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CASA FUNDACIONAL DE LAS HERMANAS DEL AMOR DE DIOS

(TORO – ZAMORA)

HOY TAMBIÉN CENTRO DE ESPIRITUALIDAD AL SERVICIO DE TODA LA

CONGREGACIÓN Y DE LA IGLESIA

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(TORO – ZAMORA)

HOY TAMBIÉN CENTRO DE ESPIRITUALIDAD AL SERVICIO DE TODA LA

CONGREGACIÓN Y DE LA IGLESIA

Extracto y adaptación del texto elaborado por Hna. Teresa Sáez(Madrid, 2013)

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INTRODUCCIÓN.

En Toro nació la CONGREGACIÓN DE LAS HH.DEL AMOR DE DIOS, y tratando de remontarnos a losorígenes, empecemos por lo material y tangible paraunirlo a la aspiración más noble y deseada.

Por lo que al edificio de la Casa Fundacional serefiere, está atestiguado que pertenece al siglo XII, yrefiriéndose a este edificio dice el historiador local DonJosé Navarro Talegón en su “Catálogo monumental deToro y su Alfoz”, 1980:

Este edificio testimonia la importancia del ricoarcedianazgo de Toro en el siglo XII, después de haberestado bajo la jurisdicción episcopal de Astorga y deLeón. Ya quedaron consignados algunos documentosen los que los prelados de nuestra diócesis se decían“episcopus in Zamora et in Tauro”.

Todos los historiadores locales han recogido que el rey D. Pedro I estuvo aquípreso de su madre y de la nobleza. Sigue diciendo este notable historiador: Nosconsta que el 1 de septiembre de 1697 la Mitra de Zamora compró una casa en lacalle de la Reina en que al presente está el Palacio Episcopal”. Por este tiempo eraObispo de Zamora Don Fernando Manuel de Mejía, que ocupó la sede episcopal deesta Diócesis de 1693 a 1703.

Añade el historiador: “En 1864 fundó aquí D. Jerónimo de Usera y Alarcón elInstituto de las Religiosas del Amor de Dios”.

Continuando con el Palacio del Obispo –Casa Cuna- dice el Sr. NavarroTalegón:

“A los lados de la puerta, de arco adintelado, aparecen borrados unos escudosde armas. Todo el edificio fue muy reformado en la segunda mitad del siglo XVIII, entiempos del obispo Jorge Galván1, que colocó sus armas en el hastial de naciente.Tiene un patio con pies derechos y galerías cerradas en la parte alta y, abajo, un pozoen medio, 7 columnas esbeltas pero sencillas con molduradas basas góticas, quedatarán del siglo XVI; las zapatas, canes y techos del mismo fueron renovados en elsiglo XVIII (Fot. 28).

La caja de la escalera se cubre con una cúpula oval aladrada por linterna, dela época de dicho Obispo. Lo demás está muy trastocado por reformas mezquinas.

Aparejo de tapias reforzadas por machones y verdugadas de ladrillos, consillares en los zócalos y portada.

De este edificio han salido las esculturas y pinturas que catalogamos en elPalacio de Alcañices” (sic).

1 Nada se ha dicho del otro escudo, que hoy vemos dentro de la Casa Fundacional a continuación del referido delObispo Jorge Galván, es el Escudo de la familia Fonseca, una de las familias más ricas y emparentadas con lanobleza desde los Reyes Católicos. Alfonso de Fonseca fue Obispo de Burgo de Osma, cuya vida poco ejemplar lellevaba –con bastante frecuencia- a Toro, su ciudad natal. Fernando de Fonseca fue nombrado Administradorperpetuo del Monasterio del Santo Sepulcro de Toro, Casa Matriz de la Orden en los reinos de Castilla, León,Portugal y Navarra.

Cuadro de la exposiciónpermanente de Toro.

Autor: Pedro Torres Cotarelo

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Hasta aquí se ha recogido la información aportada por quien conoce el ricopatrimonio histórico de Toro. Ahora nos adentraremos en lo que nos llevará poco a

Patio del Palacio del Obispo

Patio del Palacio del Obispo. Casa Fundacional 2004

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poco a un conocimiento de los orígenes de la casa fundacional de la Congregación.Fue así que vio el Padre Usera este edificio, pero en estado muy ruinoso, cuandollegó a Toro para preparar la Casa-Colegio del Amor de Dios.

Si tratamos de conocer los datos referentes a la Instrucción Pública de Toro,poco antes de la Fundación de la Congregación, debemos acudir a lo que nos dejaPascual Madoz y reproduzco textualmente:

“Hay tres escuelas de niños, dos de niñas y otra de gramática latina. Seconocen con los nombres de Arriba, Abajo y Santo Domingo; a la primera asisten 82niños que escriben, leen y cuentan, a la segunda 363 que sólo llegan a los principiosde la lectura, y a la tercera 136 que reciben toda clase de formación elemental. Ladotación de los maestros además de las retribuciones de los niños de 1, 2 y 4 reales,es de 3.285 reales, a 9 reales diarios, pagados de los fondos del común… Las niñas,en la escuela pagada por la ciudad, son 50, contándose 12 que satisfacen 2, 4, 6 y 8reales, según que hacen media, cosen, bordan, leen y escriben. El sueldo de lamaestra es de 2.910 reales. La escuela pagada por la comunidad de la tierra son 16[niñas] sin contar las 12 gratuitas, con las mismas retribuciones que las anteriores.Los maestros tienen casa gratuita, según reglamentos, otras varias escuelas de niñashay a que concurrirán sobre 40 discípulas”.

Conviene tener en cuenta que fue en 1857, cuando el zamorano ClaudioMoyano publicó lo que se conoce como La Ley Moyano, que Isabel II firmó, el 17 dejulio de 1857, autorizando al Gobierno para formar y promulgar una Ley deInstrucción Pública. Esta Ley fue el fundamento del ordenamiento legislativo en elsistema educativo español durante más de cien años, pues en esencia –con algunasmodificaciones- pervivió hasta 1970.

Acercándonos a los orígenes sabemos que el hecho ocurrió en Toro.Pero,¿cuándo le surgió la idea y se decidió por este lugar el Venerable Padre Usera?Nos consta la gran amistad y constante relación de Don Jerónimo Mariano Usera conDon Bernardo Conde y Corral –éste último fue monje Premostratense– exclaustradopor la desamortización de Mendizábal en 1835. La misma causa por la que lo fue elP. Usera y tantos monjes y frailes de la época. Cercano también el Obispo alFundador por vínculos familiares. Fue Don Bernardo Conde y Corral Obispo dePlasencia de 1858 – 1863. En julio de 1863 tomó posesión de la Diócesis de Zamora.Con él contó en todo momento el Fundador, cuya amistad y confianza nos essobradamente conocida.

En una carta escrita por el Padre desde Toro, con fecha 3 de julio de 1863,consta que en ese tiempo las obras de reparación del edificio, destinado a recibir laprimera Comunidad, iban ya muy adelantadas, y que el proyecto había causado“excelente impresión entre el pueblo”

Por estas fechas estaban ya redactados los Estatutos y en manos de algunosPrelados, a quienes el P. Usera pedía opinión sobre los mismos. La carta, dirigida alObispo de Zamora, contiene además una semblanza de lo que sería una religiosa delAmor de Dios, y está rebosando optimismo por todas sus líneas. Es la descripción dela espiritualidad del Instituto que quería fundar. Se incorporan textualmente algunospárrafos, sacados de esa carta:

“Recelo –dice el P. Fundador- apartarme un solo momento de esta obra quepesa sobre mi corazón y sobre mi cabeza. Mucho se ha hecho y resta que

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hacer; mas concluido que sea el trabajo ha de quedar una casa buena y dignade Toro y de la diócesis”.

¡“Cuánta necesidad y cuánta hambre hay de enseñanza!. Sobre todo deenseñanza sólida y religiosa”.

“Todas las madres pobres y ricas se ocupan del Colegio. Así que por grandeque sea siempre ha de parecer chico; y estoy segurísimo que al día siguientede su inauguración se ha de tratar ya de ensancharlo”.

“A nuestra vista trataremos de los Estatutos. Antes de mi salida de Madridenvié a Toledo a su Eminencia el Cardenal un proyecto de Estatutos que meofreció revisar y escribir sobre ellos su parecer. Están basados sobre elprincipio de una obediencia ciega, y sobre la absoluta dependencia del Preladode la Diócesis, empapados todos ellos en la oración y en el estudio. En unapalabra, serán las Hermanas de este Instituto unos jesuitas vestidos de mujer”.

“El tiempo lo tendrán distribuido entre la oración, la frecuentación de lossacramentos, la enseñanza y el estudio con algunos ratitos de distracción, eldescanso y la alimentación necesaria para el cuerpo; y en medio de todo se lesrecomienda que vivan siempre en la presencia de Dios. De manera que sinduda alguna han de salir maestras virtuosas y entendidas; y vivirán felices ycontentas, en cuanto uno puede ser feliz y vivir contento en este mundo”.

Resulta fácil descubrir la Espiritualidad “diseñada” por el Fundador:Espiritualidad con identidad propia, vinculada a la Misión. El Padre responde a lasnecesidades apremiantes. Estudia-ora-reflexiona y discierne: “Se peca más porignorancia que por malicia”. Resulta hoy gratificante ver cómo vivieron los tiemposdifíciles tantos y tantos fundadores –muchos beatificados o canonizados, reconocidasu Virtud heroica-. Se vieron privados no pocos de sus monasterios, a causa de ladesamortización, pero el sufrimiento es escuela de oración y en la oraciónencontraron la llamada de Dios.

El lugar escogido para poner la primera piedra fue Toro, en la Provincia yDiócesis de Zamora, población –en 1864- de ocho mil habitantes. Ciudad famosa enla Edad Media, cuna de hombres ilustres, escenario de grandes acontecimientoshistóricos. Fue Toro varias veces sede de las Cortes de Castilla, conocida también por

su riqueza natural y hermosa vega. En el momentode la Fundación conservaba Toro todavía algo de suesplendor histórico.

Con tener importancia el acervo histórico ypatrimonio artístico de la ciudad de Toro; no fue elmotivo principal que influyera en el P. Usera para suelección. Lo que indujo a nuestro P. Fundador ainclinarse por este lugar, fue –sin duda- la profundaamistad con el Excmo. Sr. Obispo, Don BernardoConde y Corral, cuyo consejo fue decisivo para hacerviable el proyecto concebido por el Venerable PadreJerónimo Mariano Usera.

En Toro no se encontraba casa apropiada quesirviese de Colegio y Residencia de la Comunidad.Ante esta realidad el Señor Obispo cedió el Palacioque la Mitra poseía en dicha ciudad. Estaba el

Don Bernardo Conde y Corral

Palacio no sólo en condiciones precarias, sino inhabitable. El Padre Usera secomprometió a llevar a cabo la restauración del edificio, a costa suya en primer lugar,y de algunos vecinos que contribuyeron con donativos de dinero unos, y otros conprestaciones personales.

E P. Usera en actitud de agradecimiento a la Mitra de Zamora, en la personadel Obispo, Don Bernardo Conde y Corral, se comprometió a llevar a cabo larestauración del edificio –por cuenta propia. Sin embargo aparece manifiesto en estacita que:

“Se estableció que todas las mejoras introducidas en el edificio quedarían afavor del Obispado, si algún día desapareciera de allí el Colegio”.

Así se desprende de un documento dirigido por Jerónimo Mariano Usera alExcmo. Señor Obispo, donde lo expresa de este modo:

“Desea dejar consignado de la manera más solemne, que su voluntad ha sidoy será siempre respetar los derechos sagrados que la Mitra de Zamora tiene sobreesta casa-palacio. A este fin he consignado en el número 5 de las bases queacompaña y que han sido aceptadas por el Ilustre Ayuntamiento” […].

Larga va sienque la Congregacióllamado Palacio delConozcamos su tra

Fachada posterior del Palacio del Obispo, restaurada (2004)

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do la Historia, desde aquel venturoso día -27 de Abril de 1864-,n del Amor de Dios vio la luz en Toro, y encontró su cuna en elObispo, hoy propiedad de las Hermanas del Amor de Dios.

yectoria.

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I. PRIMERA ESTANCIA DE LA CONGREGACIÓN EN LA CASA FUNDACIONAL.

Con anterioridad, el hombre que nació para hacer el bien, fiel a la llamada deDios, en 1861, después de buscar y no encontrar en la Península una Congregaciónde la que para las Antillas saliesen Religiosas que pudiesen realizar la llamada deDios, siente que ha de ser él quien funde esa Congregación. Estaba claro que Dios lellamaba a fundar la Congregación con la que él “soñaba”, y se retira a orar en Griñón(Madrid). No necesitamos hacer interpretaciones, basta leer lo que desde Griñónescribe el Padre al Nuncio de SS. en España:

“En la actualidad tengo un compromiso de establecer un Instituto que démaestras piadosas e instruidas para educar a las niñas pobres de nuestrasposesiones en Ultramar, y principalmente a las de Puerto Rico a cuya Iglesiapertenezco” […].

En Griñón el P. Usera –hombre fiel a la llamada de Dios- vivió en silencio. Dioshabla en el silencio del corazón, oró mucho, “escuchó” y allí en Griñón redactó losEstatutos de las Hermanas del Amor de Dios. Estatutos a los que hace referencia enla carta que dirige al Sr. Obispo de Zamora, con fecha 3 de julio de 1863.

Después firmó unas Bases de Colaboración con el Ayuntamiento de Toro en1863.

1.1 Los primeros pasos de laCongregación.

Aprobados los Estatutos del P. Fundadorpor el Señor Obispo de Zamora, al día siguiente-27 de abril de 1864- en el Convento de lasMM. Mercedarias, con la presencia del SeñorObispo de Zamora, D. Bernardo Conde yCorral, distintas autoridades eclesiásticas yrepresentantes de autoridades civiles y el PadreFundador, tuvo lugar el acto en el que se dioinicio a la Congregación de las Hermanas delAmor de Dios (exhortación hecha por el Señor

Obispo al grupo de señoras que se disponían a dar inicio a esta obra en la Iglesia,bendición del traje que iban a usar y suvestido y entonación de un solemne TeDeum); a continuación fue el traslado delas Hermanas del Convento de las MM.Mercedarias hasta el edificio que iba aser, a partir de ahí, la residencia oficial deesta nueva comunidad.

Y, el día 28 de abril, por iniciativadel Ayuntamiento y personas mássignificativas de Toro, tuvo lugar lacelebración solemne de la Eucaristía, enSanta María la Mayor - La Colegiata,siendo las Hermanas acompañadas por elSeñor Obispo de la Diócesis, autoridades

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eclesiásticas y civiles de Toro y Zamora, y sobre todo por el Venerable PadreFundador. Terminada la cual, y entonado el Te Deum en acción de gracias, lasautoridades eclesiásticas, presididas por el Sr. Obispo, así como las autoridadesciviles: la Corporación Municipal con el Sr. Alcalde a la cabeza, Junta de InstrucciónPrimaria y muchas gentes deseosas de ver abiertas las puertas de un Colegio parasus hijos se dirigieron hacia la Residencia-Colegio del Amor de Dios. Ya en la Casa-Colegio, el Sr. Alcalde tuvo unas palabras de acogida y agradecimiento al Sr. Deán dePuerto Rico y a las Fundadoras por ser Toro la ciudad elegida para el primer Colegiode Enseñanza en todo el distrito Universitario de Salamanca. El Alcalde decía alrespecto: “Es un centro al nivel de los mejores de Europa”. El Padre Fundador y el Sr.Obispo a su vez respondieron dando las gracias al Ilustre Sr. Alcalde.

Si hasta el momento, cuanto se ha venido diciendo todo ha hecho referencia allugar concreto de la Casa, conviene referirnos a las personas que en ella iban aformar la primera comunidad de Hermanas del Amor de Dios. Para ello nada mejorque acudir a documentos que lo acrediten para que tengamos conocimiento de cómoel Venerable Padre Jerónimo Mariano Usera cuidó hasta el último detalle de laFundación, y con qué justicia, sabiduría y prudencia se condujo desde los comienzos.

Hay en el Archivo de la Mitra de Zamora una carta del Padre Fundador, confecha 11 de marzo de 1864, dirigida al Señor Obispo, Don Bernardo Conde y Corral.

Pero es importante tener en cuenta la fecha con la que el Padre se dirige alObispo, así como el día fijado para salir él de Madrid con las personas que nombra yson 6, las primeras en llegar al Convento de las MM. Mercedarias. El resto de lasHermanas fundadoras llegó después.

Como monje conoce y actúa en consecuencia. Previamente el Padre Fundadorse había puesto en contacto con la Madre Comendadora, pero “suplica” al SeñorObispo que tenga a bien comunicárselo directamente –a modo de recuerdo- con el finde que las fundadoras entren en la clausura y ocupen el lugar que les tenganasignado para vivir con ellas la Semana Santa.

Terminadas las obras en la Casa-Palacio, cedido por el Sr. Obispo, DonBernardo Conde y Corral, allí se instalaron las primeras HERMANAS DEL AMOR DEDIOS, el día 27 de abril de 1864, que como hemos visto esperaban en el Convento delas MM. Mercedarias. Sus nombres deben ser consignados, por ser los primeroscimientos de la Congregación. Según el acta elaborada por el Secretario de Cámara yGobierno de la Diócesis de Zamora, del acto realizado el 27 de abril de 1864, fuerondoce las señoras que en ese día vistieron “el traje adoptado para estas Hermanas”,después que el mismo Señor Obispo lo había bendecido. Esta lista indica el pueblo deorigen de cada una de las Fundadoras así como la diócesis a la que pertenecía:

1. Adelaida de Flores, de Puerto de Santa María, diócesis de Sevilla: MadreAdelaida de las Mercedes (Superiora)

2. María Ana de Jesús Horcasitas, de Alcalá de Enares, diócesis de Toledo:Madre María Ana de Jesús de la Trinidad (Vicaria)

3. Margarita Beredas, de Madrid, diócesis de Toledo: Hermana Margarita de lasMercedes

4. Josefa Manuela Aller, de Madrid, diócesis de Toledo: Hermana Soledad deSan Bernardo

5. Ana María de Marchena, de Sevilla, diócesis del mismo nombre: Hermana AnaMaría de la Trinidad

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6. María Antonia Rafaela Martínez, de Alicante, diócesis de Orihuela: HermanaCorazón de María

7. María Vilella, de Cintadilla, diócesis de Tarragona: Hna. María del BuenSuceso

8. Alejandra Mateo, de Guadalajara, diócesis de Toledo: Hna. María de laEncarnación

9. Ángela de la Figuera, del Piñero, diócesis de Zamora: Hermana María Ángeladel Espíritu Santo

10. María Jamona Giménez, de Santo Domingo de la Calzada, diócesis deCalahorra: Hermana María de la Asunción

11. Teresa Medel, de Torrevieja, diócesis de Orihuela: Hermana Corazón deJesús

12. Juliana Ruiz, de Junguitu, diócesis de Vitoria: Hermana Jesús María

Esa misma acta hace constar como haciendo parte de este Instituto la señoritaElisa Vauvet (profesora de lenguas) y Julia Hera (profesora de música).

Cuando el 30 de agosto de 1864, presentan al Señor Obispo una instancia,solicitando autorización para hacer los votos simples, falta una de ellas, la segunda dela lista: María Ana de Jesús Horcasitas, que no llegó a emitir los votos.

El 3 de octubre de 1864, respondiendo a la instancia de las HermanasFundadoras, el Señor Obispo decía:

“Damos nuestra licencia a las Hermanas del Amor de Dios como Fundadorasde este Instituto -y repetía los nombres en el orden en que aparecen antes citados-para que como todas las Fundadoras, y en virtud de todo lo puesto en el artículo 41de los Estatutos, hagan desde luego los votos simples, sin aguardar a los dos añosprevistos a las Hermanas que entren en el Instituto por disposición general. Y dehaber emitido dichos votos en manos del Director espiritual, su Fundador, nos loparticipará la Superiora por medio de nuestro Secretario de Cámara.

El 6 de octubre de 1864, el P. Usera obtenía del Obispo de Zamora, DonBernardo Conde y Corral, la aprobación de las Reglas y del Manual de Oracionespara el Instituto de Hermanas del Amor de Dios. Ante el pensamiento confuso de laEspaña del siglo XIX, tanto en su vertiente filosófica, como pedagógica, JerónimoMariano Usera comprendió y llevó a cabo lo que es una de sus firmes convicciones:

“¡Cuánta necesidad y cuánta hambre hay de enseñanza! Sobre todo deenseñanza sólida y religiosa”. Bien convencido estuvo nuestro Venerable PadreFundador, y así consta en la aprobación de los Estatutos: […] “cuya fundaciónpromueve en esta dicha ciudad de Toro con destino a la formación de Maestras paralas posesiones españolas de las Islas Antillas, y para la enseñanza y educacióncatólica de las niñas en esta ciudad y en cualquier otro punto donde sean llamadaslas hermanas a este efecto; y considerando los grandes beneficios que esta fundacióndebe proporcionar” […]. En conclusión, la convicción es clara:

“Los servicios más eminentes que pueda prestarse a un pueblo, los de laeducación”.

El 16 de octubre de 1864, las Hermanas Fundadoras –en la Casa Cuna- hacíanla profesión religiosa, y era el P. Fundador el que recibía la primera profesión en laCongregación.

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En una época en que la mujer estaba apartada del ambiente social, el PadreUsera –con visión de futuro y completa convicción- confía y potencia a la mujer,poniendo en sus manos la labor más noble: La educación. En la Instancia que envía ala Reina se lee:

[…]. “Y la mujer, Señora, es la base de la sociedad; porque tales cuales fuerenlos sentimientos de la madre, esos serán los sentimientos de la familia y porconsiguiente del pueblo”.

Las contrariedades están siempre presentes en la vida del hombre, y nopequeña contrariedad para el Fundador lo fue -sin duda- la determinación que porReal Decreto recibió, por la que se veía “obligado” a marchar a Cuba, el 30 deoctubre de 1864. En la capital de Cuba debía tomar posesión del Deanato de la SantaIglesia Catedral de La Habana, el 23 de diciembre de 1864. A pesar de que el Padre,con fecha 1 de junio de 1864, pedía a la Reina, que le aceptara la renuncia alDeanato de Puerto Rico y al de La Habana, para poder acompañar a la Congregaciónque acababa de fundar. Con harto dolor soportó la contrariedad. La renuncia no le fueadmitida y tuvo que marchar, cuando apenas había echado a andar aquel pequeñogrupo de Hermanas Fundadoras. Así fueron los principios de la Congregación.

Desde Cádiz, y con fecha del 30 de octubre de 1864, poco antes de embarcarhacia Cuba, el P. Fundador se dirige al Excmo. e Ilustrísimo Sr. Nuncio de este modo:

“Excmo. e Ilmo. Sr. Nuncio

Muy Sr. mío y digno de toda consideración y respeto. El domingo 16 de loscorrientes hicieron los primeros votos en Toro las “Hermanas del Amor de Dios”:Instituto formado por mí y a mi costa para dar maestras a Ultramar. Este fue el objetoque me trajo a la Península, y una vez llenado hoy mismo a la una del día meembarco en el vapor Sto. Domingo para La Habana. Allí como en todas partes meofrezco a las órdenes de V. E. Ilma.

Se repite de V. E. Ilma. lleno de consideración y respeto su [abreviaturasilegibles] que besa su anillo.

Cádiz, 30 de octubre de 1864”. Firmado Jerónimo de Usera (sic).

Ésta es la CASA donde nació la Congregación, y conoció el tesón de unhombre que no escatimó esfuerzo ni sacrificio para poner en práctica la inspiraciónrecibida. No podemos dejar de reconocer el dolor que supuso para el VenerablePadre Usera aceptar la determinación, “impuesta” por Real Decreto, y lasconsecuencias que podían derivarse.

Este es el “comienzo” de una Congregación, que se vio privada de la“presencia” de su Fundador -demasiado pronto- cuando apenas había comenzado suandadura.

1.2 Surgen las primeras dificultades entre las HH. Fundadoras.

En Toro el P. Fundador dejaba la Primera Comunidad, formada por mujerescon caracteres muy diferentes y de procedencias distintas que todavía no habíanexperimentado la vida en común. Comenzaban su andadura en la Congregación queacababa de nacer.

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Tanto el Señor Obispo de Zamora, Don Bernardo Conde y Corral, como dossacerdotes de Toro, Don Félix y Orantes, eran personas de toda confianza delFundador y a ellos informaba, y por ellos era informado de la marcha de la “incipiente”Comunidad. Ninguno de los tres tardó en comprender la decepción causada por laque había sido nombrada por el Padre Fundador como Superiora, y el “malestar” quese vivía en el grupo. El buen espíritu de las otras Hermanas, con la gracia de Dios,sostenía aquella pequeña Comunidad sumida en una noche oscura que se ibaprolongando.

En la Casa Fundacional las primeras Hermanas supieron de dolor y muchasprivaciones, obscuridad y desconcierto, pero las que se mantuvieron en fidelidadhicieron posible la Obra de Dios.

Mucho tardará en consolidarse lo que el Padre Fundador quiso plasmar en elInstituto por él fundado.

En enero de 1865, la Madre Adelaida de las Mercedes, en quien el Fundadorhabía puesto su confianza, se dirigía por carta al Señor Obispo de Zamora, donde seintuye la falta de decisión de esta mujer, que sucumbe ante las primeras dificultades.No hay en esta carta “expresión de esperanza”, ni ilusión por la Vida Religiosa. Estápronta a abandonar el Instituto.

El Padre Fundador, a pesar de la gran distancia geográfica que le separa,sigue de cerca la vida de las Fundadoras y se comunica con el Obispo y sacerdotesencargados de la orientación de aquel pequeño grupo y sus comienzos de vidacomunitaria.

Lo cierto es que el Padre, antes de transcurrir el primer año de la Fundación,“conoce” la situación “penosa” que se vive en la Casa Cuna, y escribe desde LaHabana, el 15 de febrero de 1865, a la que puso como Superiora y en la que confió yle dice:

“A MADRE ADELAIDA

Muy amada en J. C. Adelaida: Ciertamente no me ha sido muy gustosa la cartaen la que V. me participa la casi resolución de abandonar con Ana el Instituto. Me daV. por causa una reconvención, más o menos agria, del Prelado. ¿Cree V. que éste,sea que hable, sea que escriba, no lo hará todo mirando a Dios y teniendo presente elbien del Instituto y de Vds. mismas?

Si las Hermanas de cualquier Instituto análogo al nuestro dejaran el hábito luegoque fueran reprendidas de una manera un poco fuerte, de seguro que estos Institutosestarían desiertos. Vd. sabe, como yo, que en estos Institutos se entra para servir ysufrirlo todo por el Amor de Dios. Hoy no puedo decir más a V. hasta que llegue otrocorreo. Celebraré el alivio de Ana M.ª Su afmo. hermano y padre en J. Cristo.

J. M. Usera

Habana, 15 de febrero de 1865”.

El grupo, primera Comunidad, sintió el vendaval y sufrió las consecuenciasderivadas. Muchas eran las comunicaciones que las Hermanas hacían al bondadosoObispo, Don Bernardo Conde y Corral, pidiendo ayuda y orientación, ya de formadirecta, ya a través de los Sacerdotes de plena confianza que en Toro había dejadoel Padre Fundador, y a los que le recomienda en la Carta a Madre Margarita, confecha del 14 de marzo de 1865.

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A la carta dirigida a Madre Margarita, seguirá la dirigida a todas las Hermanas,desde La Habana con fecha 13 de Junio de 1865. Carta extensa en la forma y muyprofunda en el contenido. Sin duda es la Carta Magna, síntesis y recopilatorio,herencia preciosa para toda la Congregación. Carta que comienza con un cariñososaludo a todas las Hermanas, e inmediatamente aborda con claridad meridiana lasituación real que se ha vivido en la Casa Cuna.

Sin tratar de hacer una estructura del contenido, buscando sólo los puntos mássignificativos, vamos a detenernos en algunos aspectos. En el segundo párrafo de sucarta dice textualmente:

“No había remedio, tenía que suceder así, y el Ilmo. Prelado, vuestro Pastor yPadre, no ha atendido más que a salvar al Instituto y a vosotras que no tenéis nidebéis tener otra enseña que sacrificaros por el Santo Amor de Dios” […].

En el tercer párrafo hace primero una declaración de principios para pasar enseguida a una “definición” de la Vida Religiosa. Sigue el Padre Fundador dandoaplicaciones “prácticas” para concluir en el párrafo sexto con la centralización enJesucristo que es quien vivifica y salva siempre. Muy actual y significativo el párrafodonde el Padre dice:

“Con una comunidad de ocho o diez religiosas penetradas de estossentimientos puedo yo hacer más y mejor que con cincuenta que desconozcan eseespíritu del Evangelio” […].

Antes de acabar de escribir la carta hace una recomendación muy válida:

“Concluiré recomendándoos la continua lectura de las Constituciones y Reglas[…]. Adiós, hijas y hermanas mías. Que el Señor os bendiga, que os dé muchahumildad y paciencia y sobre todo que llene vuestro corazón con el santo Amor deDios, a fin de que le sirváis lo mejor posible en esta vida para verle y gozarleeternamente en la otra vida” […].

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“Hermanas, mucha obediencia, obediencia ciega a los Superiores, muchahumildad y paciencia y muchísima caridad. Encomendadme a Dios.

Vuestro amantísimo padre y hermano en Jesucristo. Gerónimo M. Usera.

Una lectura serena, “crítica” y progresiva de estas tres cartas nos permite unacercamiento a la personalidad del Padre Fundador, así como el poder comprendermejor la situación por la que pasaban las primeras Hermanas. Situación difícil, muydifícil, pero en la que se vislumbra el sentido de esperanza.

Otro documento que acredita cuanto venimos diciendo está en la fotografía queaparece en los Anales, página 36, y se reproduce en la página anterior. No están yatodas las Fundadoras (sí un pequeño grupo de novicias).

De la decisión de la Madre Adelaida de Flores, la que fue primera Superiora, haquedado expresada reiteradamente, pero siempre puede decirse algo más. En cartafechada en Toro el 5 de mayo de 1865, se dirige la propia al Señor Obispo de Zamora,en la que afirma que causas ajenas a su voluntad, le hacían a su pesar, retirarse delInstituto. Y le suplica que de vuelta de correo le envíe las licencias de Sor Ana María yla suya, acompañadas de la fe de bautismo y confirmación. Al margen de esta carta selee: “Se le concedió licencia a las dos para retirarse en 6 de mayo del 65” .

1.3 El Padre viene a España a finales de 1866 y desde Madrid se desplaza aToro siempre que puede.

De una manera sencilla vamos a recordar los momentos de “Pasión yResurrección” en los comienzos de nuestra Congregación. Gozó el Padre Usera conla Profesión de las Hermanas Fundadoras, el 16 de octubre de 1864, fue unamanecer radiante, pronto perturbado por dos hechos que tuvieron fuerte repercusiónen el desarrollo inicial de la Congregación:

- La salida del Padre Fundador para Cuba, pocos días después de laProfesión de las primeras Hermanas, exactamente, el 30 de octubre de1864, partía el Padre Usera de Cádiz rumbo a Cuba.

- La salida de la Congregación de la primera Superiora de la Comunidad deToro, Madre Adelaida, y la Hermana Ana María de Marchena, en losprimeros meses de 1865, al año de la Fundación.

La Congregación luchó con dolor entre la vida y la muerte en los primerosmeses de su nacimiento. Con la venida del Padre Fundador a España, a finales de1866 -llamado por el Gobierno de la Reina Isabel II para estudiar con otroscomisionados la problemática que se vivía en las Antillas- la Comunidad experimentóde cerca positivamente su sombra protectora.

¡Cómo aprovechó el Padre esta ocasión para acercarse a las Hermanas ytratar de orientar aquel grupo fiel a la llamada!, golpeado con la prueba del dolor y“ruptura” del Instituto de quien el Fundador puso como Superiora, además de tantasdificultades surgidas en un comienzo de Vida Religiosa. Trataremos de ampliar condatos este enunciado.

El 17 de diciembre de 1866, se encontraba el Padre en Toro, y además de supresencia venía cargado de regalos para la Capilla. La Madre Soledad con fidelidadexquisita lo deja registrado en un inventario.

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El Padre estaba bien informado de cómo se encontraba la Comunidad y veníade Cuba dispuesto a hacer una “reorganización” a fondo. Bien supo lo que hacía.

Leemos en los Anales (pág. 67) “la Superiora estaba muy enferma”. Con el finde ayudarla, el Padre propuso como Vicaria del Instituto a la Madre María del BuenSuceso Vilella Segura, pero con la condición de que también debía seguir con elcargo de Maestra de Novicias, que venía ejerciendo. Efectivamente, con fecha del 6de enero de 1867, el Padre enviaba al Señor Obispo, Don Bernardo Conde y Corral,una instancia que era contestada dos días después en el mismo margen.

“Excmo. e Ilmo. Sr.

Encontrándose hoy vacante el oficio de Vicaria en esta santa Casa, en nombrede la Superiora que se encuentra actualmente enferma y en cama. Tengo la honra deproponer para este cargo a la M. María del Buen Suceso Vilella, pudiendo, si V. E.Ilma. así lo dispone, continuar la misma con el cargo de Maestra de Novicias.

Dios guarde a V. E. Ilma. muchos años. Toro, 6 de enero de 1867”.

Firmado: Excmo. e Ilmo. Sr. Jerónimo M. Usera (sic)

En la misma Instancia, margen superior de la parte izquierda, podemos leer lacontestación inmediata del Señor Obispo: “Zamora, 8 de enero de 1867. Aceptada lapropuesta se nombra Vicaria a la M. María del Buen Suceso Vilella, continuando conel cargo de Maestra de Novicias”.

Las aguas volverían a su cauce poco a poco. El Padre Fundador ve, observa,consulta, juzga y actúa con prudencia y sabiduría. Después nombra SuperioraGeneral, en el mismo año 1867, a la Madre María del Buen Suceso Vilella Segura.Ésta es la mujer a la que bien podemos llamar MADRE de la Congregación, ella hizoresurgir –casi de la nada- la Congregación.

En mayo de 1867, las alumnas del Colegio tuvieron exámenes públicos,presenciados por el Obispo de Zamora, Don Bernardo Conde y Corral, con variasautoridades y algunos miembros de la Junta Local de Instrucción Pública. Asistiótambién la prensa y en el periódico Iris, que se publicaba en Zamora, apareció unacrónica del hecho, que tuvo lugar en Toro, motivado por el Colegio Amor de Dios. ElBoletín Eclesiástico de Zamora hizo amplia referencia, de lo que constituía unaverdadera novedad en esa época en la que la Enseñanza, como se dijo en laIntroducción de este trabajo, estaba tan descuidada, y falta de organización en todoslos niveles, más la escolarización, apesar de la Ley Claudio Moyano,dejaba mucho que desear, y en elmejor de los casos, no podemos olvidarque estaba regulada para alumnos de 6a 9 años, y no eran precisamente lasniñas las más favorecidas; de ahí queel Ayuntamiento de Toro hubieraaceptado con tanto agrado y favorableacogida la Obra del Padre JerónimoMariano Usera, siendo Toro el primerlugar en el que se hiciera presente.

De cómo funcionaba el primerColegio del Amor de Dios habla un

Casa Fundacional y Colegio Amor de Dios, en Toro

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documento fechado el 19 de mayo de 1867. Se transcribe:

“Este Ilustre Ayuntamiento, la Junta de Mancomunidades de los Pueblos de laTierra, y la Cofradía de María Santísima del Canto, nuestra Patrona, cumplen con elmás grato deber, al ofrecer un testimonio de su reconocimiento y satisfacción a Vds. ya sus distinguidas educandas por el obsequio que han dispensado al culto de MaríaSantísima. Al propio tiempo no pueden por menos de felicitarse y felicitar a las dignasProfesoras del Colegio […].

Dios guarde a Vds. ms. as. Toro 19 de Mayo de 1867. El Alcalde Corregidor,José M.ª Sanz.- Sras. Superiora y Profesoras del Colegio de educandas del Amor deDios de esta ciudad. Toro” (sic)

El Padre aprovechó esta venida a España entre otras cosas para preparar el“salto” que algunas Hermanas darían a Las Antillas. Conocedor del clima, comprendióque no debían pasar las Hermanas de Toro a Cuba sin aclimatarse antes en tierrasmás cálidas –Cádiz-. Cualquier visitante de la ciudad gaditana puede encontrarse conesta leyenda en piedra:

“EN ESTA CASA, EL AÑO 1867, ABRIÓ EL SEGUNDO COLEGIO ELFUNDADOR DE LA CONGREGACIÓN DEL AMOR DE DIOS, DON JERÓNIMOUSERA Y ALARCÓN.

SIRVA ESTA PLACA COMO RECUERDO DE SU PRESENCIA EN CÁDIZ YHOMENAJE DE GRATITUD DE LA CIUDAD A LAS HERMANAS DEL AMOR DEDIOS DE MARCONI Y PUNTALES”. CÁDIZ, OCTUBRE 1997.

Si con “satisfacción” hemos hecho referencia a lo que el Señor Alcalde de Toro,con fecha 19 de mayo de 1867, decía con respecto al funcionamiento del Colegio, nopodemos omitir la realidad que empezó a experimentar la Comunidad y la repercusiónen el Colegio. La salida de Hermanas de Toro para fundar el Colegio de Cádizocasionó en el primero un fuerte “debilitamiento”. Se vieron en la necesidad de cerraralgunas aulas, al ser menos las Hermanas la enseñanza decayó notablemente. Hubotambién otras causas que contribuyeron al decaimiento, tales como la Revolución de1868, y la “epidemia” que en 1871 atacó a los Monasterios de Clarisas yConcepcionistas. Nuestras Hermanas las visitaron y atendieron con caridad ejemplar,siendo motivo de indisposición con el Ayuntamiento que les amenazó con cerrar elColegio; pero la “pequeña” Comunidad de Toro, al ver la situación lamentable en que

estaban aquellas monjas –recluidas enla ermita del Cristo de las Batallas- lastrasladaron al Colegio y las atendieroncon todo el cariño y atenciones.

Debemos tener presente que enlos primeros tiempos, y aún pasadosbastantes años de la Fundación, lasHermanas eran pocas, las dificultadesmuchas.

Es evidente que el P. Useraestaba muy por encima de su tiempo yla apertura por él manifestada a la horade buscar profesores estuvo a la alturade su inteligencia y visión universal. La

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Placa conmemorativa en Cádi fuerza nacía desde su espíritu, baste

con reflexionar sobre el Escudo que él dio a la Congregación y la profundidad de susignificado: “EL AMOR DE DIOS HACE SABIOS Y SANTOS”. Mantenido a través dela historia Congregacional, si bien, vemos después modificada la forma, no lo esencialque mantiene ”idéntica” la idea que plasmó en el carisma y el amor entrañable a laVirgen quedó reflejado en el centro del Escudo con el anagrama de María, que elPadre Fundador dio como Patrona de la Congregación.

II. LA CONGRECIÓN SALE DE LA CASA CUNA Y PASA AL PALACIO DE LOSMARQUESES DE ALCAÑICES.

Hemos visto cómo el P. Fundador buscó Casa donde comenzar la Obra queDios le inspiró, y la encontró con el apoyo del Señor Obispo de Zamora –DonBernardo Conde y Corral- su amigo y fiel colaborador hasta la muerte. En la Casa-Palacio propiedad de la Mitra de Zamora, desde el año 1697, permanecieron lasHermanas, desde la fecha de la Fundación 1864, ¿hasta cuándo?

Nos encontramos con varias fechas –ofrecidas- con motivo de la inauguraciónde la CASA FUNDACIONAL, ahora ya, propiedad de la Congregación.

Está escrito: “En esta Casa permanecieron las Hermanas, desde el año 1864hasta 1881, en que el SeñorObispo, Don Tomás Belestá,la reclamó para sí,ofreciéndoles a cambio elcontiguo palacio del Marquésde Alcañices, que habíaadquirido para este fin”.

Otra fecha distinta: “En1884 el Obispo de Zamora,Don Tomás Belestá yCambeses, adquirió, porcompra, el Palacio de losMarqueses de Alcañices,

moradmemoOlivarclasescon é

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Fachada del Palacio del Marqués de Alcañice
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también llamado Palacio deDoña Elvira, su antigua

ora, recuerdo monumental de la gloriosa historia de Castilla, entre cuyasrias se conserva la de los últimos días y momentos del Conde Duque dees. Este Palacio lo cedió el Obispo a la Congregación que pudo así ampliar las, aumentando aún más los espacios con la compra de otros edificios que lindan

ste”. (Sic).

Continuemos buscando “raíces”.

Sabemos que, el 31 de diciembre de 1880, murió Don Bernardo Conde yl. Le sucedió al frente de la Diócesis Don Tomás Belestá y Cambeses.cemos también que, después de la toma de posesión -como Obispo y Pastor-

ó para sí la Casa-Palacio del Obispo, ofreciéndonos a cambio el contiguoio del Marqués de Alcañices, que había adquirido con este fin, pero nuestranta es: ¿Cuándo lo adquirió? ¿Con cuál de las fechas, antes referidas, podemosrnos?

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Tratando de saber cuándo compró el Obispo de Zamora, Don Tomás Belestá yCambeses, el Palacio de los Marqueses de Alcañices se encuentra un escrito,acreditado con el Sello del Registro de la Propiedad de Toro, por tanto nadasospechoso en su contenido para llegar a una conclusión:

[...] “Esta finca se halla inscrita a favor del Excelentísimo e Ilustrísimo SeñorDon TOMÁS BELESTÁ Y CAMBESES, mayor de sesenta años, OBISPO DE ESTADIÓCESIS y vecino de Zamora por compra a Doña María Clotilde de la Pedraja yCuesta, mayor de edad, viuda, propietaria, vecina de Santander con domicilio enMadrid, en virtud de escritura pública otorgada en Zamora el día 13 de julio de 1883ante su Notario Don Antonio Mariano Prieto Fernández.

La finca antes descrita [Párrafo primero del documento] se encuentra en laactualidad LIBRE DE CARGOS Y GRAVÁMENES.

Toro, tres de Enero de mil novecientos sesenta y seis”.

Es un hecho que debe tenerse en cuenta, a la hora de poder afirmar a partir dequé momento podía “ofrecer” Don Tomás Belestá y Cambeses este edificio,evidentemente, no antes de haberlo comprado. Ya queda claro que no es en 1881. Hade ser después de firmada la escritura de compra, el 13 de julio de 1883.

Nos queda la posibilidad de pensar en 1884, o inclinarnos por 1890, pero siacudimos a los Anales (pág. 108) nos encontramos con que se da por hecho que -enla fecha de 1890- las Hermanas estaban ya viviendo en el Colegio en el que sigueestando, a juzgar por el deseo “expresado” por el Señor Obispo, Don Tomás Belestá yCambeses que, ante la intención de unos “frailes” franceses por establecerse enToro, dice textualmente:

[…] “Que los mencionados religiosos ocuparan el edificio en que vivíannuestras Hermanas, y que éstas pasasen al Palacio episcopal contiguo, que anteshabían habitado”.

Queda ya demostrado que -en 1890- las Hermanas llevaban tiempo viviendoen el Palacio de los Marqueses de Alcañices. Por lógica se deduce que las Hermanasestaban en lo que hoy es Colegio Amor de Dios -Palacio de los Marqueses deAlcañices-, desde finales de 1883, no antes.

El año 1890 fue un año “caótico” en la Congregación –visto horizontalmente- ala luz de la fe resultó un año de gracia y purificación. Se copia literalmente de losAnales (pg. 132-133):

“Era Superiora la Madre Serafina Albaiges y Rimbau y con ella vivían Sor PilarSistac, Sor Josefa Binués, Sor Asunción Blanco y Sor María de San Agustín, a lascuales se agregaron por entonces la Madre Benita Pardoa, Sor Pilar Martínez y SorEncarnación Salvador, procedentes de la Casa de Toro, de donde se pasaron aZamora, llevando consigo cuánto les pareció útil y conveniente. Previamente, y desdeluego sin causa bastante para ello, disolvieron el Noviciado y enviaron a sus casas alas Novicias que en el mismo tenían, quienes, a consecuencia de esta medida,terminaron por abandonar la vocación, si se exceptúa la joven Purificación Caño, quepor consejo y a instancias de un tío suyo escolapio, entró después en la Casa deToro”.

[…] “El Excmo. Señor Obispo, Don Tomás Belestá y Cambeses, comoSuperior del Instituto, acordó, con fecha 24 de noviembre de 1890, nombrar SuperioraGeneral a la Rvda. Madre Antonia Moles y Terés, que estaba al frente del Colegio de

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Santa Rosalía, en Santa Clara de la Isla de Cuba, señalándole para residencia laCasa de Toro, y disponiendo al mismo tiempo que en ella se estableciera elNoviciado”.

Aceptaron el nombramiento de la nueva Superiora General la Comunidad deToro, la de Vilaseca (Tarragona) y la de Santa Clara en Cuba. Se declararon enrebelión las de Zamora.

Se restableció el Noviciado en Toro, en principio sólo con la novicia PurificaciónCaño y la Comunidad de Toro quedó constituida por las siguientes Hermanas:

1. Madre Bernarda López Bustos, Superiora –interina- hasta que llegase deCuba la nueva Superiora General.

2. Sor Rita Sariñena.3. Sor Catalina Marqués Falcón.4. Sor Concepción Vallespín.

La pequeña Comunidad de Toro con espíritu de fe, mucha caridad y verdaderoempeño por vivir unidas se fue rehaciendo –no sin experimentar muchas privaciones yarrostrar muchos trabajos para salir adelante-. Recibieron muy bien a la nuevaSuperiora General y vivieron en obediencia y fidelidad.

El 22 de abril de 1892, murió en Zamora el Señor Obispo, Don Tomás Belestáy Cambeses, de forma repentina, y la Diócesis quedó vacante hasta el día 11 de juniode 1893, que llegó Don Luis Felipe Ortiz y Gutiérrez, designado como Obispo deZamora por la Santa Sede.

III. LA CONGREGACIÓN VUELVE A LA CASA CUNA POR UN CORTO TIEMPO.

Durante casi medio siglo el edificio, donde nació y estuvo por algún tiempo laCongregación, se vio deshabitado, y por consiguiente fue causa de deterioro. Hubo,sí, alguna que otra “presencia” ocasional en la primera década del siglo XX por partedel Obispado de Zamora, pero no de forma continuada.

3.1 La Congregación se plantea la adquisición de la Casa Cuna.

La primera vez que se encuentra una referencia concreta en la Historia de laCongregación –con respecto al deseo de comprar la Casa Cuna- es el 30 de julio de1931.

Así, leyendo las Actas de reunión del Consejo General, del año en que estallóla Segunda República en España, 1931, nos encontramos con lo que seguidamentese transcribe literalmente:

“A 30 de julio de 1931, reunido el Consejo en el despacho de la Rvdma. MadreGeneral, ésta expuso que habiendo manifestado al Señor Obispo deseos de comprarla Casa Palacio de Toro para trasladar la Comunidad (por encontrarse en mal estadola que habita), éste aprobó la proposición de la Rvdma. Madre, pero no como venta,sino arrendado por las circunstancias de la Nación, y ordenó hicieran inmediatamentelas debidas reparaciones en descuento de las 7.500 pesetas que debe la Comunidada la Mitra.

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Después de estudiado mejor el asunto, y a fin de que el Noviciado estécompletamente separado de las profesas, dispuso el Señor Obispo, que solamente setrasladase a dicho Palacio el Noviciado.

A este efecto, la Rvdma. Madre General se personó en el Colegio de Toro paradar principio a lo dispuesto.

Y para que conste levanto la presente que firmo en Zamora, a 30 de julio de1931”.

Meses más tarde queda registrado en Acta, que también se transcribe, lo queconcierne a la determinación tomada por el Gobierno General:

“A 19 de septiembre de 1931, reunido el Consejo en el despacho de la Rvdma.Madre, ésta comunicó que era voluntad del Rvdmo. Prelado quedara definitivamenteel Noviciado en la Casa de Toro y el Postulantado en ésta de Zamora, al frente delcual se acordó poner a la cuarta Consejera, M. Dolores Aguirre.

Y para que conste levanto la presente que firmo en Zamora, a 19 deseptiembre de 1931”

De la reunión del Consejo General, con fecha del 29 de julio de 1933, se tomala cita que a continuación puede leerse:

“Con vista a la prohibición de la enseñanza, y a fin de salvar el Colegio deZamora, (sic) se ha pensado traer el Noviciado de Toro”.

Por lo que atañe a la Casa Fundacional dicen lo siguiente:

“Por motivos de enseñanza y otras circunstancias continuará, por ahora, elNoviciado en Toro, pero no en la Casa Palacio, sino en el Colegio grande hasta queotra cosa no se piense”.

La Segunda República trajo como consecuencia final un levantamiento generalque culminó con la Guerra Civil española. Tiempos difíciles de persecución y muertede tantos hombres, años en los que la Iglesia fue duramente atacada. En el Palaciodel Obispo el Obispado lo abrió para que en él se celebrasen encuentros deformación cristiana donde un pequeño reducto de Acción Católica aglutinaba a gentesde buena voluntad y trataba de fortificar la fe.

3.2 La Congregación vuelve a habitar en el Viejo Palacio Episcopal.

En la década de los cincuenta, en España, transcurridos diez largos añosdespués de la Guerra Civil, tanto los Seminarios Diocesanos como lasCongregaciones Religiosas registraron la mayor afluencia de vocaciones hasta esemomento.

A este respeto y en lo que se refiere al Palacio Episcopal, nada mejor quetranscribir lo que en el acta de reunión de Consejo General, con fecha 7 de noviembrede 1951, puede leerse y transcribo textualmente:

“A siete de Noviembre de mil novecientos cincuenta y uno (7 – 11 – 1951),reunido el Consejo General en el lugar acostumbrado bajo la presidencia de la Rvda.M. General, Madre Cruz Rodríguez Rodríguez, se tomaron los siguientes acuerdos:

1º. En vista del creciente número de aspirantes que solicitan ser admitidas eneste Instituto del Amor de Dios y ante la imposibilidad de poderlo efectuar, por resultar

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pequeña esta casa [la de Zamora], el Consejo General acordó tomar en arriendo elPalacio que el Señor Obispo tiene en la vecina ciudad de Toro, siempre que en Romaconcediesen el competente permiso para erigir en dicho Palacio un nuevo Noviciado.”[…].

Firman el Acta: La Superiora General, M. Cruz Rodríguez. Sor Gloria Nieto. SorLuisa de Prado. Sor Rosalía López y Sor Visitación Romero, Secretaria. Hoy todas yagozan de a vida eterna. Un recuerdo de agradecimiento.

Se volvió a habitar el viejo Palacio episcopal -como Noviciado- durante los años1951 a 1972.

Conseguidos los permisos y autorizaciones necesarias para la erección delNoviciado en Toro, era necesario hacer el nombramiento de la Maestra de Novicias.Leamos lo siguiente:

“A treinta y uno de diciembre de mil novecientos cincuenta y uno, reunido elConsejo General en el lugar acostumbrado, y presidido por la Rvda. M. General sehicieron los nombramientos siguientes:

M. Rosalía López Gelado que cumplió los seis años de Superiora Local en laCasa Noviciado de Zamora, fue nombrada Superiora Local de la Casa de Toro(Zamora).

M. Lourdes Gallego Varona, Vicaria de la casa de Toro (Zamora), fuenombrada Maestra de Novicias de la misma casa.”

En el Capítulo General de 1954 la Madre Lourdes Gallego Varona fue elegida2ª Consejera General, y siguió siendo Maestra de Novicias en Toro hasta el año 1960en que descansó en el Señor.

En Toro seguía el Noviciado, al establecerse la división en Provincias, yprecisamente la primera Casa Provincial de Castilla se estableció en Toro, y empezóa regir el 29 de junio de 1961, lo mismo que el resto de las Provincias.

El 10 de agosto de 1971 era nombrada Maestra de Novicias de la Provincia deCastilla -con residencia en Toro- Sor Consuelo Jiménez López. Es la última Maestrade Novicias en Toro.

El Noviciado salió de Toro, cuyo número había ido disminuyendo; quedaregistrado por el Gobierno de la Provincia de Castilla que en el año de 1971 entraron10 novicias y en 1972 solamente 2, pasando al Noviciado de Zamora a partir de estafecha.

IV. LA CASA CUNA PASA POR DISTINTOS PROPIETARIOS ANTES DECOMPRARLA LA CONGREGACIÓN EN EL AÑO 2000.

La Mitra de Zamora adquirió por compra-venta una casa en la Calle de laReina en Toro (Zamora), el uno de septiembre de 1697 que, a partir de ese momento,pasó a llamarse Palacio del Obispo o Palacio Episcopal. Al Obispado de Zamoraperteneció hasta que en noviembre de 1989 lo vendió por mitad indivisa a DonManuel Palmero Ramos, casado con Doña Carmen Fernández Prieto, y a Don JuanMarván Polo, casado con Doña Basilisa de la Calle Arenas, que pasaron a ser lospropietarios.

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El año 1997, Don Juan Marván Polo y su esposa Doña Basilisa de la CalleArenas se lo vendieron a Don Manuel Palmero Ramos, que fue el propietario a quienla Congregación compró y escrituró esta finca, el día uno de abril de 2000. Eraentonces Superiora General, Sor Carmen Díaz Díaz, quien consiguió primeroinformación para entrar en contacto con los dueños y actuar después con la mayorprudencia y conocimiento.

V. LA CONGREGACIÓN ADQUIERE LA CASA FUNDACIONAL Y ESTABLECEEN ELLA UNA COMUNIDAD

Hoy, es motivo de acción gracias a Dios por todos los pasos para llegar aconseguir el lugar del origen, la Casa Cuna de la Congregación, y agradecer a todaslas Hermanas que con fidelidad trabajaron por conseguir lo que es el “patrimonioespiritual” del Amor de Dios, cuya sensibilidad se ha ido acrecentando con el paso deltiempo.

5.1 Sensibilidad del XII Capítulo General -1996- con respecto a la CasaFundacional.

Por primera vez en un Capítulo General, que precisamente tuvo como lema:“Espiritualidad de las Hermanas del Amor de Dios en Misión” se manifestó el sentir deuna vuelta definitiva a la Casa Cuna de la Congregación. Una cita textual (Libro deActas del Capítulo) puede servir para atestiguarlo:

“La Hermana Carmen Díaz Díaz [reelegida Superiora General] dio lectura auna petición escrita por la Hna. Teresa Vaz para que el Capítulo considerara laposibilidad de comprar el antiguo Palacio Episcopal, la Casa Fundacional de laCongregación. Después de un diálogo sobre la utilidad y el significado afectivo de lamisma, así como de lo que supondría económicamente su mantenimiento, se dejó enmanos del Gobierno General ese estudio y decisión sobre el asunto”.

5.2 El tema de la adquisición de la Casa Cuna a partir de este momento sehace patente.

Todo se había venido gestando poco a poco. El 28 de junio de 1999 fue para laCongregación, además de un día grande, un empuje para llevar a cabo lo que latía enla mayoría de las Hermanas, de un modo especial desde el XII Capítulo General,celebrado en 1996. Día grande aquel 28 de junio de 1999 en que el Santo Padre,Juan Pablo II, promulgó en Roma el Decreto sobre virtudes heroicas de nuestroFundador. Se imponía el “recuperar” la Casa Cuna. A partir de ese momento todo seaceleró.

El equipo de Gobierno General en ese otoño hizo sus ejercicios espirituales,como grupo, en Toro, del 30 deseptiembre al 6 de octubre. Laexperiencia afectiva por la cercaníafísica al lugar que vio nacer a laCongregación, la recientepromulgación de la declaración deheroicidad de virtudes del PadreFundador y un pequeño empujerecibido a través de alguna cartaque llegó al Equipo recordando einsistiendo en este asunto, fueronlos motivos que llevaron elGobierno General a coger elAcuerdo Capitular para trabajarlo ytomar la correspondiente decisión.Y el diálogo abierto sobre el asuntoempezó ya en el viaje de regreso aMadrid.

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Gobierno General 1996-2002. De izda. a dcha. atrás: Hnas.Margarida Martins da Silva, Mª. Amparo Hidalgo Ferreras.

Adelante: Jesusa Folgado Vara, Carmen Díaz Díaz(Superiora General) y Amelia Álvarez Alonso.

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En el Acta 13 de la reunión del Consejo General, con fecha del 18 y 19 dectubre de 1999, se lee:

“Ante la beatificación del Padre Fundador ha surgido la inquietud, entre lasermanas del Consejo General, de comprar la casa fundacional de Toro (sic). Se ven

azones a favor y en contra, pero la mayoría opina que es necesario hacer el estudio yonocer las posibilidades que ofrece.”

Se acordó encargar a un gestor la elaboración de un estudio sobre laosibilidad de compra, restauración y habitabilidad del edificio; para tenerlo presenten la reunión de diciembre y, si se viera entonces oportuno, hacer un proyecto pararesentarlo al CGA de febrero. Fueron designadas dos Hermanas Consejeras paras contactos con el gestor.

.3 La Congregación adquiere la Casa donde nació.

Con fecha 9 de febrero de 2000,scribía la Superiora General y, refiriéndosel CGA, celebrado del 3 al 8 de febrero de000, decía lo siguiente:

“En el mismo Consejo Ampliado, elspíritu del Señor nos llevó a los orígenese la Congregación y en un ambiente deración y discernimiento, concretamosealizar algún gesto, que sea signo de loue vivimos y queremos seguir viviendo, yue al mismo tiempo conmemore elcontecimiento”. [Se refiere a la esperanzaue hubo en la Congregación de la posibleeatificación del Padre en el año 2000]. Por

Fachada de la Casa Fundacional en ruinas vistadesde la huerta

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este motivo incorpora -en su comunicación- lo que consideraron debía concretarse.Se transcribe:

1. “En línea de espiritualidad: Adquisición del Palacio del Obispo -CasaFundacional- en Toro.

Esta Casa es el lugar primero de la Congregación, toda ella habitada por lapresencia del Padre y de las primeras Hermanas. Casa que es como un librodonde se pueden leer capítulos de nuestra Historia. Promesas y desvíos, gozos yheroísmo, frutos y crisis, pero sobre todo, donde parece aún oírse palpitar elcorazón de nuestro Padre Fundador lleno de amor y de esperanza.

Por eso, después de un clarificador diálogo sobre los fines de la misma, elConsejo General Ampliado dio su adhesión a la propuesta del Gobierno Generalde adquisición de la Casa Fundacional para Casa de Espiritualidadcongregacional, lugar de oración y de difusión de la vida y obra de nuestroVenerable Fundador. Las sugerencias en orden a la concreción de este proyectoson las siguientes:

Se sitúa esta acción, como gesto de encuentro con los orígenes en fidelidadrenovada.

Es una respuesta a la necesidad congregacional de un centro internacional,donde las Hermanas puedan permanecer unos días para rezar, descansar,reflexionar y encontrarse con sus raíces.

Casa abierta a grupos de seglares de nuestras obras y a grupos ajenos a laCongregación.

Con una Comunidad autónoma de la Comunidad del Colegio (sic).

En ella se pueden desarrollar, a tiempo total o parcial, los cursos dePreparación de los Votos Perpetuos, de Renovación, de Experiencia “Amorde Dios” u otros similares.

Desde ella ofrecer a la Congregación una programación anual deactividades, acciones, en línea de profundización de la espiritualidad:retiros, cursillos, etc. Para la realización de este programa se podría contarcon Hermanas de otras comunidades que pudieran ofrecer susaportaciones en tiempos compatibles con su misión principal.

2. “En línea de solidaridad” […]

Siguiendo con el tema de la Casa Fundacional, en el Acta 2/2000, con fecha 10de febrero de 2000, la Secretaria General escribe:

“En esta fecha se presentó la propuesta de compra de la Casa Fundacional,antiguo Palacio del Obispado en Toro,… El Consejo General aprobó la compra”.

En el Acta 3/2000 de las reuniones del Consejo, de 18 y 19 de febrero de 2000,se dice:

“Se informó que se había dado el adelanto para la compra de la CasaFundacional y se leyó el contrato de compra. Próximamente la Superiora Generalfirmará las Escrituras de compra”.

En el 1 de abril de 2000, Acta 5/2000, refleja lo siguiente:

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“Sor Carmen [Díaz Díaz] informó que ya se tiene la llave y las Escrituras por loque se puede empezar a dar los pasos de cara a la construcción”.

En el párrafo siguiente escribe la Secretaria: “Se le pidió a Sor Jesusa [FolgadoVara –entonces Administradora General-] que asumiera el proceso de reconstrucciónde la Casa, a lo cual ella asintió, y que comenzara a dar los pasos, buscandoarquitecto y haciendo un primer estudio”.

Hacen constar en el Acta, a la que nos estamos refiriendo- “Se habló de quees importante tener en cuenta el objetivo principal de esta casa: ser memoria históricade la Congregación, por lo que conviene restaurar lo más posible el edificio antiguo,en lo que se refiere a exteriores. Incluso en el interior que la construcción sea conmateriales apropiados a la austeridad del mismo edificio”.

Este asunto ocupó al Gobierno General en sucesivas reuniones, así constacon fechas del 1 y 2 de mayo de 2000, Acta 6/2000:

“Sor Jesusa [Folgado Vara] informó que, después de hacer el estudiocorrespondiente, el arquitecto que se encargará de la obra es Don Manuel CalveteLlamas. Ya le acompañó a Toro para darle las primeras informaciones y continuará elproceso para poder elaborar el proyecto de reconstrucción”.

El año 2000 fue vivido en la Congregación con mucha ilusión. De un modo uotro encontrábamos esta expresión: “En camino hacia la beatificación del PadreFundador”. En el Consejo General Ampliado de 2000 trabajaron este tema y cuántose ha referido respecto a la Casa Fundacional.

5.4 Los planos de la Casa Fundacional van tomando forma.

Con fecha 27 y 28 de noviembre de 2000, en el Acta de reunión del ConsejoGeneral hay ya una mayor concreción y por primera vez hacen referencia a losplanos:

“Acta 13/2000 -Planos de la Casa Fundacional-. Se vieron los planos de laCasa Fundacional que ya están tomando forma definitiva para ser presentados alAyuntamiento y solicitar los respectivos permisos”.

Esta obra contemplaba, por un lado, la rehabilitación total del edificiorecientemente adquirido y, además, la construcción en la segunda planta del Palaciodel Marqués de Alcañices, en zonas que fueron dormitorios, de 17 habitaciones queservirían de refuerzo a la capacidad de la misma Casa Fundacional.

Con antelación se habían hecho obras de reparación en la sala Museo y ante-sala del mismo así como la restauración de las tallas de madera que ahí seencontraban. Y, con cariño filial, un pequeño equipo de Hermanas dedicaron variosaños sus tiempos de vacaciones escolares y otros tiempos libres a una reorganizacióntotal de la Exposición Permanente sobre el Padre Fundador que se encuentra enestos locales.

En el año 2001, días 25 y 26 de octubre, Acta 7/2001, deja consignado laSecretaria General lo que aquí se transcribe:

“Sor Carmen Díaz también comunicó que en Zamora había hablado con elSeñor Obispo [Don Casimiro López Llorente] para comunicarle el proyecto que se

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tenía sobre la Casa Fundacional de Toro. El Sr. Obispo lo vio bien y pidió que sehicieran los trámites por escrito.”

Muchos son los pasos que tienen que dar las HH. delGobierno General por los distintos organismos con los quehay que contar, así como los riesgos que se han de correr.Van tratando de afrontarlo con valentía y decisión paralograr la reestructuración y rehabilitación del Palacio delObispo que llevará a muchos experimentar de cerca el“origen”.

5.5 Puesta a punto. Reestructuración y habitabilidad de la Casa Fundacional.

El pueblo de Toro es muy sensible a cuanto se hace o deshace en suPatrimonio Artístico. El martes, 2 de abril de 2002, en el periódico de Zamora: LaOpinión, aparecía un artículo que llevaba por título:

“El Palacio del Obispo recupera su esplendor. La Congregación del Amor deDios rehabilitará el edificio del siglo XII tras la autorización de la Comisión Provincialde Urbanismo”.

Con las iniciales M. B. se desarrollaba el artículo del que se reproducenliteralmente algunos párrafos en los que puede leerse:

“La Comisión Provincial de Patrimonio ha autorizado la rehabilitación integral yla reforma de la fachada del antiguo Palacio Episcopal de Toro, más conocido como elPalacio del Obispo, un edificio tosco, pero que testimonia la importancia del ricoarcedianazgo de la ciudad en el siglo XII, después de haber estado bajo la jurisdicciónepiscopal de Astorga y de León. El inmueble, situado en la Plaza de Santo Domingo,pertenece al Gobierno Central de la Congregación de monjas del Amor de Dios, que

previamente lo adquirió a un particular de laciudad, quien a su vez lo compró alObispado (sic).

El edificio sólo conserva de suestructura original la fachada, por lo que suinterior deberá ser restaurado en sutotalidad cuando se lleven a cabo las obrasde rehabilitación. Sin embargo, para laCongregación Religiosa tiene un significadoespecial, puesto que en 1864 el PadreJerónimo Usera y Alarcón fundó en él elInstituto de las Religiosas del Amor deDios”.

[…] “En el año 1952 quedó como Noviciado, llegando a albergar hasta 80novicias, aunque dejó de cumplir este cometido cuando las aspirantes a monjas setrasladaron a Zamora. Posteriormente acogió las clases de Formación Profesional delInstituto González, durante el tiempo que duraron las obras de reforma de su edificio,y también fue la Sede de la Acción Católica en la época franquista”.

[…] “En cuanto a la historia del Palacio Episcopal o del Obispo, se sabe que ensus orígenes en él estuvo preso de su madre y de la nobleza el rey Don Pedro I.

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Mucho después, en 1697, ya consta que concretamente el 1 de septiembre la Mitra deZamora compró una casa en la Calle de la Reina en que al presente está el PalacioEpiscopal, como recuerda el historiador local, Don José Navarro Talegón en su“Catálogo monumental de Toro y su Alfoz”.

Las obrasestaban en cursocuando se celebró el XIIICapítulo General, juliode 2002. La clausura delmismo se dio en Toro,en la Cripta de la Iglesia,junto a la tumba delPadre Usera. Y, comono podía dejar de ser,todas las capitulares seacercaron a la CasaFundacional con unavisita guiada, entrehierros y cemento, a susinstalaciones enconstrucción.

A partir de lacelebración del CapítuloGeneral de 2002, se

hizo cargo del acompañamiento de la obra la nueva Administradora General, Hna.Amparo Hidalgo. Y la obra siguió adelante sin ninguna demora ni cambio sustancial.

El inicio de la obra había sido el 26 de octubre de 2001 y su final se dio el 9 deseptiembre de 2003. La obra fue realizada bajo el título: Reestructuración yRehabilitación integral del Palacio del Obispo y Núcleo vertical de comunicación conel Palacio Marqués de Alcañices, para Casa de Espiritualidad, Convivencias yVivencias Religiosas. Asumió la responsabilidad de la misma la EmpresaConstrucciones Turonesas, S.L., de Benito González Pereira. Con fecha de 5 dediciembre de 2003, el arquitecto Manuel Calvete Llamas, Autor del proyecto y Directorde las obras, expide y firma el Certificado Final de Obras, a efectos de tramitación deLicencia de Actividad a que hubiera lugar. La Licencia final de obra y primeraocupación de este proyecto de Rehabilitación y Restauración integral fue dada por elExcmo. Ayuntamiento de Toro el 24 de junio de 2004.

5.6 El Gobierno General determina cómo se ha de regir la primera Comunidad.

Si por lo que atañe a la reestructuración del edificio hemos visto el proceso deelaboración del proyecto, la cantidad de asesoramientos y organismos queintervinieron hasta llegar al final, ahora debemos poner la mente y el corazón en loque fue el discernimiento para establecer con claridad cómo debía estar regida laPrimera Comunidad porque estaba determinada para configurar los “cimientos” delobjetivo que se buscaba.

El Gobierno General dice a este respecto y presenta al Consejo GeneralAmpliado (octubre de 2003) en un pequeño documento lo siguiente:

Visitando las obras en 2002. De izda. a dcha. Hnas. Ana María Lorenzo,Mercedes Martín Becerril y Amparo Hidalgo

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“La pequeña Comunidad, dependiente del Gobierno General, está constituida.La actividad va a empezar, aunque en los primeros momentos de una manera mássencilla. Se pretende en un futuro poder ofrecer desde ella una programación queresponda a las finalidades apuntadas”.

Es hora de definir algunos aspectos que conciernen a su funcionamientoordinario y lo queremos comentar en el Consejo General Ampliado, porque es unaCasa al servicio de toda la Congregación.

Capacidad y posibilidades. La parte de la Casa reservada a la Comunidaddispone de:

- ocho habitaciones,- una sala comedor multiuso,- una sala de reuniones y trabajo,- los espacios de apoyo.

La parte reservada a grupos, internos o externos, tiene:- 17 habitaciones dobles en el otro Palacio,- 15 habitaciones en la casa,- dos pequeñas salitas de acogida y atención personalizada,- una salita de apoyo informático,- dos salas para conferencias con capacidad para 32 y 85 personas- una sala de reuniones,- un espacio polivalente que puede servir de dormitorio para grupos juveniles,- un comedor.

Como espacios comunes a la Comunidad y a los grupos están la Capilla, lacocina, la Cripta, donde están los Restos mortales del Venerable P. Usera y el Museo(en fase de instalación). “Exposición permanente”.

Verdadera expresión de universalidad y entrañable acogida es la respuestamanifestada con los hechos.

“Colaboración de las Provincias, Comunidades y Hermanas:- Provincia del Oeste: muebles de la Comunidad de la Residencia de Oviedo.- Provincia del Este: muebles antiguos provenientes de las Comunidades de

Roa y de Burlada.- Provincia Portuguesa: la loza y cristalería nueva.- Provincia de Alemania: muebles antiguos.- Comunidad de la Residencia de Zamora: muebles antiguos y otros (sic)- Hermana Purificación Martín: Diseño de la Capilla.- Comunidad de Oporto: sabanilla”.

Cierran este apartado, poniendo puntos suspensivos.

Al igual que cuando se abre una casa nueva, por muchos que sean los“regalos”, siempre hay más necesidades, así ocurre en nuestra Casa Fundacional ypor eso añaden en esta -no corta enumeración- lo que a continuación podemosconocer.

“Cosas que aún hacen falta y por eso se pueden ofrecer:- Mantas.- Ornamentos.- Vasos sagrados.- Plantas de interior”.

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Aquí ponen punto, pero no final.

Con sentido de “pobreza” y criterio de corresponsabilidad, seguidamenteincluyen lo siguiente apartado

“UTILIZACIÓN Y SISTEMA DE FINANCIACIÓN. Esta casa es de todas nosotras. Paraser utilizada a nivel personal y de grupos. Para su utilización deben ser contactadaslas Hermanas de la Comunidad, quienes llevarán el control de su agenda.

Para grupos de fuera y de nuestras obras se harán precios asequibles quefaciliten su utilización y cubran los gastos.

En relación a las Hermanas, a nivel individual o grupal, no queremos que suutilización pueda estar condicionada a precios, por lo que no los habrá. Que todas lasHermanas de cualquier Provincia o Viceprovincia se sientan totalmente libres paravenir a esta casa suya.

Otro paso importante para la organización y buen funcionamiento de estanueva Casa Religiosa y su misión: el diálogo con la Provincia del Oeste en cuanto altraslado de dependencias del Palacio Marqués de Alcañices de la responsabilidad deuna comunidad para la otra (toda la planta de las 17 habitaciones, la sala y ante-saladel Museo, la Iglesia y la Cripta); y, teniendo en cuenta el inicio de funcionamiento dela Casa Fundacional como Casa de Espiritualidad, establecer algunos criterios paramantener el buen funcionamiento de ambas casas sin perjudicar la relación de familiaexistente. Este diálogo se dio en el contexto de una reunión de miembros delGobierno General con el equipo de gobierno de la Provincia del Oeste el 15 de enerode 2004. A partir de esta reunión fue elaborado un pequeño documento con lasdecisiones tomadas para conocimiento de las dos comunidades y su aplicación.

En la Memoria del sexenio 2002 al 2008, refiriéndose a las obras realizadas,decía la Superiora General:

[…] “Toro, “Casa Fundacional”. Continuación de la obra de reconstrucción yrehabilitación, iniciada en el sexenio anterior. Acompañamiento por parte de laAdministradora General hasta la instalación de la comunidad e inicio de la obra-misiónen el último trimestre de 2003”.

5.7 El CGA visita la Casa Fundacional, 24 de octubre de 2003.

Como era natural, la primera visita “oficial” a la Casa Fundacional la hacía elConsejo General Ampliado,representación de toda laCongregación. La visita estuvoprogramada desde Madrid –Casa Generalicia- a Toro,como punto de mira yencuentro con los orígenes.

Dos detalles de laprogramación de esta visita:

Las Hermanas ahípresentes estamparon su firmaen una piedra que puedeverse –hoy 2011- colocada en

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la parte baja de una ventana del patio interior. El significado de esta piedra estáfundado en Cristo –roca firme- sobre la que se ha intentado construir esta Casa en laque, el 24 de octubre de 2003, el CGA se ha comprometido a sostenerla para quecumpla los fines para los que ha sido restaurada.

De esta visita resultó un cambio bonito en el destino de los espacios de la CasaFundacional: Una de las Superioras Mayores echó de menos un espacio de Bibliotecadonde se recogiera principalmente los libros con relación a la espiritualidadcongregacional. Fue así que, considerando esta sugerencia, se destinó y preparópara este fin el que inicialmente fuera pensado como espacio polivalente que podíaservir de dormitorio para grupos juveniles, pues los jóvenes pueden utilizar lasmismas habitaciones que los adultos.

En principio el Gobierno General había pensado que se podría celebrar en esemomento la inauguración, pero no pudo ser porque las obras se habían retrasado.Causa que motivó encontrar otro momento. La fecha que fijaron fue determinada conbuen criterio, eligieron el 15 de mayo de 2004.

5.8 Bendición de la Casa, 15 de mayo de 2004.

El día 15 de mayo era el día destinado para labendición de la casa y solemne inauguración. Fueelegido este día por ser el sábado más cercano aldía 17, fecha del aniversario de la muerte del P.Usera. Con anticipación se había concretado conel Señor Obispo de Zamora, D. Casimiro LópezLlorente, a fin de asegurar su presencia, que erasignificativa por la vinculación de la Congregacióncon el Obispado de Zamora, y en este caso seunía también la relación con la CASAFUNDACIONAL.

La fiesta, dentro de su sencillez, se fuepreparando con esmero: invitaciones a personassignificativas, tales como sacerdotes, CorporaciónMunicipal de Toro, responsables en el diseño yconstrucción de la casa, trabajadores, claustro deprofesores y Asociación de Padres del Colegio“Amor de Dios” de Toro, Hermanas de las tresprovincias de la Península Ibérica, etc. En total sejuntaron casi doscientas personas.

En el programa -establecido con tal motivo-aparecía un recuerdo de gratitud por parte del

Gobierno General, elegido en el XIII Capítulo General de 2002.

“RECONOCIMIENTOS- Diócesis de Zamora.- Ciudad de Toro.- D. Manuel Calvete, arquitecto.- D. Benito Gonzáles, constructor.

Gobierno General 2002-2008. De izda. adcha. Hnas. Concepción Torres Antona,Mercedes Martín Becerril, MargaridaMartins da Silva (Superiora General),Concepción Álvarez Rodríguez, Mª.Amparo Hidalgo Ferreras.

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- Hermana M.ª del Carmen Díaz, rad. (La anterior Superiora General, a travésde la cual la Congregación efectuó la compra de la Casa-Fundacional)

- Hermana Jesusa Folgado, rad (Administradora General en el Gobiernoanterior)

- Comunidad Amor de Dios del Colegio de Toro.”

El centro de la celebración fue laEUCARISTÍA de acción de gracias, presididapor el Señor Obispo de Zamora. Se celebró conla alegría de toda la Congregación -allírepresentada- y en todas las comunidadessentida en unidad y concordia.

Trascribimos la monición de entrada querecoge el sentido de la misma:

“Hemos llegado de muchos y variadoslugares. Cada uno desde nuestra realidadconcreta, pero todos albergamos en el corazón

–en este momento- los mismos sentimientos de gozo, de paz, de comunión, deagradecimiento, de alabanza.

Llegar a Toro, llegar a la Casa Fundacional, tiene un significado profundo, rico ysobrecogedor. Algo misterioso y sagrado advertimos en este lugar. Dios está aquí yse nos revela de manera extraordinaria. Venimos a las raíces, a las fuentes, al origen.Aquí el Espíritu de Dios actuó de forma extraordinaria en Jerónimo Mariano Usera yenriqueció a la Iglesia con un nuevo Carisma. El carisma Amor de Dios.

Queremos beber y saciar nuestra sed en esta fuente. Abrirnos para recibir labendición del Señor y pedirle que bendiga cada rincón de esta Casa para que en ellase respire, se palpe, se viva y se irradie la Espiritualidad y el Carisma Amor de Dios.Que, desde aquí, salgamos invitados, urgidos y enviados a ser testigos y mensajerosdel Amor de Dios en y para nuestro mundo.

El Señor nos reúne, nos convoca, nos llama. Quiere partir con nosotros y paranosotros su Palabra, su Pan, su Fraternidad. Somos y nos sentimos comunidad,Pueblo, “Familia Amor de Dios”. Respondemos a esta cita y nos disponemos acelebrar la Eucaristía, la Acción de Gracias al Padre en nombre de Jesucristo.Abrimos nuestro corazón a la alabanza, a la gratitud, al Amor de Dios”.

El Señor Obispo centró la homilía en el Carisma como consagradas en el Amorde Dios. Invitó con apremio a las Religiosas a vivir la vocación, al seguimiento radicalde Jesús, y desarrolló las líneas básicas de ese seguimiento. Además destacó laprofunda implicación que el Obispo de Zamora, desde el principio, ha tenido en la vidade la Congregación.

La presencia de las junioras facilitó la expresividad de la celebración con dosdanzas: una africana y otra latinoamericana, en la introducción de la Palabra ypresentación de ofrendas.

Al finalizar la Eucaristía se invitó a todos los asistentes a pasar al claustro paracontinuar la celebración. Y con la solemnidad y sobriedad requeridas se procedió, alterminar la Eucaristía, a la Bendición de las estancias de la Casa por el Señor Obispode Zamora, D. Casimiro López, recorriendo todas las dependencias; le acompañarontodos los presentes, cantando y alabando al Señor.

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A continuación el Mensaje de la Superiora General. Se transcribe lo que estáescrito:

“La Hna. Margarida Martins da Silva, Superiora General de las Hermanas delAmor de Dios, nos ofrece su mensaje que realza la importancia que tiene paranosotras el acontecimiento que estamos celebrando, a la vez que nos invita a venir aesta Casa Fundacional a beber de las fuentes del Carisma y a responder con todafidelidad a nuestra vocación de Hermanas del Amor de Dios”.

Se añade: “Pasamos al capítulo de reconocimientos. Muchos han sido los quehan hecho posible que hoy estemoscelebrando la reapertura de la CasaFundacional. A todos ellos les damoslas más sinceras gracias. Tambiénhay instituciones y personas cuyaacción ha sido decisiva para lograrlo.A ellas queremos hacerles unreconocimiento justo y agradecido. LaSuperiora General y Hermanas delConsejo iban entregando la placaconmemorativa.

Hoy queremos decir gracias anuestra querida Diócesis de Zamora,dignamente representada por su

Obispo, D. Casimiro López Llorente. Ella nos acogió como Instituto, nos acompañó enlas personas de sus Obispos, ha proporcionado a la Congregación muchas Hermanasextendidas por 19 países y nos ha animado en la reapertura de nuestra casafundacional. Muchas gracias.

Toro: A la ciudad que nos acogió en los orígenes y colaboró en tantas ocasionescon nosotras. Hoy le queremos decir gracias por acoger a una nueva comunidad deHermanas del Amor de Dios y por toda la colaboración prestada en la restauración dela casa” [....].

De una manera más explícita debe incorporarse el agradecimiento a la anteriorSuperiora General, y así quedó escrito: “Hna. M.ª del Carmen Díaz Díaz: Por tu amora la Congregación y al Padre Fundador que te llevó a comprender la importanciahistórica y afectiva de recuperar esta casa. Porque has sido una persona decisiva, ala hora de hacer realidad la restauración de nuestra Casa Fundacional; en nombre detodas las Hermanas de la Congregación, gracias.”

De igual modo transcribo lo siguiente: “Sor Jesusa Folgado Vara, nada hubierasido posible de lo que ahora vemos, sin contar con tu dedicación y fidelidad en larealización de esta obra a ti confiada. Sólo tú sabes cuánto esfuerzo, cuántoscálculos, cuántas rectificaciones y adaptaciones para llegar a lo que ahora existe. LaCongregación siempre agradecerá el gran empeño que has puesto en esta obra; ennombre de todas, gracias”.

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5.9 Recordando fechas claves que llevaron a la consecución del Proyecto de laCasa Fundacional.

El 27 de Diciembre de 2002, la Superiora General, Hna. Margarida Martins daSilva, solicitó por escrito al Señor Obispo de Zamora el consentimiento para erigir laCasa Religiosa en el antiguo Palacio del Obispo –propiedad de la Congregación porcompra hecha con anterioridad-. Edificio que sigue restaurándose en el momento enque la Superiora General solicita este consentimiento al Prelado de la Diócesis.

El 14 de febrero de 2003, el Señor Obispo de Zamora, Don Casimiro LópezLlorente, concedió por escrito el consentimiento solicitado por la Superiora Generalpara erigir la Casa Religiosa en Toro.

El 18 de agosto de 2003, llegaron a Toro: la hermana Amparo HidalgoFerreras, Vicaria y Administradora General –en representación de la Congregación alfrente de la rehabilitación de las obras de esta Casa Fundacional– la cual permanecióunos días en Toro, y regresó después a la Casa Generalicia. Con la Vicaria Generalllegaron también: la hermana Amelia Álvarez Alonso y la hermana Rocío AlonsoPrieto, estas dos hermanas estuvieron viviendo unos días con la Comunidad delColegio que les ofreció toda clase de atenciones. Durante ese tiempo fueronlimpiando las habitaciones del tercer piso de la zona del Palacio del Marqués deAlcañices, que ya estaban hechas desde hacía dos años. Aprovecharon también parair conociendo el pueblo, participando en sus fiestas, especialmente en la fiesta de laVirgen del Canto, toda una tradición toresana.

El día 8 de septiembre de 2003, llegó la hermana Encarnación FernándezClemente con la que se completó la Comunidad aquí destinada. Acompañaban a SorEncarnación Fernández: Sor Amparo Hidalgo, Vicaria y Administradora General, quecontinuó viniendo varias veces, para impulsar el final de las obras, y la señoraFrancisca Clemente –madre de Sor Encarnación- que permaneció unos meses en laCasa Fundacional con las hermanas, porque en ese tiempo era atendida por sushijos, distribuyendo el año entre todos, y en ese momento le correspondía a SorEncarnación.

Este día, 8 de septiembre de 2003 -fiesta de la Virgen- durmieron por primeravez en esta Casa las Hermanas enviadas para constituir la Comunidad de la CASAFUNDACIONAL. Así consta en Acta en la que se dice entre otras cosas.

[…] “La Comunidad está formada por las Hermanas: Amelia Álvarez Alonso,Encarnación Fernández Clemente y Rocío Alonso Prieto. Las dos primeras procedende la Comunidad de la Casa General, C/ Asura 90. Madrid. La Hna. Rocío AlonsoPrieto procede de la Comunidad de Roma”.

Si en cuanto a lo material se ha tratado de documentar con la mayor precisiónposible, no ha de pasar por alto cuanto constituye la fidelidad a lo establecido por laIglesia, de la que nuestro Padre Fundador fue siempre muy celoso, en todo -hijo fiel ygran defensor-. Prueba de ello es que nunca dio un paso en la Fundación sin contarcon el Obispo de la Diócesis a quien con humildad y prudencia sometía sus“decisiones”.

El 15 de septiembre de 2003 –ERECCIÓN CANÓNICA-. La HermanaMargarida Martins da Silva, Superiora General, de acuerdo con lo establecido en elDerecho Canónico y el Derecho Propio, expide el decreto de erección de la CasaReligiosa perteneciente a las Hermanas del Amor de Dios en Toro, Plaza Santo

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Domingo, 4. En este decreto expresa claramente la finalidad de esta Casa y dice: “Hade ser un Centro de Espiritualidad, al servicio de la Congregación y de la Iglesia”.

Durante el mes de septiembre la hermana Encarnación Fernández Clementese hizo cargo de la cocina de la Comunidad del Colegio, ofreciéndoles un gran apoyo.Siguieron comiendo y rezando juntas las dos comunidades, durante algún tiempo enla Comunidad del Colegio.

A partir del 15 de octubre de 2003, la Comunidad de la Casa Fundacionalempezó a hacer la comida en esta casa; pero a lo largo de su existencia siguenparticipando con las Hermanas de la Comunidad del Colegio diariamente en Laudes yla Eucaristía.

El 17 de octubre de 2003, celebraron la entrega de las llaves de la Casa porparte de las personas encargadas de la construcción, aunque los obreros continuarontrabajando en la casa.

El día 24 de octubre de 2003, se les entregó una carta a las Hermanas de laComunidad de la CASA FUNDACIONAL en la que se les comunicaba la convocatoriadel Capítulo Local entre los días 8 al 10 de noviembre de 2003 y se les decía queestarían acompañadas por la Superiora General.

El 29 de octubre de 2003, por primera vez se celebró la Eucaristía en la nuevaCapilla y quedó el Santísimo en la Comunidad. La Superiora General había pedido alSeñor Obispo de Zamora, Don Casimiro López, poder contar con la presenciaeucarística del Señor en la Capilla. El Prelado respondió, enviando a Don NarcisoLorenzo Leal, Delegado de Liturgia, para comprobar si reunía las condicionescanónicas. Ese mismo día celebraron la oración de Vísperas y la Eucaristía,precediendo la bendición del Altar. El acto resultó entrañable, profundamente vivido.Acompañaron a la Comunidad de esta casa la mayor parte de las hermanas de laComunidad del Colegio.

El 30 de octubre de 2003, el Obispo de Zamora, que se encontraba realizandola Visita Canónica en Toro, tenía previsto el encuentro en el Colegio Amor de Dios,como quiera que, cuando se programó en la Diócesis esta visita, no estabaestablecida la Comunidad de la Casa Fundacional, no se tuvo en cuenta para incluirun espacio de acercamiento a esta casa religiosa. Al informarle las Hermanas delColegio de la presencia de la nueva Comunidad, manifestó el Señor Obispo el deseode conocer a las Hermanas y la casa. Por este motivo se acercó, saludó a cada unade las Hermanas y recorrió con ellas todas las dependencias. Expresó la satisfacciónde contar en la Diócesis con una casa de estas características para el servicio de laIglesia. Les deseó toda clase de bendiciones, pidiendo al Señor que esta casa sea unespacio de Evangelización.

Había quedado ya constituida la primera Comunidad de la CASAFUNDACIONAL como se ha reflejado en la referencia al Acta Nº 1, antes mencionada(8 de septiembre de dos mil tres). Ahora, siguiendo el Derecho Propio, era necesariola elección o nombramiento de la Superiora Local. Con este fin la Superiora Generalse hizo presente, el 9 de noviembre de 2003, para presidir la celebración del primerCapítulo Local. Por unanimidad votaron que la Superiora fuera nombrada por laSuperiora General.

Terminada la sesión del Capítulo Local, la Superiora General les ofrecióinformación sobre temas relacionados con la Casa. Se copia lo que la Secretaria de laComunidad deja consignado en acta:

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- “Mientras no esté terminada la obra y se hayan conseguido los permisosciviles la Hermana Amparo Hidalgo Ferreras seguirá acompañando a laComunidad.

- Hasta final de año la contabilidad de la casa será integrada en la delGobierno General.

- En CGA han decidido aumentar un 2% la aportación de los GruposCongregacionales al erario general, cantidad que será dedicada a lafinanciación de esta casa, de modo que no se cobre nada a las Hermanaspor su estancia en la casa. Al cabo de un año se evaluará si con estacantidad se puede subvenir a los costos.

- Se hará un estudio oportuno para determinar el precio que se cobrará alas personas de fuera. Para grupos de la Congregación: Profesores,Animadores, etc. se pondrá un precio especial. Se trata de cubrir costes, node amortizar la obra, estos costes son una inversión congregacional.

- Se supone que vamos a necesitar de personas contratadas paracolaborar en el trabajo. Se irá realizando en la medida necesaria.

- También nos informó de la fecha prevista para la inauguración de la Casa,el 15 de mayo, y el traslado de los Restos de Sor Rocío a la nuevaCapilla para finales de febrero o primeros de marzo” [...].

Una fecha digna de realce: La inscripción de la Casa Fundacional en elRegistro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia. Había sido solicitado porla Superiora General el 22 de octubre de 2003 y fue realizada el 18 de noviembre delmismo año. Es su reconocimiento civil oficial como Casa Religiosa.

De nuevo la Superiora General, Hermana Margarida Martins da Silva, se hizopresente en esta Comunidad, el día siete de diciembre de 2003. En el Libro de actasde la Comunidad, Acta Nº 2, se lee lo que copio literalmente:

[...] “Esta reunión tenía por objetivo comunicar el nombramiento de la SuperioraLocal y otros cargos en la comunidad. La Hna. Superiora General nos comunicó quehabía sido nombrada como Superiora Local la Hna. Rocío Alonso Prieto. La Hna.Encarnación Fernández Clemente encargada de la cocina y administración. La Hna.Amelia Álvarez Alonso encargada de la acogida de los grupos que vengan a la Casa.La Hna. Rocío quedó encargada de la organización de la casa, de modo que puedaofrecer una atención de calidad a las personas que vengan.

En esta reunión también se hizo la elección de Vicaria, que recayó en la Hna.Amelia Álvarez Alonso. También fue designada como Secretaria” [...].

La Superiora General dialogó con la Comunidad y les orientó en los comienzosde una andadura muy importante para la Congregación. Al final del Acta –ya citada-escribe la Hna. Secretaria, recogiendo el sentido de toda la reunión, presidida por laSuperiora General, Hna. Margarida Martins da Silva.

[…] “Una de las mejores cosas que podemos ofrecer a las personas que pasenpor aquí es que nos vean rezar, y sobre todo que nos vean unidas”.

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VI. LOS RESTOS DE N. V. P. F. REPOSAN EN LA CASA FUNDACIONALDESPUÉS DE UN LARGO RECORRIDO.

Los Restos del Venerable Padre Jerónimo Mariano Usera han pasado de Cubaa España y, en España, al lugar que vio nacer la congregación.

Con la Madre Luisa de la Cruz Marqués Falcón vamos a recorrer el camino –agradeciendo su gesto y entereza- nada fácil en aquellos tiempos.

6.1 En el Cementerio de Colón –La Habana- desde 1891 a 1925.

El 17 de mayo de 1891, a las 7 de la mañana, murió en La Habana (Cuba) DonJerónimo Mariano Usera. Su cuerpo fue enterrado al día siguiente, 18 de mayo, en elCementerio de Colón, según el Plano General de la Necrópolis “Cristóbal Colón”.Rectángulo número 8. En la propiedad del Cabildo Catedralicio. En este lugarpermanecieron sus Restos hasta el año 1925, que fueron traídos a España.

En el AGAD se conservan dos certificaciones que aparecen transcritas en losAnales, páginas 115 - 118. Las dos fueron solicitadas por la Superiora General –Madre Luisa de la Cruz Marqués Falcón–, en 1925, para trasladar los Restos delPadre Fundador desde La Habana a España.

La primera, referente a la defunción, procede del Consulado General deEspaña en la República de Cuba, tiene la fecha del 24 de abril de 1925; atestiguadoeste certificado por Don Joaquín Iturralde López Silverio, Cónsul General, asistido porDon José Marín y García, Vicecónsul Secretario; en él consta la transcripción de lapartida de defunción, expedida por Dr. Luis de Arango y Arango, Juez Municipal delOeste de La Habana y Encargado del Registro Civil.

La segunda certificación se refiere al enterramiento del Venerable P. Fundador,y dice así:

“Dr. Felipe Augusto Caballero y Hernández, Capellán de la Necrópolis –Cristóbal Colón- Certifico:

Que, en el libro número cuarenta y siete de inhumaciones de este Cementeriode Colón, en el folio trescientos cincuenta y cuatro, existe una partida señalada con el

número marginal mil quinientos doce,que copiada literalmente dice: “Endieciocho de mayo de mil ochocientosnoventa y un años, se dio sepultura eneste Cementerio de Colón en el CuartelN. O. cuadro número 8, zona de primeraBª (sic) número siete, de la propiedaddel Cabildo Catedral, por orden del Ilmo.y Rdmo. Obispo Diocesano al cadáverdel Excmo. e Ilmo. Sr. Don JerónimoUsera y Alarcón, Deán de la SantaIglesia Catedral” […].

Está expedida está expedida el27 de abril de 1925.

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6.2 Del Cementerio de Colón (La Habana) a España – 30 de abril a 11 de mayode 1925

El 24 de agosto de 1924, salió del Puerto de Barcelona la Madre Luisa de laCruz Marqués Falcón –Superiora General-, acompañada por Sor Inés Martín, SorPureza Fernández y Sor Matilde Castaño, destinadas estas tres Hermanas a la Isla deCuba. La finalidad del viaje tenía un doble objetivo: Hacer la Visita Canónica y reforzarel personal de Cuba con las tres Hermanas destinadas a la Isla. El 13 de septiembrede 1924, llegó a La Habana la Madre Luisa de la Cruz con las tres Hermanas yareferidas.

Con la debida antelación se había solicitado la autorización gubernativa deMadrid, pero llegó el día 18 de abril de 1925, fecha en que el barco - Vapor de Cuba-tenía que salir de La Habana, y en esa fecha no había llegado la autorización delMinisterio de la Gobernación de Madrid. Por causas ajenas a la voluntad de las Madresel Barco se retrasó hasta el 30 de abril. Entre tanto la dificultad quedó allanada, puestoque el 25 de abril llegó a Madrid, procedente del Consulado General de España en LaHabana, una real orden cablegráfica, que transcrita literalmente dice así:

“Consulado General de España en La Habana. El infrascrito Cónsul General deEspaña en la República de Cuba con residencia en La Habana, Certifica:

Que entre los documentos que existen en esta Chancillería aparece uncablegrama que copiado a la letra dice:

“S L .26 Radio Madrid 36-3 P.

El Subsecretario del Ministerio de Gobernación al Cónsul de España en LaHabana. Previo cumplimiento disposiciones sanitarias vigentes y demás preceptoslegales, autorizo traslado restos mortales de Jerónimo Usera Alarcón desde estepuerto a Vigo”.

Sigue diciendo: “Y para que conste y a instancia de parte interesada expido elpresente en La Habana a veintisiete de abril de mil novecientos veinticinco (27 – 04 –1925) Firmado, Joaquín Iturralde López Silverio”.

Además de esta copia sellada, que la Rda. Madre Superiora General exhibirápara los efectos de traslado ante el agente de la Compañía Trasatlántica francesa enLa Habana, y ante el inspector de Aduanas en Vigo, nuestro Cónsul en la capitalcubana dirigió al Gobernador de Pontevedra la comunicación siguiente:

“Consulado General de España en la República de Cuba.

Registro general de salida –abril 26 –1925 – núm. 3530.

Ilustrísimo Señor. Muy señor mío: En el Vapor francés “Cuba” que saldrá deeste puerto el día 30 del corriente, serán embarcados con destino al Puerto de Vigolos restos de D. Jerónimo Usera y Alarcón, debidamente autorizados por Real OrdenCablegráfica del Excmo. Sr. Ministro de Gobernación. Fecha 25 de abril del actualaño.

Lo que traslado a V. S. a los fines oportunos.

Habana, 27 de abril de 1925. Joaquín Iturralde López Silverio.

En la parte inferior se lee: Ilmo. Sr. Gobernador de Pontevedra”. (sic)

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El 30 de abril de 1925, la Superiora General, Madre Luisa de la Cruz MarquésFalcón, regresaba a España, trayendo los Restos del Padre Fundador.

No fue fácil el traslado de los Restos. La gestión había comenzadopersonándose la Superiora General y la Madre Marta Rodríguez Rodríguez en elArzobispado de La Habana, exponiendo al Señor Arzobispo, Monseñor Ruiz, susdeseos y la gran alegría de todas las Hermanas del Amor de Dios por tener a sualcance los Restos de su Fundador. Reconoció el Prelado que era justa la petición yexigió que se le presentara una Instancia por escrito para pasarla al CabildoCatedralicio y proveer después cuanto fuese necesario para conseguirlo.

No hubo resistencias por parte de las autoridades eclesiásticas, y laexhumación del cadáver se realizó el 18 de abril de 1925, a las 8 de la mañana, enpresencia del Capellán del Cementerio, varios empleados, la Superiora General y laSuperiora Local de Palatino.

Colocados todos los Restos en una cajita de zinc, fue soldada y llevada a lacapilla del cementerio, donde el capellán cantó un responso. Desde allí marcharondirectamente a la Casa Palatino. En la Capilla de esta casa fueron depositados losRestos con gran respeto, sencillez y decoro, poniendo luces y flores.

6.3 En la Casa Generalicia de Zamora, desde 1925 a 1931.

Este es el itinerario recorrido: el 30 de abril de 1925, embarcaron en el VaporCuba. Desembarcaron en Vigo, a las 9 de la noche, el día 11 de mayo, después deuna travesía feliz. En Vigo: Aduanas, revisión de equipajes, visado de pasaportes,¡ah! y la documentación de los Restos mortales. El Inspector de Aduanas siente unanatural preocupación primero y una mayor vacilación después. Tienen autorizaciónpara trasladarlos desde el puerto de La Habana a Vigo, pero sólo hasta Vigo.¿Después qué? El Inspector de Aduanas manifestó en todo momento ser hombrejusto y bondadoso, ante el deber le surge la duda: “tienen autorización hasta el Puertode Vigo, ¿después?, y busca cómo salir de esa situación. Al fin dice: “¡Si me lopermitieran las Madres! Insinuó como tratando de encontrar tiempo para reflexionar yencontrar una tabla de salvación. La Madre Luisa, que entre otra de las muchascualidades gozaba de gran amabilidad, respondió: “Vd. dirá, señor”.

- Yo les rogaría a Vds. que dejaran aquí en mi despacho el cofrecito de losrestos hasta mañana por la mañana, pues ya es una hora muy avanzada paraautorizar la salida.

- Como Vd. mande, señor Inspector. Fue la respuesta humilde de nuestraSuperiora General.

Y con un “hasta mañana, si Dios quiere”, se retiraron nuestras Hermanas apasar la noche en una casa de huéspedes. Muchas vueltas debió dar sobre el asuntoel Inspector de Aduanas aquella noche. Cuando a la mañana siguiente se presentó enla oficina la Superiora General y las dos Hermanas que con ella iban, el Inspector lesestaba esperando y dirigiéndose a la Superiora General le preguntó:

- “Dígame, Madre, ¿a dónde llevan destinados estos restos del Fundador de laCongregación de Vds.?

– A nuestra casa de Zamora – contestó Madre Luisa Marqués.

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Siguió el Inspector preguntando: -¿Y pretenden dar publicidad al traslado yconducirlos con pompa a esa ciudad?

– Nada de eso, señor.

- Bien, Madre, ¿son muchas las personas conocedoras de este caso?

- Sólo las presentes, y ya comprenderá el Sr. Inspector, que somos nosotraslas más interesadas en que todo quede oculto”.

Al llegar a Astorga les esperaba una sorpresa. Habían salido a su encuentro:La Madre Clara Fernández Lestón, Vicaria General, la Madre Teresa López,Consejera General, la Madre Gloria González, Consejera y Secretaria General, y laSrta. Dolores de Arabaolaza, hermana del compositor y capellán, D. Gaspar deArabaolaza.

Al fin, en la madrugada del 13 de mayo,llegaron a la estación del ferrocarril deZamora, donde les esperaba toda laComunidad, recibiéndolas con una explosiónde alegría, a pesar de la hora intempestiva.Eran las dos y media de la madrugada. Ya enla Capilla de la Casa General y Noviciadodieron gracias a Dios por tan feliz regreso.

En Zamora los Restos del PadreFundador fueron colocados sobre una mesitaen el coro de la Capilla de la Casa Generalicia,permaneciendo allí, desde el 13 de mayo de1925 hasta el año 1931.

6.4 En la Sacristía de la antigua Capilla del Colegio de Toro, desde 1931 a 1964.

El año 1931 los Restos de nuestro Fundador fueron trasladados a la Sacristíade la Capilla del Colegio de Toro. En una lápida se leía:

“AQUÍ YACEN LOS RESTOS DEL ILMO. D. JERÓNIMO USERA FUNDADOR DEL INSTITUTO

DEL “A. DE D.” (sic).

6.5 En el Sepulcro construido en el presbiterio de la Iglesia de Toro, desde1964 a 1990.

El 27 de abril de 1964 –con motivode la celebración del Primer Centenario dela Fundación- se inauguró la Iglesia delColegio de Toro; en el presbiterio de lamisma se construyó el Sepulcro del PadreFundador en el que se introdujo el Arcónde nogal de Guinea con bisagras debronce. Dentro del Arcón estaba la arquetametálica, soldada y precintada –traída delCementerio de Colón, de La Habana- quecontiene los Restos del Fundador.Día 27 de abril de 1964, traslado de los restos del

Padre Usera a la nueva Iglesia del Colegio de Toro

El TRASLADO DE LOS RESTOS se efectuó con la solemnidad requerida parael acto, con mucha alegría, multitudinaria asistencia y representación de Hermanas,llegadas de las distintas comunidades de la Congregación, presididas por la SuperioraGeneral, la Rda. Madre Cruz Rodríguez Rodríguez, todo el Consejo General, asícomo las MM. Provinciales: Luisa de Prado, de Castilla, Gloria Nieto, de Navarra,Esther Fernández de Landa, de Portugal, Celina Tejedor, de Andalucía. Todo elConsejo Provincial de Castilla, varias consejeras de Navarra, Andalucía y Portugal. Enla Iglesia resonó con fuerza el Himno al Fundador:

“Toro fue su cuna, ahora es tu sepulcro, ydesde el sepulcro, Fundador y Padre, amparas lacuna del “Amor de Dios”. Tus hijas extienden susalas azules, llevando a la tierra pureza y amor; masllevan tu espíritu que les grita siempre: “CaritasChristi urget nos”.

Asistieron al acto:

De autoridades eclesiásticas: el Dr. Don Eduardo Martínez González, Obispode Zamora de 1951 a 1970, acompañado por los Capitulares de la Santa IglesiaCatedral, muchos sacerdotes de Toro y Zamora. El Obispo de Orense. El Abad deViaceli, el de Dueñas, el de Cóbreces, el Vicario General de Essen (Alemania), elComendador de los PP. Mercedarios de Toro, el Superior de los PP. del Corazón deMaría, de Zamora, etc.

Familiares directos del P. Usera: Don Pedro María Usera –el sobrino entoncesmás anciano- con otros descendientes como Don Luis Usera, Don Mariano Usera,Doña María Usera de Canosa, Doña Isabel Usera y los niños Carlos Usera, RaúlCanosa Usera y Pedro Usera Madariaga.

Y autoridades civiles: El Alcalde de Toro con los miembros de la CorporaciónMunicipal.

6.6 Provisionalmente, en la Sala- Museo de Toro, desde 1990 a 1991.

El 9 de marzo de 1990 –provisionalmente- pasaron los Restos de nuestroVenerable P. Fundador a la Sala Museo, mientras se hacía la remodelación de laIglesia y la construcción de la Cripta, con motivo del Primer Centenario de la muertedel Padre Fundador.

Era entonces Superiora General (1984 – 1990) Sor Aurora González Pascual.

6.7 En la Cripta construida con motivo delprimer Centenario de la muerte del Padre (apartir de 1991).

Al final, llegamos a la meta. Y la metafue la Cripta que hoy conocemos, desde el 27de abril de 1991, cuando la Hermana M.ª delCarmen Díaz Díaz, Superiora General, elegidael 29 de julio de 1990, transportaba la urna,que contiene los Restos del Padre, a suSepulcro definitivo –con el aplauso y profundo

Cripta donde reposan los restos del Venerable P.Usera desde el 27 de abril de 1991, año del

centenario de su muerte.

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respeto de una representación masiva de la Congregación.

Hoy, los Restos del Venerable P. Usera son el centro de atracción para sentir elCarisma Institucional, legado por el Padre Fundador y desarrollado tradicionalmenteen la Congregación. “Encarnar el Amor de Dios en la vida, de modo que cadahermana llegue a ser una manifestación permanente del amor gratuito de Dios a loshombres” (C 3).

Los Restos del Venerable Jerónimo Mariano Usera en la Casa Fundacional sonun reclamo, una llamada a ser un lugar para acrecentar la fe, vivenciar la pasión porJesucristo, el amor apasionado por el Evangelio, reencontrar la esencia del carismapara encarnar el amor de Dios en la realidad concreta del día a día, descubriendo labelleza, el gozo, la alegría, la esperanza que lleve a compartir la propia vida –fundadaen el amor de Dios- con los hombres de hoy, construyendo una sociedad máshumana, justa y solidaria, con sentido de transcendencia cristiana. En pocas palabras–una Casa abierta a Dios para llegar a los hermanos- como lo fue el hombre quenació para hacer el bien.

VII.TRASLADO DE LOS RESTOS DE SOR ROCÍO RODRÍGUEZ XUÁREZ DE LAGUARDIA A LA CAPILLA DE LA CASA FUNDACIONAL.

Este ha sido el itinerario recorrido por los Restos de Sor Rocío RodríguezXuárez de la Guardia, hasta reposar en el sepulcro expresamente construido con estefin en la Capilla que conocemos como la Capilla de Sor Rocío en la CasaFundacional.

El féretro llegó a Toro –en triple caja-: la primera la que contenía el cadáver deSor Rocío, al ser sepultado en Roma en una tumba que no era propiedad de laCongregación (1956); la segunda caja, al ser trasladada al panteón propiedad de laCongregación en Roma (1965); y la tercera de zinc, al efectuar el traslado de Roma aEspaña (2001).

Muchas fueron las gestiones necesarias para que los Restos de Sor Rocíollegaran primero a España y luego a ocupar el lugar definitivo donde hoy seencuentran.

El 16 de mayo de 2001, desde Madrid -Casa General- Sor Mercedes Martín ySor Asunción Jáñez se dirigían a la Doctora Patrizia Cipriano, entonces Postuladorade la Causa, para darle una información necesaria para el inicio de los trámites: ladirección y el nombre del Obispo de la diócesis de Zamora a donde va a sertrasladada.

Abreviando el proceso, recordaremos algunos documentos a fin de irconociendo cómo se acerca el traslado, unos de la diócesis de Zamora, otros de laCongregación para las Causas de los Santos, y, como no podía dejar de ser, delConsulado General de España en Roma.

En Roma las Hermanas de la comunidad se despiden; y desde Roma hastaToro, el itinerario había sido comunicado con antelación: Perpignan (Francia) –Barcelona – Lérida – Zaragoza – Soria – Valladolid – Zamora – Toro.

A Toro llegaron desde Roma los Restos de Sor Rocío Rodríguez Xuárez de LaGuardia, en la noche del 21 de diciembre de 2001, (aunque el acta notarial de la

diócesis hace constar: las 10h de la mañanadel día 22). Era entonces Superiora General,Sor M.ª del Carmen Díaz Díaz, y Superiora dela Casa de Toro, Sor Asunción Gago Pérez.Presentes, también, Sor Amparo Hidalgo,Consejera General, Sor Asunción Jáñez,responsable de la Causa, y Sor MercedesMartín, que la apoya en esta tarea. A su llegadalos Restos fueron depositados en una pequeñaestancia, que está debajo de la escalera queconduce a la Cripta. Este espacio quedótabicado hasta el momento de su traslado a laCapilla, donde hoy está su sepulcro.

El 9 de noviembre de 2003, la SuperioraGeneral, Hermana Margarida Martins da Silva,informaba a la Comunidad de la CASA

FUNDACIONAL sobre el traslado de los Restosde Sor Rocío a la nueva Capilla. El hecho tuvo

Tumba de Sor Rocío Rodríguez Xuárez dela Guardia, en la Capilla de la Casa

Fundacional,desde el 28 de febrero de 2004.

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lugar el 28 de febrero de 2004.

En ese día, en “un acto totalmente privado y, al mismo tiempo, muy entrañablepara nosotras”, en la Iglesia de Toro se celebró una Eucaristía votiva de la Virgen,presidida por D. Enrique Rodríguez Cobreros; a continuación se hizo el traslado de losRestos, desde del sepulcro provisional hasta la tumba construida para el efecto: en laCapilla de Sor Rocío, donde, a partir de esa fecha, tantas personas se acercan paraorar por su intercesión y se sienten estimuladas a vivir su vida cristiana con alegría yamor, siguiendo su ejemplo.

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TORO (ZAMORA)

HOY TAMBIÉN CENTRO DE ESPIRITUALIDAD AL SERVICIO DE TODA LACONGREGACIÓN Y DE LA IGLESIA

INTRODUCCIÓN........................................................................................................................ 5

I. PRIMERA ESTANCIA DE LA CONGREGACIÓN EN LA CASA FUNDACIONAL. ..... 101.1 Los primeros pasos de la Congregación. ........................................................................ 101.2 Surgen las primeras dificultades entre las HH. Fundadoras. .......................................... 131.3 El Padre viene a España a finales de 1866 y desde Madrid se desplaza a Toro siempre

que puede. ....................................................................................................................... 16

II. LA CONGRECIÓN SALE DE LA CASA CUNA Y PASA AL PALACIO DE LOSMARQUESES DE ALCAÑICES. ...................................................................................... 19

III. LA CONGREGACIÓN VUELVE A LA CASA CUNA POR UN CORTO TIEMPO....... 213.1 La Congregación se plantea la adquisición de la Casa Cuna.......................................... 213.2 La Congregación vuelve a habitar en el Viejo Palacio Episcopal. ................................. 22

IV. LA CASA CUNA PASA POR DISTINTOS PROPIETARIOS ANTES DE COMPRARLALA CONGREGACIÓN EN EL AÑO 2000. ....................................................................... 23

V. LA CONGREGACIÓN ADQUIERE LA CASA FUNDACIONAL Y ESTABLECE ENELLA UNA COMUNIDAD ............................................................................................... 24

5.1 Sensibilidad del XII Capítulo General -1996- con respecto a la Casa Fundacional....... 245.2 El tema de la adquisición de la Casa Cuna a partir de este momento se hace patente. .. 245.3 La Congregación adquiere la Casa donde nació. ............................................................ 255.4 Los planos de la Casa Fundacional van tomando forma. ............................................... 275.5 Puesta a punto. Reestructuración y habitabilidad de la Casa Fundacional. .................... 285.6 El Gobierno General determina cómo se ha de regir la primera Comunidad................. 295.7 El CGA visita la Casa Fundacional, 24 de octubre de 2003........................................... 315.8 Bendición de la Casa, 15 de mayo de 2004. ................................................................... 325.9 Recordando fechas claves que llevaron a la consecución del Proyecto de la Casa

Fundacional..................................................................................................................... 35

VI. LOS RESTOS DE N. V. P. F. REPOSAN EN LA CASA FUNDACIONAL DESPUÉS DEUN LARGO RECORRIDO................................................................................................. 38

6.1 En el Cementerio de Colón –La Habana- desde 1891 a 1925. ....................................... 386.2 Del Cementerio de Colón (La Habana) a España – 30 de abril a 11 de mayo de 1925.. 396.3 En la Casa Generalicia de Zamora, desde 1925 a 1931.................................................. 406.4 En la Sacristía de la antigua Capilla del Colegio de Toro, desde 1931 a 1964. ............. 416.5 En el Sepulcro construido en el presbiterio de la Iglesia de Toro, desde 1964 a 1990. . 416.6 Provisionalmente, en la Sala- Museo de Toro, desde 1990 a 1991. ............................... 426.7 En la Cripta construida con motivo del primer Centenario de la muerte del Padre (a

partir de 1991)................................................................................................................. 42

VII.TRASLADO DE LOS RESTOS DE SOR ROCÍO RODRÍGUEZ XUÁREZ DE LAGUARDIA A LA CAPILLA DE LA CASA FUNDACIONAL. ....................................... 43

Toda la vida del Instituto habríade estar impregnada de este amor

de Dios, desde la mañana aldespertar, hasta la noche antes de

acostarse. (Reglas 17. 2 y 34)

casa fundacional de las hermanas del amor de dios … fundacional...reales, según que hacen media,...

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