boletin jjr nº 2

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Número 2 / Noviembre 2011 Este boletín especializado es promovido por Encuentros, Casa de la Juventud y la Fundación Terre des hommes-Lausanne, en coordinación con el Ministerio Público, Ministerio de Justicia y la Defensoria del Pueblo. Equipo responsable: Raul Marquez, Encuentros // Oscar Vásquez, Tdh // Carlos Landeo Correos: [email protected]; [email protected] Con el apoyo de: Crisis: oportunidad para avanzar os acontecimientos ocurridos recientemente en el Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación (CJDR) de Lima, deben ser motivo de una reflexión profunda para impulsar y apoyar cambios en el tratamiento de los adolescentes en conflicto con la ley, en especial de aquellos privados de libertad. Incluso, como podemos apreciar en este boletín, la nueva gestión de los Centros Juveniles está haciendo mejoras y realizando importantes inversiones en infraestructura en los Centros Juveniles, con el propósito de ofrecer mejores condiciones a los adolescentes internos. Debe tenerse en cuenta que el CJDR de Lima concentra la mayor cantidad de adolescentes internos en el Perú. Ac- tualmente se encuentran 782 adolescentes, una cifra un poco mayor al total que se encuentran en los otros Centros Juveniles en el país. El hecho sustancial es que la problemática del adoles- cente que infringe la ley sobrepasa el esfuerzo que pueda realizar cada institución aisladamente. Esta problemáti- ca exige una estrategia multisectorial, donde confluyan y coordinen todos los sectores públicos involucrados y la sociedad civil. Debemos comprender de una vez que no es posible dictar medidas en un aspecto del problema sin causar simultáneamente tensiones y nuevos problemas en otros aspectos. Quienes crean que endurecer las medidas de sanción basta para solucionar el problema del adoles- cente infractor, se equivocan de plano, pues simultánea- mente hace falta afrontar la necesidad de su educación y rehabilitación. De lo contrario, los problemas se compli- carán. Y en la tarea de educación y rehabilitación, consideramos que tampoco puede evadirse la necesidad de ir resuelta- mente hacia nuevos paradigmas basados en la Justicia Restaurativa. El enfoque tradicional del encierro discipli- nario como medio de castigo y control ha caducado defini- tivamente. Felizmente la nueva gestión de los Centros Ju- veniles tiene interés y disposición de abrir nuevos centros de medio abierto, que atiendan en forma descentralizada la gran demanda existente. Que la crisis de este noviembre en el CJDR Lima nos sirva a todos para avanzar hacia una nueva e innovadora política de rehabilitación que supere el lastre del enfoque tradicional productor de violencia.

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Número 2 / Noviembre 2011

Este boletín especializado es promovido por Encuentros, Casa de la Juventud y la Fundación Terre des hommes-Lausanne, en coordinación con el Ministerio Público, Ministerio de Justicia y la Defensoria del Pueblo.

Equipo responsable:Raul Marquez, Encuentros // Oscar Vásquez, Tdh // Carlos LandeoCorreos: [email protected]; [email protected]

Con el apoyo de:

Crisis:oportunidad para avanzar

os acontecimientos ocurridos recientemente en el Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación (CJDR) de Lima, deben ser motivo de una reflexión profunda para impulsar y apoyar cambios en el

tratamiento de los adolescentes en conflicto con la ley, en especial de aquellos privados de libertad.

Incluso, como podemos apreciar en este boletín, la nueva gestión de los Centros Juveniles está haciendo mejoras y realizando importantes inversiones en infraestructura en los Centros Juveniles, con el propósito de ofrecer mejores condiciones a los adolescentes internos.

Debe tenerse en cuenta que el CJDR de Lima concentra la mayor cantidad de adolescentes internos en el Perú. Ac-tualmente se encuentran 782 adolescentes, una cifra un poco mayor al total que se encuentran en los otros Centros Juveniles en el país.

El hecho sustancial es que la problemática del adoles-cente que infringe la ley sobrepasa el esfuerzo que pueda realizar cada institución aisladamente. Esta problemáti-ca exige una estrategia multisectorial, donde confluyan y coordinen todos los sectores públicos involucrados y la sociedad civil. Debemos comprender de una vez que no es posible dictar medidas en un aspecto del problema sin causar simultáneamente tensiones y nuevos problemas en otros aspectos. Quienes crean que endurecer las medidas de sanción basta para solucionar el problema del adoles-cente infractor, se equivocan de plano, pues simultánea-mente hace falta afrontar la necesidad de su educación y rehabilitación. De lo contrario, los problemas se compli-carán.

Y en la tarea de educación y rehabilitación, consideramos que tampoco puede evadirse la necesidad de ir resuelta-mente hacia nuevos paradigmas basados en la Justicia Restaurativa. El enfoque tradicional del encierro discipli-nario como medio de castigo y control ha caducado defini-tivamente. Felizmente la nueva gestión de los Centros Ju-veniles tiene interés y disposición de abrir nuevos centros de medio abierto, que atiendan en forma descentralizada la gran demanda existente. Que la crisis de este noviembre en el CJDR Lima nos sirva a todos para avanzar hacia una nueva e innovadora política de rehabilitación que supere el lastre del enfoque tradicional productor de violencia.

n nuestro país, los Centros Juveniles de Diagnóstico y Rehabilitación (CDJR) se en-cuentran bajo la jurisdicción del Poder Judicial, que en el

curso del presente año ha hecho im-portantes inversiones en su infraes-tructura y equipamiento. La Gerencia de Centros Juveniles del Poder Judi-cial declara que, con ello, cumple con las metas de una primera etapa de trabajo, que además comprende el in-cremento y capacitación del personal.

Así, se han creado, remodelado e im-plementado ambientes en diversos CJDR, con lo cual se ofrece mejores condiciones para el desarrollo de las actividades psicopedagógicas, depor-tivas y recreativas. Por ejemplo, en el CJDR de Pucallpa, ahora se dispone de sala de terapia, área psicológica,

área de trabajo social, taller de músi-ca, sala de terapia lúdica y gimnasio. Además, se ha adquirido mobiliario, computadoras, implementos deporti-vos, recreativos y musicales.

En el CJDR Alfonso Ugarte, de Are-quipa, los avances se materializan en un taller de confecciones equipado con máquinas nuevas, sala de cóm-puto, capilla, sala de audiencias, sala de educadores sociales, casetas de seguridad, gimnasio, jardines, pintado de interiores y exteriores, mobiliario, equipo informático, herramientas y máquinas.

El CJDR Marcavalle, de Cusco, se be-neficia con un taller de cómputo, dos salas de audiencias, biblioteca, ca-pilla, ambientes para los talleres de zapatería, sastrería, manualidades y carpintería, mobiliario, equipo infor-mático, herramientas y máquinas, más el pintado general del centro.

En el CJDR Miguel Grau, de Piura, se han inaugurado nuevos ambien-tes para el programa de atención in-tensiva, tres salas de audiencias, ca-pilla, taller de cómputo, aulas, taller de carpintería de madera y metálica,

mejora de ambientes administrativos, jardines, veredas internas, servicios higiénicos, pintado interno y externo, mobiliario, equipo informático, herra-mientas, maquinaria, casilleros y ca-marotes.

En el CJDR de Trujillo se habilitaron dos salas de audiencias dotadas con equipo de videoconferencia, salas para los talleres de música y cómputo, una sala de educadores sociales, servicios higiénicos, ambientes de dirección y administración, garitas de seguridad y cámaras de seguridad, capilla, gal-pones para el taller de crianza de aves y biohuerto, más el pintado general, mejora de los jardines y equipamiento con mobiliario, computadoras y herra-mientas.

AVANCES

Gerencia de centros juveniles Poder JudicialMejora la infraestructura

PROBLEMAS

Por una política pública intersectorial para adolescentes

Véronique HenryDelegada en el Perú de la Fundación Terre des hommes - Lausanne

en conflicto con la ley penal

Cuando se habla de diseñar e implementar políticas pú-blicas para adolescentes en conflicto con la ley penal y sus víctimas, es importante

tener un panorama de la situación de los adolescentes en conflicto con la ley en el Perú. Sabemos que poco más de 3,200 adolescentes en conflicto con la ley penal han sido atendidos por los Centros Juveniles de Rehabilitación y Diagnóstico en el primer semestre del 2011; el 69% de ellos, en medio cerra-do. Sabemos también que un núme-ro de adolescentes no han podido ser atendidos adecuadamente, sobre todo en aquellas regiones donde no existen Centros Juveniles, ni se cuentan con equipos interdisciplinarios suficientes para monitorear todas las medidas ju-diciales.

Por otro lado, el Servicio de Orientación y Atención (SOA), ubicado en Lima, y los centros juveniles en su modalidad abierta, son los únicos servicios pú-blicos de atención en medio abierto, con capacidad muy inferior al número de adolescentes que deberían recibir medidas alternativas a la privación de libertad. En resumen: es necesario incrementar la capacidad de atención de los Centros Juveniles, mermada por el insuficiente número de profesiona-les técnicos especializados, tanto en la modalidad cerrada como abierta. Todo esto acentúa la desigualdad y ex-clusión al no tener estos adolescentes una atención adecuada que les ayude a salir del circuito de violencia. Por su parte, los agraviados y la comunidad experimentan una justificada sensa-ción de impunidad. Sienten que no se hace nada, o muy poco, para reparar el daño que han sufrido.

A pesar de estas limitaciones, cabe destacar varios aspectos positivos: a) una legislación avanzada, contenida en el Código del Niño y el Adolescente (CNA), que incluye la remisión; b) es-fuerzos por parte de varios organismos del Estado para experimentar y exten-der la Justicia Juvenil Restaurativa; c) implementación de programas estra-tégicos nacionales del Ministerio de Economía y Finanzas, tal como Gestión Por Resultados, que permite a las enti-dades públicas tener acceso a recursos adicionales.

Así, teniendo en cuenta este panora-ma, con sus debilidades y fortalezas, proponemos:

1. Hacer de la Justicia Juvenil Restau-rativa una auténtica política pública, expresando esta voluntad política mediante la atribución de: a) recur-sos financieros, estableciendo meca-nismos articulados e intersectoriales; b) recursos técnicos: sistema único de información, habilitación de es-pacios y equipamiento; c) recursos humanos: fortalecer la capacitad técnica, nombrar equipos interdis-ciplinarios, defensores públicos, mediadores, policía especializada, limitar rotación, con el fin de imple-mentar las recomendaciones inter-nacionales y el CNA: aplicación de medidas privativas de la libertad como último recurso y por el menor tiempo posible, aplicación de la remi-sión (desjudicialización), de medidas socioeducativas alternativas a la pri-vación de libertad, de mecanismos de resolución de conflicto de la JJR, prácticas restaurativas, mediación, etc., siempre dando importancia al

restablecimiento de la relación vícti-ma/adolescente/comunidad.

2. Garantizar los derechos de niños, ni-ñas y adolescentes, permitiéndoles alcanzar condiciones de vida dignas que prevengan la conducta delictiva y toda situación de vulnerabilidad.

3. Promover una cultura de paz en es-cuelas y comunidades mediante acciones de prevención, prácticas restaurativas, mediaciones, transfor-mación de conflictos, etc.

En Terre des hommes y Encuentros Casa de la Juventud consideramos estos objetivos como los más impor-tantes en el período actual. Sabemos que implican la participación activa y articulada de las entidades públicas y privadas involucradas en la atención a adolescentes en conflicto con la ley. Por eso saludamos la participación de las entidades del Estado en el Grupo de Trabajo Intersectorial sobre Justicia Ju-venil Restaurativa, nacido a principios del 2011 con el fin de operativizar con-juntamente la extensión del enfoque restaurativo a nuevos distritos de Lima y a otras regiones, en el marco de una política pública intersectorial.

Este Grupo, además de nuestras insti-tuciones, está integrado por el Ministe-rio Público, Ministerio de Justicia, De-fensoría del Pueblo y el Poder Judicial.

María Luisa Mendívil Z.Trabajadora social y educadora del Proyecto JJR

MICROSISTEMAFamilia, escuela, grupo de padres

MESOSISTEMARelación entre familia y escuela, y otros microsistemas

EXOSISTEMATrabajo, vecindario, redes de relaciones sociales, servicios, etc.

MACROSISTEMAValores culturales, sistemas de creencias, sucesos históricos

MODELO ECOSISTÉMICO(U. Bronfenbrenner)

Lugar de la incertidumbreFAMILIALA

oberto tiene 14 años. Cuando tenía siete, sus pa-dres se separaron tras una relación marcada por la violencia familiar. El padre consume habitualmente alcohol y es proclive a la ira. La madre, que ya tiene

otro conviviente, tiene la custodia de Roberto y su hermana de 11 años, que no ha sido reconocida por su padre. Am-bos niños están en situación de grave riesgo. Roberto, en su afán de llamar la atención de sus padres y asegurar su consumo de droga, roba carteras, celulares o accesorios de autos. Su apariencia es la de un adolescente tranquilo, re-vela agudeza mental, pero es parco al hablar. A los 11 años empezó robando tarjetas telefónicas.

El contexto familiar de Roberto es típico de los adolescen-tes que el Proyecto JJR ha atendido en El Agustino desde el año 2005: son 304 adolescentes, la mayoría de 16 o 17 años de edad, intervenidos principalmente por robo agrava-do (33.72%) y hurto agravado (30.37%). Carecen de soporte familiar, emocional y material que provea sus necesidades fundamentales. El 25% de ellos abandonó la escuela.

La problemática de sus familias tiene múltiples dimensio-nes y factores. Se hace necesario entonces aplicar un enfo-que que considere distintos niveles de análisis para apre-ciar la conexión entre los individuos y el contexto –tanto el inmediato, familiar, educativo, entre pares, como el más amplio y genérico, social, político, cultural, religioso–, te-niendo en cuenta las interacciones recíprocas. Esto es lo que se denomina enfoque ecosistémico (ver cuadro).

La intervención profesional con estas familias debe mirar sin prejuicios su contexto social, su ciclo de vida, el nivel de deterioro de las funciones parentales tanto en su vertiente socializante como en la nutricia, así como el nivel de dete-rioro de su conyugalidad; comprender cómo se da la comu-

nicación y el sistema afectivo, cómo responden los padres ante al comportamiento de los hijos, si existen reglas explí-citas o implícitas que puedan ser interiorizadas, así como el tipo de control que ejercen los padres.

Hoy nadie duda de la centralidad de la familia, pero su com-prensión no está exenta de complejidades. Enrique García Fuster y Gonzalo Musitu Ochoa hablan de “in(definición) de la familia” para compartir la idea de que no existe una úni-ca definición para conceptualizarla: “dependerá del marco teórico y de los planteamientos epistemológicos que asume el investigador”. Desde esta perspectiva, la diversidad de la vida familiar mucho tendrá que ver con el contexto en que se desenvuelve. La familia, espacio primario de socializa-ción, da el contexto básico del desarrollo personal y social; sin embargo, la radical transformación que ha experimen-tado y los profundos cambios sociales a los que se ha visto sujeta, la han convertido, según Louis Roussel, en el “lugar de la incertidumbre”.

ENFOQUES

n marzo del 2011, Alice y

yo empezamos a colabo-

rar como voluntarios en el

Proyecto de Justicia Ju-

venil Restaurativa de El Agustino,

en Lima. La disponibilidad de los

profesionales de El Agustino de in-

volucrarnos, nos dio la posibilidad

de aprender cada día más. Nuestro

deseo es que esta experiencia cons-

tituya un ladrillo esencial en nues-

tras vidas.

En el contexto jurídico italiano, la

figura jurídica más cercana a la re-

misión fiscal peruana es la messa

alla prova, por la cual el proceso

judicial se suspende y se deriva al

adolescente a los servicios socia-

les del Estado para que participe

en un programa de orientación.

Se puede aplicar para cualquier

infracción y la decisión se basa

exclusivamente sobre el informe

psicológico. Para su aplicación

no importa si el adolescente tie-

ne precedentes judiciales o si ya

se le aplicó antes la messa alla

prova.

Si el adolescente termina posi-

tivamente el periodo de prueba,

que en la mayoría de los casos

dura seis o doce meses, el juez

declara extinto el proceso. Como

en la remisión, también en la

messa alla prova es fundamen-

tal la voluntad del adolescente;

sin embargo, no es necesario

(pero es posible) incluir en la

sentencia la necesidad de repa-

rar el daño. Pueden colaborar

EXPERIENCIAS

REMISIÓN EN EL PERÚ

Por Alice Zoggia y Fabrizio Maniscalco, voluntarios italianos del Proyecto JJR.

instituciones públicas y privadas para desarrollar conjuntamente el acom-pañamiento educativo.

Al igual que en Perú, en Italia hay dificultades en la aplicación de la messa alla prova. Algunos factores son: la excesiva lentitud de los pro-cesos, la diferente aplicación en los tribunales del país, el alto número de adolescentes que, en algunos contextos, están involucrados en la criminalidad organizada. Si bien hay algunas instituciones públicas italianas especializadas en la me-diación entre infractor y víctima, como el Centro de Mediación Penal de Torino, la Justicia Juvenil Res-taurativa no es todavía una temá-tica relevante en los medios ni a nivel político.

En Italia se registra una fuerte in-migración, pero, contrariamente a lo que dicen casi todos los medios de comunicación, el número de adolescentes infractores extranje-ros no es más alto, en proporción, al número de adolescentes infrac-tores italianos. Sin embargo, en algunos contextos urbanos, los primeros viven sin condiciones familiares y económicas adecua-das. Por eso, en esas situaciones, es más difícil pronosticar el éxito de la messa alla prova.

Los datos oficiales dicen que la messa alla prova tiene resultado positivo en el 80% de casos en que aplica, pero este óptimo resultado no es suficiente para cambiar la mentalidad de muchos operadores. La aplicación solo llega al 10% de casos (según el Dipartimento ita-liano de giustizia minorile). Si se toma en cuenta solo los adoles-centes extranjeros, el porcentaje es mucho menor.

El resultado de esta diferencia de tratamiento se ve en los centros juveniles italianos, donde quienes tienen menor acceso a una defen-sa legal verdaderamente eficaz (los adolescentes extranjeros) son mucho más numerosos. Si bien es cierto que no hay un problema de sobrepoblación como en el Centro de Diagnóstico y Rehabilitación de Lima, la situación de los cen-tros juveniles italianos es también complicada.

Como voluntarios del Proyecto JJR, nos hemos dado cuenta de que la messa alla prova en Italia y la remisión en Perú, con un buen acompañamiento educativo y juntamente con la mediación, son instrumentos en los cuales realmente vale la pena creer.

Messa alla prova en Italia,

Oscar Vásquez

Fundación Terre des hommes - Lausanne (Suiza)

ohn nos relata su historia. Sin tener una explicación clara sobre su conducta, nos narra que a inicios de año, él y un amigo de su misma edad (15 años) roba-ban entre 2 y 5 celulares al día en Puente Nuevo, zona de El Agustino. La participación de adolescentes y

jóvenes en la violencia impacta en la seguridad pública. Se-gún una encuesta realizada en 23 ciudades del Perú, el 71% de encuestados manifiesta sentirse inseguro, y el 41% señala que al menos un miembro de su familia ha sido víctima de un delito en los últimos 12 meses (Ciudad Nuestra, 2011). Si bien el fenómeno de la criminalidad y la violencia es multicausal, sin embargo se asigna a la policía la principal responsabili-dad para enfrentar este problema y se espera que, mediante el uso de la fuerza, logre mantener el orden público y la paz social. Este enfoque, a nuestro parecer, es erróneo; lleva al fracaso y a debilitar la imagen de la policía.

Creemos que el enfoque de la infracción adolescente debe ser integral, sistémico y restaurativo. Esto es: a) intervención pronta sobre el conjunto de factores que condicionan el com-portamiento infractor; b) que las instituciones competen-tes, públicas y privadas, actúen en forma específica y complementaria; c) que los involucrados en la infrac-ción (adolescentes, víctimas, familiares y comuni-dad) sean estimulados a participar para reparar el daño y restablecer la paz social. La judicialización debe ser para los casos graves; el internamiento, una medida de último recurso.

Esta visión nos insta a replantear estrategias. La policía se suele centrar en las fun-ciones de control del orden público: arresto, detención e investigación. La tolerancia cero es el paradig-ma de este enfoque. Posterior-mente, las reformas policiales se han esfuerzado por invo-lucrar activamente a la po-licía con su comunidad, representando la preven-ción situacional el enfoque prevalente. En tanto, el en-foque restaurativo de la fun-ción policial tiene importante desarrollo en Estados Unidos (Bethlehem, Pensilvania), Austra-lia (Camberra) e Inglaterra (Thames

Valley), a partir de una experiencia de justicia restaurativa (adaptación de conferencias familiares de Nueva Zelanda) iniciada en 1991 por la policía de Wagga Wagga, New South Wales, Australia. Este modelo –donde la policía convoca y participa en reuniones con los involucrados en delitos leves (agresor, víctima y familiares)– tiene críticos y defensores. La principal crítica es si la policía no estaría distorsionando y excediendo su rol, mientras sus defensores sostienen que con ello se fortalece el rol de la policía y la comunidad en el control social.

No creemos que en el Perú pueda replicarse sin más la expe-riencia extranjera; sin embargo, dentro de un modelo sisté-mico, en el que la policía interactúa con otros, sí es factible y conveniente una policía especializada con enfoque restau-rativo. La policía restaurativa no abandona las funciones tra-dicionales: les da un nuevo sentido, además de desarrollar otras habilidades. Por ejemplo, sabe que respetar los dere-chos de los adolescentes intervenidos tiene efecto educativo y preventivo. Si el hecho ilícito no es relevante, orientará y estará dispuesta a mediar; si el hecho constituye una infrac-

ción leve o grave comunicará a las familias, al defensor público y al fiscal. Esta policía realiza labor preventiva, toma conocimiento de los programas comunitarios, frecuenta a adolescentes y familias en riesgo, inclu-so podría mediar entre pandillas. Este tipo de policía responde a un paradigma diferente, enfocado en la paz social, promoviendo que la propia comunidad se empodere y atienda los problemas, conflictos e infrac-

ciones a través del diálogo, la participación y la responsabilidad compartida.

Teniendo en cuenta la experiencia de JJR de El Agustino, la Policía Nacio-nal del Perú, a través de su Dirección

de Familia, Participación y Seguri-dad Ciudadana, podría impulsar un programa de Justicia Juvenil

Restaurativa para ser desarrolla-do en 10 distritos. Este programa consistiría en establecer, como en El Agustino, comisarías de referen-cia, módulos especializados para adolescentes y víctimas, seleccio-nar y capacitar personal policial. Después de un tiempo prudencial, el programa sería evaluado, con la intención de extenderlo a nivel na-cional.

con Enfoque Restaurativo

PROPUESTAS

CULTURAL

sí se titula una obra teatral, escrita por el dramatur-

go norteamericano William Mastrosimone, que es

presentada en estos días, en Lima, por el grupo

teatral Última Orilla, bajo la dirección del maes-

tro Paco Solís Fúster. Se trata de una puesta en escena muy

bien lograda, de gran mérito dramatúrgico, que a la vez

ofrece una importancia muy particular para quienes traba-

jan con adolescentes con graves problemas de conducta o

que han infringido la ley.

La historia tiene como protagonista a Misael, un adoles-

cente que sufre un estado de absoluta desolación en medio

del acoso despiadado de sus compañeros de la escuela se-

cundaria. Bajo esta situación de tremendo estrés, Misael

comete un crimen atroz. Este hecho, que en cualquier otra

obra más o menos efectista representaría el punto culmi-

nante y final, en esta obra viene a ser más bien el punto de

partida. En efecto, tras cometer el crimen, Misael irá a un

centro de reclusión, donde un psicólogo le ayudará a reco-

rrer el camino para enfrentar los fantasmas de la muerte,

la culpa y el pasado.

ESTÁS MUERTO

Dice el director de la obra que se trata de una “metáfora

del error y el desvarío individual y social, que sugiere la

posibilidad de una construcción esperanzadora y respon-

sable ante la vida”. Añade que “este montaje teatral reco-

ge los principios del educador Víctor Guédez y el escritor

Alejandro Jodorowsky en su proyectos de redimensionar el

presente y sanar el dolor, respectivamente”.

La obra ha sido presentada en más de 2,500 centros edu-

cativos y centros juveniles de los Estados Unidos y en de-

cenas de ciudades en todo el mundo, generando debate y

reflexión entre jóvenes, padres de familia y maestros. Más

allá de esto, la obra tiene un peso y consistencia dramática

que le dan valor por sí sola frente a cualquier espectador,

incluidos los que no están interesados directamente en la

problemática conductual del adolescente.

La obra se presenta en el teatro Julieta (ubicado en Pasaje

Porta 132, a media cuadra del parque Kennedy, en Miraflo-

res), de jueves a domingo, a las 8 de la noche. La tempora-

da dura hasta el 4 de diciembre. Los jueves la función tiene

precios rebajados.

¡BANG BANG!...

bre

ves

not

i

www.justiciaparacrecer.orgwww.encuentroscj.orgwww.tdh.ch

► La Gerencia de Centros Juveniles del Poder Judicial se ha integrado recientemente al Grupo de Trabajo por la Justicia Juvenil Restaura-tiva. El Grupo es un órgano de coordinación conformado por el Mi-nisterio Público, el Ministerio de Justicia, la Defensoría del Pueblo, la asociación civil Encuentros Casa de la Juventud y la Fundación Terre des hommes - Lausanne (Suiza), que se reúne mensualmente para unir esfuerzos y recursos tras el objetivo de extender la Justicia Juvenil Restaurativa en nuestro país.

► El Ministerio Público sigue avanzando en la implementación de su Programa Nacional de Justicia Juvenil Restaurativa. Ahora dispone de equipos interdisciplinarios en El Agustino, Chiclayo y Trujillo, conformados por trabajadores sociales y psicólogos que serán de invalorable apoyo en la aplicación de la remisión en zonas de alta incidencia de infracción por menores de edad.

► Del 20 al 23 de septiembre se desarrolló en Chiclayo, Trujillo y Lima el Seminario internacional sobre Justicia Juvenil Restaurativa, con la presencia del Dr. Atilio Álvarez (Defensor de Menores de la Re-pública Argentina), el Dr. Michael Corriero (ex juez de New York), la Dra. Rita Figueroa (Coordinadora Nacional del Programa de Jus-ticia Juvenil Restaurativa del Ministerio Público) y el Dr. Jaime Ze-vallos (Fiscal Provincial de Familia de El Agustino). Las jornadas congregaron más de 500 participantes, entre operadores jurídicos, líderes sociales, defensores públicos, representantes de gobiernos locales, policías, entre otros.

► Una delegación de magistrados del Ministerio Público de Costa Rica hicieron una pasantía de una semana en Perú para conocer la experiencia de Justicia Juvenil Restaurativa que implementan conjuntamente el Ministerio Público peruano, Encuentros y Terre des hommes - Lausanne. La delegación, presidida por el Fiscal Max Chinchilla Fernández, Jefe de la Oficina de Defensa Civil de la Víc-tima del Ministerio Público costarricense, pudo conocer de primera mano nuestra experiencia en Lima Sur, El Agustino y Chiclayo.

► Representantes del Proyecto de Justicia Juvenil Restaurativa parti-ciparon en una reunión con integrantes del Instituto Interamerica-no de Derechos del Niño, que tuvo lugar en el Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social, para intercambiar opiniones sobre la adminis-tración de justicia juvenil en Perú, en el marco de la elaboración del próximo plan quinquenal del Instituto.

► La Mesa Intersectorial de Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal del MIMDES presentó en un evento público los avances del nuevo Código del Niño y el Adolescente, así como un conjunto de propuestas para mejorar el sistema de justicia juvenil en el Perú.

► Véronique Henry, delegada de Terre des hommes - Lausanne en el Perú, participó como ponente en el III Congreso Internacional “Niñez sin Rejas”, organizado por el BICE (Bureau International Catholique de l’Enfance), en Guatemala, del 24 al 27 de octubre, con la participación de 300 delegados de América, Suiza, Francia y Bélgica. El evento giró en torno a las medidas alternativas a la pri-vación de la libertad para jóvenes y adolescentes en conflicto con la ley penal.

► Ya está listo el vídeo documental sobre el Proyecto de Justicia Ju-venil Restaurativa desarrollado en El Agustino (Lima) y Chiclayo por Encuentros Casa de la Juventud y Terre des hommes - Lau-sanne, y puede ser visto en You Tube: http://www.youtube.com/watch?v=uzOuuBeeE8w. El video ha sido realizado por Fabrizio Maniscalco, dura 14 minutos y se puede ver también en formato de alta definición.