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Gracia a Vosotros: Desatando la Verdad de Dios, Un Versculo a la Vez
Orando en todo tiempo Escritura: Efesios 6:18-24
Cdigo: 1962
John MacArthur
Esta maana llegamos al sexto captulo de Efesios por ltima vez, porque vamos a terminar
nuestro estudio de este libro maravilloso. Entiendo, como mencion la semana pasada, que
este es el mensaje 62 o 63 en nuestro estudio de Efesios y pienso de nuevo, como cuando
cierro un libro, que hemos pasado ms de un ao estudiando este libro, que realmente no
hemos comenzado a llegar a las riquezas y las profundidades que aqu estn; pero Dios
realmente ha cambiado nuestras vidas conforme hemos estudiado. Dios ha hecho algunas
cosas maravillosas.
Conforme miro hacia atrs, a los temas del libro de Efesios, probablemente en este libro, en
ms de un ao, hemos disfrutado el tiempo ms emocionante de nuestra Iglesia. Dios nos ha
confrontado en tantas maneras, con tantos pensamientos nuevos; ha hecho algunas cosas
dramticas en medio de nosotros y realmente ahora no llega a un fin, porque simplemente
tomamos todo lo que hemos aprendido, tomamos todo lo que Dios ha plantado en nuestros
corazones y comenzamos a aplicarlo aqu, conforme comenzamos a vivir nuestras vidas para
Su gloria. Un
Entonces, no dejamos el libro de Efesios. Simplemente, tomamos lo que hemos aprendido y
comenzamos a dejarlo moverse a travs de nosotros para la gloria de Dios, conforme vivimos
en este mundo. Pero llegamos en esta maana a la ltima seccin del libro y tomaremos esta
seccin como una unidad esta maana. Y quiero que escuche conforme leo los versculos 18
al 24.
Orando en todo tiempo con toda oracin y splica en el Espritu, y velando en ello con toda
perseverancia y splica por todos los santos; y por m, a fin de que al abrir mi boca me sea
dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del Evangelio, por el cual soy
embajador en cadenas; que con denuedo hable de l, como debo hablar. Para que tambin
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vosotros sepis mis asuntos, y lo que hago, todo os lo har saber Tquico, hermano amado y
fiel ministro en el Seor, el cual envi a vosotros para esto mismo, para que sepis lo tocante
a nosotros, y que consuele vuestros corazones. Paz sea a los hermanos, y amor con fe, de
Dios Padre y del Seor Jesucristo. La gracia sea con todos los que aman a nuestro Seor
Jesucristo con amor inalterable. Amn.
En el ao 1671, naci en Alemania un hombre llamado Johann Burchard Freystein. l escribi
las siguientes palabras de un himno antiguo, y cito: levntate alma ma a velar y orar. De tu
sueo, despierta. No ests inconsciente por el da malo o tomado, porque al enemigo bien lo
conocemos. Su cosecha l levanta mientras que el cristiano duerme. Vela en contra de las
trampas del diablo, no sea que se encuentre dormido a ti, porque, de hecho, l se esfuerza
por engaar y cegarte. Satans ataca como vctima a aquellos que estn durmiendo seguros
y no velan. Pero mientras que ests alerta, tambin ora al Seor de manera incesante. l te
liberar, l ser tu fortaleza y har que tu fe incremente. Oh Seor, bendice en afliccin y que
nada me mueva de la voluntad a servirte a Ti. Fin de la cita.
Ms de 100 aos atrs, Charlotte Elliott escribi las palabras de otro himno: cristiano, no
busques an el reposo. Despjate de tus sueos de comodidad. T ests en medio de
enemigos, vela y ora. Principados y potestades, sin que los veas, estn esperando tus horas
en las que no ests alerta. Vela y ora. Vela como si de eso dependiera nicamente todo el
da. Ora para que se te enve ayuda desde arriba. Vela y ora.
Estos dos himnos apuntan a la realidad de que la victoria sobre Satans, la victoria sobre sus
huestes, la victoria en la batalla en la que estamos involucrados, involucra un compromiso
tremendo con la oracin. Eso es lo que ambos escritores de los himnos estn diciendo.
Y eso es precisamente lo que el apstol Pablo est diciendo en el captulo 6, versculo 18.
Ahora, l ya explic la batalla en el captulo 6, versculos 10 al 13. Y l ya ha explicado de
manera muy clara la armadura en los versculos 14 al 17. Y ahora, l trae a la luz el tema de
la oracin. El versculo 18, comienza orando en todo tiempo.
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La oracin, entonces, se convierte en el tema de conclusin en la carta a los efesios. No se
menciona como parte de la armadura del cristiano porque es ms que eso. La armadura
termin en el versculo 17 y la oracin va por encima de esto. Y adems de eso, la oracin
est en armona con eso.
Entonces, el apstol Pablo no est diciendo adems de estas cosas, aadan la oracin. Sino
que ms bien, entretejido en esto est la oracin. Mientras que estamos ponindonos el cinto
de la veracidad y la coraza de justicia y el calzado del Evangelio de la paz y el casco de la
salvacin y la espada del Espritu, a lo largo de todo esto, estamos involucrados con esos
elementos, el escudo de la fe, al mismo tiempo estamos involucrados en la oracin. Orando
en todo tiempo, a lo largo del proceso de armarnos a nosotros mismos, a lo largo de las
demandas de la batalla, a lo largo del proceso de que est en el punto mximo de intensidad
o ms tranquilo en la batalla, estamos involucrados en la oracin. La oracin es el aire mismo
que respiramos.
Me acuerdo leer acerca del tipo de animal que vive en los lugares oscuros del mar. Ah en la
profundidad del mar, no es un pez, ni un ave realmente, pero vive ah y puede quedarse en la
oscuridad por un perodo de tiempo, pero despus tiene que ascender de regreso a la
superficie y volver a inhalar. Y despus, regresar de nuevo.
Y as tambin el creyente, mientras que a lo largo de su vida en todas las vicisitudes y en todo
momento de su vida debe ascender, por as decirlo, al trono de Dios para respirar, inhalar del
aire de la oracin. Y despus, y nicamente entonces, l puede existir en la oscuridad del
mundo que lo rodea. Y eso es exactamente lo que Pablo est diciendo aqu. La oracin es
como nuestra respiracin. Le he dicho antes que es como respirar. Usted no tiene que pensar
para respirar porque el aire ejerce presin en pulmones y lo fuerza a respirar.
Y entonces, como creyentes, no orar es contener su respiracin espiritual. Y los resultados,
son siempre malos. Mientras que usted vive la vida cristiana, todo el tiempo que se pone la
armadura, todo el tiempo que usted pelea, est respirando y respirando y respirando, por as
decirlo, en oracin. La oracin permea todo esto. Pienso en leer El Progreso del Peregrino y
cmo Dios le da al cristiano, en esa maravillosa alegora, un arma llamada toda oracin. Y la
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instruccin es que cuando todo lo dems falla, esto causar que usted pueda derrotar a todos
los enemigos que enfrenta en el valle de la sombra. Pero la oracin realmente es ms de lo
que Bunyan ve ah. Es ms que un arma adicional. Es la atmsfera en la que se lleva a cabo
nuestra vida. Toda nuestra pelea y todo el armarnos a nosotros mismos afecta a todo en ese
sentido.
Ahora, el hecho de que concluye en el libro de Efesios es planeado por el Espritu Santo de
Dios. No es por accidente. Nuestro Seor siempre inst a los hombres a orar en Lucas 18:1. Y
l sabe que, en la batalla, cuando la batalla se dificultad, usted puede desmayar. Usted puede
cansarse. Usted puede darse por vencido. Usted puede abandonar la pelea si usted no ora.
Realmente, tiene dos alternativas: usted ora o desmaya. No hay trmino medio. Y entonces,
en la batalla de la cual l acaba de hablar, la oracin se vuelve vital. Pero es ms que tan slo
ese contexto. La razn por la que la oracin viene aqu es porque encaja con la conclusin del
libro total. La carta entera de Efesios llega a un clmax, a su cspide y a un pinculo en este
punto. Es como si la oracin fuera como un crescendo musical en el gran libro de alabanza
que es el gran libro de Efesios.
Ahora, permtame mostrarle por qu digo eso. Si usted regresa a Efesios, usted descubrir,
como lo hemos hecho en el tiempo que hemos estudiado, que este libro, ms probablemente
que cualquier otro libro en la Biblia entera, presenta los recursos de un creyente. En mi mente,
no veo otro libro que llegue a su nivel de estatura en trminos de la delineacin de los
recursos que son nuestros al estar en Cristo. Es incomparable en ese sentido. Es un largo
catlogo de todo lo que es nuestro como cristianos. Lo que Pedro dice en una frase simple,
que tenemos todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad, lo que Colosenses 2 dice
en esa simple frase simple, y vosotros estis completos en l, realmente es magnificado y
llevado a su mxima plenitud en el libro de Efesios.
Toda nuestra totalidad est aqu. Todos nuestros recursos estn aqu. Y la clave de eso est
en el captulo 1, versculo 3: hemos sido bendecidos con toda bendicin espiritual en los
lugares celestiales en Cristo Jess. Y despus, l pasa a delinearlos durante seis captulos.
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Es un catlogo monumental de todo lo que es nuestro en Cristo. Y nos eleva a grandes
alturas.
Comienza, por as decirlo, en los lugares celestiales. Comenzamos en las glorias y nos
quedamos ah durante el libro entero hasta que finalmente llegamos al captulo 6:18. Y Dios
demanda que caigamos sobre nuestras rodillas. Y la oracin, entonces, se convierte en la
clave, escuche esto, para apropiarnos de los recursos. Todos estn ah y todos son nuestros
en Cristo. Pero no podemos simplemente flotar en la gloria, por as decirlo. Tenemos que
llegar a la realidad de estar en nuestras rodillas delante de Dios para que estas cosas puedan
ser implementadas en nuestras vidas.
Entonces, el libro comienza en los lugares celestiales y termina en sus rodillas, conforme
Pablo nos llama a orar. Ahora, usted podra pensar que con un libro con recursos tan
tremendos, que la oracin no sera tan necesaria. Para qu orar? Por ejemplo, escuche,
segn el captulo 1, versculo 3, somos sper bendecidos. Segn el captulo 1, versculos 4 al
6, somos sper amados. Segn el captulo 1, versculo 7, somos perdonados y redimidos.
Captulo 1, versculo 8, dice que se nos ha dado sabidura. Captulo 1, versculo 11, dice que
somos hechos ricos. Captulo 1, versculo 13 dice que estamos seguros, estamos sellados
con el Espritu. Captulo 2, versculos 4 al 6, estamos vivos con nueva vida. Captulo 2,
versculo 7, somos objetos de gracia externa. Captulo 2, versculo 10, somos la obra maestra
de Dios.
Nuevamente, captulo 2, versculo 10 somos llamados a una vida de buenas obras que Dios
har por medio de nosotros. Captulo 2, versculos 13 al 18, somos uno con Dios y con el
resto de los cristianos. Captulo 2, versculo 19, somos miembros de la familia ntima de Dios.
Captulo 2, versculo 22, somos la habitacin misma del Espritu Santo. Captulo 3, versculo
20, somos poderosos ms all de nuestra propia imaginacin. Captulo 3, versculo 21,
podemos glorificar a Dios.
Qu definicin tan increble de un ser humano! Es sorprendente lo que Dios ha hecho por
nosotros, ms all de lo que jams podemos imaginar. Cuando usted pasa de ah al cuarto
captulo, contina. En el captulo 4, versculo 3, se nos dice que poseemos al Espritu vivo de
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Dios en nosotros. En el captulo 4, versculos 4 al 6, somos miembros del cuerpo de Cristo. En
el captulo 4, versculos 11 al 13, hemos recibido dones y hombres dotados para
perfeccionarnos para hacer la obra del ministerio. En el captulo 4, captulos versculos 20 al
24, tenemos a Jesucristo para ensearnos a vivir una vida nueva.
En el captulo 5, versculos 1 y 2 hemos recibido el amor de Dios para que podamos andar en
amor. En el captulo 5, versculo 8, hemos recibido la luz misma de Dios para que vivamos en
la luz. En el captulo 5, versculos 15 al 17, hemos recibido la sabidura y la verdad de Dios
para que podamos vivir de manera sabia en el mundo. En el captulo 5, versculo 18, hemos
recibido el poder de la plenitud del Espritu de Dios. En el captulo 5, versculos 21, hasta el
captulo 6, versculo 9, hemos recibido los recursos para hacer que toda relacin humana sea
todo lo que Dios siempre quiso que fuera.
Finalmente, en el captulo 6, versculos 10 al 17, hemos recibido una armadura invulnerable,
invencible, fantstica y poderosa en contra de la cual Satans es indefenso, est indefenso, si
la usamos, llevndolo a un clmax en la espada del Espritu, que es el arma magnifica de la
Palabra de Dios que est en la mano de todo creyente.
Ahora, ese es un retrato tremendo, eso es todo lo que es ser un cristiano. Ahora, para cuando
usted tiene todo eso en su cabeza y usted reconoce su posicin exaltada en Cristo y ve los
recursos para vivir la vida cristiana de manera eficaz, y usted sabe que no carece de nada,
usted entonces enfrenta un problema de manera inmediata.
Y el problema es lo que usted podra llamar un tipo de doctrina de legalismo. Un problema que
puede ser definido en 1 Corintios 10:12: as que el que piensa estar firme, mire que no caiga.
Usted de hecho se convierte en lo que yo podra llamar un ateo espiritual.
En otras palabras, tiene una creencia plena en Dios slo que no lo necesita a l. Y supongo
que este sera uno de los peligros ms serios en una Iglesia como la nuestra. Estamos tan
bien preparados. Tenemos tanto conocimiento. Tenemos tanta informacin. Tenemos tantos
recursos. Entendemos nuestra posicin. Conocemos nuestros dones. Hemos visto la
bendicin de Dios. Hemos tenido tanto xito y tan poco fracaso.
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Entonces, es fcil para nosotros simplemente avanzar y realmente no reconocer a Dios en
absoluto. Podemos caer en un pecado terrible de pensar que tenemos toda capacidad en
nosotros mismos y perder el sentido de dependencia de Dios.
Creo que debemos orar como un hermano or, que Dios nos dio de suficiente xito para
conocer que l est ah y suficiente fracaso para saber que lo necesitamos de manera
desesperada. Tenemos tantas cosas a nuestro favor en nuestra sociedad, en nuestra Iglesia,
en nuestras vidas. Hemos visto una bendicin tan tremenda por parte de Dios, que es fcil
enorgullecernos y reducir todo a cmo hacerlo y a los trucos y programas y estrategias y los
mtodos. Lo tenemos todo, lo hemos hecho todo y eso es maravilloso. Y todo va muy bien.
Y sabe una cosa? Quizs nuestro matrimonio va bien, nuestros hijos estn bien, todo est
bien en nuestra Iglesia, todo es maravilloso y nos volvemos ateos espirituales. Simplemente,
no dependemos de Dios. Y ese tipo de oracin profunda que anhela clamar a Dios desde
nuestros corazones, simplemente no est ah.
Tenemos algunos queridos amigos, Pedro y Lilian Marevus, con quienes hemos estado
muchas veces cuando estn en Estados Unidos, con quienes hemos compartido mucha
comunin rica mientras que estuvimos ministrando en Nicaragua. En la ltima semana, con
las peleas terribles y matanzas que estn sucediendo en Nicaragua, estas queridas personas
han tenido que huir del pas, han tenido que tomar lo que pudieron y han tenido que salir.
Tienen una pequea planta ah. Y hacan cosmticos. Tenan su propio negocio. Y el
gobierno, claro, demand que la usara para producir algn tipo de municiones. Y los rebeldes
dijeron que, si lo hacan, los mataran a todos. Y entonces, estaban atrapados. Y tuvieron que
huir por sus vidas. Y dudo seriamente si han tenido mucho problemas en pensar por algo por
qu orar. Perdieron todo. Todo. Su hogar, todo. Tienen que comenzar desde abajo. Sus hijos
estn siendo educados en Estados Unidos. Y entiendo que van a tener que llevarlos a todos
de regreso al hogar porque ellos ya no tienen dinero para apoyarlos. Pero, vamos tan bien
algunas veces que perdemos la perspectiva. Y
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creo que algunas veces, si la perdemos, Dios puede traer cosas a nuestras vidas para
ayudarnos a recuperarla. Y eso es lo que Pablo est diciendo. Lo tienen todo, pero aun as,
todo depende de l. Es como un entrenador de ftbol americano. Un jugador de ftbol
americano profesional ha dominado sus tcnicas. Para cuando llega a las filas del ftbol
americano profesional, l sabe lo que est haciendo. l sabe exactamente lo que est
haciendo. l entiende cmo jugar en su posicin. l entiende el ftbol americano. l est
entrenado. l tiene las habilidades y el equipo, el talento, todo.
Y, sin embargo, ese hombre grande, quien ha dominado la profesin en la que est, quien
conoce todo detalle, tiene que escuchar a un pequeo hombre que est al lado de l con una
tabla, dicindole cada movimiento que tiene que realizar. He odo a algunos de los hombres
de los Dallas Cowboys, que ste es el discurso tpico que Tom Landry les da cuando los
Dallas han perdido. l entra al vestuario y les dice: caballeros, le dije cmo ganar el partido.
No hicieron lo que yo les dije que hicieran, entonces perdieron. Y l se da la vuelta y se va.
Ahora, usted puede tener todo el talento y todos los recursos y todo el entrenamiento y toda la
capacidad innata, pero si usted no hace lo que Dios le manda hacer a usted, usted pierde.
Eso es esencialmente lo que Pablo est diciendo. No crean que debido a que tienen todos
estos recursos y debido a que tienen toda esta historia de Cristo y han llegado a ser este ser
en Cristo, que puede volverse un ateo espiritual y vivir como si no necesitaran a Dios. No
puede ser hecho. La armadura no es mecnica y la armadura no es mgica. Necesita a Dios.
Dios infunde en la armadura y Dios infunde en nuestros recursos Su poder y Su energa.
Y entonces, ah existe el peligro latente que los cristianos que tienen un conocimiento de
doctrina y algn tipo de historia de xito y algn entendimiento bastante eficaz de los
principios espirituales prcticos puede volverse satisfechos y no necesitan una oracin
constante, apasionada, que rasga su corazn. Y eso es una tragedia.
Esa es la razn por la que esta epstola comienza en los lugares celestiales y termina en sus
rodillas. Porque todo eso depende de la oracin. Quizs, usted ve su vida y dice: sabes una
cosa?, conozco tanto. Y algunos de ustedes que han salido del seminario ven su vida y
dicen: conozco tanto pero no veo mucho pasando en mi vida. Bueno, usted piensa en la
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armadura. Usted piensa en los recursos. No son ni mgicos ni mecnicos. No lo son.
Dependen de la oracin. El alma del hombre se mueve en la presencia de Dios. Ahora, eso es
lo que Pablo quiere que veamos. Y entonces, vemoslo. Vamos a cubrir todos estos
versculos. Cralo o no. Alguien se me acerc despus de que acab en el primer servicio y
su boca estaba abierta. Dijeron que no pensaban que iba a cubrir tantos versculos. Estoy
sorprendido. Pero los vamos a cubrir. Vamos a saltarnos los ltimos cuatro.
En primer lugar, quiero que vea la instruccin general del versculo 18. La instruccin general,
versculo 18, notar que hay cuatro todos. Orando en todo tiempo y splica en el Espritu. Y
velando en ello con toda oracin y splica por todos los santos.
Ahora, aqu usted tiene los cuatro todos de la oracin. Cuatro veces, todo es enfatizado.
Esto es tan maravilloso. Cada parte se viste de oracin. La oracin permea todo lo que somos
y todo lo que hacemos. Es el elemento que abarca toda nuestra vida. Esa es la razn por la
que digo que es el aire que respiramos. No hay momento en nuestra vida en el que no
debemos estar orando.
Veamos en primer lugar la frecuencia de la oracin. Tomaremos todos estos todos uno a la
vez. La frecuencia de la oracin, versculo 18. Orando en todo tiempo. Cundo debemos
orar? En todo tiempo. Ahora, algunos de ustedes han salido de trasfondos en donde oraban
leyendo de un libro de oracin o donde usted oraba en algn momento especfico del da.
Sabe una cosa? El pueblo judo sola orar en ciertas ocasiones. Inclusive, en el libro de los
Hechos, cuando se reuna la primera Iglesia, se reunan para las oraciones, dice. Realmente,
esto lo arrastraron de su judasmo. Los tiempos establecidos del da para las oraciones.
Pero el Nuevo Testamento, el nuevo pacto y el nacimiento de la Iglesia trajeron una nueva
era. Y esto es que debe haber una caracterstica constante en la oracin. No debemos ya orar
en momentos especficos del da. Debemos estar orando en todo tiempo, en toda ocasin, en
todo momento. Jess nos dio indicacin de que esto estaba por venir cuando dijo en Lucas
21:36: velad por tanto y orad siempre. En todo tiempo. Y los apstoles lo dijeron en Hechos
6:4.
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Pero nosotros nos entregaremos a la oracin. Nos entregaremos continuamente. No slo a
esas oraciones pre escritas, sino a toda oracin. Se dijo de Cornelio en Hechos 10 que l era
un hombre devoto y oraba a Dios siempre. En Romanos 12:12 dice: continen siendo
dirigente en la oracin. En Colosenses 4:2, continen en oracin. En Filipenses 4:6, en toda
oracin y splica. Y resumindolo, en 1 Tesalonicenses 5:17: orad sin cesar. Segunda de
Timoteo 1:3, el apstol Pablo indic que l haca eso. A Timoteo le escribi sin cesar, me
acuerdo de ti en mis oraciones noche y da. Tenemos que orar siempre. En Hechos 12,
encontramos a la Iglesia orando constantemente. Y aunque su oracin fue algo dbil en la fe,
Dios la respondi de tal manera que hay un patrn de orar en todo tiempo.
Sola preguntarme lo que esto significaba porque mi vida estaba llena de tantas cosas.
Aparentemente, no haba manera en la que pudiera orar en todo tiempo. Y obviamente, usted
no puede andar corriendo por todos lados con su pequea libreta de oracin leyendo
oraciones todo el da, verdad? Usted ve a Israel y usted ve a esas personas judas delante
del muro de los lamentos, hora tras hora, repitiendo sus oraciones. Quizs usted viene de un
trasfondo de la Iglesia Catlica en donde usted pasa por una serie de cuentas una y otra y
otra y otra vez, momento tras momento, ninguna de esas cosas es lo que significa orando en
todo tiempo.
No es slo andar por todos lados repitiendo ciertas frmulas o repeticin vana. Es
simplemente vivir su vida en la conciencia de Dios. Es que su vida entera se levanta a Dios en
comunin y en comunicacin. Veo mi propia vida y sola preguntarme cmo puedo orar en
todo tiempo? Y descubro las pocas veces en mi vida cuando no estoy consciente de Dios.
Todo lo que veo y todo lo que experimento en mi vida simplemente se convierte en una
oracin. Esto es, es algo que comparto con mi mejor amigo. Es algo que instantneamente se
comunica con Dios. Si me veo tentado, inmediatamente esa tentacin se convierte en una
oracin. Seor, T sabes lo que estoy enfrentando. Aydame en esto. Si veo algo bueno, mi
primer pensamiento es Dios, T eres la fuente de toda buena ddiva y todo don perfecto.
Gracias por eso. Si veo algo malo, digo: oh Dios, que la maldad no reine. Oh Dios,
corrgelo. Si veo a alguien sin Jesucristo y tengo la oportunidad de conocerlos, mi primera
respuesta es: oh Dios, siempre es tan triste que no Te conocen. Trelos a Ti mismo. Si veo
problema, digo Dios, T eres el libertador.
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En otras palabras, la vida se convierte en una oracin ascendente. Todos sus pensamientos,
todas sus obras y todas sus circunstancias se vuelven en una causa o punto de comunicacin
con Dios. As es como debemos vivir, se da cuenta?
Eso es lo que significa poner la mira en las cosas de arriba. Eso es lo que significa pensar en
Cristo. Que Su presencia consciente est en la mente de usted de tal manera que todo se
convierta en una oracin. Toda su vida y todos sus pensamientos.
Y creo que realmente se es el punto entero de la vida cristiana, se da cuenta? Como puede
ver, la razn por la que Dios lo salv a usted fue para tener comunin. Saba usted eso? l
lo salv para tener comunin. Eso es lo que dice Primera de Juan. Lo que hemos visto y odo
os lo declaramos. Por qu declara el Evangelio? Para que tengis comunin con nosotros.
Y nuestra comunin es con el Padre y con Su Hijo Jesucristo.
Dios lo salv para tener comunin. l quiere tener comunin; y no hay una mayor expresin
de comunin que la oracin. Esto es cuando usted tiene comunin con Dios. Y si usted ha
sido salvo y no tiene comunin con l, usted est negndole el propsito para el cual l lo
salv a usted. Usted le est negando el propsito para el cual l lo redimi. Usted fue salvo
para entrar en comunin con l. Y entonces, debemos orar continuamente.
La palabra de raz en Colosenses 4:2, continuar en la oracin es la raz kartere. Significa ser
constante. Ser continuo. Es usado de Moiss cuando dice que l soport en Hebreos 11:27.
El trmino es usado en su intensidad en Colosenses con una preposicin aadida enfrente del
mismo. Significa ser intenso, aguantar ah en oracin constante. La idea no es slo algn tipo
de orar de vez en cuando al Seor, sino una vida entera de estar luchando, perseverando, por
asuntos profundos.
Y sabe una cosa? Es simplemente una manera de vivir cuando su corazn est abierto a
Dios. La oracin constante, fuerte, apasionada, persistente, valiente, aferrndose y sin dejarlo
hasta que usted es bendecido.
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Sabe usted cmo nuestro Seor da dos ilustraciones en Lucas 11 y en Lucas 18? l habla
en una parte del juez injusto y de la mujer que segua viniendo y rogando, y rogando y
rogando y finalmente, el juez injusto hizo lo que ella quera. Y el Seor est diciendo que, si
un juez injusto le va a dar algo a una mujer persistente, qu cree usted que Dios le dar a
Sus propios hijos si persisten?
Y ms adelante, se acuerda del hombre que toca y toca la puerta; y el hombre dice esta
tienda est cerrada. Vete a dormir. Estoy en la cama con mi esposa y mis hijos. No voy a
salir. Y el hombre toca, y toca y finalmente, el otro sale y dice muy bien, te voy a dar pan. Lo
que Jess est diciendo es que el hombre que est durmiendo, que est ya metido en la
cama va a venir y le va a dar pan a alguien que est tocando a su puerta, qu creen que un
Padre amoroso le dar a Su hijo que tiene necesidad?
Y el punto en ambas es que siguieron persistiendo y recibieron lo que quisieron. Y Dios est
diciendo que, si eres persistente y fiel en tus oraciones y oras de manera inoportuna, l oir y
responder. Entonces, la vida debe ser un ejercicio constante de oracin.
Oh amados, pueden conocer tanto y nunca pensar en Dios! En lo nico en lo que piensan es
en las cosas que han aprendido. Y el propsito entero de lo que han aprendido es acercarlos
a la presencia de Dios. Veremos ms de esto en un minuto.
En primer lugar, entonces, la frecuencia de la oracin: en todo tiempo, siempre. Lo que usted
ve en la vida asciende a Dios en una oracin porque la comunin est tan abierta.
En segundo lugar, no slo vemos la frecuencia de la oracin, sino que el segundo todo nos
muestra la variedad de la oracin. Orando en todo tiempo con toda oracin y splica. Toda
oracin y splica. La palabra oracin. Una palabra simple. De manera general, simplemente
significa peticiones. Proseuch, oracin en general. Conversacin. La palabra splica, desis,
significa un especfico. Entonces, ah est el rea general de oracin. Oramos de manera ms
general. Oramos de manera especfica.
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Pero noten que estamos en toda oracin y splica. Debemos estar orando en todo tiempo.
Qu significa en toda oracin y splica? Simplemente todo tipo de cosas. Eso es todo. Ah
hay diferentes maneras de orar. Algunas personas creen que la nica manera en la que usted
ora es de rodillas. Algunas personas creen que el nico modo en el que usted puede orar es
con sus manos levantadas. Otros piensan que deben tener sus manos dobladas as o de esta
manera. Algunas personas creen que tiene que orar a partir de un libro de oracin, usar un
libro de oracin o se le tienen que decir qu oraciones repetir. Escuche. l dice: oren en todo
tiempo con todo tipo de oraciones.
Y, por cierto, si usted va a estar orando todo el tiempo, usted tiene que tener todo tipo de
oracin porque usted nunca estar en la misma posicin. Usted puede orar de manera pblica
o privada. Usted puede orar de manera verbal o en silencio. Usted puede orar con un volumen
bajo o un volumen alto. De manera deliberada, planeada o espontnea. Puede haber
peticiones o gratitud, confesiones y humillaciones. Alabanza. Usted puede estar de rodillas, de
pie, levantando las manos, postrado. l simplemente est diciendo oren todo el tiempo de
toda manera.
Y esa es una buena indicacin de que l significa simplemente oren a lo largo de la vida
entera. Algunas veces, bueno, normalmente toda noche me arrodillo y oro con nuestros hijos.
Y nos arrodillamos. Melinda se acuesta. El resto de nosotros nos arrodillamos y oramos.
Despus, me voy a la cama algunas veces y estoy acostado y con mi cabeza simplemente
viendo el techo y simplemente oro. Y en la maana, despierto sin haber dicho amn.
Oro cuando estoy caminando. Me acuerdo cuando estaba en la universidad y estaba
aprendiendo cmo predicar, solan llevarnos en un auto. Cinco de nosotros nos
amontonbamos en un auto y entrbamos; y nos llevaban a diferentes lugares y ciudades y
estaciones de autobuses para que predicramos. Y me llevaron ah a la estacin de
Greyhound y decan: ah est tu estacin. T, predica. Regresaremos en dos horas. Yo
predicaba un sermn y despus, tomaba un descanso de 15 minutos e iba a testificar; y luego,
predicaba otro sermn.
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Y eso es algo aterrador para un joven. Pero les digo, todava me aterra. No lo hara ahora,
pero, de cualquier manera, me llevaban ah y orbamos. bamos orando conforme nos
llevaban en el auto. Recuerdo la primera vez que hicimos esto, pens que era algo extrao. El
hombre que iba manejando iba a orando y l nos cerraba sus ojos. Entre ms pensaba en
esto, ms me gustaba, obviamente. Un testimonio vivo del hecho que es una buena manera
de orar si usted est manejando.
Pero bueno, usted puede orar mientras que maneja a auto. De hecho, Bill Clutterham me dijo
esta maana que su esposa puede saber cundo est orando cuando maneja, porque l
reduce la velocidad ms, y ms y ms; y entre ms se acerca a Dios, ms sensible se vuelve
al lmite de velocidad.
Pero bueno, usted puede orar en todo tiempo y en toda circunstancia y en cualquier situacin
en la que est; y eso es exactamente lo que Pablo est diciendo. Nunca, habiendo
considerado todos los recursos infinitos que son suyos en Cristo, piense ni por un momento
que usted no depende en todo momento del poder de Dios, porque depende de l. Que todo
se convierta en oracin.
Y entonces, Pablo le dice a Timoteo en 1 Timoteo 2:8: quiero que los hombres oren en todo
lugar. Si usted estudia las oraciones de la Biblia, usted encontrar que hay todo tipo de
oraciones y todo tipo de posiciones en todo tipo de momento. Es un estilo de vida. Un soldado
est orando en todo momento, de tal manera que lo que l enfrente en la batalla, inclusive si
es un ataque sorpresa, l est listo. l tiene un tipo de vida que est totalmente abierto Dios.
Escuche, me acuerdo que asist a una conferencia de pastores con algunos de los pastores
de la Iglesia y un hombre se puso de pie y predic acerca del hecho de que debemos orar en
la maana. Y digo, l predic: debemos orar en la maana. Y l fue a todo pasaje como yo
lo hice esta maana, Salmo 63: de maana te buscar, oh Dios. Y l habl acerca de los
hombres que oraban en la maana; y aqu estaban en la maana. Y debemos orar en la
maana. Fue un gran sermn. Y mientras que l estuvo predicando, estuve buscando todas
las Escrituras que hablaban de orar en la noche y en la tarde y dems. Digo, l tena un buen
punto. Debemos orar en la maana, pero no a expensas de cualquier otro momento. Inclusive
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el Salmo 55:17 dice: de noche, de maana y en la tarde orar. Y Daniel or tres veces al da.
Y Jess, Lucas 6:2 dice: l sigui toda la noche en oracin. Y 1 Timoteo 5:5 dice que las
viudas oran noche y da. Es un estilo de vida.
La oracin, en un sentido, amados, es ms importante que el conocimiento, es una buena
palabra para nosotros aqu. En un sentido, es un elemento ms importante que el
conocimiento. Martn Lloyd Jones dice nuestra posicin definitiva como cristianos es
aprobada por la naturaleza de nuestra vida de oracin. Usted puede tener mucho
conocimiento, inclusive, usted puede ser un alumno del seminario o un egresado del
seminario, un ministro, pastor o misionero, maestro de Biblia. Pero su vida de oracin va a ser
una medida, un monitor de cun realmente profundo es su conocimiento de Dios y su relacin
con l.
Por qu digo eso? Por esta razn, escuche: la teologa, escuche, en ltimas es el
conocimiento de Dios, verdad? La teologa es el conocimiento de Dios. Entonces, entre ms
teologa conozco, ms conozco acerca de Dios. Y entre ms conozco acerca de Dios, ms
debo verme motivado, como dijo el salmista, para seguirlo de cerca. Y si yo digo que tengo
todo este conocimiento, pero no me veo motivado a estar en Su presencia todas mis horas
conscientes, entonces es cuestionable el efecto que este conocimiento ha tenido en mi vida.
A fin de conocerte, el nico Dios verdadero y a Jesucristo, a quien T has enviado y a quien
yo estudio. Es que yo quiero aprender la palabra para poder conocer a Dios. Y entre ms lo
conozco, ms quiero estar en Su presencia. Y si usted conoce todo eso, pero usted no tiene
hambre y sed de estar en Su presencia y su vida no es una comunicacin abierta con l en
todo momento consciente, entonces es cuestionable que su teologa haya tenido el efecto
apropiado. Vemos, entonces, que debemos orar en todo tiempo, con todo tipo de oracin
conforme nuestras vidas estn abiertas a Dios.
Como dije, l quiere que lo conozcamos porque la comunin es el resultado final. Usted
tiene est comunin? Es su vida una oracin constante? Oh, qu cosa tan purificadora es
esa.
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En tercer lugar, no slo vemos la frecuencia de la oracin y el tipo de la oracin y la variedad
de la oracin, sino la manera de la oracin en tercer lugar. l dice: velando en todo tiempo
con toda perseverancia y splica. En otras palabras, debemos velar con toda perseverancia.
Y de nuevo, usted ve la idea de perseverancia, de ser fiel, de aguantar, de continuar
perseverar. Orando continuamente mientras que est velando.
La oracin es estar alerta ante los asuntos, alerta a lo que est pasando. Jess dijo: velad y
orad muchas veces. Primera de Pedro 4:7: velar y orar. Usted no puede orar
apropiadamente a menos de que vea lo que est pasando. Cuando usted llegue al punto en el
que su corazn est lleno de oracin ser porque usted ve tantas cosas que estn pasando.
Anoche estaba orando inclusive con mi esposa. Estbamos hablando acerca del hecho de
que hoy da es difcil orar, no porque usted no sepa por qu orar, sino porque hay tantas
cosas con las que estamos siendo inundados. Sabe una cosa, vivimos en un da de
comunicacin tremenda. Recibo correo de radio oyentes, personas que escuchan las cintas,
personas en el campo misionero, de todos lados. La Iglesia es tan grande. Hay tantas
necesidades. La hoja de oracin que sale el mircoles por la noche simplemente inunda mi
mente, hay tantas cosas.
Y algunas veces, simplemente digo: Seor Dios, ni siquiera s qu decirte fuera de leer la
lista de oracin. Digo, no puedo, sola tener una lista de oracin y escribir cosas y
simplemente, se volvi algo monstruoso. Todava lo hago, pero simplemente es monstruoso,
ni siquiera puedo comenzar.
Escuchen, si orara sin cesar, no podra orar por todas las cosas que estn en mi corazn.
Pero tengo que seguir velando y tengo que estar alerta para poder ver las cosas que son
necesarias. Quiero orar de manera especfica porque Dios entonces responde de manera
especfica. Y despus, le voy a dar a l gloria especfica. Eso es Juan 14:13 y 14: todo lo que
pidiereis en Mi nombre, lo har, para que el Padre sea glorificado. Como puede ver, Dios
responde a la oracin para desplegar Su poder. Si usted no ora de manera especfica, l no
puede desplegarse a s mismo.
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Le cont una vez acerca de Marcy. Ella cuando era pequea sola orar diciendo: Dios
bendice a todo el mundo. Y yo le deca: Marcy, no puedes orar as. Dios no puede hacer
eso. l no puede hacer pam! mundo. Te sientes mejor? Eso es demasiado grande.
Necesitas orar de manera especfica. Y nuestros hijos se han adaptado a eso y ahora oramos
de manera especfica. Y Dios responde de manera especfica y Le damos la gloria.
Velen. Estn alertas. Sabe lo que est pasando con la gente alrededor suyo? Por cierto, el
trmino velar nos dice que debemos estar viendo hacia fuera, en vez de estar viendo hacia
dentro. Conocemos nuestros propios problemas. Ah no es donde tenemos que pasar nuestro
tiempo en oracin. Necesitamos pasar nuestro tiempo en oracin con otras personas. Viendo,
alerta, viendo sus necesidades. Y lesvoy a decir lo que esto mata. Al egosmo.
Francamente, le voy a dar una ilustracin simple. La mayora de nosotros realmente nunca
tomamos en serio la oracin hasta que algo sucede en nuestras propias vidas, algo
problemtico. Estamos diez veces ms preocupados por nuestros propios problemas que por
los problemas de cualquier otra persona. Y eso muestra cmo vivimos centrados en nosotros
mismos.
Puede perderse a s mismo en las necesidades de otros como las del querido por todo
Pablo? Podra decir he orado por ti noche y da con lgrimas? Alguna vez ha orado noche
y da por alguien con lgrimas? Quizs haya llorado un poco por sus propios problemas, pero
dudo que muchos de nosotros hayamos hecho eso por los problemas de alguien ms. Eso
muestra el orgullo del corazn humano, inclusive de un creyente regenerado. Debemos estar
proskartersis, esto es perseverando de manera continua, velando y orando, estando alerta a
las necesidades de otros.
Y, por cierto, aqu puedo aadir, que vaya ms all de lo fsico. Sabe una cosa?, oramos por
el reumatismo de la ta Marta, los problemas del corazn de alguien y por la pierna rota de
alguien y por la ciruga de alguien. Y eso no me molesta, pero francamente, en mi lista de
oracin esas cosas estn en la parte de abajo.
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Lo que me preocupa es la batalla espiritual, es la guerra. Y estn los creyentes ganando la
batalla? Lo fsico, en un sentido, aunque es material, es inmaterial. Lo que hace que mi
corazn est preocupado es alguien que no est viendo victoria en su vida. Alguien que no
est viendo a Dios llevar a cabo Su obra poderosa. Alguien que no sabe que tiene que ver la
liberacin del poder del Espritu de Dios. Eso preocupa mi corazn. Estoy orando por la
extensin del Reino de Dios y las vidas de Su pueblo. Estoy orando porque almas sean
ganadas a Jesucristo. Es muy difcil para m el colocar en la parte de arriba de mi lista lo
fsico, aunque reconozco que es una necesidad y que tiene un efecto tremendo en nuestras
vidas espirituales, eso es secundario.
Lo que Pablo est diciendo es esto: miren, aqu est la guerra y es debido a la guerra que
debemos orar. No es fcil que usted gane la batalla. Y entonces, oro por ustedes. Oro, de vez
en cuando, por las cosas fsicas de la gente, pero ms que esto, oro porque Dios le de victoria
a usted. Oro porque usted gane la batalla en contra del enemigo.
Realmente, no me importa lo que suceder a m cuerpo fsico o al suyo siempre y cuando
podamos ganar la victoria para la gloria de Dios, amn? sa es la batalla. se es el punto.
Entonces, nos concentramos en lo que es ms necesario. Entonces, Pablo, cuando hace una
peticin aqu, l no dice: Oh, oren por m, estoy en la crcel. Oh, oren por m, tengo esta
cadena que en esta lastimando. Oren por mi pierna derecha. No! Lo que l dice es: oren
porque se me de valenta para que me sea dada palabra para hablar el misterio del
Evangelio. En otras palabras, oren por m, para que cuando Satans me tiente a cerrar mi
boca, yo gane sobre la tentacin y hable el Evangelio. Oren por que gane la batalla.
Oh, amados, tenemos que estar involucrados en splica unos por otros de manera
persistente, mientras que velamos y vemos cules son las necesidades, realmente conoce
las necesidades de la gente que lo rodea a usted? Conoce las necesidades espirituales de
su cnyuge, de hijos, de sus amigos, de sus vecinos, de la gente en su estudio bblico, de la
gente que usted conoce? Realmente ora por ellos conforme ellos pelean la batalla? Algunas
veces, lo nico que hacemos es orar cuando viene el desastre. Y quizs un poco de oracin
preventiva podra haber ayudado.
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Entonces, vemos la frecuencia de la oracin: en todo tiempo. La variedad de la oracin: con
toda oracin y splica. La cuestin de la oracin: velando con toda perseverancia. Y
finalmente, los objetos indirectos de la oracin, orando en todo tiempo por todos los santos,
dice al final del versculo 18.
Esto ha llevado a nuestro ltimo punto. Debemos orar el uno por el otro. Sabe una cosa?, no
nos dice que debemos orar por nosotros mismos. Esa no es la prioridad. Yo simplemente
tengo un compromiso personal en mi propia vida y no quiero imponerlo en nadie, pero no oro
por m mismo. Difcilmente puedo orar por todas las cosas que son necesarias. Y nunca he
encontrado la necesidad de orar por m. Reconozco que tengo necesidades y le pido al Seor
por cosas pecaminosas y confieso cosas en mi vida. Pero concentrarme en m? Mejor me
concentro en ser obediente en este punto. Confo en las Escrituras y oro por otros en lugar de
orar por m mismo. Soy cubierto porque otros oran por m.
Oh, es tan maravilloso cuando oramos por otros! Una vez conoc a un hombre que me dijo
sabes una cosa? T ministerio me ha bendecido. Voy a orar por ti durante seis meses.
Pens que eso fue simptico. Qu tengo que hacer para que hubiera orado por m durante
un ao? Pero despus, conforme comenc a pensar en eso, pens bueno, este es un
compromiso que l ha hecho. Que Dios bendiga su corazn por hacer este compromiso. l va
a orar por m y yo voy a orar por l. Porque durante estos seis meses que supe que l estaba
orando por m, sent la responsabilidad de orar por l, porque si algo le pasaba a l, l dejaba
de orar por m, se da cuenta?
Entonces, as es como el cuerpo crece en amor. As es como nos volvemos uno, cuando no
tenemos que esperar a nuestros problemas para orar, sino cuando estamos perdidos en las
necesidades de otros. Entonces, aprendemos a orar al orar por otros. Esta es la vida de
oracin del cuerpo.
El apstol Pablo lo ilustra tan bien. l siempre or por el resto de la gente. Primera de Samuel
12:23, que Dios me guarde que deba pecar contra Jehov al dejar de orar por vosotros. No se
preocupe por usted, usted ore por alguien ms, alguien ms ora por usted y todo el mundo es
cubierto, verdad? Cuando una parte del cuerpo fsico est enferma, el resto del cuerpo la
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compensa de manera directa e indirecta y as es en la oracin. Oren unos por otros. Un dedo
enfermo no puede ayudar que a s mismo. El resto del cuerpo tiene que bombear vida nueva a
ese dedo. A ese dedo herido. Esa parte de su anatoma que est lastimada por lo que tiene
que ser apoyada por el resto. No puede ayudarse a s misma por su debilidad. Y as es que
debemos orar unos por otros, para estar preocupados por eso.
Sabe una cosa? Antes de que estallara la guerra civil espaola en Barcelona y Madrid y
otras partes de Espaa, haba clnicas psicolgicas que haban surgido por toda Espaa. Y
haba muchas personas neurticas, segn los historiadores. Y todos estos neurticos estaban
recibiendo una serie de tratamientos para su neurosis. Eran atendidos de manera regular por
los psiquiatras y dems. Y haba mucha gente que reciba consulta. Este historiador dijo, de
manera interesante, que hicieron un estudio psicolgico y sociolgico de los efectos de la
guerra civil espaola. Y todas esas personas que tenan problemas personales y
preocupaciones y ansiedades y tentaciones y estaban involucradas en psiquiatra y
psicoanlisis todo esto, tan pronto como la guerra civil vino, uno de los primeros efectos ms
impactante de la guerra fue que virtualmente vaco toda las clnicas psicolgicas y
psiquitricas en Espaa. Qu interesante!
Un escritor dijo que estas personas neurticas repentinamente fueron curadas por una
ansiedad mayor. La ansiedad por su vida entera, fuera que sus hogares todava estuvieran
ah, fuera que sus maridos todava estuvieran vivos, fuera que sus hijos fueran asesinados.
Sus ansiedades mayores se deshicieron de las menores. Al tener que prestarle atencin al
problema mayor, olvidaron sus propios problemas menores.
Quiere ser una persona saludable? Entonces, pirdase a s mismo en las cosas reales que
importan. Las batallas espirituales de otras personas. Pirdase a mismo en una oracin
consumidora por el Reino de Dios. Y no tendr problemas con su ansiedad insignificante.
Entiendo que lo mismo pas en Gran Bretaa durante la Segunda Guerra Mundial. Un temor
mayor expuls a temor menor.
Creo que es necesario para nosotros aprender eso. Una de las razones por las que tenemos
una sociedad tan enferma, llena de gente que es un manojo de nervios, gente que anda por
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todos lados con todo tipo de dolores psico-inducidos y problemas es porque simplemente
estamos tan centrados en nosotros mismos.
Realmente, yo me considero como una persona algo paciente. Uso el algo simplemente
porque algunas personas no estaran de acuerdo con esto. Pero sabe una cosa, una de las
cosas que es difcil tolerar para m son personas que simplemente estn totalmente
consumidas con sus propios problemas ya que sta es una manifestacin tan clara de estar
centrados en s mismos.
Pero eso es opuesto al concepto de la vida cristiana. Debemos estar tan perdidos en las
necesidades de otros que el yo se desvanece. Que sus pequeas ansiedades den lugar a
ansiedades mayores, las batallas espirituales de otros.
Bueno, hay un pensamiento final en este versculo 18 y es este: Cuando usted lo ha dicho
todo: la frecuencia de la oracin, en todo tiempo; la variedad de la oracin, en toda oracin; la
manera de la oracin, velando para que conozca las necesidades con toda perseverancia; los
objetos indirectos de la oracin, todos los santos. Pero el pensamiento que permea todo est
en la mitad del versculo. Debemos orar en el Espritu, en el Espritu.
Ahora, por favor amados, esto no tiene nada que ver con hablar en lenguas. Cada vez que
oigo eso, simplemente es como que alguien rasgua el pizarrn con sus uas. Usted no
puede meter las lenguas en este versculo. En Judas 20 dice: orando en el Espritu Santo.
No est hablando de algn tipo de xtasis. No est hablando de algn idioma exttico. Orando
en el Espritu es lo mismo que orar en el nombre de Cristo. Es orar en coherencia con quien l
es y cul Su voluntad es. Aprenda a orar en armona con el Espritu. Que sus oraciones sean
un dueto con el que vive para interceder perpetuamente por usted. Usted sabe que Romanos
8:23 dice: no sabemos orar como debiramos, pero el Espritu hace intercesin por nosotros
con gemidos indecibles. Y Dios conoce la mente del Espritu, y l oye y responde.
Escuche, mientras que usted vive la vida cristiana, el Espritu de Dios dentro de usted ora a
favor de usted. Y l siempre ora la oracin correcta. Y l siempre recibe la respuesta correcta.
Por eso el versculo 28 dice que a los que aman a Dios todas las cosas les ayudan a bien.
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Ese no es un accidente. Eso es porque el Espritu est orando. Y orar en el Espritu es
simplemente alinear su propia oracin de manera coherente con la mente y la voluntad del
Espritu.
Usted pregunta cmo hago esto. Simplemente, al andar en la plenitud del Espritu. Conforme
su vida est llena del Espritu, conforme usted anda en el Espritu, en obediencia al Espritu,
conforme usted est caminando de cerca detrs del Seor, conforme usted est teniendo
comunin constante en Su presencia, el Espritu de Dios va a gobernar sus pensamientos de
tal manera que sus oraciones estarn en armona con el Espritu de Dios. Eso es orar en el
Espritu. Qu cosa tan tremenda es saber que yo puedo unirme en mis oraciones con el
Espritu de Dios, que puedo clamar de las profundidades de mi corazn debido a la presencia
del Espritu del Padre que mora en m, que dice Abba, Padre. Y s que Dios oye y responde.
De tal manera que el requisito que permea todas nuestras oraciones es que debemos orar en
el Espritu. De hecho, Zacaras 12:10 llama al Espritu Santo el Espritu de splica, el Espritu
de splica. No es diferente que orar en el nombre de Jess. De hecho, el Espritu Santo es
llamado el Espritu de Su Hijo, el Espritu de Su Hijo.
Y entonces, amados, debemos orar. Nuestras vidas deben estar abiertas, tener comunin. Y
sabe una cosa? Esto nos cura. Oh, qu cosa tan saludable es esta! Entonces, la frecuencia,
la variedad, la manera, los objetos indirectos, todos operan la gloria de Dios y para nuestro
gozo conforme oramos.
Y despus, Pablo cierra con una ilustracin especfica. Simplemente, se la voy a leer. Es
simple. Quiere algo especfico por qu orar? Por qu debo orar, Pablo? Versculo 19, orad,
por m, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo
el misterio del Evangelio, por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de
l, como debo hablar. l dice: yo soy una ilustracin. Oren por m. No por mis necesidades
fsicas, sino por mi batalla, mi guerra. Oren porque Dios me permita ser valiente, ser directo, y
que me d una palabra.
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Ahora, este es el modelo, amados. La guerra estaba ah. Pablo estaba enfrentando al
enemigo cara a cara, conforme era un prisionero en Roma. Los embajadores tenan una
inmunidad diplomtica, pero no este embajador. l estaba encadenado donde l estaba. l
estaba encadenado y ah estaba. l dice: oh, la batalla es dura. Usted sabe, algunas veces y
quiero renunciar. Algunas veces, pienso que estoy perdiendo mi valenta. Oren por m, porque
Dios me d palabra.
Yo voy a seguir sus pasos. Quiero decirle oren por el predicador. La gente pregunta por qu
necesitan orar por nosotros, orar por Pablo? Quin necesita orar por Pablo? Digo, l tiene
todo. Debemos orar por la gente en la periferia; simplemente recuerde que, si el hombre en la
cabeza cae, muchas personas van con l. Y Pablo estaba consciente del hecho de que el
resto era tan fuerte como su lder y su patrn lo era. Oren por m, dice l, para que pueda ser
valiente en lo que digo y que en mi valenta tambin pueda reunir a otros en torno a m y para
que ellos tambin tengan valenta.
Y usted sabe que cuando escribi la carta a los filipenses despus de esto, l escribi y dijo:
Oh!, lo que me ha sucedido en la crcel les ha dado mayor valenta a otros. Se da cuenta?
Entonces, conforme oraron por l, l se volvi un ejemplo ms fuerte y ayud a otros. Oren
por m, l dice.
Y el punto que quiero que usted entienda es que l quera que oraran porque una batalla
espiritual fuera ganada, para que l no perdiera valenta y su denuedo. Usted dice: bueno, me
gustara orar por otras personas, pero no tengo ninguna informacin. Y esa es la razn por la
que Pablo aadi los versculos 21 y 22. l dice: Para que tambin vosotros sepis mis
asuntos, y lo que hago, todo os lo har saber Tquico, hermano amado y fiel ministro en el
Seor, el cual envi a vosotros para esto mismo, para que sepis lo tocante a nosotros, yo no
espero que oren por m si no tiene ninguna informacin.
Entonces, voy a enviar a mi buen amigo Tquico. Por cierto, un querido amigo de Pablo
mencionado cinco veces en el Nuevo Testamento, quien es el que entrega la carta de los
Efesios y tambin trae palabra acerca de Pablo. Estaban preocupados. No saban qu estaba
pasando en su vida. No saban cmo iban las cosas en la prisin. Queran or. l dice lo estoy
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enviando para que les de esta informacin, para que puedan realmente orar de manera
inteligente. El versculo 22, al cual envi a vosotros para esto mismo, para que sepis lo
tocante a nosotros y que consuele vuestros corazones. l les va a decir que estoy bien. l les
va a decir dnde est la batalla y puedan orar.
Escuchen amados, si vamos a orar, oremos por cosas espirituales y abramos nuestras vidas
unos a otros para que tengamos algo porque orar, verdad? Tenemos que comunicarnos,
tenemos que compartir la lucha, compartir la batalla, compartir las victorias para que podamos
llevar los unos las cargas de los otros. Qu leccin de la oracin! Debemos estar conscientes
de Dios, ser abnegados, estar velando, llenos del Espritu, siendo persistentes, personas
valientes, buscando nicamente la gloria de Dios en nuestras oraciones.
Y yo creo que conforme vivimos ese tipo de vida y oramos ese tipo de oraciones, seremos
ms y ms conformados a la imagen de Jesucristo. Y conforme oramos unos por otros, el
cuerpo ser edificado y l ser glorificado. Y se es el clmax de la carta.
Pablo cierra con una bendicin a la cual no aado nada. Paz sea a los hermanos, y amor con
fe, de Dios Padre y del Seor Jesucristo. La gracia sea con todos los que aman a nuestro
Seor Jesucristo con amor inalterable. Amn. Oremos.
Un Santo de Dios, hace muchos aos atrs, or de esta manera. Quiero hacerla nuestra
oracin en esta maana. Oh, Seor, en la oracin lleg al mundo eterno. Y en ese ocano
amplio, mi alma triunfa sobre todos los males en las costas de la mortalidad. El tiempo, con
sus recreaciones y decepciones crueles nunca parece ser tan inconsiderado como en ese
entonces. En la oracin, oh Dios, me veo a m mismo como nada. Hallo que mi corazn Te
busca a Ti con intensidad y con una sed profunda por vivir contigo. Benditos sean los vientos
fuertes del Espritu, que aceleran mi camino a la nueva Jerusaln. En la oracin, todas las
cosas aqu abajo se desvanecen y nada parece importante ms que la santidad de corazn y
la salvacin de otros.
En la oracin, todas mis preocupaciones mundanas y temores y ansiedades desaparecen y
son tan pequeas y en tamao como una nube de viento. En la oracin, mi alma exalta
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internamente con pensamientos de lo que T ests haciendo por Tu Iglesia. Y anhelo que T
tengas un mayor nombre de los pecadores regresando a Ti. En la oracin, soy elevado por
encima de los disgustos y adulaciones de la vida para probar los gozos celestiales. Entrando
al mundo externo, puedo entregarme a m mismo a Ti con todo mi corazn para siempre. En
oracin, puedo colocar todas mis preocupaciones en Tus manos para que estn de manera
total a Tu disposicin sin tener voluntad o inters propio. En la oracin, puedo interceder por
mis amigos, ministros, pecadores, la Iglesia, Tu Reino con la mayor libertad, la esperanza ms
brillante como un hijo a su padre y como una amante con su amado. Y entonces, oh Dios,
aydame a orar siempre y a nunca cesar.
Padre, aado a esa oracin la ma. Que seamos personas de oracin, nunca satisfechos con
nosotros mismos, nunca arrogantes, sabiendo que todo nuestro conocimiento y todo el
registro del pasado de Tu bendicin no debe llevarnos ms que a la plenitud de comunin que
viene cuando nuestra vida es comunicacin abierta contigo. Oh, que sigamos de cerca Tus
pasos. Que vivamos como si nuestra vida misma fuera ofrecida como una oracin. Y Te
damos gracias, en nombre de Cristo, por un propsito como ste. Amn.
Disponible sobre el Internet en: www.gracia.org
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