cuenta de los dos hijos de Jpiter que ataron a Dirce a un toro ( y Zeto, hijos de Jpiter y Antope, se vengaron de Dirce, a quien su esposo Lico, rey de Tebas, haba entregado a Antope como esclava.) as te voy a descuartizar colgada del garabato de la carne: se ser el toro para ti.CALIDORO:Me estoy poniendo furioso de orle.PSUDOLO:Mira que tolerar la juventud ateniense que viva aqu un hombre como ste!, dnde estn, donde se encubren esos individuos en la flor de la vida que buscan sus amores en casa del rufin?, por qu no se anan todos para liberar de tal calamidad al pueblo? Pero ay!, necio de m! qu ignorancia! Van a lanzarse a hacer una cosa as aquellos a los que el amor obliga a ponerse al servicio de los rufianes, impidindoles al mismo tiempo emprender nada que vaya en contra de los deseos de stos?CALIDORO:Ay, calla!PSUDOLO:Qu es lo que ocurre?CALIDORO:No me sabes llevar el aire, me ests fastidiando, no me dejas or lo que dice el otro.PSUDOLO:Me callo.CALIDORO:Mucho mejor sera que te callaras que no dijeras que te ibas a callar.BALIN:Y t, Xitilis, atindeme bien: tus amantes, sos nadan en aceite de oliva; si no se me pone aqu rpido a odres plenos, te meter maana a ti en uno de los tales y te har llevar a la prgola (Prgolas o tiendas se colocaban en la calle ante las casas y se utilizaban para diversos fines; en ellas exponan los rufianes a sus esclavas para la venta) all se te dar un lecho, pero no para que cojas el sueo, sino para que hasta que ya no puedas con ms... ya sabes a lo que me refiero. Qu, vbora!, t que tienes tantos amigos tan bien forrados de aceite acaso has movido un dedo para que ninguno de tus consiervos tenga un tanto as ms de brillo en la cabeza?, o es que ni yo mismo puedo hacerme preparar la carne con un poco ms de resbalante? Pero eso ya me lo s yo: es que a ti el aceite no te dice mucho, es con el vino con lo que te unges; deja, que yo te lo har pagar todo de un solo golpe, Hrcules! si no es que das cumplimiento hoy a todo lo que te digo. Y t que me ests siempre con la cantinela de que vas a pagarme el dinero por tu libertad, no sabes ms que hacer promesas, pero cumplir lo que has prometido, eso no lo sabes, Fenicio, contigo hablo, t, la preferida de la aristocracia: si hoy no se me trae toda clase de provisiones de las fincas de tus amigos, maana, Fenicio, parars en la prgola con la piel de color prpura. (Juego de palabras entre Phoenicium, nombre propio, y el adjetivo poeniceus de color prpura.)

ESCENA TERCERACALIDORO, PSUDOLO, BALINCALIDORO:Psudolo, no oyes lo que dice?PSUDOLO:S que lo oigo, amo, y bien atento que estoy.CALIDORO:Qu me aconsejas que le mande, para que no prostituya a mi amiga?PSUDOLO:No te preocupes, t tranquilo; yo tomar las medidas necesarias en mi nombre y en el tuyo. Ya hace tiempo que estamos el tipo ese y yo pero que en muy buenas relaciones, nuestra amistad data ya de aos: vers cmo le mando en el da de su cumpleaos un regalo de muy mala catadura y muy en su punto.CALIDORO:Y eso para qu?PSUDOLO:No tienes otra cosa de qu ocuparte?CALIDORO:Pero...PSUDOLO:No hay pero que valga.CALIDORO:Es que sufro mucho.PSUDOLO:Hazte el fuerte.CALIDORO:No puedo.PSUDOLO:Pues haz por poder.CALIDORO:Cmo puedo dominar mis sentimientos?PSUDOLO:Dale preferencia a lo que de hecho sirva a tus intereses y no des odos en la adversidad a lo que te dictan los sentimientos.CALIDORO:Pamplinas!, un enamorado no est contento si no hace locuras.PSUDOLO:Otra vez con las mismas?CALIDORO:Oh, Psudolo de mi alma, djame desvariar djame, por favor!PSUDOLO:Te dejo; djame ir.CALIDORO:Espera, espera, estoy dispuesto a hacer todo lo que t me digas.PSUDOLO:Ahora te pones en razn.BALIN:El tiempo corre; yo mismo me estoy deteniendo; hale, chico, ve por delante.CALIDORO:Eh, que se va!, por qu no le llamas?PSUDOLO:A qu esas prisas? Calma.CALIDORO:Pero antes de que se vaya.BALIN:(A su esclavo.) Maldicin, chico!, a qu esa calma?PSUDOLO:T, el del cumpleaos, eh, el del cumpleaos, a ti te digo, eh, el del cumpleaos! vulvete y chanos una mirada; aunque andas de trajn, te detenemos, espera! que hay aqu quienes quieren hablarte.BALIN:Qu es esto? Quin es el que se atreve a entretenerme en forma tan inoportuna con las prisas que llevo?PSUDOLO:Uno que fue tu salvacin.BALIN:Muerto es quien fue; yo necesito a alguien que viva ahora.PSUDOLO:No tantos humos.BALIN:No tanta pesadez!CALIDORO:(A Psudolo.) Sujtale, alcnzale!BALIN:Hala, chico.PSUDOLO:Vamos a cortarle el paso por aqu.BALIN:Jpiter te confunda, quienquiera que seas!PSUDOLO:A ti... quiero hablarte.BALIN:Pero yo no quiero hablar con ninguno de los dos; sigue por este otro lado, chico.PSUDOLO:No podemos hablar contigo?BALIN:No, no tengo ganas.PSUDOLO:Y si es algo que te interesa?BALIN:Vamos a ver: me va a ser posible seguir mi camino o no me va a ser posible?PSUDOLO:Ah, quieto ah!BALIN:Djame!CALIDORO:Balin, escucha.BALIN:Sordo soy, al menos para un palabrero.CALIDORO:Mientras que tuve, te di.BALIN:Yo no te reclamo lo que me diste.CALIDORO:Y te dar cuando tenga.BALIN:Llvatela cuando llegue ese caso.CALIDORO:Ay, qu forma tan triste de perder lo que te llev y te di!BALIN:Despus que tus bienes han fenecido, me vienes con palabreras; eres un necio, lo pasado, para siempre ausentado.PSUDOLO:Reconoce al menos a ste que est aqu.BALIN:Ya hace tiempo que s quin fue; quien sea ahora eso es cosa suya. Hala, t! (al esclavo).PSUDOLO:No va a ser posible que eches una sola mirada para ac, Balin?, vas a sacar provecho de ello.BALIN:Con esa condicin, lo har; que dado el caso que estuviera ofreciendo un sacrificio al soberano Jpiter y que tuviera ya las entraas en la mano para ponerlas sobre el altar, si entre tanto se me ofrece alguna ganancia, dejar a la mitad la ceremonia. Sea lo que sea, ante un deber tal queda todo a un lado.PSUDOLO:Hasta los dioses, a quienes debemos, sobre todo, temor y reverencia, le importan un pelo a ste.BALIN:Voy a hablarle: salud, t, el esclavo ms pillo de toda Atenas!PSUDOLO:Los dioses y las diosas todas te bendigan, segn los deseos de ste o los mos propios o, para el caso de que te merezcas otra cosa, que ni te bendigan ni te protejan.BALIN:Qu tal, Calidoro, que se hace?CALIDORO:Amar y pasar apuros.BALIN:Yo me apiadara de ti si la piedad sirviera para alimentar a las gentes de mi casa.PSUDOLO:Anda, nosotros te conocemos muy bien, no nos vengas con explicaciones. Pero sabes qu es lo que queremos?BALIN:S, ms o menos lo siguiente: que me parta un rayo.PSUDOLO:Eso, y luego otra cosa, que es por lo que te detenemos. Prstame atencin, por favor.BALIN:Soy todo odos. Pero abrevia, que ando muy ocupado.PSUDOLO:Aqu a ste le da apuro que, despus de haberte hecho una promesa y haberte dado un plazo para cumplirla; no te ha entregado an las veinte minas por su amiga.BALIN:El apuro es ms fcil de sobrellevar que el disgusto: a l le da apuro de que no ha pagado, yo tengo disgusto de no haber recibido.PSUDOLO:Pero te lo dar, ya encontrar el medio que sea; espera slo un par de das. Es que l tiene miedo de que la vendas a causa de sus diferencias contigo.BALIN:Si hubiera querido, habra tenido ya hace tiempo ocasin de darme el dinero.CALIDORO:Pero y si es que no lo tena?BALIN:Si estabas enamorado, lo hubieras encontrado a prstamo, hubieras ido al usurero, le hubieras propuesto algn aumento de los intereses, se lo hubieras sisado a tu padre.PSUDOLO:A su padre se lo iba a sisar, descarado? Desde luego, no hay peligro de que t des un buen consejo.BALIN:No sera rufianesco.CALIDORO:Que le iba yo a haber podido sisar algo a mi padre, un viejo tan avisado? Y adems, aunque me hubiera sido posible, la piedad filial me lo prohbe.BALIN:Bien, entonces abraza por las noches a la piedad filial en lugar de a Fenicio. Pero, puesto que segn veo antepones la piedad filial a tus amores, es que todos los hombres son tus padres?, no hay ninguno a quien pedirle un prstamo?CALIDORO:Un prstamo!: esa palabra ha dejado ya de existir.PSUDOLO:Oye, t, es que desde que bien hartos abandonan las mesas (Con este trmino se hace referencia aqu tambin a las mesas de los banqueros) esos individuos que te exigen lo suyo pero sus deudas no se las paga a nadie, a la vista de eso, pues todos andan con ms precaucin de no prestarle nada a nadie.CALIDORO:Ay qu desgraciado soy, no me es posible encontrar por parte ninguna ni un cntimo, y as, pobre de m, me muero de amor y de falta de dinero!BALIN:Hrcules! pues compra aceite a crdito y vndelo al contado, vers qu pronto te encuentras en la mano hasta doscientas minas, por Hrcules.CALIDORO:Ay de mi! la ley de los veinticinco (la lex Plaetoria prohiba hacer contratos a los menores de veinticinco aos.) es mi perdicin, todos tienen miedo a darme crdito.BALIN:La mismsima ley vale para m: tengo miedo a dar crdito.PSUDOLO:Conque dar crdito, eh? Oye, es que acaso te parece todava poco el provecho que has sacado de ste?BALIN:Un enamorado como es debido es slo aquel que eterniza sus dones; tiene que dar, dar sin tregua. Cuando no tenga nada, que deje tambin de amar.CALIDORO:Es que no sientes compasin ninguna?BALIN:T vienes con las manos vacas, tus palabras no son sonantes. De todos modos, por lo que a m respecta prefera verte en vida y con salud.PSUDOLO:Oye, pero es que acaso est muerto?BALIN:Sea como sea, para m, desde luego, con eso que dice, es como si estuviera muerto. El enamorado vive hasta el punto y hora en que viene con splicas al rufin. T debes venir a m siempre con quejas acompaadas de monedas; que esos lamentos con los que me vienes ahora de que no tengo, no tengo, es como si fueras y se lo contaras a tu madrastra.PSUDOLO:Oye, es que t te has casado con el padre de ste?BALIN:No lo permitan los dioses!PSUDOLO:Haz lo que te pedimos, Balin: yo salgo garante, si tienes miedo de fiarte de ste; en estos tres das sacar yo de donde sea, por tierra o por mar, el dinero para entregrtelo.BALIN:Que a ti te voy yo a dar crdito?PSUDOLO:Y por qu no?BALIN:Porque te juro que lo mismo sera atar con tripas de cordero a un perro que se escapa.CALIDORO:se es el agradecimiento que me tienes por lo bien que me he portado contigo?BALIN:A ver, algo ms?CALIDORO:S, espera unos das; no la vendas ni pierdas a un hombre enamorado.BALIN:No te apures, que estoy dispuesto a esperar hasta seis meses.CALIDORO:Bravo, eres la amabilidad en persona!BALIN:Pues aguarda quieres que te ponga an ms contento de lo que ests?CALIDORO:Cmo pues?BALIN:Ya no tengo puesta a la venta a Fenicio.CALIDORO:No?BALIN:Hrcules, no!CALIDORO:Psudolo, ve y trae vctimas de todas clases, menores y mayores, y carniceros, para que haga un sacrificio en honor de este mi Jpiter, que l es ahora para m mucho ms Jpiter que Jpiter en persona.BALIN:Yo no quiero vctimas mayores, yo quiero que se me aplaque con entraas de cordero.CALIDORO:(A Psudolo) Rpido!, qu haces ah parado? Ve y trae corderos, no oyes lo que dice Jpiter?PSUDOLO:Ahora mismo estoy de vuelta, pero primero tengo que ir a la carrera a la puerta de la ciudad.CALIDORO:Y eso por qu?PSUDOLO:De all traer dos carniceros, pero de esos de las campanillitas; al mismo tiempo traer dos rebaos de varas de olmo, que se quede el Jpiter este satisfecho con nuestro sacrificio. (Son los verdugos, que estaban extramuros y llevaban campanillas para avisar de su presencia)BALIN:Vete a la horca!PSUDOLO:All ir nuestro rufianesco Jpiter.BALIN:(A Calidoro) A ti te convendra que yo me muriera.CALIDORO:Por qu?BALIN:Porque mientras que yo est en vida no sers t una persona de bien. Pero a ti (Psudolo) no te conviene que yo me muera.PSUDOLO:Por qu?BALIN:Porque si yo desaparezco no habr otro ms malo que t en toda Atenas.CALIDORO:Por favor, Balin, contstame ahora en serio a mi pregunta: ya no tienes en venta a Fenicio?BALIN:Claro que no la tengo, por la sencilla razn de que la he vendido ya.CALIDORO:Cmo?BALIN:Sin abalorios, pero con todas sus entraas.CALIDORO:Que t has vendido a mi amiga?BALIN:Y tanto, por veinte minas.CALIDORO:Por veinte minas?BALIN:Si lo prefieres, por cinco veces cuatro minas, a un militar macedonio, y quince minas obran ya en mi poder.CALIDORO:Qu es lo que oigo?BALIN:Que tu amiga ha quedado convertida en monedas.CALIDORO:Cmo te has atrevido a hacer una cosa as?BALIN:Me ha dado la gana, era ma.CALIDORO:Eh, Psudolo, ve y trae una espada!PSUDOLO:Para qu una espada?CALIDORO:Para matar a ste... y a m.PSUDOLO:Mtate a ti solo, que ste va a morir de hambre de todos modos.CALIDORO:Dime, t, el ms perjuro de los mortales, no me habas jurado que no se la venderas a nadie ms que a m?BALIN:Exacto.CALIDORO:Y adems con juramento solemne?BALIN:Solemne y perenne.CALIDORO:Has cometido un perjurio, malvado.BALIN:Pero me he metido el dinero en el bolsillo; yo, que soy un malvado, puedo disponer de dinero; t, que eres una persona honrada, de tan buena familia, no tienes una perra.CALIDORO:Psudolo, ponte ah a ese otro lado y llnale de insultos.PSUDOLO:De acuerdo: ni siquiera al pretor correr tan a la carrera para que me d la libertad.CALIDORO:Insltale sin parar.PSUDOLO:Te voy a hacer trizas a fuerza de insultos. Sinvergenza!BALIN:Muy bien.CALIDORO:Criminal!BALIN:Tienes toda la razn.PSUDOLO:Bribn!BALIN:Por qu no?CALIDORO:Violador de sepulturas!BALIN:Desde luego que s.PSUDOLO:Malhechor!BALIN:Estupendo!CALIDORO:Traidor!BALIN:Eso es lo mo.PSUDOLO:Parricida!BALIN:(A Calidoro.) Venga, ahora t.CALIDORO:Sacrlego!BALIN:Confieso que s.PSUDOLO:Perjuro!BALIN:Vaya novedad!CALIDORO:Violador de las leyes!BALIN:Y tanto.PSUDOLO:Ruina de la juventud!BALIN:De todas todas!CALIDORO:Ladrn!BALIN:Bravo!PSUDOLO:Desertor!BALIN:Ah va!CALIDORO:Estafador pblico!BALIN:Totalmente de acuerdo.PSUDOLO:Impostor!CALIDORO:Puerco!PSUDOLO:Rufin!CALIDORO:Lodazal!BALIN:Qu buenos cantantes!CALIDORO:Has azotado a tu padre y a tu madre.BALIN:Y los mat antes que tener que alimentarlos: qu mal hay en ello?PSUDOLO:Estamos echando agua en un cedazo, perdemos el tiempo.BALIN:Tenis algo ms que decir?CALIDORO:No tienes vergenza?BALIN:No la tienes t de haber resultado un enamorado ms vaco que una nuez vana? As y todo, a pesar de vuestros insultos, si el militar no me trae las cinco minas hoy, que es el da fijado para la entrega, si no las trae, digo, me parece que puedo hacer de las mas.CALIDORO:Y qu es eso?BALIN:Si t me traes el dinero, me vuelvo atrs de mi trato con l; se es mi oficio. Si tuviera tiempo, seguira hablando contigo; pero estando limpio de dinero, es intil que me pidas que me compadezca de ti. Ya sabes mi decisin, o sea, que delibera qu es lo que debes hacer.CALIDORO:Te vas ya?BALIN:Tengo mucho que hacer ahora.PSUDOLO:Pues ya vers despus. (Balin se va.) ste es mo, si no es que estoy totalmente dejado de la mano de los dioses y los hombres; le voy a dejar igual de limpio que los cocineros a las morenas. Ahora, Calidoro, quiero que me prestes tu colaboracin.CALIDORO:Qu es lo que me ordenas?PSUDOLO:Yo tengo la intencin de poner sitio a esta ciudad (sealando la casa del padre de Calidoro): de forma y manera que sea conquistada en el da de hoy. A este fin se precisa de un hombre astuto, listo, avisado y ladino, que ponga por obra las instrucciones que yo le d, no uno que duerma despierto.CALIDORO:Pero dime: qu es lo que piensas hacer?PSUDOLO:Ya lo sabrs a su tiempo; no quiero andar repitiendo las cosas, que tambin as son ya las comedias ms largas de lo debido.CALIDORO:Tienes toda la razn.PSUDOLO:Venga, rpido, ponme aqu en seguida, un tipo como te he dicho.CALIDORO:Si vas a ver, son, entre muchos amigos, muy pocos los que lo son de verdad.PSUDOLO:Ya lo s; o sea que tienes que hacer una doble seleccin: primero escoge unos pocos de entre muchos, y de esos pocos, dame uno que sea amigo de verdad.CALIDORO:A ahora mismo te lo pongo aqu.PSUDOLO:Acabars ya de irte? T mismo eres quien te detienes con tanto charlar. (Se va Calidoro)

ESCENA CUARTAPSUDOLO:Se fue, solo te has quedado, Psudolo. Qu es lo que vas a hacer ahora, despus de que has echado el resto haciendo esas fantsticas promesas al hijo del amo?, se puede saber dnde quedan? Sin tener a punto ni una gota de plan fijo, ni, todava menos el dinero, ni... Ahora ya s lo que voy a hacer: no sabes ni por dnde has de empezar tu trama ni hasta dnde has de continuar para acabarla; pero como el poeta cuando se pone a escribir busca lo que no existe en parte ninguna, y, as y todo, lo encuentra y le da aspecto de verdad a lo que no es sino mentira, yo ahora ser un poeta: veinte minas, que no aparecen por ninguna parte, yo las encontrar. Adems, que ya le haba dicho que se las iba a dar y quise lanzar mi dardo contra nuestro viejo, pero es que l, no s cmo, se lo barrunt. Pero tengo que acallar mi voz y dejar de hablar: ah veo a Simn venir hacia ac con su vecino Califn; ah est el viejo sepulcro, de donde desenterrar hoy veinte minas para entregrselas a su hijo. Voy a retirarme a esta parte, para poder escuchar desde aqu su conversacin.

ESCENA QUINTASIMN, PSUDOLO, CALIFNSIMN:Si se eligiera ahora en Atenas del tica un dictador de entre el gremio de los prdigos o los galanes enamorados, estoy seguro de que sera mi hijo el que se llevara la palma: no se oye otra cosa por toda la ciudad sino que quiere dar la libertad a su amiga y que anda buscando dinero al efecto. Esto es lo que me cuentan los dems, pero hace ya tiempo que me haba yo percatado de ello y me lo estaba oliendo, slo que haca por disimular. PSUDOLO:(Aparte.) Con que le apesta ya su hijo! La cosa est perdida, estamos en un callejn sin salida, el lugar hacia donde yo quera dirigirme para hacer mis provisiones... monetarias, en esa direccin est cortado el camino. Se lo ha olido: nos quedamos sin botn.CALIFN:Lo que es esas personas que propalan chismes y los que les prestan odos, si por m fuera, deban colgarlos a todos, a los que los cuentan, por la lengua, y a los que los escuchan, por las orejas; porque esas historias con que te vienen de que si tu hijo est enamorado y de que si quiere birlarte dineros, quin sabe si quiz no son todo ms que habladuras, y en el caso de que fueran verdad, sobre todo tal como andan hoy en da las costumbres, qu es lo que habra hecho de particular?, es que es acaso una novedad el que un muchacho joven est enamorado y quiera liberar a su amiga?PSUDOLO:(Aparte.) Huy, qu encanto de viejo!SIMN:Yo soy un hombre chapado a la antigua, y no quiero que se porte as.CALIFN:Pues mira; no sacas nada con no quererlo, o en tal caso, no debas t haber hecho lo mismo en tu juventud; un padre que exige que su hijo sea mejor de lo que l fue, debe ser el mismo una persona de bien, porque anda que t, de los despilfarros y de las calaveradas que hiciste habra para repartir a todos los ciudadanos por cabeza y luego te asombras de que el hijo salga a su padre?PSUDOLO:Oh, Zeus! qu pocas personas hay que sepan tener un poco de comprensin. Eso es un padre que se porta como se debe con su hijo.SIMN:Quin habla por aqu? Anda, si es mi esclavo Psudolo; ste es el que tiene echado a perder a mi hijo. el muy bribn; l es su gua y su maestro, no estoy sino deseando mandarle a la horca.CALIFN:Simn, yo te lo aviso, es una necedad el enfadarse as por las claras. Cunto mejor sera abordarle con buenas palabras e indagar si son ciertas o falsas las cosas que te cuentan. En la adversidad, si sabes conservar la calma, reduces a la mitad las penas.SIMN:Seguir tus consejos.PSUDOLO:(Aparte.) sos vienen derechitos hacia ti, Psudolo, ponte en forma para dirigirte contra el viejo: salud, en primer lugar a mi amo, tal como corresponde despus; si es que sobra algo, salud tambin para los vecinos.SIMN:Salud!, qu se hace, Psudolo?PSUDOLO:Pues eso, estar aqu en pie, como ves.SIMN:Fjate, fjate, Califn, qu ademanes se gasta, ni que fuera un rey!CALIFN:S, ya lo veo, estupendo, y qu seguro de s mismo.PSUDOLO:A un esclavo inocente y sin tacha le cuadra mantener alta la cabeza sobre todo frente a su amo.CALIFN:Psudolo, querernos hacerte algunas preguntas sobre unos rumores que han llegado a nuestros odos as de una forma un poco vaga.SIMN:Vers cmo te engatusa ste, espera, que vas a pensar que no es Psudolo sino Scrates quien habla contigo.PSUDOLO:S, ya hace tiempo que t me tienes en nada, no creas que no me doy cuenta. Ya lo s que no tienes mucha confianza en m. T querras que yo fuera un bribn, pero no por eso voy a dejar de ser una buena persona.SIMN:Psudolo, yo te lo ruego, haz sitio en la morada de tus odos para que puedan tomar asiento mis palabras en el lugar al que las dirijo.PSUDOLO:Hale, di lo que quieras, aunque en s estoy a malas contigo.SIMN:T, el esclavo, vas a estar a malas conmigo que soy tu amo?PSUDOLO:Y es que acaso te parece eso una cosa tan de extraar?SIMN:Hrcules! Tal como te expresas, no parece sino que tengo que guardarme de tus iras. Y adems, que los golpes que t pretendes darme son otros que los que yo suelo darte a ti. Qu dices t, Califn?CALIFN:Pues yo pienso que tiene razn de estar molesto contigo, si es que t le muestras tan poca confianza.SIMN:Es igual, dejmosle estar molesto; ya me encargar yo de que no me cause perjuicios. Pero a ver, Psudolo, qu me dices a mi pregunta?PSUDOLO:Si tienes alguna pregunta que hacerme adelante!; lo que yo sepa, puedes decir que es el orculo de Delfos quien te da la respuesta.SIMN:Prstame entonces atencin y ten presente esa promesa que me haces. Dime: sabes acaso si mi hijo anda enamorado de una flautista?PSUDOLO:! (S, en griego).SIMN:Y qu quiere darle la libertad?PSUDOLO:!SIMN:Y que t tienes el plan de birlarme veinte minas con tus embustes y tus sabios ardides?PSUDOLO:A ti te las voy a birlar?SIMN:S, eso, para drselas a mi hijo para que pueda comprar a su amiga: Anda, confisalo, di otra vez !PSUDOLO:!CALIFN:Lo confiesa!SIMN:No te lo haba dicho yo, Califn?CALIFN:S, s, lo recuerdo perfectamente.SIMN:Por qu me lo has ocultado una vez que lo supiste?, por qu no lo he sabido yo?PSUDOLO:Yo te lo dir: porque no quera ser yo el promotor de una costumbre tan fea como que un esclavo acuse a uno de sus amos ante el otro.SIMN:ste se mereca que le agarraran por el cuello y le llevaran al molino.CALIFN:Pero es acaso culpable?SIMN:Y en grado sumo!PSUDOLO:Deja yo s lo que me hago, Califn; mis faltas mas son. (A Simn.) Ahora escucha por qu no te he dado cuenta de los amores de tu hijo: saba que me esperaba el molino si te lo deca.SIMN:Y no sabas que te esperaba el molino si me lo callabas?PSUDOLO:Claro que lo saba.SIMN:Por qu no se me ha dicho entonces?PSUDOLO:Pues porque en el primer caso, el castigo era inminente, en el segundo estaba lejos; lo primero era cosa hecha, para lo segundo haba todava un poco de plazo.SIMN:Y qu es lo qu vais a hacer ahora?, porque, desde luego, a m es imposible birlarme el dinero, sobre todo despus de que estoy ya en ello. Voy a dar por todas partes el aviso de que no se os preste cantidad ninguna.PSUDOLO:Te juro que no me andar con splicas con nadie mientras t ests en vida; t sers quien me des el dinero, a ti te lo voy a sacar.SIMN:Que me lo vas a sacar a m?PSUDOLO:Y tanto que s.SIMN:Un ojo de la cara me puedes sacar si es que llego a drtelo.PSUDOLO:Pues me lo dars. Ya desde ahora te aviso que te andes con tiento conmigo.SIMN:Al menos una cosa es segura: que si me lo sacas, habrs llevado a cabo una hazaa sorprendente.PSUDOLO:Y la llevar a cabo.SIMN:Y si no lo consigues?PSUDOLO:Me das de latigazos. Pero y si te lo saco, qu?SIMN:Pongo a Jpiter por testigo de que no recibirs castigo por ello en tu vida.PSUDOLO:A ver si lo tienes presente.SIMN:Te crees que no voy a ser capaz de andar con ojo, una vez que estoy avisado?PSUDOLO:Yo te recomiendo que tengas cuidado. Te aviso, digo, que tengas cuidado. ndate con ojo; ah, con esas mismas manos, me entregars t hoy el dinero.CALIFN:Hrcules, qu tipo tan famoso si cumple su palabra!PSUDOLO:(A Simn.) T puedes considerarme tu esclavo si no me salgo con la ma.SIMN:Muy agradecido; por lo visto, ahora no me perteneces, no?PSUDOLO:Quieres que diga todava una cosa que os asombre an ms?CALIFN:Hrcules! estoy deseando orlo, porque la verdad es que te escucho con sumo gusto.SIMN:Venga, que no es poco el gusto con que te oigo.PSUDOLO:Antes de dar esta batalla, dar adems otra gloriosa y memorable.SIMN:Cul batalla?PSUDOLO:Mira, el rufin ese vecino tuyo: la flautista esa por la que se muere tu hijo, eh?, pues sa se la voy a birlar al rufin con mis engaos y mis sabios ardides.SIMN:Qu?PSUDOLO:Esta misma tarde estar todo perfecto, lo uno y lo otro.SIMN:Si es que, como afirmas, consigues llevar a cabo esas dos operaciones, vas a dejar atrs al rey Agatocles por tu valenta. Pero, si no lo consigues, tienes algo en contra de que te ponga en el molino?PSUDOLO:Y no para un solo da, sino para todo lo que me quede de vida. Pero, si lo consigo, me dars de grado enseguida el dinero para que se lo entregue al rufin?CALIFN:Es muy justo lo que pide Psudolo, dile que s, que se lo dars.SIMN:Pero sabes lo que se me acaba de ocurrir ahora mismo?: a ver si va a ser que el rufin y ste se han entendido entre s, Califn, o han tramado un engao y actan de comn acuerdo para birlarme el dinero.PSUDOLO:Dnde encontrar un tipo ms valiente que yo, si me atrevo a dar tal golpe? T no sufras, Simn, que yo te digo lo siguiente: si es que nos hemos puesto de acuerdo, o si hemos tramado un plan, o si nos hemos entendido uno con otro en lo que se refiere a este asunto, as como se escriben las letras en un papel con un clamo, igualitamente puedes dejar escritas mis espaldas con varas de olmo.SIMN:Venga, manos a la obra, echa ya entonces el pregn de la fiesta, si es que te empeas.PSUDOLO:T, Califn, estate hoy a mi disposicin, por favor, no te ocupes de ningn otro asunto.CALIFN:Pero es que haba planeado ayer ir hoy a la finca.PSUDOLO:Pues da al traste con los planes que habas planeado.CALIFN:No, desde luego que no voy, por causa tuya, que estoy deseoso de contemplar el espectculo que nos vas a ofrecer, Psudolo. Ms an, si veo que Simn no te da el dinero como ha prometido, antes de que te quedes sin ello, estoy dispuesto a drtelo yo.SIMN:Yo no me vuelvo atrs de lo dicho.PSUDOLO:Puedes estar seguro de que, si no me lo das, se te reclamar a grito pelado. Hale, largaos ya, adentro con vosotros y dejadme campo libre, que pueda yo dar comienzo a mis maquinaciones.CALIFN:Sea, se te dar gusto.PSUDOLO:Pero t ya sabes que no quiero que salgas de casa.CALIFN:Que s, que te prometo mi colaboracin.SIMN:Pues yo me voy al foro; ahora mismo estar de vuelta.PSUDOLO:Vuelve rpido. (Se van los viejos.) (Al pblico.) Tengo yo ahora la sospecha que vosotros sospechis, que yo prometo tan grandes hazaas slo para distraeros durante la comedia, y que no voy a hacer lo que he dicho que hara. Pues no, no me vuelvo atrs. Pero la verdad es que, que yo sepa, no s an la forma en que lo har; lo nico que s es que tendr lugar. Quien se presenta en las tablas debe ofrecer novedades de forma y de contenido; si no es capaz de hacerlo, que deje paso al que lo sepa. Ahora quiero recogerme un rato en casa para reclutar los embustes en mi caletre ; *** saldr, no os har esperar; entre tanto, os distraer aqu el flautista.

ACTO IIESCENA PRIMERAPSUDOLO:Oh, Jpiter! Qu bonitamente, qu felizmente me sale todo aquello donde pongo la mano! El plan que abrigo en mi pecho no deja lugar a dudas ni temores. Desde luego, es una necedad confiar grandes empresas a personas pusilnimes porque todo en este mundo depende de la forma en que lo hagas, de la importancia que le des; yo he dispuesto ya en mi cabeza de tal forma mis tropas, filas dobles y triples de ardides y de engaos, que sea donde sea donde me tope con el enemigo (dicho sea, fiado en el valor de mis antepasados y en mi propia capacidad para la malicia y el engao), podr, digo, vencerle fcilmente y fcilmente expoliar con mis perfidias a mis adversarios. Ahora va a ser a Balin, este enemigo comn mo y vuestro al que voy a desbalionar con mi ballesta; prestad slo atencin; yo estoy dispuesto a dar el asalto a esta ciudad (sealando la casa de Balin) de forma que sea tomada hoy, y contra ella voy a dirigir mis legiones; si la conquisto, les facilitar la vida a mis conciudadanos. Despus dirigir mi ejrcito en seguida contra esta vieja ciudad (sealando la casa de Simn), de donde me cargar y colmar de botn a m y a todos mis camaradas, para que se sepa que he nacido para infundir el terror y poner en fuga a mis enemigos: tal es la estirpe de la que soy oriundo; yo estoy predestinado a llevar a cabo grandes hazaas, cuya fama se mantenga largo tiempo entre las generaciones venideras. Pero quin es se que veo, ese desconocido que se ofrece a mi vista? Me est entrando curiosidad de saber a qu viene ah con esa espada, voy a observar desde aqu qu es lo que hace.

ESCENA SEGUNDAHRPAX, PSUDOLOHRPAX:stos son los lugares y ste es el barrio que me ha indicado mi amo, segn puedo yo verificar por mis ojos la razn que me dio mi amo el militar: a partir de la puerta de la ciudad hace la sptima la casa donde vive el rufin a quien me ha mandado traer esta contrasea y este dinero. No s lo que dara por encontrar a alguien que me indicara, dnde vive exactamente el rufin Balin.PSUDOLO:(Aparte.) Chis, calla, calla, ste es mo, si no es que estoy totalmente dejado de la mano de los dioses y los hombres! Tengo que tomar una nueva resolucin, que sto es algo que se me presenta muy de improviso; esto tiene, preferencia, renuncio a todos mis planes anteriores. Vers a qu vapuleo voy a someter al mensajero militar este.HRPAX:Voy a llamar a la puerta para que salga alguien.PSUDOLO:T, quienquiera que seas, ahrrate esos golpes, que yo he salido a la calle para interceder por esta puerta y protegerla.HRPAX:Eres t entonces Balin?PSUDOLO:No, yo soy Vicebalin.HRPAX:Y qu quiere decir eso?PSUDOLO:Yo soy el que administra sus vveres, el encargado de la despensa.HRPAX:O sea, su mayordomo.PSUDOLO:No, se est por debajo de m.HRPAX:A ver, t eres esclavo o libre?PSUDOLO:Por lo pronto soy todava esclavo.HRPAX:Esa facha tienes, no tienes aspecto de ser un hombre libre.PSUDOLO:chate una mirada a ti mismo antes de hablar mal a los dems sin motivo.HRPAX:(Aparte.) Este individuo debe ser un pillo.PSUDOLO:(Aparte.) Yo gozo realmente del favor de los dioses; este tipo me va a servir de yunque: y que no van a ser pocas las patraas qua voy a forjar en l!HRPAX:(Aparte.) Qu es lo que habla ah se para sus adentros?PSUDOLO:A ver, joven!HRPAX:Qu quieres?PSUDOLO:Vienes t o no de parte del militar macedonio, eres esclavo de uno que nos ha comprado una joven, que ha entregado a mi amo el rufin quince minas y le debe cinco?HRPAX:S que lo soy. Pero de dnde diablos me conoces o dnde me has visto o cruzado jams una palabra conmigo? Porque, desde luego no he venido nunca con anterioridad a Atenas, ni te he visto con mis ojos a ti nunca jams antes de hoy.PSUDOLO:Me ha dado la impresin de que vienes de su parte; es que cuando se march de aqu, se concert el da de hoy como fecha para traer el resto del dinero y todava no nos lo ha trado.HRPAX:Y tanto que s.PSUDOLO:Es que lo traes t?HRPAX:Yo mismo en persona.PSUDOLO:Y qu haces entonces que no me lo entregas?HRPAX:A ti te lo voy a entregar?PSUDOLO:A m, Hrcules, que estoy al frente de los bienes y de la contabilidad de mi amo Balin, que cobro los dineros y efecto los pagos a quienes se los debe.HRPAX:Hrcules! As administraras los tesoros del propio Jpiter no te entregara yo a ti ni un cntimo.PSUDOLO:Nada ms que dar un estornudo estar resuelta la cosa.HRPAX:Ni resuelta ni suelta, sino bien atada (sealando la bolsa del dinero).PSUDOLO:Ay de ti! Conque vas a ser t el que ponga en tela de juicio el crdito de que gozo, como si de continuo no se me entregaran a m solo cantidades cien veces mayores que sa!HRPAX:Puede ser que otros sean de esa opinin y que a pesar de eso yo no te haga confianza.PSUDOLO:O sea que quieres decir que yo pretendo birlarte el dinero.HRPAX:No, sino que t eres quien lo dice, y yo, pues como si tuviera esa impresin. Pero Cmo te llamas?PSUDOLO:(Aparte.) El rufin este tiene un esclavo que se llama Siro, le dir que soy l. Me llamo Siro.HRPAX:Siro?PSUDOLO:S, se es mi nombre.HRPAX:Estamos hablando demasiado; si tu amo est en casa por qu no le dices que salga, para acabar con el encargo que traigo, te llames como te llames?PSUDOLO:Si estuviera en casa, le llamara. Pero si me lo quieres dar a m, estar ms pagado todava que si se lo das a l.HRPAX:Sabes t una cosa? Mi amo me ha enviado a entregar esta cantidad, no a perderla, porque, estoy bien seguro, todo ese afn no es ms que porque no puedes echarle las garras a esto. Yo, aparte de a Balin, no le entrego a nadie un cntimo.PSUDOLO:Pero es que ahora est ocupado; est en un juicio.HRPAX:Los dioses le amparen! Pero, por lo que a m toca, volver cuando crea que est en casa. T hazte cargo de esta carta y se la das a l, que sa es la contrasea entre mi amo y el tuyo para el asunto este de la joven.PSUDOLO:S, lo s: que el que traiga el dinero y un sello con su retrato, que le mandramos con l a la joven. Es que aqu ha dejado tambin una copia de su sello.HRPAX:Ests al tanto de todo.PSUDOLO:Pues cmo podra ser de otra forma?HRPAX:Entrgale, pues, esta contrasea a tu amo.PSUDOLO:Vale. Pero cmo te llamas?HRPAX:Hrpax (Nombre parlante, 'rapaz', 'ladrn'.)PSUDOLO:Largo de aqu, Hrpax, no me haces gracia; te juro que lo que es aqu en nuestra casa no entras, no sea que vayas a hacer de las tuyas.HRPAX:Es que suelo capturar vivos a los enemigos en la batalla, por eso me dicen as.PSUDOLO:Me parece a m que ms bien las vasijas de bronce de las casas.HRPAX:No es as. Pero sabes lo que te ruego, Siro?PSUDOLO:Lo sabr, si es que me lo dices.HRPAX:Yo paro al otro lado de la puerta de la ciudad, en la fonda que hace el nmero tres, en casa de Crisis, la vieja esa que parece un tonel, coja y gorda.PSUDOLO:Y qu es lo que quieres pues?HRPAX:Que vayas a llamarme all cuando vuelva tu amo.PSUDOLO:Como quieras, de acuerdo.HRPAX:Porque es que vengo cansado del camino y quiero reposar un poco.PSUDOLO:Tienes razn, me parece muy bien. Pero mira que no me hagas andarte buscando cuando vaya a llamarte.HRPAX:No, luego que almuerce, me echar a dormir.PSUDOLO:Estupendo.HRPAX:Alguna cosa ms?PSUDOLO:Que te vayas a dormir.HRPAX:Me marcho.PSUDOLO:Eh, t, Hrpax! Cuida de arroparte bien; vers que bien te encuentras despus de haber sudado. (Hrpax se va.)

ESCENA TERCERAPSUDOLO:Dioses inmortales, ese tipo me ha salvado con su llegada! Con su vitico me ha hecho volver a buen camino, perdido como estaba; porque la misma Oportunidad en persona no hubiera podido llegar ms oportunamente que la oportuna carta esta que me ha entregado; esto es el cuerno de la abundancia, que contiene en s todo lo que deseo: ardides, engaos de todo gnero, embustes, dinero y la amiga para el enamorado hijo del amo. Y ahora, para presumir y dar prueba de lo listo que soy: todos los detalles para birlarle la joven al rufin los tena yo ya dispuestos punto por punto; todo estaba pensado, calculado, delineado tal como me haba parecido oportuno pero no hay duda: la diosa de la Fortuna da ella sola ciento y raya a los planes de cien hombres listos. Y otra cosa tambin es verdad: el xito en las empresas depende de la medida en que se sabe aprovecharse de la fortuna, y se es el criterio por el que se puede distinguir a una persona cuerda. Cuando nos enteramos de que un plan le ha salido bien a alguien declaramos que es una persona de talento, y un imbcil aquel a quien le sale mal. Necios de nosotros!, no nos damos cuenta del error en que estamos cuando deseamos ardientemente alcanzar una cosa, como si estuviera en nuestra mano el saber lo que mejor nos conviene. Dejamos lo cierto por lo dudoso, y al final sucede que la muerte se nos echa encima en medio de penas y trabajos. Pero basta ya de filosofas, ya estoy hablando demasiado. Dioses inmortales!, ni a precio de oropel hubiera salido caro el embuste que me acabo de inventar al decir que era el esclavo del rufin. Ahora con esta carta voy a engaar a tres al mismo tiempo, al amo, al rufin y al dador de la misma. Bravo, la historia se repite, otro deseo que se me cumple!: ah veo venir a Calidoro que trae a quien sea consigo.

ESCENA CUARTACALIDORO, CARINO, PSUDOLOCALIDORO:(A Carino.) Dulzuras y amarguras, ya te he dado cuenta de todo, ya ests al tanto de mis amores, de mis dificultades, de mis escaseses.CARINO:Lo tengo todo presente; t ahora no tienes ms que decirme qu es lo que quieres que haga.CALIDORO:Yo te he dicho entre otras cosas.CARINO:Lo s todo, te digo; t slo dime qu es lo que quieres que haga.CALIDORO:Psudolo me ha dado la orden de que le trajera una persona activa, diligente y bien dispuesta para conmigo.CARINO:Pues has cumplido muy bien sus rdenes, porque en m tienes un amigo y una persona que te quiere bien; pero ese Psudolo que dices no s yo quin es.CALIDORO:Es un tipo que ni pintado, y para m, lo que se dice un facttum. l me ha asegurado que llevar a cabo lo que te dije.PSUDOLO:Vers en qu forma tan subida le voy a hablar.CALIDORO:De quin es esa voz que oigo?PSUDOLO:o, o, oh, mi soberano, a ti, a ti te busco, yo, Psudolo, tu esclavo!: yo te dar tres veces, en tres dones, en tres porciones, de tres maneras, tres satisfacciones, por tres caminos tres alegrones, alevosamente conseguidos de tres cretinos, a fuerza de embustes, de astucia y ser ladino. Aqu, aqu en este insignificante lacrado memorial, te traigo todo lo dicho.CALIDORO:l es!CARINO:Qu bien sabe parodiar el tono trgico el muy bribn!PSUDOLO:Avanza hacia m a la par ma, alarga tranquilo, tu mano y dame la bienvenida.CALIDORO:Bajo qu nombre te debo saludar, Psudolo, debo llamarte mi Esperanza, o mi Salvacin?PSUDOLO:Las dos cosas.CALIDORO:Salud, Lasdoscosas. Pero cmo van los asuntos?PSUDOLO:T tranquilo.CALIDORO:Mira, aqu he acarreado a ste.PSUDOLO:Qu, que lo has acarreado?CALIDORO:Bueno, que lo he trado conmigo, quise decir.PSUDOLO:Y quin es?CALIDORO:Carino.PSUDOLO:Bravo!, te hago gracia del tal Carino. (Frase en griego: juego de palabras entre Charinus y chrin; el sentido es doble: te doy las gracias y te hago gracia de l.CARINO:Puedes mandarme tranquilamente lo que quieras, si se te ofrece algo.PSUDOLO:Gracias, gracias, no te molestes, Carino, no vamos a incomodarte.CARINO:Vosotros incomodarme? No es molestia ninguna.PSUDOLO:Bueno, pues entonces qudate, si quieres.CALIDORO:(Al ver la carta que tiene Psudolo.) Qu es eso?PSUDOLO:Acabo de hacerme con esta carta y con una contrasea.CALIDORO:Contrasea?, qu contrasea?PSUDOLO:La contrasea que ha sido trada ahora mismo de parte del militar. Acabo de pegrsela al esclavo que la traa. Trae tambin cinco minas, vena a llevarse a tu amiga.CALIDORO:Cmo?PSUDOLO:Oye, t, la comedia sta se representa para los espectadores: ellos lo saben, que estaban presentes; a vosotros os lo contar despus.CALIDORO:Y ahora qu hacemos?PSUDOLO:Hoy mismo tendrs a tu amiga libre entre tus brazos.CALIDORO:Yo?PSUDOLO:T mismo en persona, digo, si los dioses me dan vida con tal de que me encontris un sujeto a toda prisa.CARINO:De qu facha?PSUDOLO:Un bribn, un hombre astuto, avisado, alguien que, una vez puesto en camino, sepa luego tomar resoluciones propias; y adems, que no haya sido visto por aqu.CARINO:Importa si es un esclavo?PSUDOLO:Todo lo contrario: prefiero con mucho que no sea un hombre libre.CARINO:Yo creo que te puedo proporcionar un individuo pillo y ladino, que acaba de llegar de Caristo (Ciudad de la isla de Eubea.) de parte de mi padre y no ha salido hasta ahora de casa a parte ninguna ni ha estado nunca en Atenas antes del da de ayer.PSUDOLO:Estupendo. Pero yo necesito encontrar hoy cinco minas prestadas, que devolver hoy mismo porque el padre de ste (Calidoro) est en deuda conmigo.CARINO:Yo te las dar, no las busques por otra parte.PSUDOLO:Oh, qu hombre tan oportuno! Tambin necesito una clmide, una espada y un sombrero de viaje.CARINO:Yo te lo puedo prestar.PSUDOLO:Dioses inmortales, este hombre me est resultando no Carino ni carencia, sino la Abundancia en persona! Pero ese esclavo de Caristo que dices es de fino olfato?CARINO:En cuanto a olfato, es a chotuno a lo que le apestan los sobacos.PSUDOLO:Debe llevar una tnica con mangas. Y tiene sal el tipo ese?CARINO:Por arrobas.PSUDOLO:Y si es dulzura lo que se necesita, es tambin capaz de suministrarla?CARINO:Qu pregunta!: vino mirrado o de pasas, mosto, hidromiel, miel de toda clase; ms an, es que una vez hasta quiso poner por eso una taberna en sus adentros.PSUDOLO:Bravo! me pagas en la misma moneda, Carino. Pero cmo se llama el tipo?CARINO:Simia.PSUDOLO:Sabe coger las vueltas en una situacin difcil?CARINO:Y ms deprisa que un trompo.PSUDOLO:Tiene buenas explicaderas?CARINO:En especial para salir con bien de sus muchas trapisondas.PSUDOLO:Y cuando le cogen con las manos en la masa?CARINO:Es como una anguila: se escurre.PSUDOLO:Tiene decisin?CARINO:Una decisin del pueblo no es ms decidida que la suyaPSUDOLO:Qu tipo tan estupendo, tal como me lo describes!CARINO:Pues si supieras, vers, nada ms que echarte la vista encima te explicar l mismo qu es lo que quieres. Pero, qu es lo que piensas hacer? PSUDOLO:Yo te lo dir. Una vez disfrazado, le har pasar por el esclavo del militar; l traer la contrasea esta al rufin juntamente con las cinco minas, y se llevar a la joven de la casa del rufin ah tienes toda la historia. Por lo dems, los detalles de su actuacin se los explicar a l mismo. CALIDORO:Qu hacemos aqu entonces?PSUDOLO:Traedme en seguida al tipo ese disfrazado como corresponde a casa del banquero Esquines, pero daos prisa.CALIDORO:All estaremos antes que t.PSUDOLO:Marchaos entonces rpido. (Se van.) Disipadas han quedado todas mis dudas y mis incertidumbres, ahora est todo transparente, ahora tengo la mente clara; el camino est libre. Yo conducir todas mis legiones en orden bajo sus enseas: con el vuelo de los pjaros a la izquierda, bajo auspicios que no dejan lugar a dudas y conforme a mis deseos, estoy seguro de que podr perder a mis enemigos. Ahora me voy al foro para cargar a Simia con un buen fardo de advertencias: le explicar cul es su cometido, que no d algn traspi, para que sea sabio portador de nuestra trapisonda. Vers qu pronto tomo al asalto la ciudadela rufianesca.

ACTO IIIESCENA PRIMERA (Escena no es autntica en opinin de Lorenz, Ussing y Ernout.)

JOVEN ESCLAVO:(Saliendo de la casa de Balin.) Si los dioses hacen caer a un chico en la esclavitud de un rufin y si encima resulta que es feo, realmente le afligen, en mi opinin, con una gran desgracia y con penas sin cuento. ste es el caso de la esclavitud que me ha tocado en suerte, que pesan sobre m toda clase de desgracias, grandes y pequeas: no me es posible encontrar un galn que sienta predileccin por m, que fuera entonces tratado al fin de forma un poco ms aparente. Y el caso es que hoy es el cumpleaos del rufin este: nos ha amenazado a todos desde el ms empingorotado hasta el ltimo de la casa, con que el que no le hiciera un regalo en el da de hoy, perecera maana con la peor de las torturas. Yo, en serio que no s cmo arreglrmelas; yo no puedo lo que pueden los que estn hechos a ello. Pero si yo no le entrego hoy un regalo, tendr que tragarme maana una buena racin de palos. Ay, que mi corta edad no da todava para ese asunto! Y, desde luego, con el miedo que tengo ahora de los palos, pobre de m, si alguien me pone en la mano algo de peso: a pesar de que dicen que se hace a fuerza de gritos creo que podr apretar los dientes como sea; ahora lo que tengo que apretar es la boca y callarme: ah vuelve del foro el amo con el cocinero.

ESCENA SEGUNDABALIN, UN COCINEROBALIN:Eso de decir mercado de cocineros es una necedad; en realidad se deba decir mercado de ladrones. Porque en el caso de que hubiera yo jurado buscar un cocinero malo de verdad, no hubiera podido traer otro peor que el que traigo, un charlatn, un majadero, un intil. Como que yo creo que el Orco no se le ha querido llevar a su seno slo para que hubiera aqu quien preparara la cena para los muertos, que yo creo que no hay otro ms capaz de guisar a su gusto.COCINERO:Si eras de opinin de que soy as como dices, para qu me has contratado?BALIN:A falta de poder elegir: no haba otro. Pero por que estabas t all solo en el foro, siendo cocinero t y nada ms que t?COCINERO:Yo te lo explicar: la culpa de pasar por un mal cocinero no reside en m, sino en la avaricia ajena.BALIN:Y eso cmo?COCINERO:Yo te lo dir. Pues porque nada ms llegar para contratar a un cocinero, nadie va y escoge al mejor y al ms caro, sino que contratan al ms barato; se es el motivo por el que era yo el nico que estaba all en el foro sentado a la espera. No tengo nada en contra de que se dejen contratar esos desgraciados por una dracma, pero lo que es a m, no me hace nadie levantarme de mi asiento por menos de dos. Yo no trabajo como los dems cocineros, que te presentan en los platos una pradera guisada, que toman a los comensales por ganado bovino, no les ofrecen sino hierbas... y luego, eso, el condimento de las hierbas, pues otro tanto de lo mismo: le ponen cilantro, hinojo, ajo, perejil, sirven romazas, col, acelgas, bledo; le echan una libra de laserpicio, le machacan la maldita mostaza, que le hace a uno saltrsele las lgrimas ya antes de ponerse a ello. Esos individuos, cuando preparan una cena, al condimentarla no la condimentan con condimentos, sino con harpas, capaces de devorar las entraas de los comensales ya en vida. Por eso vive aqu la gente tan poco tiempo, por echarse a la andorga tal clase de hierbas, que da horror ya slo nombrarlas, cunto ms comerlas. Eso, unas plantas que no las tocan los animales, van los hombres y se las comen ellos.BALIN:Oye, es que utilizas t condimentos mgicos con los que alargas la vida humana?, a qu si no tantos denuestos contra esa otra clase de condimentos?COCINERO:Puedes afirmarlo con toda tranquilidad, porque hasta doscientos aos pueden vivir las gentes que coman los manjares que yo preparo. Es que yo, nada ms echar en las cazuelas el cocilendro o el cepolendro o la mcide o la saucptide, en seguida empiezan las cazuelas a hervir de por s. Estas hierbas las utilizo para preparar los frutos del mar; los animales terrestres los condimento con hapalpside o con cataractria (Nombres no identificables, probablemente inventados por el cocinero.)BALIN:Anda y que Jpiter te confunda con tus condimentos y con toda esa serie de embustes que ests contandoCOCINERO:Djame hablar, hombre.BALIN:Habla y vete al cuerno.COCINERO:Cuando hierven ya todas las cazuelas, las destapo todas; entonces el olor que despiden vuela hacia el cielo a mano suelta; Jpiter mismo cena el olor ese todas las noches.BALIN:El olor a mano suelta?COCINERO:Me he confundido.BALIN:Cmo?COCINERO:Quise decir a pierna suelta (En el texto latino es otra la frase hecha.)BALIN:Y si no vas a ninguna casa a guisar, qu es lo que cena Jpiter?COCINERO:Se va a la cama sin cenar.BALIN:Vete al cuerno! Y para eso voy a pagarte yo hoy dos dracmas?COCINERO:Yo confieso que soy un cocinero muy caro, pero conforme al precio es tambin la calidad de mi trabajo en las casas a donde soy contratado.BALIN:S eso, para robar.COCINERO:Oye, es que pretendes t encontrar algn cocinero sin uas de milano o de guila?BALIN:Y es que pretendes t ir a cocinar a ninguna parte sin que te hagan preparar la cena con las uas cortadas? (A un esclavo.) Ahora, t, a ti, que eres de los mos, te ordeno que te des prisa en quitar de en medio todas las cosas y, adems, que no pierdas de vista a ste: a donde quiera que dirija l su mirada, la diriges t tambin; si va hacia donde sea, t detrs; si alarga la mano, t otro tanto de lo mismo; si es que es algo suyo lo que coge, le dejas cogerlo, si echa mano a algo nuestro, lo agarras t por otro lado; si da un paso, lo das t tambin, si se para, t igual, si se agacha, te agachas t al mismo tiempo; a sus pinches les dar tambin a todos un guardaespaldas particular.COCINERO:No te pongas as, hombre, no seas tan pesimista. BALIN:Dime cmo es eso posible trayndote a ti aqu a mi casa. COCINERO:Pues porque con lo que te tragues hoy aqu por obra ma vers como te ocurre igual que a Pelias con Medea, que con sus filtros y sus pcimas se cuenta que le volvi un pollo de un abuelo que era el hombre . Igualito har yo contigo. (Segn la leyenda, no le devolvi la juventud, sino que le envenen.)BALIN:Oye, t, pero es que eres tambin brujo? COCINERO:No, al contrario, una salvaguarda del gnero humano. BALIN:Anda ah! Cunto me llevas por ensearme una sola de tus recetas? COCINERO:Cul? BALIN:De cmo te puedo guardar a ti para que no me robes nada. COCINERO:Si te fas de m, dos dracmas; si no, no lo hago ni por cien. Pero vamos a ver: es a tus amigos o a tus enemigos a quienes vas a dar hoy una cena? BALIN:Hombre, naturalmente a mis amigos. COCINERO:Y por qu no invitas mejor a tus enemigos? Porque es que yo voy a presentar a tus comensales una cena preparada de tal forma y condimentada con una exquisitez tal, que todos y cada uno de los que gusten de cada uno de mis platos van a tener que roerse los dedos. BALIN:Hrcules! por favor, anda y ve, y antes de ofrecrsela a ninguno de mis invitados, prubala t primero y dsela a probar a tus pinches, para que os rois vuestras ladronas manos. COCINERO:Me da a m la impresin de que no me crees lo que digo. BALIN:Anda y no te pongas cargante; ya es demasiado lo que ests cascando, cierra el pico. Mira, sa es mi casa; entra y prepara la cena. Date prisa.ESCLAVO (del cocinero):Ponte a la mesa y llama a los comensales, que se pasa la cena! BALIN:Ah tienes; de tal palo tal astilla, el lameplatos este se porta ya tambin como un pcaro. Desde luego, no s por donde empezar a vigilar: la casa est ya llena de ladrones, y aqu al lado (la casa donde vive Psudolo) hay un bandido; el vecino de aqu, el padre de Calidoro, no ha parado de advertirme antes en el foro que tuviera cuidado con su esclavo Psudolo y que no me fiara de l, porque dice que anda dando vueltas hoy para, si puede, birlarme a la joven. Me ha dicho que le ha prometido firmemente que se llevar de mi casa a Fenicio por malas artes. Ahora me voy para dentro y avisar a toda mi gente que no se fen un pelo de l. (Entra en casa.)

ACTO IVESCENA PRIMERAPSUDOLO, SIMIAPSUDOLO:(Hablando con Simia, sin darse cuenta de que no le sigue.) Si ha sido jams voluntad de los dioses inmortales el socorrer a alguien, entonces es cosa hecha que quieren mi salvacin y la de Calidoro, as como tambin la ruina del rufin; para mi socorro te crearon ellos a ti, un hombre tan avisado y tan astuto. (Volvindose a mirar.) Pero dnde est ste?, pues no ser necio de estarme relatando todo esto a m mismo? Hrcules!, me parece que me ha engaado; siendo los dos tal para cual, he andado con poca precaucin con l. Entonces desde luego estoy perdido, si es que se ha largado, ni podr dar hoy cima a mi empresa. Pero mira, ah lo veo, una estatua a propsito para ser apaleada; qu forma de marchar, con qu aires avanza! Eh, t, estaba venga mirar por todas partes buscndote, por Hrcules! Ya pensaba horrorizado, si te habas escurrido.SIMIA:Confieso que en ese caso no hubiera hecho sino lo que me corresponde.PSUDOLO:Dnde te habas metido?SIMIA:Donde me ha dado la gana.PSUDOLO:Eso me lo tengo bien sabido.SIMIA:Para qu preguntas entonces lo que sabes?PSUDOLO:A ver, que quiero darte unos avisos.SIMIA:Djate de dar avisos a los dems estando t necesitado de ellos.PSUDOLO:Oye, t, te pones demasiado insolente conmigo.SIMIA:Cmo no me voy a poner insolente teniendo que hacer de militar?PSUDOLO:Es que estoy con prisas de dar ya cima a nuestro plan.SIMIA:Y es que acaso ves que hago otra cosa?PSUDOLO:Pues venga, muvete con ms ligereza.SIMIA:No, sino despacito.PSUDOLO:Ahora es la ocasin; mientras que el otro duerme, quiero que te adelantes t a presentarte. SIMIA:A qu tantas prisas?, calma, t tranquilo. Jpiter haga que aparezca tambin all, sea quien sea, el que viene de parte del militar: yo te juro que jams de los jamases ser el otro ms Hrpax que yo. T no te apures, que yo te dar este asunto solucionado de maravilla, y al soldado ese forastero le voy a dejar tan achantado a fuerza de imposturas y de embustes, que va a negar que es el que es y a asegurar que soy yo quien es l.PSUDOLO:Cmo puede ser eso?SIMIA:Me matas con tu pregunta!PSUDOLO:Qu tipo tan estupendo!SIMIA:Hasta a ti, que eres mi maestro, te voy a dejar atrs con mis imposturas y mis embustes, para que lo sepas.PSUDOLO:Jpiter te guarde para bien mo!SIMIA:No, sino para el mo. Pero echa una mirada para ac: me cae bien el disfraz este?PSUDOLO:Fenomenal!SIMIA:Vale.PSUDOLO:Que los dioses inmortales te concedan, todos los bienes que desees, que si quisiera que te den lo que te mereces, sera menos que nada; yo no he visto en mi vida un tipo ms malo y ms resabiado que ste.SIMIA:Conque t te atreves a decirme eso a m, eh?PSUDOLO:Me callo. Pero si supieras la forma en que te voy a recompensar si me solucionas el asunto este con la debida circunspeccin!SIMIA:Calla ya! Hacer recordar a quien recuerda, borra el recuerdo a quien recordaba. Estoy al tanto, lo conservo todo en mi caletre, tengo muy bien pensados todos los embustes.PSUDOLO:Qu tipo ms bueno!SIMIA:Eso, a decir verdad, ni t ni yo.PSUDOLO:Pero mira que no vayas a dar algn tropezn.SIMIA:Acabars por callarte?PSUDOLO:Los dioses me bendigan como...SIMIA:No te van a bendecir, porque no vas a decir ms que mentiras.PSUDOLO:...es verdad, Simia, que te aprecio y te respeto y te tengo en alta estima por tu perfidia.SIMIA:Mira, esas canciones me s yo muy bien cantrselas a los dems; a m no me puedes hacer tragar tanta carantoa.PSUDOLO:T no te puedes figurar lo bien que te voy a tratar cuando hayas dado cima a esta empresa...

SIMIA:Ja, ja, ja!PSUDOLO:...lo que se dice a pedir de boca: vino, perfumes, buenas presas acompaando las bebidas; adems tendrs all tambin a una joven guapa, que te colmar de besos.SIMIA:Anda que no me regalas bien!PSUDOLO:No, pues si lo llevas todo a buen trmino, entonces s que lo vas a poder decir.SIMIA:Si no lo consigo caiga sobre m la mano del verdugo. Pero venga, dime cul es la puerta del rufin.PSUDOLO:Ah, la que hace la tercera.SIMIA:Chis, calla, se abre la casa!PSUDOLO:Seguro que es que se siente mal.SIMIA:Por qu?PSUDOLO:Porque vomita al rufin en persona.SIMIA:Es se?PSUDOLO:se es.SIMIA:Mala pieza es, Psudolo, fjate cmo anda de travs, no derecho: ni que fuera un cangrejo.

ESCENA SEGUNDABALIN, PSUDOLO, SIMIABALIN:Pues no parece este hombre tan malo como pensaba, el cocinero este, digo, porque hasta ahora no le ha echado el garfio ms que a una venencia y una copa.PSUDOLO:(A Simia.) Eh, t, ahora es la ocasin y el momento oportuno.SIMIA:Soy de tu misma opinin.PSUDOLO:Mucha vista y adelante; yo me quedo aqu al acecho.SIMIA:(En voz alta.) Me he quedado bien con el nmero: sta es la travesa que hace el nmero seis a partir de la puerta de la ciudad, aqu es donde me haba mandado parar; pero del nmero que me dijo que haca la casa, de eso no tengo ni idea.BALIN:(Aparte.) Quin es ese tipo de la clmide, o de dnde viene, o a quin buscar? Parece forastero, yo por lo menos no le conozco.SIMIA:Pero mira, ah veo a quien me pueda dar razn de lo que no s.BALIN:Viene derecho a mi casa: de dnde podr ser el individuo este?SIMIA:He, t, el de la barba de chivo, contstame a lo que te pregunto!BALIN:Oye, t, no saludas para empezar?SIMIA:Yo no tengo saludo ninguno que dar.BALIN:Pues te juro que te voy a pagar en la misma, moneda.PSUDOLO:(Aparte.) Qu comienzo tan bueno!SIMIA:A ver, conoces t un individuo aqu en esta calle? A ti te digo!BALIN:S, yo a m mismo.SIMIA:Pocos son los que hacen eso que dices, que en el foro apenas habr uno de diez que se conozca a s mismo.PSUDOLO:(Aparte) Estoy salvado, se pone a filosofar.SIMIA:Yo busco aqu a una mala persona, un tipo que acostumbra a saltarse las leyes, un impo, un perjuro y un malvado.BALIN:(Aparte.) ste me busca a m, porque todos esos son mis apodos: no le falta ms que decir mi nombre. (En voz alta.) Y cmo se llama ese hombre? SIMIA:El rufin Balin. BALIN:No lo deca yo? Joven, yo soy el que buscas en persona. SIMIA:Que t eres Balin? BALIN:Efectivamente, yo lo soy. SIMIA:A juzgar por tu vestimenta, se dira que eres un butronero. BALIN:Desde luego, y t, si dieras conmigo en la oscuridad, no me pondras la mano encima, no? SIMIA:Mi amo me ha dado el encargo de saludarte de su parte. Toma esta carta, que me la dio para que te la entregara. BALIN:Quin es el que te ha dado el encargo? PSUDOLO:(Aparte.) Ay de m!, ahora se ha quedado atrancado, no sabe el nombre, ahora no hay por donde tirar.BALIN:Quin es el que dices que me enva esta carta?SIMIA:Comprueba el sello; dime t mismo el nombre para que sepa yo que t eres Balin.BALIN:Oh, es Polimaqueroplgides!, el mismo que viste y calza; le reconozco; eh, t, su nombre es Polimaqueroplgides!SIMIA:Ahora ya tengo la certeza de que est bien entregada la carta, despus que has dicho el nombre de Polimaqueroplgides.BALIN:Qu tal le va?SIMIA:Como a un hombre valiente y a un guerrero de primera. Pero date prisa a leer la carta, por favor, que ando apurado, y a recibir en seguida el dinero y entregarme a la joven. Porque una de dos, o estoy hoy de vuelta en Sicin, o muerto soy maana, que mi amo es un hombre muy desptico.BALIN:Lo s, no me lo tienes que decir.SIMIA:Venga, date prisa, pues, en leer la carta.BALIN:Calla entonces, que pueda hacerlo: El militar Polimaqueroplgides enva esta carta al rufin Balin, sellada con el sello que fue concertado entre los dos.SIMIA:El sello va en la carta.BALIN:Ya lo veo y lo reconozco. Pero no acostumbra tu amo a encabezar la carta con un saludo?SIMIA:sa es la forma de ser de los militares. Balin: de su mano dan la salud a sus amigos y de su mano la perdicin a sus enemigos; pero sigue, que te enteres t por ti mismo de qu es lo que pone la carta.BALIN:Escucha, pues: Hrpax, mi criado es quien tienes ante ti..., eres t Hrpax?SIMIA:Yo soy Hrpax, y no slo de nombre.BALIN:... que es el portador de esta misiva; de l quiero que recibas el dinero y que me enves con l a la joven. A personas que lo merecen se les debe de escribir un saludo; yo, si te considerara digno de ello lo hubiera hecho.SIMIA:Entonces qu?BALIN:Nada, entrgame el dinero y llvate a la joven.SIMIA:Eres t o soy yo el que no anda listo?BALIN:Venga, sgueme adentro.SIMIA:De acuerdo. (Entran en casa de Balin.)

ESCENA TERCERAPSUDOLO:Yo no he visto nunca jams un tipo ms malo ni un pillo ms ladino que este Simia; yo mismo tengo miedo y me estremezco de pensar que vaya a traicionarme a m lo mismo que lo ha hecho con el otro, que viendo que le sale todo a pedir de boca vaya a tornar los cuernos contra m, si encuentra ocasin de hacer una mala pasada, pero espero que no, porque yo estoy a buenas con l. Ahora es triple el miedo que me acosa: en primer lugar, temo a este mi compinche, no me vaya a traicionar y se pase al enemigo; tengo miedo, no sea que vuelva entre tanto el amo del foro y vayan a ser capturados los piratas con su captura; y, al temer esto, temo tambin no vaya a volver el otro Hrpax antes de que este Hrpax se largue de aqu con la joven Hrcules, muerto soy, no acaban de salir! (de casa de Balin). Mi corazn est a la espera con el hato hecho para salirse de mi pecho en direccin al exilio, si el otro no sale trayendo a la joven consigo. (Al ver abrirse la puerta.) Ma es la victoria, he quedado por encima de mis avisados guardianes!

ESCENA CUARTASIMIA, PSUDOLO, FENICIOSIMIA:No llores, Fenicio, t no sabes la verdad de las cosas, pero ya vers cmo te enteras dentro de muy poco, cuando ests a la mesa. Yo no te llevo al macedonio ese de los dientes, que te hace ahora llorar, sino a quien ests t deseando pertenecer con toda tu alma; vers cmo vas a verte sin tardar en los brazos de Calidoro. PSUDOLO:Por favor, qu has hecho tanto tiempo ah dentro?; tengo el corazn molido a fuerza de darme saltos en el pecho. SIMIA:Miserable, te parece bonita la ocasin para andarte con preguntas en medio de las asechanzas del enemigo? Vmonos de aqu rpido, a paso militar. PSUDOLO:Desde luego, te juro que, a pesar de que eres un pillo, tienes razn con tu advertencia. Victoria, adelante, derechos a empinar el codo! (Se van.)

ESCENA QUINTABALIN:Ja, ja, ja! Al fin puedo descansar tranquilo, una vez que se march se de aqu y se llev a la joven. Anda, que venga ahora el bribn de Psudolo para birlrmela con sus patraas. Hrcules, jurar en falso mil veces preferira que no que me engaara y se burlara de m. Ahora ser yo quien me ra de l, si le veo; pero seguro que parar en el molino, como estaba convenido. Lo que s me gustara es encontrarme con Simn, para congratularnos mutuamente.

ESCENA SEXTASIMN, BALINSIMN:Voy a ver qu es lo que hace nuestro Ulises, a ver si es que se ha hecho ya con la imagen de la diosa de la ciudadela balinica( Alusin a uno de los tres hados que al cumplirse seran la seal de la cada de Troya)BALIN:Oh afortunado, alarga esa afortunada diestra!SIMN:Qu es lo que ocurre?BALIN:Ya...SIMN:Ya qu?BALIN:...no tienes nada que temer.SIMN:Qu pasa?, ha estado ya aqu el otro?BALIN:No.SIMN:Qu es entonces lo que hay de bueno?BALIN:Sanas y salvas son las veinte minas que te habas apostado con Psudolo.SIMN:Hrcules, ojal que as fuera.BALIN:Exgeme veinte minas si Psudolo se apodera hoy de la joven, o si, como ha prometido, se la entrega a tu hijo. Venga, por favor, hazme la propuesta que me deshago por prometrtelas, para que te enteres de que tienes de todas todas el dinero a salvo; y encima te doy una joven de regalo.SIMN:Tal como te expresas, no veo riesgo ninguno, que yo sepa, en hacer el trato: te apuestas veinte minas?BALIN:S, me las apuesto.SIMN:Esto, desde luego, no ha sido mal negocio. Pero, le has visto a l?BALIN:A los dos juntos.SIMN:Y qu dice?, qu cuenta?, di, qu es lo que te ha dicho?BALIN:Pamplinas propias del teatro, las cosas que se les suelen decir a los rufianes en las comedias, que se las saben hasta los chiquillos; deca que soy un malvado, y un criminal, y un perjuro.SIMN:Te juro que no ha mentido.BALIN:Yo, ni enfadarme siquiera, porque qu se saca con decir injurias a quien se queda tan fresco y no se toma el trabajo de desmentirlas?SIMN:Y cul es el motivo por el que no necesito tener miedo de l? De eso es de lo que quiero enterarme.BALIN:Pues porque ni se llevar a la joven ni es posible que se la lleve. Te acuerdas t que te dije no hace mucho que se la haba vendido a un militar macedonio?SIMN:S que lo recuerdo.BALIN:Pues un esclavo suyo me ha trado el dinero y una carta con la contrasea...SIMN:Y luego qu?BALIN:...que haba sido convenida entre el militar y yo: l se acaba de llevar a la joven ahora mismo.SIMN:Palabra de honor?BALIN:Honor?, de dnde lo voy a sacar?SIMN:Mira no vaya a ser que te haya hecho alguna zalagarda.BALIN:La carta y la imagen del sello no me dejan lugar a dudas; ms an: acaba de sacar de la ciudad a la chica camino de Sicin.SIMN:Estupendo! A qu dudo ahora de hacer inscribir a Psudolo en la Colonia del Molino? Pero, quin es ese tipo de la clmide?BALIN:Pues no lo s; pero vamos a observar a dnde se dirige y qu es lo que pretende.

ESCENA SPTIMAHRPAX, BALIN, SIMNHRPAX:Malo y redomado tiene que ser uno que siendo esclavo no tiene en nada la autoridad de su amo, y as mismo es un intil el que se olvida de cumplir con sus obligaciones como no sea que se las recuerden. En efecto, los que se hacen la ilusin de que son libres en cuanto que escapan a las miradas del amo, y se dedican a la buena vida, a frecuentar los malos lugares, a tragarse lo que poseen, tienen que llevar como consecuencia largo tiempo el nombre de esclavos. No tienen cualidades ms que para portarse de mala manera. Yo, con gente de esa clase no quiero trato ni conversacin ninguna, ni me he contado nunca en el nmero de sus conocidos. Yo, cuando se me ordena algo, aunque el amo est ausente, para m es como si no lo estuviera, y le temo ahora, cuando no est, para no tener que temerle cuando est. Voy a cumplir su encargo. Porque he estado hasta ahora en la fonda, esperando a Siro, a quien le di la contrasea, como l me haba dicho. Deca que ira a buscarme cuando el rufin estuviera en casa, pero, visto que no viene a llamarme, vengo yo por mi cuenta aqu, para enterarme qu es lo que pasa, no sea que me vaya a tomar el pelo. Lo mejor es llamar a la puerta, para que salga alguien de la casa; quiero que el rufin reciba este dinero y deje venir conmigo a la joven.BALIN:(A Simn.) Oye, t.SIMN:Que quieres?BALIN:Con este tipo me hago yo.SIMN:Por qu, pues?BALIN:Porque aqu hay botn para m: busca una fulana, tiene dinero; no sabes las ganas que me estn entrando de pegarle un mordisco.SIMN:Es que piensas comrtelo?BALIN:Mientras que est fresquito, cuando an est caliente, mientras que lo tienes a la mano hay que tragrselo; las buenas personas me llevan a la miseria, los malos me enriquecen; para el pueblo son de provecho las gentes de orden, para m, los pillos.SIMN:Los dioses te confundan: mira que eres malvado!HRPAX:Pierdo el tiempo con no llamar a la puerta para cerciorarme si es que Balin est en casa.BALIN:Venus es quien me concede estos bienes al traerme aqu a estas gentes que huyen del propio provecho, deseosos de arruinarse, que se dedican a la buena vida, comen, beben, se echan amigas; esos son de otra condicin que t, que ni quieres gozar t de la vida ni miras con buenos ojos a los que gozan de ella.HRPAX:(Llamando a la puerta.) Eh!, dnde estis?BALIN:ste viene pero que derechito a mi casa.HRPAX:Eh! dnde estis?BALIN:Eh, joven, qu es lo se te debe en esta casa. (Por lo bajo.) Buen botn voy a sacar yo de ste; ya lo saba yo, los presagios me son favorables.HRPAX:Yo busco la casa del rufin Balin.BALIN:Seas quien seas, joven, cesa de buscar.HRPAX:Por qu?BALIN:Porque le tienes frente a frente.HRPAX:(A Simn, sealndole con el dedo.) Eres t Balin?SIMN:T, el de la clmide, que te la vas a ganar, dirige tu dedo hacia ah (Balin), se es el rufin.BALIN:Y ste (Simn), una persona honorable. Pero, con toda tu honorabilidad, te hacen reclamaciones a gritos tus acreedores en el foro, cuando no encuentras por ninguna parte un cntimo, como no sea que aqu el rufin venga en tu ayuda.HRPAX:Por qu no me atiendes?BALIN:S que te atiendo, qu es lo que quieres?HRPAX:Entregarte un dinero.BALIN:Ya hace un rato estoy alargando la mano por si me das algo.HRPAX:(Dndole la bolsa.) Ten; aqu estn las cinco minas de plata contantes y sonantes que me ha mandado traerte mi amo Polimaqueroplgides, que te las deba y para que le enves conmigo a Fenicio.

BALIN:Tu amo...HRPAX:S, mi amo.BALIN:...el militar...HRPAX:Eso, el militar.BALIN:...Macedonio.HRPAX:Que s, digo.BALIN:...Polimaqueroplgides es el que te ha enviado aqu...HRPAX:Exacto.BALIN:...para que me entregaras este dinero?HRPAX:Si es que t eres el rufin Balin.BALIN:Y para que te llevaras a una joven?HRPAX:Eso.BALIN:Dijo que era Fenicio?HRPAX:Estas en lo cierto.BALIN:Espera, ahora mismo vuelvo.HRPAX:Pero date prisa, que tambin la tengo yo: ests viendo que va ya muy avanzado el da.BALIN:S que es verdad; quiero que ste (sealando a Simn) tambin est presente. T estate ah, ahora mismo estoy contigo. Qu ocurre ahora, Simn, qu hacemos?, tengo cogido in fraganti a este hombre que me ha trado el dinero.SIMN:Por qu, pues?BALIN:Pero bueno, es que no te das cuenta de qu se trata?SIMN:Tanto como uno que est absolutamente en ayunas.BALIN:Tu esclavo Psudolo ha mandado aqu a este sujeto como si viniera de parte del militar macedonio.SIMN:Tienes t ya el dinero?BALIN:Pero preguntas una cosa que ests viendo?SIMN:Oye, t, acurdate, pues, de darme la mitad del botn: hay que repartirlo entre los dos.BALIN:Qu dices, maldicin? Eso es todo tuyo.HRPAX:A ver cuando me atiendes.BALIN:Si te estoy atendiendo. Qu me aconsejas ahora, Simn?SIMN:Vamos a tomarle el pelo al emisario este de pega, hasta que l mismo termine por darse cuenta que nos burlamos de l.BALIN:Ven conmigo. (A Hrpax.) A ver, t: o sea que t eres el esclavo del militar.HRPAX:Exacto.BALIN:Por cuanto te ha comprado?HRPAX:Por una victoria alcanzada por la fuerza de su brazo en una batalla; porque yo era en mi patria general en jefe.BALIN:Es que ha tomado una vez por asalto la crcel, o sea, tu patria?HRPAX:Si empiezas a decirme injurias, vas a tener que orlas t tambin.BALIN:Cuntos das has tardado en venir de Sicin aqu?HRPAX:Da y medio.BALIN:Hrcules! Has ido a un buen paso.SIMN:Este hombre puede ser todo lo rpido que quieras: no tienes ms que mirar sus pantorrillas, enseguida te percatas de que puede... llevar unos grillos bien gruesos.BALIN:Oye, cuando chico acostumbrabas a acostarte en una cuna?SIMN:Claro que s!BALIN:Y tambin acostumbrabas a hacer... ya sabes a lo que me refiero.SIMN:Y tanto que acostumbraba!HRPAX:Estis en vuestro juicio?BALIN:A ver, una pregunta: cuando el militar sala de noche de guardia, cuando t ibas con l, entraba bien la espada del militar en tu vaina?HRPAX:Vete a la horca!BALIN:T s que vas a ir hoy sin mucho tardar.HRPAX:Por qu no me entregas a la joven? O si no devulveme al dinero.BALIN:Espera.HRPAX:A que voy a esperar?BALIN:Dime por cunto has alquilado la clmide esa que llevas.HRPAX:Qu quieres decir con eso?SIMN:Y la espada, cul es su precio?HRPAX:A stos les falta una buena racin de elboro (Contra la locura).BALIN:Oye, t (dndole con la mano).HRPAX:Quita!BALIN:Qu ganancia le proporciona hoy ese sombrero de viaje a su propietario?HRPAX:Qu es eso de propietario? Estis soando? Todo esto que llevo me pertenece, lo he comprado de mi peculio.BALIN:Claro, del que llevas en la parte superior de los muslos.HRPAX:Estos viejos se han untado de aceite, y ahora quieren que se les d un buen masaje al uso antiguo.BALIN:Hrcules!, por favor, contesta en serio a mi pregunta: cul es tu salario?, por cunto dinero te ha contratado Psudolo?HRPAX:Quin es ese Psudolo?BALIN:Tu maestro, el que te ha instruido en esta impostura para que te llevaras de aqu con tus engaos a la joven.HRPAX:Qu Psudolo es se del que hablas ni qu son esos engaos? Yo no tengo ni idea de quin es ese hombre.BALIN:No te largas? Para impostores no hay aqu ninguna clase de ganancia; o sea que vas y le comunicas a Psudolo que otro, Hrpax, le ha cogido la delantera y se ha llevado el botn.HRPAX:Pero yo soy ese Hrpax!BALIN:No, sino que pretendes serlo; ste es un impostor de cuerpo entero.HRPAX:Yo te he entregado a ti el dinero y antes, cuando llegu, le entregu en seguida la contrasea a tu esclavo, una carta sellada con el retrato de mi amo, aqu a la puerta.BALIN:Qu t le has dado una carta a un esclavo mo?, a cul?HRPAX:A Siro.BALIN:Qu hombre tan bandido este Psudolo, con qu habilidad ha compuesto su embuste; le ha dado a ste la cantidad que deba el militar y le ha disfrazado para que se llevara a la joven, porque la carta esa me la ha entregado a m el Hrpax autntico.HRPAX:Hrpax me llamo yo, yo soy el esclavo del militar macedonio, yo no soy ni un impostor ni un malhechor, ni conozco ni s quin es ese Psudolo que decs.SIMN:T, rufin, milagro si no es que te has quedado sin la joven.BALIN:Te juro que al orle me lo estoy temiendo de ms en ms; te juro que ya hace un rato que me est produciendo escalofros el Siro ese que ha recibido de aqu (Hrpax) la contrasea; milagro si no es que es Psudolo en persona. Eh, t!, cmo era se al que le diste la contrasea?HRPAX:Pelirrojo, barrigudo, gordas las pantorrillas, la piel un poco oscura, la cabeza gorda, ojos penetrantes, coloradete, unos pies enormes.BALIN:Me has matado con eso de los pies, era Psudolo en persona. Estoy perdido. Simn, me siento morir.HRPAX:Te juro que no te dejar morir si no se me devuelve el dinero, o sea, las veinte minas.SIMN:Y otras veinte minas a m.BALIN:(A Simn.) Vas a sacarme una cantidad que te promet en broma?SIMN:Tratndose de malas personas, no hay nada que impida cogerles la ganancia y el botn que sea.BALIN:Pues entrgame a Psudolo, por lo menos.SIMN:A Psudolo te voy yo a entregar?, qu delito ha cometido?, no te avis cien veces que tuvieras cuidado con l?BALIN:Ha sido mi ruina.SIMN:Pues a m slo me ha multado con veinte minas.BALIN:Qu hago ahora?HRPAX:Una vez que me hayas devuelto mi dinero, puedes colgarte.BALIN:Los dioses te confundan! Sgueme al foro, que te pague.HRPAX:Voy.SIMN:Y yo, qu?BALIN:Primero despachar a los forasteros, maana me ocupar de los ciudadanos. Psudolo ha obtenido de los comicios centuriados mi cabeza. (A Hrpax.) Ven conmigo. (Al pblico.) No esperis que vuelva a casa por aqu; despus de lo ocurrido, dar la vuelta para entrar por la puerta falsa.HRPAX:Si anduvieras tanto como charlas, ya estaras en el foro.BALIN:Cosa hecha, voy a cambiar el da de mi natalicio por el de mi muerte. (Se va con Hrpax.)

ESCENA OCTAVASIMN:Bien que le he chasqueado, y no slo yo, sino tambin mi esclavo, a su enemigo. Ahora me pondr al acecho de Psudolo, pero de otra forma que en otras comedias, que se pone uno a la espera del esclavo provisto de aguijones o de ltigos; yo voy ahora mismo a sacar de casa las veinte minas que le promet si sala con xito de su empresa; yo mismo ir a su encuentro a llevrselas. Qu tipo tan avisado, qu ladino, qu pillo! A la aagaza de Troya y al propio Ulises en persona ha dejado atrs el tal Psudolo. Ahora voy dentro, sacar el dinero, me pondr al acecho de Psudolo.

ACTO VESCENA PRIMERAPSUDOLO:(Entra tambalendose.) Pero bueno, qu es esto? Oye, a ver, pies, qu manera es sa de portarse?, os podis sostener o no?, o es que lo que pretendis es que caiga al suelo y tenga que venir alguien a levantarme? Desde luego, Hrcules, si me caigo ser una vergenza para vosotros, queris seguir adelante o no? Voy a tener que ponerme serio, eh? Ves?, se es el gran defecto del vino, que se tira primero a los pies; s, s, es un adversario pero que muy traicionero. Desde luego, te juro que tengo una buena melopea; tan exquisitos han sido los manjares, tan grandes las finezas dignas de los dioses con que se nos ha obsequiado, tan festivo el lugar donde hemos festejado. Para qu darle ms vueltas?, esto es lo que le hace al hombre amar la vida, sta la fuente de todos los placeres, de todas las delicias: tengo la impresin de ser casi un dios; porque cuando un amante esta abrazado con su amiga, cuando junta sus labios con los de ella, cuando se quedan prendidos entre s uniendo sus lenguas en un dulce beso o si les viene en gana se unen en estrecho abrazo; una blanca mano te ofrece la dulcfera copa a la salud de vuestros tiernos amores nadie se pone all a fastidiar o a molestar a los dems ni a dar la lata con conversaciones aburridas, sino te ofrecen ungentos y perfumes, innmeras coronas de flores adornadas con preciosas cintas: en nada se ha ahorrado all; en cuanto al resto de las maravillas que all se nos han ofrecido, no me preguntis o sea, que lo mismo yo que el hijo del amo nos hemos pasado el da a lo grande despus que tal como me lo haba propuesto, puse en fuga a mis enemigos y di cima a mi empresa. All los he dejado a la mesa bebiendo, haciendo el amor con sus amigas, all est tambin la ma, entregados todos a seguir los deseos de su corazn. Pero luego que me levanto, van y me piden que baile, y yo les he bailado un ritmo as como ste (baila) con la mar de gracia y exacto segn las reglas del arte, que yo he aprendido muy bien las jnicas. Pero voy, y as, con un capotillo puesto, me pongo a hacer el payaso bailando unos pasos como stos (baila). Me aplauden, me gritan ms, ms!, para que vuelva. Empiezo otra vez as, no quera repetir lo mismo, iba y me acercaba a mi amiga para que me abrazara... al dar una vuelta, me caigo. Aquello fue el golpe de gracia; al querer levantarme paf! por poco me mancho el capotillo y todo. No digo cmo se han puesto de rer con mi cada; se me pasa la copa, me la bebo. Me cambio enseguida el capotillo, me quito el que tena puesto. Despus me salgo y me vengo aqu en tanto que se me pasa la borrachera. Ahora voy de un amo al otro, al viejo, para recordarle nuestro trato. Abrid, abrid, eh, decidle a Simn que estoy aqu!

ESCENA SEGUNDASIMN, PSUDOLOSIMN:La voz de un bribn me hace salir a la puerta. Pero qu es esto?, cmo?, qu es lo que ven mis ojos?PSUDOLO:Ven a tu Psudolo borracho, con una corona de flores a la cabeza.SIMN:Hrcules, son demasiadas las libertades que te tomas! Y mira qu postura, no le da ni pizca de reparo mi presencia. No s si debo abordarle por las malas o por las buenas, pero esto que traigo aqu (la bolsa con las veinte minas) me impide usar de la violencia, si me queda alguna esperanza de no perderlo.PSUDOLO:Aqu un sinvergenza va al encuentro de una bellsima persona.SIMN:Los dioses te guarden, Psudolo.PSUDOLO:Hip!SIMN:A la horca contigo!PSUDOLO:No me empujes de esa forma.SIMN:Maldicin, mira que venir borracho a echarme un eructo en la mismsima cara!PSUDOLO:Por favor, cuidado, sostenme, que no me vaya al suelo. Ten cuidado que no me caiga, no ves que estoy como una cuba?

SIMN:Qu descaro es se de andar borracho en pleno da con una corona de flores en la cabeza?PSUDOLO:Me da la gana.SIMN:C