Grupo de LiturgiaParroquia Santa María del SilencioPersonas sordas y sordociegas. Madrid

Los ojos de todos están esperando verte, tú das la comida a su tiempo; y llenas de riqueza a tus hijos

Jesús subió a la montaña y se sentó allí con sus discípulos.Pascua, la fiesta de los judíos, estaba cerca. Jesús miró a la

gente, y al ver que había mucha dijo al apóstol Felipe:

Felipe le contestó:

Andrés, uno de sus discípulos, hermano de Pedro, le dijo:

Aquí hay un joven que tiene 5 panes y

2 peces, pero es muy poco para

tanta gente

¿Cómo podremos comprar

panes para que

coman?.

Mucha gente seguía a Jesús, porque habían visto los milagros que hacía con los enfermos.

Hacen falta más de 200 monedas para que todos puedan

comer

Cuando todos terminaron de comer, Jesús dijo a sus discípulos:

Entonces la gente, al ver el milagro que había hecho, decía:

Y Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para hacerlo rey, se fue otra vez a la montaña, Él solo.

Decid a la gente que se siente en el

suelo

Todos se sentaron. Contando sólo los hombres eran unos 5000.

Jesús cogió los panes, dio gracias y los repartió a los que estaban sentados; e hizo lo mismo con el pescado.

Recoged la comida que ha sobrado y que no se pierda

nada

Los discípulos recogieron todo y con el pan que sobró llenaron doce cestas.

Este sí que es el Profeta que tenía que venir al mundo