F elicidad P erdida...de un pueblo que la minera borr...

Rogelio Ustate Arregoces

Poemas

...de un pueblo que la minera borr...

F elicidad P erdida

Autor Rogelio Ustate Arregoces rogelioustate@hotmail.com

Apoya

Diseo y diagramacin www.ecosuenopublicidad.com Ilustracin Beto Jimenez

ISBN

ISBN xxx-xxx-xxx-xxxx Primera edicin, agosto 09 de 2011 Santa F de Bogot, D.C. Colombia

IndiceEL ECO DE LA MUERTE LA SOMBRA DE TU VOZ PERDURA EN MI SE EXALTA EN MI RECUERDO REY GUAJIRO ENTRE LAS ALAS DE LA SOLEDAD HUELLAS DESDIBUJADAS VOCES DECAIDAS ABISMO CIEGO HOY DISTINTO FELICIDAD PRDIDA EL SILENCIO DE UN ANCIANO NUEVE DE AGOSTO SOLO ME QUEDE VOLVER JAMAS PODRA VOZ HERIDA A LAS PUERTAS DEL PUEBLO AORANZA SOLEDAD EXHAUSTAS TIERRAS REFLEJOS FARISAICOS 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 22 23 25 27 28 29 30 31 32 34 35

IndiceMI NEGRA PIEL HORA AMARGA HOY PIEL NEGRA CRIOLLA IGUARAYA VIEJA PALMA SOMBRAS QUEMADAS AVISO SOLO TRISTEZA MIRADAS TURBIAS RECUERDO CIRCULAR RINCN OSCURO DEL SILENCIO HOY IGUAL QUE AYER INTRANQUILIDAD EN MEDIO DEL TIBIO SOL LAMENTOS DE PALMERAS SOBRE CRUCES TU DULCE PRESENCIA VALOR Y CORAJE EN UN RINCN DEL CIELO HURFANA MIRADA ESTTICA BELLEZA EL TAMBOR 36 37 38 39 40 41 42 44 45 46 47 48 49 50 51 53 54 55 56 61 62 63 64

DedicatoriaA mis padres a quienes les debo lo que soy, A mis hijos y a las mams de cada uno de ellos, A mis hermanos y familiares que compartieron mis sufrimientos con ellos, A mis amigos de corazn noble que de una forma muy gentil estuvieron siempre firme a mi lado, en las buenas y en las malas, dndome su apoyo incondicional. A mi Guajira y a Colombia entera quien fue testigo de nuestra lucha. A todos dedico con cario y afecto Felicidad Perdida. Pero en especial para una persona que en su vida tena muy buenos propsitos, dndole un objetivo y teniendo un deseo intenso por conseguir sus horizontes, con un corazn lleno de bondades y un espritu de colaboracin incomparable, que a lo largo de los aos el tiempo no le alcanzo para cumplir las metas que se haba propuesto a realizar, sirvindole a la comunidad en general sin distingo de color poltico, de cultura ni de raza, y menos sin tener en cuenta el color de piel, siempre en ella predomino la perseverancia redundndola de bendiciones sobre su gente y mientras lo haca aprovechaba la oportunidad aceptando que tena muchas tareas por realizar con preguntas y respuestas, dando resultados precisos en el pueblo, esmerndose mucho por el desarrollo y el buen

convivir de su gente, exigiendo una buena perseverancia material y espiritual , al tiempo de recoger el fruto de su cosecha. Esto nos ha dado, buenas razones de poder confiar plenamente en la gente con liderazgo y sentido de pertenencia, que nunca le pusieron dudas a las cosas que se podan alcanzar, mantenindonos de manera leal a nuestros propsitos, fortalecindonos con honestidad, sinceridad y mucho respeto; desafortunadamente, hoy no contamos con esta gran mujer y con su prestigiosa presencia porque el Seor la acogi en su seno, pero estamos muy seguros que ella desde el cielo nos est mirando, y nos est acompaando en esta incansable lucha, por defender nuestros derechos y sin duda alguna desde su tumba conmemorativa Dios le confiere poder para mandarnos mensajes consoladores. Estamos muy seguros que ella desde el mas all tiene las esperanzas puestas en su gente, en su pueblo porque ella muri en la lucha: Aura Elena Prez Daz, nosotros estamos seguros que tu estas constantemente ante los ojos de Dios recibiendo sabidura, para luego envirnosla, y as poder abrigar la esperanza de contar siempre contigo. Amiga incondicional quiero que sepas que las lgrimas de todo el mundo no son suficientes para llorar tu partida. Paz en tu tumba.

AgradecimientosA mi madre: MARA MAGDALENA, quien con mucha sencillez y humildad me enseo a tejer el hilo de la vida, soando con el ancho camino de nuestros sueos, labrando una esttica obra de lucha y resistencia. A mi pap: EUGENIO USTATE, que a lo largo de los aos vivi sobre la cultura ancestral, amamantndose de la madre tierra en una dulce sociedad, armnica y equilibrada.A: La Corporacin Colectivo de Abogado s JOSE ALVEAR RESTREPO.

PrologoEl 9 de agosto de 2001, el corregimiento de Tabaco en la Guajira, fue desalojado de su territorio. Estos hechos se presentaron luego de que los empresarios del Cerrejn en conjunto con el estado colombiano, desarrollaran diversas estrategias con el fin de obligar a sus habitantes a dejar sus casas, animales, cultivos y todo lo que formaba parte de sus proyectos de vida, para darle paso a la gran minera. A pesar de la denuncia de la comunidad, y de que la Corte Suprema de Justicia de Colombia, a travs de un fallo de tutela ordenara en el 2002 que el pueblo fuera reubicado, a la fecha de presentacin de este libro, diez aos despus del desalojo, los habitantes de Tabaco continan a la espera de respuestas efectivas e integrales frente a los daos causados por parte del Estado y de la empresa que les permita recuperar lo perdido. Mientras tanto, suben los niveles de contaminacin, se presentan nuevos despojos de tierra, cooptacin de lderes sociales, corrupcin, prdida de la autonoma alimentaria, desempleo, desnutricin de nios, mujeres y ancianos. Las mujeres denuncian impactos en su salud y su economa con la prdida sus tierras y su capacidad productiva vindose

forzadas a migrar a otros lugares en donde deben comprar los alimentos, sin tener los recursos para ello. Cada verso de este libro es reflejo de los profundos sufrimientos de los habitantes de Tabaco, en las voces del poeta sin tierra. Angustia que llev a la muerte por depresin de Aura Elena Prez, mujer muy querida por la comunidad, que no soport el desarraigo y la impunidad; la ruptura de los tejidos sociales, la prdida de ritos y tradiciones culturales, la habitacin forzada en zonas urbanas en donde los/as Tabaqueros/as no pueden sembrar, cultivar y cosechar sus alimentos como solan hacerlo en su territorio; ciudades hoy en donde se enferman ms y se alimentamos menos. Las prdidas son irreparables: lugares sagrados como el cementerio que tambin fue destruido, en donde quedaron abandonados sus muertos debajo de montaas de basura minera; la iglesia que haba construido la comunidad y que fue vendida por el sacerdote de turno para ser derribada, y el santo, San Martn de Porras, arrebatado por la empresa, de las entraas de la espiritualidad de lo/as tabaquero/as. Dice mucho, que ste les fuera quitado una segunda vez luego de que la comunidad lo recuperara. Quienes pretendan el proyecto minero saban que haba que despojar tambin a la comunidad de todo pilar de fe y esperanza en defender su pueblo.

La denuncia y la resistencia de la comunidad, despert solidaridad y acompaamiento nacional e internacional frente a lo cual la empresa reaccion implementando una estrategia de marketing orientada ms a acallar la denuncia, que a resolver los problemas de fondo que la originan. Este contraste se evidencia aun ms, con la enorme publicidad que desarrolla alrededor de lo que llama Responsabilidad social; inversiones que lejos de estar orientadas a la reparacin integral de las comunidades, se dirigen al incremento de su rentabilidad generando constantes situaciones de revictimizacin.1 La existencia de la Mina del Cerrejn y la experiencia de las comunidades afectadas por sta, adquiere especial relevancia como referente para hacer memoria, reflexin y propuestas colectivas frente al inminente desarrollo de la minera en Colombia que tal como se anuncia, promete la repeticin de nuevos despojos, de muchas Felicidades Perdidas.

1 El Conjunto de Principios, indica que la ausencia de reparacin y la revictimizacin, constituye un dao adicional y se refiere por un lado a los nuevos maltratos, abusos, humillaciones y estigmatizaciones que sufren las personas desplazadas por cuenta de funcionarios, autoridades y comunidades de llegada y por otro lado, debido a la impunidad y en ocasiones a la exaltacin y el reconocimiento pblico de los victimarios.

El

Eco

de la

Muerte

El eco de las manos de la muerte Blanquea en las lentas noches Dejando el sabor de la ultrajada ruina En los largos caminos El dolor increble Arroja una mirada ciega Por la vaga soledad Buscando entre los ojos muertos Sangre y plegaria del ayer Hoy reposa el brusco dolor fsico Bajo el mrmol, viendo el alba En un recuerdo fugaz de lo pasado.

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Felicidad Perdida

La Sombra

de Tu

Voz

La sombra de tu voz me asombra Oscureciendo mi presente y mi pasado, En mis esperanzas sepultadas. Aun se que ya no existe la gloria dorada De los amables mediodas. Hoy yo sin ti Estoy como el viejo cactus Que cabecea bajo la oscura tumba Recostado en un sueo no consciente, Llorando lgrimas perennes, Mientras la brisa entona su canto fnebre Haciendo alucinacin de su sed abrasadora. Algo que nunca podra olvidar Es la fe, quebrando un sueo sujeto Sobre la roca diamantina del desastre, Escuchando el suave rumor callado De las vigilias en sus noches apagadas.

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Perdura en MPerdura en m, el sordo suspiro interminable, Las rigurosas pinceladas de tus besos Labrando la ternura de tu azucena sonrisa. Tu voz preada de deleite Gorgoteando en mi odo Bajo la meloda de una sombra Que engendra placer con sus destellos esterales. La dicha de ver tus luminosos ojos Escondidos en el velo de la luz transparente, De una lmpara de petrleo en el filo de la medianoche.

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Felicidad Perdida

Se

Exalta en Mi RecuerdoSe exalta en mi recuerdo ciego El eco de la sombra.

En cierta calle, con sabor a paraso. Las hermosas noches enamoradas De las vagas horas, Esperando la voz naciente De cada da memorial, En la vasta aurora con sus rumores, Proyectando el mgico da En las erguidas ramas, entretejidas De un monumental trupillo; La frescura de las aguas dormidas Detrs de la fragancia de la luna, La dulce costumbre ancestral armada de belleza, Que un da preada de gloria y deleite Hilaron los mayores.

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Rey

Guajiro

Ave que lleva el aroma De brisas cotidianas En tus pupilas silvestres Surcando paisaje armnico Colgando en la pennsula t canto, Elevando la presencia mgica A tu esplendoroso desierto Sin detener la roja meloda Que despierta con sigilo al bermelln Sobre el peinado de un cactus. Deshojando su cadencia Brisas de espinas vienen Con huellas de cardenal Haciendo nido de sol En el fino laberinto Bajo un misterio confuso. ridos lucen sus ojos Y ms arriba del cactus La iguaraya se despernanca Viendo el desierto en sus alas.Felicidad Perdida

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Entre

Alas de la Soledadlas

Las llaves perdidas buscan gentilmente Con afn al pueblo entre las alas de la soledad Y ven en las blancas noches La memoria de una bala perdida, En donde nadie, se atreve a poner el pie Buscando la acumulacin del pasado En el infinito polvo de la historia, Dibujando con el pincel del desastre La montaosa y abrumada muerte Colgada de las quebradas ramas del olvido.

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Huellas DesdibujadasDetrs de las races corrugadas de las planas piedras No siento entusiasmada la alegre risa de mis reinas En este clido da de horas hurfanas. En cambio siento descender las hojas oxidadas De los altos rboles, demasiado descontentos Sealando la huella del pasado En una clara simpata desdibujada, Fiel a la embrutecida sombra del diamante en bruto.

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Felicidad Perdida

Voces DecaidasSe derraman voces decadas Sobrellevando a la pobre brisa arisca, Dejando a los antiguos das detenidos, Donde dorma la fe acolchonada, Siguiendo de cerca al ritmo misterioso De los suaves pasos esfumados Que juguetean tendidos En la esquina de una larga noche desconocida Chorreando lgrimas rojas En un claro de luna triangular.

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Abismo CiegoEbrio de horror divino El da se exalta de energa Abrazado a un abismo, Recordando las pisadas de piedras Tendidas en las somnolencias corrientes del pasado Que un da las curiosas manos venenosas incubaron Indeleble conflicto de mansa agona Destruyendo el texto De las hojas transparentes que se mecen agonizantes Frente al eco del silencio de la muerte.

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Felicidad Perdida

Hoy

Distinto

La maana sonre ante el curioso destino Viendo el incierto camino Da tras da, Afectuoso buscando la dura huella de tus pasos Frente a un claro paraso De violenta luz ofuscada. Aun sin mirar su culto rostro En los vastos declives del da, Ronda su risa sigilosa Tras el cristal de un sol sin color. Quisiera beber su cristalino olvido Viendo en el ahora el ayer distinto; La nia que duerme en el fondo de mis ojos Tejiendo su existir.

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F elicidad P erdidaTriste, incierto susurro Lleno de fantsticos terrores, Corre por un mundo de lamento Estremecido de ira apagada En su extremo recorrido, se deslizan Negras escorias, en formas amortajadas. Las oscuras brisas cavilan insistentemente Bajo la mgica soledad, Devorada por el tiempo. Con un leve roco lastimero Abrazadas a sus no gigantescas cascadas mudas. La impotente arena desgarrada por los das

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Llora su felicidad perdida Viendo sus aguas muertas Sobre el cristal oscuro. Tu ms que belleza desbordante Para mi fuiste fuente y altar Perseguido por siempre Abrazado a tus solitarias aguas.

El

Silencio de un AncianoTriste de sol a sol El silencio amable de un anciano

Recorre incansablemente el paso de sus huellas Buscando los tesoros que amamantan los antiguos das, Pero solo encuentra la memoria del honor ultrajada Fermentando la historia de sus races. Sus horas juegan un silencio infinito Recostado en la penumbra de los aos, Acuando su rara suerte descontinuada En el rumor del pasado. Fluye su gastado destino Lento y no dulce Arrastrando la plida agona del tiempo Antes de perderse en la promesa del desalojo.Felicidad Perdida

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Nueve de AgostoDe mi mente desaparecer quisiera Las lgrimas por doquier goteando De aquella infeliz maana sin tarde Del triste y fatdico nueve de agosto Del ao de 2001 a eso De las 10:30 a.m. cuando muri solitario el grito, Al ver el ultimo rostro de su lucha Sobre la sonriente cuchilla De un monstruoso buldcer. Sin piedad envistiendo A las entraas de una humilde vivienda de pobre. Los ojos hartos de crimen Abrazado al ruido de la humillacin Acabando con el existir dormido, Sepultando al pueblo bajo los escombros Del sueo de la muerte, en un ayer sin noche Ordenado por el suelto atrevimiento del poder.Felicidad Perdida

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Aquellos armados hombres arrogantes y ariscos Llenos de tantos caprichos Intimidando la muchedumbre a peso de bala Ciegamente impulsados por el irrespeto. Hoy todava reposa el ensordecedor ruido incrustado Dentro del pensamiento mudo de la gente En ese cruel momento de dolor asesino Que derribaba rompiendo las cuerdas de la voz del pueblo.

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Solo

Me Qued

Hurtaron la memoria visible De mis ojos cargados de historias Solo quedaron varias lgrimas Esculpidas a una lpida Que jams podran borrar de m, Las huellas de los aos. Qu no dara yo, por volver a abrazarme Con el fino olor a caf, si olfato no tengo, Baarme en las blancas noches De luna llena, si donde no tengo, Acariciar los antiguos caminos, Los atardeceres, el alba, si manos no tengo O ver las momentneas espumas burbujeantes Transportadas por las mansas aguas del arroyo Bajo la sombra leve, si ojos no tengo. Solo me qued con el destierro por aos enteros Herido por el destino Y el espritu sonriente de mi negra piel.Felicidad Perdida

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Volver Jamas

Podria

Volver jams podra, all donde Saborebamos la unin total Sobre el aorado camino compasivo Arrastrando el calor de la lealtad, All donde la brisa tea su susurro de hermandad Uniendo sus tiernos acordes A su espritu, por encima de un pensamiento. Volver jams podra All donde se apoder el silencio De las lgrimas hinchadas de un anciano Hundindose en sinsabores recuerdos. Volver jams podra All donde los buldceres Se alzaran sonrientes Sobre los muertos, nunca antes tocados Por la sombra oscura de la desgracia.

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Voz

Herida

Junto a la sombra adolorida Del viejo camino Todava resuena aquella voz herida Haciendo llegar el eco de su presencia Hasta el fondo de las gigantes piedras sonredas Que cubren el oleaje de tmidas aguas, Ante la presencia gozosa, De fatdicas multinacionales Que sin tregua rondan Recostadas en el fervor de su poder.

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Felicidad Perdida

A

las Puertas

del Pueblo

Todava destilan las duras lgrimas de un inocente nio Viendo quebrar el futuro en su presente Con golpes invisibles, destruyendo La sagrada frescura de sus costumbres El eco de la brisa salvaje Percibe el dolor y repite el llanto Que ignora la risa Guardando el recuerdo hurfano De una leal mirada a las puertas del pueblo.

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AoranzaAoro las verdes aguas Que un da, su sol de piedras ba La historia bajo la sombra oscura de mi negro color Trenzando el valor Dentro del eje afrodescendiente. Aoro la noche asomada sigilosamente, A los potreros preados de aguas silvestres Viendo mecer la herencia identificadora En su morada innata. Aoro los nios recostados sobre la sombra Espesa que dorma plcidamente en el parque Acariciando de antemano juegos ancestrales Aoro a los ancianos remendando la tarde por doquier En las maanas llenas de gente, Volando en las alas del tiempo Con un gozo estallante de cultura.Felicidad Perdida

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SoledadLa soledad habla Por si sola acariciando la indolencia De su adolorido abandono, Siento entrar, la amable desgracia A una dbil sombra hueca De la triste tristeza sin rostro. Antes veo doblar el sol Su discreta luz en un instante de eternidad apagada, Deambulando en su pasado

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Momentos hurfanos Atado al destino incierto del tiempo.

Exhaustas TierrasBajo la falda increble del cerro tabaco Y contemplado por las rocas engendradas De gozosa sombra clida Ayer en tu seno crec entre el tupido verdor Saboreando a menudo cada mirada de hermandad Hoy forastero soy sobre tus sepultadas montaas Trabando en la prisa el llanto, Dejando en las leves nubes El bro de sus exhaustas tierras con un sueo vaco Sentando forma cerca de una bandada de

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perversos buitres

Reflejos FarisaicosLa turbulenta brisa ondulada Miente en su enigmtico reflejo farisaico Cargando sobre los colores invisibles del olvido Una montaa de vientos epilpticos, Sometidos por atardeceres sin das Y silencio oxidado del presente

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Felicidad Perdida

Mi Negra PielRevientan gotas de sudor tanteando su tumba Al pie de los verdes potreros Batiendo de forma increble los olores Salidos de mi negra piel En los das quemados por el tiempo Viendo correr la palpitacin coagulada En medio del corazn del pueblo,

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All donde dej mi sal dormida de pnico.

Hora AmargaEn un ancho resplandor, ardi el grito Guardando sus cenizas, cerca de mis pupilas Haciendo mecer la cal de mis huesos En esta hora amarga El rio de mi vida se ahog Ahuecando mi voz vencida Bajando el prpado vilmente Estrangulado por generosas lepras extraas, Siento amargas mis venas En la mitad de mis das La sed es larga Cerca aquel cerro ensangrentado Mirando morir inmensas albas dolorosas Al pie de la montaa calva, Acompaada con el ruido de su fantasma.

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Felicidad Perdida

HoyHoy la noche larga me esconde Arrojndome en su sombra, solloza sin salida Hoy descienden vencidas mis fuerzas Recogiendo el duelo silencioso Hoy siento el ruido de mi desesperacin Braceando su desespero mortal Hoy siento en mi cuerpo, la fiebre de una noche callada Ardiendo sobre el despeadero del gran peligro Hoy siento cerca, un vaho de fantasma infiel

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Arrojando en m camino, lentas gotas de oscuridad Hoy recuerdo acerca de una inolvidable ancdota dormida Cuando mi sencillo y honrado abuelo expresaba Hoy respiramos tierras regaladoras de aguas dormidas Maana respiraremos tierras manchadas de olvidos Sobre rocas sanguinosas.

Piel Negra

Criolla

Era mi tierra aqu donde, en el espejo del sol La negra tejiendo un canto, arreglaba su tradicional peinado Trenzando una mirada verde encendida Por las abrazadas ramas del frondoso guacharaco, Mientras el oropel celoso volaba sobre el ojo de agua Saliendo de su pico, bello canto virgen Estampado en piedras nunca vista. Envalentonando su canto de aire delgado Como perfume dormido En un crespsculo largo y claro Siempre presente sobre la sombra Artesana de su piel negra criolla.

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Felicidad Perdida

IguarayaDnde ests callado y largo aroma No veo bailando tu orgullo dulce Cuando la brisa muerde tu forma Mirando morir el semblante de tu sombra desolada. No siento tu fragancia lindamente veteada En el suelo del huerto rojo intenso, Tus olores antes prximos hoy lejos se sienten Sin freno, raleando el verdor soleado Extrao tu olor domstico dormido Cuando enredabas mis sueos de fragancia Exclusiva sencilla y honrada fruta.

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Vieja PalmaVi en sus hojas miradas de amarguras lentas Trgicamente sollozando en su senda mortal Luego se llevan los vientos amables su fino llanto amargo Agitando las altas palmas desnudas, Suspiros en su morada de nublados lmites Abri su asombro estremecido Ante un sombro profundamente triste Mostrando un confuso y largo cansancio Hienden quemados de dolor sus frutos Dilatando la brecha, con su ancho susurro Su verde infierno, aumenta el surco de la espera Cuajando en sus opacas races penas amargas, Quedando largamente tendida en la sombra de su muerteFelicidad Perdida

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Sombras QuemadasSuben brisas cautelosamente, En la cresta besa al cerro confidente Rebota, un vaho siente busca, Lo encuentra sobre sombras quemadas En el vaho ve falda, soledad, pie, cenizas, Susurro quemando recuerdos Que un medioda dejaron ociosas manos En un confuso y pesado sueo

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Aun retumba extendido ruido construyendo Un mundo oscuro en largo cansancio, Untando sangre entre el asombro Simple, amargo, eterno, fuerte Con criminales ojos en el medio de la espalda.

AvisoEncima de la roca desnuda del carbn Cargado de pginas olvidadas, por el tiempo duerme Danzando con el mal a su espalda, Un despintado letrero en el pecho de una enorme piedra Que dice en letras, aun vivas Bienvenidos a Tabaco Tierra donde ser campesino es baarse repetidamente Con la dignidad ancestral sobre todo.

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Solo TristezaSolo el calor infinito De la soledad acompaa Las tercas piedras Ardiendo En sus profundos Testimonios Asustando al sol del medioda Que so Sordamente extrao Viendo pasar el deseo sin pulso Tropezando con el esqueleto polvoriento de la tristeza.

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Felicidad Perdida

Miradas TurbiasHoy solo camino sobre El fuego de mi mirada turbia Con un fatal dolor De sangre y lgrimas encendidas Siento pisar tierra plida Llena de flores sangrientas Y nieves de color purpura

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Que vuelan en las garras trasnochadas del viento.

Recuerdo CircularSobre el calor imborrable de mi oscura piel, Se eriza temerosa T presencia ciega, Como una rosa transparente ahogada en sangre Buscando el eco de una voz perdida. Luego gotas de recuerdo baan El cuarto vacio de mis esperanzas sepultadas, Viendo la huella imborrable de tu mirada En cada esquina de mis sueos posadas; Muriendo bajo el fuego trasnochado De un recuerdo circular. Donde los perros de presa se comen, el rostro Pardo de las mariapalitos, Arrinconados en un silencio hueco y sordomudo.

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Felicidad Perdida

Rincn Oscuro del SilencioTendido en un rincn oscuro del silencio amable El junco solloza, detrs de la ventana de la muerte. Solo escucha los rumores trasnochados, Sumergido en las aguas muertas De las lagunas de mariposas disecadas. Es all donde hoy babillas y cocodrilos bailan Un conflicto de brisas amargas Empapando de llanto la desesperacin, En un croar triangular de ranas sonmbulas, Recordando el agua bailarina De blancas mariposas con alas pardas y ojos cristalinos; Sin esconderse de letales, miradas desafiantes De guilas con alas corrugadas y colmillos emplumados.

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Hoy

Igualque

Ayer

El rastro oscuro de cada da Tropieza con los largos pasos de la muerte Viendo sepultar el dolor En el dormido rostro de la tarde gris. Hoy igual que ayer sigue dejando su imborrable huella Sealando una a una a las olvidadas races Que aun palpitan recostada al silencio De la historia como antes Deshabitando los rumores negros del tambor.

49

Felicidad Perdida

IntranquilidadA medida que la noche remendada avanza Con su pisada de espinas Sepultando en la esquina de su sombra La intranquilidad esponjosa de los palenques mudos. Huellas satisfechas Se cuelan por las hendijas de la luna Cubriendo su gemido con mansa sangre De jueces sin rostro a punto de ser ovejas en speros rebaos Que solo saben expresar los sueos de grandes trenes Inhalando el rumor de los muertos.

50

En

Mediodel

Tibio Sol

Es aqu en medio del tibio sol de lagartijas Donde las abejas secuaces se comen tus ojos de azcar Escuchando el rumor polvoriento Del agua oscura Que duerme infinitamente en el olvido De perros con gafas de cuero, devorado por el sol vecino Es aqu en medio del tibio sol de lagartijas Donde guard su dentadura el gallo Que solo cant en madrugadas falsas Viendo cerca la carabela del carbn

51

Felicidad Perdida

Lamentosde PalmerasLargos lamentos De palmeras Desfilan en la sombra De un sol enterrado Llenando de dolor inocente A las cortas maanas Que sin consuelo Lloran a ritmo de escobilla seca Mirando el paso helado de la muerte Recostado a los hospitalarios atades.

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Felicidad Perdida

Sobre CrucesHoy por hoy Lloran en silencio los palenques Con el corazn hecho un nudo Viendo de frente a los sueos Que se quedaron soando Con los negros canarios que volaban Sobre cruces Llenas de cenicientas golondrinas.

54

Tu

Dulce PresenciaTu dulce presencia Hace volar mi dicha Mil y mil veces Como un smbolo, Iluminando a menudo mi bella dicha En plena medianoche.

55

Felicidad Perdida

Valor y CorajeEra un claro da de innato jolgorio, Cuando asom el eco envalentonando La suave mtrica de un largo verso Haciendo honor al sabor del canto. De pronto una ronca voz se alz Como acariciando al cielo Cargada de palabras arrogantes y amargas, Tendi la mirada hacia m Blanqueando sin brillo sus grandes ojos, Saliendo de su arrugado rostro Un largo suspiro, prontamente diciendo Prstenme clara atencin; En este lecho dorado de sombra coagulada De ante manos les presento a este brbaro hosco El cual dicen que arde enlazando la delicia Sutil de un canto en noches calladas. Del pblico volaron entretejidos aplausos Como tambin ros de risas corrieron En medio de algazaras ridculas Luego con voz de hipocresa inmortalizada Pidieron en una sola voz que el recin Llegado cante canciones de dulce meloda.

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Pisando firme romp el hielo y con temple De acero, mi firme voz inundo al recinto Quebrando su viril hipocresa. En este instante frente a frente Vi las races de mis ancestros germinar En un claro laberinto de fondo risueo, Ardi mi honradez con el valor y el coraje De un verdadero hosco de sangre esttica y brava Como mi humilde y sencillo abuelo expres, Siempre prendido a su sagrada tradicin, Transformando la ira profundamente En dulce melancola de tardes viejas En este sencillo momento de soledad apagada Al compaero de plida mirada sin afn alguno Le contesto tajantemente Por arrogante que sea su amarga imponencia; Usted me llama brbaro hosco simplemente Para ofender el misterio de mis antepasados verdad. Sabe sinceramente porque este apelativo de brbaro hoscoFelicidad Perdida

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Que hasta gracioso suena De cualquier punto de vista, Si alguien me llama de este modo Es porque mis negras piernas, Nunca se han cruzado por un temblor Para enfrentar un problema, Sobre el perfume de mi salada tierra o en otra parte. Aqu con mis msculos morenamente fuerte Estoy dispuesto a enfrentar el golpe de los das. Donde me corto me amarro sin esconderme Detrs de la sombra de nadie Y t por ser un simple brabucn Piensas mandar en el oriente dorado Donde asoma el sol rojizo Lleno de nubes violetas; Djame que te exprese parte por parte.

58No es que un criminal yo sea Pero a m y a las races de mi alma Nos deben brindar respeto Y para falsearme a m, tienes que pasar primero sobre mi cadver,

En mi cabalga el honor Y hasta la sombra del que me busca me encuentra, A las buenas soy un manso cordero, Pero a las malas soy la lanza azotando el grito en plena calle. En este agitado momento record las sabias palabras De m sagrado taita, cuando a menudo deca Yo no soporto el incomodo peso de la humillacin, El hombre es hombre desde que su santa madre al mundo lo tira Por tal razn debe aprender muy bien amarrarse Los pantalones para la vida enfrentar, Acariciando el honor y a la seriedad Siempre demostrando la florida honra que al hosco caracteriza. Despus de escuchar alta mi voz animosa Aquel brabucn de boca ignorante Y de grandes palabras arrogantes sin sentido Lo enred la triste magia del miedo, Les juro por Dios mismsimo que vi resbalar infinitas lgrimas. Deshojando sus rusticas mejillas, Doblando su robustez,Felicidad Perdida

59

Como un viejo papel con letras transparentes. Se arrodill sobre su sombra Hundiendo en el infinito su mirada plida Mientras sus lgrimas rosadas, cruzaban sus grandes brazos, Para pedirme perdn baado de negro sudor Ah empez a comprender la invalidez de sus arrebatos amargos Al mirar que al frente suyo se paseaba solo La sombra calcinante de un hosco.

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En un

Rincn del Cielo

Volando sobre las alas de una leve sonrisa Te vi, en un rincn del vasto cielo Con un suave rostro de perlas desgranadas, Donde Dios, oyndote hablar ardi, Deshojando un dulce misterio Henchido de ligera ansiedad secreta. Hoy herido de agrios insultos Solo veo el triunfo adormecido de tu huella Persiguiendo tu inerte sombra desolada En un discreto olor a recuerdo Que aun paso a paso marcha reclinado Haciendo vacilar las gotas ocultas de amarguras Al son de tu adormecida hermosura.

61

Felicidad Perdida

Hurfana MiradaHoy al pie de una sombra retorcida Aun se expresa presuroso el oscuro dolor Fijando una mirada Sobre su hosca sangre Repleta de ardiente coraje Que en das de ayer alimento totalmente al duro resplandor Enredado a la ira cariosa y serena De una ennegrecida quimera.

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Para mi hoy por hoy sagrada tradicin hosca Evocando la hurfana mirada de siglos enteros.

Esttica BellezaHoy ms que ayer me atrap tu tentadora mirada En horas vrgenes Asilando tu esttica belleza En el contorno de mi lnguida vista, Copiando todo el melanclico desfile Velloso de tus sedosas piernas Que bellamente bronce El viejo sol de ayer Con el nimo encendido Igual yo hoy abrazado al eco del recuerdo Veo cerca tu vaivn altivo y fuerte Alcanzando la gracia misteriosa De tus peligrosas curvas risueas.

63

Felicidad Perdida

El

Tambor

A la primera luz del da Salta el golpe firme y seco Atravesado a un sordo y dulce sonido De placer olvidado, Entonado frases peregrinas De un son esttico y altanero, Elegantemente sonredo En noches de sombras alborozas; Tras un brusco sonido Adornado por paso lejano

64

De angelical expresin Que hace hoy romper a la lgrima Dormida del llanto de ayer.