Durante los siglos XVII y XVIII, en la msica religiosa y sobre todo en la operstica, la figura del castrato cobr una enorme relevancia. Los castrati eran cantantes a los que castraban antes de que les cambiara la vo para que pudieran as seguir cantando en un registro agudo. La importancia de estos int!rpretes fue tal, que un "#$ de los cantantes de pera masculinos en activo durante el siglo XVIII eran castrati y en sitios como %urn, el primo uomo cobraba m&s dinero por la temporada de carnaval que el que ganaba el primer ministro anualmente. 'l acabar las peras, la gente se pona en pi!, lanaba versos de admiracin (acia el castrato e incluso se dice que las mu)eres c(illaban *Viva il Coltello! (viva el cuchillo). +l castrato ,aldassare -eri, por e)emplo,cuando llegaba a -lorencia, era recibido por sus admiradoras en las afueras de la ciudad y lo escoltaban por un camino recubierto de flores . y los soldados de)aban la batalla para poder escuc(arlo cantar. /uy pocos castrati llegaban a alcanar esas cuotas de popularidad0de (ec(o, ni siquiera 12 de cada 1## lograban mantener a su familia con el canto3 pero era visto por muc(as familias pobres y con muc(a desecendencia como una oportunidad de salir adelante. +ntre 1"4# y 1"5#,se calcula que en italia se castraron a unos 6.### ni7os por a7o, lo que significa que (ubieron cientos de miles de castrati. +ste impresionante nmero de casos se e8plica no tanto por la creacin del g!nero operstico, sin por la profunda crisis econmica acompa7ada de la desindustrialiacin, altos impuestos, guerras, plagas, sequa... /uc(as famlias no tenan dinero para pagar ni la operacin ni la educacin musical, as que se vean obligadas a recurrir a un profesor 0a menudo, un cl!rigo3 al que prometan pagar un porcenta)e de lo que el ni7o castrado llegara a ganar. La iglesia tuvo un papel crucial en el apogeo de los castrati, ya que la mayor parte de estos acababan cantando en parroquias. 9e sabe que en 122: ya (aban cantantes castrados en la ;apilla 9i8tina pues (ay constancia de que el 4" de abril se admiti al cantante espa7ol , el papa 9i8to V decidi e8cluir a los ni7os cantores y falsetistas por castrati, pues los primeros solo podan cantar durante tres o cuatro a7os y los segundostenan una vo considerada insatisfactoria, comparada con la del castrato, sobretodo en las partes de soprano. Los falsetistas pasaron a cantar partes de alto )unto con otros castrati, aunque se los consideraba inferiores 0para la mentalidad barroca, contrariamente a lo que pensaramos a priori (oy en da, la vo del castrati era natural y verdadera, mientras que la del falsetista era artificial3. La relacin que mantena la iglesiacon los castrati era ambigua y contradictoria. =or un lado, la castracin estaba condenada, ya que la amputacin de cualquier miembro sin fines m!dicos estaba condenado con la e8comunin por la ley eclesi&stica, pero por otro lado se aceptada la opinin de 9anto %om&s de 'quino de que *todos los (umanos son cuidadores de su cuerpo? y (aban telogos defendan la castracin como una va ideal (acia la purea y el ale)amiento del libertina)e. +n el seno de la iglesia era este un tema controvertido y, por lo tanto, llegaron incluso a usar el eufemismo *falsetistas espa7oles? para referirse a los castrati 0a los que, adem&s, no reconocan como castrados3. La iglesia y el estado, entonces, (acan la vista gorda y de)aban que operaran a los ni7os, aunque lleg un momento que se tuvieron que empear a inventar e8cusas m!dicas para )ustificar esas operaciones. 9e (a demostrado, por e)emplo, que el enorme nmero de registros de ataques de )abals a ni7os durante el siglo XVII y XVIII son, en gran medida, ficticios. =or otro lado, @egine de Araaf, un famoso anatomista y fsico, e8plica en un tratado suyo que (aban (ombres que se ganaban la vida castrando a gente diciendo que eso curaba las (ernias, pero que este procedimiento era tan cruel y estaba tan anticuado, que sera practicamente imposible encontrar a alguien que por aquel entonces ganara una costra de pan con eso. 'un y as, en Italia se seguan curando las supuestas (ernias a ni7os cantores siglos despu!s de que se escribiera ese tratado. La operacin no estaba considerada *severa? por la gente, ya que uno se recuperaba en un plao de apro8im&damente dos semanas. 'un y as, eran operaciones muy peligrosas y muc(os ni7os moran. La castracin se (aca de forma clandestina 0iba contra la ley romana3 y los m!todos de anestesia eran muy primitivos y precarios. ' veces los ni7os moran debido a la alta mortalidad que supona el uso de opio que se les suministraba para de)arlos inconscientes o bien moran estrangulados cuando intentaban dormirlos presionando las arterias carotidas. 9egn @egine de Araaf, se usaban dos m!todos diferentesB o bien (acer presin en los cordones esperm&ticos con una vara (asta que estos se rompieran o bien e8tirpar los testculos enteros de ra. Los efectos de esta operacin, vistos desde el punto de vista de la endocrinologa actual, seran los siguientesB el castrado no pasara la pubertad y por lo tanto tendra un pene prepubescente, disfuncin se8ual, esterilidad, no tendra pelo facial y tendra un cuerpo *eunucide? 0tendra e8tremidades desproporcionadamente grandes3. 'dem&s, debido a la falta de testosterona, tendra la piel seca, con arrugas finas, osteoporosis, libido ba)a y posiblemente bastante riesgo de depresin. 'dem&s, y eso es lo que andaban buscando, la laringe no crecera, qued&ndose con cuerdas vocales cortas, mientras la faringe y los pulmones llegaran a tener un tama7o adulto y esto les dara una vo con muy alta frecuencia y el poder de resonancia de un adulto. 'unque, debido al gusto est!tico contempor&neo, a nosotros alguien con todos esos sntomas nos podra resultar algo grotesco,en la italia del siglo XVIII, donde (aba un marcado gusto por lo inusual y lo artificial, eran esas anormalidades fsicas las que (acan que tanto (ombres como mu)eres admiraran el fsico de esos cantantes. +l castrato tena una muy fuerte simbolo)a ertica, puesto que era un (ombre que se (aba quedado en la etapa prepuberal y, por lo tanto, se le supona la se8ualidad de un ni7o, a menudo asociados con la promiscuidad en la cultura italiana.'dem&s, la ambigCedad se8ual que encerraba (aca que la curiosidad que senta el pblico por ese persona)e fuera aun mayor. +l c!lebre Aiaccomo ;assanova, escribe, al describir a un castrato al que vi durante una velada *=or muc(o que uno supiera el se8o natural del compa7ero, uno se senta encendido y algo amoroso por !l? y, a7ade, *ese ;astrato tena una buena vo, pero su principal atraccin era su bellea... +n el escenario con vestido de mu)er... estaba encantador, una ninfa, y por increible que pareca, su pec(o era tan bello como el de cualquier mu)er?. 'dem&s, muc(as mu)eres se sentan atraidas por estos (ombres ya que, debido a su condicin esteril, podan mantener relaciones se8uales sin consecuencias. +sta situacin llev a muc(as (abladurias y la circulacin de (istorias sobre las muc(as conquistas de los castrati y ese caracter (a sido a menudo relacionado con la figura del castrato. La castracin tena muc(as otras implicaciones sociales y econmicas que (acan la vida del castrato complicadaB tenan pro(ibido el acceso al clergo 0aunque (ubo alguna e8cepcin3. Do podan tomar el rol masculino de la sociedad, ya que les estaba vetado el matrimonio con mu)eres y no podan acceder a algunos traba)os, pero tampoco podan adoptar roles femeninos como entrar en un convento, ya que se consideraba que su transformacin no estaba completa. =ara la mentalidad barroca, la diferencia de g!nero no estaba tanto en la genitalia, sino que el paso de un g!nero a otro solo se poda dar a traves de cambios en el sistema (umoral 0se e8plicaban casos que a(ora nos parecen absurdos como el de una muc(ac(a que se convirti en un (ombre al correr tras un cerdo e incrementar su calor (umoral o el de ni7os que se convirtieron espont&neamente en ni7as al ser mordidos por )abals o cisnes3.

'dem&s del caracter ertico del que (emos (ablado antes, el castrato tena un simbolismo religioso importante para sus contempor&neos. La doctrina de las esferas, aun entonces vigente, relacionaba los sonidos agudos con lo divnio e incluso algunos filsofos decan que las voces mas altas eran comparables a las nueve ordenes de &ngeles que envolvan la 9antsima %rinidad. La vo del castrati no se pareca a ninguna de las voces *normales?y, por ello, se la considerava una vo menos *(umanstica? y mas *divina?. +l famoso compositor 'llesandro 9carlatti di)o, tras una actuacin del castrato -rancisc(ello, que no poda creer que *un mortal pudiera cantar tan divinamente? y se preguntaba si realmente sera un &ngel asumiendo la forma de un mortal. Los castrati empearon a tener relevancia en la pera cuando en los +stados =apales se pro(ibi a las mu)eres el subirse a un escenario. ' partir de entonces y (asta 1">:, todos los papeles femeninos pasaron a ser interpretados por castrati. ' finales del siglo XVI, tanto el rol principal masculino 0primo uomo3 como el secundario 0secondo uomo3 eran interpretados igualmente por castrati. Vemos entonces, que en aquel momento no se asociaba 0como (acemos nosotros desde el siglo XIX3 la altura de vo con el g!nero. Los castratos, debido a la gran popularidad de que goaba el g!nero de la pera alrededor de los paises ba)o influencia cultural italiana,pasaron a ser estrellas internacionales y se enrolaban en giras por +uropa. -arinelli, el mas famoso int!rprete del siglo XVIII, actu, por e)emplo, en Viena, Venecia, Dapoles, /ilan, ,olonia,Londres, -rancia, +spa7a 0donde fue contratado por la reina para que curara al rey -elipe V de su depresin melanclica y dondeacab viviendo los ltimos 42 a7os de su vida3 y un montn de sitios mas. Los compositores de la !poca escribieron muc(sima produccin para castrati y en las peras se e8iga muc(a agilidad t!cnica a lo cantantes, especialmente por las virtuossticas coloraturas que se les escriban. 'll donde demostraban su (abilidad vocal los castrati era en las arias *dEacapo?, ya que, en la ree8posicindel tema principal improvisaban ornamentaciones, trinos... 'dem&s, se valoraba muc(o la (abilidad de los cantantes a la (ora de mantener una nota aguda durante un largo perodo de tiempo 0se dice que los castrati podan aguantar (asta un minuto sin respirar3 y tener un registro amplsimo. =ara lograr estar a la altura, los castrati se vean obligados a un entrenamiento muy e8(austivo durante un perodo de entre F y 1# a7os. ;affarelli de) constancia de su rutina durante su etapa de aprendia)eB una (ora de cantar pieas difciles, 1 (ora estudiando letras, una (ora cantando e)ercicios frente al espe)o, y por la tarde media (ora de traba)o terico, media (ora de improvisacin, una (ora de contrapunto y una (ora de letras. ;omo, a parte de msica, estudiaban asignaturas (umanistas, despu!s tenan facil acceso a otros oficios como profesorado, traba)o terico 0el tratado musical mas influyente del s. XVIII fue escrio por dos castrati3, como anticuarios, libreteros, diplom&ticos, u oficiales reales. Durante la segunda mitad del s. XVIII, con la llegada de la ilustracin, se produ)o un cambio en el gusto y se volvi a una preferencia de lo natural y (umano por encima de lo artificial. =or ello, fueron muc(os los que empearon a ver con malos o)os al castrato y vean como una barbaridad la pr&ctica de la castracin. @ousseau, uno de los mas famosos pensadores de la ilustracin, escribi que *la pr&ctica de la emasculacin GeraH indigna de una sociedad moderna e ilustrada? 0aunque al escuc(ar mas tarde al castrato ;arestini, retir todo lo que (aba dic(o sobre la pera italiana y asegur que )am&s (aba sentido un e8tasis igual3. Las mu)eres empearon a cobrar muc(a relevancia en la pera, ya que se empe a pensar que estaban mas dotadas naturalmente para el canto de soprano que los (ombres, y eso acab desbancando por completo a los castrati. 'un as, siguieron cantando en &mbitos religiosos (asta el a7o 1>#5, a7o en que =io X redact un documento en el que ordenaba el uso de ni7os cantores para las partes de alto y soprano, ya que esta era la tradicion en la mas antigua iglesia. +l ltimo castrato, /oresc(i, es el nico que qued registrado en una gravacin gramofnica, pero es de muy ba)a calidad y no se puede discernir bien la vo del cantante. 9e (an (ec(o varios intentos de reconstruccin de la vo de los castrati, pero ninguno resulta del todo convincente. +n 1>>6, para la pelcula *-arinelli? se mecl el sonido de la vo de un contratenoren las notas mas ba)as con la de una soprano en las notas mas agudas, pero esta vo no se acababa de adaptar a las definiciones que se daban de la vo del castrato de la !poca barroca. 's pues, para un documental de la ,,;, unos t!cnicos intentaron otro e8perimentoB meclar la vo de un ni7o con la de un tenor cantando agudo sin (acer falsete. +l resultado es una vo muy e8tra7a que combina la dulura de la vo de un ni7o con la potencia del tenor, pero no acaba de ser del todo convincente 0pese que es a lo mas cerca que se (a llegado3. 'ctualmente, a la (ora de representar peras que anta7o eran representadas por castrati, (ay varias opciones. La mas evidente sera usar (ombres sopranos 0(ombres que, por algn tipo de problema (ormonal, no (an acabado de desarrollar las cuerdas vocales y se (an quedado con un timbre muy agudo3, pero estos son muy dificiles de encontrar y no resulta una opcin pr&ctica. 's pues, las tres opciones mas realistas sonB el uso de dos contratenores para las dos partes agudas 0aunque esta no es una opcin demasiado acertada, ya que la vo del contratenor no se parece muc(o a la del castrato3, el uso de dos mu)eres en los papeles de castrato, o bien transponer una octava ba)a la parte del castrato con rol masculino y que sea un tenor quien lo cante, y usar una soprano para los papeles femeninos. +sta ltima opcin es muy problem&tica, ya que al aumentar tanto la distancia entre voces se pierden todas las disonancias y efectos que los compositores buscaban a la (ora de componer dos. 'dem&s, la tmbrica del tenor es evidentemente muy diferente a la del contratenor. 's pues, la opcin mas realista y la que mas se usa es la de dar los papeles principales a dos mu)eres.=ese a todos los esfueros de reconstruccin que se (acen, nunca podremos saber realmente cual era el sonido de esos mticos divos italianos y su vo quedar& siempre abierta a la especulacin.