convocatoria al xxv congreso nacional del partido comunista de chile
TRANSCRIPT
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
1/20
Convocatoria al
Congreso Nacional
rm rPartido Comunista e Chile
Consolidar los cambios
Para
seguir avanzando
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
2/20
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
3/20
Convocatoria
al XXV
Congreso Nacional
de l Partido
Comun ista
de hile
DESAFIOHISTORICODELPERIODO: CONSOLIDAR
LO
AVANZADO
Y
GENER AR CONDICIONES PARA SEGUIR ADELAN TE
Con
la presente Convocatoria, el Partido
Comunista de Ch ile da inicio a su XXV Congreso
Nacional. Lo
hacemos recogiendo nuestras
centenarias tradicionesy
con e l
especial interés
de que este debate involucre no sólo a los
comunistas, sino también
al
pueblo
de
Chile,
a las y los t rabajadores, a las mujeres y a los
jóvenes, a las chi lenas y chi lenos de la tercera
edad, a los artistas e intelectuales, a todas y
todos nuestros al iados polí t icos. Queremos
se r
un aporte al necesario debate que ayude
a reafirmar el camino para superar las odiosas
desigualdades
que persisten en Chile, y
proyectar un camino hacia una democracia
plena, de justicia social, de respeto a los
derechos humanos, de paz e integración co n
lo s pueblos vecinos y con t odas la s naciones de
América.
Es una
invitación
a una
construcción
colectiva.
Nuestra tesis principal
contradicción
n
el
marco
de la
vigente
democrac ia -neo l i be ra l i smo ,
que
hemos considerado
como asunto fundamen ta l en
varios congresos nacionales
del Partido, hoy necesi tamos
establecer
co n
mayor
c lar idad
la tendencia pr incipal
del
período
histórico, sus
posibles des enlac es y nuestra
propia apuesta y dirección
polít ica en este esce nario.
Desdecomienzosde l presente
siglo XXI, hemos desplegado
especiales esfuerzos para
generar la s condiciones que
abran
el
camino
hacia
la
democracia plena
y la sup eración del neol iberal ismo . Nuestros
eventos nac iona les part idarios han formulado
un trazado que se expresa en buena parte
en las movi l izaciones y luchas
sociales
del
período, en e l
persistente
cuestionamiento al
sistema binom inal y a la exclusión
política,
en
la
demanda
por
cambiar
la
actual
Constitución
Política por una que re con ozc a la sob eran ía del
pueblo, en un cambio al modelo que es la base
de la concentración económico-f inanciera más
grande en la historia de Chile.
Hemos sostenido,
firme y alta, la
exigencia
de Verd ad y Just icia y el Nunc a M ás en
Chile .
No nos
guía
ningún
afán
de
venganza,
sí nos
preocupa
el futuro de
nuestra
patria.
En
este
duro
caminar hemos acompañado
a
las
agrupaciones de famil iares de detenidos-
desaparecidos, de ejecutados, torturados y ex
prisioneros
políticos, y
hemos sido parte
de
una am pl ia expresión ciudadana que se resiste
a
la
impunidad.
A
fines de 2010, en las resolucion es de nues tro
XXIV Congreso Nacional, planteamos la
necesidad
de
construir
una
Nueva Mayoría
y avanzar en la al ianza de la izquierda con el
centro
político
en
torno
a un programa que
iniciara el proceso de reformas estructurales.
En la principal tesis de este período, que
es
también
un objetivo a cumplir,
hemos
señalado que Chile puede y debe alcanzar la
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
4/20
Convocatoria
al XXV
Congreso Nacional
de l
Partido Comunista
de
Chile
conquista
de un Estado
Democrático
pleno,
ta l
meta requiere
d e una
auténtica Revolución
Democrática. Sólo así, nuestro
país
dará fin a
un a transición que, necesariamente, permitirá
un
definitivo
cierre democrático a este tránsito
histórico. Las corre lac iones de clases y fuerzas
socio-políticas
se han
ordenado
en
torno
a
esta
contradicción
fundamental.
Con isuras, grietas
y lógicas tensiones, lo q ue sigue caracteriza nd o
el período, en lo esencial, es esta con tradicción
histórica. En este Co ngreso Naciona l, abiertos
al
intercambio y debate con nuestros al iados y
con el pueblo chi leno, debemos avanzar en la
caracterización
del rumbo y programa político
que nos
lleve
a
cum pl ir esta meta.
Lograr este objetivo histórico generará las
condic iones
básicas
para seguir avanzand o. En
esa
dirección,
todo
muestra que ha sido justa
la
determinación de plantearnos, para esta
fase,
un a
derrota estratégica
de la
derecha
en su
condic ión
de
clase dominante,
que se
expresa
en la hegemonía que mantiene en los
planos
político, económico, militar, cultural y
comunicacional . En función de este
objetivo
hemos hecho esfuerzos principales para
establecer una correlación de fuerzas que
permita
a lcanzar
esa meta.
Una
corre lac ión de fuerzas que
tiene
tensiones
y
contradicciones,
que se
expresa
en un
acuerdo en
torno
a un
Programa
de
Gobierno
y un Gobierno en sí mismo; en torno a la
voluntad compartida de seguir unidos m ás
allá
de l actual Gobierno del que somos parte.
Se
trata, insistimos, de un período histórico
y,
por tanto, el tiempo que demore estará
determinado por el cumplimiento del objetivo
que nos hemos planteado.
Hemos
sido incidentes en este proceso. N uestro
protagonismo crece.
Sin
embargo sería,
al
menos, un error político que se distanciaría de
la
realidad,
que nos
con s ideráramos
la
fuerza
política
principal en este esfuerzo. Lo val ioso
de la
experiencia
q ue
estamos viv iendo
es que
con la fuerza que poseemos hemos logrado
aportar
a que se
realicen avances relevantes,
aunque en ningún caso todavía suficientes
para consolidar
lo
avanzado.
E l camino recorr ido nos ha mostrado las
capacidades del Partido y de la Juventud
que debemos considerar porque es lo que
nos ha
permitido construir. Pero también
ha
evidenciado nuestras princ ipales insuficiencias
ycarenc iasy,
porsobretodo,
los
fundam enta les
desafíos que debemos enfrentar con mucho
rigor
y
responsabil idad.
Asp iramos a un partido más incidente en el
movimiento social, en los trabajadores, en
las mujeres, en la
juventud
y los pobladores,
entre otros. Para ello se requiere de mayores
niveles
de o rganización partidaria, con una
gran
preoc upación por el fortalecimiento
celular y de las
direccio ne s po líticas
intermedias con el propósito de termin ar con
discusiones
secund ar ias y que se proyecte
la
reincorporación
de esa
cantidad
de
militantes que están fuera de la organización
por prácticas sectarias, as í como
ab r i r las
compuertas para que lleguen lo s cientos o
miles de
personas
que
desean
se r
com unistas.
Una
gran preocupación debemos tener por
la
educación política
que
ayude
a l
debate
de ideas En este plano, las comunicaciones
y la propaganda política juegan un rol
importantísimo en e l
proceso
de
comunicar
bien lo que se está hac iendo en materia de
cumplimiento del
Programa
de
Gobierno.
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
5/20
Convocatoria al XX V Congreso Nacional del Partido C om unista de Chile
La d irección y práctica del proceso político
que hemos ayudado a abrir y, del cual somos
parte incidente, ha implicado poner en
cuestión
la base
misma
de
go bernabi l idad
del sistema d e dom inación de
clase
que se
ha mantenido desde el desplazamiento de la
dictadura del poder total a comienzos de la
década de los
noventa
del
siglo pasado .
Autodefinido
como demo cracia de los
acuerdos
o
"política
de los
consensos , este
estilo de gobernabi l idad ha capturado por
décadas
la
soberanía popular,
y
relegitimó
las bases de la dominación económica,
política
y
cultural heredadas
de la
dic tadura
y
que
fueron componentes fundacionales
de l
mod elo de acum ulación capi ta lis ta sustentado
en la híper concentración brutal y
salvaje
y en
la
especulación f inanciera.
Es una
vergüenza
que Chile esté hoy
entre
lo s países del mundo
que má s exportan capital f inanciero.
Esto es lo que la derec ha dom inante no
acepta perder.
Se
resiste
y lo
hará todav ía
con mayor fuerza en los meses y años que
v ienen.
En
este sentido,
la
lucha
d e
c lases
se
agudizará
y pos ib lemente ado ptará d iversas
fo rmas
que
debemos p reve r
co n
ma y o r
acuc ios i dad .
Este sistema
de
acumulación
de
ganancias
y de generación de p lusval ía ha provocado
gr ie tas t remendas
y
es t ruc tura les
que se
expresan
en
la
de s igua ldad, en
la
depredac ión
del ecos is tema, en e l agotamiento de
recursos
y fuentes energét icas, en la ruptura
de la identidad nacional , en e l crec imiento
de f e nó me nos de gran
peligro
c omo so n
e l narcot ráf ico y e l c r imen organizado, con
a l ta inc idenc ia en e l propio mode lo de
a c u m u l a c i ó n .
Sin
embargo, es un hecho his tór ico y
objetivo
que es te mod e lo de acum ulac ión cap i ta l i s ta
p ro fund i za sus t r i zadu ras y ha en t rado en
una
fase de mayor ines tab i lidad que
tiene
un cor re la to , también objetivo, en el cuadro
de cr is is de la economía mundia l cap i ta l i s ta ,
proceso que ha
a l canzado
un d inamismo por
momentos i nsospechado . L a cr is is la tienen
ahora las economías cap i ta l i s tas cent ra les
en sus p rop ios territorios y tal vez los
casos
m ás expres ivos
en
este
tiempo sean
Grecia
y
España.
Para evaluar este
tiempo
político, necesi tamo s
un enfoque histórico que nos permita con struir
nuestro proyecto. Por décadas -y eso se ha
expresado con énfasis y más claramente en
nuestros cuatro últimos congresos nacionales-
hemos puesto en el centro de nuestra política
la necesidad imperiosa de construir una
correlación de fuerzas que permita poner en
jaque al
modelo
de
dominación
que
surge
precisamente tras el desplazamiento de la
dictadura.
En
torno
a
estos objetivos hemos
construido nuestra política de alianzas, nuestras
formas
de
lucha
y
nuestras definiciones
programáticas. Es más, definiciones com o se r
parte del actual gobierno, las hemos ubicado
en este contexto.
El
carácter del Programa de la
Nueva Mayoría nuestra política
y
el cu adro general de fuerzas.
En
nuestra caracter ización
del
Programa,
di j imo s que éste puede ca racterizarse com o
democrático, reformador
y de
vocación
social,
desde
el
punto
de
vista
de las
garantías, derechos y servicios sociales que
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
6/20
onvocatoria
al XXV
Congreso Nacional
de l
Partido omunista
de
Chile
se propone promover para todos. Responde
a un diagnóstico colectivo que, en lo esencial,
cuestiona
al
neol iberal ismo
en
tanto forma
de expresión
de un
capitalismo salvaje
opuesto
a la democracia, considerado ése
neoliberal ismo tanto como categoría de la
política
en
sentido
estricto (forma
autoritaria,
excluyente
y
"tutelada"
de
ejercicio
del
poder
del Estado) como am plio (impregnando
las distintas esferas de la vida social:
relaciones económicas, sociales, ideológicas,
manifestaciones
artístico-culturales).
No surge, por lo mismo, directamente del
Programa un cu est ionam iento del capitalismo
como sistema.
No se visualiza la
contradicción
capital-trabajo como la generadora principal
de la contradicción social. Así, el Programa
no responde a la perspectiva de instalación
inmediata de una democracia revolucionaria,
que inaugure un tránsito a una sociedad
de carácter socialista, sino sólo -nada
más, aunque tampoco nada menos- a una
democracia
que sí
supere
los
aspectos
más
regresivos del neol iberal ismo y siente las
bases para iniciar
su
superación.
Fue
bajo
estas premisas que resolvimos ingresar al
Gobierno, en la convicción de que su gestión
y la
real ización
de su
Programa podrían abrir
paso a superiores condiciones para
librar
nuestra batalla por ideas y movil izaciones en
po s
de una democracia post neol iberal. Por
lo mismo, para no equivocar el análisis, el
carácter del Programa y sus medidas concretas
deben examinarse desde este ángulo. Lo que
tampoco puede conducir
a no
presionar para
que el cambio propuesto sea lo más avanzado
posible.
Al hacer la afirmación anterior, tenemos en
cuenta, por
cierto,
las enseñanzas qu e surgen
de la
dialéctica
entre
reforma
y
revolución,
siempre presente en períodos de cambio
social. En
estos períodos
no es
posible
teóricamente, n i razonable políticamente,
fijar
a
priori
lo s límites de
medidas
que
abran
espacio
a las
legítimas
y necesarias
man ifestaciones de la lucha de clases y a
consecuentes cambios
en la
correlación
de las
fuerzas. Así, por
ejemplo,
ocurrió en Chile con
la
llamada chilenización d el cobre" impulsada
por el gobierno de Eduardo Freí en los '60,
que proveyó de nuevos impulsos a la lucha
por la nacionalización de la "viga maestra" de
la econom ía chilena, culm ina da el año 1971
en la unánime aprobación parlamentaria de
la nacional ización de la principal fuente de
riqueza nacional .
Ello
ocurrió -y podríamos abundar en
ejemplos- pues de estos períodos de cambio
puede
devenir
incluso
la
apertura
de una
situación revolucionaria, aunque, obviamente,
tal situación no esté presente en el Chile actual.
Hoy, al evaluar el desarrol lo del Programa
de Gobierno, nuestra
política y el
cuadro
general de fuerzas, podemos decir que
hemos avanzado, y las condiciones para
seguir adelante
co n
nuestra línea política
se
mantienen.
La
propia experiencia acumulada
nos desafía a enriquecer nuestro quehacer
partidario
y la
realización
de
nuestra política.
Podemos afirmar que la tend encia principal del
período histórico sigue vigente.
Sin
embargo,
los riesgos y peligros de un retroceso han
aumentado,
y
este peligro
es el que
debemos
enfrentar aho ra, cuand o se requiere co nsolidar
el
avance
y la
dirección
de la
tendencia
principal, en
pleno desarrollo.
En
este contexto, no podemos descartar a
priori la ampliación de alianzas para sostener
la actual correlación de fuerzas que permita
consol idar
lo
avanzado,
y
neutral izar
la
ofensiva po r derribarlo. Esto es clave para
seguir adelante.
En el
esfuerzo
de
consolidar, para seguir
avanzando,
requerimos una profunda
flexibilidad táctica.
Junto
co n acentuar la
unidad
de nuestra
alianza principal,
la
Nueva Mayoría, debemos
observar
las
tensiones
o
contradicciones
que
se
puedan
dar en el
campo
de la
derecha,
y
no
descartar
a priori
entendimientos
puntuales con algunos sectores de ella que nos
perm itan lograr avances dem ocráticos. Co mo
ocurrió, por ejemplo, con la aprobación en el
Parlamento de la histórica y nueva ley de sistema
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
7/20
onvocatoria al XXV ongreso
Nacional
del
Partido
omunista de hile
electoral proporcional moderado,
que
terminó
con el binom inal pinochetista.
Por otra parte,
se
abre
un
campo
de
confluencia
con fuerzas o expresiones que hoy están fuera
de la
Nueva Mayoría,
y que
exponen ¡deas
y
propuestas
que
apuntan
a las
transformaciones
sociales
y
políticas
y a la
superación
del
neoliberalismo. Nuestros esfuerzos deben
apuntar
a
acercamientos
y entendimientos con
esas expresiones, tanto en el plano puntual como
en los
procesos tácticos
y los más
permanentes
de la construcción de alianzas.
L a
aspiración, compartida
por las
amplias
mayorías
nacionales de lo que hemos llamado un
"Gobierno
de
nuevo
ipo", no
está
en contradicción
alguna con el
carácter
del
proceso
y las
alianzas
políticas del presente. Más bien, vemos en ellos
una
línea de continuidad, profundización y
mejor señalamiento de los objetivos, así como
la
indispensable acumulación de fuerzas para
convertir
las exigencias de cambios de fondo
en
alianzas
con un
cada
vez
mayor
y afinado
programa.
La situación mundial y continental
E l cuadro mundial se ha
dinamizado
enormemente.
Las
con tradicciones objetivas
que
surgen del desarrollo del capitalismo en su fase
monopolista
y
financiera generan nuevas
y más
profundas tensiones. Pero crece
la
tendencia
fundamental, esto es, el surgimiento de nuevos
bloques que ponen en cuestión la hegemonía
unipolar del imperialismo norteamericano y
sus
socios mayores.
El
surgimiento
de l
grupo
de
países llamados
Brics
(Brasil, Rusia, India,
China, Sudáfrica, entre otros), ha generado una
nueva dinámica en el mundo. En palabras del
Comandante Fidel Castro, un camino que reabre
la
esperanza para la humanidad, amenazada por
el
capitalismo salvaje
y su
acción depredadora.
Estos
países, incluso disputan hoy la hegemonía
del imperialismo en su expresión monetaria
y
financiera,
y de esa
disputa surgen nuevas
instituciones
de incidencia mundial que, en los
hechos, pueden superar
la
actual estructura
y mapa de poder financiero del capitalismo
monopólico.
En
nuestro continente,
la
consolidación
de Celac
afirma las condiciones para seguir adelante
con el
surgimiento
de un
bloque
de
nac iones
que
aporta
al
nuevo escenario
multipolar en
el mundo. Unasur, Alba, Mercosur, Caricom
so n
todos el los espacios que contribuyen a
la integración
continental,
sin la presencia de
los
Estados
Unidos y Canadá, y que fortalecen
las
condic iones para
un
nuevo sistema
de
integración que considere las asimetrías al
interior
del bloque. El diálogo de paz por
Colombia que
tiene
base en La
Habana;
la
histórica declaración
de
América como
zona d e
paz, en la
reunión
d e Celac realizada en Cuba;
la
trascendental reapertura
de
relaciones
diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, son
expresiones de
este proceso
de
avance
y de
integración de nuestros estados nacion ales.
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
8/20
Convocatoria
al XXV
Congreso Nacional
de l
Partido C omun ista
de
Chile
Mientras que en otras
zonas
del
mundo,
como Oriente Medio
y e l
Cuerno
de
África,
la
desintegración
de los
estados,
las
guerras
de intervención y el control directo de sus
r iquezas naturales y energéticas muestran la
voracidad y crueldad de una polít ica imperial
que, golpeada,
busca
reponer
a
como
dé
lugar
su
fragmen tada hegemonía.
Lo s Brics
se han
t ransformado
en
al iados
estratégicos de las
nac iones
que
integran
la Celac,
y en
este proceso Chile debe jugar
un
papel mucho
más
dinámico hacia
el
Asia Pacífico y en el camino de integración
continental, especialmente en e l Cono Sur
americano.
En
este cuadro mundial
de
corre lac ión
generar desestabil izaciones de los
gobiernos
y
fuerzas demo crát icas que emprenden reformas
y
t rans formac iones
de fondo. As í
como
la
gesta
independentista a com ienzos del siglo X IX tuvo
un carácter
continental,
as imismo en nuestros
días
e s imposib le abo rdar la s tareas na cionales
sin una coordinación e integración
cada
vez
más estrechas
y una
sol idaridad
más
activa.
Las t rágicas consecuencias de un mundo
"unipolar" estremecen
en
estos
días a
toda
la humanidad. La soberbia de gran potencia
que ha
caracter izado s iempre
a la política
norteamericana, cobra hoy un precio que
están
pagando
con sus
v idas
e
innumerables
sufrimientos mil lones de seres humanos en
los territorios arrasados por la prepotencia y la
3 SUMMIT
14 • Fortaleza
D14 • Brasilia
R I S
2014
Bras
VI
CÚPULA
DO E
15deju lhote014-Fo
de
fuerzas,
lo s
procesos democrát icos,
progresistas y
revoluc ionar ios
que
cursan
en
nuestro continente son la base para conso l idar
esta
tendencia en Am ér ica, y el imperial ismo
está
jugando todas
sus
cartas para impedir
es a
consol idación. Incluso, no podem os desca rtar
formas de intervención directa o golpes de
fuerza para f renar
lo s
procesos emancipadores,
como
se ha
intentado
en
forma persistente
aunque fal l ida e n Venezuela, Ecuador y B olivia,
y lamentablemente con éxi to en Honduras
y Paraguay. Las intervenciones imperial istas
adoptan diversas formas, y también buscan
ceguera política del gran imperio. Es a hora d e
amplif icar la denun c ia y de poner a l desnudo las
causas ob jetivas
de
este desastre hum ani tar io,
a
la vez que
unirse
con
decisión
y
gen eros idad
al
vasto mo vimiento de sol idar idad que com ienza
a
verificarse en
todo
e l mundo. Una sol idar idad
activa
y eficaz no
puede s ino
ir de la
mano
co n
la denuncia
de las
causas profundas
de una
crisis impensable
de no
contar
con la
práctica
intervencionista
de una
nación,
los
Estados
Unidos de
Norteamérica,
cuyos
sectores
dirigentes gobiernan
en
función exclusiva
y
excluyente de los intereses estrechos del gran
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
9/20
Convocatoria al XXV Congreso Nacional de l Partido Com unista de Chile
capital . Tales
prácticas
no son
nuevas,
y
bien
podemos af i rmar
que
ninguna nación
se ha
l ibrado en algún momento de sus nefastas
consecuencias.
L a
reaf i rmación permanente del derecho de
las
nac iones
a su
autodeterminación, cobra
en
nuestros
días un a
extrema vigencia.
La
soberanía nacional , el derecho a d isponer
libremente
de sus
recursos naturales,
la
urgencia
de
combatir
lo s
desas trosos efectos
del
derroche
y el uso
irraciona l
de las
fuentes
de
energía que
ponen
en
riesgo
la
supervivencia
misma de la
humanidad,
son
tareas inm ediatas
que cada país y el
conjunto
de las
nac iones
deben abordar
con la
m áxima d ecisión. Tod os
estos
males
tienen
un domic i l io conocido y
culpables
sobradamente ident i f icados:
son e l
gran
capital,
cuya concentración
ha
alcanzado
niveles propios de las más v ie jas leyendas.
Las
cifras hablan
por sí
solas
y el
listado
de
las grandes fortunas
en
cuya contemplación
tantos se complacen, no hace s ino subrayar
la
i r rac ional idad de un mundo regido por
un puñado de déspotas amparados en una
escalada armament is ta de una magnitud que
tampoco
tiene
preceden tes en la historia.
Las
nuevas estrategias
de
desestabilización, la
permanente
batalla por el cumplimiento del
Programa
y los des afíos
sociales
y
políticos.
En
todos
esos
p rocesos
de
de sestabi l ización
en nuestro continente ha habido un factor
común:
los
tanques
y
fusi les
no son las
únicas
armas
de lucha del imperial ismo, también lo
son los
medios
de
comun icación mas iva.
Los
grandes
medios han ocu pado una posic ión de
vanguardia
en la
contención
de los
cambios,
llegando a ser incluso más incidentes que las
propias dere chas políticas
del
continente.
H an
usado
intensas ma niobras de desinformación,
coordinadas
regionalmente,
que
pretenden
radicalizar
a la
soc iedad tratando
de
neutral izar
los
v íncu los
de
ésta
con los
procesos
de
reformas. Son
estrategias
que, en pro de una
seudo "libertad y democracia , intentan torcer
el
rumbo
de la
historia
y
hacer retroceder
al
continente
hacia
la
hegemonía imperial
sin
contrapeso.
En
Chile, esta acción
se ha
incrementado
con
fuerza
y virulencia. Nuestro Part ido debe
asumir la
exigencia
de
normas jurídicas
que
incorporen
el
derecho
a la
com unicación
y a la
l ibre ex presión de l pueblo, co m o tarea
política
prioritaria
en la
lucha
por
democratizar
la
institucionalidad mediática.
El pueblo
de
Chile debe abrir
la
discusión
sobre
la
necesaria existencia equitat iva
de
tres
tipos
de medios, revalor izando el rol
del
Estado
como un actor t rascendental del
campo comunicacional,
lo que se
expresa
en
la
creación, reformulación
y
fortalecimiento
de
m edios públ icos como
TV N y el ex
d iario
La
Nación.
Del
mismo modo, presionar para
la
creación
de
herramientas legales
que
permitan
fortalecer
la
presencia
de
medios locales
y
comuni tar ios que den voz a la divers idad del
pueblo
y, por
último,
el
establecimiento
de una
regulación clara
que limite la
concen tración
de
la
propiedad de los medios de comunicación
privada
e
impida
la
p rop iedad
cruzada
entre
g i ros económicos diversos y aquel los
relacionados
con la
producción
de
conten idos
culturales e informativos. La
perspectiva
cada
ve z
más presente de la comunicación como
un derecho colectivo, es una clara derrota
ideológica para el argumento neoliberal que
asocia
e l concepto de "libertad de prensa a un
libertinaje d e emp resa que redu ce su ejercicio
a
un mon opol io en manos de quienes ostentan
el
poder económico.
En
nuestro país,
lo que se ha
incremen tado
co n
mayor agudeza
es la
disputa
por la
hegemonía
de la dirección del proceso
político.
Esta pugna
se
vive
en
medio
de una severa y
creciente
crisis
de representación del sistema político-
institucional y de los partidos.
Esta
crisis no
es reciente,
ha
sido latente
por décadas y hoy
empieza a
manifestarse
de
forma
más
directa
7
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
10/20
onvocatoria al XXV
ongreso Nacional
del Partido omunista de hile
y desafiante. Las desigualdades estructurales
generan descontentos sociales
y
desafección
de la
c iudadanía.
Del
mismo modo,
los
casos
de
corrupción y el poder del gran negocio
sobre
la
política
han
abierto grietas difíciles
de cerrar. Si ya en las elecciones municipales,
parlamentarias
y
presidenciales
pasadas
tuvimos
baja participación,
lo que hoy
ocurre
en el
país podría incluso disminuir
más la ya
reducida presencia c iudad ana en esos procesos.
Sin embargo, lo que es real es que las mayo rías
nacionales incrementan sus esperanzas por
cambios sustantivos y e structurales, y desean
participar
en
esos cambios,
no
sólo
se r
consultadas. Incluso, perciben la necesidad
de una nueva
Constitución
Política por vía de
plebiscito o asamblea.
Las
significativas reformas que nuestro
Sffiri
Gobierno de Nueva Mayoría ha logrado hacer
leyes
de la
República,
so n
pasos determinantes
para
consol idar
en un
futuro
cercano
lo s
cambios estructurales. Pero son también
muy decisivos para sostener e incrementar
una
corre lación
de
fuerzas socio-polít icas
que
consol ide
e l
rumbo
del
proceso
en su
totalidad.
En la real ización del Programa, en los dos
primeros años de gobierno se han dado pasos
sustantivos: el nuevo sistema electoral; las
leyes sobre educación ya aprobadas, que
apuntan a superar la desigualdad y avanzar en
gratuidad y cal idad ; las que ponen fin al lucro y
al
copago;
el
nuevo
ministerio de la
Mujer
y las
leyes que otorgan mejores condic iones para
la
igualdad de género; las normas legales que
mejoran las condic iones laborales de las y los
trabajadores, son claros ejemplos de ello.
E s el
caso
del
término
del "multirut", y el
paquete
de
reformas estructurales
tendientes
a superar el agudo deseq uil ibrio en la relación
capital-trabajo, las inversiones en el sistema d e
salud, las cualitativas mejoras a las condic iones
del magisterio y la Carrera Nacional Docente;
las leyes para
e l
financiamiento público
de los
partidos y de las campañas, que separan el
poder del gran negocio de la actividad política.
Sin embargo,
a
dialéctica misma
de
este proceso
ha acentuado la posibil idad de un retroceso.
La
derecha, severamente golpeada, empuja
con su fuerza fáctica y político-mediática hacia
un escenar io que le permita dividir a la NM,
deshacer
las
reformas
e
incluso reconquistar
el gobierno nacional. Si bien la derecha no ha
podido
tomar
plenamente la ofensiva política,
también es
necesario asumir
que la NM y su
Gobierno, tras sucesivos esfuerzos, tampoco
logra recomponer
totalmente
la iniciativa
qu e mantuvo en su
primer
año. La derecha
está
muy
lejos
de ser un
enemigo
derrotado,
incluso se siente con capa cidad para impulsar
expresiones de
descontento
social y de masas.
Severamente
golpeada, ese sector busca
recomponer fuerzas para reconquistar
el
gobierno y derogar las reformas apro bad as.
Al
interior de la NM, sectores que en el
primer
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
11/20
onvocatoria al XXV
ongreso
Nacional del Partido omunista de hile
año del
Gobierno
no
tenían mayor espacio
para
imponer sus
políticas,
hoy tienen más
fuerza en su interior y buscan tomar e l contro l
del
proceso
de
reformas
y de
real ización
d el
Programa,
acotando y reduciendo el sent ido
de las
t ransformaciones. También
al interior
de la NM hay una disputa ideológico-política
de
mayor calado
por la
direccional idad
del
proceso.
E l asunto
central
es que la
disputa
por la hegemonía de la d irección del proceso
se
ha agudizado con la derecha pero también
al
interior de la NM.
Aprovechando en su favor los insuf icientes
resultados de la
política
de reactivación
económica del Gobierno, la derecha combinó
en su favor la crisis de descon fianza ciudadan a
en la política y las
correcciones
a la
baja
de
diversas
proyecciones
de
crecimiento
en
Chi le
y América Latina y
logró
generar una crisis
de Gabinete
que terminó en la sustitución
del
equipo económico
y político que
había
encabezado la
primera etapa
del
Gobierno.
Se perfilan de
esta man era posiciones diversas
en el seno de la Nueva M ayoría. De una
parte,
ha y quienes quisieran buscar la solución del
bajo crecimiento económico en los
propios
mecanismos
de
"ajuste automático"
de una
economía como
la
chi lena:
el
neoliberalismo,
en
estos casos, recomendará
una vez más
ajustar empleos
y
salar ios
a la
baja
por la vía
del mercado. Ciertamente, en esta mirada las
reformas lab orales son vistas como un pel igro.
Por otro
lado,
está la visión
alternativa
de los que
consideran
queen
momentos dedepresión
d e a
inversión privada corresponde principalmente
al
Estado,
a
través
de una política
fiscal
y
monetaria,
activar las
palancas
reactivadoras.
Esta pugna pudiera sintetizarse en la opo sición
entre
lo que se entiende por "crecimiento"
en los marcos neol iberales y por lo mismo
depend ientes, de un país exportador sin
"valor
agregado ,
y la
consecuente posición
dependiente de nuestra economía en el
marco
de hierro de la
economía
global, con
la
perspectiva, urgente
y
posible,
de un
plan
de "desarrollo"
que
ponga como prioritarios
tanto
la urgencia del "valor agregado de
nuestras exportaciones como una concepción
soberana
que se proponga la creación de un
mercado interno de
producción
y de
consumo
que
devuelva
al
país
la
plena soberanía
de sus
recursos
naturales
y las
amplias posibi lidades
de instauración de un mercado nacional,
sino cerrado
a las
real idades
del
mercado
mundial,
sí consciente de la necesidad de
establecer
la condiciones para el impulso de
una
industr ia nacional proveedora
de plazas
de trabajo
para
las
amplias mayoría dejadas
de lado bajo el esque ma subsidiario y
dependiente instaurado por la dictadura.
Recordando lo s
acier tos
y
errores
de
quienes
fuimos protagonistas
d el intento
revolucionario
chi leno
entre
1970 1973,
podemos deci r
que
la real ización de las reformas económicas
se
constituye
en un
campo
de
batalla
principal de las luchas por la dem ocrac ia que
impulsan lo s comunistas y la Nueva Mayoría.
En esta batalla,
la
Nueva Mayoría
y su
Gobierno deberán combinar armoniosamente
la
real ización,
en los
plazos previstos,
de
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
12/20
Convocatoria
al XXV
Congreso Nacional
de l
Partido Com unista
de
Chile
las grandes reformas estructurales con la
adopción
de
medidas concretas
e
inmediatas
qu e
signifiquen
la
solución
o, al
menos,
avanzar
a la superación de carencias dramát icas
y largamente postergadas que afectan a
un a mayoría c iudadana
que
razonab le
y
real istamente aspira a un
futuro
mejor.
Problemas
de salud, educación en todos sus
niveles, transporte colectivo, vivienda social
y seguridad ciudadana no pueden esperar.
Tenemos
presente
que no
basta
co n
idear
las buenas soluciones, también
es
necesario
comunicar las
bien y convocar a lo s involucrado s
a participar de ellas. En este cuadro, la tarea
prioritaria
de los
comunistas
es
hacer todo
lo que esté a nuestro alcance para real izar el
Programa de Gobierno, incluido el inicio de un
proceso
político
y de
masas
hacia
una nueva
Constitución Política.
No es posible culminar la transición y
profundizar
la
demo cracia
en los
marcos
de la
antidemocrática Constitución del 80, ilegítima
en su origen y creada para
impedir
el avance
político y social. L a norma super ior del Estado
debe corresponderse
con e l
momento histórico
concreto
que
vive
la
sociedad
y
facilitar
el
paso
a
un a
democrac ia
avanzada
que
garantice
las
condic iones de vida del pueblo y la eficacia
real, n o d iscursiva, de cada uno de los derechos
fundamentales de los c iudadanos conforme a
lo s
estándares internacionales contenidos en
tratado s y convenios suscritos por nuestro país.
Debe ponerse
fin a la
conce pción reaccionar ia
del
Estado
subsidiario .
La nueva Constitución no debe se r obra de
un "grupo
selecto , sino
el
fruto
de la discusión
colectiva y abierta de
todoelpuebloy ratificada
por un plebiscito. No
renunciamos a
priori
a ningún camino
que
haga posible un nuevo
texto constitucional, en
primer
término a una
Asamblea Constituyente
1
como redactora del proyecto, y estamos
abiertos a las propuestas que permitan sortea
los escol los establecidos por la Constitución
del 80 para impedir su reemplazo, siempre y
cuando
se trate de propuestas en cuyo centro
esté
la part icipación del conjunto del pueblo
sus
organ izaciones y un plebiscito final.
Debemos
asumir, desde ahora, que éste debe
ser un asunto de masas, de las mayorías
nacionales,
y que el rumbo y conquista de
este objetivo histórico tanto como el de
las reformas, con el que hay una relación
dialéctica, dependerá de la fuerza de masas que
logremos movilizar, con ¡deas, con propuestas
y convicción dem ocrática.
No
podemos, meno s
ahora, pon erle fecha y hora al término de este
proceso.
Sí, iniciarlo en este
tiempo
político,
para
efectivamente ganarlo.
El
proceso
al
cual convocó
la
Presidenta
Michelle Bachelet comenzó
en
septiembre.
Lo importante es darle
total
prioridad política
a esta
batalla,
y es posible que tal proceso no
culmine en el actual período de gobierno.
Po r otra
parte,
no
tiene
ninguna viabilidad
democrática radicar
el
proceso hacia
una
nueva
Constitución Política en el actual Parlamento,
tanto
por la
situación
de
crisis como
por la
forma en que este Par lamento fue
elegido,
esto es, con vigencia del sistema
binominal.
Todo
indica que, de acuerdo a la co rre lac ión
de masas,
política
y de ideas que alcancemos,
deberíamos
analizar en profundidad el camino
que permita que todas las elecciones futuras
(municipales, parlamentarias y presidencial)
tengan el carácter político de e lecciones
"constituyentes", como una forma concreta
S M D
P R L M E N T R I
R i S M B L E CONSTITUYEN
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
13/20
Convocatoria
al XXV
Congreso Nacional
de l
Partido Comu nista
de
Chile
de
motivar
la
part icipación ciudadana
en las
elecciones y de
orientar
sus
resultados hacia
la definición
de la
nueva Co nstitución Política
refrendada en un plebiscito.
Pero
la
co nsol idación
de lo
avanzado
es
todavía
un campo en disputa, y por eso adquieren
una
urgencia e intensidad de
primer
orden en
nuestras tareas políticas
la s
acc iones
y
pasos
para alcanzarla.
En
el terreno de las real izaciones inmediatas,
hoy requerimos consolidar polít icas públicas
en
salud,
en
educación,
en
transporte
y en
la batalla
en
contra
de la
del incuencia
y el
narcotráfico, que tengan impacto
inmediato
en las
condic iones
de
vida
de la
c iudadanía,
especialmente de los más pobres y golpeados.
Una buena parte de la ciudadanía sigue
expresando malestar profundo en estos
ámbitos, y con razón espera y exige que
esto cambie. Debemos asumir este desafío
y reconocer, autocríticamente, que en estos
aspectos nuestro Gobierno no ha logrado
cambios
perceptibles.
La reforma laboral es un cambio estructural
que sí
tiene
un
impacto inmediato
y
debemos
se r
los
primeros agitadores
de su
relevancia
para lo s t rabajadores, pero también para la s
amplias m ayorías naciona les. Del mismo
modo,
la reforma
en el
sistem a
de
ed ucación super ior
es
un logro que tiene impa cto inm ediato en las
mayorías
n ac iona les.
La imperiosa necesidad
de un
nuevo modelo de de sarrollo
En
e l marco del
objetivo
agotamiento del
modelo de acumulación monetar is ta-
especulativo,
surge como necesidad
avanzar
hacia
una
nueva polít ica económica.
Hemos
dicho que hoy podría apuntarse a
una moderada recuperación económica,
especialme nte h acia f inales de 2015. Con
todo,
la salida de este ciclo no puede l levarnos a
ignorar que lo que demuestran las coyunturas
críticas
de
2008/2009
y de
2013/2014
es el
agotamiento
del
modelo
rentista
instalado
en
nuestra economía
por el
neol iberal ismo.
No
deja de
sorprender
que la
mismísima revista
T he Economist af irme que para superar la
debil idad
del
crecimiento económico,
las
economías
de América Latina deben superar
su crónica debil idad estructural: elevar las
tasas
de
ahorro
e
inversión, mejorar
las
exportaciones, diversif icarse y aumentar la
productividad.
Se trata,
en
nuestro caso ,
de un
modelo rentista
que permite la
explotación inmisericorde
de
los
recursos naturales por grande s mon opolios
nacionales
y
foráneos.
U n
modelo depredador,
basado
en la
exportación
de
recursos
co n
muy escaso valor agregado. Que permite la
obtención de
riquezas
cuantiosas
al
gran capital,
y que distr ibuye muy poco a quienes part icipan
de la activ idad económica. Recordem os que en
nuestro país, según estudios
de
especial istas
de la
Univers idad
de
Chile,
el 1% de los más
ricos se apropia de l 3 2% del Producto Interno
Bruto (PIB).
En
estas condic iones, po r ejemplo, se agravan
a niveles dramáticos
las crisis del
agua
y de
la energía. E l gran capital privado no tiene
interés alguno
en
resolver las
con un criterio de
bienestar
social
y de
futuro.
Más
aún, este mo delo rentista
se ha
con stru ido
sobre las
reglas impuestas
a
sangre
y
fuego
por
la dic tadura neol iberal de Pinochet. El Estado
definido por la Constitución del 80 -la que
nos
hemos propuesto reemplazar- tiene
por
f inal idad asegurar la l ibertad económica para
lo s
grandes empresar ios
y
establecer
e l
papel
subordinado o "subsidiario" del Estado . Lo
que reafirma la necesidad de un nuevo texto
consti tucional
para
restablecer, por ejemplo,
el principio de que la propiedad pr ivada no es
absoluta
ni está por encima de otros valores
superiores, com o
son la
respo nsa bil idad social,
la solidaridad colectiva y la función social de la
propiedad
que
existía antes
del
golpe
de
1973.
De aquí
también
se deduce la necesidad de
11
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
14/20
onvocatoria al XXV
ongreso
Nacional del Partido omunista de hile
que el Estado esté facultado para nacio nal izar
o crear emp resas estata les o públ icas, a través
de insti tuciones cen trales o ent idades públ icas
com o gobiernos regionales y m unicipalidades
o
aportar recursos
a
cooperat ivas
u
otras
empresas sin fines de lucro con el fin de
diversificar la propiedad empresar ia l . Es
necesario
dotar
al
Estado
de la
capacidad
de
emprendimiento
económico,
entendido
en el
amp lio sen tido del término.
Hay que cambiar progresivamente el modelo.
No echaremos por la borda las asoc iac iones
público-privadas
que
impulsa
el
Gobierno,
pero debemos acotarlas y cal i f icarlas mejor.
La experiencia muestra que no debemos
concesionar servicios públicos
vitales,
como
son los
casos
de la
salud
y el
transporte
público. Junto
a la
estricta regulación
de la
actividad privada
-y
sobran
los
ejemplos
que
la
justifican-
es la hora de ampl iar la esfera
de la econom ía socia l, de la inversión públ ica
directa en infraestructura y en la producción
de bienes con alto valor agregado.
Pues
si
la sola asociación públ ico-privada continúa
siendo la base principal de nuestra estrategia
económica, entonces
es muy
posible
que la
economía y la
sociedad
se
hagan
aún más
dependientes de los intereses del capital
f inanciero y de los grupos económicos.
El contexto
internacional, en tal
sentido,
es
un a oportunidad. Es una tarea fundamental
avanzar
en
esta materia, para hacer
un a
propuesta só l ida en el futuro. Muy vinculado a
esto, está
el
avanzar
en un
futuro
Programa
de
Gobierno.
No se
trata
de
adelantarnos porque
sí: el
esfuerzo
es
para que,
a
partir
de
ahora,
generemos un debate que for ta lezca la unidad
política de la NM y le dé perspectivas, en una
lucha
y debate de ¡deas que en este plano será
dura.
Un aporte sustant ivo, que emane de este
congreso nacional, debe ser la propuesta
del
futuro
Programa de Gobierno. Una carta
de contenidos que apor temos a la Nueva
Mayoría y al pueblo de Chi le. Con humildad,
pero
con
firmeza,
proponer nuestras ¡deas
de un Programa de Gobierno que consol ide
las
reformas establecidas
y
continúe
con e l
proceso e structura l
de
profundización
y
lucha
por la democrat ización del país
para
superar
la desigualdad y conquistar el nuevo Estado
Democrát ico.
La
importancia de las elecciones
que vienen
Todo indica
que las
elecciones nacionales
seguirán
s iendo cont iendas
de
cuyos
resultados dependerá, en parte muy
importante, la dirección del proceso político.
Ahora, con sistema proporcional moderado,
las posibi l idades
se
abren
para
crecer
y
para
reducir la sobre representación de la derecha.
Sin embargo, el escenar io no será nada de
fácil.
Es
mejor enfrentar lo desde
la
óptica
del
máximo esfuerzo para lograr los resultados
que se requieren. T ene mo s t iempo s polít icos
acotados para
o rdena r
la s
fo rmas
de
t rabajo
partidario en función de
este
objetivo
primordial.
Lo s próximos meses deberían se r para resolver
y hacer síntesis respecto del ordenamiento
del
trabajo partidario.
En las
elecciones
municipales, nuestro objetivo de crecer en
representación de Part ido debe estar en
armonía
con el
objetivo
de
fortalecer
la NM (no
12
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
15/20
Convocatoria al XXV ongreso Nacional de l Partido Com unista de Chile
infligirnos derrotas entre nosotros), desplazar
a
la derecha (disputar le las comunas que hoy
están en su poder) y crecer en representación
democrática (analizar eventuales
al ianzas
coyunturales
c on
fuerzas externas
a la NM que
compar tan el objetivo principal de desplazar a
la
derecha).
Del resultado
de las
próximas elecciones
municipales
depende en medida importante e l
ordenamiento
de la s
uerzas
adversarias,
dé las
propias, de las de la NM y de las que podamos
construir en al ianzas fuera del bloque, aunque
sean c i rcunstanciales.
Del mismo
modo,
las posibi l idades de crecer
en representación
partidaria
en las elecciones
parlamentarias
son
objetivas. Pero ello implica
abordar
en
este
tiempo político todo
lo que
haya que resolver en materia partidaria,
para comenzar
el
traba jo político-electoral
en los terri torios en don de tendremo s,
necesar iamente, mayor concentración de
esfuerzos. Sin
embargo,
se hace necesario
sacar lecciones y hacer síntesis respecto del
trabajo parlamentario. Part imos de un balance
muy posit ivo respecto del trabajo de los
comunistas en el
Par lamento. También como
instrumento
de
co nstrucción
de
fuerza
en los
distritos y territorios. Todo el lo ha sido un
esfuerzo sustantivo. Sin embargo, requerimos
mejorar e l trabajo part idario en este aspecto,
evitar cualquier tipo de deformación,
entrelazar mucho
más
estos quehaceres,
poner en el centro la real ización de la política
partidaria, en todos sus aspectos y desde al l í
evaluar nuestro trabajo político tanto como
dirección
nac iona l como
e n
cua nto di recciones
regionales, comunales y de células. Nadie
puede estar ajeno
a
este esfuerzo.
La
urgente necesidad de fortalec er
el sujeto principal
En
la
m isma dirección
d e
esfuerzo, necesitamos
acelerar
con un sentido de urgencia el ritmo
de
construcción y crecimiento cuali tat ivo del
sujeto principal que hemos
definido
para
el
proceso
histórico en curso.
Se trata, nada menos,
que de la
independencia
de
clase
del
sector ampl iamente mayor i tar io
de la
población:
los
trabajadores,
aquellos
que viven de un sueldo o un salar io por la
venta
de su
fuerza
de
trabajo.
De la
fortaleza
de sus
organizaciones, part icularmen te
sindicales,
depende
en una
medida sustantiva
el carácter de los procesos políticos y sociales.
Como
partido
identificado con sus intereses,
hemos sostenido
invariablemente
y en tanto
"principio"
el pluralismo político e ideológico
de las organizaciones de los t rabajadores, sin
que por el lo renun ciemo s al deb ate ideológico
a
llevar adelante en su seno para la af irmación
indispensable
de su
independencia ideológica
en tanto clase para sí .
Este
ha sido, también, un asunto de varios
congresos
nacionales
d el
Partido
y de
sucesivos
plenos del comité central. Históricamente, en
Chile el
sujeto
principal ha sido fundamen tal
en la con strucción de alianzas, de fuerza y de
avances.
Pero también debemos asumir que
las
derrotas
han
s ido profundas
y han
dejado
secuelas
difíciles de remontar. Las décadas de
construcción cualitativa del sujeto principal
der ivaron
en el
gobierno revoluc ionar io
de la
Unidad Popular, en cuanto programa nacional
y en
cuanto
una
hegemonía que, social
y
culturalmente,
fue
determinante.
Esa
experiencia fue derrotada, y, especialmente
en el, para nosotros, trascend ental XV
congreso nacional part idario, formulamos la s
lecciones
de ese
período histórico.
En la
lucha
en
contra
de la
dictadura,
la resistencia e incluso la sal ida (por
desplazamiento del poder fascista), estuvieron
marcadas
por la
fuerza
que
logramos empujar
de s de y c on el sujeto principal: los t rabajado res.
13
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
16/20
Convocatoria
al XXV Congreso
N acional
del
Partido C omunista
de
Chile
La
sal ida pactada
(en un tránsito
permanente)
también ha estado marcada por los intentos
de los sectores dominantes de fragmentar,
dividir
e
inv isibilizar
a los
trabajad ores. Ningún
esfuerzo
de resistencia a esos propósitos ha
sido e n vano .
El
actual proceso
político
qu e vive Chile,
también ha sido posible porque el sujeto
principal
ha
logrado mayores espacios
de
inc idencia socio-polít ica.
Sin embargo,
hoy
vivimos otro momento,
un
nuevo ciclo
y s e
requiere
dar
saltos cualitativos,
en
breve
tiempo político,
para que el sujeto
principal se a mucho m ás incidente en las
alianzas, en el programa y en la disputa por la
hegemonía
en la
dirección
del
proceso
político
nac iona l
en curso.
Este
no es, básicamente,
un
problema orgánico,
es
esencialmente
un
problema político e ideológico.
Sin embargo,
eso
también
se expresa en
las
formas orgánicas
que
adoptemos para
enfrentar el desafío. Necesitamos mucha
más concentración part idaria
en
esta tarea
determinante.
Este
factor
es
decisivo
en la
correlación social y política por u na hege mo nía
que
impulse
las
t ransformaciones.
E l
Partido
necesita
acentuar mucho más sus esfuerzos
dest inados
a
fortalecer
en la base
social,
en
los
territorios, en los cuerpos intermedios,
en los fren tes so ciales, el sujeto socio-político
principal de la correlación de fuerzas que
impulsa y
llevará adelante
la s
t ransformacione s.
Esta es una tarea primordial.
La
irreal con tradicción entre estar
en la
cal le
o en La
Moneda"
ha
quedado superada
por
los hechos, y se t rans forma en una car icatura.
Sin embargo, sí debemos cons iderar asuntos
más p rofundos
que nos
desaf ían. H emos s ido
inc identes desde comienzos
de la década de
los noventa del siglo pasado en abrir paso a los
movimientos
sociales.
Un
cam ino largo,
difícil,
intenso y por momentos lento. De avances
y
retrocesos,
enfrentando
fuerzas
que han
buscado reducir
y aún
minimizar
la
presencia
y
el protagonismo del sujeto principal y de los
movimientos
sociales e n
general.
Un asunto central se halla también en las
preocupaciones y p lanteamientos de otras
fuerzas políticas, lo constituye el insuficiente
grado
de
part ic ipación c iudadana
en los
asuntos
que le competen y que comprometen
su cal idad de vida. Es una tarea impostergable
hacer
lo s
máximos esfuerzos
por
fortalecer
las
var iadas organizaciones
a
través
de las
cuales
se expresan las part icularidades de
nuestro pueblo y se encauzan su s demandas .
No en
vano
una de las
gestiones
en que
mayor
empeño puso
la
dictadura
y sus
partidos
políticos
fue la
destrucción
d el
riquísimo tejido
social en que se organizaban y expresaban as
grandes
masas urbanas
y
rurales
de
nuestro
país.
Pero a la gente" no
basta
co n
escuchar la.
Hay que dotarla de un poder efectivo,
devolviéndole
así sus
niveles
de
autonomía
como
su
capacidad
d e influir en las
políticas
públicas que desde lo s niveles locales hasta los
de
carácter central afectan
su s
vidas.
E l
añ o
2011 marcó
un hito
determinante,
y
se abre
u n
nuevo ciclo signado
por el ascenso
del
protagonismo social y popular. Algunos
pretenden olvidar, rápidamente, los
años
previos a
2011.
Los
paros
y
marchas
de los
profesores,
lo s
estudiantes,
las
agrupacion es
de defensa de los derechos humanos, lo s
medioambiental is tas, la Central Unitaria de
Trabajadores
y diversos sectores que expresan
el ampl io mundo del trabajo chi leno, las
mujeres, el pueb lo mapuche y diversas etnias,
múltiples
organizaciones
de la
diversidad
de
género, permanentes expresiones
que
14
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
17/20
Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Com unista de Chile
demandan
regionalismo
y descentralización.
Pero
también
hay
v is iones
que
buscan
dar
por superado el
hito
histórico que marcaron
las
multitudinarias
marchas nac iona les
en
2011, bajo el gobierno derechista de Sebastián
Pinera. Lo
claro
es que
t odas ellas
so n
expresiones sociales
latentes
y por
momentos
mani festaciones
multitudinarias,
que levantan
propuestas y
exigen
se r
parte
de un
proyecto
nacional
democrát ico.
En
este contexto histórico nuevo, requerimos
considerar que los
movimientos
sociales y
la dirección
que
adoptan
son un
campo
en
disputa
política
e ideológica. Junto a la tarea
permanente
y
recurrente
de
seguir
c on
fuerza
en la construcción de sujetos y mov imientos
sociales,
necesi tamo s af inar n uestros esfuerzos
para incidir
más y
mejor
en la
conducc ión
de
el los.
De
hecho,
hay
sectores interesados
en infligir derrotas polít icas y tácticas a
lo s comunistas, a
partir
de sus eventuales
retrocesos en el campo de la representación
social. Con
esto
se busca
golpear
el
p roceso
de
cambios
y
reformas
que
está
en
curso,
y la
dirección polít ica del proceso en su conjunto.
La
derecha interviene
en
esta disputa
muy
act ivamente. También
lo
hacen sectores
que
desde autodef in idas
posic iones
de
izquierda,
tratan de asestar derrotas a los comunistas
y a la
Nueva Mayoría. Estos fenómenos
debemos enfrentarlos para asegurar que los
movimientos sociales y en especial el sujeto
principal, jueguen
el
papel determinante
en la
correlación de
fuerzas sociales
y
política
que
las transform acione s requieren.
No es nueva en nuestra
historia
la prédica
del apoliticismo
como a rma
de la política. Tal
expediénteosla
en
el abecé de la
derechay de
lo s
grandes
patrones.
Sin
duda
que la
política"
se
halla
en en tredicho y con ci ta a sí la ind iferencia
como
el
repudio
de
vastos sectores
y muy
part icularmente
de la
juventud.
Para
superar
esos
estados de án imo se
hace
ind ispensable
enfrentar
con
respeto
y
serenidad, pero
necesar iamente también con c lar idad,
mani festaciones
maximal is tas
e inmediatistas
que en nada contribuyen a su saneamiento. E l
pueblo d ebe percibir "meridianamente", como
solía decir
el
Presidente Salvador Al lende,
que
hay otra forma de hacer polít ica en el lo los
comunistas
debemos
ser
p ioneros, aunque
sin la
menor pretensión
a la
infalibil idad
ni a
postularnos como
un
"modelo",
sino
a
través
de una
práctica consciente
y una
vigi lancia
permanente de nuestra propia conducta en
el seno de las organizaciones populares. La
revocación de los
mandatos,
en
todos
los
niveles
de la
representación popular, debe
establecerse como un pr inc ip io en nuestro
ordenamiento institucional.
El
necesario crecimiento
del
Partido
Esta
tarea, debemos ubicar la
en el
contexto
político y en la
perspectiva
de los
desafíos
que nos
hemos planteado.
Se
trata
de un
crecimiento
cuantitativo,
ojalá en e l menor
tiempo
posible, en el espesor d el seno d e las
masas,
ta l como realmente son, reduciendo
al máx imo las exigencias para su adhesión,
mil i tancia
y
comprom iso partidario.
No
tenemo s otra opción.
Las
o rmas orgánicas
para
incorporar
a
este
contingente
deben
ser
las ade cuadas a sus niveles d e conc ienc ia . No
hay otra exigencia ante quienes
dan el
paso
de
incorporarse
a
esta bella tarea, pero
que
también es com pleja y difícil.
Por
otra parte,
tan
relevante como
lo
anterior
es el crecimiento cualitativo del Partido.
Requerimos
mejorar
la
calidad política
en la
15
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
18/20
onvocatoria al XXV ongreso Nacional de l Partido omunista de hile
conducción e n todos los niveles, desde las células
hasta el
comité
central. Colectivos que potencien
la
realización de la
política,
con imaginación,
co n fuerza y
determinación,
con un acabado
conocimiento
de la
realidad social
y política de sus
territorios y ámbitos de
acción,
siempre cuidando
la
unidad
del
Partido.
Este
tiempo histórico requiere
de la
realización
de la
línea
sin
titubeos, pero también haciendo
los
esfuerzos para adelantarnos
a los
escenarios
y
actuar
en consecuencia. Las direcciones, e n todos
los niveles, son las responsables de la realización.
Todavía
tenemos
demasiadas
trabas que emanan
de tensiones, e incluso de disputas al
interior
del
Partido, que dificultan, en definitiva, la realización
de nuestra línea política en toda su
ntensidad.
Este
clima debemos superarlo ahora, con generosidad
y
altruismo,
que son los
valores
que
emanan
de
nuestra tradición ya más que centenaria.
El
tiempo político que nos tocará
vivir
requerirá
de
un Partido y una Juventud Comunista unidos,
solidarios, flexibles y sólidos en sus principios y en
la
aplicación de la línea. Siempre es necesario e l
plantearse fortalecer y enriquecer el centralismo
democrático.
Para
derrotar
la
hegemonía
derechista, necesitamos
también
darle prioridad
a
nuestro trabajo
político y de masas en
ámbitos
referidos a lo comunicacional, lo cultural y los
llamados
"poderes fácticos". Si
bien debemos
avanzar
en
ideas programáticas
en
estos ámbitos,
tan urgente como lo anterior es plantearse la
construcción de sujetos populares y ciudadanos
que empujen y hagan posible el
avance
en estos
aspectos.
El Partido debe reordenar su s formas de trabajo
político
para dar prioridad a estos aspectos de la
realización de su
política.
Esto necesariamente se debe reflejar en el
trabajo orgánico del
Partido,
en todos sus niveles.
Hay
que cambiar todo lo que se necesite, para
dar paso a formas orgánicas que,
efectivamente,
den
prioridad
a
estos ámbitos
de la
lucha
política
e ideológica. La batalla ideológica se agudiza y
supera la hegemonía cultural y comunicacional
qu e
mantiene
la derecha, hoy se hace más
necesaria para
consolidar y
seguir avanzando.
El
Congreso Nacional del
Partido
Comunista de
Chile se
produce
en
medio
de un
cuadro
político
de
gran movilidad. Necesitamos estar atentos
a los eventuales cambios y hacer los esfuerzos
para adelantarnos e incidir en ellos. Debemos
considerar
en
nuestro
debate
y
nuestros
esfuerzos
políticos este antecedente crucial. Requerimos
acentuar nuestra flexibilidad táctica.
La
batalla po r verdad y justicia es una lucha po r
un
país
realmente democrático, con memoria
histórica y con conciencia de
futuro.
Debemos
proponer
que la
futura
Constitución Política
parta señalando: ¡Nunca Más en Chile golpes y
terrorismo de
Estado
Un texto que
considere
a os
derechos humanos, universalmente reconocidos,
como aspectos esenciales
de la
futura
carta
fundamental.
Iniciamos
un
Congreso Nacional
que
debe
abordar no pocos desafíos en un nuevo ciclo.
Nos acompaña nuestra historia y los miles y miles
de compatriotas de los más diversos orígenes
y condiciones que resistieron hasta alcanzar el
estatuto de héroes y mártires que lucharon por los
nobles ideales humanistas de justicia y
libertad.
En
las filas de l pueblo nadie es un
"anónimo".
Sus
nombres
y sus
vidas
tienen
un
lugar permanente
y
emocionado
en
incontables hogares,
en escuelas
y
organismos populares, en regimientos y centros
de
producción
y
trabajo.
A
ellos
nos
debemos.
De
este árbol
de
hojas verdes siempre perennes,
deben brotar ahora nuevos
frutos y
flores
para
seguir adelante,
i Viva Chile, viva el pueblo, vivan lostrabajadores "
16
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
19/20
-
8/20/2019 Convocatoria al XXV Congreso Nacional del Partido Comunista de Chile
20/20
Consolidar los cambios
Para seguir avanzando