seminario de contextos y sistemas del arte

Seminario de contextos y sistemas del arte

Alumna: María del Carmen Vázquez Álvarez 1

SEMINARIO DE CONTEXTOS Y SISTEMAS DEL ARTE

PCE 4. Investigar las redes de agentes del arte “La identidad del personaje en el vestuario escénico”

Carmen Jane Style Madrid, 22 de diciembre, 2021



INDICE

1. Actor elegido para la investigación……………………………..…….3

2. Informe de la investigación…………………………………………….3

3. Anexo 1. Resumen de la entrevista…...………………………...……7

4. Anexo 2. Diario de bitácora……………………………………………10

4. Bibliografía…………….…………………….…………………………...11



1. Actor elegido para la investigación

El actor elegido para la investigación es Anne, una diseñadora de vestuario

escénico afincada en Madrid, especializada en teatro, danza y cine en

producciones de época, con amplia experiencia profesional a nivel internacional.

Licenciada en Bellas Artes en la Escuela Nacional de París, ha realizado además

numerosos talleres didácticos como docente, tanto en España, como en Francia.

Por motivos de privacidad personal, no incluyo su nombre completo, porque,

aunque ha aceptado hacer la entrevista por amistad conmigo, y hemos trabajado

juntas en diversas ocasiones, no desea ser nombrada.

2. Informe de la investigación

Me he decantado por realizar mi informe sociológico sobre una diseñadora de

artes escénicas, ya que me resultaba accesible y esta dentro de mi campo de

actuación profesional, ya que soy estilista y diseñadora de moda y vestuario de

teatro, cine y TV.

Me voy a central principalmente en la figura del diseñador, como creador de

personajes, cuya función principal es aportarle la identidad marcada a través del

vestuario. En este proceso intervienen a la vez infinidad de actores humanos como

son el creador narrativo de la obra a representar, director de la obra escénica en

cuestión, guionista, técnicos (luces, montaje, sonido, attrezzo, etc.), maquilladores

y peluqueros, sastres y modistas, actores, etc. Y a la vez otra serie de actores no

humanos como son los tejidos seleccionados, las técnicas de tratamiento de estos

tejidos, máquinas de coser, accesorios, patrones, etc. Todos estos actores deben

trabajar en equipo y conexión para que el resultado sea armonioso y se consigan

los objetivos previamente establecidos.

La construcción del vestuario escénico permite desplazar a los actores de un

cuerpo físico real a un cuerpo poético.



Todo diseñador, a la hora de abordar un proyecto de vestuario debe iniciarlo cómo

experiencia comunicativa, operando mediante el uso de imágenes, significados,

formas, siluetas, tipologías, colores, texturas y accesorios puestos al servicio de la

creación artística, instaurando en el actor una espacialidad íntima, una vivencia

sensible y funcional que lo introduce en el espacio del personaje, lo consolida y lo

define, generando un espacio de intertextualidad en la construcción sensorial

emotiva de la experiencia del personaje.

El vestir es un hecho básico de la vida social, es común en todas las culturas

humanas, ya que todas las personas visten de alguna manera el cuerpo, ya sea

con prendas, tatuajes, cosméticos o complementos. La ropa y el adorno corporal

son los medios mediante los cuales los cuerpos se vuelven sociales y adquieren

sentido e identidad. El acto individual y personal de vestirse es un acto de preparar

el cuerpo para el mundo social, considerándolo aceptable, apropiado, respetable

en sociedad.

Comprender la manera de vestir en la ficción es entender como se representa el

vestido dentro del sistema y de sus discursos sobre el vestir, es decir lo

contextualiza. De igual forma, define el modo en que experimenta y vive, el papel

que desempeña la indumentaria en la construcción del cuerpo poético.

Las prendas que se eligen para dar imagen al personaje constituyen una forma de

expresar su identidad, de decir a los demás algo sobre el género, clase o postura

del personaje. El vestido funciona como revelador u ocultador de identidad, en un

medio de vulnerabilidad de identidades.

Hoy en día, el problema al que se enfrentan los diseñadores de vestuario es

multidimensional. El vestido como espacio de signos, vulnerable y efímero,

demanda la capacidad profesional de plantear un proceso de diseño

metodológico, que siente fases de evolución y crecimiento en el desarrollo de una

propuesta creativa. Dentro de la escena, el proceso creativo en vestuario tiene la



responsabilidad de dar nacimiento a un mundo sensible de ideas conformado por

etapas de transformación que conllevan al desarrollo del tejido dramático-poético

que envuelve al personaje.

El trabajo de construcción de identidades se inicia con la lectura del material, el

texto permite descubrir a los personajes, descifrar hábitos, costumbres, perfiles,

fisonomías. Al abordar el análisis de los personajes es necesario tratar de

descubrirlos, permitirles que nos sorprendan a partir de la lectura, dejar que el

texto nos los pinte sin ningún juicio crítico preexistente. El vestuario surge del

relato y la apropiación del mismo desde lo visceral, consiguiendo una percepción

sensible del personaje.

Es importante poder ir generando un listado de características, deduciendo los

íconos, las imágenes y los símbolos de las metáforas que los autores a través del

lenguaje del texto nos plantean, y aquellas que, por asociación libre, o por intuición

el diseñador y el director hayan creado de los personajes. Se inicia aquí una etapa

de orden y jerarquización de las ideas, tratando de plantear los ejes conceptuales,

claves de la identidad de los personajes.

Determinado el estilo visual, la idea central plantea el punto de vista del director a

través de un concepto, una imagen, una época, un suceso, etc. Comienza

entonces un proceso de investigación y documentación que permite modelar en

torno a los personajes y al tema, e ilustrar las claves en imágenes de sus perfiles

psicofísicos. Las claves muestran las sensaciones, conceptos, texturas, colores

que se quieren representar, y están en relación con las formas, materiales,

tipologías y técnicas con los que asociaremos a los personajes.

El escenario del personaje engloba caracteres de formas, épocas, hábitos,

espacios, posturas y objetos que definen el espesor, textura y psicología del

personaje, determinando así su identidad visual. Definiendo visualmente una



manera de ser, pensar y parecer del personaje en su vida de relación.

La etapa siguiente es la documentación del tema disparador de la puesta en

escena, investigación y recopilación de información de imágenes, videos, textos,

música, referentes que nos permiten documentar la temática de la puesta y

construir a partir de aquí su escenario conceptual.

El proceso siguiente es la transferencia del conjunto de cualidades, rasgos, que

deben ponerse en juego para trasladar las claves al vestuario. A partir de la

combinación del escenario conceptual de la idea global y el escenario del

personaje es que el vestuarista comienza su labor creativa en la construcción de la

espacialidad primaria del personaje.

El vestuario comunica mensajes, discursos a través de su forma y su material. Las

cualidades de la forma, las tipologías y la técnica con las que se trabaja tienen la

capacidad de comunicar y transmitir temas, conceptos, situaciones, momentos,

historias, estilos, ideologías, conformando así un entramado, un organismo vivo y

vulnerable.

Estos rasgos transferidos a la superficie y estructura del vestuario permitirán

desarrollar un lenguaje apropiado para comunicar la vivencia y experiencia de vivir

el espacio material que conforma visual y sensorialmente al personaje.

Una vez construido el estilo e identidad del personaje, se comienza con la

ubicación en el espacio ficcional, la expectación. Aquí el vestido abandona su

espacio de construcción intima con el actor y pasa a su espacialidad socializada.

Comparte en espacio y tiempo el accionar con los personajes, con los

espectadores, técnicos, etc. De esta manera el vestuario se sitúa y se relaciona en

escena, comunicando a los espectadores, los últimos actores en cuestión.



3. Anexo I. Resumen de la entrevista

La entrevista ha sido desarrollada en el taller de Anne en un emblemático barrio

de la ciudad de Madrid. He aprovechado el hecho de que ambas estábamos

colaborando juntas en un taller de envejecimiento y tintado de tejidos con

productos naturales.

Transcripción de la entrevista:

Anne, descríbeme tu campo de actuación dentro del mundo de las artes visuales. Soy diseñadora de vestuario escénico especializada en diseño y

coordinación de vestuario para producciones teatrales, musicales y cine de época. ¿Cómo llegaste al lugar en el que te encuentras y cuál ha sido tu formación? Nací en Francia, y tras finalizar mis estudios secundarios me matriculé en la

Escuela Nacional de Bellas Artes de París. Al finalizar me especialicé en diseño

teatral y comencé a realizar colaboraciones para producciones de danza y teatro. Desde entonces he estado diseñado vestuario para numerosas obras,

especializándome actualmente en cine y series de TV.

¿Cómo empezaste a diseñar vestuario teatral? Todo comenzó cuando era una

niña. Tenía mis muñecas y les hacía ropa. También dibujaba mis propios figurines,

a modo de juego. Mi madre era costurera y gracias a ella aprendí a coser, y fue de

esta manera como empecé a hacerme ropa para mí. Muchos años después,

cuando terminé el colegio, no me planteaba ser diseñadora de moda, sino que

prefería trabajar en el teatro, porque me fascinaba, pero opté por estudiar Bellas

Artes y fue después cuando me especialicé en estudios de diseño de vestuario

escénico.

¿Cuándo comenzaste a desarrollar trabajos profesionales? Cuando acabé mis

estudios me trasladé a Milán y comencé haciendo prácticas con Lindsay Kemp,

bailarín, actor, mimo y coreógrafo británico. Le gustó mi trabajo y colaboramos en



numerosas ocasiones durante años. Al principio me encargaba de labores

principalmente de sastrería, y poco a poco fui desarrollando los diseños de los

protagonistas de sus obras. ¿Cuál es la lección más importante que aprendiste de tu mentor? Me enseñó

a ser imaginativa y a lanzarme a realizar cualquier idea que tuviera. Aprendí a

hacer maravillas con simples pedazos de tela barata y conseguir que los trajes se

vieran de maravilla en escena. Y, sobre todo, me enseñó a ser valiente, constante,

y a no perder la ilusión.

¿Cuáles son las diferencias que, como diseñadora, separan al cine del teatro? En el teatro diseñas para que tu trabajo sea visto desde bastante distancia

y también de cerca, así que tiene que funcionar tanto mirándolo desde arriba como

desde lejos, por eso ha de ser exagerado, brillante, grande y más atrevido. En cine

todo tiene que ser más reducido, todo se hace para ser contemplado desde cerca.

El vestuario teatral está concebido para ser usado noche tras noche; en una

película, la ropa tiene que usarse también, pero con menor intensidad.

La construcción del personaje es idéntica: tanto en cine como en teatro estás

ayudando a la audiencia a creer que esa persona es el personaje y que se levantó

por la mañana y decidió ponerse esa determinada ropa. La vestimenta tiene que

dar información sobre el personaje.

En el diseño de vestuario, ¿qué es lo realmente importante? Lo importante es

que hagas las cosas lo mejor que seas capaz. Y entender que de nada vale tener

un vestuario fantástico en una película en la que el guion sea fallido, o preciosos

vestidos con un pésimo decorado, o increíbles ropajes mal iluminados. Todos los

componentes tienen que trabajar juntos para construir algo que funcione. Se trata

de un trabajo en equipo donde todos los elementos estén en armonía.



Durante la fase de preparación, ¿los actores te ayudan? Depende, a veces sí y

a veces no. Con los actores siempre hay un diálogo. Es necesario que confíen en

ti para desarrollar el personaje. Si pierdes la confianza de un actor o actriz, tienes

un serio problema porque todo se hace muy complicado. Para los diseñadores de

vestuario, el 90% del trabajo es psicológico. Tienes que captar las necesidades y

resolver muy rápido. A los intérpretes lo que más les cuesta comprender es que

vestimos a su personaje, no a ellos.

¿Sueles estar presente en los ensayos o rodajes? Sí, pero no todo el tiempo.

Muchas veces, mientras se rueda se continúa diseñando. Acudo a los rodajes

cuando hay cambios de vestuario y el personaje aparece caracterizado de forma

diferente en un cambio de escena o ambiente, o cada vez que hay un nuevo

personaje. Estoy siempre allí para vestir a los actores y asegurarme de que se

ponen las prendas de forma correcta.

¿Qué piensas del auge de las series televisivas? Antes no quería hacer

trabajos que se vieran en una pantalla pequeña. Pero las cosas están cambiando,

no solo los tamaños de los televisores, también la calidad de las producciones.

Aunque a mí me sigue gustando más la sensación de entrar en un teatro o en una

sala de cine. Cuando ves la tele en tu sala, cualquier cosa a tu alrededor puede

distraerte, y a mí me gusta la sensación de estar completamente perdida en la

oscuridad. Es una experiencia única y a la vez comunitaria.

Háblame de tu faceta como formadora. Cuando tengo descanso entre rodajes

me gusta compartir mis conocimientos en pequeños talleres formativos para

profesionales del sector. Me gusta enseñar, y también aprendo mucho de mis

alumnos. ¿Qué sacrificios has hecho por tu trabajo? No ver a los seres queridos durante

periodos largos de tiempo. Creo que eso es lo más duro, especialmente cuando



hay rodajes fuera. Es un sacrificio para mí, pero también para mi familia y mis

amigos.

Y ahora que estás asentada profesionalmente, ¿este sacrificio ha merecido la pena? No lo sé. No puedo decir que no haya merecido la pena, pero lo que si

sé es que soy feliz con mi trabajo y con mi vida, quizás porque mi trabajo es mi

vida.

4. Anexo II. Cuaderno de bitácora

Aunque personalmente conozco a Anne hace años, porque he colaborado como

ayudante en algunas de sus producciones, aproveche mi asistencia a uno de sus

talleres para proponerle la entrevista.

Inicialmente fue un poco reacia, ya que no le gusta nada la exposición mediática,

pero aceptó, por ser un proyecto de la Universidad, siempre y cuando no citara su

nombre.

No lo planteé como una entrevista, sino como una conversación entre descansos y

cafés en un fin de semana.

Como admiradora de la artista, y porque seguimos un camino similar enfocado al

diseño y creación de vestuario escénico, el proyecto ha resultado muy gratificante

y satisfactorio para mí. Me ha ayudado a entender cual es su proceso de

construcción de identidades de los personajes, y todos los actores que conforman

el camino.



5. Bibliografía

Gracia Palomera, D. Orientaciones metodológicas para la investigación social.

Waelder, P. El sector de las artes plásticas y visuales.

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